AMPARO DIRECTO 1557/2016 QUEJOSOS: ********** EN REVISIÓN VISTO BUENO SEÑOR MINISTRO PONENTE: MINISTRO JORGE MARIO PARDO REBOLLEDO SECRETARIO: JORGE ARRIAGA CHAN TEMBLADOR Ciudad de México. Acuerdo de la Primera Sala de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, correspondiente al día […]. V I S T O S para resolver los autos relativos al amparo directo en revisión 1557/2016, interpuesto en contra de la sentencia dictada por el Cuarto Tribunal Colegiado del Decimoquinto Circuito, el dieciocho de febrero de dos mil dieciséis, al resolver el amparo directo **********; R E S U L T A N D O: PRIMERO. Demanda de amparo. Por escrito presentado el veintitrés de octubre de dos mil quince, por conducto de la Primera Sala del Tribunal Superior de Justicia del Estado de Baja California, señalada como autoridad responsable en el amparo, **********y********** promovieron demanda de amparo en contra de las autoridades y por los actos que a continuación se indican: Autoridades Responsables: La Primera Sala del Tribunal Superior de Justicia del Estado de Baja California. El C. Juez Séptimo de Primera Instancia de lo Civil, del Partido Judicial de Tijuana, Baja California. Actos Reclamados: AMPARO DIRECTO EN REVISIÓN 1557/2016 La sentencia definitiva de veinticinco de septiembre de dos mil quince, dictada en el toca de apelación **********. La sentencia definitiva de nueve de marzo de dos mil quince, dictada en primera instancia dentro del expediente **********, relativo a un juicio especial hipotecario. SEGUNDO. Preceptos constitucionales violados y tercero interesado. La parte quejosa señaló como derechos humanos y garantías violadas en su perjuicio, las contenidas en los artículos 1° párrafos primero, segundo, tercero y quinto, 16, 25 párrafo primero y 28 párrafo sexto de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, así como el artículo 24 de la Convención Americana sobre Derechos Humanos. Además señaló como terceros interesados a ********** y a **********, **********expresando los conceptos de violación que estimó pertinentes.1 TERCERO. Trámite y resolución del juicio de amparo. Mediante proveído de dos de diciembre de dos mil quince, el Presidente del Cuarto Tribunal Colegiado del Decimoquinto Circuito, órgano jurisdiccional al que por razón de turno correspondió el conocimiento de la demanda, la ordenó registrar bajo el número de expediente **********; admitiéndola a trámite.2 Seguidos los trámites procesales correspondientes, el Tribunal Colegiado del conocimiento dictó sentencia el dieciocho de febrero de dos mil dieciséis, en la que resolvió negar el amparo solicitado3. CUARTO. Interposición del recurso de revisión. Inconforme con la sentencia de amparo, la parte quejosa mediante escrito 1 Cuaderno del Juicio de Amparo Directo **********. Fojas 3 a 20. Ibídem. Fojas 33 a 34. 3 Ibídem. Fojas 50 a 60 vuelta. 2 2 AMPARO DIRECTO EN REVISIÓN 1557/2016 presentado el diez de marzo de dos mil dieciséis, ante la Oficina de Correspondencia Común de los Tribunales Colegiados del Decimoquinto Circuito interpuso recurso de revisión.4 Por auto de catorce de marzo de dos mil dieciséis, el Presidente del Tribunal Colegiado del conocimiento tuvo por interpuesto el recurso de que se trata y ordenó remitir los autos del juicio de amparo a la Suprema Corte de Justicia de la Nación, haciendo mención de que en la sentencia emitida no hubo pronunciamiento sobre la constitucionalidad o inconstitucionalidad de una norma general o tratado internacional, ni se estableció la interpretación directa de un precepto constitucional. QUINTO. Trámite del recurso de revisión ante la Suprema Corte de Justicia de la Nación. Con la remisión anterior, el Presidente de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, por auto de treinta de marzo de dos mil dieciséis, dispuso formar y registrar el recurso de revisión bajo el número 1557/2016. En el mismo proveído ordenó requerir a ********** para que, ante la presencia judicial, expresara si ratificaba o no la firma autógrafa que calza el escrito de expresión de agravios, así como su contenido, bajo el apercibimiento que de no hacerlo se tendría por no interpuesto por lo que respecta a la citada quejosa; y una vez hecho lo anterior que se diera nuevamente cuenta para acordar lo que en derecho correspondiera. Una vez ratificada la firma referida, por acuerdo de veintiséis de abril de dos mil dieciséis, se admitió el asunto a trámite y se señaló que si bien existe criterio emitido por este alto tribunal en relación con el tema, se impone admitirlo dado que su resolución podría dar lugar a un criterio de importancia y trascendencia, pues se estima relevante 4 Toca del Amparo Directo en Revisión 1557/2016. Fojas 3 a 39. 3 AMPARO DIRECTO EN REVISIÓN 1557/2016 para el orden jurídico nacional el establecimiento de jurisprudencia sobre la constitucionalidad del precepto legal impugnado. En el mismo proveído, se ordenó turnar el expediente al Ministro Jorge Mario Pardo Rebolledo y la radicación del expediente en la Primera Sala de esta Suprema Corte de Justicia de la Nación, así como notificar a la Procuraduría General de la República, a través del Agente del Ministerio Público adscrito a este Alto Tribunal.5 SEXTO. Opinión del Agente del Ministerio Público. El Agente del Ministerio Público de la Federación no formuló pedimento. SÉPTIMO. Trámite del asunto en la Primera Sala En cumplimiento al proveído de admisión, el Presidente de la Primera Sala de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, por acuerdo de veinticinco de mayo de dos mil dieciséis, ordenó el avocamiento del asunto y dispuso el envío de los autos a la Ponencia del Ministro Jorge Mario Pardo Rebolledo, para formular el proyecto de resolución correspondiente.6 C O N S I D E R A N D O: PRIMERO. Competencia. Esta Primera Sala de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, es legalmente competente para conocer del presente recurso de revisión, en términos de lo dispuesto por los artículos 107, fracción IX, de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos; 81, fracción II, de la Ley de Amparo en vigor, y 21, fracción III, inciso a), de la Ley Orgánica del Poder Judicial de la Federación; en relación con los puntos primero y tercero del Acuerdo General número 5/2013, emitido por el Pleno de este Alto Tribunal el trece de mayo de dos mil trece y publicado en el Diario 5 6 Ibídem. Fojas 63 a 66 vuelta. Ibídem. Foja 83 4 AMPARO DIRECTO EN REVISIÓN 1557/2016 Oficial de la Federación el veintiuno del mismo mes y año; en virtud de que la materia del asunto corresponde a su especialidad. SEGUNDO. Oportunidad del recurso. Por tratarse de un presupuesto procesal cuyo análisis debe hacerse de oficio, es necesario corroborar que la interposición del recurso de revisión que nos ocupa fue oportuna. El recurso de revisión planteado por la parte quejosa fue interpuesto en tiempo y forma, de conformidad con lo dispuesto por el artículo 86 de la Ley de Amparo en vigor, pues de las constancias de autos se advierte que la sentencia dictada por el Cuarto Tribunal Colegiado del Decimoquinto Circuito, le fue notificada el veinticuatro de febrero de dos mil dieciséis,7 surtiendo efectos el día hábil siguiente, es decir, el veinticinco del citado mes y año, de conformidad con la fracción II, del artículo 31, de la Ley Reglamentaria de los artículos 103 y 107 de la Constitución Federal. Así, el plazo de diez días que señala el artículo 86 de la Ley de Amparo, corrió del veintiséis de febrero al diez de marzo de dos mil dieciséis, sin contar en dicho cómputo los días veintisiete y veintiocho de febrero, ni cinco y seis de marzo por ser sábados y domingos conforme al artículo 19 de la Ley de la Materia y 163 de la Ley Orgánica del Poder Judicial de la Federación. En tales condiciones, dado que de autos se desprende que el recurso de revisión fue presentado ante la Oficina de Correspondencia Común de los Tribunales Colegiados del Decimoquinto Circuito, el diez de marzo de la presente anualidad según se desprende del sello fechador que aparece en la foja tres del presente toca, resulta evidente que se interpuso oportunamente. 7 Cuaderno del Juicio de Amparo Directo **********. Foja 60 vuelta. 5 AMPARO DIRECTO EN REVISIÓN 1557/2016 TERCERO. Cuestiones necesarias para resolver el asunto. A continuación se hace una relación, en lo que interesa, de los antecedentes del asunto, de los conceptos de violación esgrimidos por la parte quejosa, de las consideraciones del Tribunal Colegiado de Circuito, así como de los agravios expresados por el recurrente: I. 1. Antecedentes. De los autos se despende: Juicio Especial Hipotecario. ********** demandó de los ahora quejosos en la vía especial hipotecaria entre otras cosas, el vencimiento anticipado de un contrato de apertura de crédito simple con interés y garantía hipotecaria, así como la terminación de un contrato de cobertura accesorio al primero, y el pago de diversas cantidades entre ellas el monto de la suerte principal del contrato, los intereses ordinarios, la comisión por administración y cobertura, etc., todas las cuales estaban expresadas en Unidades de Inversión (en adelante UDIS). De dicha demanda conoció el Juez Séptimo de lo Civil del Partido Judicial de Tijuana Baja California, quien registró dicho asunto bajo el número **********. Dicho juez mediante sentencia de nueve de marzo de dos mil quince, resolvió, entre otras cuestiones, que la parte actora acreditó su acción, por lo que: Decretó el vencimiento anticipado del contrato de apertura de crédito simple con interés y garantía hipotecaria; así como la terminación del contrato de cobertura, por ser un contrato accesorio al primero. Condenó a los codemandados al pago de los siguientes conceptos: - Por concepto de capital adeudado, al pago de **********UDIS ********** 6 AMPARO DIRECTO EN REVISIÓN 1557/2016 - Por concepto de interés ordinario, al pago de la cantidad de ********** UDIS ********** - Por Comisión de Administración, al pago de ********** UDIS **********. - Por Comisión por Apertura, al pago de ********** UDIS ********** - Por intereses moratorios vencidos, al pago de ********** UDIS ********** más los que se sigan generando. Todo lo anterior en el entendido de que debe efectuarse el pago de las UDIS referidas en Pesos Moneda Nacional de acuerdo al factor de conversón que publique Banco de México en el Diario Oficial de la Federación para el día en que se haga el pago. 2. Recurso de apelación. Inconforme con la resolución citada la parte demandada interpuso recurso de apelación, del cual conoció la Primera Sala del Tribunal Superior de Justicia del Estado de Baja California, el cual fue radicado con el número ********** y resuelto por sentencia de veinticinco de septiembre del año dos mil quince, en la cual el tribunal de alzada declaró infundado el recurso de apelación hecho valer y confirmó la sentencia de primera instancia. 