Publicacion Oficial - Diario Oficial El Peruano

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1825-2015. LA HISTORIA PARA CONTAR
AÑO DE LA CONSOLIDACIÓN DEL MAR DE GRAU
Lunes 1 de febrero de 2016
SENTENCIAS EN CASACIÓN
Año XX / Nº 711
CAS. N° 183- 2012 HUANCAVELICA
Lima, once de marzo de dos mil catorce. LA SALA DE DERECHO
CONSTITUCIONAL Y SOCIAL PERMANENTE DE LA CORTE
SUPREMA DE JUSTICIA DE LA REPÚBLICA: VISTA la causa:
con los acompañados; de conformidad con el Dictamen Fiscal
Supremo en lo Contencioso Administrativo; en audiencia pública
llevada a cabo en la fecha, integrada con los Señores Jueces
Supremos Sivina Hurtado – Presidente, Walde Jáuregui, Acevedo
Mena, Vinatea Medina y Rueda Fernández; y, luego de verificada la
votación con arreglo a ley, se emite la siguiente sentencia: I.MATERIA DEL RECURSO: Se trata del recurso de casación
interpuesto por la demandante doña Nilda Pari de Ledesma de
fecha dos de diciembre de dos mil once, obrante a fojas trescientos
setenta y siete, contra la sentencia de vista de fecha catorce de
noviembre de dos mil once, obrante a fojas trescientos sesenta y
ocho, expedida por la Sala Civil de la Corte Superior de Justicia de
Huancavelica, que confirmando la sentencia apelada de fecha
veintisiete de julio de dos mil once, obrante a fojas trescientos uno,
que declara infundada la demanda. II.- FUNDAMENTOS POR LOS
CUALES SE HA DECLARADO PROCEDENTE EL RECURSO:
Mediante resolución de fecha quince de octubre de dos mil doce,
obrante a fojas cuarenta y uno del cuaderno de casación, se ha
declarado procedente el recurso de casación interpuesto por la
recurrente por la denuncia de infracción normativa del artículo 9
del Texto Único Ordenado de la Ley de Tributación Municipal,
aprobado por Decreto Supremo N° 156-2004-EF, en cuanto
establece que cuando la existencia del propietario no pudiera ser
determinada, son sujetos obligados al pago del impuesto, en
calidad de responsables, los poseedores o tenedores, a cualquier
título, de los predios afectados, sin perjuicio de su derecho a
reclamar el pago a los respectivos contribuyentes; en el caso de
autos se encuentra plena e indubitablemente acreditado que la
recurrente tiene la calidad o condición de posesionaria del bien
inmueble urbano ubicado en el Jirón Agustín Gamarra N° 203 del
Cercado de Huancavelica, y como quiera que venía pagando dicho
impuesto predial, el Alcalde demandado en forma ilegal y abusiva,
le ha recortado dicha contribución tributaria, por lo que debe
continuar pagando por dicho concepto de tributación municipal;
bajo dicha premisa, con la constancia de posesión otorgada por el
Gobernador de Huancavelica, la recurrente ha demostrado que
tiene la calidad de posesionaria. III.- CONSIDERANDO: Primero:
A través del proceso contencioso administrativo, este Supremo
Tribunal controla jurídicamente las actuaciones de la administración
pública, entre ellas, los actos administrativos, el silencio
administrativo y las actuaciones materiales administrativas, siendo
que la finalidad de dicho proceso es que el Juez declare la nulidad
de tales actos, en resguardo de los derechos fundamentales a un
debido procedimiento administrativo y a un debido proceso, y de
los principios de integración, de igualdad procesal, de
favorecimiento del proceso y de suplencia de oficio, entre otros.
Segundo: La actora pretende a través de la demanda interpuesta
que se declare: i) nula e ineficaz la Resolución de Alcaldía N° 1472010/MPH, de fecha quince de abril de dos mil diez, que declaró
infundado el recurso de apelación interpuesto por la recurrente
contra la Resolución de Alcaldía N° 498-2009/MPH del catorce de
octubre de dos mil nueve; ii) nula e ineficaz la Resolución de
Alcaldía N° 498-2009/MPH, del catorce de octubre del dos mil
nueve, que declara la nulidad de oficio, la inscripción del predio de
registro N° P-002128, ubicado en el Jirón Agustín Gamarra N° 203
– Cercado; iii) se ordene a la Sub Gerencia de Administración
Tributaria de la Municipalidad Provincial de Huancavelica para
continuar pagando a la accionante, por concepto de Rentas de
Declaración Jurada de Autoavalúo del bien inmueble ubicado en el
Jirón Agustín Gamarra N° 203 del Cercado de Huancavelica, así
como la inscripción del predio que tenía su finado padre. Tercero:
Como sustento de la demanda, señala la demandante que don
Saturnino Pari Quincho ha estado posesionando el bien inmueble
ubicado en el Jirón Agustín Gamarra N° 203, así como realizó el
pago de autoavalúo; precisa que desde el dos mil seis, se ha
realizado el pago por autoavalúo a nombre de la recurrente en
calidad de heredera forzosa de Saturnino Pari Quincho. Al emitirse
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la Resolución de Alcaldía materia de impugnación no se ha
contemplado los plazos establecidos por la Ley N° 27444, por lo
que a la fecha de haber emitido la resolución ya había prescrito,
debiéndose declarar fundada y continuarse con el pago del tributo,
así como la inscripción del predio. El pago del Tributo se ha
realizado con total puntualidad, a efecto de no sustraerse de sus
obligaciones tributarias y que no se ha estado pagando
indebidamente como señala la emplazada. En su condición de hija
y heredera forzosa, esta le ha sucedido en la posesión del bien
inmueble ubicado en Jr. Agustín Gamarra N° 203, por lo que el
Gobernador en su condición de Autoridad Política de la Provincia
de Huancavelica, le ha otorgado un certificado de posesión; siendo
que se le ha privado del pago, empero el plazo para emitir dicha
nulificación ha prescrito, y como quiera que ha realizado el pago las
resoluciones devienen en nulas. La emplazada ha formulado
silencio administrativo positivo, por no haber resuelto el recurso
impugnatorio dentro de los treinta días hábiles, pero para justificar
o aparentar haber dictado dentro del término de Ley, con fecha
quince de abril emiten la resolución y se notifica a la recurrente con
fecha veinte del mismo año y mes. Cuarto: Por sentencia de
primera instancia, de fecha veintisiete de julio de dos mil once, de
fojas trescientos uno, se declaró infundada la demanda, precisando
el A quo que la recurrente ha sido declarada heredera única y
universal de Saturnino Pari Quincho, no obstante la demandante
no ha acreditado con documento idóneo que su causante haya sido
propietario del inmueble ubicado en el Jirón Agustín Gamarra N°
203; asimismo, la declaratoria de herederos o sucesión intestada
se entiende de una forma genérica más al contrario no se ha
demostrado que la recurrente sea propietaria del inmueble antes
referido. Precisa el Juez de la causa que si bien el Gobernador de
Huancavelica ha otorgado a la demandante certificado de posesión
del inmueble ubicado en Jirón Agustín Gamarra N° 203, (obrante a
fojas dieciocho), el mencionado certificado no es suficiente para
acreditar la titularidad del predio y realizar los pagos de impuesto
predial, toda vez que el TUPA de la entidad emplazada señala de
manera clara que se deberá presentar Certificado de Posesión
Judicial u otro que acredite la propiedad por lo que se evidencia
que la recurrente al momento de realizar la inscripción del predio
para el pago del impuesto predial no cumplió con los requisitos
exigidos por el Texto Único de Procedimientos Administrativos TUPA 2004 de la emplazada. Quinto: Por sentencia de vista, de
fecha catorce de noviembre de dos mil once, obrante a fojas
trescientos sesenta y ocho, la Sala de mérito ha confirmado la
sentencia apelada que declaró infundada la demanda, señalando
que la demandante no ha acreditado la propiedad del inmueble sub
materia, a favor de su causante ni de ella misma y por el contrario
al parecer dicho inmueble sería propiedad del Estado, en atención
a lo indicado en el décimo fundamento de la Resolución de Alcaldía
N° 147-2010/MPH a fojas tres y cuatro, en el que se afirma, porque
el mencionado predio se encontraba inscrito en el Registro de
Predios del Estado (SINABIF) en mérito al Decreto Ley N° 18972,
que revierte al dominio del Estado aparentemente el inmueble sub
materia, ello teniendo en cuenta la coincidencia de los linderos,
descritos en la norma invocada y el plano de linderos, descritos en
la norma invocada y el plano de ubicación y localización de fojas
veinte. Concluye la Sala de mérito que es en dichas condiciones
que el párrafo último del artículo 9 del Texto Único Ordenado de la
Ley de Tributación Municipal, aprobado con Decreto Supremo 1562004-EF, no se puede aplicar al presente caso, ya que se entiende
que los poseedores son sujetos pasivos en calidad de
contribuyentes, cuando la existencia del propietario no pueda ser
determinada, empero en el presente caso la parte demandante no
ha evidenciado dicho supuesto y por el contrario el bien inmueble
al parecer sería de un propietario determinado, como es el Estado.
Sexto: Entrando al análisis de la causal de infracción normativa del
artículo 9 del Texto Único Ordenado de la Ley de Tributación
Municipal, aprobado por Decreto Supremo No. 156-2004-EF, en
primer término cabe precisar que conforme a dicha norma: “Son
sujetos pasivos en calidad de contribuyentes, las personas
naturales o jurídicas propietarias de los predios, cualquiera sea su
naturaleza. Excepcionalmente, se considerará como sujetos
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CASACIÓN
pasivos del impuesto a los titulares de concesiones otorgadas al
amparo del Decreto Supremo Nº 059-96-PCM, Texto Único
Ordenado de las normas con rango de Ley que regulan la entrega
en concesión al sector privado de las obras públicas de
infraestructura y de servicios públicos, sus normas modificatorias,
ampliatorias y reglamentarias, respecto de los predios que se les
hubiesen entregado en concesión, durante el tiempo de vigencia
del contrato. Los predios sujetos a condominio se consideran como
pertenecientes a un solo dueño, salvo que se comunique a la
respectiva Municipalidad el nombre de los condóminos y la
participación que a cada uno corresponda. Los condóminos son
responsables solidarios del pago del impuesto que recaiga sobre el
predio, pudiendo exigirse a cualquiera de ellos el pago total.
Cuando la existencia del propietario no pudiera ser determinada,
son sujetos obligados al pago del impuesto, en calidad de
responsables, los poseedores o tenedores, a cualquier título, de los
predios afectos, sin perjuicio de su derecho a reclamar el pago a
los respectivos contribuyentes.” Sétimo: Al respecto, la
demandante ha sostenido en el recurso de su propósito que
conforme a la norma denunciada, cuando la existencia del
propietario no pudiera ser determinada, son sujetos obligados al
pago del impuesto, en calidad de responsables, los poseedores o
tenedores, a cualquier título, de los predios afectados, sin perjuicio
de su derecho a reclamar el pago a los respectivos contribuyentes,
encontrándose acreditado que la recurrente tiene la calidad o
condición de posesionaria del bien inmueble urbano ubicado en el
Jirón Agustín Gamarra N° 203 del Cercado de Huancavelica, y
como quiera que venía pagando dicho impuesto predial, el Alcalde
demandado en forma ilegal y abusiva, le ha recortado dicha
contribución tributaria, por lo que debe continuar pagando por
dicho concepto de tributación municipal; bajo dicha premisa, con la
constancia de posesión otorgada por el Gobernador de
Huancavelica, la recurrente ha demostrado que tiene la calidad de
posesionaria. Octavo: Este Supremo Tribunal conviene en precisar
que no basta tener la calidad de poseedor para ser sujeto obligado
al pago del impuesto, sino que además la existencia del propietario
no pudiera ser determinada; resultando indispensable establecer la
condición del bien inmueble cuya titularidad de pago del impuesto
se discute, así se observa que según el plano de ubicación
aportado por la actora a fojas veinte, el inmueble presenta los
siguientes linderos: por el norte Jirón Agustín Gamarras, por el
oeste Jirón Arequipa, por el este Pasaje Versalles (que se prolonga
al Jirón Manuel Ascencio Segura), y por el Sur con la propiedad de
la Familia Patiño, linderos que esta Sala aprecia coinciden con el
inmueble que según el Decreto Ley N° 18972 revirtió al dominio del
Estado y que conforme a la Resolución de Alcaldía N° 147-2010/
MPH de fecha quince de abril de dos mil diez, obrante a fojas tres
se encuentra registrado en el registro de Predios del Estado. En
consecuencia, siendo el inmueble materia de litis de propiedad del
Estado, no corresponde al caso de autos la aplicación del último
párrafo del artículo 9 del Texto Único Ordenado de la Ley de
Tributación Municipal, aprobado por Decreto Supremo N°. 1562004-EF, por lo que deviene en infundado el recurso de casación.
IV. DECISIÓN: Por tales consideraciones declararon: INFUNDADO
el recurso de casación interpuesto por la demandante doña Nilda
Pari de Ledesma de fecha dos de diciembre de dos mil once,
obrante a fojas trescientos setenta y siete, NO CASARON la
sentencia de vista de fecha catorce de noviembre de dos mil once,
obrante a fojas trescientos sesenta y ocho; y MANDARON se
publique la presente resolución en el Diario Oficial “El Peruano”
conforme a ley; en los seguidos por doña Nilda Pari de Ledesma
contra la Municipalidad Provincial de Huancavelica, sobre Acción
Contencioso Administrativa; y los devolvieron. Vocal Ponente:
Vinatea Medina. S.S. SIVINA HURTADO, WALDE JÁUREGUI,
ACEVEDO MENA, VINATEA MEDINA, RUEDA FERNÁNDEZ
C-1335410-1
CAS. Nº 760-2013 SAN MARTIN
Lima, cinco de agosto de dos mil catorce. LA SALA DE DERECHO
CONSTITUCIONAL Y SOCIAL PERMANENTE DE LA CORTE
SUPREMA DE JUSTICIA DE LA REPÚBLICA: VISTA la causa en
audiencia pública llevada a cabo en el día de la fecha, con los
Señores Jueces Supremos Sivina Hurtado, Walde Jáuregui,
Acevedo Mena, Vinatea Medina y Rueda Fernández; y luego de
verificada la votación con arreglo a ley, se emite la siguiente
sentencia: I.- MATERIA DEL RECURSO DE CASACION: Se trata
del recurso de casación interpuesto por la Institución Educativa
Agropecuaria Valle del SISA, obrante a fojas quinientos ochenta y
nueve, contra la sentencia de vista de fecha dieciocho de julio de
dos mil doce, obrante a fojas quinientos setenta y dos, que confirma
la sentencia apelada que declaró fundada la demanda. II.FUNDAMENTOS POR LOS CUALES SE HA DECLARADO
PROCEDENTE EL RECURSO DE CASACIÓN: Esta Sala
Suprema por resolución de fecha veinticinco de junio de dos mil
trece, obrante a fojas ciento tres del cuaderno de casación, ha
declarado procedente el recurso de casación interpuesto por la
causal de infracción normativa por contravención de las normas
que garantizan el derecho a un debido proceso, señalando que
la sentencia impugnada ha fallado más allá del petitorio, y se ha
basado en argumentos no esgrimidos por las partes, pues la
pretensión demandada consiste en la reivindicación del predio
rústico denominado Silisu, ubicado en el distrito de San José de
Sisa, provincia El Dorado, departamento de San Martín, inscrito en
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la partida N° 04023245, no obstante, sin que haya sido demandado,
la sentencia adjudica a la demandante la edificación (casa,
galpones, árboles frutales), bajo el argumento que se le adjudica
en compensación por los frutos recibidos por la demandada, sin
que este argumento haya sido sustentado por la demandante, por
lo que se le priva del derecho a un debido proceso, especialmente
del derecho a la defensa, ya que en atención a lo dispuesto por el
artículo VII del Título Preliminar del Código Procesal Civil, el
Juzgador no puede emitir pronunciamiento sobre un petitorio no
demandado expresamente; que la Sala al integrar la sentencia
ordenando la adjudicación de lo edificado, ha sustentado que la
pretensión procesal no se circunscribe al petitorio, sino también a
los fundamentos de hecho y que si bien es cierto que en autos ha
quedado establecido que en la demanda el accionante no ha
propuesto como pretensión la accesión de los bienes existentes en
el predio, a fin de que sean adjudicados, también lo es que se ha
mencionado como fundamento de hecho de la demanda, por lo que
la sentencia que integra la demanda no resulta un atentado al
artículo VII del Título Preliminar del Código Procesal Civil,
interpretación que resulta forzada y ajena al espíritu de la
Constitución Política del Estado, pues al verificarse la existencia de
la construcción correspondía declarar improcedente la demanda.
III.- CONSIDERANDO: Primero: Corresponde examinar la causal
de infracción normativa procesal, desde el marco jurídico de las
garantías de los derechos fundamentales a un debido proceso y
tutela jurisdiccional efectiva, a fin de que en sede casatoria se
ejercite adecuadamente la finalidad esencial del recurso de
casación, y se resguarde la tutela de los derechos procesales con
valor constitucional, con la clara observancia de las normas
sustantivas y procesales que garantiza al justiciable el derecho de
obtener de los órganos jurisdiccionales una respuesta razonada y
fundamentada, respetando los principios de jerarquía de las
normas, el de congruencia procesal, la valoración de los medios
probatorios; constituyendo un deber del Juez emitir fallos de
acuerdo a lo establecido en el inciso 5 del artículo 139 de la
Constitución Política del Estado, en el inciso 4 del artículo 122, así
como el artículo 50 inciso 6 del Código Procesal Civil, en resguardo
de los derechos fundamentales citados en todas sus acepciones.
Segundo: En cuanto al derecho fundamental a un debido proceso,
no sólo es un principio de quienes ejercen la función jurisdiccional
y que está contemplado como tal en el inciso 3 del artículo 139 de
la Constitución Política del Estado, sino que también es concebido
como aquel derecho fundamental que posee toda persona peruana
o extranjera, natural o jurídica- y que, en tal medida, es exigible por
éstas (dimensión subjetiva); a su vez, es un derecho que debe ser
respetado por todos, debido a que lleva implícito los fines sociales
y colectivos de justicia (dimensión objetiva)1. En ese sentido, existe
contravención de las normas que garantizan el derecho a un
debido proceso cuando, en el desarrollo del mismo, el órgano
jurisdiccional no ha respetado los derechos procesales de las
partes; se han obviado o alterado actos de procedimiento; la tutela
jurisdiccional no ha sido efectiva y/o el órgano jurisdiccional deja de
motivar sus resoluciones, en clara transgresión de la normatividad
vigente y de los principios procesales. Tercero: Ahora bien,
conforme a la jurisprudencia sentada por esta Sala de Derecho
Constitucional y Social Permanente2: “El derecho a la tutela
jurisdiccional efectiva se encuentra reconocido en el artículo 139,
inciso 3, de la Carta Magna, y en el artículo I del Título Preliminar
del Código Procesal Civil, el cual encuentra dentro de su contenido
constitucional protegido que, cuando una persona requiera la
protección de su derecho o de sus intereses legítimos, aquello sea
atendido por los órganos jurisdiccionales mediante un proceso
adecuado donde se respeten las garantías mínimas de los
litigantes, esto es, de ambas partes en el proceso. Ello es así, toda
vez que no sólo se busca la defensa de los intereses de la
parte accionante sino también los del sujeto requerido,
estando sus derechos también abarcados en la tutela
jurisdiccional efectiva. Tal derecho se trata, por tanto, de un
derecho continente, esto es que abarca una serie de otros derechos
expresamente señalados o implícitamente deducidos de aquel. En
la doctrina, se ha señalado que este derecho abarca principalmente
tres etapas: El acceso a los órganos jurisdiccionales, el
cumplimiento de las normas y derechos que regula el debido
proceso, y el de la ejecución de la resolución obtenida. En ese
sentido, estableció la Sala Suprema que uno de los derechos que
abarca la tutela jurisdiccional efectiva es el derecho al acceso a la
justicia, el cual se encuentra implícitamente contenido en aquel, y
comprende el derecho de la persona de promover la acción
jurisdiccional de los órganos estatales correspondientes, a través
de los mecanismos que la Ley le franquea para solicitar que se
resuelva una situación jurídica ó conflicto de derechos en un
proceso judicial conforme a derecho. Asimismo, se precisó que
este derecho se concretiza a través del ejercicio de otro derecho
también de relevancia constitucional como parte integrante del
derecho a la tutela procesal efectiva, refiriéndose al derecho de
acción definido como “(…) el poder jurídico que tiene todo sujeto de
derecho, de acudir a los órganos jurisdiccionales para reclamarles
la satisfacción de una pretensión”3. Cuarto: Sobre la motivación de
las sentencias, el Tribunal Constitucional4 ha establecido: “debe
tenerse presente que en todo Estado constitucional y democrático
de derecho, la motivación debida de las decisiones de las entidades
públicas -sean o no de carácter jurisdiccional- es un derecho
fundamental que forma parte del contenido esencial del derecho a
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CASACIÓN
la tutela procesal efectiva. El derecho a la motivación debida
constituye una garantía fundamental en los supuestos en que con
la decisión emitida se afecta de manera negativa la esfera o
situación jurídica de las personas. Así, toda decisión que carezca
de una motivación adecuada, suficiente y congruente constituirá
una decisión arbitraria y, en consecuencia, será inconstitucional”.
Quinto: Mediante el presente proceso la parte demandante
pretende se les restituya la posesión del predio rústico denominado
Silisu, con Código Catastral número 30520, ubicado en el Sector,
Distrito de San José de Sisa, Provincia El Dorado, Departamento
de San Martín; mas el pago de costas y costos. Como sustento de
la demanda se sostiene que la parte demandante es propietario de
dicho bien, conforme a la escritura pública de fecha quince de
diciembre del dos mil ocho, debidamente registrada. Precisa que
cuando se apersonó a su propiedad para hacer la debida posesión
del inmueble, se dio con la sorpresa que dentro de ella se
encontraba habitando el demandado Ruller Rodríguez Isuiza,
restringiéndole el acceso, a pesar que no cuenta con documentos
que acrediten su posesión. Añade que el demandado se niega a
desocupar el inmueble, quien además ha venido sembrando y
criando ganado vacuno, causando graves deterioros sobre la
propiedad, actuando de mala fe. Sexto: Por sentencia de primera
instancia de fecha treinta de setiembre de dos mil once, obrante a
fojas trescientos diecinueve se declaró fundada la demanda.
Sostiene el Juez de la causa, que la parte demandante ha
acreditado ser propietario del inmueble con la escritura pública de
compraventa, debidamente registrada por la que el propietario
inicial Adolfo Martín Alarcón Nuñez adquiere la propiedad de Julio
Abel Reátegui Valles y Eleana Rucoba Gómez, y posteriormente
dicho propietario inicial transfiere la propiedad a favor de ALARCON
& CIA E. I. R. L., aun cuando la parte demandada alega posesión
por más de diez años, no ha acreditado dicha posesión. Sétimo:
En segunda instancia, la Sala de mérito ha confirmado la sentencia
apelada que declaró fundada la demanda, y además la integra
disponiendo la adjudicación de la vivienda rústica, los galpones y
árboles frutales a los demandantes; y que la institución educativa
demandada retire la cosecha de maíz y el ganado vacuno en el
mismo plazo señalado para la restitución del predio rústico. Señala
el Colegiado Superior en esencia, que la sentencia que declara
propietario al poseedor por prescripción adquisitiva de dominio, no
es declarativa, sino constitutiva de derechos, por lo que, al no
haberse aportado en el proceso sentencia judicial firme dictada por
autoridad competente que declare a la demandada Institución
Educativa Agropecuaria “Valle de Sisa” propietaria por prescripción
adquisitiva de dominio respecto del predio rústico sub litis, no
puede la parte demandada arrogarse la titularidad de tal situación
jurídica. Por otro lado, añade que en aplicación del principio de
economía procesal, la vivienda rústica, los galpones, y los árboles
frutales referidos deben adjudicarse a los demandantes en
sustitución de los frutos que ha percibido la parte demandada
durante el tiempo que ha explotado el bien. Octavo: Esta Sala
Suprema advierte de la sentencia impugnada que efectivamente al
expedirse se han vulnerado los derechos fundamentales a un
debido proceso y tutela jurisdiccional efectiva, por cuanto se han
transgredido los derechos procesales – constitucionales a la
motivación de las sentencias y a la defensa, por las siguientes
infracciones incurridas. En primer término, se advierte que la Sala
de mérito ha resuelto más allá de lo pretendido por la parte
demandante, toda vez que, como se ha precisado, a través de la
presente causa el actor solo ha peticionado la restitución de la
posesión del predio rústico denominado Silisu, con Código
Catastral número 30520 ubicado en el Sector, Distrito de San José
de Sisa, Provincia El Dorado, Departamento de San Martín; mas el
pago de costas y costos; no obstante, el Colegiado Superior, sin
que haya sido demandado, ha ordenado la adjudicación a la parte
demandante de la edificación (casa, galpones, árboles frutales),
bajo el argumento de que le correspondería tal adjudicación, en
compensación por los frutos recibidos por la demandada,
vulnerándose el derecho a un debido proceso, específicamente el
derecho a la defensa, ya que en atención a lo dispuesto por el
artículo VII del Título Preliminar del Código Procesal Civil, los
Jueces no pueden emitir pronunciamiento sobre un petitorio no
demandado expresamente en el escrito postulatorio del proceso.
Noveno: Se advierte de la motivación de la sentencia de vista, que
la Sala de mérito ha precisado que la sentencia que declara
propietario al poseedor por prescripción adquisitiva de dominio no
es declarativa, sino constitutiva de derechos, por lo que, al no
haberse aportado en el proceso sentencia judicial firme dictada por
autoridad competente que declare a la demandada Institución
Educativa Agropecuaria “Valle de Sisa” propietaria por prescripción
adquisitiva de dominio respecto del predio rústico sub litis, no
puede la demandada arrogarse la titularidad de tal situación
jurídica. Al respecto, debe tener en cuenta la Sala de mérito con
relación al tema de prescripción adquisitiva de dominio, que la
posesión cumple una función de legitimación, en virtud de la cual
una persona es titular de un derecho sobre el bien, y pueda ejercitar
en el tráfico jurídico las facultades derivadas de aquél, así como
que los terceros pueden confiar en dicha apariencia. Otro de los
efectos de la posesión es la posibilidad de su transformación en
dominio o en el derecho real de que es manifiestamente exterior
mediante la usucapión. Décimo: Con relación a la usucapión, en el
Segundo Pleno Casatorio Civil de la Corte Suprema5 se precisó
que la usucapión es la realidad misma de la propiedad,
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constituyéndose en una consecuencia necesaria de la protección
dispensada a la posesión. En ese sentido, se señaló que cuando
la propiedad coincide con el abandono y, en cambio, la
posesión coincide con el tiempo, triunfa esta última;
representando la usucapión la superposición del hecho sobre
el derecho. Luego se sostiene: “(…) En suma, la usucapión viene
a ser el instituto por el cual el poseedor adquiere el derecho real
que corresponde a su relación con la cosa (propiedad, usufructo),
por la continuación de la posesión durante todo el tiempo fijado por
ley. Sirve además, a la seguridad jurídica del derecho y sin ella
nadie estaría cubierto de pretensiones sin fundamento o extinguidas
de antiguo, lo que exige que se ponga un límite a las pretensiones
jurídicas envejecidas. Nuestro ordenamiento civil señala que la
adquisición de la propiedad por prescripción de un inmueble
se logra mediante la posesión continua, pacífica y pública
como propietario durante diez años (denominada usucapión
extraordinaria), en tanto que, si media justo título y buena fe
dicho lapso de tiempo se reduce a cinco años (denominada
usucapión ordinaria).” Undécimo: Conforme al artículo 950 del
Código Civil cabe señalar en primer lugar, que conforme a dicha
norma, la propiedad inmueble se adquiere por prescripción
mediante la posesión continua, pacífica y pública como propietario
durante diez años. Se adquiere a los cinco años cuando median
justo título y buena fe. Conforme al Segundo Pleno Casatorio Civil6,
se tratan de requisitos o elementos copulativos; a) Continuidad en
la posesión: entiéndase la continuidad de la posesión como
aquella que se ejerce sin intermitencias, sin solución de continuidad,
lo cual no implica permanencia, puesto que se pueden dar actos de
interrupción como los previstos por los artículos 904 y 953 del
Código Civil, que vienen a constituir hechos excepcionales, por
tanto, la posesión será continua cuando su ejercicio sea a través de
actos posesorios realizados en la cosa, sin contradictorio alguno,
durante todo el tiempo establecido por ley; b) La posesión
pacífica: se dará cuando el poder de hecho sobre la cosa no se
mantenga por la fuerza; por lo que, aún obtenida violentamente,
pasa a haber posesión pacífica una vez que cesa la violencia que
instauró aquel estado; c) La posesión pública, esto implica que
sea conocida por todos, toda vez que el usucapiente es un
contradictor del propietario o poseedor anterior, por eso resulta
necesario que la posesión sea ejercida de manera que pueda ser
conocida por éstos, para que estos no puedan oponerse a aquella.
Si los propietarios y el anterior poseedor pudieron conocer
esa posesión durante todo el tiempo que duró, y no lo hicieron,
la ley presume en ellos el abandono y la posesión del
usucapiente se consolida; d) Como propietario, puesto que se
entiende que el poseedor debe actuar con animus domini sobre el
bien materia de usucapión. En ese entendido, para mayor precisión
el animus domini, como elemento subjetivo, equivale a la
intencionalidad de poseer como propietario. Si bien el fundamento
de la prescripción es la posesión, también es fundamento la
propiedad o la simple tenencia. Duodécimo: Sobre el requisito
referido a que la posesión sea pacífica, nos ilustra la Real Academia
Española, que el término “pacífico” o “pacífica” hace referencia a
algo “tranquilo, sosegado, que no provoca luchas o discordias”. Por
tanto, se puede afirmar que la posesión pacífica debe ser entendida
como aquella que se ejerce sin perturbación ni cuestionamiento
alguno, es decir, en total armonía y con la tácita aprobación y
aceptación de los demás integrantes de la sociedad. Dicho de otro
modo, posesión pacífica es aquella que se obtiene sin violencia
alguna, esto es que no es adquirida por vías de hecho,
acompañadas de violencias materiales o morales, o por amenazas
de fuerza, y continúa en esa forma mientras no sea perturbada, en
los hechos y en el derecho. En consecuencia, conforme a los
requisitos descritos, el poseedor debe poseer como dueño,
esto es comportarse como propietario de la cosa, bien porque
lo es, bien porque tiene la intención de serlo. En sentido
amplio, poseedor en concepto de dueño es el que se comporta
con la cosa como titular de un derecho susceptible de
posesión. En ese sentido, los demás consideran al poseedor
como dueño del bien. Décimo Tercero: Finalmente, este
Supremo Tribunal considera relevante precisar que la usucapión
opera de pleno derecho, esto es que el derecho de propiedad
respecto del inmueble poseído se adquiere por la posesión
continua, pública y pacífica por el plazo previsto por ley, una
vez cumplido dicho plazo, el derecho ya fue adquirido, siendo
la sentencia a obtenerse dentro de un proceso sobre
prescripción adquisitiva de dominio meramente declarativa y
no constitutiva. En efecto, conforme a una interpretación integral
de los artículos 950, 952 y 953 del Código Civil, la propiedad sobre
el inmueble se adquiere por prescripción mediante la posesión
continua, pacífica y pública como propietario durante diez años; y
se adquiere a los cinco años cuando median justo título y buena fe.
En ese entendido, quien adquiere un bien por prescripción puede
entablar juicio para que se le declare propietario, de esta manera el
efecto erga omnes solo derivará de la usucapión reconocida por
sentencia judicial e inscrita en los Registros Públicos conforme a la
parte final del citado artículo 952 del Código Civil. Décimo Cuarto:
Una interpretación correcta del artículo 950 del Código Civil implica
tener claro que la posesión es eminentemente un poder de hecho
de acuerdo al artículo 896 del Código Civil, antes que de derecho,
por la vinculación material sobre la cosa. Lo determinante es que
la posesión se desarrolle en forma continua, pacífica y pública
por el período considerado en el referido artículo 950 del
74012
CASACIÓN
Código Civil, produciéndose un conjunto de efectos dentro de
la sociedad los cuales informan que el titular de dicha posesión
ya no es un simple poseedor sino que ejerce atribuciones
sobre el bien propias de un propietario que persuaden a su
entorno del mismo y exige un reconocimiento como tal.
Décimo Quinto: Este Supremo Tribunal considera relevante que la
Sala Superior al momento de resolver tenga en consideración los
fundamentos expuestos en las consideraciones que anteceden,
exigiéndose al Colegiado de mérito realice una análisis conjunto y
razonado de las pruebas aportadas por las partes de este proceso,
conforme al ordenamiento jurídico vigente. Las omisiones
advertidas por este Supremo Tribunal confirma la grave vulneración
al derecho fundamental a un debido proceso de la impugnante,
habiéndose incurrido en infracción normativa del artículo 139
numerales 3 y 5 de la Constitución Política del Estado, artículo 12
de la Ley Orgánica del Poder Judicial y artículo 122 inciso 4 del
Código Procesal Civil. En consecuencia, deviene en fundado el
recurso de casación, en consecuencia nula la sentencia de vista, y
ordenaron a la Sala Superior expida nueva sentencia. IV.DECISION: Por estos fundamentos, declararon: FUNDADO el
recurso de casación interpuesto por la Institución Educativa
Agropecuaria Valle del SISA, obrante a fojas quinientos ochenta y
nueve; en consecuencia NULA la sentencia de vista de fecha
dieciocho de julio de dos mil doce, obrante a fojas quinientos
setenta y dos; y ORDENARON a la Sala de mérito EXPIDA NUEVA
SENTENCIA de acuerdo las consideraciones precedentes; y
DISPUSIERON la publicación de la presente resolución en el
Diario Oficial El Peruano conforme a ley; en los seguidos por la
Empresa Alarcón & CIA Empresa Individual de Responsabilidad
Limitada contra la Institución Educativa Agropecuaria Valle del
SISA y otros sobre reivindicación; y los devolvieron. Juez Supremo
Ponente Vinatea Medina. SS. SIVINA HURTADO, WALDE
JÁUREGUI, ACEVEDO MENA, VINATEA MEDINA, RUEDA
FERNÁNDEZ
1
2
3
4
5
6
Comisión Andina de Juristas. Luis Huerta con la colaboración de Enrique Aguilar,
“El debido proceso en las decisiones de la Corte Interamericana de Derechos
Humanos (análisis del artículo 8 de la Convención Americana sobre Derechos
Humanos), en www.cajpe.org.pe.
CASACIÓN N° 405-2010, LIMA-NORTE, considerando octavo, de fecha quince
de marzo de dos mil once. En esta oportunidad la Sala de Derecho Constitucional
y Social Permanente declaró infundado el recurso de casación interpuesto por
la Asociación de Propietarios de la Urbanización Sol de Lima; en los seguidos
contra la Municipalidad Distrital de San Martín de Porres y otro; sobre proceso
contencioso administrativo. (negrita y subrayado nuestro).
Couture Eduardo J (1985) Fundamentos del Derecho Procesal Civil. Buenos Aires,
Depalma, p57.
STC. N° 01807-2011-PA/TC, del veintisiete de junio de dos mil once, fundamento
10.
Segundo Pleno Casatorio Civil de la Corte Suprema de Justicia de la República.
Casación Nº 2229-2008-Lambayeque, expedida a los veintitrés días del mes de
octubre de dos mil ocho.
Idem.
C-1335410-2
CAS. Nº 944- 2012 LAMBAYEQUE
Lima, dieciocho de marzo de dos mil catorce. LA SALA DE
DERECHO CONSTITUCIONAL Y SOCIAL PERMANENTE DE
LA CORTE SUPREMA DE JUSTICIA DE LA REPÚBLICA:
VISTA: la causa, en audiencia pública llevada a cabo en la
fecha, integrada con los Señores Jueces Supremos: Sivina
Hurtado - Presidente, Walde Jáuregui, Acevedo Mena, Vinatea
Medina y Rueda Fernández; y luego de verificada la votación
con arreglo a ley, se emite la siguiente sentencia: I.- MATERIA
DEL RECURSO: Se trata del recurso de casación obrante a
fojas cuatrocientos cincuenta y uno interpuesto por doña Lilia La
Torre Campos, de fecha veintiocho de setiembre de dos mil
once, contra la sentencia de vista de fojas cuatrocientos treinta
y cuatro, de fecha seis de setiembre de dos mil once. II.FUNDAMENTOS POR LOS CUALES SE HA DECLARADO
PROCEDENTE EL RECURSO: Mediante resolución de fecha
veintidós de octubre de dos mil doce, corriente a fojas setenta y
cuatro del cuaderno de casación se ha declarado procedente el
recurso de casación interpuesto por doña Lilia La Torre Campos
por la denuncia casatoria de Infracción normativa de los
artículos 911 y 912 del Código Civil, habiendo precisado la
recurrente que ha acreditado ser la legítima propietaria del
inmueble materia de controversia tanto del terreno como de la
construcción y el hecho de que el demandado haya construido
de material rústico una parte del mismo para aparentar la
posesión sin acreditar tener derecho alguno de propiedad sobre
el terreno ni la construcción resulta incoherente que se
desestime la demanda. Añade que el demandado no ha
acreditado con medio de prueba alguna ser propietario del
terreno de las supuestas construcciones; y por la denuncia de
infracción normativa de los artículos 197, 235 y 546 inciso 4
del Código Procesal Civil, sosteniendo la impugnante que en
la sentencia no se ha merituado que el dictamen pericial actuado
en autos ha señalado que en el inmueble materia de litigio se
encuentra cercado parcialmente con adobe y las construcciones
que existen destinadas a vivienda las ha realizado la recurrente,
y que el demandado ha reconocido en forma expresa los
El Peruano
Lunes 1 de febrero de 2016
derechos de propiedad de la impugnante; además alega que la
sentencia de vista sin ninguna motivación congruente ni
justificada confirma la sentencia apelada a pesar que el
demandado no acredita en modo alguno derecho de propiedad
sobre el inmueble inscrito a su nombre, pretendiendo la Sala de
mérito subjetivamente establecer si efectivamente el demandado
ha realizado construcciones en el inmueble y si por tal hecho la
demanda de desalojo resulta inviable, lo que no ha sido materia
de los puntos controvertidos de la demanda, ni absolución de la
misma. III.- CONSIDERANDO: Primero: Dados los efectos
nulificantes de la denuncia de infracción normativa de los
artículos 197, 235 y 546 inciso 4 del Código Procesal Civil, al
haberse alegado que se ha vulnerado los derechos
constitucionales - procesales a la motivación de las resoluciones
jurisdiccionales y valoración de pruebas, lo cual tiene incidencia
en los derechos fundamentales a un debido proceso, tutela
jurisdiccional efectiva, y a la prueba, en caso de configurarse,
corresponde empezar el análisis de fondo del recurso, a partir
de dichas causales; y de ser el caso, de no ampararse, analizar
la causal in iudicando igualmente denunciada. Segundo: En
primer término, corresponde examinar la causal de infracción
normativa procesal, desde el marco jurídico de las garantías de
los derechos fundamentales a un debido proceso y tutela
jurisdiccional efectiva, a fin de que en sede casatoria se ejercite
adecuadamente la finalidad esencial del recurso de casación, y
se resguarde la tutela de los derechos procesales con valor
constitucional, con la clara observancia de las normas
sustantivas y procesales que garantiza al justiciable el derecho
de obtener de los órganos jurisdiccionales una respuesta
razonada y fundamentada, respetando los principios de jerarquía
de las normas, el de congruencia procesal, la valoración de los
medios probatorios; constituyendo un deber del Juez emitir
fallos de acuerdo a lo establecido en el inciso 5 del artículo 139
de la Constitución Política del Estado, en el inciso 4 del artículo
122, así como el artículo 50 inciso 6 del Código Procesal Civil,
en resguardo de los derechos fundamentales citados en todas
sus acepciones. Tercero: En cuanto al derecho fundamental a
un debido proceso, no sólo es un principio de quienes ejercen la
función jurisdiccional y que está contemplado como tal en el
inciso 3 del artículo 139 de la Constitución Política del Estado,
sino que también es concebido como aquel derecho fundamental
que posee toda persona peruana o extranjera, natural o jurídicay que, en tal medida, es exigible por éstas (dimensión subjetiva);
a su vez, es un derecho que debe ser respetado por todos,
debido a que lleva implícito los fines sociales y colectivos de
justicia (dimensión objetiva)1. En ese sentido, existe
contravención de las normas que garantizan el derecho a un
debido proceso cuando, en el desarrollo del mismo, el órgano
jurisdiccional no ha respetado los derechos procesales de las
partes; se han obviado o alterado actos de procedimiento; la
tutela jurisdiccional no ha sido efectiva y/o el órgano jurisdiccional
deja de motivar sus resoluciones, en clara transgresión de la
normatividad vigente y de los principios procesales. Cuarto:
Ahora bien, conforme a la jurisprudencia sentada por esta Sala
de Derecho Constitucional y Social Permanente2: “El derecho a
la tutela jurisdiccional efectiva se encuentra reconocido en el
artículo 139, inciso 3, de la Carta Magna, y en el artículo I del
Título Preliminar del Código Procesal Civil, el cual encuentra
dentro de su contenido constitucional protegido que, cuando una
persona requiera la protección de su derecho o de sus intereses
legítimos, aquello sea atendido por los órganos jurisdiccionales
mediante un proceso adecuado donde se respeten las garantías
mínimas de los litigantes, esto es, de ambas partes en el
proceso. Ello es así, toda vez que no sólo se busca la
defensa de los intereses de la parte accionante sino también
los del sujeto requerido, estando sus derechos también
abarcados en la tutela jurisdiccional efectiva. Tal derecho se
trata, por tanto, de un derecho continente, esto es que abarca
una serie de otros derechos expresamente señalados o
implícitamente deducidos de aquel. En la doctrina, se ha
señalado que este derecho abarca principalmente tres etapas:
El acceso a los órganos jurisdiccionales, el cumplimiento de las
normas y derechos que regula el debido proceso, y el de la
ejecución de la resolución obtenida. En ese sentido, estableció
la Sala Suprema que uno de los derechos que abarca la tutela
jurisdiccional efectiva es el derecho al acceso a la justicia, el
cual se encuentra implícitamente contenido en aquel, y
comprende el derecho de la persona de promover la acción
jurisdiccional de los órganos estatales correspondientes, a
través de los mecanismos que la Ley le franquea para solicitar
que se resuelva una situación jurídica ó conflicto de derechos en
un proceso judicial conforme a derecho. Asimismo, se precisó
que este derecho se concretiza a través del ejercicio de otro
derecho también de relevancia constitucional como parte
integrante del derecho a la tutela procesal efectiva, refiriéndose
al derecho de acción definido como “(…) el poder jurídico que
tiene todo sujeto de derecho, de acudir a los órganos
jurisdiccionales para reclamarles la satisfacción de una
pretensión”3. Quinto: Sobre la motivación de las sentencias, el
Tribunal Constitucional4 ha establecido: “debe tenerse presente
que en todo Estado constitucional y democrático de derecho, la
motivación debida de las decisiones de las entidades públicas
-sean o no de carácter jurisdiccional- es un derecho fundamental
El Peruano
Lunes 1 de febrero de 2016
CASACIÓN
que forma parte del contenido esencial del derecho a la tutela
procesal efectiva. El derecho a la motivación debida constituye
una garantía fundamental en los supuestos en que con la
decisión emitida se afecta de manera negativa la esfera o
situación jurídica de las personas. Así, toda decisión que
carezca de una motivación adecuada, suficiente y congruente
constituirá una decisión arbitraria y, en consecuencia, será
inconstitucional”. Sexto: Finalmente, el derecho fundamental a
probar tiene por finalidad producir en el Juez el convencimiento
sobre la existencia o inexistencia de los hechos afirmados por
los sujetos procesales, lo que ha sido ratificado por el Tribunal
Constitucional5, cuando señala que: “Existe un derecho
constitucional a probar, aunque no autónomo, que se encuentra
orientado por los fines propios de la observancia o tutela del
derecho al debido proceso. Constituye un derecho básico de los
justiciables de producir la prueba relacionada con los hechos
que configuran su pretensión o su defensa. Según este derecho,
las partes o un tercero legitimado en un proceso o procedimiento,
tienen el derecho a producir la prueba necesaria con la finalidad
de acreditar los hechos que configuran su pretensión o defensa.
Así, por ejemplo, el artículo 188 del Código Procesal Civil
establece que los medios probatorios tienen por finalidad
acreditar los hechos expuestos por las partes, producir certeza
en el Juez respecto de los puntos controvertidos y fundamentar
sus decisiones. Se trata de un derecho complejo que está
compuesto por el derecho a ofrecer medios probatorios que se
consideren necesarios, a que estos sean admitidos,
adecuadamente actuados, que se asegure la producción o
conservación de la prueba a partir de la actuación anticipada de
los medios probatorios y que estos sean valorados de manera
adecuada y con la motivación debida, con el fin de darle el
mérito probatorio que tenga en la sentencia. La valoración de la
prueba debe estar debidamente motivada por escrito, con la
finalidad de que el justiciable pueda comprobar si dicho mérito
ha sido efectiva y adecuadamente realizado”. Sétimo: Mediante
el presente proceso la demandante solicita que el demandado le
restituya los Lotes 2 y parte del Lote 3 ubicado en el Kilómetro 6
de la Carretera Chiclayo-Pimentel. Como sustento de la
demanda, precisa la actora que el veintiséis de agosto de dos
mil tres conjuntamente con su cónyuge Máximo Guevara Alarcón
adquirió la propiedad del terreno denominado “Los Arenales”
con un área total de mil ochocientos metros cuadrados (1,800
m2) inscrito en la Ficha N° 27587 del registro de propiedad de
Chiclayo. En setiembre de dos mil seis procedió a realizar la sub
división del predio, elaborándose la correspondiente memoria
descriptiva quedando sub dividido en tres lotes, el Lote 1 con un
área de setecientos ochenta punto treinta y siete metros
cuadrados (780.37 m2), el Lote 2 con un área de ciento
veinticuatro punto sesenta y tres metros cuadrados (124.63 m2)
y el Lote 3 con un área de ochocientos noventa y cinco metros
cuadrados (895 m2). Cuando se constituyeron a tomar posesión
de los lotes sub divididos se dieron con la sorpresa que se
encontraban en posesión de terceras personas a quienes los
requirieron para que desocuparan en forma pacífica acto que se
materializó en el mes de agosto de dos mil seis. No obstante lo
anotado uno de los posesionarios se negó a desocupar un área
que representa la totalidad del Lote 2 y parte del Lote 3
justificando que en dicho terreno funciona su iglesia. Octavo:
Por escrito de fecha doce de febrero de dos mil ocho, de fojas
noventa y cuatro, don Pedro Claver Larios Perleche, contesta la
demanda sosteniendo que el recurrente no es precario pues
viene ocupando desde hace más de veinte años doscientos
ochenta y ocho metros cuadrados (288 m2) un lote de terreno de
mayor extensión, esto es, desde mil novecientos ochenta y
siete, habiéndose transferido la posesión mediante contrato de
traslado de posesión de fecha veintitrés de junio de mil
novecientos ochenta y siete. Añade que, la Escritura Pública que
ostentan los actores trata de un terreno con un área de mil
ochocientos metros cuadrados (1, 800 m2) cuyos linderos y
demás características obran en la Ficha N° 227584 contrario a lo
manifestado en la demanda que indica haber inscrito en la Ficha
N° 27587 donde figura la anotación de la compraventa mas no
existe los linderos ni ninguna característica del inmueble, por
tanto no existe coherencia respecto del inmueble señalado en la
demanda con los linderos que aparentemente figuran en la
Ficha N° 227584 del testimonio de Escritura Pública que
acompaña. Finalmente refiere que la edificación donde funciona
la Iglesia tienen más de diez años y no se trata de una edificación
precaria de quincha y caña son de material noble. Noveno: En
sede de instancia, el Juez de la causa ha declarado improcedente
la demanda, sosteniendo que en la Escritura Pública de
compraventa del inmueble del veintiséis de agosto de dos mil
seis, dentro de la cual se encuentra el área materia de litigio, se
indica que el inmueble adquirido por la demandante y su esposo
se encuentra inscrita en la Ficha N° 227584 del Registro de
Propiedad Inmueble, lo que es evidentemente un error material,
puesto que tal acto jurídico se inscribió en el asiento c) 2 de la
Ficha N° 27587, según consta del documental de folios noventa,
lo que se ratifica con la esquela de observaciones del Registro
Público otorgada al demandado de folios ciento veintiuno en la
que se deja constancia que la Ficha N° 227584 no existe. Para
determinar si el predio materia de demanda se encuentra
ubicado dentro del área de propiedad de la demandante el
74013
juzgado dispuso la actuación de una prueba pericial la que corre
a folios ciento sesenta y siete que concluye que efectivamente el
área ocupada por el demandado tiene doscientos ochenta y
ocho metros cuadrados (288 m2) y está ubicado dentro del área
superficie de los sub lotes 2 y 3 de propiedad de la demandante
e inclusive también sobre una parte del sub lote 1, lo que no deja
dudas respecto de que el inmueble cuyo desalojo se demanda
se encuentra dentro del área de propiedad de la demandante.
Asimismo del Informe pericial se verifica que el área de litigio
está dentro del área del lote de propiedad de la demandante lo
que se comprueba de una simple superposición. No obstante lo
expuesto está acreditado que sobre el terreno ocupado por el
demandado este ha construido una vivienda de material noble,
según constan de las fotografía de folios setenta y ocho a
ochenta y uno, lo que no ha sido desvirtuado por la demandante
quién tampoco ha demandado la accesión de la edificación
cuestión que resulta transcendente para amparar la demanda.
Concluye, que no se puede demandar el desalojo ni la
reivindicación si es que no se pretende la unificación de ambos
elementos en la misma persona del propietario del suelo lo que
determina la improcedencia de la demanda por falta de
legitimidad para obrar del demandante respecto de la propiedad
de la edificación. Décimo: Por sentencia de vista de fecha seis
de setiembre de dos mil once, de fojas cuatrocientos treinta y
cuatro se confirma la sentencia apelada que declara
improcedente la demanda, determinando la Sala de mérito que
existen construcciones en el inmueble las mismas que han sido
realizadas por los demandados, por lo que a fin de establecer a
quien le corresponde la propiedad de las mismas, la demandante
tendría que acudir a la vía pertinente a fin de que en base a los
artículos 841 y siguientes del Código Civil se establezcan si se
trata de construcciones en terreno ajeno de buena o mala fe, y
cuál debe ser el destino de las mismas lo que no es posible
determinar en este proceso sumarísimo. Añade que, si bien se
ha cumplido con identificar el inmueble materia de litigio a pesar
del error advertido respecto a la ficha en que se encuentra
inscrito, sin embargo la demandante no ha acreditado ser
propietaria de las construcciones levantadas. Undécimo: Este
Supremo Tribunal advierte que para la decisión arribada en sede
de instancia, se han vulnerado los derechos fundamentales a un
debido proceso, tutela jurisdiccional efectiva, y a la prueba por
cuanto se ha transgredido el derecho procesal – constitucional a
la motivación de las sentencias. Como ya ha precisado este
Supremo Tribunal, el derecho real a la posesión es uno de los
más complejos y sugestivos, por cuanto es uno amplio que
permite intervenir en el debate a cuestiones de relevancia
jurídica relacionadas con el derecho fundamental a la propiedad,
la resolución de los contratos, el proceso de prescripción
adquisitiva de dominio, entre otros de igual complejidad e interés
para la Comunidad Jurídica. En efecto, la posesión es un
derecho real a través del cual se han planteado a nivel registral,
administrativo, contencioso, arbitral, judicial, entre otros,
diversas controversias que han permitido nutrir a la jurisprudencia
y doctrina de nuestro país, así lo demuestran los innumerables
fallos obtenidos los últimos años por las diversas instituciones
de la Administración Pública, las Cortes Superiores del Perú y
por este Supremo Tribunal. Duodécimo: Conforme a lo previsto
en el Código sustantivo la posesión vendría a ser el ejercicio de
uno o más poderes inherentes a la propiedad, siendo el disfrute
y uso los poderes que configuran la posesión de hecho que
prescinde de título alguno para su legitimidad, he ahí su
complejidad y trascendencia en el mundo jurídico, por cuanto se
constituye en un derecho real cuyo contenido se encuentra
nutrido de otros derechos reales. Concretamente, conforme a lo
previsto en el Código Civil, la posesión implica un ejercicio de
hecho, cuya eficacia prescinde de título, contrato u otro acto
jurídico. Efectivamente, al ser la posesión un ejercicio de hecho,
no es necesario demostrarla a través de un título que le atribuya
legitimidad al que posee, basta que en los hechos se posea el
bien, ahí radica la complejidad e importancia trascendente de la
posesión, pues su constitución da paso a la configuración de
diversas situaciones jurídicas, dentro de las cuales se erige el
desalojo por ocupación precaria. Décimo Tercero: El Legislador
ante la preeminencia de garantizar seguridad jurídica y orden
público consideró acertadamente determinar en el Código Civil
peruano los tipos de posesión, así como las distintas instituciones
jurídicas que permitan al poseedor encontrarse sujeto al bien
hasta que los órganos jurisdiccionales decidan; encontrándonos
de esta manera frente a los interdictos o las acciones posesorias
cuyo fin es mantener el estado posesorio. En nuestro sistema
jurídico, el poseedor podrá ser todo aquel que reconozca a otra
persona como titular del bien, tales como arrendatarios,
usufructuarios, comodatarios, etcétera; también podrá serlo
quien no reconozca la titularidad de otra persona, conforme a
los supuestos del artículo 911 del Código Civil. Este clasifica a la
posesión en mediata o inmediata; legítima o ilegítima, y a su vez
la posesión ilegítima se sub clasifica de buena o mala fe, y la
posesión precaria. Décimo Cuarto: Respecto a la posesión
precaria en el Código Civil, el artículo 911 establece que “La
posesión precaria es la que se ejerce sin título alguno o
cuando el que se tenía ha fenecido”; la posesión precaria es
aquella posesión de hecho que se ejerce sin título alguno o
cuando el que se tenía ha fenecido, caracterizándose por tanto
74014
CASACIÓN
por la ausencia de un título que justifique el uso o disfrute del
bien. En ese sentido, y para mayor comprensión de la figura de
posesión precaria, tenga la comunidad jurídica presente que nos
encontramos frente a una posesión netamente ilegítima de mala
fe, que pudo haber sido en un comienzo una posesión ilegítima
de buena fe (el poseedor tuvo un título nulo), pero ante el
requerimiento de restitución de la posesión, el poseedor se negó
a hacerlo. Décimo Quinto: En ese orden de exposición, la
posesión precaria se distingue frente a las otras por su
ilegitimidad, por ir en contra del orden público, los principios y
las buenas costumbres en perjuicio del titular del derecho y la
Sociedad misma; por cuanto se está frente a una posesión sin
título; o se tiene un título nulo o insuficiente, o ha sido adquirido
del que no tenía derecho a poseer o transmitir el bien. En
consecuencia, considera importante precisar que el poseedor
precario conforme a los artículos 909 y 910 del Código Civil
queda sujeto a las responsabilidades del poseedor ilegítimo de
mala fe previstas en el mismo, debiendo asumir por cuenta y
costo propio la pérdida o detrimento del bien, aun por caso
fortuito o fuerza mayor; restituir los frutos percibidos y, si no
existiesen, a pagar su valor estimado al tiempo que los percibió
o debió percibir. Décimo Sexto: En cuanto al proceso de
desalojo, el artículo 585 del Código Procesal Civil vigente prevé:
“La restitución de un predio se tramita con arreglo a lo
dispuesto para el proceso sumarísimo y las precisiones
indicadas en este Subcapítulo (…)”. Efectivamente en el
proceso de desalojo solo puede pretenderse la restitución del
bien, quedando fuera el debate sobre aspectos referidos a la
propiedad o que revistan mayor complejidad que la restitución
referida. La valoración fáctica y probatoria por los Jueces
debe limitarse a determinar si el emplazado en el proceso de
desalojo por ocupación precaria cuenta con el derecho a
disfrutar de la posesión del bien o usar tal bien. Décimo
Sétimo: Entrando al análisis del recurso casatorio, esta Sala
Suprema aprecia de la motivación de la Sentencia de vista, que
la Sala de mérito efectivamente ha vulnerado los derechos
fundamentales a un debido proceso y tutela jurisdiccional
efectiva por cuanto no ha tenido en cuenta los lineamientos
referidos en los considerandos de esta sentencia que anteceden
a fin de motivar en forma coherente, razonada y lógica la
sentencia expedida en segunda instancia. Más aún los
lineamientos precisados y desarrollados en el Cuarto Pleno
Casatorio, llevado a cabo por la Sala Civil Transitoria de la Corte
Suprema, Casación Nº 2195-2011-Ucayali, donde se ha
determinado que cuando el demandado afirme haber realizado
edificaciones o modificaciones sobre el predio materia de
desalojo —sea de buena o mala fe—, no justifica que se declare
la improcedencia de la demanda, bajo el sustento de que
previamente deben ser discutidos dichos derechos en otro
proceso. Por el contrario, lo único que debe verificarse es si el
demandante tiene derecho o no a disfrutar de la posesión que
Invoca, dejándose a salvo el derecho del demandado a reclamar
en otro proceso lo que considere pertinente. Décimo Octavo:
En efecto, la motivación de las resoluciones jurisdiccionales
constituye un principio, y a la vez se erige como un derecho
procesal – constitucional que emana de la función jurisdiccional,
por lo tanto, la motivación de las sentencias jurisdiccionales
debe ser el resultado de un razonamiento lógico y jurídico
sobre la base de los hechos determinados en sede de
instancia, los medios de prueba aportados por las partes y
la aplicación del derecho objetivo, lo que se advierte no ha
sido resguardado por la Sala Superior pues no se aprecia una
motivación coherente y razonada producto de una análisis
conjunto de los medios de prueba y los parámetros esenciales
contenidos en las normas sustantivas y lineamientos de los
Plenos emitidos por la Corte Suprema, evidenciándose la
vulneración de los derechos fundamentales invocados en el
recurso de su propósito; en consecuencia, deviene en fundado
el recurso de casación, careciendo de objeto emitirse
pronunciamiento por la causal material denunciada, por los
efectos nulificantes de la causal procesal fundada. IV.
DECISIÓN: Por tales consideraciones declararon: FUNDADO el
recurso de casación interpuesto por doña Lilia La Torre Campos
de fecha veintiocho de setiembre de dos mil once, obrante a
fojas cuatrocientos cincuenta y uno; en consecuencia NULA la
sentencia de vista de fecha seis de setiembre de dos mil once,
obrante a fojas cuatrocientos treinta y cuatro; ORDENARON a la
Sala de mérito EXPIDA NUEVA SENTENCIA en atención a los
lineamientos señalados en la presente resolución; y
DISPUSIERON se publique la presente resolución en el Diario
Oficial “El Peruano” conforme a ley; en los autos seguidos por
doña Lilia La Torre Campos contra Pedro Claver Larios Perleche,
sobre Desalojo por Ocupación Precaria; y los devolvieron. Vocal
Ponente: Vinatea Medina. S.S. SIVINA HURTADO, WALDE
JÁUREGUI, ACEVEDO MENA, VINATEA MEDINA, RUEDA
FERNÁNDEZ
1
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Comisión Andina de Juristas. Luis Huerta con la colaboración de Enrique Aguilar,
“El debido proceso en las decisiones de la Corte Interamericana de Derechos
Humanos (análisis del artículo 8 de la Convención Americana sobre Derechos
Humanos), en www.cajpe.org.pe.
CASACIÓN N° 405-2010, LIMA-NORTE, considerando octavo, de fecha quince
de marzo de dos mil once. En esta oportunidad la Sala de Derecho Constitucional
3
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El Peruano
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y Social Permanente declaró infundado el recurso de casación interpuesto por
la Asociación de Propietarios de la Urbanización Sol de Lima; en los seguidos
contra la Municipalidad Distrital de San Martín de Porres y otro; sobre proceso
contencioso administrativo. (negrita y subrayado nuestro).
Couture Eduardo J (1985) Fundamentos del Derecho Procesal Civil. Buenos Aires,
Depalma, p57.
STC. N° 01807-2011-PA/TC, del veintisiete de junio de dos mil once, fundamento
10.
STC N° 06712-2005-PH/TC del 17 de octubre de 2005. En esta oportunidad el
Tribunal Constitucional en sesión de Pleno Jurisdiccional, resolvió improcedente la
demanda de amparo de autos en el extremo que alega la violación del derecho a la
prueba; e, infundada la demanda de amparo de autos en el extremo que alega la
violación del derecho a la defensa; en los seguidos por doña Magaly Jesús Medina
Vela y por don Ney Guerrero Orellana contra los miembros de la Primera Sala
Penal Transitoria de la Corte Suprema, señores Robinson Gonzáles Campos, José
María Balcázar Zelada, Pastor Barrientos Peña, César Vega Vega y Hugo Príncipe
Trujillo, sobre proceso de amparo.
C-1335410-3
CAS. Nº 1056- 2012 DEL SANTA
Lima, veinticinco de marzo de dos mil catorce. LA SALA DE
DERECHO CONSTITUCIONAL Y SOCIAL PERMANENTE DE LA
CORTE SUPREMA DE JUSTICIA DE LA REPÚBLICA: VISTA la
causa en Audiencia Pública llevada a cabo en la fecha, integrada
por los Jueces Supremos Sivina Hurtado – Presidente, Walde
Jáuregui, Acevedo Mena, Vinatea Medina y Rueda Fernández; con
lo expuesto en el Dictamen Fiscal Supremo en lo Contencioso
Administrativo; producida la votación con arreglo a ley, se ha
emitido la siguiente sentencia: I.- MATERIA DEL RECURSO: Se
trata del recurso de casación interpuesto por doña Rosa Perpetua
Chen Bernabé de fecha diecinueve de enero de dos mil doce,
obrante a fojas cuatrocientos ochenta y dos, contra la sentencia de
vista de fecha trece de diciembre de dos mil once, obrante a fojas
cuatrocientos sesenta y seis, que resuelve revocar la sentencia de
fecha veinticinco de abril de dos mil once, obrante a fojas
trescientos treinta y cuatro que declaró fundada la demanda, y
reformándola, la declara improcedente. II.- FUNDAMENTOS DEL
RECURSO: Que, mediante Resolución Suprema de fecha
veintinueve de noviembre de dos mil doce, de fojas sesenta y dos
del cuadernillo de casación, se declaró PROCEDENTE el recurso
presentado por la causal de contravención del inciso 5 del
artículo 139° de la Constitución Política del Estado, del inciso
3 del artículo 122° y 171° del Código Procesal Civil,
argumentando que el fallo de la resolución recurrida resulta
totalmente incoherente ya que no obstante haber ordenado la
actuación oficiosa de los medios probatorios con la finalidad de
esclarecer los hechos, resuelve declarando improcedente la
demanda, pese a que ésta se sustenta en lo establecido por el
Decreto Supremo N° 007-2001-PCM que le otorga derechos sobre
el bien sub litis dada su condición de concubina supérstite; en ese
sentido, la Sala Superior procede a resolver sin mencionar cual es
la improcedencia en la que sustenta su decisión. III.CONSIDERANDO: PRIMERO: Mediante escrito de fojas ochenta y
ocho, doña Rosa Perpetua Chen Bernabé interpone demanda en la
vía del proceso contencioso administrativo a efectos de que se
ordene a la Empresa Regional de Servicio Público de Electricidad
Electro Norte Medio Sociedad Anónima –HIDRANDINA S.A. dar
estricto cumplimiento a la Ley N° 27249 y su Reglamento aprobado
por Decreto Supremo N° 007-2001-PCM , disponiendo que se le
adjudique en venta directa el inmueble ubicado en Calle Los Pinos
9A-8 Manzana P Lote 04 del Complejo Habitacional La Caleta de la
ciudad de Chimbote. Señala como sustento de su demanda que la
administración de HIDRANDINA Sociedad Anónima, hace más de
treinta años entregó a su difunto conviviente Cesar Esteban Nieves
Honismann (ex trabajador de la demandada) el inmueble sub litis
como condición de trabajo, predio que viene ocupando hasta la
actualidad. Posteriormente, con fecha treinta de diciembre de mil
novecientos noventa y nueve se publicó la Ley N° 27249 que
autorizó a todas las empresas de propiedad del Estado (entre ellas
HIDRANDINA Sociedad Anónima) la adjudicación de venta directa
de los inmuebles a sus trabajadores, ex trabajadores, cónyuges o
convivientes de éstos que ocupen los inmuebles. Es así que la
actora procede a aceptar la oferta de venta de Hidrandina Sociedad
Anónima, mediante carta de fecha dieciocho de julio del dos mil
dos; empero, hasta la fecha, la empresa demandada no cumplió
con elaborar la minuta de compra venta, incumpliendo así la Ley N°
27249 y su Reglamento. SEGUNDO: Mediante sentencia
(resolución número veinticinco) de fojas trescientos treinta y cuatro
se declaró fundada la demanda, ordenándose que la demandada
dé estricto cumplimiento a la Ley N° 27249 y su Reglamento
aprobado por Decreto Supremo N° 007-2001-PCM disponiendo
previa verificación de los requisitos de ley, la adjudicación en venta
directa del inmueble ubicado en la Calle Los Pinos 9A- 8 manzana
P lote 04 del Complejo Habitacional La Caleta de la ciudad de
Chimbote a favor de la demandante doña Rosa Perpetua Chen
Bernabé al considerar que en su calidad de conviviente supérstite,
cumplió con la presentación de los requisitos exigidos en el artículo
10° del Decreto Supremo N° 007-2001-PCM, razón por la cual, la
emplazada debía dar cumplimiento a lo ordenado en la Ley N°
27249 y su Reglamento, procediendo a adjudicar en venta directa;
sin embargo, ello no aconteció evidenciándose la vulneración
alegada por la accionante. TERCERO: Por su parte, la Segunda
El Peruano
Lunes 1 de febrero de 2016
CASACIÓN
Sala Civil de la Corte Superior de Justicia Del Santa mediante
sentencia de vista de fecha trece de diciembre de dos mil once,
obrante a fojas cuatrocientos sesenta y seis revoca la sentencia
apelada y reformándola declara improcedente la demanda al
considerar que si bien el artículo 5° del Decreto Supremo N° 0072001-PCM establece que tendrán derecho a ser beneficiarios en
caso de muerte del trabajador o ex trabajador, el o la cónyuge
sobreviviente, así como la conviviente sobreviviente sujeta a la
sociedad de bienes establecida en el artículo 326 del Código Civil,
también es cierto que la demandante no ha acreditado su condición
de conviviente con la declaración judicial de convivencia o unión de
hecho, según el artículo 326° del Código Civil, por lo que no le es
aplicable la preferencia de adjudicación establecida en la Ley N°
27249. CUARTO: Previamente al análisis del caso, es necesario
precisar que la motivación de las resoluciones judiciales constituye
un principio y derecho la función jurisdiccional, consagrado en el
inciso 5 del artículo 139 de la Constitución Política del Estado, la
misma que forma parte de la observancia del debido proceso
consagrado en el inciso 3 del antes citado artículo 139 de la
Constitución Política del Estado; el deber-derecho a la debida
motivación de las resoluciones judiciales ha sido desarrollado en el
artículo 12 de la Ley Orgánica del Poder Judicial, inciso 6 del
artículo 50 e inciso 3 del artículo 122 del Código Procesal Civil,
cuya contravención originará la nulidad de la resolución, conforme
lo disponen las dos últimas normas adjetivas señaladas. QUINTO:
La motivación es esencial en los fallos, ya que los justiciables
deben saber las razones por las que se ampara o desestima una
demanda, pues a través de su aplicación efectiva se llega a una
recta impartición de justicia, evitando con ello arbitrariedades y
permitiendo a las partes ejercer adecuadamente su derecho de
impugnación, planteando al superior jerárquico las razones
jurídicas que sean capaces de poner de manifiesto los errores que
puede haber cometido el juzgador. La verificación de una debida
motivación sólo es posible si de las consideraciones de la sentencia
se expresan las razones suficientes que sustentan la decisión, que
justifiquen el fallo, las que deben ser razonadas, objetivas, serias y
completas, en atención al petitorio formulado en la demanda, a los
hechos alegados por las partes y que estén debidamente probados.
SEXTO: Respecto a la contravención de las normas que
garantizan el derecho al debido proceso, del inciso 5 del
artículo 139° de la Constitución Política del Estado, del inciso
3 del artículo 122° y 171° del Código Procesal Civil, del análisis
de los hechos se advierte que el proceso se ha desarrollado
respetando los derechos procesales de las partes, los actos del
procedimiento y el órgano jurisdiccional ha motivado sus decisiones
coherentemente, y si bien la recurrente alega que corresponde
declarar nula la sentencia impugnada pues interpuso la presente
demanda en su condición de concubina supérstite, conforme a lo
establecido por el Decreto Supremo N° 007-2001-PCM, sin
embargo de la revisión de dicha resolución se tiene que el juzgador
ha declarado improcedente la demanda al establecer que si bien la
demandante adjuntó documentos que acreditan que el señor Cesar
Esteban Nieves Honismann laboró para Electroperú, que falleció el
quince de octubre de dos mil uno, y que tenía como residencia el
inmueble sub litis, sin embargo, la demandante no ha probado su
condición de conviviente con la declaración judicial de convivencia
o unión de hecho, requisito exigido por el artículo 5 del Decreto
Supremo N° 007-2001-PCM- Reglamento de la Ley Nº 27249,
norma que autoriza a las empresas del Estado en liquidación o en
proceso de privatización o de entrega en concesión, la adjudicación
en venta directa de inmuebles de su propiedad de uso no operativo,
al cual tendrán derecho a ser beneficiarios, de forma excluyente,
en caso de muerte del trabajador, el o la conviviente sobreviviente
sujetos a la sociedad de bienes a que se refiere el articulo 326° del
Código Civil. Más aún, cuando el A quem advierte que en autos
obra el certificado de inscripción emitido por el Registro Nacional
de Identificación y Estado Civil - RENIEC en el cual se consigna el
estado civil de Cesar Esteban Nieves Honismann como casado.
Hecho el cual no ha sido desvirtuado por la demandante. SÉTIMO:
En consecuencia, de lo anotado en el considerando precedente, la
sentencia cuestionada no incurre en infracción a las normas que
garantizan el derecho al debido proceso -debida motivación- al
declarar improcedente la demanda, puesto que como bien ha
señalado la Sala de mérito, al no haber probado la demandante su
condición de conviviente mediante declaración judicial de
convivencia o unión de hecho, siendo este requisito imprescindible
exigido por el artículo 5 del Decreto Supremo N° 007-2001-PCM –
Reglamento de la Ley N°27249, no procede su solicitud de
adjudicación en venta directa del inmueble sub litis; más aún se ha
determinado en sede de instancia que obra el certificado de
inscripción emitido por el Registro Nacional de Identificación y
Estado Civil – RENIEC en el cual se consigna el estado civil de
Cesar Esteban Nieves Honismann como casado (ello a pesar que
la demandante refiere en todo el interín del proceso que se
apersona en calidad de su conviviente), no obstante, doña Rosa
Perpetua Chen Bernabé no ha logrado acreditar mediante
documento alguno que tal situación jurídica plasmada en el registro
civil se refiera a la alegada unión entre Cesar Esteban Nieves
Honismann y la accionante. IV.- DECISIÓN: Por tales
consideraciones, Declararon: INFUNDADO el recurso de casación
interpuesto por doña Rosa Perpetua Chen Bernabé a fojas
cuatrocientos ochenta y dos; en consecuencia NO CASARON la
sentencia de vista de fecha trece de diciembre de dos mil once,
74015
obrante a fojas cuatrocientos sesenta y seis; en los seguidos contra
la Empresa Regional de Servicio Público de Electricidad Electro
Norte Medio Sociedad Anónima – Hidrandina Sociedad Anónima,
sobre acción contencioso administrativo; DISPUSIERON la
publicación de la presente resolución en el Diario Oficial “El
Peruano” conforme a ley; y los devolvieron. Juez Supremo
Ponente: Vinatea Medina. S.S. SIVINA HURTADO, WALDE
JAUREGUI, ACEVEDO MENA, VINATEA MEDINA, RUEDA
FERNANDEZ C-1335410-4
CAS. Nº 1093 – 2011 LIMA
Lima, veintitrés de abril de dos mil trece. LA SALA DE DERECHO
CONSTITUCIONAL Y SOCIAL PERMANENTE DE LA CORTE
SUPREMA DE JUSTICIA DE LA REPÚBLICA. I. VISTA; con el
expediente administrativo como acompañado, la causa número
mil noventa y tres – dos mil once; de conformidad con el dictamen
del señor Fiscal Supremo en lo Contencioso Administrativo, en
Audiencia Pública llevada a cabo en la fecha, integrada por los
señores magistrados Sivina Hurtado, Presidente, Acevedo Mena,
Vinatea Medina, Morales Parraguez y Rueda Fernández;
producida la votación con arreglo a la Ley, se ha emitido la
siguiente sentencia: I.1 MATERIA DE LOS RECURSOS: Viene a
conocimiento de esta Sala Suprema, los recursos de casación
interpuestos por las co demandadas Corporación July’s Sociedad
Anónima Cerrada, de fecha diez de diciembre de dos mil diez,
obrante a fojas ciento tres del cuadernillo de casación formado
por la Sala Civil Transitoria de la Corte Suprema de Justicia de la
República; y, el Ministerio de Economía y Finanzas - MEF, de
fecha primero de diciembre de dos mil diez, a fojas ochenta y
cuatro del mismo cuadernillo, contra la sentencia de vista de
fecha trece de setiembre de dos mil diez, obrante a fojas cincuenta
y ocho del referido cuadernillo, que confirmó la sentencia apelada
de primera instancia de fecha treinta de setiembre de dos mil
ocho, obrante a fojas ciento noventa y uno del expediente
principal, que declaró fundada la demanda incoada, con lo demás
que contiene, en los seguidos por la Superintendencia Nacional
de Aduanas y Administración Tributaria - SUNAT contra el
Ministerio de Economía y Finanzas - MEF y la Corporación July’s
Sociedad Anónima Cerrada, sobre Impugnación de Resolución
Administrativa. I.2 RESOLUCIONES CALIFICATORIAS DE LOS
RECURSOS DE CASACIÓN i) Por resolución de fecha siete de
noviembre de dos mil once, obrante a fojas setenta y ocho del
cuadernillo de casación formado en esta Sala Suprema, se
declaró procedente el recurso de casación interpuesto por
Corporación July’s Sociedad Anónima Cerrada por la causal
de inaplicación del artículo 6 del Acuerdo sobre Salvaguardias y
de la Resolución Legislativa N° 26047; anotando las alegaciones
de la impugnante, que por el artículo 1 Normas Generales de la
Parte I Disposiciones Generales del Protocolo de Adhesión de la
República Popular China a la Organización Mundial del Comercio
- OMC, la Superintendencia Nacional de Aduanas y Administración
Tributaria - SUNAT debió aplicar el articulo 6 del Acuerdo sobre
Salvaguardias, por formar parte de los Acuerdos Comerciales
Multilaterales anexos al Acuerdo de la OMC, y no puede ser
interpretado fuera del mismo al constituir norma general; que el
segundo considerando de la sentencia señala que el articulo 16
del protocolo debe entenderse dentro de sus propios términos,
que en consecuencia se ha inaplicado una norma de derecho
material, en este caso de la Resolución Legislativa N° 26047; que
el Decreto Supremo N° 023-2003- MINCETUR estableció
definitivamente que las salvaguardias de transición provisionales
no se convierten en salvaguardias definitivas al no haber
acreditado la existencia de una desorganización del mercado,
correspondiendo restituir o reembolsar las salvaguardias de
transición provisionales. ii) Por resolución de fecha siete de
noviembre de dos mil once, obrante a fojas ochenta y dos del
cuadernillo de casación formado en esta Sala Suprema, se
declaró procedente el recurso de casación del Ministerio de
Economía y Finanzas - MEF por la causal de infracción normativa
del numeral 1 del artículo 16 del Protocolo de adhesión de la
República Popular China, del artículo 6 del Acuerdo sobre
Salvaguardias, y numeral 7 de la Décima Sexta Disposición
General del Protocolo mencionado; anotando las alegaciones del
impugnante de que la Sala de vista ha efectuado una interpretación
aislada de la norma, pues lo dispuesto en el Decreto Supremo N°
026-2003-MINCETUR si resulta aplicable frente al vacío legal en
el que ha incurrido el Protocolo de Adhesión de la República
Popular China respecto de los casos en los que habiéndose
aplicado provisionalmente las salvaguardias de transición, el
Estado que las impuso decide no imponer dichas salvaguardias,
que de acuerdo a lo dispuesto en el artículo 16 numeral 1 del
Protocolo en mención resulta aplicable a fin de cubrir el vacío
legal, en tal sentido al aplicarse el numeral 7 de la Décimo Sexta
Disposición General del Protocolo de Adhesión de la República
Popular China, ésta debe hacerse en virtud de lo establecido en
el artículo 16 numeral 1 y del artículo 6 del Acuerdo sobre
Salvaguardias; las normas no fueron aplicadas por la Sala de
mérito al momento de resolver y que ha dado lugar a que realice
una incorrecta aplicación del articulo antes citado. I.3 DICTAMEN
FISCAL SUPREMO. De conformidad con el Dictamen Fiscal N°
397-2013-MP-FN-FSCA, de fecha veintiocho de febrero de dos
mil trece, de fojas ochenta y seis del cuadernillo de casación, con
opinión de que se declare infundados los recursos de casación
74016
CASACIÓN
planteados. II. CONSIDERANDO: PRIMERO: DELIMITACIÓN
DEL OBJETO DE PRONUNCIAMIENTO. 1.1 Como se tiene
señalado en la parte expositiva de la presente resolución, los
recursos de casación fueron declarados procedentes,
puntualmente por las siguientes causales: a) Infracción normativa
del numeral 1 del artículo 16 del Protocolo de Adhesión de la
República Popular China. b) Infracción normativa del numeral 7
del artículo 16 del Protocolo de Adhesión de la República Popular
China. c) Infracción del artículo 6 del Acuerdo sobre Salvaguardias
y de la Resolución Legislativa N° 26407. d) Infracción normativa
del inciso c) del numeral 1 del artículo 11 del Acuerdo Sobre
Salvaguardias. 1.2 Siendo objeto de pronunciamiento en esta
sede casatoria la denuncia de infracciones de normas de derecho
objetivo, no corresponde realizar un re examen de la pretensión o
la obtención de un tercer pronunciamiento sobre cuestiones
fácticas o de revaloración probatoria1; se accede a la casación en
función de cognición especial sobre vicios en la resolución por
infracciones normativas que incide en la decisión judicial,
permitiendo ejercer el control de derecho, velando por su
cumplimiento “y por su correcta aplicación a los casos litigiosos, a
través de un poder independiente que cumple la función
jurisdiccional”2, revisando si el caso particular que accede a sede
casatoria ha sido resuelto de acuerdo a la normatividad jurídica
respetando el derecho objetivo en la solución del conflicto3. 1.3 Es
menester precisar que las infracciones de normas de derecho
objetivo están referidas a la calificación defectuosa, que partiendo
de hechos debidamente establecidos se incurre en error en la
interpretación, aplicación o se deja de aplicar una norma que
corresponde4; en este contexto y como se tiene expresado, no es
objeto el control de hechos (la quaestio facti), sino que acudiendo
a los hechos determinados por las instancias de merito se
verificará si se ha incurrido o no en las infracciones de las normas
denunciadas (la quaestio iure) al resolver el caso particular; para
lo cual precisados los hechos, se procederá al análisis para
determinar si la sentencia impugnada ha incurrido o no, en las
infracciones normativas. SEGUNDO: ELEMENTOS FACTICOS.
2.1 Conforme a los términos de la demanda específicamente
detallados en la sentencia de primer grado confirmada por la
sentencia impugnada, resultan los siguientes hechos: a. Mediante
Declaración Única de Aduana N° 118-2004-10-050866-01-1-00
de fecha de numeración treinta de abril de dos mil cuatro, la
Corporación July’s Sociedad Anónima Cerrada solicitó a consumo
mercancías consistentes en confecciones textiles – prendas de
vestir. b. Efectuado el reconocimiento físico con participación de
la Agencia de Aduanas despachante y veedora del Comité de
Confecciones de la Sociedad Nacional de Industrias, se estableció
como incidencias en las prendas de vestir, que algunas aparecían
con etiquetas con inscripción “Made in China”, otras con etiquetas
indicando ser originarias de Colombia y otras sin etiquetado,
formalizándose la inmovilización de la totalidad de la mercancía
consignada en Actas de Inmovilización. c. La empresa solicitó el
levante de las mercancías alegando que se había acreditado el
origen legal de las mercancías, que había cancelado los derechos
arancelarios y percepción del Impuesto General a las Ventas IGV; la Intendencia de Aduana Marítima emitió la Resolución
Jefatural de División N° 118-0152/2004-000984, del nueve de
setiembre de dos mil cuatro, que sustentó las liquidaciones de
cobranza por salvaguardias de transición provisional y tributos
diferenciales, así como las liquidaciones de cobranza por
concepto de multa por comisión de infracciones previstas en el
artículo 103 inciso d) numerales 6 y 10 del Decreto legislativo N°
809, Ley General de Aduanas. d. Por Resolución Directoral N°
118-3D1000/2005-000456, se declaró infundada la reclamación
interpuesta por la empresa contra la citada Resolución Jefatural
de División. e. En razón del recurso de apelación de la empresa
contra la resolución directoral que le desestimó su reclamación, el
Tribunal Fiscal emitió la Resolución N° 03801-A-2006, resolviendo
revocar la Resolución Directoral N° 118-3D1000/2005-000456.
2.2 La resolución del Tribunal Fiscal N° 03801-A-2006 (adoptada
por mayoría con voto en discrepancia) impugnada en este
proceso, se sustenta en que: los miembros de la Organización
Mundial del Comercio - OMC se comprometieron a no superar
cierto nivel arancelario y acordaron eliminar las medidas no
arancelarias restrictivas de las importaciones, que las
salvaguardia provisionales no son distintas de las definitivas,
siendo una sola medida de protección o defensa comercial que en
principio es permitida en forma provisional para evitar daños
irreparables y garantizar la eficacia de la medida y luego se
vuelve definitiva cuando se ha probado las distorsiones o
amenazas, cuando ello no ocurre debe devolverse o reembolsar
las salvaguardias de transición provisional; que hay vacío legal en
el Protocolo de Adhesión de China que no expresa que la
aplicación de salvaguardias de transición deben resolverse de
acuerdo al numeral 1 del artículo 16 del protocolo, que aplicando
el artículo 6 del Acuerdo procede la devolución de las indicadas
salvaguardias; que el inciso c) numeral 1 artículo 11 del Acuerdo
sobre Salvaguardias establece que cuando se adopte medida
distinta de la prevista en el artículo XIX del GATT de mil
novecientos noventa y cuatro en los Acuerdos Comerciales
Multilaterales, no será aplicable las disposiciones del acuerdo de
Salvaguardias; que de una lectura aislada de la norma podría
entenderse que no es aplicable el Acuerdo a las medidas
adoptadas en el Decreto Supremo N° 026-2003-MINCETUR, pero
El Peruano
Lunes 1 de febrero de 2016
que sin embargo el Protocolo de Adhesión se aplica en el marco
de lo establecido en el Acuerdo sobre Salvaguardias según el
numeral 1 del artículo 16 del protocolo, norma aplicable para
cubrir el vacío legal; al vencimiento de los plazos legales no se
publicó norma disponiendo aplicación de salvaguardia definitiva;
por documento del veintiuno de julio de dos mil cuatro, el Perú
comunicó a la OMC que no se establecerán salvaguardias
definitivas; que el Estado Peruano no determinó que los productos
chinos habrían causado o amenazado causar un daño, debiendo
devolverse las salvaguardias de transición, y tampoco procede
que la administración aduanera formule cobranza alguna por ese
concepto; que documentos e informes señalan la devolución al no
declararse definitivas y por tanto el monto de las mismas no es
posible de afianzamiento, que el artículo 6 del Acuerdo de
Salvaguardia es aplicable, que se trata de un pago sin causa; el
Centro de Asesoría Legal de la OMC interpreta que el Perú se
remitió al artículo 6 del Acuerdo para reembolsar los derechos
pagados por salvaguardias provisionales, que si bien las
mercancías son de origen chino, sin embargo corresponde dejar
sin efecto la cobranza de las salvaguardias de transición aplicadas
entre otros a la Declaración Única de Aduanas N° 118-2004-10050866-01-1-00; respecto a la aplicación de la multa por infracción
prevista en el numeral 6 inciso d) del artículo 103 del Decreto
Legislativo N° 809, considera que la empresa sí se encuentra
incursa en la misma debido que la declaración de origen de las
mercancías es incorrecta, sin embargo siendo la sanción el triple
de los tributos, y que en este caso no se ha dejado de pagar
ningún tributo al no corresponder el pago de las salvaguardias, en
consecuencia el cálculo de la multa es cero; y respecto a la multa
por infracción al numeral 10) inciso d) del artículo 103 del Decreto
Legislativo N° 809, finalmente señala que la empresa sí se
encuentra incursa en la infracción, recomendando a la
administración que aplique la multa de cero punto diez (0.10) de
la Unidad Impositiva Tributaria (UIT) en los supuestos que
corresponda en tanto la asignación de una subpartida arancelaria
incorrecta no tiene incidencia tributaria. 2.3 De los hechos
determinados por las instancias de mérito y de los fundamentos
de la resolución administrativa impugnada, se extrae que en sí no
estamos ante un caso de devolución de salvaguardias que hayan
sido pagadas, sino en establecer si se aplica o no el artículo 6 del
Acuerdo sobre Salvaguardias referente a la restitución o
reembolso de salvaguardias de transición provisionales, y como
consecuencia de ello, si subsiste o no, la obligación de la empresa
a pagar las salvaguardias provisionales de transición. TERCERO:
PROTOCOLO DE ADHESIÓN DE LA REPÚBLICA POPULAR
CHINA Y LA RESOLUCIÓN LEGISLATIVA N° 26407. 3.1 El
Protocolo de Adhesión de la República Popular China cuenta con
antecedentes jurídicos directamente vinculados, a los que nos
remitimos para determinar el contexto normativo, además que
aportan a la interpretación de las normas denunciadas: a. Se
encuentra en orden histórico en primer lugar, el Acuerdo General
sobre Tarifas y Comercio –GATT (identificándose en lo sucesivo
en esta resolución conforme a sus siglas)– tratado multilateral
que entró en vigencia en el año mil novecientos cuarenta y ocho
y del cual fue parte el Perú desde el año mil novecientos cincuenta
y uno; detentando como objetivo reducir las trabas a los
intercambios comerciales y establecer una base para la
negociación de acuerdos comerciales multilaterales, la
consolidación y reducción de aranceles; los principios de la GATT
eran: de trato de Nación más favorecida, liberalidad entendiendo
que el libre comercio beneficia a todos por igual, reciprocidad,
transparencia, principios no discriminatorios, sin embargo se le
cuestionaba el no reconocimiento de asimetrías económicas y
políticas de los países participantes. b. Posteriormente se celebra
el Acuerdo por el que se establece la Organización Mundial del
Comercio –OMC (identificándose en lo sucesivo en esta
resolución conforme a sus siglas)- y los Acuerdos Comerciales
Multilaterales contenidos en el Acta Final de la Ronda Uruguay,
suscrita en Marrakech, Marruecos, el quince de abril de mil
novecientos noventa y cuatro, sustituyendo el OMC al GATT, así
como introduce nuevos principios que orientan las relaciones
multilaterales en base a un sistema multilateral de comercio
más justo y más abierto en beneficio y por el bienestar de los
pueblos, en la declaración de Marrakech se expresa como
objetivos la liberación de los mercados, fortalecimiento de la
economía mundial y dar paso a un mayor crecimiento del
comercio internacional, las inversiones, el empleo y los ingresos
en todo el mundo; aportando para ello un marco jurídico más
fuerte y claro, orientando a mecanismos de solución más eficaces
y fiables, si bien persigue la reducción de aranceles, apertura de
mercados y mayor fluidez, libertad, equidad, no descuida la
previsibilidad y seguridad de los compromisos arancelarios,
fomento de la competencia leal sin distorsiones, así como la
proyección a la cooperación económica mundial, reconoce las
asimetrías y contempla como fin lograr una mayor coherencia en
la formulación de las políticas económicas a escala mundial con
cooperación de otros organismos internacionales5. c. Siendo bajo
las premisas y sustentos de la OMC que con Decisión de fecha
diez de noviembre de dos mil uno se incorpora el Protocolo de
Adhesión de la República Popular China que establece los
términos y condiciones de su adhesión obligando a su
cumplimiento6. 3.2 Es por Resolución Legislativa N° 26407,
publicada con fecha dieciocho de diciembre de mil novecientos
El Peruano
Lunes 1 de febrero de 2016
CASACIÓN
noventa y cuatro dada por el Congreso en ejercicio de la función
legislativa prevista en el inciso primero del artículo 1027 que se
aprobó el Acuerdo por el que se establece la Organización
Mundial del Comercio –OMC- y los Acuerdos Comerciales
Multilaterales contenidos en el Acta Final de la Ronda Uruguay,
en razón de ello se incorporan Acuerdos comerciales como es el
Protocolo de Adhesión de la República Popular China; ahora bien
el tratado de la OMC y el Protocolo de Adhesión están referidos a
relaciones comerciales siendo incorporados al derecho nacional
conforme a lo previsto en el artículo 55 de la Constitución Política
del Perú8, en tal caso sometidos a la Constitución como norma
superior, norma normarum y guía para establecer la juricidad y
validez de las otras normas de menor jerarquía a las contenidas
en el bloque de constitucionalidad9; asimismo, a tenor de lo
previsto en el inciso 4 del artículo 200 de la Constitución Política
del Estado, el valor asignado a los tratados en mención es de
normas que tienen rango de ley. 3.3 Continuando con el
análisis, se resalta que en temas de tratados internacionales
suscritos por el Perú se aplica lo previsto en la Convención de
Viena sobre el Derecho de los Tratados de fecha veintitrés de
mayo de mil novecientos sesenta y nueve, norma vinculante para
el Perú que la ratificó el catorce de setiembre de dos mil por
Decreto Supremo N° 029-2000-RE, entrando en vigencia para el
Estado Peruano el catorce de octubre de dos mil; dicha
convención contiene principios y normas de derecho internacional
que sirven para interpretar, aplicar y ejecutar los tratados. En
consonancia con la Convención y al principio “pacta sunt
servanda” resultan obligatorias para el Estado Peruano los
tratados internacionales –Acuerdo de la OMC y Protocolo de
Adhesión de la República Popular China-, encontrándose
obligado a cumplirlos de buena fe (artículo 26 de la Convención10);
determinándose el carácter vinculante del Acuerdo por el que
se establece la Organización Mundial del Comercio –OMC-,
los Acuerdos Comerciales Multilaterales contenidos en el
Acta Final de la Ronda Uruguay incorporados a nuestro
ordenamiento jurídico por Resolución Legislativa N° 26407, y
el Protocolo de Adhesión, así como la exigibilidad y
responsabilidad internacional para el Estado Peruano en el
cumplimiento de las normas y derechos que el tratado reconoce.
CUARTO: SOBRE LA SALVAGUARDIA DE TRANSICION 4.1
Ahora bien, el punto en controversia en sede casatoria reside
sobre las salvaguardias prescritas en el Protocolo de Adhesión de
la República Popular China, cuyos antecedentes, principios
orientadores, objetivos y carácter vinculante se han indicado en el
considerando anterior. Las alegaciones de las impugnantes
(anotadas en la parte expositiva de esta sentencia casatoria)
residen en concreto, que ante el vacío legal del Protocolo de
Adhesión de la República Popular China sobre la devolución o
reembolso de las salvaguardias de transición provisional, resulta
de aplicación lo dispuesto en el Acuerdo sobre Salvaguardias, ello
de acuerdo a lo dispuesto en el artículo 16 numeral 1 del Protocolo
antes referido. 4.2 Para dilucidar el tema acudimos a la
interpretación jurídica, considerando que conforme al artículo 26
de la Convención de Viena y en aplicación del principio “Pacta
Sunt Servanda”, lo previsto en los tratados obliga a las partes
y debe ser cumplido de buena fe; significando que es el
contenido y lo acordado en los tratados lo que vincula; asimismo,
se tiene en consideración el artículo 31 de la Convención que
prevé como regla general de interpretación aplicable a las normas
internacionales materia de pronunciamiento, que: “Un tratado
deberá interpretarse de buena fe conforme al sentido
corriente que haya de atribuirse a los términos del Tratado en
el contexto de estos y teniendo en cuenta su objetivo y fin”.
Atendiendo que el alcance concreto de los derechos y obligaciones
de los Acuerdos no resultan de su simple lectura, y que las
disposiciones jurídicas se redactan en términos generales para
que puedan ser aplicados a casos concretos, la OMC tiene
reconocido que en la mayoría de los casos se requiere proceder
a la interpretación de los términos jurídicos contenidos en la
disposición a un caso particular, que muchas veces las
disposiciones jurídicas de los acuerdos internacionales no están
claras porque son formulas de compromiso resultantes de
negociaciones multilaterales pudiendo los textos entenderse en
más de un sentido; acogiendo las normas usuales de
interpretación del derecho internacional público, en particular las
acogidas en los artículos 31, 32 y 33 de la Convención de Viena11;
expresa que el Acuerdo no debe ser leído clínicamente aislado
del derecho internacional público que aporta normas usuales de
interpretación12; asimismo, distingue las interpretaciones
autorizadas que son de validez general para todos los miembros,
esto es las establecidas por la Conferencia Ministerial y el
Consejo General conforme a lo previsto en el párrafo 2 del artículo
IX del Acuerdo sobre la OMC; de las que resulten del ESD
(Entendimiento relativo a las normas y procedimientos por los que
se rige la solución de diferencias), que sirven para aclarar las
disposiciones del Acuerdo sobre la OMC de conformidad con las
normas usuales de interpretación del derecho internacional
público; precisando que las interpretaciones de los grupos
especiales y el Órgano de Apelación, sólo son aplicables a las
partes y al asunto que trate una diferencia; no estando en los
supuestos referidos, la comunicación de treinta de mayo de dos
mil doce del Centro de Asesoría Legal de la OMC alegada por la
impugnante. 4.3 Ahora bien, dentro del marco regulatorio
74017
señalado en el considerando anterior, el cual es vinculante para
los Estados Partes (Perú – República Popular China) y de
aplicación en la importación de productos chinos comprendidos
en la regulación de los tratados comerciales, se encuentra
previsto el mecanismo de salvaguardia en el numeral 1 del
artículo 16 del Protocolo de Adhesión de la República Popular
China, que establece: Numeral 1: “En aquellos casos en que
productos de origen chino se estén importando en el territorio de
cualquier Miembro de la OMC en tal cantidad y en condiciones
tales que causen o amenacen causar una desorganización del
mercado para los productores nacionales de productos similares
o directamente competidores, el Miembro de la OMC así afectado
podrá pedir la celebración de consultas con China con el fin de
llegar a una solución mutuamente satisfactoria, incluida la
cuestión de si el Miembro de la OMC afectado debe proceder a la
aplicación de una medida al amparo del Acuerdo sobre
Salvaguardias. Las solicitudes de este tipo serán notificadas
inmediatamente al Comité de Salvaguardias”. 4.4 La disposición
anotada contiene más de una norma jurídica aplicable a la
importación de productos de origen chino, regula los supuestos
para adoptar acciones –cuando por cantidad y condiciones
causen o amenacen causar desorganización del mercado para
los productores nacionales-, facultando al país afectado a pedir
la celebración de consultas con China para llegar a una
solución “mutuamente satisfactoria”, así como incluyendo la
posibilidad de que el Estado afectado debe proceder a la
aplicación de una medida al amparo del Acuerdo sobre
Salvaguardias. Normas que guardan coincidencia con los
objetivos del Acuerdo de la OMC contenidos en la Declaración de
Marrakech de mil novecientos noventicuatro de incluir
mecanismos de solución de diferencias más eficaz y fiable, así
como a lograr un sistema multilateral de comercio más justo y
más abierto en beneficio y por el bienestar de los pueblos. 4.5
Distinguiendo que el numeral 1 posibilita que un Estado Miembro
de la OMC pueda solicitar consultas sobre la procedencia de la
aplicación de una medida al amparo del Acuerdo sobre
Salvaguardias; la norma no contempla la aplicación de
medidas de salvaguardias provisionales ni hace mención a la
previstas en el numeral 7, sino aquellas medidas dictadas en
procedimiento especial generado a solicitud del Estado
Miembro; descartando las alegaciones de las impugnantes de
que la norma estaría facultando la aplicación de la regulación del
Acuerdo sobre Salvaguardias para los casos de aplicación de
medidas provisionales efectuadas al amparo del numeral 7 del
mismo articulo 16. Así como también lo reconoce la Resolución
del Tribunal Fiscal impugnada, anotando en su quinta pagina que
el Protocolo de Adhesión de China “no se refiere expresamente a
aquellos casos en los que habiéndose aplicado provisionalmente
las salvaguardias de transición (…), éstos deben resolverse de
acuerdo al numeral 1 del artículo 16° del Protocolo (…) aplicando
lo establecido en el artículo 6° del Acuerdo sobre Salvaguardias,
procediendo por tanto a la devolución …””; de lo que trasciende
que admiten que no hay disposición expresa para la aplicación de
lo previsto en el numeral 1 del artículo 16 del Protocolo sobre la
aplicación del artículo 6 del Acuerdo para proceder a la devolución.
4.6 El numeral 7 del artículo 16, regula un caso diferente y
especifico de medida de “salvaguardia provisional” dispuesta
en forma unilateral por el Estado Miembro de la OMC, cuando
por las circunstancias críticas no podría seguir el procedimiento
bilateral previsto en el numeral 1, en razón de que la demora
acarrearía “perjuicio difícilmente reparable”, facultándole a
notificar después al Comité de Salvaguardias de la medida
adoptada e inmediatamente presentar una solicitud de consultas
bilaterales: “En circunstancias críticas, en las que cualquier
demora entrañaría un perjuicio difícilmente reparable, el Miembro
de la OMC afectado podrá adoptar una medida de salvaguardia
provisional en virtud de una determinación preliminar de que las
importaciones han causado o amenacen causar una
desorganización del mercado. En tal caso, se dará notificación
inmediatamente después al Comité de Salvaguardias de la
medida adoptada y se presentará una solicitud de consultas
bilaterales. La duración de la medida provisional no excederá de
200 días, durante los cuales se cumplirán las prescripciones
pertinentes de los párrafos 1, 2 y 5. Se computará como parte del
periodo previsto en el párrafo 6 la duración de esas medidas
provisionales”. La norma contempla un procedimiento especial
para adoptar salvaguardias provisionales (determinación
preliminar de la desorganización del mercado que hubiere
causado o amenacen causar), duración de la medida (doscientos
días), el trámite a seguir en el periodo de duración (comunicación
inmediata al Comité y presentación de solicitud de consultas
bilaterales); no tiene previsto la posibilidad de reembolso de
los montos pagados, ni aplicación del reembolso contemplado
en el Acuerdo sobre Salvaguardias; respecto de lo que se tiene
presente que sólo es vinculante lo pactado, lo acordado, ello de
conformidad al artículo 31 de la Convención de Viena, y a lo
establecido por la OMC en los casos de Estados Unidos – Acero
al carbono, párrafos 61-62 (WT/DS213/AB/R), Japón – Bebidas
Alcohólicas// pagina 14 (WT/DS8/AB/R), que la tarea de
interpretar una disposición de un tratado debe comenzar por sus
propios términos, y que el texto del tratado constituye la base del
proceso interpretativo. Los términos del tratado resultan claros y
se ubican en el contexto del Acuerdo de la OMC orientados al
74018
CASACIÓN
fortalecimiento de la economía mundial, crecimiento del comercio
internacional, compatibilizando con sus objetivos de que el
sistema multilateral de comercio sea más justo y beneficioso para
los pueblos, con la finalidad de procurar su bienestar, adopción de
mecanismos eficaces y fiables; su razón de ser intrínseca, es
evitar un perjuicio difícilmente reparable a causa de la demora
que acarrearía seguir el procedimiento de consultas, que estando
a las circunstancias críticas resulta necesaria la previsión de
salvaguardia provisional en forma unilateral por el Estado
afectado, en tanto la finalidad del tratado es facilitar el comercio
internacional no ocasionar perjuicio o desorganizar el mercado
nacional; teniendo presente que las disposiciones emergen de las
formulas de compromiso resultantes de negociaciones
multilaterales, no se establece la intención de contemplar un
reembolso de lo pagado por salvaguardia. 4.7 En igual sentido
el inciso c) del numeral 1 del artículo 11 del Acuerdo sobre
Salvaguardias que regula prohibiciones, tiene establecido que
dicho acuerdo no es aplicable a las medidas que se adopten de
conformidad con otras disposiciones: c) El presente Acuerdo no
es aplicable a las medidas que un Miembro trate de adoptar,
adopte o mantenga de conformidad con otras disposiciones del
GATT de 1994, aparte del artículo XIX, y de los Acuerdos
Comerciales Multilaterales incluidos en el Anexo 1A, aparte del
presente Acuerdo, o de conformidad con protocolos y acuerdos o
convenios concluidos en el marco del GATT de 1994. Por lo que,
el mismo Acuerdo sobre Salvaguardias restringe su aplicación a
las medidas que resulten de la aplicación –en este caso- del
Protocolo de Adhesión de la República Popular China. Cabe
anotar que la aplicación de la disposición anotada originó
discordia en la votación de los miembros del Tribunal Fiscal, en
tanto el voto discrepante en razón de la norma sustenta que el
Acuerdo de Salvaguardia no es aplicable al caso13, por su parte la
resolución que contiene el voto en mayoría señala que ciertamente
de acuerdo a la disposición citada podría entenderse que “el
Acuerdo sobre Salvaguardias no es aplicable a las medidas
adoptadas mediante Decreto Supremo N° 026-2003-MINCETUR,
que se refieren al Protocolo de Adhesión de China”, no obstante
considera que la medida del Protocolo se aplica en el marco de lo
establecido en el Acuerdo de Salvaguardias en razón de lo
señalado en el numeral 1 del artículo 16 del Protocolo;
interpretación que resulta contradictoria al mismo Acuerdo sobre
Salvaguardias que restringe su aplicación, y con el numeral 1 del
artículo 16 del Protocolo, que como se tiene desarrollado, no
dispone la aplicación del Acuerdo para las medidas provisionales
adoptadas conforme al numeral 7 del mismo artículo, y colisiona
con el principio de interpretación de los tratados “pacta sunt
servanda”, en tanto los tratados son obligatorios conforme a los
propios términos pactados. 4.8 En el caso del Perú en relación a
la importaciones de textiles y prendas de vestir chinas, por
Decreto Supremo N° 026-2003-MINCETUR se estableció
salvaguardia de transición a importaciones de confecciones
textiles originarias de la República Popular China, al amparo
de lo previsto en el numeral 7 que faculta la adopción unilateral de
medida de salvaguardia de transición por el Miembro de la OMC
afectado por las importaciones chinas; señalando en su parte
considerativa (segundo párrafo): “Que, el Protocolo de Adhesión
de la República Popular China a la Organización Mundial del
Comercio establece un mecanismo de salvaguardia de transición
para productos específicos, el mismo que prevé en su Artículo
16.7 que, en circunstancias críticas, en las que cualquier demora
entrañaría un perjuicio difícilmente reparable, el país miembro de
la OMC afectado pueda adoptar una medida de salvaguardia
provisional en virtud de una determinación preliminar de que las
importaciones originarias de la República Popular China han
causado o amenazan causar una desorganización del mercado”.
Resulta pertinente anotar que el referido Decreto Supremo
responde al procedimiento para la adopción de salvaguardias de
transición al amparo de las normas y compromisos asumidos por
los Miembros de la Organización Mundial del Comercio,
establecido por Decreto Supremo N° 023-2003-MINCETUR. 4.9
El Decreto Supremo N° 026-2003-MINCETUR establece en su
artículo 1 el “Establecimiento de Salvaguardia de Transición
Provisional”, aplicándola a las importaciones de confecciones
textiles originarias de la República Popular China, y en el artículo
2 establece la modalidad de aplicación, siendo el resultado de la
diferencia entre el precio CIF de importación y la sobretasa
máxima señalada en el Anexo 1 del decreto, asimismo regula un
caso de inaplicación cuando el precio CIF del producto sea
superior al valor de la sobretasa máxima. El artículo tercero en
concordancia con lo previsto en el numeral 7 del artículo 16 del
Protocolo de Adhesión establece que duración de la salvaguardia
provisional será de doscientos días contados a partir del día
siguiente de la publicación del decreto supremo de fecha veintitrés
de diciembre de dos mil tres. De los términos del decreto supremo
se advierte que se trata de la regulación de una salvaguardia de
transición provisional conforme al numeral 7 del artículo 16 del
Protocolo de Adhesión, y descartan que nos encontremos en el
supuesto del numeral 1 que contempla un procedimiento bilateral
para la adopción de medidas conforme al Acuerdo sobre
Salvaguardias, por lo que se desvirtúa infracción normativa al
numeral 1 del referido artículo 16. 4.10 Si bien las impugnantes
alegan vacío legislativo en el numeral 7 y que como consecuencia
de ello se debería aplicar lo previsto en el artículo 6 del Acuerdo
El Peruano
Lunes 1 de febrero de 2016
sobre Salvaguardias; dichas alegaciones resultan contradictorias
en tanto el vacío legislativo no faculta ante la ausencia normativa
la aplicación de otra norma, estando mas bien prevista la
integración por analogía en los casos de laguna del derecho. Así
la doctrina distingue en el caso de ausencia de norma, el vacío de
derecho en el que no hay que integrar norma, y la laguna de
derecho ante la que sí se integra la norma14; pues no en todos los
casos de carencia normativa corresponde la integración,
existiendo situaciones en que el legislador ha optado por no
establecer norma ni mandato alguno; se trata del vacío del
derecho “entendiendo por tal un suceso para el que no existe
norma jurídica aplicable y que se considera que no debe estar
regulado por el Derecho rigiéndose, en consecuencia, por los
principios hermenéuticos aplicables”15, estos son en relación a la
libertad y seguridad personal: 1) que nadie está obligado a hacer
lo que la ley no manda ni impedido de hacer lo que ella no prohíbe
-literal a) del inciso 24 del artículo 2 de la Constitución Política
vigente; 2) en relación a la competencia asignada, en el caso de
funcionarios públicos y directivos, gerentes y administradores de
entidades privadas, por el cual solo pueden realizar lo
expresamente atribuido conforme a la ley, estatutos y demás
disposiciones reglamentarias. 4.11 En el caso del numeral 7 como
se tiene antes señalado, no se ha contemplado el reembolso o
devolución de los montos pagados por concepto de salvaguardias
provisionales; ello no constituye vacío normativo sino una
regulación especial y diferente para las medidas provisionales
dictadas en el marco de aplicación del Protocolo de Adhesión de
la República Popular China que contiene sus propias formulas de
compromiso y términos de negociación. 4.12 Tampoco nos
encontramos ante un supuesto de laguna del derecho, entendido
como tal, cuando no existe norma jurídica aplicable a pesar de
que debería estar regulado por el ordenamiento jurídico; no
ubicándose en ninguno de los tres casos señalados por la
doctrina: cuando el caso que carece de norma tiene una
racionalidad que es sustantivamente igual a la de otro caso sí
normado, teniendo una esencia común, en el que se aplica la
analogía; cuando el caso originaría una consecuencia agraviando
los principios generales del derecho, para lo cual se integra
conforme a los principios de derecho; cuando la norma genérica
aún no ha sido reglamentada exigiendo una normatividad, lo que
se denomina como laguna técnica16. Como se tiene antes
señalado, el supuesto contemplado en el numeral 7 es uno
especial que se ubica en el contexto del Protocolo de Adhesión de
la República Popular China, dicho supuesto si bien guarda alguna
similitud con las medidas provisionales reguladas en el artículo 6
del Acuerdo sobre Salvaguardias, en esencia son diferentes no
habiendo adoptado acuerdo en el tratado –Protocolo de Adhesiónel reembolso como consecuencia para las salvaguardias
provisionales, limitándose a prever un término de duración de la
medida. Aún en el supuesto –no establecido-, que existiera
semejanza en sustancia, no es un caso factible de aplicación de
otra norma por analogía, al estar prohibida en la norma
constitucional –inciso 9 del artículo 139- para las normas que
restrinjan derechos, y que no puede crearse tributos ni concederse
exoneraciones ni extenderse las disposiciones tributarias por
analogía, teniendo determinado el artículo 74 de la norma
constitucional en concordancia con el principio de reserva de ley
en materia tributaria, que implica una determinación constitucional
que impone la regulación sólo por ley en ciertas materias, que la
creación, derogación, modificación de tributos, exoneraciones, se
establecen exclusivamente por ley o decreto legislativo en el caso
de delegación de facultades, y en el caso especifico de los
aranceles debe ser mediante decreto supremo; asimismo por el
principio de legalidad en materia tributaria por el que no se puede
exigir el pago de un tributo o exoneración (en este caso, la
devolución de pago de salvaguardia de transición provisional), sin
ley o norma que lo regule; el principio de legalidad subordina a
todos los poderes públicos a leyes generales y abstractas cuya
control de legitimidad y constitucionalidad corresponde a los
Jueces del Poder Judicial conforme al artículo 138 de la
Constitución Política vigente; el principio antes anotado cumple
doble función, de garantía individual fijando limite a las posibles
intromisiones arbitrarias del Estado en los espacios de libertad de
los ciudadanos, y una función plural que garantiza la democracia
en los procedimientos de imposición y reparto de la carga
tributaria, correspondiendo su establecimiento a los órganos
designados constitucionalmente17. La potestad tributaria que la
Constitución ha atribuido monopólicamente al Estado se expresa
básicamente en la capacidad de éste para crear, modificar,
suprimir tributos, crear exoneraciones; y que se asienta en el
modelo de economía social de mercado, en que la iniciativa
privada es libre pero al Estado le corresponde proveer a las
personas de mecanismos de garantías de sus derechos
fundamentales así como ciertas condiciones materiales mínimas,
teniendo entre sus finalidades que todos y sin discriminación por
razón económica, logren un desarrollo integral, así como la
realización de valores constitucionales como el de justicia y
solidaridad18. Por lo que más bien en dicho contexto, resulta
improcedente la aplicación de otra norma por analogía, pues ello
originaría una consecuencia agraviando y contradiciendo los
principios generales del derecho. 4.13 Resultando aplicable el
numeral 7 conforme a sus propios términos sin que se
encuentre sometido a la regulación sobre el reembolso
El Peruano
Lunes 1 de febrero de 2016
CASACIÓN
contenida en el Acuerdo sobre Salvaguardias, teniendo como
argumentos adicionales a los ya expuestos, que el inciso c) del
numeral 1 del artículo 11 del Acuerdo sobre Salvaguardias, prevé
la restricción en la aplicación de las normas de dicho acuerdo a
las medidas que el Estado miembro adopte de conformidad a
otras disposiciones del GATT de mil novecientos noventa y
cuatro, aparte del artículo XIX y acuerdos comerciales
multilaterales incluidos en el Anexo 1A; y que de conformidad con
la Convención de Viena sobre el Derecho de los tratados numeral
2 del artículo 30, para que prevalezca la aplicación de las
disposiciones de otro tratado, la subordinación a otra norma o
tratado anterior o posterior debe encontrarse especificada.
QUINTO: SOBRE EL REEMBOLSO O DEVOLUCION DE LOS
MONTOS PAGADOS POR SALVAGUARDIA PROVISIONAL.
5.1 La resolución administrativa del Tribunal Fiscal N° 03801-A2006, se sustenta para revocar la resolución directoral y dejar sin
efecto el cobro de salvaguardia, en que las autoridades
encargadas de elaborar el informe técnico que al vencimiento del
plazo legal las autoridades nacionales competentes, no
cumplieron con determinar que los productos importados causen
o amenacen causar desorganización del mercado, no se publicó
decreto supremo que disponga la aplicación de salvaguardias
definitivas, por lo que en aplicación del articulo 6 del Acuerdo
sobre Salvaguardias aplicable por efecto del numeral 1 del
artículo 16 del Protocolo de Adhesión de la Republica Popular
China, el Estado Peruano debe devolver las salvaguardias de
transición que se cobraron en virtud del antes referido decreto,
correspondiendo dejar sin efecto la cobranza conforme a los
numerales 1 y 3 del artículo 16 del Protocolo de Adhesión y
articulo 6 del Acuerdo de Salvaguardias que regula la posibilidad
de reembolso o devolución de las mismas. 5.2 En este punto cabe
anotar las consideraciones establecidas en los considerandos
anteriores –tercero y cuarto- respecto a las disposiciones jurídicas
contenidas en las normas internacionales y sobre el reembolso o
devolución de los montos pagados por salvaguardia provisional:
a. En principio y como se tiene antes anotado, la empresa
emplazada no pagó monto alguno por concepto de salvaguardia
provisional, discutiéndose mas bien, el cobro de dichos conceptos
en razón del carácter reembolsable o devolución de los mismos;
considerando este Supremo Tribunal que lo pertinente hubiera
sido mas bien determinar si las medidas provisionales se
encontraban en el periodo de vigencia y eran exigibles a la
empresa (circunstancias diferentes a las analizadas en la
resolución fiscal). b. Se ha establecido que el numeral 1 del
artículo 16 del Protocolo de Adhesión de la Republica Popular
China, contempla un supuesto para la aplicación de medidas al
amparo del Acuerdo sobre Salvaguardias, mas no dispone la
aplicación de dicho acuerdo para el caso de las medidas
provisionales previstas en el numeral 7 del artículo 16 del
Protocolo de Adhesión de la Republica Popular China. c. Que el
referido numeral 7 no contempla la devolución ni reembolso de
los montos pagados por concepto de salvaguardia, asimismo, que
no existe vacío legal, y no se aplica lo previsto sobre el reembolso
en el artículo 6 del Acuerdo sobre Salvaguardias. d. En ese
sentido, y conforme a las normas constitucionales y a la
Convención de Viena, el numeral 7 del artículo 16 del Protocolo
de Adhesión debe ser interpretado y aplicado en sus propios
términos, no siendo procedente el reembolso o devolución de
salvaguardias provisionales dictadas en el marco de dicho
tratado, el cual no contempla tales consecuencias. e. Además, se
tiene establecido que las salvaguardias provisionales fueron
dispuestas por decreto supremo, y conforme al principio de
legalidad contemplado en el artículo 74 de la Constitución Política
del Estado, para disponer el reembolso se requiere la emisión de
decreto supremo que reconozca dicho derecho. 5.3 Conforme se
ha determinado en el considerando anterior no resulta infracción
normativa al numeral 1 del artículo 16 del Protocolo de Adhesión
en tanto regula un supuesto diferente a la salvaguardia provisional
dispuesta unilateralmente, así como no dispone la aplicación del
Acuerdo sobre salvaguardias para el caso de la medida
provisional dictada conforme al supuesto del numeral 7 del mismo
artículo. 5.4 Asimismo, como se tiene señalado en el considerando
anterior, de los términos del mismo decreto supremo y el numeral
7 del artículo 16 del Protocolo que lo sustenta, se determina que
no se ha contemplado el reembolso o devolución del monto
pagado por concepto de salvaguardia de transición provisional;
tampoco se advierte un vacío legal pues las normas contenidas
en las disposiciones anotadas regulan la salvaguardia provisional
sometida a un periodo de duración, contemplan una finalidad
especifica de protección al mercado nacional. Las medidas han
sido expedidas conforme al procedimiento previsto en el Decreto
Supremo N° 023-2003-MINCETUR, en razón de la solicitud de la
Sociedad Nacional de Industrias a la Comisión de Fiscalización
de Dumping y Subsidios del Instituto Nacional de Defensa de la
Competencia y de la Protección de la Propiedad Intelectual –
INDECOPI, la aplicación de salvaguardias de transición a las
importaciones de confecciones textiles originarias de la República
Popular de China; sustentándose en el Informe N° 037-2003/CDS
elaborado por la Comisión antes referida y citado en la parte
considerativa del Decreto Supremo N° 026-2003-MINCETUR,
que determina la existencia de evidencias para la imposición de
salvaguardias de transición solicitadas “al haberse encontrado
indicios ciertos de que éstas han causado desorganización
74019
de mercado en este subsector”, que asimismo “el citado
informe ha determinado que existen circunstancias críticas
que justifican la aplicación de manera inmediata de medidas
de salvaguardia de transición provisional al haberse
comprobado un aumento significativo en la importaciones de
confecciones textiles de origen chino en lo que va del
presente año, por lo que de no interrumpirse esta tendencia,
se podría producir un perjuicio difícilmente reparable”,
además se sustenta en las consideraciones de la Comisión
Multisectorial en su sesión de fecha diecinueve de diciembre de
dos mil tres de que “se encuentra acreditada la desorganización
del mercado del sector confecciones producto del incremento
de las importaciones de confecciones textiles originarios de
la República Popular China”. Consideraciones fácticas que
justifican el establecimiento de la medida de transición provisional
en el decreto supremo, las mismas que no son objeto de debate
ni cuestionamiento en este proceso contencioso administrativo,
en el cual la controversia reside mas bien en que la empresa no
estaría afecta al cobro de la salvaguardia provisional por el
carácter de reembolsable o sujeta a devolución de los montos
pagados por salvaguardia; respecto de lo cual ya se ha
determinado de la normatividad aplicable que no se ha regulado
el reembolso ni devolución de montos pagados por tales
conceptos. SEXTO: SOBRE EL ACUERDO SOBRE
SALVAGUARDIAS. 6.1 Las impugnantes también alegan
infracción por inaplicación del artículo 6 del Acuerdo sobre
Salvaguardias. Cabe señalar que el citado Acuerdo tiene como
objetivo general mejorar y fortalecer el sistema de comercio
internacional basado en el GATT de mil novecientos noventa y
cuatro, y, “concretamente las de su artículo XIX (Medidas de
Urgencia sobre la importación de productos determinados), de
reestablecer el control multilateral sobre las salvaguardias y
suprimir las medidas que escapen a tal control”, reconoce la
importancia del reajuste estructural y necesidad de potenciar la
competencia en los mercados internacionales en lugar de
limitarla, así como reconoce que se requiere un acuerdo global
aplicable a todos los miembros y basado en los principios
fundamentales del GATT de mil novecientos noventa y cuatro
(parte considerativa del Acuerdo); regula la aplicación de medidas
de salvaguardia a un producto cuando las importaciones de éste,
hayan aumentado en tal cantidad en términos absolutos o en
relación con la producción nacional y se realicen en condiciones
tales, que causan o amenazan causar un daño grave a la rama de
producción nacional que produce similares o directamente
competidores (artículo 2.1 del Acuerdo). 6.2 Las consideraciones
del Acuerdo y el artículo antes citado, conlleva que el
establecimiento de medidas de salvaguardias no contraría el
objetivo de potenciar la competencia en los mercados
internacionales, y mas bien cuidando que se cumplan los objetivos
y no se afecte negativamente la producción nacional de un Estado
Parte, en determinadas circunstancias se posibilita la aplicación
de las medidas de salvaguardias, habiendo preferido la norma
internacional acoger éstas de entre las tres formas de protección
comercial
(antidumping,
medidas
compensatorias
por
subvenciones y salvaguardias). 6.3 Las medidas reguladas en el
Acuerdo se encuentran sometidas a exigencias y se condice con
el objetivo de potenciar la competencia en los mercados
internacionales procedimiento especial regulado en los numerales
del artículo 2, artículos 3, 4 y 5, referidos a las condiciones
presentadas para la aplicación de la medida de salvaguardias,
investigación conforme a procedimiento pre establecido y público,
determinación de la existencia de daño grave o amenaza de daño
grave y, supuestos para la aplicación de medidas de salvaguardias.
