RESOLUCION Nº 68/03 En Buenos Aires, a los 26 días del mes de marzo del año dos mil tres, sesionando en la Sala de Plenario del Consejo de la Magistratura del Poder Judicial de la Nación, con la Presidencia de la Dra. María Lelia Chaya, los señores consejeros presentes, VISTO: El expediente 281/01, caratulado “Sandaza, Sixto Alfredo c/ integrantes de la Sala ‘G’ Civil, Dres. Greco Bellucci y otro”, del que RESULTA: I. El señor Sixto Alfredo Sandaza denuncia ante este Consejo a los integrantes de la Sala “G” de la Cámara Nacional de Apelaciones en lo Civil, doctores Leopoldo Montes de Oca, Roberto Ernesto Greco y Carlos Alfredo Bellucci, “por la comisión de delitos, prevaricato y(...) mal desempeño en su cargo” (fs. 1/32). II. El presentante cuestiona lo resuelto por esa Sala en el expediente caratulado “Sandaza, Sixto Alfredo c/ Danziger, Héctor s/ rendición de cuentas” (autos 261.992/87), en trámite ante el Juzgado Nacional de Primera Instancia en lo Civil Nº 105, en el cual los magistrados mencionados intervinieron en grado de apelación. El interesado relata que las actuaciones referidas tuvieron inicio al promover la disolución de la sociedad denominada “Estudio de Arquitectura Sandaza-Danziger” y que la pretensión incluía el cincuenta por ciento de las utilidades generadas por una obra en San Bernardo, Provincia de Buenos Aires. III. Manifiesta que “la garantía de independencia de los jueces solamente puede ser invocada para la aplicación de sanciones disciplinarias, pero jamás para analizar su mal desempeño y comisión de delitos en el ejercicio de sus funciones” (fs. 1 vta.). IV. Refiere que el mal desempeño, el prevaricato y el abuso de poder en que incurren, se desprenden del contenido de la sentencia. Considera veintiséis obras, que se según juzgaron quien de rindiera diferente cuentas manera -actor o demandado- “aplicando distintas interpretaciones de las leyes de Aranceles” para juzgar situaciones similares y “siempre en perjuicio del actor” (fs. 30). V. Solicita que “se investigue el crecimiento desmesurado del patrimonio de los integrantes de la Cámara Sala G(...) en especial los del Dr. Leopoldo Montes de Oca, durante el año 1998 con respecto al año 1997 y concretamente dentro del año/98 el período que va del 1º de Mayo al 30 de Junio”, sesenta días después del dictado de la sentencia atacada (fs. 25 vta.). Expresa que de acuerdo con documentación anónima, el patrimonio del citado juez se habría incrementado en $ 100.000 en 1998, con relación al año anterior. Agrega que, veinte días después de dictar el fallo, adquiere una propiedad en Miramar. VI. Sostiene que la Empresa Manufer S.C.A., que vendió el chalet de Miramar al doctor Montes de Oca, tiene sus oficinas en Avda. Pueyrredon 709, a una cuadra de la del arquitecto Danziger -demandado perdidoso en primera instanciaque está en Avda. Pueyrredon 848, ambas de esta ciudad, insinuando la existencia de una relación entre ellos. VII. Añade que el Dr. Néstor Luis Lloveras, abogado del demandado, es ex camarista de la Sala “E”, con ubicación muy próxima a la Sala “G”, por lo que es de suponer “la existencia de un conocimiento entre los integrantes de la Cámara y de este defensor del demandado Danziger. Lo que genera familiaridad excesiva en el trato y a su vez presunción de favoritismo”. Indica que, con su intervención ante la Cámara, logró que en aproximadamente dos meses ésta estudiara y fallara un caso que en primera instancia llevó casi diez años (fs. 26). VIII. En función de las medidas preliminares previstas en el artículo 7 del Reglamento de la Comisión de Acusación, se compulsó la causa sobre enriquecimiento ilícto que tramitó en el Juzgado Nacional en lo Criminal de Instrucción Nº 37, Secretaría Nº 129- caratulada “Montes de Oca, Leopoldo y otros s/ enriquecimiento ilícito” (autos 1680/4), de la que surge que ha sido archivada por inexistencia de delito. CONSIDERANDO: 1º) evidencian Que su las manifestaciones disconformidad con lo del denunciante resuelto por los integrantes de la Sala “G”, luego de haber sido rechazado su recurso ante la Corte Suprema de Justicia