Untitled - LA Organic

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FINANCIAL TIMES
Una cuestión de Presión
3 de Septiembre de 2011
La colombiana Elisa Álvarez, ahora residente en Madrid, es una apasionada del aceite de
oliva español.
Por Emma Mahony
Nacer y criarse en Colombia, obtener una beca Fulbright para estudiar cinematografía
en Nueva York y acabar dirigiendo un negocio español de aceite de oliva, puede resultar un
camino poco lógico, pero Elisa Álvarez, 46, no se arrepiente de nada en su trayectoria
profesional. Cuanto más sabes acerca de su empresa LA Organic, que cuenta con el
diseñador Philippe Starck y el enólogo Michel Rolland como socios, más entiendes la pasión
que siente por su negocio gastronómico.
Todavía no está claro si acabará echando raíces en la capital española, Madrid, desde
donde la empresa realiza sus operaciones y ciudad en la que ha estado viviendo en los
últimos dos años. «No me gusta comprar sin antes conocer bien una ciudad», comenta. «La
situación inmobiliaria ha cambiado mucho debido a la crisis [económica]. Aquí hay
muchísimos inmuebles en venta, muchos están en propiedad de los bancos, y debido al
exceso de construcción, los precios continúan bajando». La decisión de Álvarez de vivir de
alquiler con su hija Agatha, de diez años, también es acorde a la ajetreada vida que ha
llevado hasta ahora. Ha desarrollado su carrera en París, Nueva York, Panamá y Bologna
(Italia), adonde se mudó con su marido italiano en 2001. La flexibilidad del alquiler le ha
permitido viajar sin equipaje, a pesar de que su herencia colombiana no siempre le haya
facilitado las cosas.
«He sufrido la discriminación» cuenta. «Italia fue el peor [país] en cuanto a prejuicios, todo el
mundo me decía “no pareces colombiana”, porque se esperaban que fuera bajita y morena.
La verdad es que en Latinoamérica hay mucha gente rubia o pelirroja». Esta discriminación
incluso le supuso algunos problemas a la hora de alquilar en el extranjero. «Un arrendatario
me pidió siete meses de fianza alegando que los latinoamericanos tenían mala fama. El tópico
es que los colombianos venden drogas».
Antes de instalarse en Madrid, Álvarez asistió durante seis meses a unas reuniones
semanales en Madrid, para las que viajaba desde Bolonia, en Italia, y cuyo fin era definir la
filosofía de la empresa. Vino propuesta a su amigo y fundador de LA Organic, el inversor
Pedro Gómez de Baeza, con el fin de ayudar. «Pedro estaba buscando a alguien que le
ayudara a recuperar el embotellado y la producción del aceite de oliva español de los
italianos», comenta.
España es el mayor productor de aceite de oliva del mundo, con una producción tres veces
superior a la de Italia; pero los italianos importan 500.000 toneladas de aceite para venderlo
bajo el nombre de marcas italianas.
LA AMARILLA DE RONDA SL.- CALLE VELÁZQUEZ, 53 – 28001 MADRID
TEL: 91-4364485- FAX- 915776350- CIF: B- 83972869
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Álvarez compaginaba su otro trabajo como directora de marketing en Negrini, distribuidora
italiana de alimentación y en la que estuvo trabajando en productos de alta gastronomía
durante cinco años, con la tarea de buscar piso en la zona norte de Madrid mientras se
alojaba en casa de su hermana, también en la capital. «Escogí una zona llamada Chamartín
porque es muy soleada, sobre todo después de Bologna, famosa por su niebla». El piso de
tres habitaciones se encuentra en una tranquila zona residencial, con parques y cerca del
colegio de su hija. «Estoy a 15 minutos de todo: mi oficina, el aeropuerto y el centro de la
ciudad». La diferencia de precio de alquiler entre Bologna, donde vivía en un palazzo del s.
XVI de unos 250 metros cuadrados y con un amplio jardín, y el apartamento en Madrid, es de
1.500 euros a favor de la capital española.
