I Encontré el más increíble tesoro En donde no tenía intención de
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…A Ella. Francisco Sández I Encontré el más increíble tesoro En donde no tenía intención de buscar Más fino y más bello que el oro Más grande y profundo que el mar. Hallazgo que aumentó mi poderío Ahora soy el hombre mas afortunado Un tesoro que será solo mío Y se quedara siempre a mi lado. De mi hallazgo lo que mas adoro Es que no es de un sencillo material Pues de carne y hueso es mi tesoro Y de belleza celestial. No perderte al cielo imploro Jamás lo podré soportar Y aunque tu, mujer, eres mi tesoro. Me pregunto ¿alguien te podrá robar? II Mientras soy nada, Soy un todo, Siénteme mientras soy real Porque después de salir de aquí Ya nada volverá A ser igual, Y cuando me veas de nuevo Yo no te podré ver No me ames, no te creo, Yo jamás podré ser fiel Ni fiel a mi vida Ni fiel al deseo Deja que te descubra Quien de verdad te quiera por dentro Porque no estoy aquí aunque te vea Porque no te siento aunque yo quiera Y porque aquí no soy feliz. III ¿Qué vida es vida? Si no se cometen errores Si no se cae en la subida O se vive sin miedos, sin temores. 1 …A Ella. Francisco Sández ¿Qué vida es gloria? Si se nace ya en la cima Si obtenemos la victoria Antes de emprender la partida. ¿Qué vida es vida? Sin tropiezos ni fracasos Sin caminos con derivas O amores sin rechazos. ¿Qué vida es justa? Si nunca nos han herido, El juego no se disfruta Sin antes haber perdido. Porque vida es vivir, Y vivir es amar, Y porque amar es sufrir Hasta el cielo alcanzar. IV ¿Recuerdas aquel día? Cuando cruzamos las miradas, Tiernamente me veías, Sutilmente te observaba. Alejado, oculto y distante, Intimidado a tu presencia Mi vida en un instante Cambió ante tu existencia. Me acerqué a ti lento y temeroso Como al viento le temen las cenizas, Y me obsequiaste el momento más hermoso Al ser la razón de tu sonrisa. En tu rostro suave y tierno, Plasmé la caricia de un amante Deseando detener el tiempo Al momento de abrazarte Tomé tu mano y sin palabras Confesé lo mucho que te quiero Tú con la duda en la mirada Y yo con un corazón sincero. 2 …A Ella. Francisco Sández Mi corazón en tu alma preso Palpita amor mientras declamo Solo dos palabras te confieso, Y esas palabras son… “Te Amo” V Alguien conoce a Sofía Niña de ojos avellanados Que llegó aquí por que huía Quien según a ningún hombre ha amado Según cuentan, ella es muy fría Y en el pueblo donde ella vivía A todos dejó desolados. Todo aquel que sus ojos veía Quedaba simplemente hipnotizado, Y sus corazones partía Sin siquiera haberla tocado, En esas la calle le ofrecían Lo que toda mujer ha soñado Pero ella a nadie oía Esperaba el hombre indicado Y en ese pueblo donde vivía Jamás lo habría encontrado. Pero dicen que en un cierto día A cada hombre haría un llamado A su casa a uno por uno llevaría Y en el cuarto oscuro de al lado Todos su delicado cuerpo tomarían. Extraña decisión que había tomado Pero todos sabían porque lo hacia Por dinero su cuerpo había entregado Por unas monedas su dignidad perdía. El hombre quien pensó sería el indicado Solo como un objeto la poseería Un gañan afortunado Que la llenó de melancolía, Su vida había arruinado Solo por tenerla un día Ella su alma le había dado Y poco después también la vida Pobre muchachita de Sofía La de los ojos avellanados ¿Porque amaste al que no lo merecía Si cualquiera por ti la vida habría dado? 3 …A Ella. Francisco Sández VI Se podrá sufrir de una serpiente su mordida, Y el letal veneno vencer, Pero no habrá ningún hombre en esta vida Que supere