La negociación colectiva y las Relaciones laborales en Euskadi. Introducción La negociación colectiva es el ámbito propio de la autonomía colectiva de las organizaciones empresariales y sindicales para definir los marcos de distribución de la riqueza que se genera en las empresas, así como para canalizar, facilitar y potenciar la fijación y adaptación de las condiciones de trabajo. Igualmente esta autonomía colectiva tiene el poder de establecer criterios para mejorar la productividad económica, crear riqueza y empleo, y favorecer dinámicas cooperativas que permitan mejorar la posición de concurrencia empresarial en un entorno económico global, desde parámetros distintos a la devaluación de la calidad y cantidad del empleo. CCOO considera necesario fijar una serie de criterios compartidos sobre la realidad del marco de relaciones laborales en una sociedad compleja como la vasca, y abrir un proceso de reflexión para repensar el modelo actual de relaciones laborales en Euskadi. Sin embargo cualquier reflexión de carácter general sobre esta materia, pasa por reconocer previa o simultáneamente, que en Euskadi la negociación colectiva, espina dorsal de cualquier modelo de relaciones laborales, atraviesa por grandes dificultades, así como por la adopción de ciertos compromisos concretos destinados a superar el bloqueo actual. Tales compromisos deben ir dirigidos a la activación de los procesos negociales colectivos para posibilitar, o facilitar al menos, los acuerdos como único medio de aumentar la tasa de cobertura actual y recuperar los ámbitos sectoriales propios de negociación, que son las señas de identidad irrenunciables de nuestro modelo y por ello, la base de partida de cualquier reflexión sobre él. Desde CCOO consideramos, necesario, una acuerdo que contribuya al desbloqueo de la negociación colectiva, sobre pautas que puedan trasladarse a las mesas de negociación de los diferentes convenios, partiendo como decíamos de la defensa del convenio sectorial territorial, como norma de referencia, articulando estos con la negociación en el ámbito de la empresa. Un acuerdo que impulse una negociación colectiva y que dé soluciones a los problemas que origina la falta de acuerdos y de marcos de referencia comunes para las empresas de los distintos sectores de la industria y los servicios, que evite por una parte, la desigualdad e individualización de las relaciones laborales y por otra, el dooping empresarial que esta situación puede sin duda producir. Un acuerdo que legitime y fortalezca el papel vertebrador de la negociación colectiva como institución central a la hora de determinar las materias propias de las relaciones laborales, devolviendo a los interlocutores sociales el papel protagonista que les corresponde en la misma. En el mes de mayo se firmaba a nivel estatal el III AENC, que además de orientar sobre los contenidos de los convenios colectivos y apostar por el empleo de calidad, tiene por objeto reconstruir la negociación colectiva, tras los efectos perjudiciales que la crisis económica y las reformas laborales han tenido sobre ella. CCOO de Euskadi no se plantea trasladar el acuerdo estatal aquí, aunque como no puede ser de otra manera, compartimos todas sus recomendaciones y objetivos y nos sirve de referencia, pero aquí, además, Pág. 2 de 24 debemos de abordar nuestros propios problemas y nuestra situación específica. Situación de la negociación colectiva en Euskadi. CCOO de Euskadi viene analizando con enorme preocupación la situación generada en la negociación colectiva. El riesgo de desaparición de nuestros espacios sectoriales de negociación, la pérdida de cobertura y las consecuencias que ello acarrea: la desregulación de las condiciones de trabajo, la fragmentación de las relaciones laborales y la caída de los salarios y el riesgo de aumentar las desigualdades. La reforma laboral se configuro con un objetivo claro: desvertebrar la negociación colectiva. La pérdida de ultra-actividad de los convenios persigue la desaparición de la misma y dar prevalencia aplicativa en materias básicas, a los convenios de empresa frente a los convenios sectoriales, eliminado la referencia aplicativa de mínimos garantizados, está enfocado a la devaluación de sus contenidos, Con el objetivos de ser más competitivos a base de viejas recetas fracasadas, desregulación laboral, bajos salarios y amplias jornadas. No obstante las reformas laborales no explican por sí solas la parálisis de la negociación colectiva en Euskadi, pues esta ya se daba, por razones variadas desde mucho tiempo antes. En Euskadi en el sector privado, algo más del 77% de las personas que tienen reguladas sus condiciones laborales y salariales a través de la negociación colectiva, están afectadas por un convenio sectorial, frente al 22,6% que regulan sus condiciones a través de un convenio de empresa. En la CAPV tenemos 115 convenio sectoriales de carácter territorial. De estos vigentes hay 30, de los que 11 vencen a 31 de diciembre de 2015. 