6.4 El Acuerdo regula en el artículo 6 la medida de salvaguardia
provisional, cuando se presenten circunstancias críticas en las
que cualquier demora entrañaría un perjuicio irreparable,
adoptándose la medida en virtud a una determinación preliminar
de la existencia de pruebas claras de que el aumento de las
importaciones han causado o amenazan causar un daño grave.
Dicho articulo contempla asimismo la posibilidad de reembolso de
los incrementos de los aranceles si en la investigación posterior
no se determina que el aumento de las importaciones ha causado
o amenazado causar un daño grave a una rama de producción
nacional; significando que no se trata de un reembolso automático
sino condicionado a la acreditación por investigación posterior
que el aumento de importaciones no ha ocasionado ni amenazado
causar el grave daño; y que el reembolso se encuentra previsto
para las medidas de salvaguardia provisional dictadas conforme
al artículo 6 del Acuerdo. Del supuesto normativo no se desprende
la posibilidad de que la empresa acredite o debata en razón del
requerimiento de cobro del tributo, que no se ha ocasionado el
daño o la amenaza, sino que en procedimiento adecuado las
autoridades pertinentes, en virtud de investigación posterior
determinen la inexistencia de daño o amenaza, dejando sin efecto
la salvaguardia provisional que se encuentre en vigencia y
aplicación, pues en concordancia con lo previsto en la norma
constitucional –artículo 74-, la extinción, derogación del tributo
creado por decreto supremo, igualmente debe realizarse por
disposición legal –decreto supremo, y de acuerdo al artículo 7 del
Decreto Supremo N° 23-2003-MINCETUR, las decisiones que
impongan medidas, que modifiquen o pongan fin a las mismas,
deberán ser publicadas en el diario oficial “El Peruano”. 6.5
Conforme a lo desarrollado en esta sentencia casatoria, la
74020
CASACIÓN
sentencia impugnada que en su sétimo considerando se remite al
numeral 7 de la Décimo Sexta Disposición General del Protocolo
de Adhesión de la República Popular China, interpretando
conforme al mismo que no expresa la obligación de devolver o
reembolsar el monto pagado por concepto de salvaguardia, se
encuentra conforme a derecho, no habiendo incurrido en
infracción normativa a los numerales 1 y 7 del artículo 16 del
referido protocolo, al artículo 6 del Acuerdo sobre Salvaguardias y
Resolución Legislativa N° 26047. SÉTIMO: DOCUMENTOS
REFERIDOS EN RESOLUCION IMPUGNADA. 7.1 La Resolución
del Tribunal Fiscal al resolver sobre la apelación de la Resolución
Jefatural de División N° 118-0152/2004-000984, del nueve de
setiembre de dos mil cuatro que sustentó las liquidaciones de
cobranza por salvaguardias de transición provisional y tributos
diferenciales, así como las liquidaciones de cobranza por
concepto de multa por comisión de infracciones previstas en el
artículo 103 inciso d) numerales 6 y 10 del Decreto legislativo N°
809, Ley General de Aduanas; se ampara complementariamente
en documentos respecto de los cuales, resulta pertinente hacer
mención. 7.2 Respectos a los informes y oficios emitidos por
autoridades nacionales, vienen a constituir medios probatorios
para acreditar hechos, conforme a lo previsto en los artículos 233,
234 y 239 del Código Procesal Civil de aplicación supletoria;
estando dirigido a un supuesto diferente, que como se tiene
dicho, no se encuentra en debate las razones y sustentos por los
que se dispuso la medida de transición provisional, ni la razones
para no establecer medidas definitivas, sino en concreto, en
aplicación de las normas del Protocolo de Adhesión de la
República Popular China, el asunto está orientado a la
procedencia de devolución o reembolso del pago efectuado por
salvaguardias de transición y como consecuencia de ello, el no
cobro a la empresa de las referidas salvaguardias. Sin perjuicio
de lo expuesto y en forma ilustrativa, cabe anotar, que de acuerdo
al Examen de las Políticas Comerciales, WT/TPR/S/189, pagina
veinticuatro, no se ha cuestionado la imposición y vigencia
durante el plazo, de las salvaguardias de transición provisional;
así en el numeral 88 se registra la aplicación por el Perú de
medidas de salvaguardias provisionales en dos ocasiones, en
diciembre de dos mil tres a confecciones textiles chinas en el
marco del mecanismo de salvaguardia de transición para
productos específicos contenido en el Protocolo de Adhesión de
República Popular China, la medida se aplicó por periodo de
doscientos días, luego de lo cual Perú decidió no aplicar medidas
de salvaguardias definitivas. En el numeral 89 anota la
investigación iniciada por el Perú en donde se argumentó que la
rama de producción nacional estaba conformada en gran
medida por micro y pequeñas empresas y se trataba de una
rama de producción atomizada, la investigación dio por
resultado la aplicación de salvaguardias provisionales por
doscientos días, el cuatro de mayo de dos mil cinco, el Perú la dio
por concluida sin imposición de medida de salvaguardia definitiva.
7.3 En cuanto a la comunicación de fecha treinta y uno de mayo
de dos mil doce del Centro de Asesoría Legal de la OMC, nos
remitimos a lo señalado en el segundo párrafo del considerando
4.2 de esta sentencia; además, se advierte que la indicada
comunicación se remite a una conducta particular adoptada por
las autoridades nacionales respecto a la devolución de
salvaguardias provisionales, interpretando de acuerdo a dicha
conducta que el Perú se remitió al artículo 6 del Acuerdo sobre
Salvaguardias para decidir reembolsar los derechos pagados
mientras las salvaguardias estuvieron vigentes. 7.4 Por otro
aspecto sobre los documentos internos con referencias al
reembolso de las salvaguardias de transición, no han tenido en
consideración que respecto de los tratados internacionales no se
trata de asumir o disminuir derechos y obligaciones, sino lo que
corresponda, como lo ha señalado la OMC en el caso IndiaPatentes (Estados Unidos) párrafo 46 (WT/DS50/AB/R)19, en el
sentido que las reglas deben respetarse y aplicarse al interpretar
el Acuerdo sobre los ADPIC o cualquier otro de los acuerdos
abarcados; que tanto los grupos especiales como el Órgano de
Apelación deben guiarse por las normas de interpretación de los
tratados establecidas en la Convención de Viena y no deben
asumir ni disminuir los derechos y obligaciones previstos en
el Acuerdo sobre la OMC. 7.5 Finalmente, sin perjuicio de lo
señalado en los considerandos anteriores sobre las reglas de
interpretación de los tratados, cabe anotar lo expresado por la
OMC respecto a que sus normas no son rígidas e inflexibles,
permitiendo juicios razonados para hacer frente al interminable
y siempre cambiante flujo y reflujo de los hechos reales, en el
mundo real; pues así sirven mejor al sistema de comercio
multilateral si se interpretan con ese espíritu, consiguiendo la
seguridad y previsibilidad que se busca para el sistema de
comercio multilateral20; no es cuestión de proscribir las medidas
de salvaguardias, sino que éstas cumplan su finalidad dentro del
sistema, en un entorno jurídico de seguridad y previsibilidad
otorgando confianza en las relaciones comerciales multilaterales,
logrando así su objetivo de preservar las condiciones del
mercado; que las importaciones no tengan un efecto negativo
llevando a circunstancias críticas, desorganización, con perjuicios
difícilmente reparables que afecten a la producción y mercado
nacional; las salvaguardias utilizadas con razonabilidad son
compatibles con el nuevo sistema de la OMC que reconoce las
asimetrías económicas y políticas, se orienta a la transparencia, y
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Lunes 1 de febrero de 2016
a un sistema multilateral de comercio más justo y más abierto en
beneficio y por el bienestar de los pueblos. III. DECISIÓN: Por las
consideraciones expuestas: declararon INFUNDADOS los
recursos de casación interpuestos por las co demandadas
Corporación July’s Sociedad Anónima Cerrada, de fecha diez de
diciembre de dos mil diez, obrante a fojas ciento tres del
cuadernillo de casación formado por la Sala Civil Transitoria de la
Corte Suprema de Justicia de la República; y, el Ministerio de
Economía y Finanzas - MEF, de fecha primero de diciembre de
dos mil diez, a fojas ochenta y cuatro del mismo cuadernillo, en
consecuencia; NO CASARON la sentencia de vista de fecha
trece de setiembre de dos mil diez, obrante a fojas cincuenta y
ocho del referido cuadernillo, emitida por la Sala Civil Transitoria
de la Corte Suprema de Justicia de la República; en los seguidos
por la Superintendencia Nacional de Aduanas y Administración
Tributaria - SUNAT contra el Ministerio de Economía y Finanzas
- MEF y la Corporación July’s Sociedad Anónima Cerrada, sobre
Impugnación de Resolución Administrativa; DISPUSIERON la
publicación de la presente resolución en el diario oficial “El
Peruano”, conforme a ley; y los devolvieron. SS. SIVINA
HURTADO, ACEVEDO MENA, MORALES PARRAGUEZ, RUEDA
FERNÁNDEZ. EL VOTO EN MINORÍA DEL JUEZ SUPREMO
VINATEA MEDINA ES COMO SIGUE: VISTA: Con el
acompañado, la causa número un mil noventa y tres – dos mil
once; en Audiencia Pública llevada a cabo en la fecha; con lo
expuesto con el Dictamen Fiscal Supremo en lo Contencioso
Administrativo; en audiencia pública llevada a cabo en la fecha,
integrada con los Señores Jueces Supremos Sivina Hurtado
(Presidente), Acevedo Mena, Vinatea Medina, Morales Parraguez
y Rueda Fernández; oído el informe oral del abogado de la parte
demandante, don Joan Escobedo Pastor; y luego de producida la
votación con arreglo a ley, se emite la siguiente sentencia: I.MATERIA DE LOS RECURSOS DE CASACION: Se trata de los
recursos de casación interpuesto por Corporación JULY’S
Sociedad Anónima Cerrada, obrante a fojas ciento tres; y por el
Ministerio de Economía y Finanzas obrante a fojas ochenta y
cuatro; ambas contra la sentencia de vista de fecha trece de
setiembre de dos mil diez, de fojas cincuenta y ocho, del cuaderno
formado en la Sala Civil Transitoria de la Corte Suprema de
Justicia de la República, que confirmando la apelada de fecha
treinta de setiembre de dos mil ocho, de fojas ciento noventa y
uno declaró fundada la demanda sobre Proceso Contencioso
Administrativo. II.- FUNDAMENTOS POR LOS CUALES SE HAN
DECLARADO PROCEDENTES LOS RECURSOS: Esta Sala
Suprema mediante resoluciones de fecha siete de noviembre de
dos mil once, corrientes a fojas setenta y ocho y ochenta y dos del
cuaderno de casación, se han declarado procedentes los recursos
de casación interpuestos por Corporación JULY’S Sociedad
Anónima Cerrada respecto a la causal de inaplicación del
artículo 6 del Acuerdo sobre Salvaguardias y de la Resolución
Legislativa N° 26047, al haber alegado que dichas normas
claramente establecen la obligación de la Administración de
devolver o reembolsar con prontitud el monto pagado por
concepto de salvaguardia provisional, basado en una
determinación provisional, si en la investigación posterior no se
determina que el aumento de las importaciones ha causado o
amenazado causar grave daño a una rama de la producción
nacional; en consecuencia, no habiéndose establecido en el
procedimiento respectivo que el aumento de las importaciones de
los productos chinos, a que se refiere el Decreto Supremo N°
026-2003-MINCETUR, habría causado o amenazado causar un
daño grave a una rama de la producción nacional, ni habiéndose
publicado Decreto Supremo alguno que disponga la aplicación de
las salvaguardias de transición en forma definitiva, de conformidad
con lo establecido en el artículo 6 del Acuerdo sobre Salvaguardias,
el Estado Peruano a través de la Administración Aduanera, debe
dejar de cobrar las salvaguardias de transición provisionales que
se han liquidado en virtud de lo establecido en el Decreto
Supremo N° 026-2003-MINCETUR. En ese sentido, precisó que
no habiendo pagado las medidas de salvaguardia de transición
provisionales por las importaciones amparadas en la Declaración
Única de Aduana N° 118-2004-10-050866-01-1-00 impuestas por
Decreto Supremo N° 026-2003-MINCETUR, tampoco procede
que la Administración Aduanera formule cobranza alguna por este
concepto, al no haberse establecido finalmente la aplicación de
las salvaguardias de transición en forma definitiva, tal como lo
señala la Resolución del Tribunal Fiscal N° 3801-A-2006; y, el
recurso de casación interpuesto por el Ministerio de
Economía y Finanzas - MEF, por las denuncias de infracción
normativa del numeral 1 del artículo 16 del Protocolo de
Adhesión de la República Popular China y del artículo 6 del
Acuerdo sobre Salvaguardias, habiendo sostenido el
impugnante que la Sala incurre en un grave error al inaplicar
dichas normas, por cuanto considera que en el numeral 7 de la
Décimo Sexta Disposición General del Protocolo de Adhesión de
la República Popular China a la Organización Mundial de
Comercio, no se establece de manera expresa la obligación de
devolver o reembolsar el monto pagado por concepto de
salvaguardias de transición provisionales, por lo que, considera
que no resulta aplicable lo previsto en el artículo 6 del Acuerdo
sobre Salvaguardias, toda vez que, así lo indica, no existe vacío
legal, sino la intención de los autores del protocolo de no permitir
la devolución o reembolso; en cuanto a la infracción normativa
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CASACIÓN
del literal c) del numeral 1 del artículo 11 del Acuerdo sobre
Salvaguardias, alega el recurrente que la Sala ha efectuado una
interpretación aislada de la norma, pues lo dispuesto en el
Decreto Supremo N° 026-2003-MINCETUR que se refiere al
citado acuerdo de la Organización Mundial de Comercio – OCM si
resulta aplicable frente a ese vacío legal en el que ha incurrido el
Protocolo de Adhesión de la República Popular China; respecto a
la denuncia infracción normativa del numeral 7 de la Décima
Sexta Disposición General del Protocolo de Adhesión de la
República Popular China, señala el impugnante que la Sala no
considera que en dicho protocolo existe un vacío legal respecto a
aquellos casos en los que habiéndose aplicado provisionalmente
las salvaguardias de transición, el Estado que las impuso decide
no imponer dichas salvaguardias, lo cual de acuerdo a lo
dispuesto en el artículo 16 numeral 1 del propio protocolo resulta
aplicable a fin de cubrir el vacío legal existente en el Protocolo de
Adhesión, en tal sentido, al aplicarse el numeral 7 de la Décimo
Sexta Disposición General del Protocolo de Adhesión de la
República Popular China esta debe hacerse en virtud de lo
establecido en el artículo 16 numeral 1 y del artículo 6 del Acuerdo
Sobre Salvaguardias, normas que no han sido aplicadas por la
Sala al momento de resolver y que ha dado lugar a que la Sala
realice una incorrecta aplicación del artículo antes citado. III.ANTECEDENTES: 1. Procedimiento Administrativo. i)
Mediante Declaración Única de Aduana N° 118-2004-10-05086601-1-00, de fecha treinta de abril de dos mil cuatro, de fojas
catorce del expediente acompañado, la Empresa Corporación
JULY´S Sociedad Anónima Cerrada solicitó a consumo
mercancías consistentes en confecciones textiles (prendas de
vestir), declaración en la que se precisa que la mercancía tiene
como país de origen Colombia, y como país de embarque
Panamá. ii) En los boletines químicos números 118-004723-2004,
118-004984-2004, 118-004985-2004 y 118-004986-2004 de
fechas siete y doce de mayo de dos mil cuatro, de fojas uno y dos
del expediente acompañado, que guardan relación con la
Declaración Única de Aduana - DUA N° 118-2004-10-050866-011-00, igualmente se precisó que las mercancías importadas
tenían como país de origen Colombia. iii) No obstante lo declarado
por la Empresa Corporación JULY´S Sociedad Anónima Cerrada;
por Informe N° 704-2004-SUNAT -3D0500 de fecha veinticuatro
de junio de dos mil cuatro, la Intendencia de Aduana Marítima del
Callao remite a la Jefa de la División de Laboratorio Central,
dieciséis muestras correspondientes a la Declaración Única
Arancelaria - DUA N° 118-2004-10-50866-01-1-00 para su
análisis e informe correspondiente; apreciándose del Cuadro N° 1
de fojas cinco a nueve del expediente acompañado que en el ítem
descripción, con relación a las series números dos, cuatro, ocho,
nueve, diez, once, catorce, quince, dieciocho y diecinueve se
precisa que las mercancías importadas contienen etiquetas que
no indican la procedencia o el país de procedencia de tales
mercancías; y solo respecto de las series números tres, cuatro,
siete, doce, quince y diecisiete se precisa que las mercancías
importadas contienen etiquetas que indican “hecho en Colombia”.
iv) Se aprecia además de la Ficha de Participación de Veedores
N° 707-2004-ADUANAS-01211, de fecha cuatro de mayo de dos
mil cuatro, de fojas once del acompañado, que guarda relación
con la Declaración Única Arancelaria - DUA N° 118-2004-1050866-01-1-00 que en el ítem observaciones se precisó “partidas
arancelarias incluidas en el listado de salvaguardias. – Para las
prendas de código 82544B se encontró etiquetas de origen donde
se especifica origen china de marca comercial Leona (…). v)
Cabe añadir que a fojas cincuenta y uno del acompañado obra la
notificación efectuada por la Superintendencia Nacional de
Administración Tributaria Marítima del Callao a la Agencia de
Aduana Rabanal Sociedad Anónima Cerrada donde se precisa
que con relación a las incidencias presentadas en el despacho de
la Declaración Única Arancelaria - DUA 050866-04 y a las
observaciones en la documentación presentada, se sirva efectuar
sus descargos, por cuanto en el reconocimiento físico del cien por
ciento (100%) de la mercancía presentada a despacho, se
encontró mercadería presentando etiqueta con origen Colombia,
China y sin origen; además que las facturas comerciales números
mil ochocientos treinta y tres y mil ochocientos treinta y cuatro no
consignan la vigencia de los precios declarados y tampoco
indican el nombre o cargo del funcionario que las suscribe. vi) Al
respecto, todas las incidencias anotadas precedentemente dieron
lugar a que por Acta de Inmovilización – Incautación y Comiso N°
118-2004-0101 de fecha seis de julio de dos mil cuatro se
inmovilizarán e incautarán la totalidad de las mercancías
consignadas en las actas respectivas, en aplicación de la Ley de
los Delitos Aduaneros N° 28008, y de su Reglamento Decreto
Supremo N° 121-2003-EF, que autorizan a la autoridad aduanera
detener el despacho de mercancías cuando se detecte indicios de
delito conforme a lo establecido en los artículos 4 y 5 de la citada
ley. vii) Corporación JULY´S Sociedad Anónima Cerrada solicitó el
levante de las mercancías amparadas en la Declaración Única de
Aduana – DUA N° 118-2004-10-050866-01-1-00 por considerar
que se había acreditado el origen legal de dichas mercancías y se
había cancelado los derechos arancelarios correspondientes. viii)
Posteriormente, la Intendencia de Aduana Marítima del Callao
emitió la Resolución Jefatural de División N° 118-0152/2004000984 de fecha nueve de setiembre de dos mil cuatro, por la que
anuló el Acta de Inmovilización N° 118-2004-0101-00105 de fecha
74021
cuatro de mayo de dos mil cuatro al haberse sustituido por el Acta
de Inmovilización N° 118-2004-0101-00166 de fecha seis de julio
de dos mil cuatro formulada en mérito al artículo 10 del
Reglamento de la Ley de Delitos Aduaneros vigente hasta la
culminación de las investigaciones; improcedente lo solicitado por
la Agencia de Aduana Rabanal Sociedad Anónima Cerrada
mediante Expediente N° 118-2004-032817-6, precisando que
debe continuarse con la inmovilización de la mercancía conforme
a lo establecido en el Reglamento de la Ley de Delitos Aduaneros;
formular la liquidación de cobranza por los tributos dejados de
pagar en las series uno, dos, cuatro y ocho al diecinueve de la
Declaración Única Arancelaria - DUA N° 118-2004-10-050866-011-00, notificando su cobro a la Empresa Corporación JULY´S
Sociedad Anónima Cerrada por la suma de seis mil quinientos
veintiséis con 22/100 dólares americanos (US $ 6,526.22)
correspondiendo por concepto de salvaguardia: cinco mil
trescientos noventa y tres con 57/100 dólares americanos (US $
5,393.57); Impuesto General a las Ventas - IGV: Un mil veinticuatro
con 78/100 dólares americanos (US $ 1, 024.78); e Impuesto de
Promoción Municipal - IPM: Ciento siete con 87/100 dólares
americanos (US $ 107.87); sancionar a la Empresa referida a la
multa ascendente de diecinueve mil quinientos setenta y ocho
con 66/100 dólares americanos (US $ 19, 578.66) conforme a lo
establecido en el artículo 103, inciso d), numeral 6 de la Ley
General de Aduanas aprobada por Decreto Legislativo N° 809,
concordante con la Tabla de Sanciones aplicables a las
infracciones previstas en la Ley General de Aduanas aprobada
por Decreto Supremo N° 122-96-EF, modificada por los Decretos
Supremos Nº 027 y Nº 050-2000-EF y Nº 030-2001-EF; y a una
multa ascendente a cero punto diez por ciento (0.10%) de una
Unidad Impositiva Tributaria - UIT por incorrecta asignación de la
especie en la serie siete (7) de la Declaración Única Arancelaria
- DUA N° 118-2004-10-050866. ix) En cuanto a las multas
impuestas en sede administrativa por las infracciones previstas
en los numerales 6 y 10, inciso d), artículo 103 del Decreto
Legislativo N° 809, conforme a dichas disposiciones normativas
se sancionó a la Empresa Corporación JULY´S Sociedad Anónima
Cerrada por haber declarado información incorrecta respecto de
las mercancías en cuanto a su origen; así como haber asignado
partidas arancelarias distintas a tales mercancías. x) Corporación
JULY´S Sociedad Anónima Cerrada interpuso recurso de
reclamación contra la Resolución Jefatural de División N° 1180152/2004-000984 de fecha nueve de setiembre de dos mil
cuatro, recurso que fue declarado infundado por Resolución
Directoral N° 118 3D1000/2005-000456 del cinco de setiembre de
dos mil cinco. xi) Luego Corporación JULY´S Sociedad Anónima
Cerrada interpuso recurso de apelación contra la Resolución
Directoral N° 118 3D1000/2005-000456 del cinco de setiembre de
dos mil cinco que declaró infundado su recurso de reclamación.
xii) Por escrito del trece de marzo de dos mil seis, obrante a fojas
doscientos veintinueve del expediente administrativo Corporación
JULY´S Sociedad Anónima Cerrada solicitó el levantamiento del
Acta de Inmovilización N° 118-2004-0101-00166 del seis de julio
de dos mil cuatro, que sustituyó al Acta de Inmovilización N° 1182004-0101-00105 del cuatro de mayo de dos mil cuatro,
correspondiente a la mercadería amparada en la Declaración
Única Arancelaria - DUA N° 118-2004-10-050866-01-1-00. xiii)
Por Resolución del Tribunal Fiscal N° 03801-A-2006 del trece de
julio de dos mil seis se revocó por mayoría la Resolución Directoral
N° 118 3D1000/2005-00456 del cinco de setiembre de dos mil
cinco, expedida por la Intendencia de Aduana Marítima del Callao,
en el extremo que se refiere a las salvaguardias, impuesto general
a las ventas e impuesto de promoción municipal determinados en
la Declaración Única Arancelaria - DUA N° 118-2004-10-05086601-1-00, así como la multa por la infracción establecida en el
numeral 6 inciso d) del artículo 103 de la Ley General de Aduanas
(Decreto Legislativo N° 809); y confirma la Resolución Directoral
N° 118 3D1000/2005-000456 del cinco de setiembre de dos mil
cinco, en el extremo que dispuso sancionar a la recurrente con
multa por la infracción establecida en el numeral 10 del inciso d)
del artículo 103 de la Ley General de Aduanas. xiv) Cabe precisar
en cuanto a las multas impuestas a la Empresa Corporación
JULY´S Sociedad Anónima Cerrada por la infracción prevista en
el numeral 6, inciso d), artículo 103 del Decreto Legislativo N°
809, que conforme a dicha norma cometen infracción sancionable
con multa los declarantes o despachadores de aduana cuando
formulen declaraciones incorrectas o proporcionen información
incompleta de las mercancías en cuanto a su origen. En el
presente caso, conforme se ha precisado en la Resolución del
Tribunal Fiscal N° 03801-A-2006 respecto del origen de las
mercancías, se habría determinado una incorrecta declaración
del origen de las mismas amparadas en la DUA N° 118-2004-10050866-01-1-00, razón por la cual la empresa recurrente se
encontraría incursa en la infracción referida; no obstante ello,
cabe señalar que se debe tener en cuenta que la multa aplicable
por la supuesta infracción cometida es equivalente al triple de los
tributos dejados de pagar, según lo establecido en la Tabla de
Sanciones aprobada por Decreto Supremo N° 122-96-EF,
modificada por Decreto Supremo N° 122-96-EF; por lo tanto, al no
haberse dejado de pagar los tributos en la declaración referida,
por no corresponder que se formule cobranza alguna por
concepto de salvaguardias, efectivamente el cálculo de la multa
es igual a cero, tal como lo ha desarrollado la Administración. xv)
74022
CASACIÓN
En cuanto a la multa impuesta por la infracción prevista en el
numeral 10, inciso d), artículo 103 del Decreto Legislativo N° 809,
el hecho de que la Empresa Corporación JULY´S Sociedad
Anónima Cerrada haya asignado una subpartida nacional
incorrecta a la mercancía declarada, como lo ha precisado la
Administración, y así se aprecia del expediente administrativo no
ha tenido incidencia tributaria en la Declaración Única Arancelaria
- DUA N° 118-2004-10-050866-01-1-00, ya que el cambio de tales
sub partidas no implica un mayor cobro de tributos porque a pesar
que la mercancía es de origen chino, no sería aplicable a dichas
importaciones las salvaguardias de transición provisional
establecidas en el Decreto Supremo N° 026-2003-MINCETUR, de
tal manera que no sería aplicable a tales importaciones la multa
equivalente al doble de los tributos dejados de pagar que se debe
imponer cuando se comete la infracción establecida en el artículo
103 inciso d) numeral 10 del Decreto Legislativo N° 809, con
incidencia tributaria. xvi) Finalmente, de acuerdo a lo previsto en
la Tabla de Sanciones aprobada por Decreto Supremo N° 122-96EF, modificada por Decreto Supremo N° 030-2001-EF,
correspondía aplicar en la Declaración Única Arancelaria - DUA
N° 118-2004-10-050866-01-1-00 multas equivalentes a cero
punto diez por ciento (0,10%) de una Unidad Impositiva Tributaria
- UIT, precisamente porque la asignación de una subpartida
nacional incorrecta a la mercancía declarada en ella no había
tenido incidencia tributaria. Al respecto, se aprecia de los
actuados que la Administración Aduanera impuso la referida
multa únicamente con relación a la serie siete (7) de la declaración
única bajo referencia, respecto de la cual la recurrente ha
asignado una subpartida nacional incorrecta a la mercancía
declarada, lo cual es correcto; y por tal razón correspondería que
la Administración determinara las multas aplicables a las series
ocho, nueve, diez, once, doce, trece, catorce, quince, dieciséis,
diecisiete, dieciocho y diecinueve de la Declaración Única
Arancelaria - DUA N° 118-2004-10-050866-01-1-00, ya que en
alguna de ellas también se ha cometido la infracción prevista en
el artículo 103 inciso d) numeral 10 del Decreto Legislativo N°
809, al haber asignado una sub partida nacional incorrecta a la
mercancía declarada sin incidencia tributaria, para lo cual se
deberá tener en cuenta el criterio adoptado en las Resoluciones
del Tribunal Fiscal Nº 2425-A-2003 del ocho de mayo de dos mil
tres y Nº 7076-A-2003 del cinco de diciembre de dos mil tres.
Corresponde además, como lo ha precisado con acierto el
Tribunal Fiscal que se otorgue el levantamiento de las mercancías
previo pago de las multas. 2. Demanda. La Superintendencia
Nacional de Administración Tributaria - SUNAT, pretende se
declare la nulidad total de la Resolución del Tribunal Fiscal N°
03801-A-2006 del trece de julio de dos mil seis. Como sustento de
su demanda expone que Corporación JULY´S Sociedad Anónima
Cerrada mediante la Declaración Única de Aduana – DUA N° 1182004-10-050866-01-1-00, de fecha treinta de abril de dos mil
cuatro, tramitada ante la Intendencia de Aduana Marítima del
Callao, solicitó a consumo mercancías consistentes en
confecciones textiles (prendas de vestir), sin embargo, se
formalizó la inmovilización de la totalidad de las mercancías, en
aplicación de la Ley de los Delitos Aduaneros N° 28008, y su
Reglamento Decreto Supremo N° 121-2003-EF, que autoriza a la
autoridad aduanera detener el despacho de mercancías cuando
se detecte indicios del delito previsto en los artículos 4 y 5 de la
citada ley. Ante la decisión de la Administración, la demandada
interpuso los respectivos medios impugnatorios, para finalmente
expedirse la Resolución del Tribunal Fiscal N° 03801-A-2006 del
trece de julio de dos mil seis, cuya nulidad es materia del presente
proceso contencioso administrativo. Añade que, el Tribunal Fiscal
ha sostenido que la sanción a aplicarse a la Empresa Corporación
JULY´S Sociedad Anónima Cerrada por haber incurrido en la
infracción prevista en el numeral 6 inciso d) del artículo 103 del
Decreto Legislativo N° 809 es equivalente al triple de los tributos
dejados de pagar, con lo cual estaría de acuerdo. Sin embargo,
acto seguido el Tribunal Fiscal ha señalado que al no haberse
dejado de pagar tributo alguno en la Declaración Única Arancelaria
- DUA N° 118-2004-10-050866-01-1-00, por no corresponder el
pago de salvaguardias, el cálculo de la multa sería igual a cero,
afirmación con la que el Tribunal implícitamente desconocería la
facultad que la Administración tenía para exigir el pago de la
multa durante el período que estuvo vigente la salvaguardia de
transición provisional, lo cual carece de asidero legal. En ese
sentido, precisa que la infracción se configuró el día de la
numeración de la Declaración Única Arancelaria - DUA N° 1182004-10-050866-01-1-00, cuando la obligación de pagar
salvaguardias de transición provisionales se encontraba vigente a
la fecha de la infracción según el Decreto Supremo N°
026-2003-MINCETUR; por tanto, de acuerdo al artículo 104 del
Decreto Legislativo, la multa es exigible desde la fecha de
infracción, entendiéndose por ello que el monto determinado a
esa fecha ascendía a diecinueve mil quinientos setenta y nueve
con 00/100 dólares americanos (US $ 19, 579.00), equivalente al
triple de los derechos por concepto de salvaguardias dejados de
pagar; en consecuencia, el cobro del concepto de la multa por
declaración incorrecta de origen es totalmente exigible desde la
fecha de la infracción, debiendo determinarse el monto de la
multa en ese momento de acuerdo al principio de legalidad y no
con posterioridad – después de los doscientos (200) días – como
pretende el Tribunal; por lo que, la Resolución del Tribunal Fiscal
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N° 03801-A-2006 deviene en nula conforme a lo previsto en el
artículo 10 de la Ley N° 27444. 3. Contestación. Ministerio de
Economía y Finanzas: Por escrito del ocho de enero de dos mil
siete, a fojas cuarenta, el Procurador del Ministerio de Economía
y Finanzas - MEF, contesta la demanda señalando respecto a la
aplicación de salvaguardia de transición provisional establecida
mediante Decreto Supremo N° 026-2003-MINCETUR y solicitud
de levante de mercancías inmovilizadas, que el Estado Peruano a
través de la Comisión de Fiscalización de Dumping y Subsidios
del Instituto Nacional de Defensa de la Competencia y de la
Protección de la Propiedad Intelectual - INDECOPI y de la
Comisión Multisectorial, no determinó en dicho procedimiento que
el aumento de las importaciones de los productos chinos, había
causado o amenazado causar daño grave a una rama de la
producción nacional. En consecuencia, resultaría de aplicación lo
establecido en el artículo 6 del Acuerdo de Salvaguardias con
arreglo al numeral 1 del artículo 16 del Protocolo de Adhesión de
la República Popular China a la Organización Mundial de
Comercio, por tanto, se debe devolver lo pagado por las
salvaguardias de transición provisionales en virtud a lo establecido
en el Decreto Supremo referido. Más aún, que según el Informe
N° 015-2004-EF/67, se concluye que las salvaguardias de
transición provisional establecidas en el Decreto Supremo N°
026-2003-MINCETUR son un derecho arancelario y según lo
establece el Acuerdo de Salvaguardias en caso no se determine
que el aumento de las importaciones haya causado o amenazado
causar un daño grave a una rama de la producción nacional se
procederá con el reembolso inmediato. Corporación JULY’S
Sociedad Anónima Cerrada: Por escrito del doce de setiembre
de dos mil siete, a fojas noventa y seis, sostiene que la
demandante Superintendencia Nacional de Administración
Tributaria - SUNAT pretende desconocer la aplicación de lo
dispuesto en el artículo 6 del Acuerdo de Salvaguardias que
claramente establece la obligación de la Administración de
devolver o reembolsar con prontitud el monto pagado por
concepto de salvaguardia provisional basado en una
determinación provisional, si en la investigación posterior no se
determina que el aumento de las importaciones ha causado o
amenazado causar un grave daño a un rama de la producción
nacional. En ese sentido, precisa que una consecuencia lógica
que fluye del mismo Acuerdo sobre Salvaguardias y de todos los
acuerdos contenidos en el Acta Final de la Organización Mundial
del Comercio - OMC es que si no procede aplicar de forma
definitiva las salvaguardias, las aplicadas provisionalmente deben
devolverse o reembolsarse porque en tales circunstancias la
determinación preliminar que las sustentó habría quedado
desvirtuada. En el caso que nos ocupa y aplicando el mismo
criterio, no habiendo la recurrente pagado las medidas de
salvaguardia de transición provisionales por las importaciones
amparadas en la Declaración Única de Aduana – DUA N° 1182004-10-050866-01-1-00 impuestas por Decreto Supremo N°
026-2003-MINCETUR, tampoco procede que la Administración
Aduanera formule cobranza alguna por este concepto, al no
haberse establecido finalmente la aplicación de las salvaguardias
de transición en forma definitiva, tal como lo señala la Resolución
del Tribunal Fiscal N° 03801-A-2006. Finalmente señala que con
relación a lo resuelto sobre las sanciones por multa, lo resuelto
por el Tribunal Fiscal se ajusta a derecho y debe dejarse sin
efecto las cobranzas de tales multas. 4. Sentencia de Primer
Grado. El A quo ha declarado fundada la demanda y nula la
Resolución del Tribunal Fiscal N° 03801-A-2006 del trece de julio
de dos mil seis, sustentando su decisión en que el Estado
Peruano ha emitido el Decreto Supremo N° 023-2003-MINCETUR
a través del cual se regula el procedimiento especial para la
aplicación de la medida de salvaguardia, y por Decreto Supremo
N° 026-2003-MINCETUR se estableció la salvaguardia de
transición provisional a importaciones de confecciones textiles
originarias de la República Popular China, en virtud del artículo 16
numeral 7 del Protocolo de Adhesión de la República Popular
China a la Organización Mundial de Comercio, por cuanto
conforme al Informe N° 037-2003/CDS elaborado por la Comisión
de Fiscalización de Dumping y Subsidios del Instituto Nacional de
Defensa de la Competencia y de la Protección de la Propiedad
Intelectual - INDECOPI se encontró indicios ciertos de que la
importación de confecciones textiles de origen chino había
causado desorganización del mercado peruano por un sobre
ingreso de los productos chinos, lo que evidenciaba circunstancias
críticas que justificaban la aplicación inmediata de dichas
medidas. De otro lado, precisó que la Comisión Multisectorial
consideró que se encontraba acreditada la desorganización del
mercado en el sector confecciones, producto del incremento de
las importaciones de confecciones textiles originarias de la
República Popular China, llegando a la conclusión que la medida
de salvaguardia provisional a las importaciones en referencia
fueron efectuadas conforme a ley. Añade que, al advertirse que la
empresa demandada ha cometido la infracción tipificada en el
artículo 103 inciso d) numeral 10 de la Ley General de Aduanas,
le corresponde pagar la multa impuesta. 5. Sentencia de Segundo
Grado. El Ad quem confirma la decisión de primera instancia,
declarando fundada la demanda; en consecuencia, nula la
Resolución del Tribunal Fiscal Nº 03801-A-2006 de fecha trece de
julio de dos mil seis, precisando que las salvaguardias son
medidas de emergencia para proteger la industria nacional que se
El Peruano
Lunes 1 de febrero de 2016
CASACIÓN
ve amenazada ante el creciente aumento absoluto o relativo de
las importaciones a territorio nacional de un determinado país. En
ese sentido, agrega que el Protocolo de Adhesión de la República
Popular China a la Organización Mundial de Comercio – OMC, en
el numeral 7 de la Décimo Sexta Disposición General establece la
aplicación de salvaguardias de transición provisionales; empero,
no determina de manera expresa la obligación de devolver o
reembolsar el monto pagado por concepto de salvaguardias de
transición provisionales, por lo que, no es factible que por
analogía se pretenda aplicar lo previsto en el artículo 6 del
Acuerdo sobre Salvaguardias para pretender la devolución o
reembolso del monto pagado por dicho concepto, toda vez que,
no existe vacío legal, sino la intención de los autores del Protocolo
de Adhesión de la República Popular China a la Organización
Mundial de Comercio – OMC, de no permitir la devolución o
reembolso. Finalmente señala, que al advertirse que la empresa
demandada ha cometido la infracción tipificada en el artículo 103
incido d) numerales 6 y 10 de la Ley General de Aduanas, le
corresponde pagar la multa impuesta. IV. CONSIDERANDO.
PRIMERO: Economía social de mercado dentro del marco de
economía globalizada y respeto de libre comercio. Son veinte
años desde que nuestro país inició un proceso de
institucionalización a fin de recuperar la legitimidad de las
instituciones del Estado, afianzándolas para cambiar de esta
manera la imagen proyectada al exterior. Al proceso de
institucionalización, se suma la integración económica en un
escenario de economía social de mercado imperante, conforme a
los parámetros de constitucionalidad contenidos en los artículos
58, 61 y 63 de la Constitución Política del Estado Peruano,
conforme a los cuales la iniciativa privada es libre, y se ejerce en
una economía social de mercado, bajo un marco normativo con
reglas claras donde prevalece la libre competencia,
garantizándose la eliminación de toda práctica que la limite y el
abuso de posiciones dominantes o monopólicas. Bajo este
régimen económico, el Estado Peruano orienta el desarrollo del
país, y actúa principalmente en las áreas de promoción de salud,
educación, seguridad, servicios públicos, infraestructura, empleo,
industria, comercio, entre otros. SEGUNDO: La globalización y
la integración de los mercados.- Influencia en la apertura
comercial. La globalización y la integración de los mercados han
dado paso a los mercados transnacionales, donde los países
acuden a ofrecer bienes, servicios, capitales, y tecnología;
compitiendo entre ellos bajo reglas de competencia leal y libre
comercio internacional. En ese sentido, en nuestro país desde
hace ya dos décadas se ha impulsado reformas a la liberalización
del comercio tanto interno como externo, conforme a la tendencia
de la Organización Mundial de Comercio - OMC. La consecuencia
de la globalización e integración ha influido notoriamente en la
apertura comercial cuyo beneficiario final somos nosotros los
consumidores por cuanto encontramos en el mercado diversidad
de bienes y servicios, además se promueve entre las empresas
del país una competencia eficaz, ofreciendo tales productos y
servicios de mejor calidad ante el desarrollo interno y la entrada al
país de productos también de calidad, a través de las
importaciones. TERCERO: Salvaguardias en el marco de la
Organización Mundial de Comercio - OMC.- Naturaleza
Jurídica. Ante la apertura comercial, se presentan nuevos
problemas por afrontar por parte de los Estados, uno de ellos
precisamente es la creciente importación de productos que
constituya una amenaza o daño real del mercado nacional por
desestabilización del mismo. Ante ello los gobiernos deben
procurar que las medidas adoptadas no incidan negativamente en
el libre comercio y en los mercados transnacionales. En esa
orientación, la Organización Mundial de Comercio – OMC
establece las medidas relacionadas con la defensa comercial que
los países miembros pueden establecer como son: a) Medidas
antidumping; b) Medidas Compensatorias; y, c) Salvaguardias.
Las medidas antidumping y compensatorias, tienen su razón de
ser ante la demostración de la existencia de prácticas comerciales
desleales (copar mercados y eliminar la competencia, debido a
que cuentan con el suficiente volumen de producción para vender
a un precio menor al costo de producción) con relación a
productos importados que causan un daño importante o una
amenaza de dicho daño en la economía de un país. En cambio,
las salvaguardias constituyen una defensa comercial que
neutraliza distorsiones en la economía de un país determinado,
ocasionadas por un súbito y significativo volumen de las
importaciones de determinados productos. CUARTO: La cláusula
de salvaguardia del Acuerdo General Sobre Aranceles Aduaneros
y Comercio – GATT de mil novecientos cuarenta y siete21, está
prevista en el artículo XIX de dicho acuerdo, como medidas de
urgencia sobre la importación de productos en casos particulares,
el cual establece en su párrafo 1.a): “Si como consecuencia de la
evolución imprevista de las circunstancias y por efecto de las
obligaciones, incluidas las concesiones arancelarias, contraídas
por una parte contratante en virtud del presente Acuerdo, se
importa un producto en el territorio de esta parte contratante en
cantidades tan mayores y en condiciones tales que cause o
amenace causar un perjuicio grave a los productores nacionales
de los productos similares y directamente competidores, dicha
parte contratante podrá, en la medida y durante el tiempo que
sean necesarios para prevenir o reparar ese perjuicio, suspender
total o parcialmente la obligación contraída respecto de dicho
74023
producto o retirar o modificar la concesión”. De otro lado, la parte
final del párrafo 2 del referido artículo XIX señala: “En
circunstancias críticas en las que cualquier demora entrañaría un
perjuicio difícilmente reparable, las medidas previstas en el
párrafo 1 de este artículo podrán ser adoptadas provisionalmente
sin consulta previa, a condición de que esta se efectúe
inmediatamente después de que se hayan adoptado las medias
citadas”. QUINTO: Ronda de Uruguay de Negociaciones
Comerciales Multilaterales. Al adoptarse el Acta Final de la
Ronda Uruguay de Negociaciones Comerciales Multilaterales
(Marruecos, quince de abril de mil novecientos noventa y cuatro)
por la que se crea la Organización Mundial de Comercio, los
países miembros asumieron el compromiso de no superar cierto
nivel arancelario, acordando a su vez eliminar todo tipo de
medidas no arancelarias restrictivas de las importaciones; y
específicamente, en el caso del Perú, a no superar el nivel
arancelario del treinta por ciento expresado como ad valorem
sobre el valor CIF de importación de las mercancías con reserva
sobre ciertos productos agrícolas afectos a sobretasas
adicionales22. SEXTO: Acuerdo sobre Salvaguardias de la
Organización Mundial de Comercio - OMC. El Acuerdo sobre
Salvaguardias de la Organización Mundial de Comercio – OMC
desarrolla lo previsto en el artículo XIX del Acuerdo del Acuerdo
General sobre Aranceles Aduaneros y Comercio - GATT de mil
novecientos cuarenta y siete, sobre las normas generales
aplicables cuando resulta necesario recurrir a la medida prevista
en dicho artículo; y con relación a las medidas de salvaguardias
provisionales el artículo 6 del Acuerdo bajo referencia establece:
“En circunstancias críticas, en las que cualquier demora
entrañaría un perjuicio difícilmente reparable, un Miembro podrá
adoptar una medida de salvaguardia provisional en virtud de una
determinación preliminar de la existencia de pruebas claras de
que el aumento de las importaciones ha causado o amenaza
causar un daño grave. La duración de la medida provisional no
excederá de doscientos días, y durante ese período se cumplirán
las prescripciones pertinentes de los artículos 2 a 7 y 12. Las
medidas de esa índole deberán adoptar la forma de incrementos
de los aranceles, que se reembolsarán con prontitud si en la
investigación posterior a que se refiere el párrafo 2 del artículo 4
no se determina que el aumento de las importaciones ha causado
o amenazado causar un daño grave a una rama de producción
nacional. Se computará como parte del período inicial y de las
prórrogas del mismo a que se hace referencia en los párrafos 1, 2
y 3 del artículo 7 la duración de esas medidas provisionales”.
SÉTIMO: Tanto el artículo XIX del Acuerdo del Acuerdo General
sobre Aranceles Aduaneros y Comercio - GATT como el Acuerdo
sobre Salvaguardias contemplan la posibilidad que el
procedimiento para establecer las salvaguardias tenga alguna
demora y que tal circunstancia pudiera causar un daño difícilmente
reparable, y propone como solución que el país miembro afectado
pueda de forma provisional aplicar salvaguardias, sobre la base
de una determinación preliminar. Nótese además que a pesar de
haber sido aceptadas las salvaguardias por las partes signatarias
del Acuerdo General sobre Aranceles Aduaneros y Comercio GATT, los Estados contratantes optaron por incluirlas en
instrumentos bilaterales, siendo que su uso constante generó la
necesidad de estandarizar tal uso. OCTAVO: Luego de varios
intentos, en mil novecientos noventa y cuatro el Acuerdo General
sobre Aranceles Aduaneros y Comercio - GATT reguló las
medidas de salvaguardia como instrumentos de defensa
comercial ante el aumento de las importaciones, tratando de
incorporar los textiles a la pretendida liberalización económica; en
consecuencia, es posible distinguir dos estadíos en el análisis de
las medidas de salvaguardias, durante el Acuerdo General sobre
Aranceles Aduaneros y Comercio - GATT, y luego de la creación
de la Organización Mundial del Comercio – OMC, que irán
marcándose en el desarrollo de esta sentencia, a fin de ilustrar la
decisión del Colegiado. NOVENO: Concepto de Medidas de
Salvaguardias. A nivel doctrinario son consideradas «remedios
del comercio», mecanismos de defensa comercial frente a las
importaciones, instrumentos que imponen restricciones a las
importaciones, entre otros23. Desde el punto de vista normativo
son «remedios extraordinarios» (GATT) o «medidas de urgencia
ante la importación de productos determinados» (Preámbulo del
Acuerdo de Salvaguardias); remitiendo directamente al artículo
XIX del Acuerdo General sobre Aranceles Aduaneros y Comercio
- GATT (artículo 11 del Acuerdo de Salvaguardias). DÉCIMO:
Normatividad internacional. Investigación previa a la
aplicación de las medidas de salvaguardia. Acuerdo de
Salvaguardia.- El acuerdo bajo referencia establece los requisitos
de obligatorio cumplimiento antes de aplicar las medidas de
salvaguardia. En efecto, la autoridad designada por el miembro
de la Organización Mundial de Comercio – OMC, deberá llevar a
cabo una investigación objetiva previa a fin de determinar si se ha
producido un daño efectivo o una amenaza de dicho daño.
Conforme a los artículos X del Acuerdo General sobre Aranceles
Aduaneros y Comercio - GATT y 3 del Acuerdo de Salvaguardias,
la capacidad técnica adecuada del ente investigador es decisiva
para la etapa previa, así como la publicidad del procedimiento. Al
finalizar la investigación previa, la autoridad competente de
conformidad con lo establecido en el artículo 4 párrafo 2, literal a)
del Acuerdo de Salvaguardias deberá determinar el ritmo y
cuantía del aumento de las importaciones tanto en términos
74024
CASACIÓN
absolutos como relativos, parte del mercado interno absorbido,
los cambios ocurridos en el nivel de ventas, producción,
productividad, utilización de la capacidad, ganancias, pérdidas, y
los efectos sobre el empleo; y como consecuencia de ello, se
producirá un informe en el cual se expondrán detalladamente las
conclusiones de la decisión conforme a lo prescrito en el artículo
3 párrafo 1 del Acuerdo citado. UNDÉCIMO: Tiempo de
aplicación de las medidas de salvaguardias. Conforme a lo
señalado en el artículo 7 del Acuerdo de Salvaguardias, la
aplicación de la medida de salvaguardia no depende de la
voluntad unilateral del Estado afectado sino que se circunscribe
en la medida necesaria para prevenir un daño grave o reparar
el ya ocasionado, de modo que facilite el reajuste deseado
por el país afectado. En general, el Acuerdo de Salvaguardias
establece como tope máximo de aplicación de la medida de
salvaguardia cuatro años, pudiéndose prorrogar su aplicación
hasta los ocho años solo si se demuestra la necesidad de seguir
aplicando dicha medida, caso contrario, de no llegar a un acuerdo
sobre si debe o no prorrogarse, dentro del plazo de treinta días
siguientes, los miembros exportadores podrán aplicar medidas de
retorsión por verse afectados en sus exportaciones, a modo de
ejemplo podrá suspenderse la aplicación de concesiones por
parte de un miembro afectado por la medida de salvaguardia
impuesta u otras obligaciones sustancialmente equivalentes
resultantes del Acuerdo General sobre Aranceles Aduaneros y
Comercio - GATT de mil novecientos noventa y cuatro, conforme
a lo señalado en el artículo 8 del Acuerdo de Salvaguardia.
DUODÉCIMO: Medidas de salvaguardias provisionales. Las
medidas de salvaguardia provisionales de la Organización
Mundial de Comercio – OMC se aplican en situaciones
excepcionales o críticas, cuando el país afectado advierta que
cualquier demora en su aplicación compromete un perjuicio
difícilmente reparable, así se ha previsto en el artículo 6 del
Acuerdo de Salvaguardias de la Organización Mundial de
Comercio - OMC24. Para la aplicación de este tipo de salvaguardias
deben existir pruebas preliminares donde se determine la
existencia del daño o amenaza del mismo, a causa del aumento
de las importaciones. DÉCIMO TERCERO: Escenario donde se
gestionó el Protocolo de Adhesión de la República Popular
China a la Organización Mundial de Comercio - OMC. La
República Popular China fue uno de los firmantes originales del
Acuerdo General sobre Aranceles Aduaneros y Comercio - GATT,
sin embargo, luego de la revolución de mil novecientos cuarenta
y nueve perdió el control sobre la China Continental. Fue hasta el
año mil novecientos ochenta y seis que China le notificó al
Acuerdo General sobre Aranceles Aduaneros y Comercio - GATT
su intención de reasumir su calidad de Estado signatario,
solicitando finalmente en mil novecientos noventa y cinco su
acceso a la Organización Mundial de Comercio. Admitida su
membresía, las medidas de salvaguardia se incluyeron dentro del
listado de compromisos de la República Popular China contenidas
en el Protocolo de Adhesión de la República Popular China, bajo
el título «Mecanismo de salvaguardia de transición para productos
específicos de origen chino”. DÉCIMO CUARTO: Aplicación de
las medidas de salvaguardia en el Protocolo de Adhesión de
China a la Organización Mundial de Comercio - OMC. La
regulación de las medidas de salvaguardia contenidas en el
Protocolo de Adhesión de la República Popular China a la
Organización Mundial de Comercio – OMC se diferencia de la
establecida en el Acuerdo de Salvaguardias en: primero, el
miembro que pretenda aplicar este tipo de medidas deberá
demostrar, además del origen chino de los productos, que la
importación causa o amenaza causar una desorganización del
mercado, en detrimento del país afectado por dicha importación.
El Protocolo bajo referencia no exige investigaciones previas con
los requisitos del Acuerdo de Salvaguardias señalados en las
consideraciones precedentes, sólo se efectúan consultas entre
los países comprometidos, con un plazo máximo de sesenta días
a partir de la recepción de las mismas, luego de ello el miembro
afectado decide aplicar o no una medida en el marco del Acuerdo
de Salvaguardias conforme a lo previsto en el artículo 16 número
1 del Protocolo de Adhesión de la República Popular China a la
Organización Mundial de Comercio - OMC25; o puede no llegarse
a ningún acuerdo, pudiendo el miembro importador retirar
concesiones o limitar las importaciones de los productos. Otra
diferencia característica entre el Acuerdo de Salvaguardia y el
Protocolo es que este último no establece un período máximo de
aplicación de las medidas de salvaguardias, por cuanto el criterio
de razonabilidad es el que impera, por ello, se aplicarán las
salvaguardias durante el tiempo que sea necesario para prevenir
o reparar la desorganización del mercado. DÉCIMO QUINTO:
Similitudes entre el Acuerdo de Salvaguardias y el Protocolo
de Adhesión de la República Popular China a la Organización
Mundial de Comercio – OMC respecto de las medidas de
salvaguardias. Cabe señalar que ambos textos normativos
permiten que en circunstancias críticas, el país afectado pueda
recurrir a una medida de tipo temporal. De esta manera, la medida
de salvaguardia temporal podrá adoptarse si previamente se
estableció una amenaza de desorganización de mercado o su
cierta realización como consecuencia de las importaciones de
productos chinos, medida que sólo podrá aplicarse por un máximo
de doscientos días, atendiendo a lo regulado sobre requisitos
para la aplicación de esa medida prescritos en el artículo 16
El Peruano
Lunes 1 de febrero de 2016
numeral 1 del Protocolo bajo estudio, numeral que para tal
supuesto permite la aplicación de una medida al amparo del
Acuerdo de Salvaguardias, previa celebración de consultas
bilaterales regulada en el artículo 16 numeral 2 del mismo
Protocolo; y, el cumplimiento del principio de transparencia
contenido en el artículo 16 numeral 5 del Protocolo citado.
DÉCIMO SEXTO: Incorporación de las medidas de
salvaguardia en el Perú.- Bajo la óptica de una economía social
de mercado y mercados transnacionales, así como ante la
celebración de acuerdos comerciales y tratados de libre comercio,
nuestro país incorporó en su legislación el tratamiento de las
medidas de salvaguardia multilateralmente a fin de proteger la
economía e industria nacional. Tres instrumentos normativos se
destacan en el tema de salvaguardias: El Decreto Supremo N°
020-1998-ITINCI modificado por el Decreto Supremo N°
017-2004-MINCETUR,
y
el
Decreto
Supremo
N°
023-2003-MINCETUR.
En
el
Decreto
Supremo
N°
020-1998-ITINCI se definen los conceptos y procedimientos
previstos por la Organización Mundial de Comercio – OMC, en el
Acuerdo de Salvaguardias, incorporando íntegramente los
artículos 2 y 3 del citado Acuerdo, y define ciertos conceptos no
explicados en este último. Con relación a las autoridades
encargadas de la investigación, hay un elemento particular que
marca la diferencia con la normativa multilateral; mientras que la
investigación previa está a cargo del Instituto Nacional de Defensa
de la Competencia y de la Protección de la Propiedad Intelectual
- INDECOPI, la etapa decisiva recae en una Comisión
Gubernamental conformada por el Ministerio de Comercio
Exterior y Turismo - MINCETUR, el Ministerio de Economía y
Finanzas - MEF y el Ministerio de Producción del sector afectado.
En el último párrafo de su artículo 3426 dispone la devolución del
monto pagado si no se establece salvaguardia definitiva. DÉCIMO
SÉTIMO: Tomando como base las consideraciones anotadas, las
medidas de salvaguardia son de carácter excepcional, por lo que,
sólo resultan aplicables de comprobarse un ritmo creciente de
importaciones que causen o amenacen causar un daño grave al
mercado peruano. La desorganización del mercado debe ser real
y comprobada, esto es, debe configurarse un daño grave o
amenaza de dicho daño grave, ante lo cual deben procurarse que
la industria afectada se recupere mientras la medida es aplicable.
DÉCIMO OCTAVO: Estado de Derecho, y aplicación del
Principio de Legalidad. Entrena Cuesta27 señala respecto al
Estado de Derecho que no sólo se caracteriza por su sustantividad
–reconocimiento y tutela de los derechos públicos subjetivos-,
también por la forma en que se alcanzaría dicho objetivo: el
sometimiento del Estado “y, dentro de él, principalmente la
Administración, a la ley”. En ese sentido, sobre el principio de
legalidad Bartra Cavero refiere: “concretamente, el referido
principio enuncia que la administración actuará siempre ciñéndose
estrictamente a la norma legal, vale decir, a la ley y al resto del
ordenamiento jurídico; a todo el bloque de legalidad28”. En
efecto, la Administración se somete a todo el bloque normativo, y
es en base a este que actúa frente a los administrados, por
cuanto su actividad no puede realizarse al margen del Derecho.
El principio de legalidad se encuentra regulado en el artículo IV
numeral 1 inciso 1.1) de la Ley N° 27444: “Las autoridades
administrativas deben actuar con respeto a la Constitución, la ley
y al derecho, dentro de las facultades que le estén atribuidas y de
acuerdo con los fines para los que les fueron conferidas”.
DÉCIMO NOVENO: Principio de Razonabilidad. El Principio de
Razonabilidad se encuentra regulado en el artículo IV numeral 1
inciso 1.4) de la Ley N° 27444: “Las decisiones de la autoridad
administrativa, cuando creen obligaciones, califiquen infracciones,
impongan sanciones, o establezcan restricciones a los
administrados, deben adaptarse dentro de los límites de la
facultad atribuida y manteniendo la debida proporción entre los
medios a emplear y los fines públicos que deba tutelar, a fin de
que respondan a lo estrictamente necesario para la satisfacción
de su cometido. Conforme al principio de razonabilidad las
instituciones de la Administración valoran tanto las circunstancias
de hecho como las de derecho, disponiendo medidas adecuadas
para preservar el orden público. VIGÉSIMO: Principio al Debido
Procedimiento Administrativo.- Derecho a una decisión
fundada. Según la doctrina el origen de este principio se
encuentra en el derecho anglosajón “Due Process of Law”. En la
Ley Orgánica del Poder Judicial artículo 7 se establece: “En el
ejercicio y defensa de sus derechos, toda persona goza de la
plena tutela jurisdiccional, con las garantías de un debido
proceso”; por su parte, el artículo I del Título Preliminar del Código
Procesal Civil: “Toda persona tiene derecho a la tutela
jurisdiccional efectiva para el ejercicio o defensa de sus derechos
o intereses”; y el artículo IV, numeral 1, inciso 1.2 de la Ley N°
27444 señala: “Los administrados gozan de todos los derechos y
garantías inherentes al debido procedimiento administrativo, que
comprende el derecho a exponer sus argumentos, a ofrecer y
producir pruebas y a obtener una decisión motivada y fundada en
derecho. La institución del debido procedimiento administrativo se
rige por los principios del Derecho Administrativo. La regulación
propia del Derecho Procesal Civil es aplicable sólo en cuanto sea
compatible con el régimen administrativo”. A nivel constitucional,
el artículo 139 de la Constitución Política del Perú lo establece
como principio y derecho fundamental: la observancia del debido
proceso y la tutela jurisdiccional. Conforme al contenido del
El Peruano
Lunes 1 de febrero de 2016
CASACIÓN
principio a un debido procedimiento administrativo los
administrados tienen derecho a una decisión fundada que
expresamente contenga las circunstancias de hecho y derecho en
las que se basan los actos de la Administración Pública, a fin de
ejercer su derecho a la defensa en igualdad de condiciones.
VIGÉSIMO PRIMERO: Análisis de las infracciones normativas
denunciadas. Dentro del marco normativo que antecede,
absolviendo las causales casatorias, cabe precisar que el Acuerdo
de Salvaguardias de la Organización Mundial del Comercio –
OMC forma parte del Acta Final que aprobó los resultados de la
Ronda de Uruguay de Negociaciones Comerciales Multilaterales
incorporados a nuestra legislación a través de la Resolución
Legislativa N° 26047. El artículo 6 del Acuerdo de Salvaguardias
de la Organización Mundial del Comercio - OMC establece la
obligación de la Administración de devolver el monto pagado por
concepto de salvaguardia provisional, basado en una
determinación provisional, si en la investigación posterior no se
determina o concluye que el aumento de las importaciones ha
causado o amenazado causar grave daño a una rama de la
producción nacional. En ese sentido, el Protocolo de Adhesión de
la República Popular China forma parte integrante de los acuerdos
comerciales multilaterales anexos al Acuerdo sobre la
Organización Mundial de Comercio – OMC que incluye al Acuerdo
sobre Salvaguardias, por lo tanto, la interpretación de las normas
bajo referencia debe llevarse en forma integral y sistemática, en
estricta aplicación de los principios de legalidad y debido
procedimiento administrativo. VIGÉSIMO SEGUNDO: Para
mayor precisión, el Decreto Supremo N° 023-2003-MINCETUR
que establece el procedimiento especial para la aplicación de
salvaguardias de transición en el marco del Protocolo de Adhesión
de la República Popular China a la Organización Mundial de
Comercio – OMC hace referencia a los Acuerdos Comerciales
multilaterales contenidos en el Acta Final de la Ronda de Uruguay
aprobado por la Resolución Legislativa N° 26407. De tal manera,
si bien las normas del Protocolo de Adhesión no regulan
expresamente la devolución de lo pagado por concepto de
salvaguardias de transición provisionales que no se conviertan en
definitivas, dicho decreto supremo habilita la aplicación del
artículo 16 numeral 1 de dicho Protocolo, así como la aplicación
del artículo 6 del Acuerdo sobre Salvaguardias de la Organización
Mundial de Comercio – OMC el cual establece que la
Administración se encuentra obligada a devolver o reembolsar lo
pagado como salvaguardia, si en la investigación posterior no se
determina que el aumento de las importaciones haya causado o
amenazado causar un grave daño a una rama de la producción
nacional. VIGÉSIMO TERCERO: Debemos resaltar el Informe N°
137-2005-EF/60 en el cual se concluyó que procede la devolución
de los derechos provisionales pagados de acuerdo con el Decreto
Supremo N° 026-2003-MINCETUR, al considerar que “habiendo
transcurrido el plazo de doscientos días que dicha salvaguardia
tenía y dado que el Ministerio de Comercio Exterior y Turismo ya
notificó a la Organización Mundial de Comercio la decisión de no
establecer salvaguardias definitivas, la medida provisional ha
caducado, por lo que sería aplicable el artículo 34 del Decreto
Supremo N° 020-98-ITINCI y sus modificatorias”. VIGÉSIMO
CUARTO: De la consulta efectuada por el Ministerio de Economía
y Finanzas – MEF al Centro de Asesoría Legal de la Organización
Mundial de Comercio - OMC, se advierte que por comunicación
del treinta y uno de mayo de dos mil doce respondió: “en cuanto a
la devolución de salvaguardias provisionales que no se declararon
definitivas, la referencia que hizo el Perú al Acuerdo sobre
Salvaguardias al inicio de su investigación, mediante la
Resolución N° 152-2003-CDS-INDECOPI debe ser interpretada
en el sentido que el Perú se remitió al artículo 6 del Acuerdo sobre
Salvaguardias para reembolsar los derechos pagados mientras
las salvaguardias estuvieron vigentes”. A ello cabe añadir, que por
Oficio N° 0094-2004-DEFCON respecto de las salvaguardias
provisionales previstas en el Decreto Supremo N°
026-2003-MINCETUR, se señaló que si bien dichas medidas de
salvaguardia provisionales fueron creadas al amparo del
Protocolo de Adhesión de la República Popular China a la
Organización Mundial de Comercio – OMC se considera que
resulta aplicable el artículo 6 del Acuerdo de Salvaguardias de la
Organización Mundial de Comercio – OMC, al tratarse éste de un
acuerdo marco. Y por Oficio N° 012-2005-DEFCON, se determinó
que el pago efectuado por concepto de salvaguardias
provisionales clasifica como “pago sin causa en sentido estricto”,
por cuanto dicho pago deviene injustificado al no haberse
comprobado el daño o la amenaza de daño y al haber
desaparecido “la causa justa” que supuestamente lo respaldaba.
VIGÉSIMO QUINTO: Igual criterio fue establecido por la
Superintendencia Nacional de Administración Tributaria, que en
su Informe N° 012-2005-SUNAT/2B4000 del diecinueve de enero
de dos mil cinco, concluyó en que las salvaguardias de transición
provisionales perdieron validez al no cumplirse con el requisito
establecido en el artículo 5 del Decreto Supremo N°
023-2003-MINCETUR, el cual señala que la Comisión
Multisectorial debe determinar si el incremento de importaciones
ha causado desorganización en el mercado o perjuicio grave y al
no materializarse dicho supuesto carecen de validez las
salvaguardias de transición provisionales, consecuentemente los
pagos que hubieran sido efectuados por tal concepto deberían
ser reembolsados. Cabe destacar que dentro del marco
74025
constitucional y legal que antecede es pertinente señalar que en
caso las salvaguardias provisionales no se transformen en
definitivas por no existir daño al mercado, la administración
tributaria deberá proceder a la devolución de lo pagado por
concepto de salvaguardias provisionales, lo cual deberá ser
aplicado por la Superintendencia Nacional de Administración
Tributaria de manera general. VIGÉSIMO SEXTO: Si bien el
Gobierno aplicó provisionalmente la salvaguardia como medida
de defensa comercial a que se refiere el Protocolo de Adhesión de
la República Popular de China a la Organización Mundial de
Comercio – OMC, de conformidad con lo establecido en el
Acuerdo de Salvaguardias, no determinó en el procedimiento
respectivo que el aumento de las importaciones de los productos
chinos,
señaladas
en
el
Decreto
Supremo
N°
026-2003-MINCETUR, hubieren causado o amenazado causar
daño grave a una rama de la producción nacional, lo que a su vez
dio lugar a que por documento del veintiuno de julio de dos mil
cuatro, la Representación Diplomática Permanente del Perú
comunicó a la Secretaría General de la Organización Mundial de
Comercio – OMC que no se establecerían salvaguardias
definitivas; razones por todas las cuales; a través de la
resolución cuestionada en este proceso se dejó sin efecto la
cobranza de las salvaguardias de transición provisionales
aplicadas a las declaraciones únicas de aduanas; más aún,
como se ha precisado en las consideraciones anteriores, se
trataría de un pago realizado sin causa justa al no haberse
acreditado el daño o la amenaza de daño a la rama de
producción nacional. En consecuencia, devienen fundados los
recursos de casación interpuestos por Corporación JULY´S
Sociedad Anónima Cerrada y el Ministerio de Economía y
Finanzas, debiéndose casar la sentencia de vista; y en sede de
instancia revocar la sentencia apelada, reformándola declarar
infundada la demanda. V.- DECISION: Por estas consideraciones,
MI VOTO es porque se declaren FUNDADOS los recursos de
casación obrantes a fojas ciento tres y ochenta y cuatro,
interpuestos por Corporación JULY’S Sociedad Anónima Cerrada
y el Ministerio de Economía y Finanzas - MEF; en consecuencia,
SE CASE la sentencia de vista de fecha trece de setiembre de
dos mil diez, de fojas cincuenta y ocho; actuando en sede de
instancia, SE REVOQUE la sentencia apelada de fecha treinta de
setiembre de dos mil ocho, de fojas ciento noventa y uno que
declaró fundada la demanda; y SE REFORME declarándola
INFUNDADA; y, SE DISPONGA la publicación la presente
resolución en el Diario Oficial “El Peruano” conforme a ley; en los
seguidos por Superintendencia Nacional de Administración
Pública – SUNAT contra Corporación JULY’S Sociedad Anónima
Cerrada y otros; sobre acción contenciosa administrativa; y, los
devolvieron. Vocal Ponente: Vinatea Medina. S.S. VINATEA
MEDINA
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La casación en función nomofiláctica se orienta a garantizar en un estado social,
así como Constitucional la seguridad jurídica y no ha convertirse en una tercera
instancia; pues, como afirma Geny,: “La existencia de un Tribunal de casación
es absolutamente necesario para garantizar en nuestro estado social una
firme organización jurídica: No se puede prácticamente satisfacer la necesidad
de seguridad de los derechos, que tan vivamente se hace sentir en nuestro
civilización, luchando por la homogeneidad centralizada contra tantas corrientes
hostiles, más que con la intervención de una jurisdicción superior, que aun fuera de
su contribución al establecimiento de la verdad jurídica abstracta, encuentre en la
organización de la justicia un arma fuerte y decisiva para asegurar a la vida práctica
el reinado continuo y soberanamente progresivo del derecho”. Citado por Juan
Carlos Hitters, Telesis de la Casación, En: Técnica de los Recursos Extraordinarios
y la Casación. Segunda Edición, Librería Editora Platense, La Plata. pagina 168.
HITTERS Juan Carlos, Técnicas de los Recursos Extraordinarios y de la Casación,
Librería Editora Platense, Segunda Edición, La Plata, pagina 166.
Cuando nos referimos al respeto del derecho objetivo no nos limitamos a una
referencia a la ley, sino al sistema normativo en un Estado Constitucional, mas aún
al Derecho mismo, respecto al cual expone Luis Vigo: “No se puede prescindir del
derecho que sigue después de la ley, porque de lo contrario corremos el riesgo de
tener una visión irreal o no completa del mismo. Pero esa operatividad y resultado
judicial resultan ser un foco de atención doctrinaria privilegiado actualmente, no
sólo por sus dimensiones y complejidades sino también por su importancia teórica
para entender el ordenamiento jurídico en su faz dinámica”. VIGO, Rodolfo Luis, De
la Ley al Derecho, Editorial Porrúa, México, 2005, segunda edición, Pagina 17.
HITTERS, Juan Carlos, “La Casación Civil en el Perú”, En Revista Peruana de
Derecho Procesal Civil, Tomo II, Marzo de 1998, pagina 436.
Como el Fondo Monetario Internacional –FMI, Banco Internacional de
Reconstrucción y Fomento –BIRF, Banco Mundial.
Establece la parte I: Disposiciones Generales, articulo 1 Normas Generales,
del Protocolo de Adhesión antes citado, la aplicación y entrada en vigor de las
obligaciones establecidas en los Acuerdos Comerciales bilaterales, precisando que
deberán ser cumplidas por China como si hubiera aceptado el acuerdo en la fecha
de su entrada en vigor.
Norma concordante con el inciso tercero del mismo articulo de la Constitución
Política que autoriza al Congreso dar resoluciones legislativas aprobando los
tratados; norma concordante con el inciso cuarto del artículo 56 de la Constitución
que dispone que los tratados que versen sobre obligaciones financieras deben ser
aprobados por el Congreso de la República.
Constitución Política del Perú 1993: Artículo 55.- Los tratados celebrados por el
Estado y en vigor forman parte del derecho nacional.
La jerarquía de la norma constitucional en el ordenamiento jurídico nacional es
reconocida en la actualidad en un Estado Constitucional de Derecho; la doctrina
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CASACIÓN
actual también lo reconoce así, como señala Luis Vigo al referirse a “la Constitución
como el “higher law” que preside al resto del derecho vigente” (op, citado, pagina
9), y el carácter de norma normarum y que sirve para medir la juricidad o validez de
las restantes normas (pagina 41).
CONVENCIÓN DE VIENA, SOBRE EL DERECHO DE LOS TRATADOS
ENTRE ESTADOS Y ORGANIZACIONES INTERNACIONALES O ENTRE
ORGANIZACIONES INTERNACIONALES. Artículo 26: Todo tratado en vigor
obliga a las partes y debe ser cumplido por ellas de buena fe. Artículo 27.1 de
la Convención de Viena.- Un Estado parte en un tratado no podrá invocar las
disposiciones de su derecho interno como justificación del incumplimiento del
tratado.
“Aclaración de los derechos y obligaciones mediante la interpretación”, En,
Introducción al Sistema de solución de diferencias de la OMC, portada, pagina
Web de la Organización Mundial de Comercio, http:www.wto.org/spanish.
“Reglas Generales de interpretación de los tratados –artículo 31 de la Convención
de Viena”, En, Interpretación, OMC, http:www.wto.org/spanish.
Señala: “De otro lado, se debe tener en cuenta que artículo 11° numeral 1 inciso
c) del Acuerdo sobre Salvaguardias de la Organización Mundial de Comercio
establece que: (…). De acuerdo a ello, no es aplicable al presente caso el artículo
6° del Acuerdo de Salvaguardias, ya que la medida adoptada mediante Decreto
Supremo N° 026-2003-MINCETUR se aplicó de conformidad con el Protocolo de
Adhesión de la República Popular China a la Organización Mundial de Comercio,
que es uno concluido en el marco del Gatt de 1994”. Voto Discrepante de la R.T.F.
N° 03801-A-2006.
RUBIO CORREA, Marcial, El Sistema Jurídico, Décima Edición aumentada, Fondo
Editorial de la Pontificia Universidad Católica del Perú, Lima, Junio 2012, pagina
262.
RUBIO CORREA, Marcial, op, citado pagina 261.
RUBIO CORREA, Marcial, op, citado pagina 262-263.
LANDA ARROYO, Cesar, Los Principios Tributarios en la Constitución de 1993,
Una perspectiva Constitucional. Constitución y Derecho Tributario, En IV Teoría de
las Fuentes Constitucionales, Paginas 5-7.
LANDA ARROYO, Cesar, op citado, Paginas 2-4.
“Reglas Generales de interpretación de los tratados –artículo 31 de la Convención
de Viena”, En, Interpretación, OMC, http:www.wto.org/spanish.
Japón-Bebidas alcohólicas //, pagina 37, (WT/DS8/AB/R, WT/DS10/AB/R, WT/
DS11/AB/R).
General Agreement on Tariffs and Trade (Acuerdo General Sobre Aranceles
Aduaneros y Comercio – GATT) (ver Textos Jurídicos en www.wto.org.)
Documento de Perú “Examen de Políticas Comerciales”, ver Informe de la
Secretaría en www.wto.org.
Finger, Michael y Julio Nogués (editores). Safeguards & Antidumping in Latin
American Trade Liberalization. Fighting Fire With Fire. Nueva York/Washington,
D.C.: Palgrave Macmillan/The World Bank, 2006, pág. 1.
Artículo 6 del Acuerdo de Salvaguardia de la Organización Mundial de
Comercio: “En circunstancias críticas, en las que cualquier demora entrañaría
un perjuicio difícilmente reparable, un Miembro podrá adoptar una medida de
salvaguardia provisional en virtud de una determinación preliminar de la existencia
de pruebas claras de que el aumento de las importaciones ha causado o amenaza
causar un daño grave. La duración de la medida provisional no excederá de
200 días, y durante ese período se cumplirán las prescripciones pertinentes de
los artículos 2 a 7 y 12. Las medidas de esa índole deberán adoptar la forma
de incrementos de los aranceles, que se reembolsarán con prontitud si en la
investigación posterior a que se refiere el párrafo 2 del artículo 4 no se determina
que el aumento de las importaciones ha causado o amenazado causar un daño
grave a una rama de producción nacional. Se computará como parte del período
inicial y de las prórrogas del mismo a que se hace referencia en los párrafos 1, 2 y
3 del artículo 7 la duración de esas medidas provisionales”.
16. Mecanismo de salvaguardia de transición para productos específicos:
“1. En aquellos casos en que productos de origen chino se estén importando en
el territorio de cualquier Miembro de la OMC en tal cantidad y en condiciones
tales que causen o amenacen causar una desorganización del mercado para los
productores nacionales de productos similares o directamente competidores, el
Miembro de la OMC así afectado podrá pedir la celebración de consultas con China
con el fin de llegar a una solución mutuamente satisfactoria, incluida la cuestión de
si el Miembro de la OMC afectado debe proceder a la aplicación de una medida
al amparo del Acuerdo sobre Salvaguardias. Las solicitudes de este tipo serán
notificadas inmediatamente al Comité de Salvaguardias”.
Decreto Supremo 020-98-ITINCI de 19.12.1998. Artículo 34: “ (…). En el supuesto
que no se estableciera una medida de salvaguardia definitiva, se ordenará con
prontitud la devolución de la totalidad del monto pagado o se devolverá o liberará
la carta fianza otorgada por el monto de los derechos provisionales impuestos.”
Entrena Cuesta, Rafael, citado por Bartra Cavero, José. Procedimiento
Administrativo: Ley del Procedimiento Administrativo General. Sétima edición.
Editorial Huallaga: Lima, 2005, pág. 62.
Op. cit.(negrita y subrayado nuestro).
C-1335410-5
CAS. Nº 1125-2013 LIMA
Lima, primero de julio de dos mil trece. VISTOS; y CONSIDERANDO:
PRIMERO: El recurso de casación interpuesto por la Constructora
e Inmobiliaria los Andes Sociedad Comercial de Responsabilidad
Limitada, obrante a fojas dos mil doscientos treinta y seis, contra
la resolución de vista de fojas dos mil doscientos veintiséis, de
fecha veintidós de mayo de dos mil doce; el cual cumple con los
requisitos de admisibilidad, conforme a lo previsto por el artículo
387 del Código Procesal Civil, modificado por el artículo 1 de la
Ley N° 29364. SEGUNDO: Antes del análisis de los requisitos de
procedencia es necesario precisar que el recurso de casación es
un medio impugnatorio extraordinario de carácter formal que sólo
puede fundarse en cuestiones eminentemente jurídicas y no en
El Peruano
Lunes 1 de febrero de 2016
cuestiones fácticas o de revaloración probatoria, es por ello que sus
fines esenciales constituyen la adecuada aplicación del derecho
objetivo al caso concreto y la uniformidad de la jurisprudencia
nacional por la Corte Suprema; en ese sentido, su fundamentación
por parte del recurrente debe ser clara, precisa y concreta,
indicando ordenadamente cuáles son las denuncias que configuran
la infracción normativa que incida directamente sobre la decisión
contenida en la resolución impugnada, o las precisiones respecto
al apartamiento inmotivado del precedente judicial. TERCERO:
En efecto, a través de la modificación efectuada al artículo 386
del Código Procesal Civil por el artículo 1 de la Ley N° 29364,
publicada el veintiocho de mayo de dos mil nueve, se ha regulado
como causales del recurso de casación la infracción normativa,
o el apartamiento inmotivado del precedente judicial que tengan
incidencia directa sobre el sentido de la decisión impugnada.
CUARTO: Por infracción normativa debemos entender la causal
a través de la cual el recurrente denuncia la existencia de un error
de naturaleza procesal o sustantiva que incide directamente sobre
el sentido de lo decidido. Los errores que pueden ser alegados
como infracción normativa pueden comprender a los supuestos de
aplicación indebida, interpretación errónea o inaplicación de una
norma, que como se ha señalado pueden ser de carácter sustantivo
o procesal. QUINTO: La recurrente han denunciado como causales
casatorias: 1) La inaplicación del segundo párrafo del artículo
1577 del Código Civil, denuncia que se subsume dentro de la
causal de infracción normativa; y 2) la infracción normativa
del artículo 1504 del Código Civil. SEXTO: En cuanto a la 1)
infracción normativa del artículo 1504 del Código Civil, precisa
la impugnante que la Sala Superior ha hecho una valoración de
los hechos en forma equivocada y mal razonada al mencionar
que la diligencia debida y exigida al adquiriente se traduce en una
predisposición que el agente debe tener antes o al momento de
la celebración del contrato traslativo de dominio. En ese sentido,
precisa que antes y al momento de celebrarse el contrato han sido
diligentes, entre otros argumentos que tratan sobre valoración de
hechos y pruebas. Y sobre la causal de 2) infracción normativa
del artículo 1577 del Código Civil, refiere la recurrente que el
segundo párrafo de dicha norma es justo y equitativo y concebido
con la finalidad de evitar el indebido enriquecimiento de uno de
los contratantes en perjuicio del otro. Alega que la Sala de mérito
ha manifestado que no resulta aplicable el segundo párrafo de
dicha norma por haberse fijado el precio por el total y como se
encontraba mas no teniendo en cuenta su extensión o cabida.
Concluyendo en que no existe pronunciamiento ni del Juez ni
de la Sala Superior tanto de la acción estimatoria y saneamiento
del vicio oculto (Expediente N° 899-98 acumulado) no obstante
de existir los puntos controvertidos, ni mucho menos respecto a
la pretensión accesoria de inscripción registral. SÉPTIMO: Las
denuncias casatorias que anteceden deviene en improcedentes,
por cuanto este Supremo Tribunal advierte que lo realmente
cuestionado por el impugnante es la situación fáctica establecida
en sede de instancia, así como la valoración de los medios de
prueba efectuada por los Jueces de mérito, pretendiendo forzar
a esta Sala Suprema a emitir un nuevo pronunciamiento sobre el
fondo del asunto, lo que no se condice con los fines del recurso
extraordinario de casación, esto es, la interpretación del derecho
objetivo y la unificación de los criterios de la Corte Suprema.
Máxime que la Sala Superior ha determinado en la instancia en
base a las pruebas aportadas por las partes, que la recurrente es
una empresa especializada y dedicada a la compra de inmuebles
en general, por lo que si la empresa reconviniente hubiera actuado
con las diligencias del caso hubiese podido advertir que el inmueble
no tenía el metraje consignado en el contrato y por ende, que el
vicio no se encontraba oculto, mas aun cuando la propia empresa
ha señalado que tenía proyectado la contratación de un Programa
Residencial denominado “Programa Residencial Señor de la
Exaltación – Huachipa Nievería”. A ello cabe añadir que la Sala de
mérito ha precisado que no resulta aplicable el segundo párrafo
del artículo 1577 del Código Civil, debido a que en el contrato de
compraventa de fojas uno, se fijó el precio por el total y como se
encontraba, mas no teniendo en cuenta su extensión o cabida.
Por tales consideraciones, y de conformidad con lo previsto en el
artículo 392 del Código Procesal Civil, modificado por el artículo 1
de la Ley N° 29364, declararon: IMPROCEDENTE el recurso de
casación interpuesto por la Constructora e Inmobiliaria los Andes
Sociedad Comercial de Responsabilidad Limitada, obrante a fojas
dos mil doscientos treinta y seis, contra la resolución de vista de
fojas dos mil doscientos veintiséis, de fecha veintidós de mayo de
dos mil doce; en los seguidos por doña Juana Sullca Antonio contra
la empresa recurrente, sobre Indemnización por daños y perjuicios
y otro; y MANDARON la publicación de la presente resolución en el
Diario Oficial “El Peruano” conforme a ley; y, los devolvieron.- Vocal
Ponente: Vinatea Medina. S.S. SIVINA HURTADO, ACEVEDO
MENA, VINATEA MEDINA, MORALES PARRAGUEZ, RUEDA
FERNÁNDEZ C-1335410-6
CAS. Nº 1448-2012 LIMA
Lima, catorce de agosto de dos mil catorce. LA SALA DE
DERECHO CONSTITUCIONAL Y SOCIAL PERMANENTE DE LA
CORTE SUPREMA DE JUSTICIA DE LA REPÚBLICA: VISTA la
causa: con los acompañados; de conformidad con el dictamen
fiscal; y Opinión del Tribunal de Justicia de la Comunidad Andina;
en audiencia pública llevada a cabo en la fecha, integrada con los
El Peruano
Lunes 1 de febrero de 2016
CASACIÓN
Señores Jueces Supremos Sivina Hurtado – Presidente, Acevedo
Mena, Vinatea Medina, Rueda Fernández y Malca Guaylupo; y
luego de verificada la votación con arreglo a ley, se emite la
siguiente sentencia: I.- MATERIA DEL RECURSO: Se trata del
recurso de casación obrante a fojas ciento ocho, interpuesto por el
Instituto Nacional de Defensa de la Competencia y de la Protección
de la Propiedad Intelectual – INDECOPI, contra la sentencia de
vista de fojas noventa y cuatro (II Tomo), su fecha ocho de agosto
de dos mil once, que confirmando la sentencia apelada la declara
fundada
la
demanda
contenciosa
administrativa.
II.FUNDAMENTOS POR LOS CUALES SE HA DECLARADO
PROCEDENTE EL RECURSO: Por resolución Suprema de fecha
seis de diciembre de dos mil doce, se declaró procedente el recurso
de casación por la denuncia de infracción normativa de los artículos
45 y 46 de la Decisión N° 486, señalando que la Sala de mérito
yerra al considerar que todo cuestionamiento técnico a la solicitud
de patente de invención, sin importar la instancia en la que se
encuentre el procedimiento, debería ser notificada a la parte
interesada; no obstante efectuando una interpretación sistemática
de las normas, se puede concluir que los dispositivos legales en
mención, se restringe exclusivamente al trámite de la solicitud en
primera instancia administrativa y no al procedimiento en grado de
apelación, pues el artículo 45 de la Decisión N° 486 establece que
la Oficina de Invenciones solamente tiene la obligación de notificar
la primera inconformidad con la patente, siendo potestad de la
administración notificar una segunda o sucesivas inconformidades;
de igual modo, resulta también potestad de la administración
notificar las subsiguientes observaciones estén o no sustentadas
en opiniones de los expertos de la materia, a que se contrae el
artículo 46 del mismo cuerpo normativo, dado que de no ser así, un
procedimiento como es el registro de patentes, que por su
naturaleza requiere opinión de expertos, se estaría prolongando
indefinidamente con las sucesivas absoluciones por la parte del
solicitante; por consiguiente el Informe Técnico N° PCG 18-2008
que sirvió al Tribunal Administrativo para resolver, no podía ser
notificado, ya que no era obligatorio y además, por cuanto, de
haberse
efectuado
el
procedimiento
hubiera
durado
indefinidamente. III.- CONSIDERANDO: Primero: El proceso
contencioso administrativo es la vía mediante la cual, el Poder
Judicial ejerce el control jurídico de las actuaciones de la
administración pública sujetas al derecho administrativo en
salvaguarda de los derechos e intereses de los administrados,
tales como los actos administrativos, el silencio administrativo y las
actuaciones materiales administrativas. La finalidad de dicho
proceso es que el Juez declare la nulidad de tales actos cuando
vulneran los derechos fundamentales del debido procedimiento
administrativo, debido proceso, y los principios de integración,
igualdad procesal, favorecimiento del proceso, suplencia de oficio,
entre otros. Así está consagrado por el artículo 148 de la
Constitución Política del Perú, lo cual tiene su desarrollo en el
artículo 1 y siguientes del Texto Único Ordenado de la Ley que
regula el Proceso Contencioso Administrativo N° 27584. Segundo:
A través del presente proceso la demandante pretende se declare
la invalidez e ineficacia de la Resolución N° 729-2008-TPIINDECOPI, que dispuso confirmar la Resolución N° 815-2007/OININDECOPI, que le deniega la solicitud de patente de invención
denominada “Cetoamidas Novedosas con P4 Cíclicos como
inhibidores de NS3 Serina Proteasa del Virus del Hepatitis C”. Y
como pretensión accesoria solicita se notifique a la demandante el
Informe Técnico PCG 18-2008, permitiéndole ejercer su derecho
de defensa en relación a dicho informe y solo después de ello,
dictar resolución que ponga fin al procedimiento administrativo.
Como fundamento de hecho señala que al emitirse la Resolución
N° 815-2007/OIN-INDECOPI, sin notificarle previamente el Informe
Técnico PCG 18-2008, no se permitió a la demandante ejercer su
derecho a la defensa. Tercero: En sede de instancia, la Sala
Superior ha confirmado la sentencia de primera instancia que
declaró fundada la demanda; sustentando su decisión en que, el
Informe Técnico PCG 18-2008 contenía resultados desfavorables
para los intereses de la demandante; por consiguiente debió
notificársele para que pueda formular sus descargos o absuelva las
observaciones contenidas en el citado documento exponiendo sus
argumentos, esto de conformidad con lo dispuesto en el acápite
uno punto dos del artículo cuatro del Título Preliminar de la Ley de
Procedimiento Administrativo General. Cuarto: El Artículo 45 de
la Decisión N° 486 señala.- Si la oficina nacional competente
encontrara que la invención no es patentable o que no cumple con
alguno de los requisitos establecidos en esta Decisión para la
concesión de la patente, lo notificará al solicitante. Este deberá
responder a la notificación dentro del plazo de sesenta días
contados a partir de la fecha de la notificación. Este plazo podrá ser
prorrogado por una sola vez por un período de treinta días
adicionales. (…) Cuando la oficina nacional competente estimara
que ello es necesario para los fines del examen de patentabilidad,
podrá notificar al solicitante dos o más veces conforme al párrafo
precedente. (…) Si el solicitante no respondiera a la notificación
dentro del plazo señalado, o si a pesar de la respuesta subsistieran
los impedimentos para la concesión, la oficina nacional competente
denegará la patente”. Por otro lado, el Artículo 46 del mismo
texto legal señala.- “La oficina nacional competente podrá requerir
el informe de expertos o de organismos científicos o tecnológicos
que se consideren idóneos, para que emitan opinión sobre la
patentabilidad de la invención. Asimismo, cuando lo estime
74027
conveniente, podrá requerir informes de otras oficinas de propiedad
industrial. (…) De ser necesario, a efectos del examen de
patentabilidad y a requerimiento de la oficina nacional competente,
el solicitante proporcionará, en un plazo que no excederá de tres
meses, uno o más de los siguientes documentos relativos a una o
más de las solicitudes extranjeras referidas total o parcialmente a
la misma invención que se examina: a) copia de la solicitud
extranjera; b) copia de los resultados de exámenes de novedad o
de patentabilidad efectuados respecto a esa solicitud extranjera; c)
copia de la patente u otro título de protección que se hubiese
concedido con base en esa solicitud extranjera; d) copia de
cualquier resolución o fallo por el cual se hubiese rechazado o
denegado la solicitud extranjera; o, e) copia de cualquier resolución
o fallo por el cual se hubiese anulado o invalidado la patente u otro
título de protección concedido con base en la solicitud extranjera.
(…)”. Quinto: De lo anterior, y conforme se ha pronunciado el
Tribunal de Justicia de la Comunidad Andina en el Proceso 126-IP2013 de fecha veintiuno de agosto de dos mil trece, obrante a fojas
ciento treinta y cinco del cuadernillo de casación, se desprende del
primer párrafo del artículo 45, que la entidad administrativa( en
nuestro caso el Instituto Nacional de Defensa de la Competencia y
de la Protección de la Propiedad Intelectual – INDECOPI) deberá
notificar al peticionario que la solicitud no es patentable o que no
cumple con alguno de los requisitos establecidos en la Decisión N°
486 para la concesión de la patente, ello como consecuencia del
principio de publicidad de sus actuaciones y a efectos de otorgar al
solicitante la posibilidad de que contradiga dichas argumentaciones
o que satisfaga los requerimientos para la concesión de la patente.
Asimismo, el segundo párrafo del artículo en análisis, indica
taxativamente que “Cuando la oficina nacional competente
estimara que ello es necesario para los fines del examen de
patentabilidad, podrá notificar al solicitante dos o más veces
conforme al párrafo precedente”. En consecuencia, indica el
mencionado texto que se puede trasladar al peticionario el criterio
de la Oficina Nacional Competente, las veces que sean necesarias,
-respecto de que la invención no es patentable o que no cumple
con alguno de los requisitos establecidos en la mencionada
Decisión N° 486 a fin que el peticionario se pronuncie al respecto.
Sexto: Por otro lado, según lo dispuesto en el artículo 46 de la
Decisión N° 486, la Oficina Nacional Competente podrá requerir el
informe de expertos o de organismos científicos o tecnológicos que
se consideren idóneos, para que emitan opinión sobre la
patentabilidad de la invención. Asimismo, cuando lo estime
conveniente, podrá requerir informes de otras oficinas de propiedad
industrial. Siendo así, la posibilidad de contar con la experticia, esto
es, los dictámenes técnicos, constituidos por los informes de
expertos o de organismos científicos o tecnológicos que se
consideren idóneos, recae en que aquellos permiten abordar los
aspectos técnicos de la solicitud de patente, el cual constituye un
estudio prolijo y especializado. Siendo ello así, este Supremo
Tribunal considera que si bien de la lectura del artículo 46 de la
Decisión N° 486, éste no indica expresamente que se debe notificar
al peticionario el informe de la experticia, sin embargo, de una
lectura integral de la Decisión se infiere que siempre que se pidan
informes en el marco del artículo 46 de la Decisión N° 486 se debe
dar traslado al solicitante por cuanto es fundamental a efectos de
viabilizar el principio de contradicción en el trámite administrativo
de concesión de la patente. Sétimo: Entrando al análisis del
recurso de casación, este Supremo Tribunal advierte de los
actuados administrados que mediante Resolución N° 815-2007/
OIN-INDECOPI de fecha veintiuno de agosto de dos mil siete, la
Oficina de Invenciones y Nuevas Tecnologías del Instituto Nacional
de Defensa de la Competencia y de la Protección de la Propiedad
IntelectuaI -INDECOPI, resuelve denegar la patente de invención
solicitado por Schering Corporation de Estados Unidos de América.
Por lo que al interponer la demandante el recurso de apelación
contra dicha resolución, obrante de fojas mil novecientos dieciocho
del expediente administrativo, fue resuelto mediante la Resolución
N° 729-2008-TPI-INDECOPI, de fecha veinticinco de marzo de dos
mil ocho, que confirmó la Resolución antes señalada, que deniega
la solicitud de patente de invención denominada “Cetoamidas
Novedosas con P4 Cíclicos como inhibidores de NS3 Serina
Proteasa del Virus del Hepatitis C”. Señala dicha resolución que la
Sala de Propiedad Intelectual solicitó que se emita un Informe
Técnico sobre el nuevo pliego de reivindicaciones y argumentos
presentados por la solicitante en su apelación, emitiéndose el
Informe Técnico PCG 18-2008 de fecha diecinueve de febrero de
dos mil ocho, obrante de fojas mil novecientos setenta y dos del
expediente administrativo que concluyó que las reivindicaciones
uno a diecinueve y veinticinco no cumplen con el requisito de nivel
inventivo, y las reivindicaciones veinte a veinticuatro constituyen
una ampliación de divulgación, siendo evidentemente los
resultados adversos a los intereses de la empresa demandante.
Por lo que de conformidad con el artículo 45 de la Decisión N° 486,
la entidad demandada al haber advertido que la solicitud de
otorgamiento de patente de invención no era procedente debió
notificar al solicitante, más aun cuando el Informe Técnico PCG
18-2008 de fecha diecinueve de febrero de dos mil ocho sirvió de
fundamento de la decisión arribada por el Tribunal de Defensa de
la Competencia y de la Propiedad Intelectual; no obstante dicho
informe no le fue notificado a la recurrente conforme se
acredita de los actuados y de lo manifestado por la propia
administración. Octavo: En consecuencia, en base a lo dispuesto
74028
CASACIÓN
en los artículos 45 y 46 de la Decisión N° 486 por el Tribunal de
Justicia de la Comunidad Andina en el Proceso 126-IP-2013 de
fecha veintiuno de agosto de dos mil trece, la autoridad
administrativa si considera que no es patentable o no cumple con
alguno de los requisitos para la concesión de la patente, debe
notificar al solicitante a fin que absuelva las observaciones. En ese
sentido, si bien las normas en referencia otorgan la facultad
discrecional a la administración para solicitar un nuevo informe
técnico, no obstante a efectos de garantizar el debido procedimiento
administrativo, el Instituto Nacional de Defensa de la Competencia
y de la Protección de la Propiedad Intelectual - INDECOPI debió
notificar a la demandante el Informe Técnico PCG 18-2008 de
fecha diecinueve de febrero de dos mil ocho, puesto que dicho
informe dio sustento a la desestimación de su recurso de apelación
mediante la Resolución N° 729-2008-TPI-INDECOPI, de fecha
veinticinco de marzo de dos mil ocho, resolución que agotó la vía
administrativa. Siendo ello así, no se advierte que, la Sala de
mérito al estimar la presente demanda haya infringido los artículos
45 y 46 de la Decisión Nº 486 de la Comisión de la Comunidad
Andina, debiéndose desestimar el recurso propuesto. IV.- DECISIO.
Por tales consideraciones: declararon INFUNDADO el recurso de
casación interpuesto por el Instituto Nacional de Defensa de la
Competencia y de la Protección de la Propiedad Intelectual –
INDECOPI a fojas ciento ocho; en consecuencia NO CASARON la
sentencia de vista de fojas noventa y cuatro (II Tomo), su fecha
ocho de agosto de dos mil once; en los seguidos por Schering
Corporation contra el Instituto Nacional de Defensa de la
Competencia y de la Protección de la Propiedad Intelectual –
INDECOPI,
sobre
Acción
Contencioso
Administrativo;
DISPUSIERON la publicación de la presente resolución en el
Diario Oficial “El Peruano” conforme a ley; y los devolvieron.- Juez
Supremo Ponente: Vinatea Medina S.S. SIVINA HURTADO,
ACEVEDO MENA, VINATEA MEDINA, RUEDA FERNÁNDEZ,
MALCA GUAYLUPO C-1335410-7
CAS. Nº 1547-2011 LIMA
Lima, veinticuatro de junio de dos mil catorce. LA SALA DE
DERECHO CONSTITUCIONAL Y SOCIAL PERMANENTE DE LA
CORTE SUPREMA DE JUSTICIA DE LA REPÚBLICA: VISTA la
causa; con el acompañado; en Audiencia Pública llevada a cabo en
la fecha, integrada por los Jueces Supremos Walde Jáuregui–
Presidente, Acevedo Mena, Vinatea Medina, Rueda Fernández y
Malca Guaylupo; con la Interpretación Prejudicial remitida por el
Tribunal de Justicia de la Comunidad Andina; con lo expuesto en el
Dictamen Fiscal Supremo en lo Contencioso Administrativo;
producida la votación con arreglo a ley, se ha emitido la siguiente
sentencia: I.- MATERIA DEL RECURSO DE CASACION: Es
materia el recurso de casación interpuesto por el Instituto Nacional
de Defensa de la Competencia y de la Protección de la Propiedad
Intelectual- INDECOPI, de fecha veintitrés de julio de dos mil diez,
obrante a fojas doscientos diecisiete, contra la sentencia de vista
de fecha veintiséis de noviembre del dos mil nueve, obrante a fojas
ciento ochenta y ocho, que revocando la sentencia de fecha nueve
de julio de dos mil ocho que declara infundada la demanda;
reformándola la declara fundada la demanda; en consecuencia,
nula la Resolución N° 0448-2007/TPI-INDECOPI de fecha primero
de marzo de dos mil siete, emitida por el Tribunal de Defensa de la
Competencia y de la Propiedad Intelectual del Instituto Nacional de
Defensa de la Competencia y de la Protección de la Propiedad
Intelectual - INDECOPI, ordenando que la entidad administrativa
demandada inscriba en el Registro de Marcas de Productos de la
Propiedad Industrial a favor de Intradevco Industrial Sociedad
Anónima la marca de producto constituida por la denominación
“OXYWHITE”, para distinguir detergentes de la clase tres de la
Clasificación Internacional. II.- FUNDAMENTOS POR LOS
CUALES SE HA DECLARADO PROCEDENTE EL RECURSO:
Mediante resolución de fecha cinco de diciembre de dos mil once,
corriente a fojas setenta y nueve del cuaderno de casación, se ha
declarado procedente el recurso de casación interpuesto por el
Instituto Nacional de Defensa de la Competencia y de la Protección
de la Propiedad Intelectual- INDECOPI por: a) Infracción
normativa de los incisos a), b) c) y d) del artículo 131° del
Decreto Legislativo N° 823, que establece los criterios obligatorios
de confundibilidad que debe tener en cuenta el juzgador al
momento de realizar el examen comparativo entre dos signos,
alegando que a través de la sentencia de vista no solo se ha
violentado el análisis del conjunto de los signos, sino que además
se han inobservado las reglas de comparación establecidas
imperativamente en la ley, ya que no se ha evaluado los signos
OXYWHITE y OXYAZUL de manera conjunta, por cuanto sólo se
ha procedido a descomponer la unidad gráfica y fonética de los
signos para encontrar diferencias entre sus elementos
aisladamente, es decir, no se empleó ningún criterio técnico, y b)
Infracción normativa del inciso a) del artículo 136° de la
Decisión 486, que regula la prohibición relativa del registro de
marcas susceptibles de causar un riesgo de confusión o de
asociación en el consumidor, argumentando que al haber dejado
de ejecutar los criterios de confundibilidad entre marcas
denominativas se ha inaplicado también el dispositivo legal
anotado. III.- CONSIDERANDO: El proceso contencioso
administrativo. Primero: El proceso contencioso administrativo
tiene por finalidad el control jurídico por parte del Poder Judicial de
las actuaciones de la administración pública sujetas al derecho
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administrativo y la tutela efectiva de los derechos e intereses de los
administrados, en virtud a lo cual son impugnables los actos
administrativos, el silencio administrativo, la actuación material no
sustentada en actos administrativos, la actuación u omisión en la
ejecución o interpretación de los contratos de administración
pública y las actuaciones respecto del personal de la citada
administración. El proceso contencioso administrativo tiene doble
finalidad: i) El control jurídico de los actos administrativos; ii) La
protección y satisfacción de los derechos e intereses de los
demandantes. Sobre el particular Bernales Ballesteros1 señala: “La
acción contenciosa administrativa, tiene por finalidad recurrir al
Poder Judicial a fin de que se revise la adecuación al sistema
jurídico de las decisiones administrativas que versan sobre
derechos subjetivos de las personas, en ese sentido es garantía de
la constitucionalidad y legalidad de la actuación de la administración
pública frente a los administrados”. Por ello corresponde en sede
jurisdiccional analizar la racionalidad de la decisión administrativa
conforme a la protección de los derechos fundamentales y el marco
jurídico vigente. Producto de dicha actividad el Juez competente
está facultado y obligado a declarar la nulidad de tales actos
cuando vulneran el derecho al debido procedimiento administrativo,
tutela jurisdiccional efectiva, debido proceso, así como los
principios de integración, igualdad procesal, favorecimiento del
proceso, suplencia de oficio, entre otros. Así está consagrado por
el artículo 148 de la Constitución Política del Perú lo cual tiene su
desarrollo en los artículos 1, 4 y demás pertinentes del Texto Único
Ordenado de la Ley que regula el Proceso Contencioso
Administrativo N° 27584. Demanda. Segundo: Mediante escrito
de demanda de fojas cuarenta y seis, Intradevco Industrial
Sociedad Anónima pretende que se declare la nulidad de la
Resolución N° 0448-2007/TPI-INDECOPI de fecha primero de
marzo de dos mil siete emitida por la Sala de Propiedad Intelectual
del Tribunal de Defensa de la Competencia y Propiedad Intelectual
del Instituto Nacional de Defensa de la Competencia y de la
Protección de la Propiedad Intelectual - INDECOPI que revocando
la Resolución N° 163667-2006/OSD-INDECOPI de fecha
veintinueve de setiembre de dos mil seis declara fundada la
oposición presentada por Procter & Gamble Company y deniega la
inscripción de la marca de producto Oxywhite para distinguir
detergentes de la clase tres de la Nomenclatura Oficial. Tercero:
Como fundamentos de hecho señala, que el cinco de diciembre de
dos mil cinco solicitó la marca del producto OXYWHITE en la clase
tres de la Nomenclatura Oficial. Con fecha uno de febrero de dos
mil seis, la empresa The Procter & Gamble Company formula
oposición a la solicitud de inscripción argumentando ser la titular de
la marca OXIAZUL para distinguir productos de la clase tres, según
certificado N° 99909, señala que ambas marcas se encuentran
constituidas por una sola denominación conformadas por el prefijo
OXI y OXY respectivamente acompañadas de terminaciones que
designan colores, el mensaje conceptual sería similar, el hecho que
el color que designa la marca solicitada sea en inglés no es un
elemento de diferenciación debido a que la denominación WHITE
es entendida por la mayoría de los consumidores como “blanco”, y
que de este modo cualquier consumidor encontraría relación entre
las marcas al compararlas en el mercado, generándose una
confusión indirecta. No obstante, los argumentos esgrimidos por el
Tribunal del Instituto Nacional de Defensa de la Competencia y de
la Protección de la Propiedad Intelectual –INDECOPI en las
resoluciones cuya nulidad se pretende, son totalmente equivocados
debido a que han sido emitidos alejándose de los criterios
aceptados por la doctrina dominante en materia de propiedad
industrial, toda vez que, resulta contrario a derecho analizar las
marcas fraccionándolas; asimismo, al tratarse de marcas
denominativas simples, el examen de confundibilidad debe
realizarse en base a una visión integral del signo, es decir, no
puede separarse por sílabas. Por otro lado, señala que se debe
tener en cuenta que el parámetro de consumidor medio no debe
ser forzado imputándosele conocimientos técnicos, que por el
contexto del país no tiene, razón por la cual, la administración
incurrió en error al determinar que la denominación White ha
ingresado al lenguaje común de nuestra realidad, ya que al no
formar parte de nuestro vocabulario debe ser considerada como
una denominación de fantasía; en ese sentido, la palabra en
comento no evoca ninguna característica del producto que
pretende distinguir, sino que es una terminación novedosa e
inventada para dotar de distintividad al signo cuyo registro se
solicitó. Sentencia de Primera Instancia. Cuarto: Mediante la
sentencia expedida por la Tercera Sala Especializada en lo
Contencioso Administrativo de la Corte Superior de Justicia de
Lima, de fecha nueve de julio de dos mil ocho se declara infundada
la demanda, precisando que al ser productos de naturaleza similar,
los que representan dichas marcas, esto es, detergentes que
pertenecen al rubro de productos de limpieza, se expenden por los
mismos canales de comercialización; en ese sentido existe el
riesgo de que la presencia de dicho vocablo induzca al consumidor
a creer que el signo solicitado constituye una variación de la marca
registrada o de una nueva línea de productos, toda vez que la
marca OXIAZUL es la única marca registrada que posee la
combinación OXI+ COLOR en la clase en mención; en
consecuencia, el criterio del ente administrativo es correcto al
declarar que la co existencia de ambas marcas, esto es,
OXYWHITE (solicitada) y OXIAZUL (registrada), implica la
existencia de un alto grado de confusión para el público consumidor.
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CASACIÓN
Sentencia de Vista. Quinto: La sentencia de vista de fecha
veintiséis de noviembre del dos mil nueve, de fojas ciento ochenta
y ocho, revoca la sentencia expedida en primera instancia, y
declara fundada la demanda, en consecuencia, nula la Resolución
N° 0448-2007/TPI-INDECOPI del primero de marzo del dos mil
siete, emitida por el Tribunal de Defensa de la Competencia y de la
Propiedad Intelectual del Instituto Nacional de Defensa de la
Competencia y de la Protección de la Propiedad Intelectual
-INDECOPI, ordenando que la entidad administrativa demandada
inscriba en el registro de marcas de productos de la propiedad
industrial a favor de Intradevco Industrial Sociedad Anónima la
marca de producto constituida por la denominación “OXYWHITE”
para distinguir detergentes de la clase tres de la Clasificación
Internacional, argumentando que en el caso de la marca solicitada,
ésta se encuentra conformada por el término “White”, el cual es
una expresión denominativa en idioma extranjero (inglés), por lo
que debe ser considerado como una denominación forjada o de
fantasía, teniendo en cuenta que no se ha acreditado que dicho
término haya sido incorporado al lenguaje común como su
semejanza fonética y gráfica correspondiente a su traducción en el
idioma nacional; por tanto, no es factible afirmar que el significado
de la denominación “White” es conocida por el consumidor medio
peruano. Marca: Concepto. Requisitos. Función. Clases. Sexto:
Debemos resaltar que la marca es el signo utilizado para la
identificación de productos o servicios en el mercado y sirve
fundamentalmente para su diferenciación respecto de otros
productos o servicios de la misma especie, constituye un bien
inmaterial que goza de protección jurídica por la legislación
nacional y supranacional. En ese sentido, desde su inscripción o
depósito en la entidad administrativa correspondiente, la marca
confiere a su titular el derecho a usarla en exclusividad, siempre
que cumpla con los requisitos de distintividad, perceptibilidad y ser
susceptible de representación gráfica. Según definición de la
OMPI2 marca es un signo distintivo que individualiza los productos
de una persona o empresa determinada y los distingue de sus
competidores. Puede ser representada por palabras, dibujos o
símbolos, colores, figuras, letras, números, abreviaturas o
nombres, embalajes, slogans, objetos, emblemas, hologramas,
sonidos, aromas o fragancias, etc. La marca es un bien inmaterial
que a decir de José Antonio Gomez Segade3 se define como “las
prestaciones producto de la creación o del esfuerzo humano, que
se materializan en determinados bienes y que encierran un
extraordinario valor informativo de gran relevancia en el mercado
moderno”. El artículo 15.1 de los ADPIC4 establece que podrá
constituir una marca de fábrica o de comercio cualquier signo o
combinación de signos que sean capaces de distinguir los bienes o
servicios de una empresa de los de otras empresas. Tales signos
podrán registrarse como marcas de fábrica o de comercio, en
particular las palabras, incluidos los nombres de persona, las
letras, los números, los elementos figurativos y las combinaciones
de colores, así como cualquier combinación de estos signos.
Cuando los signos no sean intrínsecamente capaces de distinguir
los bienes o servicios pertinentes, los Miembros podrán supeditar
la posibilidad de registro de los mismos al carácter distintivo que
hayan adquirido mediante su uso. Los Miembros podrán exigir
como condición para el registro que los signos sean perceptibles
visualmente. Para efectos del artículo 134 de la Decisión 4865
constituirá marca cualquier signo que sea apto para distinguir
productos o servicios en el mercado. Podrán registrarse como
marcas los signos susceptibles de representación gráfica. Dice
Metke Méndez6 –citando a José Manuel Otero Lastres- que es
requisito para constituir marca, que el signo debe ser apto, vale
decir, idóneo o adecuado para el fin propuesto (distinguir productos
o servicios). Otro requisito es la representación gráfica como
aptitud del signo para ser inscrito o registrado, esto parte de la
necesidad de que el signo, para poder ser publicado, inscrito y
examinado tanto por la Administración como por terceros, requiere
de esta formalidad. En atención al artículo 128 del Decreto
Legislativo N° 8237, se entiende por marca todo signo que sirva
para diferenciar en el mercado los productos y servicios de una
persona de los productos o servicios de otra persona. Podrán
registrarse como marcas los signos que sean perceptibles,
suficientemente distintivos y susceptibles de representación
gráfica. De lo antes expuesto advertimos que es requisito ineludible
para el registro de un signo como marca es su carácter de distintivo,
asimismo, las marcas presentan dos elementos que componen su
calidad de signo distintivo, ser susceptibles de representación
gráfica y su relación con un producto o servicio determinado en el
mercado. Sétimo: Si bien se reconoce usualmente a la marca una
diversidad de funciones, entre las cuales pueden mencionarse, la
de ser un indicador de la procedencia empresarial de los productos
que distingue y de su calidad, un medio de concentración de la
reputación o goodwill de su titular y los productos o servicios que
oferta, o un instrumento para publicitar productos y servicios. En
cuanto a las funciones de la marca, indica Oré Sosa8 que se le
atribuye: 1) Función indicadora de procedencia (identificar los
productos o servicios de una persona respecto de los de otra en el
mercado); 2) Función indicadora de calidad (el consumidor espera
que los productos de una marca presenten estándares homogéneos
y constantes de calidad); 3) El prestigio o goodwill ( el prestigio de
los productos y servicios para los que se usa la marca); 4) La
función publicitaria (la publicidad tiene trascendencia económica
pues brinda al público todo tipo de información sobre las
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características de los productos y servicios puestos en el mercado,
las cuales determinan la elección del consumidor y refuerzan el
carácter distintivo del signo). Afirma Cornejo Guerrero9 que las
marcas se caracterizan por su aptitud para identificar y diferenciar
fácilmente un producto o un servicio de sus similares en el mercado,
por consiguiente, tienen una función identificadora que permite a la
marca individualizar fácilmente un producto o un servicio, así como
una función diferenciadora cuyo objeto es distinguir un producto o
un servicio para que no sea confundido con otros iguales o
similares. No obstante lo expuesto, se reconoce sin mayor
discusión que la función esencial que cumple la marca es la
denominada distintiva, que permite al consumidor distinguir los
productos o servicios de un empresario respecto a los otros, y que
a la idoneidad de la marca para cumplir ésta se encuentran
supeditadas las demás funciones antes nombradas. Prohibiciones
para el Registro de Marca: Distintividad. Identidad o semejanza
de signos. Riesgo de Confusión o Asociación. Conexión
competitiva. Octavo: El artículo 135 literales a), b) e i) de la
Decisión 486, establece prohibiciones absolutas para registrar los
signos que no puedan constituir marca conforme al primer párrafo
del artículo 134; a los que carezcan de distintividad; y, a los que
puedan engañar a los medios comerciales o al público, en particular
sobre la procedencia geográfica, la naturaleza, el modo de
fabricación, las características, cualidades o aptitud para el empleo
de los productos o servicios de que se trate. El artículo 136 literal a)
limita con calidad de prohibición relativa registrar como marcas
aquellos signos cuyo uso en el comercio afecte indebidamente un
derecho de tercero, especialmente cuando: sean idénticos o se
asemejen, a una marca anteriormente solicitada para registro o
registrada por un tercero, para los mismos productos o servicios, o
para productos y servicios respecto de los cuales el uso de la
marca pueda causar un riesgo de confusión o de asociación. El
concepto de distintividad se relaciona directamente con el signoproducto y con la capacidad intrínseca del signo de diferenciar el
producto, lo que desde esta perspectiva se logra en la medida que
el signo no designe el género o la especie del producto o servicio
de que se trate o no describa sus características o calidades. Esta
noción se denomina distintividad interna, la otra es la distintividad
externa predicada en relación con otras marcas prioritarias, que de
ser confundibles con la segunda, le impedirían cumplir su función
distintiva, pues no permitiría que el público distinguiera
adecuadamente los productos o servicios amparados por las
marcas prioritarias10. Este concepto de distintividad externa implica
lo diferente o distinta que debe ser la marca solicitada, de las
marcas ya registradas y de otros signos distintivos. Por el principio
de especialidad, la protección de la marca se extiende a los
productos o servicios para los cuales fue registrada y a los
productos o servicios respecto de los cuales el uso de la marca
pueda causar un riesgo de confusión o de asociación. Esto deriva
del artículo 136 literal a) de la Decisión 486 y artículo 130 literal a)
del Decreto Legislativo N° 82311. El fundamento de este principio,
se encuentra en que la función de la marca es identificar uno o
varios productos o servicios en concreto, y no toda la gama de
productos o servicios existentes. Consecuencia de este principio,
es que existan marcas idénticas a favor de diversos titulares,
registradas para productos o servicios distintos y sin conexión
competitiva entre sí. Cabe destacar que la identidad o semejanza
de los signos cuyo registro de marca se pretende debe ser de tal
entidad que potencialmente pueda inducir a error al público. Esta
prohibición legal de registro se sostiene en un principio fundamental
del derecho de marcas cual es el riesgo de confusión, que es de
carácter abstracto, es decir, no es necesario demostrar una
concreta situación de confusión, sino que la identidad o semejanza
de los signos confrontados sea de tal forma que “pueda” inducir al
público a error. Por tanto, será suficiente verificar, a partir de una
comparación de los signos y productos en conflicto, la aptitud para
generar confusión en el mercado. No se exige probar la existencia
de una efectiva confusión en el consumidor, sino comprobar la
posibilidad de confusión12. El artículo 131 del Decreto Legislativo
N° 82313 contiene los criterios generales para la determinación del
riesgo de confusión, los cuales se aplican a conflictos entre
cualquier clase de marcas o de diversa naturaleza. Por otro lado, el
citado Tribunal de Justicia14 sobre el riesgo de confusión y
asociación, ha manifestado: “El riesgo de confusión es la posibilidad
de que el consumidor al adquirir un producto piense que está
adquiriendo otro (confusión directa), o que piense que dicho
producto tiene un origen empresarial diferente al que realmente
posee (confusión indirecta). El riesgo de asociación es la posibilidad
de que el consumidor, que aunque diferencia las marcas en
conflicto y el origen empresarial del producto, al adquirirlo piense
que el productor de dicho producto y otra empresa tienen una
relación o vinculación económica”. Con relación a la conexión
competitiva, el Tribunal de Justicia de la Comunidad Andina15 ha
establecido criterios y factores de análisis para definir la conexión
competitiva entre los productos que también son aplicables a los
servicios: a) La inclusión de los productos en una misma clase del
nomenclátor; b) Canales de comercialización; c) Similares medios
de publicidad; d) Relación o vinculación entre productos; e) Uso
conjunto o complementario de productos; y, f) Mismo género de los
productos. En el Proceso 065-IP-2013, Interpretación Prejudicial
de quince de mayo de dos mil trece, marca: HALUX, en su numeral
4 el Tribunal refiere con relación a las consideraciones relativas a la
conexión competitiva entre productos y servicios, su orientación
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CASACIÓN
jurisprudencial, con base en la doctrina señala que se han
elaborado pautas o criterios que pueden conducir a establecer o
fijar la similitud o la conexión competitiva entre los productos y
servicios que se sintetizan: (i) La inclusión de los productos o
servicios en la misma clase del nomenclátor; (ii) canales de
comercialización; (iii) mismos medios de publicidad; (iv) relación o
vinculación entre los productos o servicios; (vi) partes y accesorios;
(vii) mismo género de los productos o servicios; (viii) misma
finalidad; (ix) intercambiabilidad de los productos o servicios.