el mordaz beso de una mujer. VII Jamás pensé de ti enamorarme Frase común de un soñador Que al sentir el amor distante Niega sutilmente su temor. Cuando el tiempo se ha perdido Al igual que la razón El engaño del vencido Es su absurda indecisión Buscando pasiones ocultas Envueltas en la obsesión Y reclamando a la vida injusta Nos olvidamos del perdón VIII Interminables son mis días Si tu no estas a mi lado Mi corazón aun dañado Solo suspira poesía Porque te mantienes distante Porque te alejas vida mía El canto del ave ya no es alegría El destello del sol ya no es brillante Mis ojos están cegados Ya no buscan a un amante Mi corazón tan palpitante Del amor se siente aislado. IX Se enciende la noche, se apaga el día, Tu silueta en silencio me vuelve a llamar, Me escondo en mi sueño, tan frío y oscuro, Me oculto con miedo y solo intento observar. 4 …A Ella. Francisco Sández Desvanecido tu rostro en una densa niebla, Yo sé que tus ojos me han de observar, Me quieres contigo y no quieres que vuelva Me llevas por siempre hacia el nunca jamás. Eres vida sin rostro y yo un rostro sin alma, Ni un rayo de luna la podrá penetrar Temeroso espero a que llegue esa hora En que un sueño profundo me envuelva una vez más. Amo el misterio que envuelve tu vida No se si existes o en mi mente estás Eres el eco de mi inocencia perdida Y aunque te tengo entre sueños, al tenerte, te vas. X Que levante la mano yo le pido A quien no ha sufrido un mal de amores Que por una mujer la razón no ha perdido Y no ha vivido entre lamentos y dolores. Que levante la mano yo le ruego A quien por una mujer no ha llorado A quien piense en el amor como un simple juego Y que su corazón no haya sido envenenado. Que levante la mano yo le imploro A quien no ha sido engatusado por una mujer A quien por una mujer no ha dejado todo Y no ha peleado por no poderla tener. Que levante la mano yo le suplico A quien no ha sido victima de una mujer Si existe ese hombre yo no me explico De donde proviene tan frío poder. XI Respirando el aroma de tu voz Viva te mantengo en mi conciencia Mi corazón, partido por una hoz Muerto en vida aun late por tu ausencia. En tu lecho cuidaba tu inmóvil ser Aquellos ojos que mi vida iluminaron Ojos que como luciérnagas al amanecer Lentamente se apagaron. 5 …A Ella. Francisco Sández Nostalgia siento al recordarte, Vacío estoy de tanto haber sufrido Mis brazos extrañan rodearte Acogerte en mi regazo, tu nido XII Que la vida es corta y que vale oro Todos lo dicen no importa la edad, Y que el oro es nada, mas lo compra todo, Pero jamás la felicidad. Que es la vida entonces ¿Quien lo puedes explicar? Porque la comparas con algo Que no tiene un valor real. XII Hoy he puesto la primer piedra De la morada que deseo construir Lentamente las llevo a cuestas Sin descansos al subir. El viento sopla muy fuerte Ha derrumbado un par de muros Pero no maldigo a mi suerte Solo me quejo en silencio, mudo. Y lentamente se levanta Cambiando el aspecto del lugar Y lentamente se agiganta Lo que llamaré mi humilde hogar. Cada piedra vale oro Cada piedra es un avance Y trabajando como un moro El día que termine, será el día que descanse. Lluvia cae sobre mi espalda desnuda Mientras un nuevo muro estoy levantando Y aunque me retrasa mas me ayuda Con ella mi rostro estoy lavando. Animales varios se introducen a mis dominios Roban mi alimento y sofocan mi paz Hacen del día un eterno tormento Mas me forjan carácter y fuerza me dan. 6 …A Ella. Francisco Sández Y así pasan los días de mi vida Acumulándose y formando meses Esos meses formando años Y con los años mi morada crece. Hoy viejo