Documento descargado de http://www.revclinesp.es el 30/11/2016. Copia para uso personal, se prohíbe la transmisión de este documento por cualquier medio o formato. N OTA S CLÍN ICA S S índro me de ve na cava supe rio r po r bo cio multino dular A. Ríos Zambudio, J. M. Rodríguez González, M. Carrasco Prats, A. Piñero Madrona, T. Soria Cogollos y P. Parrilla Paricio S ervicio de Cirugía Gen eral y del A parato Digestivo I. Hospital Universitario Virgen de la A rrixaca. El Palm ar. Murcia. Superior vena cava syndrome caused by multinodular goiter El s índro me de ve na cava s upe rio r (S VCS ) e s ho y un pro ble ma principalme nte o nco ló gico . En e s te trabajo pre s e ntamo s cuatro cas o s de e s te s índro me caus ado po r bo cio multino dular intrato rácico . To do s lo s pacie nte s pre s e ntaban o tro s s índro me s co mpre s ivo s , s o bre to do e s o fágico y traque al. La to mo g rafía axial co mputado rizada (TAC) fue la té cnica de image n que o bje tivó e l bo cio multino dular intrato rácico co mprimie ndo lo s tro nco s braquio ce fálico s . El tratamie nto fue quirúrg ico (tiro ide cto mía to tal), re virtie ndo to do s lo s s ínto mas co mpre s ivo s . PALABRAS CLAVE: sín drom e de vena cava superior, bocio m ultinodular intratorácico, tiroidectom ía total. Intro ducció n El síndrome de vena cava superior (SVCS) es una entidad clínica poco frecuente, descrita en 1 7 5 7 por William Hunter 1 , y que se define como el conjunto de signos y síntomas derivados de la oclusión parcial o completa de la luz de la vena cava superior 2 . La etiología del SVCS ha variado con el paso del tiempo 3 . Hasta hace 40 años las causas más frecuentes eran benignas, sobre todo la tuberculosis y el aneurisma de aorta sifilítico. En el momento actual más del 80% de los casos se deben a patología tumoral maligna, principalmente por el cáncer de pulmón (6 0 %-7 5 %) 3 ,4 . La etiología benigna es infrecuente (tabla 1), considerándose el bocio multinodular intratorácico una rareza 5,6 . La primera descripción de un SVCS secundario a bocio intratorácico benigno data de 1954 por McArt 7 . Posteriormente se han descrito otros casos aislados, en ocasiones por bocios no multinodulares 6,8-13 . Aunque esta entidad clínica es rara, creemos importante tenerla en cuenta, pues a diferencia de la mayoría de SVCS es potencialmente corregible y curable con cirugía. En este estudio presentamos cuatro casos de SVCS por bocio multinodular intratorácico, haCorrespondencia: A. Ríos Zambudio. Av. Libertad, 208. Casillas. 30007 Murcia. Aceptado para su publicación el 13 de enero de 2000. 208 Superior vena cava syndrome caused by multinodular goiter Curre ntly, the ve na cava s upe rio r s yndro me (VCS S ) is mainly o f o nco lo gic o rigin. We re po rt he re fo ur cas e s o f this s yndro me caus e d by intratho racic multino dular go ite r. All patie nts had co mpre s s ive s ympto ms , particularly o f the o e s o phagus and trache a. Axial CT was the imag ing te chnique that de line ate d the intratho racic multino dular go ite r co mpre s s ing brachio ce phalic ve s s e ls . S urg e ry (to tal thyro ide cto my) was us e d and all co mpre s s ive s ympto ms re s o lve d. KEY WORDS : Vena cava superior syn drom e, intrathoracic m ultinodular goiter, total thyroidectom y. (Rev Clín Esp 2000; 200:208-211) ciendo hincapié en lo importante de un diagnóstico correcto y la necesidad de la cirugía para corregirlo. Cas o s clínico s Los cuatro pacientes eran mujeres mayores de 50 años de edad y diagnosticadas de bocio multinodular desde hacía más de quince años. En todos los casos el bocio era eutiroideo, y una de las pacientes tomaba en los últimos diez años tiroxina 150 mg al día para frenar el crecimiento tiroideo. La clínica fue progresiva, refiriendo como síntomas de inicio en tres casos una leve disnea y en cuatro disfagia. Posteriormente