Asimismo, el Tribunal16 ha sostenido: “ en este supuesto, y a fin de
verificar la semejanza entre los productos en comparación, el
consultante habrá de tomar en cuenta, en razón de la regla de
especialidad, la identificación de dichos productos en las solicitudes
correspondientes y su ubicación en el nomenclátor; además podrá
hacer uso de los criterios elaborados por la doctrina para establecer
si existe o no conexión competitiva entre el producto identificado en
la solicitud de registro del signo como marca y el amparado por la
marca ya registrada o ya solicitada para registro. A objeto de
precisar que se trata de productos semejantes, respecto de los
cuales el uso del signo pueda inducir al público a error, será
necesario que los criterios de conexión, de ser aplicables al caso,
concurran en forma clara y en grado suficiente, toda vez que
ninguno de ellos bastará, por sí solo, para la consecución del citado
propósito”. Por otro lado, el artículo 146 de la Decisión 486 y el
concordante artículo 146 del Decreto Legislativo N° 823, admiten la
oposición u observación al registro de marca, esta es la oposición
a nivel nacional formulada por terceros que tengan legítimo interés
en que la marca cuyo registro se encuentra en trámite se consolide
pues afecta sus intereses ya sea porque tienen idéntica o similar
marca anteriormente registrada o porque pretenden registrarla a
posteriori o paralelamente. Esta oposición debe acompañar las
pruebas que la sustenten. Noveno: En el presente caso, la
controversia fue fijada en determinar si corresponde declarar la
nulidad de la Resolución N° 0448-2007/TPI-INDECOPI, para cuyo
efecto era preciso dilucidar. i) si el signo OXYWHITE, cuyo registro
pretende Intradevco Industrial Sociedad Anónima, incurre en riesgo
de confusión con la marca OXIAZUL registrada a favor de Procter
& Gamble Company con certificado N° 99909; ii) si es posible la
coexistencia pacífica de ambos signos en el mercado. Sobre el
particular, se advierte de autos que mientras la resolución
administrativa impugnada deniega el registro del signo OXYWHITE
bajo la consideración de que incurre en dicho riesgo de confusión
indirecta con la marca registrada, la empresa demandante sostiene
que el referido signo cuenta con suficiente distintividad como para
superar cualquier posibilidad de confusión. Es pertinente remarcar
que a nivel administrativo, mediante Expediente N° 0262374-2005,
Intradevco Industrial Sociedad Anónima solicitó el registro de la
marca “OXYWHITE” para distinguir “detergentes” de la clase tres
de la Nomenclatura Oficial. Procter & Gamble Company en su
calidad de titular de la marca registrada OXIAZUL con certificado
N° 99909 la cual distingue los productos: “jabones líquidos, en
crema, desodorantes, desinfectantes y medicinales; sales no
medicinales para el baño; perfumería, aguas de colonia, toallitas
impregnadas de colonia, perfumes, talco para tocador, cosméticos,
leches de tocador, productos de maquillaje, lociones para uso
cosmético, cremas faciales, cremas para el cuerpo, cremas para
blanquear la piel, aceites y cremas desmaquilladoras, mascarillas
de belleza, sombras para ojos, lápices labiales, máscaras para
pestañas, rubor, polvos para el maquillaje, esmaltes para uñas,
aceites esenciales, aceites de tocador; champú, mouse, gel, spray,
tintes para el cabello, preparaciones para la limpieza, cuidado y
embellecimiento de la piel, cuero cabelludo y el cabello; dentífricos;
preparaciones para blanquear, limpiar, pulir, desengrasar y raspar,
detergentes y jabones de escamas usados como detergentes” de
la clase tres de la Nomenclatura Oficial interpuso oposición
sustentada en que la solicitud vulneraba los artículos 134, 135
literales a) e i), 136 literal a) y 137 de la Decisión 486. Conforme
consta de la Resolución N° 016367-2006/OSD-INDECOPI, la
Oficina de Signos Distintivos de Indecopi verificó que en la clase
tres de la Clasificación Internacional se encuentran registradas
distintas marcas a favor de personas diversas, que incluyen en su
denominación las partículas OXY y WHITE, tales como:
OXYFRESH con certificado N° 65379, OXYGENE certificado N°
55983, OXYSPRAY certificado N° 85670; WHITE CAP certificado
N° 73804, WHITE DIAMONDS certificado N° 16650 y WHITE KISS
certificado N° 60585; con lo cual determinó que dichas partículas
son de uso frecuente en la clase tres. Declaró infundada la
oposición y ordenó la inscripción en el registro de la marca
solicitada, en mérito a su conclusión de que si bien existe similitud
entre los productos distinguidos por ambos signos, su examen
comparativo determinó que debido a sus diferencias fonéticas,
gráficas y conceptuales, no existía riesgo de inducir a error al
público consumidor respecto a los productos mismos ni en cuanto
a su origen empresarial. Interpuesta apelación por parte de la
solicitante, el Tribunal de Defensa de la Competencia y de la
Propiedad Intelectual por Resolución N° 0448-2007/TPI-INDECOPI
revocó la apelada y denegó el registro de la marca de producto
OXYWHITE, fundamentada en que la denominación WHITE
constituye una palabra del idioma inglés cuyo significado es
BLANCO, el cual es conocido por la mayoría de la población, no
obstante que no representa semejanza fonética y gráfica con la
palabra que constituye su traducción al idioma castellano; agrega
que si bien es cierto el término BLANCO es de uso común en
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publicidad de detergentes domésticos e incluso en su clasificación
comercial, por si mismo no es descriptivo, por tanto concluye que la
denominación WHITE no está incursa en la prohibición del artículo
135 literal e) de la Decisión 486. En cuanto al riesgo de confusión,
concluye que la correcta aplicación del artículo 136 inciso a) de la
Decisión 486 requiere la interrelación de la identidad y similitud de
los productos o servicios y la identidad o similitud de los signos,
tomando en cuenta siempre la distintividad de los signos; respecto
a la similitud o conexión competitiva advierte que el producto
“detergentes” del signo solicitado está incluido dentro de los
productos de la marca registrada; con relación al examen
comparativo, advierte desde el punto de vista fonético que ambos
signos tiene diferente pronunciación, del punto de vista gráfico,
advierte que si bien la partícula OXY del primero es similar a la
partícula OXI del segundo, las grafías WHITE y AZUL de cada
signo generan una impresión visual distinta. En lo referente al
riesgo de confusión. Décimo: Según lo expuesto en los
considerandos cuarto y quinto precedentes, la sentencia de
primera instancia declaró infundada la demanda considerando que
ambas marcas distinguen detergentes que pertenecen al rubro
productos de limpieza y se expenden por los mismos canales de
comercialización con el riesgo de que induzcan a error al
consumidor respecto a su origen empresarial, pues la marca
OXIAZUL es la única registrada que posee la combinación OXI +
Color en dicha clase, de lo que advierte que existe la posibilidad de
vinculación de productos o conexión competitiva; y en tal sentido,
ello implica alto grado de confusión entre ellas, razón por la cual la
marca cuyo registro pretende la demandante incurre en la
prohibición establecida en el artículo 136 literal a) de la Decisión
486. La sentencia de vista revocó la apelada y reformándola
declaró fundada la demanda y nula la Resolución N° 0448-2007/
TPI-INDECOPI, luego de reiterar lo determinado por la autoridad
administrativa que descartó similitudes en los planos gráfico y
fonético entre ambas marcas y que en el plano conceptual existen
otras marcas registradas conteniendo la misma partícula OXY, de
lo cual se concluye que es un elemento débil compartido por las
marcas en conflicto. En cuanto a la fuerza distintiva, respecto a la
expresión denominativa “WHITE” en inglés, afirma que no ha sido
probado que su uso hubiere ingresado al idioma nacional para
describir determinado producto o su incorporación al lenguaje
común por semejanza fonética o gráfica con su respectiva
traducción, situación que le otorga categoría de denominación de
fantasía, es decir, carente de significado, motivo por el cual no será
percibido por el consumidor medio como expresión que resalte o
transmita una cualidad del producto; en consecuencia, no es
posible afirmar que el significado de la denominación “WHITE” es
conocida por el consumidor medio peruano, ni que exista riesgo de
confusión o asociación por vinculación de productos; por
consiguiente, concluye que el signo solicitado tiene la distintividad
necesaria para acceder al registro. Interpretación Prejudicial.
Décimo Primero: La Sala de Derecho Constitucional y Social
Permanente dando cumplimiento a lo dispuesto por el artículo 33
segundo párrafo del Tratado de Creación del Tribunal de Justicia
de la Comunidad Andina y artículo 123 de su Estatuto aprobado por
la Decisión 500, efectuó la consulta obligatoria al Tribunal de
Justicia de la Comunidad Andina el cual emitió la Interpretación
Prejudicial (Proceso 112-IP-2013) de dieciséis de julio de dos mil
trece sobre el artículo 136 literal a) de la Decisión 486 y de oficio
sobre el artículo 134 literal a) de la misma norma; artículos 32 y 33
del Tratado de Creación del Tribunal de Justicia de la Comunidad
Andina; y artículos 121, 122 y 123 de su Estatuto aprobado por la
Decisión 500. Entre sus conclusiones expone: i) Un signo puede
registrarse como marca si reúne los requisitos de distintividad y
susceptibilidad de representación gráfica y, además, si el signo no
está incurso en las causales de irregistrabilidad señaladas en los
artículos 135 y 136 de la Decisión 486; ii) Para establecer la
similitud entre dos signos distintivos, se deberá proceder al cotejo
de los signos en conflicto, para luego determinar si existe riesgo de
confusión o asociación, bastando la posibilidad de riesgo para que
opere la prohibición; iii) Para resolver el conflicto marcario la
consultante deberá establecer el riesgo de confusión que pudiere
existir entre los signos denominativos OWYWHITE y OXYAZUL; iv)
La consultante deberá determinar si la palabra OXY es de uso
común en la clase tres de la Clasificación Internacional de Niza, así
como en clases conexas competitivamente; v) La consultante
deberá determinar si el significado de la palabra WHITE es
conocido por la mayoría del público consumidor, y si se trata de una
palabra de uso común, genérica o descriptiva para la clase tres de
la Clasificación Internacional, para así determinar la distintividad
del conjunto marcario; vi) Se deberá establecer si el signo
denominativo OXYWHITE es evocativo. Décimo Segundo: En
este contexto, el Instituto Nacional de Defensa de la Competencia
y de la Protección de la Propiedad Intelectual - INDECOPI denuncia
en su recurso de casación la infracción de los literales a), b), c) y d)
del artículo 131 del Decreto Legislativo N° 823 y el inciso a) del
articulo 136 de la Decisión 486, alegando que la Sala Civil
Permanente de la Corte Suprema ha inaplicado los criterios de
confundibilidad contenidos en estas normas para la realización del
examen comparativo entre dos signos, pues la sentencia materia
de impugnación no ha evaluado los signos OXYWHITE y OXIAZUL
de manera conjunta, sino que ha procedido a descomponer la
unidad gráfica y fonética de ambos signos, para encontrar
diferencias entre sus elementos, sin ningún criterio técnico. Las
El Peruano
Lunes 1 de febrero de 2016
CASACIÓN
citadas normas establecen los criterios que deben ser utilizados
por el operador al realizar el análisis destinado a establecer si dos
signos son semejantes y capaces de inducir a confusión y error al
consumidor. Así, el artículo 131 del Decreto Legislativo N° 823
estableció los siguientes criterios: a) La apreciación sucesiva de los
signos considerando su aspecto de conjunto, y con mayor énfasis
en las semejanzas que en las diferencias; b) El grado de percepción
del consumidor medio; c) La naturaleza de los productos o servicios
y su forma de comercialización o prestación, respectivamente; d) El
carácter arbitrario o de fantasía del signo, su uso, publicidad y
reputación en el mercado; y, e) Si el signo es parte de una familia
de marcas. Para el caso específico de los signos denominativos, el
artículo 132 del Decreto Legislativo N° 823 exige, adicionalmente,
los siguientes criterios: a) La semejanza gráfico-fonética; b) La
semejanza conceptual; y, c) Si el signo incluye palabras genéricas
y/o descriptivas, se realizará el análisis sobre la palabra o palabras
de mayor fuerza distintiva. En virtud a dichos criterios, el análisis
comparativo de dos signos debe efectuarse de modo sucesivo y en
base a la impresión o apreciación que éstos producen en su
conjunto, sin descomponer su unidad fonética, dado que es
previsible que, al entrar en contacto con ellos, los consumidores los
apreciarán del mismo modo, pues no los apreciarán al mismo
tiempo, sino que cada marca se presentará en un momento distinto
y, del mismo modo, tampoco los percibirán fragmentariamente,
sino en base a una visión de conjunto. Asimismo, estas normas
buscan que al realizar el análisis, el operador trate de colocarse en
el mayor grado posible dentro de la situación en que se encontrarán
los posibles adquirentes de los productos o servicios afectados,
teniendo en cuenta el grado de percepción del consumidor medio y
la naturaleza de los productos o servicios y su forma de
comercialización o prestación, sin dejar de atender al carácter
arbitrario o de fantasía del signo, su uso, publicidad y reputación en
el mercado, ya que estas últimas circunstancias podrían modificar
el contexto en el cual los signos son apreciados por el consumidor
o incluso introducir variaciones en el carácter de los signos que les
provean mayor o menor distintividad. Así, por ejemplo, en el caso
de productos que, por su modo de prestación, requieran de la
asistencia de un profesional, como en el caso de los productos
farmacéuticos, la posibilidad de confusión será menos intensa,
dada la asistencia de una persona versada en el manejo de los
productos; y, del mismo modo, para el caso de los signos formados
por una o más palabras en el idioma extranjero, la opinión del
Tribunal de Justicia de la Comunidad Andina obrante a fojas
noventa y cuatro del cuadernillo de casación expone que cuando
ellos no sean parte del conocimiento común, son considerados
signos de fantasía y, en consecuencia, es procedente su registro
como marca, al tener un alto grado de distintividad. Décimo
Tercero: En ese orden de ideas, al someter a comparación los
signos “OXYWHITE” y “OXIAZUL”, puede apreciarse que, en
efecto, ambos tienen en común similar la partícula “OXY y OXI”,
sobre las cuales ha quedado establecido a nivel administrativo -no
negado a nivel judicial- que ambas son de uso frecuente en la clase
tres de la Nomenclatura Oficial; no obstante, la presencia de los
términos WHITE, en el primero, y AZUL, en el segundo, generan
una impresión gráfica distinta, dada la marcada diferencia en la
grafía de cada uno de ellos y, del mismo modo, produce una
variación esencial en su pronunciación y entonación, ya que no
solo la estructura y posición que tienen las vocales varía en cada
uno de ellos, sino que, además, los fonemas producidos son
diametralmente distintos, al grado de poder distinguir
suficientemente a los signos. Conviene mencionar a estos efectos,
que el riesgo de confusión directa se da entre productos idénticos
distinguidos por signos iguales o similares de modo tal que
conducen a error al consumidor al hacerle creer que se adquiere un
producto del competidor; por su parte, el riesgo de confusión
indirecta se presenta cuando a pesar de poder diferenciar
adecuadamente los productos o servicios distinguidos por una
marca respecto a los demás similares en el mercado, el consumidor
está en la creencia que dichos productos tienen un origen
empresarial diferente al que realmente poseen, al considerar que la
marca que los identifica es una variación de otra registrada. En tal
sentido, a fin de determinar, en este caso concreto, si en realidad la
presencia del término OXY – OXI en ambos signos puede producir
riesgo de confusión indirecta, es necesario llevar a cabo un análisis
previo a fin de establecer también si la expresión en idioma
extranjero WHITE es de uso común en la clase tres de la
Nomenclatura Oficial y, de este modo, determinar si en realidad el
signo OXYWHITE es evocativo o debe ser considerado como uno
de fantasía, según lo ha declarado el Tribunal de Justicia de la
Comunidad Andina en la Consulta Prejudicial N° 112-IP-2013, dado
que los signos de fantasía tienen generalmente un alto grado de
distintividad y, por lo tanto, su registro puede concederse sin que se
presenten oposiciones exitosas. Décimo Cuarto: Por consiguiente,
cabe indicar que de lo actuado en autos, se observa que, si bien se
ha determinado que el término “OXY” es de uso común en los
productos de la clase tres de la Clasificación Internacional, sin
embargo, no se acreditó que la denominación en idioma extranjero
“WHITE” hubiere ingresado al idioma nacional para describir
detergentes u otro producto, o que sea parte del conocimiento
común del consumidor promedio peruano. En vista a ello, el hecho
que el término “WHITE” no constituya una palabra de dominio
común por el consumidor promedio peruano, tiene como efecto
que se le considere como signo de fantasía, debido a que su sola
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presencia no evocará en el consumidor o usuario promedio,
característica o cualidad de algún producto, pues para ello tendría
que efectuar una deducción no evidente. A raíz de lo expuesto, en
la sentencia de vista igualmente se descartó la existencia de riesgo
de confusión a causa de la naturaleza de los productos -ambas
marcas distinguen detergentes- o de su origen empresarial, al no
ser la marca “OXYWHITE” una de naturaleza evocativa respecto a
producto alguno, ni mucho menos a detergentes; como también
descartó el riesgo de confusión para el consumidor sobre el origen
del producto y su forma de comercialización, más aun, dentro del
marco de un mercado nacional sumamente amplio de productos de
uso masivo, como son los detergentes. Finalmente, atendiendo a
que la Sala de mérito concluyó razonadamente que la marca
“OXYWHITE” constituye un signo de fantasía, resulta aplicable la
regla señalada en la Interpretación Prejudicial de fojas noventa y
cuatro, según la cual los signos de fantasía tienen generalmente un
alto grado de distintividad, conforme está acreditado en el presente
proceso. Por tanto, determina que la referida marca tiene
distintividad suficiente y supera claramente el examen de
registrabilidad, resultando improbado que la marca solicitada por la
demandante –materia de la resolución objeto de impugnaciónhaya incurrido en los supuestos establecidos por el artículo 136
literal a) de la Decisión 486 o el artículo 131 literales a), b) y c) del
Decreto Legislativo N° 823, motivo por el cual se encuentra
arreglado a ley conceder su registro. Por tanto, esta Sala Suprema
debe declarar infundado el recurso de casación en todos sus
extremos. IV.- DECISIÓN: Por tales consideraciones Declararon
INFUNDADO el recurso de casación interpuesto por el Instituto
Nacional de Defensa de la Competencia y de la Protección de la
Propiedad Intelectual- INDECOPI, de fecha veintitrés de julio de
dos mil diez, obrante a fojas doscientos diecisiete; en consecuencia
NO CASARON la sentencia de vista de fecha veintiséis de
noviembre del dos mil nueve, obrante a fojas ciento ochenta y
ocho; y, DISPUSIERON la publicación de la presente resolución en
el Diario Oficial El Peruano conforme a ley; en los seguidos por
Intradevco Industrial Sociedad Anónima contra el Instituto Nacional
de Defensa de la Competencia y de la Protección de la Propiedad
Intelectual- INDECOPI y otro, sobre proceso contencioso
administrativo; y los devolvieron. Juez Supremo Ponente: Vinatea
Medina. S.S. WALDE JAUREGUI, ACEVEDO MENA, VINATEA
MEDINA, RUEDA FERNANDEZ, MALCA GUAYLUPO
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La Constitución de 1993 – Análisis Comparado, ICS Editores, III Edición, noviembre
1997.
Organización Mundial de la Propiedad Intelectual. Creada en 1970, es una
organización internacional cuyo objetivo es velar por la protección de los derechos
de los creadores y los titulares de propiedad intelectual a nivel mundial y, por
consiguiente, contribuir a que se reconozca y se recompense el ingenio de los
inventores, autores y artistas. Como parte de las Naciones Unidas, la OMPI
constituye un foro para que sus Estados miembros elaboren y armonicen normas y
prácticas destinadas a proteger los derechos de propiedad intelectual.
ORÉ SOSA, Eduardo Arsenio. “La infracción del derecho de marca”, Palestra
Editores, Lima-2007, cita p. 35.
Acuerdo sobre los Aspectos de los Derechos de Propiedad Intelectual relacionados
con el Comercio.
Acuerdo de Cartagena, Régimen Común sobre Propiedad Industrial, 14 de
setiembre del año 2000. Artículo 134: “A efectos de este régimen constituirá marca
cualquier signo que sea apto para distinguir productos o servicios en el mercado.
Podrán registrarse como marcas los signos susceptibles de representación gráfica.
La naturaleza del producto o servicio al cual se ha de aplicar una marca en ningún
caso será obstáculo para su registro. Podrán constituir marcas, entre otros, los
siguientes signos: a) las palabras o combinación de palabras; b) las imágenes,
figuras, símbolos, gráficos, logotipos, monogramas, retratos, etiquetas, emblemas
y escudos; c) los sonidos y los olores; d) las letras y los números; e) un color
delimitado por una forma, o una combinación de colores, f) la forma de los
productos, sus envases o envolturas; g) cualquier combinación de los signos o
medios indicados en los apartados anteriores”.
METKE MÉNDEZ, Ricardo. Lecciones de Propiedad Industrial III, Raisbeck, Lara,
Rodríguez y Rueda (Baker & Mckenzie), Primera Edición, Bogotá, junio de 2006, p.
28.
Ley de Propiedad Industrial – Decreto Legislativo 823 publicado el 24 de abril de
1996, aplicable a este caso concreto por razón de temporalidad, fue derogado por
la Primera Disposición Complementaria Derogatoria del Decreto Legislativo 1075
que aprueba las Disposiciones Complementarias de la Decisión 486, publicado el
28 de junio de 2008.
ORÉ SOSA, Eduardo Arsenio. Op. Cit. p. 43.
CORNEJO GUERRERO, Carlos A. Derecho de Marcas, Cultural Cusco, Lima –
Perú 2007, p. 69.
METKE MÉNDEZ, Ricardo. Op. Cit. pp. 29 - 30.
Decreto Legislativo 823 – Ley de Propiedad Industrial. Artículo 130.- Asimismo, no
podrán registrarse como marcas aquellos signos que, en relación con derechos de
terceros, presenten alguno de los siguientes impedimentos: a) Sean idénticos o se
asemejen de forma que pueda inducir al público a error, a una marca anteriormente
solicitada para registro o registrada por un tercero, para los mismos productos o
servicios, o para productos o servicios respecto de los cuales el uso de la marca
pueda inducir a error.
ORÉ SOSA, Eduardo Arsenio. Op. Cit. p. 58.
Decreto Legislativo 823 – Ley de Propiedad Industrial. Artículo 131.- A efectos de
establecer si dos signos son semejantes y capaces de inducir a confusión y error al
consumidor, la Oficina competente tendrá en cuenta, principalmente los siguientes
criterios: a) La apreciación sucesiva de los signos considerando su aspecto de
conjunto, y con mayor énfasis en las semejanzas que en las diferencias; b) El
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CASACIÓN
grado de percepción del consumidor medio; c) La naturaleza de los productos
o servicios y su forma de comercialización o prestación, respectivamente; d) El
carácter arbitrario o de fantasía del signo, su uso, publicidad y reputación en el
mercado; y, e) Si el signo es parte de una familia de marcas.
Proceso 70-IP-2008. Interpretación Prejudicial de 02.07.2008, Gaceta Oficial del
Acuerdo de Cartagena N° 1648. Marca: SHERATON
Proceso 114-IP-2003. Interpretación Prejudicial de 19.11.2003, Gaceta Oficial del
Acuerdo de Cartagena N° 1028. Marca: EBEL INTERNACIONAL.
Proceso 67-IP-2002. Interpretación Prejudicial, Gaceta Oficial del Acuerdo de
Cartagena N° 871, 11.12.2002. Marca: GOODNITES.
C-1335410-8
CAS. Nº 1788-2011 LIMA
Lima, veintitrés de setiembre de dos mil trece. LA SALA DE
DERECHO CONSTITUCIONAL Y SOCIAL PERMANENTE DE
LA CORTE SUPREMA DE JUSTICIA DE LA REPÚBLICA:
VISTA: La causa número un mil setecientos ochenta y ocho – dos
mil once: con el acompañado; de conformidad con el Dictamen
Fiscal; en audiencia pública llevada a cabo en la fecha, integrada
con los Señores Sivina Hurtado – Presidente, Walde Jáuregui,
Acevedo Mena, Vinatea Medina y Rueda Fernández; oído el
informe oral del abogado don David Zumaita Arrasco por la parte
demandante; y. luego de verificada la votación con arreglo a ley,
se emite la siguiente sentencia: I.- MATERIA DE LOS
RECURSOS: Se trata de los recursos de casación interpuestos a
fojas setenta y tres y ochenta y siete, por el Instituto Geológico,
Minero y Metalúrgico INGEMMET y el Procurador Público del
Ministerio de Energía y Minas contra la sentencia de vista de fojas
cincuenta y seis, su fecha dieciocho de marzo de dos mil once,
que confirmando la sentencia apelada del siete de agosto de dos
mil nueve, declaró fundada la demanda. II.-FUNDAMENTOS
POR LOS CUALES SE HAN DECLARADO PROCEDENTES
LOS RECURSOS: Que, mediante resoluciones de fecha once de
enero de dos mil doce, de fojas ochenta y tres y ochenta y cinco
del cuaderno de casación formado en esta Sala Suprema se han
declarado procedentes los recursos de casación interpuestos por
el Instituto Geológico, Minero y Metalúrgico INGEMMET por la
causal de interpretación errónea del artículo 11 de la Ley
26615, Ley del Catastro Minero Nacional, argumentando el
impugnante que al declarar fundada la demanda el Colegiado de
la Sala Civil Transitoria de la Corte Suprema, ha concluido que se
puede otorgar concesiones mineras por un área reducida menor
a una cuadrícula, lo cual no tendría sentido alguno respecto de las
áreas prioritarias ni que se consigne las coordenadas y áreas del
mismo en el título de la nueva concesión, como lo establece el
dispositivo legal anotado, ya que al reducirse el nuevo petitorio, al
no incluir las áreas superpuestas no habría área que respetar;
agrega que la mencionada Sala establece una concordancia de la
mencionada norma con el artículo 12 y 114 del Texto Único
Ordenado sin tener en consideración que el supuesto mencionado
en este último dispositivo legal está referido a dos o más petitorios
formulados en el sistema de cuadrículas; precisa que aún cuando
el artículo 12 en comento sí corresponde ser concordado con el
artículo 11 de la Ley N° 26615, por estar ambos referidos a la
superposición de nuevos petitorios a otro prioritario otorgado con
el sistema anterior, la superposición no puede determinarse por el
área que comprende exactamente una cuadrícula o más; y, por el
Procurador Público del Ministerio de Energía y Minas por la
denuncia de aplicación indebida del artículo 1 del Decreto
Supremo No. 35-94-EM, así como del artículo 12 de la Ley
26615 – Ley de Catastro Minero Nacional, alegando que la
sentencia de vista, no ha tomado en cuenta el Informe
5427-2007-INACC-DGCM-UT-708, de la Unidad Técnica de la
Dirección de Concesiones Mineras, de fecha veinte de abril de
dos mil siete, mediante el cual se prueba que su representada
consignó las Coordenadas UTM, definitivas de los vértices que
definan el área a respetarse, además del nombre de la Concesión
CONDESTABLE 45, padrón y extensión en Hectáreas de las
concesiones prioritarias, por lo que no ha incurrido en causal de
nulidad al expedir la resolución impugnada. III.- CONSIDERANDO:
PRIMERO: A través del proceso contencioso administrativo, este
Supremo Tribunal controla jurídicamente las actuaciones de la
administración pública, entre ellas, los actos administrativos, el
silencio
administrativo
y
las
actuaciones
materiales
administrativas, siendo que la finalidad de dicho proceso es que
el Juez declare la nulidad de tales actos, en resguardo de los
derechos fundamentales a un debido procedimiento administrativo
y a un debido proceso, y de los principios de integración, de
igualdad procesal, de favorecimiento del proceso y de suplencia
de oficio, entre otros. SEGUNDO: Mediante el presente proceso
se pretende la invalidez de la Resolución N° 171-2008-MEN/CM
de fecha veintitrés de mayo del dos mil ocho expedida por el
Consejo de Minería del Ministerio de Energía y Minas que declaró
infundado el recurso de revisión que se interpuso contra la
Resolución de Jefatura N° 1847-2007-INACC/J, de fecha
diecisiete de mayo del dos mil siete; se ordene al Instituto
Geológico Minero y Metalúrgico (INGEMMET), que al expedir
nueva Resolución, de otorgarse el petitorio “CONDESTABLE 45
“se deberá establecer con toda claridad la reducción del área de
dicho petitorio minero y en consecuencia que el área que se
otorgue a dicho petitorio sólo comprenda las áreas libres de la
cuadrícula o conjunto de cuadrículas no pudiendo superponerse
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al derecho minero prioritario “Santa Catalina de Siena” con
padrón N° 75, el cual cuenta con coordenadas UTM definitivas.
TERCERO: Como sustento de la demanda sostiene la actora que
con fecha cuatro de diciembre del dos mil seis, Compañía Minera
Condestable Sociedad Anónima Abierta, formuló el petitorio
minero “CONDESTABLE 45”, con código N° 01-05108-06, por
sustancias metálicas, por una extensión de ochocientas
hectáreas, ubicado en los Distritos de Calango y Santa Cruz de
Flores, Provincia de Cañete, Departamento de Lima. Mediante
Resolución de fecha ocho de enero del dos mil siete, emitida por
el Director General de Concesiones Mineras del INACC, se
determinó que el petitorio minero “CONDESTABLE 45” se
superpone parcialmente al derecho minero prioritario “SANTA
CATALINA DE SIENA”, con padrón N° 75, por lo cual, con fecha
treinta de enero del dos mil siete, formuló oposición contra el
referido petitorio; por Resolución Jefatural N° 1847-2007-INACC,
de fecha diecisiete de mayo del dos mil siete, INACC declaró
FUNDADA la oposición formulada por la demandante en contra
DEL PETITORIO MINERO “CONDESTABLE 45”, resolviendo
otorgarse la concesión minera “CONDESTABLE 45”, el titular
deberá respetar el área superpuesta a la concesión de la
demandante, de manera prioritaria; mediante Resolución Jefatural
N° 1847-2007-INACC/J, de fecha diecisiete de mayo del dos mil
siete, artículo segundo, el INACC ordena que de otorgarse el
título de concesión minera al titular del petitorio minero
“CONDESTABLE 45”, se consignará la obligación del titular de la
misma de respetar el derecho minero prioritario al que se
superpone parcialmente, omitiendo resolver que de otorgarse el
título de concesión sólo se consignará por el área libre de la
cuadrícula o conjunto de cuadrículas; finalmente, mediante
Resolución N° 171-2008-MEM/CM de fecha veintitrés de mayo
del dos mil ocho, el Consejo de Minería del Ministerio de Energía
y Minas declaró INFUNDADO el recurso de Revisión que
interpusiéramos
contra
la
Resolución
Jefatural
N°
1847-2007-INACC/J, de fecha diecisiete de mayo del dos mil
siete. CUARTO: Los Jueces de mérito en sede de instancia han
declarado fundada la demanda; en consecuencia nulas y sin
efecto legal alguno la Resolución N° 171-2008-MEM/CM de fecha
veintitrés de mayo de dos mil ocho, y la Resolución Jefatural N°
1847-2007-INACC/J de fecha diecisiete de mayo del dos mil
siete, sosteniendo que conforme aparece de la Resolución
Directoral de fecha veintiuno de mayo de mil novecientos
cincuenta y cinco, obrante a fojas siete, se aprobó los títulos de la
concesión minera “Santa Catalina de Siena” a favor de la
compañía de Cementos Chilca S. A., la misma que después se
fusionó bajo la razón Social Compañía Peruana de Cemento
Portland conforme fluye a fojas 06, indicándose que la concesión
ha sido inscrita en el Registro de Concesiones y Derechos
Mineros en el asiento N° 07 de fojas 111 del Tomo 84 del Libro
de Concesiones y Derechos Mineros. Siendo ello así, y estando
a lo dispuesto por los artículos 3 y 4 de la Ley N° 26615, Ley de
catastro Minero Nacional, publicada el veinticinco de mayo de mil
novecientos noventa y seis, la actora tramitó la inscripción de su
derecho minero con fecha quince de octubre de mil novecientos
noventa y siete según fluye de la partida N° 02005098 ficha N°
030093 del Registro Público de Minería obrante a fojas nueve.
Por lo tanto, acreditándose en autos que la concesión minera
“Santa Catalina de Siena” fue peticionada con anterioridad al
quince de diciembre de mil novecientos noventa y uno, y estando
a la superposición parcial de derechos mineros de la actora, se
concluye que el nuevo petitorio minero “Condestable 45” señalado
en el Informe N° 13453-2006-INACC-DGCM-UT, de fecha
diecinueve de diciembre de mil novecientos noventa y seis, de
fojas ocho del expediente administrativo, solamente deberá
comprender las áreas libres de la cuadrícula o conjunto de
cuadrículas. Sobre el particular, la Sala de Derecho Constitucional
y Social Permanente de la Corte Suprema de Justicia de la
República se ha pronunciado al respecto conforme fluye de las
sentencias obrantes en el expediente administrativo de fojas
ciento uno a ciento treinta y tres, se ha pronunciado en forma
reiterada señalando que no solo debe respetarse el derecho
minero prioritario, sino que también debe señalarse que el
nuevo denuncio sólo comprenderá las áreas libres de la
cuadrícula, en aplicación al artículo 12 del Texto Único Ordenado
de la Ley General de Minería, vulnerando de ésta manera el
segundo párrafo del artículo 114 del Texto Único Ordenado de la
Ley General de Minería. En ese sentido, al no haberse dispuesto
la reducción del petitorio “Condestable 45”, las resoluciones
administrativas que son materia de la presente demanda resultan
contrarias al ordenamiento jurídico, por lo que incurren en causal
de nulidad previstas en el artículo 148 del TUO de la Ley General
de Minería, concordante con el artículo 10 de la Ley del
Procedimiento Administrativo General. QUINTO: Entrando al
análisis de las causales propuestas por los recurrentes, conviene
precisar previamente que conforme a los artículos 9 del Texto
Único Ordenado de la Ley General de Minería aprobado por
Decreto Supremo N° 014-92-EM, la concesión minera otorga a su
titular el derecho a la exploración y explotación de los recursos
minerales que se encuentran dentro de un sólido de profundidad
indefinida, limitado por planos verticales correspondientes a los
lados de un cuadrado, rectángulo o poligonal cerrado, cuyos
vértices están referidos a coordenadas Universal Transversal
Mercator (UTM); además acorde con lo prescrito por los artículos
El Peruano
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CASACIÓN
11, 12 y 114 del Decreto Supremo bajo referencia se estableció un
nuevo sistema en base a cuadrículas de cien hectáreas cada una
que divide el territorio donde se ubican las concesiones mineras,
de este modo puede acontecer el caso de cuadrículas que
comprendas varias concesiones mineras, o también el caso de
concesiones que solo se ubiquen en parte del área de una
cuadrícula quedando áreas libres de dicha cuadrícula, lo que no
impediría que respecto de tales áreas se solicite nuevas
concesiones, por ello, y en resguardo de las concesiones mineras
otorgadas con anterioridad al quince de diciembre de mil
novecientos noventa y uno, los nuevos petitorios solo
comprenderán las áreas libres de la cuadrícula o conjunto de
cuadrículas y en caso de advertirse peticiones que se superponen
parcialmente sobre otras se deberá reducir el pedimento
respetando el área de la concesión anterior. SEXTO: En cuanto a
la denuncia de interpretación errónea del art. 11 de la Ley del
Catastro Minero Nacional - Ley Nº 26615, conforme a dicha
norma las áreas de los derechos mineros vigentes, formulados al
amparo de legislaciones anteriores al Decreto Legislativo Nº 708,
cuyos vértices adquieran coordenadas UTM definitivas bajo el
procedimiento de la presente ley, serán respetadas
obligatoriamente por las concesiones mineras otorgadas o que se
otorguen bajo el sistema de cuadrículas del procedimiento
ordinario del Texto Único Ordenado, siendo que, en los títulos de
estas últimas, se consignarán las coordenadas UTM definitivas
de los vértices que definen el área a respetarse, además del
nombre de la concesión, padrón y extensión en hectáreas de las
concesiones prioritarias. Al respecto, nótese que en virtud de la
norma bajo referencia se reafirmó lo prescrito en los artículos 12
y 114 del Decreto Supremo N° 014-92, en cuanto a la protección
del derecho minero concedido bajo la legislación anterior al
Decreto Legislativo N° 708, por lo tanto, los nuevos petitorios sólo
comprenderán las áreas libres de la cuadrícula y no podrán
superponerse
sobre
concesiones
mineras
otorgadas
prioritariamente. SÉTIMO: En ese sentido, el Colegiado Superior
ha precisado que el artículo 11 de la Ley N° 26615 no ha derogado
tácita ni expresamente los artículos 12 y 114 del Decreto Supremo
N° 014-92, por lo tanto, su interpretación y aplicación debe darse
en concordancia con dichas normas, entendiéndose que la
reducción del nuevo pedimento es precisamente la consecuencia
del respeto al que todo peticionario debe someterse cuando
existan derechos mineros prioritarios; entonces en el nuevo
sistema de cuadrícula la concesión nueva que se superpone a
otra otorgada prioritariamente debe ser otorgada respetando el
derecho minero anterior; por lo que, no solo debe respetarse el
derecho minero prioritario, como se precisa en la Resolución
Jefatural N° 1847-2007-INACC y en la Resolución N° 171-2008NEEM/CM materia de impugnación, sino que conforme lo ha
señalado la Sala Suprema de mérito debe señalarse que la nueva
concesión sólo comprenderá las áreas libres de la cuadrícula o
conjunto de cuadrículas, en aplicación del artículo 12 del Decreto
Supremo N° 014-92-EM, lo que efectivamente no fue precisado
por la Administración; en consecuencia, este Supremo Tribunal
ha verificado que la interpretación efectuada por la Sala Civil
Transitoria de la Corte Suprema respecto del artículo 11 de la Ley
N° 26615 es la correcta, deviniendo en infundado este extremo
del recurso de casación. OCTAVO: Respecto a la causal de
aplicación indebida del artículo 12 de la ley N° 26615, cabe
señalar que dicha norma no incide en la resolución de este
proceso contencioso por cuanto regula los supuestos de extinción
de las concesiones mineras otorgadas bajo el sistema anterior al
normado por el Decreto Legislativo N° 708 que cuentan con
coordenadas UTM definitivas, concesiones a cuya extinción,
según dispone la norma serán declaradas y publicadas como de
libre denunciabilidad y objeto de nuevo petitorio en su integridad;
por lo tanto, este extremo del recurso resulta infundado. Y sobre
la causal de aplicación indebida del artículo 1 del Decreto
Supremo N° 35-94-EM dicha norma fue publicada el dieciséis de
agosto de mil novecientos noventa y cuatro, y reguló un
procedimiento para la mejor protección de los derechos mineros
prioritarios, pues según el nuevo sistema de cuadrículas los
titulares de las concesiones mineras otorgadas con anterioridad
al quince de diciembre de mil novecientos noventa y uno debían
consignar las coordenadas UTM en las declaraciones juradas, sin
embargo debido a la deficiencia en la precisión de tales
coordenadas y en tanto no se definía la incorporación de las
coordenadas UTM a los títulos de las concesiones mineras se
estableció aquel procedimiento; norma que tampoco incidiría en
la resolución del presente proceso por cuanto no se cuestiona el
procedimiento previsto y/o la tramitación que la Administración
haya efectuado en virtud de la indicada norma; por lo que, este
extremo del recurso deviene en infundado. En consecuencia, al
haber la Sala de mérito declarado nulas las resoluciones
administrativas por considerar que no sólo debe respetarse el
derecho minero prioritario, como se precisa en la Resolución
Jefatural N° 1847-2007-IONACC y en la Resolución N°
171-2008-MEN-CM, sino que también debe señalarse que la
nueva concesión sólo comprenderá las áreas libres de la
cuadrícula o conjunto de cuadrículas, en aplicación del artículo 12
del Decreto Supremo N° 014-92 lo que no fue precisado por la
Administración en sede administrativa, no se ha incurrido en
infracción normativa alguna por interpretación errónea o
aplicación indebida de las normas invocadas en el recurso de su
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propósito, por lo tanto, deviene en infundado el recurso de
casación. IV.- DECISIÓ. Por tales consideraciones, declararon:
INFUNDADO los recursos de casación interpuestos a fojas
setenta y tres y ochenta y siete por el Instituto Geológico, Minero
y Metalúrgico INGEMMET y el Procurador Público del Ministerio
de Energía y Minas; en consecuencia, NO CASARON la sentencia
de vista obrante a fojas cincuenta y seis, su fecha dieciocho de
marzo de dos mil once; y DISPUSIERON publicar la presente
resolución en el Diario Oficial “El Peruano” conforme a ley; en los
seguidos por Cementos Lima Sociedad Anónima contra el
Instituto Geológico, Minero y Metalúrgico INGEMMET y otros,
sobre Impugnación de Resolución Administrativa; y los
devolvieron. Vocal Ponente: Vinatea Medina. S.S. SIVINA
HURTADO, WALDE JAUREGUI, ACEVEDO MENA, VINATEA
MEDINA, RUEDA FERNANDEZ C-1335410-9
CAS. Nº 2285-2012 TACNA
Lima, tres de abril de dos mil catorce. LA SALA DE DERECHO
CONSTITUCIONAL Y SOCIAL PERMANENTE DE LA CORTE
SUPREMA DE JUSTICIA DE LA REPÚBLICA: VISTA la causa;
en Audiencia Pública llevada a cabo en la fecha, integrada por
los Jueces Supremos Sivina Hurtado – Presidente, Walde
Jáuregui, Acevedo Mena, Vinatea Medina y Rueda Fernández;
producida la votación con arreglo a ley, se ha emitido la siguiente
sentencia: I.- MATERIA DEL RECURSO DE CASACION: Se
trata del recurso de casación interpuesto por el Procurador
Público Ad Hoc del Gobierno Regional de Tacna, obrante de
fojas trescientos treinta y cinco, contra la sentencia de vista de
fecha veintiuno de octubre de dos mil once, obrante a fojas
trescientos veintiséis, que resuelve confirmar la sentencia
apelada que declaró infundada la demanda; en los seguidos por
el Gobierno Regional de Tacna contra don Eleuterio Mita
Choque, sobre Desalojo. II.- FUNDAMENTOS POR LOS
CUALES SE HA DECLARADO PROCEDENTE EL RECURSO:
Esta Sala Suprema mediante Resolución de fecha veintinueve
de octubre del dos mil doce, de fojas setenta y cinco del
cuadernillo de casación, declaró procedente el recurso de su
propósito, en aplicación del artículo 392 –A del Código Procesal
Civil por la infracción normativa procesal del artículo 139
inciso 3 de la Constitución Política del Estado, por la
probable afectación del derecho fundamental a un debido
proceso. III.- CONSIDERANDO: Primero: En primer término,
corresponde examinar la causal de infracción normativa
declarada procedente, desde el marco jurídico de las garantías
de los derechos fundamentales a un debido proceso y tutela
jurisdiccional efectiva, a fin de que en sede casatoria se ejercite
adecuadamente la finalidad esencial del recurso de casación, y
se resguarde la tutela de los derechos procesales con valor
constitucional, con la clara observancia de las normas
sustantivas y procesales que garantiza al justiciable el derecho
de obtener de los órganos jurisdiccionales una respuesta
razonada y fundamentada, respetando los principios de jerarquía
de las normas, el de congruencia procesal, la valoración de los
medios probatorios; constituyendo un deber del Juez emitir
fallos de acuerdo a lo establecido en el inciso 5 del artículo 139
de la Constitución Política del Estado, en el inciso 4 del artículo
122, así como el artículo 50 inciso 6 del Código Procesal Civil,
en resguardo de los derechos fundamentales citados en todas
sus acepciones. Segundo: En cuanto al derecho fundamental a
un debido proceso, no sólo es un principio de quienes ejercen la
función jurisdiccional y que está contemplado como tal en el
inciso 3 del artículo 139 de la Constitución Política del Estado,
sino que también es concebido como aquel derecho fundamental
que posee toda persona peruana o extranjera, natural o jurídicay que, en tal medida, es exigible por éstas (dimensión subjetiva);
a su vez, es un derecho que debe ser respetado por todos,
debido a que lleva implícito los fines sociales y colectivos de
justicia (dimensión objetiva)1. En ese sentido, existe
contravención de las normas que garantizan el derecho a un
debido proceso cuando, en el desarrollo del mismo, el órgano
jurisdiccional no ha respetado los derechos procesales de las
partes; se han obviado o alterado actos de procedimiento; la
tutela jurisdiccional no ha sido efectiva y/o el órgano jurisdiccional
deja de motivar sus resoluciones, en clara transgresión de la
normatividad vigente y de los principios procesales. Tercero:
Ahora bien, conforme a la jurisprudencia sentada por esta Sala
de Derecho Constitucional y Social Permanente2: “El derecho a
la tutela jurisdiccional efectiva se encuentra reconocido en el
artículo 139, inciso 3, de la Carta Magna, y en el artículo I del
Título Preliminar del Código Procesal Civil, el cual encuentra
dentro de su contenido constitucional protegido que, cuando una
persona requiera la protección de su derecho o de sus intereses
legítimos, aquello sea atendido por los órganos jurisdiccionales
mediante un proceso adecuado donde se respeten las garantías
mínimas de los litigantes, esto es, de ambas partes en el
proceso. Ello es así, toda vez que no sólo se busca la
defensa de los intereses de la parte accionante sino también
los del sujeto requerido, estando sus derechos también
abarcados en la tutela jurisdiccional efectiva. Tal derecho se
trata, por tanto, de un derecho continente, esto es que abarca
una serie de otros derechos expresamente señalados o
implícitamente deducidos de aquel. En la doctrina, se ha
señalado que este derecho abarca principalmente tres etapas:
74034
CASACIÓN
El acceso a los órganos jurisdiccionales, el cumplimiento de las
normas y derechos que regula el debido proceso, y el de la
ejecución de la resolución obtenida. En ese sentido, estableció
la Sala Suprema que uno de los derechos que abarca la tutela
jurisdiccional efectiva es el derecho al acceso a la justicia, el
cual se encuentra implícitamente contenido en aquel, y
comprende el derecho de la persona de promover la acción
jurisdiccional de los órganos estatales correspondientes, a
través de los mecanismos que la Ley le franquea para solicitar
que se resuelva una situación jurídica ó conflicto de derechos en
un proceso judicial conforme a derecho. Asimismo, se precisó
que este derecho se concretiza a través del ejercicio de otro
derecho también de relevancia constitucional como parte
integrante del derecho a la tutela procesal efectiva, refiriéndose
al derecho de acción definido como “(…) el poder jurídico que
tiene todo sujeto de derecho, de acudir a los órganos
jurisdiccionales para reclamarles la satisfacción de una
pretensión”3. Cuarto: Sobre la motivación de las sentencias, el
Tribunal Constitucional4 ha establecido: “debe tenerse presente
que en todo Estado constitucional y democrático de derecho, la
motivación debida de las decisiones de las entidades públicas
-sean o no de carácter jurisdiccional- es un derecho fundamental
que forma parte del contenido esencial del derecho a la tutela
procesal efectiva. El derecho a la motivación debida constituye
una garantía fundamental en los supuestos en que con la
decisión emitida se afecta de manera negativa la esfera o
situación jurídica de las personas. Así, toda decisión que
carezca de una motivación adecuada, suficiente y congruente
constituirá una decisión arbitraria y, en consecuencia, será
inconstitucional”. Quinto: A través del presente proceso, el
demandante Gobierno Regional de Tacna pretende que don
Eleuterio Mita Choque desocupe y entregue los terrenos eriazos
de propiedad del Proyecto Especial Afianzamiento y Ampliación
de los Recursos Hídricos de Tacna, terreno ubicado en el
Asentamiento Cuatro, La Yarada, Parcela veintiuno, Pozo docecatorce- ocho, Comité Tres (Zona A), por cuanto el demandado
es un ocupante precario, entendida la ocupación precaria como
una manifestación de la posesión sin derecho o de mala fe.
Sexto: Sostiene el demandante como fundamentos de su
pretensión, que el Proyecto Especial Afianzamiento y Ampliación
de los Recursos Hídricos de Tacna, es un organismo encargado
de dar soluciones a la aguda problemática hidroenergética por la
que atraviesa la región Tacna, tendiente a satisfacer la demanda
de agua; y en virtud del Decreto Supremo N°005-2005-PCM ha
sido transferido al Gobierno Regional de Tacna. Precisa que la
Dirección Regional de Agricultura amparada en la Resolución
Suprema N°0211-AG-DGRA-AR adjudicó tierras a diversas
Asociaciones de Agricultores; las adjudicaciones mencionadas
resultan ilegales, considerando la Ley N° 26505 y su Reglamento
aprobado por Decreto Supremo N° 011-97-AG de fecha trece de
junio de mil novecientos noventa y siete, donde se precisa los
alcances del Decreto Legislativo N° 556 y la Ley N° 25303. El
veintisiete de noviembre del dos mil se cursó al demandado
carta notarial, a efecto de que se abstenga de continuar
ejerciendo actos posesorios o cualquier trabajo de
infraestructura, sembrío de plantaciones en terrenos que son de
exclusiva propiedad del Proyecto Especial de Tacna. Sétimo: El
Juez de primera instancia ha declarado infundada la demanda,
precisando el Juez de la causa que para la calificación de la
posesión precaria –conforme al artículo 911 del Código Civil– se
tiene que el poseedor precario es el que ocupa un bien sin título,
ya sea porque nunca lo tuvo o porque el que tenía ha fenecido,
aún más se considera precario al darse ausencia absoluta de
cualquier circunstancia que justifique el uso, que para el caso de
autos mediante las inspecciones adjuntadas al presente proceso
se corrobora la posesión del demandado, toda vez que, ha
convertido tierras eriazas en terrenos de cultivo, y siendo su
derecho procedió a solicitar la titulación, como se aprecia de los
documentos de fojas ciento cuarenta y dos y siguientes; además
conforme al precitado informe emitido por el Organismo de
Formalización de la Propiedad Informal -COFOPRI y anexos de
fojas doscientos veinticuatro a doscientos veintisiete, éste
cuenta con un título por lo que no encajaría en la figura de
ocupante precario, deviniendo en infundada la demanda.
Octavo: En segunda instancia, la Sala de mérito ha confirmado
la sentencia apelada que declaró infundada la demanda,
señalando el Colegiado Superior que si bien es cierto se
desprende de fojas diecisiete a veinte que el demandante ha
acompañado a su demanda copias certificadas de las fichas
registrales números 17034, 7364 y 18719 que datan del
veintidós de agosto del dos mil dos y siete de marzo del dos mil
seis respectivamente, las cuales acreditarían que figura el actor
como propietario de tierras eriazas, dentro de las cuales se
encontrarían las que son materia de desalojo; sin embargo, a
fojas
doscientos
veintiocho
obra
el
Oficio
N°
1792-2010-COFOPRI/OZTAC de fecha once de octubre del dos
mil diez, remitido en mérito de la consulta que formulara el A
quo, donde el Organismo de Formalización de la Propiedad
Informal- COFOPRI, dando respuesta a la consulta respecto al
trámite de titulación de los terrenos precisa: “se informa que de
la verificación efectuada en el Sistema SSET, los señores
Eleuterio Mita Choque y Maximiliana Navarro de Mita,
cuentan con propiedad rural inscrita en la ficha N° 2868,
El Peruano
Lunes 1 de febrero de 2016
habiendo sido adjudicado por la Reforma Agraria a título
gratuito”; en consecuencia, precisa el Colegiado que ello
concuerda con las fichas del predio rural que corren a fojas
doscientos veinticuatro a doscientos veintisiete, con las que se
acredita que el demandado es “adjudicatario de la reforma
agraria a título gratuito”. Noveno: Mediante resolución
suprema de fecha veintinueve de octubre de dos mil doce,
obrante a fojas setenta y cinco del cuaderno de casación, este
Supremo Tribunal ha declarado procedente el recurso de su
propósito, en aplicación del artículo 392 –A del Código Procesal
Civil por la infracción normativa procesal del artículo 139
inciso 3 de la Constitución Política del Estado, por la
probable afectación del derecho fundamental a un debido
proceso. Este Supremo Tribunal verifica en sede casatoria, que
si bien es cierto de los medios de prueba que obran en autos,
específicamente de la ficha registral N° 17034 se aprecia que el
predio sub materia a mérito del Decreto Legislativo N° 556 y la
Ley N° 25303, Leyes de Presupuesto del Sector Público para mil
novecientos noventa y mil novecientos noventa y uno, aparece
inscrito a favor del Proyecto Especial de Tacna, según solicitud
de fecha doce de agosto de mil novecientos noventa y dos, lo
cual es reforzado con la fichas registrales números 7364 y
18719, de fojas diecisiete a veinte que datan del veintidós de
agosto de dos mil dos y siete de marzo del dos mil seis
respectivamente, las cuales acreditarían que figura el actor
como propietario de tierras eriazas; sin embargo, a fojas
doscientos veintiocho obra el Oficio N°1792-2010-COFOPRI/
OZTAC de fecha once de octubre de dos mil diez, remitido en
mérito de la consulta que formulara el A quo, donde el Organismo
de Formalización de la Propiedad Informal -COFOPRI, dando
respuesta a la consulta respecto al trámite de titulación de los
terrenos precisa: “se informa que de la verificación efectuada
en el Sistema SSET, los señores Eleuterio Mita Choque y
Maximiliana Navarro de Mita, cuentan con propiedad rural
inscrita en la ficha N° 2868, habiendo sido adjudicado por la
Reforma Agraria a título gratuito”; en consecuencia, esta Sala
Suprema corrobora, tal como se ha precisado por el Colegiado
de mérito que ello concuerda con las fichas del predio rural que
corren a fojas doscientos veinticuatro a doscientos veintisiete,
con las que se acredita que el demandado es adjudicatario de la
reforma agraria. Décimo: En el presente caso ha quedado
comprobado en autos que el demandado posee el bien, en base
a un título legítimo que se encuentra inscrito, lo que permite a
este Colegiado Supremo corroborar que la ocupación del
demandado no es una precaria, por el contrario nos encontramos
ante una posesión de hecho con título legítimo. Respecto a la
posesión precaria en el Código Civil, el artículo 911 establece
que “La posesión precaria es la que se ejerce sin título alguno o
cuando el que se tenía ha fenecido”; la posesión precaria es
aquella posesión de hecho que se ejerce sin título alguno o
cuando el que se tenía ha fenecido, caracterizándose por tanto
por la ausencia de un título que justifique el uso o disfrute del
bien. En ese sentido, y para mayor comprensión de la figura de
posesión precaria, tenga la comunidad jurídica presente que nos
encontramos frente a una posesión netamente ilegítima de mala
fe, que pudo haber sido en un comienzo una posesión ilegítima
de buena fe (el poseedor tuvo un título nulo), pero ante el
requerimiento de restitución de la posesión, el poseedor se negó
a hacerlo. Undécimo: En ese orden de exposición, la posesión
precaria se distingue frente a las otras por su ilegitimidad, por ir
en contra del orden público, los principios y las buenas
costumbres en perjuicio del titular del derecho y la sociedad
misma; por cuanto se está frente a una posesión sin título; o se
tiene un título nulo o insuficiente, o ha sido adquirido del que no
tenía derecho a poseer o transmitir el bien, lo cual no se
advierte de autos; en consecuencia, esta Sala Suprema
corrobora tal como se ha precisado por el Colegiado de
mérito, que la parte demandada es poseedora del bien sub
materia con título legítimo, conforme a las fichas del predio
rural que corren de fojas doscientos veinticuatro a
doscientos veintisiete, con las que se acredita que el
demandado es adjudicatario de la reforma agraria a título
gratuito, por lo tanto, lo resuelto por los Jueces de mérito en
sede de instancia se ajusta a ley y ha sido debidamente
motivado, apreciándose que se ha declarado infundada la
demanda conforme a la situación fáctica establecida y a una
valoración conjunta y razonada de los medios de prueba.
Duodécimo: En efecto, la motivación de las resoluciones
jurisdiccionales constituye un principio, y a la vez se erige como
un derecho procesal – constitucional que emana de la función
jurisdiccional, por lo tanto, la motivación de las sentencias
jurisdiccionales debe ser el resultado de un razonamiento lógico
y jurídico sobre la base de los hechos determinados en sede de
instancia, los medios de prueba aportados por las partes y la
aplicación del derecho objetivo, lo que se reitera ha sido
resguardado por la Sala Superior; en consecuencia, deviene en
infundado el recurso de casación. IV.- DECISION: Por tales
consideraciones Declararon: INFUNDADO el recurso de
casación interpuesto por el Procurador Público Ad Hoc del
Gobierno Regional de Tacna, obrante de fojas trescientos treinta
y cinco; en consecuencia NO CASARON la sentencia de vista
de fecha veintiuno de octubre de dos mil once, obrante a fojas
trescientos veintiséis; DISPUSIERON la publicación de la
El Peruano
Lunes 1 de febrero de 2016
CASACIÓN
presente resolución en el Diario Oficial “El Peruano” conforme a
ley; en los seguidos por el Gobierno Regional de Tacna contra
don Eleuterio Mita Choque, sobre Desalojo; y los devolvieron;
Juez Supremo Ponente Vinatea Medina. SS. SIVINA HURTADO,
WALDE JAUREGUI, ACEVEDO MENA, VINATEA MEDINA,
RUEDA FERNANDEZ
1
2
3
4
Comisión Andina de Juristas. Luis Huerta con la colaboración de Enrique Aguilar,
“El debido proceso en las decisiones de la Corte Interamericana de Derechos
Humanos (análisis del artículo 8 de la Convención Americana sobre Derechos
Humanos), en www.cajpe.org.pe.
CASACIÓN N° 405-2010, LIMA-NORTE, considerando octavo, de fecha quince
de marzo de dos mil once. En esta oportunidad la Sala de Derecho Constitucional
y Social Permanente declaró infundado el recurso de casación interpuesto por
la Asociación de Propietarios de la Urbanización Sol de Lima; en los seguidos
contra la Municipalidad Distrital de San Martín de Porres y otro; sobre proceso
contencioso administrativo. (negrita y subrayado nuestro).
Couture Eduardo J (1985) Fundamentos del Derecho Procesal Civil. Buenos Aires,
Depalma, p57.
STC. N° 01807-2011-PA/TC, del veintisiete de junio de dos mil once, fundamento
10.
C-1335410-10
CAS. Nº 2287-2010 CUSCO
Lima, veintisiete de abril de dos mil once. VISTOS; y
CONSIDERANDO: Primero.- Es materia de pronunciamiento el
Recurso de Casación interpuesto por el Procurador Público Ad
Hoc encargado de la defensa de los derechos e intereses
asuntos judiciales del Instituto Nacional de Cultura, mediante
escrito de fojas cuatrocientos cincuenta y tres, su fecha ocho de
junio de dos mil nueve, interpuesto contra la resolución de fecha
veinte de mayo de dos mil nueve, corriente a fojas cuatrocientos
ocho, expedida por la Primera Sala Civil de la Corte Superior de
Justicia de Cusco, en cuanto Confirma la resolución número
quince, su fecha veinte de enero de dos mil nueve, obrante a fojas
trescientos treinta y uno, que contiene la sentencia que declara
Fundada en parte la demanda interpuesta, con las pretensiones de
indemnización de daños y perjuicios, cobro de compensación por
tiempo de servicios e intereses; e Infundada respecto a la
pretensión de cobertura de pensión de sobrevivencia por muerte
por trabajo de riesgo; la Revocaron en el extremo que ordena que
el Instituto Nacional de Cultura pague por concepto de daños y
perjuicios la suma de veinte mil Nuevos Soles (S/. 20,000.00) a
favor del demandante; Reformándola en ese extremo, Dispusieron
que la demandada pague a favor de la demandante por
Indemnización de daños y perjuicios la suma de cincuenta mil
Nuevos Soles (S/. 50,000.00); Asimismo, Revocaron la misma
sentencia en el extremo que declara Infundada la pretensión de
reembolso de gastos por atención médica y sepelio y Fundada la
pretensión de indemnización por accidente de trabajo, enfermedad
profesional y fallecimiento; y Reformándola declararon Fundada la
primera de ellas; e Infundada la segunda, en consecuencia
dispusieron que la demandada cumpla con pagar a la actora por
las pretensiones la suma total de cincuenta y cuatro mil cincuenta
y tres Nuevos Soles con treinta y ocho céntimos (S/. 54,053.38),
más intereses legales a ser liquidados en la etapa de ejecución,
con lo demás que contiene, en los seguidos por doña Juana
Chauca Carazas contra la entidad recurrente y otro. Recurso que
satisface los requisitos de forma. Segundo.- Que, en cuanto a los
requisitos de fondo, el recurrente denuncia: a) que no se han
aplicado correctamente los alcances de los artículos 1321 y
1969 del Código Civil. Indica que se ha acreditado que el causante
se encontraba prestando servicios no personales a su representada,
sin embargo, está acreditado que dicha relación contractual era
eventual y que al producirse dichos hechos entre su parte y el
causante, no habían pasado más de dieciséis días de iniciada su
relación contractual. Se debe considerar que la causa de su muerte
no se debió a un accidente de trabajo, mucho menos a una
negligencia de su parte, por lo que los artículos referidos no han
sido correctamente aplicados, por cuanto para la aplicación de
aquellos se requiere como condición la existencia de dolo, culpa
inexcusable o culpa leve, y a la luz de todos los actuados no esta
demostrada la existencia de dolo, culpa inexcusable o culpa leve,
no siendo posible la existencia de dolo, culpa, ni daño sobre un
hecho que es producto de una enfermedad, o conjunto de las
mismas las que ocasionaron su muerte. Afirma además que no se
ha valorado que el causante trabajó para el Instituto Nacional de
Cultura desde el primero de agosto del dos mil siete hasta el
dieciséis de agosto del mismo año, por lo que dicho trabajador solo
estuvo en la obra dieciséis días, no existiendo contratos firmados;
b) Respecto de los alcances de la Ley número 26790, y su
Reglamento, el Decreto Supremo 09-97-SA concretamente su
capítulo 8. Indica que su parte pagaba puntualmente las
obligaciones que como empleador asumió frente al trabajador,
siendo una de ellas el pago de Seguro Complementario de Trabajo
de Riesgo, que en el caso de un obrero de categoría c es la suma
de diez soles con sesenta céntimos conforme se evidencia con la
liquidación presentada y actuada oportunamente, no apreciando
las instancias de mérito el cumplimiento de esa obligación. Afirma
que la sentencia no ha aplicado la norma materia de denuncia, es
más, en su considerando 2.5 b) la sentencia apelada se fundamenta
en la aplicación del Decreto Supremo número 09-2007-SA, que no
74035
es aplicable al presente proceso pues aquella regula la creación
del Sistema Nacional de Sangre Segura, por lo que dicha resolución
también es írrita pues aplica una norma ajena a la naturaleza del
proceso. Tercero.- Antes del análisis de los requisitos de fondo es
necesario precisar que el recurso de casación es un medio
impugnatorio extraordinario de carácter formal que solo puede
fundarse en cuestiones eminentemente jurídicas y no en cuestiones
fácticas o de revaloración probatoria, es por ello que tiene como
fines esenciales -a decir del artículo 54 de la Ley Procesal del
Trabajo, Ley número 26636, modificado por la Ley número 27021la correcta aplicación e interpretación de las normas materiales del
Derecho Laboral, Previsional y de Seguridad Social y, la unificación
de la jurisprudencia laboral nacional por la Corte Suprema de
Justicia de la República; en ese sentido, su fundamentación por
parte del recurrente debe ser clara, precisa y concreta indicando
ordenadamente cuales son las causales denunciadas, las mismas
que no pueden estar orientadas a una revaloración de los
elementos fácticos ni de los medios probatorios dado que aquello
desnaturalizaría el presente recurso. Cuarto.- Que, así
fundamentado el recurso, resulta a todas luces improcedente en
todos sus extremos (contenidos en los literales a) y b) del segundo
considerando de la presente resolución) por carecer de claridad y
precisión en el modo de proponerlo, primero porque no se
encuentra enmarcado su recurso en atención a las causales
establecidas en el artículo 56 de la Ley número 26636, Ley
Procesal del Trabajo, así como tampoco cumple con los requisitos
de fondo indicados en el artículo 58 de ese mismo cuerpo
normativo, norma de aplicación al caso de autos, al tratarse de un
proceso laboral, por lo que la invocación del recurrente de los
artículos 384, 385 y 386 del Código Procesal Civil, los mismos que
fueron modificados por la Ley número 29364, carece de asidero.
Quinto.- A mayor abundamiento, en el caso de la denuncia
contenida en el literal a) del referido segundo considerando, el
impugnante se encuentra alegando un conjunto de normas en la
misma causal sin realizar una distinción de como se estaría
produciendo la vulneración de cada una de ellas en la resolución
impugnada, y sin considerar que cada una regula supuestos
distintos, las cuales merecen un desarrollo independiente a fin de
otorgar claridad y precisión a su recurso, de lo que carece. Sexto.Asimismo, en cuanto a la denuncia formulada en el literal b) del
mencionado segundo considerando, en ella se encuentra
denunciando todo un cuerpo normativo así como su reglamento,
sin indicar de manera clara y precisa qué dispositivo de todo ese
acervo normativo se encuentra impugnando, incurriendo su recurso
en ambigüedad, razones por las cuales también debe desestimarse.
Sétimo.- Por tales consideraciones en aplicación del artículo 58 de
la Ley número 26636: Declararon IMPROCEDENTE el recurso de
casación interpuesto por el Procurador Público Ad Hoc
encargado de la defensa de los derechos e intereses asuntos
judiciales del Instituto Nacional de Cultura, mediante escrito de
fojas cuatrocientos cincuenta y tres contra la resolución de fecha
veinte de mayo de dos mil nueve, corriente a fojas cuatrocientos
tres, expedida por la Primera Sala Civil de la Corte Superior de
Justicia del Cusco; en los seguidos por doña Juana Chauca
Carazas contra el recurrente y otro, sobre Pago de Indemnización
por Accidente de Trabajo y otros; MANDARON publicar la presente
resolución en el diario oficial “El Peruano”; y los devolvieron.- Juez
Supremo Ponente: Távara Córdova. S.S. VÁSQUEZ CORTEZ,
TÁVARA CÓRDOVA, ACEVEDO MENA, YRIVARREN FALLAQUE,
TORRES VEGA C-1335410-11
CAS. Nº 2424- 2011 ICA
Lima, veintitrés de setiembre de dos mil trece. LA SALA DE
DERECHO CONSTITUCIONAL Y SOCIAL PERMANENTE DE LA
CORTE SUPREMA DE JUSTICIA DE LA REPÚBLICA: VISTA, la
causa número dos mil cuatrocientos veinticuatro – dos mil once; en
audiencia pública llevada a cabo en la fecha, integrada con los
Señores Jueces Supremos Sivina Hurtado - Presidente, Walde
Jáuregui, Acevedo Mena, Vinatea Medina y Rueda Fernández; y
luego de verificada la votación con arreglo a ley, se emite la
siguiente sentencia: 1.- MATERIA DEL RECURSO: Se trata del
recurso de casación obrante a fojas doscientos cincuenta y tres
interpuesto por doña Justina Elías Ponce contra la sentencia de
vista de fojas doscientos treinta y cinco, su fecha cuatro de octubre
de dos mil diez, que confirmando la sentencia apelada en el
extremo que declara infundada la demanda respecto del acto
jurídico de la compra venta de acciones y derechos del inmueble
rústico del lote treinta y nueve, lateral seis, sub lote A, situado en la
irrigación Pampa de Ñoco, del distrito de Pueblo Nuevo, así como
el pago de indemnización de daños y perjuicios de fecha ocho de
noviembre de dos mil cuatro, revocando el extremo relativo a la del
acto jurídico consistente en la compra venta del predio urbano
ubicado en el Asentamiento Humano - AAHH San Isidro, manzana
cinco, lote cuatro (Jirón Los Incas), así como el pago de costas y
costos; y, reformándola declara la nulidad del citado acto jurídico de
compra venta por simulación absoluta, debiendo inscribirse esa
resolución al margen de la escritura simulada e igualmente en el
registro de Propiedad. 2.- FUNDAMENTOS POR LOS CUALES
SE HA DECLARADO PROCEDENTE EL RECURSO: Mediante
resolución de fecha veintiséis de marzo de dos mil doce, corriente
a fojas ciento nueve del cuaderno de casación se ha declarado
procedente el recurso de casación por la denuncia de infracción
normativa por aplicación indebida del artículo 219 inciso 5 del
74036
CASACIÓN
Código Civil, alega que lo correcto para resolver el presente caso
era el articulo 221 inciso 3 del Código Civil, ya que del petitorio de
la demanda y de los hechos que la fundamentan se establece
claramente que la actora interpone anulabilidad de acto jurídico por
la causal de simulación relativa de la escritura cuestionada,
mientras que el Ad quem reconoce que la actora ampara su
pretensión en los artículos 193 y 221 del Código Civil, las que
refieren al acto jurídico anulable por simulación relativa. Esta
aplicación indebida de una norma jurídica le causa agravio y
perjuicio, porque la Sala Superior apartándose de lo expresamente
establecido por ley emite una sentencia contraria a derecho. Por
ello solicita al superior de grado revoque la sentencia de vista
recurrida. 3.- CONSIDERANDO: PRIMERO: Mediante el presente
proceso la demandante pretende la anulabilidad de la escritura
pública, la cancelación de la inscripción del derecho de propiedad
de los codemandados por simulación, respecto de la compraventa
celebrada por doña Justina Elías Ponce y don Máximo Hernández
Vera y esposa doña Olga Aparcana, de fecha ocho de noviembre
de dos mil cuatro, con relación al predio rústico inscrito en la Ficha
Nº 000594-010407; y, la nulidad de la compraventa celebrada entre
la misma doña Justina Elías Ponce y don Falconier Talla Chávez,
de fecha dieciocho de noviembre de dos mil cuatro, respecto del
inmueble urbano inscrito en la Ficha Nº P07038720; accesoriamente
solicita el pago de una indemnización por daños y perjuicios
ascendente a la suma de cinco mil soles (S/. 5,000.00) que
solidariamente deben pagar los demandados. SEGUNDO: Como
sustento de la demanda sostiene la actora que la codemandada
doña Justina Elías Ponce le tiene un adeudo judicialmente
declarado ascendente a dos mil setecientos noventa y un soles (S/.
2,791.00), que pretende evadir con la venta de los inmuebles sub
litis. La demandada vendió el ocho de noviembre de dos mil cuatro
a don Máximo Hernández Vera y esposa doña Olga Aparcana, sus
derechos y acciones del predio rústico lote treinta y nueve, lateral
seis, sub lote A, situado en la irrigación Pampa de Ñoco del distrito
de Pueblo Nuevo, inscrito en la Ficha Nº 000594-010407, a un
precio irreal de un mil quinientos soles (S/. 1,500.00), cuando su
precio real es ocho mil soles (S/. 8,000.00). Asimismo, la misma
demandada el dieciocho de noviembre de dos mil cuatro transfirió
su propiedad ubicada en el Asentamiento Humano - AA.HH. San
Isidro manzana cinco, lote cuatro (Jirón Los Incas), inscrito en la
Ficha Nº P07038720, a don Falconier Talla Chávez, al irreal precio
de dos mil quinientos soles (S/. 2,500.00) cuando su verdadero
precio es de diez mil soles (S/. 10,000.00), este último comprador
resulta ser cuñado del hermano de la vendedora. La premura de
las transferencias, el grado de parentesco de los demandados, los
precios irreales, así como la inexistencia de la tradición determinan
que las ventas realizadas por doña Justina Elías Ponce son
simuladas y se efectuaron solo con la finalidad de no hacer pago
del adeudo a la demandante, quien se ha visto perjudicada.
TERCERO: Por sentencia de primera instancia, de fecha ocho de
enero de dos mil diez, a fojas doscientos ocho, se declaró infundada
la demanda, precisando el Juez de la causa que habiendo invocado
la demandante simulación como causal de anulabilidad, se
entiende que es la simulación relativa, porque la absoluta es causal
de nulidad. Precisa que de los cuatro ítems que vienen contenidos
en los fundamentos de hecho del escrito postulatorio, no se
expresa ni se aprecia, cual es el acto jurídico oculto, el cual
tampoco fluye de ninguna de las pruebas que obran en el proceso.
Y si bien, los hechos demandados, de probarse en el proceso,
advertirían que las ventas fueron “fraudulentas” como se sostiene,
no sólo desde la perspectiva se configura la simulación relativa, la
cual exige un acto oculto, que en caso concreto no se expresa, y
bajo esa circunstancia la demanda no tiene fundamento que
sustente válidamente la anulabilidad de los actos cuestionados,
careciendo de objeto dilucidar si estos son o no fraudulentos.
CUARTO: Por sentencia de segunda instancia de fecha cuatro de
octubre de dos mil diez, a fojas doscientos treinta y cinco, se
confirmó la sentencia apelada en el extremo que declaró Infundada
la demanda respecto del acto jurídico de la compra venta del
inmueble rústico del lote treinta y nueve, lateral seis, Sub Lote A
situado en la irrigación de Pampa de Ñoco del distrito de Pueblo
Nuevo, así como el pago de la Indemnización de daños y perjuicios,
revocaron el extremo relativo al acto jurídico consistente en la
compra venta del predio urbano ubicado en el Asentamiento
Humano AA.HH San Isidro manzana cinco, lote cuatro (Jirón Los
Incas), así como el pago de costas y costos, reformándola
declararon la nulidad del acto jurídico de compra venta del inmueble
por simulación absoluta por el predio urbano ubicado en el
Asentamiento Humano - AA.HH. San Isidro manzana cinco, lote
cuatro (Jirón Los Incas), realizado por la demandada doña Justina
Elías Ponce con don Falconier Talla Chávez. QUINTO: La Sala de
mérito sostiene respecto al inmueble rústico del lote treinta y
nueve, lateral seis, Sub Lote A situado en la irrigación de Pampa de
Ñoco del distrito de Pueblo Nuevo, que la venta fue llevada a cabo
el ocho de noviembre de dos mil cuatro, esto es, con fecha posterior
al reconocimiento judicial del adeudo de la demandada de fecha
veintidós de octubre de dos mil cuatro. Que del suministro de agua
de fojas ciento veintidós se tiene que el predio es de propiedad de
María Magdalena Elías Ponce, mientras que en el Padrón de
Regantes de fojas ciento sesenta y cinco se establece que se
encuentra registrado a nombre de la Sucesión Ponce Ruíz viuda de
Elías Maximina, siendo integrante de la misma la antes nombraba;
por lo que es insuficiente el acta de matrimonio de fojas quince de
El Peruano
Lunes 1 de febrero de 2016
María Magdalena Elías Ponce, hermana de la demandada para
demostrar la existencia de simulación en la realización del acto
jurídico, tanto más si se trata de derechos y acciones. Respecto al
predio urbano ubicado en el Asentamiento Humano - AA.HH. San
Isidro manzana cinco, lote cuatro (Jirón Los Incas) del distrito de
Pueblo Nuevo, la venta se realiza igual en forma posterior al
reconocimiento del adeudo. Se tiene que a pesar de haberse
realizado la venta, la propia demandada es quien paga el impuesto
predial y arbitrios municipales del predio, por lo que continúa
realizando actos de propiedad exclusiva, más aun el demandado
Falconier Talla Chávez no ha aportado pruebas de lo contrario; en
consecuencia, la demandada para impedir el cobro del adeudo ha
simulado haber vendido dicho inmueble urbano, por lo que cabe
ampararse la pretensión referido a este inmueble. En ese sentido,
precisa la Sala de mérito que el presente caso se trata de una
simulación absoluta prevista en el artículo 190 del Código Civil,
pues se ha creado la apariencia del negocio, sin querer dar vida al
mismo, toda vez que, se ha demostrado que la actora sigue siendo
propietaria del predio en cuestión. En consecuencia, la adecuación
de los hechos alegados no afecta el derecho de defensa o
contradicción de los emplazados, pues simplemente se está
aplicando el principio “Iura novit curia”. SEXTO: Este Supremo
Tribunal advierte de la sentencia de vista que para revocar en parte
la sentencia apelada, la Sala de mérito ha precisado que al tratarse
la presente causa sobre una simulación absoluta prevista en el
artículo 190 del Código Civil, deviene en nulo el acto jurídico de
compraventa del predio ubicado en el Asentamiento Humano AA.HH. San Isidro, manzana cinco, lote cuatro (Jirón Los Incas)
distrito de Pueblo Nuevo, toda vez que, la adecuación de los
hechos alegados no afecta el derecho de defensa o contradicción
de los emplazados, en aplicación del principio Iura novit curia. Al
respecto, cabe precisar que si bien es cierto conforme a los
artículos VII del Título Preliminar del Código Civil y VII del Título
Preliminar del Código Procesal Civil se reconoce dicho principio,
motivo por el cual, el juez debe aplicar el derecho que corresponda
al proceso, aunque no haya sido invocado por las partes o Io haya
sido erróneamente, sin embargo, no puede ir más allá del petitorio
ni fundar su decisión en hechos diversos de los que han sido
alegados por las partes. SÉTIMO: Para mayor precisión, a través
del principio “Iura novit curia”, se reconoce al juez la facultad de
subsumir los hechos alegados y probados por las partes dentro del
tipo legal pertinente, aún en el supuesto que los justiciables
hubieran invocado la aplicabilidad de otras disposiciones; sin
embargo, el empleo de este principio por parte del juez debe operar
con prudencia, limitado por el principio de congruencia procesal, es
decir, no puede ir más allá del petitorio ni fundarse la decisión en
hechos diversos de los que hayan sido alegados por las partes en
el decurso del proceso, lo cual no ha sido adoptado por el Colegiado
de mérito. En efecto, advertimos que efectivamente se ha incurrido
en la infracción normativa denunciada, pues la Sala Superior no
aplicó el artículo 221 inciso 3 del Código Civil que es la norma
pertinente, y conforme a la cual constituye causal de anulabilidad,
la figura de simulación relativa, esto es, cuando el acto real que
contiene al acto jurídico en cuestión perjudica el derecho de
terceros; por el contrario se aplicó al caso de autos el articulo 219
inciso 5 del Código Civil, que prescribe que el acto jurídico es nulo
por adolecer de simulación absoluta, a partir de lo cual se revoca la
sentencia apelada y reformándola se ha declarado la nulidad del
acto jurídico de compra venta del predio urbano ubicado en el
Asentamiento Humano - AAHH San Isidro, manzana cinco, lote
cuatro (Jirón Los Incas), no obstante que el peticionado de la
demanda es la anulabilidad por simulación relativa de los actos
jurídicos cuestionados, tal como se aprecia a fojas diecinueve.
Asimismo, precisa la Sala Superior que lo pretendido es la nulidad
de los documentos de compraventa y accesoriamente el pago de
indemnización por daños y perjuicios ascendente a la suma de
cinco mil soles (S/. 5,000.00) que solidariamente deben pagar los
demandados; cuando lo correcto era aplicar el artículo 221 inciso
3) del Código Civil, por lo que, el recurso de casación deviene en
fundado. OCTAVO: Ahora bien, conforme a lo establecido en el
artículo 396 del Código Procesal Civil, al declararse fundado el
recurso de casación por infracción de una norma de derecho
material, la resolución de vista deberá revocarse, íntegra o
parcialmente, según corresponda. En el presente caso, este
Supremo Tribunal en base al análisis contenido en los
considerandos que preceden, ha corroborado que efectivamente la
demandante ha pedido la anulabilidad por simulación relativa de
los actos jurídicos cuestionados, sin embargo, esta Sala no aprecia
de autos el acto jurídico oculto, el cual tampoco fluye de ninguno de
los medios probatorios ofrecidos por las partes, por lo tanto, la
demanda deviene en infundada, al carecer de fundamento alguno
que sustente la anulabilidad de los actos demandados, careciendo
de objeto dilucidar si estos son o no fraudulentos; deviniendo
igualmente en infundada la pretensión accesoria. 4. DECISION:
Por estas consideraciones declararon FUNDADO del recurso de
casación de fecha veintitrés de diciembre de dos mil diez, obrante
a fojas doscientos cincuenta y tres interpuesto por doña Justina
Elías Ponce; en consecuencia, CASARON la sentencia de vista de
fojas doscientos treinta y cinco, su fecha cuatro de octubre de dos
mil diez, que revoca la sentencia apelada y, reformándola declara
fundada en parte; y, actuando en sede de instancia
CONFIRMARON la apelada de fecha ocho de enero de dos mil
diez, obrante a fojas doscientos ocho, que declaró INFUNDADA la
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CASACIÓN
demanda; y, ORDENARON la publicación de la presente resolución
en el Diario Oficial “El Peruano” conforme a ley; en los seguidos por
Francisca Velásquez de Flores contra Justina Elías Ponce y otros,
sobre anulabilidad de escritura pública y otro; y, los devolvieron.
Vocal Ponente Vinatea Medina.- S.S. SIVINA HURTADO, WALDE
JAUREGUI, ACEVEDO MENA, VINATEA MEDINA, RUEDA
FERNÁNDEZ C-1335410-12
CAS. Nº 2614 - 2011 LIMA
Lima, trece de junio de dos mil doce.- VISTOS; y CONSIDERANDO:
PRIMERO.- Que, el recurso de casación de fojas trescientos once,
interpuesto el veinte de junio de dos mil once, por el Procurador
Público Ad-Hoc a cargo de la defensa de los derechos e intereses
del Ministerio de Cultura, contra la sentencia de vista, de fojas
doscientos noventa y siete, su fecha dieciocho de enero del dos mil
once que confirma la sentencia apelada de fojas doscientos setenta
y dos, su fecha veintiséis de abril de dos mil diez que declaró
fundada en parte la demanda; reúne los requisitos de forma
establecidos para su admisión en el artículo 57 de la Ley Procesal
del Trabajo N° 26636, modificado por la Ley N° 27021,
correspondiendo, por tanto, evaluar los requisitos de fondo
establecidos en el acotado cuerpo normativo. SEGUNDO.- En la
Ley Procesal del Trabajo N° 26636, modificado por la Ley N°
27021, se configura el recurso de casación como un medio
impugnatorio de carácter extraordinario cuyos fines son la correcta
aplicación e interpretación de las normas materiales del Derecho
Laboral, Previsional y de Seguridad Social, así como la unificación
de la jurisprudencia nacional por la Corte Suprema. Su procedencia
-por ese carácter extraordinario- está limitado por tanto, al
cumplimiento de ciertos requisitos establecidos numerus clausus
en dicha Ley Procesal. En el artículo 56 de la Ley Procesal del
Trabajo N° 26636, modificado por la Ley N° 27021, se señalan las
causales por las que procede el recurso; sin embargo, su sola
alegación no es suficiente para la procedencia del mismo, la sola
mención de cuál es la norma que se considera interpretada
erróneamente, aplicada indebidamente o inaplicada no es
suficiente, sino que también es imprescindible, según sea el caso,
y conforme el artículo 58 la Ley Procesal del Trabajo N° 26636,
modificado por la Ley N° 27021, indicar cuál es la interpretación
que se considera correcta, cuál es la norma aplicable en defecto de
la indebidamente aplicada; o por qué la norma denunciada como
inaplicada debió aplicarse. Cada causal casatoria además, debe
ser argumentada con claridad y precisión, exigencias que son
imprescindibles, en tanto solo así se podrá fijar la extensión de lo
que va a ser discutido y debatido por este Supremo Colegiado; y si
bien la norma procesal no lo declara expresamente, la
argumentación expuesta en el recurso tiene un objetivo: demostrar
el error de derecho incurrido en la sentencia impugnada. No puede
denunciarse en casación el error sobre normas procesales o en
todo caso de cuestiones de hecho o probatorias, dado que la
finalidad del recurso es, conforme el artículo 54 de la Ley Procesal
del Trabajo N° 26636, modificado por la Ley N° 27021, la correcta
aplicación e interpretación de las normas materiales del Derecho
Laboral, Previsional y de Seguridad Social. TERCERO.- Del
recurso de casación se aprecia que la parte recurrente denuncia: a)
Inaplicación del artículo 13 inciso 2) del Título II del Decreto
Legislativo N° 1071, respecto al convenio arbitral, norma regulada
que no se ha tomado en cuenta, asimismo el artículo 41 del
Decreto Supremo N° 083-2004-PCM, Texto Único Ordenado de
la Ley de Contrataciones y Adquisiciones del Estado sobre el
Arbitraje; alega que las sentencias de mérito han analizado
incorrectamente los contratos de locación de servicios, por ser la
relación contractual entre las partes uno de naturaleza civil y en la
cláusula décimo tercera, la actora, doña Marisa Lucila Torrealva
Avalos, voluntariamente pactó con el Instituto Nacional de Radio y
Televisión del Perú – IRTP que la jurisdicción correcta para resolver
las posibles controversias sea la Sala Arbitral. De esta manera los
Jueces no han tomado en cuenta que no son competentes para
revisar pretensiones, y lo más grave no se ha tomado en
consideración el artículo 41 del Texto Único Ordenado de la Ley de
Contrataciones y Adquisiciones del Estado que obliga a someter a
arbitraje controversias referentes a contratos bajo modalidad de
locación de servicios. Que el Ad quem no ha tomado en cuenta al
momento de resolver la apelación contra la tacha, que los
documentos ofrecidos por la demandante no tiene las formalidades
de ley para ser atendidas como ciertas, no pudiendo darles la
validez por una aplicación de indicios para darle una valoración
respectiva; b) Aplicación indebida de los artículos 3 y 4 del
Decreto Supremo N° 003-97-TR; alega que la Sala Superior ha
aplicado indebidamente estas normas en atención al Principio de la
Primacía de la Realidad”, principio laboral que no es jurídicamente
aplicable a este caso, pues no se ha tomado en cuenta que la
demandante prestó servicios bajo la modalidad de contrato de
locación de servicios, en ese sentido es aplicable al caso lo
dispuesto por el artículo 1764 del Código Civil que regula dicha
modalidad contractual de naturaleza civil. Se ha errado en el
proceso de establecer una correcta interpretación del artículo 4 de
la Ley de Productividad y Competitividad Laboral, toda vez, que no
se configura una infracción laboral al contratar mediante contrato
de locación de servicios a una persona a fin de que ejecute
actividades permanentes y propias de la actividad productiva en el
centro de trabajo, ya que los puntos incidentes que recaen primacía
de la realidad deben darse conjuntamente sin excepción alguna; y
74037
c) interpretación errónea del artículo 1 del Decreto Ley N°
25807 modificatorio del Decreto Ley N° 25572; respecto al pago
de intereses de la Compensación por Tiempo de Servicios - CTS,
debe tenerse en cuenta que el artículo 1 del Decreto Ley N° 25807
modificatorio del Decreto Ley N° 25572 ha exonerado a los
organismos públicos con personal sujeto al régimen laboral de la
actividad privada, de efectuar los depósitos semestrales de la
Compensación por Tiempo de Servicios, pero no de la
responsabilidad por los mismos constituyéndose en depositarios
obligatorios de dichas fondos; y d) Contravención de las normas
que garantizan el derecho a un debido proceso; alega que la
Sala Superior ha vulnerado el debido proceso al no haber aplicado
al caso de autos lo establecido en el artículo IX del Título Preliminar
del Código Procesal Civil, donde se señala que las normas
procesales del Código son imperativas salvo regulación en
contrario. De esta manera respecto a la carga de la prueba como
es el caso de autos, quien alega un hecho, debe probarlo.
CUARTO.- Que, al versar la presente controversia sobre el pago
de indemnización por despido arbitrario y beneficios laborales; y
haberse concluido en las instancias de mérito, que en aplicación
del principio de primacía de la realidad previsto en el artículo 4 de
la Ley de Productividad y Competitividad Laboral, se ha identificado
la concurrencia de los elementos esenciales que configuran el
contrato de trabajo sujeto al régimen de la actividad privada, se ha
ordenado que la entidad demandada cumpla con pagar a la actora
la suma total ascendente a ciento cinco mil trescientos veinticinco
nuevos soles con cuarenta y siete céntimos (S/.105,325.47) por
concepto de beneficios sociales e indemnización por despido
arbitrario, no resulta por tanto pertinente la invocación de
inaplicación de las normas denunciadas en los literales a), b) y c);
por consiguiente, su recurso en estos extremos deviene en
improcedente. QUINTO.- Que, respecto a la denuncia casatoria en
el literal d), la contravención de las normas que garantizan el
derecho a un debido proceso que no se encuentra prevista en el
artículo 56 de la Ley Procesal del Trabajo N° 26636, modificado por
el artículo 1 de la Ley Nº 27021; sin embargo, la Corte Suprema de
manera excepcional aplica dicha propuesta casatoria, en los casos
en que se advierta flagrante afectación a tal derecho fundamental;
supuestos fácticos que no se advierten de autos; por lo que este
extremo del recurso también deviene en improcedente. Por tales
consideraciones, de conformidad con el artículo 58 de la Ley
Procesal del Trabajo N° 26636, modificado por la Ley N° 27021,
declararon: IMPROCEDENTE el recurso de casación interpuesto
por el Procurador Público Ad-Hoc a cargo de la defensa de los
derechos e intereses del Ministerio de Cultura, de fecha veinte de
junio de dos mil once, a fojas trescientos once, contra la sentencia
de vista, de fecha dieciocho de enero del dos mil once, de fojas
doscientos noventa y siete, expedida por la Primera Sala Laboral
de la Corte Superior de Justicia de Lima; en los seguidos por doña
Marisa Lucila Torrealva Avalos contra el Instituto Nacional de Radio
y Televisión del Perú – IRTP, sobre Indemnización por Despido
Arbitrario y otro; y MANDARON publicar la presente resolución en
el diario oficial “El Peruano” conforme a ley, y, los devolvieron.Vocal Ponente: Vinatea Medina. S.S. CHUMPITAZ RIVERA,
VINATEA MEDINA, TORRES VEGA, MORALES GONZALEZ,
CHAVES ZAPATER C-1335410-13
CAS. Nº 2619-2012 HUANCAVELICA
Lima, diez de enero de dos mil trece. VISTOS; y CONSIDERANDO:
PRIMERO: El recurso de casación interpuesto por don Alejandro
Clemente Alarcón, obrante a fojas mil ochocientos setenta y tres,
contra la sentencia de vista, de fojas mil ochocientos cincuenta
y dos, de fecha catorce de noviembre de dos mil once; cumple
con los requisitos de admisibilidad, conforme a lo previsto por el
artículo 387 del Código Procesal Civil, modificado por el artículo 1
de la Ley N° 29364. SEGUNDO: Antes del análisis de los requisitos
de procedencia es necesario precisar que el recurso de casación
es un medio impugnatorio extraordinario de carácter formal que
sólo puede fundarse en cuestiones eminentemente jurídicas
y no en cuestiones fácticas o de revaloración probatoria, es por
ello que sus fines esenciales constituyen la adecuada aplicación
del derecho objetivo al caso concreto y la uniformidad de la
jurisprudencia nacional por la Corte Suprema; en ese sentido, su
fundamentación por parte del recurrente debe ser clara, precisa y
concreta, indicando ordenadamente cuáles son las denuncias que
configuran la infracción normativa que incida directamente sobre la
decisión contenida en la resolución impugnada, o las precisiones
respecto al apartamiento inmotivado del precedente judicial.
TERCERO: En efecto, a través de la modificación efectuada al
artículo 388 del Código Procesal Civil por el artículo 1 de la Ley
N° 29364, publicada el veintiocho de mayo de dos mil nueve, se
ha regulado como causales del recurso de casación la infracción
normativa, y el apartamiento inmotivado del precedente judicial que
tengan incidencia directa sobre el sentido de la decisión impugnada.
CUARTO: Por infracción normativa debemos entender la causal a
través de la cual el recurrente denuncia la existencia de un error
de naturaleza procesal o sustantiva que incide directamente sobre
el sentido de lo decidido. Los errores que pueden ser alegados
como infracción normativa pueden comprender a los supuestos
de aplicación indebida, interpretación errónea o inaplicación de
una norma, que como se ha señalado pueden ser de carácter
sustantivo o procesal. QUINTO: El recurrente ha denunciado como
causales casatorias: 1) La aplicación indebida de los artículos
74038
CASACIÓN
923 y 927 del Código Civil; 2) La inaplicación del artículo 949
del Código Civil; 3) La inaplicación de los artículos 2 inciso
16), 70 y 139 inciso 3) de la Carta Magna; y, 4) La contravención
de las normas que garantizan el derecho a un debido proceso;
denuncias que se subsumen dentro de la causal de infracción
normativa; y 5) La inaplicación de la doctrina jurisprudencial,
la Casación N° 1112-2003-Puno, denuncia que se subsume
dentro de la causal de apartamiento inmotivado del precedente
judicial. SEXTO: En cuanto a la causal de infracción normativa
de los artículos 923 y 927 del Código Civil; alega el recurrente
que el Colegiado Superior al momento de emitir su decisión ha
incurrido en los mismos errores de interpretación del Juzgado al no
valorar las pruebas aportadas por su parte. En ese sentido precisa
que no se ha valorado el Título de adjudicación del veintiocho de
agosto de mil novecientos setenta y nueve como justo título; siendo
que inclusive el Ministerio de Agricultura respecto a dicho titulo de
ejecución que ostenta ha señalado que “se trata de un documento
otorgado por una entidad que dependía administrativamente de
la Dirección General de Reforma Agraria y Asentamiento Rural
perteneciente al Ministerio de Agricultura realizado en observancia
y aplicación de los requisitos establecidos en la Ley N° 17716,
acreditándose con ello su valor probatorio; con relación a la
causal de infracción normativa procesal por contravención de
las normas que garantizan el derecho a un debido proceso;
refiere el recurrente que se ha vulnerado el principio de valoración
de la prueba, lo que evidencia la motivación de la sentencia de
mérito, toda vez que los medios de prueba no han sido valorados
en forma conjunta; y sobre la causal de infracción normativa
de los artículos 949 del Código Civil; 2 inciso 16), 70 y 139
inciso 3) de la Carta Magna; refiere el recurrente que no se
puede ordenar la restitución a la Comunidad Campesina actora,
la posesión del predio titulado a su nombre bajo apercibimiento
de disponerse el lanzamiento sin haberse determinado la
demarcación precisa, colindancia y la disposición respecto a las
construcciones y plantaciones que hay en la misma, no habiéndose
determinado un sentido social. Así la Sala de mérito lo ha dejado
desprotegido de la seguridad jurídica a que tiene derecho, entre
otros argumentos que tratan sobre valoración de medios de prueba
y hechos. SÉPTIMO: Las denuncias casatorias que anteceden
devienen en improcedentes, por cuanto este Supremo Tribunal
advierte que lo realmente cuestionado por el impugnante es la
situación fáctica establecida en sede de instancia, así como la
valoración de los medios de prueba efectuada por los Jueces
de mérito, pretendiendo forzar a esta Sala Suprema a emitir un
nuevo pronunciamiento sobre el fondo del asunto, lo que no se
condice con los fines del recurso extraordinario de casación, esto
es, la interpretación del derecho objetivo y la unificación de los
criterios de la Corte Suprema. OCTAVO: Respecto a la causal de
apartamiento inmotivado del precedente judicial contenido en
las Casaciones N° 1112-2003-Puno, N° 43-2007/Tacna, N° 7292006-Lima, N° 3588-00/Puno, N° 1349-2000/Junín; sostiene el
impugnante que en dicha casación se ha determinado que en el
proceso de reivindicación no se pude definir cuál de las partes tiene
mejor derecho de propiedad. En ese sentido, la sentencia apelada
debió declarar que no es posible la pretensión de reivindicación
por cuanto el demandado acredita que su posesión se funda en el
derecho de propiedad que detenta sobre un predio que se reclama,
por lo que debe seguirse previamente al proceso de reivindicación,
uno de mejor derecho de propiedad. NOVENO: La causal anterior
resulta improcedente por cuanto las casaciones invocadas por el
impugnante no constituyen precedentes judiciales conforme a las
formalidades establecidas en el artículo 400 del Código Procesal
Civil, modificado por la Ley N° 27021. Por tales consideraciones,
y de conformidad con lo previsto en el artículo 392 del Código
Procesal Civil, modificado por el artículo 1 de la Ley N° 29364,
declararon: IMPROCEDENTE el recurso de casación interpuesto
por don Alejandro Clemente Alarcón, obrante a fojas mil ochocientos
setenta y tres, contra la sentencia de vista, de fojas mil ochocientos
cincuenta y dos, de fecha catorce de noviembre de dos mil once;
en los seguidos por la Comunidad Campesina de San Gerónimo
contra el Ministerio de Agricultura y otros; sobre Indemnización
por daños y perjuicios y otro; y ORDENARON la publicación de la
presente resolución en el diario oficial “El Peruano” conforme a ley;
y, los devolvieron.- Vocal Ponente: Vinatea Medina. S.S. SIVINA
HURTADO, ACEVEDO MENA, VINATEA MEDINA, MORALES
PARRAGUEZ, RUEDA FERNÁNDEZ C-1335410-14
CAS. Nº 2743- 2011 LA LIBERTAD
Lima, quince de octubre de dos mil trece. LA SALA DE DERECHO
CONSTITUCIONAL Y SOCIAL PERMANENTE DE LA CORTE
SUPREMA DE JUSTICIA DE LA REPÚBLICA: VISTA: Con el
acompañado, la causa número dos mil setecientos cuarenta y tres
– dos mil once, integrada con los Señores Jueces Supremos Sivina
Hurtado – Presidente, Acevedo Mena, Vinatea Medina, Rueda
Fernández y Ayala Flores; y luego de verificada la votación con
arreglo a ley, se emite la siguiente sentencia: 1.- MATERIA DEL
RECURSO: Se trata del recurso de casación de fecha veintitrés de
marzo de dos mil once, obrante a fojas cuatrocientos cinco,
interpuesto por doña Silvia Corina Cáceres Castañeda, contra la
sentencia de vista de fojas trescientos veinticinco, de fecha catorce
de setiembre de dos mil diez, que confirmando la sentencia apelada
declaró infundada la demanda. 2.- FUNDAMENTOS POR LOS
CUALES SE HA DECLARADO PROCEDENTE EL RECURSO:
El Peruano
Lunes 1 de febrero de 2016
Mediante resolución de fecha dos de mayo de dos mil doce,
corriente a fojas sesenta y seis del cuaderno de casación, se ha
declarado procedente el recurso de casación interpuesto por la
causal de infracción normativa del artículo 950 del Código
Civil, al haberse alegado que se ha cumplido con todos los
requisitos, tanto para la usucapión larga como para la usucapión
corta; es más ha acreditado tener más de treinta años de posesión
con justo título y buena fe, de manera pública y pacífica del bien
inmueble materia de litis; sin embargo, la sentencia de vista
considera que por el hecho de la interposición de la demanda de
reivindicación, posterior a la interposición de la presente acción, la
prescripción se ha interrumpido con el emplazamiento de la
demanda de reivindicación. 3.- CONSIDERANDO: PRIMERO:
Aspectos Generales del Derecho de Posesión. Cabe precisar en
primer lugar, que el derecho real a la posesión es uno de los más
complejos y sugestivos, por cuanto es uno amplio que permite
intervenir en el debate a cuestiones de relevancia jurídica
relacionadas con el derecho fundamental a la propiedad, la
resolución de los contratos, el proceso de prescripción adquisitiva
de dominio, entre otros de igual complejidad e interés para la
Comunidad Jurídica. En efecto, la posesión es un derecho real a
través del cual se han planteado a nivel registral, administrativo,
contencioso, arbitral, judicial, entre otros, diversas controversias
que han permitido nutrir a la jurisprudencia y doctrina de nuestro
país, así lo demuestran los innumerables fallos obtenidos los
últimos años por las diversas instituciones de la Administración
Pública, las Cortes Superiores del Perú y por este Supremo
Tribunal1. SEGUNDO: Conforme a lo previsto en el Código
sustantivo la posesión vendría a ser el ejercicio de hecho de uno o
más poderes inherentes a la propiedad, siendo el disfrute y uso los
poderes que configuran la posesión de hecho que prescinde de
título alguno para su legitimidad, he ahí su complejidad y
trascendencia en el mundo jurídico, por cuanto se constituye en un
derecho real cuyo contenido se encuentra nutrido de otros
derechos reales. Concretamente, conforme a lo previsto en el
Código Civil, la posesión implica un ejercicio de hecho, cuya
eficacia prescinde de título, contrato u otro acto jurídico.
Efectivamente, al ser la posesión un ejercicio de hecho, no es
necesario demostrarla a través de un título que le atribuya
legitimidad al que posee, basta que en los hechos se posea el bien,
ahí radica la complejidad e importancia trascendente de la
posesión, pues su constitución da paso a la configuración de
diversas situaciones jurídicas, dentro de las cuales se erige la
prescripción adquisitiva de dominio. TERCERO: El Legislador ante
la preeminencia de garantizar seguridad jurídica y orden público
consideró acertadamente determinar en el Código Civil peruano los
tipos de posesión, así como las distintas instituciones jurídicas que
permitan al poseedor encontrarse sujeto al bien hasta que los
órganos jurisdiccionales decidan; encontrándonos de esta manera
frente a los interdictos o las acciones posesorias cuyo fin es
mantener el estado posesorio. En nuestro sistema jurídico,
poseedor podrá ser todo aquel que reconozca a otra persona como
titular del bien, tales como arrendatarios, usufructuarios,
comodatarios, etcétera; también podrá serlo quien no reconozca la
titularidad de otra persona, conforme a los supuestos del artículo
911 del Código Civil. Este clasifica a la posesión en mediata o
inmediata; legítima o ilegítima, y a su vez la posesión ilegítima se
sub clasifica de buena o mala fe, y la posesión precaria. CUARTO:
Con relación al tema de prescripción adquisitiva de dominio, la
posesión cumple una función de legitimación, en virtud de la cual
una persona es titular de un derecho sobre el bien, y pueda ejercitar
en el tráfico jurídico las facultades derivadas de aquél, así como
que los terceros pueden confiar en dicha apariencia. Otro de los
efectos de la posesión es la posibilidad de su transformación en
dominio o en el derecho real de que es manifiestamente exterior
mediante la usucapión. QUINTO: Aspectos generales de la
Usucapión. Con relación a la usucapión, en el Segundo Pleno
Casatorio Civil de la Corte Suprema2 se precisó que la usucapión
es la realidad misma de la propiedad, constituyéndose en una
consecuencia necesaria de la protección dispensada a la posesión.
En ese sentido, se señaló que cuando la propiedad coincide con el
abandono y, en cambio, la posesión coincide con el tiempo, triunfa
esta última; representando la usucapión la superposición del hecho
sobre el derecho. Luego se sostiene: “(…) En suma, la usucapión
viene a ser el instituto por el cual el poseedor adquiere el derecho
real que corresponde a su relación con la cosa (propiedad,
usufructo), por la continuación de la posesión durante todo el
tiempo fijado por ley. Sirve además, a la seguridad jurídica del
derecho y sin ella nadie estaría cubierto de pretensiones sin
fundamento o extinguidas de antiguo, lo que exige que se ponga un
límite a las pretensiones jurídicas envejecidas. Nuestro
ordenamiento civil señala que la adquisición de la propiedad por
prescripción de un inmueble se logra mediante la posesión
continua, pacífica y pública como propietario durante diez años
(denominada usucapión extraordinaria), en tanto que, si media
justo título y buena fe dicho lapso de tiempo se reduce a cinco años
(denominada usucapión ordinaria).” SEXTO: Requisitos
copulativos del artículo 950 del Código Civil. En relación al tema
de casación -interpretación errónea del artículo 950 del Código
Civil- cabe señalar en primer lugar que conforme a dicha norma, la
propiedad inmueble se adquiere por prescripción mediante la
posesión continua, pacífica y pública como propietario durante diez
años. Se adquiere a los cinco años cuando median justo título y
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CASACIÓN
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buena fe. Conforme al Segundo Pleno Casatorio Civil , se tratan de
requisitos o elementos copulativos; a) Continuidad en la
posesión: entiéndase la continuidad de la posesión como aquella
que se ejerce sin intermitencias, sin solución de continuidad, lo cual
no implica permanencia, puesto que se pueden dar actos de
interrupción como los previstos por los artículos 904 y 953 del
Código Civil, que vienen a constituir hechos excepcionales, por
tanto, la posesión será continua cuando su ejercicio sea a través de
actos posesorios realizados en la cosa, sin contradictorio alguno,
durante todo el tiempo establecido por ley; b) La posesión
pacífica: se dará cuando el poder de hecho sobre la cosa no se
mantenga por la fuerza; por lo que, aún obtenida violentamente,
pasa a haber posesión pacífica una vez que cesa la violencia que
instauró aquel estado; c) La posesión pública, esto implica que
sea conocida por todos, toda vez que el usucapiente es un
contradictor del propietario o poseedor anterior, por eso resulta
necesario que la posesión sea ejercida de manera que pueda ser
conocida por éstos, para que estos no puedan oponerse a aquella.
Si los propietarios y el anterior poseedor pudieron conocer
esa posesión durante todo el tiempo que duró, y no lo hicieron,
la ley presume en ellos, el abandono y la posesión del
usucapiente se consolida; d) Como propietario, puesto que se
entiende que el poseedor debe actuar con animus domini sobre el
bien materia de usucapión. En ese entendido, para mayor precisión
el animus domini, como elemento subjetivo, equivale a la
intencionalidad de poseer como propietario. Si bien el fundamento
de la prescripción es la posesión, también es fundamento la
propiedad o la simple tenencia. SÉTIMO.- Sobre el requisito de que
la posesión sea pacífica, nos ilustra la Real Academia Española, el
término “pacífico” o “pacífica” hace referencia a algo “tranquilo,
sosegado, que no provoca luchas o discordias”. Por tanto, se
puede afirmar que la posesión pacífica debe ser entendida como
aquella que se ejerce sin perturbación ni cuestionamiento alguno,
es decir, en total armonía y con la tácita aprobación y aceptación de
los demás integrantes de la sociedad. Dicho de otro modo,
posesión pacífica es aquella que se obtiene sin violencia alguna,
esto es que no es adquirida por vías de hecho, acompañadas de
violencias materiales o morales, o por amenazas de fuerza, y
continúa en esa forma mientras no sea perturbada, en los hechos
y en el derecho. En consecuencia, conforme a los requisitos
descritos, el poseedor debe poseer como dueño, esto es
comportarse como propietario de la cosa, bien porque lo es,
bien porque tiene la intención de serlo. En sentido amplio,
poseedor en concepto de dueño es el que se comporta con la
cosa como titular de un derecho susceptible de posesión. En
ese sentido, los demás consideran al poseedor como dueño
del bien. OCTAVO: Situación Jurídica sustancial y procesal de
los demandantes: Mediante el presente proceso la demandante
pretende se la declare propietaria por prescripción adquisitiva larga
del inmueble constituido por el lote de terreno y construcción
rústica ubicado en el Jirón Unión N° 1708, ahora números 1740,
1744, 1746 (Ex Fundo El Palomar); como pretensión accesoria se
disponga la inscripción de su derecho de propiedad en la partida
registral N° 04005761 (antes ficha N° 035615) del registro de
Predios de Trujillo, y se deje sin efecto la inscripción a favor de los
antiguos propietarios. NOVENO: Como sustento de la demanda,
precisa la actora que don Zoe Tranquilino Reyna Cabrera fue
beneficiario por reforma agraria de la parcela denominada “El
Palomar”, con una extensión de 1.22 Hectáreas conforme a la
Resolución Directoral N° 29-ZA-III La Libertad, de fecha primero de
abril de mil novecientos setenta y uno; con fecha quince de agosto
de mil novecientos setenta y tres, mediante documento privado el
referido propietario transfiere a favor de los hermanos Leonardo
Cáceres Crispín (padre de la recurrente) y Pedro Cáceres Crispín
(tío de la recurrente) una parte de la parcela (25 m2 x 35 m2), lote
que fue subdividido por aquellos en dos sub lotes, acto ratificado
mediante Escritura Pública de fecha ocho de enero de mil
novecientos noventa y seis. Finalmente señala que desde mil
novecientos setenta y tres, más de treinta y cinco años a la
actualidad, se encuentra en posesión continua, pacífica y pública
en la conducción y dominio del referido bien inmueble, habiendo
construido su vivienda y dedicado parte del mismo a taller.
DÉCIMO: Mediante sentencia de primera instancia de fecha siete
de mayo des mil diez, obrante a fojas doscientos setenta y dos ha
declarado infundada la demanda, precisando el A quo que la
demanda incoada debe subsumirse dentro de la denominada longi
temporis prescriptio o prescripción por largo tiempo, entendida
como aquella que no se fundamenta en un justo título y que
pretende regularizar situaciones de hecho consolidadas por el
transcurso del tiempo, por lo que, resulta necesario examinar con
las pruebas admitidas, si la demandante cumple con cada uno de
los requisitos del artículo 950 del Código Civil. En ese sentido, el
Juez aprecia del expediente ofrecido por la empresa demandada,
sobre mejor derecho de propiedad y reivindicación, seguido entre
las mismas partes (Expediente N° 40-2008), que se ha declarado
fundada aquella demanda, lo que quiere decir que se han suscitado
procesos judiciales con relación al predio sub litis; por tanto, si bien
es cierto la demandante viene ejerciendo la posesión sobre el bien
inmueble, ello lo ha realizado con conocimiento que tiene como
propietaria a la demandada, de allí que pretender que su posesión
se encuentra dentro de los requisitos previstos para solicitar la
prescripción adquisitiva, no resulta procedente, toda vez que, no ha
demostrado que sea pacífica. UNDÉCIMO: En segunda instancia,
74039
la Sala de mérito, mediante sentencia de vista, de fojas trescientos
veinticinco, su fecha catorce de setiembre de dos mil diez, ha
confirmado la sentencia apelada; precisando que se advierte de las
copias del Expediente N° 40-2008, que con fecha veintiocho de
diciembre de dos mil siete, la empresa emplazada en este proceso
interpuso demanda de mejor derecho de propiedad, reivindicación
y otro contra la demandante de esta causa, doña Silvia Corina
Cáceres Castañeda y su madre Leonor Emperatriz Castañeda
Gonzáles, respecto del bien sub litis, habiéndose admitido a trámite
con fecha cinco de marzo de dos mil ocho; esto es, antes que se
interponga esta acción de prescripción adquisitiva de dominio, la
cual recién fue notificada a la empresa demandada con fecha
veinticuatro de junio de dos mil ocho; en consecuencia, la
demanda de prescripción adquisitiva de dominio interpuesta
por la actora, doña Silvia Corina Cáceres Castañeda se ha
interrumpido con el emplazamiento de la demanda de mejor
derecho de propiedad y otros, por lo tanto, no se ha cumplido
con los requisitos para prescribir el inmueble materia de litis.
DUODÉCIMO: Entrando al análisis del recurso de casación, como
se ha señalado, se ha denunciado la infracción normativa del
artículo 950 del Código Civil, sosteniendo la demandante que pese
a haber cumplido con todos los requisitos contenidos en la norma
invocada, tanto para la usucapión larga como para la usucapión
corta; no obstante, la Sala de mérito ha considerado que por
haber sido emplazada con la demanda de reivindicación y
otros, interpuesta por la empresa emplazada, se ha
interrumpido su demanda de prescripción adquisitiva de
dominio. Al respecto, este Supremo Tribunal advierte que
efectivamente se ha incurrido en infracción normativa del artículo
950 del Código Civil, al haber efectuado la Sala de mérito respecto
de dicha norma una interpretación errónea, al haberle dado un
sentido que no le corresponde, además de consignar datos
inexactos en la sentencia de vista que no guardan fidelidad a lo
realmente ocurrido, a fin de justificar la errada interpretación de la
norma denunciada en sede de casación. DÉCIMO TERCERO: La
Sala Superior interpretando el artículo 950 del Código Civil sostiene
que debe cumplirse con tres requisitos: posesión continua, pacífica
y pública, por tanto, al haber sido emplazada la actora doña
Silvia Corina Cáceres Castañeda con la demanda de
reivindicación y otros, se habría interrumpido su demanda de
prescripción adquisitiva de dominio. Al respecto, este Supremo
Tribunal considera relevante precisar en primer término que la
usucapión opera de pleno derecho, esto es, que el derecho de
propiedad respecto del inmueble poseído se adquiere por la
posesión continua, pública y pacífica por el plazo previsto por ley,
una vez cumplido dicho plazo, el derecho ya fue adquirido, siendo
la sentencia a obtenerse dentro de un proceso sobre prescripción
adquisitiva de dominio meramente declarativa y no constitutiva. En
efecto, conforme a una interpretación integral de los artículos 950,
952 y 953 del Código Civil, la propiedad sobre el inmueble se
adquiere por prescripción mediante la posesión continua, pacífica y
pública como propietario durante diez años; y se adquiere a los
cinco años cuando median justo título y buena fe. En ese entendido,
quien adquiere un bien por prescripción puede entablar juicio para
que se lo declare propietario, de esta manera el efecto erga omnes
solo derivará de la usucapión reconocida por sentencia judicial e
inscrita en los Registros Públicos conforme a la parte final del
artículo 952 del Código Civil. DÉCIMO CUARTO: Una interpretación
correcta del artículo 950 del Código Civil implica tener claro que la
posesión es eminentemente un poder de hecho, de acuerdo al
artículo 896 del Código Civil, antes que de derecho, por la
vinculación material sobre la cosa. Lo determinante es que la
posesión se desarrolle en forma continua, pacífica y pública por el
período considerado en el referido artículo 950 del Código Civil,
produciéndose un conjunto de efectos dentro de la sociedad los
cuales informan que el titular de dicha posesión ya no es un simple
poseedor sino que ejerce atribuciones sobre el bien, propias de un
propietario que persuaden a su entorno del mismo y exige un
reconocimiento como tal. DÉCIMO QUINTO: Más aún, se advierte
que para justificar la errada interpretación del artículo 950 del
Código Civil, la Sala de mérito ha distorsionado la situación fáctica,
citando datos inexactos en la sentencia cuestionada, concluyendo
que por haber sido emplazada la actora con la demanda de
reivindicación y otros, se habría interrumpido la demanda de
prescripción adquisitiva de dominio. Para mayor precisión, se
advierte del Expediente acompañado N° 40-2008 que,
efectivamente la Empresa Inversiones e Importaciones La Nueva
Piel Sociedad Anónima Cerrada interpuso demanda de mejor
derecho de propiedad, reivindicación y accesión inmobiliaria
industrial contra doña Silvia Corina Cáceres Castañeda, y la madre
de esta, doña Leonor Emperatriz Castañeda Gonzales conforme
aparece del escrito, de fojas treinta, el veintiocho de diciembre de
dos mil siete, demanda que fue admitida a trámite recién el cinco
de marzo de dos mil ocho mediante resolución número dos
conforme se aprecia del auto de admisión de la demanda de fojas
cuarenta y dos del expediente acompañado, tomando doña Silvia
Corina Cáceres Castañeda conocimiento de dicho proceso judicial
recién el día de la notificación con aquella demanda, lo que ocurrió
el veinte de marzo del dos mil ocho, conforme se verifica a fojas
doscientos ochenta y ocho del expediente principal; esto es, con
posterioridad a dos días en que fue interpuesta la demanda de
prescripción adquisitiva de dominio; en consecuencia, cuando
doña Silvia Corina Cáceres Castañeda interpuso la demanda de
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CASACIÓN
autos no había sido aún notificada con la demanda de la Empresa
Inversiones e Importaciones La Nueva Piel Sociedad Anónima
Cerrada, por lo que, la afirmación de la Sala de mérito sobre que
con el emplazamiento de la demanda de mejor derecho de
propiedad y otros se habría interrumpido la de prescripción
adquisitiva de dominio no es cierta. DÉCIMO SEXTO: En cuanto al
argumento de que la demanda de reivindicación y otros de la
Empresa emplazada haya sido interpuesta con anterioridad a la
demanda de prescripción adquisitiva de dominio, y que por ello no
cumple la demandante con el requisito de pacificidad, como ya se
ha desarrollado ampliamente, la demandante adquirió su derecho
de propiedad sobre el bien sub litis de pleno derecho. Más aún,
este Tribunal Supremo corrobora en sede casatoria que la
demandante recién tomó conocimiento del proceso de mejor
derecho de propiedad y otros, el veinte de marzo de dos mil ocho,
conforme a lo precisado en el escrito de apelación de sentencia de
fojas doscientos ochenta y ocho, lo cual no ha sido negado o
refutado por la empresa emplazada, conforme se aprecia del
escrito de absolución de traslado de apelación de fojas trescientos;
mientras que la demanda de prescripción adquisitiva de dominio
fue interpuesta con anterioridad, esto es, el dieciocho de marzo de
dos mil ocho; razones por todas las cuales este Tribunal ha
verificado que efectivamente se ha incurrido en infracción normativa
del artículo 950 del Código Civil; por lo tanto, estando a las
facultades de esta Corte deviene en fundado el recurso de su
propósito, en consecuencia, deberá casarse la sentencia de vista;
y actuando en sede de instancia revocarse la sentencia apelada,
que declaró infundada la demanda; y, reformándola declararla
fundada, conforme a lo prescrito en el artículo 396 del Código
Procesal Civil. 4.- DECISIÓN: Por estas consideraciones
declararon FUNDADO el recurso de casación obrante a fojas
cuatrocientos cinco, interpuesto por doña Silvia Corina Cáceres
Castañeda; en consecuencia, CASARON la sentencia de vista de
fojas trescientos veinticinco, de fecha catorce de setiembre de dos
mil diez; y actuando en sede de instancia: REVOCARON la
sentencia apelada, de fecha siete de mayo de dos mil diez, obrante
a fojas doscientos setenta y dos que declaró infundada la demanda;
y, REFORMÁNDOLA la declararon: FUNDADA; en los seguidos
por Silvia Corina Cáceres Castañeda contra Inversiones e
Importaciones de La Nueva Piel Sociedad Anónima Cerrada; sobre
Prescripción Adquisitiva; y ORDENARON la publicación de la
presente resolución en el Diario Oficial “El Peruano” conforme a
ley; y los devolvieron; Vocal Ponente: Vinatea Medina. S.S. SIVINA
HURTADO, ACEVEDO MENA, VINATEA MEDINA, RUEDA
FERNÁNDEZ, AYALA FLORES
1
2
3
Casación N° 1730- 2011/CUSCO, expedida el 24 de junio de 2013, por la Sala de
Derecho Constitucional y Social Permanente de la Corte Suprema de Justicia de la
República.
Segundo Pleno Casatorio Civil de la Corte Suprema de Justicia de la República.
Casación Nº 2229-2008-Lambayeque, expedida a los veintitrés días del mes de
octubre de dos mil ocho.
Idem.