me encuentro, mas no agotado Al fin terminé mi pequeña morada Ante su belleza me encuentro cegado Pues tan bello no he visto nada. Ahora mi mente divaga y sueña Por alguien que comparta conmigo Que sea de mi obra también la dueña Y sea de mi orgullo testigo. Aunque el construir fue un intenso martirio Se bien que mi trabajo no fue en vano Para mí un inmenso castillo Y lo he construido con mis propias manos. XIV Me pregunto si mi nombre hará eco Resonando en la eternidad Si mis ideas morirán conmigo Sin que alguien las pueda escuchar. Si acaso tengo talento Si mi voz es digna de escuchar Me pregunto si estos pensamientos Me obstruyen la realidad. ¿Pecará mente de pereza y triunfar intenta poco? ¿O sufriré delirios de grandeza Y lentamente me vuelvo loco? XV Hoy me siento con alma de poeta Más no puedo descifrar mi inspiración Brota muy dentro de mí esta sensación inquieta Brota muy dentro de mi corazón. El día hoy se ve mas iluminado Siento que hoy brilla más el sol Mi corazón late hoy mas animado Pero aun no encuentro la razón. 7 …A Ella. Francisco Sández Será acaso la mañana Con su fresca brisa de primavera Con la bella luz que emana La cual siento ver por vez primera. Será acaso la noche Con su hermosa luna llena Su oscuro cielo eterno Iluminado de brillantes estrellas. Espero encontrar la respuesta Encontrar el origen de mi felicidad Al saber lo que me ha cambiado Seré feliz en la eternidad. XVI Amada mía, no te puedo odiar, Seguiste los consejos de tu corazón Tú bien sabias que hacías mal Pero solo cometiste un error. Me heriste con tu traición Pero reconociste a tiempo tu maldad Y aunque duele de tu boca escucharla Es mejor que la verdad ocultar. Este error es más mío que tuyo Creo que no te supe dar tu lugar Destrozaste mi ego, mi orgullo, Ahora solo debo tu traición perdonar. Por mucho tiempo te mantuve en olvido Te llené de lujos más no de amor Y por eso, yo a ti perdón te pido De tus penas, el culpable fui yo. XVII Bajo la luna me encuentro esta noche Solo en una inmensa oscuridad Sufriendo un dolor enorme Pidiendo a Dios tenga piedad. Maldigo el error cometido Pues con odio fue creado Me dolió haberte ofendido Pero más me dolió haberte dejado. 8 …A Ella. Francisco Sández Por la vida camino sin rumbo Viviendo triste y desolado Ya que por mas que ande en el mundo Jamás volveré a estar a tu lado. Te extraño con profunda tristeza Desde el fondo de mi corazón Por haberte hecho una falsa promesa Quisiera pedirte perdón. Jure amarte por siempre Más no lo pude sostener Los celos cegaron mi mente Y el juicio me hicieron perder. Ahora los segundos me parecen eternos, Mis noches se vuelven mas frías Me siento como un hombre enfermo Me invade una inmensa agonía. Te amo y te amaré por siempre Te apoderaste de mi razón Ocupando un espacio en mi mente En mi mente y en mi corazón. XVIII Preciosa, ave de mal agüero Nacida para hacerme sufrir Entre mas me odias mas te quiero Y si tu quieres yo me espero, A que te decidas bien por mí. Tus palabras intentan hacerme mal Me lastiman mas no me pueden herir Tu voz tiene ese algo especial que es difícil de olvidar Y es muy fácil de sentir. Tal vez yo no tenga dinero Ni riquezas que compartir Mas no por ser pobre no soy caballero De la avaricia no soy prisionero El oro no me gobierna a mí. 9 …A Ella. Francisco Sández Poco es lo que te puedo dar Suficiente para poder vivir Sin carencias, sin necesidad, Y aunque lujos no podré comprar Te prometo serás muy feliz. Más si conmigo no puedes estar Si tu no estas destinada para mi No te podré obligar A que dejes de buscar Lo que no encontraras en mí. Si hacerte