las cuatro pacientes comenzaron con eritema y edema facial que fue aumentando de intensidad de forma paulatina, acompañándose entonces de edema de cuello y ambos miembros superiores. A la exploración se objetivó edema de cara, cuello y ambos miembros superiores, con dilatación de las venas del cuello y brazos. Además dos pacientes presentaban cianosis de dichas zonas. Las cuatro presentaban la maniobra de Pemberton positiva, con exacerbación de la sintomatología al levantar ambos brazos. A la palpación del cuello se halló en un caso un gran bocio IV/ IV con prolongación intratorácica y en los otros tres un bocio cervical de dimensiones pequeñas (I-II/ IV) que se prolongaba hacia el tórax (tabla 2). La radiología de tórax mostraba masa mediastínica anterior con desplazamiento traqueal en los cuatro casos (fig. 1). En dos pacientes se realizó ecografía que mostró bocio multinodular intratorácico y tres casos tenían realizada previamente una gammagrafía que informaba de tiroides desestructurado con múltip les formaciones nodulares frías y prolongación intratorácica en uno de ellos, compatible en los tres casos con bocio multinodular. En todos los casos se Documento descargado de http://www.revclinesp.es el 30/11/2016. Copia para uso personal, se prohíbe la transmisión de este documento por cualquier medio o formato. A. RÍOS ZAMBUDIO ET AL — SÍNDROME DE VENA CAVA SUPERIOR POR BOCIO MULTINODULAR TABLA 1 Ca u s a s d e s índ ro m e d e ve na c a va s u p e rio r b e nig na Me dias tinitis Tuberculosa Histoplasmosis Actinomicosis Sífilis Nocardia Piógena Postradiación Idiopática Tumo re s me dias tínico s Teratoma Timoma Bocio retroesternal Quiste dermoide Hematoma postraumático Linfadenopatía Cardio vas cular Aneurisma aórtico Fístula arteriovenosa Trombosis Tromboflebitis idiopática Mixoma auricular Pericarditis severa Estenosis mitral Complicaciones marcapasos Catéter o vía central (vena subclavia) Insuficiencia cardíaca congestiva Trasplante cardíaco Vasculitis Pulmo nar Neumotórax Silicosis Quiste broncógeno Absceso pulmonar Calcificaciones pleurales Fibrosis quística Derrame pleural encapsulado Otras caus as Osteomielitis clavicular Divertículo esofágico Sarcoidosis Síndrome de Behçet Propiltiouracilo Fiebre mediterránea familiar Otras realizó una tomografía axial computadorizada (TAC) que objetivó un gran bocio multinodular intratorácico con calcificaciones y compresión de los troncos braquicefálicos (fig. 2). Las hormonas tiroideas y la tiroglobulina fueron normales. Con el diagnóstico de SVCS por bocio multinodular intratorácico fueron intervenidas mediante cervicotomía anterior de Kocher. En todos los casos se realizó tiroidectomía total, pudiendo extraerse la pieza tiroidea a través de la incisión cervical sin necesidad de esternotomía. La intervención fue larga y laboriosa, sobrepasando las tres horas de duración en tres de los pacientes. En todos los casos se identificaron los dos nervios recurrentes y un mínimo de tres paratiroides. Durante el postoperatorio dos pacientes presentaron complicaciones: a) una disfonía transitoria que cedió a los ocho meses y un pequeño hematoma cervical que se drenó con anestesia local, y b) una hipocalcemia transitoria que precisó suplementos de calcio durante un mes, y un hematoma cervical asfixiante que precisó drenaje urgente en quirófano y revisión de la hemostasia. La anatomía patológica informó en los cuatro casos de bocio multinodular, con un peso superior a 190 g en todos ellos. Con un seguimiento superior a los dos años las pacientes están asintomáticas, con soportes de tiroxina entre 100 y 1 5 0 mg diarios. Periódicamente, anual o bianualmente, son revisadas en consultas externas de Endocrinología. Dis cus ió n La facilidad de colapso de la vena cava superior se relaciona con la delgadez de su pared, su baja presión venosa y por el hecho de encontrarse