C-1335410-15
CAS. Nº 6253 - 2012 MOQUEGUA
Lima, siete de diciembre de dos mil doce. LA SALA DE DERECHO
CONSTITUCIONAL Y SOCIAL PERMANENTE DE LA CORTE
SUPREMA DE JUSTICIA DE LA REPÚBLICA: VISTA: Con los
acompañados; la causa número seis mil doscientos cincuenta y
tres – dos mil doce; en la fecha en Audiencia Pública con los
señores Vocales Supremos Acevedo Mena Presidente, Chumpitaz
Rivera, Mac Rae Thays, Torres Vega y Morales González; y,
producida la votación con arreglo a ley, emite la siguiente
sentencia: 1. MATERIA DEL RECURSO: Se trata del recurso de
casación interpuesto por la Apoderada de la Entidad Prestadora
de Servicios de Saneamiento Ilo Sociedad Anónima – EPS ILO
S.A., mediante escrito de fojas trescientos treinta y ocho, contra la
sentencia de vista de fojas trescientos veintiséis, de fecha
veintiocho de junio de dos mil doce, expedida por la Sala Mixta
Descentralizada de Ilo de la Corte Superior de Justicia de
Moquegua, que confirma la sentencia apelada corriente a fojas
doscientos sesenta y uno, de fecha diez de abril de dos mil doce
que declara fundada la demanda sobre incumplimiento de normas
laborales. 2. FUNDAMENTOS DEL RECURSO: La demandada
invocando los artículos 54 y siguientes de la Ley Procesal del
Trabajo N° 26636 modificada por Ley N° 27021, denuncia como
agravios: a) Infracción normativa del artículo 139 incisos 3) y
5) de la Constitución Política del Estado; sostiene la recurrente
que existe contravención de las normas que garantizan el derecho
al debido proceso porque en el desarrollo del proceso no se han
respetado los derechos procesales de las partes, se ha obviado o
alterado actos de procedimiento, la tutela jurisdiccional no ha sido
efectiva y/o el órgano jurisdiccional dejó de motivar sus decisiones
haciéndolo en forma incoherente, en clara trasgresión de la
normatividad vigente y de los principios procesales. Por tanto el
recurso de casación merece ser declarado procedente y fundado,
en consecuencia nula la sentencia de vista. b) Interpretación
errónea del inciso 2) artículo 28 de la Constitución Política
del Estado y artículo 28 del Reglamento de la Ley de
Relaciones Colectivas de Trabajo aprobado por Decreto
Supremo N° 011-92-TR; señala que la sentencia de vista ha
realizado una interpretación errónea de estas normas, en el
El Peruano
Lunes 1 de febrero de 2016
sentido que entre el Laudo Arbitral y la vigencia de los contratos
posteriores a dicha fecha exista equivalencia en la temporalidad
que permita concluir que el alcance establecido en el Laudo
Arbitral coincida con la vigencia del contrato de naturaleza laboral.
c) Inaplicación de los incisos c) y d) del artículo 43 del
Decreto Ley N° 25593, Ley de Relaciones Colectivas de
Trabajo; alega que resulta lesivo de los derechos de la emplazada
exigir que se incremente las remuneraciones de los trabajadores
con contrato posterior a la vigencia del Laudo Arbitral 2002-2003,
regulado en el Laudo Arbitral del Pliego de Reclamos 2002-2003,
apelando sólo a la fuerza vinculante de toda convención, por tanto
debe respetarse la cláusula demilitadora que establece la vigencia
del Laudo Arbitral 2002-2003. 3. CONSIDERANDO: PRIMERO.El recurso de casación interpuesto por la recurrente reúne los
requisitos de forma exigidos por el artículo 57 de la Ley Procesal
del Trabajo N° 26636, modificado por el artículo 1 de la Ley N°
27021, por lo que corresponde evaluar si las denuncias referidas
cumplen con las exigencias de procedencia establecidas en el
artículo 58 de la Ley Procesal del Trabajo N° 26636, modificado
por el artículo 1 de la Ley N° 27021. SEGUNDO.- El artículo 58 de
la Ley Procesal del Trabajo N° 26636, modificado por el artículo 1
de la Ley N° 27021, prescribe que el recurso de casación deberá
estar fundamentado con claridad, señalando con precisión las
causales descritas en el artículo 56 de la Ley Procesal del Trabajo
N° 26636, modificado por el artículo 1 de la Ley N° 27021 en que
se sustenta, esto es: a) La aplicación indebida de una norma de
derecho material; b) La interpretación errónea de una norma de
derecho material; c) La inaplicación de una norma de derecho
material; y, d) La contradicción con otras resoluciones expedidas
por la Corte Suprema de Justicia o las Cortes Superiores,
pronunciadas en casos objetivamente similares, siempre que
dicha contradicción esté referida a una de las causales anteriores;
y, según el caso: i) Qué norma ha sido indebidamente aplicada y
cuál es la que debió aplicarse; ii) Cuál es la correcta interpretación
de la norma; iii) Cuál es la norma inaplicada y porqué debió
aplicarse; y, iv) Cuál es la similitud existente entre los
pronunciamientos invocados y en qué consiste la contradicción.
TERCERO.- Que, independientemente de las causales invocadas
por la recurrente, en reiteradas oportunidades esta Suprema Sala
ha establecido que para que se ejercite adecuadamente la
finalidad esencial del recurso de casación de la correcta aplicación
e interpretación de las normas materiales del Derecho Laboral,
Previsional y de Seguridad Social conforme lo establece el
artículo 54 de la Ley Procesal del Trabajo N° 26636, modificado
por el artículo 1 de la Ley N° 27021, es indispensable que las
causas sometidas a su jurisdicción respeten ciertas reglas
mínimas y esenciales del debido proceso que le permitan
examinar valida y eficazmente las normas materiales denunciadas.
CUARTO.- Por otro lado, la causal de contravención a las normas
que garantizan el derecho a un debido proceso, cabe precisar que
no se encuentra prevista en el artículo 56 de la Ley Procesal del
Trabajo N° 26636, modificado por el artículo 1 de la Ley Nº 27021;
sin embargo, la Corte Suprema de manera excepcional aplica
dicha propuesta casatoria, en los casos en que se advierta
flagrante afectación al derecho fundamental del debido proceso,
como garantía constitucional de los justiciables y a efectos de
cumplirse con los fines del recurso de casación; por lo que,
habiendo la demandada denunciado la vulneración de normas
que garantizan el derecho a un debido proceso y advirtiendo este
Supremo Tribunal una probable afectación a tal derecho, en
forma excepcional se declara procedente la causal procesal
referida, por lo tanto, de primer intención, debe examinarse la
causal in procedendo, pues, de declararse fundado el recurso por
dicha motivación, resultaría innecesario examinar las otras
causales invocadas. QUINTO.- Que, uno de los contenidos
esenciales del derecho al debido proceso es el derecho de
obtener de los órganos judiciales una respuesta razonada,
motivada y congruente con las pretensiones oportunamente
deducidas por las partes en cualquier clase de procesos. La
exigencia de que las decisiones judiciales sean motivadas en
proporción a los términos del inciso 5) del artículo 139 de la
Constitución Política del Estado garantiza que los Jueces
cualquiera sea la instancia a la que pertenezcan expresen el
proceso lógico que los ha llevado a decidir la controversia,
asegurando que el ejercicio de la potestad de Administrar Justicia
se haga con sujeción a la Constitución y a la Ley, pero también
con la finalidad de facilitar un adecuado ejercicio del derecho de
defensa. SEXTO.- Que, asimismo el derecho a un debido proceso
y la tutela jurisdiccional efectiva encuentran desarrollo a nivel
ordinario en el artículo Primero del Título Preliminar y artículo 122
del Código Procesal Civil que garantizan al justiciable, ante su
pedido de tutela, el deber del órgano jurisdiccional de observar el
debido proceso y de impartir justicia dentro de los estándares
mínimos que su naturaleza impone; así mientras que la tutela
judicial efectiva supone tanto el derecho de acceso a los órganos
de justicia como la eficacia de lo decidido en la sentencia es decir
una concepción genérica que encierra todo lo concerniente al
derecho de acción frente al poder – deber de la jurisdicción, el
derecho al debido proceso en cambio significa la observancia de
los principios y reglas esenciales exigibles dentro del proceso
como es el caso del principio de motivación de las resoluciones
judiciales. SÉPTIMO.- Que, en ese sentido, habrá motivación de
las resoluciones judiciales siempre que exista: 1) Fundamentación
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Lunes 1 de febrero de 2016
CASACIÓN
jurídica, que no implica la sola mención de las normas aplicar al
caso, sino, la explicación y justificación de que qué tal caso se
encuentra o no dentro de los supuestos que contemplan tales
normas; 2) Congruencia entre lo pedido y lo resuelto, que implica
la manifestación de argumentos que expresarán la conformidad
entre los pronunciamientos del fallo y las pretensiones formuladas
por las partes; y, 3) Por sí misma la resolución judicial exprese
una suficiente justificación de la decisión adoptada, aún si ésta es
breve o concisa, o dicho en otras palabras, que las razones que
respaldan una determinada resolución judicial puedan
desprenderse de su simple lectura y no de suposiciones o
interpretaciones forzadas por parte de los destinatarios de ellas,
tal es así que el inciso 3) del artículo 122 del Código Procesal
Civil, establece: “Las resoluciones contienen: La mención
sucesiva de los puntos sobre los que versa la resolución con las
consideraciones, en orden numérico correlativo, de los
fundamentos de hecho que sustentan la decisión, y los respectivos
de derecho con la cita de la norma o normas aplicables en cada
punto, según el mérito de lo actuado”. OCTAVO.- Que, se aprecia
del escrito de fojas veintidós que el actor don Florencio Maximo
Ramirez Carbajal, interpone demanda de incumplimiento de
normas laborales, solicita se reconozca su remuneración, se le
registre en libro de planillas y boletas de pago, se le pague el
reintegro de remuneraciones del cuatro de febrero de dos mil
cuatro al treinta y uno de mayo de dos mil nueve, pago de
remuneraciones devengadas de junio dos mil nueve a enero dos
mil diez, pago de gratificaciones de julio y diciembre de febrero
dos mil cuatro a diciembre dos mil nueve, pago directo o deposito
de Compensación por Tiempo de Servicios en un banco, pago de
remuneración vacacional e indemnización vacacional, con sus
respectivos intereses, costas y costos del proceso. Que mediante
sentencia de amparo de fecha quince de setiembre de dos mil
nueve, se ordenó su reposición a su centro de labores, debido al
despido que cual fue objeto, el cual transgredió su derecho al
trabajo. NOVENO.- En atención a ello, las instancias de mérito
han declarado fundada la demanda y ordenado el pago de
remuneraciones devengadas y beneficios sociales a favor del
actor, señalando entre otros considerandos, que la norma señala
expresamente que el laudo arbitral obliga inclusive a los
trabajadores que se incorporen con posterioridad a su celebración,
no siendo posible establecer exclusiones o limitaciones contrarias
al texto expreso de la ley. Y respecto al pago de remuneraciones
devengadas, señalan que existen resoluciones casatorias que
coinciden en el hecho de que al trabajador despedido y repuesto
vía amparo, le corresponde el pago de remuneraciones
devengadas así como de los beneficios sociales dejados de
percibir como consecuencia del despido, quedando claro que en
caso un trabajador despedido sea repuesto vía amparo, también
le alcanza el derecho al cobro de remuneraciones devengadas y
beneficios sociales, al equipararse a un despido nulo. DÉCIMO.Respecto al pago de remuneraciones devengadas, el Tribunal
Constitucional1 es del criterio que no existe derecho a
remuneraciones por el período no laborado, lo cual, obviamente,
no implica negar que efectivamente pueda existir clara
verosimilitud sobre la existencia de daños al impedirse el ejercicio
de los derechos del trabajador, los mismos que deben ser
evaluados e indemnizados, según los hechos de cada caso
concreto y ante el Juez y vía procedimental predeterminados por
ley. UNDÉCIMO.- Más aún el artículo 6 del Decreto Supremo N°
003-97-TR, prevé que la remuneración es definida como el
resultado de una contraprestación entre el servicio prestado y el
pago de este servicio, siendo las únicas excepciones en las
cuales se abona dicha contraprestación sin que exista labor
efectiva, aquellas previstas legalmente, siendo esto así, no
corresponde el pago de remuneraciones devengadas a
trabajadores que obtienen la invalidez del despido en vía de
amparo, en tanto que el ordenamiento jurídico solo ha previsto los
efectos colaterales de la tutela restitutoria derivada del despido
nulo vía proceso ordinario laboral, por lo que esta norma debe,
además, ser interpretada en concordancia con el carácter
sinalagmático del contrato de trabajo, que determina que se
genera la obligación del empleador de abonar la remuneración,
cuando el trabajador labora en forma efectiva, salvo las
excepciones establecidas por ley. DUODÉCIMO.- Asimismo, la
sentencia de la Corte Interamericana de Derechos Humanos de
fecha treinta y uno de enero del dos mil uno, en el caso de
reposición de los Magistrados del Tribunal Constitucional Peruano
estableció que el Estado Peruano debía indemnizar a los
Magistrados repuestos en sus labores, tomando como uno de los
criterios para el efectivo resarcimiento los salarios y prestaciones
dejados de percibir, sin perjuicio de todos los daños que se
acrediten debidamente y que tuvieran conexión con el hecho
dañoso constituido por la ilegal declaración de excedencia, por lo
tanto no existe sustento legal, constitucional ni supra nacional
que interprete dicha norma como una exigencia para el pago de
remuneraciones por periodo no laborado. DÉCIMO TERCERO.En este contexto, y atendiendo a la motivación esgrimida por los
Jueces de mérito, este Tribunal Supremo ha constatado un exiguo
análisis respecto a la procedencia o no del pago de
remuneraciones devengadas y beneficios sociales en caso del
trabajador despedido y repuesto vía amparo, interpretación que
debe estar acorde con el carácter sinalagmático del contrato de
trabajo, que establece la obligación del empleador de abonar la
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remuneración cuando el trabajador labora en forma efectiva,
salvo las excepciones establecidas por ley, debiendo determinarse
si el caso del demandante se encuentra en una de ellas. DÉCIMO
CUARTO.- En consecuencia, debe declararse fundada la causal
por contravención a las normas que garantizan el derecho
fundamental a un debido proceso o proceso justo, en su
manifestación de motivación de las resoluciones judiciales, al
advertir esta Sala Suprema que las sentencias de mérito han
incurrido en una motivación deficiente; por lo que, a fin de
garantizar los derechos contenidos en el artículo 139 incisos 3) y
5) de la Constitución Política del Perú, debe emitirse un nuevo
pronunciamiento de fondo a cargo de los Jueces de mérito,
garantizando que esa decisión sea consecuencia de una
deducción razonada de los hechos del caso, las pruebas
aportadas y su valoración jurídica, exigencias que como se
desprende de los defectos relevados adolece la recurrida; por
consiguiente, en ejercicio de la facultad nulificante del juzgador
prevista en el artículo 176 del Código Procesal Civil, entendida
como aquella facultad de declarar la nulidad aún cuando no haya
sido solicitada, por considerar que el acto viciado altera
sustancialmente los fines abstracto y concreto del proceso
laboral, este Colegiado Supremo luego de verificar que al emitir la
sentencia de mérito se ha incurrido en causal de nulidad absoluta,
resulta inválida e ineficaz la sentencia de vista, correspondiendo
al Ad quem renovar este acto procesal; por lo que carece de
objeto emitir pronunciamiento respecto a las causales in iudicando
invocadas por la recurrente. 4. DECISIÓN: Por estos fundamentos:
A) Declararon: FUNDADO el recurso de casación interpuesto por
la Apoderada de la Entidad Prestadora de Servicios de
Saneamiento Ilo Sociedad Anónima – EPS ILO S.A. a fojas
trescientos treinta y ocho; en consecuencia, NULA la sentencia
de vista obrante a fojas trescientos veintiséis, de fecha veintiocho
de junio de dos mil doce, expedida por la Sala Mixta
Descentralizada de Ilo de la Corte Superior de Justicia de
Moquegua. B) ORDENARON que el Ad quem emita nueva
sentencia, teniendo en cuenta las directivas de la presente
resolución; en los seguidos por don Florencio Máximo Ramírez
Carbajal contra la Entidad Prestadora de Servicios de
Saneamiento Ilo Sociedad Anónima – EPS ILO S.A., sobre
Incumplimiento de normas laborales. C) MANDARON la
publicación de la presente resolución en el Diario Oficial “El
Peruano” conforme a ley; y, los devolvieron.- Vocal Ponente:
Torres Vega. S.S. ACEVEDO MENA, CHUMPITAZ RIVERA, MAC
RAE THAYS, TORRES VEGA, MORALES GONZALEZ
1
STC Nº 1112-98-AA/TC y STC Nº 901-2002-AA/TC
C-1335410-16
CAS. Nº 6715 - 2012 CAJAMARCA
Lima, siete de diciembre de dos mil doce. LA SALA DE DERECHO
CONSTITUCIONAL Y SOCIAL PERMANENTE DE LA CORTE
SUPREMA DE JUSTICIA DE LA REPÚBLICA: VISTA: la causa
número seis mil setecientos quince – dos mil doce; en Audiencia
Pública llevada a cabo en el día de la fecha; con los Señores
Jueces Supremos Acevedo Mena - Presidente, Chumpitaz Rivera,
Mac Rae Thays, Torres Vega y Morales González; y luego de
producida la votación conforme a ley, se ha emitido la siguiente
sentencia: I) MATERIA DEL RECURSO: Se trata del recurso de
casación obrante a fojas ciento noventa y siete, interpuesto por
doña María Elena Silva Ramírez, contra la sentencia de vista de
fojas ciento ochenta y cinco, de fecha veintiocho de mayo del dos
mil doce que confirma la sentencia apelada de fecha veintiséis de
mayo del dos mil once, obrante a fojas ciento treinta que declaró
fundada en parte la demanda. II) CAUSALES DEL RECURSO DE
CASACIÓN: La recurrente ha denunciado como causales
casatorias las siguientes: 1) La inaplicación de los artículos 4 y
77 inciso d) de la Ley de Productividad y Competitividad
Laboral - Decreto Legislativo N° 728 y 37 de la Ley Orgánica
de Municipalidades; y 2) la contravención de las normas que
garantizan el derecho a un debido proceso. III)
CONSIDERANDO: PRIMERO: El recurso de casación interpuesto
por la recurrente reúne los requisitos de forma exigidos por el
artículo 57 de la Ley Procesal de Trabajo N° 26636, modificado
por el artículo 1 de la Ley N° 27021, por lo que corresponde
evaluar si las denuncias referidas cumplen con las exigencias de
procedencia establecidas en el modificado artículo 58 del
precitado texto legal. SEGUNDO: Al respecto, el artículo 58 de la
Ley Procesal de Trabajo N° 26636, modificado por el artículo 1 de
la Ley N° 27021, prescribe que el recurso de casación deberá
estar fundamentado con claridad, señalando con precisión las
causales descritas en el artículo 56 de la Ley Procesal de Trabajo
N° 26636, modificado por el artículo 1 de la Ley N° 27021 en que
se sustenta, esto es: a) La aplicación indebida de una norma de
derecho material; b) La interpretación errónea de una norma de
derecho material; c) La inaplicación de una norma de derecho
material; y, d) La contradicción con otras resoluciones expedidas
por la Corte Suprema de Justicia o las Cortes Superiores,
pronunciadas en casos objetivamente similares, siempre que
dicha contradicción esté referida a una de las causales anteriores;
y, según el caso: i) Qué norma ha sido indebidamente aplicada y
cuál es la que debió aplicarse; ii) Cuál es la correcta interpretación
de la norma; iii) Cuál es la norma inaplicada y porqué debió
aplicarse; y, iv) Cuál es la similitud existente entre los
74042
CASACIÓN
pronunciamientos invocados y en qué consiste la contradicción.
TERCERO: Las causales de casación propuestas reúnen los
requisitos de fondo contenidas en el artículo 58 de la Ley Procesal
de Trabajo N° 26636, modificado por el artículo 1 de la Ley N°
27021, por lo que devienen en procedentes. CUARTO: Respecto
a la causal de contravención al debido proceso, cabe precisar que
no se encuentra prevista en el artículo 56 de la Ley Procesal de
Trabajo N° 26636, modificado por el artículo 1 de la Ley Nº 27021;
sin embargo, la Corte Suprema de manera excepcional aplica
dicha propuesta casatoria, en los casos en que se advierta
flagrante afectación al debido proceso, como garantía
constitucional de los justiciables y a efectos de cumplir con los
fines del recurso de casación, por lo que siendo altamente
probable la vulneración de los derechos fundamentales a un
debido proceso y a una tutela jurisdiccional efectiva, así como al
derecho procesal constitucional a la motivación de las
resoluciones jurisdiccionales, el recurso de casación deviene en
procedente por la causal bajo referencia. QUINTO: Dados los
efectos nulificantes de la causal de contravención de las normas
que garantizan el derecho al debido proceso, en caso de
configurarse, corresponde empezar el análisis de fondo del
recurso, a partir de dicha causal; y de ser el caso, de no declararse
fundada, analizar la causal material igualmente declarada
procedente. SEXTO: En primer término, este Supremo Tribunal
conviene en señalar que en todas las causas laborales, los
esfuerzos de los Jueces deben reconducirse a la reivindicación
de los derechos fundamentales reclamados en la demanda,
teniendo en cuenta el contenido esencial de la fundamentación
fáctica y jurídica en ella desarrollada, a fin de identificar lo
pretendido, y el grado de afectación de los derechos invocados, lo
contrario desnaturalizaría al proceso laboral protector de los
derechos constitucionales y fundamentales de las partes. Por lo
tanto, este Tribunal Supremo invoca a los Jueces a cargo de los
procesos laborales que su actuación se despliegue conforme a
las normas de derecho constitucional y convencional que exigen
la aplicación de primer orden de la Constitución Política del
Estado y de los Convenios celebrados, garantizando la vigencia
efectiva de los derechos humanos, y asegurando con ello la
justicia preexistente al derecho positivizado, lo que a su vez dará
legitimidad a su actuación, cuya preocupación principal, se
insiste, será el aseguramiento de la plena vigencia de los
derechos de la persona humana. SÉPTIMO: En cuanto al derecho
fundamental a un debido proceso, cabe precisar que no sólo es
un principio de quienes ejercen la función jurisdiccional, y que
está contemplado como tal en el inciso 3) del artículo 139 de la
Constitución Política del Estado, sino que también es concebido
como aquel derecho fundamental que posee toda persona
peruana o extranjera, natural o jurídica- y que, en tal medida, es
exigible por éstas (dimensión subjetiva); a su vez, es un derecho
que debe ser respetado por todos, debido a que lleva implícito los
fines sociales y colectivos de justicia (dimensión objetiva)1.
OCTAVO: Sobre la motivación de las sentencias, el Tribunal
Constitucional2 ha establecido: “debe tenerse presente que en
todo Estado constitucional y democrático de derecho, la
motivación debida de las decisiones de las entidades públicas
-sean o no de carácter jurisdiccional- es un derecho fundamental
que forma parte del contenido esencial del derecho a la tutela
procesal efectiva. El derecho a la motivación debida constituye
una garantía fundamental en los supuestos en que con la decisión
emitida se afecta de manera negativa la esfera o situación jurídica
de las personas. Así, toda decisión que carezca de una motivación
adecuada, suficiente y congruente constituirá una decisión
arbitraria y, en consecuencia, será inconstitucional”. NOVENO:
Esta Sala Suprema aprecia de la demanda, obrante a fojas uno,
que la actora pretende que se declare la existencia de un contrato
laboral desde el uno de febrero del dos mil ocho y accesoriamente
se ordene su incorporación al régimen de contratación a plazo
indeterminado como obrera sujeta al régimen laboral de la
actividad privada del área de mantenimiento y conservación de
cuencas – vivero forestal de la demandada desde el uno de
febrero del dos mil ocho con los derechos y beneficios inherentes
a dicho régimen. Se declare su derecho a percibir los beneficios
laborales devengados desde el primer día de labores, es decir
desde el uno de febrero del dos mil ocho; el depósito de su
Compensación por Tiempo de Servicios, el pago de gratificaciones
y vacaciones, así como la indemnización por retención indebida
de la Compensación por Tiempo de Servicios, y se realicen los
aportes en los porcentajes de ley, al Sistema Nacional de
Pensiones y al Seguro Social de Salud para que pueda gozar de
las prestaciones de salud y pensiones. DÉCIMO: En sede de
instancia los Jueces de mérito han declarado fundada en parte la
demanda, determinando que de autos se advierte que entre la
actora y la demandada han existido dos periodos contractuales
diferentes; el primer período comprende desde el uno de febrero
del dos mil ocho hasta el treinta de junio del dos mil ocho, período
que se ha realizado bajo contratos de locación de servicios; no
obstante ello, se señala que tal como se acreditó en el proceso de
amparo con la expedición de la sentencia del veintiuno de agosto
del dos mil ocho y su confirmatoria de fojas cuarenta y ocho, y en
aplicación del Principio de Primacía de la Realidad se determinó
que en realidad no se trataban de contratos de naturaleza civil,
sino laboral. Y en cuanto al segundo período señalan que se ha
efectuado mediante la celebración de Contrato Administrativo de
El Peruano
Lunes 1 de febrero de 2016
Servicios - CAS, respecto de los cuales el Tribunal Constitucional
por sentencia expedida en el Expediente N° 00002-2010-PI/TC
del treinta y uno de agosto del dos mil diez ha declarado
constitucional el Decreto Legislativo N° 1057 por tratarse de un
régimen laboral especial; por lo tanto, siendo que los fallos o
decisiones que el Tribunal Constitucional emite en los procesos
de inconstitucionalidad de cumplimiento obligatorio, el segundo
período no corresponde ser adicionado al primero, por tratarse de
períodos independientes, máxime si al haber suscrito el actor un
contrato CAS su primera situación habría quedado consentida y
novada con la sola suscripción del citado contrato CAS.
UNDÉCIMO: El razonamiento que precede deja advertir por parte
de este Supremo Colegiado una motivación aparente en las
sentencias de primera y segunda instancia, constituyendo fallos
arbitrarios y con plena inobservancia de lo dispuesto no sólo en el
inciso 3) del artículo 139 de la Constitución Política del Estado,
sino también de su inciso 5), que reconoce a todo justiciable el
derecho de obtener de los órganos jurisdiccionales una respuesta
razonada, motivada y congruente respecto de las pretensiones en
debate, por cuanto los Jueces en la instancia no se han
pronunciado sobre la desnaturalización de los contratos CAS
alegada y desarrollada por la actora en el escrito de demanda y
en el transcurso del presente proceso, por el contrario, pese a que
uno de los puntos centrales del debate es si ha existido
“desnaturalización de la contratación” a la que estuvo sujeta la
demandante, los Jueces de mérito han obviado pronunciarse
sobre el período en que se le contrató bajo la modalidad del
contrato administrativo de servicios, sustentándose en las
Sentencias del Tribunal Constitucional, específicamente las que
fueran expedidas en los Expedientes N° 00002-2010-PI/TC y N°
03818-2009-PS/TC; sin embargo, cabe advertir que lo resuelto en
dichas causas, no releva en modo alguno a los Jueces laborales,
de pronunciarse en cada caso en concreto sobre la procedencia
de la desnaturalización de un contrato administrativo de servicios,
pues éstos contienen sus propias peculiaridades que no siempre
son acogidas y abordadas en las sentencias constitucionales
como a las que se ha hecho mención; máxime si de la
fundamentación jurídica esgrimida en la demanda se alega la
vulneración constitucional del derecho al trabajo; y, además,
porque esta exigencia en la motivación de las sentencias de
mérito, en casos como el presente, no resulta inoficiosa en tanto
se discuten dos valores constitucionales, cuales son, el derecho
al trabajo (en su manifestación de estabilidad laboral y vocación
de continuidad de la relación laboral) y por el otro, la observancia
a las normas públicas – seguridad jurídica (que tienen por
finalidad el reordenamiento del aparato estatal en el área de
recursos humanos). En consecuencia, corresponde declarar
fundado el recurso casatorio planteado por la causal de
contravención de las normas que garantizan el derecho a un
debido proceso; casar la sentencia de vista, declarando
insubsistente la sentencia apelada, a fin de que el A quo expida
nueva sentencia; careciendo de objeto emitir pronunciamiento por
las otras causales declaradas procedentes. IV) DECISIÓN: Por
estas consideraciones: Declararon FUNDADO el recurso de
casación obrante a fojas ciento noventa y siete, interpuesto por
doña María Elena Silva Ramírez; en consecuencia: NULA la
sentencia de vista de fojas ciento ochenta y cinco, de fecha
veintiocho de mayo del dos mil doce; e INSUBSISTENTE la
sentencia apelada, de fecha veintiséis de mayo del dos mil once,
obrante a fojas ciento treinta que declaró fundada en parte la
demanda; y DISPUSIERON que el Juez de primera instancia
EXPIDA NUEVO PRONUNCIAMIENTO, conforme a los
lineamientos expresados en los considerandos de la presente
resolución; en los seguidos por doña María Elena Silva Ramírez
contra la Municipalidad Distrital de Los Baños del Inca, sobre
Reconocimiento de contrato de trabajo; y ORDENARON la
publicación de la presente resolución en el diario oficial “El
Peruano” conforme a ley.- Vocal Ponente: Chumpitaz Rivera. S.S.
ACEVEDO MENA, CHUMPITAZ RIVERA, TORRES VEGA,
MORALES GONZÁLEZ. EL VOTO EN MINORÍA DE LA SEÑORA
JUEZ SUPREMO MAC RAE THAYS, ES COMO SIGUE: VISTOS:
y CONSIDERANDO: PRIMERO.- Se trata del recurso de casación
interpuesto por doña María Elena Silva Ramírez, mediante escrito
de folios ciento noventa y siete, contra la sentencia de vista de
fecha veintiocho de mayo de dos mil doce, obrante a folios ciento
ochenta y cinco que confirma la sentencia apelada de fecha
veintiséis de mayo de dos mil once, corriente a folios ciento treinta
que declara fundada en parte la demanda sobre declaración de
existencia de contrato de trabajo y otros. SEGUNDO.- El artículo
58 de la Ley Procesal del Trabajo N° 26636, modificado por el
artículo 1 de la Ley N° 27021 prescribe que el recurso de casación
deberá estar fundamentado con claridad, señalando con precisión
las causales descritas en el artículo 56 de la Ley Procesal del
Trabajo N° 26636, modificado por el artículo 1 de la Ley N° 27021
en que se sustenta, esto es: a) la aplicación indebida de una
norma de derecho material; b) la interpretación errónea de una
norma de derecho material; c) la inaplicación de una norma de
derecho material; y d) la contradicción con otras resoluciones
expedidas por la Corte Suprema de Justicia o las Cortes
Superiores, pronunciadas en casos objetivamente similares,
siempre que dicha contradicción este referida a una de las
causales anteriores; y según el caso: i) que norma ha sido
indebidamente aplicada y cuál es la que debió aplicarse; ii) cuál
El Peruano
Lunes 1 de febrero de 2016
CASACIÓN
es la correcta interpretación de la norma; iii) cuál es la norma
inaplicada y porqué debió aplicarse; y iv) cuál es la similitud
existente entre los pronunciamientos invocados y en qué consiste
la contradicción. TERCERO.- La parte recurrente denuncia como
causales casatorias: i) La inaplicación de los artículos 4 y 77
inciso d) de la Ley de Productividad y Competitividad Laboral
- Decreto Legislativo N° 728 y el artículo 37 de la Ley Orgánica
de Municipalidades; sostiene que, la sentencia de primera
instancia ha aplicado de manera incorrecta la normatividad de la
contratación bajo el régimen especial del Decreto Legislativo N°
1057, Contrato Administrativo de Servicios – CAS, siendo que la
Sala Superior incurre en el mismo error cuando al confirmar la
sentencia recurrida, implica que ha aplicado dicha normatividad
legal, cuando lo correcto es que la Sala Especializada Civil debió
aplicar el contenido del artículo 4 y 77 inciso d) del Decreto
Legislativo N° 728, concordante con el artículo 37 de la Ley
Orgánica de Municipalidades. ii) La contravención de las
normas que garantizan el derecho a un debido proceso,
sostiene que existe contravención a las normas que garantizan el
derecho a un debido proceso, por parte del Colegiado Superior.
CUARTO.- Con respecto al acápite i) se advierte que la
demanda3, de fojas uno, tiene por objeto que: i) Se ordene su
incorporación al régimen de contratación a plazo indeterminado,
como obrero sujeto al régimen laboral de la actividad privada del
Área de Mantenimiento y Conservación de Cuencas – Vivero
Forestal de la demandada desde el uno de febrero de dos mil
ocho; y como consecuencia de ello se declare su derecho a
percibir los Beneficios Sociales desde el primer día de labores.
QUINTO.- Que, tal como ha establecido en la sentencia de
primera instancia de fecha veintiséis de mayo de dos mil once,
corriente a folios ciento treinta, el A quo, manifiesta “se advierte
que entre la actora y la entidad edil emplazada han existido dos
períodos contractuales diferentes; el primer período comprende
desde el uno de febrero del dos mil ocho hasta el treinta de junio
de dos mil ocho, se ha realizado bajo contratos de locación de
servicios, (…) “en relación al segundo período, efectuado
mediante contrato administrativo de servicios CAS4. SEXTO.- Es
importante precisar que en las Sentencias del Tribunal
Constitucional N° 00002-2010-PI/TC(1) y N° 03818-2009-PA/TC,
se han establecido que el régimen de protección sustantivoreparador contra el despido arbitrario previsto en el régimen
laboral especial del contrato administrativo de servicios guarda
conformidad con el artículo 27(2) de la Constitución Política del
Estado. SÉPTIMO.- Consecuentemente, no corresponde analizar
si con anterioridad a la celebración del contrato administrativo de
servicios, los contratos civiles que suscribió el demandante fueron
desnaturalizados, pues en el caso de que ello hubiese ocurrido,
dicha situación de fraude constituiría un período independiente
del inicio del contrato administrativo de servicios, que es
constitucional, conforme lo ha reiterado el Tribunal Constitucional
en la Sentencias del Tribunal Constitucional N° 05185-2011-PA/
TC, N° 04039-2011-PA/TC, N° 03633-2011-PA/TC, N° 007412012-PA/TC, N° 03044-2012-PA/TC, N° 02499-2012-PA/TC, N°
01362-2012-PA/TC, N° 00128-2012-PA/TC, N° 03561-2012-AA/
TC, N° 03060-2012-AA/TC, N° 00604-2012-PA/TC, N° 029262012-AA/TC, N° 02762-2012-PA/TC, N° 00727-2012-PA/TC y N°
03127-2012-PA/TC, entre otras(3). Por lo tanto al haber la instancia
de mérito declarado improcedente la pretensión del demandante
no ha incurrido en inaplicación de las normas denunciadas; razón
por la cual cabe desestimar el acápite i. OCTAVO.- Con respecto
al acápite ii, del análisis realizado se advierte que las mismas no
se encuentran previstas en el artículo 56 de la Ley Procesal de
Trabajo N° 26636, modificado por el artículo 1 de la Ley N° 27021;
sin embargo, la Corte Suprema de manera excepcional aplica
dicha propuesta casatoria, en los casos donde se advierta
inminente afectación al debido proceso, supuesto fáctico que no
se advierte en los actuados, pues el pronunciamiento de la
instancia de mérito fue inhibitoria; por lo tanto, estos extremos
denunciados deben ser desestimados. Por estas consideraciones
y en aplicación del artículo 58 de la Ley Procesal de Trabajo N°
26636, modificado por el artículo 1 de la Ley N° 27021, MI VOTO
es porque se declare IMPROCEDENTE el recurso de casación
interpuesto por doña María Elena Silva Ramírez, mediante escrito
de folios ciento noventa y siete, contra la sentencia de vista de
fecha veintiocho de mayo de dos mil doce, obrante a folios ciento
ochenta y cinco; en los seguidos por la recurrente contra la
Municipalidad Distrital de Baños del Inca, sobre Declaración de
Existencia de Contrato Laboral y otros; y DISPONIENDO publicar
la presente resolución en el Diario Oficial “El Peruano” conforme
a ley; y, se devuelva. S.S. MAC RAE THAYS
1
2
3
4
1
Comisión Andina de Juristas. Luis Alberto Huerta Guerrero con la colaboración de
Enrique Aguilar, “El debido proceso en las decisiones de la Corte Interamericana
de Derechos Humanos (análisis del artículo 8 de la Convención Americana sobre
Derechos Humanos), en www.cajpe.org.pe.
STC. N° 01807-2011-PA/TC, del veintisiete de junio de dos mil once, fundamento
10.
Ver página 01 de autos.
Fundamentos cuarto y quinto de la sentencia de primera instancia página 133 y 134
de autos.
El Tribunal Constitucional se había pronunciado respecto a la constitucionalidad
del citado Decreto Legislativo 1057. En tal sentido, y de conformidad con
2
3
74043
lo establecido en el segundo párrafo del Artículo VI del Título Preliminar del
Código Procesal Constitucional (Ley Nº 28237), los jueces no pueden dejar de
aplicar una norma cuya constitucionalidad haya sido confirmada en un proceso
de inconstitucionalidad. Ello quiere decir que ningún juez podrá aplicar lo que en
doctrina se denomina control difuso, inaplicando, al caso en concreto, el Decreto
Legislativo 1057.
Artículo 27.- Protección del trabajador frente al despido arbitrario.- La ley otorga al
trabajador adecuada protección contra el despido arbitrario.
Para el Tribunal Constitucional, la duración del contrato CAS no puede ser mayor
al año fiscal en el que se efectúa la contratación. De esa forma, si el trabajador
continúa laborando después de la fecha de vencimiento de su contrato CAS, este
hecho no implica que el contrato se convierta en uno de duración indeterminada,
sino que deberá prorrogarse en forma automática hasta el término del año fiscal. En
caso que la relación laboral se terminase sin causa, solo se genera el derecho para
el trabajador de percibir la indemnización prevista en el reglamento (equivalente
a las contraprestaciones dejadas de percibir hasta por un importe máximo
equivalente a dos meses). Asimismo, el hecho de que un trabajador continúe
laborando, después de la fecha de vencimiento del contrato CAS, constituye una
falta administrativa que puede dar lugar a un procedimiento disciplinario para
determinar las responsabilidades previstas en el artículo 7° del Decreto Legislativo
Nº 1057.
C-1335410-17
CAS. Nº 7029- 2012 JUNIN
Lima, veintinueve de abril de dos mil catorce. LA SALA DE
DERECHO CONSTITUCIONAL Y SOCIAL PERMANENTE DE LA
CORTE SUPREMA DE JUSTICIA DE LA REPUBLICA: VISTA la
causa, con lo expuesto en el dictamen de la Fiscalía Suprema en lo
Contencioso Administrativo, en audiencia pública llevada a cabo en
la fecha, integrada por los señores Jueces Supremos: Sivina
Hurtado, Acevedo Mena, Vinatea Medina, Rueda Fernández y
Malca Guaylupo verificada la votación con arreglo a ley se emite la
siguiente sentencia: I.- MATERIA DEL RECURSO: Se trata del
recurso de casación interpuesto por el Procurador Público a cargo
de los asuntos judiciales de la Municipalidad Provincial de
Huancayo de fecha veintiuno de junio de dos mil doce, obrante a
fojas cuatrocientos cincuenta y nueve, contra la sentencia de vista
de fecha veintinueve de diciembre de dos mil once, obrante a fojas
cuatrocientos cuarenta y cuatro que resuelve confirmar la sentencia
de fecha veinticinco de enero de dos mil once, obrante a fojas
trescientos cuarenta y cuatro, por medio de la cual se declaró
fundada en parte la demanda sobre acción contencioso
administrativo. II.- FUNDAMENTOS POR LOS CUALES SE HA
DECLARADO PROCEDENTE EL RECURSO: Mediante resolución
de fecha catorce de marzo de dos mil trece, obrante a fojas
cuarenta y siete del cuadernillo de casación formado en este
Supremo Tribunal, se declaró procedente el recurso presentado
por la causal de Infracción normativa de los artículos 12° literal
c) y 13° numeral 13.7 de la Ley del Procedimiento de Ejecución
Coactiva N° 26979, y 49° de la Ley Orgánica de Municipalidades,
alegando el impugnante que la sentencia de vista no ha interpretado
y por ende, no ha aplicado correctamente los artículos invocados,
concernientes a las facultades cautelares del Ejecutor Coactivo en
los supuestos de situación de emergencia por razones de seguridad
y salubridad pública al determinar indebidamente su obligatoria
concordancia con la regla prevista en el artículo 49 de la Ley
Orgánica de Municipalidades, la misma que prescribe que dichas
facultades cautelares necesariamente requieren de autorización
judicial. En ese sentido precisa que la Sala Superior ha confundido
y mezclado los ámbitos de aplicación correspondientes a la norma
general y a los supuestos de excepción de dicha norma general,
exigiendo erradamente que incluso en los acotados supuestos de
excepción (peligro de salud, higiene o seguridad pública) el
Ejecutor Coactivo pese a dichas situaciones de emergencia tenga
que contar con una autorización judicial previa para poder ejercer
sus prerrogativas cautelares. III.- CONSIDERANDO: PRIMERO:
Mediante escrito de fojas cinco, don Eliseo Bonifacio Porta, en
representación de la Asociación de Comerciantes del Mercado
Central Artesanal de Huancayo interpone demanda de acción
contencioso administrativo a efectos de que se declare la nulidad
de la Resolución número uno de fecha diecisiete de febrero de dos
mil nueve emitida por el Ejecutor Coactivo de la Municipalidad
Provincial de Huancayo y como consecuencia de ello, la nulidad de
la medida cautelar de demolición dictada previo al proceso de
ejecución coactiva signado en el Expediente N° 020-2009-EJCMCP respecto a las edificaciones del Coliseo Municipal y Mercado
Artesanal ubicado en la intersección del Pasaje Coliseo Municipal
al Norte; Jirón Piura al Sur; Jirón Ancash al Este y Plazoleta de la
Calle Real por el Oeste - Huancayo. Señala como sustento de su
demanda que el Ejecutor Coactivo de la Municipalidad demandada
resolvió trabar medida cautelar previa de demolición a fin de
destruir las edificaciones del Coliseo Municipal y del Mercado
Artesanal ubicado en la intersección del Pasaje Coliseo Municipal
(puestos comerciales) pese a que el artículo 49° de la Ley N°
27972 sólo faculta al Ejecutor Coactivo para ejercer las facultades
de demolición forzada sobre edificaciones que se encuentran en la
vía pública, lo cual no acontece en el presente caso; asimismo
indica, que la propia Municipalidad ha demandado el desalojo de la
Asociación de Comerciantes del Mercado Central Artesanal de
Huancayo en vía judicial, proceso que se encuentra en trámite ante
el Segundo Juzgado Civil de Huancayo bajo el Expediente N°
2008-3929-1501-JR-CI-02; en consecuencia, la intervención del
74044
CASACIÓN
Ejecutor Coactivo vulnera la independencia jurisdiccional, teniendo
en cuenta que no existe mandato judicial que ordene una
demolición. SEGUNDO: El Ejecutor Coactivo de la Municipalidad
Provincial de Huancayo mediante escrito de fecha uno de abril de
dos mil nueve, obrante a fojas setenta, absuelve la demanda
señalando que la incoada pretende desarrollar una revisión judicial
sobre el inicio y trámite del procedimiento de ejecución coactiva, lo
cual claramente se encuentra contemplado en el artículo 23 del
Texto Unico Ordenado de la Ley N° 26979, el cual tiene su propia
naturaleza y tramitación ante la Sala Mixta de la Corte Superior de
Justicia de Junín, siendo la vía correspondiente la sumarísima.
TERCERO: La Segunda Sala Mixta de Huancayo de la Corte
Superior de Justicia de Junín, mediante sentencia de vista de fecha
veintinueve de diciembre de dos mil once, obrante a fojas
cuatrocientos cuarenta y cuatro, confirma la sentencia apelada que
declaró fundada en parte la demanda, declarando la nulidad de la
Resolución número uno de fecha diecisiete de febrero del dos mil
nueve emitida por el Ejecutor Coactivo de la Municipalidad
Provincial de Huancayo, así como la nulidad de la medida cautelar
previa de demolición emitida en el Expediente N° 020-2009-EJCMCP. Como sustento de su decisión, indicó que si bien tanto el
Ejecutor Coactivo como el Procurador Público de la Municipalidad
demandada señalan que debió interponerse la presente demanda
ante una Sala Mixta y no ante un juzgado, por cuanto el proceso
tiene como objeto la revisión judicial de un procedimiento; sin
embargo, ello es erróneo, ya que mediante Resolución número
nueve se ha resuelto declarando infundada la nulidad de la
Resolución número dos que admite a trámite la demanda, además
se ha declarado infundada la excepción de incompetencia, decisión
que fue notificada a las partes, según las constancias de notificación
obrantes a folios trescientos veintitrés y trescientos veinticuatro, la
cual quedó consentida y con calidad de cosa juzgada al no haberse
interpuesto ningún recurso impugnatorio, conforme al artículo 123°
numeral 2 del Código Civil. Asimismo señala, que si bien la medida
cautelar previa fue solicitada y amparada conforme al artículo 13.7
de la Ley de Procedimiento de Ejecución Coactiva, ello no implica
que se pueda llevar a cabo una demolición después de cuatro años
de haberse declarado la inhabitabilidad conforme a la Resolución
Directoral N° 236-2004-MPH/DGDU de fecha dos de julio de dos
mil cuatro, razón por la cual queda establecido que las medidas
cautelares deben de ejecutarse en forma inmediata y no esperar
que transcurra tanto tiempo para su ejecución, como sucedió en el
presente caso. CUARTO: Es necesario precisar que de los autos
se advierte que a fojas veintiocho obra la Resolución Directoral N°
236-2004-MPH/DGDU de fecha dos de julio de dos mil cuatro,
expedido por la Dirección General de Desarrollo Urbano de la
Municipalidad Provincial de Huancayo que declara la inhabitabilidad
de las edificaciones del Coliseo Municipal y Mercado Artesanal
ubicado en la intersección del Pasaje Coliseo Municipal al Norte;
Jirón Piura al Sur; Jirón Ancash al Este y Plazoleta de la Calle Real
por el Oeste, en Huancayo; asimismo dispone la demolición de
estas edificaciones una vez desocupadas para la intervención
urbana asignada por el Plan Director de Huancayo. No obstante,
esta resolución administrativa no ha sido materia del presente
proceso ya que del petitorio de la demanda se advierte que el
cuestionamiento se encuentra dirigido a controvertir lo dispuesto
en la Resolución número uno del diecisiete de febrero de dos mil
nueve, que obra a fojas quince emitida por el Ejecutor Coactivo de
la Municipalidad Provincial de Huancayo en el Expediente N°
020-2009-EJC-MCP, que ordena trabar medida cautelar previa de
demolición de las edificaciones del Coliseo Municipal y Mercado
Artesanal ubicado en la intersección del Pasaje Coliseo Municipal
al Norte; Jirón Piura al Sur; Jirón Ancash al Este y Plazoleta de la
Calle Real por el Oeste, en Huancayo. QUINTO: Asimismo, a fojas
ciento cuarenta y dos obra el escrito de demanda de revisión
judicial interpuesta por el demandante Eliseo Bonifacio Porta
contra la Municipalidad Provincial de Huancayo y sus ejecutores
coactivos (que expidieron la Resolución número uno del diecisiete
de febrero de dos mil nueve), mediante la cual se pretende la
revisión del Expediente Coactivo N° 020-2009- EJC-MCP y que
declarándola fundada se ordene la nulidad de la Resolución
número uno del diecisiete de febrero de dos mil nueve que ordena
trabar medida cautelar previa de demolición de las edificaciones
del Coliseo Municipal y Mercado Artesanal ubicado en la
intersección del Pasaje Coliseo Municipal al Norte; Jirón Piura al
Sur; Jirón Ancash al Este y Plazoleta de la Calle Real por el Oeste,
en Huancayo (mismo petitorio que la presente demanda). SEXTO:
De todo lo anotado, es evidente que lo que se está cuestionando es
una resolución administrativa expedida en el procedimiento de
ejecución coactiva, tramitada en el Expediente N° 020-2009-EJCMCP; siendo ello así, debemos tener en consideración que el
artículo 23 de la Ley Nº 26979, modificada por la Ley Nº 28165,
dispone “El procedimiento de ejecución coactiva puede ser
sometido a un proceso que tenga por objeto exclusivamente la
revisión judicial de la legalidad y cumplimiento de las normas
previstas para su iniciación y trámite”, la misma que debe
concordarse con lo prescrito en el numeral 23.5 del acotado cuerpo
normativo que señala “para efectos de resolver sobre la demanda
de revisión judicial, únicamente corresponde a la Corte Superior
resolver si el procedimiento de ejecución coactiva ha sido iniciado
o tramitado conforme a las disposiciones previstas en la presente
ley”. SETIMO: Conforme al numeral 23.1 del artículo 23 de la Ley
N° 26979, modificado por la Ley N° 28165, el procedimiento de
El Peruano
Lunes 1 de febrero de 2016
ejecución coactiva puede ser sometido a un proceso que tenga por
objeto exclusivamente la revisión judicial de la legalidad y
cumplimiento de las normas previstas para su iniciación, con la
finalidad de que se lleve a cabo la revisión de la legalidad del
procedimiento de ejecución coactiva, en cualquiera de los
siguientes casos: a) Cuando iniciado un procedimiento de ejecución
coactiva, se hubiera ordenado mediante embargo, la retención de
bienes, valores y fondos en cuentas corrientes, depósitos, custodia
y otros, así como los derechos de crédito de los cuales el obligado
o responsable solidario sea titular y que se encuentren en poder de
terceros, así como cualquiera de las medidas cautelares previstas
en el artículo 33 de la Ley; y b) Después de concluido el
procedimiento de ejecución coactiva, dentro de un plazo de
quince días hábiles de notificada la resolución que pone fin al
procedimiento. Por otro lado, de acuerdo con el propio texto de los
artículos 12 y 13 de la Ley N° 26979, los actos como las
paralizaciones de obra, “demoliciones”, reparaciones urgentes,
suspensión de actividades, clausura de locales, resultan siendo
actos de coerción o ejecución forzada y no medidas cautelares
provisorias que buscan primordialmente asegurar el cumplimiento
de la decisión definitiva. Por ello, esta Sala Suprema ya ha emitido
pronunciamientos anteriores dejando sentada esta posición, que la
demolición como el caso de autos, es una medida de carácter
definitivo y no uno de carácter provisional, correspondiendo ser
tramitada como un proceso de revisión judicial de procedimiento
coactivo y no como ha sido tramitada, por cuanto la vía especial no
es la adecuada sino la sumarísima, asimismo la competencia para
resolver el caso de autos la tiene la Sala Superior, conforme al
articulo 23.2 y 23.3 de la Ley N° 26979. OCTAVO: En consecuencia,
al haberse determinado el error in procedendo incurrido por las
instancias de mérito que no tuvieron en consideración que
mediante el presente proceso contencioso administrativo se
pretende la revisión judicial del Expediente Coactivo N° 020-2009EJC-MCP en el cual se expidió la Resolución número uno del
diecisiete de febrero de dos mil nueve, más aún cuando de los
autos se advierte que existe demanda de revisión judicial
interpuesta por el demandante contra la Municipalidad Provincial
de Huancayo y sus ejecutores coactivos, teniendo como objeto el
mismo petitorio que la presente demanda (pretende la revisión del
Expediente Coactivo N° 020-2009- EJC-MCP y que declarándola
fundada se ordene la nulidad de la Resolución número uno del
diecisiete de febrero de dos mil nueve) no pudiendo encontrarse en
trámite dos procesos cuyo objeto sea el mismo, corresponde casar
la sentencia de vista de fecha veintinueve de diciembre de dos mil
once y actuando en sede de instancia revocar la sentencia de
fecha veinticinco de enero de dos mil once y reformándola declarar
improcedente la demanda, en mérito a lo dispuesto en el numeral 4
del articulo 427° del Código Procesal Civil (de aplicación supletoria)
que dispone que el juez declarará improcedente la demanda
cuando carezca de competencia. Cabe precisar que, en relación a
los agravios que contiene el recurso, carece de objeto emitir
pronunciamiento dado los efectos de la presente sentencia. IV.DECISIÓN: Por tales consideraciones Declararon: FUNDADO del
recurso de casación interpuesto por el Procurador Público a cargo
de los asuntos judiciales de la Municipalidad Provincial de
Huancayo de fecha veintiuno de junio de dos mil doce, obrante a
fojas cuatrocientos cincuenta y nueve; en consecuencia NULA la
sentencia de vista de fecha veintinueve de diciembre de dos mil
once, obrante a fojas cuatrocientos cuarenta y cuatro; y,
ACTUANDO EN SEDE DE INSTANCIA REVOCARON la sentencia
de fecha veinticinco de enero del dos mil once, obrante a fojas
trescientos cuarenta y cuatro, que declaró fundada en parte la
demanda
sobre
acción
contencioso
administrativo;
y
REFORMANDOLA la declararon IMPROCEDENTE la demanda; y
MANDARON se publique la presente resolución en el Diario Oficial
El Peruano; y los devolvieron; en los seguidos por don Eliseo
Bonifacio Porta en representación de la Asociación de Comerciantes
del Mercado Central Artesanal de Huancayo contra la Municipalidad
Provincial de Huancayo y otro, sobre acción contencioso
administrativa. Juez Supremo Ponente: Vinatea Medina. S.S.
SIVINA HURTADO, ACEVEDO MENA, VINATEA MEDINA, RUEDA
FERNANDEZ, MALCA GUAYLUPO C-1335410-18
CAS. Nº 7568-2013 LIMA
Lima, veinticinco de octubre de dos mil trece. VISTOS; y
CONSIDERANDO: PRIMERO: El recurso de casación interpuesto
por el demandado Consorcio Minero Sociedad Anónima – CORMIN
S.A., obrante a fojas ochocientos veinticuatro, contra la sentencia
de vista de fecha trece de diciembre de dos mil doce, de fojas
ochocientos seis; cumple con los requisitos de forma que para su
admisibilidad exige el artículo 57 de la Ley Nº 26636, Ley Procesal
del Trabajo, modificado por el artículo 1 de la Ley Nº 27021; por lo
que, corresponde examinar si el recurso reúne los requisitos de
fondo. SEGUNDO: El artículo 58 de la Ley N° 26636, modificado
por el artículo 1 de la Ley N° 27021, prescribe que el recurso de
casación deberá estar fundamentado con claridad, señalando con
precisión las causales descritas en el artículo 56 de la Ley N° 26636,
modificado por el artículo 1 de la Ley N° 27021 en que se sustenta,
esto es: a) La aplicación indebida de una norma de derecho
material; b) La interpretación errónea de una norma de derecho
material; c) La inaplicación de una norma de derecho material; y,
d) La contradicción con otras resoluciones expedidas por la Corte
Suprema de Justicia o las Cortes Superiores, pronunciadas en
El Peruano
Lunes 1 de febrero de 2016
CASACIÓN
casos objetivamente similares, siempre que dicha contradicción
esté referida a una de las causales anteriores; y, según el caso: i)
Qué norma ha sido indebidamente aplicada y cuál es la que debió
aplicarse; ii) Cuál es la correcta interpretación de la norma; iii) Cuál
es la norma inaplicada y porqué debió aplicarse; y, iv) Cuál es la
similitud existente entre los pronunciamientos invocados y en qué
consiste la contradicción. TERCERO: Antes de entrar al análisis de
los requisitos de fondo resulta necesario precisar que, el recurso
de casación es un medio impugnatorio extraordinario de carácter
formal que sólo puede fundarse en cuestiones eminentemente
jurídicas y no en cuestiones fácticas o de revaloración probatoria,
es por ello que este medio impugnatorio, en materia laboral, tiene
como fines esenciales la correcta aplicación e interpretación
de las normas materiales en esta materia y la uniformidad de
la jurisprudencia nacional por la Corte Suprema, conforme al
artículo 54 de la Ley Procesal del Trabajo; en ese sentido su
fundamentación por parte del recurrente debe ser clara, precisa
y concreta indicando ordenadamente cuáles son las causales
denunciadas, las mismas que no pueden estar orientadas a una
revaloración de los elementos fácticos ni de los medios probatorios
dado que aquello desnaturalizaría el presente recurso. CUARTO:
El recurrente denuncia como causales del recurso de su propósito:
a) la interpretación errónea del inciso c) del artículo 25 de la
Ley de Productividad y Competitividad Laboral, aprobado por
Decreto Supremo N° 003-97-TR; b) la interpretación errónea
del artículo 31 de la Ley de Productividad y Competitividad
Laboral, aprobado por Decreto Supremo N° 003-97-TR; c)
la inaplicación del artículo 39 de la Ley de Productividad y
Competitividad Laboral, aprobado por Decreto Supremo N°
003-97-TR; y, d) la contravención a las normas que garantizan
el debido proceso. QUINTO: En relación a la causal a) de
interpretación errónea del inciso c) del artículo 25 de la Ley de
Productividad y Competitividad Laboral, aprobado por Decreto
Supremo N° 003-97-TR, precisa que no se toma en cuenta que
la conducta del señor Campos Gil ha afectado evidentemente el
deber de fidelidad, confianza, lealtad y honestidad, pues no es
válido que un trabajador que labora en la Gerencia de Operaciones
(que se admitan las compras y la salida de mineral) reciba de
terceros sumas cuando viene contratando con los mismos; por lo
que dichas faltas son consecuencia de la apropiación consumada
de bienes de la recurrente, así como de la utilización indebida de los
mismos en beneficio propio y de terceros, supuesto que configura
como falta grave que amerita el despido. SEXTO: Respecto a la
causal b) de interpretación errónea del artículo 31 de la Ley
de Productividad y Competitividad Laboral, aprobado por
Decreto Supremo N° 003-97-TR, alega que la sala de mérito llega
a la conclusión que no se habría efectuado un procedimiento de
despido, sin considerar la flagrancia en la falta grave cometida
por el demandante, por lo que no existía ninguna razón objetiva
para pretender que el demandante presente sus descargos
respecto a un hecho reconocido. SÉTIMO: Respecto a la causal
c) de inaplicación del artículo 39 de la Ley de Productividad
y Competitividad Laboral, aprobado por Decreto Supremo N°
003-97-TR, indica que existe omisión por parte de la sala de merito
al no haberse pronunciado respecto a la apropiación consumada y
utilización indebida de bienes de la recurrente en la que ha incurrido
el demandante, acreditada en su declaración testimonial de fecha
veintinueve de mayo de dos mil dos. OCTAVO: Respecto a la causal
d) de contravención a las normas que garantizan el debido
proceso, señala que no se ha cumplido con determinar, de manera
clara y precisa cuáles son los motivos por los cuales considera que
el demandante incurrió en un incumplimiento de sus obligaciones
laborales, más no, en el supuesto establecido en el inciso c) del
artículo 25 de la Ley de Productividad y Competitividad Laboral;
asimismo, advierte una falta de motivación e incongruencia, pues
se basa únicamente en una “imprecisión en la carta de despido”
a efectos de determinar la falta de flagrancia en la conducta
incurrida por el demandante, omitiendo analizar los hechos que
se alegan y sustentan el despido. NOVENO: Como se advierte de
las causales descritas en los literales a), b), c) y d), relacionada
con la falta grave imputada al demandante, lo pretendido por el
recurrente, antes de corregir algún determinado error de derecho,
es variar la situación fáctica y jurídica establecida en las instancias
de mérito, a través de una nueva revisión de los hechos alegados
respecto del despido justificado y de las pruebas que lo sustentan;
lo que no se condice con la finalidad del recurso de casación el
cual sólo puede fundarse en cuestiones eminentemente jurídicas
y no en cuestiones fácticas o de revaloración probatoria; por lo
que, este extremo del recurso deviene en improcedente, tanto
más, si la Sala de mérito establece en el considerando quince de
su sentencia de vista, que se ha configurado el despido arbitrario
puesto que se ha vulnerado el derecho de defensa del actor en el
proceso previo del despido, sin que se haya configurado falta grave
flagrante, lo que constituye la vulneración al principio del debido
proceso, además que la falta imputada de apropiación de bienes
no se encuentra probada, razón por la cual confirma lo resuelto en
la sentencia apelada. OCTAVO: En consecuencia, el recurso de
casación no cumple con los requisitos de fondo necesarios para su
procedencia, por lo que, corresponde a este Colegiado proceder
con la facultad conferida por la parte in fine del artículo 58 de la
Ley Procesal del Trabajo, modificado por el artículo 1 de la Ley
Nº 27021, declarando: IMPROCEDENTE el recurso de casación
interpuesto por el demandado Consorcio Minero Sociedad
74045
Anónima – CORMIN S.A., obrante a fojas ochocientos veinticuatro,
contra la sentencia de vista de fecha trece de diciembre de dos
mil doce, de fojas ochocientos seis; y ORDENARON publicar la
presente resolución en el Diario Oficial “El Peruano” conforme a
ley; en los seguidos por Roberto Raúl Campos Gil contra Consorcio
Minero Sociedad Anónima – CORMIN S.A. sobre Indemnización
por Despido Arbitrario; y los devolvieron. Vocal Ponente: Vinatea
Medina. S.S. SIVINA HURTADO, WALDE JAUREGUI, ACEVEDO
MENA, VINATEA MEDINA, RUEDA FERNÁNDEZ C-1335410-19
CAS. Nº 8234 – 2012 LIMA
Lima, ocho de abril de dos mil trece. VISTOS; y, CONSIDERANDO:
PRIMERO.- Que, el recurso de casación interpuesto por el
demandante NYX Publicidad Exterior Sociedad Anónima a fojas
ciento noventa, contra la sentencia de vista de fecha nueve
de diciembre del dos mil once, obrante a fojas ciento ochenta y
dos, que confirmando la sentencia apelada declara infundada la
demanda de impugnación de resolución administrativa; el presente
recurso reúne los requisitos de forma para su admisibilidad,
conforme a lo previsto en el artículo 387 del Código Procesal Civil,
modificado por la Ley N° 29364, concordante con el artículo 32
de la Ley N° 27584; por ello corresponde examinar si el recurso
reúne los requisitos de fondo. SEGUNDO.- Que, el artículo
386 del Código Procesal Civil, modificado por la Ley N° 29364,
señala que el recurso de casación se sustenta en: i) la infracción
normativa que incida directamente sobre la decisión contenida en
la resolución impugnada, o ii) en el apartamiento inmotivado del
precedente judicial. TERCERO.- Que, el recurrente cumple con
el requisito establecido en el inciso 1° del artículo 388 del Código
Procesal Civil, modificado por la Ley N° 29364, porque no dejo
consentir la sentencia de primera instancia que le fue desfavorable.
CUARTO.- Que, los incisos 2) y 3) del artículo 388° del Código
Procesal Civil, establece que constituyen requisitos de fondo del
recurso, que se describa con claridad y precisión la infracción
normativa o el apartamiento del precedente judicial, expresando en
cuál de las causales descritas en el artículo 386° de este Código
acotado se sustenta y, según el caso, debe precisarse cómo debe
ser la debida aplicación o cuál es la interpretación correcta de la
norma de derecho material; cuál debe ser la norma de derecho
material aplicable; o en qué ha consistido la afectación del derecho
al debido proceso o cuál ha sido la formalidad procesal incumplida;
así como el demostrar la incidencia directa de la infracción sobre la
decisión impugnada. QUINTO.- Que la parte recurrente denuncia
como agravio: a) Infracción normativa por inaplicación de los
artículos 197, 201, 51 inciso 2) del Código Procesal Civil; b)
Infracción normativa por inaplicación del artículo 139 incisos
3) y 5) de la Constitución Política del Estado; y, c) Infracción
normativa por inaplicación del numeral 1.11) del artículo IV del
Título Preliminar y artículo 230 numeral 8) de la Ley N° 27444,
Ley del Procedimiento Administrativo General. SEXTO.- Sobre
la denuncia de a) Infracción normativa por inaplicación de
los artículos 197, 201, 51 inciso 2) del Código Procesal Civil,
alega que de la sentencia se aprecia que existe contradicción e
incongruencia en lo que afirma la Sala Superior, porque por una
parte menciona que no han presentado ningún medio probatorio
que sustente su pretensión relacionada al hecho que cuentan con
la correspondiente autorización de instalación; y de otro lado, dice
que han presentado el Acta de Conciliación a fin de acreditar la
instalación de su panel publicitario, pero en copia simple, por tanto
dicho documento carece de eficacia probatoria; lo que transgrede su
derecho a la prueba, y por ende su derecho de defensa; SÉPTIMO.La denuncia casatoria que antecede deviene en improcedente por
cuanto en sede de instancia el Colegiado ha determinado que si
bien la actora presentó a fojas sesenta y cuatro y sesenta y cinco,
una copia del Acta de Conciliación correspondiente al Expediente
N° 267-96 con la que pretende acreditar la existencia de un
convenio con la Municipalidad Distrital de Santiago de Surco, por
el cual “el panel o elemento fijo de publicidad comercial exterior
de bienes o servicios permanecerá instalado hasta el dieciocho de
agosto de 1999”, la misma carece de eficacia por tratarse de una
copia simple y no certificada por el funcionario judicial respectivo,
sin perjuicio de señalarse además que en ningún extremo del
referido documento se especifica a qué elemento de publicidad
se refiere o en todo caso la ubicación del mismo, careciendo
por tanto tal argumento de sustento, siendo desestimado por el
Colegiado. OCTAVO.- En cuanto a la denuncia de: b) Infracción
normativa por inaplicación del artículo 139 incisos 3) y 5)
de la Constitución Política del Estado, señala que el artículo
invocado impone a los Magistrados el deber de fundamentar tanto
fáctica como jurídicamente sus decisiones jurisdiccionales, a fin de
posibilitar que los justiciables tengan acceso al razonamiento lógico
jurídico empleado en la solución de la controversia de la que forma
parte, disipando cualquier matiz de arbitrariedad o subjetividad
en su resolución; c) Infracción normativa por inaplicación del
numeral 1.11) del artículo IV del Título Preliminar y artículo
230 numeral 8) de la Ley N° 27444, Ley del Procedimiento
Administrativo General, argumenta que la sentencia que se
cuestiona deviene en nula, pues su pretensión planteada en su
demanda así como su pretensión impugnatoria de su apelación,
están relacionadas al hecho que la autorización otorgada tiene el
carácter de indefinida, la cual no ha sido materia de análisis y/o
debate de orden jurídico por parte de la Sala Superior; por tanto, se
les ha privado de tener acceso a una efectiva tutela jurisdiccional,
74046
CASACIÓN
pues se está vulnerando abiertamente su derecho a la defensa, lo
que incide en la vulneración del Principio de Congruencia procesal.
NOVENO.- Las denuncias casatorias que anteceden devienen en
improcedentes, por cuanto este Supremo Tribunal advierte que lo
pretendido por el recurrente es un nuevo pronunciamiento en sede
casatoria de lo resuelto en sede de instancia; lo que no se condice
con los fines del recurso extraordinario de casación, en tanto que
esta sede no es una tercera instancia, sino que más bien se orienta
a velar por el interés de la sociedad, de allí que el objeto de la
casación no se oriente a enmendar el agravio de la sentencia, sino
busca la seguridad jurídica y la igualdad de los ciudadanos ante la
ley, por medio de la defensa del derecho objetivo y la unificación de
los criterios de la Corte Suprema. Máxime que se ha determinado
en sede de instancia en base a la situación fáctica y a los medios
de prueba que obran en autos que la actora incurrió en infracción
administrativa pasible de sanción, al haber instalado un panel de
publicidad exterior con una superficie mayor a los cincuenta metros
cuadrados (50.00 m2) y sin contar con autorización municipal,
concluyéndose en que la actuación de la demandada se encontraba
dentro del ejercicio de las funciones atribuidas por ley, deviniendo
en improcedente. Por las razones expuestas, al no haberse
satisfecho las exigencias de fondo a que hace referencia el artículo
388° del Código Procesal Civil, modificado por la Ley N° 29364, en
ejercicio de la facultad conferida por el artículo 392° del acotado
Código, declararon: IMPROCEDENTE el recurso de casación
interpuesto por el demandante NYX Publicidad Exterior Sociedad
Anónima, obrante a fojas ciento noventa, contra la sentencia de
vista de fecha nueve de diciembre de dos mil once, obrante a
fojas ciento ochenta y dos, que confirmando la sentencia apelada
declara infundada la demanda; en los seguidos por NYX Publicidad
Exterior Sociedad Anónima contra la Municipalidad de Santiago de
Surco, sobre Acción Contencioso Administrativa; MANDARON
publicar la presente resolución en el diario oficial “El Peruano”
conforme a ley; y, los devolvieron.- Vocal Ponente: Vinatea Medina.
S.S. SIVINA HURTADO, ACEVEDO MENA, VINATEA MEDINA,
MORALES PARRAGUEZ, RUEDA FERNANDEZ C-1335410-20
CAS. Nº 8766 - 2013 LIMA
Lima, nueve de enero de dos mil catorce. VISTOS; con su
acompañado; y CONSIDERANDO: Primero.- Viene a conocimiento
de esta Sala Suprema el recurso de casación interpuesto por el
Instituto Nacional de Defensa de la Competencia y de la Protección
de la Propiedad Intelectual - INDECOPI, de fecha catorce de mayo
de dos mil trece, a fojas trescientos ocho, contra la sentencia
de vista de fecha doce de abril de dos mil trece, obrante a fojas
doscientos ochenta, que confirmando la sentencia apelada declara
fundada la demanda, la cual reúne los requisitos de forma para su
admisibilidad, conforme a lo previsto en el artículo 387° del Código
Procesal Civil, modificado por la Ley N° 29364, concordante con el
artículo 32 de la Ley N° 27584; por ello corresponde examinar si el
recurso reúne los requisitos de fondo. Segundo.- Que, el artículo
386° del Código Procesal Civil, modificado por la Ley N° 29364,
señala que el recurso de casación se sustenta en: i) La infracción
normativa que incida directamente sobre la decisión contenida
en la resolución impugnada, ii) En el apartamiento inmotivado
del precedente judicial. Tercero.- Que, los numerales 2 y 3 del
artículo 388° del Código Procesal Civil, modificado por la Ley N°
29364, establece que constituye requisito de fondo del recurso,
que se describa con claridad y precisión la infracción normativa
o el apartamiento del precedente judicial, expresando en cuál de
las causales descritas en el artículo 386° de este Código acotado
se sustenta y, según el caso, debe precisarse cómo debe ser la
debida aplicación o cuál es la interpretación correcta de la norma
de derecho material; cuál debe ser la norma de derecho material
aplicable; o en qué ha consistido la afectación del derecho al debido
proceso o cuál ha sido la formalidad procesal incumplida; así como
el demostrar la incidencia directa de la infracción sobre la decisión
impugnada. Cuarto.- Que, el recurrente denuncia como causales:
a) La infracción normativa por inaplicación del artículo 2022
del Código Civil, alega que de considerarse que el contrato
celebrado entre las partes demuestra que el demandante tenía
derechos reales sobre los inmuebles embargados, debió aplicarse
el dispositivo legal que se menciona, el mismo que establece que
ante derechos de distinta naturaleza se aplican las disposiciones
del derecho común, lo cual no se hizo; máxime si, no se aprecia
la existencia del artículo en el Código Civil que establezca que
los derechos reales prevalecen sobre los personales. Asimismo,
sostiene que dicha inaplicación trajo consigo una cadena de
normas inaplicadas, como es el caso de los artículos 2012, 2013,
2016 y 2017 del Código Civil, que resultarían aplicables al caso
en concreto ante una confrontación entre un derecho real contra
un derecho personal emanado del embargo de un bien; b) La
infracción normativa por inaplicación del artículo 2013 del
Código Civil; precisa que el recurrente jamás otorgó derechos de
propiedad en mérito a la inscripción de un inmueble en los registros
públicos, que no podría haberlo hecho, pues la norma no dispone
el nacimiento de derechos de propiedad por la inscripción de un
bien en los registros públicos. Sin embargo, esto no significa que
Indecopi soslaye la información oficial que se desprende del Registro
sobre la titularidad del bien, en aplicación del dispositivo legal que
se denuncia; que es a partir de la información del registro que se
resolvió declarar infundada la tercería de propiedad formulada por el
demandante, basándose fundamentalmente en la presunción legal
El Peruano
Lunes 1 de febrero de 2016
de veracidad que emana del contenido del registro, sobre lo cual
la Tercera Sala Especializada en lo Contencioso Administrativo ha
mostrado el más absoluto silencio, incurriendo así en la infracción
que sustenta en su recurso; y c) El apartamiento inmotivado del
precedente judicial; menciona que, la Tercera Sala Especializada
en lo Contencioso Administrativo ha decidido apartarse del criterio
plasmado por la Corte Suprema de Justicia acerca de la aplicación
de las normas del derecho común, específicamente de las normas
del Derecho Registral, a aquellos casos en los que se encuentren
en conflicto de un derecho real con un derecho personal. En
efecto, lo cierto es que los pronunciamientos de la Corte Suprema
de Justicia tampoco avalan la prevalencia de un derecho real por
encima de un derecho personal como lo es un embargo, tal como
se puede observar en las Casaciones Nº 1689-2003-La Libertad
y Nº 2607-2006-Arequipa. Quinto.- Que, analizando las causales
denunciadas en los acápites a) y b), debemos señalar que las
mismas devienen en improcedentes, por cuanto este Supremo
Tribunal advierte que lo realmente cuestionado por el impugnante
es la situación fáctica establecida en sede de instancia, así
como revisión del análisis a que han arribado los Jueces, lo cual
no es permitido en sede casatoria, pues se pretende forzar a
esta Sala Suprema a emitir un nuevo pronunciamiento sobre el
fondo del asunto, lo que no se condice con los fines del recurso
extraordinario de casación, que es la interpretación del derecho
objetivo y la unificación de los criterios de la Corte Suprema de
Justicia. A mayor abundamiento, en autos se ha determinado que
los demandantes han acreditado tener la calidad de propietarios
del Departamento N° 103, de la Calle 9, N° 274 de la Urbanización
Los Álamos de Monterrico- Santiago de Surco, esto en mérito del
contrato de compraventa que celebraron con la Empresa M & S
Sociedad Anónima Cerrada, con fecha treinta de junio de dos mil
uno; por tanto, la recurrente ha viciado con nulidad su resolución
impugnada, al denegar el pedido de tercería de propiedad que
formularon los actores en la vía administrativa, en mérito de lo
establecido en el artículo 20 de la Ley 26979, Ley de Procedimiento
de Ejecución Coactiva. Sexto: Respecto de la causal denunciada
en el acápite c) cabe señalar que los expedientes señalados con
Nº 1689-2003-La Libertad y Nº 2607-2006-Arequipa no tienen
la condición de vinculantes para el presente proceso; toda vez
que, dichas casaciones no cumplen con lo establecido en el
artículo 400 del Código Procesal Civil, esto es, ser una sentencia
expedida por el pleno de los magistrados supremos civiles. Por
las razones expuestas, al no haberse satisfecho las exigencias de
fondo a que hace referencia el artículo 388° del Código Procesal
Civil, en ejercicio de la facultad conferida por el artículo 392° del
acotado Código, modificado por la Ley N° 29364, declararon:
IMPROCEDENTE el recurso de casación interpuesto por el
Instituto Nacional de Defensa de la Competencia y de la Protección
de la Propiedad Intelectual - INDECOPI, de fecha catorce de mayo
de dos mil trece, a fojas trescientos ocho, contra la sentencia
de vista de fecha doce de abril de dos mil trece, obrante a fojas
doscientos ochenta; MANDARON publicar la presente resolución
en el diario oficial “El Peruano” conforme a ley; en los seguidos
por Juan Andrés Marchini Barthelmess y Renee Virginia Pinto del
Pozo de Marchini contra INDECOPI, sobre proceso contencioso
administrativo; y los devolvieron. Vocal Ponente: Vinatea Medina.
S.S. SIVINA HURTADO, WALDE JAUREGUI, ACEVEDO MENA,
VINATEA MEDINA, RUEDA FERNÁNDEZ C-1335410-21
CAS. Nº 8879-2013 CALLAO
Lima, doce de marzo de dos mil catorce. VISTOS; y
CONSIDERANDO: Primero: El recurso de casación interpuesto
por Superintendencia Nacional de Aduanas y Administración
Tributaria - SUNAT, obrante a fojas novecientos dos, contra la
sentencia de vista de fecha once de marzo de dos mil trece, de
fojas ochocientos noventa y uno; cumple con los requisitos de
forma que para su admisibilidad exige el artículo 57 de la Ley Nº
26636, Ley Procesal del Trabajo, modificado por el artículo 1 de
la Ley Nº 27021. Segundo: El artículo 58 de la Ley N° 26636,
modificado por el artículo 1 de la Ley N° 27021, prescribe que
el recurso de casación deberá estar fundamentado con claridad,
señalando con precisión las causales descritas en el artículo 56 de
la Ley N° 26636, modificado por el artículo 1 de la Ley N° 27021 en
que se sustenta, esto es: a) La aplicación indebida de una norma
de derecho material; b) La interpretación errónea de una norma
de derecho material; c) La inaplicación de una norma de derecho
material; y, d) La contradicción con otras resoluciones expedidas
por la Corte Suprema de Justicia o las Cortes Superiores,
pronunciadas en casos objetivamente similares, siempre que dicha
contradicción esté referida a una de las causales anteriores; y,
según el caso: i) Qué norma ha sido indebidamente aplicada y cuál
es la que debió aplicarse; ii) Cuál es la correcta interpretación de
la norma; iii) Cuál es la norma inaplicada y porqué debió aplicarse;
y, iv) Cuál es la similitud existente entre los pronunciamientos
invocados y en qué consiste la contradicción. Tercero: Antes
de entrar al análisis de los requisitos de fondo resulta necesario
precisar que, el recurso de casación es un medio impugnatorio
extraordinario de carácter formal que sólo puede fundarse
en cuestiones eminentemente jurídicas y no en cuestiones
fácticas o de revaloración probatoria, es por ello que este medio
impugnatorio, en materia laboral, tiene como fines esenciales la
correcta aplicación e interpretación de las normas materiales en
esta materia y la uniformidad de la jurisprudencia nacional por la
El Peruano
Lunes 1 de febrero de 2016
CASACIÓN
Corte Suprema, conforme al artículo 54 de la Ley Procesal del
Trabajo; en ese sentido su fundamentación por parte del recurrente
debe ser clara, precisa y concreta indicando ordenadamente
cuáles son las causales denunciadas, las mismas que no pueden
estar orientadas a una revaloración de los elementos fácticos ni
de los medios probatorios dado que aquello desnaturalizaría el
presente recurso. Cuarto: El recurrente denuncia como causales
del recurso de su propósito: a) La inaplicación del artículo 26 del
Decreto Supremo N° 003-97; y b) La contravención al derecho
al debido proceso por vulneración al principio de motivación
de las resoluciones judiciales contenido en el artículo 139,
inciso 5 de la Constitución Política. Quinto: En cuanto a la
causal de inaplicación del artículo 26 del Decreto Supremo
N° 003-97-TR, Texto Único Ordenado del Decreto Legislativo Nº
728, Ley de Productividad y Competitividad Laboral, alega que
se comete un craso error, al no reconocer la tajante diferencia
entre la aplicación de una sanción de tipo laboral y la acción
proveniente de una actividad realizada por una persona, la cual
se ajusta a un tipo penal sancionado por la Ley. Agrega que se
debe considerar que en el presente caso, el actor realizó actos
contrarios al cumplimiento de sus funciones, asimismo incumplió
con el procedimiento aduanero establecido por la institución,
generándoles graves perjuicios no solo a la entidad sino también
al estado ya que con sus actos colaboro para que se configure
el delito contra la administración pública, situación que generó
la aplicación de una sanción como la del despido debidamente
justificado, pues el acto irregular fue realizado por el demandante,
al margen de poseer o no connotaciones delictivas. Sexto: Sobre
el particular, debemos señalar que la inaplicación de una norma de
derecho material se configura cuando se deja de aplicar una norma
que contiene la hipótesis que describe el presupuesto fáctico
establecido en el proceso, lo que implica un desconocimiento
de la Ley como norma jurídica abstracta de tal suerte que no se
trata de un error en el modo de aplicarla, sino de una omisión de
cumplirla; en el presente caso, se aprecia que los argumentos
que esgrime no sustentan la inaplicación del dispositivo legal que
denuncia, muy por el contrario se advierte un cuestionamiento a
la valoración probatoria efectuada por las instancias de mérito,
quienes coinciden en señalar que la pretensión de indemnización
por despido arbitrario debe ser estimada. En ese sentido, al
no cumplirse con el requisito de claridad y precisión, merece
desestimarse esta causal; máxime si, la Sala Superior ha
establecido que no se encuentra acreditado la falta que se imputa,
indicando además que la supuesta responsabilidad del actor
sustentado en el Atestado Policial deviene en irrelevante al haberse
exonerado de responsabilidad por la Sala de Delitos Tributarios y
Aduaneros. Sétimo: Respecto a la causal de contravención al
derecho al debido proceso por vulneración al principio de
motivación de las resoluciones judiciales contenido en el
artículo 139, inciso 5 de la Constitución Política; sostiene que
las instancias de mérito no han analizado el abundante material
probatorio con el que queda acreditada la falta laboral cometida
por el accionante; existe una contradicción al no haber analizado
la falta laboral cometida por el demandante, lo cual no permite
establecer y/o comprender por qué se ha concluido en que la
entidad no habría demostrado la causa de despido, sin analizar
los medios probatorios obrantes en autos. Octavo: Al respecto,
resulta necesario precisar que la “infracción al debido proceso” no
se encuentra prevista como causal casatoria en el artículo 56 de la
Ley N° 26636, modificado por el artículo 1 de la Ley Nº 27021; sin
embargo, la Corte Suprema de manera excepcional aplica dicha
propuesta, en los casos en que se advierta flagrante afectación
al debido proceso, como garantía constitucional de los justiciables
y a efectos de cumplir con los fines del recurso de casación. En
el presente caso, esta Sala Suprema aprecia que en la sentencia
de vista, se han expresado los fundamentos de hecho y jurídicos
que sustentan su decisión de confirmar la sentencia de primera
instancia, expresando las valoraciones esenciales y determinantes
que sustentan dicha decisión, por lo que mal podría ahora alegar –la
recurrente- que no se analiza el abundante material probatorio que
acredita la falta laboral imputada; por consiguiente, corresponde
desestimar este extremo del recurso. En consecuencia, el
recurso de casación no cumple con los requisitos de fondo
necesarios para su procedencia, por lo que, corresponde a este
Colegiado proceder con la facultad conferida por la parte in fine del
artículo 58 de la Ley Procesal del Trabajo, modificado por el artículo
1 de la Ley Nº 27021, declarando: IMPROCEDENTE el recurso de
casación interpuesto por Superintendencia Nacional de Aduanas
y Administración Tributaria - SUNAT, obrante a fojas novecientos
dos, contra la sentencia de vista de fecha once de marzo de dos mil
trece, de fojas ochocientos noventa y uno; y ORDENARON publicar
la presente resolución en el Diario Oficial “El Peruano” conforme a
ley; en los seguidos por Juan Edgardo Mansilla Montoya contra
la Superintendencia Nacional de Aduanas y Administración
Tributaria - SUNAT, sobre Indemnización por despido arbitrario;
y los devolvieron. Vocal Ponente: Vinatea Medina. S.S. SIVINA
HURTADO, ACEVEDO MENA, VINATEA MEDINA, RUEDA
FERNÁNDEZ, MALCA GUAYULUPO C-1335410-22
CAS. Nº 8974 – 2013 LIMA
Lima, tres de junio de dos mil catorce. LA SALA DE DERECHO
CONSTITUCIONAL Y SOCIAL PERMANENTE DE LA CORTE
SUPREMA DE JUSTICIA DE LA REPÚBLICA. VISTOS: con el
74047
acompañado, la causa número ocho mil novecientos setenta y
cuatro – dos mil trece, en Audiencia Pública llevada a cabo en la
fecha, integrada por los señores Jueces Supremos: Sivina Hurtado
– Presidente, Walde Jáuregui, Vinatea Medina, Rueda Fernández
y Malca Guaylupo; producida la votación con arreglo a la Ley, se
emite la siguiente sentencia: I. RECURSO DE CASACIÓN: Se
trata del recurso de casación interpuesto por el Procurador Público
del Ministerio de Economía y Finanzas obrante a fojas trescientos
cuarenta y dos, de fecha quince de febrero de dos mil trece, contra
la sentencia de vista obrante a fojas trescientos treinta y cuatro, de
fecha veintidós de enero de dos mil trece, mediante la cual la
Quinta Sala Civil de la Corte Superior de Justicia de Lima, confirma
la sentencia apelada, que declaró fundada en parte la demanda
incoada. II. CAUSALES DEL RECURSO: Mediante resolución de
fecha trece de enero de dos mil catorce, obrante a fojas ciento
catorce del cuadernillo de casación formado en esta Suprema
Sala, se ha declarado procedente el recurso casatorio por las
siguientes causales: a) infracción normativa del artículo 204 de
la Constitución Política del Estado; respecto a la cual el
recurrente señala que la Sala Superior ha aplicado indebidamente
los alcances de la sentencia dictada por el Tribunal Constitucional
en el Expediente N° 022-96-I/TC, pues la misma solo puede ser
aplicada a hechos (expropiaciones) que ocurran a partir del día
siguiente a su publicación (once de mayo de dos mil uno), y no a
los producidos antes de su publicación; b) Infracción normativa
del artículo 29 de la Constitución Política de 1933, así como los
artículos 174, 175 y 176 del Decreto Ley N° 17716-Ley de
Reforma Agraria, indicando que en virtud de la citada norma
constitucional, vigente a la fecha de expropiación del predio sub
judice, los bonos agrarios tienen carácter cancelatorio respecto de
las indemnizaciones con fines de la Reforma Agraria,
estableciéndose en el Decreto Ley N° 17716 que los bonos tienen
valor nominal, por lo que no cabe actualizar el monto de los valores;
y c) infracción normativa del artículo 1236 del Código Civil;
señala el recurrente que habiéndose cancelado la obligación
indemnizatoria con bonos agrarios, a partir de la transferencia de
los bonos a los expropiados la deuda adquirió la naturaleza de
deuda de dinero, por lo que no resulta aplicable la teoría valorista
contenida en el dispositivo legal denunciado, ya que solo puede ser
aplicado para obligaciones de valor, esto es, sobre el monto
indeterminado que requiere ser liquidado; máxime aun su por el
principio de aplicación de la ley en el tiempo, dicha norma tampoco
resulta aplicable pues no regula hechos que sucedieron antes de
su vigencia; agrega que el artículo 1234 del Código Civil, que
regula la teoría nominalista, si resulta aplicable al caso de autos, en
la medida que el pago de una deuda contraída en moneda nacional
no podrá exigirse en moneda distinta, ni en cantidad diferente al
monto nominal originalmente pactado. III. CONSIDERANDO:
PRIMERO: De acuerdo con el artículo 82 del Código Procesal
Constitucional, las sentencias del Tribunal Constitucional en los
procesos de inconstitucionalidad y las recaídas en los procesos de
acción popular que queden firmes tienen autoridad de cosa
juzgada, por lo que vinculan a todos los poderes públicos y
producen efectos generales desde el día siguiente a la fecha de su
publicación. Disposición que prevé con precisión, dentro de nuestro
ordenamiento jurídico, una de las principales características que
identifica, con especial particularidad, la naturaleza que distingue a
las decisiones finales dictadas en procesos de acción popular y la
de inconstitucionalidad frente a la generalidad de decisiones
dictadas por tribunales jurisdiccionales nacionales. SEGUNDO:
Este especial carácter (vinculante a todos los poderes públicos)
que acompaña a las decisiones finales dictadas en los procesos de
acción popular e inconstitucionalidad se deriva, en esencia, de la
propia naturaleza que estos procesos poseen dentro de nuestro
modelo constitucional. En efecto, en tanto han sido previstos por
nuestra Carta Política (artículo 200, incisos 4 y 5) como los dos
únicos procesos de control abstracto de la constitucional, la acción
popular y la de inconstitucionalidad constituyen los medios a través
de los cuales se somete a juicio, en términos puros o abstractos, la
constitucionalidad de las normas ordinarias, a efectos de
salvaguardar el orden derivado de la Constitución Política del
Estado. TERCERO: En este sentido, los alcances generales y
vinculantes que poseen dentro de nuestro sistema jurídico las
sentencias dictadas en los procesos de inconstitucionalidad y
acción popular no derivan de algún orden de primacía en el órgano
que las dicta o algún tipo de predominio en el aparato jurisdiccional
de una autoridad frente a otra, sino del hecho que lo declarado en
ellas se sustenta específicamente en el principio de supremacía
constitucional, consagrado en el artículo 51 de la Constitución
Política del Estado; y, en esta medida, la decisión adoptada en este
tipo de procesos, constituye la plasmación de dicho principio en
relación al asunto específico sometido a juicio. CUARTO: En el
presente caso, a partir del análisis de los autos puede desprenderse
que el petitorio debatido en el proceso se encuentra referido al
pago actualizado de bonos de la deuda agraria y, en atención a
ello, esta Suprema Sala considera necesario tener en cuenta la
resolución dictada por el Tribunal Constitucional el dieciséis de julio
de dos mil trece, en el proceso de inconstitucionalidad seguido en
el expediente N° 00022-1996-PI/TC, en la cual, dentro de la etapa
de ejecución de la sentencia definitiva dictada en el mismo proceso,
ha precisado algunas medidas destinadas a determinar el
modo en que el Estado deberá cumplir con la obligación de
pago de los bonos de la deuda agraria. QUINTO: Según lo
74048
CASACIÓN
expuesto en los parágrafos precedentes, la consideración a los
lineamientos expuestos en la referida resolución se desprende del
deber de respetar el principio de supremacía constitucional,
consagrado en el artículo 51 de la Constitución Política del Estado,
independientemente del origen que ésta tenga; por lo que, a criterio
de este Supremo Colegiado, la solución definitiva de la presente
controversia no podrá ser dictada válidamente por el órgano
jurisdiccional mientras no se establezcan adecuada y
motivadamente los alcances que dicha resolución tendrá para este
caso. SEXTO: Siendo ello así, se desprende que, más allá de las
denuncias casatorias descritas en la parte introductoria de la
presente resolución, la vigencia de lo dispuesto en el artículo 82 del
Código Procesal Constitucional y el artículo 51 de la Constitución
Política del Estado hacen necesario amparar el recurso interpuesto,
con el propósito que los órganos jurisdiccionales de mérito valoren
los efectos que en el presente caso produzca lo resuelto en el
proceso de inconstitucionalidad N° 00022-1996-PI/TC. SÉTIMO:
Que, por último, no se puede dejar de advertir de la revisión de los
actuados que solamente obran copias fotostáticas certificadas de
los Bonos Agrarios materia de la presente demanda, por lo que a
consideración de este Colegiado Supremo, el A quo debe requerir
la remisión de los originales Bonos Agrarios, fundamento de la
presente demanda a fin de verificar su autenticidad; así como
solicitar al Ministerio de Economía y Finanzas informe sobre la
emisión de los bonos en cuestión y quiénes son sus titulares. IV.
DECISIÓN: Por tales consideraciones: declararon FUNDADO el
recurso de casación interpuesto por el Procurador Público del
Ministerio de Economía y Finanzas obrante a fojas trescientos
cuarenta y dos, de fecha quince de febrero de dos mil trece; en
consecuencia NULA la sentencia de vista de fecha veintidós de
enero de dos mil trece, obrante a fojas trescientos treinta y cuatro;
e INSUBSISTENTE la sentencia apelada de fecha veintiocho de
junio de dos mil doce, obrante a fojas doscientos treinta y ocho;
ORDENARON al A quo que dicte un NUEVO PRONUNCIAMIENTO
en atención a los lineamientos precedentes; DISPUSIERON la
publicación de la presente resolución en el Diario Oficial “El
Peruano” conforme a ley; en los autos seguidos por la Hacienda
Media Luna Sociedad Anónima contra el Ministerio de Economía y
Finanzas y otros, sobre Pago de Bonos de la Deuda Agraria y otro;
y los devolvieron. Juez Supremo Ponente: Vinatea Medina. S.S.
SIVINA HURTADO, WALDE JÁUREGUI, VINATEA MEDINA,
RUEDA FERNÁNDEZ, MALCA GUAYLUPO C-1335410-23
CAS. Nº 9065 - 2013 LIMA
Lima, catorce de enero de dos mil catorce. VISTOS; con su
acompañado; y CONSIDERANDO: Primero.- Viene a conocimiento
de esta Sala Suprema el recurso de casación interpuesto por Zoila
Eudocia Olaechea Viuda de Del Carpio, de fecha quince de febrero
de dos mil trece, a fojas cuatrocientos uno, contra la sentencia de
vista de fecha veinticuatro de julio de dos mil doce, obrante a fojas
trescientos setenta y dos, que revocando la sentencia apelada que
declara infundada la demanda, la reforma declarándola fundada en
parte; recurso que reúne los requisitos de forma para su
admisibilidad, conforme a lo previsto en el artículo 387° del Código
Procesal Civil, modificado por la Ley N° 29364,concordante con el
artículo 32 de la Ley N° 27584; por ello corresponde examinar si
reúne los requisitos de fondo. Segundo.- Que, el artículo 386° del
Código Procesal Civil,modificado por la Ley Nº 29364, señala que
el recurso de casación se sustenta en: i) La infracción normativa
que incida directamente sobre la decisión contenida en la resolución
impugnada, ii) En el apartamiento inmotivado del precedente
judicial. Tercero.- Que, los numerales 2 y 3 del artículo 388° del
Código Procesal Civil, modificado por la Ley Nº 29364, establece
que constituye requisito de fondo del recurso, que se describa con
claridad y precisión la infracción normativa o el apartamiento del
precedente judicial, expresando en cuál de las causales descritas
en el modificado artículo 386° de este Código acotado se sustenta
y, según el caso, debe precisarse cómo debe ser la debida
aplicación o cuál es la interpretación correcta de la norma de
derecho material; cuál debe ser la norma de derecho material
aplicable; o en qué ha consistido la afectación del derecho al
debido proceso o cuál ha sido la formalidad procesal incumplida;
así como el demostrar la incidencia directa de la infracción sobre la
decisión impugnada. Cuarto.- Que la parte recurrente denuncia
como agravio, la infracción normativa expresada en la falta de
motivación interna del razonamiento, sosteniendo que la
inferencia que extrae la sentencia de vista no guarda relación
lógica con la premisa que se propone, pues no se individualizan los
bienes que son materia del contrato, simplemente alude de manera
genérica a dos solares, cuyas medidas y linderos no coinciden en
forma alguna con el inmueble que fue materia del procedimiento
administrativo. En suma, alega que dicha infracción normativa se
encuentra sustentada en los términos establecidos en el
fundamento siete, literal b) de la sentencia expedida en el
Expediente N° 00728-2008-PHC/TC. Quinto.-Que, analizando la
causal denunciada en el considerando anterior, se advierte que no
cumple con el requisito de procedencia señalado en el inciso 3 del
artículo 388 del Código Procesal Civil, modificado por la Ley Nº
29364, ya que no solo basta indicar la infracción normativa en que
se ha incurrido, sino que también se debe señalar como la misma
incide directamente sobre la decisión contenida en la resolución
impugnada, esto es, debe indicar como dicha infracción hizo emitir
un pronunciamiento judicial que no se encuentra conforme a Ley, lo
El Peruano
Lunes 1 de febrero de 2016
cual no se ha cumplido; limitándose la recurrente a cuestionar el
criterio asumido por las instancias de mérito, señalando que no se
ha respetado su derecho al debido proceso; en ese sentido, se
puede verificar de autos que la Sala de mérito ha establecido que
la autoridad administrativa no agotó las vías necesarias para poder
determinar de manera fehaciente si el predio que reclama la
demandante forma parte del predio que posee la recurrente,
posesión que ha sido reconocida por Organismo de Formalización
de la Propiedad Informal - COFOPRI mediante procedimiento
administrativo; más aún, si en autos se ha admitido como medio
probatorio el contrato de anticresis de fecha dos de diciembre de
mil novecientos setenta y cuatro, donde se aprecia que el padre de
la demandante Belisario Ampuero Salazar entregó dos solares de
mil metros cuadrados (1000 m2) y otro de cuatrocientos ochenta y
tres metros cuadrados (483 m2) al padre de la recurrente Guillermo
Olaechea Romero, a fin de garantizar un préstamo de treinta mil
soles oro, otorgado a favor del primero; siendo así, la causal así
denunciada deviene en improcedente, por no haberse demostrado
la infracción de la sentencia recurrida. Por las razones expuestas,
al no haberse satisfecho las exigencias de fondo a que hace
referencia el modificado artículo 388° del Código Procesal Civil, en
ejercicio de la facultad conferida por el artículo 392° del acotado
Código, declararon: IMPROCEDENTE el recurso de casación
interpuesto por Zoila Eudocia Olaechea Viuda de Del Carpio, de
fecha quince de febrero de dos mil trece, a fojas cuatrocientos uno,
contra la sentencia de vista de fecha veinticuatro de julio de dos mil
doce, obrante a fojas trescientos setenta y dos; MANDARON
publicar la presente resolución en el diario oficial “El Peruano”
conforme a ley; en los seguidos por Luz A. Ampuero Llamosas
contra el Organismo de Formalización de la Propiedad Informal COFOPRI, sobre proceso contencioso administrativo; y los
devolvieron. Vocal Ponente: Vinatea Medina. S.S. SIVINA
HURTADO, ACEVEDO MENA, VINATEA MEDINA, RUEDA
FERNÁNDEZ, MALCA GUAYLUPO. Lima, catorce de enero de dos
mil catorce. VISTOS; con su acompañado; y CONSIDERANDO:
Primero.- Viene a conocimiento de esta Sala Suprema el recurso
de casación interpuesto por el Procurador Público del Organismo
de Formalización de la Propiedad Informal - COFOPRI, de fecha
trece de febrero de dos mil trece, a fojas trescientos ochenta y
ocho, contra la sentencia de vista de fecha veinticuatro de julio de
dos mil doce, obrante a fojas trescientos setenta y dos, que
revocando la sentencia apelada que declara infundada la demanda,
la reforma declarándola fundada en parte; recurso que reúne los
requisitos de forma para su admisibilidad, conforme a lo previsto en
el artículo 387° del Código Procesal Civil, modificado por la Ley N°
29364, concordante con el artículo 32 de la Ley N° 27584; por ello
corresponde examinar si reúne los requisitos de fondo. Segundo.Que, el artículo 386° del Código Procesal Civil, modificado por la
Ley Nº 29364, señala que el recurso de casación se sustenta en: i)
la infracción normativa que incida directamente sobre la decisión
contenida en la resolución impugnada, ii) en el apartamiento
inmotivado del precedente judicial. Tercero.- Que, los numerales 2
y 3 del artículo 388° del Código Procesal Civil, modificado por la
Ley Nº 29364, establece que constituye requisito de fondo del
recurso, que se describa con claridad y precisión la infracción
normativa o el apartamiento del precedente judicial, expresando en
cuál de las causales descritas en el modificado artículo 386° de
este Código acotado se sustenta y, según el caso, debe precisarse
cómo debe ser la debida aplicación o cuál es la interpretación
correcta de la norma de derecho material; cuál debe ser la norma
de derecho material aplicable; o en qué ha consistido la afectación
del derecho al debido proceso o cuál ha sido la formalidad procesal
incumplida; así como el demostrar la incidencia directa de la
infracción sobre la decisión impugnada. Cuarto.- Que la parte
recurrente denuncia como agravios: a) La infracción normativa
por inaplicación del Decreto Supremo N° 013-99-MTC, Decreto
Supremo N° 009-99-MTC, Decreto Supremo N° 039-2000-MTC y
de los artículos 2012 y 2016 del Código Civil; alega que lo
pretendido por la accionante es revocar un acto civil, situación que
obviamente
resulta
inconsistente,
pues
la
ficha
de
empadronamiento, las inspecciones realizadas en el lote materia
de litis y a los medios probatorios adjuntados es un acto de
administración interna que no resulta vinculante y no genera
derecho de propiedad de por si, dentro del proceso de formalización
urbana, la misma que contiene fases donde se prevé la etapa de
impugnación contra la calificación del posesionario, lo cual
suspende la situación del predio hasta que se resuelva el
procedimiento administrativo de impugnación, siendo el estadio
natural para hacer prosperar cualquier divergencia referida a la
posesión, la misma que debió concluir con la resolución expedida
por el Tribunal Administrativo de la Propiedad, pasible de ser
impugnada válidamente ante el Poder Judicial en la vía Contenciosa
Administrativa; entendiendo que resulta prematura pretender
nulificar civilmente un acto administrativo que a tenor del artículo
148 de la Constitución Política tiene un cauce natural legal. Agrega,
que en el caso de autos, los actores aparentemente jamás hicieron
uso de este derecho, debiendo revocarse la recurrida, pues en el
fondo pretenden nulificar un acto administrativo, no siendo idónea
las acciones civiles sino la contenciosa administrativa, tal como lo
dispone el artículo 4 numeral 1 del Decreto Supremo Nº 013-2008JUS, Texto Único Ordenado de la Ley Nº 27584, Ley del Proceso
Contencioso Administrativo; y b) La infracción normativa por
contravención del derecho al debido proceso contenido en el
El Peruano
Lunes 1 de febrero de 2016
CASACIÓN
artículo I del Título Preliminar, artículo 386 numeral 3 del
Código Procesal Civil y artículo 139 numeral 3 de la
Constitución Política; sobre el particular, no se advierte
fundamentación. Quinto.- Que, analizando la causal descrita en el
acápite a) se advierte que lo realmente cuestionado por el
impugnante es la situación fáctica establecida en sede de instancia,
así como revisión del análisis a que han arribado los Jueces, lo cual
no es permitido en sede casatoria, pues se pretende forzar a esta
Sala Suprema a emitir un nuevo pronunciamiento sobre el fondo
del asunto, lo que no se condice con los fines del recurso
extraordinario de casación, que es la interpretación del derecho
objetivo y la unificación de los criterios de la Corte Suprema.
Aunado a ello, cabe señalar que en la sentencia impugnada se ha
determinado que la recurrente como autoridad administrativa no
agotó las vías pertinentes para poder acreditar de manera
fehaciente si el predio otorgado a favor de la demandada Zoila
Eudocia Olaechea Viuda de Del Carpio, perteneció o no a Belisario
Ampuero Salazar padre de la actora, pues con la Resolución
Administrativa N° 061-2008-COFOPRI/TAP expedida por la
recurrente de fecha veintiocho de marzo de dos mil nueve, se
estaría afectando el derecho de propiedad de la demandante. En
consecuencia, la causal así propuesta deviene en improcedente,
al no cumplir con lo establecido en el inciso 3° del artículo 388 del
Código Procesal Civil, al no haber demostrado la incidencia de la
causal denunciada sobre lo resuelto en la sentencia recurrida.
Sexto: Sobre la causal denunciada en el acápite b) la misma no ha
cumplido con lo establecido en el inciso 2° del artículo 388 del
Código Procesal Civil, al no haber descrito la infracción en que
habría incurrido la sentencia impugnada, deviniendo en
improcedente la causal propuesta. Por las razones expuestas, al
no haberse satisfecho las exigencias de fondo a que hace
referencia el artículo 388° del Código Procesal Civil, en ejercicio de
la facultad conferida por el artículo 392° del acotado Código,
declararon: IMPROCEDENTE el recurso de casación interpuesto
por el Procurador Público del Organismo de Formalización de la
Propiedad Informal - COFOPRI, de fecha trece de febrero de dos
mil trece, a fojas trescientos ochenta y ocho, contra la sentencia de
vista de fecha veinticuatro de julio de dos mil doce, obrante a fojas
trescientos setenta y dos, que revocando la sentencia apelada que
declara infundada la demanda, la reforma declarándola fundada en
parte; MANDARON publicar la presente resolución en el diario
oficial “El Peruano”; en los seguidos por Luz A. Ampuero Llamosas,
contra el Organismo de Formalización de la Propiedad Informal COFOPRI, sobre proceso contencioso administrativo; y los
devolvieron. Vocal Ponente: Vinatea Medina. S.S. SIVINA
HURTADO, ACEVEDO MENA, VINATEA MEDINA, RUEDA
FERNÁNDEZ, MALCA GUAYLUPO C-1335410-24
CAS. Nº 9279-2012 CUSCO
Lima, veintiséis de junio de dos mil catorce. LA SALA DE
DERECHO CONSTITUCIONAL Y SOCIAL PERMANENTE DE
LA CORTE SUPREMA DE JUSTICIA DE LA REPÚBLICA:
VISTA; con los acompañados; la causa en Audiencia Pública
llevada a cabo en la fecha, integrada por los Jueces Supremos
Walde Jáuregui-Presidente, Acevedo Mena, Vinatea Medina,
Rueda Fernández y Malca Guaylupo; producida la votación con
arreglo a ley, se ha emitido la siguiente sentencia: I.- MATERIA
DEL RECURSO DE CASACION: Se trata del recurso de casación
interpuesto por don Marco Antonio Guerra Guerra a fojas
cuatrocientos noventa y ocho, contra la sentencia de vista del
veintiséis de julio de dos mil doce, obrante a fojas cuatrocientos
ochenta y siete que revocando la sentencia apelada de fecha
veintitrés de febrero de dos mil doce obrante a fojas trescientos
noventa y cuatro y reformándola declaró fundada la demanda. II.FUNDAMENTOS POR LOS CUALES SE HA DECLARADO
PROCEDENTE EL RECURSO: Esta Sala Suprema mediante
resolución de fecha dieciocho de abril de dos mil trece, obrante a
fojas setenta y uno del cuaderno formado en esta Sala Suprema,
ha declarado procedente el recurso de casación por la causal de:
a) infracción normativa por aplicación indebida del artículo
219 incisos 4 y 5 del Código Civil, alega que no se ha acreditado
la ilicitud en cuanto a su fin, pues no está demostrado que los
demandados hayan celebrado un contrato con simulación
absoluta, como se ha concluido en la sentencia impugnada;
además el Colegiado se ha basado en doctrina subjetiva,
conforme es de verse del considerando cuarto, de la sentencia
cuestionada, la cual le causa agravio a su derecho como
propietario y como vendedor de su propiedad; y b) Infracción
normativa por inaplicación de los artículos 1409, 1430 y 1481
del Código Civil, sostiene que la prueba que el acto jurídico de
compraventa de fecha dieciséis de febrero de dos mil nueve es
lícito, es porque el Tribunal Registral de Arequipa, ordenó la
Inscripción Registral de dicha Escritura Pública, toda vez que la
medida cautelar dictada por el Primer Juzgado Mixto de Canchis
a favor del demandante era inaplicable, porque ninguna autoridad
judicial puede privar el derecho a la libertad y voluntad de la parte
en litigio de transferir su propiedad. III.- CONSIDERANDO:
Primero: Mediante el presente proceso, el actor pretende la
nulidad del acto jurídico de compraventa del predio denominado
Occobamba Norte; y como pretensión originaria accesoria la
nulidad de la escritura pública que la contiene y la cancelación de
la inscripción registral. Como sustento de la demanda sostiene el
actor que con fecha primero de setiembre del dos mil siete, el
74049
demandado Marco Antonio Guerra Guerra y los demandantes
celebraron un contrato de compromiso de compraventa y
enajenación perpetua sobre el predio denominado Occobamba
Norte del distrito de Checaupe, de la provincia de Canchis- Cusco,
fijándose como precio la suma de sesenta y cinco mil dólares
americanos ($65,000.00 dólares americanos) y estando al
compromiso adquirido se entregó cuarenta mil dólares americanos
($ 40,000 mil dólares americanos), quedando como saldo la suma
de veinticinco mil dólares americanos ($ 25,000 mil dólares
americanos), que se encuentran depositados en el Banco
Continental - Sucursal del Cusco mediante cheque de gerencia
N° 00002447-1-011-204-0900000021-57 de fecha veinticinco de
setiembre de dos mil ocho. Ante los hechos expuestos, los
demandantes iniciaron un proceso de Obligación de Hacer ante el
Primer Juzgado Mixto de Canchis y un proceso penal por
estelionato. El demandado ha vendido el bien denominado
Occobamba Norte a su hijo Juan Antonio Guerra Montoya, con
fecha dieciséis de febrero de dos mil nueve. Sobre el bien pesa
una medida cautelar de anotación de demanda, admitida
mediante resolución número dos de fecha veinticuatro de
diciembre de dos mil ocho en el proceso signado con el N° 2008407. Segundo: Por sentencia de primera instancia de fecha
veintitrés de febrero de dos mil doce de fojas trescientos noventa
y cuatro se ha declarado infundada la demanda, sosteniendo el
Juez de la causa que en la suscripción del acto jurídico
cuestionado no ha existido fin ilícito, al no haberse contravenido
el ordenamiento jurídico. Señala el A quo que habiendo precisado
el demandante que interpuso una denuncia por los delitos de
estafa y otras defraudaciones sub tipo de estelionato, en su
modalidad de venta de bien litigioso, en grado consumado en
agravio del actor, éste no propuso pruebas que acrediten que
efectivamente se llegó a cometer dichos delitos; en consecuencia,
no se ha acreditado la forma mínima de simulación absoluta en el
acto jurídico cuestionado, pues no se celebró para engañar a
terceros. Tercero: Por sentencia de segunda instancia, de fecha
veintiséis de julio de dos mil doce de fojas cuatrocientos ochenta
y siete, la Sala Civil del Cusco revocando la sentencia apelada
que declaró infundada la demanda; la reformó declarándola
fundada en todos sus extremos; en consecuencia nulo el acto
jurídico de compraventa celebrado entre Marco Antonio Guerra
Guerra y Juan Antonio Guerra Montoya, respecto al predio
denominado Occobamba Norte, así como nula también la
escritura pública de fecha dieciséis de febrero de dos mil ocho
que lo contiene; ordenándose la cancelación de la inscripción
registral contenida en el asiento C- 000047 de la Partida Registral
N° 11016051 del Registro de Propiedad Inmueble de la Oficina
Registral de Cusco. La Sala de mérito, fundamenta su decisión
señalando que la transferencia fue celebrada con posterioridad al
inicio del proceso de Obligación de Hacer que entablara el
demandante en contra de los demandados, bajo el Expediente
N°2008-407; que los celebrantes demandados han actuado bajo
lo prescrito por el artículo 219 inciso 5 del Código Civil, por
simulación absoluta. Cuarto: Con relación al tema de acto
jurídico, conforme a nuestro Código Civil, se aprecian dos tipos de
invalidez del acto jurídico, la nulidad y la anulabilidad. Sobre el
acto jurídico nulo, se entiende aquel al que le falta un elemento o
requisito, sea contrario a las leyes que interesan al orden público
o buenas costumbres, o cuando infrinja una norma imperativa.
Las causales de nulidad del acto jurídico dentro del Código
sustantivo, están contempladas en su artículo 219, precisándose:
“1.- Cuando falta la manifestación de voluntad del agente. 2.Cuando se haya practicado por persona absolutamente incapaz,
salvo lo dispuesto en el artículo 1358. 3.- Cuando su objeto es
física o jurídicamente imposible o cuando sea indeterminable. 4.Cuando su fin sea ilícito. 5.- Cuando adolezca de simulación
absoluta. 6.- Cuando no revista la forma prescrita bajo sanción de
nulidad. 7.- Cuando la ley lo declara nulo. 8.- En el caso del
artículo V del Título Preliminar, salvo que la ley establezca
sanción diversa.” Quinto: Cabe precisar que la causal de nulidad
por fin ilícito, contemplada en el artículo 219 numeral 4 del Código
Civil, se ha determinado en base a lo prescrito en el artículo 140
numeral 3 del citado Código que prevé que el acto jurídico es la
manifestación de voluntad destinada a crear, regular, modificar o
extinguir relaciones jurídicas y para su validez se requiere un fin
lícito. En ese sentido, será nulo todo acto jurídico celebrado cuya
causa sea ilícita por contravenir las normas que interesan al
orden público o a las buenas costumbres, precisándose que la
ilicitud es de carácter netamente subjetivo. Sexto: Luego de las
precisiones que preceden, esta Sala Suprema verifica que con la
decisión arribada en segunda instancia no se ha incurrido en la
causal de infracción normativa del artículo 219 incisos 4 y 5 del
Código Civil, toda vez que la Sala de mérito conforme a lo previsto
en el artículo 219 del Código citado ha concluido que el
demandando Marco Antonio Guerra Guerra, pese al conocimiento
que tenía de la obligación contraída con los demandantes,
procedió a realizar una segunda enajenación sobre el mismo
bien, lo cual encuadra dentro de la figura contenida en el numeral
4 del artículo 219 del acotado Código bajo referencia, por tratarse
de un acto jurídico cuyo fin sería ilícito, pues con la actuación del
demandado se podría estar evadiendo una responsabilidad a la
cual previamente se obligó cumplir; en consecuencia, este
extremo del recurso deviene en infundado. Sétimo: Sobre la
denuncia de infracción normativa por inaplicación de los
74050
CASACIÓN
artículos 1409, 1430 y 1481 del Código Civil, el recurrente ha
alegado en síntesis que la prueba que el acto jurídico de
compraventa de fecha dieciséis de febrero de dos mil nueve es
lícito, es porque el Tribunal Registral de Arequipa, ordenó la
Inscripción Registral de dicha Escritura Pública. Al respecto, el
artículo 1409 del Código Civil regula que la prestación materia de
la obligación creada por el contrato puede versar sobre bienes
futuros, ajenos o afectados en garantía o embargados o
sujetos a litigio por cualquier otra causa; el artículo 1430 del
Código Civil prescribe que puede convenirse expresamente
que el contrato se resuelva cuando una de las partes no
cumple determinada prestación a su cargo, establecida con
toda precisión; y por su parte el artículo 1481 del mismo cuerpo
legal, establece los efectos de la retractación entre las partes,
en ese sentido señala que si se retracta la parte que entrega las
arras, las pierde en provecho del otro contratante. Si se retracta
quien recibe las arras, debe devolverlas dobladas al tiempo de
ejercitar el derecho. Octavo: Como se ha señalado en los
considerandos que anteceden, a través del presente proceso el
actor pretende la nulidad del acto jurídico de compraventa del
predio denominado Occobamba Norte; y como pretensión
originaria accesoria la nulidad de la escritura pública que la
contiene y la cancelación de la inscripción registral. En el caso de
autos, las partes han celebrado un contrato de compromiso de
compraventa y enajenación perpetua sobre el predio denominado
Occobamba Norte. Los demandantes iniciaron un proceso de
obligación de hacer ante el Primer Juzgado Mixto de Canchis y un
proceso penal por estelionato, por cuanto el demandado vendió el
bien referido a su hijo Juan Antonio Guerra Montoya, con fecha
dieciséis de febrero de dos mil nueve, pese a la medida cautelar
de anotación de demanda admitida mediante resolución número
dos de fecha veinticuatro de diciembre de dos mil ocho en el
proceso signado con el N° 2008-407. Puede verificarse en sede
casatoria que las normas denunciadas no resultan aplicables al
caso en controversia por cuanto regulan supuestos de hecho
distintos a los supuestos de hecho de la materia en controversia;
en consecuencia, este extremo del recurso deviene en infundado,
por cuanto las normas invocadas no guardan relación con lo
pretendido en el presente proceso de nulidad de acto jurídico.
IV.- DECISION: Por estas consideraciones Declararon:
INFUNDADO el recurso de casación interpuesto por don Marco
Antonio Guerra Guerra a fojas cuatrocientos noventa y ocho, en
consecuencia NO CASARON la sentencia de vista del veintiséis
de julio de dos mil doce, obrante a fojas cuatrocientos ochenta y
siete; y, DISPUSIERON la publicación de la presente resolución
en el Diario Oficial “El Peruano” conforme a ley; en los seguidos
por don Pastor Domiciano Ccama Aroni y otra contra Marco
Antonio Guerra Guerra y otro, sobre Nulidad de Acto Jurídico; y
los devolvieron. Juez Supremo Ponente Vinatea Medina. S.S.
WALDE JAUREGUI, ACEVEDO MENA, VINATEA MEDINA,
RUEDA FERNANDEZ, MALCA GUAYLUPO C-1335410-25
CAS. Nº 9529-2013 LIMA
Lima, catorce de marzo de dos mil catorce. VISTOS; y
CONSIDERANDO: Primero: El recurso de casación interpuesto
por Alejandro Gutiérrez Piedra, obrante a fojas seiscientos
noventa y uno, contra la sentencia de vista de fecha catorce de
marzo de dos mil trece, de fojas seiscientos cincuenta y seis;
cumple con los requisitos de forma que para su admisibilidad
exige el artículo 57 de la Ley Nº 26636, Ley Procesal del Trabajo,
modificado por el artículo 1 de la Ley Nº 27021. Segundo: El
artículo 58 de la Ley N° 26636, modificado por el artículo 1 de la
Ley N° 27021, prescribe que el recurso de casación deberá estar
fundamentado con claridad, señalando con precisión las causales
descritas en el artículo 56 de la Ley N° 26636, modificado por el
artículo 1 de la Ley N° 27021 en que se sustenta, esto es: a) La
aplicación indebida de una norma de derecho material; b) La
interpretación errónea de una norma de derecho material; c) La
inaplicación de una norma de derecho material; y, d) La
contradicción con otras resoluciones expedidas por la Corte
Suprema de Justicia o las Cortes Superiores, pronunciadas en
casos objetivamente similares, siempre que dicha contradicción
esté referida a una de las causales anteriores; y, según el caso: i)
Qué norma ha sido indebidamente aplicada y cuál es la que debió
aplicarse; ii) Cuál es la correcta interpretación de la norma; iii)
Cuál es la norma inaplicada y porqué debió aplicarse; y, iv) Cuál
es la similitud existente entre los pronunciamientos invocados y
en qué consiste la contradicción. Tercero: Antes de entrar al
análisis de los requisitos de fondo resulta necesario precisar que,
el recurso de casación es un medio impugnatorio extraordinario
de carácter formal que sólo puede fundarse en cuestiones
eminentemente jurídicas y no en cuestiones fácticas o de
revaloración probatoria, es por ello que este medio impugnatorio,
en materia laboral, tiene como fines esenciales la correcta
aplicación e interpretación de las normas materiales en esta
materia y la uniformidad de la jurisprudencia nacional por la Corte
Suprema, conforme al artículo 54 de la Ley Procesal del Trabajo;
en ese sentido su fundamentación por parte del recurrente debe
ser clara, precisa y concreta indicando ordenadamente cuáles
son las causales denunciadas, las mismas que no pueden estar
orientadas a una revaloración de los elementos fácticos ni de los
medios probatorios dado que aquello desnaturalizaría el presente
recurso. Cuarto: El recurrente denuncia como causal del recurso
El Peruano
Lunes 1 de febrero de 2016
de su propósito: a) La interpretación errónea del artículo 29 del
Decreto Supremo N° 003-97-TR; b) La inaplicación de los
incisos 3 y 5 del artículo 139 de la Constitución Política; y, c)
La contradicción con otras sentencias de la Corte Suprema.
Quinto: En relación a la causal de interpretación errónea del
artículo 29 del Decreto Supremo N° 003-97-TR, alega que la
Sala erróneamente considera que cuando la norma establece
causales de nulidad de despido, se trata de causales inmutables
y que solamente por ellas pueden ocasionar la nulidad del
despido, afirmando que la norma no deja abierta la posibilidad
que por la vía análoga o por la interpretación extensiva se puedan
incorporar nuevas causales; omitiendo considerar el principio de
continuidad y la doctrina referente a la suspensión imperfecta de
labores. Agrega que, es posible que una sentencia de acción de
amparo pueda lograr los efectos previstos en el artículo 40 del
Decreto Supremo N° 003-97-TR, partiendo del supuesto básico
que en ambos casos el cese del trabajador carece de validez, por
lo que debe reputarse que no se produjo. Sexto: Sobre esta
causal, es pertinente señalar que no cumple con el requisito
establecido en el artículo 58 de la Ley N° 26636, modificado por
el artículo 1 de la Ley N° 27021, toda vez que no precisa con
claridad el error de derecho en el que habría incurrido la sentencia
cuestionada; por el contrario, se advierte que sus argumentos
están dirigidos principalmente a cuestionar situaciones fácticas y
de revaloración probatoria, relacionadas con el pago de las
remuneraciones devengadas que pretende, sin considerar que la
Sala de mérito determina con suma claridad que dicho beneficio
es propio de la figura jurídica del despido nulo y no puede ser
aplicado por analogía o interpretación extensiva a los casos de
reposición obtenido mediante un proceso de amparo; por lo que,
al encontrarse establecido que la sede casatoria no constituye
una tercera instancia en la que pueda argumentarse cuestiones
fácticas o de revaloración probatoria, deviene en improcedente
este extremo del recurso. Sétimo: Respecto a la causal de
inaplicación de los incisos 3 y 5 del artículo 139 de la
Constitución Política, menciona que la sentencia de vista
carece de motivación interna y externa, al no haber tenido en
cuenta que la Sala Constitucional y Social ha emitido
pronunciamientos en casos similares al de autos, en los que se
determina la procedencia de la pretensión del demandante.
