TAI CHI Ejercicios para iniciarse El objetivo de los ejercicios de Tai Chi que describiremos a continuación es, en primer lugar, el recobrar la vitalidad y alcanzar un estado de equilibrio a nivel energético. ● Disponer de quince minutos para la práctica, sin interrupciones, teléfono o preocupaciones. ● Realizar movimientos lentos, coordinados con una respiración profunda, que se realiza de manera lenta y suave. ● Concentrar, la mente en ese fluir del aire que inspiramos y que luego exhalamos, induciendo un estado de calma y tranquilidad interior, que permiten que el cuerpo recupere energía vital y desarrolle resistencia a la enfermedad. ● Tratar de contar con la dirección de un Instructor calificado a fin de que corrija lo errores posturales y vicios en los movimientos que uno mismo no puede percibir. Preparación 1. buscar un lugar cómodo, aireado pero sin corrientes de aire violentas. 2. evitar las interrupciones, agendando ese tiempo sólo para la práctica, para nosotros mismos 3. desconectar el celular o ponerlo en modo “silencio” 4. evitar estar conversando, leyendo o mirando TV, mientras se practica 5. colocarse en posición vertical con los pies separados el ancho de los hombros. www.clases-de-taichi.com.ar 1 6. comenzaremos a relajar el cuerpo recorriendo las diferentes partes del cuerpo y eliminando las tensiones en cada una de ellas: la cintura, los hombros, el abdomen, etc. Simplemente iremos relajando los músculos tensos, dejando que el cuerpo adopte una postura natural. 7. Despejar la mente de pensamientos ociosos, problemas personales o laborales . Buscar concentrarse exclusivamente en el momento de la práctica.. 8. Esto se alcanza cuando uno se centra en el ejercicio, dejando pasar de lado otro tipo de preocupaciones. Así se calman las emociones, al ritmo de una respiración profunda o abdominal. Este es un paso fundamental. Ejercicio I Recordar que son sólo quince minutos, si se realiza la práctica con consciencia, podrán ver resultados pronto ● Ubicarse en la posición de pie descripta anteriormente, en lo posible mirando al Norte. Los pies separados entre sí a una distancia igual a los hombros, la punta de los mismos orientados levemente hacia afuera. ● Inspiramos elevando los brazos por delante del cuerpo hasta que las manos relajadas lleguen a la altura de los hombros. ● Exhalamos bajando los brazos, primero se hunden los hombros, los codos y luego las manos descienden hasta la altura de la cadera, como apoyando las palmas sobre una mesa. ● Las rodillas se van flexionando mientras los brazos descienden, cuidando de que éstas no sobrepasen la línea de los dedos del pie. Se recomienda repetir este movimiento ocho veces hasta sentirlo correctamente y luego se lo puede encadenar con los siguientes o practicarlo siempre de forma aislada. www.clases-de-taichi.com.ar 2 Ejercicicio II El siguiente ejercicio que proponemos parte de la posición del anterior, pies separados por el ancho de hombros, rodillas semi-flexionadas y manos a la altura de la cadera con las palmas hacia abajo. ● Se elevan los brazos a la vez, el izquierdo hacia adelante, quedando la palma de la mano hacia arriba, y el derecho hacia el costado, ambos hasta la altura de los hombros. ● Miramos la mano del brazo derecho, la acercamos al rostro, y desde el hombro la orientamos hacia adelante y empujamos hacia el frente cruzándose con la mano izquierda que retrocede descendiendo hasta el ombligo, quedando la palma orientada hacia arriba. ● La mano izquierda sube desde el ombligo hacia el costado hasta la altura del hombro, quedando la derecha al frente (altura del hombro), y se repite lo que hicimos antes con el otro brazo; se acerca (en este caso) la mano izquierda hacia el rostro, gira hacia el frente cuando llega al hombro y empuja hacia adelante, mientras que la derecha que está al frente retrocede bajando hasta la altura del ombligo ● Vuelve a subir y se repite todo para el otro lado… se van alternando los movimientos, se va dando fluidez a los mismos. Al igual que el anterior, se recomienda repetir este movimiento varias veces y luego se lo puede encadenar con los siguientes o practicarlo siempre de forma aislada. Dentro de la larga serie de ejercicios de la cual hemos seleccionado apenas algunos para que puedan practicar sin mayores dificultades, por un lado por lo relativamente simples, y por otro por no ofrecer grades riesgos de lesionarse sin la supervisión de un profesional, que es siempre lo recomendable. www.clases-de-taichi.com.ar 3 Ejercicio III El siguiente ejercicio se puede practicar a continuación de los anteriores o sólo. En este caso la descripción es para realizarlo sin desplazamiento para evitar cualquier tipo de lesión, producto de una mala posición de pies o rodillas. ● Desde la posición de pies separados por el ancho de los hombros, semiflexionadas las rodillas ● comenzamos desplazando el peso del cuerpo hacia la pierna derecha, llevando las manos hacia el mismo lado, la izquierda arriba con la palma orientándose hacia la derecha y la derecha abajo con la palma orientada hacia la izquierda. Como si se sostuviera una pelota. ● Trasladamos los brazos, a la vez que vamos pasando el peso del cuerpo hacia la pierna izquierda, mientras inspiramos, y al llegar al extremo izquierdo cambiamos de posición las manos. ● la mano izquierda baja y se orienta la palma hacia la derecha, y la mano derecha sube orientándose la palma hacia la izquierda. ● Comenzamos entonces a trasladar el peso del cuerpo hacia la pierna derecha, mientras exhalamos, llevando los brazos hacia el extremo derecho, donde volvemos a cambiar la posición de las manos. Se repite, inspirando cuando vamos para un lado y exhalando cuando vamos para el otro. Los cambios de la posición de los brazos se realizan siempre en los extremos. El peso se traslada suavemente de un lado a otro coincidiendo con la respiración. Todos los movimientos en general se realizan con todo el cuerpo y desde “adentro”. El Tai Chi pertenece al grupo de Escuelas Internas denominadas en Oriente como “Nei Dan”. Se trabaja con energía interna y no con fuerza muscular. www.clases-de-taichi.com.ar 4 Con la práctica regular de estos sencillos ejercicios se logra obtener en general mayor energía vital, tonicidad muscular, se regula la presión arterial, se mejora el humor logrando mayor soltura y flexibilidad. Una de las cosas que más nos cuestan a las mujeres es la de poder “soltar” las cosas, con la práctica del Tai Chi aprendemos a mejorar en muchos aspectos, a conectarnos con nosotras mismas, a renovarnos… a ser felices. Profesora Adriana Vellegal Especialista en Filosofía de Oriente y Occidente Directora de ConCiencia TAI CHI, Escuela Integral de Tai Ch y Chi Kung - Argentina www.clases-de-taichi.com.ar 5