«Incluso aunque los precios hayan bajado, los pisos en el centro de Madrid siguen siendo
caros, tanto para alquilar como para comprar».
Por fortuna, LA Organic (renombrada por Philippe Starck porque su nombre original «La
Amarilla de Ronda» era «demasiado engorroso de pronunciar») ha crecido rápidamente. El
nombre original se refería a la finca de Gómez de Baeza, un antiguo convento cuyo aceite
obtenido de los frutos de sus nueve hectáreas de olivar era muy apreciado en la región.
«Nueve hectáreas solamente producen 2.000 litros al año», dice Álvarez, «así que no
podíamos hacer una explotación comercial».
Gómez de Baeza tuvo entonces la brillante idea de trabajar con otros agricultores de
Andalucía, a los que únicamente compra las olivas de cultivo ecológico de la región, logrando
crear una red de 56 pagos. El aspecto clave es que los propietarios venden sus olivas, no el
aceite, y así la empresa puede mantener el control sobre la calidad.
Starck, cuyos diseños de muebles y exprimidores decoran los hoteles y hogares de medio
mundo, aportó su toque mágico con exclusivos embalajes en tonos amarillos y botellas de
vidrio en forma de tinteros antiguos. La nariz y el paladar de Michel Rolland, afincado en
Burdeos, identifican las variedades de oliva para crear sabores como si de delicados vinos se
tratara.
«Insistimos en hacer entender a la gente que el aceite de oliva debería tener la misma
categoría que la trufa y estamos enseñando a la gente a leer la etiqueta de origen del
producto», comenta Álvarez.
El duro trabajo obtuvo su recompensa hace poco, en noviembre pasado, cuando fueron a
recoger el premio Flos Olei en Italia, los «Oscar» del aceite de oliva, por su marca LA Oro
Intenso. Situado entre los veinte mejores aceites de oliva virgen extra, el reconocimiento puso
a la marca en el punto de mira del mundo gastronómico y, en la actualidad, el cocinero Sergi
Arola, premiado con una estrella Michelin, la ha convertido en una de las favoritas de su
cocina. Asimismo, la aerolínea Iberia ha decidido ofrecer las botellitas en miniatura a sus
clientes de business y primera clase.
Esta apuesta por la calidad ha permitido a la empresa hacer frente a la actual crisis que vive
el sector del aceite de oliva en España, afectada por el boom urbanístico (tal y como
informaba FT en mayo). Hace poco el precio del aceite de oliva ha experimentado una fuerte
caída a causa de los olivareros españoles que, ahogados por los créditos, se han visto
LA AMARILLA DE RONDA SL.- CALLE VELÁZQUEZ, 53 – 28001 MADRID
TEL: 91-4364485- FAX- 915776350- CIF: B- 83972869
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forzados a vender a cualquier precio y a inundar el mercado con su producto. Esta saturación
ha empeorado con el dinero procedente de la explosión urbanística, que en los últimos 15
años se ha estado reinvirtiendo en olivares para generar un crecimiento constante en
términos de cultivo.
Antes de la crisis económica el precio promedio de un kilogramo de aceite de oliva era de
2,80 € y ahora ha caído a 1,80 € , provocando pérdidas en tres cuartas partes de los
agricultores españoles que emplean métodos artesanales y tradicionales para la recogida de
la aceituna. Los métodos orgánicos empleados por LA Organic benefician a sus agricultores,
que quizá solo cuentan con 80 o 120 árboles por hectárea frente a los 1.000 de los cultivos
superintensivos. El resultado en la calidad permite que por una botella de 500 ml puedan
llegar a pagarse en torno a 9,99 libras en los supermercados Waitrose en Reino Unido.
«Esto es la guerra», dice Álvarez, «pero la gente realmente quiere calidad. Al tiempo que
crecemos, intentamos implicar a otros productores orgánicos. Nosotros obtenemos lo mejor,
ellos obtienen lo mejor y nosotros les pagamos lo que deberían percibir siempre. Nos hemos
propuesto creer en España y esto es una cruzada».
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