Octavo: En referencia a la causal descrita, es pertinente señalar
que dicha norma procesal debió ser invocada bajo la causal de
contravención de las normas que garantizan el derecho a un
debido proceso, aplicable de manera excepcional en los procesos
laborales, y no bajo una causal reservada sólo para normas
materiales; por lo que, debe ser declarado improcedente. Sin
perjuicio de ello, se advierte que los argumentos que expone
tampoco se encuentran dirigidos a denunciar la afectación al
debido proceso, por cuanto omite describir en qué consiste el
agravio, limitándose a definir los alcances de dicho derecho
fundamental; por lo que, una vez más este extremo del recurso
casatorio resulta improcedente. Noveno: En relación a la
denuncia de contradicción con otras sentencia de la Corte
Suprema, sostiene que la Sala de mérito no toma en cuenta al
momento de sentencia, que los criterios o fundamentos con los
que pretende sustentar su fallo, ya han sido mucho tiempo atrás
objeto de variación de criterio y por el contrario establecido como
criterio nuevo, que este tipo de pretensiones son amparables para
el demandante; asimismo, no se toma en cuenta que la propia
Corte Interamericana de Derechos Humanos, consagra el
derecho de los magistrados afectados a ser resarcidos en sus
salarios y prestaciones dejadas de percibir disponiendo en su
fundamento ciento veintiuno que, el Estado pague los salarios
caídos y demás derechos laborales que le corresponden durante
el periodo que duro su indebida destitución. Además no se toma
en cuenta el Pleno Jurisdiccional Nacional Laboral que establece
la posibilidad de que las remuneraciones dejadas de percibir con
ocasión del despido de un trabajador repuesto por un proceso de
amparo, pueden ser reclamadas en uno de pago de beneficios
sociales y/o en un proceso de indemnización por daños y
perjuicios. Décimo: Sobre el particular, es de indicarse que luego
de examinar los argumentos que propone el recurrente, se
aprecia que estos están dirigidos a cuestionar el orden fáctico y
jurídico establecido por la Sala de mérito, pretendiéndose con ello
que este Supremo Tribunal efectúe una nueva apreciación de los
hechos y subsecuente valoración probatoria, a fin de determinar
la procedencia del pago de remuneraciones devengadas en los
casos de trabajadores repuestos por amparo; actividad que
resulta ajena a los fines del recurso de casación previstos en el
artículo 54 de la Ley Procesal del Trabajo N° 26636, modificado
por la Ley N° 27021; tanto más, si conforme hemos referido
precedentemente, la Sala de mérito concluye válidamente que los
efectos de una acción de amparo, no puede equipararse a los
efectos de un despido nulo, toda vez que los mismos se
encuentran taxativamente regulados en el Decreto Supremo N°
003-97-TR; razón por la cual, el agravio en examen debe ser
declarado improcedente. En consecuencia, el recurso de
casación no cumple con los requisitos de fondo necesarios para
su procedencia, por lo que, corresponde proceder a este
Colegiado con la facultad conferida por la parte in fine del artículo
58 de la Ley Procesal del Trabajo, modificado por el artículo 1 de
la Ley Nº 27021, declarando: IMPROCEDENTE el recurso de
casación interpuesto por Alejandro Gutiérrez Piedra, obrante a
El Peruano
Lunes 1 de febrero de 2016
CASACIÓN
fojas seiscientos noventa y uno, contra la sentencia de vista de
fecha catorce de marzo de dos mil trece, de fojas seiscientos
cincuenta y seis; y, ORDENARON publicar la presente resolución
en el Diario Oficial “El Peruano” conforme a ley; en los seguidos
por Alejandro Gutiérrez Piedra contra la Superintendencia
Nacional de Administración Tributaria - SUNAT, sobre Pago de
remuneraciones devengadas; y los devolvieron. Vocal Ponente:
Vinatea Medina. S.S. SIVINA HURTADO, ACEVEDO MENA,
VINATEA MEDINA, RUEDA FERNÁNDEZ, MALCA GUAYLUPO
C-1335410-26
CAS. Nº 9671-2013 HUAURA
Lima, veintiocho de marzo de dos mil catorce. VISTOS; con los
acompañados; y, CONSIDERANDO: Primero: Es materia de
revisión el recurso de casación interpuesto por la demandada
Pronto Gas Sociedad Anónima, obrante a fojas quinientos cinco,
contra la sentencia de vista de fecha veintiocho de mayo de dos
mil trece, de fojas cuatrocientos ochenta y ocho; cumple con los
requisitos de forma que para su admisibilidad exige el artículo
57 de la Ley Nº 26636, Ley Procesal del Trabajo, modificado por
el artículo 1 de la Ley Nº 27021. Segundo: El artículo 58 de la
Ley N° 26636, modificado por el artículo 1 de la Ley N° 27021,
prescribe que el recurso de casación deberá estar fundamentado
con claridad, señalando con precisión las causales descritas en
el artículo 56 de la Ley N° 26636, modificado por el artículo 1 de
la Ley N° 27021 en que se sustenta, esto es: a) La aplicación
indebida de una norma de derecho material; b) La interpretación
errónea de una norma de derecho material; c) La inaplicación de
una norma de derecho material; y, d) La contradicción con otras
resoluciones expedidas por la Corte Suprema de Justicia o las
Cortes Superiores, pronunciadas en casos objetivamente similares,
siempre que dicha contradicción esté referida a una de las causales
anteriores; y, según el caso: i) Qué norma ha sido indebidamente
aplicada y cuál es la que debió aplicarse; ii) Cuál es la correcta
interpretación de la norma; iii) Cuál es la norma inaplicada y
porqué debió aplicarse; y, iv) Cuál es la similitud existente entre
los pronunciamientos invocados y en qué consiste la contradicción.
Tercero: Antes de entrar al análisis de los requisitos de fondo
resulta necesario precisar que, el recurso de casación es un medio
impugnatorio extraordinario de carácter formal que sólo puede
fundarse en cuestiones eminentemente jurídicas y no en cuestiones
fácticas o de revaloración probatoria, es por ello que este medio
impugnatorio, en materia laboral, tiene como fines esenciales la
correcta aplicación e interpretación de las normas materiales en
esta materia y la uniformidad de la jurisprudencia nacional por la
Corte Suprema, conforme al artículo 54 de la Ley Procesal del
Trabajo; en ese sentido su fundamentación por parte del recurrente
debe ser clara, precisa y concreta indicando ordenadamente
cuáles son las causales denunciadas, las mismas que no pueden
estar orientadas a una revaloración de los elementos fácticos ni
de los medios probatorios dado que aquello desnaturalizaría el
presente recurso. Cuarto: El recurrente denuncia como causales
del recurso de su propósito: a) La inaplicación del artículo I
del Título Preliminar de la Ley Procesal del Trabajo; y b) La
inaplicación del artículo 30 de la Ley Procesal del Trabajo.
Quinto: En relación a la causal de inaplicación del artículo I
del Título Preliminar de la Ley Procesal del Trabajo Nº 26636;
alega que no se aplica el principio de oralidad, dado que no se
considera el mérito probatorio de lo afirmado por el demandante
en la Audiencia Única y que contradice el petitorio de la demanda,
es decir, que trabajó en otra empresa hasta el año mil novecientos
noventa y cuatro, empresa independiente de la empresa Pronto
Gas Sociedad Anónima, siendo incluso corroborado por el libro
de planillas de dicha empresa. Sexto: Respecto a la causal de
inaplicación del artículo 30 de la Ley Procesal del Trabajo Nº
26636; sostiene que se vulnera el principio de congruencia en la
motivación (artículo 139 inciso 5 de la Constitución), toda vez que
no existe prueba que demuestre la fecha de ingreso que alega, ya
que ha reconocido que prestó servicios para doña Aida Morales
de Drago. Siendo así, el monto establecido en la sentencia de
vista debe ser modificada. Sétimo: Sobre las causales descritas,
debemos señalar que las normas procesales referidas debieron
ser invocadas bajo la causal de contravención de las normas que
garantizan el derecho a un debido proceso, aplicable de manera
excepcional en los procesos laborales, y no bajo una causal
reservada sólo para normas materiales, por lo que, devienen
en improcedentes estos extremos del recurso. De otro lado,
conviene señalar que los argumentos que expone tampoco se
encuentran dirigidos a denunciar la afectación al debido proceso,
por cuanto se sustentan en un pedido de valoración probatoria en
el que se pueda modificar la fecha de ingreso determinada por
las instancias de mérito, lo cual no resulta procedente en sede
casatoria; por lo que, una vez más estos extremos del recurso
casatorio resultan improcedentes. En consecuencia, el recurso de
casación no cumple con los requisitos de fondo necesarios para su
procedencia, por lo que, corresponde a este Colegiado proceder
con la facultad conferida por la parte in fine del artículo 58 de la
Ley Procesal del Trabajo, modificado por el artículo 1 de la Ley
Nº 27021, declarando: IMPROCEDENTE el recurso de casación
interpuesto por la demandada Pronto Gas Sociedad Anónima,
obrante a fojas quinientos cinco, contra la sentencia de vista de
fecha veintiocho de mayo de dos mil trece, de fojas cuatrocientos
ochenta y ocho; y ORDENARON publicar la presente resolución en
74051
el Diario Oficial “El Peruano” conforme a ley; en los seguidos por
Vicente de la Cruz Ramírez contra Empresa Pronto Gas Sociedad
Anónima, sobre Pago de beneficios sociales; y los devolvieron.
Vocal Ponente: Vinatea Medina. SS. SIVINA HURTADO, WALDE
JAUREGUI, ACEVEDO MENA, VINATEA MEDINA, RUEDA
FERNÁNDEZ C-1335410-27
CAS. Nº 9837-2013 LAMBAYEQUE
Lima, veintiocho de marzo de dos mil catorce. VISTOS; y
CONSIDERANDO: Primero: Es materia de revisión el recurso
de casación interpuesto por el demandante Julio Miguel Vargas
Flores, obrante a fojas doscientos treinta y ocho, contra la
sentencia de vista de fecha veinte de marzo de dos mil doce, de
fojas doscientos treinta y dos; cumple con los requisitos de forma
que para su admisibilidad exige el artículo 57 de la Ley Nº 26636,
Ley Procesal del Trabajo, modificado por el artículo 1 de la Ley Nº
27021. Segundo: El artículo 58 de la Ley N° 26636, modificado
por el artículo 1 de la Ley N° 27021, prescribe que el recurso de
casación deberá estar fundamentado con claridad, señalando con
precisión las causales descritas en el artículo 56 de la Ley N° 26636,
modificado por el artículo 1 de la Ley N° 27021 en que se sustenta,
esto es: a) La aplicación indebida de una norma de derecho
material; b) La interpretación errónea de una norma de derecho
material; c) La inaplicación de una norma de derecho material; y,
d) La contradicción con otras resoluciones expedidas por la Corte
Suprema de Justicia o las Cortes Superiores, pronunciadas en
casos objetivamente similares, siempre que dicha contradicción
esté referida a una de las causales anteriores; y, según el caso: i)
Qué norma ha sido indebidamente aplicada y cuál es la que debió
aplicarse; ii) Cuál es la correcta interpretación de la norma; iii) Cuál
es la norma inaplicada y porqué debió aplicarse; y, iv) Cuál es la
similitud existente entre los pronunciamientos invocados y en qué
consiste la contradicción. Tercero: Antes de entrar al análisis de
los requisitos de fondo resulta necesario precisar que, el recurso
de casación es un medio impugnatorio extraordinario de carácter
formal que sólo puede fundarse en cuestiones eminentemente
jurídicas y no en cuestiones fácticas o de revaloración probatoria,
es por ello que este medio impugnatorio, en materia laboral, tiene
como fines esenciales la correcta aplicación e interpretación
de las normas materiales en esta materia y la uniformidad de
la jurisprudencia nacional por la Corte Suprema, conforme al
artículo 54 de la Ley Procesal del Trabajo; en ese sentido su
fundamentación por parte del recurrente debe ser clara, precisa
y concreta indicando ordenadamente cuáles son las causales
denunciadas, las mismas que no pueden estar orientadas a una
revaloración de los elementos fácticos ni de los medios probatorios
dado que aquello desnaturalizaría el presente recurso. Cuarto:
El recurrente denuncia como causal del recurso de su propósito,
la interpretación errónea del artículo 4 del Decreto Supremo
N° 003-97-TR referida a elementos esenciales que determinan
la existencia de un contrato de trabajo; transcribe la sentencia
de vista (del quinto al undécimo considerando) para indicar que
resulta errónea la interpretación que efectúa la Sala de mérito;
y, para señalar cuál sería la correcta interpretación transcribe la
sentencia de primera instancia. Quinto: Como se advierte, en el
presente caso se omite fundamentar con claridad y precisión la
causal invocada, por cuanto se limita a transcribir las sentencias
emitidas por las instancias de mérito sin identificar en qué consiste
la interpretación errónea del artículo 4 del Decreto Supremo N°
003-97-TR, así como cuál sería su correcta interpretación. En ese
sentido, advirtiéndose que lo pretendido es que este Supremo
Tribunal efectúe una revisión de los hechos alegados y los
contratos de locación de servicios, lo que no se condice con la
finalidad del recurso de casación el cual sólo puede fundarse en
cuestiones eminentemente jurídicas y no en cuestiones fácticas o
de revaloración probatoria; por lo que, este extremo del recurso
deviene en improcedente, tanto más, si la Sala Superior luego
de la valoración probatoria ha determinado que no existe medio
probatorio que demuestre fehacientemente la configuración de los
elementos esenciales del contrato de trabajo. En consecuencia,
el recurso de casación no cumple con los requisitos de fondo
necesarios para su procedencia, por lo que, corresponde a este
Colegiado proceder con la facultad conferida por la parte in fine
del artículo 58 de la Ley Procesal del Trabajo, modificado por el
artículo 1 de la Ley Nº 27021, declarando: IMPROCEDENTE el
recurso de casación interpuesto por el demandante Julio Miguel
Vargas Flores, obrante a fojas doscientos treinta y ocho, contra la
sentencia de vista de fecha veinte de marzo de dos mil doce, de
fojas doscientos treinta y dos; y ORDENARON publicar la presente
resolución en el Diario Oficial “El Peruano” conforme a ley; en
los seguidos contra el Fondo de Cooperación para el Desarrollo
Social - FONCODES, sobre Pago de Beneficios Sociales; y
los devolvieron. Vocal Ponente: Vinatea Medina. S.S. SIVINA
HURTADO, WALDE JAUREGUI, ACEVEDO MENA, VINATEA
MEDINA, RUEDA FERNÁNDEZ C-1335410-28
CAS. Nº 9940-2013 DEL SANTA
Lima, once de abril de dos mil catorce. VISTOS; y
CONSIDERANDO: Primero: El recurso de casación interpuesto
por Modesto Saucedo Cárdenas, obrante a fojas seiscientos
quince, contra la sentencia de vista de fecha treinta de abril de
dos mil trece, de fojas seiscientos tres; cumple con los requisitos
de forma que para su admisibilidad exige el artículo 57 de la Ley
74052
CASACIÓN
Nº 26636, Ley Procesal del Trabajo, modificado por el artículo
1 de la Ley Nº 27021. Segundo: El artículo 58 de la Ley N°
26636, modificado por el artículo 1 de la Ley N° 27021, prescribe
que el recurso de casación deberá estar fundamentado con
claridad, señalando con precisión las causales descritas en el
artículo 56 de la Ley N° 26636, modificado por el artículo 1 de
la Ley N° 27021 en que se sustenta, esto es: a) La aplicación
indebida de una norma de derecho material; b) La interpretación
errónea de una norma de derecho material; c) La inaplicación
de una norma de derecho material; y, d) La contradicción con
otras resoluciones expedidas por la Corte Suprema de Justicia
o las Cortes Superiores, pronunciadas en casos objetivamente
similares, siempre que dicha contradicción esté referida a una
de las causales anteriores; y, según el caso: i) Qué norma ha
sido indebidamente aplicada y cuál es la que debió aplicarse;
ii) Cuál es la correcta interpretación de la norma; iii) Cuál es
la norma inaplicada y porqué debió aplicarse; y, iv) Cuál es la
similitud existente entre los pronunciamientos invocados y en qué
consiste la contradicción. Tercero: Antes de entrar al análisis de
los requisitos de fondo resulta necesario precisar que, el recurso
de casación es un medio impugnatorio extraordinario de carácter
formal que sólo puede fundarse en cuestiones eminentemente
jurídicas y no en cuestiones fácticas o de revaloración probatoria,
es por ello que este medio impugnatorio, en materia laboral, tiene
como fines esenciales la correcta aplicación e interpretación de
las normas materiales en esta materia y la uniformidad de la
jurisprudencia nacional por la Corte Suprema, conforme al artículo
54 de la Ley Procesal del Trabajo, modificado por la Ley Nº 27021;
en ese sentido su fundamentación por parte del recurrente debe
ser clara, precisa y concreta indicando ordenadamente cuáles
son las causales denunciadas, las mismas que no pueden estar
orientadas a una revaloración de los elementos fácticos ni de los
medios probatorios dado que aquello desnaturalizaría el presente
recurso. Cuarto: El recurrente denuncia como causales del
recurso de su propósito, la inaplicación del artículo 43 inciso d)
y la Cuarta Disposición Transitoria y Final de la Ley N° 25593
- Ley de Relaciones Colectivas de Trabajo; y, la contradicción
con otras resoluciones expedidas por la Corte Suprema,
argumentando que en autos no obra pacto colectivo alguno en
el cual se haya ratificado o revisado el otorgamiento de dicha
bonificación, ni incremento remunerativo del año 2003, y que, en
ninguna de las actas de negociación se contempla la disposición
de revisar los acuerdos y menos aún ratificarlos durante el
periodo que la resolución de vista ha confirmado. Quinto: Como
se advierte, las causales descritas incumplen con los requisitos
de claridad y precisión previstas en el artículo 58 de la Ley
Procesal del Trabajo, modificado por la Ley Nº 27021, por cuanto
se sustentan en la Ley de Relaciones Colectivas de Trabajo, que
resulta impertinente para resolver el presente caso que versa
sobre indemnización por despido arbitrario; debiendo además
considerarse que se omite sustentar la denuncia de contradicción
con otras resoluciones expedidas por la Corte Suprema; por lo
que debe declararse improcedente. En consecuencia, el recurso
de casación no cumple con los requisitos de fondo necesarios
para su procedencia, por lo que, corresponde a este Colegiado
proceder con la facultad conferida por la parte in fine del artículo
58 de la Ley Procesal del Trabajo, modificado por el artículo 1
de la Ley Nº 27021, declarando: IMPROCEDENTE el recurso de
casación interpuesto por Modesto Saucedo Cárdenas, obrante a
fojas seiscientos quince, contra la sentencia de vista de fecha
treinta de abril de dos mil trece, de fojas seiscientos tres; y,
ORDENARON publicar la presente resolución en el Diario Oficial
“El Peruano” conforme a ley; en los seguidos por Modesto Saucedo
Cárdenas contra Jacobo Cavenago Rebaza, sobre Indemnización
por despido arbitrario; y los devolvieron. Vocal Ponente: Vinatea
Medina. S.S. SIVINA HURTADO, WALDE JAUREGUI, ACEVEDO
MENA, VINATEA MEDINA, RUEDA FERNÁNDEZ C-1335410-29
CAS. Nº 10092-2013 LIMA NORTE
Lima, once de abril de dos mil catorce. LA SALA DE DERECHO
CONSTITUCIONAL Y SOCIAL PERMANENTE DE LA CORTE
SUPREMA DE JUSTICIA DE LA REPÚBLICA: VISTA la causa;
con el acompañado; en audiencia pública llevada a cabo en el
día de la fecha, con los Señores Jueces Supremos Sivina
Hurtado – Presidente, Walde Jáuregui, Acevedo Mena, Vinatea
Medina y Rueda Fernández; y, luego de producida la votación
conforme a ley, se ha emitido la siguiente sentencia: I. MATERIA
DEL RECURSO: Se trata del recurso de casación interpuesto
por el demandante don Mark Joe Armas Grandez de fecha cinco
de junio de dos mil trece, obrante a fojas doscientos veinticinco,
contra la sentencia de vista de fecha tres de mayo de dos mil
trece, obrante a fojas doscientos diez, que confirmando la
sentencia apelada del veintiocho de diciembre de dos mil diez,
obrante de fojas ciento veinte, declara fundada en parte la
demanda; en consecuencia, ordena que la demandada cumpla
con consignar en el Libro de Planillas y boletas de pago la
condición del actor como trabajador obrero con contrato laboral
a plazo indeterminado y como fecha de ingreso el primero de
enero de dos mil seis; revocaron en cuanto dispone: (i) cumpla
con abonar a favor del demandante la suma de S/.1,300.00 (mil
trescientos y 00/100 nuevos soles) por concepto de nivelación
de remuneraciones; (ii) cumpla con abonar a favor del
demandante la suma de S/.18,243.00 (dieciocho mil doscientos
El Peruano
Lunes 1 de febrero de 2016
cuarenta y tres con 00/100 nuevos soles) por concepto de
remuneraciones dejadas de percibir (del tres de abril de dos mil
siete al nueve de enero de dos mil nueve); (iii) cumpla con
abonar a favor del demandante la suma de S/.2,600 (dos mil
seiscientos con 00/100 nuevos soles) por concepto de
remuneración vacacional; (iv) cumpla con abonar a favor del
demandante la suma de S/.7,800.00 (siete mil ochocientos
00/100 nuevos soles) por concepto de gratificaciones legales
por fiestas patrias y navidad; reformándola declararon
improcedente los puntos (i), (ii) y (iii), dejándose a salvo el
derecho del demandante en los dos últimos casos para que
lohaga valer con arreglo a Ley; respecto al punto (iv) lo
modificaron en su monto, en consecuencia ordenaron quela
entidad edil pague la suma de S/.1,000.00 (Un mil 00/100
nuevos soles) por concepto de gratificaciones legales por fiestas
patrias y navidad, con sus respectivos intereses legales. II.
CAUSALES DEL RECURSO DE CASACIÓN: El recurrente ha
interpuesto el recurso de casación, denunciando las siguientes
causales: a) La inaplicación de los Decreto Supremos N° 00198-TR (Normas reglamentarias relativas a obligación de los
empleadores de llevar Planillas de Pago) y el Decreto Supremo
N° 003-97-TR (Texto Único Ordenado del Decreto Legislativo N°
728, Ley de Productividad y Competitividad Laboral); y, b) La
inaplicación de los artículos 22, 23, 26 y 27 de la Constitución
Política del Estado. III. CONSIDERANDO: Primero: El recurso
de casación reúne los requisitos que para su admisibilidad,
contempla el artículo 57 de la Ley Nº 26636, Ley Procesal del
Trabajo, modificado por el artículo 1 de la Ley Nº 27021.
Segundo: Independientemente de las denuncias invocadas, si
bien es cierto que la actuación de esta Suprema Sala al conocer
del recurso de casación se ve limitada a la misión y postulado
que le asigna el artículo 54 de la Ley Nº 26636, modificado por
el artículo 1 de la Ley Nº 27021, esto es, la correcta aplicación e
interpretación de las normas materiales –en este caso– del
derecho laboral, también lo es que dicha premisa tiene como
única y obligada excepción la tutela de los derechos procesales
con valor constitucional, pues es evidente que allí donde el
ejercicio de la función jurisdiccional los vulnera o amenaza, se
justifica la posibilidad de ejercer el recurso de casación como
instrumento de su defensa y corrección aunque limitado sólo a la
vulneración de los derechos de tal naturaleza, quedando por
tanto descartado que dentro de dicha noción se encuentren las
anomalías o simples irregularidades procesales que no son por
si mismas contrarias a la Constitución Política del Estado.
Tercero: En este contexto, aun cuando en el presente recurso
no se denuncia la contravención de las normas que
garantizan el derecho a un debido proceso, el cual además
no constituye causal de casación en materia laboral conforme al
texto vigente de la Ley Procesal del Trabajo N° 26636; sin
embargo, por encontrarnos frente a una irregularidad que
transgrede principios y derechos del debido proceso, queda
obligada esta Sala Suprema a declarar en forma excepcional,
procedente la casación por dicha causal, en aplicación de lo
dispuesto en los incisos 3 y 5 del artículo 139 de la Constitución
Política del Perú, obviándose las denuncias materiales
invocadas, al observarse la existencia de vicios que vulneran el
derecho de los justiciables de obtener de parte de los órganos
jurisdiccionales una resolución debidamente motivada y que se
respalde en los actuados (fundamentos fácticos, jurídicos y
probatorios). Cuarto: El derecho fundamental a un debido
proceso, consagrado en el inciso 3) del artículo 139 de la
Constitución Política del Estado, implica el respeto del conjunto
de garantías que protegen a los ciudadanos sometidos a
cualquier cuestión litigiosa, con el fin de asegurarles una
cumplida y recta administración de justicia, en orden a
procurarles seguridad jurídica y que las decisiones se pronuncien
conforme a derecho. En virtud a ello, existe contravención de las
normas que garantizan el derecho a un debido proceso cuando,
en el desarrollo del mismo, el órgano jurisdiccional no ha
respetado los derechos procesales de las partes; se han obviado
o alterado actos de procedimiento; la tutela jurisdiccional no ha
sido efectiva y/o el órgano jurisdiccional deja de motivar sus
resoluciones, en clara transgresión de la normatividad vigente y
de los principios procesales. Quinto: En relación al derecho a la
tutela jurisdiccional efectiva, exige que, cuando una persona
requiera la protección de su derecho o de sus intereses
legítimos, aquello sea atendido por los órganos jurisdiccionales
mediante un proceso adecuado donde se respeten las garantías
mínimas de los litigantes, esto es, de ambas partes en el
proceso. “(…) Ello es así, toda vez que no sólo se busca la
defensa de los intereses de la parte accionante sino también los
del sujeto requerido, estando sus derechos también abarcados
en la tutela jurisdiccional efectiva. Tal derecho se trata, por
tanto, de un derecho continente, esto es que abarca una serie
de otros derechos expresamente señalados o implícitamente
deducidos de aquel. En la doctrina, se ha señalado que este
derecho abarca principalmente tres etapas: El acceso a los
órganos jurisdiccionales, el cumplimiento de las normas y
derechos que regula el debido proceso, y el de la ejecución de
la resolución obtenida.” 1 Sexto: Sobre el derecho a la motivación
de las resoluciones judiciales, el cual forma parte del contenido
esencial del derecho al debido proceso, garantiza que la
decisión expresada en el fallo o resolución sea consecuencia de
El Peruano
Lunes 1 de febrero de 2016
CASACIÓN
una deducción razonada de los hechos del caso, las pruebas
aportadas y su valoración jurídica, en tal virtud esta garantía se
respeta siempre que exista fundamentación jurídica, congruencia
entre lo pedido y lo resuelto y, por sí misma la resolución judicial
exprese una suficiente justificación de la decisión adoptada. En
efecto, la exigencia de motivación en las decisiones judiciales
prevista en el inciso 5) del artículo 139 de la Constitución
Política, garantiza que los jueces, cualquiera sea la instancia a
la que pertenezca, expresen la argumentación jurídica que los
ha llevado a decidir una controversia, asegurando que el
ejercicio de la potestad de administrar justicia se haga con
sujeción a la Constitución y a la ley; pero también con la finalidad
de facilitar un adecuado ejercicio del derecho de defensa de los
justiciables. En suma, garantiza que el razonamiento empleado
guarde relación y sea suficiente y proporcionado con los hechos
que el juez corresponde resolver. Sétimo: La observancia
irrestricta de este derecho en el desarrollo del proceso no sólo
es impuesta en la actuación de los órganos de primera instancia,
sino que se proyecta en toda su secuela, lo cual obviamente
involucra la intervención de la instancia revisora como así lo
reconoce el artículo 12 del Texto Único Ordenado de la Ley
Orgánica del Poder Judicial, modificado por el artículo único de
la Ley Nº 28490, que desarrollando la garantía de motivación de
las resoluciones judiciales determina expresamente que todas
las resoluciones, con exclusión de las de mero trámite, son
motivadas, bajo responsabilidad, con expresión de los
fundamentos en que se sustentan. Esta disposición alcanza a
los órganos jurisdiccionales de segunda instancia que absuelven
el grado, en cuyo caso, la reproducción de los fundamentos de
la resolución recurrida, no constituye motivación suficiente.
Octavo: En ese contexto, resulta conveniente señalar que,
conforme al escrito de demanda obrante a fojas veinticinco, dos
Mark Joe Armas Grandez pretende: i) El reconocimiento y
registro en la Planillas de pago de su condición de trabajador
obrero a plazo indeterminado; ii) Que le abone la remuneración
mensual de S/.1,300.00 (Un mil trescientos con 00/100 nuevos
soles) similar a la que vienen percibiendo otros trabajadores
obreros de la Municipalidad; y, iii) Se le abone: a) la suma de
S/.7,800.00 (siete mil ochocientos con 00/100 nuevos soles) por
concepto de gratificaciones por los años, dos mil seis, dos mil
siete y dos mil ocho; b) la suma de S/.6,500.00 (seis mil
quinientos con 00/100 nuevos soles) por concepto de vacaciones
no gozadas por el año dos mil seis; c) la suma de S/.28,800.00
(veintiocho mil con 00/100 nuevos soles) por concepto de
reintegro de diferencia de haberes; y, c) la suma de S/.27,560.00
(veintisiete mil quinientos sesenta con 00/100 nuevos soles) por
el concepto de remuneraciones devengadas por el periodo que
duro el cese (del tres de abril de dos mil siete al nueve de enero
de dos mil nueve). Extremos que también fueron sido fijados
como puntos controvertidos, conforme se verifica del Acta de
Audiencia Única llevada a cabo el veintitrés de noviembre de
dos mil nueve, obrante a fojas cincuenta y ocho. Noveno: En
ese sentido, de la sentencia de vista se advierte la inexistencia
de motivación respecto a la pretensión de nivelación
remunerativa, por cuanto, si bien en la parte decisoria determina
que debe declararse su improcedencia; cierto es que, no
expresa argumento alguno que lo sustente, limitándose a
resolver los extremos de reconocimiento del vínculo laboral, su
inscripción en los libros de planillas, el otorgamiento de boletas
de pago, así como el pago de las gratificaciones, vacaciones, y
remuneraciones devengadas. De otro lado, en relación al
extremo de vacaciones, se verifica la existencia de una
motivación aparente2, toda vez que determina su improcedencia,
argumentando que no cumple con la exigencia prevista en el
artículo 10 del Decreto Legislativo N° 713 y artículo 11 de su
Reglamento aprobado por Decreto Supremo N° 012-92-TR;
pese a advertir que prestó servicios ininterrumpidos desde el
primero de enero de dos mil seis hasta el tres de abril de dos mil
siete, fecha en que fue cesado y posteriormente repuesto
mediante un proceso judicial de amparo (ver punto 3.5 de la
sentencia de vista). Décimo: Que, los vicios revelados
evidencian una afectación a la garantía de la debida motivación
de las resoluciones judiciales y con ello el debido proceso legal
que también exige que la sentencia respectiva guarde
reciprocidad y armonía con lo actuado en el proceso, de tal
suerte que el fallo del Juzgador no se convierta en un acto de
arbitrariedad, lo que acarrea ineludiblemente su invalidez
insubsanable correspondiendo por tanto a la Sala Superior
renovar dicho acto procesal teniendo en cuenta las
considerativas de este pronunciamiento. IV. DECISIÓN: Por
tales consideraciones declararon: FUNDADO el recurso de
casación interpuesto por el demandante don Mark Joe Armas
Grandez de fecha cinco de junio de dos mil trece, obrante a fojas
doscientos veinticinco; en consecuencia: NULA la sentencia de
vista de fecha tres de mayo de dos mil trece, obrante a fojas
doscientos diez; DISPUSIERON que la Sala Superior EMITA
NUEVA SENTENCIA con observancia de los parámetros y
lineamientos contenidos en la presente ejecutoria suprema; y
ORDENARON la publicación de la presente resolución en el
Diario Oficial “El Peruano” conforme a ley; en los seguidos por
don Mark Joe Armas Grandez contra la Municipalidad Distrital
de Carabayllo, sobre Incumplimiento de Normas Laborales; y los
devolvieron. Vocal Ponente: Vinatea Medina. S.S. SIVINA
74053
HURTADO, WALDE JÁUREGUI, ACEVEDO MENA, VINATEA
MEDINA, RUEDA FERNÁNDEZ
1
2
CASACIÓN N° 405-2010, LIMA-NORTE, del quince de marzo de dos mil once,
considerando octavo. En esta oportunidad la Sala de Derecho Constitucional y
Social Permanente declaró infundado el recurso de casación interpuesto por la
Asociación de Propietarios de la Urbanización Sol de Lima; en los seguidos
contra la Municipalidad Distrital de San Martín de Porres y otro; sobre proceso
contencioso administrativo. (negrita y subrayado nuestro).
“La motivación aparente, Existe motivación aparente cuando una determinada
resolución judicial si bien contiene argumentos o razones de derecho o de hecho
que justifican la decisión del juzgador, éstas no resultan pertinentes para tal efecto,
sino que son falsos, simulados o inapropiados en la medida que en realidad no son
idóneos para adoptar dicha decisión.” (Fundamento Jurídico 26). Expediente N°
01939-2011- PA/TC, de fecha ocho de noviembre de dos mil once.
C-1335410-30
CAS. Nº 10103 – 2012 LIMA NORTE
Lima, veinticuatro de mayo de dos mil trece. LA SALA DE
DERECHO CONSTITUCIONAL Y SOCIAL PERMANENTE DE LA
CORTE SUPREMA DE JUSTICIA DE LA REPÚBLICA. VISTA: La
causa número diez mil ciento tres – dos mil doce; en Audiencia
Pública llevada a cabo en la fecha, integrada por los Magistrados
Supremos: Sivina Hurtado - Presidente, Acevedo Mena, Vinatea
Medina, Morales Parraguez y Rueda Fernández; oído el informe
oral del letrado don Andrés Calderón Mendoza por la parte
demandante; y, producida la votación con arreglo a Ley, se ha
emitido la siguiente sentencia: I) MATERIA DEL RECURSO: Se
trata del recuso de casación interpuesto por don Julio César Castro
Borda, de fecha veintiséis de setiembre de dos mil doce, obrante a
fojas cuatrocientos cuarenta y uno, contra la resolución de vista de
fojas cuatrocientos catorce, su fecha dieciséis de agosto de dos mil
doce, que revoca la sentencia apelada de fecha veinticuatro de
mayo de dos mil diez de fojas doscientos setenta y nueve que
declaró fundada en parte la demanda con lo demás que contiene;
y reformándola la declaró improcedente. II) CAUSALES DEL
RECURSO DE CASACION: La recurrente ha denunciado como
causales casatorias las siguientes: a) Aplicación indebida o la
interpretación errónea del Decreto Supremo N° 003-97-TR,
alega que la Sala de mérito a emitido una sentencia tomando en
cuenta una sentencia de Tribunal Constitucional y no ha merituado
las diversas ejecutorias presentadas en el presente proceso,
incluso la misma ejecutoria suprema de fecha dos de diciembre de
dos mil once, emitida por la Sala de Derecho Constitucional y
Social Permanente, que declaró fundado el recurso de casación
que interpusiera contra la resolución de la Sala Superior de fecha
dos de noviembre de dos mil diez; b) Aplicación indebida o la
interpretación errónea de los artículos 22, 23, 26 y 27 de la
Constitución Política del Estado, sostiene que no es verdad, que
se encontraba bajo el régimen especial del Contrato Administrativo
de Servicios, puesto que su fecha de ingreso es anterior a la
vigencia del Decreto Legislativo N° 1057 (junio de dos mil ocho)
esto es, hace más de siete años, con anterioridad a la citada fecha,
teniendo en cuenta lo dispuesto en el artículo 37 de la Ley Orgánica
de Municipalidades N° 23853, y el desempeño de su persona de
manera personal en labores de carácter permanente, sujeto a
subordinación y al pago de una remuneración, es absolutamente
errónea, la interpretación que hace la Sala respecto a su situación
laboral; c) Contravención de lo dispuesto en el inciso 5) del
artículo 139 de la Constitución Política del Estado, sostiene el
recurrente que toda resolución judicial debe estar debidamente
motivada con mención expresa de la ley aplicable y de los
fundamentos de hecho en que se sustenta, sin embargo, en los
considerandos de la resolución que impugna, si bien es cierto se
hace mención a algunos artículos del Código Procesal Civil, no
hace una debida sustentación del porqué revoca la sentencia
apelada. Dentro de este contexto, se debe precisar que en los
principios procesales laborales, se aplica el principio de veracidad
y el principio de la primacía de la realidad, es decir, que en caso de
que exista discordia entre lo que ocurre en la práctica y lo que
surge de los documentos o de acuerdos, el Juez debe darle
preferencia a lo primero, esto es lo que ocurre en el terreno de los
hechos o de la realidad, pues el contrato de trabajo constituye un
contrato de realidad, esto se tipifica por la formas y condiciones
bajo los cuales prestó sus servicios con prescindencia de la
denominación que se pudiera otorgar a dicha relación. III)
CONSIDERANDO: PRIMERO: El recuso de casación interpuesto
por Julio César Castro Borda, contra la resolución de vista de fojas
cuatrocientos catorce, de fecha dieciséis de agosto de dos mil
doce, cumple con los requisitos de forma contenidos en el artículo
57 de la Ley Procesal del Trabajo N° 26636, modificado por el
artículo 1 de la Ley N° 27021. SEGUNDO: El artículo 58 de la Ley
Procesal del Trabajo N° 26636, modificado por el artículo 1 de la
Ley N° 27021, prescribe que el recurso de casación deberá estar
fundamentado con claridad, señalando con precisión las causales
descritas en el artículo 56 de la Ley Procesal del Trabajo N° 26636,
modificado por el artículo 1 de la Ley N° 27021 en que se sustenta,
esto es: a) La aplicación indebida de una norma de derecho
material; b) La interpretación errónea de una norma de derecho
material; c) La inaplicación de una norma de derecho material; y, d)
La contradicción con otras resoluciones expedidas por la Corte
Suprema de Justicia o las Cortes Superiores, pronunciadas en
74054
CASACIÓN
casos objetivamente similares, siempre que dicha contradicción
esté referida a una de las causales anteriores; y, según el caso: i)
Qué norma ha sido indebidamente aplicada y cuál es la que debió
aplicarse; ii) Cuál es la correcta interpretación de la norma; iii) Cuál
es la norma inaplicada y porqué debió aplicarse; y, iv) Cuál es la
similitud existente entre los pronunciamientos invocados y en qué
consiste la contradicción. TERCERO: Antes de entrar al análisis de
los requisitos de fondo resulta necesario precisar que, el recurso de
casación es un medio impugnatorio extraordinario de carácter
formal que sólo puede fundarse en cuestiones eminentemente
jurídicas y no en cuestiones fácticas o de revaloración probatoria,
es por ello que este medio impugnatorio, en materia laboral, tiene
como fines esenciales la correcta aplicación e interpretación de las
normas materiales en esta materia y la uniformidad de la
jurisprudencia nacional por la Corte Suprema, conforme al artículo
54 de la Ley Procesal del Trabajo N° 26636, modificado por el
artículo 1 de la Ley N° 27021; en ese sentido su fundamentación
por parte del recurrente debe ser clara, precisa y concreta indicando
ordenadamente cuáles son las causales denunciadas, las mismas
que no pueden estar orientadas a una revaloración de los
elementos fácticos ni de los medios probatorios dado que aquello
desnaturalizaría el presente recurso. CUARTO: En cuanto a las
denuncias casatorias expuestas en los acápites a) y b) las mismas
deben ser declaradas improcedentes, pues si bien denuncian la
aplicación indebida y la interpretación errónea de las normas que
denuncian, no se ha cumplido con establecer cuál sería la norma a
aplicarse para resolver lo que es materia de controversia, como
tampoco cual sería la interpretación correcta que debió darle la
Sala Superior; por lo tanto en este extremo las causales
denunciadas no cumplen con lo establecido en el artículo 58 de la
Ley N° 26636 –Ley Procesal del Trabajo, modificado por la Ley N°
27021. QUINTO: Que, respecto a la denuncia de contravención a
las normas que garantizan el derecho a un debido proceso,
cabe precisar que no se encuentra prevista en el artículo 56 de la
Ley Procesal del Trabajo N° 26636, modificado por el artículo 1 de
la Ley Nº 27021; sin embargo, la Corte Suprema de manera
excepcional aplica dicha propuesta casatoria, en los casos en que
se advierta flagrante afectación al debido proceso, como garantía
constitucional de los justiciables y a efectos de cumplir con los fines
del recurso de casación, por lo que apreciando este Supremo
Tribunal una alta probabilidad de afectación al derecho fundamental
al debido proceso de la actora, deviene en procedente este
extremo del recurso casatorio. SEXTO: En primer término, este
Supremo Tribunal conviene en señalar que en todas las causas
laborales, los esfuerzos de los Jueces deben reconducirse a la
reivindicación de los derechos fundamentales reclamados en la
demanda, teniendo en cuenta el contenido esencial de la
fundamentación fáctica y jurídica en ella desarrollada, a fin de
identificar lo pretendido, y el grado de afectación de los derechos
invocados, lo contrario desnaturalizaría al proceso laboral protector
de los derechos constitucionales y fundamentales de las partes.
Por lo tanto, este Tribunal Supremo invoca a los Jueces a cargo de
los procesos laborales que su actuación se despliegue conforme a
las normas de derecho constitucional y convencional que exigen la
aplicación de primer orden de las Constituciones de los Estados y
de los Convenios celebrados, garantizando la vigencia efectiva de
los derechos humanos, y asegurando con ello la justicia
preexistente al derecho positivizado, lo que a su vez dará
legitimidad a su actuación, cuya preocupación principal, se insiste,
será el aseguramiento de la plena vigencia de los derechos de los
hombres. SÉTIMO: En cuanto al derecho fundamental a un debido
proceso, no sólo es un principio de quienes ejercen la función
jurisdiccional, y que está contemplado como tal en el inciso 3 del
artículo 139 de la Constitución Política del Estado, sino que también
es concebido como aquel derecho fundamental que posee toda
persona peruana o extranjera, natural o jurídica y que, en tal
medida, es exigible por ésta (dimensión subjetiva); a su vez, es un
derecho que debe ser respetado por todos, debido a que lleva
implícito los fines sociales y colectivos de justicia (dimensión
objetiva)1. OCTAVO: Sobre la motivación de las sentencias, el
Tribunal Constitucional2 ha establecido: “debe tenerse presente
que en todo Estado constitucional y democrático de derecho, la
motivación debida de las decisiones de las entidades públicas
-sean o no de carácter jurisdiccional- es un derecho fundamental
que forma parte del contenido esencial del derecho a la tutela
procesal efectiva. El derecho a la motivación debida constituye una
garantía fundamental en los supuestos en que con la decisión
emitida se afecta de manera negativa la esfera o situación jurídica
de las personas. Así, toda decisión que carezca de una motivación
adecuada, suficiente y congruente constituirá una decisión
arbitraria y, en consecuencia, será inconstitucional. NOVENO.Esta Sala Suprema aprecia de la demanda que el actor pretende
que se declare la desnaturalización de su contrato civil y sea
considerado como uno laboral, con el consecuente pago de sus
beneficios sociales desde su fecha de ingreso; se nivele las
remuneraciones acorde con un trabajador obrero de su misma
condición, esto es, se le abone como remuneración básica mensual
la suma de mil cuatrocientos nuevos soles (S/.1,400.00); se le
reconozca el pago de gratificaciones, incrementos por pacto
colectivo, bonificación vacacional, escolaridad y demás beneficios
que otorga la demandada; siendo el monto total demandado la
suma de doscientos dieciocho mil seiscientos con 00/100 nuevos
soles (S/. 218, 600.00). Como sustento de su demanda señala que
El Peruano
Lunes 1 de febrero de 2016
ingresó a laborar para la Municipalidad Distrital de Comas el uno de
mayo de mil novecientos noventa y cuatro, mediante la modalidad
de locación de servicios, en el cargo de mecánico, percibiendo una
remuneración mensual de setecientos con 00/100 nuevos soles
(S/.700.00), función que viene cumpliendo hasta la fecha de la
presentación de la demanda, esto es treinta de setiembre de dos
mil ocho, por lo que está acreditado con los documentos que
presenta, que su relación laboral es de carácter permanente.
DÉCIMO: Que, mediante sentencia de primera instancia contenida
en la Resolución N° 15 de fecha veinticuatro de mayo de dos mil
diez, se declaró fundada en parte la demanda, reconociéndose
como fecha de ingreso del actor el dos de junio de dos mil uno, esto
en virtud a lo establecido en la Ley N° 27469; asimismo respecto a
la celebración de los Contratos Administrativos de Servicios – CAS
la declara sin efecto legal, puesto que ya existía un contrato laboral
a plazo indeterminado; en consecuencia se ordena que la
demandada: a) cumpla con registrar al demandante en planillas,
consignando su condición de trabajador obrero contratado a plazo
indeterminado, asimismo se le otorgue duplicado de las boletas de
pago; b) cumpla con consignar en las planillas y en las boletas de
pago del trabajador, el dos de junio de dos mil uno, como fecha de
ingreso; c) cumpla con abonar a favor del demandante la suma de
ocho mil cuatrocientos con 00/100 nuevos soles (S/8,400.00) por
concepto de remuneración vacacional; d) cumpla con abonar a
favor del demandante la suma de nueve mil ochocientos con
00/100 nuevos soles (S/.9,800.00) por concepto de gratificaciones
legales –fiestas patrias y navidad; y e) cumpla con efectuar los
aportes al sistema de seguridad social y actuar como agente
retenedor de conformidad con el artículo 29 del Decreto Supremo
N° 054-97-EF; e infundada la pretensión de nivelación y reintegro
de remuneraciones, asignación escolar y depósito de compensación
por tiempo de servicios - CTS; dejando a salvo el derecho del actor
respecto al periodo anterior al dos de junio de dos mil uno, pues en
aplicación del Principio de la Primacía de la Realidad se encuentra
acreditado que las labores prestadas por el actor fueron de
naturaleza laboral al concurrir los elementos del mismo, esto es
subordinación, prestación y remuneración. Por tanto, debe
establecerse como fecha de ingreso del mismo el dos de junio de
dos mil uno, en virtud del artículo 1 de la Ley N° 27469. Respecto
al periodo de sus labores sujeto al régimen de Contrato
Administrativo de Servicios –CAS-, si bien el Decreto Legislativo N°
1057 regula una contratación especial, propia del derecho
administrativo y privado del Estado, debe tenerse en cuenta, en
primer lugar que antes de la suscripción del Contrato de
Administrativo de Servicios - CAS que alega la demandada
(ocurrido el uno de agosto de dos mil ocho según boleta de pago de
fojas sesenta y dos) ya existía un contrato laboral a plazo
indeterminado regulado por el Texto Único Ordenado del Decreto
Legislativo N° 728, y en segundo lugar, al haberse suscrito el
Contrato Administrativo de Servicios - CAS, el mismo carece de
efecto legal, aplicando del artículo 78 del Decreto Supremo N° 00397-TR y el artículo 26 inciso 2 de la Constitución Política del
Estado. Siendo así, y encontrándose el demandante laborando
desde el dos de junio de dos mil uno, en adelante y teniendo en
cuenta que, de esa fecha a la actualidad superó el período de
prueba a que alude el artículo 10 del Decreto Supremo 003-97-TR,
el contrato ha pasado a ser uno de naturaleza indeterminada por lo
que la demandada está obligada a registrar al accionante en sus
libros de planillas y otorgarle las boletas de pago respectivas.
UNDÉCIMO: Asimismo, de la sentencia impugnada de fecha
dieciséis de agosto de dos mil trece, obrante a fojas cuatrocientos
catorce, se advierte que los Jueces de mérito han declarado
improcedente la demanda, sosteniendo que de los medios
probatorios aportados al proceso se tiene que el treinta de
setiembre de dos mil ocho, fecha en que se interpuso la presente
demanda, la Municipalidad Distrital de Comas ha acreditado la
existencia de la suscripción del Contrato Administrativo de Servicios
suscrito con el demandante, en un primer momento (folios noventa
y cinco) vigente del uno de agosto al treinta de setiembre de dos mil
ocho; y el segundo (folios noventa y seis) vigente del uno de
octubre al treinta y uno de diciembre de dos mil ocho, acreditándose
además con la boleta de pago de folios sesenta y dos. En esa
línea, si el demandante se encontraba bajo el régimen especial del
Contrato Administrativo de Servicios - CAS, conforme fluyen de los
contratos suscritos con la demandada, no puede solicitar la
declaración judicial de trabajador obrero a plazo indeterminado
sujeto al régimen jurídico de la Ley de Productividad y
Competitividad Laboral (Decreto Legislativo N° 728), conforme lo
ha planteado en autos; pues, habiendo suscrito el Contrato
Administrativo de Servicios - CAS, por su voluntad ha modificado
su situación laboral preexistente al aludido régimen especial,
máxime si tampoco ha probado haber sido obligado a suscribir el
contrato. DUODÉCIMO: Que, este Supremo Colegiado analizando
la sentencia de vista advierte una motivación aparente,
constituyendo un fallo arbitrario y con plena inobservancia de lo
dispuesto en los incisos 3 y 5 del artículo 139 de la Constitución
Política del Estado, que reconoce a todo justiciable el derecho de
obtener de los órganos jurisdiccionales una respuesta razonada,
motivada y congruente respecto de las pretensiones en debate, por
cuanto los Jueces de mérito al declarar improcedente la demanda
no se han pronunciado sobre la desnaturalización de los contratos
de locación de servicios celebrados entre las partes, entre los años
dos mil uno al dos mil siete, denunciada en la demanda al amparo
El Peruano
Lunes 1 de febrero de 2016
CASACIÓN
de los establecido en el Decreto Supremo número 003-97-TR, y
bajo el principio de primacía de la realidad, entre otras normas y
principios fundamentales. DÉCIMO TERCERO: Además, se
aprecia de la motivación aparente y arbitraria de la sentencia
cuestionada, que los Jueces de mérito no han realizado valoración
alguna de los medios de prueba que obran en autos como son los
contratos de trabajo suscritos entre las partes, las boletas de pago,
y las constancias de trabajo, medios de prueba que denotan la
continuidad de las labores de la demandante bajo una misma
función, pese a haberse suscrito distintos contratos lo que como ya
se ha señalado mereció un mayor celo de los Jueces de mérito
respecto a la aplicación del principio de primacía de la realidad
invocado e inaplicado en la instancia. DÉCIMO CUARTO: En base
a las consideraciones que preceden este Tribunal Supremo, ha
verificado que en la sentencia de segunda instancia los Jueces de
mérito no han determinado en sede de instancia si se ha producido
la desnaturalización de los contratos de locación de servicios,
conforme a un análisis de fondo congruente y razonado exigido por
la Carta Magna y las demás leyes de la nación, la jurisprudencia de
esta Corte de Casación, y la del Tribunal Constitucional, en
evidente transgresión del artículo 139 incisos 3 y 5 de la
Constitución Política del Estado, por lo tanto corresponde
declararse fundado el recurso de casación propuesto. IV.
DECISIÓN: Por estas consideraciones declararon: FUNDADO el
recuso de casación interpuesto por don Julio César Castro Borda,
obrante a fojas cuatrocientos cuarenta y uno; en consecuencia:
NULA la resolución de vista de fojas cuatrocientos catorce, de
fecha dieciséis de agosto de dos mil doce; DISPUSIERON que el
Ad quem EMITA NUEVA SENTENCIA con observancia de los
parámetros y lineamientos contenidos en la presente ejecutoria
suprema; en los seguidos por don Julio César Castro Borda contra
la Municipalidad Distrital de Comas, sobre incumplimiento de
normas laborales; MANDARON la publicación de la presente
resolución en el Diario Oficial “El Peruano” conforme a ley; y los
devolvieron. Vocal Ponente: Vinatea Medina. S.S. SIVINA
HURTADO, ACEVEDO MENA, VINATEA MEDINA, MORALES
PARRAGUEZ, RUEDA FERNÁNDEZ
1
2
Comisión Andina de Juristas. Luis Alberto Huerta Guerrero con la colaboración de
Enrique Aguilar, “El debido proceso en las decisiones de la Corte Interamericana
de Derechos Humanos (análisis del artículo 8 de la Convención Americana sobre
Derechos Humanos), en www.cajpe.org.pe.
STC. N° 01807-2011-PA/TC, del veintisiete de junio de dos mil once, fundamento
10.
C-1335410-31
CAS. Nº 10320-2013 LIMA
Lima, treinta de abril de dos mil catorce. VISTOS; y
CONSIDERANDO: PRIMERO: El recurso de casación interpuesto
por el demandado Panamericana Televisión Sociedad Anónima
obrante a fojas doscientos treinta y siete, contra la sentencia
de vista de fecha veintiocho de enero de dos mil trece, de fojas
doscientos veintisiete; cumple con los requisitos de forma que
para su admisibilidad exige el artículo 57 de la Ley Nº 26636, Ley
Procesal del Trabajo, modificado por el artículo 1 de la Ley Nº
27021. SEGUNDO: El artículo 58 de la Ley N° 26636, modificado
por el artículo 1 de la Ley N° 27021, prescribe que el recurso de
casación deberá estar fundamentado con claridad, señalando con
precisión las causales descritas en el artículo 56 de la Ley N° 26636,
modificado por el artículo 1 de la Ley N° 27021 en que se sustenta,
esto es: a) La aplicación indebida de una norma de derecho
material; b) La interpretación errónea de una norma de derecho
material; c) La inaplicación de una norma de derecho material; y,
d) La contradicción con otras resoluciones expedidas por la Corte
Suprema de Justicia o las Cortes Superiores, pronunciadas en
casos objetivamente similares, siempre que dicha contradicción
esté referida a una de las causales anteriores; y, según el caso: i)
Qué norma ha sido indebidamente aplicada y cuál es la que debió
aplicarse; ii) Cuál es la correcta interpretación de la norma; iii) Cuál
es la norma inaplicada y porqué debió aplicarse; y, iv) Cuál es la
similitud existente entre los pronunciamientos invocados y en qué
consiste la contradicción. TERCERO: Antes de entrar al análisis de
los requisitos de fondo resulta necesario precisar que, el recurso
de casación es un medio impugnatorio extraordinario de carácter
formal que sólo puede fundarse en cuestiones eminentemente
jurídicas y no en cuestiones fácticas o de revaloración probatoria,
es por ello que este medio impugnatorio, en materia laboral, tiene
como fines esenciales la correcta aplicación e interpretación
de las normas materiales en esta materia y la uniformidad de la
jurisprudencia nacional por la Corte Suprema, conforme al artículo
54 de la Ley Procesal del Trabajo N° 26636, modificado por el
artículo 1 de la Ley N° 27021; en ese sentido su fundamentación
por parte del recurrente debe ser clara, precisa y concreta
indicando ordenadamente cuáles son las causales denunciadas,
las mismas que no pueden estar orientadas a una revaloración
de los elementos fácticos ni de los medios probatorios dado
que aquello desnaturalizaría el presente recurso. CUARTO:
Como fundamentos de su recurso, el recurrente invoca: a) la
contravención al debido proceso; y, b) la aplicación indebida del
principio de primacía de la realidad. QUINTO: En cuanto a la causal
a) de la contravención al debido proceso, alega el demandado
que al momento de resolver nuestra apelación, el Colegiado
74055
omite pronunciarse sobre la denuncia de errores contenidos en
la sentencia de primera instancia referidos a la inexistencia de un
horario de trabajo que el demandante alega debía cumplir y que
no cumplió con acreditar. SEXTO: Sobre la causal desarrollada,
resulta necesario precisar que la infracción al debido proceso no
se encuentra prevista como causal casatoria en el artículo 56 de la
Ley N° 26636, modificado por el artículo 1 de la Ley Nº 27021; sin
embargo, la Corte Suprema de manera excepcional aplica dicha
propuesta, en los casos en que se advierta flagrante afectación al
debido proceso, como garantía constitucional de los justiciables y
a efectos de cumplir con los fines del recurso de casación. En el
caso en particular, efectuando un detenido y meditado estudio de
los actuados, se puede concluir que no se advierte el agravio que
aduce el recurrente, puesto que la decisión emitida por la Sala de
mérito deriva de la valoración conjunta y razonada de los medios
probatorios aportados, tal como se expresa de los fundamentos
de la sentencia de vista del que se deprende las valoraciones
esenciales y determinantes que sustentan su decisión de confirmar
la sentencia que declara fundada la demanda de reconocimiento
de vínculo laboral y pago de beneficios sociales; por consiguiente,
debe declararse improcedente este extremo del recurso. SÉTIMO:
Respecto a la causal de la b) aplicación indebida del principio de
primacía de la realidad, precisa que se ha aplicado indebidamente
dicho principio, en tanto, como ya lo hemos sostenido a lo largo de
este proceso, entre el actor y nuestra parte no existió una relación
laboral por el periodo que el demandante señala, sino, durante un
periodo determinado y debidamente acreditado. OCTAVO: Sobre
esta causal, es pertinente señalar que no cumple con el requisito
establecido en el artículo 58 de la Ley N° 26636, modificado por
el artículo 1 de la Ley N° 27021, toda vez que no se advierte una
descripción clara del error de derecho que alega; por el contrario,
se puede verificar que lo pretendido es variar la situación fáctica
y jurídica establecida en las instancias de mérito, a través de una
revisión de sus argumentos y medios probatorios aportados, lo
que no se condice con la finalidad del recurso de casación el cual
sólo puede fundarse en cuestiones eminentemente jurídicas y no
en cuestiones fácticas o de revaloración probatoria; por lo que,
este extremo del recurso deviene en improcedente, tanto más,
si la aplicación del principio de primacía de la realidad se efectuó
al verificarse la concurrencia de los elementos esenciales del
contrato de trabajo, como son la prestación personal de servicios,
la remuneración y la subordinación. En consecuencia, el recurso
de casación no cumple con los requisitos de fondo necesarios para
su procedencia, por lo que, corresponde a este Colegiado proceder
con la facultad conferida por la parte in fine del artículo 58 de la
Ley Procesal del Trabajo, modificado por el artículo 1 de la Ley
Nº 27021, declarando: IMPROCEDENTE el recurso de casación
interpuesto por el demandado Panamericana Televisión Sociedad
Anónima, obrante a fojas doscientos treinta y siete, contra la
sentencia de vista de fecha veintiocho de enero de dos mil trece, de
fojas doscientos veintisiete; y ORDENARON publicar la presente
resolución en el Diario Oficial “El Peruano” conforme a ley; en los
seguidos por Luis Fernando Llanos Readi contra Panamericana
Televisión Sociedad Anónima sobre Pago de beneficios sociales;
y los devolvieron. Vocal Ponente: Vinatea Medina. S.S. SIVINA
HURTADO, ACEVEDO MENA, VINATEA MEDINA, RUEDA
FERNÁNDEZ, DE LA ROSA BEDRIÑANA C-1335410-32
CAS. Nº 10598-2013 PIURA
Lima, tres de marzo de dos mil catorce. VISTOS: con el
acompañado; y, CONSIDERANDO: Primero: El recurso de
casación interpuesto por Electronoroeste Sociedad Anónima
obrante a fojas doscientos cincuenta y uno, cumple con los
requisitos de admisibilidad previstos en el artículo 387 del Código
Procesal Civil, modificado por el artículo 1 de la Ley N° 29364, de
aplicación supletoria, concordante con el numeral 3.1) del inciso 3
del artículo 32 de la Ley N° 27584. Segundo: Antes del análisis de
los requisitos de procedencia es necesario precisar que el recurso
de casación es un medio impugnatorio extraordinario de carácter
formal que sólo puede fundarse en cuestiones eminentemente
jurídicas y no en cuestiones fácticas o de revaloración probatoria,
es por ello que sus fines esenciales constituyen la adecuada
aplicación del derecho objetivo al caso concreto y la uniformidad
de la jurisprudencia nacional por la Corte Suprema; en ese
sentido su fundamentación por parte de la recurrente debe
ser clara, precisa y concreta indicando ordenadamente cuales
son las denuncias que configuran la infracción normativa que
incida directamente sobre la decisión contenida en la resolución
impugnada, o las precisiones respecto al apartamiento inmotivado
del precedente judicial. Tercero: Por otro lado, el artículo 386
del Código Procesal Civil, modificado por el artículo 1 de la Ley
N° 29364, precisa como causales casatorias: a) La infracción
normativa que incida directamente sobre la decisión contenida
en la resolución impugnada; y, b) El apartamiento inmotivado del
precedente judicial. Cuarto: Por infracción normativa debemos
entender la causal a través de la cual el recurrente denuncia la
existencia de un error de naturaleza procesal o sustantiva que
incide directamente sobre el sentido de lo decidido. Los errores
que pueden ser alegados como infracción normativa pueden
comprender a los supuestos de aplicación indebida, interpretación
errónea o inaplicación de una norma, que como se ha señalado
pueden ser de carácter sustantivo o procesal. Quinto: La
recurrente ha denunciado como causal casatoria la vulneración
74056
CASACIÓN
del principio de legalidad alegando que las sanciones impuestas
por la supuesta transgresión del indicador aspectos generales de la
cobranza incurre en vulneración de tal principio porque se sustenta
en norma jurídica ilegítima. Precisa que la Resolución N° 028-2006OS/CD ha sido expedida transgrediendo los criterios sustanciales
establecidos por el ordenamiento jurídico para la expedición de
reglamentos de tal naturaleza por parte del Organismo Supervisor
de la Inversión en Energía y Minería - OSINERGMIN En ese
sentido, añade que si bien es cierto el de Organismo Supervisor de
la Inversión en Energía y Minería - OSINERGMIN puede dictar, en
el ámbito y materia de su respectiva competencia, los reglamentos
y normas que regulen los procedimientos a su cargo, también es
cierto que para ejercer esa potestad debe cumplir ineludiblemente
– determinados criterios de forma y sustancia - siendo uno de ellos
que las normas a ser emitidas previamente a su vigencia sean
puestas a conocimiento de la población mediante la realización
de la respectiva publicación en la Gaceta de Normas Legales del
Diario Oficial “El Peruano”, de esa manera, recibir opiniones o
comentarios de los interesados, salvo que se omita realizar dicha
publicación mediando o atendiendo para ello razones de urgencia,
verificándose que la Resolución Administrativa N° 028-2006OS/CD no ha sido pre publicada debido a que el de Organismo
Supervisor de la Inversión en Energía y Minería - OSINERGMIN
afirmó que su entrada en vigencia resultaba de urgente necesidad.
Sexto: Con relación a las alegaciones contenidas en la causal de
casación, este Supremo Tribunal aprecia de la sentencia de vista
que la Sala de mérito ha señalado respecto de la Resolución N°
028-2006-OS/CD que en el numeral 5 de la Resolución N° 3612011-OS/TASTEM, el Organismo Supervisor de la Inversión en
Energía y Minería - OSINERGMIN expresó las razones por las
cuales consideró que la Resolución N° 028-2006-OS/CD tiene
plena vigencia, señalándose que al haberse detectado diversos
incumplimientos por parte de las empresas eléctricas, se consideró
de carácter urgente contar con una escala de multas y sanciones
que permitiera corregir de manera inmediata aquellas conductas
que perjudicaban el correcto desempeño del servicio público de
electricidad. En ese sentido, el Colegiado Superior ha señalado
expresamente que la entidad demandada refirió en la Resolución
Administrativa N° 028-2006-OS/CD que se acogió a la excepción
de pre publicación por considerarlo de urgencia, encontrándose
por tanto vigentes sus efectos conforme al ordenamiento
jurídico; razones por las cuales el recurso de casación deviene
en improcedente. Más aún, este Supremo Tribunal advierte que
lo pretendido por el recurrente es un nuevo pronunciamiento en
sede casatoria de lo resuelto en sede de instancia; lo que no se
condice con los fines del recurso extraordinario de casación, en
tanto que esta sede no es una tercera instancia, sino que más
bien se orienta a velar por el interés de la sociedad de allí que
el objeto de la casación no se oriente a enmendar el agravio de
la sentencia, sino busca la seguridad jurídica y la igualdad de
los ciudadanos ante la ley, por medio de la defensa del derecho
objetivo y la unificación de los criterios de la Corte Suprema. En
consecuencia, al no cumplir el presente recurso de casación con
los requisitos de fondo a que se refiere el artículo 388 del Código
Procesal Civil, modificado por el artículo 1 de la Ley N° 29364,
declararon IMPROCEDENTE el recurso de casación de fecha ocho
de julio de dos mil trece interpuesto por Electronoroeste Sociedad
Anónima contra la resolución de vista de fecha veintinueve de
mayo de dos mil trece obrante a fojas doscientos veinticuatro;
ORDENARON: publicar la presente resolución en el Diario Oficial
“El Peruano” conforme a ley; en los seguidos por Electronoroeste
Sociedad Anónima contra Organismo Supervisor de la Inversión
en Energía y Minería - OSINERGMIN, sobre acción contencioso
administrativa; y, los devolvieron. Vocal Ponente: Vinatea Medina.
S.S. WALDE JAUREGUI, ACEVEDO MENA, VINATEA MEDINA,
RUEDA FERNÁNDEZ, MALCA GUAYLUPO C-1335410-33
CAS. Nº 11041-2013 ICA
Lima, seis de marzo de dos mil catorce. VISTOS: con el acompañado;
y, CONSIDERANDO: Primero: El recurso de casación interpuesto
por don Juan Antonio Sturla Venturo y doña Rocío Gómez Germán
Palacios obrante a fojas ciento cincuenta y cuatro, cumple con los
requisitos de admisibilidad previstos en el artículo 387 del Código
Procesal Civil, modificado por el artículo 1 de la Ley N° 29364, de
aplicación supletoria, concordante con el numeral 3.1) del inciso 3
del artículo 32 de la Ley N° 27584. Segundo: Antes del análisis de
los requisitos de procedencia es necesario precisar que el recurso
de casación es un medio impugnatorio extraordinario de carácter
formal que sólo puede fundarse en cuestiones eminentemente
jurídicas y no en cuestiones fácticas o de revaloración probatoria,
es por ello que sus fines esenciales constituyen la adecuada
aplicación del derecho objetivo al caso concreto y la uniformidad de
la jurisprudencia nacional por la Corte Suprema; en ese sentido su
fundamentación por parte de la recurrente debe ser clara, precisa
y concreta indicando ordenadamente cuales son las denuncias
que configuran la infracción normativa que incida directamente
sobre la decisión contenida en la resolución impugnada, o las
precisiones respecto al apartamiento inmotivado del precedente
judicial. Tercero: Por otro lado, el artículo 386 del Código
Procesal Civil, modificado por el artículo 1 de la Ley N° 29364,
precisa como causales casatorias: a) La infracción normativa que
incida directamente sobre la decisión contenida en la resolución
impugnada; y, b) El apartamiento inmotivado del precedente judicial.
El Peruano
Lunes 1 de febrero de 2016
Cuarto: Por infracción normativa debemos entender la causal a
través de la cual el recurrente denuncia la existencia de un error
de naturaleza procesal o sustantiva que incide directamente sobre
el sentido de lo decidido. Los errores que pueden ser alegados
como infracción normativa pueden comprender a los supuestos
de aplicación indebida, interpretación errónea o inaplicación de
una norma, que como se ha señalado pueden ser de carácter
sustantivo o procesal. Quinto: Los recurrentes han denunciado
como causales del recurso de casación que: i) La sentencia de vista
incurre en motivación aparente; ii) La inaplicación del artículo 27
del Texto Único Ordenado de la Ley N° 27584; y iii) La inaplicación
del artículo 9 de la Ley N° 27444; denuncias que se subsumen
dentro de la causal de infracción normativa. Sexto: Sobre la
denuncia de infracción normativa por motivación aparente
alegan los recurrentes que se ha incurrido en dicha infracción
por cuanto, en la sentencia de vista se ha precisado que no está
acreditada la necesidad impostergable de tutela para canalizar su
pretensión en la vía del proceso urgente, lo que no responde a sus
alegaciones de haber recién adquirido la titularidad de todos los
derechos originarios con la Resolución Directoral N° 022—GORE.
ICA-DRAG en virtud a una cesión de derechos de fecha veintitrés
de setiembre de dos mil once. En consecuencia, no es cierto que
hayan esperado más de cinco años para solicitar la ejecución
del mandato contenido en la resolución bajo referencia. Y, con
relación a la denuncia de infracción normativa por inaplicación
del artículo 27 del Texto Único Ordenado de la Ley N° 27584,
sostienen los impugnantes que de haberse aplicado dicha norma su
demanda no hubiese sido declarada improcedente, sino debió ser
adecuada a las reglas del proceso especial. Sétimo: Las denuncias
casatorias que anteceden devienen en improcedentes, por cuanto
este Supremo Tribunal aprecia de la decisión cuestionada que la
Sala Superior ha cumplido con motivarla, precisando que “los
presupuestos para conceder tutela urgente son: interés tutelable,
cierto y manifiesto; necesidad impostergable de tutela; y, que sea
la única vía eficaz para la tutela del derecho invocado” no obstante
ello, la Sala de mérito advirtió que los demandantes no acreditaron
la necesidad impostergable de tutela, por cuanto la resolución
administrativa cuyo cumplimiento pretenden data de fecha quince
de enero de dos mil siete, sin embargo, recién acudieron al órgano
jurisdiccional a fin de solicitar el cumplimiento de lo solicitado el
catorce de junio de dos mil doce (después de más de cinco años),
conducta que evidenciaba que la pretensión incoada no resultaba
ser de inminente tutela, declarando improcedente la demanda
conforme a ley. Más aún, fueron los mismos demandantes quienes
en su escrito de demanda de fojas diecisiete, solicitaron se tramite
en la vía procedimental de proceso urgente. Octavo: Sobre la
denuncia de infracción normativa por inaplicación del artículo
9 de la Ley N° 27444, alegan los impugnantes que no existe norma
dentro de las Leyes Nº 27584 y Nº 27444 que autorice a un Juez
la declaración de nulidad de oficio de un acto administrativo dentro
de un proceso contencioso administrativo, de modo que al no
haberse derivado la declaración de nulidad de pleno derecho de la
Resolución Directoral N° 022-2007-GORE-ICA-DRAG del quince
de enero de dos mil siete, de alguno de los supuestos contenidos
en el artículo 13 del Texto Único Ordenado de la Ley N° 27584, la
sentencia de vista ha inaplicado y por ende infringido lo dispuesto
en el artículo 9 de la Ley N° 27444. Noveno: La denuncia que
antecede deviene en manifiestamente improcedente por cuanto
en el presente caso, la Sala Superior no ha declarado la nulidad
de la Resolución Directoral N° 022-2007-GORE-ICA-DRAG
del quince de enero de dos mil siete, solo se ha pronunciado
por la improcedencia de la demanda al no haber acreditado los
demandantes la necesidad de que la pretensión incoada resultaba
ser de inminente tutela. En consecuencia, al incumplir el presente
recurso de casación con los requisitos de fondo a que se refiere el
artículo 388 del Código Procesal Civil, modificado por el artículo
1 de la Ley N° 29364, declararon IMPROCEDENTE el recurso de
casación interpuesto por don Juan Antonio Sturla Venturo y doña
Rocío Gómez Germán Palacios obrante a fojas ciento cincuenta
y cuatro, de fecha veintiocho de mayo de dos mil trece contra la
sentencia de vista, de fecha veintinueve de abril de dos mil trece,
de fojas ciento siete; DISPUSIERON la publicación de la presente
resolución en el Diario Oficial “El Peruano” conforme a ley; en
los seguidos por Rocío Gómez Germán Palacios y otro contra
el Gobierno Regional de Ica y otro, sobre acción contencioso
administrativa. Vocal Ponente: Vinatea Medina. S.S. WALDE
JAUREGUI, ACEVEDO MENA, VINATEA MEDINA, RUEDA
FERNÁNDEZ, MALCA GUAYLUPO C-1335410-34
CAS. Nº 11305-2013 LIMA
Lima, diez de marzo de dos mil catorce. VISTOS: con los
acompañados; y, CONSIDERANDO: Primero: El recurso de
casación interpuesto por Electronoroeste Sociedad Anónima,
obrante a fojas trescientos veintisiete, cumple con los requisitos
de admisibilidad previstos en el artículo 387 del Código Procesal
Civil, modificado por el artículo 1 de la Ley N° 29364, de aplicación
supletoria, concordante con el numeral 3.1) del inciso 3 del
artículo 32 de la Ley N° 27584. Segundo: Antes del análisis de
los requisitos de procedencia es necesario precisar que el recurso
de casación es un medio impugnatorio extraordinario de carácter
formal que sólo puede fundarse en cuestiones eminentemente
jurídicas y no en cuestiones fácticas o de revaloración probatoria,
es por ello que sus fines esenciales constituyen la adecuada
El Peruano
Lunes 1 de febrero de 2016
CASACIÓN
aplicación del derecho objetivo al caso concreto y la uniformidad de
la jurisprudencia nacional por la Corte Suprema; en ese sentido su
fundamentación por parte de la recurrente debe ser clara, precisa
y concreta indicando ordenadamente cuales son las denuncias
que configuran la infracción normativa que incida directamente
sobre la decisión contenida en la resolución impugnada, o las
precisiones respecto al apartamiento inmotivado del precedente
judicial. Tercero: Por otro lado, el artículo 386 del Código
Procesal Civil, modificado por el artículo 1 de la Ley N° 29364,
precisa como causales casatorias: a) La infracción normativa que
incida directamente sobre la decisión contenida en la resolución
impugnada; y, b) El apartamiento inmotivado del precedente judicial.
Cuarto: Por infracción normativa debemos entender la causal a
través de la cual el recurrente denuncia la existencia de un error
de naturaleza procesal o sustantiva que incide directamente sobre
el sentido de lo decidido. Los errores que pueden ser alegados
como infracción normativa pueden comprender a los supuestos
de aplicación indebida, interpretación errónea o inaplicación de
una norma, que como se ha señalado pueden ser de carácter
sustantivo o procesal. Quinto: La recurrente ha denunciado como
causal del recurso de casación la inaplicación del artículo 194 de
la Ley N° 27444, alegando que la Sala de mérito incurre en error
al señalar que el Organismo Supervisor de la Inversión en Energía
y Minería - OSINERGMIN cuenta con competencia o atribución
para aplicar multas coercitivas cuando se incumplen prestaciones
a favor de terceros en procedimientos administrativos trilaterales.
Precisa, que si bien la Administración tiene facultad para imponer
multas coercitivas y estas han sido impuestas respecto de una
obligación de dar, ésta no ha sido determinada a favor de la entidad
demandada, sino a favor de un tercero, Gobierno Regional de
Tumbes, puesto que se encuentra ante un procedimiento trilateral,
de lo que se concluye que no se ha configurado el requisito en
análisis, lo que genera la ilegalidad de la sanción impuesta, por lo
que las resoluciones administrativas deben ser anuladas. Sexto:
Este Supremo Tribunal advierte del contenido de la denuncia que
precede que, esta deviene en improcedente por cuanto como
lo ha determinado la Sala Superior, el Organismo Supervisor de
la Inversión en Energía y Minería - OSINERGMIN cuenta con
competencia o atribución para aplicar multas coercitivas, conforme
a lo prescrito en los artículos 196 y 199 de la Ley N° 27444, e
incisos c) y d) del artículo 3 de la Ley N° 27332, Ley Marco de los
Organismos reguladores de la Inversión Privada en los Servicios
Públicos. En ese sentido, el Colegiado de mérito precisó que la
norma que tipifica las infracciones y escala de multas y sanciones
es la Resolución de Consejo Directivo de Osinerg N° 028-2003OS/CD; asimismo, la Resolución N° 054-2004-OS-CD, en su
artículo 4 resuelve incorporar la tipificación de multas coercitivas;
y finalmente la Resolución de Gerencia General de Osinergmin N°
0275-2007-OS/GG, que establece pautas para la aplicación de
multas coercitivas en procedimientos de reclamos, de conformidad
con el artículo 44 de la Resolución de Consejo Directivo del
Organismo Supervisor de la Inversión en Energía y Minería
OSINERGMIN N° 640-2007-OS/CD. Sétimo: Máxime que, este
Tribunal Supremo advierte que lo realmente cuestionado por el
impugnante es lo resuelto por los Jueces de mérito, pretendiendo
forzar a esta Sala Suprema a emitir un nuevo pronunciamiento
sobre el fondo del asunto, lo que no se condice con los fines
del recurso extraordinario de casación, esto es, la interpretación
del derecho objetivo y la unificación de los criterios de la Corte
Suprema. En consecuencia, al no cumplir el presente recurso de
casación con los requisitos de fondo a que se refiere el artículo
388 del Código Procesal Civil, modificado por el artículo 1 de la Ley
N° 29364, declararon IMPROCEDENTE el recurso de casación
interpuesto por Electronoroeste Sociedad Anónima, obrante a fojas
trescientos veintisiete, de fecha veintidós de enero de dos mil trece,
contra la resolución de vista de fecha veinticuatro de julio de dos
mil doce, obrante a fojas ciento noventa y cuatro; DISPUSIERON
publicar la presente resolución en el Diario Oficial “El Peruano”
conforme a ley; en los autos seguidos por Electronoroeste
Sociedad Anónima contra Organismo Supervisor de la Inversión
en Energía y Minería - OSINERGMIN, sobre Acción Contencioso
Administrativa; y los devolvieron. Vocal Ponente: Vinatea Medina.
S.S. SIVINA HURTADO, WALDE JAUREGUI, ACEVEDO MENA,
VINATEA MEDINA, RUEDA FERNÁNDEZ C-1335410-35
CAS. Nº 11329-2013 LIMA
Lima, diez de marzo de dos mil catorce. VISTOS; con el
acompañado; y, CONSIDERANDO: Primero.- Que, el recurso de
casación interpuesto por Embotelladora San Jorge Sociedad
Anónima Cerrada, de fecha primero de julio de dos mil trece, a
fojas doscientos doce, contra la sentencia de vista, su fecha
diecinueve de setiembre de dos mil doce, obrante a fojas
doscientos, que resuelve confirmar la sentencia contenida en la
resolución número ocho del veintiocho de octubre de dos mil diez,
que declaro infundada la demanda contencioso administrativo
interpuesta por Embotelladora San Jorge Sociedad Anónima
Cerrada, para cuyo efecto se debe proceder a calificar los requisitos
de admisibilidad y procedencia de dicho medio impugnatorio
conforme a la modificación establecida por la Ley N° 29364; norma
que debe concordarse con los artículos 32 y 33 de la Ley N° 27584
que regula el Procedimiento Contencioso Administrativo.
Segundo.- En tal sentido, verificados los requisitos de admisibilidad
previstos en el artículo 387 del Código Procesal Civil, modificado
74057
por el artículo 1 de la Ley N° 29364, aplicable supletoriamente, se
tiene que: i) Se recurre una resolución expedida por una Sala
Superior que pone fin al proceso, ii) Se ha interpuesto ante la Sala
que emitió la resolución impugnada; iii) Fue interpuesto dentro del
plazo de diez días de notificada la recurrente con la resolución
impugnada; y, iv) Adjunta el arancel judicial por concepto del
recurso de casación. Habiendo cumplido con los requisitos de
admisibilidad se procederá a calificar los requisitos de procedencia
de este recurso. Tercero.- Que, el artículo 386° del Código
Procesal Civil señala que el recurso de casación se sustenta en: i)
La infracción normativa que incida directamente sobre la decisión
contenida en la resolución impugnada, ii) En el apartamiento
inmotivado del precedente judicial. Cuarto: Por infracción
normativa debemos entender la causal a través de la cual el
recurrente denuncia la existencia de un error de naturaleza
procesal o sustantiva que incide directamente sobre el sentido de
lo decidido. Los errores que pueden ser alegados como infracción
normativa pueden comprender a los supuestos de aplicación
indebida, interpretación errónea o inaplicación de una norma, que
como se ha señalado pueden ser de carácter sustantivo o procesal.
Quinto: La recurrente ha denunciado como infracciones
normativas: 1) La inaplicación del numeral 3 del articulo 235 y
el numeral 3 del articulo 234 de la Ley Nº 27444 - Ley del
Procedimiento Administrativo General; y, 2) La aplicación
errónea (indebida) del artículo 14 de la Ley Nº 27444 - Ley del
Procedimiento Administrativo General. Sexto: En cuanto a la
denuncia de infracción normativa por inaplicación del numeral
3 del artículo 235 y el numeral 3 del artículo 234 de la Ley Nº
27444 - Ley del Procedimiento Administrativo General, sostiene
la empresa recurrente que, desde la interposición de la demanda a
señalado que el procedimiento administrativo incumplió con lo
dispuesto en las normas de referencia, puesto que no se le
procedió a entregar la información relevante en el primer acto de
notificación, limitándose a adjuntar la denuncia formulada por el
señor Jorge Gerardo Penilla Melchor; en ese sentido, señala que,
basta apreciar el Oficio N° 1707-2007/DG/DIGESA para verificar el
incumplimiento de la minima garantía para el ejercicio de la
potestad sancionadora por parte de la administración pública,
vulnerándose de esta manera su derecho al debido proceso en
sede administrativa. Sétimo: Que, la denunciante afirma que la
Administración se limito a trasladarle la denuncia realizada por el
señor Jorge Gerardo Penilla Melchor, la cual fue realizada a mano,
sin ningún rigor legal, omitiéndose el traslado de elementos
imprescindibles como son la calificación de las infracciones, la
expresión de las sanciones y la exposición exacta de los hechos
que se imputan; por lo tanto al pretender sustentar que se realizó
una correcta notificación, se pretendería validar un procedimiento
administrativo de naturaleza sancionatoria que se inicio nulo toda
vez que el incumplimiento del mismo conlleva a la vulneración de
los derechos de defensa y debido procedimiento sufridos por su
parte. Octavo: Que, el numeral 3 del articulo 234 de la Ley Nº
27444, Ley del Procedimiento Administrativo General, cuya
infracción por inaplicación se denuncia, se encuentra referida a la
obligatoriedad de la debida notificación en el procedimiento
administrativo; la misma que consiste en comunicar a los
administrados de los hechos que se le imputen a título de cargo, la
calificación de las infracciones que tales hechos pueden construir y
la expresión de las sanciones que, en su caso, se le pudiera
imponer, así como la autoridad competente para imponer la
sanción y la norma que atribuya tal competencia del procedimiento
sancionador. Asimismo, invoca la infracción normativa por
inaplicación del numeral 3 del artículo 235 de la Ley Nº 27444, Ley
del Procedimiento Administrativo General, que dispone la
obligatoriedad de la Administración, una vez decidido el inicio del
procedimiento sancionador, de efectuar la respectiva notificación
de cargo al posible sancionado, la cual debe contener las
referencias que describe el numeral 3 del articulo 234 de la norma
en desarrollo, a fin de presentar los respectivos descargos.
Noveno: Por lo que siendo ello así, esta Sala Suprema, advierte
que lo que la parte recurrente pretende cuestionar es el criterio
asumido por las instancias de mérito, al valorar el medio probatorio
consistente en el Oficio N° 1707-2007/DG/DIGESA1, de fecha diez
de marzo de dos mil siete, por consiguiente, se tiene que, lo que en
el fondo pretende el recurrente es el reexamen de la prueba y la
modificación de los hechos establecidos, lo cual no esta permitido
en sede casatoria. Décimo: Que, aunado a ello, se advierte de
autos que, la Sala Superior en el considerando 4.1 de la sentencia
de vista de fecha diecinueve de setiembre de dos mil doce, ha
efectuado el respectivo análisis del medio probatorio en cuestión,
señalando taxativamente que “i) Es de verificarse en autos que el
demandante fue debidamente notificado mediante el Oficio N°
1707-2007/DG/DIGESA de fecha diez de marzo de dos mil siete, el
cual le requiere hacer su descargo correspondiente en forma
documentada concediéndole el plazo de cinco días “por el supuesto
procesamiento y comercialización de Agua sin gas “AGUA VIDA”
(…), que no cumple con las normas sanitarias al evidenciar
sedimentos” poniéndole en conocimiento la denuncia de parte
presentada en su contra. ii) Asimismo se aprecia que el demandante
presento su descargo con fecha veinte de abril de dos mil siete,
donde se puede advertir que tuvo conocimiento de las Visitas
inopinadas por parte de DIGESA, ejerciendo su derecho de
defensa durante todo el procedimiento administrativo sancionador,
presentando descargos, escritos y recursos pertinentes”. Siendo
74058
CASACIÓN
ello así, este Supremo Tribunal considera que las infracciones
denunciadas en este extremo devienen en manifiestamente
improcedentes, por cuanto se pretende un reexamen de los
medios de prueba debidamente valorados por las instancias de
mérito. Décimo Primero: Que, en cuanto a la infracción
normativa consistente en la aplicación errónea (indebida) del
artículo 14 de la Ley Nº 27444 - Ley del Procedimiento
Administrativo General, sustenta el denunciante que, la Sala
Superior sostiene que el vicio incurrido en el Oficio N° 1707-2007/
DG/DIGESA fue convalidado por haber cuestionado oportunamente,
razón por la cual correspondería la aplicación del principio de
conservación de los actos administrativos recogido en el artículo 14
de la Ley Nº 27444. Sin embargo, no toma en consideración que
los vicios incurridos por la Administración, no pueden catalogarse
como intrascendentes, razón por la cual no podría convalidarse por
consiguiente no seria de aplicación el principio de conservación del
acto administrativo. Décimo Segundo: Que, el alegado articulo 14
de la Ley Nº 27444, Ley del Procedimiento Administrativo General,
cuya infracción por aplicación errónea se denuncia, establece el
principio de conservación de los actos administrativos; en ese
sentido, es de mérito señalar que la Sala Superior si bien en
considerando 4.1 de la resolución de vista establece que el
recurrente “al presentar su descargo de fecha diecinueve de abril
de dos mil siete no cuestionó ningún defecto en la forma de emisión
del Oficio N° 1707-2007/DG/DIGESA, por lo que cualquier defecto
formal en ella presente, habría en todo caso quedado convalidado
por el principio de convalidación del acto previsto en el articulo 14
de la Ley de Procedimiento Administrativo General”; también es de
pertinente acotar que la Sala Superior analiza el caso en particular,
conforme al caudal probatorio, llegando a concluir en su
considerando 4.2 que “se puede apreciar de autos que el
demandante conoció la imputación que le atribuía la administración
consistente en no cumplir con las normas sanitarias al evidenciar
sedimentos y que ante ello, ejerció su derecho de defensa”. En
consecuencia, esta Sala Suprema aprecia de la resolución de
mérito que contiene una adecuada motivación, al haberse expuesto
los fundamentos de hecho y de derecho en que se sustenta la
decisión, no evidenciándose contravención alguna al derecho
fundamental al debido proceso, siendo realmente la pretensión de
la Empresa impugnante lograr a través de este recurso
extraordinario una revaloración de los hechos y de la prueba
actuada en sede de instancia, lo cual no se condice con los fines
del recurso casatorio previstos en el artículo 384 del Código
Adjetivo, modificado por el artículo 1 de la Ley Nº 29364. En
consecuencia, de conformidad con lo previsto en el artículo 392 del
Código Procesal Civil, modificado por el artículo 1 de la Ley N°
29364, declararon: IMPROCEDENTE el recurso de casación
interpuesto por Embotelladora San Jorge Sociedad Anónima
Cerrada, de fecha primero de julio de dos mil trece, a fojas
doscientos doce, contra la sentencia de vista su fecha diecinueve
de setiembre de dos mil doce; DISPUSIERON la publicación de la
presente resolución en el Diario Oficial “El Peruano” conforme a
ley; en los seguidos por la Embotelladora San Jorge Sociedad
Anónima Cerrada contra el Ministerio de Salud y otro, sobre
impugnación de acto administrativo; y los devolvieron. Vocal
ponente Vinatea Medina. S.S. SIVINA HURTADO, WALDE
JAUREGUI, ACEVEDO MENA, VINATEA MEDINA, RUEDA
FERNÁNDEZ
1
Obrante a fojas 9 del Expediente Principal.
C-1335410-36
CAS. Nº 11361-2013 LIMA
Lima, diez de marzo de dos mil catorce.- VISTOS; y
CONSIDERANDO: Primero.- Que, el recurso de casación
interpuesto por doña Dora Anselma De La Cruz Castillo Vda. de
Machuca, de fecha doce de junio de dos mil trece, a fojas ciento
noventa y uno, contra la sentencia de vista su fecha dos de mayo
de dos mil trece, obrante a fojas ciento setenta y cinco, que
resuelve confirmar la sentencia apelada que declara infundada la
demanda de impugnación de resolución administrativa, para cuyo
efecto se debe proceder a calificar los requisitos de admisibilidad
y procedencia de dicho medio impugnatorio conforme a la
modificación establecida por la Ley N° 29364; norma que debe
concordarse con los artículos 32 y 33 de la Ley N° 27584 que
regula el Procedimiento Contencioso Administrativo. Segundo.- En
tal sentido, verificados los requisitos de admisibilidad previstos en
el artículo 387 del Código Procesal Civil, modificado por el artículo
1 de la Ley N° 29364, aplicable supletoriamente, se tiene que: i)
Se recurre una resolución expedida por una Sala Superior que
pone fin al proceso, ii) Se ha interpuesto ante la Sala que emitió la
resolución impugnada; iii) Fue interpuesto dentro del plazo de diez
días de notificada la recurrente con la resolución impugnada; y, iv)
Adjunta el arancel judicial por concepto del recurso de casación.
Habiendo cumplido con los requisitos de admisibilidad se procederá
a calificar los requisitos de procedencia de este recurso. Tercero.Que, el artículo 386° del Código Procesal Civil, modificado por la
Ley Nº 29364, señala que el recurso de casación se sustenta en: i)
La infracción normativa que incida directamente sobre la decisión
contenida en la resolución impugnada, o ii) En el apartamiento
inmotivado del precedente judicial. Cuarto.- Que, los numerales
2 y 3 del artículo 388° del Código Procesal Civil, modificado por
la Ley Nº 29364, establece que constituye requisito de fondo del
El Peruano
Lunes 1 de febrero de 2016
recurso, que se describa con claridad y precisión la infracción
normativa o el apartamiento del precedente judicial, expresando en
cuál de las causales descritas en el artículo 386° de este Código
acotado se sustenta y, según el caso, debe precisarse cómo debe
ser la debida aplicación o cuál es la interpretación correcta de la
norma de derecho material; cuál debe ser la norma de derecho
material aplicable; o en qué ha consistido la afectación del derecho
al debido proceso o cuál ha sido la formalidad procesal incumplida;
así como el demostrar la incidencia directa de la infracción sobre
la decisión impugnada. Quinto.- Este Supremo Tribunal advierte
del recurso de su propósito, que la recurrente no ha cumplido con
precisar las causales en que lo sustenta, alegando entre otros
fundamentos que la Sala Superior no hace un análisis exegético
de las normas que sustentarían el proceder de la Municipalidad
Distrital de Chorrillos al no haber cumplido con resolver en el
plazo establecido el recurso de reconsideración interpuesto en
el procedimiento administrativo, mediante el cual se ordena la
clausura definitiva del Local N° 18 del Modulo de Servicios de
Playa Agua Dulce, conducido por la demandante; sin embargo este
Colegiado considera que lo que en realidad cuestiona la recurrente,
es la no aplicación del silencio administrativo positivo a su caso.
Sexto.- Que, en ese sentido, es necesario precisar que el A quem
en la resolución materia del presente recurso, señala taxativamente
en su considerando décimo que “tratándose la solicitud de una
cuestión relacionada que afecta el interés público, incidiendo en la
salud (no exhibir los precios de los platos de comidas que expende,
ni los carné sanitarios del personal que atiende al público) el silencio
administrativo operado es el negativo, por lo que sería contrario a
ley asumir, como lo hace el accionante, que la Municipalidad al no
pronunciarse dentro de los treinta (30) días, plazo estipulado en
el artículo 207 numeral 207.2 de la Ley Nº 27444 - Ley General
de Procedimiento Administrativo General, opera automáticamente
el Silencio Administrativo Positivo”. En consecuencia, se advierte
que la Sala Superior cumple con hacer un análisis sistemático y
exegético de la norma, através del cual concluye que en el caso
de autos no es de aplicación el silencio administrativo positivo por
cuanto las infracciones incurridas por la demandante contravienen
el interés publico. Sétimo.- Aunado a ello, el recurso de casación
deviene en manifiestamente improcedente por cuanto, como
se ha señalado en el considerando anterior, no se ha precisado
las causales casatorias, por el contrario, la recurrente realmente
cuestiona el criterio jurisdiccional de los Jueces de mérito,
pretendiendo una revaloración de la situación fáctica, propósito
que no se condice con los fines de este recurso extraordinario. Por
las razones expuestas, al no haberse satisfecho las exigencias de
fondo a que hace referencia el artículo 388° del Código Procesal
Civil, en ejercicio de la facultad conferida por el artículo 392° del
acotado Código, modificado por la Ley Nº 29364, declararon:
IMPROCEDENTE el recurso de casación interpuesto por doña
Dora Anselma De La Cruz Castillo Vda. de Machuca a fojas
ciento noventa y uno, contra la sentencia de vista su fecha dos
de mayo de dos mil trece, obrante a fojas ciento setenta y cinco;
y, MANDARON publicar la presente resolución en el Diario Oficial
“El Peruano” conforme a ley; en los seguidos por Dora Anselma De
La Cruz Castillo Vda. de Machuca contra la Municipalidad Distrital
de Chorrillos; sobre impugnación de resolución administrativa;
y los devolvieron. Vocal Ponente: Vinatea Medina.- S.S. SIVINA
HURTADO, WALDE JÁUREGUI, ACEVEDO MENA, VINATEA
MEDINA, RUEDA FERNÁNDEZ C-1335410-37
CAS. Nº 12168 – 2013 LIMA
Lima, siete de agosto de dos mil catorce. LA SALA DE DERECHO
CONSTITUCIONAL Y SOCIAL PERMANENTE DE LA CORTE
SUPREMA DE JUSTICIA DE LA REPUBLICA. VISTA la causa:
con el acompañado, con lo expuesto en el dictamen de la Fiscalía
Suprema en lo Contencioso Administrativo; en audiencia pública
llevada a cabo en la fecha integrada por los Señores Jueces
Supremos: Sivina Hurtado, Walde Jáuregui, Acevedo Mena,
Vinatea Medina y Rueda Fernández; verificada la votación con
arreglo a ley, emite la siguiente sentencia: I.- MATERIA DEL
RECURSO: Se trata del recurso de casación interpuesto por la
parte demandante Empresa de Distribución Eléctrica de Lima
Norte Sociedad Anónima Abierta – EDELNOR S.A.A., de fecha
nueve de noviembre de dos mil doce, obrante a fojas doscientos
contra la sentencia de vista de fecha veinticuatro de noviembre de
dos mil once, obrante a fojas ciento setenta y seis, que confirma la
sentencia apelada de fecha dieciocho de abril de dos mil once,
obrante a fojas ciento treinta y dos, que declaró infundada la
demanda interpuesta. II.- FUNDAMENTOS DEL RECURSO: Que,
mediante Resolución Suprema de fecha catorce de abril del dos mil
catorce, de fojas cuarenta y ocho del cuadernillo de casación, se
declaró PROCEDENTE el recurso presentado, por la causal
prevista en el artículo 386 del Código Procesal Civil, con relación al
agravio por: infracción normativa de las normas que garantizan
el derecho al debido proceso, en ese sentido la actora refiere que
la Sala de mérito no se ha pronunciado respecto del extremo de su
demanda en la que se indica que en el procedimiento administrativo
se ha vulnerado el debido proceso, plasmado en el numeral 1.2 del
artículo IV del Título Preliminar de la Ley N° 27444 Ley de
Procedimiento Administrativo General, al respecto precisa que en
los fundamentos de hecho de la demanda, indicó que la Resolución
N° 022-2009-OS/GG, deviene en nula ya que fue emitida fuera del
plazo de treinta días, habiendo operado el silencio administrativo
El Peruano
Lunes 1 de febrero de 2016
CASACIÓN
positivo, lo cual no ha tenido pronunciamiento por parte de la
instancia de mérito. III.- CONSIDERANDO: PRIMERO: Mediante
escrito de fojas cuarenta y dos, la Empresa de Distribución Eléctrica
de Lima Norte Sociedad Anónima Abierta – EDELNOR S.A.A.,
interpone demanda de Nulidad de Resolución Administrativa, a
efectos de que se declare la nulidad total de la Resolución
OSINERGMIN N° 022-2009-OS/GG, de fecha trece de enero de
dos mil nueve, que confirmó la Resolución de Gerencia de
Fiscalización Eléctrica N° 2810-2008-OS/GFE que declaró
infundado en todos sus extremos el recurso de apelación
presentado por su parte. Señala que por las referidas resoluciones
se resolvió su pedido de que el Organismo Supervisor de la
Inversión en Energía y Minas-OSINERGMIN procediera a calificar
como causa de fuerza mayor la interrupción del servicio de
electricidad producida entre las 02:18 y 12: 46 horas del dieciséis
de junio del dos mil ocho, que afectó al distrito de Barranca, como
consecuencia del hurto de conductor ocurrido entre las estructuras
N° 26665 y 26670 correspondientes a la red de media tensión del
alimentador BA-02 hecho que provocó la actuación del sistema de
protección y la apertura del referido alimentador, vulnerando lo
establecido en el numeral 1.2 del artículo IV del Título Preliminar de
la Ley N° 27444, que establece el principio del debido proceso,
puesto que con fecha trece de enero de dos mil nueve, esto es,
después de seis meses de haber interpuesto el recurso de
apelación contra la Resolución de Gerencia de Fiscalización
Eléctrica N° 2810-2008-OS/GFE, la Gerencia General emite la
Resolución OSINERGMIN N° 022-2009-OS/GG declarando
infundado en todos los extremos el recurso de apelación, no
obstante haber devenido esta última en nula por haber operado el
silencio administrativo positivo. SEGUNDO: El Colegiado de la
Segunda Sala Contencioso Administrativa Transitoria de la Corte
Superior de Justicia de Lima, mediante sentencia de vista de fojas
ciento setenta y seis, de fecha veinticuatro de noviembre de dos mil
once, confirmando la apelada declaró infundada la demanda, por
considerar que la demandante no acreditó haber cumplido con el
servicio de seguridad idóneo en razón a la frecuencia de hechos
delictivos de robo de cables en la zona. TERCERO: En el caso, es
necesario precisar que la motivación de las resoluciones judiciales
constituye un principio y derecho la función jurisdiccional,
consagrado en el numeral 5 del artículo 139 de la Constitución
Política del Estado, la misma que forma parte de la observancia del
debido proceso consagrado en el inciso 3 del antes citado artículo
139; el deber-derecho a la debida motivación de las resoluciones
judiciales ha sido desarrollado en el artículo 12 de la Ley Orgánica
del Poder Judicial, numeral 6 del artículo 50 y numeral 3 del artículo
122 del Código Procesal Civil, cuya contravención originará la
nulidad de la resolución, conforme lo disponen las dos últimas
normas adjetivas señaladas. CUARTO: La motivación es esencial
en los fallos, ya que los justiciables deben saber las razones por las
que se ampara o desestima una demanda, pues a través de su
aplicación efectiva se llega a una recta impartición de justicia,
evitando con ello arbitrariedades y permitiendo a las partes ejercer
adecuadamente su derecho de impugnación, planteando al
superior jerárquico las razones jurídicas que sean capaces de
poner de manifiesto los errores que puede haber cometido el
juzgador. La verificación de una debida motivación sólo es posible
si de las consideraciones de la sentencia se expresan las razones
suficientes que sustentan la decisión, que justifiquen el fallo, las
que deben ser razonadas, objetivas, serias y completas, en
atención al petitorio formulado en la demanda, a los hechos
alegados por las partes y que estén debidamente probados.
QUINTO: Respecto a la infracción normativa de las normas que
garantizan el derecho al debido proceso, del análisis de los
hechos se advierte que el proceso se ha desarrollado respetando
los derechos procesales de las partes, los actos del procedimiento
y el órgano jurisdiccional ha motivado sus decisiones
coherentemente, y si bien la recurrente alega que corresponde
declarar nula la sentencia de impugnada porque no se ha
pronunciado sobre el extremo de la demanda en cuanto señala que
no se ha aplicado la Ley N° 29060- Ley del Silencio Administrativo,
al momento de emitirse la Resolución N° 022-2009-OS/GG, la
misma que fue emitida fuera del plazo de treinta días, habiendo
operado el silencio administrativo positivo, sin embargo de la
revisión de dicha resolución se tiene que el juzgador si se ha
pronunciado sobre los puntos que han sido fijados como
controvertidos, y si bien no se pronuncia sobre cada una de las
alegaciones esgrimidas por las partes, si lo hace respecto a los
puntos que tienen relevancia en el proceso y que están vinculados
a los puntos controvertidos, por lo que este Tribunal advierte que la
sentencia cuestionada no adolece de falta de motivación, pues de
sus fundamentos se colige un rechazo implícito de las alegaciones
formuladas por la recurrente, tratándose por tanto de una
motivación implícita, no habiéndose trasgredido el principio de la
debida motivación, por cuanto el sentido del fallo se condice con lo
expuesto en sus considerandos fácticos y jurídicos determinando
que la resolución administrativa impugnada no adolece de causal
de nulidad, y así lo ha ratificado el Ad quem al expedir la sentencia
de vista, confirmando la decisión de declarar infundada la demanda;
siendo así, se ha garantizado los derechos a la tutela jurisdiccional
efectiva y al debido proceso. SEXTO: Aunado a lo señalado en el
considerando precedente, este Supremo Tribunal advierte que
erróneamente concluye la parte recurrente que al no haber la
entidad administrativa resuelto su recurso de apelación dentro del
74059
plazo de treinta días, ha operado el silencio administrativo (no
obstante impugnar mediante el presente proceso la Resolución N°
022-2009-OS/GG que resuelve dicho recurso de apelación); sin
embargo de la lectura del primer artículo de la Ley N° 29060- Ley
del Silencio Administrativo, se desprende que los procedimientos
de evaluación previa sujetos a silencio positivo, son: a) Solicitudes
cuya estimación habilite para el ejercicio de derechos preexistentes
o para el desarrollo de actividades económicas que requieran
autorización previa del Estado, y siempre que no se encuentren
contempladas
en
la
Primera
Disposición
Transitoria,
Complementaria y Final; b) Recursos destinados a cuestionar la
desestimación de una solicitud o actos administrativos anteriores,
siempre que no se encuentren contemplados en la Primera
Disposición Transitoria, Complementaria y Final; c) Procedimientos
en los cuales la trascendencia de la decisión final no pueda
repercutir directamente en administrados distintos del peticionario,
mediante la limitación, perjuicio o afectación a sus intereses o
derechos legítimos. Siendo ello así, es evidente que la solicitud de
calificación como causa de fuerza mayor la interrupción del servicio
de electricidad producida el dieciséis de junio de dos mil ocho, que
afectó al distrito de Barranca, como consecuencia del hurto de
conductor, no es un supuesto de hecho que la norma haya
establecido como sujeto al silencio administrativo positivo. IV.DECISIÓN: Por tales consideraciones, y en atención a lo dispuesto
en el primer párrafo del artículo 396 del Código Procesal Civil,
modificado por el artículo 1 de la Ley N° 29364 declararon:
INFUNDADO el recurso de casación interpuesto por la Empresa de
Distribución Eléctrica de Lima Norte Sociedad Anónima Abierta –
EDELNOR S.A.A., de fecha nueve de noviembre de dos mil doce,
obrante a fojas doscientos contra la sentencia de vista de fecha
veinticuatro de noviembre de dos mil once, obrante a fojas ciento
setenta y seis; en los seguidos por la Empresa de Distribución
Eléctrica de Lima Norte Sociedad Anónima Abierta - EDELNOR
S.A.A. contra el Organismo Supervisor de la Inversión en Energía
y Minería - OSINERGMIN sobre Acción Contencioso Administrativa;
DISPUSIERON publicar la presente resolución en el Diario Oficial
“El Peruano” conforme a ley; y los devolvieron. Vocal Ponente:
Vinatea Medina. S.S. SIVINA HURTADO, ACEVEDO MENA,
VINATEA MEDINA, RUEDA FERNÁNDEZ. EL VOTO EN
DISCORDIA DEL SEÑOR JUEZ SUPREMO WALDE JÁUREGUI
ES COMO SIGUE: VISTA la causa: con el acompañado, de
conformidad con el dictamen del señor Fiscal Supremo en lo
Contencioso Administrativo, con sus fundamentos. I.- MATERIA
DEL RECURSO. Se trata del recurso de casación interpuesto por
la Empresa de Distribución Eléctrica de Lima Norte Sociedad
Anónima Abierta, EDELNOR S.A.A., obrante a fojas doscientos
contra la sentencia de vista de fojas ciento setenta y seis, expedida
por la Segunda Sala Contenciosa Administrativa de la Corte
Superior de Justicia de Lima, su fecha veinticuatro de noviembre
de dos mil once, que confirmando la apelada, declara infundada la
demanda incoada. II.- CAUSALES DE CASACION: Mediante auto
calificatorio de fojas cuarenta y ocho del cuadernillo de casación,
este Supremo Tribunal ha declarado procedente el recurso de
casación interpuesto por la demandante Empresa de Distribución
Eléctrica de Lima Norte Sociedad Anónima Abierta – EDELNOR,
quien denuncia como agravio: La infracción normativa de
normas que garantizan el debido proceso, alegando que la Sala
de mérito no se ha pronunciado respecto del extremo de su
demanda en la que se indica que en el procedimiento administrativo
se ha vulnerado el debido proceso; al respecto precisa que en los
fundamentos de hecho de la demanda, indicó que la Resolución
No. 022-2009-OS/GG deviene en nula ya que fue emitida fuera del
plazo de treinta días, habiendo operado el silencio administrativo
positivo, lo cual no ha tenido pronunciamiento por parte de la
instancia de mérito. III.- CONSIDERANDO: PRIMERO: El derecho
al debido proceso previsto en el inciso 3) del artículo 139 de la
Constitución Política del Estado, está concebido como el
cumplimiento de todas las garantías, requisitos y normas de orden
público que deben observarse en las instancias procesales de
todos los procedimientos, incluidos los administrativos, a fin de que
las personas estén en condiciones de defender adecuadamente
sus derechos ante cualquier acto del Estado que pueda afectarlos,
siendo una de sus expresiones, el derecho que tiene todo justiciable
a probar, lo que constituye uno de los componentes elementales
del derecho a la tutela procesal efectiva, pues constituye un
elemento implícito de tal derecho, por ello es necesario que su
protección sea realizada en todo tipo de procesos. Como se ha
destacado, la tutela procesal efectiva está consagrada en la
Constitución Política del Estado y su salvaguarda está relacionada
con la necesidad que en cualquier proceso que se lleve a cabo, los
actos que lo conforman se verifiquen dentro de los cauces de la
formalidad y la consistencia propias de la administración de
Justicia. Se debe buscar, en consecuencia que los justiciables no
sean sometidos a instancias vinculadas con la arbitrariedad o los
caprichos de quien debe resolver el caso, pues el derecho a la
tutela procesal efectiva, importa la materialización de todo derecho
fundamental sometido al ámbito contencioso. SEGUNDO: Por
escrito de fojas cuarenta y dos, la Empresa Distribuidora Eléctrica
de Lima Norte Sociedad Anónima Abierta – EDELNOR S.A.A.,
interpone demanda contenciosa administrativa contra el Organismo
Supervisor de la Inversión en Energía y Minas – OSINERGMIN, a
efecto que se declare la nulidad total de la Resolución
OSINERGMIN N° 022-2009-OS/GG de fecha trece de enero de
74060
CASACIÓN
dos mil nueve, que confirmó la Resolución de Gerencia de
Fiscalización Eléctrica N° 2810-2008-OS/GFE que declaró
infundada la solicitud de calificación de fuerza mayor presentada
por EDELNOR, la interrupción del servicio público de electricidad
producida entre las 02:18 y 12:46 horas del día dieciséis de junio,
que afectó al distrito de Barranca, Lima, como consecuencia del
hurto de conductor ocurrido entre las estructuras números 26665 y
26670 correspondientes a la red aérea de media tensión del
alimentador BA-02; hecho que provocó la actuación del sistema de
protección y la apertura del referido alimentador. TERCERO:
Mediante la sentencia de vista de fojas ciento setenta y seis, la
Segunda Sala Contenciosa Administrativa Transitoria de la Corte
Superior de Justicia de Lima, confirmando la apelada declaró
infundada la demanda, tras considerar que la parte demandante,
quien tiene la carga de la prueba para acreditar su actuación
diligente conforme al artículo 33 del Texto Único Ordenado de la
Ley N° 27584, publicado el veintinueve de agosto de dos mil ocho,
a pesar que señala haber adoptado medidas de vigilancia y
seguridad con las que se ha reducido el robo de cable eléctrico, no
ha demostrado en el caso en concreto que ha contratado vigilancia
para sus instalaciones, lo que ha realizado es instalar abrazaderas
antiescalamiento o coronas con púas en los postes, difusión de
comunicados radiales con la finalidad de invitar a la participación
de los pobladores de Huacho y distritos, a comunicarse con la
Empresa de Distribución Eléctrica de Lima Norte Sociedad
Anónima Abierta – EDELNOR cuando observen a personas
manipulando sus instalaciones como refiere en su Informe.
CUARTO: Ingresando al análisis de la causal invocada y declarada
procedente, tenemos que de la argumentación impugnatoria
expuesta por el impugnante, se aprecia que el cuestionamiento a la
sentencia de vista se encuentra referido al hecho de no haberse
pronunciado respecto del extremo de su demanda en la que se
indica que en el procedimiento administrativo se ha vulnerado el
debido proceso, ya que la Resolución N° 022-2009-OS/GG fue
emitida fuera del plazo de treinta días, habiendo operado el silencio
administrativo positivo. QUINTO: De la revisión del escrito de
demanda de fojas cuarenta y dos, aparece que el pedido de nulidad
de la resolución administrativa por la que se desestima su solicitud
de declaración de fuerza mayor se sustenta principalmente en los
siguientes hechos: a) que a nivel administrativo se ha producido la
vulneración de su derecho a un debido procedimiento, pues no ha
cumplido con observar el plazo previsto para resolver el recurso de
apelación, por lo que al haberse emitido la Resolución
OSINERGMIN N° 022-2009-OS/GG fuera del plazo de treinta días
hábiles se produjo el silencio administrativo positivo previsto en la
Ley N° 29060, b) que el hurto de instalaciones, pese a su frecuencia
sigue siendo un hecho extraordinario, irresistible e imprevisible,
habiendo EDELNOR cumplido con adoptar todas las diligencias
necesarias para evitar el hurto de instalaciones y poder cumplir con
su obligación de suministrar energía y c) que los términos de
frecuencia y sector, en los que se basa OSINERGMIN para declarar
infundada el recurso de apelación son conceptos que no se
encuentra definidos en la “Directiva para la Evaluación de
Solicitudes de Calificación de Fuerza Mayor para Instalaciones de
Transmisión y Distribución”, lo que vulnera los principios de
legalidad y motivación. SEXTO: De los fundamentos de la sentencia
de primera instancia obrante a fojas ciento treinta y dos, se aprecia
que la razón esencial por la que el Juez del Décimo Juzgado
Especializado en lo Contencioso Administrativo, desestimó la
demanda se limita a establecer que el evento ocurrido el lunes
dieciséis de junio de dos mil ocho, ya es un evento que se presenta
con frecuencia y por lo cual Empresa de Distribución Eléctrica de
Lima Norte Sociedad Anónima Abierta - EDELNOR S.A.A., debería
tomar las medidas preventivas necesarias para cumplir con su
obligación de suministrar energía eléctrica de manera continua,
oportuna y suficiente; y que el corte de fluido eléctrico fue de 10:28
horas, por lo cual está en la obligación de compensar a los usuarios
por el costo de la potencia y energía no suministrada, tiempo que
debería haber sido menor si hubiera tomado las previsiones para
este tipo de eventos que se venían repitiendo en la citada
instalación. SÉTIMO: Del mismo modo, la sentencia de vista
corriente a fojas ciento setenta y seis, ha circunscrito su
pronunciamiento a establecer que la prueba de la diligencia debe
ser concreta y en relación al sector en el que ocurrieron los hechos,
no siendo fundamento valedero para acogerse a la causal de
fuerza mayor, sostener que la delincuencia es incontrolable por el
propio Estado, puesto que el demandante debía concentrar sus
esfuerzos en las acciones destinadas al robo de cables eléctricos
en el sector que ocurrió el hecho materia de este proceso.
OCTAVO: Como se observa, en ninguna de las mencionadas
sentencias de mérito, el Juez ha emitido pronunciamiento en torno
a los argumentos del escrito de demanda, destacados en el quinto
considerando de la sentencia de vista, consistentes en: haberse
emitido la Resolución OSINERGMIN N° 022-2009-OS/GG, fuera
del plazo de treinta días hábiles, cuando ya se había producido el
silencio administrativo previsto en la Ley N° 29060, de haber la
Empresa de Distribución Eléctrica de Lima Norte Sociedad
Anónima Abierta – EDELNOR cumplido con adoptar todas las
diligencias necesarias a efectos de evitar el hurto de instalaciones
y poder cumplir con su obligación de suministrar energía, y de no
haberse definido en la “Directiva para la Evaluación de Solicitudes
de Calificación de Fuerza Mayor para Instalaciones de Transmisión
y Distribución”, los términos de “frecuencia” y “sector”, habiendo
El Peruano
Lunes 1 de febrero de 2016
incurrido de esta manera, ambas sentencias de mérito en una
evidente falta de motivación, que acarrea su nulidad, por lo que los
referidos pronunciamientos deberían ser anulados, en atención a lo
dispuesto por el inciso 4 del artículo 122 del Código Procesal Civil;
Consideraciones por las que: MI VOTO es porque se declare
FUNDADO el recurso de casación interpuesto por la Empresa de
Distribución Eléctrica de Lima Norte Sociedad Anónima Abierta,
EDELNOR S.A.A., obrante a fojas doscientos, en consecuencia,
NULA la sentencia de vista de fecha veinticuatro de noviembre de
dos mil once, obrante a fojas ciento setenta y seis; e
INSUBSISTENTE la sentencia apelada de fecha dieciocho de abril
de dos mil once, obrante a fojas ciento treinta y dos; y SE
DISPONGA que el Juez del Décimo Juzgado Permanente
Especializado en lo Contencioso Administrativo emita nueva
resolución, conforme a los considerandos expuestos
precedentemente; y SE ORDENE la publicación de la presente
resolución en el Diario Oficial “El Peruano” conforme a ley; en los
seguidos por Empresa de Distribución Eléctrica de Lima Norte
Sociedad Anónima Abierta - EDELNOR S.A.A. contra el Organismo
Supervisor de la Inversión en Energía y Minería - OSINERGMIN
sobre Impugnación de Resolución Administrativa; y los devolvieron.
S.S. WALDE JÁUREGUI C-1335410-38
CAS. Nº 12294-2013 LIMA
Lima, once de junio de dos mil catorce. VISTOS; y CONSIDERANDO:
Primero: El recurso de casación interpuesto por la Cooperativa de
Servicios Educacionales Abraham Lincoln Ltda. de fecha primero
de julio de dos mil trece, obrante a fojas quinientos diecisiete,
contra la sentencia de vista de fecha tres de abril de dos mil trece,
de fojas quinientos siete; cumple con los requisitos de forma que
para su admisibilidad exige el artículo 57 de la Ley Nº 26636, Ley
Procesal del Trabajo, modificado por el artículo 1 de la Ley Nº
27021. Segundo: El artículo 58 de la Ley N° 26636, modificado
por el artículo 1 de la Ley N° 27021, prescribe que el recurso de
casación deberá estar fundamentado con claridad, señalando con
precisión las causales descritas en el artículo 56 de la Ley N° 26636,
modificado por el artículo 1 de la Ley N° 27021 en que se sustenta,
esto es: a) La aplicación indebida de una norma de derecho
material; b) La interpretación errónea de una norma de derecho
material; c) La inaplicación de una norma de derecho material; y,
d) La contradicción con otras resoluciones expedidas por la Corte
Suprema de Justicia o las Cortes Superiores, pronunciadas en
casos objetivamente similares, siempre que dicha contradicción
esté referida a una de las causales anteriores; y, según el caso: i)
Qué norma ha sido indebidamente aplicada y cuál es la que debió
aplicarse; ii) Cuál es la correcta interpretación de la norma; iii) Cuál
es la norma inaplicada y porqué debió aplicarse; y, iv) Cuál es la
similitud existente entre los pronunciamientos invocados y en qué
consiste la contradicción. Tercero: Antes de entrar al análisis de
los requisitos de fondo resulta necesario precisar que, el recurso
de casación es un medio impugnatorio extraordinario de carácter
formal que sólo puede fundarse en cuestiones eminentemente
jurídicas y no en cuestiones fácticas o de revaloración probatoria,
es por ello que este medio impugnatorio, en materia laboral, tiene
como fines esenciales la correcta aplicación e interpretación
de las normas materiales en esta materia y la uniformidad de la
jurisprudencia nacional por la Corte Suprema, conforme al artículo
54 de la Ley Procesal del Trabajo N° 26636, modificado por el
artículo 1 de la Ley N° 27021; en ese sentido su fundamentación
por parte del recurrente debe ser clara, precisa y concreta
indicando ordenadamente cuáles son las causales denunciadas,
las mismas que no pueden estar orientadas a una revaloración
de los elementos fácticos ni de los medios probatorios dado
que aquello desnaturalizaría el presente recurso. Cuarto: El
recurrente denuncia como causal del recurso de su propósito: a)
La contravención de las normas que garantizan el debido proceso,
contenidos en el artículo 139 incisos 3 y 5 de la Constitución Política;
y b) la interpretación errónea del artículo 31 del Decreto Supremo
N° 003-97-TR. Quinto: En relación a la causal de contravención
de las normas que garantizan el debido proceso y motivación
de las resoluciones contenidos en el artículo 139 incisos 3
y 5 de la Constitución Política, alega que la sentencia de vista
ha desconocido los argumentos de su apelación al no efectuar el
análisis respectivo de sus agravios; que no se ha tenido en cuenta
el informe ampliatorio ni los demás medios probatorios que obran
en autos, que acreditan el goce del descanso físico vacacional y
el pago correspondiente. De otro lado, señala que el despido del
demandante ha sido analizado superficialmente sin considerar sus
agravios; tanto más, si en el proceso se actuó la declaración de la
señorita Fiorella Cabero Benza, quien señaló que fue obligada por
el demandante a cambiar su informe para beneficiar la contratación
de la Señora Carmen Sarmiento Moscol. Sexto: Sobre el particular,
resulta necesario precisar que la infracción al debido proceso no
se encuentra prevista como causal casatoria en el artículo 56 de la
Ley N° 26636, modificado por el artículo 1 de la Ley Nº 27021; sin
embargo, la Corte Suprema de manera excepcional aplica dicha
propuesta, en los casos en que se advierta flagrante afectación
al debido proceso, como garantía constitucional de los justiciables
y a efectos de cumplir con los fines del recurso de casación. En
el presente caso, esta Sala Suprema aprecia que la sentencia
de vista contiene la absolución clara y concreta respecto de los
agravios expresados en el recurso de apelación; además cumple
con expresar los fundamentos de hecho y jurídicos que sustenta su
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Lunes 1 de febrero de 2016
CASACIÓN
decisión de confirmar la sentencia que declara fundada en parte la
demanda, así como las valoraciones esenciales y determinantes
que la sustentan, por lo que no existe tal vicio de motivación que
alega, razón por la cual se declara improcedente este extremo
del recurso. Sétimo: Respecto a la causal de interpretación
errónea del artículo 31 del Decreto Supremo N° 003-97-TR,
menciona que la sentencia de vista da a entender que la carta
de imputación de cargos debe contener un hecho debidamente
probado y plenamente establecido, lo cual no es correcto pues
ello está reservado para la carta de despido. La interpretación
correcta del dispositivo legal que se denuncia implica que el
procedimiento de imputación de cargos es siempre “condicional”
es decir que la contundencia de la afirmación de la imputación está
claramente sujeta a la defensa que pueda expresar el trabajador,
caso contrario se habría ya juzgado antes de otorgar el derecho
de defensa. Octavo: Sobre esta causal, es pertinente señalar que
no cumple con el requisito establecido en el artículo 58 de la Ley
N° 26636, modificado por el artículo 1 de la Ley N° 27021, pues no
precisa con claridad el error de derecho en el que habría incurrido
la sentencia cuestionada; por el contrario, se verifica que sus
argumentos están dirigidos a cuestionar la valoración probatoria
efectuada por las instancias de mérito respecto del contenido de
la carta de imputación de cargos, pretendiendo con ello desvirtuar
la existencia del despido arbitrario. Siendo ello así, al encontrarse
establecido que la sede casatoria no constituye una tercera
instancia en la que pueda argumentarse cuestiones fácticas o de
revaloración probatoria, deviene en improcedente este extremo
del recurso. En consecuencia, el recurso de casación no cumple
con los requisitos de fondo necesarios para su procedencia, por lo
que, corresponde a este Supremo Colegiado proceder conforme
a la facultad conferida por la parte in fine del artículo 58 de la Ley
Procesal del Trabajo, modificado por el artículo 1 de la Ley Nº 27021,
declarando: IMPROCEDENTE el recurso de casación interpuesto
por la Cooperativa de Servicios Educacionales Abraham Lincoln
Ltda., obrante a fojas quinientos diecisiete, contra la sentencia de
vista de fecha tres de abril de dos mil trece, de fojas quinientos
siete; ORDENARON la publicación de la presente resolución en
el Diario Oficial El Peruano conforme a ley; en los seguidos por
Juan Carlos Dianderas Huaihuaca contra Cooperativa de Servicios
Educacionales Abraham Lincoln Ltda., sobre Indemnización por
despido arbitrario y otro; y los devolvieron. Vocal Ponente: Vinatea
Medina. S.S. WALDE JAUREGUI, VINATEA MEDINA, RUEDA
FERNÁNDEZ, DE LA ROSA BEDRIÑANA, MALCA GUAYLUPO
C-1335410-39
CAS. Nº 12813-2013 LIMA
Lima, trece de junio de dos mil catorce. VISTOS; y
CONSIDERANDO: Primero: El recurso de casación interpuesto
por el demandante Juan José Segura Mestanza, de fecha quince de
julio de dos mil trece, obrante a fojas ochocientos setenta y cuatro,
contra la sentencia de vista de fecha dieciséis de mayo de dos
mil trece, obrante a fojas ochocientos sesenta y siete; cumple con
los requisitos de forma que para su admisibilidad exige el artículo
57 de la Ley Nº 26636, Ley Procesal del Trabajo, modificado por
el artículo 1 de la Ley Nº 27021. Segundo: El artículo 58 de la
Ley N° 26636, modificado por el artículo 1 de la Ley N° 27021,
prescribe que el recurso de casación deberá estar fundamentado
con claridad, señalando con precisión las causales descritas en
el artículo 56 de la Ley N° 26636, modificado por el artículo 1 de
la Ley N° 27021 en que se sustenta, esto es: a) La aplicación
indebida de una norma de derecho material; b) La interpretación
errónea de una norma de derecho material; c) La inaplicación de
una norma de derecho material; y, d) La contradicción con otras
resoluciones expedidas por la Corte Suprema de Justicia o las
Cortes Superiores, pronunciadas en casos objetivamente similares,
siempre que dicha contradicción esté referida a una de las causales
anteriores; y, según el caso: i) Qué norma ha sido indebidamente
aplicada y cuál es la que debió aplicarse; ii) Cuál es la correcta
interpretación de la norma; iii) Cuál es la norma inaplicada y
porqué debió aplicarse; y, iv) Cuál es la similitud existente entre
los pronunciamientos invocados y en qué consiste la contradicción.