feliz no puedo Y esta vida no quieres vivir Que encuentres lo que buscas te deseo Preciosa ave de mal agüero Nacida para hacerme sufrir. XIX Tierna belleza interior Tus ojos me lo han revelado Un salto profundo al amor Y mi vida por siempre has cambiado. Labios tan dulces como la miel, Ojos profundos como el mar Suave y tersa es tu piel Piel que cualquiera desea acariciar. Tu hermosura me ha enloquecido Nunca había visto nada igual Pareces un ángel caído A quien por siempre he de admirar. Con tan solo una mirada He quedado enamorado Y aun que tú no digas nada Ya me siento intimidado. Si tan solo un pequeño deseo Me pudiera la vida cumplir Seria el estar contigo Y tu cuerpo poder sentir. 10 …A Ella. Francisco Sández Eres más bella que todas las rosas Mejor aun que todas las flores Eres una mujer hermosa Un digno manjar de dioses. XX Me ofreciste de ti lo mejor, Algo que en exceso podías brindar, No fue tu cuerpo, no fue pasión Ni un objeto material. Cerca de mí sin condiciones Formaste parte de mis desgracias y alegrías Llegaron a latir juntos nuestros corazones Y juntos vimos el inicio y el fin del día. No dejamos que los naturales instintos, Satisficieran nuestros deseos carnales Sentimientos que vagaron en un mismo laberinto Pero jamás encontraron placeres banales. Somos dos cuerpos con una sola alma Lo mejor que la vida me pudo obsequiar Una mujer que se respeta y ama Una luz que no deja de brillar. Eres del jardín la más bella flor Que jamás se ha de marchitar Gracias por darme de ti lo mejor Gracias por darme tu infinita amistad. XXI Ese algo que nos hace sufrir Mientras gozamos, Reír mientras lloramos Y se apodera de la razón. Que no se sabe de donde viene Ni como ha llegado Y hace al propósito anhelado Algo sin fuerza y sin valor. Ese sentimiento absurdo, Irracional, ilógico y burdo Que nos ataca sin temor. 11 …A Ella. Francisco Sández Ese algo que nos domina los sentidos Y cambia el rumbo del destino De quien ingenuamente lo buscó. Eso que hace vulnerable al poderoso Humillarse al orgulloso Y hace al insensible un soñador. Ese sentimiento loco Que buscan muchos y encuentran pocos, Ese algo tan hermoso, Ese algo es el amor. XXII Y ahí estaba nuevamente ella Llorando sola frente a su ventana Con una mirada triste y a la vez bella Sufría esperando la mañana. Y ahí estaba nuevamente yo Observándola solo, en secreto Contando cada triste lágrima De su eterno sufrimiento. En un cuarto solitario y frío Cada noche la observaba Deseando lo que jamás sería mío Cada día un poco más me enamoraba. Ingenuamente solía pensar Que por ella yo sentía amor Pero lo que nunca podría pasar Sería obtener su corazón. Su ventana frente a la mía Y ella a mi no me miraba En la oscuridad yo me escondía En la oscuridad yo la admiraba. Pero ella no era como yo Porque ella sola no vivía Ella había entregado su corazón A quien no lo merecía 12 …A Ella. Francisco Sández Un rufián al que llamaba esposo Su vida en un martirio transformaba Y absurdamente me sentía celoso Porque el tenia lo que yo mas deseaba. Desde mi cuarto impotente veía Como lastimaban a aquella hermosura Como injustamente ella sufría Y el verla sufrir era mi tortura. Hasta que un día no soporté más Observar tan injusta vida Y la decisión que habría de tomar Seria mi acto suicida. Busqué al ingrato que la golpeaba Para reclamarle lo que sentía Cada noche lo esperaba Un intenso odio en mi crecía. Y en el día en que en la calle lo encontré Con sucias mujeres a su alrededor Del cuello al instante lo tomé Mirando en sus ojos el temor. Desquité mi furia reprimida En el cuerpo de aquel mal nacido Y aunque con mis manos le quité la vida Me sentí al hacerlo, renacido. Después de cometer la atrocidad Hui corriendo desesperado Bañado en sangre regresé a mi hogar Mas no importaba, la había salvado. Solo aquel día fui feliz Pues la justicia pronto me encontraría Y aunque para ella el culpable yo fui Gracias a esto ella jamás lloraría. Ahora de nuevo estoy en un cuarto frío Solo y rodeado de lamentos El haber amado lo que no fue mío Ahora es mi eterno sufrimiento. 