33 están ultra-activos pendientes de negociar y 52 han decaído al no tener recogida la vigencia indefinida. De éstos 38 no tienen convenios estatales de referencia. Pág. 3 de 24 Esto se traduce en que, en el ámbito sectorial el 23,3% de las personas que trabajan tienen su convenio decaído y no disponen de uno de ámbito superior de referencia. El 49,2% tienen los convenios con vigencia prorrogada y pendientes de negociación y solo el 27,5% están afectados por convenios con vigencia ordinaria. La situación de la negociación en el ámbito de las empresas, mejora un poco, solo el 0,8% tienen sus convenios decaídos, pero no deja de ser preocupante que el 41,9% estén amparados por convenios en ultraactividad y que solo el 57,3% tengan sus convenios actualizados con vigencia ordinaria. Teniendo en cuenta estos dos ámbitos de negociación, solo el 34,4% de las personas que trabajan tienen sus convenios actualizados con vigencia ordinaria. Esta situación no es consecuencia en exclusiva de las reformas laborales últimas, aunque sí han incidido de una forma determinante, en la situación que tenemos. Aquí los convenios vienen paralizándose desde hace muchos años atrás. (A modo de referencia podemos señalar que, de los convenios sectoriales decaídos 4 son del año 2000, otros 11 de 2002 y 2003, 15 son de 2008 y 2009 o 7 de 2011.) Como se puede apreciar el bloqueo de la negociación colectiva sectorial es evidente. El ritmo de renovaciones es lento y sólo la existencia del mantenimiento de la ultra-actividad en aquellos convenios que tienen recogido vigencias indefinidas y las sentencias que contractualizan las condiciones laborales están impidiendo el llamado “abismo laboral”. Pero en ningún caso vienen a solucionar el grave problema por el que atraviesa la negociación colectiva, ni evitan el riesgo de desregulación laboral, o de dobles escalas salariales que ya se están produciendo. Objetivos de CCOO de Euskadi. Pág. 4 de 24 EL objetivo central es extender la cobertura al conjunto de las trabajadoras y trabajadores asalariados; recuperar el papel homogeneizador del convenio sectorial territorial y una adecuada organización de la estructura negocial en cada sector. Priorizar la consolidación del empleo y la reducción de la temporalidad; mejorar las retribuciones y las condiciones de trabajo; ampliar los derechos de información y participación de la representación sindical en la empresa y en el sector; la extensión de las medidas de acción positiva para las mujeres y los planes de igualdad, regular la flexibilidad interna para facilitar la adaptación competitiva de las empresas, fortalecer el papel de las comisiones paritarias de los convenios colectivos y hacer un uso extensivo de los procedimientos creados para la solución de los conflictos que se generen en la negociación y aplicación de los convenios. Propuestas de actuación. La negociación colectiva y su expresión más concreta, el convenio colectivo, debe combinar elementos de seguridad y cohesión en la regulación y determinación de derechos colectivos entre empresas y trabajadores, con elementos de flexibilidad interna para facilitar la adaptación competitiva de las empresas. Este equilibrio entre seguridad regulatoria y flexibilidad adaptativa es el eje de bóveda que debe permitir el fortalecimiento de las empresas y el empleo, así como una correcta asignación de los recursos generados en la actividad productiva. Asimismo la negociación colectiva, debe dotarse de mayores contenidos y materias. La velocidad en que se producen los cambios tecnológicos, organizativos, de ciclo de demanda, de cualificaciones requeridas, etc., exigen de respuestas ágiles y a la vez participadas del conjunto de agentes sociales. 1.- Impulsar el empleo de calidad y con derechos. Pág. 5 de 24 Ante la intensa destrucción de empleo producida en los últimos años, al igual que se hace en el III AENC, asumimos como objetivo prioritario de la negociación colectiva el mantenimiento del empleo y la recuperación del empleo de calidad. Evitando que esta recuperación se canalice a través de la temporalidad, debiéndose limitar ésta a dar respuesta a las necesidades coyunturales de bienes y servicios. Así: 1.1 Los convenios deben promocionar la contratación indefinida, como forma de acceso al trabajo por cuenta ajena; la transformación de los contratos temporales en indefinidos; el mantenimiento del empleo y la igualdad de oportunidades, utilizando de forma ajustada a derecho, las diferentes modalidades de contratación: para las actividades permanentes el contrato indefinido; para discontinuas o estacionales, el contrato fijo discontinuo; y para las necesidades coyunturales, el contrato temporal causal. 1.2 No introducir a través de la negociación colectiva redacciones o pactos que desnaturalicen las causas previstas en el Estatuto de los Trabajadores y refuercen la causa que justifica la utilización de los diferentes contratos. 1.3 Pactar un volumen global de contrataciones temporales, en relación con la plantilla, en cuyo caso hay que establecer reglas claras sobre su alcance y consecuencias en los supuestos de incumplimiento. 