3. Juicio de amparo. Por escrito presentado el día veintitrés de octubre de dos mil quince, ante la sala responsable, los enjuiciados promovieron demanda de amparo. II. Conceptos de violación. El quejoso aduce dos conceptos de violación que, en síntesis, son los siguientes: Primero. En ambas sentencias reclamadas se aplica una norma inconstitucional: el Decreto por el que se Establecen las Obligaciones que Podrán Denominarse en Unidades de Inversión y Reforma y Adiciona diversas disposiciones del Código Fiscal de la Federación y la Ley del Impuesto Sobre la Renta, publicado en el Diario Oficial de la Federación el primero de abril de 1995. Señalan que dicho decreto resulta violatorio del derecho humano a no ser discriminado y de manera específica el derecho a la igual protección de la ley, previsto en el artículo 1 de la Constitución; y 7 AMPARO DIRECTO EN REVISIÓN 1557/2016 por otra parte los actos reclamados violan las reglas relativas a la rectoría del desarrollo nacional, contempladas en los artículos 25 párrafo primero y 28 párrafo sexto constitucionales, y por extensión se viola también el artículo 16 constitucional. Para demostrar de forma argumentativa la violación al derecho humano a la no discriminación se presentan los siguientes postulados: 1. El derecho a la no discriminación e igualdad ante la ley es de rango constitucional. 2. El régimen jurídico de comparación es el carácter protector del artículo 123 constitucional y de 101 de la Ley Federal del Trabajo, que aseguran el derecho del trabajador de cobrar su salario en moneada de curso legal. 3. El régimen de igualdad jurídica que resulta de los artículos 7 y 9 de la Ley Monetaria establece la obligación de pactar obligaciones en moneda de curso legal. La igualdad consecuente de esta disposición estriba en que todas las obligaciones quedan expuestas a los riesgos económicos de la moneda común, de manera que la inflación o la devaluación impactan de manera pareja todas las obligaciones o bien la parte del patrimonio de todas las personas consistente en dinero considerando que toda obligación de pago, forma parte del haber patrimonial de alguien. 4. El régimen especial de protección establecido en el Decreto es excluyente, toda vez que únicamente protege a las instituciones financieras y a los comerciantes ya que les asegura que el valor del pago de obligaciones mensuales, así como el valor principal de la deuda, se protege no sólo en moneda de curso legal, sino con una actualización del valor nominal al valor real para que se incremente en la proporción en que lo haga la inflación, lo que se traduce en una especial protección frente al riesgo inflacionario. 5. Sólo el haber patrimonial, expresado en dinero, de los bancos y de los comerciantes tiene acceso exclusivo a la protección que otorga el Decreto imputado, no así las demás personas cuyas obligaciones han de denominarse en moneda de curso legal, la cual continúa expuesta a los riesgos inflacionarios. El Decreto es de carácter protector, toda vez que pretende preservar el valor real del dinero del intermediario financiero y de los comerciantes de los riesgos inflacionarios, de tal suerte que cuando la obligación es exigible, ésta debe solventarse multiplicando las UDIS al valor actualizado de tales unidades. Lo 8 AMPARO DIRECTO EN REVISIÓN 1557/2016 cual es reconocido por la exposición de motivos del referido decreto y se advierte también del Diario de Debates del Congreso de la Unión. Es incuestionable el carácter protector del artículo 101 de la Ley Federal del Trabajo en cuanto a la protección al salario, pero sin dudas hay diferencias es decir desigual protección de la ley frente al Decreto de las UDIS, pues el trabajador sólo está protegido en la parte del salario que se paga en efectivo para que se pague en moneda nacional de curso legal, (o sea que el salario queda expuesto a la inflación) en tanto los sujetos privilegiados por el Decreto están protegidos para que las obligaciones a su favor no sean afectadas por la inflación. Se reconoce que hay casos en los que la discriminación persigue un fin constitucionalmente válido, esto es que la desigualdad normativa produzca el efecto de igualar las desigualdades materiales. Pero en el caso la parte fuerte de la relación es el intermediario financiero. En otro orden de ideas, alega que el Decreto es violatorio del artículo 25 párrafo primero y 28 párrafo sexto de la Constitución, pues el primero establece que corresponde al estado el papel rector en el desarrollo nacional, lo cual debe alcanzarse mediante una más justa distribución del ingreso y al riqueza, y debe permitir el pleno ejercicio de la libertad y la dignidad de los individuos, clases y grupos sociales. El segundo dispositivo enmarca la función del banco central de procurar la estabilidad del poder adquisitivo de la moneda nacional, fortaleciendo con ello la rectoría del desarrollo nacional que corresponde al estado, lo cual también debe alcanzarse mediante el respeto a la dignidad de los individuos y de los grupos sociales; por lo que una medida legislativa de política financiera no puede fundarse en una norma que parte de la idea de que es más importante el patrimonio del intermediario frente al patrimonio de las demás personas. SEGUNDO. Repite que la sentencia es violatoria del derecho humano a la igualdad, así como las reglas constitucionales relativas a la rectoría del desarrollo nacional. Refiriendo que la autoridad responsable se pronuncia de antemano sobre la colisión de los derechos referidos anteriormente, mediante una simple subsunción mecánica, por la prevalencia del derecho al debido proceso, a la igualdad adjetiva y a la seguridad jurídica, considerándolos preponderantes de forma absoluta frente al derecho a la no discriminación. 9 AMPARO DIRECTO EN REVISIÓN 1557/2016 Señalan que la disposición general que resulta inconstitucional es el artículo 81 del Código de Procedimientos Civiles para el Estado de Baja California. Se duelen de que la sentencia omite pronunciarse respecto del agravio primero, relativo a las violaciones cometidas en la sentencia de primera instancia, referentes al derecho humano a la no discriminación y a la igualdad y las reglas sobre la rectoría del desarrollo nacional, pues se limita la responsable de la sentencia al análisis del agravio relativo a la litis cerrada. Se puede resumir la sentencia de segunda instancia, como un pronunciamiento de antemano a favor de los derechos humanos de seguridad jurídica, debido proceso e igualdad adjetiva frente a los derechos humanos a la no discriminación y a la igualdad material. Recordando que la existencia de valores constitucionales no es absoluta, sino que es compatible con otros valores que también fueron considerados por el constituyente. La responsable estaba obligada a reconocer la existencia de una colisión del derecho humano a la igualdad, en la modalidad de no discriminación, con los derechos humanos a la igualdad adjetiva, debido proceso y seguridad jurídica y en esas circunstancias, se debió haber realizado un ejercicio de ponderación y aplicar el principio de razonabilidad, con el fin de encontrar la norma aplicable al caso concreto. La sentencia de primera instancia, al igual que la de apelación, viola el derecho humano a la no discriminación al reconocer de forma implícita la constitucionalidad del Decreto de primero de abril de mil novecientos noventa y cinco, sobre cuya constitucionalidad trata el primer concepto de violación. En virtud de todo lo anterior, debió decretarse la nulidad absoluta del contrato base de la acción, en atención a que se trata de actos contrarios al derecho público en particular a los derechos fundaméntales, por su propia naturaleza irrenunciables. A continuación se realiza un ejercicio de ponderación y aplicación del criterio de razonabilidad, siendo que las responsables tuvieron que haber tomado en cuenta las siguientes consecuencias prácticas sobre la prevalencia de los derechos fundamentales en colisión: - Refiere que no hay afectación en relación al derecho de afirmar de la actora. - Pero en relación al derecho a ser tratado de forma igual, si hay una afectación, pues si no se respeta, sería obligado a pagar una suma de dinero, como resultado de la convalidación de una situación jurídica fundada en la desigual protección de la ley. 10 AMPARO DIRECTO EN REVISIÓN 1557/2016 Además de poner a disposición de la persona privilegiada los medios de coacción para ejecutar dichas sentencias, - No se afecta el derecho de probar de su contraparte, y en relación al derecho de controvertir, se señala que habría una afectación pero que ésta no sería irreparable en tanto que en la contestación de los agravios o conceptos de violación la tercera interesada ha tenido y tiene la oportunidad de controvertir