13 …A Ella. Francisco Sández Su rostro veo en la luna llena Ahora se dibuja en el una sonrisa, Yo muero lento, es mi pena Pero ella es feliz y esa es mi dicha. XXIII Avanza, avanza la esperanza, Grita y canta de alegría, Corre y brinca todo el día Y ofrece a Dios una alabanza. Avanza, avanza la esperanza Ni una pizca de agonía Corre y corre por la vía Y por más que corra no se cansa. Avanza, avanza la esperanza Llena el alma de armonía Despierta al fin al que dormía Lo despierta y lo levanta. Avanza, avanza la esperanza Ríe al fin el que sufría Vive al fin el que moría Y al vivir el cielo alcanza. XXIV Tú serás mi dulce adicción Mi eterno y divino mal Serás mi ilógica obsesión Mi amor por ti será inmortal. De tu amor siempre prisionero Atrapado por tu seductora figura Tal vez como hombre no sea el primero Pero seré el elegido sin duda. Se bien que esta adicción Me llevara directo al infierno Más no importa que seas mi perdición Eres y serás el más exquisito veneno XXV Te marchaste solitaria y fría Tu recuerdo aun queda fijo en el tiempo Muere la noche muere el día Y yo aun escucho tu voz en el viento. 14 …A Ella. Francisco Sández Porque olvidarte no podría Y olvidarte yo no quiero Eres tal vez la oscuridad en mis días Pero serás la luz al final de mi sendero. Al que solía llamar mi hogar Ahora solo es una casa vacía Los muebles no la podrán llenar Le falta tu luz y tu armonía. Aunque ese veneno me tenía cegado Aun recuerdo la noche sombría En la que llegue a la casa enviciado Mientras tú dulcemente dormías. Mi mente se había encolerizado Un gran rencor me poseía Falsos rumores había escuchado Un falso sentimiento me invadía. Escuche que me habías engañado Y que muy pronto me dejarías Jamás las debí haber escuchado Huecas y absurdas tonterías. El cuchillo de mi funda había sacado El rencor en mi pecho se oprimía Y después de tu boca haber tapado El metal en tu piel se enterraría. Volví mis ojos hacia un lado Pues ver tu rostro no podía Tus fuerzas se habían agotado Ya la muerte te invadía. Mas el odio pronto se esfumó Pero tarde me arrepentiría Pues el daño estaba hecho Y salvarte no podía. Te fuiste desvaneciendo en mis brazos Lentamente te perdía Te sostenía fuertemente en mi regazo Mientras lentamente tu morías. 15 …A Ella. Francisco Sández Me sonreíste tiernamente Mientras yo por ti sufría Y con un último beso en tu frente Yo me quedaba y tú partías. Me tomaste de la mano Expresando lo que por mi sentías Me dijiste “yo te amo” Y poco a poco te me ibas. Por mi culpa ahora te has ido Por mi culpa se esfumó tu vida Y aunque en verdad esté arrepentido No podré perdonarme tu partida. En mis sueños quiero verte Yo te amo todavía Regresa de la muerte Regresa amada mía. Pero esa dicha no merezco Solo esta amarga agonía, Pues estas manos que alguna vez te acariciaron Injustamente te quitaron la vida. XXVI Como un felino en atenta vigilia Acecho tu cuerpo al verte pasar Tu meneo hipnotiza mi mente obsesiva Este día de mi no podrás escapar. Con lentitud caminas coqueta ante mis ojos Y dejas que la silueta de tu cuerpo pueda admirar Te burlas y me manipulas a tu antojo Deseo obtenerte, no me basta observar. ¿Que necesito dime, para que a mi pertenezcas? Yo te doy todo, promesa cumplida ¿Que deseas? Te doy mis riquezas Y si eso no basta te entrego mi vida. XVII Yo no era un hombre era un guerrero, Y sentenciado estoy ahora por tu amor, Castigado y prisionero Entre las celdas del dolor. 