1.4 Evitar la destrucción de empleo a tiempo completo para potenciar el empleo a tiempo parcial no voluntario, que afecta de una forma especial a las mujeres desde el momento de su entrada al mundo laboral y se perpetúa a lo largo de su carrera profesional, constituyendo un elemento de discriminación por razón de género. Pág. 6 de 24 1.5 El desempleo juvenil, que también afecta de una forma grave a nuestra comunidad, ha de tener un recorrido prioritario en la negociación colectiva para impulsar la contratación de personas jóvenes con empleos de calidad. a) La apuesta por la jubilación parcial y el contrato de relevo como instrumento adecuado para el mantenimiento del empleo y el rejuvenecimiento de plantillas, que solo será una realidad si lo concretamos a través del convenio colectivo. b) Impulsar la formación de las personas jóvenes en la empresa ligada a la contratación, en contratos formativos y/o a través de la formación dual, como vía para la cualificación y la inserción laboral, fomentando su incorporación definitiva en la empresa, una vez finalizado el contrato formativo. c) Para garantizar una formación de calidad, debemos de garantizar el tutorizaje del alumnado y este debe estar vinculado a tiempo real de trabajo del personal de la empresa. Por ello la negociación colectiva ha de ser la herramienta que delimite el porcentaje de tiempo que las y los trabajadores de la empresa deben destinar a la formación de las personas en formación. La RLT, además de hacer un seguimiento de estas modalidades de contratación al igual que con el resto de los contratos, deberá dar su conformidad explícita a la realización de contratos de carácter formativo en el ámbito de la empresa. d) Priorizar el acceso de los jóvenes a la oferta formativa de la empresa y a los permisos individuales de formación así como facilitar su participación en procedimientos de reconocimiento de la competencia laboral que les permitan mejorar su cualificación personal y profesional, garantizando sus derechos laborales y salariales en el desarrollo del Art. 11 del E.T. 1.6 En relación con la subcontratación, la externalización productiva y subrogación de actividades, empleo y condiciones de trabajo, la Pág. 7 de 24 negociación colectiva debe contribuir a facilitar y en consecuencia a mejorar, el cumplimiento de lo dispuesto en el artículo 42 del ET, tanto en materia de información como de crédito horario, así como a establecer cláusulas que establezcan la subrogación de las plantillas, todo ello para garantizar la seguridad del empleo y el cumplimiento de las condiciones laborales establecidas legal y convencionalmente. 1.7 Acordar como instrumentos adecuados las jubilaciones anticipadas y medidas de prejubilación ligadas a las circunstancias económicas que puedan atravesar las empresas. 2.- Sobre estructura de la negociación colectiva y concurrencia de convenios colectivos. 2.1 En la necesidad de defender nuestro ámbito propio de negociación colectiva, como instrumento básico para la regulación acordada de las condiciones laborales de las y los trabajadores vascos y de las empresas, es necesario un acuerdo interprofesional que garantice al amparo de lo establecido en el Art. 83.2 del E.T. la preferencia aplicativa de los convenios territoriales e interterritoriales suscritos en Euskadi que estén vigentes, sobre cualquier otro convenio sectorial o acuerdo marco de ámbito estatal preexistente o posterior a la firma de un posible acuerdo. 2.2 Igualmente los futuros convenios que se suscriban en nuevos ámbitos negociales, así como aquellos que hubieran perdido su vigencia y se suscriban con posterioridad, tendrán desde su firma la misma preferencia aplicativa, recogida en el párrafo anterior en esta materia, sin perjuicio de lo establecido en el Art. 84.4 del E.T. Pág. 8 de 24 2.3 Por otra parte, dado que la norma legal vigente establece una prevalencia del convenio de empresa sobre el sectorial, sea cuál sea su ámbito y el momento de su vigencia, en las materias determinadas en el Art 84.2, se hace necesario adoptar criterios de actuación que eviten la proliferación de nuevas unidades de negociación que se pudieran instar con la intención de reducir las condiciones laborales fijadas en un convenio sectorial de aplicación. El establecimiento de condiciones inferiores a las fijadas en los convenios sectoriales debería de realizarse a través de los procedimientos de inaplicación previstos en el artículo 82.3 del E.T. en función de las circunstancias particulares de carácter objetivo existentes en cada empresa. 3.- Recuperar los ámbitos sectoriales. Tras la entrada en vigor de la pérdida de ultra-actividad de los convenios en Euskadi, son muchos los que han decaído, fundamentalmente en el ámbito sectorial. Por ello desde CCOO consideramos urgente buscar soluciones a los convenios decaídos y retomar la obligación de negociar de buena fe, en el ámbito colectivo correspondiente. Somos conscientes del papel que juega la correlación de fuerzas para una negociación eficaz y resolutiva, pero no por eso queremos dejar de buscar soluciones y plantear propuestas. Hemos de diferenciar entre los convenios decaídos que tienen un convenio colectivo de ámbito superior que le fuera de aplicación y los que no tienen otro convenio de referencia. a) Convenios decaídos con convenio de ámbito superior de