los argumentos de los quejoso, relativos a la nulidad absoluta del contrato fundatorio. De donde se puede concluir que la mejor consecución de los fines constitucionales, es el que prevalezca el derecho de no discriminación e igualdad sobre el debido proceso, seguridad e igualdad adjetiva. III. Consideraciones del Tribunal Colegiado. El Tribunal Colegiado determinó negar el amparo con base en lo siguiente: Se califican de infundados los conceptos de violación hechos valer por los quejosos, ello toda vez que el Decreto impugnado sí es constitucional. Explica el colegiado que el Congreso de la Unión estableció las condiciones de pago para que sumas pactadas en moneda nacional puedan denominarse en UDIS, siendo mediante el referido decreto que se autorizó al propio Banco de México para determinar el valor en pesos de las unidades de cuenta, lo cual no lleva implicada ninguna desatención a los artículos 13, 14, 16 y 25 de la Carta Magna, debido a que adminiculados con el artículo 28 de la ley suprema, el Banco de México es un órgano a través del cual el Estado mantiene la estabilidad del poder adquisitivo de la moneda nacional. Por lo tanto, resulta plenamente constitucional la expedición del decreto. Se explica a continuación la naturaleza de las UDIS, refiriendo que son de contratación potestativa, exclusivas para actos jurídicos, financieros y mercantiles, cuyo propósito es indexar o actualizar el monto de la obligación de pago en moneda nacional, al ritmo de la inflación. Siendo que fueron creadas para alcanzar la estabilidad y lograr la recuperación económica mediante la promoción del ahorro y estableciendo mecanismos que permitan la rehabilitación financiera de las empresas productivas, así como de las personas deudoras del sistema bancario del país. 11 AMPARO DIRECTO EN REVISIÓN 1557/2016 Ahora, la circunstancia de que el congreso haya delegado al Banco de México la obligación de determinar y publicar el valor de las UDIS de ninguna manera constituye una facultad legislativa delegada, porque al banco no se le confirió la atribución de que adoptara un sistema que sustituyera la forma de pago en pesos, ni que dictare las reglas para determinar su valor, sino que se le encomendó realizar las operaciones financieras para determinar el valor de las UDIS. Fue el propio congreso en su decreto el que fijó como se determinaría el valor de las UDIS. Se reitera que su uso es voluntario, por lo que legalmente puede pactarse su pago, tal y como sucedió en la especie, por lo que sí está demostrado que la parte obligada fue conforme y se comprometió a cubrir lo adeudado en UDIS. Es manifiesto que dichas Unidades se pueden traducir en pesos al convertirse en la unidad monetaria relativa, según el valor que se le va asignando diariamente por el Banco de México. Se fundamenta en la tesis 1ª. CXXXIII/20068, y en la 9 jurisprudencia 1ª./J. 16/2012 (9ª) . Por lo que opuestamente a los señalado por la parte quejosa, de ninguna manera se contraviene los principios que destacan sus motivos de queja, pues al momento de celebrar el contrato respectivo, sabían que debían cubrir el adeudo correspondiente en UDIS, mismas que se traducen en cantidad líquida, sin que con ello se favorezca a la explotación del hombre por el hombre, por el contrario, ello pretende que toda persona acceda a créditos accesibles; de ahí que resulten infundado. Siendo aplicables los criterios contenidos en la jurisprudencia 1ª/J. 95/200410, y en la tesis aislada 1ª CXXXII/200611. Finalmente se señala que no es legalmente posible someter los criterios de la Suprema Corte a control de constitucionalidad yo convencionalidad, por tratarse de un órgano jurisdiccional de menor jerarquía al Alto Tribunal. Por lo que son infundados y no se presenta violación alguna a los artículos 16, 25 y 28 constitucionales. De Rubro: “UNIDADES DE INVERSIÓN (UDIS). EL DECRETO PUBLICADO EN EL DIARIO OFICIAL DE LA FEDERACIÓN DE 1o. DE ABRIL DE 1995, POR EL CUAL SE CREARON AQUÉLLAS, ES CONSTITUCIONAL.” 9 De Rubro: “UNIDADES DE INVERSIÓN (UDIS). SON UNA UNIDAD DE CUENTA Y NO MONETARIA.” 10 De Rubro: “PAGARÉ. EN ÉL PUEDEN PACTARSE LEGALMENTE OBLIGACIONES DE PAGO EN UNIDADES DE INVERSIÓN (UDIS).” 11 De Rubro: “CONTRATOS MERCANTILES. EN ELLOS PUEDE PACTARSE LEGALMENTE EL PAGO DE LAS DEUDAS CONTRAÍDAS EN UNIDADES DE INVERSIÓN (UDIS).” 8 12 AMPARO DIRECTO EN REVISIÓN 1557/2016 IV. Expresión de Agravios. Los recurrentes aducen, en síntesis, lo siguiente: Consideraciones sobre la procedencia. En este apartado aducen los recurrentes que la sentencia de amparo abordó las normas que facultan al banco para mantener el poder adquisitivo de la moneda así como que el decreto favorece la explotación del hombre por el hombre, lo cual no formó parte de los conceptos de violación. Los conceptos de violación se encaminaban a aducir reglas o límites a la actividad legislativa, refiriéndose a que no se pueden emitir normas que violen el derecho humano a la igualdad y a la no discriminación. Lo cual constituye la base de los conceptos, reiterando que el Decreto privilegia a una clase económica y social privilegiada e impone una carga sobre otra clase trabajadora, el asalariado, el deudor financiero, el que ocupa vivienda y tiene que pedir prestado, de manera que soporta la carga de la estabilidad del poder acquisito, por lo que también contraria al artículo 25 que exige que la rectoría se alcance mediante el respeto a la dignidad de los grupos sociales e individuos que protege la constitución. La sentencia de amparo al remitir a la autonomía de la voluntad vuelve a disociar el planteamiento de los conceptos de violación, pero alega que tal argumento es insostenible porque los derecho humanos quedan sustraídos tanto de la acción del legislador, como del comercio, por lo tanto no son negociables. El hecho de que una norma violatoria de derechos humanos resulte de uso voluntario no subsana el hecho de que sea inconstitucional. Motivo de relevancia y trascendencia es la colisión de derechos, pues en los conceptos de violación, se alega que no obstante los quejosos no hicieron valer en la contestación de la demanda la excepción de nulidad absoluta, amparados en la inconstitucionalidad del decreto, debe sin embargo prevalecer el derecho a la igualdad y no discriminación sobre el derecho al debido proceso, en razón de los argumentos expuestos en los conceptos de violación. Adicionalmente se refiere a la tesis aislada de la Primera Sala en la que se sostiene que el Decreto es constitucional, siendo que la sentencia del colegiado omite decidir sobre la cuestión de constitucionalidad planteada por las quejosas, que consiste en la violación al derecho humano a la igualdad y no discriminación. 13 AMPARO DIRECTO EN REVISIÓN 1557/2016 Se abstiene de entrar al debate sobre la existencia de dos regímenes legales, uno para proteger al salario y el otro para proteger el patrimonio de los intermediarios financieros. Finalmente, en esta sección se señala que la sentencia resuelve un debate no planteado, como si se tratara de un “copy paste” de otra sentencia de amparo. PRIMERO. De la lectura de la demanda de amparo y de la correlativa sentencia se puede corroborar que la sentencia argumenta en el sentido de la constitucionalidad del Decreto como si los quejosos hubieran objetado las facultades del Banco de México para fijar el valor diario de las UDIS, por tratarse de facultades legislativas delegadas, cosa que jamás ocurrió. Los conceptos de violación lo que cuestionan es que el Decreto es violatorio de la igualdad y no discriminación. Explica nuevamente su concepto de violación, sobre el régimen especial de protección al patrimonio del intermediario financiero y que no se protege de igual manera el salario de los trabajadores, refiriendo que ello es pasado por alto. La sentencia refiere que el uso de UDIS es voluntario, lo cual se entiende, pero si el colegiado hubiera entrado al estudio de la cuestión planteada, a partir del principio de igualdad, tendría que concluir que los derechos fundamentales están fuera del mercado, sustraídos de la autonomía de la voluntad y en el caso de los derechos humanos también se encuentran sustraídos de la actividad legislativa. Pues la existencia de un régimen que vulnere los derechos sociales pero cuya adopción resulte voluntaria, no por ser voluntario deja de ser violatorio de derechos humanos. Los derechos de igualdad y no discriminación y el artículo 25 constitucional referente a la rectoría del desarrollo nacional deben interpretarse de manera sistemática y armónica, pues del último dispositivo se entendió que el desarrollo nacional debe darse en un marco de respeto a la dignidad de los grupos e individuos protegidos por la constitución. Por lo que resulta inconstitucional emitir una carga que significa mantener el poder adquisitivo de la moneda nacional, que se imponga sobre una clase social y económicamente débil, en beneficio de otra que resulta sociológica y económicamente fuerte y privilegiada. Por lo tanto en la sentencia se aplicó una norma inconstitucional. Basta observar la tabla de amortización para comprender los efectos perniciosos de una obscena decisión político-legislativa que privilegia a la parte fuerte de la relación financiera. SEGUNDO. Se duelen de la omisión del estudio de su otro concepto de violación en relación al test de ponderación (a la 14 AMPARO DIRECTO EN REVISIÓN 1557/2016 preferencia que debe concederse en el caso concreto al derecho humano a la igualdad y a la no discriminación, sobre el derecho humano al debido proceso). Reconocen que omitieron oponer en la primera instancia la excepción de nulidad del contrato, sin embargo alegan que en razón de estar pactado en UDIS y por tanto fundamentado en un decreto inconstitucional, dicho contrato base de la acción es nulo absoluto. Así mismo se sostiene que la autoridad responsable al emitir la sentencia de segunda instancia, establece a priori la prevalencia del derecho humano al debido proceso, sobre los otros, sin embargo dentro del derecho constitucional no puede establecerse en abstracto un derecho que prevalezca sobre otro, sino que ello debe ser analizado en cada caso concreto. CUARTO. Procedencia. Por corresponder a una cuestión de estudio preferente, esta Primera Sala se avocará a determinar la procedencia del presente recurso de revisión. De conformidad con lo previsto en los artículos 107, fracción IX, de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, 81, fracción II y 83 de la Ley de Amparo en vigor; 10, fracción III y 21, fracción III, inciso a) de la Ley Orgánica del Poder Judicial de la Federación; así como, en el punto primero del Acuerdo General Plenario 9/2015, se deriva lo siguiente. Por regla general, las sentencias que dicten los Tribunales Colegiados de Circuito en juicios de amparo directo son inatacables. Sin embargo, por excepción, tales sentencias serán susceptibles de ser impugnadas mediante recurso de revisión, si el Tribunal Colegiado de Circuito se pronunció u omitió hacerlo sobre temas propiamente de constitucionalidad (es decir, sobre la constitucionalidad de una norma general o sobre la interpretación directa de algún precepto de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos o de algún derecho humano reconocido en algún tratado internacional de que México sea parte). 