16 …A Ella. Francisco Sández Mi corazón fue traicionero, Pues por ti se obsesionó Y aunque me esfuerce con esmero No sentiré hacia ti rencor. Maldito corazón embustero Que ingenuamente me engañó De la peor mujer en mi sendero De esa mujer se enamoró. Mi carácter solía ser como el acero No conocía el dolor Más contigo fue ligero Tu simple voz lo intimidó. Se bien que no soy el primero Que es lastimado por una pasión Más fuera de mi yo quiero Este maldito dolor. Poco a poco yo me muero, Solo, triste y sin calor, Robaste mi corazón entero Y el morir por ti es mi gran temor. XVIII 1 Caminante de la noche, Dime hacia donde vas, ¿Llevas contigo esas flores Que no has podido entregar? 2 Si es que te burlas de mi desgracia, Solo espero que como yo no acabes Esas flores se han marchitado Y eso tú muy bien lo sabes. 1 Solo pegunto, no te enojes, Lo pensé por tu apresurado andar Puedes hacer lo que se te antoje ¿Solo pregunto hacia donde vas? 2 Voy hacia donde me lleve el viento A cualquier lugar lejos de aquí, Lejos del odio y el sufrimiento Que ya no tengo ganas de sentir. 17 …A Ella. Francisco Sández 1 Ahora se bien cual es tu camino, Se hacia donde vas y sé porque, Pero no odies a tu destino Y no le reclames lo que yo te gané. 2 A mi destino no le odio ni le reclamo, Si orgulloso te sientes de una falsa victoria Pues allá tu, yo te aclamo Tú obtienes el triunfo, y yo obtengo la gloria. 1 ¿De que gloria hablas si tengo a tu mujer? A quien le llevabas tus flores marchitas Ser mí esposa, será su papel Y vivir feliz en una gloria infinita. 2 No eres su dueño, tampoco su hombre Solo obtienes su cuerpo en las noches de frío Será tu esposa solo por nombre Más sabes bien que su corazón es mío XXIX Bajo un mar de sueños rotos, Sumergido en una profunda soledad, Mi corazón se alimentaba del odio Sufriendo una cruel realidad. La mujer que ame se ha ido Para nunca más regresar, La muerte había venido Ha clamar su propiedad. Fue un golpe demasiado duro Que me hizo perder la razón Haciendo trizas mi futuro y También mi corazón. Por completo perdí la cordura No quería aceptar la situación Se apodero de mí la locura Y me invadió una gran obsesión. El camposanto se tornó mi hogar, Los cuervos mi fiel compañía Me rehusaba a olvidar A quien fue el amor de mi vida. 18 …A Ella. Francisco Sández Junto a una tumba yo siempre dormía Despertando bajo un cielo gris La lluvia en mi cuerpo caía mojando mi rostro infeliz. Su perdida yo lamentaba, Y mi vida con odio maldecía, Pues así como un simple cigarrillo Mi vida despacio se consumía. ¿Por qué es tan triste la vida? ¿Por qué es tan amargo el destino? ¿Por qué ya no hay luz en mis días? ¿Por qué oscureció mi camino? Derramando una última lagrima Al cielo alce mi enfurecida voz Y cerrando los ojos junto a su lápida La oscura muerte me cobijó. XXX ¿Por qué se caen los ángeles? ¿Quien me lo puede explicar? ¿Por qué desafían a Dios? ¿Por qué les molesta la paz? ¿Por qué rechazan el paraíso? ¿Por qué en el cielo levantan guerras? ¿Acaso Dios nunca los quiso O sienten celos de la tierra? ¿Por qué desafían al eterno? Si él no los ha rechazado ¿Que es lo bello del infierno? ¿Que es lo bello del pecado? ¿Por qué Dios permite esto? ¿Por qué Dios los ha olvidado? ¿Acaso Dios esta molesto Con el mundo que ha creado? XXXI Ciego al amor