referencia. En estos supuestos las personas trabajadoras quedarían cubiertas por estos ámbitos, aunque no por ello deja de generar problemas. Por una parte se corre el riesgo real de perder derechos conseguidos, de forma Pág. 9 de 24 especial en materia de salarios y jornada, y por otra, en el ámbito de las empresas, porque pueden ser varios los convenios de aplicación y en las normas de concurrencia no queda establecido cual es de aplicación si el más favorable o el de ámbito estatal y dentro de estos nos encontramos con distintos ámbitos funcionales susceptibles de aplicación, generando inseguridad jurídica y conflictividad que deberíamos evitar. b) Cuando no hay un convenio colectivo de ámbito superior que fuera de aplicación. La regulación legal no da solución expresa a este supuesto. Ha sido a través de la vía judicial, donde se ha buscado una solución a través de la incorporación del contenido del convenio que pierde su vigencia, de forma automática y completa al contrato de trabajo de cada una de las personas afectadas; pero no viene a solucionar la situación de las nuevas personas trabajadoras, que fueran contratadas una vez ya decaído el convenio, que se quedan sin protección y sin la red que brindaba el convenio decaído, viéndose privados de derechos fundamentales como la dignidad profesional y la igualdad. Igualmente las condiciones que pasan al contrato de trabajo, pasan a tener un valor jurídico meramente contractual y no ya normativo, con todo lo que ello implica desde la perspectiva de eventuales modificaciones sustanciales que se puedan llevar a cabo. Está claro que las resoluciones judiciales no vienen en ningún caso a solucionar el problema de la negociación colectiva ni garantizan los derechos y obligaciones de las partes. Por ello desde CCOO consideramos urgente buscar soluciones a los convenios decaídos y retomar la obligación de negociar de buena fe, en el ámbito colectivo correspondiente. Somos conscientes del papel que juega la correlación de fuerzas para una negociación eficaz y resolutiva, pero no por eso queremos dejar de buscar solucione y plantear propuestas. Pág. 10 de 24 Algunas propuestas en esta materia. 3.1 Abrir de forma ordenada todas las mesas de negociación que no estén activas en estos momentos y negociar de buena fe. 3.2 Mientras duran las negociaciones, o bien con una duración determinada, establecer un acuerdo parcial de mínimos sobre determinadas materias, (salarios, jornada y su distribución y otras materias que se puedan acordar) que suponga mantener las condiciones del convenio decaído para todas las personas trabajadoras, sin discriminar a nadie por razón de la fecha de entrada en la empresa, que evite la aplicación en las materias acotadas , de los convenios de ámbito superior, o en su caso la regulación estatutaria. Esto puede ser un instrumento que dote de un mecanismo a disposición de las partes para evitar un vacío normativo en aquellos derechos de las plantillas, pero también en cuestiones fundamentales para la organización del trabajo de las empresas y para dotarnos de criterios de regulación comunes para todas las personas trabajadoras de un mismos sector. 3.3 Si finalizado el proceso de negociación, o de vigencia dada al acuerdo parcial, no se hubiera llegado a un acuerdo de eficacia general, se valorará las decisiones a tomar, que pueden tener diversos recorridos: a) Si las partes firmantes de este acuerdo compartimos el resultado del proceso de negociación, valorar la oportunidad, de la firma en eficacia limitada. b) Llevar los acuerdos al ámbito de las empresas, propiciando la participación de los trabajadores y trabajadoras en la toma de decisiones. 3.4 Si no hubiera acuerdo: a) Someter las discrepancias a procedimiento de mediación del PRECO. Pág. 11 de 24 b) Si la propuesta de mediación es rechazada, las partes de común acuerdo, podrán optar por un arbitraje como medio para el desbloqueo de la negociación del convenio. c) En estos supuestos el convenio seguiría vigente hasta la resolución oportuna. Desde CCOO y UGT consideramos que, revertir la situación anómala que tenemos en Euskadi, contribuye a impulsar la competitividad de las empresas a tener mayor seguridad, lo que repercute en la mejora de la gestión empresarial de los procesos productivos y comerciales, en el reforzamiento de la cualificación de los trabajadores y trabajadoras y del mejor aprovechamiento de los conocimientos y experiencia de plantillas estables y profesionalmente motivadas, aprovechando el inicio de la mejora del crecimiento de la economía y con el compromiso de combatir la pobreza laboral y la desigualdad y hacer extensiva la recuperación al conjunto de la sociedad. A ello contribuye sin duda, la negociación colectiva. 4.