CÉLULA DE CRECIMIENTO
SERIE: “Espíritu De Consolidación Para La Posesión”
Lección 11
Tema: “Renunciando a la cultura latina por la cultura del Reino ”
Pr. Ap. Raúl David Ávila
www.ccnven.org/discipulado
Texto: Génesis 12:1-4
Introducción.1. Cuando Dios te da una visión que traerá sanidad a todas las familias de la tierra, junto con ella te
enseña lo urgente a cambiar.
1.1. No podrás ver la herencia de tu visión si no puedes dejar las distracciones almáticas de tu hoy.
1.2. La tierra: tiene que ver con la cultura de tu nación, parentela: tiene que ver con la cultura de tu
familia, de la casa de tu padre: la cultura que te gobierna.
1.3. La cultura de la tierra:
1.3.1. Harán era un lugar estratégico para el movimiento del comercio para toda esa zona, pero
también era un pueblo sumamente idólatra. Esto quiere decir, que había una mezcla de
negocio con un alto nivel de corrupción.
1.3.2. Quiere decir que lo que Abraham consiguió fue forjándose un futuro con una cultura de
trampa.
1.3.3. Nuestra cultura latina tiene también sus trampas. A un buen número de latinos no nos gusta
la disciplina, queremos hacernos ricos en tres días y vivir siempre despreciando la tierra que
nos da de comer.
1.3.4. El problema es que hasta que no renunciemos a la cultura de nuestros pueblos, jamás
haremos de nuestra nación una tierra productiva.
1.4. La cultura de tu parentela:
1.4.1. La nación de Israel desde el principio tuvo una lucha constante con la idolatría, el hacer de
cualquier cosa un dios.
1.4.2. No hay cosa que más despierte el juicio de Dios que la idolatría, porque es como que le
saquen una foto a una cucaracha y se le diga este eres tú.
1.4.3. Nuestra cultura latina no sólo lucha con la idolatría, sino que como pueblo nos formaron
bajo principios no cristianos, y nuestras familias, en general, se levantaron adorando al palo
y la piedra.
1.4.4. El latino es sumamente idólatra, cada cierto tiempo necesita inventarse un ídolo que le dé
esperanza de vida.
1.4.5. Por eso vemos las cosas más extrañas: la catedral de adoración a un futbolista, el templo de
un ex presidente en nuestro país, etc.
1.4.6. Esa cultura familiar es la que conlleva a que si uno de la familia hace plata, todos los demás
se le “guindan”, y si no les da para todos sus antojos es porque se volvió egoísta, tacaño y se
le subió el dinero a la cabeza; si tú triunfas, eres el nuevo ídolo y los ídolos están para
proveernos.
1.4.7. Esa cultura idolátrica con la que te formas desde tu casa, altera el sano y común compromiso
que asume una persona con el Reino de Dios, porque la cultura idólatra dice: a un santo se
le prende velas, se le presenta ofrendas y se le hace una caminata por los siete templos en
semana santa, pero el día que no te dé lo quieres y cuándo lo quieres, búscate otro santo.
1.4.8. Por eso hay gente que viene a decirte que se va de la visión, por las cosas más estúpidas, y
abandona el liderazgo. ¿Sabes por qué? porque está sirviendo a Jesús pero con la cultura de
su casa latina.
1.5. La cultura que gobierna:
1.5.1. Los judíos tenían como cultura que cuando la familia crecía, los hijos no se iban lejos de la
casa de su padre, sino que iban construyendo alrededor de la casa principal, de esa manera
se iba creando, prácticamente, una comunidad familiar donde el gran padre se convertía en
un gobernante. Por eso hablar con el gran padre era hablar con un hombre que tenia
gobierno sobre toda una línea generacional, con la cual hizo una comunidad.
CÉLULA DE CRECIMIENTO
SERIE: “Espíritu De Consolidación Para La Posesión”
Lección 11
Tema: “Renunciando a la cultura latina por la cultura del Reino ”
Pr. Ap. Raúl David Ávila
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1.5.2.
1.5.3.
1.5.4.
Cuando se muere Taré, el padre de Abraham, ellos se quedaron sin gobierno familiar y Dios
le dice: “sal de la casa de tu padre”, lo que le quiso decir fue: “ahora vivirás por mi gobierno
invisible y aprenderás autogobernarte.”
Gobierno invisible no es gobierno ausente, es simplemente un gobierno donde Dios te observa,
pero tú a él no.
En nuestra cultura latina de liderazgo nosotros siempre necesitamos ver al que nos manda,
así cuando lo vemos podemos aparentar ser quienes no somos.
El problema es cuando no ves a tu gobernante, pero sabes que está allí, y la única manera de
honrar sus demandas es aprendiendo a autogobernarte.
2. La clave está en que si tú no renuncias a la cultura de tu tierra, de tu familia y la que te gobierna,
para asumir el gobierno de Dios, sobre la totalidad de tu vida, jamás verás la tierra de tu herencia.
2.1. Hay gente que vive como gitanos en el Reino, porque no renuncian a lo que les vela su herencia.
2.2. Dicen amar a Jesús pero están velados, están ciegos.
2.3. El problema no es la palabra que reciben, sino a qué está aferrada su vida.
3. Dios no le pidió un cambio a Abraham por nada, sino por las naciones.
3.1. A veces nos aferramos a conductas, maneras de ver la vida, y una cultura de tinieblas por nada,
cuando Dios nos quiere dar una misión global.
3.2. Y haré de ti una nación GRANDE. (Gn. 12:2)
3.3. Te haré próspero en todos tus caminos, te daré un nombre y serás de bien para todo el que te
conozca. (Gn. 12:2)
3.4. Tendrás mi protección las 24 horas del día, hay gente que te maldecirá pero le irá peor, pero los
que aprendan a honrar lo que te he dado los sacará de la estrechez. (Gn. 12:3)
3.5. No sólo tendrás beneficios, sino que tu vida ejecutará acciones que liberarán y traerán restauración
a las familias de la tierra. (Gn. 12:3)
3.6. ¿Se da cuenta por qué debemos renunciar a la cultura de nuestros días, a la cultura que nos rodea?
Porque la cultura latina no discute que Dios te va a hacer una nación, ni que te protegerá, lo que sí
discute es por qué debo bendecir a todas las familias de la tierra.
3.7. Tú no puedes aceptar las promesas del Dios eterno sin aceptar su cultura para ver su cumplimiento.
3.8. Clave final: Vete como Jehová te dice. Haz hoy lo que tienes que hacer en las casas pero como
Jehová te dice. Levanta un negocio pero como Jehová te dice. Dirige a tu familia pero como Jehová
te dice.
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