Vulnerable al deseo Aun busco tu pasión Entre la nostalgia del recuerdo 19 …A Ella. Francisco Sández Sueño sin dormir Que tu pronto volverás Más al no tenerte aquí Solo duermo sin soñar. XXXII Me sentía triste y deprimido Tan cerca, muy cerca del fin Me sentía solo y malherido Con pocas ganas de vivir. En mi mundo de miseria Jamás pude imaginar Que una persona tan bella Me pudiera su amor brindar. Mi corazón había dejado de sentir, Mi cuerpo había dejado de luchar, Hasta que una noche se acercó a mí La mujer más bella del lugar. Despejó mi atormentado cielo Iluminó mi ensombrecido hogar, De mis ojos borró el desvelo Ocasionado por mi gran pesar. Limpió los baches del camino Que me impedían caminar, Dio un gran cambio a mi destino Para una nueva vida comenzar. Llegó cuando vacío me sentía Llenó ese espacio con su amistad Alejó el invierno de mis días Y de las noches la soledad. Al fin a una musa he encontrado Que infinita inspiración me dé A quien mi amor ya he entregado Por ser tan pura y digna mujer. Y aunque su amor aún no creo merecer Por darme más de lo que pedía No tengo más para ofrecer Que esta corta pero sincera poesía. 20 …A Ella. Francisco Sández XXXIII Hermosa niña de ojos negros, Piel morena y delicado andar ¿Seré yo quien te vele el sueño? ¿Seré yo quien te ha de enamorar? ¿Que me falta dime, para que mía seas? ¿Que es lo que buscas y no encuentras? Porque deseo ser lo que tú deseas ¿Cómo hacer que amor por mi sientas? Porque muero por hablarte un día Por tocar tus manos y sentir tu piel Serás la última musa de mis poesías Y yo seré quien te haga una feliz mujer. XXXIV Sentado en silencio en la orilla del mar, sobre la húmeda y blanca arena, oigo a lo lejos una voz serena un eco suave que no puedo ignorar. Me levanto observando la playa inquieta dudando aun en mi fría cordura, ¿De quien es la voz tan dulce y tan pura que mi mente mantiene sujeta? Me adentro curioso olvidando pensar Mientras el agua entre las rocas resuena Una última mirada hacia la blanca arena Y salto sin miedo hacia el fondo del mar. Soledad y silencio, una calma incierta, observo inseguro dentro del agua oscura escucho de nuevo aquella voz que murmura Un eco suave de melodía perfecta. A lo lejos veo una luz que al brillar Ilumina y destella como la luna llena Brindándome una bienvenida amena Señala el camino a donde debo llegar. Estando mas cerca veo una curveada silueta De una bella pero extraña criatura Que no siente miedo, se ve muy segura Y con mi presencia parece contenta. 21 …A Ella. Francisco Sández Me abre una puerta y me invita a pasar A un nuevo mundo de vida sin penas Y aunque dentro de ahí soy una vida ajena Nadie es extraño en un mundo de paz. Admiro en silencio la bella la silueta De aquella increíble pero rara hermosura ¿Será real o será una locura? Mi mente la niega aunque mi alma la sienta. Admiro su rostro sin poderla tocar Y pregunto su nombre a la bella sirena Contesta sonriendo mi nombre es Malena “esclava del mundo, diosa del mar” Se mueve muy lento y de forma coqueta Entre tierna sirena y mujer madura Admiro su cuerpo su fina textura Y su cola de pez con destellos violetas. El sueño me abrume sin poderlo evitar Y despierto mojado en la blanca arena En mi mente su canto todavía resuena Mis ojos su rostro no podrán olvidar. Recuerdo su cuerpo en el agua quieta Recuerdo su bella y torneada figura Su alma tan fresca, tan linda y tan pura Sin duda una musa, la mujer mas completa. Me levanto muy rápido para el mar observar. Y a lo lejos creo ver a la tierna sirena A la hermosa mujer de nombre Malena “esclava del mundo y diosa del mar. 22