- Criterios en materia salarial El incremento de los salarios y la cláusula de garantía, constituyen una palanca necesaria para impulsar la demanda interna y, con ello, el crecimiento económico y del empleo; para evitar la deflación y potenciar una recuperación económica basada en la creación de empleo de calidad, estable y con derechos, que reduzca los niveles de desigualdad y de pobreza generados por la crisis y las políticas de austeridad. El porcentaje de incremento salarial en los sectores debe referenciarse en parámetros generales que cuenten con indicadores públicos y medibles. Otros parámetros, solo deben ser utilizados en el ámbito de los convenios de empresa y han de establecerse con criterios claros, con indicadores cuantificados e igualmente medibles y se utilizaran en base a incrementos adicionales y o retribuciones variables. Pág. 12 de 24 Además en esta etapa es necesario cambiar la orientación de las políticas salariales, promoviendo una recuperación del poder adquisitivo de los salarios, como elemento de justicia redistributiva, y que va a contribuir a la de mejora de la demanda, la actividad y con ello el empleo. 5.- Flexibilidad interna y del tiempo de trabajo La negociación colectiva es el espacio natural del ejercicio de la autonomía colectiva y el ámbito apropiado para facilitar la capacidad de adaptación de las empresas, fijar condiciones de trabajo y modelos que permitan mejorar la productividad, crear más riqueza, aumentar el empleo, mejorar su calidad y contribuir a la cohesión social. Dentro de la capacidad de adaptación de las empresas, la flexibilidad interna juega un papel importante para adaptarse a los cambios tecnológicos, organizativos, de ciclos de demanda, de cualificaciones requeridas etc. que exigen de respuestas ágiles y a la vez participadas por el conjunto de los agentes sociales y de la RLT en su caso. CCOO considera que en esta dinámica, necesaria para promover la adaptación empresarial sin que esta vaya en detrimento de las condiciones laborales, es fundamental la implicación de la Administración Pública. Son muchas las medidas flexibilizadoras que la legislación ha introducido, ignorando la autonomía de las partes, y sin consenso con los agentes sociales, en materia de sistemas de clasificación profesional, movilidad funcional, movilidad geográfica, modificaciones sustanciales de las condiciones de trabajo y en la propia ordenación del tiempo de trabajo. También los convenios colectivos son una fuente de regulación real de la flexibilidad interna, con lo que existen ya una serie de experiencias en esta materia. Es cierto que los convenios sectoriales, se hacen un menor eco de estas medidas, pero sin duda obedece a la ausencia de renovación de los mismos y a las dificultades de concretar determinadas materias de una forma homogénea para todas las empresas. Pág. 13 de 24 La gestión flexible del tiempo de trabajo a favor de la empresa, viene motivada por necesidades organizativas o de producción de las empresas y existe en los convenios colectivos una variada tipología de fórmulas y mecanismos de flexibilidad en el tiempo de trabajo tales como: ampliación de las jornadas diarias o semanales, estableciéndose mecanismos de compensación; alteraciones en el régimen de descansos, y en los días de disfrute de vacaciones; disponibilidad horaria fundada en necesidades de funcionamiento de la empresa, o supuestos vinculados a la producción ( Paradas improductivas, paros de maquinas e instalaciones o interrupción de del trabajo por falta de por falta de componentes o materiales que imposibilitan trabajar por razones ajenas a la voluntad de la empresa, que exigen fórmulas de flexibilidad en el tiempo de trabajo. En tales casos se regula la previsión de retribución garantizada o la recuperación pactada del tiempo. También se avanza en regular las situaciones que se pueden producir por las inclemencias del tiempo. La forma flexibilizadora más común que nos encontramos es la previsión convencional de un determinado número de horas al año , que la empresa, por razones vinculadas a su funcionamiento podrá utilizar alterando su calendario laboral anual, exige normalmente , el respeto a un plazo de preaviso a los trabajadores y trabajadoras afectadas e implica el descanso compensatorio de esas horas.. CCOO apuesta por regular criterios, causas y procedimientos en la aplicación de todas las medidas de flexibilidad, así como procedimientos agiles de adaptación y modificación de lo pactado, con la participación siempre, la de RLT y con la intervención en caso de desacuerdo de las comisiones paritarias y de los sistemas de solución de conflictos (PRECO). La empresa es el ámbito más adecuado para configurar estos conceptos, sin obviar que el ámbito sectorial puede propiciar el desarrollo de la negociación en el ámbito de la empresa, a iniciativa de las partes afectadas con el establecimiento de procedimientos y garantías individuales y colectivas. Pág. 14 de 24 6.