15 AMPARO DIRECTO EN REVISIÓN 1557/2016 Además de que en la sentencia recurrida se decidan o se hubieran omitido decidir temas propiamente constitucionales, deberá fijarse un criterio de importancia y trascendencia, entendiéndose que será así cuando: a) se advierta que aquélla dará lugar a un pronunciamiento novedoso o de relevancia para el orden jurídico nacional, o b) lo decidido en la sentencia recurrida pueda implicar el desconocimiento de un criterio sostenido por la Suprema Corte de Justicia de la Nación relacionado con alguna cuestión propiamente constitucional. Finalmente, es importante destacar que el análisis definitivo de la procedencia del recurso es competencia, según sea el caso, del Pleno o las Salas de esta Suprema Corte. El hecho de que el Presidente, del Pleno o de la Sala respectiva, admita a trámite el mismo no implica la procedencia definitiva del recurso12. Atendiendo a lo anterior, el recurso que nos ocupa es procedente, como se explica a continuación: En la demanda de amparo se planteó la inconstitucionalidad del Decreto por el que se Establecen las Obligaciones que Podrán Denominarse en Unidades de Inversión y reforma y adiciona diversas disposiciones del Código Fiscal de la Federación y la Ley del Impuesto Sobre la Renta, publicado en el Diario Oficial de la Federación el primero de abril de 1995, por contravenir el derecho humano a la igualdad y no discriminación, así como una colisión entre los derechos 12 En este punto, resulta aplicable la tesis 14 de la otrora Tercera Sala de esta Suprema Corte, publicada en el Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta, Octava Época, Tomo II, Primera Parte, julio a diciembre de 1988, página 271, cuyo rubro es “REVISIÓN, IMPROCEDENCIA DEL RECURSO DE. NO ES OBSTÁCULO QUE EL PRESIDENTE DE LA SALA LO HUBIERE ADMITIDO”, así como la tesis jurisprudencial 101/2010 de esta Primera Sala, publicada en el Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta, Novena Época, Tomo XXXIII, enero de 2011, página 71, cuyo rubro es “AMPARO DIRECTO EN REVISIÓN. REQUISITOS DE PROCEDENCIA QUE DEBEN SER REVISADOS POR EL PRESIDENTE DE LA SUPREMA CORTE DE JUSTICIA DE LA NACIÓN O DE SUS SALAS”. 16 AMPARO DIRECTO EN REVISIÓN 1557/2016 de seguridad jurídica e igualdad formal y el derecho a la igualdad material y no discriminación. Siendo que, como se verá más adelante, esta Primera Sala advierte que el tribunal colegiado del conocimiento omitió pronunciarse sobre dichos conceptos; aunado a que tal omisión es combatida en los agravios esgrimidos en el presente recurso de revisión, de ahí que se cumple con el primer requisito de procedencia referente a que subsista una cuestión propiamente constitucional. Por lo que hace al tema de importancia y trascendencia esta Primera Sala considera que también se cumple con el mismo, en virtud de que el tema planteado puede permitir un pronunciamiento sobre la constitucionalidad del Decreto por el que se Establecen las Obligaciones que Podrán Denominarse en Unidades de Inversión y reforma y adiciona diversas disposiciones del Código Fiscal de la Federación y la Ley del Impuesto Sobre la Renta, publicado en el Diario Oficial de la Federación el primero de abril de 1995, en relación con el derecho a la igualdad y no discriminación, lo cual indudablemente puede resultar un tema de trascendencia para el orden jurídico nacional dado el impacto que puede tener sobre las obligaciones ya contraídas denominadas en UDIS, y sobre la contratación de este tipo de obligaciones; tema sobre el cual no hay precedentes por lo que también resulta novedoso. QUINTO. Estudio de los agravios. Atendiendo a lo anterior, corresponde a esta Primera Sala determinar si los agravios de la quejosa desvirtúan las consideraciones en que se sostiene la sentencia de amparo. Resultan fundados los agravios de los recurrentes en los que se duelen de la omisión del tribunal colegiado de pronunciarse sobre 17 AMPARO DIRECTO EN REVISIÓN 1557/2016 sus conceptos de violación en relación a la inconstitucionalidad del Decreto por el que se Establecen las Obligaciones que Podrán Denominarse en UDIS y a la colisión de derechos fundamentales, como se verá a continuación, y sobre la alegada colisión de derechos: Los quejosos en esencia plantearon los siguientes argumentos: - El Decreto por el que se Establecen las Obligaciones que Podrán Denominarse en UDIS, es violatorio del derecho humano a no ser discriminado y a la igual protección de la ley. También es violatorio de las reglas relativas a la rectoría del desarrollo nacional, contempladas en los artículos 25 párrafo primero, 28 párrafo sexto constitucionales, y por extensión se viola el artículo 16 constitucional, pues dichos artículos disponen que ese desarrollo debe alcanzarse mediante una más justa distribución del ingreso y al riqueza, y debe permitir el pleno ejercicio de la libertad y la dignidad de los individuos, clases y grupos sociales - Lo anterior en esencia porque es un decreto que protege el patrimonio de los inversionistas y comerciantes en tanto que permite que obligaciones a su favor se denominen en UDIS, siendo un mecanismo que protege su patrimonio en contra de las variaciones de la inflación, mientras que el patrimonio de los trabajadores simplemente se encuentra protegido por artículo 123 constitucional y de 101 de la Ley Federal del Trabajo, que aseguran el derecho del trabajador de cobrar su salario en moneada de curso legal, pero que sigue sujeto a los riesgos de la inflación. Señalando que ese régimen es el régimen de comparación para analizar la razonabilidad de la distinción. 18 AMPARO DIRECTO EN REVISIÓN 1557/2016 - Que la responsable se pronunció a priori sobre la colisión de derechos por la prevalencia del derecho al debido proceso, a la igualdad adjetiva y a la seguridad jurídica, considerándolos preponderantes de forma absoluta frente al derecho a la no discriminación, sin embargo, se debió haber realizado un ejercicio de ponderación y aplicar el principio de razonabilidad, con el fin de encontrar la norma aplicable al caso concreto. Por su parte, el tribunal colegiado declaró infundados los conceptos de violación por considerar que en el Decreto de 1995 no se delegaron facultades legislativas al Banco de México, sino que simplemente se le autorizó para determinar el valor en pesos de las unidades de cuenta, lo cual no lleva implicada ninguna desatención a los artículos 13, 14, 16 y 25 de la Carta Magna, y señaló que las UDIS son de uso voluntario, por lo que legalmente puede pactarse su pago, tal y como sucedió en la especie, por lo que se pueden traducir en pesos al convertirse en la unidad monetaria relativa, según el valor que se le va asignando diariamente por el Banco de México; sin que con ello se favorezca a la explotación del hombre por el hombre, por el contrario, ello pretende que toda persona acceda a créditos accesibles; de ahí que resulten infundado. Como puede advertirse de la simple lectura de la sentencia del tribunal colegiado, éste realizó un estudio completamente ajeno a los argumentos planteados por los quejosos, sobre la inconstitucionalidad del Decreto y la colisión entre los derechos de debido proceso e igualdad, e inexplicablemente analizó o, mejor dicho, parafraseó una resolución emitida por esta Suprema Corte sobre si la publicación del valor de las UDIS es una facultad legislativa delegada o simplemente un procedimiento permitido por la constitución. 19 AMPARO DIRECTO EN REVISIÓN 1557/2016 En esa tesitura, debe señalarse que del estudio y análisis de la demanda de garantías y el fallo recurrido, esta Primera Sala advierte que el Cuarto Tribunal Colegiado del Decimoquinto Circuito, con residencia en la ciudad de Mexicali, Baja California, no dio contestación a la totalidad de los conceptos de violación expresados por el quejoso en su demanda de garantías, en cuanto al tema de constitucionalidad; por lo que en ese sentido, es inconcuso que no cumplió con el principio de congruencia que debe regir todas las sentencias de amparo, ya que no se pronunció respecto de las cuestiones propuestas como conceptos de violación por los peticionarios del amparo, al omitir en el estudio de la litis constitucional aspectos que resultaban trascendentes para el sentido del fallo; por tanto, es incuestionable que al emitir la sentencia impugnada el juez de amparo incumplió con lo dispuesto por los artículos 74 y 75 de la Ley de Amparo13. Es aplicable al respecto la jurisprudencia número 1ª./J. 33/2005, sustentada por la Primera Sala de este Alto Tribunal, de rubro y texto siguientes: “Artículo 74.