de la Nación por haberse omitido hacer la reserva del caso federal en primera instancia, prosperando en cambio el recurso del demandado reconviniente. El interesado se agravia por la disímil interpretación de la normativa aplicable. Cabe señalar que ello es suceptible de los recursos previstos en los ordenamientos procesales, los que, por otra parte, se ejercieron como se ha manifestado. Sin embargo, la citada discrepancia carece de entidad suficiente para decidir la apertura del procedimiento de remoción. De acuerdo con lo expuesto por el denunciante en su presentación, éste obtuvo sentencia favorable en primera instancia, por la suma de $ 293.291,68, con más sus intereses a contarse desde el 31 de octubre de 1992. La Sala “G” -que intervino como alzada- redujo el monto a $ 71.535,50 y, finalmente, luego de resolver aclaratorias presentadas por las partes, lo fijó en $ 77.640,75 e impuso las costas en el orden causado. Este pronunciamiento no conformó a las partes, lo cual motivó que ambas recurrieran ante la Corte Suprema de Justicia de la Nación. El interesado también afirmó que la sentencia de Cámara (Sala “G”) es de mayo de 1998 y la nueva Sala interviniente (“E”) -que se pronunció el 7 de marzo de 2001modificó el fallo declarando un saldo favorable al demandado reconviniente por la suma de $ 47.499. Ante este Consejo la denuncia se presentó en septiembre del año 2001. 2º) Que, si se tiene en cuenta la fecha de la sentencia de la Sala cuestionada y aquella de la interposición de la denuncia, se observa que el motivo de la presentación ha sido la disconformidad con el resultado del pleito, pues entre ambas ha transcurrido un lapso de tres años y cuatro meses. En relación con ello, se reitera el criterio establecido por la Comisión de Acusación en cuanto a que la mencionada discrepancia carece de entidad para decidir la apertura del apuntadas, y procedimiento debe de canalizarse remoción por por las causales de los recursos medio procesales idóneos que otorga la legislación vigente. En el caso en análisis, ese remedio no prosperó para el denunciante por una cuestión procesal -la falta de formulación de la pertinente reserva del caso federal- omitida en su momento. Asimismo, se ha dicho en reiterados pronunciamientos que este Cuerpo no puede constituirse en una nueva e inadmisible instancia a la que acudan los justiciables cuando sus planteos no tengan favorable acogida a sus intereses en los tribunales, salvo que nos encontremos en presencia de un desconocimiento del derecho que en la práctica se traduzca en un mal desempeño de las funciones para las que el juez fue designado, lo que no ocurre en el caso en examen. 3º) Que, de conformidad con el análisis efectuado, corresponde concluir que no surge en la actuación de los magistrados cuestionados irregularidad alguna que configure una de las causales de remoción previstas en el artículo 53 de la Constitución Nacional, razón por la cual corresponde -con acuerdo a lo propuesto por la Comisión de Acusación (dictamen 6/03)- desestimar la presente denuncia. 4º) Que el Sr. Sandaza ha efectuado una nueva presentación, el 14 de marzo del corriente año, la cual ha sido analizada por la Comisión de Acusación, informándose al respecto que no se aportan nuevos elementos que justifiquen un cambio en el criterio propuesto por la referida Comisión en el dictamen 6/03. Por ello, SE RESUELVE: 1º) Desestimar el pedido de apertura del procedimiento de remoción de los doctores Leopoldo Luis Víctor Montes de Oca, Roberto Ernesto Greco y Carlos Alfredo Bellucci, integrantes de la Sala “G” de la Cámara Nacional de Apelaciones en lo Civil. 2º) Notificar al denunciante y a los magistrados denunciados, y archivar el expediente. Regístrese. Firmado por ante mí, que doy fe. Fdo.: Jorge O. Casanovas - Abel Cornejo - María Lelia Chaya Joaquín P. da Rocha - Juan C. Gemignani - Claudio M. Kiper Lino E. Palacio - Luis E. Pereira Duarte - Victoria P. Pérez Tognola - Miguel A. Pichetto - Humberto Quiroga Lavié - Marcelo Stubrin - Marcela V. Rodríguez - Beinusz Szmukler - Pablo G. Hirschmann (Secretario General)