- Formas de flexibilidad justificadas por razones de conciliación de la vida personal, familiar y laboral. Si como vemos en el ámbito de la flexibilidad interna motivada por necesidades organizativas o de producción, se han producido avances sustanciales en el ámbito de la negociación colectiva, en materia de conciliación de la vida laboral y familiar y personal no ocurre lo mismo. Las formulas convencionales innovadoras de flexibilidad en el tiempo de trabajo, por estas causas, con garantía retributiva son prácticamente inexistentes y si se aprecia , sin embargo, una tendencia a incorporar otras formas flexibles que por la vía de las licencias sin retribución o de las reducciones de jornada, permitan al trabajador y/o trabajadora disponer de tiempo para atender necesidades familiares, medidas que la realidad nos demuestra que fomentan poco la igualdad y la corresponsabilidad entre sexos y viene a ahondar en las desigualdades por razón de género. La negociación colectiva es el marco idóneo para abordar también la flexibilidad a favor de las personas, no convirtiendo ésta en un tema puramente unidireccional, que solo se adapta a las necesidades productivas de la empresa. Tenemos determinadas materias que el propio ET, la ley orgánica de igualdad entre mujeres y hombres o la Ley contra la violencia de género, remiten entre otras, a su desarrollo a la negociación colectiva en materia de flexibilidad. Por tanto es necesario avanzar en propuestas que permitan gestionar el tiempo de trabajo de forma más flexible para los trabajadores y trabajadoras: en los horarios atípicos, en la plasmación convencional de bolsas o cuentas individuales de horas, que pudieran activarse por necesidades individuales de las personas trabajadoras, posibilidad de cambios de horarios o jornada, reglas flexibles de disfrute de las vacaciones por motivos de conciliación y avanzar progresivamente en los días de libre disposición en los permisos retribuidos orientando estos a las necesidades reales que tienen en la actualidad los trabajadores y trabajadoras. Pág. 15 de 24 7.-Ultra-actividad La perdida de ultra-actividad de los convenios colectivos en ningún caso ha supuesto una negociación colectiva más efectiva, por el contrario ha producido un efecto nada deseable, como es la reducción de la tasa de cobertura de la negociación colectiva o lo que es lo mismo, la merma de la protección que el convenio colectivo suministra a las trabajadoras y trabajadores. Además hemos de constatar que esta medida ha dado importantes réditos a la parte empresarial frente al debilitamiento de negociador de la parte social. Por ello consideramos necesario establecer medidas que eviten estos efectos y doten a la negociación de mayor agilidad y seguridad jurídica. Dado que el art. 86.3 del ET, otorga al ámbito de la negociación colectiva prioridad aplicativa en materia de regulación de la ultra-actividad frente a lo regulado en la Ley que tiene carácter supletorio y se aplica, por tanto en defecto de pacto en contrario, es necesario acordar el mantenimiento de la vigencia de los convenios hasta que sean sustituidos por uno nuevo o en todo caso establecer plazos que mejore substancialmente la regulación legal, para todos aquellos convenios que no cuenten con una cláusula que garantice la vigencia del convenio hasta su renovación por otro. Por otro lado, para evitar una posible pérdida o decaimiento del convenio, por falta de acuerdo en la renovación cuando se tiene limitado el periodo de ultra-actividad, es necesario que las partes avancen en la adopción de compromisos previos, acerca de mantener vigente el convenio durante todo su proceso negociador, evitando así que se produzcan más vacíos de regulación por la pérdida de vigencia de los convenios. Para resolver discrepancias o conflictos que se produzcan durante el proceso de negociación y que puedan llegar a bloquear la renovación del convenio, cualquiera de las partes podrá solicitar el inicio de una mediación, que será obligatoria para la otra y se desarrollará en los términos previstos en PRECO. Finalizada dicha mediación si es rechazada la propuesta de la persona que encargada de realizarla, las partes de Pág. 16 de 24 común acuerdo, podrán optar por un arbitraje como medio para el desbloqueo de la negociación del convenio colectivo. 8.- Igualdad de trato y oportunidades entre hombres y mujeres. Las organizaciones sindicales y empresariales tenemos dos herramientas fundamentales desde donde podemos incidir, para erradicar las discriminaciones por razón de sexo y articular medidas de acción positiva en materia de empleo, remuneración , condiciones de trabajo, formación y promoción o salud laboral: la negociación colectiva y el dialogo social. El mundo de las relaciones laborales, al igual que en otros aspectos de la vida viene construyendo a lo largo de la historia, aptitudes, roles sociales y actitudes diferenciadas en función del sexo. Ello genera distintas identidades, expectativas y oportunidades, a la vez que establece relaciones de poder y desigualdades entre uno otro sexo, que son modificables al estar ante una construcción cultural de género. En el ámbito legal se han producido avances muy importantes dirigidos a combatir todas las manifestaciones aún existentes de discriminación directa o indirecta, por razón de sexo y a promover la igualdad real plena. De ahí la consideración de la dimensión transversal de la igualdad, como principio fundamental del derecho antidiscriminatorio. La Ley Orgánica para la igualdad efectiva entre mujeres y hombres, presta especial atención a la corrección de la desigualdad en el ámbito especifico de las relaciones laborales y pretende promover la adopción de medidas concretas a favor de la igualdad en las