- La sentencia debe contener: I. La fijación clara y precisa del acto reclamado; II. El análisis sistemático de todos los conceptos de violación o en su caso de todos los agravios; III. La valoración de las pruebas admitidas y desahogadas en el juicio; IV. Las consideraciones y fundamentos legales en que se apoye para conceder, negar o sobreseer; V. Los efectos o medidas en que se traduce la concesión del amparo, y en caso de amparos directos, el pronunciamiento respecto de todas las violaciones procesales que se hicieron valer y aquellas que, cuando proceda, el órgano jurisdiccional advierta en suplencia de la queja, además de los términos precisos en que deba pronunciarse la nueva resolución; y VI. Los puntos resolutivos en los que se exprese el acto, norma u omisión por el que se conceda, niegue o sobresea el amparo y, cuando sea el caso, los efectos de la concesión en congruencia con la parte considerativa. El órgano jurisdiccional, de oficio podrá aclarar la sentencia ejecutoriada, solamente para corregir los posibles errores del documento a fin de que concuerde con la sentencia, acto jurídico decisorio, sin alterar las consideraciones esenciales de la misma”. “Artículo 75.- En las sentencias que se dicten en los juicios de amparo el acto reclamado se apreciará tal y como aparezca probado ante la autoridad responsable. No se admitirán ni se tomarán en consideración las pruebas que no se hubiesen rendido ante dicha autoridad”. 13 20 AMPARO DIRECTO EN REVISIÓN 1557/2016 “CONGRUENCIA Y EXHAUSTIVIDAD EN SENTENCIAS DICTADAS EN AMPARO CONTRA LEYES. ALCANCE DE ESTOS PRINCIPIOS. Los principios de congruencia y exhaustividad que rigen las sentencias en amparo contra leyes y que se desprenden de los artículos 77 y 78 de la Ley de Amparo, están referidos a que éstas no sólo sean congruentes consigo mismas, sino también con la litis y con la demanda de amparo, apreciando las pruebas conducentes y resolviendo sin omitir nada, ni añadir cuestiones no hechas valer, ni expresar consideraciones contrarias entre sí o con los puntos resolutivos, lo que obliga al juzgador, a pronunciarse sobre todas y cada una de las pretensiones de los quejosos, analizando, en su caso, la constitucionalidad o inconstitucionalidad de los preceptos legales reclamados”14. En ese sentido resultan fundados los agravios esgrimidos por el inconforme en su recurso de revisión y, por tanto, esta Primera Sala procede a analizar los conceptos de violación planteados en la demanda de amparo, referentes a los temas de constitucionalidad antes expuestos, de conformidad con lo dispuesto por el artículo 93, fracción V, de la Ley Reglamentaria de los artículos 103 y 107 de la Constitución Federal15. SEXTO. Estudio de los Conceptos de Violación. En primer lugar es preciso referir que del análisis de la demanda de amparo se advierte que los quejosos plantearon la inconstitucionalidad del artículo 81 del Código de Procedimientos Civiles para el Estado de Baja California16 sobre lo cual tampoco se 14 Jurisprudencia 1a./J. 33/2005, emitida por la Primera Sala, Novena Época del Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta, Tomo XXI, abril de 2005, página 108, número de registro: 178783. 15 “Artículo 93.- Al conocer de los asuntos en revisión, el órgano jurisdiccional observará las reglas siguientes: (…) V. Si quien recurre es el quejoso, examinará los demás agravios; si estima que son fundados, revocará la sentencia recurrida y dictará la que corresponda;…”. 16 El precepto legal citado dispone: “Artículo 81.- Las sentencias deben ser claras, precisas y congruentes con las demandas y las contestaciones, y con las demás pretensiones deducidas oportunamente en el pleito, condenando o absolviendo al 21 AMPARO DIRECTO EN REVISIÓN 1557/2016 pronunció el tribunal colegiado17, sin embargo dado que ello no fue combatido en los agravios, no ha lugar entrar ahora al estudio del mismo por ser una cuestión que quedó firme. Primer Concepto de Violación. Del primer argumento de su primer concepto de violación se advierte que los quejosos en esencia se duelen de que el Decreto por el que se Establecen las Obligaciones que Podrán Denominarse en UDIS resulta inconstitucional al vulnerar el derecho de igualdad y no discriminación; pues aducen que establece un régimen privilegiado de protección en contra de los riesgos inflacionarios a favor del patrimonio de los intermediarios financieros y comerciantes, régimen del cual no gozan los trabajadores quienes solamente cuentan con el régimen protector del artículo 123 constitucional y 110 de la Ley Federal del Trabajo, que solamente establece que el salario se pagará en moneda nacional, pero no lo cubre contra los cambios inflacionarios. En primer término se considera oportuno precisar lo conducente del desarrollo jurisprudencial en torno al derecho de igualdad y no discriminación. Tanto la Primera como la Segunda Sala de la Suprema Corte de Justicia de la Nación son coincidentes en que el principio de igualdad tiene un carácter complejo, que subyace a toda la estructura constitucional, positivizado en múltiples preceptos tanto constitucionales como de tratados internacionales los cuales imponen obligaciones o deberes específicos a los poderes públicos con relación al principio indicado. demandado, y decidiendo todos los puntos litigiosos que hayan sido objeto del debate. Cuando éstos hubieren sido varios, se hará el pronunciamiento correspondiente a cada uno de ellos”. 17 La impugnación al artículo referido se advierte en el segundo de sus agravios, visible a página 11 de su demanda de garantías, en donde los inconformes sostuvieron: “La disposición legal que imputamos de inconstitucional, es el artículo 81 del Código de Procedimientos Civiles para el Estado de Baja California…”. 22 AMPARO DIRECTO EN REVISIÓN 1557/2016 En específico el derecho de igualdad, en su vertiente de igualdad ante la ley comporta un mandato dirigido al legislador que ordena el igual tratamiento a todas las personas en la distribución de los derechos y obligaciones, lo cual implica dos imperativos para el legislador: a) Un mandamiento de trato igual en supuestos de hecho equivalentes, salvo que exista un fundamento objetivo y razonable que permita darles uno desigual. b) Un mandato de tratamiento desigual, que obliga al legislador a establecer diferencias entre supuestos de hecho distintos cuando la propia Constitución Federal las imponga. Ahora, para determinar si una norma general es contraria a dichos mandatos constitucionales, y por lo tanto debe considerarse como discriminatoria, tal como lo señaló la Segunda Sala en el Amparo en Revisión 568/201518, es preciso observar los siguientes criterios: La igualdad normativa requiere necesariamente una comparación entre dos o más regímenes jurídicos, ya que un régimen jurídico no es discriminatorio en sí mismo, sino únicamente en relación con otro. Para analizar una norma a la luz de la garantía de igualdad se debe elegir el término de comparación apropiado que permita comparar a los sujetos desde un determinado punto de vista y, con 18 Resuelto en sesión de veintitrés de septiembre de dos mil quince, por mayoría de cuatro votos, de los señores Ministros Eduardo Medina Mora I., Juan N. Silva Meza, José Fernando Franco González Salas y Presidente Alberto Pérez Dayán (ponente). La señora Ministra Margarita Beatriz Luna Ramos emitió su voto en contra. 23 AMPARO DIRECTO EN REVISIÓN 1557/2016 base en éste, establecer si se encuentran o no en una situación de igualdad respecto de otros individuos sujetos a diverso régimen y si el trato que se les da, con base en el propio término de comparación, es diferente. En caso de que los sujetos comparados no sean iguales o no sean tratados de manera desigual, no habrá violación a la garantía individual. Una vez establecida la situación de igualdad y la diferencia de trato, debe determinarse si la diferenciación persigue una finalidad constitucionalmente válida y, para ello, resulta suficiente que la finalidad perseguida sea constitucionalmente aceptable, salvo que se trate de una de las prohibiciones específicas de discriminación contenidas en el artículo 1º, primer y quinto párrafos, de la Constitución Política, pues respecto de éstas no basta que el fin buscado sea constitucionalmente aceptable, sino que su prohibición es imperativa. La siguiente exigencia de la garantía de igualdad es que la diferenciación cuestionada sea adecuada para el logro del fin legítimo buscado; es decir, que la medida sea capaz de causar su objetivo, bastando para ello una aptitud o posibilidad de cumplimiento, sin que sea exigible que los medios se adecuen estrechamente o estén diseñados exactamente para lograr el fin en comento. Tratándose de las prohibiciones concretas de discriminación, en cambio, será necesario analizar con mayor intensidad la adecuación, siendo exigible que la medida esté directamente conectada con el fin perseguido. Finalmente, debe determinarse si la medida legislativa de que se trate resulta proporcional, es decir, si guarda una relación razonable con el fin que se procura alcanzar, lo que supone una ponderación entre sus ventajas y desventajas, a efecto de comprobar que los perjuicios ocasionados por el trato diferenciado 24 AMPARO DIRECTO EN REVISIÓN 1557/2016 no sean desproporcionados con respecto a los objetivos perseguidos. Criterios que a su vez derivan de la jurisprudencia número 42/201019, de rubro: "IGUALDAD. CRITERIOS QUE DEBEN OBSERVARSE EN EL CONTROL DE LA CONSTITUCIONALIDAD DE NORMAS QUE SE ESTIMAN VIOLATORIAS DE DICHA GARANTÍA", misma que es compartida por esta Primera Sala. Con base en lo anterior y como lo ha sostenido esta Primera Sala en diversos precedentes de acuerdo con la doctrina especializada, entre la infinidad de formas que puede adoptar la discriminación normativa, las más comunes son la exclusión tácita y la diferenciación expresa, tal como se estipuló en el Amparo Directo en Revisión 3445/201420 asunto del cual derivó la tesis aislada 1a. CLXXI/2016 (10a.), de rubro: “IGUALDAD ANTE LA LEY. ALCANCES DE ESTE DERECHO FUNDAMENTAL CUANDO SE RECLAMA LA INCONSTITUCIONALIDAD DE UNA DIFERENCIACIÓN EXPRESA”21. Así, esta Primera Sala considera que, como su nombre lo indica, la discriminación por exclusión tácita de un beneficio tiene lugar cuando un régimen jurídico implícitamente excluye de su ámbito de aplicación a un supuesto de hecho equivalente al regulado en la disposición normativa, lo que suele ocurrir cuando se establece a un determinado colectivo como destinatario de un régimen jurídico sin 19 Sustentada por la Segunda Sala, Visible en el Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta, Tomo XXXI, abril de 2010, página 427. 