Tercero: Antes de entrar al análisis de los requisitos de fondo
resulta necesario precisar que, el recurso de casación es un medio
impugnatorio extraordinario de carácter formal que sólo puede
fundarse en cuestiones eminentemente jurídicas y no en cuestiones
fácticas o de revaloración probatoria, es por ello que este medio
impugnatorio, en materia laboral, tiene como fines esenciales la
correcta aplicación e interpretación de las normas materiales en
esta materia y la uniformidad de la jurisprudencia nacional por la
Corte Suprema, conforme al artículo 54 de la Ley Procesal del
Trabajo N° 26636, modificado por artículo 1 de la Ley N° 27021; en
ese sentido su fundamentación por parte del recurrente debe ser
clara, precisa y concreta indicando ordenadamente cuáles son las
causales denunciadas, las mismas que no pueden estar orientadas
a una revaloración de los elementos fácticos ni de los medios
probatorios dado que aquello desnaturalizaría el presente recurso.
Cuarto: Como fundamentos de su recurso, el recurrente invoca: a)
la interpretación errónea del artículo 2 del Decreto Legislativo N°
892 y artículo 3, parte final, del Decreto Supremo N° 009-98-TR;
y b) la aplicación indebida del Decreto Supremo N° 014-92-EM.
Quinto.- En cuanto a la causal de interpretación errónea del
artículo 2 del Decreto Legislativo N° 892 y artículo 3, parte final,
del Decreto Supremo N° 009-98-TR, alega que se debe tomar en
74061
cuenta que la empresa demandada tiene mayores ingresos de la
venta de hidrocarburos, por lo que su renta a distribuir debe ser
fijado en el ocho por ciento (8%); asimismo, el análisis efectuado
se ha detenido a confirmar que la demandada está calificado
dentro del rubro de otras actividades que no le corresponde al
estar ubicado en lo más alto del palmarés calificador internacional
junto a la actividad minera, como ha sido expresado, y es de
ese modo como la Superintendencia Nacional de Administración
Tributaria - SUNAT lo ha entendido para acopiar los tributos de
las empresas dedicadas a ambas actividades. Sexto.- Respecto
a la causal de aplicación indebida del Decreto Supremo N°
014-92-EM, precisa que si bien en el Perú, la actividad minera y
petrolera tienen sus propias normas legales (Ley N° 26221 para
las petroleras y Decreto Supremo N°014-92-EM para las mineras);
empero, esta división de actividades por imperio de la ley no quiere
decir, in stricto, que por ese hecho se catalogue a la empresa
petrolera como perteneciente a la que realiza “otras actividades”.
Si las empresas petroleras tienen su propia calificación, no podrían
al mismo tiempo pertenecer a las que realizan otras actividades. La
calificación internacional de realizar otras actividades es sinónimo
de efectuar trabajos marginales como eliminación de desperdicios y
aguas residuales, saneamiento y actividades similares, de donde el
auto título que la demandada se hace de realizar otras actividades
para pagar el cinco por ciento (5%) de las utilidades es un invento
hecho para favorecerse por sus propios actos, ya que es ella la
que señala y reparte las utilidades. Sétimo.- Sobre las causales
descritas, es de indicarse que luego de examinar los argumentos
que propone el recurrente, se aprecia que estos están dirigidos
a cuestionar el orden fáctico y jurídico establecido por la Sala de
mérito, pretendiéndose con ello que este Supremo Tribunal efectúe
una nueva apreciación de los hechos y subsecuente valoración
probatoria, a fin de determinar la procedencia del pago de
utilidades en el porcentaje que formula en su demanda; actividad
que resulta ajena a los fines del recurso de casación previstos en
el artículo 54 de la Ley Procesal del Trabajo N° 26636, modificado
por la Ley N° 27021; razón por la cual, los agravios examinados
deben ser declarados improcedentes. Máxime si, la Sala de
mérito concluye válidamente que de acuerdo a las actividades
principales realizadas por la demandada se encuentra excluida de
la denominación de empresas mineras consignada en el artículo 2
del Decreto Legislativo N° 892, motivo por el cual la pretensión del
demandante sobre el ocho por ciento (8%) de las utilidades deviene
en infundada; decisión que se encuentra acorde con lo resuelto en
la Casación N° 968-2004 Piura. En consecuencia, el recurso de
casación no cumple con los requisitos de fondo necesarios para su
procedencia, por lo que, corresponde a este Supremo Colegiado
proceder con la facultad conferida por la parte in fine del artículo 58
de la Ley Procesal del Trabajo, modificado por el artículo 1 de la Ley
Nº 27021, declarando: IMPROCEDENTE el recurso de casación
interpuesto por el demandante Juan José Segura Mestanza,
obrante a fojas ochocientos setenta y cuatro, contra la sentencia
de vista de fecha dieciséis de mayo de dos mil trece, obrante de
fojas ochocientos sesenta y siete; y ORDENARON publicar la
presente resolución en el Diario Oficial “El Peruano” conforme a
ley; en los seguidos por don Juan José Segura Mestanza contra
Pluspetrol Norte Sociedad Anónima, sobre Pago de Utilidades;
y los devolvieron. Vocal Ponente: Vinatea Medina. S.S. WALDE
JÁUREGUI, VINATEA MEDINA, RUEDA FERNANDEZ, DE LA
ROSA BEDRIÑANA, MALCA GUAYLUPO C-1335410-40
CAS. Nº 13035-2013 HUAURA
Lima, dieciocho de junio de dos mil catorce. VISTOS; y
CONSIDERANDO: PRIMERO: El recurso de casación interpuesto
por el demandado Gobierno Regional de Lima, de fecha veintisiete
de agosto de dos mil trece, obrante a fojas ciento treinta y cinco,
contra la resolución de vista de fecha seis de agosto de dos mil
trece, obrante a fojas ciento catorce mediante la cual la Sala Mixta
de la Corte Superior de Justicia de Huaura confirma la sentencia
de fecha trece de mayo de dos mil trece, obrante a fojas ochenta
y ocho que declara fundada en parte la demanda incoada, con lo
demás que al respecto contiene; cumple con los requisitos de forma
que para su admisibilidad exige el artículo 57 de la Ley Nº 26636,
Ley Procesal del Trabajo, modificado por el artículo 1 de la Ley Nº
27021. SEGUNDO: El artículo 58 de la Ley N° 26636, modificado
por el artículo 1 de la Ley N° 27021, prescribe que el recurso de
casación deberá estar fundamentado con claridad, señalando con
precisión las causales descritas en el artículo 56 de la Ley N° 26636,
modificado por el artículo 1 de la Ley N° 27021 en que se sustenta,
esto es: a) La aplicación indebida de una norma de derecho
material; b) La interpretación errónea de una norma de derecho
material; c) La inaplicación de una norma de derecho material; y,
d) La contradicción con otras resoluciones expedidas por la Corte
Suprema de Justicia o las Cortes Superiores, pronunciadas en
casos objetivamente similares, siempre que dicha contradicción
esté referida a una de las causales anteriores; y, según el caso: i)
Qué norma ha sido indebidamente aplicada y cuál es la que debió
aplicarse; ii) Cuál es la correcta interpretación de la norma; iii) Cuál
es la norma inaplicada y porqué debió aplicarse; y, iv) Cuál es la
similitud existente entre los pronunciamientos invocados y en qué
consiste la contradicción. TERCERO: Antes de entrar al análisis de
los requisitos de fondo resulta necesario precisar que, el recurso
de casación es un medio impugnatorio extraordinario de carácter
formal que sólo puede fundarse en cuestiones eminentemente
74062
CASACIÓN
jurídicas y no en cuestiones fácticas o de revaloración probatoria,
es por ello que este medio impugnatorio, en materia laboral, tiene
como fines esenciales la correcta aplicación e interpretación
de las normas materiales en esta materia y la uniformidad de
la jurisprudencia nacional por la Corte Suprema, conforme al
artículo 54 de la Ley Procesal del Trabajo; en ese sentido su
fundamentación por parte del recurrente debe ser clara, precisa
y concreta indicando ordenadamente cuáles son las causales
denunciadas, las mismas que no pueden estar orientadas a una
revaloración de los elementos fácticos ni de los medios probatorios
dado que aquello desnaturalizaría el presente recurso. CUARTO:
El recurrente denuncia como causales del recurso de su propósito:
a) la inaplicación del artículo 6 del Decreto Supremo N° 003-97TR; y b) la contradicción con otras resoluciones expedidas por la
Corte Suprema de Justicia, como es la Casación N° 2712-2009
Lima. QUINTO: En cuanto a la causal a) de inaplicación del
artículo 6 del Decreto Supremo N° 003-97-TR, señala la parte
demandada que en la sentencia de vista se incurre en error al
no considerar que lo pretendido por el demandante es el pago
de las remuneraciones dejadas de percibir durante el periodo
que no prestó servicios; afectando lo dispuesto en el artículo 24
de la Constitución Política del Estado y el dispositivo legal que se
denuncia, ya que se encuentra establecido que la remuneración
en la contraprestación por el trabajo efectivamente prestado;
por consiguiente, al verificarse que las sentencias emitidas en el
proceso de amparo no ordenan el pago de remuneraciones, no
existe prestación efectiva que deba ser retribuida. SEXTO: La
causal así descrita, deviene en improcedente, por cuanto se
advierte que no existe una fundamentación clara y precisa de
la denuncia que formula, conforme lo exige el artículo 58 de la
Ley Procesal del Trabajo N° 26636, modificado por el artículo 1
de la Ley N° 27021. Ello en virtud a que viene cuestionando el
monto ordenado por concepto de lucro cesante, pretendiendo con
ello que este Supremo Tribunal efectúe una nueva revisión de la
situación fáctica determinada por las instancias de mérito; lo que
no se condice con la finalidad del recurso de casación el cual sólo
puede fundarse en cuestiones eminentemente jurídicas; tanto más,
si en el presente caso la pretensión versa sobre indemnización por
daños y perjuicios producido por el despido incausado reconocido
mediante proceso de amparo, que a decir de la Sala Superior
determina la conducta antijurídica de la demandada y el nacimiento
de la obligación legal de indemnizarlo. SÉTIMO: En relación a la
causal b) de contradicción con otras resoluciones expedidas
por la Corte Suprema de Justicia, como es la Casación N°
2712-2009 Lima, alega la parte demandada que los hechos
acaecidos en dicha sentencia casatoria son similares al presente
caso, toda vez que se trata del pago de remuneraciones dejadas de
percibir reclamadas por un trabajador que fue sujeto a un despido
incausado, habiendo accedido a su reposición a través de un
proceso de amparo; caso en el cual la Sala Constitucional y Social
Permanente de la Corte Suprema de Justicia de la República ha
señalado que no le corresponde dichos derechos, declarando
fundado el recurso de casación y revocando la sentencia apelada,
la reforma declarándola infundada. OCTAVO: Sobre esta causal,
debemos señalar que incumple con el requisito de admisibilidad
que exige el inciso d) del artículo 56 de la Ley Procesal del
Trabajo N° 26636, modificado por el artículo 1 de la Ley N° 27021;
asimismo, se omite adjuntar la resolución que precisa, lo que no
permite apreciar que se traten de los mismos supuestos fácticos
del caso que nos ocupa; además la causal bajo análisis exige que
dicha contradicción esté referida a una de las causales referidas
en los literales a), b) y c) del modificado artículo 56 de la Ley N°
26636, esto es, la aplicación indebida, la interpretación errónea
o la inaplicación de normas de derecho material; por lo que,
una vez más este extremo del recurso resultan manifiestamente
improcedente. En consecuencia, el recurso de casación no
cumple con los requisitos de fondo necesarios para su procedencia,
por lo que, corresponde a este Colegiado proceder con la facultad
conferida por la parte in fine del artículo 58 de la Ley Procesal del
Trabajo N° 26636, modificado por el artículo 1 de la Ley Nº 27021,
declarando: IMPROCEDENTE el recurso de casación interpuesto
por el demandado Gobierno Regional de Lima, de fecha veintisiete
de agosto de dos mil trece, obrante a fojas ciento treinta y cinco,
contra la sentencia de vista de fecha seis de agosto de dos mil
trece, corriente a fojas ciento catorce; y ORDENARON publicar
la presente resolución en el Diario Oficial El Peruano conforme a
ley; en los seguidos por doña Carmen Luz Oyola Chinga contra
el Gobierno Regional de Lima, sobre Indemnización por Daños
y Perjuicios; y los devolvieron. Vocal Ponente: Vinatea Medina.
S.S. WALDE JAUREGUI, ACEVEDO MENA, VINATEA MEDINA,
RUEDA FERNÁNDEZ, MALCA GUAYLUPO C-1335410-41
CAS. Nº 13132-2013 LIMA
Lima, diecinueve de mayo de dos mil catorce. VISTOS; con el
expediente administrativo como acompañado; y, CONSIDERANDO:
Primero.- Que, es materia de grado el recurso de casación
interpuesto por la Superintendencia Nacional de Aduanas y
Administración Tributaria - SUNAT de fecha diez de abril del dos mil
trece, obrante a fojas cuatrocientos treinta y seis, contra la
sentencia de vista de fecha cuatro de diciembre de dos mil doce,
obrante a fojas trescientos setenta y dos, que resuelve revocar la
sentencia contenida en la resolución número once de fecha catorce
de diciembre de dos mil once, en los extremos apelados mediante
El Peruano
Lunes 1 de febrero de 2016
la cual el Sexto Juzgado Transitorio Especializado en lo
Contencioso Administrativo declaró infundada la demanda; y
reformándola declararon fundada la demanda, sin costas ni costos,
en consecuencia, se declara nula la Resolución del Tribunal Fiscal
N° 09651-A-2009 de fecha veintitrés de setiembre de dos mil
nueve. Ordenaron al Tribunal Fiscal emita nuevo acto administrativo
aclarando los conceptos dudosos advertidos en la sentencia; el
cual reúne los requisitos de forma para su admisibilidad, conforme
a lo previsto en el artículo 387 del Código Procesal Civil, modificado
por el artículo 1 de la Ley N° 29364, concordante con el artículo 32
de la Ley N° 27584; por ello corresponde examinar si el recurso
reúne los requisitos de fondo. Segundo.- Que, el artículo 386 del
Código Procesal Civil, modificado por el artículo 1 de la Ley N°
29364 de aplicación supletoria al presente caso, señala que el
recurso de casación se sustenta en: i) la infracción normativa que
incida directamente sobre la decisión contenida en la resolución
impugnada, ii) en el apartamiento inmotivado del precedente
judicial. Tercero.- Que, los numerales 2 y 3 del artículo 388 del
Código Procesal Civil, establece que constituye requisito de fondo
del recurso, que se describa con claridad y precisión la infracción
normativa o el apartamiento del precedente judicial, expresando en
cuál de las causales descritas en el artículo 386 de este Código
acotado se sustenta y, según el caso, debe precisarse cómo debe
ser la debida aplicación o cuál es la interpretación correcta de la
norma de derecho material; cuál debe ser la norma de derecho
material aplicable; o en qué ha consistido la afectación del derecho
al debido proceso o cuál ha sido la formalidad procesal incumplida;
así como el demostrar la incidencia directa de la infracción sobre la
decisión impugnada. Cuarto.- Por infracción normativa debemos
entender la causal a través de la cual el recurrente denuncia la
existencia de un error de naturaleza procesal o sustantiva que
incide directamente sobre el sentido de lo decidido. Los errores que
pueden ser alegados como infracción normativa pueden
comprender a los supuestos de aplicación indebida, interpretación
errónea o inaplicación de una norma, que como se ha señalado
pueden ser de carácter sustantivo o procesal. Quinto.- La
recurrente ha denunciado como causales casatorias: la infracción
normativa del artículo 13 de la Ley General de Aduanas,
aprobado por Decreto Legislativo N° 809 y del Texto Único
Ordenado de la Ley General de Aduanas, aprobado por el
Decreto Supremo N° 129-2004-EF, en concordancia con el
Decreto Supremo N° 239-2001-EF, y el artículo 147 del Código
Tributario. Sexto.- Sostiene la recurrente que la infracción en la
que incurre la resolución impugnada está referida a la aplicación de
las normas que conceden a la administración las facultades de
fiscalización y de sanción previstas en la Ley General de Aduanas,
el Código Tributario y normas conexas. Señala que durante el
procedimiento administrativo no se violó ningún principio,
permitiéndose al demandante hacer valer sus derechos en las
instancias pertinentes; y que la administración cumplió con el
desarrollo de las dos etapas previstas para la clasificación
arancelaria: la primera correspondiente al estudio merceológico de
la mercancía a clasificar con el propósito de establecer su
descripción y características, y una segunda etapa, que tomando
en cuenta los resultados del estudio merceológico así como las
Reglas Generales para la Interpretación de la Nomenclatura del
Arancel de Aduanas aplicable al caso y demás normas, ubica la
mercancía en el universo de la Nomenclatura. Afirma que según se
verifico en la etapa administrativa, la partida arancelaria declarada
por la demandante en las importaciones materia de impugnación
(SPA 3824.90.99.99) difieren de la clasificación arancelaria que
correspondía a dichas mercancías: partida arancelaria 34.02, y en
específico, la Subpartida Nacional 3402.90.90.00. Señala que
continua el agravio, al señalar la Sala Superior en cuanto a la
aplicación del artículo 147 del Código Tributario, que si bien el
recurrente no podrá discutir aspectos que no impugno al reclamar,
ello solo se refiere a los extremos impugnados en la reclamación
mas no a los argumentos que fundamentan su reclamación y la
apelación, considerando que el Tribunal Fiscal se encontraba
obligado a pronunciarse respecto del Boletín Químico N° 118-2009000477 correspondiente a la DUA N° 118-2009-006606, en el que
se clasifico el producto ASFIER 121 en la Subpartida 3824.90.99.99.
Sétimo.- Alega que los argumentos de la Sala Superior afectan y
agravian la normatividad vigente aplicable al señalar que existen
conceptos dudosos advertidos por la demandante que requieren
aclaración y deben ser materia de pronunciamiento, refiriendo que
la resolución administrativa impugnada judicialmente carece de
una debida motivación advirtiendo como concepto dudoso el
análisis merceológico de los productos importados, manifestando
que de ella no se desprende el porqué se encuentran los productos
ASFIER 211, ASFIER 220 y KAOAMIN comprendidos en la
subpartida nacional 3402.90.90.00 al no evidenciarse que cumplan
con la nota 3 del capítulo 34 del Arancel de Aduanas. Octavo.Siendo ello así, este Supremo Tribunal considera que la infracción
denunciada es manifiestamente improcedente, por cuanto se
advierte que la misma se orienta a enervar la conclusión arribada
por las instancias de mérito, que estiman la demanda, por
considerar que existen conceptos dudosos que requieren
aclaración y que deben ser materia de pronunciamiento por parte
del Tribunal Fiscal; careciendo de una debida motivación por
cuanto advierten que: i) del análisis merceológico de los productos
importados, no se desprende por que se encuentran los productos
ASFIER 211, ASFIER 220 y KAOAMIN comprendidos en la
El Peruano
Lunes 1 de febrero de 2016
CASACIÓN
subpartida nacional 3402.90.90.00 al no evidenciarse que cumplan
con la nota 3 del capítulo 34 del Arancel de Aduanas, que si bien
fue citada en la resolución administrativa impugnada, no se aprecia
que se haya efectuado el procedimiento indicado; ii) la Sala
Administrativa no se ha pronunciado respecto de la diferencia entre
el análisis merceológico de la demandante y de la Superintendencia
Nacional de Aduanas y Administración Tributaria - SUNAT; y iii) que
el Tribunal Fiscal se encontraba obligado a pronunciarse respecto
del Boletín Químico N° 118-2009-000477 en el que se había
comprendido el producto ASFIER 121 dentro de la subpartida
nacional 3824.90.99.99, lo cual fue aducido en la solicitud de
corrección y ampliación de fallo del demandante, aspecto que no
motivó respuesta alguna por la administración. Noveno.- Que,
aunado a lo señalado precedentemente, es necesario precisar que
las denuncias efectuadas no cumplen con los requisitos
establecidos en los numerales 2 y 3 del artículo 388° del Código
Procesal Civil, que señala que constituye requisito de fondo del
recurso, que se cumpla con describir con claridad y precisión la
infracción normativa o el apartamiento del precedente judicial,
expresando en cuál de las causales descritas en el artículo 386° de
este Código acotado se sustenta y, según el caso, se precise cómo
debe ser la debida aplicación o cuál es la interpretación correcta de
la norma de derecho material; cuál debe ser la norma de derecho
material aplicable, así como el demostrar la incidencia directa de la
infracción sobre la decisión impugnada; en consecuencia, no
habiendo cumplido la recurrente con dichos requisitos, el recurso
deviene en improcedente. Por las razones expuestas, al no
haberse satisfecho las exigencias de fondo a que hace referencia
el artículo 388 del Código Procesal Civil, modificado por el artículo
1 de la Ley N° 29364, en ejercicio de la facultad conferida por el
artículo 392 del acotado Código, declararon: IMPROCEDENTE el
recurso de casación interpuesto por la Superintendencia Nacional
de Aduanas y Administración Tributaria - SUNAT de fecha diez de
abril del dos mil trece, obrante a fojas cuatrocientos treinta y seis,
contra la sentencia de vista de fecha cuatro de diciembre de dos mil
doce, obrante a fojas trescientos setenta y dos; y, ORDENARON
publicar la presente resolución en el diario oficial “El Peruano”
conforme a ley; en los seguidos por Bitumenes del Perú Sociedad
Anónima Cerrada con el Tribunal Fiscal y otro, sobre acción
contenciosa administrativa; y los devolvieron. Vocal Ponente:
Vinatea Medina. S.S. SIVINA HURTADO, ACEVEDO MENA,
VINATEA MEDINA, RUEDA FERNÁNDEZ, MALCA GUAYLUPO
C-1335410-42
CAS. Nº 13355- 2013 LIMA
Lima, once de agosto de dos mil catorce. VISTOS; con el escrito
de subsanación de fecha treinta de julio de dos mil catorce, obrante
a fojas cuarenta y nueve del cuadernillo formado en esta Suprema
Sala, y CONSIDERANDO: Primero.- Que, viene a conocimiento
de esta Suprema Sala, el recurso de casación interpuesto por el
demandante Pesquera Rosario Sociedad Anónima, de fecha seis
de agosto de dos mil trece, obrante a fojas trescientos nueve,
contra la sentencia de vista de fecha veintiuno de enero de dos mil
trece, obrante a fojas doscientos noventa y nueve, que confirma la
sentencia de fecha treinta y uno de agosto de dos mil once, obrante
a fojas doscientos treinta y séis, que declaró infundada la demanda;
la cual reúne los requisitos de forma para su admisibilidad,
conforme a lo previsto en el artículo 387 del Código Procesal Civil,
modificado por la Ley N° 29364, concordante con el artículo 32 de
la Ley N° 27584; por ello corresponde examinar si el recurso reúne
los requisitos de fondo. Segundo.- Que, el artículo 386 del Código
Procesal Civil, modificado por el artículo 1 de la Ley N° 29364
señala que el recurso de casación se sustenta en: i) la infracción
normativa que incida directamente sobre la decisión contenida
en la resolución impugnada, ii) en el apartamiento inmotivado del
precedente judicial. Tercero.- Que, los numerales 2 y 3 del artículo
388 del Código Procesal Civil, modificado por el artículo 1 de la Ley
N° 29364, establece que constituye requisito de fondo del recurso,
que se describa con claridad y precisión la infracción normativa
o el apartamiento del precedente judicial, expresando en cuál de
las causales descritas en el artículo 386 de este Código acotado
se sustenta y, según el caso, debe precisarse cómo debe ser la
debida aplicación o cuál es la interpretación correcta de la norma
de derecho material; cuál debe ser la norma de derecho material
aplicable; o en qué ha consistido la afectación del derecho al
debido proceso o cuál ha sido la formalidad procesal incumplida;
así como el demostrar la incidencia directa de la infracción sobre
la decisión impugnada. Cuarto.- Que la parte recurrente denuncia
como agravios: la infracción normativa del inciso 6 del artículo
50, 121 último párrafo, inciso 4 del artículo 122 del Código
Procesal Civil y normativas relacionadas a la contravención
al debido proceso; señala que la Sala Superior ha contravenido
las normas procesales reseñadas, las cuales garantizan el derecho
a un debido proceso; por cuanto advierte que en el considerando
tercero y cuarto de la recurrida sólo se remite a plasmar la norma
sin efectuar el correspondiente análisis de la situación fáctica, en
ese sentido afirma que la sentencia de vista no hace una correcta
evaluación sobre la forma correcta en que se debían tomar las
muestras para determinar la talla de las anchovetas. Por otro
lado, señala que en el considerando cuarto la Sala Superior
omite motivar debidamente la conclusión arribada, limitándose a
mencionar los reportes de ocurrencias y partes de muestreo como
elementos determinantes para la tipificación de la infracción por la
74063
que fue sancionada, sin embargo no hace referencia alguna a las
observaciones que fueron planteadas respecto de la forma en que
fueron tomadas dichas muestras y su incidencia en el resultado
final, incurriendo en motivación defectuosa. Quinto.- Que, las
causales denunciadas, así propuestas no pueden prosperar,
habida cuenta que no cumplen con las exigencias establecidas
en el inciso 3 del artículo 388 del Código Procesal Civil, en razón
que del sustento esgrimido por la impugnante no se advierte la
incidencia directa de la infracción denunciada, además de los
fundamentos del recurso casatorio se advierte que se orientan
a enervar la conclusión de hecho arribada por las instancias de
mérito, que desestima la demanda del accionante, por considerar
que la sanción impuesta es legal, pues no fue sobre la base de
presunciones, sino sobre la base de una infracción puntual y
concreta, basada en el Muestreo de Recursos Hidrobiológicos,
acorde a las disposiciones reglamentarias aprobadas por
la Resolución Ministerial N° 257-2002-PE; siendo así, los
cuestionamientos de la impugnante exigirían una nueva actividad
probatoria, la cual resulta incompatible con la naturaleza y finalidad
del extraordinario recurso de casación; por consiguiente su recurso
deviene improcedente. Por las razones expuestas, al no haberse
satisfecho las exigencias de fondo a que hace referencia el
artículo 388 del Código Procesal Civil, modificado por el artículo
1 de la Ley N° 29364 en ejercicio de la facultad conferida por el
artículo 392 del acotado Código, declararon: IMPROCEDENTE el
recurso de casación interpuesto por Pesquera Rosario Sociedad
Anónima, de fecha seis de agosto de dos mil trece, obrante a fojas
trescientos nueve, contra la sentencia de vista de fecha veintiuno
de enero de dos mil trece, obrante a fojas doscientos noventa y
nueve; ORDENARON publicar la presente resolución en el diario
oficial “El Peruano” conforme a ley; en los seguidos por Pesquera
Rosario Sociedad Anónima contra el Ministerio de la Producción,
sobre Acción Contenciosa Administrativa; y los devolvieron. Vocal
Ponente: Vinatea Medina. S.S. SIVINA HURTADO, WALDE
JÁUREGUI, ACEVEDO MENA, VINATEA MEDINA, RUEDA
FERNÁNDEZ C-1335410-43
CAS. Nº 13411-2013 LIMA
Lima, veintisiete de mayo de dos mil catorce. VISTOS; Con el
acompañado; y CONSIDERANDO: Primero.- Que, el recurso de
casación interpuesto por Gunter Alberto Villena Sarmiento, de
fecha trece de agosto de dos mil trece, a fojas trescientos treinta,
contra la sentencia de vista su fecha treinta y uno de enero de dos
mil trece, obrante a fojas doscientos noventa y nueve, que
resuelve confirmar la sentencia de fecha cuatro de agosto de dos
mil once, que declara infundada la demanda de impugnación de
resolución administrativa, reúne los requisitos de forma para su
admisibilidad, conforme a lo previsto en el artículo 387 del Código
Procesal Civil, modificado por la Ley N° 29364, concordante con
el artículo 32 de la Ley N° 27584; por ello corresponde examinar
si el recurso reúne los requisitos de fondo. Segundo.- Que, el
artículo 386 del Código Procesal Civil, modificado por el artículo 1
de la Ley Nº 29364, señala que el recurso de casación se sustenta
en: i) La infracción normativa que incida directamente sobre la
decisión contenida en la resolución impugnada; o, ii) En el
apartamiento inmotivado del precedente judicial. Tercero.- Que,
los numerales 2 y 3 del artículo 388 del Código Procesal Civil,
modificado por la Ley Nº 29364, establece que constituye requisito
de fondo del recurso, que se describa con claridad y precisión la
infracción normativa o el apartamiento del precedente judicial,
expresando en cuál de las causales descritas en el artículo 386
de este Código acotado se sustenta y, según el caso, debe
precisarse cómo debe ser la debida aplicación o cuál es la
interpretación correcta de la norma de derecho material; cuál
debe ser la norma de derecho material aplicable; o en qué ha
consistido la afectación del derecho al debido proceso o cuál ha
sido la formalidad procesal incumplida; así como el demostrar la
incidencia directa de la infracción sobre la decisión impugnada.
Cuarto.- Que, la parte recurrente denuncia como agravios, las
infracciones normativas por: a) Inaplicación de los artículos I
del Título Preliminar del Código Procesal Civil; 33 del Tratado
de Creación del Tribunal de Justicia de la Comunidad Andina;
y; 123 del Estatuto de Creación del Tribunal de Justicia de la
Comunidad Andina; e, interpretación errónea de los artículos
30, 45 y 46 de la Decisión 486; b) Inaplicación del numeral 14
del artículo 139 de la Constitución Política del Estado y
artículo 34 de la Decisión 486; c) Inaplicación del numeral 5 del
artículo 139 de la Constitución Política del Estado; y, d)
Inaplicación del articulo 176 numeral 176.2 de la Ley Nº
27444; y, artículos 196 y 197 del Código Procesal Civil.
Quinto.- Que, en cuanto a la infracción normativa por
inaplicación de los artículos I del Título Preliminar del Código
Procesal Civil; 33 del Tratado de Creación del Tribunal de
Justicia de la Comunidad Andina; 123 del Estatuto de
Creación del Tribunal de Justicia de la Comunidad Andina; e,
interpretación errónea de los artículos 30, 45 y 46 de la
Decisión 486; señala la parte recurrente que la Sala Superior no
ha cumplido con solicitar al Tribunal de Justicia de la Comunidad
Andina la interpretación prejudicial de las normas comunitarias de
la Decisión 486 aplicables al presente proceso, lo cual incide
directamente en la decisión arribada. Sexto.- En ese sentido, este
Supremo Tribunal advierte que del análisis de las normas citadas,
se puede concluir que las mismas establecen dos supuestos de
74064
CASACIÓN
hecho, esto es, en primer lugar otorgan facultad discrecional a
los jueces nacionales que conozcan de un proceso en el que
deba aplicarse o se controvierta alguna de las normas que
conforman el ordenamiento jurídico de la Comunidad Andina, de
poder solicitar la interpretación prejudicial al Tribunal de la
Comunidad Andina, acerca de dichas normas, siempre que la
sentencia sea susceptible de recursos en derecho interno.
Asimismo, señalan que de llegarse la oportunidad de dictar
sentencia sin que hubiere recibido la interpretación del Tribunal
de la Comunidad Andina, el juez deberá decidir el proceso, no
otorgándole, en consecuencia, el carácter imperativo a la
interpretación prejudicial en los procesos en trámite que aun sean
susceptibles de recursos impugnatorios (como es el caso de
autos, puesto que ante la decisión de segunda instancia, que es
la impugnada, procede el recurso de casación). Por otro lado, las
mismas normativas denunciadas, establecen un segundo
supuesto de hecho, los procesos en los cuales la sentencia no
fuere susceptible de recursos en derecho interno (medios
impugnatorios), en esos casos, establece la norma que el juez
suspenderá el procedimiento y solicitará directamente de oficio o
a petición de parte la interpretación del Tribunal de la Comunidad
Andina; en ese sentido, el legislador taxativamente establece el
carácter imperativo de solicitar la interpretación prejudicial en los
casos en los cuales no se pueda interponer recursos internos o
medios impugnatorios. Siendo ello así, en el caso de autos, la
parte denunciante interpone recurso de casación contra la
sentencia de vista de fecha treinta y uno de enero de dos mil
trece, en consecuencia, no nos encontramos ante el segundo
supuesto de hecho que establece la norma comunitaria para
determinar la exigencia de solicitar la interpretación prejudicial, en
consecuencia, no era imperativo que la Sala Superior haya
solicitado la interpretación prejudicial al Tribunal de la Comunidad
Andina; razón por la cual debe declararse improcedente las
infracciones denuncias en este extremo. Sétimo: Que, en cuanto
a la infracción normativa por inaplicación del numeral 14 del
artículo 139 de la Constitución Política del Estado y artículo
34 de la Decisión 486; señala el denunciante que constituye un
hecho no controvertido que la Dirección de Invenciones y Nuevas
Tecnologías no cumplió con notificar al demandante, el Informe
Técnico N° BCC 45-2008/A previamente a emitir la Resolución N°
51-2009/OI-INDECOPI, privándolo de su derecho de defensa. En
ese extremo, esta Sala Suprema advierte que a fojas ciento
cuarenta y siete del expediente administrativo, obra cargo de
notificación del Informe Técnico BCC N° 45-2008/A, de fecha de
setiembre de dos mil nueve; asimismo se advierte que a fojas
ciento cuarenta y nueve obra escrito de apelación de fecha
veintitrés de setiembre de dos mil nueve, presentada por el
demandante, sin embargo de la revisión del mencionado recurso
no se advierte que el recurrente haya cuestionado la falta de
notificación del Informe Técnico BCC N° 45-2008/A, previo a la
emisión de la Resolución N° 51-2009/OI-INDECOPI, en
consecuencia no se puede a través del presente recurso
cuestionar hechos que no fueron alegados en sede administrativa,
en el mismo sentido, no se le ha privado del derecho de defensa
en ningún estado del proceso administrativo. Siendo ello así, este
Supremo Tribunal advierte de sus fundamentos que lo que
realmente se pretende es una revaloración de los hechos y del
material probatorio, propósitos que no se condicen con los fines
del recurso extraordinario de casación, por lo que deviene en
improcedente este extremo del recurso. Octavo: Que, en cuanto
a la infracción normativa por inaplicación del numeral 5 del
artículo 139 de la Constitución Política del Estado; señala el
recurrente que la Sala Superior ha omitido señalar en la resolución
de vista los fundamentos por los cuales califica de idónea a la
evaluadora química designada por la Dirección de Invenciones y
Nuevas Tecnologías del INDECOPI; y en lo que se refiere a la
infracción normativa por inaplicación del articulo 176
numeral 176.2 de la Ley Nº 27444; y, artículos 196 y 197 del
Código Procesal Civil; señala que el INDECOPI tenía el deber y
carga de acreditar documentariamente si la evaluadora química
que emitió el Informe Técnico BCC N° 45-2008/A, era personal
laboral de INDECOPI o era personal laboral de una entidad
técnica apta para emitir ese tipo de informes, puesto que dicha
acreditación resulta esencial para la decisión de otorgar o denegar
la patente de invención solicitada. Noveno: Que, de las
infracciones denunciadas, este Supremo Tribunal advierte que las
mismas se encuentran dirigidas a cuestionar la capacidad
profesional de la evaluadora química designada por la Dirección
de Invenciones y Nuevas Tecnologías del INDECOPI; las mismas
que fueron debidamente evaluadas por la Sala Superior,
específicamente en el considerando décimo de la sentencia
recurrida; en consecuencia, esta Sala Suprema advierte, una vez
más, que lo realmente pretendido por el impugnante es convertir
a esta Corte Suprema de Casación en una tercera instancia, esto
es, que se pronuncie sobre la situación fáctica establecida por los
Jueces de mérito, valorando los medios de prueba nuevamente,
pretensiones que como ya lo hemos precisado no se encuentran
contempladas en el ordenamiento procesal vigente, por lo que,
igualmente este extremo del recurso resulta improcedente. Por
las razones expuestas, al no haberse satisfecho las exigencias de
fondo a que hace referencia el artículo 388° del Código Procesal
Civil, modificado por la Ley Nº 29364, en ejercicio de la facultad
conferida por el modificado artículo 392° del acotado Código,
El Peruano
Lunes 1 de febrero de 2016
declararon: IMPROCEDENTE el recurso de casación interpuesto
por Gunter Alberto Villena Sarmiento, de fecha trece de agosto de
dos mil trece, a fojas trescientos treinta, contra la sentencia de
vista su fecha treinta y uno de enero de dos mil trece, obrante a
fojas doscientos noventa y nueve; y, MANDARON publicar la
presente resolución en el diario oficial “El Peruano” conforme a
ley; en los seguidos por Gunter Alberto Villena Sarmiento contra
Instituto Nacional de Defensa de la Competencia y de la
Protección de la Propiedad Intelectual – INDECOPI; sobre
impugnación de resolución administrativa; y los devolvieron.
Vocal Ponente: Vinatea Medina. S.S. SIVINA HURTADO, WALDE
JAUREGUI, ACEVEDO MENA, VINATEA MEDINA, RUEDA
FERNÁNDEZ C-1335410-44
CAS. Nº 13510-2013 AREQUIPA
Lima, veinte de junio de dos mil catorce. VISTOS; y
CONSIDERANDO: Primero: El recurso de casación interpuesto
por el demandado YURA Sociedad Anónima obrante a fojas
quinientos sesenta y ocho, contra la sentencia de vista de fecha
ocho de julio de dos mil trece, de fojas quinientos treinta y siete;
cumple con los requisitos de forma que para su admisibilidad
exige el artículo 57 de la Ley Nº 26636, Ley Procesal del Trabajo,
modificado por el artículo 1 de la Ley Nº 27021. Segundo: El
artículo 58 de la Ley N° 26636, modificado por el artículo 1 de la
Ley N° 27021, prescribe que el recurso de casación deberá estar
fundamentado con claridad, señalando con precisión las causales
descritas en el artículo 56 de la Ley N° 26636, modificado por
el artículo 1 de la Ley N° 27021 en que se sustenta, esto es: a)
La aplicación indebida de una norma de derecho material; b)
La interpretación errónea de una norma de derecho material;
c) La inaplicación de una norma de derecho material; y, d) La
contradicción con otras resoluciones expedidas por la Corte
Suprema de Justicia o las Cortes Superiores, pronunciadas en
casos objetivamente similares, siempre que dicha contradicción
esté referida a una de las causales anteriores; y, según el caso: i)
Qué norma ha sido indebidamente aplicada y cuál es la que debió
aplicarse; ii) Cuál es la correcta interpretación de la norma; iii) Cuál
es la norma inaplicada y porqué debió aplicarse; y, iv) Cuál es la
similitud existente entre los pronunciamientos invocados y en qué
consiste la contradicción. Tercero: Antes de entrar al análisis de
los requisitos de fondo resulta necesario precisar que, el recurso
de casación es un medio impugnatorio extraordinario de carácter
formal que sólo puede fundarse en cuestiones eminentemente
jurídicas y no en cuestiones fácticas o de revaloración probatoria,
es por ello que este medio impugnatorio, en materia laboral, tiene
como fines esenciales la correcta aplicación e interpretación
de las normas materiales en esta materia y la uniformidad de
la jurisprudencia nacional por la Corte Suprema, conforme al
artículo 54 de la Ley Procesal del Trabajo; en ese sentido su
fundamentación por parte del recurrente debe ser clara, precisa
y concreta indicando ordenadamente cuáles son las causales
denunciadas, las mismas que no pueden estar orientadas a una
revaloración de los elementos fácticos ni de los medios probatorios
dado que aquello desnaturalizaría el presente recurso. Cuarto: El
recurrente invoca como única causal casatoria la interpretación
errónea del artículo 47 del Texto Único Ordenado del Decreto
Legislativo Nº 728 aprobado por el Decreto Supremo N°
002-97-TR; alega que resulta equivocado señalar que el monto
otorgado al cese no es compensable con el adeudo al trabajador,
en este caso por concepto de utilidades, ya que fue concedida
como incentivo para su renuncia en el empleo. Si bien, no es
compensable hasta el monto similar al que hubiese correspondido
a la trabajadora si se le hubiese despedido arbitrariamente; sin
embargo, todo el exceso de la suma resulta compensable. Además
se contraviene la jurisprudencia de la Corte Suprema contenidas
en las Casaciones N° 551-99 La Libertad y N° 1272-97 Sullana.
Quinto: Sobre el particular, es pertinente señalar que la recurrente
al invocar esta denuncia no cumple con el requisito establecido
en el artículo 58 de la Ley N° 26636, modificado por el artículo 1
de la Ley N° 27021, toda vez que no precisa con claridad el error
de derecho en el que habría incurrido la sentencia cuestionada;
por el contrario, se advierte que sus argumentos están dirigidos
principalmente a cuestionar la valoración efectuada sobre el monto
otorgado al actor con ocasión de su cese, sin considerar que la
Sala de mérito determina con suma claridad que dicha suma no
resulta compensable al constituir un incentivo económico que tiene
como finalidad específica la extinción del contrato de trabajo; por lo
que, al encontrarse establecido que la sede casatoria no constituye
una tercera instancia en la que pueda argumentarse cuestiones
fácticas o de revaloración probatoria, deviene en improcedente
este extremo del recurso. En consecuencia, el recurso de casación
no cumple con los requisitos de fondo necesarios para su
procedencia, por lo que, corresponde a este Colegiado proceder
con la facultad conferida por la parte in fine del artículo 58 de la
Ley Procesal del Trabajo, modificado por el artículo 1 de la Ley
Nº 27021, declarando: IMPROCEDENTE el recurso de casación
interpuesto por el demandado YURA Sociedad Anónima obrante
a fojas quinientos sesenta y ocho, contra la sentencia de vista de
fecha ocho de julio de dos mil trece, de fojas quinientos treinta y
siete; ORDENARON la publicación de la presente resolución en
el Diario Oficial El Peruano conforme a ley; en los seguidos por
Roxana Pola Benavente Valcarcel contra Yura Sociedad Anónima,
sobre Pago de utilidades; y los devolvieron. Vocal Ponente:
El Peruano
Lunes 1 de febrero de 2016
CASACIÓN
Vinatea Medina. S.S. WALDE JAUREGUI, ACEVEDO MENA,
VINATEA MEDINA, RUEDA FERNÁNDEZ, MALCA GUAYLUPO
C-1335410-45
CAS. Nº 13650-2013 LIMA
Lima, dos de junio de dos mil catorce. VISTOS: con los
acompañados; y, CONSIDERANDO: Primero: El recurso de
casación interpuesto por la demandante Compañía Minera San
Nicolás Sociedad Anónima, de fecha veintiocho de agosto de dos
mil trece, obrante a fojas doscientos setenta y nueve, contra la
sentencia de vista de fecha dieciocho de julio de dos mil trece,
obrante a fojas doscientos sesenta y cinco, mediante la cual la
Primera Sala Permanente Especializada en lo Contencioso
Administrativo de la Corte Superior de Justicia de Lima, confirma la
sentencia apelada de fecha veinticinco de junio de dos mil doce,
obrante a fojas doscientos cinco, que declaró infundada la
demanda; cumple con los requisitos de admisibilidad previstos en
el artículo 387 del Código Procesal Civil, modificado por el artículo
1 de la Ley N° 29364, de aplicación supletoria, concordante con el
numeral 3.1) del inciso 3 del artículo 32 de la Ley N° 27584.
Segundo: Antes del análisis de los requisitos de procedencia es
necesario precisar que el recurso de casación es un medio
impugnatorio extraordinario de carácter formal que sólo puede
fundarse en cuestiones eminentemente jurídicas y no en cuestiones
fácticas o de revaloración probatoria, es por ello que sus fines
esenciales constituyen la adecuada aplicación del derecho objetivo
al caso concreto y la uniformidad de la jurisprudencia nacional por
la Corte Suprema; en ese sentido su fundamentación por parte de
la recurrente debe ser clara, precisa y concreta indicando
ordenadamente cuales son las denuncias que configuran la
infracción normativa que incida directamente sobre la decisión
contenida en la resolución impugnada, o las precisiones respecto
al apartamiento inmotivado del precedente judicial. Tercero: Por
otro lado, el artículo 386 del Código Procesal Civil, modificado por
el artículo 1 de la Ley N° 29364, precisa como causales casatorias:
a) La infracción normativa que incida directamente sobre la
decisión contenida en la resolución impugnada; y, b) El apartamiento
inmotivado del precedente judicial. Cuarto: Por infracción
normativa debemos entender la causal a través de la cual el
recurrente denuncia la existencia de un error de naturaleza
procesal o sustantiva que incide directamente sobre el sentido de
lo decidido. Los errores que pueden ser alegados como infracción
normativa pueden comprender a los supuestos de aplicación
indebida, interpretación errónea o inaplicación de una norma, que
como se ha señalado pueden ser de carácter sustantivo o procesal.
Quinto: En cuanto a la causal de apartamiento de los precedentes
del Poder Judicial, este Supremo Tribunal precisa que se funda en
el principio constitucional del stare decisis, propio del sistema
norteamericano que implica una vinculación fuerte para los
Magistrados del Poder Judicial, respecto de las decisiones
adoptadas por la Corte Suprema. En el Perú, los órganos
jurisdiccionales se encuentran vinculados a los precedentes
expedidos por la Corte Suprema de la República y el Tribunal
Constitucional, en nuestro caso, el artículo 22 de la Ley Orgánica
del Poder Judicial prescribe: “Las Salas Especializadas de la Corte
Suprema de Justicia de la República ordenan la publicación
trimestral en el Diario Oficial "El Peruano" de las Ejecutorias que
fijan principios jurisprudenciales que han de ser de obligatorio
cumplimiento, en todas las instancias judiciales. Estos principios
deben ser invocados por los Magistrados de todas las instancias
judiciales, cualquiera que sea su especialidad, como precedente
de obligatorio cumplimiento. En caso que por excepción decidan
apartarse de dicho criterio, están obligados a motivar”. Sexto: La
recurrente ha denunciado como causales casatorias: i) la violación
a un debido proceso; ii) vulneración al derecho defensa; iii) la
inaplicación del artículo 122 numerales 122.3 y 122.4 del Código
Procesal Civil; iv) del segundo párrafo del artículo 122 del Código
Procesal Civil; v) del primer párrafo del artículo 370 del Código
Procesal Civil; vi) vulneración de los artículos 122 numeral 122.3 y
197 del Código Procesal Civil; denuncias que se subsumen dentro
de la causal de infracción normativa Sétimo: Sobre las denuncias
de infracción normativa a un debido proceso; al derecho
defensa; inaplicación del artículo 122 numerales 122.3 y 122.4
del Código Procesal Civil; del segundo párrafo del artículo 122
del Código Procesal Civil; del primer párrafo del artículo 370
del Código Procesal Civil; de los artículos 122 numeral 122.3 y
197 del Código Procesal Civil; sostiene la recurrente que la
sentencia de vista adolece de motivación pues no cumple con
fundamentar en argumento alguno de derecho su decisión. Añade
que la sentencia de vista es nula porque aplica al presente caso el
art. 36 del procedimiento sancionador aprovado por Resolución N°
640-2007- cuando dicha norma corresponde a hidrocarburos.
Añade que se ha efectuado una deficiente valoración de la prueba.
Octavo: En primer término, corresponde examinar las causales
que preceden, desde el marco jurídico de las garantías de los
derechos fundamentales a un debido proceso y tutela jurisdiccional
efectiva, por su contenido constitucional y procesal denunciados, a
fin de que en sede casatoria se ejercite adecuadamente la finalidad
esencial del recurso de casación, y se resguarde la tutela de los
derechos procesales con valor constitucional, con la clara
observancia de las normas sustantivas y procesales que garantiza
al justiciable el derecho de obtener de los órganos jurisdiccionales
una respuesta razonada y fundamentada, respetando los principios
74065
de jerarquía de las normas, el de congruencia procesal, la
valoración de los medios probatorios; constituyendo un deber del
Juez emitir fallos de acuerdo a lo establecido en el inciso 5 del
artículo 139 de la Constitución Política del Estado, en el inciso 4 del
artículo 122, así como el artículo 50 inciso 6 del Código Procesal
Civil, en resguardo de los derechos fundamentales citados en
todas sus acepciones. Noveno: En cuanto al derecho fundamental
a un debido proceso, no sólo es un principio de quienes ejercen la
función jurisdiccional y que está contemplado como tal en el inciso
3 del artículo 139 de la Constitución Política del Estado, sino que
también es concebido como aquel derecho fundamental que posee
toda persona peruana o extranjera, natural o jurídica- y que, en tal
medida, es exigible por éstas (dimensión subjetiva); a su vez, es un
derecho que debe ser respetado por todos, debido a que lleva
implícito los fines sociales y colectivos de justicia (dimensión
objetiva)1. En ese sentido, existe contravención de las normas que
garantizan el derecho a un debido proceso cuando, en el desarrollo
del mismo, el órgano jurisdiccional no ha respetado los derechos
procesales de las partes; se han obviado o alterado actos de
procedimiento; la tutela jurisdiccional no ha sido efectiva y/o el
órgano jurisdiccional deja de motivar sus resoluciones, en clara
transgresión de la normatividad vigente y de los principios
procesales. Décimo: Ahora bien, conforme a la jurisprudencia
sentada por esta Sala de Derecho Constitucional y Social
Permanente2: “El derecho a la tutela jurisdiccional efectiva se
encuentra reconocido en el artículo 139, inciso 3, de la Carta
Magna, y en el artículo I del Título Preliminar del Código Procesal
Civil, el cual encuentra dentro de su contenido constitucional
protegido que, cuando una persona requiera la protección de su
derecho o de sus intereses legítimos, aquello sea atendido por los
órganos jurisdiccionales mediante un proceso adecuado donde se
respeten las garantías mínimas de los litigantes, esto es, de ambas
partes en el proceso. Ello es así, toda vez que no sólo se busca
la defensa de los intereses de la parte accionante sino también
los del sujeto requerido, estando sus derechos también
abarcados en la tutela jurisdiccional efectiva. Tal derecho se
trata, por tanto, de un derecho continente, esto es que abarca una
serie de otros derechos expresamente señalados o implícitamente
deducidos de aquel. En la doctrina, se ha señalado que este
derecho abarca principalmente tres etapas: El acceso a los órganos
jurisdiccionales, el cumplimiento de las normas y derechos que
regula el debido proceso, y el de la ejecución de la resolución
obtenida. En ese sentido, estableció la Sala Suprema que uno de
los derechos que abarca la tutela jurisdiccional efectiva es el
derecho al acceso a la justicia, el cual se encuentra implícitamente
contenido en aquel, y comprende el derecho de la persona de
promover la acción jurisdiccional de los órganos estatales
correspondientes, a través de los mecanismos que la Ley le
franquea para solicitar que se resuelva una situación jurídica ó
conflicto de derechos en un proceso judicial conforme a derecho.
Asimismo, se precisó que este derecho se concretiza a través del
ejercicio de otro derecho también de relevancia constitucional
como parte integrante del derecho a la tutela procesal efectiva,
refiriéndose al derecho de acción definido como “(…) el poder
jurídico que tiene todo sujeto de derecho, de acudir a los órganos
jurisdiccionales para reclamarles la satisfacción de una pretensión”3.
Undécimo: Sobre la motivación de las sentencias, el Tribunal
Constitucional4 ha establecido: “debe tenerse presente que en todo
Estado constitucional y democrático de derecho, la motivación
debida de las decisiones de las entidades públicas -sean o no de
carácter jurisdiccional- es un derecho fundamental que forma parte
del contenido esencial del derecho a la tutela procesal efectiva. El
derecho a la motivación debida constituye una garantía fundamental
en los supuestos en que con la decisión emitida se afecta de
manera negativa la esfera o situación jurídica de las personas. Así,
toda decisión que carezca de una motivación adecuada, suficiente
y congruente constituirá una decisión arbitraria y, en consecuencia,
será inconstitucional”. Duodécimo: Al respecto, este Supremo
Tribunal verifica en sede casatoria que al expedirse la sentencia de
vista no se han vulnerado los derechos fundamentales a un debido
proceso y tutela jurisdiccional efectiva invocados por la recurrente,
por cuanto no se han transgredido los derechos procesales –
constitucionales a la motivación de las sentencias y a la defensa,
menos los principios y normas denunciados por la impugnante.
Esta Sala Suprema aprecia, contrario a lo alegado por la
impugnante, que la Sala de mérito ha resuelto conforme a la
situación fáctica establecida en sede de instancia, los medios de
prueba que obran en autos, y un análisis detenido, razonado y
lógico de la controversia suscitada; en consecuencia, al no
advertirse por este Supremo Tribunal las denuncias contenidas en
las causales bajo análisis, sino más bien una sentencia de mérito
con motivación, conforme a lo prescrito en los artículos 139
numerales 3 y 5 de la Constitución Política del Estado, artículo 12
de la Ley Orgánica del Poder Judicial, 122 inciso 4 del Código
Procesal Civil, pronunciándose respecto de todas las alegaciones
efectuadas por las partes en el transcurso del proceso en los
escritos y medios impugnatorios de mérito, y la normatividad
pertinente al caso, este extremo del recuro deviene en
improcedente . Décimo Tercero: En efecto, la motivación de las
resoluciones jurisdiccionales constituye un principio, y a la vez se
erige como un derecho procesal – constitucional que emana de la
función jurisdiccional, por lo tanto, la motivación de las sentencias
jurisdiccionales debe ser el resultado de un razonamiento lógico y
74066
CASACIÓN
jurídico sobre la base de los hechos determinados en sede de
instancia, los medios de prueba aportados por las partes y la
aplicación del derecho objetivo, aaalo que se reitera ha sido
resguardado por la Sala Superior, es estricto resguardo de los
derechos fundamentales a un debido proceso y tutela jurisdiccional
efectiva. Por tales consideraciones, y de conformidad con lo
previsto en el artículo 392 del Código Procesal Civil, artículo
modificado por el artículo 1 de la Ley N° 29364, declararon:
IMPROCEDENTE el recurso de casación interpuesto por la
demandante Compañía Minera San Nicolás Sociedad Anónima, de
fecha veintiocho de agosto de dos mil trece, obrante a fojas
doscientos setenta y nueve, contra la sentencia de vista de fecha
dieciocho de julio de dos mil trece, obrante a fojas doscientos
sesenta y cinco; ORDENARON la publicación de la presente
resolución en el Diario Oficial “El Peruano” conforme a ley; en los
seguidos por la Compañía Minera San Nicolás Sociedad Anónima
contra el Organismo Supervisor de la Inversión en Energía y
Minería - OSINERGMIN, sobre Acción Contencioso Administrativa;
y los devolvieron. Vocal Ponente: Vinatea Medina. S.S. SIVINA
HURTADO, WALDE JAÚREGUI, VINATEA MEDINA, RUEDA
FERNÁNDEZ, MALCA GUAYLUPO
1
2
3
4
Comisión Andina de Juristas. Luis Huerta con la colaboración de Enrique Aguilar,
“El debido proceso en las decisiones de la Corte Interamericana de Derechos
Humanos (análisis del artículo 8 de la Convención Americana sobre Derechos
Humanos), en www.cajpe.org.pe.
CASACIÓN N° 405-2010, LIMA-NORTE, considerando octavo, de fecha quince
de marzo de dos mil once. En esta oportunidad la Sala de Derecho Constitucional
y Social Permanente declaró infundado el recurso de casación interpuesto por
la Asociación de Propietarios de la Urbanización Sol de Lima; en los seguidos
contra la Municipalidad Distrital de San Martín de Porres y otro; sobre proceso
contencioso administrativo. (negrita y subrayado nuestro).
Couture Eduardo J (1985) Fundamentos del Derecho Procesal Civil. Buenos Aires,
Depalma, p57.
STC. N° 01807-2011-PA/TC, del veintisiete de junio de dos mil once, fundamento
10.
C-1335410-46
CAS. Nº 13793-2013 LIMA
Lima, dos de junio de dos mil catorce. VISTOS: con los
acompañados; y, CONSIDERANDO: Primero: Viene a
conocimiento de esta Sala Suprema el recurso de casación
interpuesto por el demandante Pesquera Tevimar Sociedad
Anónima, de fecha ocho de agosto de dos mil trece, obrante a fojas
doscientos cincuenta y siete, contra la sentencia de vista de fecha
veinte de junio de dos mil trece, obrante a fojas doscientos cuarenta
y cuatro, mediante la cual la Quinta Sala Permanente Especializado
en lo Contencioso Administrativo de la Corte Superior de Justicia
de Lima, confirma la sentencia apelada de fecha veinte de agosto
de dos mil doce, obrante a fojas ciento cincuenta y seis, que
declaró infundada la demanda; para cuyo efecto se debe proceder
a calificar si dicho recurso cumple con los requisitos de admisibilidad
y procedencia, conforme a lo prescrito en los artículos 387 y 388
del Código Procesal Civil, artículos modificados por el artículo 1 de
la Ley N° 29364, de aplicación supletoria, concordante con lo
dispuesto en el numeral 3.1) del inciso 3) del artículo 32 de la Ley
N° 27584. Segundo: En tal sentido, verificados los requisitos de
admisibilidad previstos en el artículo 387 del Código Procesal Civil,
artículo modificado por el artículo 1 de la Ley N° 29364, el referido
medio impugnatorio cumple con ellos, a saber: i) se recurre una
sentencia expedida por una Sala que pone fin al proceso, ii) se ha
interpuesto ante la Sala que emitió la resolución impugnada; iii) fue
interpuesto dentro del plazo de diez días de notificada la recurrente
con la resolución impugnada; y, iv) además adjunta el arancel
judicial por concepto del recurso de casación. Tercero: Antes del
análisis de los requisitos de procedencia es necesario precisar que
el recurso de casación es un medio impugnatorio extraordinario de
carácter formal que sólo puede fundarse en cuestiones
eminentemente jurídicas y no en cuestiones fácticas o de
revaloración probatoria, es por ello, que sus fines esenciales
constituyen la adecuada aplicación del derecho objetivo al caso
concreto, y la uniformidad de la jurisprudencia nacional por la Corte
Suprema; en ese sentido, su fundamentación por parte de la
Entidad recurrente debe ser clara, precisa y concreta, indicando
ordenadamente cuales son las denuncias que configuran la
infracción normativa que incida directamente sobre la decisión
contenida en la resolución impugnada, o las precisiones respecto
al apartamiento inmotivado del precedente judicial. Cuarto: El
artículo 386 del Código Procesal Civil, modificado por el artículo 1
de la Ley N° 29364, prescribe que: “El recurso de casación se
sustenta en la infracción normativa que incida directamente sobre
la decisión contenida en la resolución impugnada o en el
apartamiento inmotivado del precedente judicial". Quinto: Por
infracción normativa debemos entender la causal a través de la
cual el recurrente denuncia la existencia de un error de naturaleza
procesal o sustantiva que incide directamente sobre el sentido de
lo decidido. Los errores que pueden ser alegados como infracción
normativa pueden comprender a los supuestos de aplicación
indebida, interpretación errónea o inaplicación de una norma, que
como se ha señalado pueden ser de carácter sustantivo o procesal.
Sexto: En cuanto a la causal de apartamiento de los precedentes
del Poder Judicial, este Supremo Tribunal precisa que se funda en
El Peruano
Lunes 1 de febrero de 2016
el principio constitucional del stare decisis, propio del sistema
norteamericano que implica una vinculación fuerte para los
Magistrados del Poder Judicial, respecto de las decisiones
adoptadas por la Corte Suprema. En el Perú, los órganos
jurisdiccionales se encuentran vinculados a los precedentes
expedidos por la Corte Suprema de la República y el Tribunal
Constitucional, en nuestro caso, el artículo 22 de la Ley Orgánica
del Poder Judicial prescribe: “Las Salas Especializadas de la Corte
Suprema de Justicia de la República ordenan la publicación
trimestral en el Diario Oficial "El Peruano" de las Ejecutorias que
fijan principios jurisprudenciales que han de ser de obligatorio
cumplimiento, en todas las instancias judiciales. Estos principios
deben ser invocados por los Magistrados de todas las instancias
judiciales, cualquiera que sea su especialidad, como precedente
de obligatorio cumplimiento. En caso que por excepción decidan
apartarse de dicho criterio, están obligados a motivar”. Sétimo: En
el presente caso, el impugnante ha denunciado: i) la infracción
normativa por inaplicación del artículo 1 numerales 1.1, 1.2, 1.5 de
la Ley N° 27444; ii) la infracción normativa del artículo 2 numerales
1.1., 1.2 y 1.5 de la ley N° 27444; y iii) la infracción normativa del
artículo 230 numerales 1, 2 y 5; y iv) la infracción normativa del
artículo 103 de la Constitución Política del Perú. Octavo: Con
relación a las denuncias de infracción normativa por inaplicación
del artículo 1 numerales 1.1, 1.2, 1.5 de la Ley N° 27444; del
artículo 2 numerales 1.1, 1.2 y 1.5 y artículo 230 numerales 1, 2
y 5 de la Ley N° 27444; y del artículo 103 de la Constitución
Política del Perú, sostiene la recurrente que: i) se ha vulnerado el
principio de legalidad por cuanto la persona que firmó el acta que
sirvió de sustento para el inicio del procedimiento cuestionado
carecía a la fecha de los hechos, de la atribución legal para realizar
operativos de control y fiscalización en el litoral peruano; ii) la
participación del Señor Reátegui en su condición de Ministro de
Pesquería tampoco puede ser legitimado con lo dispuesto en el
Decreto Supremo N° 008-2002-PE. En ese sentido, precisa que
desde que en el procedimiento en cuestión intervino la máxima
autoridad al interior del Ministerio de Pesquería se descartó la
posibilidad de que sus argumentos puedan ser analizados de
manera imparcial; iii) El artículo 5 del Decreto Supremo N° 008002-PE no se encontraba vigente a la fecha de los hechos, por lo
que, de conformidad con el principio de irretroactividad no resultaba
aplicable al caso de autos. Concluye la impugnante que la
inaplicación de normas ha determinado que las instancias judiciales
no hayan concluido respecto a la ilegalidad del procedimiento
administrativo en cuestión. Noveno: Corresponde examinar las
causales que preceden, desde el marco jurídico de las garantías de
los derechos fundamentales a un debido proceso y tutela
jurisdiccional efectiva, por su contenido constitucional y procesal
denunciados, a fin de que en sede casatoria se ejercite
adecuadamente la finalidad esencial del recurso de casación, y se
resguarde la tutela de los derechos procesales con valor
constitucional, con la clara observancia de las normas sustantivas
y procesales que garantiza al justiciable el derecho de obtener de
los órganos jurisdiccionales una respuesta razonada y
fundamentada, respetando los principios de jerarquía de las
normas, el de congruencia procesal, la valoración de los medios
probatorios; constituyendo un deber del Juez emitir fallos de
acuerdo a lo establecido en el inciso 5 del artículo 139 de la
Constitución Política del Estado, en el inciso 4 del artículo 122, así
como el artículo 50 inciso 6 del Código Procesal Civil, en resguardo
de los derechos fundamentales citados en todas sus acepciones.
Décimo: En cuanto al derecho fundamental a un debido proceso,
no sólo es un principio de quienes ejercen la función jurisdiccional
y que está contemplado como tal en el inciso 3 del artículo 139 de
la Constitución Política del Estado, sino que también es concebido
como aquel derecho fundamental que posee toda persona peruana
o extranjera, natural o jurídica- y que, en tal medida, es exigible por
éstas (dimensión subjetiva); a su vez, es un derecho que debe ser
respetado por todos, debido a que lleva implícito los fines sociales
y colectivos de justicia (dimensión objetiva)1. En ese sentido, existe
contravención de las normas que garantizan el derecho a un
debido proceso cuando, en el desarrollo del mismo, el órgano
jurisdiccional no ha respetado los derechos procesales de las
partes; se han obviado o alterado actos de procedimiento; la tutela
jurisdiccional no ha sido efectiva y/o el órgano jurisdiccional deja de
motivar sus resoluciones, en clara transgresión de la normatividad
vigente y de los principios procesales. Undécimo: Ahora bien,
conforme a la jurisprudencia sentada por esta Sala de Derecho
Constitucional y Social Permanente2: “El derecho a la tutela
jurisdiccional efectiva se encuentra reconocido en el artículo 139,
inciso 3, de la Carta Magna, y en el artículo I del Título Preliminar
del Código Procesal Civil, el cual encuentra dentro de su contenido
constitucional protegido que, cuando una persona requiera la
protección de su derecho o de sus intereses legítimos, aquello sea
atendido por los órganos jurisdiccionales mediante un proceso
adecuado donde se respeten las garantías mínimas de los
litigantes, esto es, de ambas partes en el proceso. Ello es así, toda
vez que no sólo se busca la defensa de los intereses de la
parte accionante sino también los del sujeto requerido,
estando sus derechos también abarcados en la tutela
jurisdiccional efectiva. Tal derecho se trata, por tanto, de un
derecho continente, esto es que abarca una serie de otros derechos
expresamente señalados o implícitamente deducidos de aquel. En
la doctrina, se ha señalado que este derecho abarca principalmente
El Peruano
Lunes 1 de febrero de 2016
CASACIÓN
tres etapas: El acceso a los órganos jurisdiccionales, el
cumplimiento de las normas y derechos que regula el debido
proceso, y el de la ejecución de la resolución obtenida. En ese
sentido, estableció la Sala Suprema que uno de los derechos que
abarca la tutela jurisdiccional efectiva es el derecho al acceso a la
justicia, el cual se encuentra implícitamente contenido en aquel, y
comprende el derecho de la persona de promover la acción
jurisdiccional de los órganos estatales correspondientes, a través
de los mecanismos que la Ley le franquea para solicitar que se
resuelva una situación jurídica ó conflicto de derechos en un
proceso judicial conforme a derecho. Asimismo, se precisó que
este derecho se concretiza a través del ejercicio de otro derecho
también de relevancia constitucional como parte integrante del
derecho a la tutela procesal efectiva, refiriéndose al derecho de
acción definido como “(…) el poder jurídico que tiene todo sujeto de
derecho, de acudir a los órganos jurisdiccionales para reclamarles
la satisfacción de una pretensión”3. Duodécimo: Al respecto, este
Supremo Tribunal verifica en sede casatoria que al expedirse la
sentencia de vista no se han vulnerado los derechos fundamentales
a un debido proceso y tutela jurisdiccional efectiva, por cuanto no
se han transgredido los derechos procesales – constitucionales a
la motivación de las sentencias y a la defensa, menos los principios
y normas denunciados por la impugnante. Esta Sala Suprema
aprecia, contrario a lo alegado por la impugnante, que la Sala de
mérito ha resuelto conforme a la situación fáctica establecida en
sede de instancia, los medios de prueba que obran en autos, y un
análisis detenido, razonado y lógico de la controversia suscitada;
en consecuencia, al no advertirse por este Supremo Tribunal las
denuncias contenidas en las causales bajo análisis, sino más bien
una sentencia de mérito con motivación, conforme a lo prescrito en
los artículos 139 numerales 3 y 5 de la Constitución Política del
Estado, artículo 12 de la Ley Orgánica del Poder Judicial, 122
inciso 4 del Código Procesal Civil, pronunciándose respecto de
todas las alegaciones efectuadas por las partes en el transcurso
del proceso en los escritos y medios impugnatorios de mérito, y la
normatividad pertinente al caso, este extremo del recuro deviene
en improcedente. Décimo Tercero: Máxime que, la Sala de
mérito ha determinado en sede de instancia que conforme al acta
suscrita a las dieciséis con treinta horas del treinta de marzo de dos
mil dos, por el entonces Ministro de Pesquería Javier Reátegui
Rosello de fojas cinco, donde se dejó constancia que la
embarcación TEO se encontraba extrayendo recursos
hidrobiológicos dentro de la zona reservada de las cinco millas de
la costa peruana. En ese sentido, se precisa por los Jueces que
atendiendo a que la Administración ha considerado además del
acta cuya validez se cuestiona, los informes emitidos por la
Dirección de Seguimiento, Vigilancia y Sanciones del SISESAT y el
reporte de pesaje de autos, medios probatorios determinantes que
valorados de manera conjunta persuadieron a los órganos
jurisdiccionales sobre la comisión de la infracción imputada a la
demandante, más aun que no fueron desvirtuados en modo alguno.
Por tales consideraciones, y de conformidad con lo previsto en el
artículo 392 del Código Procesal Civil, artículo modificado por el
artículo 1 de la Ley N° 29364, declararon: IMPROCEDENTE el
recurso de casación interpuesto por el demandante Pesquera
Tevimar Sociedad Anónima, de fecha ocho de agosto de dos mil
trece, obrante a fojas doscientos cincuenta y siete, contra la
sentencia de vista de fecha veinte de junio de dos mil trece, obrante
a fojas doscientos cuarenta y cuatro; ORDENARON la publicación
de la presente resolución en el Diario Oficial “El Peruano” conforme
a ley; en los seguidos por Pesquera Tevimar Sociedad Anónima
contra el Ministerio de la Producción, sobre Acción Contenciosa
Administrativa; y los devolvieron. Vocal Ponente: Vinatea Medina.
S.S. SIVINA HURTADO, WALDE JÁUREGUI, VINATEA MEDINA,
RUEDA FERNÁNDEZ, MALCA GUAYLUPO
1
2
3
Comisión Andina de Juristas. Luis Huerta con la colaboración de Enrique Aguilar,
“El debido proceso en las decisiones de la Corte Interamericana de Derechos
Humanos (análisis del artículo 8 de la Convención Americana sobre Derechos
Humanos), en www.cajpe.org.pe.
CASACIÓN N° 405-2010, LIMA-NORTE, considerando octavo, de fecha quince
de marzo de dos mil once. En esta oportunidad la Sala de Derecho Constitucional
y Social Permanente declaró infundado el recurso de casación interpuesto por
la Asociación de Propietarios de la Urbanización Sol de Lima; en los seguidos
contra la Municipalidad Distrital de San Martín de Porres y otro; sobre proceso
contencioso administrativo. (negrita y subrayado nuestro).
Couture Eduardo J (1985) Fundamentos del Derecho Procesal Civil. Buenos Aires,
Depalma, p57.
C-1335410-47
CAS. Nº 15959 – 2013 HUANUCO
Sumilla: La Sala de mérito ampara las pretensiones de
remuneraciones devengadas, sin considerar que el artículo 40 del
Decreto Supremo Nº 003-97-TR, es aplicable para los procesos de
nulidad de despido, y no para aquellos reconocidos mediante
procesos de amparo; motivo por el cual resulta conveniente que se
analice la viabilidad de identificar el carácter restitutorio del amparo,
con la figura del despido nulo en la legislación laboral, teniendo
presente que el proceso de amparo se encuentra referido a la
restitución de un derecho subjetivo específico, mientras que el
proceso de nulidad se refiere, valga la redundancia, a la nulidad de
un acto de despido, siendo por tanto las pretensiones que se
deducen en cada caso de índole distinta. Lima, ocho de agosto de
74067
dos mil catorce. LA SALA DE DERECHO CONSTITUCIONAL Y
SOCIAL PERMANENTE DE LA CORTE SUPREMA DE JUSTICIA
DE LA REPÚBLICA: VISTA: con el acompañado; en Audiencia
Pública llevada a cabo en el día de la fecha, con los Señores
Jueces Supremos: Sivina Hurtado - Presidente, Walde Jáuregui,
Acevedo Mena, Vinatea Medina y Rueda Fernández; y, luego de
producida la votación con arreglo a ley, se emite la siguiente
sentencia: I. MATERIA DEL RECURSO: Se trata del recurso de
casación interpuesto por el Ministerio de Agricultura, obrante a
fojas trescientos setenta y nueve y trescientos noventa y tres,
contra la sentencia de vista de fecha veinticinco de setiembre del
dos mil trece, obrante a fojas trescientos sesenta y seis que
confirmando la sentencia apelada de fecha veinticinco de abril del
dos mil trece obrante a fojas trescientos uno declara fundada la
demanda; en consecuencia, ordena: i) El reconocimiento de la
relación laboral entre las partes; ii) La suscripción del contrato de
trabajo a plazo indeterminado, bajo el régimen laboral privado; y, iii)
El pago de las remuneraciones devengadas por el periodo que va
del uno de julio de dos mil ocho al treinta y uno de mayo del dos mil
diez, en la suma de S/.27,600.00 nuevos soles (veintisiete mil
seiscientos nuevos soles), más intereses legales que se liquidaran
en ejecución de sentencia. II. CAUSALES DEL RECURSO DE
CASACION: El recurrente ha interpuesto el recurso de casación,
denunciando las siguientes causales: a) la infracción normativa del
inciso 3 del artículo 122 del Código Procesal Civil; b) la infracción
normativa del inciso 4 del artículo 122 del Código Procesal Civil; c)
la inaplicación del artículo 1764 del Código Civil; d) la aplicación
indebida del principio de primacía de la realidad; e) la inaplicación
del Decreto Legislativo N°1057; y, f) la inaplicación de una norma
de derecho material o de la doctrina jurisprudencial. III.
CONSIDERANDO: Primero: El recurso de casación reúne los
requisitos que para su admisibilidad, contempla el artículo 57 de la
Ley Nº 26636, Ley Procesal del Trabajo, modificado por el artículo
1 de la Ley Nº 27021. Segundo: Independientemente de las
denuncias invocadas, si bien es cierto que la actuación de esta
Suprema Sala al conocer del recurso de casación se ve limitada a
la misión y postulado que le asigna el artículo 54 de la Ley Nº
26636, modificado por el artículo 1 de la Ley Nº 27021, esto es, la
correcta aplicación e interpretación de las normas materiales –en
este caso– del derecho laboral, también lo es que dicha premisa
tiene como única y obligada excepción la tutela de los derechos
procesales con valor constitucional, pues es evidente que allí
donde el ejercicio de la función jurisdiccional los vulnera o amenaza,
se justifica la posibilidad de ejercer el recurso de casación como
instrumento de su defensa y corrección aunque limitado sólo a la
vulneración de los derechos de tal naturaleza, quedando por tanto
descartado que dentro de dicha noción se encuentren las
anomalías o simples irregularidades procesales que no son por si
mismas contrarias a la Constitución Política del Estado. Tercero:
En este contexto, aún cuando en el presente recurso no se
denuncia la contravención de las normas que garantizan el
derecho a un debido proceso, el cual además no constituye
causal de casación en materia laboral conforme al texto vigente de
la Ley Procesal del Trabajo N° 26636; sin embargo, por
encontrarnos frente a una irregularidad que transgrede principios y
derechos del debido proceso, queda obligada esta Sala Suprema a
declarar en forma excepcional, procedente la casación por dicha
causal, en aplicación de lo dispuesto en los incisos 3 y 5 del artículo
139 de la Constitución Política del Perú, obviándose las denuncias
materiales invocadas, al observarse la existencia de vicios que
vulneran el derecho de los justiciables de obtener de parte de los
órganos jurisdiccionales una resolución debidamente motivada y
que se respalde en los actuados (fundamentos fácticos, jurídicos y
probatorios). Cuarto: El derecho fundamental a un debido proceso,
consagrado en el inciso 3) del artículo 139 de la Constitución
Política del Estado, implica el respeto del conjunto de garantías
que protegen a los ciudadanos sometidos a cualquier cuestión
litigiosa, con el fin de asegurarles una cumplida y recta
administración de justicia, en orden a procurarles seguridad jurídica
y que las decisiones se pronuncien conforme a derecho. En virtud
a ello, existe contravención de las normas que garantizan el
derecho a un debido proceso cuando, en el desarrollo del mismo,
el órgano jurisdiccional no ha respetado los derechos procesales
de las partes; se han obviado o alterado actos de procedimiento; la
tutela jurisdiccional no ha sido efectiva y/o el órgano jurisdiccional
deja de motivar sus resoluciones, en clara transgresión de la
normatividad vigente y de los principios procesales. Quinto: En
relación al derecho a la tutela jurisdiccional efectiva, exige que,
cuando una persona requiera la protección de su derecho o de sus
intereses legítimos, aquello sea atendido por los órganos
jurisdiccionales mediante un proceso adecuado donde se respeten
las garantías mínimas de los litigantes, esto es, de ambas partes
en el proceso. “(…) Ello es así, toda vez que no sólo se busca la
defensa de los intereses de la parte accionante sino también los del
sujeto requerido, estando sus derechos también abarcados en la
tutela jurisdiccional efectiva. Tal derecho se trata, por tanto, de un
derecho continente, esto es que abarca una serie de otros derechos
expresamente señalados o implícitamente deducidos de aquel. En
la doctrina, se ha señalado que este derecho abarca principalmente
tres etapas: El acceso a los órganos jurisdiccionales, el
cumplimiento de las normas y derechos que regula el debido
proceso, y el de la ejecución de la resolución obtenida.”1. Sexto:
Sobre el derecho a la motivación de las resoluciones judiciales, el
74068
CASACIÓN
cual forma parte del contenido esencial del derecho al debido
proceso, garantiza que la decisión expresada en el fallo o resolución
sea consecuencia de una deducción razonada de los hechos del
caso, las pruebas aportadas y su valoración jurídica, en tal virtud
esta garantía se respeta siempre que exista fundamentación
jurídica, congruencia entre lo pedido y lo resuelto y, por sí misma la
resolución judicial exprese una suficiente justificación de la decisión
adoptada. En efecto, la exigencia de motivación en las decisiones
judiciales prevista en el inciso 5) del artículo 139 de la Constitución
Política del Estado, garantiza que los jueces, cualquiera sea la
instancia a la que pertenezca, expresen la argumentación jurídica
que los ha llevado a decidir una controversia, asegurando que el
ejercicio de la potestad de administrar justicia se haga con sujeción
a la Constitución y a la ley; pero también con la finalidad de facilitar
un adecuado ejercicio del derecho de defensa de los justiciables.
En suma, garantiza que el razonamiento empleado guarde relación
y sea suficiente y proporcionado con los hechos que el juez
corresponde resolver. Sétimo: La observancia irrestricta de este
derecho en el desarrollo del proceso no sólo es impuesta en la
actuación de los órganos de primera instancia, sino que se proyecta
en toda su secuela, lo cual obviamente involucra la intervención de
la instancia revisora como así lo reconoce el artículo 12 del Texto
Único Ordenado de la Ley Orgánica del Poder Judicial, modificado
por el artículo único de la Ley Nº28490, que desarrollando la
garantía de motivación de las resoluciones judiciales determina
expresamente que todas las resoluciones, con exclusión de las de
mero trámite, son motivadas, bajo responsabilidad, con expresión
de los fundamentos en que se sustentan. Esta disposición alcanza
a los órganos jurisdiccionales de segunda instancia que absuelven
el grado, en cuyo caso, la reproducción de los fundamentos de la
resolución recurrida, no constituye motivación suficiente. Octavo:
En el presente caso, mediante escrito de fecha veintidós de junio
del dos mil once, don José Luis Ochoa Cuya, demanda el
reconocimiento de su vínculo laboral a plazo indeterminado, desde
el inicio de sus labores y el pago de sus remuneraciones
devengadas, por el periodo que duró su despido. Sostiene que,
ingresó a laborar el uno de julio del dos mil tres, suscribiendo
contratos de locación de servicios, desempeñándose en el cargo
de Especialista en Ciencias Agrarias II, hasta el treinta de junio del
dos mil ocho, fecha en que fue despedido; por lo que en vía de
acción de amparo se dispuso su reincorporación lo que se produjo
el catorce de junio de dos mil diez. Es por tal motivo que solicita el
reconocimiento de su vínculo laboral desde el inicio de sus labores
y el pago de sus remuneraciones devengadas por el periodo que
duró su cese, esto es, desde el primero de julio del dos mil ocho
hasta el trece de junio del dos mil diez. Noveno: Dentro del
contexto normativo señalado precedentemente, cabe precisar en
cuanto al pago de remuneraciones devengadas, ordenados a
pagar en sede de instancia, que no se ha cumplido con fundamentar
en armonía con el derecho a la motivación de las resoluciones
judiciales el porqué procedería el pago de dichos conceptos por el
período no laborado, esto es, por el período que duró el despido
inconstitucional reconocido a través de la acción de amparo; más
aún si, en el caso del trabajador repuesto a través de un proceso de
amparo no existe normativa que disponga su otorgamiento;
advirtiéndose que su única finalidad fue estimar esta pretensión,
sin considerar que el artículo 40 del Decreto Supremo N° 003-97TR2 (único supuesto en el que corresponde el pago de las
remuneraciones devengadas), se adscribe a una lista de numerus
clausus de los supuestos de nulidad de despido en los que procede
su aplicación, los cuales se encuentran circunscritos al artículo 29,
mas no a los demás supuestos regulados por el Texto Unico
Ordenado del Decreto Legislativo N°728, Ley de Productividad y
Competitividad Laboral, aprobado por Decreto Supremo Nº 00397-TR; siendo necesario que se tome en cuenta el artículo IV del
Título Preliminar del Código Civil, el cual prevé que toda norma que
establece excepciones o restringe derechos no se aplica por
analogía, entendiéndose como excepciones, a aquellos supuestos
en donde exista una regulación específica que no es aplicable a la
generalidad de casos similares a la regulada por un dispositivo
legal. Décimo: De otro lado, tampoco resulta congruente, suficiente
y motivado lo señalado por el Colegiado Superior quien sostiene
que es perfectamente posible el reconocimiento de las
remuneraciones devengadas como consecuencia directa de un
despido declarado nulo por inconstitucional, en tanto en el Pleno
Jurisdiccional Laboral Nacional de fecha veintiocho de junio del dos
mil ocho se ha establecido que las remuneraciones dejadas de
percibir con ocasión del despido de un trabajador repuesto
mediante un proceso de amparo, pueden ser reclamados en uno
de pago de beneficios sociales y/o en un proceso de indemnización
por daños y perjuicios. Undécimo: Finalmente, esta Sala Suprema
considera necesario señalar, acorde con lo expresado en los
considerandos que anteceden en cuanto al pago de remuneraciones
devengadas y demás beneficios sociales, que si bien es cierto la
reposición real en el centro laboral satisface el derecho a prestar la
fuerza de trabajo, no crea una ficción retroactiva de labores
prestadas durante el período de ausencia, frente a la cual pudiera
surgir la obligación de pago remunerativo, por lo tanto, al haberse
ordenado por el Colegiado Superior el pago de dichos conceptos
por el período no laborado por el actor, se ha transgredido la
garantía constitucional de la motivación escrita que debe tener toda
resolución, prevista en el artículo 139 incisos 3 y 5 de la Carta
Constitucional, así como el principio de congruencia que debe
El Peruano
Lunes 1 de febrero de 2016
estar presente en toda resolución judicial conforme así lo exige el
artículo 122 inciso 4 del Código Procesal Civil, lo que acarrea la
invalidez insubsanable de la sentencia de vista emitida en este
proceso, deviniendo en fundado el recurso de casación por esta
causal, careciendo de objeto examinar los argumentos de fondo de
las causales materiales denunciadas. IV. DECISIÓN: Por estas
consideraciones, declararon: FUNDADO el recurso de casación
interpuesto por el Ministerio de Agricultura, obrante a fojas
trescientos setenta y nueve y trescientos noventa y tres; en
consecuencia: NULA la sentencia de vista de fecha veinticinco de
setiembre del dos mil trece, obrante a fojas trescientos sesenta y
seis; y DISPUSIERON que la Sala de mérito EMITA NUEVA
SENTENCIA con observancia de los parámetros y lineamientos
contenidos en la presente ejecutoria suprema; ORDENARON la
publicación de la presente resolución en el Diario Oficial “El
Peruano”; y los devolvieron; en los seguidos por don José Luis
Ochoa Cuya, sobre Reconocimiento de vínculo laboral y otro; Juez
Supremo Ponente Vinatea Medina. S.S. SIVINA HURTADO,
ACEVEDO MENA, VINATEA MEDINA, RUEDA FERNÁNDEZ. EL
VOTO EN DISCORDIA DEL JUEZ SUPREMO WALDE
JAUREGUI, ES COMO SIGUE: VISTOS: y, CONSIDERANDO:
PRIMERO: Que, viene a conocimiento de esta Sala Suprema el
recurso de casación interpuesto por el demandado Ministerio de
Agricultura, de fecha catorce de octubre de dos mil trece, obrante a
fojas trescientos setenta y nueve, complementado a fojas
trescientos noventa y tres, contra la sentencia de vista de fecha
veinticinco de setiembre de dos mil trece, obrante a fojas trescientos
sesenta y seis, que confirma la sentencia apelada de fecha
veinticinco de abril de dos mil trece, que declara fundada la
demanda; por lo que se debe examinar si el recurso reúne los
requisitos de forma y de fondo establecidos en los artículos 57 y 58
de la Ley Procesal de Trabajo N° 26636, modificada por Ley N°
27021. SEGUNDO: Que, en primer lugar se debe verificar si se
cumple los requisitos de forma señalados en el artículo 57 de la Ley
N° 26636, modificado por el artículo 1 de la Ley N° 27021, el cual
establece que el recurso de casación se interpone: i) Ante la Sala
que expidió la resolución impugnada; ii) Dentro del plazo de diez
días de notificada; iii) Contra la sentencia a que se refiere el
artículo 55; iv) Acreditando el pago o la exoneración de la tasa
judicial respectiva; v) Siempre que la resolución adversa de primera
instancia que haya sido confirmada por la recurrida no hubiera sido
consentida; y, vi) Presentando copia de las resoluciones
contradictorias, si invocara la causal señalada en el inciso d) del
artículo 56. TERCERO: Que, en el presente caso se verifica que el
recurso: i) ha sido interpuesto ante la Sala Civil de la Corte Superior
de Justicia de Huánuco, la cual expidió la resolución impugnada; ii)
ha sido presentado dentro del plazo de diez días que establece la
norma; iii) se interpone contra una sentencia expedida por una
Sala Superior que resuelve el conflicto jurídico planteado por las
partes; iv) se encuentra exonerado de la presentación de la tasa
judicial por ser el Estado el recurrente; v) no dejó consentir la
resolución de primera instancia que le fue adversa, al haber
interpuesto recurso de apelación; y, vi) no es exigible este requisito
por cuanto no se ha invocado la causal señalada en el inciso d) del
artículo 56. CUARTO: Que, en cuanto a los requisitos de fondo, el
artículo 58 de la Ley 26636, modificado por el artículo 1 de la Ley
N° 27021, señala que el recurso deberá estar fundamentado con
claridad señalando con precisión las causales descritas en el
artículo 56 en que se sustenta, y según el caso, debe precisarse
qué norma ha sido indebidamente aplicada y cuál es la que debió
aplicarse, cuál es la correcta interpretación de la norma, cuál es la
norma inaplicada y porqué debió aplicarse y cuál es la similitud
existente entre los pronunciamientos invocados y en qué consiste
la contradicción. QUINTO: Que, el recurrente denuncia como
causales de su recurso: a) Infracción normativa del artículo 122
incisos 3 y 4 del Código Procesal Civil; señalando que la
sentencia de vista no ha cumplido con mencionar los puntos sobre
los que versa la misma, como tampoco los fundamentos de hecho
y derecho correspondientes, o al menos no con claridad y precisión,
siendo que ante el despido arbitrario no corresponde pago de
remuneraciones devengadas sino indemnización; y no ha tenido en
cuenta que al actor se le repuso por mandato judicial emitido en un
proceso de amparo en el régimen laboral del Decreto Legislativo N°
1057; y b) Inaplicación de los artículos 1764 y 1361 del Código
Civil; manifestando que no ha existido relación laboral con el
demandante sino sólo una de carácter civil mediante la suscripción
de contratos de locación de servicios, siendo que éstos son válidos
y legales conforme a la declaración expresada por las partes en los
mismos; c) Aplicación indebida del principio de primacía de la
realidad; sosteniendo que con dicho principio de justifica la
relación laboral declarada en la sentencia de vista, pese a que tal
relación nunca existió; d) Inaplicación del Decreto Legislativo N°
1057; alegando que el Tribunal Constitucional ha declarado la
constitucionalidad de los contratos administrativos de servicios,
determinando la existencia de novación el periodo anterior a la
suscripción de los mismos; y e) Inaplicación de una norma de
derecho material o de la doctrina jurisprudencial; argumentando
que el Tribunal Constitucional no ha establecido que proceda el
pago de remuneraciones devengadas, sino que ello debe ser
objeto de debate en la vía ordinaria, debiendo considerarse las
Casaciones N° 4723-2012-Lambayeque y N° 01532-2010-Cusco,
las cuales han señalado que no corresponde el pago de
remuneraciones devengadas salvo que exista despido nulo.
El Peruano
Lunes 1 de febrero de 2016
CASACIÓN
SEXTO: Que, en relación al primer agravio denunciado en el literal
a), se advierte que la misma carece de amparo legal en cuanto a su
procedencia, toda vez que de la sentencia recurrida, no se
desprende falta de motivación alguna, al haber expresado la Sala
Superior, de manera adecuada, suficiente y congruente los
fundamentos de hecho y de derecho que sustentan su decisión;
siendo además que invocar el término infracción normativa resulta
genérico, no cumpliéndose con precisar si la misma se configura
por aplicación indebida, inaplicación o interpretación errónea
conforme exige el artículo 56 de la Ley N° 26636, modificado por el
artículo 1 de la Ley N° 27021. SÉTIMO: Que, respecto al agravio
descrito en el literal b), se verifica que la argumentación
impugnatoria se encuentra orientada más bien a generar en este
Supremo Tribunal una nueva apreciación de los hechos con la
subsecuente revaloración de la prueba actuada y los elementos de
juicio del proceso, a efectos de determinar que los contratos de
locación de servicios celebrados con el demandante son válidos y
no se encuentran desnaturalizados, por lo que nunca ha existido
vínculo laboral alguno, como si esta sede se tratara de una tercera
instancia, propósito que no se condice con la naturaleza de este
extraordinario recurso de casación, cuyos fines están circunscritos
a la defensa del derecho objetivo y la unificación de los criterios de
la Corte Suprema. OCTAVO: Que, en cuanto al tercer agravio
alegado, corresponde precisar que existe aplicación indebida de
una norma de derecho material, cuando se aplica una norma
impertinente a la relación fáctica establecida en el proceso, por lo
que dicho agravio debe ser desestimado, atendiendo en principio
que se denuncia la aplicación indebida de un principio, sin precisar
la norma material que ha sido aplicada indebidamente, y en
segundo lugar, porque el principio aludido, no ha sido invocado por
la Sala Superior en la sentencia recurrida a fin de sustentar su fallo.
NOVENO: Que, respecto al cuarto agravio denunciado, es
menester señalar que la causal de inaplicación de una norma de
derecho material se configura cuando se deja de aplicar una norma
que contiene la hipótesis que describe el presupuesto fáctico
establecido en el proceso, lo que implica un desconocimiento de la
ley como norma jurídica abstracta de tal suerte que no se trata de
un error en el modo de aplicarla, sino de una omisión de cumplirla,
lo cual no se configura en el caso de autos, atendiendo a que el
Decreto Legislativo cuya inaplicación se denuncia, ha sido invocada
por la Sala de mérito en el considerando décimo de la sentencia
recurrida. DÉCIMO: Que, en relación al agravio contenido en el
literal e), se aprecia que no se precisa la norma de derecho material
inaplicada, como tampoco las sentencias del Tribunal Constitucional
supuestamente inobservadas, siendo que las Casaciones números:
4723-2012- Lambayeque y 01532-2010 - Cusco no resultan de
observancia obligatoria, al no constituir precedentes vinculantes.
Asimismo, corresponde agregar, que el recurso de casación no
expresa fundamento alguno dirigido a cuestionar la ratio decidendi
de la sentencia de vista, respecto a que en un proceso de amparo
previo, se declaró la existencia de un contrato a plazo indeterminado
entre las partes, ordenando la reposición del demandante en virtud
a la condición de trabajador indeterminado. Por lo tanto, al no
haberse satisfecho los requisitos de fondo que prescribe el artículo
58 de la Ley N° 26636, modificado por el artículo 1 de la Ley N°
27021, MI VOTO es porque se declare: IMPROCEDENTE el
recurso de casación interpuesto por el demandado Ministerio de
Agricultura, de fecha catorce de octubre de dos mil trece, obrante a
fojas trescientos setenta y nueve, complementado a fojas
trescientos noventa y tres, contra la sentencia de vista de fecha
veintiocho de setiembre de dos mil trece, obrante a fojas trescientos
sesenta y seis; se ORDENE la publicación de la presente resolución
en el Diario Oficial “El Peruano” conforme a Ley; en los seguidos
por don José Luis Ochoa Cuya contra el Ministerio de Agricultura y
otros, sobre Reconocimiento de vínculo laboral y otros; y se
devuelva. S.S. WALDE JÁUREGUI
1
2
CASACIÓN N° 405-2010, LIMA-NORTE, del quince de marzo de dos mil once,
considerando octavo. En esta oportunidad la Sala de Derecho Constitucional y
Social Permanente declaró infundado el recurso de casación interpuesto por la
Asociación de Propietarios de la Urbanización Sol de Lima; en los seguidos
contra la Municipalidad Distrital de San Martín de Porres y otro; sobre proceso
contencioso administrativo. (negrita y subrayado nuestro).
Artículo 40.- Al declarar fundada la demanda de nulidad de despido, el juez
ordenará el pago de las remuneraciones dejadas de percibir desde la fecha en que
se produjo, con deducción de los períodos de inactividad procesal no imputables a
las partes.
C-1335410-48
CAS. Nº 16109-2013 LIMA
Lima, trece de agosto de dos mil catorce. LA SALA DE DERECHO
CONSTITUCIONAL Y SOCIAL PERMANENTE DE LA CORTE
SUPREMA DE JUSTICIA DE LA REPÚBLICA: VISTA la causa; en
audiencia pública llevada a cabo en el día de la fecha, con los
Señores Jueces Supremos Sivina Hurtado, Acevedo Mena, Vinatea
Medina, Rueda Fernández y Malca Guaylupo; y, luego de producida
la votación conforme a ley, se ha emitido la siguiente sentencia: I.
MATERIA DEL RECURSO: Se trata del recurso de casación
interpuesto por la Empresa de Electricidad del Perú Sociedad
Anónima – ELECTROPERÚ S.A. de fecha cuatro de setiembre del
dos mil trece, obrante a fojas setecientos ochenta y cinco, contra la
sentencia de vista de fecha veintisiete de junio del dos mil trece, de
fojas setecientos cincuenta y tres, que confirma la sentencia
74069
apelada de fecha ocho de noviembre del dos mil once obrante a
fojas seiscientos veintiséis, que declara fundada la demanda; en
los seguidos por el Sindicato Unico de Trabajadores de Electricidad
del Sector Eléctrico Nacional – SUTESEN con la Empresa de
Electricidad del Perú Sociedad Anónima – ELECTROPERU S.A.
sobre Pago de utilidades. II. CAUSALES DEL RECURSO DE
CASACION: El recurrente denuncia en el recurso de su propósito
las siguientes causales: a) la inaplicación del Decreto de Urgencia
N° 014-98; b) la inaplicación del Decreto Supremo N° 043-98-EF; y
c) la contravención de las normas que garantizan el derecho a un
debido proceso. III. CONSIDERANDO: Primero: El recurso de
casación reúne los requisitos que para su admisibilidad, contempla
el artículo 57 de la Ley Nº26636, Ley Procesal del Trabajo,
modificado por el artículo 1 de la Ley Nº 27021. Segundo:
Independientemente de las denuncias invocadas, si bien es cierto
que la actuación de esta Suprema Sala al conocer del recurso de
90’casación se ve limitada a la misión y postulado que le asigna el
artículo 54 de la Ley Nº 26636, modificado por el artículo 1 de la
Ley Nº 27021, esto es, la correcta aplicación e interpretación de las
normas materiales –en este caso– del derecho laboral, también lo
es, que dicha premisa tiene como única y obligada excepción la
tutela de los derechos procesales con valor constitucional, pues es
evidente que allí donde el ejercicio de la función jurisdiccional los
vulnera o amenaza, se justifica la posibilidad de ejercer el recurso
de casación como instrumento de su defensa y corrección aunque
limitado sólo a la vulneración de los derechos de tal naturaleza,
quedando por tanto descartado que dentro de dicha noción se
encuentren las anomalías o simples irregularidades procesales
que no son por sí mismas contrarias a la Constitución Política del
Estado. Tercero: En este contexto, teniendo en cuenta que en el
presente recurso se denuncia la contravención de las normas
que garantizan el derecho a un debido proceso, la cual si bien
no constituye causal de casación en materia laboral conforme al
texto vigente de la Ley Procesal del Trabajo N° 26636; cierto es
que, por encontrarnos frente a una irregularidad que transgrede
principios y derechos del debido proceso, queda obligada esta Sala
Suprema a declarar procedente la casación por dicha causal, en
aplicación de lo dispuesto en los incisos 3 y 5 del artículo 139 de la
Constitución Política del Perú, obviándose las causales casatorias
restantes, al observarse la existencia de vicios que vulneran el
derecho de los justiciables de obtener de parte de los órganos
jurisdiccionales una resolución debidamente motivada y que se
respalde en los actuados (fundamentos fácticos, jurídicos y
probatorios). Cuarto: El derecho fundamental a un debido proceso,
consagrado en el inciso 3 del artículo 139 de la Constitución
Política del Estado, implica el respeto del conjunto de garantías
que protegen a los ciudadanos sometidos a cualquier cuestión
litigiosa, con el fin de asegurarles una cumplida y recta
administración de justicia, en orden a procurarles seguridad jurídica
y que las decisiones se pronuncien conforme a derecho. En virtud
a ello, existe contravención de las normas que garantizan el
derecho a un debido proceso cuando, en el desarrollo del mismo,
el órgano jurisdiccional no ha respetado los derechos procesales
de las partes; se han obviado o alterado actos de procedimiento; la
tutela jurisdiccional no ha sido efectiva y/o el órgano jurisdiccional
deja de motivar sus resoluciones, en clara transgresión de la
normatividad vigente y de los principios procesales. Quinto: En
relación al derecho a la tutela jurisdiccional efectiva, exige que,
cuando una persona requiera la protección de su derecho o de sus
intereses legítimos, aquello sea atendido por los órganos
jurisdiccionales mediante un proceso adecuado donde se respeten
las garantías mínimas de los litigantes, esto es, de ambas partes
en el proceso. “(…) Ello es así, toda vez que no sólo se busca la
defensa de los intereses de la parte accionante sino también los del
sujeto requerido, estando sus derechos también abarcados en la
tutela jurisdiccional efectiva. Tal derecho se trata, por tanto, de un
derecho continente, esto es que abarca una serie de otros derechos
expresamente señalados o implícitamente deducidos de aquel. En
la doctrina, se ha señalado que este derecho abarca principalmente
tres etapas: El acceso a los órganos jurisdiccionales, el
cumplimiento de las normas y derechos que regula el debido
proceso, y el de la ejecución de la resolución obtenida.”1. Sexto:
Sobre el derecho a la motivación de las resoluciones judiciales, el
cual forma parte del contenido esencial del derecho al debido
proceso, garantiza que la decisión expresada en el fallo o resolución
sea consecuencia de una deducción razonada de los hechos del
caso, las pruebas aportadas y su valoración jurídica, en tal virtud
esta garantía se respeta siempre que exista fundamentación
jurídica, congruencia entre lo pedido y lo resuelto y, por sí misma la
resolución judicial exprese una suficiente justificación de la decisión
adoptada. En efecto, la exigencia de motivación en las decisiones
judiciales prevista en el inciso 5) del artículo 139 de la Constitución
Política, garantiza que los jueces, cualquiera sea la instancia a la
que pertenezca, expresen la argumentación jurídica que los ha
llevado a decidir una controversia, asegurando que el ejercicio de
la potestad de administrar justicia se haga con sujeción a la
Constitución y a la ley; pero también con la finalidad de facilitar un
adecuado ejercicio del derecho de defensa de los justiciables. En
suma, garantiza que el razonamiento empleado guarde relación y
sea suficiente y proporcionado con los hechos que el juez
corresponde resolver. Sétimo: La observancia irrestricta de este
derecho en el desarrollo del proceso no sólo es impuesta en la
actuación de los órganos de primera instancia, sino que se proyecta
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CASACIÓN
en toda su secuela, lo cual obviamente involucra la intervención de
la instancia revisora como así lo reconoce el artículo 12 del Texto
Único Ordenado de la Ley Orgánica del Poder Judicial, modificado
por el artículo único de la Ley Nº 28490, que desarrollando la
garantía de motivación de las resoluciones judiciales determina
expresamente que todas las resoluciones, con exclusión de las de
mero trámite, son motivadas, bajo responsabilidad, con expresión
de los fundamentos en que se sustentan. Esta disposición alcanza
a los órganos jurisdiccionales de segunda instancia que absuelven
el grado, en cuyo caso, la reproducción de los fundamentos de la
resolución recurrida, no constituye motivación suficiente. Octavo:
En el presente el caso, mediante escrito de fecha veintiocho de
agosto del dos mil seis, el Sindicato de Trabajadores de Electricidad
del Sector Eléctrico Nacional - SUTESEN, demanda el pago de un
millón ochocientos ochenta y dos mil nuevos soles (S/.1´882,000.00)
por concepto de utilidades del ejercicio económico de mil
novecientos noventa y siete a sus setenta y dos afiliados. Señala
como argumento de su demanda que al cierre del ejercicio
económico de mil novecientos noventa y siete, conforme a la
Declaración Jurada presentada ante la Superintendencia Nacional
de Aduanas y Administración Tributaria - SUNAT, la demandada
obtuvo una utilidad de S/.296´565,324.00 (doscientos noventa y
seis millones quinientos sesenta y cinco mil trescientos veinticuatro
nuevos soles); posteriormente, modifica dicha declaración
consignando el monto de US$ 70´000,000.00 (setenta millones de
dólares americanos) por gastos financieros a favor del Estado, con
lo cual redujo el monto de la participación de utilidades de los
trabajadores a solo S/.6´000,000.00 (seis millones de nuevos
soles) y, si bien en forma posterior obtuvo la devolución del pago en
exceso por concepto de Impuesto a la Renta correspondiente al
año mil novecientos noventa y siete, por un monto S/.57´970,051.00
(cincuenta y siete millones novecientos setenta mil cincuenta y uno
nuevos soles), se puede verificar que se redujo el monto de la
participación de los trabajadores. Precisan que la demandada
justifica su accionar en el Decreto de Urgencia N°014-98 de fecha
quince de abril de mil novecientos noventa y ocho, que modificó el
Decreto Supremo N°065-87-EF de fecha treinta de marzo de mil
novecientos noventa y siete, que estableció la obligación de
reembolsar al Estado, los intereses que pagó por las obligaciones
que asumió de acuerdo a ese Decreto; y, que de conformidad con
el Decreto Supremo N°043-98-EF del treinta de mayo de mil
novecientos noventa y ocho, que en vía de regularización, ordena
efectuar los ajustes contables correspondientes y afectar los
resultados del ejercicio económico mil novecientos noventa y siete,
se paga al Estado la suma de US$ 70´000,000.00 dólares
americanos dentro de los treinta días de vigencia de la Resolución
Ministerial N°127-98-EF/75 del doce de junio de mil novecientos
noventa y ocho, lo que obligó a la empresa a efectuar dos
rectificaciones a la Declaración Jurada inicial, y de esta manera
afectar gravemente el derecho de los trabajadores a la participación
en las utilidades. Noveno: Sobre el particular, se aprecia que en la
sentencia de vista, se sostiene que el Decreto de Urgencia N°01498 publicado el quince de abril de mil novecientos noventa y ocho,
que modifica el artículo 2 del Decreto Supremo N° 065-87-EF, en
modo alguno, faculta a la empresa demandada a modificar el
trámite de la Declaración Jurada del Impuesto a la Renta del
ejercicio económico de mil novecientos noventa y siete, el cual
fuera presentado en marzo de mil novecientos noventa y ocho,
pues, conforme lo prevé el artículo 118 numeral 19 de la
Constitución Política del Estado, el Poder Ejecutivo puede dictar
medidas en materias económicas y financieras, más no tributarias.
En ese sentido, teniendo en cuenta lo señalado por el artículo 4 del
Decreto Legislativo N°892, al haberse cerrado el estado financiero
el treinta y uno de diciembre de mil novecientos noventa y siete con
una utilidad ascendente a S/.296´565,324.00 ( doscientos noventa
y seis millones quinientos sesenta y cinco mil trescientos
veinticuatro nuevos soles), que origina a su vez el pago de
S/.88´969,597.00 ( ochenta y ocho millones novecientos sesenta y
nueve mil quinientos noventa y siete nuevos soles) de impuesto a
la renta y una participación de utilidades de S/.15´608,701.00
(quince millones seiscientos ocho mil setecientos uno nuevos
soles), se puede concluir que la demandada ya había determinado
las ganancias y las pérdidas del indicado ejercicio; razón por la cual
las rectificaciones efectuadas en los meses de julio y setiembre de
mil novecientos noventa y nueve, sustentadas en el Decreto de
Urgencia N°014-98 y el Decreto Supremo N°043-98-EF no resultan
válidas, teniendo plena validez y eficacia la Declaración Jurada
primigenia del ejercicio económico de mil novecientos noventa y
siete, presentada en marzo de mil novecientos noventa y ocho,
como se sostiene en la sentencia recurrida. Décimo: En este
contexto, teniendo en consideración el marco constitucional antes
descrito, es pertinente precisar que, luego del estudio detenido y
meditado de los actuados, se puede observar que la sentencia de
vista no contiene una respuesta razonada, motivada y congruente
por cuanto se omite examinar que el Decreto Supremo N°043-98EF emitido el dos de junio de mil novecientos noventa y ocho,
contiene un mandato legal expreso, al establecer en su artículo 1,
que de acuerdo a lo dispuesto en el Decreto de Urgencia Nº014-98
la empresa ELECTROPERÚ S.A. , a partir de la fecha de entrada
en vigencia de la Resolución Suprema Nº 289-92-PCM, se
encontraba obligada a pagar al Estado intereses financieros por las
obligaciones asumidas en el programa de facilidades contenidas
en el Decreto Supremo Nº065-87-EF, los cuales debían ser
El Peruano
Lunes 1 de febrero de 2016
afectados a partir del ejercicio 1997 según las condiciones que se
establezcan por Resolución Ministerial de Economía y Finanzas”;
asimismo, en su artículo 2 lo autoriza para que en vía de
regularización y para todos los efectos realice desde el ejercicio mil
novecientos noventa y siete los ajustes contables correspondientes,
especificando que no es de aplicación en este caso las normas que
se le opongan. Undécimo: Asimismo, se verifica la existencia de
una motivación insuficiente2, por cuanto sostiene que el mandato
contenido en el Decreto de Urgencia N°014-98, que modifica el
artículo 2 del Decreto Supremo N°065-87-EF, se trata de una
medida de contenido tributario para la cual no se encuentra
facultada el Poder Ejecutivo, de conformidad con el artículo 118
numeral 19 de la Constitución Política del Estado; no obstante, que
dicho dispositivo legal refiere que la obligación contraída por la
demandada se tratan de rembolsos que debe efectuar a favor del
Estado por concepto de intereses financieros derivados de las
deudas de PETROPERÚ que asumió el Estado en el marco del
Decreto Supremo N° 065-87-EF. Duodécimo: En consecuencia,
debe declararse fundada la causal por contravención a las normas
que garantizan el derecho fundamental a un debido proceso o
proceso justo, careciendo de objeto examinar los argumentos de
fondo de las causales materiales denunciadas; por lo que, a fin de
garantizar los derechos contenidos en el artículo 139 incisos 3 y 5
de la Constitución Política del Perú, debe emitirse un nuevo
pronunciamiento de fondo a cargo de los Jueces de mérito,
garantizando que esa decisión sea consecuencia de una deducción
razonada de los hechos del caso, las pruebas aportadas y su
valoración jurídica, exigencias que como se desprende de los
defectos relevados adolece la sentencia de vista; por consiguiente,
en ejercicio de la facultad nulificante del juzgador prevista en el
artículo 176 del Código Procesal Civil, entendida como aquella
facultad de declarar la nulidad aun cuando no haya sido solicitada,
por considerar que el acto viciado altera sustancialmente los fines
abstracto y concreto del proceso laboral, este Colegiado Supremo
luego de verificar que al emitir la sentencia de vista se ha incurrido
en causal de nulidad absoluta, resulta inválida e ineficaz la
sentencia recurrida, correspondiendo al Colegiado Superior
renovar este acto procesal; por lo que carece de objeto pronunciarse
por las causales invocadas por la parte recurrente. IV. DECISIÓN:
Por estas consideraciones, declararon: FUNDADO el recurso de
casación interpuesto por la Empresa de Electricidad del Perú
Sociedad Anónima – ELECTROPERÚ S.A. de fecha cuatro de
setiembre del dos mil trece, obrante a fojas setecientos ochenta y
cinco; en consecuencia NULA la sentencia de vista de fecha
veintisiete de junio del dos mil trece, de fojas setecientos cincuenta
y tres; y DISPUSIERON que la Sala de mérito EMITA NUEVA
SENTENCIA con observancia de los parámetros y lineamientos
contenidos en la presente ejecutoria suprema; ORDENARON la
publicación de la presente resolución en el Diario Oficial “El
Peruano”; y los devolvieron; en los seguidos por el Sindicato Unico
de Trabajadores de Electricidad del Sector Eléctrico Nacional SUTESEN, sobre Pago de utilidades; Juez Supremo Ponente:
Vinatea Medina. S.S. SIVINA HURTADO, ACEVEDO MENA,
VINATEA MEDINA, RUEDA FERNANDEZ, MALCA GUAYLUPO
1
2
CASACIÓN N° 405-2010, LIMA-NORTE, del quince de marzo de dos mil once,
considerando octavo. En esta oportunidad la Sala de Derecho Constitucional y
Social Permanente declaró infundado el recurso de casación interpuesto por la
Asociación de Propietarios de la Urbanización Sol de Lima; en los seguidos
contra la Municipalidad Distrital de San Martín de Porres y otro; sobre proceso
contencioso administrativo. (negrita y subrayado nuestro).
“La motivación insuficiente, referida básicamente al mínimo de motivación exigible
atendiendo a las razones de hecho o de derecho indispensables para asumir
que la decisión está debidamente motivada. Si bien, como ha establecido este
Tribunal, no se trata de dar respuestas a cada una de las pretensiones planteadas,
la insuficiencia, vista aquí en términos generales, sólo resultará relevante
desde una perspectiva constitucional si es que la ausencia de argumentos o la
“insuficiencia” de fundamentos resulta manifiesta a la luz de lo que en sustancia se
está decidiendo.” (Fundamento Jurídico 34). Expediente N° 00037-2012- PA/TC,
de fecha veinticinco de enero de dos mil doce.
C-1335410-49
CAS. Nº 16259-2013 LIMA
Lima, quince de agosto de dos mil catorce. VISTOS; y
CONSIDERANDO: Primero: Que, viene a conocimiento de esta
Sala Suprema el recurso de casación interpuesto por el demandante
don José Luis Vásquez Guillen obrante a fojas ochocientos noventa
y nueve, contra la sentencia de vista de fecha uno de julio de dos
mil trece, obrante a fojas ochocientos ochenta y ocho, mediante la
cual la Segunda Sala Laboral de la Corte Superior de Justicia de
Lima, confirmado la sentencia apelada de fecha quince de abril de
dos mil once, que declara fundada en parte la demanda; recurso
que cumple con los requisitos de forma que para su admisibilidad
exige el artículo 57 de la Ley Nº 26636, Ley Procesal del Trabajo,
modificado por el artículo 1 de la Ley Nº 27021. Segundo: El
artículo 58 de la Ley N° 26636, modificado por el artículo 1 de la
Ley N° 27021, prescribe que el recurso de casación deberá estar
fundamentado con claridad, señalando con precisión las causales
descritas en el artículo 56 de la Ley N° 26636, modificado por el
artículo 1 de la Ley N° 27021 en que se sustenta, esto es: a) La
aplicación indebida de una norma de derecho material; b) La
interpretación errónea de una norma de derecho material; c) La
El Peruano
Lunes 1 de febrero de 2016
CASACIÓN
inaplicación de una norma de derecho material; y, d) La
contradicción con otras resoluciones expedidas por la Corte
Suprema de Justicia o las Cortes Superiores, pronunciadas en
casos objetivamente similares, siempre que dicha contradicción
esté referida a una de las causales anteriores; y, según el caso: i)
Qué norma ha sido indebidamente aplicada y cuál es la que debió
aplicarse; ii) Cuál es la correcta interpretación de la norma; iii) Cuál
es la norma inaplicada y porqué debió aplicarse; y, iv) Cuál es la
similitud existente entre los pronunciamientos invocados y en qué
consiste la contradicción. Tercero: El recurrente denuncia como
causales del recurso de su propósito: a) la aplicación indebida de la
Ley N° 11377 y los Decretos Supremos N° 027-93-TCC, N° 029-98MTC y 032-98-MTC; b) la interpretación errónea de los artículos 2
y 4 de la Ley N° 25129; c) la inaplicación del artículo 6 del Decreto
Supremo N° 003-97-TR; y d) la interpretación errónea del artículo 9
del Decreto Supremo N° 001-97-TR. Cuarto: Antes de entrar al
análisis de los requisitos de fondo resulta necesario precisar que, el
recurso de casación es un medio impugnatorio extraordinario de
carácter formal que sólo puede fundarse en cuestiones
eminentemente jurídicas y no en cuestiones fácticas o de
revaloración probatoria, es por ello que este medio impugnatorio,
en materia laboral, tiene como fines esenciales la correcta
aplicación e interpretación de las normas materiales en esta
materia y la uniformidad de la jurisprudencia nacional por la Corte
Suprema, conforme al artículo 54 de la Ley Procesal del Trabajo;
en ese sentido su fundamentación por parte del recurrente debe
ser clara, precisa y concreta indicando ordenadamente cuáles son
las causales denunciadas, las mismas que no pueden estar
orientadas a una revaloración de los elementos fácticos ni de los
medios probatorios dado que aquello desnaturalizaría el presente
recurso. Quinto: Así, en relación a la causal a) de aplicación
indebida de la Ley N° 11377 y los Decretos Supremos N° 02793-TCC, N° 029-98-MTC y 032-98-MTC; precisa que al haber
suscrito contratos de locación de servicios no hay razón para que
el órgano jurisdiccional lo califique dentro del régimen público, sino
que debe aplicarse las normas que pertenecen al régimen laboral
privado. En realidad, habiendo tenido sus contratos de locación los
elementos esenciales de un contrato de trabajo era aplicable el
artículo 4 del Decreto Supremo N° 003-97-TR. Sexto: La causal
así descrita, deviene en improcedente, por cuanto se advierte que
no existe una fundamentación clara y precisa de la denuncia que
formula, conforme lo exige el artículo 58 de la Ley Procesal del
Trabajo N° 26636, modificado por el artículo 1 de la Ley N° 27021.