empresas, situándolas en el marco de la negociación colectiva, para que sean las partes, libre y responsablemente, las que acuerden su contenido. Tras haber pasado más de 8 años de aprobación de esta Ley, el balance en medidas de igualdad es terriblemente escaso. Pág. 17 de 24 La negociación colectiva, no ha asumido la perspectiva de género y en el mejor de los casos los convenios colectivos se limitan a reproducir la Ley, sin entrar al desarrollo de las materias, que la misma dispone a la negociación colectiva. Es cierto que en el ámbito sectorial hay muchos convenios que desde que entro en vigor la Ley en 2007, no se han renovado, pero los convenios sectoriales que se han firmado con posterioridad a la misma, tampoco reflejan un avance en las políticas de igualdad. Poro tanto tenemos una asignatura pendiente, que no puede esperar por más tiempo. Algunas propuestas: 8.1 Revisar el texto de los convenios, ver todo lo que no se ajusta a la Ley y adaptarlos. 8.2 Analizar las remisiones que las distintas leyes disponen en materia de igualdad a la negociación colectiva e ir negociándolas y aprobándolas progresivamente. 8.3 Rebajar de 250 el número necesario de personas en la plantilla, para que las empresas tengan la obligación de elaborar planes de igualdad, teniendo en cuenta el tamaño de las empresas que configuran el tejido productivo 8.4 Determinar los factores que inciden en la brecha salarial por razón de género, para actuar sobre ellos y eliminarla. 8.5 Concretar medidas específicas de protección frente al acoso laboral y por razón de sexo. Tipificando las faltas y sanciones correspondientes dentro del régimen disciplinario. La crisis ha supuesto un freno, también en las políticas de igualdad, pero, este es un problema previo a la crisis, que no se va a superar con el fin de Pág. 18 de 24 la misma por sí solo. Por tanto es necesario negociar para la igualdad y esto no se puede quedar en recoger, en exclusiva medidas para la conciliación. Las políticas de conciliación, son parte de las políticas de igualdad, pero si no van acompañadas del resto de medidas de igualdad, no cumplen sus objetivos, ni fomentan la igualdad, ni la natalidad, y fracasan en el objetivo de la corresponsabilidad, situando a las mujeres en clara desventaja en el mercado de trabajo. 9.- Los planes de igualdad en las empresas CCOO de Euskadi considera que para garantizar los derechos constitucionales de igualdad y no discriminación por razón de sexo, es fundamental aplicar La Ley Orgánica 3/2007 para la Igualdad Efectiva de Mujeres y Hombres y mediante la negociación colectiva y el diálogo social modificar y mejorar el actual escenario laboral para avanzar en el objetivo de corregir las desigualdades que existen en las condiciones laborales entre hombres y mujeres. La Ley establece en el artículo 45 que las empresas de menos de 250 trabajadores/as con convenio colectivo propio deberán negociar medidas antidiscriminatorias y a favor de la igualdad de trato y oportunidades, pero no tendrán la obligación de negociar un plan de igualdad. Si bien, también prevé en su artículo 49, el establecimiento de medidas de fomento, especialmente dirigidas a las pequeñas y medianas empresas, para impulsar la implantación voluntaria de planes de igualdad y que dichas medidas incluirán el apoyo técnico necesario. Proponemos: 9.1 Establecer un sistema de control para garantizar que las empresas con más de 250 personas en plantilla tiene establecidos planes de igualdad, de acorde la legislación vigente. 9.2 Dotar de una partida presupuestaria para fomentar la elaboración, ejecución y seguimiento de estos planes en empresas no obligadas por ley a su elaboración. Pág. 19 de 24 9.3 Campañas informativas para que estas empresas implanten voluntariamente planes de igualdad. 9.4 Creación de un registro donde se ubiquen los planes de igualdad ejecutados. 9.5 Medidas para favorecer el diagnóstico, puesta en marcha y evaluación tanto de planes de igualdad en la pequeña y mediana empresa como de medidas favorecedoras de la igualdad en microempresas. 10.- Necesidad de abordar la problemática de las mutuas en la negociación colectiva: La negociación colectiva abre diversos espacios que pueden ser utilizados para obligar a las Mutuas a mejorar la calidad del servicio que ofrece a las personas trabajadoras. Si bien los procesos de negociación colectiva se dan entre empresa y representantes de los trabajadores y trabajadoras y las organizaciones sindicales, cabe la posibilidad de articular estos procesos de forma que afecten a un tercero, en este caso las Mutuas, en su papel de entidad colaboradora de la Seguridad Social que gestiona contingencias profesionales y, en muchos casos, también comunes. El escenario que ha propiciado la nueva legislación sobre Mutuas, es claramente lesivo a los derechos de las personas trabajadoras. La colaboración de éstas en el pago de la prestación de incapacidad transitoria por contingencia común, puede suponer una presión más a las personas en situación de IT en aquellas empresas que hayan dejado la gestión de la contingencia común en manos de las Mutuas, por lo que la cobertura de las contingencias profesionales y comunes de las personas trabajadoras ha de ser abordada y regulada en la negociación colectiva Pág. 20 de 24 Propuestas de CCOO en esta materia: 10.1 La gestión de las contingencias comunes (enfermedad común y accidente no laboral) NO serán gestionadas por las mutuas, sino que, éstas permanecerán en el ámbito de la Seguridad Social. 