encerrada en un estrecho compartimento mediastínico rodeada por estructuras rígidas 3 . En el SVCS benigno de origen tiroideo el comienzo clínico suele ser insidioso y lentamente progresivo, salvo que existan factores precipitantes (hemorragia intratumoral, etc.) que determinen un aumento brusco del contenido intratorácico 9 . Además hay que recordar que los bocios retroesternales son raramente sintomáticos, y generalmente se descubren como un hallazgo incidental dentro de un cribaje por una radiografía de tórax 1 0 , y en ocasiones a pesar de la obstrucción venosa no se llega a producir el síndrome por el desarrollo de la circulación colateral 1 4 . El síntoma inicial más frecuente es la disnea (5 0 %) como en nuestra serie. La tríada clínica clásica incluye el edema en esclavina, la cianosis en cara y extremidades superiores, y la circulación colateral toracobraquial como ocurrió al final en nuestros pacientes. Los síntomas más frecuentes son el edema facial, la disnea, la tos, la ortopnea y el edema de cuello y brazos 3 ,1 4 . A la exploración física destaca la distensión de las venas torácicas, el estasis de las venas del cuello, el edema de cara y la taquipnea. La plétora facial con cianosis, el edema de las extremidades superiores, la p arálisis de cuerdas vocales y el síndrome de Horner son menos frecuentes. Son indicadores de extrema gravedad la presencia de coma (edema cerebral) o estridor laríngeo (edema laríngeo) 3 . La clínica empeora con los cambios posturales, la tos y los esfuerzos 3 , y en los casos de SVCS subclínico el signo de Pemberton (congestion facial, cianosis y distrés al elevar ambos brazos) es útil para el diagnóstico 1 1 ,1 4 ,1 5 . El diagnóstico semiológico es fácil de hacer a partir de los hallazgos clínicos, aunque el etiológico es, a veces, más difícil 3 . Hasta hace unas décadas el diagnóstico histológico presentaba escasa relevancia, ya que el tratamiento indicado era la radioterapia. Sin embargo, en la actualidad es importante para identificar etiologías curables o mejorables con otras terapéuticas (quimioterapia, cirugía, trombólisis, etc.) 2 ,1 6 . Además es excepcionalmente difícil la obtención de un diagnóstico intentando interpretar biopsias de tejidos incluidos en los campos de irradiación una vez que el tratamiento radioterápico ha sido iniciado 5 ,1 7 . La precocidad del tratamiento radioterápico sin diagnóstico histológico sólo estaría indicada ante un compromiso vital inmediato 3 . Además de una historia clínica y una adecuada exploración física, las técnicas de imagen son fundamentales para el diagnóstico. La radiología de tórax no es específica, aunque puede ayudar a la localización. Así en la etiología tiroidea muestra ensancha209 Documento descargado de http://www.revclinesp.es el 30/11/2016. Copia para uso personal, se prohíbe la transmisión de este documento por cualquier medio o formato. REVISTA CLÍNICA ESPAÑOLA, VOL. 200, NÚM. 4, ABRIL 2000 TABLA 2 Ca s u ís tic a Sexo Edad Tiempo evolución del bocio Bocio cervical Prolongación intratorácica Otra sintomatología compresiva Diagnóstico etiológico Cirugía Tiempo quirúrgico Complicaciones postquirúrgicas Peso de la pieza Evolución (años) Tratamiento diario Ca s o 1 Ca s o 2 Ca s o 3 Ca s o 4 Mujer 57 años 25 años IV/ IV Sí Disnea Disfagia Disfonía Ronquera Tos TAC Tiroidectomía total 180 minutos No Mujer 90 años 40 años II/ IV Sí Disnea Tos Mujer 60 años 20 años II/ IV Sí Disnea Disfagia Ronquera Mujer 52 años 15 años I/ IV Sí Disfagia TAC Tiroidectomía total 200 minutos No 200 g Asintomático (7) Tiroxina 100 235 g Asintomático (5) Tiroxina 150 TAC Tiroidectomía total 75 minutos Disfonía Hematoma cervical 195 g Asintomático (2) Tiroxina 100 TAC Tiroidectomía total 180 minutos Hipocalcemia Hematoma cervical 260 g Asintomático (4) Tiroxina 100 TAC: tomografía axial computadorizada. miento mediastínico en el 1 0 0 % de los casos y en menor proporción desviación de la tráquea 1 8 , que en nuestras pacientes se objetivó en todas. Actualmente la ecografía cervical y la gammagrafía tiroidea son dos pruebas utilizadas en el control del bocio multinodular, pero ante la presencia de un componente intratorácico es fundamental la realización de una TAC torácica con contraste venoso 1 9 ,2 0 . Moncada 2 1 demostró las ventajas de la TAC frente al resto de pruebas diagnósticas: a) muestra los detalles anatómicos de las estructuras intratorácicas y musculoesqueléticas; b) permite identificar la causa de la obstrucción y su extensión; c) documenta la circulación colateral; d) p ermite una biop sia p ercutánea bajo control radiológico, y e) permite planificar la radioterapia en los casos que se va a aplicar. En el SVCS maligno se puede utilizar la resonancia magnética, pues muestra mejor la relación del tumor con los vasos y otras estructuras hiliares y mediastínicas 2 2 . La toracotomía o toracoscopia diagnósticas se reservan para cuando el resto de pruebas no determinan la causa del SVCS 3 ,2 3 . Se discute si el SVCS es una verdadera urgencia médica, pues el riesgo vital por la simple obstrucción de la vena cava superior es dudoso y en los casos de etiología maligna la evolución y la mortalidad dependen más de la agresividad del tumor que de la propia obstrucción venosa 2 ,1 6 . Sin embargo, dejado a su evolución y sin tratamiento, el SVCS conduce al fallecimiento, secundario a edema cerebral o laríngeo, en un plazo de seis a ocho semanas desde el inicio de la obstrucción venosa. El tratamiento del SVCS depende sobre todo de la etiología, por lo que generalmente precisa radio y/ o quimioterapia 3 ,2 4 . En el bocio intratorácico el tratamiento de elección es la tiroidectomía 7 ,8 , aunque algunos autores 2 5 ,2 6 han utilizado sólo yodo radiactivo precedido, en casos aislados, por la administración de Fig. 1. Radiología sim ple de tórax: m asa m ediastínica anterior con desplazam iento traqueal. Fig. 2. Tom ografía axial com putadorizada: bocio m ultinodular intratorácico con calcificaciones y com presión de los troncos braquiocefálicos. 210 Documento descargado de http://www.revclinesp.es el 30/11/2016. Copia para uso personal, se prohíbe la transmisión de este documento por cualquier medio o formato. A. RÍOS ZAMBUDIO ET AL — SÍNDROME DE VENA CAVA SUPERIOR POR BOCIO MULTINODULAR hormona tiroidea. Tolle 27 fue el primero en tratarlo exclusivamente con tiroxina, en dosis de 75 mcg/ día, con resp uesta favorable. En nuestra casuística, al igual que otros autores 1 1 ,1 2 , los resultados obtenidos con la cirugía son muy buenos, con remisión total del cuadro, y además se soluciona definitivamente el problema etiológico, hecho que no ocurre cuando se trata médicamente con tiroxina y/ o yodo radiactivo. Por otra parte, la cirugía del bocio, a pesar de ser más laboriosa, no precisa generalmente la realización de una esternotomía para completar la tiroidectomía, lo cual reduce la morbilidad. Allo 2 8 también recomienda el tratamiento, pues no hay otro tratamiento curativo para bocios multinodulares de larga evolución; el tratamiento con 1 3 1 I puede precipitar en p acientes seniles una reacción inflamatoria aguda provocando un compromiso respiratorio y una evolución de años no excluye siempre malignidad. Por todo ello pensamos que el tratamiento de elección debe ser quirúrgico, reservando el tratamiento médico a casos límite de operabilidad. El pronóstico del SVCS depende de la etiología de la obstrucción. En los casos por bocio el pronóstico es muy bueno, presentando curación en la totalidad de los casos tras la tiroidectomía, precisando el resto de su vida tratamiento con tiroxina y las únicas secuelas son las que puedan quedar derivadas de la cirugía (disfonía, hipocalcemia, etc.). 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