Ello en virtud a que viene cuestionando el régimen laboral aplicable
a los periodos que van del diecinueve de abril de mil novecientos
noventa y seis al treinta de noviembre de mil novecientos noventa
y ocho y del veinticuatro de diciembre de mil novecientos noventa
y ocho al treinta y uno de diciembre de dos mil uno, pretendiendo
con ello que este Supremo Tribunal efectúe una nueva revisión de
los mismos; lo que no se condice con la finalidad del recurso de
casación el cual sólo puede fundarse en cuestiones eminentemente
jurídicas; tanto más, si en el presente caso las instancias de mérito
han señalado que su competencia se encuentra limitado al periodo
comprendido entre el uno al veintitrés de diciembre de mil
novecientos noventa y ocho y del uno de enero de dos mil dos al
cese (régimen privado), conforme se desprende de la sentencia de
vista de fecha uno de setiembre de dos mil nueve que confirmando
la resolución emitida en Audiencia Única, determina el régimen
aplicable a cada periodo señalado, el cual ha quedado consentido
por las partes. Sétimo: Respecto a la causal b) de interpretación
errónea de los artículos 2 y 4 de la Ley N° 25129; alega que al
haber suscrito contratos de locación de servicios se le recortó su
derecho a percibir la asignación familiar, ya que de haberse
aplicado correctamente las disposiciones laborales, por lógica
consecuencia se habría tomado en consideración que su prestación
de servicios era subordinada aplicándosele los alcances de este
dispositivo legal. Agrega además que el registro de hijos existe, por
lo que le corresponde el derecho por el periodo que reclama.
Octavo: Respecto a la causal c) de inaplicación del artículo 6 del
Decreto Supremo N° 003-97-TR; menciona que se encuentra
demostrado que prestó servicios del primero al quince de enero de
dos mil tres, por ello, en atención a que uno de los caracteres más
importante del contrato de trabajo es el sinalagmático, correspondía
ordenar la remuneración correspondiente. Noveno: En cuanto a la
causal d) de interpretación errónea del artículo 9 del Decreto
Supremo N° 001-97-TR; menciona que para efectuar el cálculo de
la compensación por tiempo de servicios se debió considerar su
última remuneración (S/.1,400.00 nuevos soles), jamás la
intermedia (S/.1,150.00 nuevos soles), ya que lo que está en
discusión es el pago por un periodo no abonado; ello en virtud a
que no puede practicarse una liquidación que lo afecte
económicamente. (sí se efectuó su liquidación con la remuneración
de S/.1,400.00 nuevos soles). Décimo: Como se advierte de las
causales descritas, lo pretendido por el recurrente, antes de
corregir algún determinado error de derecho, es variar la situación
fáctica establecida en las instancias de mérito, a través de una
revisión de los medios probatorios con la finalidad de determinar la
procedencia de los beneficios que señala; lo que no se condice con
la finalidad del recurso de casación el cual sólo puede fundarse en
cuestiones eminentemente jurídicas y no en cuestiones fácticas o
de revaloración probatoria; por lo que, este extremo del recurso
deviene en improcedente. Máxime si, las instancias de mérito
determinan, luego de la valoración conjunta y razonada de los
74071
medios probatorios, que no es posible estimar el otorgamiento de
estos extremos peticionados en la demanda. Las causales así
descritas, devienen en improcedentes, por cuanto se advierte que
no existe una fundamentación clara y precisa de la denuncia que
formula, conforme lo exige el artículo 58 de la Ley Procesal del
Trabajo N° 26636, modificado por el artículo 1 de la Ley N° 27021.
Ello en virtud a que viene denunciando el Decreto Legislativo N°
728 y la Ley 28237, que contienen la Ley de Productividad y
Competitividad Laboral (aprobado por Decreto Supremo N° 00397-TR) y el Código Procesal Constitucional, sin especificar
disposición alguna que considere pertinente al caso de autos, no
siendo posible sustentar ésta causal de manera genérica, sin
individualizar el artículo que considere de aplicación al caso, y
sustentar cómo ello modificaría el resultado del proceso, tal como
lo exige el literal b) del artículo 58 de la Ley N° 26636, razones por
las cuales éste extremo no puede ampararse. En consecuencia, el
recurso de casación no cumple con los requisitos de fondo
necesarios para su procedencia, por lo que, corresponde a este
Colegiado proceder con la facultad conferida por la parte in fine del
artículo 58 de la Ley Procesal del Trabajo, modificado por el artículo
1 de la Ley Nº 27021, declarando: IMPROCEDENTE el recurso de
casación interpuesto por el demandante don José Luis Vásquez
Guillen, obrante a fojas ochocientos noventa y nueve, contra la
sentencia de vista de fecha uno de julio de dos mil trece, de fojas
ochocientos ochenta y ocho; y ORDENARON publicar la presente
resolución en el Diario Oficial “El Peruano” conforme a ley; en los
seguidos por don José Luis Vásquez Guillen contra PROVIAS,
sobre Pago de Beneficios Sociales; y los devolvieron. Vocal
Ponente: Vinatea Medina. S.S. SIVINA HURTADO, ACEVEDO
MENA, VINATEA MEDINA, RUEDA FERNÁNDEZ, MALCA
GUAYLUPO C-1335410-50
CAS. Nº 16269-2013 LIMA
Lima, primero de julio de dos mil catorce. VISTOS; con el
acompañado y, CONSIDERANDO: Primero: El recurso de
casación interpuesto por la demandante Empresa de Transportes
Perú Bus Sociedad Anónima, de fecha quince de agosto de dos
mil trece, obrante a fojas doscientos diez, contra la sentencia de
vista de fecha ocho de julio de dos mil trece, obrante a fojas ciento
noventa y siete, expedida por la Primera Sala Permanente
Contenciosa Administrativa de la Corte Superior de Justicia de
Lima, que confirma la sentencia apelada de fecha once de julio de
dos mil doce, obrante a fojas ciento cuarenta y uno, que declaró
infundada la demanda, cumple con los requisitos de admisibilidad
previstos en el artículo 387 del Código Procesal Civil, modificado
por el artículo 1 de la Ley N° 29364, de aplicación supletoria,
concordante con el numeral 3.1) del inciso 3 del artículo 32 de la
Ley N° 27584. Segundo: Antes del análisis de los requisitos de
procedencia es necesario precisar que el recurso de casación es
un medio impugnatorio extraordinario de carácter formal que sólo
puede fundarse en cuestiones eminentemente jurídicas y no en
cuestiones fácticas o de revaloración probatoria, es por ello que
sus fines esenciales constituyen la adecuada aplicación del
derecho objetivo al caso concreto y la uniformidad de la
jurisprudencia nacional por la Corte Suprema; en ese sentido su
fundamentación por parte de la recurrente debe ser clara, precisa
y concreta indicando ordenadamente cuales son las denuncias
que configuran la infracción normativa que incida directamente
sobre la decisión contenida en la resolución impugnada, o las
precisiones respecto al apartamiento inmotivado del precedente
judicial. Tercero: Por otro lado, el artículo 386 del Código
Procesal Civil, modificado por el artículo 1 de la Ley N° 29364,
precisa como causales casatorias: a) La infracción normativa que
incida directamente sobre la decisión contenida en la resolución
impugnada; y, b) El apartamiento inmotivado del precedente
judicial. Cuarto: Por infracción normativa debemos entender la
causal a través de la cual el recurrente denuncia la existencia de
un error de naturaleza procesal o sustantiva que incide
directamente sobre el sentido de lo decidido. Los errores que
pueden ser alegados como infracción normativa pueden
comprender a los supuestos de aplicación indebida, interpretación
errónea o inaplicación de una norma, que como se ha señalado
pueden ser de carácter sustantivo o procesal. Quinto: La
recurrente ha denunciado como causales casatorias: i) la
infracción normativa del artículo 139 inciso 3 de la Constitución
Política del Estado que garantiza el derecho a un debido proceso;
ii) la infracción normativa del artículo I del Título Preliminar del
Código Procesal Civil, por vulneración del derecho fundamental a
la tutela jurisdiccional efectiva; iii) la infracción normativa del
artículo 30 de la Ley de Tributación Municipal, Decereto Legislativo
N° 776; iv) la aplicación indebida del inciso g) del artículo 37 de la
ley de Tributación Municipal, denuncias que se subsumen dentro
de la causal de infracción normativa. Sexto: Sobre las denuncias
de infracción normativa del artículo 139 inciso 3 de la
Constitución Política del Estado que garantiza el derecho a
un debido proceso, del artículo I del Título Preliminar del
Código Procesal Civil, por vulneración del derecho
fundamental a la tutela jurisdiccional efectiva, del artículo 30
de la Ley de Tributación Municipal, Decreto Legislativo N°
776, del inciso g) del artículo 37 de la Ley de Tributación
Municipal, sostiene la recurrente que en el presente caso la
resolución impugnada ha vulnerado sus derechos a un debido
proceso y a una tutela jurisdiccional efectiva, no solo
74072
CASACIÓN
distorsionando el trámite del proceso, sino que ha causado
indefensión al aplicar indebidamente el artículo 37 de la Ley de
Tributación Municipal, impidiéndole gozar de una afectación que
por ley le corresponde, obligándosele a pagar el tributo de
impuesto al patrimonio vehicular sin analizar de manera debida
los alcances de la norma correspondiente ( la Ley de Tributación
Municipal). En ese sentido ha precisado que los jueces de mérito
pretenden hincar el cómputo de los plazos desde la fecha de
fabricación del vehículo bajo el errado argumento de que
únicamente en ese momento el citado bien tenía la condición de
no usado, confundiéndose un bien no usado con uno recién
fabricado. Sétimo: En primer término, corresponde examinar las
causales que preceden, desde el marco jurídico de las garantías
de los derechos fundamentales a un debido proceso y tutela
jurisdiccional efectiva, por su contenido constitucional y procesal
denunciados, a fin de que en sede casatoria se ejercite
adecuadamente la finalidad esencial del recurso de casación, y
se resguarde la tutela de los derechos procesales con valor
constitucional, con la clara observancia de las normas sustantivas
y procesales que garantiza al justiciable el derecho de obtener de
los órganos jurisdiccionales una respuesta razonada y
fundamentada, respetando los principios de jerarquía de las
normas, el de congruencia procesal, la valoración de los medios
probatorios; constituyendo un deber del Juez emitir fallos de
acuerdo a lo establecido en el inciso 5 del artículo 139 de la
Constitución Política del Estado, en el inciso 4 del artículo 122,
así como el artículo 50 inciso 6 del Código Procesal Civil, en
resguardo de los derechos fundamentales citados en todas sus
acepciones. Octavo: En cuanto al derecho fundamental a un
debido proceso, no sólo es un principio de quienes ejercen la
función jurisdiccional y que está contemplado como tal en el
inciso 3 del artículo 139 de la Constitución Política del Estado,
sino que también es concebido como aquel derecho fundamental
que posee toda persona peruana o extranjera, natural o jurídica- y
que, en tal medida, es exigible por éstas (dimensión subjetiva); a
su vez, es un derecho que debe ser respetado por todos, debido
a que lleva implícito los fines sociales y colectivos de justicia
(dimensión objetiva)1. En ese sentido, existe contravención de las
normas que garantizan el derecho a un debido proceso cuando,
en el desarrollo del mismo, el órgano jurisdiccional no ha
respetado los derechos procesales de las partes; se han obviado
o alterado actos de procedimiento; la tutela jurisdiccional no ha
sido efectiva y/o el órgano jurisdiccional deja de motivar sus
resoluciones, en clara transgresión de la normatividad vigente y
de los principios procesales. Noveno: Sobre la motivación de las
sentencias, el Tribunal Constitucional2 ha establecido: “debe
tenerse presente que en todo Estado constitucional y democrático
de derecho, la motivación debida de las decisiones de las
entidades públicas -sean o no de carácter jurisdiccional- es un
derecho fundamental que forma parte del contenido esencial del
derecho a la tutela procesal efectiva. El derecho a la motivación
debida constituye una garantía fundamental en los supuestos en
que con la decisión emitida se afecta de manera negativa la
esfera o situación jurídica de las personas. Así, toda decisión que
carezca de una motivación adecuada, suficiente y congruente
constituirá una decisión arbitraria y, en consecuencia, será
inconstitucional”. Décimo: Al respecto, este Supremo Tribunal
verifica en sede casatoria que al expedirse la sentencia de vista
no se han vulnerado los derechos fundamentales a un debido
proceso y a un debido procedimiento invocados por la recurrente,
por cuanto no se han transgredido los derechos procesales –
constitucionales a la motivación de las sentencias y a la defensa,
menos los principios y normas denunciados por la impugnante.
Esta Sala Suprema aprecia, contrario a lo alegado por la
impugnante, que la Sala de mérito ha resuelto conforme a la
situación fáctica establecida en sede de instancia, los medios de
prueba que obran en autos, y un análisis detenido, razonado y
lógico de la controversia suscitada; en consecuencia, al no
advertirse por este Supremo Tribunal las denuncias contenidas
en las causales bajo análisis, sino más bien una sentencia de
mérito con motivación, conforme a lo prescrito en los artículos 139
numerales 3 y 5 de la Constitución Política del Estado, artículo 12
de la Ley Orgánica del Poder Judicial, 122 inciso 4 del Código
Procesal Civil, pronunciándose respecto de todas las alegaciones
efectuadas por las partes en el transcurso del proceso en los
escritos y medios impugnatorios de mérito, y la normatividad
pertinente al caso, este extremo del recuro deviene en
improcedente. Undécimo: En efecto, la motivación de las
resoluciones jurisdiccionales constituye un principio, y a la vez se
erige como un derecho procesal – constitucional que emana de la
función jurisdiccional, por lo tanto, la motivación de las sentencias
jurisdiccionales debe ser el resultado de un razonamiento lógico y
jurídico sobre la base de los hechos determinados en sede de
instancia, los medios de prueba aportados por las partes y la
aplicación del derecho objetivo, lo que se reitera ha sido
resguardado por la Sala Superior, es estricto resguardo de los
derechos fundamentales a un debido proceso y tutela
jurisdiccional efectiva. En consecuencia, al no cumplir el presente
recurso de casación con los requisitos de fondo a que se refiere el
artículo 388 del Código Procesal Civil, modificado por el artículo 1
de la Ley N° 29364, en ejercicio de la facultad conferida por el
artículo 392 del acotado Código, declararon: IMPROCEDENTE el
recurso de casación interpuesto la demandante Empresa de
El Peruano
Lunes 1 de febrero de 2016
Transportes Perú Bus Sociedad Anónima, de fecha quince de
agosto de dos mil trece, obrante a fojas doscientos seis, contra la
sentencia de vista de fecha ocho de julio de dos mil trece, obrante
a fojas ciento noventa y siete; y ORDENARON la publicación de
la presente resolución en el Diario Oficial “El Peruano” conforme
a ley: en los seguidos por Empresa de Transportes Perú Bus
Sociedad Anónima contra Tribunal Fiscal, sobre Acción
Contencioso Administrativa; y los devolvieron. Vocal Ponente:
Vinatea Medina. S.S. ACEVEDO MENA, VINATEA MEDINA,
RUEDA FERNÁNDEZ, DE LA ROSA BEDRIÑANA, MALCA
GUAYLUPO
1
2
Comisión Andina de Juristas. Luis Huerta con la colaboración de Enrique Aguilar,
“El debido proceso en las decisiones de la Corte Interamericana de Derechos
Humanos (análisis del artículo 8 de la Convención Americana sobre Derechos
Humanos), en www.cajpe.org.pe.
STC. N° 01807-2011-PA/TC, del veintisiete de junio de dos mil once, fundamento
10.
C-1335410-51
CAS. Nº 16486-2013 LIMA
Lima, tres de julio de dos mil catorce. VISTOS; y, CONSIDERANDO:
Primero: El recurso de casación interpuesto por el demandante
Servicio de Agua Potable y Alcantarillado de Lima Sociedad
Anónima - SEDAPAL, de fecha veintiocho de agosto de dos mil
trece, obrante a fojas doscientos treinta y cuatro, contra sentencia
de vista de fecha diecisiete de julio de dos mil doce, obrante a
fojas doscientos dieciséis, mediante la cual la Segunda Sala
Transitoria Contencioso Administrativa de la Corte Superior de
Justicia de Lima revoca la sentencia apelada de fecha veinte
de julio de dos mil once, que declara fundada la demanda y
reformándola la declara infundada en todos sus extremos; cumple
con los requisitos de admisibilidad previstos en el artículo 387
del Código Procesal Civil, modificado por el artículo 1 de la Ley
N° 29364, de aplicación supletoria, concordante con el numeral
3.1) del inciso 3 del artículo 32 de la Ley N° 27584. Segundo:
Antes del análisis de los requisitos de procedencia es necesario
precisar que el recurso de casación es un medio impugnatorio
extraordinario de carácter formal que sólo puede fundarse en
cuestiones eminentemente jurídicas y no en cuestiones fácticas
o de revaloración probatoria, es por ello que sus fines esenciales
constituyen la adecuada aplicación del derecho objetivo al caso
concreto y la uniformidad de la jurisprudencia nacional por la
Corte Suprema; en ese sentido su fundamentación por parte
de la recurrente debe ser clara, precisa y concreta indicando
ordenadamente cuales son las denuncias que configuran la
infracción normativa que incida directamente sobre la decisión
contenida en la resolución impugnada, o las precisiones respecto
al apartamiento inmotivado del precedente judicial. Tercero: Por
otro lado, el artículo 386 del Código Procesal Civil, modificado
por el artículo 1 de la Ley N° 29364, precisa como causales
casatorias: a) La infracción normativa que incida directamente
sobre la decisión contenida en la resolución impugnada; y, b)
El apartamiento inmotivado del precedente judicial. Cuarto: Por
infracción normativa debemos entender la causal a través de la
cual el recurrente denuncia la existencia de un error de naturaleza
procesal o sustantiva que incide directamente sobre el sentido de
lo decidido. Los errores que pueden ser alegados como infracción
normativa pueden comprender a los supuestos de aplicación
indebida, interpretación errónea o inaplicación de una norma,
que como se ha señalado pueden ser de carácter sustantivo o
procesal. Quinto: En cuanto a la causal de apartamiento de los
precedentes del Poder Judicial, este Supremo Tribunal precisa que
se funda en el principio constitucional del stare decisis, propio del
sistema norteamericano que implica una vinculación fuerte para
los Magistrados del Poder Judicial, respecto de las decisiones
adoptadas por la Corte Suprema. En el Perú, los órganos
jurisdiccionales se encuentran vinculados a los precedentes
expedidos por la Corte Suprema de la República y el Tribunal
Constitucional, en nuestro caso, el artículo 22 de la Ley Orgánica
del Poder Judicial prescribe: “Las Salas Especializadas de la
Corte Suprema de Justicia de la República ordenan la publicación
trimestral en el Diario Oficial "El Peruano" de las Ejecutorias que
fijan principios jurisprudenciales que han de ser de obligatorio
cumplimiento, en todas las instancias judiciales. Estos principios
deben ser invocados por los Magistrados de todas las instancias
judiciales, cualquiera que sea su especialidad, como precedente
de obligatorio cumplimiento. En caso que por excepción decidan
apartarse de dicho criterio, están obligados a motivar”. Sexto:
La impugnante ha denunciado como causales casatorias: i) la
infracción del principio de legalidad; ii) la contravención de los
artículos 3 incisos 4) y 5), 6 y 10 incisos 1) y 2) de la Ley N°
27444; y, iii) la vulneración de los artículos 3 y 49 de la Ley
General de Servicio de Saneamiento N° 26338, y su Reglamento;
denuncias que se subsumen dentro de la causal de infracción
normativa. Sétimo: Con relación a la denuncia de infracción
normativa del principio de legalidad, sostiene la recurrente que
la Administración Pública al justificar la infracción respecto a no
regularizar autorizaciones de obra y/o conformidad y/o finalización
de obra en la vía pública o de dominio público ha contravenido
las normas que garantizan el derecho a un debido proceso. Y
sobre las denuncias de infracción normativa de los artículos
El Peruano
Lunes 1 de febrero de 2016
CASACIÓN
3 incisos 4) y 5) , 6 y 10 incisos 1) y 2) de la Ley N° 27444;
y de los artículos 3 y 49 de la Ley General de Servicio de
Saneamiento N° 26338, y su Reglamento, alega la impugnante
que la multa no se encuentra debidamente motivada, puesto que
en la misma no se fundamentan las razones de hecho y derecho
que motivaron la intervención municipal, o las instrucciones que
permitan localizar los referidos conceptos, no se indica tampoco
la fecha y la hora de detección de la infracción, contraviniéndose
lo señalado en la Ordenanza N° 153, respecto al procedimiento
en el caso de imposición de sanciones, correspondiendo declarar
la nulidad del acto administrativo cuestionado. Octavo: Las
denuncias casatorias que anteceden devienen en improcedentes,
por cuanto este Supremo Tribunal advierte que lo pretendido por
el recurrente es un nuevo pronunciamiento en sede casatoria de
lo resuelto en sede de instancia; lo que no se condice con los fines
del recurso extraordinario de casación, en tanto que esta sede no
es una tercera instancia, sino que más bien se orienta a velar por
el interés de la sociedad de allí que el objeto de la casación no
se oriente a enmendar el agravio de la sentencia, sino busca la
seguridad jurídica y la igualdad de los ciudadanos ante la ley, por
medio de la defensa del derecho objetivo y la unificación de los
criterios de la Corte Suprema. Máxime que, en sede de instancia,
la Sala de mérito ha determinado conforme a las pruebas que
obran en autos que la Resolución de Multa N° 003899-2005-DR/
MDLV contiene el sello de recepción por Sedapal, con fecha
doce de diciembre de dos mil cinco; en tal sentido, apreciando
el Colegiado de mérito del recurso de apelación de fojas siete,
formulado por la demandante SEDAPAL interpuesto contra
dicha resolución de multa, que figura con sello de recepción
de la Municipalidad de La Victoria de fecha diez de enero de
dos mil seis, por lo tanto, el medio impugnatorio formulado por
SEDAPAL en vía administrativa resultó extemporáneo, al haberse
interpuesto vencido el plazo de quince días hábiles prescritos
en el inciso 207.2 del artículo 207 de la Ley N° 27444. En
consecuencia, al no cumplir el presente recurso de casación con
los requisitos de fondo a que se refiere el artículo 388 del Código
Procesal Civil, modificado por el artículo 1 de la Ley N° 29364,
declararon IMPROCEDENTE el recurso de casación interpuesto
por el Servicio de Agua Potable y Alcantarillado de Lima Sociedad
Anónima - SEDAPAL, de fecha veintiocho de agosto de dos mil
trece, obrante a fojas doscientos treinta y cuatro, contra sentencia
de vista de fecha diecisiete de julio de dos mil doce, obrante a
fojas doscientos dieciséis; DISPUSIERON publicar la presente
resolución en el Diario Oficial “El Peruano” conforme a ley; en
los seguidos por el Servicio de Agua Potable y Alcantarillado de
Lima Sociedad Anónima – SEDAPAL contra la Municipalidad
Distrital de La Victoria, sobre Acción Contencioso Administrativa;
y los devolvieron. Vocal Ponente: Vinatea Medina. S.S. VINATEA
MEDINA, MORALES GONZÁLEZ, RUEDA FERNÁNDEZ, DE LA
ROSA BEDRIÑANA, MALCA GUAYLUPO C-1335410-52
CAS. Nº 16680-2013 LIMA
Lima, tres de julio de dos mil catorce. VISTOS; Con el acompañado;
y, CONSIDERANDO: Primero: Viene a conocimiento de esta Sala
Suprema el recurso de casación obrante a fojas ciento sesenta
y ocho, interpuesto por la Procuradora Pública Municipal de la
Municipalidad Distrital de Miraflores con fecha dieciséis de octubre
de dos mil trece contra la sentencia de vista de fecha trece de
setiembre de dos mil trece, de fojas ciento cuarenta y siete, para
lo cual este Supremo Tribunal ha de verificar si cumple con los
requisitos de admisibilidad previstos en el artículo 387 del Código
Procesal Civil, modificado por el artículo 1 de la Ley N° 29364, de
aplicación supletoria, y el artículo 32 inciso 3 de la Ley N° 27584.
Segundo: El artículo 32 inciso 3 de la Ley N° 27584 prescribe
que procede el recurso de casación: a) Contra las sentencias
expedidas en revisión por las Cortes Superiores; y, b) Contra los
autos expedidos por las Cortes Superiores que, en revisión, ponen
fin al proceso; precisando asimismo, que el recurso procederá
siempre y cuando supere las unidades de referencia procesal allí
precisadas. Tercero: Mediante el presente proceso se pretende
que se declare la nulidad de la Resolución N° 1383-2008-GAC/
MM que declaró infundado el recurso de apelación interpuesto
contra de la Resolución de Sanción Administrativa N° 040502008-ACS/GFC/MM que multó a la actora con S/. 3,500.00 (Tres
Mil Quinientos con 00/100 Nuevos Soles), suma que no supera la
cuantía establecida en el artículo 32 inciso 3) de la Ley N° 27584,
por lo tanto, en aplicación del artículo 392 del Código Procesal
Civil, modificado por el artículo 1 de la Ley N° 29364, declararon
IMPROCEDENTE el recurso de casación obrante a fojas ciento
sesenta y ocho, interpuesto por la Procuradora Pública Municipal
de la Municipalidad Distrital de Miraflores con fecha dieciséis de
octubre de dos mil trece; contra la sentencia de vista de fecha trece
de setiembre de dos mil trece, de fojas ciento cuarenta y siete;
ORDENARON la publicación de la presente resolución en el diario
oficial “El Peruano” conforme a ley; en los seguidos por Luz del
Sur Sociedad Anónima Abierta contra la Municipalidad Distrital
de Miraflores, sobre impugnación de resolución administrativa; y
los devolvieron. Vocal Ponente: Vinatea Medina. S.S. ACEVEDO
MENA, VINATEA MEDINA, RUEDA FERNANDEZ, DE LA ROSA
BEDRIÑANA, MALCA GUAYLUPO C-1335410-53
CAS. Nº 17329 - 2013 DEL SANTA
Lima, diez de julio de dos mil catorce. VISTOS, Con los
74073
acompañados; y, CONSIDERANDO: Primero.- Que, viene a
conocimiento de esta Suprema Sala, el recurso de casación
interpuesto por Miguel Leyva Corcino, de fecha cuatro de octubre
de dos mil trece, obrante de fojas mil doscientos noventa, contra
la sentencia de vista su fecha veintiocho de agosto de dos mil
trece, obrante a fojas mil doscientos cuarenta y uno, corregida a
fojas mil doscientos sesenta y uno, que confirmando la sentencia
apelada, declara fundada la demanda de reivindicación; el cual
reúne los requisitos de forma para su admisibilidad, conforme a
lo previsto en el artículo 387 del Código Procesal Civil, modificado
por la Ley N° 29364; por lo que corresponde examinar si el
recurso reúne los requisitos de fondo. Segundo.- Que, el artículo
386 del Código Procesal Civil, modificado por la Ley N° 29364
señala que el recurso de casación se sustenta en: i) la infracción
normativa que incida directamente sobre la decisión contenida en
la resolución impugnada, o ii) en el apartamiento inmotivado del
precedente judicial. Tercero.- Que, los incisos 2 y 3 del artículo
388 del Código Procesal acotado, establecen que constituyen
requisitos de procedencia del recurso: que se describa con claridad
y precisión la infracción normativa o el apartamiento del precedente
judicial; y demostrar la incidencia directa de la infracción sobre la
decisión impugnada. Cuarto.- Que la parte recurrente, invocando
el artículo 386 del Código Procesal Civil, denuncia como agravio:
a) Infracción normativa de los artículos 194 y 200 del Código
Procesal Civil y el artículo 723 del Código Civil; y b) Infracción
del inciso 3 del artículo 139 de la Constitución Política.
Quinto.- En cuanto a la infracción normativa de los artículos
194 y 200 del Código Procesal Civil y el artículo 723 del Código
Civil; señala la parte recurrente, que el demandante solicita en
su petitorio la reivindicación del terreno rústico constituido en la
Parcela N° 10811 del Sector Liza Baja ubicada en el Distrito de
Yautan Provincia de Casma, de seis hectáreas, ofreciendo como
medios probatorios la copia literal de la Ficha N° 000001769 de
la Sección Especial de Predios Rurales del Registro de Propiedad
Inmueble de la Oficina Registral de Casma, sin embargo no ofrece
medio probatorio sobre la Parcela N° 10811, esto es pretende
amparar su derecho de propiedad con una ficha registral que
difiere de su pretensión, tratándose por lo tanto de dos predios
distintos. Sexto.- De la revisión de los argumentos expuestos
por el recurrente, esta Sala Suprema considera que deben ser
desestimados, por no cumplir con describir con claridad y precisión
la infracción normativa denunciada, así como tampoco demuestra
la incidencia directa de la infracción sobre la decisión impugnada,
conforme a lo establecido en el inciso 2° y 3° del artículo 388 del
Código Procesal Civil, modificado por la Ley N° 29364; el recurso
solo se limita a expresar afirmaciones de hecho por las cuales
considera que los documentos aportados por la parte demandante
no son suficientes para probar su titularidad sobre el predio
materia de reivindicación; pretendiendo con ello la revaloración
probatoria de los asuntos fácticos involucrados en el conflicto. En
consecuencia, al pretender una nueva revisión de los hechos, el
recurso de casación resulta igualmente inviable. Sétimo.- Que,
en cuanto a la infracción del inciso 3 del artículo 139 de la
Constitución Política, señala la parte recurrente que los medios
probatorios tienen por finalidad acreditar los hechos expuestos
por las partes, producir certeza en el juez respecto de los puntos
controvertidos y fundamentar sus decisiones, en ese sentido, alega
que es obligación del juez llegar a la convicción que la Parcela
Nº 10811 sea de propiedad del demandante. En ese sentido, este
Colegiado Supremo advierte que en el considerando noveno de
la sentencia impugnada, la Sala de merito ha concluido que de
las pruebas aportadas en el proceso, se acredita la propiedad del
demandante, señalando taxativamente que “a folios once obra
copia literal certificada del predio sub litis inscrito en la Partida
Registral N° 001769 del Registro de Propiedad Inmueble de la
Sección Especial de Predios Rurales, en el que aparece que el
demandante y su cónyuge han adquirido la propiedad del inmueble
rustico constituido por la Parcela N° 10811, del Predio “Liza Baja”
(…), acreditando la titularidad que ostentan el demandante con su
cónyuge respecto del bien materia de litis; y al encontrarse inscrito
en Registros Públicos resulta oponible a terceros”. Octavo.- Que,
este Supremo Colegiado considera que la denuncia alegada, así
propuesta no puede prosperar, habida cuenta que no cumplen con
las exigencias establecidas en los incisos 2 y 3 del artículo 388 del
Código Procesal Civil modificado por la Ley Nº 29364, en razón
a que se limita a señalar fundamentos fácticos, cuestionando el
criterio asumido por las instancias de mérito, en el sentido que se
encuentra plenamente acreditado la propiedad del demandante
sobre el predio materia de litis; por consiguiente, se tiene que,
lo que en el fondo pretende el recurrente es el reexamen de la
prueba y la modificación de los hechos establecidos, lo cual no
está permitido en sede casatoria, por consiguiente el presente
recurso deviene improcedente. Por las razones expuestas, al no
haberse satisfecho las exigencias de fondo a que hace referencia
el artículo 388 del Código Procesal Civil, en ejercicio de la facultad
conferida por el artículo 392 del acotado Código modificado por
la Ley Nº 29364 , declararon: IMPROCEDENTE el recurso de
casación interpuesto por Miguel Leyva Corcino, de fecha cuatro
de octubre de dos mil trece, obrante de fojas mil doscientos
noventa, contra la sentencia de vista su fecha veintiocho de agosto
de dos mil trece, obrante a fojas mil doscientos cuarenta y uno,
corregida a fojas mil doscientos sesenta y uno; en los seguidos
por Juan Manuel Mata Paredes contra Mauro Romero Quintana
74074
CASACIÓN
y otros, sobre reivindicación. DISPUSIERON la publicación de la
presente resolución en el Diario Oficial “El Peruano” conforme a
ley; y los devolvieron; Juez Ponente Vinatea Medina. S.S. SIVINA
HURTADO, WALDE JAUREGUI, ACEVEDO MENA, VINATEA
MEDINA, RUEDA FERNÁNDEZ C-1335410-54
CAS. Nº 18161-2013 AYACUCHO
Lima, veintiuno de julio de dos mil catorce. VISTOS; y
CONSIDERANDO: Primero.- El recurso de casación interpuesto
por el demandado don Leopoldo Froilán Gutiérrez Velarde, de
fecha quince de octubre de dos mil trece, obrante a fojas trescientos
ochenta y ocho, contra la sentencia de vista de fecha veintinueve
de agosto de dos mil trece, obrante a fojas trescientos setenta y
siete, mediante la cual la Sala Mixta Descentralizada Transitoria de
Puquio de la Corte Superior de Justicia de Ayacucho, confirma la
sentencia apelada de fecha veinticinco de enero de dos mil trece,
obrante a fojas doscientos setenta y seis, que declaró fundada la
demanda; cumple con los requisitos de admisibilidad, conforme a
lo previsto por el artículo 387 del Código Procesal Civil, modificado
por el artículo 1 de la Ley N° 29364. Segundo.- Antes del análisis de
los requisitos de procedencia es necesario precisar que el recurso
de casación es un medio impugnatorio extraordinario de carácter
formal que sólo puede fundarse en cuestiones eminentemente
jurídicas y no en cuestiones fácticas o de revaloración probatoria,
es por ello que sus fines esenciales constituyen la adecuada
aplicación del derecho objetivo al caso concreto y la uniformidad
de la jurisprudencia nacional por la Corte Suprema; en ese sentido,
su fundamentación por parte del recurrente debe ser clara, precisa
y concreta, indicando ordenadamente cuáles son las denuncias
que configuran la infracción normativa que incida directamente
sobre la decisión contenida en la resolución impugnada, o las
precisiones respecto al apartamiento inmotivado del precedente
judicial. Tercero.- En efecto, a través de la modificación efectuada
al artículo 388 del Código Procesal Civil por el artículo 1 de la Ley
N° 29364, publicada el veintiocho de mayo de dos mil nueve, se
ha regulado como causales del recurso de casación la infracción
normativa, y el apartamiento inmotivado del precedente judicial que
tengan incidencia directa sobre el sentido de la decisión impugnada.
Cuarto.- Por infracción normativa debemos entender la causal a
través de la cual el recurrente denuncia la existencia de un error
de naturaleza procesal o sustantiva que incide directamente sobre
el sentido de lo decidido. Los errores que pueden ser alegados
como infracción normativa pueden comprender a los supuestos de
aplicación indebida, interpretación errónea o inaplicación de una
norma, que como se ha señalado pueden ser de carácter sustantivo
o procesal. Quinto.- El recurrente ha denunciado como causales
casatorias: infracción normativa del inciso 3 y 5 del articulo 139
de la Constitución Política del Estado; artículo 468 del Código
Procesal Civil; artículo 971 del Código Civil; artículo 196 del Código
Procesal Civil. Sexto.- Que el recurrente desarrolla conjuntamente
las normas denunciadas, señalando que, en cuanto a la infracción
normativa del inciso 3 del articulo 139 de la Constitución Política
del Estado, el cuarto considerando de la sentencia impugnada
sostiene que la cuestión controvertida consiste en determinar si
el predio Ccaypiña es bien común de la herencia o si es bien de
propiedad exclusiva del demandado; siendo dicho pronunciamiento
impertinente y extrapetita, puesto que la pretensión demandada es
de nulidad de acto jurídico por causal de falta de manifestación
de voluntad, en tal sentido la controversia radica en determinar si
el acto jurídico de compraventa es nulo o no, y si concurren tanto
la voluntad declarada como la voluntad de declarar, de alguno de
los agentes que intervienen en el negocio jurídico. Asimismo, la
Sala Superior en el acápite 4.7 establece que el señor Saturnino
Gutiérrez Falconi era propietario entre otros del predio Ccaypiña, y
fundamentan su fallo en el denominado “Certificado de Posición”,
obrante de fojas cuarenta y dos, sin embargo, dicho documento no
fue admitido como medio probatorio, vulnerándose lo establecido
en el articulo 468 del Código Procesal Civil. Sétimo.- Así también
denuncia infracción normativa del inciso 5 del artículo 139 de
la Constitución Política del Estado, norma concordada con el
articulo 121 del Código Procesal Civil, alegando que el A quem
ha incumplido pronunciarse en forma precisa y motivada sobre la
única cuestión controvertida, es decir si procede o no la nulidad del
acto jurídico de compraventa por la causal de falta de manifestación
de voluntad. Denuncia la aplicación indebida del artículo 971 del
Código Civil, pues llega a establecer en base a suposiciones que
el inmueble sub litis pertenece a una copropiedad, no existiendo
prueba idónea que acredite tal hecho, vulnerándose así lo
dispuesto en el artículo 196 del Código Procesal Civil. Octavo.Al respecto, las causales anotadas devienen en improcedentes,
por cuanto este Supremo Tribunal advierte que lo realmente
cuestionado por el impugnante es la situación fáctica establecida
en sede de instancia, así como la valoración de los medios de
prueba efectuada por los Jueces de mérito, pretendiendo forzar
a esta Sala Suprema a emitir un nuevo pronunciamiento sobre el
fondo del asunto, lo que no se condice con los fines del recurso
extraordinario de casación, esto es, la interpretación del derecho
objetivo y la unificación de los criterios de la Corte Suprema.
Noveno.- Que, aunado a lo señalado precedentemente, es
necesario precisar que las denuncias efectuadas no cumplen con
los requisitos establecidos en los numerales 2 y 3 del artículo 388
del Código Procesal Civil, modificado por el artículo 1 de la Ley N°
29364, que señala que constituye requisito de fondo del recurso,
El Peruano
Lunes 1 de febrero de 2016
que se cumpla con describir con claridad y precisión la infracción
normativa o el apartamiento del precedente judicial, expresando
en cuál de las causales descritas en el artículo 386 de este Código
acotado se sustenta y, según el caso, debe precisarse cómo debe
ser la debida aplicación o cuál es la interpretación correcta de la
norma de derecho material; cuál debe ser la norma de derecho
material aplicable; o en qué ha consistido la afectación del derecho
al debido proceso o cuál ha sido la formalidad procesal incumplida;
así como el demostrar la incidencia directa de la infracción sobre
la decisión impugnada. Por las razones expuestas, al no haberse
satisfecho las exigencias de fondo a que hace referencia el artículo
388 del Código Procesal Civil, modificado por el artículo 1 de la
Ley N° 29364, en ejercicio de la facultad conferida por el artículo
392 del acotado Código, declararon: IMPROCEDENTE el recurso
de casación interpuesto por el demandado don Leopoldo Froilán
Gutiérrez Velarde, de fecha quince de octubre de dos mil trece,
obrante a fojas trescientos ochenta y ocho, contra la sentencia de
vista de fecha veintiocho de agosto de dos mil trece, obrante a
fojas trescientos setenta y siete; en los seguidos por don Guillermo
Gutiérrez de la Cruz y otra contra don Leopoldo Froilán Gutiérrez
Velarde y otra, sobre Nulidad de Acto Jurídico; DISPUSIERON la
publicación de la presente resolución en el Diario Oficial “El Peruano”
conforme a ley; y los devolvieron. Juez Supremo Ponente: Vinatea
Medina. S.S. SIVINA HURTADO, WALDE JÁUREGUI, ACEVEDO
MENA, VINATEA MEDINA, RUEDA FERNÁNDEZ C-1335410-55
CAS. Nº 3782 - 2012 LIMA
En el presente caso, se advierte que la instancia de mérito ha
resuelto conforme a ley, no incurriendo en la infracción normativa
de los incisos 3) y 5) del artículo 139° de la Constitución Política del
Estado, por lo que no se ha contravenido el derecho al debido
proceso, debida motivación, y tutela jurisdiccional efectiva. Lima,
diez de setiembre de dos mil quince. LA PRIMERA SALA DE
DERECHO CONSTITUCIONAL Y SOCIAL TRANSITORIA DE LA
CORTE SUPREMA DE JUSTICIA DE LA REPÚBLICA: VISTA:
Con el acompañado, en discordia la señora De La Rosa Bedriñana
se adhiere al voto de los señores Jueces Supremos Rodríguez
Mendoza, Chumpitaz Rivera y Mac Rae Thays, dejados y suscritos
con fecha veinticuatro de junio de dos mil catorce, conforme lo
señala el artículo 145° del Texto Único Ordenado de la Ley
Orgánica del Poder Judicial, en audiencia pública llevada a cabo en
la fecha; y, luego de verificada la votación con arreglo a ley, emite
la siguiente sentencia. MATERIA DEL RECURSO: Se trata del
recurso de casación interpuesto de fojas 333 a 337 por la entidad
demandada, Ministerio de Trabajo y Promoción del Empleo, contra
la sentencia de vista de fojas 327 a 330, de fecha 14 de marzo de
2012, que confirma la Resolución número seis de fecha 10 de julio
de 2009 a fojas 209 y 210, en el extremo que declara improcedente
la sustracción de la materia pretendida por la demandada,
confirmando también la sentencia de fecha 26 de marzo de 2010,
obrante de fojas 278 a 281 que declaró fundada la demanda en el
proceso contencioso administrativo seguido por don Alejandro
Pereyra Quispe, sobre Inclusión en Registro Nacional de
Trabajadores Cesados Irregularmente. CAUSAL DEL RECURSO:
Mediante resolución de fecha seis de mayo de dos mil trece, que
corre de fojas 19 a 22 del cuaderno de casación formado en esta
Suprema Sala, se ha declarado procedente en forma excepcional
el recurso interpuesto por la parte demandada, por la causal de
infracción normativa de los incisos 3) y 5) del artículo 139° de
la Constitución Política del Perú. CONSIDERANDO: Primero.El artículo 139° de la Constitución Política del Perú, establece que
son Principios de la Administración de Justicia y derechos de la
función jurisdiccional: “(…) 3. La observancia del debido proceso y
la tutela jurisdiccional. (…) 5. La motivación escrita de las
resoluciones judiciales en todas las instancias, excepto los decretos
de mero trámite, con mención expresa de la ley aplicable y de los
fundamentos de hecho en que se sustentan.” Segundo.- La
contravención de las normas que garantizan el derecho a un
debido proceso1 se configura cuando en el desarrollo del mismo, no
se han respetado los derechos procesales de las partes, se han
obviado o alterado actos de procedimiento, la tutela jurisdiccional
no ha sido efectiva y/o el órgano jurisdiccional deja de motivar sus
decisiones o lo hace en forma incoherente, en clara transgresión
de la normatividad vigente y de los principios procesales. Tercero.El derecho al debido proceso y a la tutela jurisdiccional efectiva,
reconocidos también como principio de la función jurisdiccional en
el inciso 3) de la Constitución Política del Perú, garantizan al
justiciable ante su pedido de tutela, el deber del órgano jurisdiccional
de observar el debido proceso y de impartir justicia dentro de los
estándares mínimos que su naturaleza impone; así mientras que la
tutela judicial efectiva supone tanto el derecho de acceso a los
órganos de justicia como la eficacia de lo decidido en la sentencia,
es decir, una concepción genérica que encierra todo lo concerniente
al derecho de acción frente al poder - deber de la jurisdicción, el
derecho al debido proceso en cambio significa la observancia de
los principios y reglas esenciales exigibles dentro del proceso,
entre ellas, el de motivación de las resoluciones judiciales recogido
expresamente dada su importancia en el inciso 5) del artículo 139°
de la Constitución Política del Perú2. Cuarto.- A fin de determinar,
si en el caso de autos se ha incurrido en la infracción de orden
procesal a que alude el auto calificatorio, resulta necesario precisar
que, según escrito de demanda de fojas ciento setenta y cinco a
ciento ochenta, la pretensión es: i) Se declare la nulidad de la
El Peruano
Lunes 1 de febrero de 2016
CASACIÓN
Resolución Suprema N° 021-2003-TR de fecha veintitrés de
diciembre de dos mil tres; y ii) Se disponga su reincorporación en
el listado de la resolución materia de impugnación. Quinto.- La
sentencia de vista de fojas 327 a 330, confirma la sentencia de
primera instancia, al considerar que: i) En el caso de autos, por
Resolución de Alcaldía N° 1106-96 de fecha 17 de octubre de 1996,
se resolvió cesar a un grupo de trabajadores de la Municipalidad
Provincial de Tacna por causal de excedencia; asimismo por
Resolución de Alcaldía N° 1332-96 de fecha 29 de noviembre de
1996 se resolvió cesar por causal de excedencia a otro grupo de
trabajadores de la Municipalidad Provincial de Tacna, siendo que
ambos listados se encontraba el demandante, sin embargo,
cuando se emite la relación de trabajadores cesados irregularmente
a través de la Resolución Suprema N° 021-2003-TR, se considera
a otros trabajadores que fueron cesados junto con el demandante
(N° 5353-Hugo Flores Huarcasi y N° 5354-Héctor Flores Pacco),
más no al demandante, lo cual denota evidentemente un trato
discriminatorio, al haber sido objeto de un trato diferente, sin
mediar razones objetivas y razonables que lo legitimen. ii) Se
advierte además, que la resolución administrativa cuestionada no
ha sido debidamente motivada, pues no indica cuales son las
razones de la no inclusión del demandante en el listado de ex
trabajadores cesados irregularmente, lo que vulnera el principio del
debido procedimiento administrativo. iii) De lo detallado, se infiere
que la administración transgredió el principio de igualdad ante la
ley previsto en el inciso 2) del artículo 2° de la Constitución del
Estado, incurriendo en nulidad, pues no ha explicitado porqué los
compañeros de trabajo del demandante, en idéntica situación que
este, si han sido registrados en el Registro Nacional de Trabajadores
Cesados Irregularmente. Sexto.- Considerando la materia de
controversia, es precisa señalar que el artículo 5° de la Ley N°
27803 establece que: “La Comisión Ejecutiva a cargo de aprobar el
Registro Nacional de extrabajadores Cesados Irregularmente,
tendrá por obligación analizar los documentos probatorios que
presenten los ex trabajadores que consideren que su voluntad fue
viciada, a fin de determinar si existió o no coacción en la
manifestación de voluntad de renunciar”. Séptimo.- Al respecto,
uno de los supuestos para ser beneficiario de la Ley N° 27803, es
el caso de aquellos extrabajadores que cesaron por renuncia
coaccionada, por lo que corresponde que estos acrediten ante la
Comisión Ejecutiva con los medios probatorios, los siguientes
supuestos: i) Que su voluntad fue viciada al momento de renunciar
a su centro de labores ya sea por coacción u otro vicio de la
voluntad, o ii) Que fue objeto de cese colectivo irregular, producido
como consecuencia del proceso de inversión privada de la
Empresa del Estado en la cual trabajaba, o iii) Que fue objeto de
cese colectivo, el cual se produjo incumpliendo los procedimientos
legales establecidos en el Decreto Legislativo N° 276,
contraviniendo los procedimientos de excedencia regulados en el
Decreto Ley N° 26093, o contrario a los procedimientos establecidos
en la norma de reorganización, o iv) Demostrar que existe un caso
similar al suyo que fue atendido favorablemente por la Comisión
Ejecutiva. Octavo.- En el presente caso, el Colegiado Superior
argumenta que a través de la Resolución de Alcaldía N° 1106-96 de
fecha 17 de octubre de 1996 (de fojas 09 a 13) y la Resolución de
Alcaldía N° 1332-96 de fecha 29 de noviembre de 1996 (a fojas
trece), varios extrabajadores de la Municipalidad Provincial de
Tacna que fueron cesados por causal de excedencia, entre los
cuales se encontraba el demandante, fueron incluidos en los
listados de extrabajadores cesados irregularmente a diferencia de
lo ocurrido en el caso del demandante, a pesar que existe identidad
o similitud entre el caso del demandante y de los extrabajadores
(Hugo Flores Huarcasi y Héctor Flores Pacco) que fueron acogidos
e inscritos en la Lista de Trabajadores Cesados Irregularmente,
hecho que se evidencia de los medios probatorios obrante en el
proceso, configurándose la analogía vinculante, que este Colegiado
Supremo ha precisado que para su aplicación debe presentarse
identidad o similitud respecto de un ex trabajador ya inscrito en el
registro entre, otros, en los siguientes aspectos: i) Entidad o
empresa de cese del extrabajador, ii) Fecha de cese, iii) Forma y/o
causa del cese, y iv) Resolución y/o documentos de cese del
trabajador. De lo cual se colige, que para la aplicación del citado
principio debe verificarse que exista identidad o similitud entre el
caso materia de calificación y aquél que ha sido acogido e inscrito
como cese irregular, debiendo ello evidenciarse de los medios de
prueba obrantes en el proceso, que no existe diferencia en cuanto
a los ceses, que justifiquen la exclusión del demandante. De lo
detallado, se infiere que en el presente caso se ha configurado la
analogía vinculante por cuanto el Colegiado Superior ha
determinado que el demandante ha sufrido un trato diferenciado, a
pesar de estar en idéntica situación que los extrabajadores Flores
Huarcasi y Flores Pacco que sí fueron incorporados en la lista de
trabajadores cesados irregularmente. Noveno.- En tal sentido,
este Colegiado advierte que la instancia de mérito ha resuelto
conforme a ley, no incurriendo en la infracción normativa de los
incisos 3) y 5) del artículo 139° de la Constitución Política del
Estado, por lo que no se ha contravenido el derecho al debido
proceso, debida motivación, y tutela jurisdiccional efectiva; razón
por la cual corresponde desestimar la infracción procesal
denunciada, y por ende el recurso de casación. DECISIÓN: Por
estas consideraciones, con lo expuesto con el dictamen emitido por
la señora Fiscal Suprema: Declararon INFUNDADO el recurso de
casación interpuesto de fojas 333 a 337 por el Ministerio de Trabajo
74075
y Promoción del Empleo; en consecuencia, NO CASARON la
sentencia de vista de fecha 14 de marzo de 2012, que corre de
fojas 327 a 330; DISPUSIERON la publicación de la presente
resolución en el Diario Oficial “El Peruano”, conforme a ley; en el
proceso contencioso administrativo seguido por don Alejandro
Pereyra Quispe, sobre Inclusión en el Registro Nacional de
Trabajadores Cesados Irregularmente; y, los devolvieron.
Interviniendo como Jueza Suprema ponente la señora Mac Rae
Thays. S.S. RODRÍGUEZ MENDOZA, CHUMPITAZ RIVERA, MAC
RAE THAYS, DE LA ROSA BEDRIÑANA. La señora Jueza
Suprema De La Rosa Bedriñana firma su dirimencia el diez de
setiembre de dos mil quince, y los señores Jueces Supremos
Rodríguez Mendoza, Chumpitaz Rivera y Mac Rae Thays firman
sus votos dejados y suscritos con fecha veinticuatro de junio de dos
mil catorce, y conforme a lo dispuesto por el artículo 149° del Texto
Único Ordenado de la Ley Orgánica del Poder Judicial, firma para
certificar el acto la doctora Rosamry Cerrón Bandini, Secretaria de
Sala (e). EL VOTO EN DISCORDIA DE LOS SEÑORES JUECES
SUPREMOS TORRES VEGA, CHAVES ZAPATER Y MALCA
GUAYLUPO, ES COMO SIGUE: CONSIDERANDO: Primero.Que, la contravención del debido proceso es aquel estado de
anormalidad procesal que se configura cuando se afecta: El
derecho de las partes a acceder al Órgano Jurisdiccional, a ejercer
su derecho de defensa, a utilizar los medios impugnatorios que
franquea la ley, a la pluralidad de instancias, a la obtención de una
resolución que resuelva la causa en tiempo oportuno, a la
motivación de sus resoluciones, entre otros; y, que normalmente es
sancionado con la nulidad procesal, salvo que el vicio no haya sido
convalidado o su subsanación no influya en el sentido de lo
resuelto. Segundo.- Que, el Derecho a la Tutela Jurisdiccional
Efectiva y el Debido Proceso, no sólo son principios, sino que
constituyen derechos fundamentales de toda persona, siendo
garantías constitucionales aplicables a todas las instancias; por lo
tanto, el debido proceso se caracteriza principalmente porque se
presenta en tres oportunidades: a) El acceso a la jurisdicción, b)
Debido proceso propiamente dicho, y c) Efectividad de las
sentencias, también llamado a este bloque, tutela jurisdiccional
efectiva. Tercero.- Que, además, el Principio del Debido Proceso
contiene el derecho a la motivación escrita de las resoluciones que
garantiza al justiciable el derecho de obtener de los órganos
judiciales una respuesta razonada, motivada y congruente con las
pretensiones oportunamente deducidas por las partes en cualquier
clase de procesos y con los puntos controvertidos señalados.
Teniendo además, la exigencia que las decisiones judiciales sean
motivadas en proporción a los términos del inciso 5) del artículo
139° de la Constitución Política del Estado, garantizando con ello,
que los Jueces, cualquiera sea la instancia a la que pertenezcan,
expresen el proceso lógico que los ha llevado a decidir la
controversia, asegurando que el ejercicio de la potestad de
Administrar Justicia se haga con sujeción a la Constitución y a la
ley pero también con la finalidad de facilitar un adecuado ejercicio
del derecho de defensa. Cuarto.- Que, la motivación o
fundamentación de las resoluciones judiciales se traduce en la
explicación detallada que debe realizar el Juez de los motivos que
han conllevado a la decisión final. En esta fundamentación debe
existir conexión lógica entre los hechos narrados por las partes
(demandante y en nuestro caso, entidad demandada), y las
pruebas aportadas por ellas; así como coherencia y consistencia
en sus razonamientos. Para que una motivación sea el fiel reflejo
de una aplicación racional del ordenamiento jurídico debe
necesariamente fundarse en derecho. Ello es, que la norma
seleccionada encuentre estricta correspondencia con el petitorio y
sus fundamentos, teniendo en cuenta que dicho dispositivo legal
debe ser válido, vigente, y en caso de no ser vigente, establecer y
fundamentar si corresponde su aplicación o no al caso concreto.
Quinto.- Que, el control de logicidad, es el examen que efectúa la
Corte de Casación o Tribunal Supremo para conocer si el
razonamiento que realizaron los jueces inferiores es formalmente
correcto y completo desde el punto de vista lógico, esto es, se
quiere verificar el cumplimiento de las reglas que rigen el pensar,
es decir, los errores in cogitando, estando a ello, existen: a) La falta
de motivación, y b) La defectuosa motivación, dentro de esta última
encontramos la motivación aparente, la insuficiente y la defectuosa
en sentido estricto. Sexto.- Que, la controversia en el presente
caso, gira en torno a determinar si corresponde amparar el pedido
de impugnación de la Resolución Suprema N° 021-2003-TR de
fecha 23 de diciembre de 2003, así como determinar si al actor,
extrabajador de la Municipalidad Provincial de Tacna, le
corresponde ser incorporado en el listado de trabajadores cesados
irregularmente que se impugna. Séptimo.- Que, la Ley N° 27803
publicada el veintinueve de julio de dos mil dos, tiene por objeto
implementar las recomendaciones derivadas de las Comisiones
creadas por las Leyes N° 27452 y N° 27586, encargadas de revisar
los ceses colectivos efectuados en las Empresas del Estado
sujetas a Procesos de Promoción de la Inversión Privada y en las
entidades del Sector Público y Gobiernos Locales. Octavo.- Que,
mediante el artículo 5° de la referida Ley N° 27803, se creó la
Comisión Ejecutiva, encargada de: 1. Analizar los documentos
probatorios que presenten los extrabajadores que consideran que
su voluntad fue viciada, a fin de determinar si existió o no coacción
en la manifestación de voluntad de renunciar. 2. Analizar los casos
de los ceses colectivos de trabajadores que, habiendo presentado
su solicitud de cese hasta el 23 de julio de 2001, no fueron tomados
74076
CASACIÓN
en cuenta por la entidad correspondiente. Noveno.- Que, de la
revisión de autos, se aprecia que la sentencia de vista que confirma
la apelada que declara fundada la demanda, fundamenta su
decisión en el hecho que el demandante fue cesado junto con un
grupo de trabajadores de la Municipalidad de Tacna, encontrándose
en las listas de cesados en las que ellos se encontraban; a pesar
de ello, señala el Colegiado Superior, que el demandante no fue
inscrito en la Resolución Suprema N° 021-2003-TR que si
consideró a otros trabajadores que fueron cesados con el
accionante, hecho que denota un trato discriminatorio, en razón a
que el demandante ha sufrido un trato diferente, sin mediar razones
objetivas y razonables para ello. Refiriendo además, que la
resolución administrativa sujeta a cuestionamiento no fue
debidamente motivada, por no indicar cuáles son las razones de la
no inclusión del demandante al listado de extrabajadores cesados
irregularmente, vulnerándose por ello el principio del debido
procedimiento administrativo con transgresión al principio de
igualdad ante la ley, prevista en el inciso 2) del artículo 2° de la
Constitución Política del Perú. Décimo.- Que, en mérito a lo
expuesto, se infiere que la Sala Superior no ha tomado en
consideración lo dispuesto en el artículo 5° de la Ley N° 27803, que
señala que la Comisión Ejecutiva es el único órgano administrativo
facultado para revisar los ceses colectivos, a fin de determinar si
existió o no coacción en la manifestación de voluntad de renunciar,
por lo que no corresponde al Poder Judicial la calificación de dichos
ceses; con lo cual se ha incurrido en un vicio de motivación
aparente, que a decir del Tribunal Constitucional, se presenta
cuando una resolución judicial si bien contiene las razones de
hecho y de derecho que justifican la decisión del juzgador, empero
estas no son pertinentes para tal efecto, sino que son simuladas,
inapropiadas o falsas en la medida que en realidad no son idóneas
para adoptar la decisión final, ya que la argumentación que
sustenta su decisión, no resulta ser la apropiada3. Undécimo.Sostener un razonamiento como el esbozado por el Ad quem en la
recurrida, conllevaría no sólo a asumir competencias que la ley no
prevé sino también a vulnerar uno de los principios más importantes
del Derecho Administrativo, como es el principio de legalidad,
previsto en el artículo IV, inciso 1), literal 1.1 del Título Preliminar de
la Ley N° 27444, por el cual se establece que todas las autoridades
administrativas que componen el Estado deben actuar con respeto
a la Constitución, la Ley y al Derecho, dentro de las facultades que
le estén atribuidas y de acuerdo con los fines para los que fueron
conferidas dichas facultades. En ese sentido, el órgano colegiado
superior al momento de merituar nuevamente la controversia
deberá tener en cuenta que la Administración tiene su fundamento
y el límite de su acción en la ley, ya que de lo contrario, se vulneraría
el Estado de Derecho. Duodécimo.- Por tanto, la sentencia de
mérito adolece de nulidad insalvable, que afecta fundamentalmente
el derecho a la motivación de las resoluciones judiciales reconocido
en el artículo 139° inciso 5) de la Constitución Política del Perú.
Décimo Tercero.- Que, cabe concluir que frente a la invalidez
insubsanable de la sentencia de vista, por los defectos anotados,
corresponde declarar la nulidad de la misma, y disponer que el Ad
quem, emita nuevo pronunciamiento teniendo en cuenta lo
señalado en los considerandos precedentes. DECISIÓN: Por estas
consideraciones, de conformidad con el dictamen de la señora
Fiscal Suprema: NUESTRO VOTO es porque se declare
FUNDADO el recurso de casación, interpuesto de fojas 333 a 337
por el Ministerio de Trabajo y Promoción del Empleo, en
consecuencia, NULA la sentencia de vista que corre de fojas 327 a
330, de fecha 14 de marzo de 2012; SE ORDENE que la Sala
Superior expida nueva sentencia teniendo en cuenta los
considerandos precedentes; en los seguidos por don Alejandro
Pereyra Quispe, sobre Inclusión en el Registro Nacional de
Trabajadores Cesados Irregularmente; y los devuelven. S.S.
TORRES VEGA, CHAVES ZAPATER, MALCA GUAYLUPO. El
señor Juez Supremo Malca Guaylupo firma su dirimencia el
veintiocho de mayo de dos mil quince, y los señores Jueces
Supremos Mac Rae Thays y Chaves Zapater firman su votos
dejados y suscritos con fecha diez de dos mil catorce; y conforme
a lo dispuesto por el artículo 149° del Texto Único Ordenado de la
Ley Orgánica del Poder Judicial, firma para certificar el acto la
doctora Rosamry Cerrón Bandini, Secretaria de Sala (e).
1
2
3
En este mismo sentido, respecto a la causal de contravención de las normas que
garantizan el derecho a un debido proceso, la Sala Civil Permanente de la Corte
Suprema en la Casación 989-2004 Lima Norte señala que: “se presenta cuando
en su desarrollo no se han respetado los derechos procesales de las partes, se
han obviado o alterado actos de procedimiento, la tutela jurisdiccional no ha sido
efectiva, cuando el órgano jurisdiccional deja de motivar sus decisiones o lo hace
en forma incoherente, o cuando se vulneran los principios procesales”.
EXP. N° 1313-2005-HC/TC.
Fundamento 26 de la sentencia de fecha ocho de noviembre de dos mil ocho,
recaída en el Expediente N° 01939-2011-PA/TC.
C-1335410-56
CAS. Nº 9357-2012 AYACUCHO
Fundado por infracción normativa del artículo 48° de la Ley N°
24029, modificado por el artículo 1° de la Ley N° 25212. Es criterio
de esta Sala Suprema que la Bonificación Especial Mensual por
Preparación de Clases y Evaluación se otorga a los docentes del
Magisterio Nacional sobre la remuneración total o íntegra y no
sobre la remuneración total permanente. Lima, treinta de abril de
El Peruano
Lunes 1 de febrero de 2016
dos mil quince. LA PRIMERA SALA DE DERECHO
CONSTITUCIONAL Y SOCIAL TRANSITORIA DE LA CORTE
SUPREMA DE JUSTICIA DE LA REPÚBLICA: VISTA: En
discordia, el señor Juez Supremo Malca Guaylupo, se adhiere al
voto de los señores Jueces Supremos Rodríguez Mendoza,
Chumpitaz Rivera y Torres Vega; dejados y suscritos con fecha
veintitrés de enero de dos mil catorce, conforme lo señala el
artículo 145° del Texto Único Ordenado de la Ley Orgánica del
Poder Judicial; en audiencia pública llevada a cabo en la fecha; y,
luego de verificada la votación con arreglo a Ley, se emite la
siguiente sentencia. MATERIA DEL RECURSO: Se trata del
recurso de casación interpuesto por la demandante Benjamina
Ayala Tenorio, de fecha veinticuatro de setiembre de dos mil
doce, de fojas 203 a 208, contra la sentencia de vista, de fecha
veintinueve de agosto de dos mil doce, de fojas 186 a 193, que
revoca la sentencia de primera instancia, de fecha dieciséis de
mayo de dos mil once, de fojas 59 a 68, que declara fundada la
demanda; y, reformándola la declararon infundada; en el Proceso
Contencioso Administrativo seguido contra la Dirección Regional
de Educación de Ayacucho y otro, sobre Bonificación Especial
Mensual por Preparación de Clases y Evaluación. CAUSALES
DEL RECURSO: Mediante resolución de fecha cinco de marzo de
dos mil trece, de fojas 33 a 36 del cuaderno de casación, esta
Sala Suprema declaró procedente el recurso de casación
interpuesto por la demandante, por las causales de: i) infracción
normativa de los incisos 3) y 5) del artículo 139° de la
Constitución Política del Perú, y ii) Infracción normativa del
artículo 48° de la Ley N° 24029, modificado por el artículo 1°
de la Ley N° 25212. CONSIDERANDO: Primero.- Que, el
recurso de casación tiene por fines la adecuada aplicación del
derecho objetivo al caso concreto y la uniformidad de la
jurisprudencia nacional por la Corte Suprema de Justicia,
conforme se señala en el texto del artículo 384° del Código
Procesal Civil, vigente a la fecha de la interposición del recurso.
Segundo.- Que, la infracción normativa puede ser
conceptualizada, como la afectación de las normas jurídicas en
las que incurre la Sala Superior al emitir una resolución, originando
con ello que la parte que se considere afectada por la misma
pueda interponer el respectivo recurso de casación. Respecto de
los alcances del concepto de infracción normativa, quedan
subsumidos en el mismo, las causales que anteriormente
contemplaba el Código Procesal Civil en su artículo 386°, relativas
a interpretación errónea, aplicación indebida e inaplicación de
una norma de derecho material, pero además incluyen otro tipo
de normas como son las de carácter adjetivo. Tercero.- Que,
habiéndose declarado procedentes las denuncias sustentadas en
vicios in procedendo como vicios in iudicando, corresponde
efectuar el análisis del error procesal, toda vez que de resultar
fundada la denuncia, dada su incidencia en la tramitación del
proceso y su efecto nulificante, carecería de sentido emitir
pronunciamiento respecto de los errores materiales. Cuarto.Que, emitiendo pronunciamiento de fondo corresponde señalar
que, el principio del debido proceso contiene el derecho a la
motivación escrita de las resoluciones que garantiza al justiciable
el derecho de obtener de los órganos judiciales una respuesta
razonada, motivada y congruente con las pretensiones
oportunamente deducidas por las partes en cualquier clase de
procesos. Quinto.- Que, en ese sentido, habrá motivación de las
resoluciones judiciales siempre que exista fundamentación
jurídica, congruencia entre lo pedido y lo resuelto y, por sí misma,
la resolución judicial exprese una suficiente justificación de la
decisión adoptada, aun si ésta es breve o concisa. Si bien en el
presente caso se ha declarado en forma excepcional la
procedencia del recurso de casación por la causal de infracción
normativa de los incisos 3) y 5) del artículo 139° de la Constitución
Política del Perú, se aprecia de autos que la Sala Superior ha
empleado en forma suficiente los fundamentos que le han servido
de base para estimar la demanda, argumentos que no resultan
contrarios a lo establecido por esta Sala Suprema y el Tribunal
Constitucional, y que no pueden analizarse a través de una
causal in procedendo, consideraciones por las cuales la causal de
infracción normativa de los incisos 3) y 5) del artículo 139° de la
Constitución Política del Perú resulta infundada. Sexto.Antecedentes.- Que, mediante escrito, de fecha veintinueve de
diciembre de dos mil nueve, y subsanada el trece de enero de dos
mil diez, Benjamina Ayala Tenorio, interpone demanda contra la
Dirección Regional de Educación de Ayacucho y otro, solicitando
se disponga el reconocimiento del pago del monto diferencial,
mediante crédito interno de devengados, de la bonificación
especial mensual por preparación de clases y evaluación
equivalente al 30% mensual de la pensión total que percibe como
profesora de aula cesante del Centro Educativo N° 38006 “09 de
diciembre” de Ayacucho, con el pago de intereses legales, costas
y costos procesales. Séptimo.- Fundamentos de la sentencia
de vista recurrida.- Que, la Sala Superior, mediante sentencia de
vista, de fecha veintinueve de agosto de dos mil doce, de fojas
186 a 193 que revoca la sentencia apelada que declara fundada
la demanda y reformándola la declararon infundada, tras
considerar que el artículo 10° del Decreto Supremo N° 051-91PCM ha precisado que para calcular la bonificación especial
mensual por preparación de clases y evaluación dispuesta en el
artículo 48° de la Ley del Profesorado – Ley N° 24029, se aplica
sobre la remuneración total permanente. Octavo.- Que, de la
El Peruano
Lunes 1 de febrero de 2016
CASACIÓN
forma de cálculo de la bonificación especial mensual por
preparación de clases y evaluación.- Que, corresponde
establecer la base de cálculo de la bonificación demandada,
puesto que la parte demandante viene solicitando que se le
otorgue la bonificación especial mensual por preparación de
clases y evaluación en base a la remuneración total o íntegra, de
conformidad con el artículo 48° de la Ley N° 24029 – Ley del
Profesorado, modificado por el artículo 1° de la Ley Nº 25212; en
tanto que la parte demandada alega que dicha bonificación debe
ser otorgada en base a la remuneración total permanente, de
conformidad con el artículo 10° del Decreto Supremo N° 051-91PCM. Noveno.- Que, al respecto, esta Corte Suprema, a través
de sus Salas Especializadas, ha tomado posición y criterio
uniforme en reiteradas ejecutorias supremas, señalando que la
bonificación especial mensual por preparación de clases y
evaluación se calcula en base a la remuneración total o
íntegra. Por lo tanto, es esta línea jurisprudencial (doctrina
jurisprudencial) la que este Supremo Tribunal ha adoptado para
efectos de evaluar los casos referidos a la bonificación especial
mensual por preparación de clases y evaluación, por lo que
resulta un criterio judicial válido de aplicación y observancia para
la resolución de demandas sobre la citada materia en cualquier
instancia y proceso judicial, pues ello conlleva a generar
estabilidad jurídica frente a la resolución de este tipo de casos,
además de cumplir con uno de los fines del recurso de casación
consagrado en el artículo 384° del Código Procesal Civil, que es
la uniformidad de la jurisprudencia nacional por la Corte Suprema
de Justicia. En ese sentido, es criterio de esta Suprema Corte que
la base de cálculo de la bonificación especial mensual por
preparación de clases y evaluación se deba efectuar teniendo en
cuenta la remuneración total o íntegra y no la remuneración total
permanente, posición que se reafirma en el presente caso.
Décimo.- Solución del caso concreto.- Que, de la
documentación acompañada por la recurrente, consistente en la
copia de la boleta de pago, a fojas 04, se advierte que la
demandante, en su condición de profesora de aula cesante, viene
percibiendo la bonificación especial mensual por preparación de
clases y evaluación bajo el rubro Bonesp calculada sobre la
remuneración total permanente. Undécimo.- Que, en
consecuencia, por aplicación del criterio previsto en el
Considerando Noveno de la presente resolución, resulta fundado
el recurso formulado por la causal de infracción normativa del
artículo 48° de la Ley N° 24029, modificado por el artículo 1° de la
Ley N° 25212; debiendo ampararse la pretensión reclamada
respecto al cálculo de la bonificación especial mensual por
preparación de clases y evaluación la que deberá calcularse en
base al 30% de la remuneración total o íntegra, desde la entrada
en vigencia de la Ley N° 25212, correspondiendo ser abonados
los respectivos devengados generados a partir de la vigencia de
la norma que reconoció el derecho, esto es, desde el veinte de
mayo de mil novecientos noventa. Duodécimo.- Que, respecto al
pago de intereses, constituyen una consecuencia del no pago
oportuno del íntegro de la bonificación demandada, por tanto
debe ordenarse su pago sobre las remuneraciones devengadas
conforme a lo previsto en los artículos 1242° y siguientes del
Código Civil desde la fecha en que la demandante tiene derecho
al pago de devengados. Décimo Tercero.- Que, finalmente,
conforme a lo dispuesto por el artículo 50° del Texto Único
Ordenado de la Ley N° 27584, aprobado por el Decreto Supremo
N° 013-2008-JUS, las partes del proceso contencioso
administrativo no podrán ser condenadas al pago de costos y
costas. DECISIÓN: Por estas consideraciones, y de conformidad
con el Dictamen emitido por el señor Fiscal Supremo en lo
Contencioso Administrativo; y, en aplicación del artículo 396° del
Código Procesal Civil, declararon: FUNDADO el recurso de
casación interpuesto por la demandante Benjamina Ayala Tenorio,
de fecha veinticuatro de setiembre de dos mil doce, de fojas 203
a 208; en consecuencia, CASARON la sentencia de vista, de
fecha veintinueve de agosto de dos mil doce, de fojas 186 a 193;
y, actuando en sede de instancia, CONFIRMARON la sentencia
de primera instancia, de fecha dieciséis de mayo de dos mil once,
de fojas 59 a 68, que declara fundada la demanda; ORDENARON
que la entidad demandada cumpla con lo previsto en el artículo
48° de la Ley N° 24029 en lo que respecta a la bonificación
especial mensual por preparación de clases y evaluación, y
abone a favor de la demandante la acotada bonificación
equivalente al 30% de su remuneración total, así como practique
la liquidación de los devengados respectivos desde que se
generó el derecho de la demandante a percibir tal bonificación,
más sus correspondientes intereses legales, con deducción de lo
percibido por este mismo concepto que se calculó sobre la
remuneración total permanente; con lo demás que contiene; sin
costas ni costos; DISPUSIERON la publicación del texto de la
presente sentencia en el Diario Oficial “El Peruano”, conforme a
Ley; en el Proceso Contencioso Administrativo seguido contra la
Dirección Regional de Educación de Ayacucho y otro, sobre
Bonificación Especial Mensual por Preparación de Clases y
Evaluación; interviniendo como ponente la señora Jueza Suprema
Chumpitaz Rivera; y, los devolvieron. S.S. RODRÍGUEZ
MENDOZA, CHUMPITAZ RIVERA, TORRES VEGA, MALCA
GUAYLUPO. El señor Juez Supremo Malca Guaylupo firma su
dirimencia el treinta de abril del presente año, los señores Jueces
Supremos Rodríguez Mendoza, Chumpitaz Rivera y Torres Vega
74077
firman su voto suscrito con fecha veintitrés de enero de dos mil
catorce, conforme lo señala el artículo 149° del Texto Único
Ordenado de la Ley Orgánica del Poder Judicial. Firma para
certificar el acto, la doctora Rosmary Cerrón Bandini, Secretaria
de Sala (e). LOS FUNDAMENTOS DEL VOTO EN DISCORDIA
DE LOS SEÑORES JUECES SUPREMOS MAC RAE THAYS Y
CHAVES ZAPATER SON LOS SIGUIENTES: CONSIDERANDO:
Primero.- Que, se trata del recurso de casación interpuesto por la
demandante Benjamina Ayala Tenorio, de fecha veinticuatro de
setiembre de dos mil doce, de fojas 203 a 208, contra la sentencia
de vista, de fecha veintinueve de agosto de dos mil doce, de fojas
186 a 193, que revoca la sentencia de primera instancia, de fecha
dieciséis de mayo de dos mil once, de fojas 59 a 68, que declara
fundada la demanda y reformándola la declararon improcedente
la demanda, en Proceso Contencioso Administrativo seguido
contra la Dirección Regional de Educación de Ayacucho y otro,
sobre Bonificación Especial Mensual por Preparación de Clases y
Evacuación. Segundo.- Que, mediante resolución de fecha cinco
de marzo de dos mil trece, de fojas 33 a 36 del cuaderno de
casación, este Tribunal Supremo ha declarado procedente el
recurso de casación interpuesto por Benjamina Ayala Tenorio por
las causales de: i) Infracción normativa de los incisos 3) y 5)
del artículo 139° de la Constitución Política del Perú, y ii)
Infracción normativa el artículo 48° de la Ley N° 24029,
modificado por el artículo 1° de la Ley N° 25212. Tercero.Que, el recurso de casación tiene por fines la adecuada aplicación
del derecho objetivo al caso concreto y la uniformidad de la
jurisprudencia nacional por la Corte Suprema de Justicia,
conforme se señala en el texto del artículo 384° del Código
Procesal Civil, vigente a la fecha de la interposición del recurso.
Cuarto.- Que, la infracción normativa puede ser conceptualizada,
como la afectación de las normas jurídicas en las que incurre la
Sala Superior al emitir una resolución, originando con ello que la
parte que se considere afectada por la misma pueda interponer el
respectivo recurso de casación. Respecto de los alcances del
concepto de infracción normativa, quedan subsumidos en el
mismo, las causales que anteriormente contemplaba el Código
Procesal Civil en su artículo 386°, relativas a interpretación
errónea, aplicación indebida e inaplicación de una norma de
derecho material, pero además incluyen otro tipo de normas
como son las de carácter adjetivo. Quinto.- Que, habiéndose
declarado procedentes las denuncias sustentadas en vicios in
procedendo como vicios in iudicando, corresponde efectuar en
primer término, el análisis del error procesal, toda vez que de
resultar fundada la denuncia, dada su incidencia en la tramitación
del proceso y su efecto nulificante, carecería de sentido emitir
pronunciamiento respecto de los posibles errores materiales.
Sexto.- Que, la infracción de las normas que garantizan el
derecho a un debido proceso1 se configura cuando en el desarrollo
del mismo, no se han respetado los derechos procesales de las
partes, se han obviado o alterado actos de procedimiento, la
tutela jurisdiccional no ha sido efectiva y/o el órgano jurisdiccional
deja de motivar sus decisiones o lo hace en forma incoherente, en
clara transgresión de la normatividad vigente y de los principios
procesales. Séptimo.- Que, el derecho al debido proceso y a la
tutela jurisdiccional efectiva reconocidos también como principio
de la función jurisdiccional en el inciso 3) del artículo 139° de la
Constitución Política del Perú que garantiza al justiciable, ante su
pedido de tutela, el deber del órgano jurisdiccional de observar el
debido proceso y de impartir justicia dentro de los estándares
mínimos que su naturaleza impone; así mientras que la tutela
judicial efectiva supone tanto el derecho de acceso a los órganos
de justicia como la eficacia de lo decidido en la sentencia, es
decir, una concepción genérica que encierra todo lo concerniente
al derecho de acción frente al poder - deber de la jurisdicción, el
derecho al debido proceso en cambio significa la observancia de
los principios y reglas esenciales exigibles dentro del proceso,
entre ellas, el de motivación de las resoluciones judiciales.
Octavo.- Que, se debe señalar que el principio procesal de la
motivación escrita de las resoluciones judiciales se halla
consagrado en el inciso 5) del artículo 139° de la Constitución
Política del Perú, el cual tiene como finalidad principal el de
permitir el acceso de los justiciables al razonamiento lógico
jurídico empleado por las instancias de mérito para justificar sus
decisiones jurisdiccionales y así puedan ejercer adecuadamente
su derecho de defensa, cuestionando de ser el caso, el contenido
y la decisión asumida. Esta motivación escrita de las resoluciones
judiciales constituye un deber para los magistrados, tal como lo
establecen los artículos 50° inciso 6), y 122° inciso 3) del Código
Procesal Civil; y dicho deber implica que los juzgadores señalen
en forma expresa la ley que aplican con el razonamiento jurídico
a la que ésta les ha llevado, así como los fundamentos fácticos
que sustentan su decisión, respetando los principios de jerarquía
de normas y de congruencia. Noveno.- Que, el petitorio de la
demanda incoada el veintinueve de diciembre de dos mil nueve, y
subsanada el trece de enero de dos mil diez, tiene por objeto que
el Órgano Jurisdiccional disponga el reconocimiento del pago del
monto diferencial, mediante crédito interno de devengados, la
bonificación especial mensual por preparación de clases y
evaluación equivalente al 30% mensual de la pensión total que
percibe como Profesora de Aula cesante del Centro Educativo N°
38006 “09 de Diciembre” de Ayacucho, de conformidad con lo
depuesto en el artículo 48° de la Ley N° 24029, modificado por el
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CASACIÓN
artículo 1ª de la Ley N° 25212, más el pago de intereses legales,
costos y costas del proceso. Décimo.- Que, el Colegiado de la
Sala Superior revoca la resolución apelada que declara fundada
la demanda, señalando como fundamento de su decisión que si
bien el artículo 48° de la Ley del Profesorado – Ley N° 24029,
modificado por el artículo 1° de la Ley N° 25212, señala que la
bonificación especial mensual por preparación de clases y
evaluación equivale al 30% de su remuneración total; también lo
es que, el artículo 10° del Decreto Supremo N° 051-91-PCM,
modifica lo dispuesto en el artículo 48° de la Ley N° 24029,
precisando de manera indubitable que el cálculo de la bonificación
especial mensual por preparación de clases y evaluación se hace
en base a la remuneración total permanente; por lo que la
bonificación especial mensual por preparación de clases y
evaluación, se debe abonar en base a la remuneración total
permanente. Undécimo.- Que, de la revisión de la sentencia
recurrida se aprecia que el Colegiado de la Sala Superior al
revocar la sentencia apelada, declara infundada, ha emitido
pronunciamiento sobre los extremos materia de apelación,
esgrimiendo los argumentos que sustentan su decisión de
desestimar la demanda, lo cual denota que se ha emitido una
resolución motivada, no configurándose la infracción de los
incisos 3) y 5) del artículo 139° de la Constitución Política del
Perú; debiéndose por tanto emitir pronunciamiento respecto a la
denuncia por infracción normativa de normas de carácter material.
Duodécimo.- Que, en relación a la causal casatoria de infracción
de normas de carácter material se debe tener en cuenta que la
demandante viene solicitando que se le otorgue la bonificación
especial mensual por preparación de clases y evaluación en base
a la remuneración total o íntegra, de conformidad con el artículo
48° de la Ley N° 24029 – Ley del Profesorado, modificado por el
artículo 1° de la Ley Nº 25212; en tanto que, la parte demandada
alega que dicha bonificación debe ser otorgada en base a la
remuneración total permanente, de conformidad con el artículo
10° del Decreto Supremo N° 051-91-PCM; por lo que corresponde
establecer cuál de estas normas corresponde aplicar para el
cálculo de la bonificación demandada. Décimo Tercero.- Que, al
respecto, debe precisarse que el Decreto Supremo N° 051-91PCM fue expedido al amparo de la atribución presidencial prevista
en el inciso 20) del artículo 211° de la Constitución Política del
Perú de 1979, que facultó al Ejecutivo dictar medidas
extraordinarias siempre que tengan como sustento normar
situaciones imprevisibles y urgentes cuyos efectos o riesgo
inminente se extiendan o constituyan un peligro para la economía
nacional o las finanzas públicas. A pesar que la mencionada
Constitución no le otorgó a estos Decretos Supremos fuerza de
ley, parte de la doctrina te atribuyó este efecto, pero en el
entendido de que se trataban de Decretos Supremos
Extraordinarios con vigencia temporal. Décimo Cuarto.- Que,
en efecto, de considerarse los citados Decretos Supremos como
Decreto de Urgencia por su naturaleza extraordinaria, estos
devienen en temporales; sin embargo, dicha exigencia no ha sido
observada respecto al Decreto Supremo N° 051-91-PCM,
publicado en el Diario Oficial “El Peruano” el seis de marzo de mi
novecientos noventa y uno, a pesar de que esta norma fue
expedida por la necesidad de “dictar las normas reglamentarias
transitorias orientadas a establecer los niveles remunerativos de
los trabajadores al servicio del Estado en el marco del Proceso de
Homologación, Carrera Pública y Sistema Único de
Remuneraciones y Bonificaciones”, según se desprende de su
parte considerativa y de su artículo 1°; por lo que se ha
desnaturalizado su carácter extraordinario y temporal, y con ello
su fuerza de ley, lo que implica que el citado Decreto Supremo N°
051-91-PCM es una norma reglamentaria y general que no puede
afectar los derechos reconocidos en la Ley N° 24029- Ley del
Profesorado, modificada por la Ley N° 25212. Décimo Quinto.Que, a mayor abundamiento, debe tenerse en cuenta, que el
Tribunal Constitucional, en la sentencia recaída en el Expediente
N° 00007-2009-AI/TC, sobre el control de constitucionalidad de
diferentes artículos del Decreto de Urgencia N° 026-2009,
estableció que los Decretos de Urgencia dictados bajo las
exigencias previstas en el inciso 19) del artículo 118° de la
Constitución Política del Perú de 1993, debían responder a
determinados criterios o exigencias de validez, como la
excepcionalidad, la necesidad, la transitoriedad, la generalidad y
la conexidad, concluyendo en su fundamento jurídico 11 que el
otorgamiento de beneficios previstos por ley, no pueden
modificarse a través de un decreto de urgencia, pues ello resulta
inconstitucional. Décimo Sexto.- Que, por lo tanto, teniendo en
cuenta que los decretos supremos dictados al amparo del inciso
20) del artículo 211° de la Constitución Política del Perú de 1979,
constituyen el antecedente de los decretos de urgencia dictados
al amparo del inciso 19) del artículo 118° de la Constitución
Política del Perú de 1993; entonces la conclusión arribada en la
mencionada sentencia del Tribunal Constitucional resulta
aplicable al caso de autos; por lo que el artículo 10° del Decreto
Supremo N° 051-91-PCM no puede modificar el beneficio
contenido en el artículo 48° de la Ley N° 24029, pues el citado
Decreto Supremo, al haberse extendido en el tiempo, no ha
cumplido el presupuesto habilitante de su carácter extraordinario
y temporal que le otorga fuerza de ley. Décimo Séptimo.- Que,
por lo tanto, en el caso de autos el Decreto Supremo N° 051-91PCM no tiene fuerza de ley, al haber incumplido el carácter
El Peruano
Lunes 1 de febrero de 2016
extraordinario y temporal que precisamente le otorgaban dicha
fuerza. Por lo que el artículo 10° del Decreto Supremo N° 051-91PCM no puede modificar válidamente el artículo 48° de la Ley del
Profesorado, al tratarse de una norma reglamentaria de inferior
jerarquía. Décimo Octavo.- Que, por lo demás, resulta aplicable
a este caso el principio de especialidad, según el cual una norma
especial prima sobre norma general, es decir, orienta a que en la
solución de un conflicto corresponde aplicar la norma que regula
de modo específico el supuesto de hecho generador del derecho
correspondiente. En el caso de autos, el Decreto Supremo N°
051-91-PCM es una norma de ámbito general, que está destinada
a regular los niveles remunerativos de todos los servidores del
Estado, mientras que la Ley del Profesorado N° 24029, modificado
por la Ley N° 25212, y reglamentada por el Decreto Supremo N°
019-90-ED, es una norma que regula de manera especial los
derechos y deberes de un sector determinado de la administración,
como son los profesores de la carrera pública; en este sentido, es
evidente que la bonificación especial mensual por preparación de
clases y evaluación materia de la demanda, al tratarse de un
bonificación que es exclusivamente percibida por los docentes, la
normatividad legal que resulta aplicable por razón de especialidad
es la Ley N° 24029 y su modificatoria la Ley Nº 25212, así como
su Reglamento aprobado por el Decreto Supremo N° 019-90-ED,
y no el Decreto Supremo N° 051-91-PCM. Décimo Noveno.Que, en similar sentido se ha pronunciado el Tribunal del Servicio
Civil en la Resolución N° 2836-2010-SERVIR-TSC-Primera Sala
recaída en el expediente N° 5643-2010-SERVIR/TSC de fecha 14
de Diciembre de 2010, al señalar lo siguiente “(...) esta Sala
considera que en atención al principio de especialidad, entendido
como ‘la preferencia aplicativa de la norma reguladora de una
especie de cierto género sobre la norma reguladora de tal género
en su totalidad’, debe preferirse la norma contenida en el artículo
48° de la Ley N° 24029; lo que determina que, para el cálculo de
la Bonificación Especial Mensual por Preparación de Clases y
Evaluación, se aplique la remuneración mensual total que el
docente perciba y no la remuneración total permanente a la que
hace referencia el artículo 9° del Decreto Supremo N° 051-91PCM”. Vigésimo.- Existencia de doctrina jurisprudencial
sobre el tema.- Que, la Sala de Derecho Constitucional y Social
de la Corte Suprema, en la sentencia dictada en la Casación N°
1567-2002-La Libertad, ha señalado que: “La Ley del Profesorado
N° 24029, ha sido expedida observando el proceso de formación
de la ley previsto en la Constitución Política del Estado, de allí que
entre ésta y el Decreto Supremo N° 051-91-PCM, exista una
diferencia de origen y vigencia, no obstante tener ambas normas
la misma naturaleza”, concluyendo que: “en aplicación del
principio de especialidad, resulta aplicable la Ley del Profesorado
y su Reglamento y no el referido Decreto Supremo”. Asimismo, la
Segunda Sala de Derecho Constitucional y Social Transitoria de
la Corte Suprema, por sentencia de fecha 01 de julio de 2009,
recaída en la Casación N° 435-2008-AREQUIPA, ha considerado
pertinente ponderar la aplicación del artículo 48° de la Ley N°
24029, sobre el del Decreto Supremo Nº 051-91-PCM, señalando
que: “(…) la norma que debe aplicarse al caso de autos es el
artículo 48° de la Ley N° 24029 y no el artículo 10° del Decreto
Supremo N° 051-91-PCM”. En ese mismo sentido, la Sala de
Derecho Constitucional y Social Transitoria de la Corte Suprema,
en la Casación N° 9887-2009-PUNO de fecha 15 de diciembre de
2011, ha señalado que: “La bonificación especial mensual por
preparación especial de clases y evaluación debe ser calculada
tomando como base la remuneración total, conforme lo dispone el
artículo 48° de la Ley N° 24029, Ley del Profesorado, modificado
por el artículo 1º de la Ley N° 25212, concordante con el artículo
210° del Decreto Supremo N° 019-90-ED (Reglamento de la Ley
del Profesorado), y no sobre la base de la remuneración total
permanente como lo señala el artículo 10° del Decreto Supremo
N° 051-91-PCM”. Asimismo, esta Sala Suprema, mediante la
sentencia de fecha 15 de diciembre de 2011, recaída en la
Casación N° 9890-2009-PUNO, ha establecido respecto a la
forma de cálculo de la bonificación especial mensual por
preparación de clases y evaluación que: “al tratarse de un
bonificación que es exclusivamente percibida por los servidores
comprendidos en la Ley del Profesorado, la normatividad legal
que le resulta aplicable por razón de especialidad es la Ley N°
24029 y su modificatoria la Ley N° 25212, así como su Reglamento
aprobado por el Decreto Supremo N° 019-90-ED, y no así el
Decreto Supremo Nº 051-91-PCM”. Finalmente, mediante las
Consultas recaídas en los Expedientes N° 2026-2010-PUNO y N°
2442-2010-PUNO de fecha 24 de setiembre de 2010, esta Sala
Suprema ha preferido aplicar la norma especial, esto es la Ley N°
24029, en lugar de la norma general, es decir, en lugar del
Decreto Supremo N° 051-91-PCM. Vigésimo Primero.- Que, en
consecuencia, se advierte que esta Corte Suprema, a través de
sus Salas Especializadas, ha tomado posición y criterio uniforme
en reiteradas ejecutorias supremas, señalando que la
bonificación especial mensual por preparación de clases y
evaluación se calcula en base a la remuneración total o
íntegra, de acuerdo a lo dispuesto en el artículo 48° de la Ley N°
24029, modificado por el artículo 1° de la Ley N° 25212
concordado a su vez con el artículo 210° del Decreto Supremo N°
019-90-ED (Reglamento de la Ley del Profesorado). Por lo tanto,
en virtud a lo dispuesto en el artículo 22° del Texto Único
Ordenado de la Ley Orgánica del Poder Judicial, aprobado por el
El Peruano
Lunes 1 de febrero de 2016
CASACIÓN
Decreto Supremo N° 017-93-JUS, este Supremo Tribunal ha
adoptado esta línea jurisprudencial (doctrina jurisprudencial) para
efectos de evaluar los casos referidos a la bonificación especial
mensual por preparación de clases y valuación; por lo que resulta
un criterio judicial válido de aplicación y observancia obligatoria
para la resolución de demandas sobre la citada materia en
cualquier instancia y proceso judicial, de acuerdo a lo establecido
por el artículo 34°2 de la Ley N° 27584 – Ley que regula el Proceso
Contencioso Administrativo, modificado por el Artículo Único del
Decreto Legislativo N° 1067, publicado el 28 de junio del 2008,
recogido también en el artículo 37°3 de su Texto Único Ordenado
aprobado por el Decreto Supremo N° 013-2008-JUS; pues ello
conlleva a generar estabilidad jurídica frente a la resolución de
este tipo de casos, además de cumplir con uno de los fines del
recurso de casación consagrado en el artículo 384° del Código
Procesal Civil, que es la uniformidad de la jurisprudencia nacional
por la Corte Suprema de Justicia. Vigésimo Segundo.- Que,
asimismo, debe observarse la sentencia dictada por la Sala de
Derecho Constitucional y Social Permanente de la Corte
Suprema, que al resolver la Acción Popular Nº 438-2007, y
declarar fundada la demanda sostuvo que “el carácter transitorio
de la norma reglamentaria contenida en el Decreto Supremo N°
051-91-PCM se ha desnaturalizado”, por lo que concluyó que la
Ley del Profesorado – Ley N° 24029 prevalece por tratarse de la
norma de mayor jerarquía; por lo que este criterio debe ser de
observancia obligatoria para todas las instancias judiciales, en
razón a los efectos erga omnes de la sentencia de acción popular,
similares a los efectos de una sentencia de inconstitucionalidad.
Vigésimo
Tercero.Que,
según
los
antecedentes
jurisprudenciales reseñados en los considerandos precedentes,
es criterio de esta Suprema Corte que la base de cálculo de la
bonificación especial mensual por preparación de clases y
evaluación y de la bonificación adicional por desempeño de
cargo, se deba efectuar teniendo en cuenta la remuneración total
o íntegra y no la remuneración total permanente. Igual tratamiento
deberá tener el cálculo de la bonificación adicional por desempeño
de cargo y por preparación de documentos de gestión, al emanar
dicho beneficio del mismo dispositivo legal que la bonificación
especial mensual por preparación de clases y evaluación.
Vigésimo Cuarto.- Que, del análisis de los actuados se
desprende que mediante Resolución Directoral Regional N°
02007 de fecha once de setiembre de dos mil tres, a fojas 02, se
resuelve cesar a la demandante a partir del primero de setiembre
de dos mil tres, en el cargo que venía desempeñando como
Profesora de Aula. Así mismo, de la boleta de pago, a fojas 04, se
advierte que la demandante, en su condición de docente cesante,
viene percibiendo la bonificación especial mensual por
preparación de clases y evaluación y desempeño de (Bonesp)
calculada sobre la remuneración total permanente. Vigésimo
Quinto.- Que, el artículo 48° de la Ley N° 24029, modificado por
el artículo 1° de la Ley N° 25212, establece que: “El profesor tiene
derecho a percibir una bonificación especial mensual por
preparación de clases y evaluación equivalente al 30% de su
remuneración total. El Personal Directivo y Jerárquico, así como
el Personal Docente de la Administración de Educación, así como
el Personal Docente de Educación Superior incluidos en la
presente ley, perciben, además, una bonificación adicional por el
desempeño del cargo y por la preparación de documentos de
gestión equivalente al 5% de su remuneración total. El profesor
que presta servicios en: zona de frontera, Selva, zona rural, altura
excepcional, zona de menor desarrollo relativo y emergencia
tiene derecho a percibir una bonificación por zona diferenciada
del 10% de su remuneración permanente por cada uno de los
conceptos señalados hasta un máximo de tres". Vigésimo
Sexto.- Que, conforme al texto del artículo 48° de la Ley N°
24029, Ley del Profesorado, se concluye que la percepción de la
bonificación especial mensual por preparación de clases y
evaluación, tiene como finalidad compensar el desempeño del
cargo atendiendo a las funciones especiales encargadas al
docente, puesto que la labor de éste no se limita al dictado de
clases, sino que ello implica prepararlas previamente o desarrollar
la temática que se requiera, labores efectivas que son propias
de un profesor en actividad. Criterio sostenido en los
antecedentes jurisprudenciales reseñados en los considerandos
anteriores y que se ratifica en el presente fallo. Vigésimo
Séptimo.- Que, por aplicación de dicho criterio señalado en los
considerandos precedentes, resulta fundado el recurso formulado
por la recurrente, amparándose en parte la pretensión reclamada
respecto al cálculo de la bonificación especial mensual por
preparación de clases y evaluación, la que deberá calcularse
sobre la base de la remuneración total o íntegra, desde el veinte
de mayo de mil novecientos noventa hasta el treinta y uno de
agosto de dos mil tres, fecha de cese de la accionante, por cuanto
tal bonificación no tiene naturaleza pensionable, pues sólo
corresponde a los docentes en actividad. Sin embargo, estando a
que la demandante viene percibiendo la acotada bonificación en
aplicación del Principio de Intangibilidad de las remuneraciones,
debe dejarse subsistente el pago que se le viene otorgando,
desde su fecha de cese hasta la actualidad pero sin el reajuste del
mismo. Vigésimo Octavo.- Que, en cuanto a las pretensiones
accesorias de pago de devengados e intereses legales, éstos
constituyen una consecuencia del no pago oportuno del íntegro
de la bonificación demandada, por tanto debe ordenarse su pago,
74079
teniendo en cuenta lo dispuesto en los artículos 1242° y siguientes
del Código Civil. Vigésimo Noveno.- Que, finalmente, conforme
a lo dispuesto por el artículo 50° del Texto Único Ordenado de la
Ley N° 27584, aprobado por el Decreto Supremo N° 013-2008JUS, las partes del proceso contencioso administrativo no podrán
ser condenadas al pago de costos y costas. DECISIÓN: Por estas
consideraciones, y de conformidad con el Dictamen emitido por el
señor Fiscal Supremo en lo Contencioso Administrativo; y en
aplicación del artículo 396° del Código Procesal Civil; NUESTRO
VOTO es porque se declare: FUNDADO el recurso de casación
interpuesto por la demandante Benjamina Ayala Tenorio, de fecha
veinticuatro de setiembre de dos mil doce, de fojas 203 a 208; en
consecuencia, SE CASE la sentencia de vista, de fecha
veintinueve de agosto de dos mil doce, de fojas 186 a 193; y,
actuando en sede de instancia, SE REVOQUE la sentencia
apelada, de fecha dieciséis de mayo de doce mil once, de fojas 59
a 68, que declara fundada la demanda y reformándola se declare
FUNDADA EN PARTE, en consecuencia SE ORDENE que el
Director General de la Dirección Regional de Educación de
Ayacucho, o quien haga sus veces, abone a favor de la
demandante la bonificación especial mensual por preparación de
clases y evaluación de documentos equivalente al 30% de la
remuneración total, desde el veinte de mayo de mil novecientos
noventa hasta el treinta y uno de agosto de dos mil tres, ordenando
que se practique la liquidación de los devengados desde que se
generó el derecho de la demandante a percibir tales bonificaciones,
más sus correspondientes intereses legales, con deducción de lo
percibido por estos mismos conceptos que se calcularon sobre la
remuneración total permanente, e INFUNDADA en el extremo
que solicita el recálculo de las acotadas bonificaciones en su
pensión, desde su fecha de cese, el uno de setiembre de dos mil
tres hasta la actualidad; sin costas ni costos; en el Proceso
Contencioso Administrativo seguido contra la Dirección Regional
de Educación de Ayacucho y otro, sobre Bonificación Especial
Mensual por Preparación de Clases y Evaluación; y, los
devolvieron. S.S. MAC RAE THAYS, CHAVES ZAPATER. Los
señores Jueces Supremos Mac Rae Thays y Chaves Zapater
firman sus votos dejados y suscritos con fecha veintitrés de enero
de dos mil catorce, conforme a lo dispuesto por el artículo 149°
del Texto Único Ordenado de la Ley Orgánica del Poder Judicial.
Firma para certificar el acto, la doctora Rosmary Cerrón Bandini,
Secretaria de Sala (e).
1
2
3
En este mismo sentido, respecto a la causal de contravención de las normas que
garantizan el derecho a un debido proceso, la Sala Civil Permanente de la Corte
Suprema en la Casación N° 989-2004 - Lima Norte señala que: “se presenta
cuando en su desarrollo no se han respetado los derechos procesales de las
partes, se han obviado o alterado actos de procedimiento, la tutela jurisdiccional no
ha sido efectiva, cuando el órgano jurisdiccional deja de motivar sus decisiones o
lo hace en forma incoherente, o cuando se vulneran los principios procesales”.
Artículo 34°.- Principios jurisprudenciales.
Cuando la Sala Constitucional y Social de la Corte Suprema fije en sus resoluciones
principios jurisprudenciales en materia contenciosa administrativa, constituyen
precedente vinculante.
Los órganos jurisdiccionales podrán apartarse de lo establecido en el precedente
vinculante, siempre que se presenten circunstancias particulares en el caso que
conocen y que motiven debidamente las razones por las cuales se apartan del
precedente.
El texto íntegro de todas las sentencias expedidas por la Sala Constitucional y
Social de la Corte Suprema de Justicia de la República se publicarán en el
Diario Oficial “El Peruano” y en la página web del Poder Judicial. La publicación
se hace dentro de los sesenta días de expedidas, bajo responsabilidad. De otro
lado, se incorpora la exigencia que el Juez debe ponderar la proporcionalidad
entre la eventual afectación que causaría al interés público o a terceros la medida
cautelar y el perjuicio que causa al recurrente la eficacia inmediata de la actuación
impugnable.
Artículo 37°.- Principios jurisprudenciales.
Cuando la Sala Constitucional y Social de la Corte Suprema fije en sus resoluciones
principios jurisprudenciales en materia contenciosa administrativa, constituyen
precedente vinculante.
Los órganos jurisdiccionales podrán apartarse de lo establecido en el precedente
vinculante, siempre que se presenten circunstancias particulares en el caso que
conocen y que motiven debidamente las razones por las cuales se apartan del
precedente.
El texto íntegro de todas las sentencias expedidas por la Sala Constitucional y
Social de la Corte Suprema de Justicia de la República se publicarán en el
Diario Oficial El Peruano y en la página web del Poder Judicial. La publicación
se hace dentro de los sesenta días de expedidas, bajo responsabilidad. De otro
lado, se incorpora la exigencia que el Juez debe ponderar la proporcionalidad
entre la eventual afectación que causaría al interés público o a terceros la medida
cautelar y el perjuicio que causa al recurrente la eficacia inmediata de la actuación
impugnable.
C-1335410-57
CAS. Nº 891-2013 AYACUCHO
Se verifica la lesión al contenido esencial de la garantía
constitucional del debido proceso legal y la tutela jurisdiccional
efectiva así como la motivación de las resoluciones toda vez que
la Sala Superior declara la sustracción de la materia sin tomar en
consideración que la sola expedición de la Ley N° 29059 no
implica que la pretensión de los recurrentes haya salido del
ámbito jurisdiccional, por cuanto la norma legal acotada no
74080
CASACIÓN
resuelve de manera definitiva la pretensión planteada pues ésta
no ha sido satisfecha por la entidad demandada, subsistiendo la
incertidumbre jurídica que dio lugar a la interposición de la
demanda. Lima, veinticinco de agosto de dos mil quince. LA
PRIMERA SALA DE DERECHO CONSTITUCIONAL Y SOCIAL
TRANSITORIA DE LA CORTE SUPREMA DE JUSTICIA DE LA
REPÚBLICA. VISTA: En discordia, la señora Jueza Suprema De
La Rosa Bedriñana, se adhiere al voto de los señores Jueces
Supremos Rodríguez Mendoza, Chumpitaz Rivera y Mac Rae
Thays; dejados y suscritos con fecha veintiséis de junio de dos mil
catorce, conforme lo señala el artículo 145° del Texto Único
Ordenado de la Ley Orgánica del Poder Judicial; en audiencia
pública llevada a cabo en la fecha; y, luego de verificada la
votación con arreglo a Ley, emite la siguiente sentencia. MATERIA
DEL RECURSO: Se trata del recurso de casación interpuesto por
Luis Zúñiga Paredes, y en representación de Misael Luis Vásquez
Díaz, de fecha nueve de noviembre de dos mil doce, de fojas 923
a 928, contra la sentencia de vista, de fecha cuatro de octubre de
dos mil doce, de fojas 902 a 907, que declara la sustracción de la
materia; en el Proceso Contencioso Administrativo seguido contra
el Ministerio de Trabajo y Promoción del Empleo, sobre Inscripción
en el Registro Nacional de Trabajadores Cesados Irregularmente.
CAUSAL DEL RECURSO: Mediante resolución de fecha
diecinueve de julio de dos mil trece, de fojas 25 a 27 del cuaderno
de casación, esta Sala Suprema declaró procedente el recurso de
casación por la causal de: Infracción normativa del artículo
139° incisos 3) y 5) de la Constitución Política del Perú.
CONSIDERANDO: Primero.- Que, el recurso de casación tiene
por fines la adecuada aplicación del derecho objetivo al caso
concreto y la uniformidad de la jurisprudencia nacional por la
Corte Suprema de Justicia de la República, conforme se señala
en el texto del artículo 384° del Código Procesal Civil, vigente a la
fecha de la interposición del recurso. Segundo.- Que, la infracción
normativa puede ser conceptualizada como la afectación de las
normas jurídicas en las que incurre la Sala Superior al emitir una
resolución, originando con ello que la parte que se considere
afectada por la misma pueda interponer el respectivo recurso de
casación. Respecto de los alcances del concepto de infracción
normativa, quedan subsumidos en el mismo, las causales que
anteriormente contemplaba el Código Procesal Civil en su artículo
386°, relativas a interpretación errónea, aplicación indebida e
inaplicación de una norma de derecho material, pero además
incluyen otro tipo de normas como son las de carácter adjetivo.
Tercero.- Que, siendo esto así, corresponde señalar que el
derecho al debido proceso y a la tutela jurisdiccional efectiva
reconocidos también como principios de la función jurisdiccional
en el inciso 3) del artículo 139° de la Constitución Política del
Perú, así como en el artículo I del Título Preliminar del Código
Procesal Civil, garantizan al justiciable, ante su pedido de tutela,
el deber del órgano jurisdiccional de observar el debido proceso y
de impartir justicia dentro de los estándares mínimos que su
naturaleza impone1; así mientras que la tutela judicial efectiva
supone tanto el derecho de acceso a los órganos de justicia como
la eficacia de lo decidido en la resolución, es decir, una concepción
genérica que encierra todo lo concerniente al derecho de acción
frente al poder – deber de la jurisdicción; el derecho al debido
proceso en cambio significa la observancia de los principios y
reglas esenciales exigibles dentro del proceso, entre ellas, el de
motivación de las resoluciones judiciales recogido expresamente
dada su importancia en el inciso 5) del artículo 139° de la
Constitución Política del Perú. Cuarto.- Que, el inciso 5) del
artículo 139° de la Constitución Política del Perú consigna que la
motivación escrita de las resoluciones judiciales en todas las
instancias se trasluce en la mención expresa que se debe realizar
de la ley aplicable y los fundamentos de hecho en que se sustenta,
es decir, que la motivación o fundamentación de las resoluciones
judiciales se traduce en la explicación detallada que debe realizar
el Juez de los motivos o razones que han conllevado a la decisión
final, la forma como llegó a formarse una convicción sobre los
puntos controvertidos. No es suficiente la simple cita de
dispositivos legales o jurisprudencia invocada, sino que tiene que
exponerse argumentos idóneos que permitan a las partes conocer
los motivos que le conllevaron al Juez a la conclusión arribada.
Quinto.- Que, el petitorio de la demanda, de fojas 49 a 59,
adecuada conforme al proceso contencioso administrativo, de
fojas 176 a 181, tiene por objeto que el Órgano Jurisdiccional
declare el derecho de los demandantes a ser evaluados y
calificados como trabajadores irregularmente cesados con arreglo
a la Ley N° 27803, tal como lo solicitaron en su oportunidad legal
a la Comisión Ejecutiva creada por la Ley N° 27803; que se
declare contrario a derecho el no incluirlos en el Registro Nacional
de Trabajadores Cesados Irregularmente, situación que no se
sustenta en resolución o acto administrativo de evaluación o
calificación; se declare inaplicable a los demandantes la
Resolución Suprema N° 021-2003-TR integrada por Resolución
Suprema N° 034-2004-TR en cuanto al extremo que declara
cerrado el Registro Nacional de Trabajadores Cesados
Irregularmente; y, se ordene su inscripción en el referido registro
creado por Ley N° 27803, teniendo por escogido el beneficio de la
reposición. Sexto.- Que, la sentencia de vista declara la
sustracción de la materia señalando que el supuesto que sustenta
el litigio en el caso de autos ha desaparecido, por cuanto la propia
autoridad competente, esto es, la Comisión Ejecutiva, en virtud
El Peruano
Lunes 1 de febrero de 2016
de la facultad conferida mediante el artículo primero de la Ley N°
29059, ha procedido a evaluar y calificar nuevamente las
peticiones de los demandantes, por lo que el petitorio de la
demanda deviene en insubsistente al haber dejado de ser
justiciable por disposición legal, como es la Ley N° 29059, norma
que faculta a la Comisión Ejecutiva proceder nuevamente a la
revisión complementaria y final de los casos de los trabajadores
cesados que fueron excluidos de la tercera lista aprobada por la
Resolución Suprema N° 034-2004-TR; por lo que en aplicación
supletoria de lo dispuesto por el inciso 2) del artículo 321° del
Código Procesal Civil, corresponde declarar la sustracción de la
materia. Séptimo.- Que, en ese sentido, se aprecia de fojas 799
a 800 de autos, las Cartas N° 29746-2009-MTPE/ST y N° 357662009-MTPE/ST, ambas de fecha tres de setiembre de dos mil
nueve, remitidas a los recurrentes Luis Zúñiga Paredes y Misael
Luis Vásquez Díaz, mediante las cuales se les pone de
conocimiento las razones por las cuales, luego de haber sido
evaluados sus casos en virtud de la Ley N° 29059, no han sido
considerados dentro de la relación de extrabajadores inscritos en
el Registro Nacional de Trabajadores Cesados Irregularmente;
caso contrario a lo ocurrido con los demandantes Carlos Tito del
Solar Salazar y Efraín Antonio Guzmán Vargas, quienes sí han
sido incluidos en la Lista de extrabajadores que deben ser
inscritos en el Registro Nacional de Trabajadores Cesados
Irregularmente aprobada por Resolución Suprema N° 028-2009TR, de fecha cuatro de agosto de dos mil nueve, tal como se
aprecia de fojas 613 a 614. Octavo.- Que, emitiendo
pronunciamiento de fondo entorno a la causal de naturaleza
procesal declarada procedente, debemos señalar que el artículo
231° inciso 1) del Código Procesal Civil establece lo siguiente:
“Concluye el proceso sin declaración sobre el fondo cuando: 1. Se
sustrae la pretensión del ámbito jurisdiccional (…)” (sic). En tal
virtud, se entiende por sustracción de la materia la desaparición
de supuestos, hechos o normas que sustentan una acción, lo cual
ocasiona que el juez no pueda pronunciarse porque se ha
extinguido la causa que originó acudir a la jurisdicción. Se
entiende además que la sustracción de la materia o sustracción
de la pretensión del ámbito jurisdiccional, a tenor de lo dispuesto
por el artículo 321° inciso 1) del Código Procesal Civil, puede
darse también cuando la pretensión ya ha sido satisfecha en su
totalidad, por lo que carece de objeto proseguir con el proceso,
contrario sensu de no satisfacerse extra proceso, en su integridad
la pretensión o pretensiones, no podría operar la sustracción de la
materia. Noveno.- Que, por lo tanto, esta Suprema Sala considera
que la mera expedición de la Ley N° 29059 que encarga a la
Comisión Ejecutiva creada por la Ley N° 27803, la revisión
complementaria y final de los casos de los extrabajadores no
incluidos en las listas publicadas, no implica que la pretensión de
los demandantes haya salido del ámbito jurisdiccional, por cuanto
la norma legal acotada no resuelve de manera definitiva la
pretensión de los actores, subsistiendo la incertidumbre jurídica
planteada en la demanda que debe ser resuelta a través de la
sentencia que eventualmente recaiga en el proceso. Asimismo,
se advierte que la tesis planteada por la Sala Superior limita el
derecho de acción de los actores consagrado en el artículo 3° del
Código Procesal Civil en el cual se establece que este no admite
limitación ni restricción para su ejercicio y ello por cuanto la Ley
N° 29059 es una norma de carácter optativa, pudiendo los
demandantes acogerse o no a los beneficios de la misma, por lo
que en ningún caso puede ser considerada como una norma
restrictiva del derecho de acción de los actores. Décimo.- Que,
en consecuencia, no habiéndose acreditado que la pretensión de
los recurrentes haya sido satisfecha por la entidad administrativa,
se concluye que esta no ha salido de la esfera jurisdiccional,
razón por la cual el proceso debe continuar y de ser el caso, ser
resuelto con declaración sobre el fondo. Undécimo.- Que, la Sala
de mérito al no haber tenido en cuenta las observaciones
descritas y haber omitido pronunciarse sobre el fondo del asunto
litigioso ha contravenido las reglas que garantizan el derecho a un
debido proceso y a la tutela jurisdiccional efectiva así como el de
motivación de las resoluciones, consagrados en los incisos 3) y 5)
del artículo 139° de la Constitución Política del Perú, en tanto que
para la validez y eficacia de las resoluciones se exige bajo
sanción de nulidad que estas contengan de manera congruente
los fundamentos de hecho que sustentan la decisión y los
respectivos de derecho con la cita de la norma o normas
aplicables en cada punto, según el mérito de lo actuado y lo
invocado por las partes; en consecuencia, frente a la invalidez
insubsanable de la resolución de vista, corresponde anular la
sentencia recurrida y, a la Sala de mérito, renovar dicho acto
procesal, de acuerdo a los alcances del numeral 1) del artículo
396° del Código Adjetivo. DECISIÓN: Por estas consideraciones
y, de conformidad con el Dictamen del señor Fiscal Supremo en lo
Contencioso Administrativo, declararon: FUNDADO el recurso de
casación interpuesto por Luis Zúñiga Paredes y en representación
de Misael Luis Vásquez Díaz, de fecha nueve de noviembre de
dos mil doce, de fojas 923 a 928; en consecuencia: declararon
NULA la sentencia de vista, de fecha cuatro de octubre de dos mil
doce, de fojas 902 a 907; ORDENARON que la Sala Superior
emita nuevo pronunciamiento con arreglo a Ley y conforme a los
fundamentos de la presente resolución; DISPUSIERON la
publicación de la presente resolución en el Diario Oficial “El
Peruano”, conforme a Ley; en el Proceso Contencioso
El Peruano
Lunes 1 de febrero de 2016
CASACIÓN
Administrativo seguido contra el Ministerio de Trabajo y Promoción
del Empleo, sobre Inscripción en el Registro Nacional de
Trabajadores Cesados Irregularmente; interviene como ponente
la señora Jueza Suprema Chumpitaz Rivera; y, los devolvieron.
S.S. RODRÍGUEZ MENDOZA, CHUMPITAZ RIVERA, MAC RAE
THAYS, DE LA ROSA BEDRIÑANA. La señora Jueza Suprema
De La Rosa Bedriñana firma su dirimencia el veinticinco de agosto
de dos mil quince, los señores Jueces Supremos Rodríguez
Mendoza, Chumpitaz Rivera y Mac Rae Thays firman su voto
suscrito con fecha veintiséis de junio de dos mil catorce, conforme
lo señala el artículo 149° del Texto Único Ordenado de la Ley
Orgánica del Poder Judicial. Firma para certificar el acto, la
doctora Rosmary Cerrón Bandini, Secretaria de Sala (e). LOS
FUNDAMENTOS DEL VOTO EN DISCORDIA DE LOS
SEÑORES JUECES SUPREMOS TORRES VEGA, CHAVES
ZAPATER y MALCA GUAYLUPO SON LOS SIGUIENTES:
MATERIA DEL RECURSO: Se trata del recurso de casación
interpuesto por Luis Zúñiga Paredes, y en representación de
Misael Luis Vásquez Díaz, de fecha nueve de noviembre de dos
mil doce, de fojas 923 a 928, contra la sentencia de vista, de
fecha cuatro de octubre de dos mil doce, de fojas 902 a 907, que
declara la sustracción de la materia; en el Proceso Contencioso
Administrativo seguido contra el Ministerio de Trabajo y Promoción
del Empleo, sobre Inscripción en el Registro Nacional de
Trabajadores Cesados Irregularmente. CAUSAL DEL RECURSO:
Mediante resolución de fecha diecinueve de julio de dos mil trece,
de fojas 25 a 27 del cuaderno de casación, esta Sala Suprema
declaró procedente el recurso de casación por la causal de:
Infracción normativa del artículo 139° incisos 3) y 5) de la
Constitución Política del Perú. CONSIDERANDO: Primero.Que, el recurso de casación tiene por fines la adecuada aplicación
del derecho objetivo al caso concreto y la uniformidad de la
jurisprudencia nacional por la Corte Suprema de Justicia de la
República, conforme se señala en el texto del artículo 384° del
Código Procesal Civil, vigente a la fecha de la interposición del
recurso. Segundo.- Que, se conceptualiza a la infracción
normativa como la afectación a las normas jurídicas en que
incurre la Sala Superior al emitir una resolución que pone fin al
proceso, dando apertura a que la parte que se considere afectada
pueda interponer el recurso de casación. Cabe precisar que la
infracción normativa, subsume las causales que fueron
contempladas anteriormente en el artículo 386° del Código
Procesal Civil, relativas a la interpretación errónea, aplicación
indebida e inaplicación de una norma de derecho material, pero
además incluyen otro tipo de normas como son las de carácter
adjetivo. Corresponde entonces, examinar si la resolución de
vista adolece de infracción normativa por la cual se declaró
procedente el recurso de casación. Tercero.- Que, la demanda,
de fojas 49 a 59, de fecha trece de junio de dos mil siete,
adecuada al proceso contencioso administrativo, de fojas 176 a
181, de fecha siete de diciembre de dos mil siete, tiene como
pretensión que se declare el derecho de los demandantes a ser
evaluados y calificados como trabajadores irregularmente
cesados con arreglo a la Ley N° 27803, tal como lo solicitaron en
su oportunidad legal a la Comisión Ejecutiva creada por la Ley N°
27803; que se declare contrario a derecho el no incluirlos en el
Registro Nacional de Trabajadores Cesados Irregularmente,
situación que no se sustenta en resolución o acto administrativo
de evaluación o calificación; se declare inaplicable a los
demandantes la Resolución Suprema N° 021-2003-TR integrada
por Resolución Suprema N° 034-2004-TR en cuanto al extremo
que declara cerrado el Registro Nacional de Trabajadores
Cesados Irregularmente; y, se ordene su inscripción en el referido
registro creado por Ley N° 27803, teniendo por escogido el
beneficio de la reposición. Cuarto.- Que, la sentencia de vista
declara la sustracción de la materia señalando que el supuesto
que sustenta el litigio en el caso de autos ha desaparecido, por
cuanto la propia autoridad competente, esto es, la Comisión
Ejecutiva, en virtud de la facultad conferida mediante el artículo
1° de la Ley N° 29059, ha procedido a evaluar y calificar
nuevamente las peticiones de los demandantes, por lo que el
petitorio de la demanda deviene en insubsistente al haber dejado
de ser justiciable por disposición legal, como es la Ley N° 29059,
norma que faculta a la Comisión Ejecutiva proceder nuevamente
a la revisión complementaria y final de los casos de los
trabajadores cesados que fueron excluidos de la tercera lista
aprobada por la Resolución Suprema N° 034-2004-TR, por lo que
en aplicación supletoria de lo dispuesto por el inciso 2) del artículo
321° del Código Procesal Civil, declara la sustracción de la
materia. Quinto.- Que, el derecho al debido proceso y a la tutela
jurisdiccional efectiva reconocidos también como principios de la
función jurisdiccional en el artículo 139° inciso 3) de la Constitución
Política del Perú garantizan al justiciable ante su pedido de tutela,
el deber del órgano jurisdiccional de observar el debido proceso y
de impartir justicia dentro de los estándares mínimos que su
naturaleza impone; así mientras que la tutela judicial efectiva
supone tanto el derecho de acceso a los órganos de justicia como
la eficacia de lo decidido en la sentencia, es decir, una concepción
genérica que encierra todo lo concerniente al derecho de acción
frente al poder – deber de la jurisdicción, el derecho al debido
proceso en cambio significa la observancia de los principios y
reglas esenciales exigibles dentro del proceso, entre ellas, el de
motivación de las resoluciones judiciales recogido expresamente
74081
dada su importancia en el inciso 5) del artículo 139° de la
Constitución Política del Perú. Sexto.- Que, asimismo, existe
contravención al debido proceso cuando en el desarrollo del
mismo no se han respetado los derechos procesales de las
partes, se han obviado o alterado actos de procedimiento, la
tutela jurisdiccional no ha sido efectiva y/o el órgano jurisdiccional
deja de motivar sus decisiones, o lo hace en forma incoherente,
en clara trasgresión de la normatividad vigente y de los principios
procesales. Séptimo.- Que, desarrollando este derecho
constitucional los incisos 3) y 4) del artículo 122° del Código
Procesal Civil exigen que para su validez y eficacia las
resoluciones judiciales deben contener la mención sucesiva de
los puntos sobre los que versa la resolución con las
consideraciones, en orden numérico correlativo, de los
fundamentos de hecho que sustentan la decisión, y los respectivos
de derecho con la cita de la norma o normas aplicables en cada
punto, según el mérito de lo actuado; y, la expresión clara y
precisa de lo que se decide u ordena, respecto de todos los
puntos controvertidos; siendo asimismo, deber del juzgador
fundamentarla respetando los principios de jerarquía de las
normas y el de congruencia, según lo postula el inciso 6) del
artículo 50° del Código acotado, también bajo sanción de nulidad.