10.2 Igualmente hemos de plantear la reversión de este hecho en aquellas empresas que ya hayan cedido la gestión de esta contingencia a la Mutua, para evitar posibles abusos de éstas, en la gestión de la contingencia común y cerrarles la puerta a que puedan extralimitarse presionando con las citaciones y a que puedan extinguir la prestación a personas enfermas. 10.3 Introducir cláusulas relativas a la codecisión en la elección de la Mutua, así como renovación o no de la misma evitando la decisión unilateral de la empresa. La elección de la Mutua que asegure las contingencias, tiene que ser algo acordado entre plantilla y empresa, y no una elección en exclusiva de esta última. CCOO considera que las cotizaciones empresariales por contingencias profesionales tienen la consideración de salario diferido, o lo que es lo mismo salario devengado pero no recibido y además las y los asegurados son los trabajadores y trabajadoras y en ese sentido la codecisión a la hora de la elección de la Mutua ha de ser un derecho incuestionable, aunque la Ley de Mutuas no lo haya resuelto. 10.4 Negociar el estudio de indicadores de calidad en el servicio, transcurrido un año, antes de tomar la decisión de renovar o no el documento de adhesión. Entre otros indicadores podemos contemplar los siguientes: • Accesibilidad para los trámites administrativos. • Información que se da a la persona trabajadora cuando acude a las revisiones médicas. • Pruebas diagnósticas y tratamientos alternativos que se proponen en la IT por contingencia común. Pág. 21 de 24 • Pago o compensación del desplazamiento al lugar en el que se hacen las revisiones médicas durante la situación de IT. • Facilitación de la hoja de reclamaciones a quien lo solicite. • Observancia estricta de las normas de confidencialidad de datos. • Existencia o no de una comunicación motivada, por escrito y fehaciente previa a las citaciones. • Calidad y accesibilidad de las instalaciones. • Existencia o no de un interlocutor de la mutua para la resolución rápida de dudas. • Satisfacción percibida y expresada por los usuarios. La negociación colectiva debe de ser también una herramienta, para defender la salud y el bienestar de los trabajadores y las trabajadoras, para defender el sistema público de salud, evitando la injerencia de las Mutuas en las contingencias que claramente corresponden al ámbito de la sanidad pública y para determinar acerca de aquellos aspectos que afectan a las personas trabajadoras a la vez que aseguradas. 11.- Los procedimientos voluntarios de conflictos laborales Debemos de apostar por los procedimientos de resolución de conflictos para gestionar los problemas que se puedan dar en la negociación colectiva así como en los procesos de inaplicación sin interferir por ello en la autonomía colectiva. El conflicto es inherente a nuestra sociedad y a las relaciones laborales. Es importante buscar soluciones al mismo, utilizando los servicios que en sus diferentes modalidades, tenemos a nuestro alcance para su resolución. 12.- La negociación en el Área Pública CCOO ha solicitado al gobierno vasco que se reactive la negociación Pág. 22 de 24 colectiva en todos los ámbitos de la Administración y se aborde un proceso real de negociación, a través de la convocatoria de la Mesa General de negociación la Administración Pública, que sirva para recuperar el poder de compra de las personas empleadas en la administración pública vasca. La devolución de la paga extra de 2012 de forma inmediata y recuperar de forma paulatina el poder adquisitivo perdido y el resto de los derechos laborales que les fueron sustraídos. Una negociación colectiva dinámica y participativa La negociación colectiva es clave para la afiliación y la representación sindical. Una negociación colectiva que dé respuesta a las nuevas necesidades que se viven en los centros de trabajo, no sólo en las grandes y medianas empresas, sino también en las más pequeñas; empresas con muy diferentes formas de gestión productiva y de recursos humanos donde, de no realizar una acción sindical potente y una negociación colectiva que regule adecuadamente las condiciones de trabajo, hay un campo trillado para la precarización laboral, el abuso de poder empresarial, la individualización de las condiciones de trabajo, el desprecio a lo social y colectivo, la desigualdad creciente y la discriminación. Tenemos la referencia del III AENC que abre un nuevo tiempo en la negociación colectiva, y no renunciamos a abrir espacios que propicien acuerdos en Euskadi para el desbloqueo y racionalización de la negociación colectiva, en el objetivo de recuperar y ampliar, a través de los convenios colectivos, la cobertura de los trabajadores y trabajadoras y revertir las reformas laborales. Bilbao a 22 de Enero de 2016 Pág. 23 de 24 Pág. 24 de 24