20 Resuelto por esta Primera Sala en sesión de veintidós de abril de dos mil quince, por unanimidad de votos de los señores Ministros: Arturo Zaldívar Lelo de Larrea (Ponente), José Ramón Cossío Díaz, Jorge Mario Pardo Rebolledo, quien se reservó el derecho de formular voto concurrente, Olga Sánchez Cordero de García Villegas y Presidente Alfredo Gutiérrez Ortiz Mena quien se reservó el derecho de formular voto concurrente. Págs. 15 a 17. 21 Visible en la Gaceta del Semanario Judicial de la Federación, Libro 31, Junio de 2016, Tomo I, Pág. 695. 25 AMPARO DIRECTO EN REVISIÓN 1557/2016 hacer mención alguna de otro colectivo que se encuentra en una situación equivalente. Por su parte, la discriminación por diferenciación expresa ocurre cuando el legislador establece dos regímenes jurídicos diferenciados para supuestos de hecho o situaciones equivalentes. En este segundo caso la exclusión es totalmente explícita, toda vez que el legislador no sólo establece un régimen jurídico del cual se excluye a un colectivo, sino que además crea un régimen jurídico distinto para ese supuesto de hecho equivalente. De acuerdo con lo expuesto, debe señalarse que la discriminación normativa constituye un concepto relacional, en el sentido de que ningún régimen es discriminatorio en sí mismo, sino en comparación con otro régimen jurídico. Dicho de otra manera, la inconstitucionalidad no radica propiamente en el régimen jurídico impugnado, sino en la relación que existe entre éste y el régimen jurídico con el cual se le compara. Ahora bien, cuando el legislador establece una distinción que se traduce en la existencia entre dos regímenes jurídicos, ésta debe ser razonable para considerarse constitucional. Así, para mostrar que la distinción no es razonable debe señalarse por qué resultan equivalentes o semejantes los supuestos de hecho regulados por ambos regímenes jurídicos, de tal manera que esa equivalencia mostraría la falta de justificación de la distinción. Lo anterior lleva a considerar que en el caso concreto el argumento vertido en el primer concepto de violación resulta inoperante, pues no se surten los elementos que permitan realizar el análisis de la norma impugnada de acuerdo a los estándares mencionados, referentes al derecho de igualdad, como se explicará a continuación: 26 AMPARO DIRECTO EN REVISIÓN 1557/2016 En el caso concreto los quejosos actúan con el carácter de deudores/demandados del pago de determinadas obligaciones denominadas en UDIS contraídas un contrato de apertura de crédito simple con interés y garantía hipotecaria. Sin embargo, dichos quejosos plantearon la inconstitucionalidad del Decreto por discriminación tácita, ya que consideran que dicho cuerpo normativo establece un régimen jurídico privilegiado (en tanto que protege de la inflación a las obligaciones en dinero) que sólo aplica en protección de los intermediarios financieros y los comerciantes, excluyendo del mismo a los trabajadores los cuales únicamente se encuentran protegidos por el artículo 123 constitucional y la Ley Federal del Trabajo; de lo que es importante destacar las siguientes premisas: Los quejosos ostentan el carácter de deudores/demandados del pago de una deuda denominada en UDIS. Se duelen de la distinta protección al patrimonio, pues por un lado tenemos que en las obligaciones contraídas a favor de los intermediarios financieros y comerciantes les asiste la protección contra la inflación regulada en el Decreto y, por el otro, a los trabajadores y demás personas quienes no tienen dicho beneficio, limitándose la ley laboral a establecer que el salario se pague en moneda nacional, quedando éstos últimos sujetos a los riesgos inflacionarios. Lo cual revela que los quejosos no se encuentran en alguna de las hipótesis que pretenden que sean comparadas (intermediaros, comerciantes o trabajadores), sino que son deudores de una obligación denominada en UDIS. Es decir, los quejosos están en una hipótesis diversa de la que ellos mismos están comparando, lo que 27 AMPARO DIRECTO EN REVISIÓN 1557/2016 implica que los supuestos a comparar no están en el mismo plano al que el recurrente pertenece. Por lo que se advierte que el término de comparación no es apropiado al caso concreto y por lo tanto realizar la comparación carecería de sentido en tanto que no afectaría la situación de los quejosos. En consecuencia, al igual que en el ya citado Amparo Directo en Revisión 3445/2014, esta Primera Sala considera que, “en virtud de que el principio de igualdad implica el derecho de todos los gobernados de recibir el mismo trato que quienes se ubican en similar situación de hecho, ello conlleva a que una violación al derecho de igualdad, se configura sólo si la misma produce distinción entre situaciones iguales, sin que exista para ello una justificación objetiva y razonable. Así, quienes deben reclamar la desigualdad de trato, son precisamente, quienes reciben el tratamiento desigual”. Lo anterior se explica porque la reparación de la supuesta discriminación normativa alegada no puede obtenerse como resultado de una concesión del presente amparo. De las consideraciones expuestas en los conceptos de violación se advierte que los quejosos no se duelen propiamente de la exclusión de un beneficio, ya que no pretende que se le incluya en el régimen establecido en el Establecen las Obligaciones que Podrán Denominarse en UDIS; sino que lo que en realidad buscan con la impugnación es que se anule el contrato por el cual contrajeron las obligaciones denominadas en UDIS, es decir excluir del supuesto régimen de beneficio a la ahora tercero interesada. Sin embargo, esta Primera Sala ha determinado que los efectos de amparo en materia de constitucionalidad cuando se estudian cuestiones relacionadas con igualdad se materializan de manera tal que de resolverse que es fundado el amparo se extienda el beneficio o 28 AMPARO DIRECTO EN REVISIÓN 1557/2016 el trato del cual se desea gozar al sujeto que ha sido discriminado, lo cual evidentemente no es la intención de la quejosa. En ese sentido y siguiendo el análisis realizado por esta Primera Sala en el Amparo Directo en Revisión 4481/201322, si los quejosos no se duelen propiamente de la exclusión injustificada de un beneficio, sino de la posibilidad de su contraparte de celebrar operaciones denominadas en UDIS, esta Primera Sala estima que los recurrentes no fueron afectados por una discriminación normativa. Es decir, dado que lo pretendido por el recurrente es la declaratoria de inconstitucionalidad de la norma, los efectos que la posible concesión del amparo podría generar, son los siguientes: a) Darle a la parte quejosa el mismo tratamiento del cual se duele, es decir que pudiera celebrar operaciones denominadas en UDIS, con el fin de que su patrimonio estuviera igualmente protegido contra los riesgos inflacionarios. Lo cual evidentemente no es el efecto pretendido por la recurrente. b) La otra posibilidad -la cual aparentemente es la que pretendía-, es que se le exija a su contraparte que éste se vea excluida de la norma estimada inconstitucional, es decir, que no pueda celebrar operaciones denominadas en UDIS, y por lo tanto que se declare la nulidad absoluta del convenio base de la acción. 22 Fallado por esta Primera Sala el veintiséis de marzo de dos mil catorce por unanimidad de cinco votos de los señores Ministros: Arturo Zaldívar Lelo de Larrea (Ponente), José Ramón Cossío Díaz, Alfredo Gutiérrez Ortiz Mena, Olga Sánchez Cordero de García Villegas, y Presidente Jorge Mario Pardo Rebolledo. Págs. 25 a 27. 29 AMPARO DIRECTO EN REVISIÓN 1557/2016 Lo cual se estima inviable pues por un lado, como lo sostuvo la responsable, en la contestación de la demanda no se opuso la excepción de nulidad del convenio, por lo tanto la validez del contrato no formó parte de la litis, y por otro lado, como ya se explicó, los efectos de amparo en materia de constitucionalidad cuando se estudian cuestiones relacionadas con igualdad se materializan de manera tal que se extienda el beneficio o el trato del cual se desea gozar, al sujeto que ha sido discriminado, lo cual ya se dijo, no es la intención de la quejosa además de que en el presente asunto es materialmente imposible pues tal beneficio nunca fue negado a los quejosos –pues ni siquiera se pretendía ejercitarlo-. Lo anterior claramente implica que dado que en materia de otorgamiento del amparo ante la posible desigualdad de la norma, donde su efecto, es extender el supuesto normativo del cual es excluido el quejoso, en el presente asunto, no se puede materializar por las razones antes esgrimidas, lo que claramente deriva en una inoperancia de los argumentos vertidos. Aunado a lo anterior, en el Amparo Directo en Revisión 1023/2013 esta Primera Sala determinó con fundamento en las tesis del Pleno de esta Suprema Corte de Justicia de la Nación de rubro: “LEYES, INCONSTITUCIONALIDAD DE LAS.”23, “LEYES. NO SON INCONSTITUCIONALES POR EL SOLO HECHO DE QUE LAS INSTITUCIONES QUE REGULAN NO ESTÉN PREVISTAS EN LA CONSTITUCIÓN.”24, así como en la jurisprudencia de la propia Primera Sala de rubro: “CONCEPTOS DE VIOLACIÓN EN DEMANDA DE AMPARO DIRECTO. LA IMPUGNACIÓN DE CONSTITUCIONALIDAD DE DISPOSICIONES LEGALES PRECISA 23 P./J. 25/2000, Novena Época, Pleno, visible en el Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta XI, Marzo de 2000, Página: 38. 24 P./J. 135/99, Novena Época, Pleno, visible en el Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta X, Diciembre de 1999, Página: 10. 30 AMPARO DIRECTO EN REVISIÓN 1557/2016 DE REQUISITOS SATISFACER.”25, que MÍNIMOS siempre que A se impugne la constitucionalidad de una norma en amparo directo “debe haber una vinculación entre el agravio que le produce a la parte quejosa la sentencia dictada por la autoridad responsable que constituye el acto reclamado, y el planteamiento de inconstitucionalidad de normas generales que hace la quejosa en su demanda de amparo directo” 26. Lo anterior, se explicó que es así, puesto que “debe tenerse en cuenta que el juicio de amparo directo no constituye una vía para hacer planteamientos de inconstitucionalidad de normas abstractas - 25 1a./J. 58/99, Novena Época, Primera Sala, visible en el Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta X, Noviembre de 1999, Página: 150, de texto: “La impugnación suficiente de una norma jurídica, en función del aspecto de su constitucionalidad, requiere que se base en premisas esenciales mínimas a satisfacer en la demanda de amparo directo. Esto es, de conformidad con lo dispuesto en el artículo 166, fracciones IV y VII de la Ley de Amparo, se advierte la necesidad de que la norma jurídica señalada como reclamada, deba ser impugnada en confrontación expresa con una disposición específica de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, mediante concepto de violación suficiente. La causa requerida en tal situación se apoya en los siguientes elementos imprescindibles: a) señalamiento de la norma de la Carta Magna; b) invocación de la disposición secundaria que se designe como reclamada y, c) conceptos de violación en los que se trate de demostrar, jurídicamente, que la ley impugnada resulta contraria a la hipótesis normativa de la norma constitucional, en cuanto al marco de su contenido y alcance. A partir del cumplimiento de precisión de esos requisitos esenciales, surgirá la actualización del problema constitucional, así como la procedencia de la declaración respectiva en torno a la ley secundaria. Si no se satisfacen los requisitos medulares que se han indicado, el señalamiento de la ley reclamada y el concepto de violación que no indique el marco y la interpretación de una disposición constitucional que pueda transgredir aquélla, resultan motivos de insuficiencia, que desestiman la actualización de un verdadero problema de constitucionalidad de ley. En este orden, a la parte quejosa, dentro de la distribución procesal de la carga probatoria, incumbe la de demostrar la inconstitucionalidad de la ley o de un acto de autoridad, excepción hecha de los casos en que se trate de leyes que hayan sido declaradas inconstitucionales en las que exista jurisprudencia obligatoria sustentada por el Pleno de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, o cuando se esté en presencia de actos que sean inconstitucionales por sí mismos. Así la situación, deberá considerarse carente de la conformación de un verdadero concepto de violación, la simple enunciación como disposiciones constitucionales dejadas de aplicar, pues de ello no puede derivarse la eficiente impugnación de la constitucionalidad de leyes secundarias, en tanto que no existe la confrontación entre éstas y un específico derecho tutelado por la norma constitucional en su texto y alcance correspondientes.” 26 Fallado por la Primera Sala en sesión de quince de mayo de dos mil trece, por unanimidad de cinco votos de los señores Ministros: Arturo Zaldívar Lelo de Larrea, José Ramón Cossío Díaz, Alfredo Gutiérrez Ortiz Mena, Olga Sánchez Cordero de García Villegas y Presidente y Ponente Jorge Mario Pardo Rebolledo. Pág. 21. 31 AMPARO DIRECTO EN REVISIÓN 1557/2016 ajenos a la decisión contenida en el acto reclamado- a la autoridad jurisdiccional”. Ello en virtud de que en este tipo de amparos el acto reclamado es una sentencia o laudo, o una resolución que pongan fin al juicio, dictadas por tribunales judiciales, administrativos o del trabajo, respecto de las cuales no proceda ningún recurso ordinario por el que puedan ser modificadas o revocadas. “De manera que en el juicio de amparo directo no se cuestiona la constitucionalidad de las leyes por vía de acción, sino por vía de excepción. Esto es, el ejercicio de esa acción se endereza contra la sentencia, laudo o resolución reclamados, siendo el análisis de la ley aplicada un argumento más para decidir sobre la constitucionalidad o inconstitucionalidad de la resolución destacada”. “En esa tesitura, el juicio de amparo directo necesariamente está vinculado con el acto reclamado, es decir, con la resolución dictada por la autoridad responsable. De manera que no constituye una oportunidad para plantear la inconstitucionalidad de normas que no hayan sido aplicadas en el acto reclamado, o que no tengan vinculación alguna con la resolución que le causó agravio a la parte quejosa, y mucho menos, con base en argumentos abstractos que no tengan relación alguna con el juicio y decisión judicial de que se trate.” Lo cual fue igualmente sostenido en los Amparos Directos en Revisión 1897/201327 y 1654/201328, y de los cuales derivó la tesis aislada 1a. XXXIX/2014 (10a.), de rubro y texto: 27 Fallado por esta Primera Sala en sesión de tres de julio de dos mil trece por unanimidad de cinco votos de los Ministros Arturo Zaldívar Lelo de Larrea, José Ramón Cossío Díaz, Alfredo Gutiérrez Ortiz Mena, Olga Sánchez Cordero de García Villegas y Jorge Mario Pardo Rebolledo (Ponente). 28 Fallado por esta Primera Sala en sesión de veintiuno de agosto de dos mil trece por unanimidad de cinco votos de los Ministros Arturo Zaldívar Lelo de Larrea, José Ramón 32 AMPARO DIRECTO EN REVISIÓN 1557/2016 “REVISIÓN EN AMPARO DIRECTO. PARA QUE PROCEDA ESE RECURSO ES NECESARIO QUE LA NORMA QUE SE TILDA DE INCONSTITUCIONAL SE APLIQUE AL QUEJOSO EN SU PERJUICIO Y EL PLANTEAMIENTO DE INCONSTITUCIONALIDAD ESTÉ VINCULADO CON EL ACTO RECLAMADO. Para la procedencia del recurso de revisión en amparo directo es indispensable que el precepto que se tilda de inconstitucional se haya aplicado al quejoso en su perjuicio en la secuela del procedimiento del juicio natural o en la sentencia, laudo o resolución reclamado en el juicio de amparo, por lo que debe existir una vinculación entre el agravio que le produce la sentencia dictada por la autoridad responsable y el planteamiento de inconstitucionalidad de normas generales que hace en su demanda, pues el juicio relativo no constituye una vía para hacer planteamientos abstractos de inconstitucionalidad de normas -ajenos a la decisión contenida en el acto reclamado- a la autoridad jurisdiccional. Lo anterior es así, ya que en el amparo directo no se cuestiona la constitucionalidad de las leyes por vía de acción, sino de excepción, esto es, lo que se pretende al cuestionar la ley es que se declare la inconstitucionalidad del acto reclamado, es decir, de la sentencia impugnada, que es la que le causa agravio a la quejosa. Así, la posibilidad de que quien perdió el juicio en los tribunales ordinarios acuda al juicio de amparo para que se revise la sentencia que le causó perjuicio, tiene por objeto que los tribunales federales verifiquen si hubo una violación durante el juicio ordinario a sus derechos constitucionales y, en su caso, analizar si las normas específicas, con base en las cuales se decidió el juicio, no vulneran los principios consagrados en la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos. De manera que no constituye una oportunidad para plantear la inconstitucionalidad de normas que no hayan sido aplicadas en el acto reclamado, o que no tengan vinculación alguna con la resolución que le causó agravio a la parte quejosa, y mucho menos, con base en argumentos abstractos que no tengan relación con la secuela procesal y con la resolución que constituye el acto reclamado. De lo contrario, se vulnerarían los principios de procedencia que el Constituyente Permanente y este alto tribunal han ido construyendo durante décadas. En efecto, dar procedencia a los recursos de revisión en los que se haga referencia a Cossío Díaz (Ponente), Alfredo Gutiérrez Ortiz Mena, Olga Sánchez Cordero de García Villegas y Jorge Mario Pardo Rebolledo. 33 AMPARO DIRECTO EN REVISIÓN 1557/2016 temas de constitucionalidad de normas que no están relacionados con el asunto de que se trata, se traduciría en vulnerar el principio de excepcionalidad atribuido al recurso de revisión en amparo directo, porque, entonces, "todos" los recursos de revisión en amparo directo serían procedentes con cualquier ocurrencia, como lo es aducir la inconstitucionalidad de la Constitución local, y por lo tanto, de todo el ordenamiento jurídico de la entidad, cuando la litis no versó sobre dicha cuestión, lo que demeritaría su objeto así como la atribución otorgada a este alto tribunal de constituirse en el intérprete definitivo de la Constitución Federal.”29 Lo cual implica que para hacer factible el estudio de constitucionalidad en un amparo directo, en primer término las normas impugnadas deben haber sido aplicadas al quejoso, y en segundo lugar los argumentos por los que las considera inconstitucionales deben encontrarse vinculados con la afectación que aduce haber sufrido por el acto reclamado, que es la sentencia. Esto implica que la inconstitucionalidad debe reclamarse en virtud de que su aplicación llevó a la vulneración de un derecho fundamental del quejoso, y no simplemente por argumentos abstractos que pretendan confrontar dicha norma con algún precepto constitucional, pues como ya se dijo el examen de constitucionalidad en amparo directo no puede ser un estudio abstracto, sino que debe relacionarse directamente con el acto reclamado que es la sentencia definitiva, la que propiamente causa perjuicio al quejoso. Por lo tanto, se refuerza la inoperancia decretada sobre este primer argumento del primer concepto de violación, en virtud de que los quejosos pretenden hacer valer planteamientos de inconstitucionalidad relacionados a una violación genérica del derecho a la igualdad respecto a los regímenes de protección al patrimonio de determinados sujetos, sin embargo ello no tiene relación alguna con el acto reclamado, que consiste en una sentencia de segunda instancia 29 Visible en la Gaceta del Semanario Judicial de la Federación, Libro 3, Febrero de 2014, Tomo I, Página: 684 34 AMPARO DIRECTO EN REVISIÓN 1557/2016 en la que se confirmó la condena a los quejosos de pagar determinadas cantidades denominadas en UDIS, en virtud del incumplimiento de un contrato. Sin que en el caso concreto el derecho a la igualdad se haya visto involucrado, pues a los quejosos nunca se les negó la posibilidad de celebrar operaciones en UDIS, ni en la litis natural, ni en el desarrollo del procedimiento. Por lo que si los argumentos del quejoso se enfocan a considerar de manera abstracta que el Decreto por el cual se Establecen las Obligaciones que Podrán Denominarse en UDIS vulnera la igualdad y no discriminación por excluir de su protección a los trabajadores, pero no lo vinculan de manera alguna a que en el acto reclamado se haya vulnerado ese derecho con la aplicación de la norma impugnada, entonces se debe concluir que su planteamiento de inconstitucionalidad, se observa más encaminado a evitar o retrasar la ejecución de una determinación judicial, que a referir una verdadera violación a sus derechos fundamentales que hubiera provocado el acto reclamado, y en ese sentido se debe declarar inoperante. Por esa misa razón es que se considera inoperante el segundo argumento de su primer concepto de violación, en el que alega que el Decreto por el cual se Establecen las Obligaciones que pueden Denominarse en UDIS es violatorio del artículo 25 párrafo primero y 28 párrafo sexto de la Constitución, pues el primero establece que corresponde al estado el papel rector en el desarrollo nacional, lo cual debe alcanzarse mediante una más justa distribución del ingreso y al riqueza, y debe permitir el pleno ejercicio de la libertad y la dignidad de los individuos, clases y grupos sociales, mientras que el segundo dispositivo enmarca la función del banco central de procurar la estabilidad del poder adquisitivo de la moneda nacional, fortaleciendo con ello la rectoría del desarrollo nacional que 35 AMPARO DIRECTO EN REVISIÓN 1557/2016 corresponde al estado, lo cual también debe alcanzarse mediante el respeto a la dignidad de los individuos y de los grupos sociales; por lo que una medida legislativa de política financiera no puede fundarse en una norma que parte de la idea de que es más importante el patrimonio del intermediario frente al patrimonio de las demás personas. Lo anterior debido a que, como se expuso anteriormente, “debe haber una vinculación entre el agravio que le produce a la parte quejosa la sentencia dictada por la autoridad responsable que constituye el acto reclamado, y el planteamiento de inconstitucionalidad de normas generales que hace la quejosa en su demanda de amparo directo”, siendo que en el caso concreto los quejosos no se duelen una violación o una afectación a sus derechos fundamentales producida por la violación constitucional planteada. Es decir que su argumento se encuentra totalmente desvinculado del acto reclamado, ya que en el caso del que deriva el amparo directo nunca se solicitó que las obligaciones en favor del patrimonio de los quejosos se denominaran en UDIS, sino que los propios quejosos contrajeron una obligación en UDIS y la incumplieron, por lo que en el caso- y con independencia de los méritos que pudiera tener el planteamiento realizado por los quejososen el caso concreto es imposible realizar el examen planteado porque su cuestionamiento a la política relacionada con el desarrollo nacional no se encuentra relación alguna con el acto reclamado. Segundo Concepto de Violación. Ahora, por lo que respecta a los argumentos vertidos en su segundo concepto de violación, en los que el quejoso se duele de que la responsable omitió haber realizado un ejercicio de ponderación y aplicar el principio de razonabilidad ante la colisión de derechos de 36 AMPARO DIRECTO EN REVISIÓN 1557/2016 debido proceso, seguridad jurídica e igualdad formal frente a los derechos de igualdad material y no discriminación, se considera infundado. Para una mejor comprensión, se considera conveniente explicar que dicho concepto de violación surgió en virtud de que la sala responsable determinó no entrar al estudio del agravio en el que los entonces apelantes demandaban la nulidad del convenio base de la acción (agravio en el que se planteó la inconstitucionalidad del Decreto por vulnerar el derecho de igualdad), en virtud de que ésta fue planteada hasta la apelación y no en el momento procesal oportuno como lo era en la contestación de la demanda. Al respecto la responsable explicó que si entrara a dicho estudio se vulnerarían los derechos de audiencia, debido proceso y seguridad jurídica, por lo que determinó que dichos planteamientos resultaban inoperantes. En contra de tal determinación, los quejosos consideran que la sala responsable se pronunció a priori por la prevalencia de esos derechos de audiencia, debido proceso y seguridad jurídica, sobre el derecho de igualdad y no discriminación, por lo que se duelen de la omisión por parte de la responsable de haber realizado un test de razonabilidad ante la colisión de derechos, con el fin de encontrar la norma aplicable al caso concreto. Sin embargo, contrario a lo que sostienen los quejosos, en el caso concreto no se advierte una colisión de derechos, pues como fue explicado en el estudio de su primer concepto de violación, los recurrentes no fueron afectados por una discriminación normativa, pues no fueron excluidos de un régimen preferencial, por lo tanto de la simple lectura de los instumentos que integran la litis se advierte que nunca se planteó una verdadera afectación al derecho aludido de los 37 AMPARO DIRECTO EN REVISIÓN 1557/2016 recurrentes, y por lo tanto en el caso concreto no puede existir una colisión de derechos. En ese sentido resulta incorrecto que la sentencia de segunda instancia constituya un pronunciamiento de antemano a favor de los derechos humanos de seguridad jurídica, debido proceso e igualdad adjetiva frente a los derechos humanos a la no discriminación y a la igualdad material, pues si bien es cierto que la recurrente declaró inoperantes los agravios de los recurrentes por no haberse esgrimido en el momento procesal oportuno, ello no se traduce en una restricción al derecho a la igualdad, pues en situaciones como la actual no se advertía y no fue planteado que hubiera existido una afectación específica al mismo, y relacionada al caso concreto, en virtud de que no se excluyó al quejoso de un beneficio o de un régimen de privilegio. En razón de lo anterior, es claro que los quejosos partieron de premisas falsas en la elaboración del resto de sus argumentos del segundo concepto de violación, por lo que es claro que los subsecuentes deben declararse inoperantes en tanto que resulta innecesario efectuar mayor pronunciamiento frente a la omisión que se atribuye y pretende combatir, porque constituye una cuestión ajena al acto reclamado. Siendo aplicable por analogía la jurisprudencia 26/2000 sustentada por esta Primera Sala, de rubro: “AGRAVIO INOPERANTE DE LA AUTORIDAD, SÍ ATRIBUYE A LA SENTENCIA RECURRIDA ARGUMENTO AJENO Y SE LIMITA A COMBATIR ÉSTE”.30 Así como la jurisprudencia de la Segunda Sala 108/2012 de rubro: “AGRAVIOS INOPERANTES. LO SON AQUELLOS QUE SE SUSTENTAN EN PREMISAS FALSAS”31 30 Jurisprudencia 1a./J. 26/2000, Novena Época, visible en el Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta, Tomo XII, Octubre de 2000, página 69. 31 Visible en el Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta Libro XIII, Octubre de 2012, Tomo 3, Pág., 1326. 38 AMPARO DIRECTO EN REVISIÓN 1557/2016 En virtud de lo anterior y dado lo inoperante e infundado de los argumentos que constituyen los conceptos de violación, lo procedente es confirmar la sentencia recurrida aunque por razones diversas a los establecidas por el tribunal colegiado en dicho fallo. Por lo expuesto y fundado, se resuelve: PRIMERO. En la materia competencia de esta Primera Sala de la Suprema Corte de Justicia de la Nación y por las razones vertidas en la presente ejecutoria, se confirma la sentencia recurrida. SEGUNDO. La Justicia de la Unión no ampara ni protege a ********** y **********, en contra de la sentencia de veinticinco de septiembre de dos mil quince, dictada dentro del toca civil **********, por la Primera Sala del Tribunal Superior de Justicia del Estado de Baja California. Notifíquese; con testimonio de esta ejecutoria, devuélvanse los autos relativos al lugar de su origen; y, en su oportunidad archívese el toca como asunto concluido. En términos de lo previsto en los artículos 3, fracción II, 13, 14 y 18 de la Ley Federal de Transparencia y Acceso a la Información Pública Gubernamental, en esta versión pública se suprime la información considerada legalmente como reservada o confidencial que encuadra en esos supuestos normativos. 39