Octavo.- Que, examinada la sentencia de vista, es de apreciar
que aquella no vulnera el citado principio procesal, de motivación
de resoluciones, pues mediante Ley N° 29059 (publicada el seis
de julio de dos mil siete) se otorgó facultades a la Comisión
Ejecutiva creada por Ley N° 27803, la revisión complementaria y
final de los casos de los extrabajadores cuyo derecho fue
reconocido por la Resolución Suprema N° 021-2003-TR y fueron
excluidos de la Resolución Suprema N° 034-2004-TR y de
aquellos que habiendo presentado sus expedientes en el plazo de
ley, presentaron sus recursos de impugnación administrativa o
judicial por no estar comprendidos en ninguna de las Resoluciones
Ministeriales N° 347-2002-TR y N° 059-2003-TR. Noveno.- Que,
conforme se aprecia de las solicitudes de fojas 615 y 681,
respectivamente, los ahora impugnantes solicitaron ante la
Comisión Ejecutiva se revise nuevamente sus pedidos y se les
inscriba en el Registro Nacional de Trabajadores Cesados
Irregularmente, petición que ha sido evaluada por la Comisión
Ejecutiva, habiéndose emitido a fojas 799 y 800, la Cartas N°
29746-2009-MTPE/ST y N° 35766-2009-MTPE/ST, ambas de
fecha tres de setiembre de dos mil nueve, remitidas a los
recurrentes Luis Zúñiga Paredes y Misael Luis Vásquez Díaz que
les pone de conocimiento las razones por la cuales luego de
haber sido evaluados sus casos en virtud de la Ley N° 29059, no
han sido considerados dentro de la relación de extrabajadores
inscritos en el Registro Nacional de Trabajadores Cesados
Irregularmente; es decir la Comisión Ejecutiva ya se ha
pronunciado con respecto al tema materia de controversia.
Décimo.- Que, en ese sentido, el ente administrativo al haber
emitido pronunciamiento en virtud a lo prescrito en el artículo 5°2
de la Ley N° 27803, dispositivo legal por el cual se crea la
Comisión Ejecutiva como único órgano administrativo encargado
de revisar los Ceses Colectivos efectuados en la década del año
mil novecientos noventa y, determinar de esta forma, si existió o
no coacción al momento de que los trabajadores expresaron su
voluntad de renunciar, así también evaluar los requisitos de la Ley
N° 29059; ha determinado que el caso controvertido deje de ser
justiciable. Undécimo.- Que, consecuentemente, en virtud de lo
establecido en el artículo 321° numeral 2) del Código Procesal
Civil, aplicable supletoriamente, la presente causa ha concluido
por disposición de la Ley N° 29059, norma que faculta a la
Comisión Ejecutiva para proceder nuevamente a la revisión
complementaria y final de los casos de los extrabajadores
cesados que fueron excluidos de la tercera lista aprobada por el
Decreto Supremo N° 034-2004-TR (que es el caso de los
actores impugnantes); no afectando en ese sentido la decisión
de la Sala Superior, la garantía y principio no solo del debido
proceso y la tutela jurisdiccional efectiva, sino tampoco la de
motivación de las resoluciones consagrados en el artículo 139°
incisos 3) y 5) de la Constitución Política del Perú. DECISIÓN: Por
estas consideraciones: NUESTRO VOTO es porque se declare
INFUNDADO el recurso de casación interpuesto por Luis Zúñiga
Paredes, y en representación de Misael Luis Vásquez Díaz, de
fecha nueve de noviembre de dos mil doce, de fojas 923 a 928; en
consecuencia: NO CASARON la sentencia de vista, de fecha
cuatro de octubre de dos mil doce, de fojas 902 a 907;
DISPUSIERON la publicación de la presente resolución en el
Diario Oficial “El Peruano”, conforme a Ley; en el Proceso
Contencioso Administrativo seguido contra el Ministerio de
Trabajo y Promoción del Empleo, sobre Inscripcion en el Registro
Nacional de Trabajadores Cesados Irregularmente; y, los
devolvieron. S.S. TORRES VEGA, CHAVES ZAPATER, MALCA
GUAYLUPO. El señor Juez Supremo Malca Guaylupo firma su
dirimencia el veintisiete de mayo de dos mil quince, los señores
Jueces Supremos Torres Vega y Chaves Zapater firman su voto
suscrito con fecha veintiséis de junio de dos mil catorce, conforme
lo señala el artículo 149° del Texto Único Ordenado de la Ley
Orgánica del Poder Judicial. Firma para certificar el acto, la
doctora Rosmary Cerrón Bandini, Secretaria de Sala (e).
1
El Tribunal Constitucional en la STC Nº 090-2004-AA/TC cita a Bustamante
Alarcón, Reynaldo, “El derecho a probar como elemento esencial de un proceso
74082
2
CASACIÓN
justo” señalando que el derecho al debido proceso es "un derecho fundamental de
carácter instrumental que se encuentra conformado por un conjunto de derechos
esenciales (como el derecho de defensa, el derecho a probar, entre otros) que
impiden que la libertad y los derechos individuales sucumban ante la ausencia o
insuficiencia de un proceso o procedimiento, o se vean afectados por cualquier
sujeto de derecho (incluyendo al Estado) que pretenda hacer uso abusivo de
éstos”. (Vid. Bustamante Alarcón, Reynaldo, “El derecho a probar como elemento
esencial de un proceso justo”. Ara Editores 1ra. Edición, Lima 2001, págs. 47 y 48).
Artículo 5.- Comisión Ejecutiva
Créase por única vez una Comisión Ejecutiva que estará encargada de lo siguiente:
1. Analizar los documentos probatorios que presenten los ex trabajadores que
consideran que su voluntad fue viciada, a fin de determinar si existió o no coacción
en la manifestación de voluntad de renunciar. 2. Analizar los casos de ceses
colectivos de trabajadores que, habiendo presentado su solicitud de cese hasta el
23 de julio de 2001, no fueron tomados en cuenta por la entidad correspondiente.
Esta Comisión tomará en cuenta los parámetros establecidos en el Artículo 9 de la
presente Ley. (…)
C-1335410-58
CAS. Nº 2686-2013 ICA
Es criterio de esta Sala Suprema que la bonificación especial por
preparación de clases y evaluación, prevista en el artículo 48° de la
Ley N° 24029, Ley del Profesorado, modificado por Ley 25212,
debe ser calculada en base al 30% de la remuneración total o
íntegra y no sobre la base de la remuneración total permanente.
Lima, veintidós de abril de dos mil quince. LA PRIMERA SALA DE
DERECHO CONSTITUCIONAL Y SOCIAL TRANSITORIA DE LA
CORTE SUPREMA DE JUSTICIA DE LA REPÚBLICA. VISTA: La
causa en discordia, el señor Juez Supremo Malca Guaylupo se
adhiere al voto de los señores Jueces Supremos Rodríguez
Mendoza, Chumpitaz Rivera y Torres Vega, dejados y suscritos con
fecha nueve de enero de dos mil catorce, conforme lo señala el
artículo 145° del Texto Único Ordenado de la Ley Orgánica del
Poder Judicial; y, luego de verificada la votación con arreglo a Ley,
emite la siguiente sentencia. MATERIA DEL RECURSO: Se trata
del recurso de casación interpuesto por la demandante Gladys
Hermelinda Giraldo De Espinoza, mediante escrito a fojas 143,
contra la sentencia de vista de fecha 14 de noviembre de 2012, a
fojas 119, que revoca la sentencia apelada de fecha 07 de marzo
de 2012, a fojas 89, que declaró infundada la demanda y
reformándola la declara fundada en parte, en el proceso seguido
con la Dirección Regional de Educación de Ica y otros.
FUNDAMENTOS DEL RECURSO: Mediante resolución de fecha
19 de junio de 2013, que corre a fojas 24 del cuaderno de casación,
este Tribunal Supremo ha declarado procedente el recurso de
casación interpuesto por Gladys Hermelinda Giraldo De Espinoza
por la causal de infracción normativa del artículo 48° de la Ley
N° 24029, modificado por el artículo 1° de la Ley N° 25212, y de
los incisos 3) y 5) del artículo 139° de la Constitución Política
del Estado. CONSIDERANDO: Primero.- La infracción normativa
constituye un vicio de derecho en que incurre el juzgador en una
resolución; determinando que el caso sea pasible de ser examinado
por medio del recurso de casación, siempre que esté ligado por
conexidad lógica a lo decidido. En tal sentido, se puede
conceptualizar la infracción normativa como la afectación a las
normas jurídicas en que incurre la Sala Superior al emitir una
resolución que pone fin al proceso, dando apertura a que la parte
que se considere afectada pueda interponer el recurso de casación.
Segundo.- La Corte Suprema de Justicia de la República, como
órgano de casación ostenta atribuciones expresamente
reconocidas en la Constitución Política del Estado, desarrolladas
en el artículo 2° del Texto Único Ordenado de la Ley Orgánica del
Poder Judicial, aprobado por Decreto Supremo N° 017-93-JUS,
atribuciones que sustentan la unidad, exclusividad e independencia
en el ejercicio de la función casatoria que desempeña en la revisión
de casos. Tercero.- En la etapa de calificación del recurso, se
declaró procedente el mismo, por denuncias sustentadas en vicios
in procedendo, así como por vicios in iudicando, de manera que en
primer término, corresponde emitir pronunciamiento respecto a la
causal de infracción normativa procesal del artículo 139°
incisos 3) y 5) de la Constitución Política del Perú. Al respecto,
cabe precisar que el artículo 384° del Código Procesal Civil,
reconoce que el recurso de casación persigue como fines
esenciales la adecuada aplicación del derecho objetivo al caso
concreto (finalidad nomofiláctica) y la uniformidad de la
jurisprudencia nacional por la Corte Suprema de Justicia (finalidad
uniformizadora), no obstante, la doctrina contemporánea también
le atribuye una finalidad denominada dikelógica que se encuentra
orientada a la búsqueda de la justicia al caso concreto. Cuarto.- A
la luz de dicha norma, el examen de la causal de infracción
normativa procesal, vinculada a vicios que supuestamente afectan
al debido proceso que de ser amparados invalidarían en forma total
o parcial lo actuado y decidido por los órganos de instancia, debe
efectuarse teniendo en cuenta el logro de tales finalidades y
además la naturaleza de los derechos que se controvierten en el
proceso, como en el caso sub examine, donde el controvertido
versa sobre un derecho con contenido alimentario, por lo que
recobran singular relevancia e importancia los principios de
celeridad y economía procesal, así como el derecho de acceso a la
justicia, que forma parte del contenido esencial del derecho de
tutela judicial efectiva, reconocido por el inciso 3) del artículo 139°
de la Carta Magna como principio y derecho de la función
jurisdiccional, que no se agota en prever mecanismos de tutela en
El Peruano
Lunes 1 de febrero de 2016
abstracto, sino que supone posibilitar al justiciable la obtención de
un resultado óptimo con el mínimo empleo de la actividad procesal,
de allí que se debe también atender al principio de esencialidad
que rige el sistema de nulidades de acuerdo a lo contemplado en el
artículo 172° del Código Procesal Civil, que señala que la
declaración de nulidad del vicio debe influir en forma decisiva sobre
la sentencia. Quinto.- Análisis de la actuación procesal. De
acuerdo a la pretensión de la demanda a fojas 34, la accionante
solicita se declare la nulidad de la Resolución Directoral Regional
Nº 1487 del 02 de junio de 2010, en lo que respecta a la actora, y
de la Resolución Directoral N° 00135 del 11 de febrero de 2010, a
efectos de que se ordene que la demandada realice el recálculo del
pago de la bonificación especial por preparación de clases y
evaluación, equivalente al 30% de la remuneración total o íntegra
conforme a lo previsto en el artículo 48° de la Ley Nº 24029, Ley del
Profesorado, modificado por la Ley Nº 25212, y no en base a la
remuneración total permanente como lo viene efectuando la
entidad demandada al efectuar su pago. La sentencia de vista
recurrida, revocando la sentencia apelada, declara fundada en
parte la demanda, al considerar que dicha bonificación especial se
otorga solo y únicamente a todo aquel que se encuentre en
actividad, por lo que al tener en la actualidad la actora la condición
de cesante, desde el 01 de marzo de 1994, solo le corresponde su
goce hasta dicha data. Sin embargo, es de apreciar que la
sentencia de vista vulnera el principio de congruencia (externa) y
como tal afecta al debido proceso en su vertiente de motivación de
las resoluciones judiciales, al haber emitido pronunciamiento en
relación a un tema que no ha sido materia de pretensión, puesto
que, además el presente proceso se ha formulado como una de
cumplimiento por parte de la administración de una determinada
actuación a la que se encuentra obligada por mandato de ley, no
obstante, la Sala ha procedido a analizar la procedencia de su
reconocimiento, lo cual contraviene la pretensión procesal
pretendida y admitida. Si bien, correspondería anular la sentencia
recurrida, también lo es que se debe resolver la causal material, en
aplicación de los principios antes decantados, atendiendo, además,
a la reiterada jurisprudencia de este Supremo Tribunal, respecto al
tema de fondo. Sexto.- Respecto a la causal de infracción
normativa material del artículo 48° de la Ley Nº 24029, Ley del
Profesorado, modificado por la Ley Nº 25212. Conforme se
aprecia del escrito de demanda obrante a fojas 34, la pretensión
postulada por la demandante, es que se declare la nulidad de la
Resolución Directoral Regional Nº 1487 del 02 de junio de 2010, en
lo que respecta a la actora, y de la Resolución Directoral N° 00135
del 11 de febrero de 2010, a efectos de que se ordene que la
demandada realice el recálculo del pago de la bonificación especial
por preparación de clases y evaluación, equivalente al 30% de la
remuneración total o íntegra conforme a lo previsto en el artículo
48° de la Ley Nº 24029, Ley del Profesorado, modificado por la Ley
Nº 25212, y no en base a la remuneración total permanente como
lo viene efectuando la entidad demandada al efectuar su pago;
bonificación que percibía como Profesora de Aula de Educación
Primaria de la Institución Educativa N° 22240 de Chincha Alta, con
el pago de los reintegros devengados desde su nombramiento el
01 de abril de 1977, más intereses legales. Séptimo.- Análisis
casatorio. Teniendo en consideración, lo peticionado por la
recurrente a través de su escrito de demanda, obrante a fojas 34,
así como lo resuelto por el Ad quo y el Ad quem, se concluye que
el debate casatorio en el caso concreto de autos, se circunscribe a
determinar si la bonificación especial por preparación de clases y
evaluación, regulada en el artículo 48° de la Ley Nº 24029, Ley del
Profesorado, modificada por la Ley Nº 25212, que la demandada,
Dirección Regional de Educación de Ica viene otorgando a la
demandante, debe ser calculada tomando como base de referencia
la remuneración total permanente o la remuneración total o íntegra,
como postula la actora. Octavo.- Alcances del Decreto Supremo
Nº 051-91-PCM. El Decreto Supremo Nº 051-91-PCM, es una
norma orientada a determinar los niveles remunerativos de los
funcionarios, directivos, servidores y pensionistas del Estado, el
mismo que en su artículo 10° precisa que los beneficios a que se
refiere el artículo 48° de la Ley Nº 24029, modificada por la Ley Nº
25212, Ley del Profesorado, se calcularán sobre la base de la
remuneración total permanente, haciendo diferencia respecto de la
Remuneración Total Permanente y Remuneración Total Íntegra, en
el artículo 8° del referido Decreto Supremo1. Noveno.- Alcances
del artículo 48° de la Ley Nº 24029, Ley del Profesorado,
modificado por la Ley Nº 25212. El artículo 48° de la Ley Nº
24029, modificado por la Ley Nº 25212, establece que: “El profesor
tiene derecho a percibir una bonificación especial mensual por
preparación de clases y evaluación equivalente al 30% de su
remuneración total. El Personal Directivo y Jerárquico, así como
el Personal Docente de la Administración de Educación, así como
el Personal Docente de Educación Superior incluidos en la presente
ley, perciben, además, una bonificación adicional por el desempeño
de cargo y por la preparación de documentos de gestión equivalente
al 5% de su remuneración total. El profesor que presta servicios en:
zona de frontera, selva, zona rural, altura excepcional, zona de
menor desarrollo relativo y emergencia tiene derecho a percibir una
bonificación por zona diferenciada del 10% de su remuneración
permanente por cada uno de los conceptos señalados hasta un
máximo de tres” (la negrita es nuestra). Décimo.- Pronunciamiento
de la Corte Suprema de Justicia de la República sobre la
aplicación del artículo 48° de la Ley Nº 24029, modificada por
El Peruano
Lunes 1 de febrero de 2016
CASACIÓN
la Ley Nº 25212. La Sala de Derecho Constitucional y Social
Transitoria de la Corte Suprema de Justicia de la República,
respecto a la forma de cálculo de la bonificación especial por
preparación de clases y evaluación, en la Casación N° 9887-2009Puno, expedida con fecha 15 de diciembre de 2011, ha destacado
que: “(…) este Supremo Tribunal establece el criterio que la
bonificación especial por preparación de clases y evaluación debe
ser calculada tomando como base la remuneración total conforme
lo dispone el artículo 48° de la Ley N° 24029 –Ley del Profesoradomodificado por la Ley N° 25212, concordante con el artículo 210°
del Decreto Supremo 019-90-ED (Reglamento de la Ley del
Profesorado) y no sobre la base de la remuneración total
permanente como lo señala el artículo 10° del Decreto Supremo N°
051-91-PCM. (…) El criterio antes señalado tiene como antecedente
la Casación N° 000435-2008-Arequipa del uno de julio de dos mil
nueve, expedida por esta Sala Suprema”. Décimo Primero.Precedente judicial. Este Tribunal Supremo ha forjado en el
devenir del tiempo como criterio uniforme que el cálculo de la
bonificación especial por preparación de clases y evaluación, debe
realizarse teniendo como referencia la remuneración total íntegra
de acuerdo a lo dispuesto en el artículo 48° de la Ley N° 24029, Ley
del Profesorado, modificado por la Ley N° 25212, concordado a su
vez con el artículo 210° del Decreto Supremo N° 019-90-ED
(Reglamento de la Ley del Profesorado), constituyendo de esta
forma lo preceptuado, un principio jurisprudencial, de acuerdo a lo
establecido por el artículo 34° de la Ley N° 27584, Ley que regula
el Proceso Contencioso Administrativo, recogido también en el
artículo 37° de su Texto Único Ordenado aprobado por Decreto
Supremo N° 013-2008-JUS, que señala “Cuando la Sala
Constitucional y Social de la Corte Suprema fije en sus resoluciones
principios jurisprudenciales en materia contencioso administrativa,
constituyen precedente vinculante”, lo cual concordado con lo
previsto en los artículos 386° y 400° del Código Procesal Civil, en
la actualidad se denomina precedente judicial; pues debe ser
observado por todas las instancias judiciales de la república.
Décimo Segundo.- Solución del caso concreto. Teniendo en
cuenta la pretensión de la demandante en el presente proceso,
sobre el recálculo de la bonificación especial por preparación de
clases y evaluación, en base a la remuneración total o íntegra, de
la documentación adjuntada por la demandante, para sustentar su
pretensión, se verifica: i) De las boletas de pago (febrero, marzo y
abril del año 1994) de fojas 30 a 31 y de las resoluciones
administrativas de fojas 02 a 06, se aprecia que la actora ingresó
con fecha 01 de abril de 1977, ostentó el cargo de Profesora de
Aula, Nivel Magisterial IV, 30 Horas, cesó en dicho cargo con fecha
01 de marzo de 1994, y viene percibiendo en el rubro “preparación
de clases” o “bonif”, la bonificación especial por preparación de
clases y evaluación, en la suma de S/. 21.84 (Veintiuno con 84/100
nuevos soles); y, ii) De las mencionadas boletas de pago y
resoluciones administrativas, se aprecia que la citada bonificación
especial otorgada a favor de la demandante ha sido calculada en
base a la remuneración total permanente. Décimo Tercero.- En
consecuencia, en aplicación del criterio previsto en el considerando
décimo de la presente resolución, resulta fundado el recurso
formulado, amparándose la pretensión reclamada respecto al
recálculo de la bonificación mensual por preparación de clases y
evaluación, la que debe calcularse en base al treinta por ciento
(30%) de la remuneración total o íntegra, desde el 21 de mayo de
1990, fecha de vigencia del beneficio previsto en el artículo 48° de
la Ley N° 24029, Ley del Profesorado, modificado por la Ley N°
25212, más el pago de los intereses legales, según los alcances de
los artículos 1242° y 1246° del Código Civil, según ha resuelto la
Corte Suprema en casos similares. DECISIÓN: Por estas
consideraciones, declararon FUNDADO el recurso de casación
interpuesto por la demandante Gladys Hermelinda Giraldo De
Espinoza, mediante escrito a fojas 143; en consecuencia, se
CASARON la sentencia de vista de fecha 14 de noviembre de
2012, a fojas 119; y, actuando en sede de instancia, se
REVOCARON la sentencia apelada de fecha 07 de marzo de
2012, a fojas 89, que declara INFUNDADA la demanda;
REFORMANDOLA la declararon FUNDADA; en consecuencia,
nula la Resolución Directoral Regional N° 1487 del 02 de junio de
2010 y la Resolución Directoral N° 00135 del 11 de febrero de
2010; ORDENARON que la demandada expida nueva resolución
otorgando la bonificación especial por preparación de clases y
evaluación, calculada en base a la remuneración total o íntegra,
con el pago de los reintegros devengados, más intereses legales,
de acuerdo a la precisión formalizada en esta decisión;
DISPUSIERON la publicación del texto de la presente sentencia en
el Diario Oficial “El Peruano”, conforme a Ley; en el Proceso
Contencioso Administrativo, seguido contra la Dirección Regional
de Educación de Ica y otros, sobre Nuevo Cálculo de la
Bonificación Especial por Preparación de Clases y Evaluación;
interviniendo como Jueza Suprema ponente la señora Torres Vega;
y, los devolvieron. S.S. RODRÍGUEZ MENDOZA, CHUMPITAZ
RIVERA, TORRES VEGA, MALCA GUAYLUPO. El señor Juez
Supremo Malca Guaylupo firma su dirimencia el veintidós de abril
de dos mil quince; los señores Jueces Supremos Rodríguez
Mendoza, Chumpitaz Rivera y Torres Vega firman su voto suscrito
el nueve de enero de dos mil catorce; y, conforme a lo dispuesto
por el artículo 149° del Texto Único Ordenado de la Ley Orgánica
del Poder Judicial. Firma para certificar el acto, la doctora Rosmary
Cerrón Bandini, Secretaria de Sala (e). EL VOTO EN MINORIA DE
74083
LOS SEÑORES JUECES SUPREMOS MAC RAE THAYS Y
CHAVES ZAPATER, es como sigue: CONSIDERANDO:
Primero.- El recurso de casación tiene por fines la adecuada
aplicación del derecho objetivo al caso concreto y la uniformidad de
la jurisprudencia nacional por la Corte Suprema de Justicia,
conforme se señala en el texto del artículo 384° del Código
Procesal Civil, vigente a la fecha de la interposición del recurso.
Segundo.- La infracción normativa puede ser conceptualizada,
como la afectación de las normas jurídicas en las que incurre la
Sala Superior al emitir una resolución, originando con ello que la
parte que se considere afectada por la misma pueda interponer el
respectivo recurso de casación. Respecto de los alcances del
concepto de infracción normativa, quedan subsumidos en el
mismo, las causales que anteriormente contemplaba el Código
Procesal Civil en su artículo 386°, relativas a la interpretación
errónea, aplicación indebida e inaplicación de una norma de
derecho material, pero además incluyen otro tipo de normas como
son las de carácter adjetivo. Tercero.- La infracción de las normas
que garantizan el derecho a un debido proceso2 se configura
cuando en el desarrollo del mismo, no se han respetado los
derechos procesales de las partes, se han obviado o alterado actos
de procedimiento, la tutela jurisdiccional no ha sido efectiva y/o el
órgano jurisdiccional deja de motivar sus decisiones o lo hace en
forma incoherente, en clara transgresión de la normatividad vigente
y de los principios procesales. Cuarto.- El derecho al debido
proceso y a la tutela jurisdiccional efectiva reconocidos también
como principio de la función jurisdiccional en el inciso 3) del artículo
139° de la Constitución Política del Perú garantizan al justiciable,
ante su pedido de tutela, el deber del órgano jurisdiccional de
observar el debido proceso y de impartir justicia dentro de los
estándares mínimos que su naturaleza impone; así mientras que la
tutela judicial efectiva supone tanto el derecho de acceso a los
órganos de justicia como la eficacia de lo decidido en la sentencia,
es decir, una concepción genérica que encierra todo lo concerniente
al derecho de acción frente al poder - deber de la jurisdicción, el
derecho al debido proceso en cambio significa la observancia de
los principios y reglas esenciales exigibles dentro del proceso,
entre ellas, el de motivación de las resoluciones judiciales. Quinto.Se debe señalar que el principio procesal de la motivación escrita
de las resoluciones judiciales se halla consagrado en el inciso 5)
del artículo 139° de la Constitución Política del Estado, el cual tiene
como finalidad principal el de permitir el acceso de los justiciables
al razonamiento lógico jurídico empleado por las instancias de
mérito para justificar sus decisiones jurisdiccionales y así puedan
ejercer adecuadamente su derecho de defensa, cuestionando de
ser el caso, el contenido y la decisión asumida. Esta motivación
escrita de las resoluciones judiciales constituye un deber para los
magistrados, tal como lo establecen los artículos 50° inciso 6), y
122° inciso 3) del Código Procesal Civil; y dicho deber implica que
los juzgadores señalen en forma expresa la ley que aplican con el
razonamiento jurídico a la que ésta les ha llevado, así como los
fundamentos fácticos que sustentan su decisión, respetando los
principios de jerarquía de normas y de congruencia. Sexto.- El
petitorio de la demanda incoada a fojas 34, tiene por objeto que el
Órgano Jurisdiccional declare la nulidad de la Resolución Directoral
Regional N° 1487 de fecha 02 de junio de 2010 y la Resolución
Directoral N° 00135 de fecha 11 de febrero de 2010, y como
consecuencia de ello se ordene a la entidad emplazada cumpla
con el pago de la Bonificación Especial mensual por preparación
de clases y evaluación, equivalente al 30% mensual de la
Remuneración Total, desde la fecha de su nombramiento el 01 de
abril de 1977 hasta la fecha de cese, más los intereses legales.
Séptimo.- Que, el Colegiado de la Sala Superior revoca la
resolución apelada que declaró infundada la demanda, y
reformándola declara fundada en parte la demanda sosteniendo
como argumento: “… que en atención del principio de especialidad,
entendido como “la preferencia aplicativa de la norma reguladora
de una especie de cierto género sobre la norma reguladora de tal
género en su totalidad”, debe preferirse la norma contenida en el
artículo 48° de la Ley N° 24029. Lo que determina que, para el
cálculo de bonificación especial mensual por preparación de clases
y evaluación, se aplique la remuneración mensual total que el
docente perciba y no la remuneración total permanente a la que se
refiere el artículo 9° del Decreto Supremo N° 051-91-PCM. Por
consiguiente, la bonificación que reclama la demandante, debe
otorgarse sobre la base de la remuneración total y no sobre la base
de la remuneración total permanente, desde el mes de marzo de
mil novecientos noventa y uno hasta el primero de marzo de mil
novecientos noventa y cuatro, fecha en que fue cesado”. Octavo.De la revisión de la sentencia recurrida se aprecia que el Colegiado
de la Sala Superior al revocar la sentencia apelada, que declaró
infundada la demanda y reformándola la declaró fundada en parte,
ha emitido pronunciamiento sobre los extremos materia de
apelación, esgrimiendo los argumentos que sustentan su decisión
de amparar la demanda, lo cual denota que se ha emitido una
resolución motivada, no configurándose la infracción de los incisos
3) y 5) del artículo 139° de la Constitución Política del Estado;
debiéndose por tanto emitir pronunciamiento respecto a la denuncia
por infracción normativa de normas de carácter material. Noveno.De la norma aplicable para el cálculo de la bonificación por
preparación de clases y evaluación y de la bonificación
adicional por desempeño de cargo. La parte demandante viene
solicitando que se le otorgue la bonificación especial por
74084
CASACIÓN
preparación de clases y evaluación en base a la remuneración
total o íntegra, de conformidad con el artículo 48° de la Ley N°
24029 – Ley del Profesorado, modificada por Ley Nº 25212; en
tanto que la parte demandada alega que dicha bonificación debe
ser otorgada en base a la remuneración total permanente, de
conformidad con el artículo 10° del Decreto Supremo N° 051-91PCM; por lo que corresponde establecer cuál de estas normas
corresponde aplicar para el cálculo de la bonificación demandada.
Décimo.- Al respecto, debe precisarse que el Decreto Supremo N°
051-91-PCM fue expedido al amparo de la atribución presidencial
prevista en el inciso 20° del artículo 211° de la Constitución Política
del Estado de 1979, que facultó al Ejecutivo dictar medidas
extraordinarias siempre que tengan como sustento normar
situaciones imprevisibles y urgentes cuyos efectos o riesgo
inminente se extiendan o constituyan un peligro para la economía
nacional o las finanzas públicas. A pesar que la mencionada
Constitución no le otorgó a estos Decretos Supremos fuerza de
Ley, parte de la doctrina le atribuyó este efecto, pero en el entendido
de que se trataban de Decretos Supremos Extraordinarios con
vigencia temporal. Décimo Primero.- En efecto, de considerarse
los citados Decretos Supremos como Decreto de Urgencia por su
naturaleza extraordinaria, estos devienen en temporales; sin
embargo, dicha exigencia no ha sido observada respecto al
Decreto Supremo N° 051-91-PCM, publicado en el Diario Oficial El
Peruano el 06 de Marzo de 1991, a pesar de que esta norma fue
expedida por la necesidad de “dictar las normas reglamentarias
transitorias orientadas a establecer los niveles remunerativos de
los trabajadores al servicio del Estado en el marco del Proceso de
Homologación, Carrera Pública y Sistema Único de
Remuneraciones y Bonificaciones”, según se desprende de su
parte considerativa y de su artículo 1°; por lo que se ha
desnaturalizado su carácter extraordinario y temporal, y con ello su
fuerza de ley, lo que implica que el citado Decreto Supremo N° 05191-PCM es una norma reglamentaria y general que no puede
afectar los derechos reconocidos en la Ley N° 24029 - Ley del
Profesorado, modificada por la Ley N° 25212. Décimo Segundo.A mayor abundamiento, debe tenerse en cuenta, que el Tribunal
Constitucional, en la sentencia recaída en el Expediente N° 000072009-PI/TC, sobre el control de constitucionalidad a diferentes
artículos del Decreto de Urgencia N° 026-2009, estableció que los
Decretos de Urgencia dictados bajo las exigencias previstas en el
inciso 19) del artículo 118° de la Constitución Política de 1993,
debían responder a determinados criterios o exigencias de validez,
como la excepcionalidad, la necesidad, la transitoriedad, la
generalidad y la conexidad, concluyendo en su fundamento jurídico
11 que el otorgamiento de beneficios previstos por Ley, no pueden
modificarse a través de un Decreto de Urgencia, pues ello resulta
inconstitucional. Décimo Tercero.- Por lo tanto, teniendo en cuenta
que los Decretos Supremos dictados al amparo del inciso 20) del
artículo 211° de la Constitución Política de 1979, constituyen el
antecedente de los Decretos de Urgencia dictados al amparo del
inciso 19) del artículo 118° de la Constitución Política de 1993;
entonces la conclusión arribada en la mencionada sentencia del
Tribunal Constitucional resulta aplicable al caso de autos; por lo
que el artículo 10° del Decreto Supremo N° 051-91-PCM no puede
modificar el beneficio contenido en el artículo 48° de la Ley N°
24029, pues el citado Decreto Supremo, al haberse extendido en el
tiempo, no ha cumplido el presupuesto habilitante de su carácter
extraordinario y temporal que le otorga fuerza de ley. Décimo
Cuarto.- Por lo tanto, en el caso de autos el Decreto Supremo N°
051-91-PCM no tiene fuerza de ley, al haber incumplido el carácter
extraordinario y temporal que precisamente le otorgaban dicha
fuerza. Por lo que el artículo 10° del Decreto Supremo N° 051-91PCM no puede modificar válidamente el artículo 48° de la Ley del
Profesorado, al tratarse de una norma reglamentaria de inferior
jerarquía. Décimo Quinto.- Por lo demás, y abonando en razones,
resulta aplicable a este caso el principio de especialidad, según el
cual una norma especial prima sobre norma general, es decir,
orienta a que en la solución de un conflicto corresponde aplicar la
norma que regula de modo específico al supuesto de hecho
generador del derecho correspondiente. En el caso de autos, el
Decreto Supremo N° 051-91-PCM es una norma de ámbito general,
que está destinada a regular los niveles remunerativos de todos los
servidores del Estado, mientras que la Ley del Profesorado N°
24029, modificada por la Ley N° 25212, y reglamentada por el
Decreto Supremo N° 19-90-PCM, es una norma que regula de
manera especial los derechos y deberes de un sector determinado
de la administración, como son los profesores de la carrera pública;
en este sentido, es evidente que la bonificación por preparación de
clases materia de la demanda, al tratarse de un bonificación que es
exclusivamente percibida por los docentes, la normatividad legal
que resulta aplicable por razón de especialidad es la Ley N° 24029
y su modificatoria la Ley N° 25212, así como su Reglamento
aprobado por Decreto Supremo N° 19-90-ED, y no el Decreto
Supremo N° 051-91-PCM. Décimo Sexto.- En similar sentido se
ha pronunciado el Tribunal del Servicio Civil en la Resolución N°
2836-2010-SERVIR-TSC- Primera Sala recaída en el expediente
N° 5643-2010-SERVIR/TSC de fecha 14 de Diciembre de 2010, al
señalar lo siguiente “(...), esta Sala considera que en atención al
principio de especialidad, entendido como ‘la preferencia aplicativa
de la norma reguladora de una especie de cierto género sobre la
norma reguladora de tal género en su totalidad’, debe preferirse la
norma contenida en el artículo 48° de la Ley N° 24029; lo que
El Peruano
Lunes 1 de febrero de 2016
determina que, para el cálculo de la Bonificación Especial Mensual
por Preparación de Clases y Evaluación, se aplique la remuneración
mensual total que el docente perciba y no la remuneración total
permanente a la que hace referencia el artículo 9° del Decreto
Supremo N° 051-91-PCM”. Décimo Séptimo.- Existencia de
doctrina jurisprudencial sobre el tema. La Sala de Derecho
Constitucional y Social de la Corte Suprema, en la sentencia
dictada en la Casación N° 1567-2002-La Libertad, ha señalado
que: “La Ley del Profesorado N° 24029, ha sido expedida
observando el proceso de formación de la Ley previsto en la
Constitución Política del Estado, de allí que entre ésta y el Decreto
Supremo N° 051-91-PCM, exista una diferencia de origen y
vigencia, no obstante tener ambas normas la misma naturaleza”,
concluyendo que “en aplicación del principio de especialidad,
resulta aplicable la Ley del Profesorado y su Reglamento y no el
referido Decreto Supremo”. Asimismo, la Segunda Sala de Derecho
Constitucional y Social Transitoria de la Corte Suprema, por
sentencia de fecha 01 de julio de 2009, recaída en la Casación N°
435-2008-Arequipa, ha considerando pertinente ponderar la
aplicación del artículo 48° de la Ley N° 24029, sobre el Decreto
Supremo N° 051-91-PCM, señalando que “(…) la norma que debe
aplicarse al caso de autos es el artículo 48° de la Ley N° 24029 y
no el artículo 10° del Decreto Supremo N° 051-91-PCM”. En ese
mismo sentido, la Sala de Derecho Constitucional y Social
Transitoria de la Corte Suprema, en la Casación N° 9887-2009Puno de fecha 15 de diciembre de 2011, ha señalado que: “la
bonificación especial por preparación especial de clases y
evaluación debe ser calculada tomando como base la remuneración
total, conforme lo dispone el artículo 48° de la Ley N° 24029, Ley
del Profesorado, modificado por la Ley N° 25212, concordante con
el artículo 210° del Decreto Supremo N° 019-90-ED (Reglamento
de la Ley del Profesorado), y no sobre la base de la remuneración
total permanente como lo señala el artículo 10° del Decreto
Supremo N° 051-91-PCM”. Asimismo, esta Sala Suprema,
mediante la sentencia de fecha 15 de diciembre de 2011, recaída
en la Casación N° 9890-2009 - Puno, ha establecido respecto a la
forma de cálculo de la bonificación por preparación de clases que
“al tratarse de un bonificación que es exclusivamente percibida por
los servidores comprendidos en la Ley del Profesorado, la
normatividad legal que le resulta aplicable por razón de especialidad
es la Ley N° 24029 y su modificatoria la Ley N° 25212, así como su
Reglamento aprobado por Decreto Supremo N° 19-90-ED, y no así
el Decreto Supremo N° 051-91-PCM”. Finalmente, mediante las
Consultas recaídas en los Expedientes N° 2026-2010-Puno y N°
2442-2010-Puno de fecha 24 de septiembre de 2010, esta Sala
Suprema ha preferido aplicar la norma especial, esto es la Ley N°
24029, en lugar de la norma general, es decir, en lugar del Decreto
Supremo N° 051-91-PCM. Décimo Octavo.- En consecuencia, se
advierte que esta Corte Suprema, a través de sus Salas
Especializadas, ha tomado posición y criterio uniforme en
reiteradas ejecutorias supremas, señalando que la bonificación
especial por preparación de clases y evaluación se calcula en
base a la remuneración total o íntegra. Por lo tanto, en virtud a lo
dispuesto en el artículo 22° del Texto Único Ordenado de la Ley
Orgánica del Poder Judicial, aprobado por Decreto Supremo N°
017-93-JUS, este Supremo Tribunal ha adoptado esta línea
jurisprudencial (doctrina jurisprudencial) para efectos de evaluar
los casos referidos a la bonificación especial por preparación de
clases y evaluación; por lo que resulta un criterio judicial válido de
aplicación y observancia obligatoria para la resolución de
demandas sobre la citada materia en cualquier instancia y proceso
judicial, pues ello conlleva a generar estabilidad jurídica frente a la
resolución de este tipo de casos, además de cumplir con uno de los
fines del recurso de casación consagrado en el artículo 384° del
Código Procesal Civil, que es la uniformidad de la jurisprudencia
nacional por la Corte Suprema de Justicia. Décimo Noveno.Asimismo, debe observarse la sentencia dictada por la Sala de
Derecho Constitucional y Social Permanente de la Corte Suprema,
que al resolver la Acción Popular Nº 438-2007, y declarar fundada
la demanda sostuvo que “el carácter transitorio de la norma
reglamentaria contenida en el Decreto Supremo N° 051-91-PCM
se ha desnaturalizado”, por lo que concluyó que la Ley del
Profesorado – Ley N° 24029 prevalece por tratarse de la norma de
mayor jerarquía; por lo que este criterio debe ser de observancia
obligatoria para todas las instancias judiciales, en razón a los
efectos erga omnes de la sentencia de acción popular, similares a
los efectos de una sentencia de inconstitucionalidad. Vigésimo.Según los antecedentes jurisprudenciales reseñados en los
considerandos precedentes, es criterio de esta Suprema Corte que
la base de cálculo de la bonificación especial por preparación de
clases y evaluación y de la bonificación adicional por desempeño
de cargo, se deba efectuar teniendo en cuenta la remuneración
total o íntegra y no la remuneración total permanente. Igual
tratamiento deberá tener el cálculo de la bonificación adicional por
desempeño de cargo y por preparación de documentos de gestión,
al emanar dicho beneficio del mismo dispositivo legal que la
bonificación por preparación de clases y evaluación. Vigésimo
Primero.- Se aprecia de los actuados que la demandante tiene la
calidad de cesante a partir del 01 de marzo de 1994, como es de
verse de la Resolución Directoral N° 000169 obrante a fojas 71;
quien expresamente solicita como petitorio de su demanda de fojas
34, el pago de la bonificación especial por preparación de clases y
evaluación y de la bonificación adicional por desempeño de cargo,
El Peruano
Lunes 1 de febrero de 2016
CASACIÓN
sobre la remuneración total o integra desde su fecha de
nombramiento del 01 de abril de 1977 hasta la fecha de su cese.
Vigésimo Segundo.- Estando en este orden de ideas, se advierte
que la instancia de mérito ha resuelto teniendo en cuenta que la
pretensión alegada por la actora le corresponde a partir de la fecha
de aplicación de la norma que otorga tal derecho, hasta su fecha de
cese; es decir por el tiempo que ejerció labores como docente en
actividad; ya que, el texto del artículo 48° de la Ley N° 24029, Ley
del Profesorado, expresa que la percepción de la bonificación
especial por preparación de clases y evaluación, tiene como
finalidad compensar el desempeño del cargo atendiendo a las
funciones especiales encargadas al docente, puesto que la labor
de éste no se limita al dictado de clases, sino que ello implica
prepararlas previamente o desarrollar la temática que se requiera,
labores efectivas que son propias de un profesor en actividad.
Por lo tanto, no se advierte infracción del artículo 48° de la Ley N°
24029, modificado por el artículo 1° de la Ley N° 25212. En
consecuencia por aplicación del criterio señalado en los
considerandos precedentes, resulta infundado el recurso formulado
por la recurrente. DECISIÓN: Por estas consideraciones, con lo
expuesto en el Dictamen Fiscal Supremo, y de conformidad con el
artículo 397° del Código Procesal Civil, declararon: INFUNDADO el
recurso de casación interpuesto por la demandante Gladys
Hermelinda Giraldo De Espinoza, a fojas 143; en consecuencia,
NO CASARON la resolución de vista de fecha 14 de noviembre de
2012, a fojas 119; ORDENARON la publicación del texto de la
presente resolución en el Diario Oficial “El Peruano”, conforme a
Ley; en los seguidos con la Dirección Regional de Educación de Ica
y otros, sobre Proceso Contencioso Administrativo; y, los
devolvieron. S.S. MAC RAE THAYS, CHAVES ZAPATER. Los
señores Jueces Supremos Mac Rae Thays y Chaves Zapater,
firman sus votos suscritos el nueve de enero de dos mil catorce;
conforme a lo dispuesto por el artículo 149° del Texto Único
Ordenado de la Ley Orgánica del Poder Judicial. Firma para
certificar el acto, la doctora Rosmary Cerrón Bandini, Secretaria de
Sala (e).
1
2
Artículo 8°.- Para efectos remunerativos se considera: a) Remuneración Total
Permanente es aquella cuya percepción es regular en su monto, permanente en
el tiempo y se otorga con carácter general para todos los funcionarios, directivos
y servidores de la Administración Pública; y está constituida por la Remuneración
principal, bonificación personal, bonificación familiar, remuneración transitoria para
homologación y la bonificación por refrigerio y movilidad; b) Remuneración Total
Íntegra es aquella que está compuesta por la remuneración total permanente y
los conceptos remunerativos adicionales otorgados por Ley expresa, los mismos
que se dan por el desempeño de cargos que implican exigencias y/o condiciones
distintas al común.
En este mismo sentido, respecto a la causal de contravención de las normas que
garantizan el derecho a un debido proceso, la Sala Civil Permanente de la Corte
Suprema en la Casación N° 989-2004 - Lima Norte señala que: “se presenta
cuando en su desarrollo no se han respetado los derechos procesales de las
partes, se han obviado o alterado actos de procedimiento, la tutela jurisdiccional no
ha sido efectiva, cuando el órgano jurisdiccional deja de motivar sus decisiones o
lo hace en forma incoherente, o cuando se vulneran los principios procesales”.
C-1335410-59
CAS. Nº 2776-2013 LIMA
Incentivos Laborales. Lima, doce de octubre de dos mil quince.
VISTOS: Con el acompañado; y, CONSIDERANDO: PRIMERO:
Viene a conocimiento de este Tribunal Supremo el recurso de
casación interpuesta por el demandante Ricardo Carranza
Lefevre, de fecha veintidós de octubre de dos mil doce, de fojas
157 a 162, contra la sentencia de vista de fecha treinta y uno de
julio de dos mil doce, de fojas 147 a 151, que confirma la sentencia
apelada que declara infundada la demanda, la misma que debe
ser calificado teniendo en cuenta los parámetros establecidos en
la modificatoria del Código Procesal Civil efectuada por la Ley
N° 29364, a fin de verificar el cumplimiento de los requisitos de
admisibilidad y procedencia de dicho recurso. SEGUNDO: Que,
se verifica que el medio impugnatorio propuesto por la parte
recurrente cumple con los requisitos de admisibilidad previstos
en el numeral 3.1.) inciso 3) del artículo 32° de la Ley N° 27584
Ley del Proceso Contencioso Administrativo, y los contenidos en
el artículo 387 del Código Procesal Civil, esto es: i) Se recurre
una sentencia expedida en revisión por la Sala Superior, ii) Se ha
interpuesto ante la Quinta Sala Especializado en lo Contencioso
Administrativo de la Corte Superior de Justicia de Lima; ii) Ha
sido presentado dentro del plazo de diez días que establece la
norma; y, iv) La parte recurrente se encuentra exonerado del pago
de la tasa judicial según el artículo 24° inciso i) del Texto Único
Ordenado de la Ley Orgánica del Poder Judicial, modificado por
la Ley N° 27327. TERCERO: Que el Código Procesal Civil en su
artículo 386° establece como causal de casación "La infracción
normativa que incida directamente sobre la decisión contenida
en la resolución impugnada o en el apartamiento inmotivado del
precedente judicial"; asimismo el artículo 388° del Código Adjetivo
acotado establece como requisitos de procedencia del recurso de
casación: “1. Que el recurrente no hubiera consentido previamente
la resolución adversa de primera instancia, cuando ésta fuere
confirmada por la resolución objeto del recurso; 2. Describir con
claridad y precisión la infracción normativa o el apartamiento
del precedente judicial; 3. Demostrar la incidencia directa de la
74085
infracción sobre la decisión impugnada; e, 4. Indicar si el pedido
casatorio es anulatorio o revocatorio”. CUARTO: Que, respecto
al requisito de procedencia contenido en el inciso 1) del artículo
388° del Código Procesal Civil, se advierte que la parte recurrente
ha interpuesto recurso de apelación en contra de la sentencia de
primera instancia, conforme se aprecia a fojas 111; por otra parte,
se observa que la parte impugnante ha cumplido con lo dispuesto
en el inciso 4) del citado artículo. Al indicar su pedido casatorio
como revocatorio. QUINTO: Que, en cuanto a los demás requisitos
establecidos en el artículo en mención, la parte recurrente
denuncia: i) Contravención de las normas que garantizan el
derecho a un debido proceso, expresando que se encuentra
acreditado, que el accionante, pertenece al Nivel N-5, según boleta
de pago que se adjuntó a la demanda como anexo A-02, en las
cuales se advierte que el demandante cesó con el cargo de médico
cirujano; hecho que no ha logrado desvirtuar el Ministerio de Salud
emplazado, por lo tanto, se tiene acreditado que el recurrente
cumple con los requisitos para acceder al beneficio previsto en
el Decreto de Urgencia N° 088-2001 y la Resolución Ministerial
N°s 223-2003-SA/DM, 825-2003SA/DM y 717-2004/MINSA; ii)
Infracción normativa procesal por contravención al principio
de congruencia procesal recogido en el artículo VII del Título
Preliminar del Código Procesal Civil, alegando que de la lectura
de la sentencia emitida no aparece que el a quo haya cumplido con
pronunciarse con relación al petitorio contenido del reintegro de su
pensión de jubilación por encontrarse dentro de la Ley N° 20530,
pedido que tiene carácter autónomo. SEXTO: Que del análisis de
los fundamentos en los ítems i) y ii) la parte recurrente, vertidos en
su recurso, se aprecia que no demuestra la incidencia directa sobre
la decisión impugnada, contraviniendo las exigencias señaladas en
el inciso 3) del artículo 388° del Código Procesal Civil, modificado
por la Ley 29364, en tanto que el colegiado luego del análisis
congruente de las normas ha determinado que Los beneficios
económicos solicitado no pueden ser abonados al actor por tener
la calidad de pensionista, ya que no tienen carácter remunerativo
ni pensionable, no apreciándose infracción normativa de la norma
que indique que amerite un pronunciamiento de fondo, por lo que
deviene en improcedente el recurso. Por las razones expuestas
y de conformidad con el artículo 392° del Código Procesal Civil:
Declararon IMPROCEDENTE el recurso de casación interpuesto
por el demandante Ricardo Carranza Lefevre, de fecha veintidós
de octubre de dos mil doce, de fojas 157 a 162, contra la sentencia
de vista de fecha treinta y uno de julio de dos mil doce, de fojas
147 a 151; DISPUSIERON publicar el texto de la presente
resolución en el Diario Oficial “El Peruano”, conforme a Ley; en
el proceso contencioso administrativo seguido con el Ministerio de
Salud, sobre Nulidad de Resolución Administrativa. Interviniendo
como ponente la señora Jueza Suprema Chumpitaz Rivera;
y, los devolvieron. S.S. RODRÍGUEZ MENDOZA, CHUMPITAZ
RIVERA, TORRES VEGA, MAC RAE THAYS, CHAVES ZAPATER
C-1335410-60
CAS. Nº 4678-2013 LIMA
La revisión de la solicitud hecha por el demandante, de inscripción
en el Registro Nacional de Trabajadores Cesados Irregularmente
en aplicación de la Ley N° 27803, implica asumir funciones que
fueron de competencia exclusiva de la Comisión Ejecutiva creada
para evaluar dichos pedidos, hecho que de ampararse significaría
incurrir en una clara infracción de lo dispuesto por el artículo 5° de
la Ley N° 27803, correspondiendo por ello desestimar su pedido
declarando infundada su demanda. Lima, diez de setiembre de dos
mil quince. LA PRIMERA SALA DE DERECHO CONSTITUCIONAL
Y SOCIAL TRANSITORIA DE LA CORTE SUPREMA DE
JUSTICIA DE LA REPÚBLICA. VISTA; la causa número cuatro mil
seiscientos setenta y ocho - dos mil trece - Lima; en discordia, el
señor Juez Supremo Yrivarren Fallaque se adhiere al voto del
señor Juez Supremo Malca Guaylupo, dejado y suscrito con fecha
veintidós de julio de dos mil quince, y al voto de los señores Jueces
Supremos Torres Vega y Chaves Zapater, dejados y suscritos con
fecha dieciocho de setiembre de dos mil catorce; conforme lo
señala el artículo 145º del Texto Único Ordenado de la Ley
Orgánica del Poder Judicial, y producida la votación con arreglo a
ley; emite la siguiente sentencia: MATERIA DEL RECURSO: Se
trata del recurso de casación interpuesto por la entidad demandada,
Ministerio de Trabajo y Promoción del Empleo, mediante escrito
de fecha 04 de febrero de 2013, obrante de fojas 273 a 276, contra
la Sentencia de Vista de fecha 03 de octubre de 2012, obrante de
fojas 266 a 271, que confirma la sentencia de primera instancia de
fecha 14 de setiembre de 2011, obrante de fojas 213 a 238, que
declara fundada la demanda; en los seguidos por Tito Santa Cruz
Torres, sobre Inclusión en el Registro Nacional de Trabajadores
Cesados Irregularmente. CAUSAL DEL RECURSO: Por
Resolución de fecha 18 de setiembre de 2013, obrante de fojas 41
a 45 del cuaderno de casación formado en esta Sala, se ha
declarado procedente el recurso de casación por la causal de
infracción normativa de los incisos 3) y 5) del artículo 139º de
la Constitución Política del Perú, así como por el artículo 5º de
la Ley Nº 27803. CONSIDERANDO: Primero.- Que, habiéndose
declarado procedentes, denuncias sustentadas en vitio in
procedendo como en vitio in iudicando, corresponde prima facie
efectuar el análisis del error procesal o vitio in procedendo, toda
vez que, de resultar fundada la denuncia en dicho extremo, dada
su incidencia en la tramitación del proceso y su efecto nulificante,
74086
CASACIÓN
carecería de sentido emitir pronunciamiento respecto del
denunciado error material, referido al derecho controvertido en la
presente causa. Respecto a la causal de infracción normativa
del artículo 139º incisos 3) y 5) de la Constitución Política del
Perú. Segundo.- Que, el debido proceso es un principio y derecho
de la función jurisdiccional, consagrado en el inciso 3) del artículo
139º de la Constitución Política del Estado, que tiene por función
velar por el respeto irrestricto de los derechos fundamentales y las
garantías constitucionales que lo integran, dando a toda persona la
posibilidad de recurrir a la justicia para obtener la tutela jurisdiccional
de sus derechos, a través de un procedimiento regular en el que se
dé oportunidad razonable y suficiente de ser oído, ejercer el
derecho de defensa; de producir prueba y obtener una sentencia
debidamente motivada. Tercero.- Que, uno de los contenidos del
derecho al debido proceso es el derecho de obtener de los órganos
judiciales una respuesta razonada, motivada y congruente con las
pretensiones oportunamente deducidas por las partes en cualquier
clase de procesos. La exigencia de que las decisiones judiciales
sean motivadas en proporción a los términos del inciso 5) del
artículo 139º de la Constitución Política del Perú garantiza que los
Jueces, cualquiera sea la instancia a la que pertenezcan, expresen
el proceso lógico que los ha llevado a decidir la controversia,
asegurando que el ejercicio de la potestad de Administrar Justicia
se haga con sujeción a la Constitución y a la Ley, pero también con
la finalidad de facilitar un adecuado ejercicio del derecho de
defensa de los justiciables. Cuarto.- Que, el análisis de la infracción
normativa denunciada, tiene por finalidad examinar si la Sala
Superior ha emitido la recurrida con observancia de las reglas del
debido proceso; al respecto, se advierte que la sentencia de vista
ha sido debidamente motivada, al haber expuesto los fundamentos
de hecho y de derecho que sustentan su decisión, asimismo, no se
advierte afectación a las garantías del debido proceso, habiéndose
desarrollado el proceso con observancia de las normas procesales
aplicables al caso; en tal sentido, no se advierte que se haya
contravenido el principio fundamental del Debido Proceso y la
debida motivación de las resoluciones judiciales que encuentran su
desarrollo en los incisos 3) y 5) del artículo 139º de la Constitución
Política del Estado, por lo que, esta causal debe ser desestimada.
Respecto a la causal de infracción normativa del artículo 5º de
la Ley Nº 27803. Quinto.- Que, examinando la causal material del
presente recurso, se debe señalar que, mediante la Ley Nº 27803
se implementaron las recomendaciones efectuadas por las
Comisiones creadas por las Leyes Nº 27452 y Nº 27586,
encargadas de revisar los ceses colectivos efectuados en las
empresas del estado sujetas a procesos de promoción de la
inversión privada y en las entidades del sector público y gobiernos
locales, la misma que en su artículo 6º establece la conformación
de una Comisión Ejecutiva encargada de analizar la documentación
y los casos de ceses colectivos de trabajadores. Sexto.- Que,
asimismo el artículo 5º de la Ley Nº 27803, establece que, la
Comisión Ejecutiva, creada por única vez, es la encargada de: a)
Analizar los documentos probatorios que presenten los
extrabajadores que consideran que su voluntad fue viciada, a fin de
determinar si existió o no coacción en la manifestación de voluntad
de renunciar. b) Analizar los casos de ceses colectivos de
trabajadores que, habiendo presentado su solicitud de cese hasta
el 23 de julio de 2001, no fueron tomados en cuenta por la entidad
correspondiente. Esta Comisión tomará en cuenta los parámetros
establecidos en el artículo 9º de la presente Ley1. Séptimo.- Que
además, conforme a los párrafos agregados por el artículo 1º de la
Ley Nº 28299, publicada el 22 de julio de 2004: La calificación
efectuada por la Comisión Ejecutiva o la ejecución de los beneficios
a favor de los extrabajadores cuyos ceses sean calificados como
irregulares, es de carácter excepcional, en atención a lo cual, no
generará beneficios distintos a los establecidos en la referida
norma. Octavo.- Que, en ese mismo sentido, mediante Ley Nº
29029, se encargó a la Comisión Ejecutiva creada por Ley Nº
27803, la revisión Complementaria y Final de los casos de los
extrabajadores cuyo derecho fue reconocido por la Resolución
Suprema Nº 021-2003-TR; siendo luego excluidos por Resolución
Suprema Nº 034-2004-TR que en su artículo 3º estableció los
criterios para dicha revisión, incluyendo: a) Los parámetros
establecidos en el artículo 9º de la Ley Nº 27803 y demás normas
vigentes a la fecha de publicación de la Resolución Suprema Nº
021-2003-TR, salvo normas posteriores que favorezcan al
trabajador, y b) la aplicación del principio de analogía vinculante
ante la existencia de casos similares y observación del debido
proceso para la revisión. Noveno.- Que, la sentencia de vista
materia de casación, confirma la sentencia de primera instancia
obrante de fojas 213 a 238 que declara fundada la demanda, al
considerar que mediante Resolución de Junta Empresarial Nº 00496-JE/ESAMO de fecha 09 de abril de 1996, se dio por concluido el
contrato a plazo indeterminado del demandante junto con otros
trabajadores, habiéndose producido dicho cese, sin la existencia
de programas de renuncias voluntarias, ni habiendo cumplido con
el debido procedimiento ante la autoridad administrativa de trabajo
del personal de excedencia; siendo por ello que no se acreditó que
el actor haya sido cesado a través de las modalidades permitidas
por el Decreto ley Nº 26120, siendo dichos hechos por los que la
Sala de mérito concluye que el actor fue cesado dentro de un
procedimiento irregular. Décimo.- Que, de lo descrito se aprecia
que el Colegiado Superior asume indebidamente las funciones
para las que fue creada la Comisión Ejecutiva, tal como se ha
El Peruano
Lunes 1 de febrero de 2016
detallado en el considerando quinto, por lo que se verifica que al
ordenar la inscripción del demandante en el Registro Nacional de
Trabajadores Cesados Irregularmente, infringe el artículo 5º de la
Ley Nº 27803, porque asume funciones que son de competencia
exclusiva de la Comisión, que fue la encargada de analizar los
documentos probatorios presentados por el extrabajador, y
después de ese análisis determinar si existió o no coacción en
virtud de la Ley Nº 29059, llegando a la conclusión que no
corresponde su inclusión al Registro Nacional de Trabajadores
Cesados Irregularmente. Undécimo.- Que, en dicho orden de
ideas, esta Sala Suprema, evidencia que en la sentencia materia
de casación, se ha incurrido en infracción del artículo 5º de la Ley
Nº 27803; y consecuentemente, el recurso que nos ocupa, resulta
fundado. DECISIÓN: Por estas consideraciones, y con lo
expuesto en el Dictamen de la señora Fiscal Suprema en lo
Contencioso Administrativo, y en aplicación del artículo 396º del
Código Procesal Civil; Declararon: FUNDADO el recurso de
casación interpuesto por la entidad demandada, Ministerio de
Trabajo y Promoción del Empleo, de fecha 04 de febrero de
2013, obrante de fojas 273 a 276; en consecuencia, CASARON la
sentencia de vista de fecha 03 de octubre de 2012, obrante de fojas
266 a 271; y actuando en sede de instancia: REVOCARON la
sentencia de primera instancia obrante de fojas 213 a 238, de
fecha 14 de setiembre de 2011, que declara fundada la demanda,
y REFORMÁNDOLA la declararon INFUNDADA; DISPUSIERON
la publicación de la presente Ejecutoria Suprema en el Diario
Oficial "El Peruano", conforme a ley; en los seguidos por Tito
Santa Cruz Torres contra el Ministerio de Trabajo y Promoción
del Empleo, sobre inclusión en el registro nacional de trabajadores
cesados irregularmente; y, los devolvieron.- Interviniendo como
ponente el señor Juez Supremo, Chaves Zapater. S.S. YRIVARREN
FALLAQUE, TORRES VEGA, CHAVES ZAPATER, MALCA
GUAYLUPO. El señor Juez Supremo Yrivarren Fallaque firma su
dirimencia el diez de setiembre de dos mil quince; el señor Juez
Supremo Malca Guaylupo firma su voto suscrito el veintidós de julio
de dos mil quince; los señores Jueces Supremos Torres Vega y
Chaves Zapater firman sus votos suscritos el dieciocho de
setiembre de dos mil catorce; y, conforme a lo dispuesto por el
artículo 149º del Texto Único Ordenado de la Ley Orgánica del
Poder Judicial. Firma para certificar el acto, la doctora Rosmary
Cerrón Bandini, Secretaria de Sala (e). EL VOTO EN DISCORDIA
DE LOS SEÑORES JUECES SUPREMOS RODRÍGUEZ
MENDOZA, CHUMPITAZ RIVERA Y MAC RAE THAYS, ES COMO
SIGUE: CONSIDERANDO: Primero.- Que, al haberse declarado la
procedencia de una causal procesal –contravención del artículo
139º inciso 5) de la Constitución Política del Estado - y de una
causal sustantiva –infracción normativa del artículo 5º de la Ley Nº
27803-, corresponde emitir pronunciamiento con respecto a la
causal procesal, sino se corroborase el vicio procesal denunciado,
se procedería a emitir pronunciamiento respecto a la causal
sustantiva. Segundo.- Que, la causal in procedendo admitida tiene
como sustento determinar si en el caso de autos la sentencia
impugnada ha sido expedida en cumplimiento de lo dispuesto por
el inciso 5) del artículo 139º de la Constitución Política del Estado,
esto es, si se ha observado el debido proceso así como la tutela
jurisdiccional y a la debida motivación de las resoluciones judiciales.
Tercero.- Que, de manera preliminar a la dilucidación de la
presente controversia, este Colegiado Supremo estima conveniente
precisar que el objeto de la presente demanda es que se declare la
nulidad parcial de la Resolución Suprema Nº 028-2009-TR de
fecha 05 de agosto de 2009 y la Carta Nº 33813-2009-MTPE/ST de
fecha 03 de septiembre de 2009; y en consecuencia se ordene a la
entidad demandada que cumpla con inscribirlo en el Registro
Nacional de Trabajadores Cesados Irregularmente. Cuarto.- Que,
la demanda ha sido estimada en la resolución recurrida por
considerar que de la revisión de los actuados se aprecia que el
demandante ha sido cesado conjuntamente con otros trabajadores
mediante la Resolución de Junta Empresarial Nº 004-96-JE/
ESAMO de fecha 09 de abril de 1996, a través de la cual se da por
concluido la relación laboral, conducta que demuestra la
vulneración del debido procedimiento ante la Autoridad
Administrativa de Trabajo, razón por la cual se demuestra la
existencia que el demandante ha sido cesado dentro de un
procedimiento irregular. Quinto.- Que, hecha esta precisión, este
Colegiado Supremo estima conveniente ingresar al análisis del
caso concreto, teniendo en cuenta los específicos supuestos de
afectación que han sido denunciados por la parte recurrente. De la
causal procesal: Incisos 3) y 5) del artículo 139º de la
Constitución Política. Sexto.- Que, a juicio de la Sala Superior se
aprecia de la Resolución de Junta Empresarial Nº 004-96-JE/
ESAMO de fecha 09 de abril de 1996, a través de la cual se da por
concluido el contrato a plazo indeterminado del demandante y
otros trabajadores se observa que dicho cese se produjo sin la
existencia de programas de renuncias voluntarias, así como
inaplicando el debido procedimiento administrativo ante la
Autoridad Administrativa de Trabajo del personal en excedencia, y
al no haberse acreditado que el demandante haya sido cesado a
través de las dos modalidades permitidas por el Decreto Ley Nº
26120, con lo que se determina que el demandante fue cesado
dentro de un procedimiento irregular. Séptimo.- Que, en
consonancia con ello, este Colegiado Supremo estima que la Sala
Superior ha resuelto según su criterio, expresando una decisión
razonada, motivada y congruente con la pretensión formulada por
El Peruano
Lunes 1 de febrero de 2016
CASACIÓN
el demandante; apreciándose, además que la misma se encuentra
justificada; por lo que el extremo relacionado con la infracción del
artículo 139º incisos 3) y 5) de la Constitución Política del Estado
deviene en infundado. De la causal material: Articulo 5º de la
Ley Nº 27803. Octavo.- Que, al respecto, cabe mencionar que el
artículo 5º de la Ley Nº 27803 explica cuáles serán los criterios que
las Comisiones utilizaron para cumplir sus objetivos: Créase por
única vez una Comisión Ejecutiva que estará encargada de lo
siguiente: 1. Analizar los documentos probatorios que presenten
los extrabajadores que consideran que su voluntad fue viciada, a
fin de determinar si existió o no coacción en la manifestación de
voluntad de renunciar. 2. Analizar los casos de ceses colectivos de
trabajadores que, habiendo presentado su solicitud de cese hasta
el 23 de julio de 2001, no fueron tomados en cuenta por la entidad
correspondiente. Esta Comisión tomará en cuenta los parámetros
establecidos en el artículo 9º de la presente Ley. La calificación
efectuada por la Comisión Ejecutiva o la ejecución de los beneficios
a favor de los extrabajadores cuyos ceses sean calificados como
irregulares, es de carácter excepcional; en atención a ello, no
generará beneficios distintos a los establecidos en la presente Ley.
Entiéndase que dentro de los beneficios comprendidos en la
presente Ley se encuentran los precisados en el artículo 18º y la
Segunda Disposición Complementaria. Como se puede observar,
los criterios utilizados al momento de la denegatoria de la inclusión
del demandante en la lista de cesados irregularmente pueden ser
encontrados en la ley reproducida. Noveno.- Que, de conformidad
con el inciso 3) del artículo 9º de la Ley Nº 27803 se considerara
como: “(…) ceses irregulares aquellos ceses colectivos que se
produjeron incumpliendo los procedimientos legales establecidos
en el Decreto Legislativo Nº 276 contraviniendo los procedimientos
de excedencia regulados en el Decreto Ley Nº 26093 y contrarios
a los procedimientos establecidos en las normas de reorganización
autorizados por norma legal expresa”. Décimo.- Que, en el
presente caso, analizaremos si el procedimiento de despido del
demandante se sujeto o no a las disposiciones normativas vigentes
en la época que regularon el proceso de racionalización de
personal en las empresas del Estado de acuerdo con el Decreto
Ley Nº 26120. Undécimo.- Que, de la revisión de los actuados se
aprecia la Resolución de Junta Empresarial Nº 004-96-JE/ESAMO
de fecha 09 de abril de 1996, emitida por la Empresa de
Saneamiento de Moquegua - ESAMO en Sesión de Junta
Empresarial de fecha 02 de enero de 1996, se declaró por
unanimidad, la Reorganización y Reestructuración de ESAMO en
base al acuerdo autoritativo del Municipio Provincial de Mariscal
Nieto, disponiéndose entre otras cosas, la Racionalización de
Personal (fojas 127) y consecuentemente la conclusión de los
contratos a plazo indeterminado de algunos trabajadores, entre
ellos, el demandante. Así también se aprecia que la citada
Resolución de Junta Empresarial se amparo en el Decreto Ley Nº
26120. Duodécimo.- Que, el artículo 7º del Decreto Ley Nº 26120
dispuso que, previo acuerdo de la COPRI, mediante Decreto
Supremo se adoptarían todas las medidas destinadas a lograr la
reestructuración económica, financiera, legal y administrativa, así
como la racionalización de personal de las empresas incluidas en
el proceso de promoción de la inversión privada a que se refiere
que el Decreto Legislativo Nº 674, entre ellas, la Racionalización de
Personal. Este programa consistía en aprobar y poner en ejecución
programas de cese voluntario de personal, con o sin incentivos y
que vencido el plazo para acogerse al programa de cese voluntario,
la empresa debía de presentar a la Autoridad Administrativa de
Trabajo una solicitud de reducción de personal excedente,
adjuntado la nómina de los trabajadores comprendidos en tal
medida; se señalaba, en dicha norma que los trabajadores que
cesaron por efecto del proceso de reducción solo tendrán derecho
a percibir los beneficios sociales correspondientes de acuerdo a
ley, sin que sea procedente el otorgamiento de beneficios
adicionales. Refiere también la norma que la Autoridad
Administrativa de Trabajo aprobaría el Programa de Reducción
propuesto dentro de los 05 días de presentada la solicitud, sin que
sea aplicable el procedimiento previsto por el Decreto Legislativo
Nº 728. Décimo Tercero.- Que, como se aprecia la norma
establece dos etapas a seguir, la primera consistente en acoger las
solicitudes de cese voluntario y, una segunda, que se aplicaría una
vez vencido el plazo para solicitar el cese voluntario (elaboración
de una nómina de trabajadores excedentes). Décimo Cuarto.Que, en el presente caso, se aprecia que la Empresa de Servicios
de Saneamiento procedió a emitir Resolución Administrativa de
cese de un grupo de trabajadores entre los cuales se encuentra el
demandante de manera directa, es decir, sin que previamente se
hayan efectuado las citadas etapas y ello se desprende de los
propios argumentos de la Resolución de Junta Empresarial Nº 00496-JE/ESAMO de fecha 09 de abril de 1996, donde no se hace más
que mencionar que resultaba necesario realizar una reorganización
de personal y da por concluido el contrato de varios trabajadores,
entre ellos, el demandante, por considerar que su nombramiento
fue irregular, pese haber laborado para su empleadora desde 1992.
En otras palabras, ni siquiera se le dio la oportunidad al demandante
de cesar de manera voluntaria como lo dispuso el Decreto
Legislativo Nº 26120. Décimo Quinto.- Que, siendo ello así, se
aprecia que en el cese del demandante no se ha cumplido con los
procedimientos establecidos en las normas de reorganización
autorizados por el Decreto Legislativo Nº 26120, de lo cual se
deduce que éste se suscitó de manera irregular, conforme a lo
74087
dispuesto en el artículo 3º de la Ley Nº 29059 y artículo 9º de la Ley
Nº 27803. Décimo Sexto.- Que, si bien, el Procurador Público del
Ministerio de Trabajo y Promoción del Empleo alega la infracción al
artículo 5º de la Ley Nº 27803, considerando que la Sala Superior
no ha evaluado la existencia de coacción; sin embargo, en el
presente caso no se ha determinado que el cese del demandante
se haya producido a través de una renuncia de su parte que haya
sido coaccionada por su ex empleador, sino, más bien, dicho cese
se produjo a través de un procedimiento irregular, razón por la cual
no se verifica la infracción normativa invocada, razón por la cual el
recurso deviene en infundado. DECISIÓN: Por estas
consideraciones, NUESTRO VOTO es porque se declare
INFUNDADO el recurso de casación interpuesto por el Procurador
Público del Ministerio de Trabajo y Promoción del Empleo,
obrante de fojas 273 a 276; en consecuencia, NO SE CASE la
sentencia de vista de fecha 03 de octubre de 2012, obrante de fojas
266 a 271; en los seguidos por Tito Santa Cruz Torres contra el
Ministerio de Trabajo y Promoción del Empleo, sobre inclusión
en el registro nacional de trabajadores cesados irregularmente.
S.S. RODRÍGUEZ MENDOZA, CHUMPITAZ RIVERA, MAC RAE
THAYS. Los señores Jueces Supremos Rodríguez Mendoza,
Chumpitaz Rivera y Mac Rae Thays, firman sus votos suscritos el
dieciocho de setiembre de dos mil catorce, conforme a lo dispuesto
por el artículo 149º del Texto Único Ordenado de la Ley Orgánica
del Poder Judicial. Firma para certificar el acto, la doctora Rosmary
Cerrón Bandini, Secretaria de Sala (e).
1
Artículo 9° de la Ley N° 27803 .- De los cesados irregularmente en las
entidades del Sector Público
Para efectos de lo señalado en el segundo párrafo del artículo anterior
(individualizar a los trabajadores del Sector Público y Gobiernos Locales cuyos
ceses son irregulares), se deberá tomar en cuenta los siguientes parámetros: 1.
Considerar únicamente las solicitudes de revisión de cese cursadas al amparo
de la Ley Nº 27487 y normas reglamentarias, según lo analizado por la Comisión
Multisectorial creada por Ley Nº 27586 y la Comisión Ejecutiva referida en el artículo
5º de la presente Ley. 2. Considerar únicamente a los ex trabajadores que cesaron
por renuncia coaccionada, conforme lo determine la Comisión Ejecutiva referida
en el artículo 5° de la presente Ley. 3. Se considerará como ceses irregulares
aquellos ceses colectivos que se produjeron incumpliendo los procedimientos
legales establecidos en el Decreto Legislativo Nº 276, contraviniendo los
procedimientos de excedencia regulados en el Decreto Ley Nº 26093 y contrarios a
los procedimientos establecidos en las normas de reorganización autorizados por
norma legal expresa.
Se considerará como ceses colectivos irregulares, aquellos que afectaron a los
obreros municipales al amparo del Decreto Ley Nº 26093 fuera del ámbito de la
Octava Disposición Final de la Ley Nº 26553.
C-1335410-61
CAS. Nº 6926-2013 LIMA
Inclusión en RNTCI, Ley 27803La sentencia de vista afecta el
derecho a un debido proceso y a la motivación de las resoluciones
judiciales, previsto en el artículo 139 incisos 3 y 5 de la
Constitución Política, al incurrir en motivación aparente ya que la
argumentación que sustenta su decisión, no resulta ser la
apropiada, al no haber tomado en cuenta lo prescrito en el artículo
5 de la Ley N° 27803, dispositivo legal por el cual se crea (y se
encarga a) la Comisión Ejecutiva como único órgano administrativo
encargado de revisar los Ceses Colectivos efectuados en la
década del año mil novecientos noventa y, determinar de esta
forma, si existió o no, un cese irregular en caso del trabajador
accionante; así como por haber resuelto el caso con prueba
diminuta o insuficiente. Lima, doce de agosto de dos mil quince.
LA PRIMERA SALA DE DERECHO CONSTITUCIONAL Y
SOCIAL TRANSITORIA DE LA CORTE SUPREMA DE JUSTICIA
DE LA REPÚBLICA: VISTA: La causa, con el acompañado, en
discordia, el señor Juez Supremo Malca Guaylupo se adhiere al
voto de los señores Jueces Supremos Torres Vega, Chaves
Zapater, De La Rosa Bedriñana; dejados y suscritos con fecha
veintitrés de octubre de dos mil catorce, conforme lo señala el
artículo 145° del Texto Único Ordenado de la Ley Orgánica del
Poder Judicial; en audiencia pública llevada acabo en la fecha; y,
luego de verificada la votación con arreglo a Ley, se emite la
siguiente sentencia: MATERIA DEL RECURSO: Se trata del
recurso de casación interpuesto por la entidad demandada,
Ministerio de Trabajo y Promoción del Empleo, de fecha veintiuno
de febrero de dos mil trece, de fojas 208 a 212, contra la sentencia
de vista, de fecha catorce de enero de dos mil trece, de fojas 195
a 200, que revoca la sentencia de primera instancia, de fecha
veintiséis de setiembre de dos mil once, de fojas 144 a 150, que
declara infundada la demanda y reformándola la declararon
fundada en parte; en el Proceso Contencioso Administrativo
seguido por Ángel Custodio Tarazona Arias, sobre Inscripción en
el Registro Nacional de Trabajadores Cesados Irregularmente.
CONSIDERANDO: Primero.- Que, el recurso de casación ha
sido declarado procedente mediante resolución de fecha
dieciocho de setiembre de dos mil trece, de fojas 25 a 29 del
cuaderno de casación, esta Sala Suprema declaró procedente el
recurso de casación, por las causales de: i) Infracción normativa
del artículo 5° de la Ley N° 27803, ii) Infracción normativa del
artículo 30° del Texto Único Ordenado de la Ley N° 27584, y
iii) En forma excepcional por la causal de infracción normativa
de los incisos 3) y 5) del artículo 139° de la Constitución
74088
CASACIÓN
Política del Perú. Segundo.- Que, corresponde en primer
término, por cuestión de orden, emitir pronunciamiento sobre la
causal in procedendo, pues de ser amparada, por su efecto
procesal, carecerá de objeto emitir pronunciamiento sobre la
causal in iudicando. Tercero.- Que, en principio corresponde
señalar que el derecho al debido proceso y a la tutela jurisdiccional
efectiva reconocidos también como principios de la función
jurisdiccional en el inciso 3) del articulo 139° de la Constitución
Política del Perú, así como en el artículo I del Título Preliminar del
Código Procesal Civil, garantizan al justiciable, ante su pedido de
tutela, el deber del órgano jurisdiccional de observar el debido
proceso y de impartir justicia dentro de los estándares mínimos
que su naturaleza impone; así mientras que la tutela jurisdiccional
efectiva supone tanto el derecho de acceso a los órganos de
justicia como la eficacia de lo decidido en la sentencia, es decir,
una concepción genérica que encierra todo lo concerniente al
derecho de acción frente al poder – deber de la jurisdicción; el
derecho al debido proceso en cambio significa la observancia de
los principios y reglas esenciales exigibles dentro del proceso,
entre ellas, el de motivación de las resoluciones judiciales
recogido expresamente dada su importancia en el inciso 5) del
artículo 139° de la Constitución Política del Perú. Cuarto.- Que,
aún cuando la Constitución no garantiza una determinada
extensión de la motivación de las resoluciones judiciales y
tampoco que de manera pormenorizada todas las alegaciones
que las partes puedan formular dentro del proceso sean objeto de
pronunciamiento expreso y detallado, sin embargo, su contenido
esencial se respeta siempre y cuando exista fundamentación
jurídica, congruencia entre lo pedido y lo resuelto y por si misma,
exprese una suficiente justificación de la decisión adoptada, aún
si ésta es breve o concisa, o se presenta el supuesto de
motivación por remisión; de este modo, este derecho
constitucional garantiza que la decisión judicial expresada en el
fallo sea consecuencia de una deducción razonable de los hechos
del caso, las pruebas aportadas y la valoración jurídica de ellas
en la dilucidación de la controversia. Quinto.- Que, desarrollando
este derecho constitucional del inciso 3) del artículo 122° del
Código Procesal Civil que exige que para su validez y eficacia las
resoluciones judiciales debe contener la mención sucesiva de los
puntos sobre los que versa la resolución con las consideraciones,
en orden numérico correlativo, de los fundamentos de hecho que
sustentan la decisión y los respectivos de derecho con la cita de
la norma o normas aplicables en cada punto, según el mérito de
lo actuado; siendo asimismo, deber del juzgador fundamentarla
respetando los principios de jerarquía de las normas y el de
congruencia, según lo postula el inciso 6) de su artículo 50° del
Código Procesal Civil, también bajo sanción de nulidad. Sexto.Que, así también, el Tribunal en la sentencia del trece de octubre
de dos mil ocho, al resolver el Expediente N° 00728-2008-HC1,
respecto de la debida motivación de las resoluciones judiciales,
ha expresado que el derecho a la debida motivación de las
resoluciones importa que los jueces, al resolver las causas,
expresen las razones o justificaciones objetivas que los llevan a
tomar una determinada decisión, las mismas que deben provenir
no sólo del ordenamiento jurídico vigente y aplicable al caso, sino
de los propios hechos debidamente acreditados en el trámite del
proceso. Séptimo.- Que, dentro de ese contexto, se advierte del
análisis del petitorio de la demanda2, de fecha catorce de
diciembre de dos mil cuatro, de fojas 17 a 26, subsanada, de fojas
30 a 31, el accionante solicita se declare la nulidad de la
Resolución Suprema N° 034-2004-TR, y se ordene su Inscripción
en el Registro Nacional de Trabajadores Cesados Irregularmente,
creado por la Ley N° 27803, así como se le incluya dentro del
Beneficio de Compensación Económica, más intereses legales
generados desde el 02 de octubre de 2004, con costas y costos.
Octavo.- Que, de los actuados procesales se verifica que la
sentencia de primera instancia declaró infundada la demanda, al
considerar que durante la secuela del proceso no ha acreditado
con medio probatorio alguno que haya sido coaccionado para
efectos de formular su renuncia o que su exempleador, al haberlo
cesado, haya incumplido los procedimientos legales establecidos
en la ley de la materia. Noveno.- Que, mientras que la sentencia
de vista, revocando la sentencia apelada, declaró fundada en
parte la demanda, al considerar que en este caso se verifica que
existió coacción sobre el demandante para que presente la
renuncia a su puesto de trabajo, lo que fluye de la apreciación
conjunta y razonada de los documentos presentados pues fue
declarado excedente y se le recomendó acogerse al II Programa
de Racionalización de Personal de EMSAL S.A. y la Directiva N°
004-92-CONADE; en consecuencia, el actor presentó su renuncia
a fin de no perder los incentivos otorgados en el mencionado
programa, hecho que no impide que pueda verificarse la coacción
ejercida en su contra. Décimo.- Que, siendo esto así, es de
advertir que el órgano de segunda instancia ha incurrido en un
vicio de motivación aparente - entendida ésta cuando una
resolución judicial si bien contiene las razones de hecho y de
derecho que justifican la decisión del juzgador, éstas no son
pertinentes para tal efecto, sino que son simuladas, inapropiadas
o falsas en la medida que en realidad no son idóneas para adoptar
la decisión final - ya que la argumentación que sustenta su
decisión, no resulta ser la apropiada, al no haber tomado en
cuenta lo prescrito en el artículo 5°3 de la Ley N° 27803, dispositivo
legal por el cual se crea la Comisión Ejecutiva como único órgano
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Lunes 1 de febrero de 2016
administrativo encargado de revisar los Ceses Colectivos
efectuados en la década del año mil novecientos noventa y,
determinar de esta forma, si existió o no, coacción al momento de
que los trabajadores expresaron su voluntad de renunciar; y, si
como sostiene el Colegiado Superior, solo en base a lo señalado
en el Certificado de Trabajo, a fojas 08 y la liquidación de
beneficios sociales de fojas 09 a 10, dicho análisis atenta contra
el debido proceso, en tanto transgrede lo establecido respecto a
los medios probatorios que deberían ser materia de análisis y
pronunciamiento en los procesos contenciosos administrativos,
tal como lo señala el artículo 27° de la Ley N° 27584 y el artículo
30° de su Texto Único Ordenado aprobado por el Decreto
Supremo N° 013-2008-JUS, pues no puede incorporarse al
proceso la probanza de hechos nuevos o no alegados en la etapa
prejudicial, aspecto que no ha sido ponderado por la Sala
Superior. Finalmente, no expone cuál es la fuente de orden legal,
que en el presente caso, permita al órgano jurisdiccional evaluar
la actuación administrativa, respecto de la inclusión en el listado
de trabajadores cesados irregularmente. Undécimo.- Que,
sostener un razonamiento como el esbozado por el Ad Quem en
la sentencia recurrida, conllevaría no sólo a asumir competencias
que la Ley no prevé sino también a vulnerar uno de los principios
más importantes del Derecho Administrativo, como es el principio
de legalidad, previsto en el artículo IV, inciso 1), numeral 1.1) del
Título Preliminar de la Ley N° 27444, Ley del Procedimiento
Administrativo General, por el cual se establece que todas las
autoridades administrativas que componen el Estado deben
actuar con respeto a la Constitución, la Ley y al Derecho, dentro
de las facultades que le estén atribuidas y de acuerdo con los
fines para los que fueron conferidas dichas facultades. Al
respecto, Ochoa Cardich4 precisa que: “(…) La Administración
Pública, a diferencia de los particulares, no goza de la llamada
libertad negativa (nadie está obligado a hacer lo que la ley no
manda, ni impedido a hacer lo que esta no prohíbe) o principio de
no coacción, dado que solo puede hacer aquello para lo cual está
facultada en forma expresa”. En ese sentido, el órgano colegiado
superior al momento de merituar nuevamente la controversia
deberá tener en cuenta que la Administración tiene su fundamento
y el límite de su acción en la ley, ya que de lo contrario, se
vulneraría el Estado de Derecho. Duodécimo.- Que, asimismo,
es de advertir que la Sala en todo caso no justifica adecuadamente
los motivos por los cuales rehúsa analizar si en el caso concreto
del demandante, su cese laboral por renuncia voluntaria con
incentivos fue irregular, desde que resultaba necesario el análisis
comparativo entre el caso del accionante con otro u otros
extrabajadores de EMSAL S.A., al que se refiere la Sala en la
sentencia de vista, sin tener a la vista por lo menos un expediente
administrativo de algún extrabajador de EMSAL S.A. incluido en
alguna de las listas de extrabajadores cesados irregularmente.
Así como no se ha efectuado un análisis comparativo fáctico entre
el caso del actor y de otro u otros extrabajadores que permitiera
determinar la existencia de un efectivo tratamiento diferenciado
por la Comisión Ejecutiva, no siendo razonable deducirlo
únicamente del certificado de trabajo, a fojas 08, la liquidación de
beneficios sociales, de fojas 09 a 10 y del Memorando Circular, a
fojas 07. Décimo Tercero.- Que, por tanto, los vicios y omisiones
advertidos en la sentencia de vista, afectan la garantía y principio
no sólo del debido proceso y la tutela jurisdiccional efectiva, sino
también de motivación de las resoluciones consagrados en el
artículo 139° incisos 3) y 5) de la Carta Fundamental, que
encuentra desarrollo legal en el artículo 122° inciso 3) del Código
Procesal Civil, en tanto que para la validez y eficacia de las
resoluciones judiciales exige, bajo sanción de nulidad, que éstas
contengan los fundamentos de hecho que sustentan la decisión y
los respectivos de derecho con la cita de la norma o normas
aplicables en cada punto, según el mérito de lo actuado y lo
invocado por las partes; en consecuencia, frente a la invalidez
insubsanable de la sentencia de vista, corresponde disponer que
el Ad Quem emita nuevo pronunciamiento conforme a lo expuesto
precedentemente. Décimo Cuarto.- Que, además, conforme a
los alcances del artículo 197° del Código Procesal Civil todos los
medios probatorios son valorados por el Juez en forma conjunta,
utilizando su apreciación razonada, expresando en la resolución
las valoraciones esenciales y determinantes que sustentan la
decisión. Asimismo, cabe agregar que conforme afirma Igartua
Salaverría5 que: “La valoración individualizada de las pruebas y la
valoración conjunta se necesitan recíprocamente. No hay
valoración conjunta racional si previamente no se ha tomado en
cuenta el valor de los distintos elementos que forman aquel
conjunto (…)”. De modo que a fin de no incurrir en indebida
valoración de la prueba, por ende expresar una motivación
aparente, es deber de todo órgano jurisdiccional, en cautela del
debido proceso, resolver la controversia puesta a su conocimiento
según el mérito de lo actuado. Décimo Quinto.- Que, en
consecuencia, corresponde amparar el extraordinario medio
impugnatorio sub analisis, al verificar que la sentencia de vista
expresada por la Sala Superior, vulnera los principios de
motivación de las resoluciones judiciales y al debido proceso, por
lo que el recurso resulta fundado. Por los efectos de la presente
decisión carece de objeto emitir pronunciamiento respecto a la
causal de infracción normativa material calificada procedente.
DECISIÓN: Por estas consideraciones y, con lo expuesto en el
Dictamen del señor Fiscal Supremo en lo Contencioso
El Peruano
Lunes 1 de febrero de 2016
CASACIÓN
Administrativo; y, en aplicación del artículo 396° del Código
Procesal Civil, declararon FUNDADO el recurso de casación
interpuesto por la entidad demandada, Ministerio de Trabajo y
Promoción del Empleo, de fecha veintiuno de febrero de dos mil
trece, de fojas 208 a 212; en consecuencia: NULA la sentencia de
vista, contra la sentencia de vista, de fecha catorce de enero de
dos mil trece, de fojas 195 a 200; ORDENARON que la Sala
Superior de origen emita nuevo fallo de acuerdo a ley y a las
directivas emitidas en esta resolución; DISPUSIERON la
publicación de la presente resolución en el Diario Oficial “El
Peruano”, conforme a Ley; en el Proceso Contencioso
Administrativo seguido por Ángel Custodio Tarazona Arias, sobre
Inscripción en el Registro Nacional de Trabajadores Cesados
Irregularmente; y, los devolvieron. S.S. TORRES VEGA, CHAVES
ZAPATER, DE LA ROSA BEDRIÑANA, MALCA GUAYLUPO. El
señor Juez Supremo Malca Guaylupo firma su dirimencia el doce
de agosto de dos mil quince; los señores Jueces Supremos Torres
Vega, Chaves Zapater y De La Rosa Bedriñana; firman sus votos
dejados y suscritos con fecha veintitrés de octubre de dos mil
catorce, conforme a lo dispuesto por el artículo 149° del Texto
Único Ordenado de la Ley Orgánica del Poder Judicial. Firma
para certificar el acto, la doctora Rosmary Cerrón Bandini,
Secretaria de Sala (e). LOS FUNDAMENTOS DEL VOTO EN
DISCORDIA DE LOS SEÑORES JUECES SUPREMOS
RODRIGUEZ MENDOZA Y CHUMPITAZ RIVERA, SON LOS
SIGUIENTES: CAUSALES DEL RECURSO: Mediante resolución
de fecha dieciocho de setiembre de dos mil trece, de fojas 25 a 29
del cuaderno de casación, esta Sala Suprema declaró procedente
el recurso de casación, por las causales de: i) Infracción
normativa del artículo 5° de la Ley N° 27803, ii) Infracción
normativa del artículo 30° del Texto Único Ordenado de la Ley
N° 27584, y iii) En forma excepcional por la causal de
infracción normativa de los incisos 3) y 5) del artículo 139° de
la Constitución Política del Perú. CONSIDERANDO: Primero.Que, la infracción normativa puede ser conceptualizada como la
afectación de las normas jurídicas en las que incurre la Sala
Superior al emitir una resolución, originando con ello que la parte
que se considere afectada por la misma pueda interponer el
respectivo recurso de casación. Respecto de los alcances del
concepto de infracción normativa, quedan subsumidos en el
mismo, las causales que anteriormente contemplaba el Código
Procesal Civil en su artículo 386°, relativas a interpretación
errónea, aplicación indebida e inaplicación de una norma de
derecho material, pero además incluyen otro tipo de normas
como son las de carácter adjetivo. Segundo.- Delimitación del
caso. a. El petitorio de la demanda de fecha catorce de diciembre
de dos mil cuatro, de fojas 17 a 26, subsanada de fojas 30 a 31,
tiene por objeto que el órgano jurisdiccional declare ineficaz o
nula la Resolución Suprema N° 034-2004-TR de fecha uno de
octubre de dos mil cuatro, al no haber sido incluido el demandante
dentro del Registro Nacional de Trabajadores Cesados
Irregularmente. En forma acumulativa, objetiva y accesoria,
solicita se le inscriba y considere dentro del Registro Nacional de
Trabajadores Cesados Irregularmente; se le incluya dentro de los
beneficios del Programa Extraordinario contemplado en el artículo
3° de la Ley N° 27803, específicamente dentro de la compensación
económica; el pago de intereses legales del beneficio de la
compensación económica que se hayan generado a partir del dos
de octubre de dos mil cuatro; y, el pago de costos y costas del
proceso. b. Mediante sentencia de primera instancia, de fecha
veintiséis de setiembre de dos mil once, de fojas 144 a 150, el
Tercer Juzgado Especializado en lo Contencioso Administrativo
de la Corte Superior de Justicia de Lima declaró infundada la
demanda al considerar que, el actor no ha acreditado con medio
probatorio alguno que haya sido coaccionado para efectos de
formular su renuncia o que su exempleador, al haberlo cesado,
haya incumplido los procedimientos legales establecidos en la ley
de la materia. c. El Colegiado de la Sala Superior revoca la
sentencia apelada que declaró infundada la demanda y
reformándola la declararon fundada en parte, al considerar que
en el presente caso se verifica que existió la coacción sobre el
demandante para que presente su renuncia a su puesto de
trabajo, lo que fluye de la apreciación conjunta y razonada de los
documentos presentados pues fue declarado excedente y se le
recomendó acogerse al II Programa de Racionalización de
Personal de EMSAL S.A. y la Directiva N° 004-92-CONADE, en
consecuencia, el actor presentó su renuncia a fin de no perder los
incentivos otorgados en el mencionado programa, hecho que no
impide que pueda verificarse la coacción ejercida en su contra.
Tercero.- Que, habiéndose declarado procedentes las denuncias
sustentadas en vicios in procedendo como vicios in iudicando,
corresponde efectuar el análisis del error procesal, toda vez que
de resultar fundadas las denuncias, dada su incidencia en la
tramitación del proceso y su efecto nulificante, carecería de
sentido emitir pronunciamiento respecto de los errores materiales.
Cuarto.- Que, el debido proceso es un principio y derecho de la
función jurisdiccional, consagrado en el inciso 3) del artículo 139°
de la Constitución Política del Perú, que tiene por función velar
por el respeto irrestricto de los derechos fundamentales y las
garantías constitucionales que lo integran, dando a toda persona
la posibilidad de recurrir a la justicia para obtener la tutela
jurisdiccional de sus derechos, a través de un procedimiento
regular en el que se dé oportunidad razonable y suficiente de ser
74089
oído, ejercer el derecho de defensa; de producir prueba y obtener
una sentencia debidamente motivada. Quinto.- Que, asimismo,
se debe señalar que el principio procesal de la motivación escrita
de las resoluciones judiciales se halla consagrado en el inciso 5)
del artículo 139° de la Constitución Política del Perú, el cual tiene
como finalidad principal el de permitir el acceso de los justiciables
al razonamiento lógico jurídico empleado por las instancias de
mérito para justificar sus decisiones jurisdiccionales y así puedan
ejercer adecuadamente su derecho de defensa, cuestionando de
ser el caso, el contenido y la decisión asumida. Esta motivación
escrita de las resoluciones judiciales constituye un deber para los
magistrados, tal como lo establecen los artículos 50° inciso 6) y
122° inciso 3) del Código Procesal Civil; y dicho deber implica que
los juzgadores señalen en forma expresa la ley que aplican con el
razonamiento jurídico a la que ésta les ha llevado, así como los
fundamentos fácticos que sustentan su decisión, respetando los
principios de jerarquía de normas y de congruencia. Sexto.- Que,
si bien en el presente caso se ha declarado la procedencia del
recurso de casación por la causal de infracción normativa de
los incisos 3) y 5) del artículo 139° de la Constitución Política
del Perú, se aprecia de autos que la Sala Superior ha empleado
en forma suficiente los fundamentos que le han servido de base
para estimar la demanda, argumentos que no resultan contrarios
a lo establecido por esta Sala Suprema y el Tribunal Constitucional,
y que no pueden analizarse a través de una causal in procedendo,
consideraciones por las cuales la causal de infracción normativa
de los incisos 3) y 5) del artículo 139° de la Constitución Política
del Perú resulta infundada. Séptimo.- Que, respecto a la
infracción normativa del artículo 30° del Texto Único
Ordenado de la Ley N° 27584, aprobado por el Decreto
Supremo N° 013-2008-JUS, debemos mencionar que dicho
dispositivo señala lo siguiente: “En el proceso contencioso
administrativo, la actividad probatoria se restringe a las
actuaciones recogidas en el procedimiento administrativo, salvo
que se produzcan nuevos hechos o que se trate de hechos que
hayan sido conocidos con posterioridad al inicio del proceso. En
cualquiera de estos supuestos, podrá acompañarse los
respectivos medios probatorios (…)”, al respecto se debe precisar
que, si bien en el expediente administrativo no obra toda la
documentación acompañada por el actor en sede judicial, en
relación a la coacción que habría sufrido al momento de renunciar;
también lo que es, omitir pronunciamiento de fondo supondría
una vulneración a los principios de justicia, equidad e igualdad de
derechos, principios que deben prevalecer conjuntamente con el
de plena jurisdicción que inspira al proceso contencioso
administrativo, por el cual el juez de la causa puede adoptar o
disponer las medidas que considere pertinentes a fin de superar
los requisitos formales que pudieran haberse obviado en tanto
que estos requisitos deben ser interpretados en el sentido más
favorable al demandante, evitando que las formalidades
procesales obstaculicen el derecho al acceso a la justicia, por lo
que la búsqueda de la verdad jurídica objetiva debe permitir la
valoración de medios probatorios en aquellos casos en los que
resulten relevantes o decisivos para la justa solución de la causa;
máxime si, en el presente caso, la entidad demandada ha ejercido
plenamente su derecho de defensa al haber tenido la oportunidad
de ofrecer y producir las pruebas necesarias que generen
convicción en relación a la documentación presentada por el
demandante; en consecuencia, se advierte que el Ad Quem no ha
vulnerado la alegada norma, deviniendo en infundada la causal
de infracción normativa del artículo 30° del Texto Único Ordenado
de la Ley N° 27584, aprobado por el Decreto Supremo N° 0132008-JUS. Octavo.- Que, en cuanto a la infracción normativa
del artículo 5° de la Ley N° 27803, es menester precisar que
mediante el artículo 4° de la acotada Ley se crea el Registro
Nacional de Trabajadores Cesados Irregularmente, siendo
requisito indispensable la inscripción en el mismo para acceder
de manera voluntaria, alternativa y excluyente al programa
extraordinario de acceso a beneficios; y, tal como lo señala el
artículo 5°6 de la Ley N° 27803, se crea por única vez una
Comisión Ejecutiva para analizar los documentos probatorios, a
fin de determinar si existió o no coacción en la manifestación de
voluntad de renunciar, siendo sus decisiones susceptibles de ser
revisadas en aplicación de lo establecido por el artículo 148° de la
Constitución Política del Perú que señala que: “Las resoluciones
administrativas que causan estado son susceptibles de
impugnación mediante la acción contenciosa administrativa.”, en
concordancia con el artículo 1° del Texto Único Ordenado de la
Ley N° 27584, aprobado por el Decreto Supremo N° 013-2008JUS que precisa que: “La acción contenciosa administrativa
prevista en el artículo 148° de la Constitución Política del Perú
tiene por finalidad el control jurídico por el Poder Judicial de las
actuaciones de la administración pública sujetas al derecho
administrativo y a la efectiva tutela de los derechos e intereses de
los administrados.”, criterio compartido por el Tribunal
Constitucional como se advierte de las sentencias recaídas en lo
Expedientes N° 0048-2004-AI/TC, N° 4587-2004-AA/TC, N°
0004-2006-PI/TC y N° 5652-2007-PA, en las que se revisó el
pedido de extrabajadores cesados que no fueron inscritos en el
Registro Nacional de Trabajadores Cesados Irregularmente.
Noveno.- Que, asimismo, el artículo 3° de la Ley N° 29059
publicada el 06 de julio de 2007, dispone como criterios que debe
seguir la Comisión Ejecutiva para la revisión de los ceses
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CASACIÓN
colectivos, los que a continuación se detalla: i) Los parámetros
establecidos en el artículo 9°7 de la Ley N° 27803 y demás normas
vigentes a la fecha de la publicación de la Resolución Suprema N°
021-2003-TR, salvo normas posteriores que favorecen al
trabajador; y ii) Aplicación del principio de analogía vinculante
ante la existencia de casos similares y observación del debido
proceso. Décimo.- Que, en este contexto corresponde a los
extrabajadores que se consideren comprendidos en los supuestos
de la normatividad ya indicada, acreditar ante la Comisión
Ejecutiva, con los medios probatorios necesarios, los siguientes
supuestos: i) Que su voluntad fue viciada al momento de renunciar
a su centro de labores, ya sea por coacción u otro vicio de la
voluntad; ii) Que fue objeto de cese colectivo irregular, producido
como consecuencia del proceso de inversión privada de la
Empresa de Estado en la cual trabajaba; iii) Que fue objeto de
cese colectivo, el cual se produjo incumpliendo los procedimientos
legales establecidos en el Decreto Legislativo N° 276,
contraviniendo los procedimientos de excedencia regulados en el
Decreto Ley N°. 26093 o contrario a los procedimientos
establecidos en las normas de reorganización; o, iv) Que existe
un caso similar al suyo que fue atendido favorablemente por la
Comisión Ejecutiva. Undécimo.- Que, asimismo, conforme se
aprecia del numeral 4.3.1) ítem b), del Informe Final de junio de
20098, la Comisión Ejecutiva sostiene que sobre las invitaciones a
renunciar, circulares, directivas internas, comunicados y en
general todo documento mediante el cual se puso en conocimiento
de los extrabajadores la existencia de un programa de renuncias
o las formas en que se llevarían a cabo dicho programas, se
considerará indistintamente para la determinación de la coacción,
entre otros, documentos que precisen que la consecuencia del no
acogimiento al programa de renuncias conllevaría a la excedencia
o reducción de personal, así como documentos que señalen que
si no se acogen a los programas de renuncias, serán evaluados o
cesados y/o cesado, es decir, se aprecia el cese como
consecuencia directa de la no renuncia. Duodécimo.- Que,
conforme han valorado las instancias de mérito, en el caso de
autos, mediante el Memorándum Circular de fecha 23 de
noviembre de 1992, a fojas 07, la Empresa de la Sal S.A.
comunica a todo su personal que el II Programa de Racionalización
de Personal alcanza a todos los trabajadores que a la fecha
cuenten con más de 12 meses de trabajo bajo la modalidad de
contrato a plazo indeterminado; asimismo, se les comunica que
dichos trabajadores tienen expedito su derecho a presentar su
carta de renuncia voluntaria y acogerse a los beneficios del
incentivo económico que ofrece el mencionado programa hasta el
27 de dicho mes y año; de igual forma, se señala que en caso no
formalicen su renuncia serán declarados excedentes en base a
los resultados de la prueba a que haya sido sometido cada
trabajador y en función a la nueva estructura orgánica de la
empresa; en virtud a ello, se aprecia que a través de la Carta N°
044-S-SH-92, de fecha veinticinco de noviembre de mil
novecientos noventa y dos, a fojas 116, la empresa acotada
comunica al demandante que no ha sido considerado en la nueva
estructura orgánica de EMSAL S.A, en vista de no cumplir con los
requisitos exigidos y siendo además que el cargo que venía
desempeñando ya no existe en la acotada estructura,
consecuentemente,
tiene
la
calidad
de
excedente,
recomendándosele tener presente el II Programa de
Racionalización de Personal de la Empresa y la Directiva N°
004-92-CONADE. Bajo dicho contexto, se advierte que el
Certificado de Trabajo, obrante a fojas 08, señala como causa de
cese, su renuncia voluntaria el 12 de diciembre de 1992, lo que se
ratifica con su Liquidación de Beneficios Sociales por
Compensación por Tiempo de Servicios, de fojas 9 a 10, en la que
se señala que éste cesó acogiéndose al II Programa de
Racionalización de Personal de EMSAL 92 - Renuncia con
Incentivos, conforme se le indicara en el mencionado
Memorándum Circular. Décimo Tercero.- Que, en este orden de
ideas, del examen de la sentencia de vista emitida por la instancia
de mérito, se verifica que esta ha actuado conforme a derecho, al
haber determinado que el demandante ha acreditado, con medios
probatorios suficientes e idóneos, la coacción a la que fue
sometido al momento de renunciar, ello por cuanto dos días
después de emitirse el mencionado Memorándum Circular de
fecha 23 de noviembre de 1992, se le pone de conocimiento que
tiene la calidad de “excedente”, lo que hace suponer que en un
breve lapso de tiempo entre la “invitación” a renunciar y la
declaración de excedencia, la voluntad del demandante fue
presionada por parte de la empresa, razón por la cual, a fin de no
verse perjudicado en su esfera patrimonial y poder percibir el
beneficio del incentivo económico, el demandante presentó su
carta de renuncia “voluntaria”; advirtiéndose además que, no obra
en autos documentación alguna que acredite que el actor recibió
los incentivos económicos derivados de su renuncia, pues solo se
aprecia la acotada Liquidación de Beneficios Sociales por
Compensación por Tiempo de Servicios, de fojas 9 a 10, por la
suma de S/. 13,878.64, y la liquidación de parte que obra en el
Expediente Administrativo, efectuada por el demandante respecto
a sus beneficios sociales adeudados por reclamar, incluido el
incentivo por retiro voluntario, presentada junto con su solicitud
de Inscripción en el Registro Nacional de Trabajadores Cesados
Irregularmente, de fecha 06 de agosto de 2002. Décimo Cuarto.Que, en consecuencia, al haber acreditado el demandante que su
El Peruano
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renuncia fue coaccionada, se concluye que la sentencia de vista
no ha infringido el artículo 5° de la Ley N° 27803, deviniendo en
infundado el recurso interpuesto. DECISION: Por estas
consideraciones, y de conformidad con el Dictamen del señor
Fiscal Supremo en lo Contencioso Administrativo; y, en aplicación
del artículo 397° del Código Procesal Civil, NUESTRO VOTO es
porque se declare INFUNDADO el recurso de casación
interpuesto por la entidad demandada, Ministerio de Trabajo y
Promoción del Empleo, de fecha veintiuno de febrero de dos mil
trece, de fojas 208 a 212; en consecuencia: NO SE CASE la
sentencia de vista, de fecha catorce de enero de dos mil trece, de
fojas 195 a 200 que revoca la sentencia de primera instancia, de
fecha veintiséis de setiembre de dos mil once, de fojas 144 a 150,
que declara infundada la demanda y reformándola la declararon
fundada en parte; sin costas ni costos; SE DISPONGA la
publicación de la presente resolución en el Diario Oficial “El
Peruano”, conforme a Ley; en el Proceso Contencioso
Administrativo seguido por Ángel Custodio Tarazona Arias, sobre
Nulidad de Resolución Suprema N° 034-2004-TR y otros cargos;
y, los devolvieron. S.S. RODRÍGUEZ MENDOZA, CHUMPITAZ
RIVERA. Los señores Jueces Supremos Rodríguez Mendoza y
Chumpitaz Rivera firman sus votos dejados y suscritos con fecha
veintitrés de octubre de dos mil catorce; conforme a lo dispuesto
por el artículo 149° del Texto Único Ordenado de la Ley Orgánica
del Poder Judicial. Firma para certificar el acto, la doctora
Rosmary Cerrón Bandini, Secretaria de Sala (e).
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En su sexto fundamento ha expresado lo siguiente: “Ya en sentencia anterior, este
Tribunal Constitucional (Exp. N° 1480-2006-AA/TC. FJ 2) ha tenido la oportunidad
de precisar que: “El derecho a la debida motivación de las resoluciones importa que
los jueces, al resolver las causas, expresen las razones o justificaciones objetivas
que los llevan a tomar una determinada decisión. Esas razones, (...) deben provenir
no sólo del ordenamiento jurídico vigente y aplicable al caso, sino de los propios
hechos debidamente acreditados en el trámite del proceso. Sin embargo, la tutela
del derecho a la motivación de las resoluciones judiciales no debe ni puede servir
de pretexto para someter a un nuevo examen las cuestiones de fondo ya decididas
por los jueces ordinarios. En tal sentido, (...) el análisis de si en una determinada
resolución judicial se ha violado o no el derecho a la debida motivación de las
resoluciones judiciales debe realizarse a partir de los propios fundamentos
expuestos en la resolución cuestionada, de modo que las demás piezas procesales
o medios probatorios del proceso en cuestión sólo pueden ser evaluados para
contrastar las razones expuestas, mas no pueden ser objeto de una nueva
evaluación o análisis. Esto, porque en este tipo de procesos al juez constitucional
no le incumbe el mérito de la causa, sino el análisis externo de la resolución, a
efectos de constatar si ésta es el resultado de un juicio racional y objetivo donde el
juez ha puesto en evidencia su independencia e imparcialidad en la solución de un
determinado conflicto, sin caer ni en arbitrariedad en la interpretación y aplicación
del derecho, ni en subjetividades o inconsistencias en la valoración de los hechos”.
Incoada con fecha 14 de diciembre de 2004.
Artículo 5.- Comisión Ejecutiva
Créase por única vez una Comisión Ejecutiva que estará encargada de lo siguiente:
1. Analizar los documentos probatorios que presenten los extrabajadores que
consideran que su voluntad fue viciada, a fin de determinar si existió o no coacción
en la manifestación de voluntad de renunciar. 2. Analizar los casos de ceses
colectivos de trabajadores que, habiendo presentado su solicitud de cese hasta el
23 de julio de 2001, no fueron tomados en cuenta por la entidad correspondiente.
Esta Comisión tomará en cuenta los parámetros establecidos en el artículo 9° de la
presente Ley. (…)
OCHOA CARDICH, César. Los Principios Generales del Procedimiento
Administrativo. En: Comentarios a la Ley del Procedimiento Administrativo General
- Ley Nº 27444. Segunda Parte. Ara Editores, Lima, julio - 2003, página 53.
IGARTUA SALAVERRIA, Juan. La motivación de las sentencias, imperativo
constitucional, Madrid: Centro de Estudios Políticos y Constitucionales, página 154.
Artículo 5.- Comisión Ejecutiva
Créase por única vez una Comisión Ejecutiva que estará encargada de lo siguiente:
1. Analizar los documentos probatorios que presenten los extrabajadores que
consideran que su voluntad fue viciada, a fin de determinar si existió o no coacción
en la manifestación de voluntad de renunciar. 2. Analizar los casos de ceses
colectivos de trabajadores que, habiendo presentado su solicitud de cese hasta el
23 de julio de 2001, no fueron tomados en cuenta por la entidad correspondiente.
Esta Comisión tomará en cuenta los parámetros establecidos en el artículo 9° de la
presente Ley.
La calificación efectuada por la Comisión Ejecutiva o la ejecución de los beneficios
a favor de los extrabajadores cuyos ceses sean calificados como irregulares,
es de carácter excepcional, en atención a ello, no generará beneficios distintos
a los establecidos en la presente Ley. Entiéndese que dentro de los beneficios
comprendidos en la presente Ley se encuentran los precisados en el artículo 18° y
Segunda Disposición Complementaria.
Artículo 9.- De los cesados irregularmente en las entidades del Sector
Público
Para efectos de lo señalado en el segundo párrafo del artículo anterior, se
deberá tomar en cuenta los siguientes parámetros: 1. Considerar únicamente las
solicitudes de revisión de cese cursadas al amparo de la Ley Nº 27487 y normas
reglamentarias, según lo analizado por la Comisión Multisectorial creada por
Ley Nº 27586 y la Comisión Ejecutiva referida en el artículo 5° de la presente
Ley. 2. Considerar únicamente a los extrabajadores que cesaron por renuncia
coaccionada, conforme lo determine la Comisión Ejecutiva referida en el artículo
5° de la presente Ley. 3. Se considerará como ceses irregulares aquellos ceses
colectivos que se produjeron incumpliendo los procedimientos legales establecidos
en el Decreto Legislativo Nº 276, contraviniendo los procedimientos de excedencia
regulados en el Decreto Ley Nº 26093 y contrarios a los procedimientos
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CASACIÓN
establecidos en las normas de reorganización autorizados por norma legal expresa.
4. Se considerará como ceses colectivos irregulares, aquellos que afectaron a los
obreros municipales al amparo del Decreto Ley Nº 26093 fuera del ámbito de la
Octava Disposición Final de la Ley Nº 26553.
Véase:
www.mintra.gob.pe/contenidos/destacados/ceses/
PUBLICACIONES_2009/informe_final_ley_29059.
C-1335410-62
CAS. Nº 13637-2013 HUANCAVELICA
La sentencia de vista ha infringido la garantía procesal del debido
proceso, en su expresión del derecho a la tutela jurisdiccional
efectiva, y de la debida motivación, al verificarse la afectación al
principio de favorecimiento del proceso, esto es, prefiriéndose dar
trámite a la demanda en caso que exista alguna duda razonable,
máxime si en el presente proceso se requiere de un pronunciamiento
de fondo. Lima, catorce de abril de dos mil quince. LA PRIMERA
SALA DE DERECHO CONSTITUCIONAL Y SOCIAL
TRANSITORIA DE LA CORTE SUPREMA DE JUSTICIA DE LA
REPÚBLICA. VISTA: La causa número trece mil seiscientos treinta
y siete guión dos mil trece –Huancavelica- en audiencia pública de
la fecha; y, luego de verificada la votación con arreglo a Ley, emite
la siguiente sentencia: MATERIA DEL RECURSO: Se trata del
recurso de casación interpuesto por el demandante Donato Juan
Ramos Curasma, de fecha veintiocho de agosto de dos mil trece,
de folios 171 a 174, contra la sentencia de vista de fecha ocho de
agosto de dos mil trece, de folios 165 a 167, expedida por la Sala
Civil de la Corte Superior de Justicia de Huancavelica, que confirma
la sentencia apelada que declara improcedente la demanda.
FUNDAMENTOS DEL RECURSO: Mediante resolución de fecha
nueve de abril de dos mil catorce, que corre a folios 19 a 22 del
cuaderno de casación, éste Tribunal Supremo ha declarado
procedente en forma excepcional el recurso de casación
interpuesto por el recurrente por la causal establecida en el artículo
386° del Código Procesal Civil, referida a la infracción normativa
del artículo 139° Incisos 3) y 5) de la Constitución Política del
Estado. CONSIDERANDO: Primero.- Que, conforme a lo
preceptuado por el artículo 1° de la Ley N° 27584, norma que
Regula el Proceso Contencioso Administrativo, la acción
contenciosa administrativa prevista en el artículo 148° de la
Constitución Política del Estado, constituye una expresión singular
del Estado de justicia administrativa; es decir, del sometimiento del
poder al Derecho puesto que tiene por finalidad el control jurídico
por parte del Poder Judicial, de las actuaciones de la administración
pública sujetas al Derecho Administrativo y la efectiva tutela de los
derechos e intereses de los administrados en su relación con la
administración. Segundo.- Que el debido proceso es un principio y
derecho de la función jurisdiccional, consagrado en el inciso 3) del
artículo 139° de la Constitución Política del Estado, cuya función es
velar por el respeto irrestricto de los derechos fundamentales y las
garantías constitucionales que lo integran, dando a toda persona la
posibilidad de recurrir a la justicia para obtener la tutela jurisdiccional
de sus derechos, a través de un procedimiento regular en el que se
dé oportunidad razonable y suficiente de ser oído, ejercer el
derecho de defensa, de producir prueba y obtener una sentencia
debidamente motivada. Tercero.- Que, asimismo, uno de los
contenidos del derecho al debido proceso es el derecho de obtener
de los órganos judiciales una respuesta razonada, motivada y
congruente con las pretensiones oportunamente deducidas por las
partes en cualquier clase de proceso. La exigencia primordial es
que las decisiones judiciales sean motivadas en proporción a los
términos del inciso 5) del artículo 139° de la Constitución Política
del Estado, la cual garantiza que los Jueces cualquiera sea la
instancia a la que pertenezcan expresen el proceso lógico que los
ha llevado a decidir la controversia, asegurando que el ejercicio de
la potestad de administrar justicia se haga con sujeción a la
Constitución Política del Estado y a la Ley, así también, con la
finalidad de facilitar un adecuado ejercicio del derecho de defensa
de los justiciables. Cuarto.- Que el derecho a la debida motivación
de las resoluciones judiciales, bajo el marco del contenido
constitucional garantiza la delimitación de otros supuestos que han
sido desarrollados por el Tribunal Constitucional: a) Inexistencia de
motivación o motivación aparente, b) Falta de motivación interna
del razonamiento, c) Deficiencia en la motivación externa:
justificación de las premisas, d) Motivación insuficiente, e)
Motivación sustancialmente incongruente y f) Motivaciones
cualificadas; recogidos en la sentencia del Expediente Nº 007282008-HC/TC. Quinto.- Que, hoy, es reconocido como derecho
fundamental del ciudadano, el obtener de la administración pública
decisiones congruentes y coherentes; y, es obligación del Poder
Judicial efectuar el respectivo control jurídico conforme a lo
señalado anteriormente; por lo que, es posible afirmar que la
existencia de una vulneración de los principios del debido proceso
en detrimento de los derechos del demandante, merece un
pronunciamiento de fondo por parte de esta Sala Suprema, dirigido
a tutelarlos. ANTECEDENTES: Sexto.- Que, conforme se advierte
del escrito de demanda de folios 16 a 21, el demandante Donato
Juan Ramos Curasma emplaza a la directora de la Unidad de
Gestión Educativa Local de Huancavelica y otro; solicitando se
declare nula e ineficaz la Resolución Directoral Regional N° 009022012-DREH de fecha veintitrés de julio de dos mil doce; se declare
nula la Resolución Directoral N° 001560-2012-UGELH de fecha
trece de abril de dos mil doce; solicitando el reconocimiento de
pago de la bonificación especial mensual por concepto de
74091
preparación de clases y evaluación equivalente al treinta por ciento
de la remuneración total, debiendo ser en montos totales o íntegros,
conforme señala la Ley del Profesorado y su reglamento, así como
el pago de los devengados al momento de su nombramiento y/o
vigencia de la Ley e intereses legales que se han generado a partir
del nombramiento y por el retardo en su pago. Séptimo.- Que, en
el caso de autos, la sentencia de vista confirma la sentencia
apelada que declara improcedente la demanda, tras considerar
que en el caso materia de análisis, en su fundamento 4.3) que: “Del
presente proceso, se desprende que, quedó agotada la vía
administrativa con la Resolución Directoral N° 00902-2012-DREH
de fecha 23 de julio de 2012 expedido por el Director Regional de
Educación de Huancavelica, el que obra de fojas 3 y 3 vuelta. El
citado acto administrativo le fue notificado al actor Ramos Curasma
el 5 de setiembre de 2012, como es de verse de fojas 4. Siendo así,
habiendo presentado la demanda en la Central de Distribución
General. CDG de la Corte Superior de Justicia de Huancavelica el
11 de diciembre de 2012, esta es, fuera del plazo de 3 meses, que
tenía expedido para accionar en la vía contencioso administrativa”,
4.4) que: “Por lo señalado en los fundamentos precedentes, es de
precisar que, el mismo Abogado defensor al formular el Recurso de
apelación en el punto 1 del error de hecho (fojas 143) reconoce
expresamente que la demanda se interpuso el 11 de diciembre de
2012. Seguidamente señala que, la interposición de la demanda
con fecha 11 de diciembre de 2012, ello obedece a que los
Trabajadores del Poder se encontraban en huelga a nivel nacional
desde el 15 de noviembre de 2012 hasta el 5 de diciembre de 2012,
razones por las que no habría sido posible presentar su demanda,
por cuanto no había atención al público, (…)”; y, 4.5) que: “Por todo
lo señalado, la interposición de la demanda Contenciosa
Administrativa fue después de vencido el plazo de caducidad
prevista para el caso de autos, en lo normado en el inciso 1 del
artículo 19° de la Ley N° 27584, (…)”. DELIMITACIÓN DE LA
CONTROVERSIA: Octavo.- Que, estando a lo señalado, se
aprecia que la controversia en el presente caso gira alrededor de
determinar si la sentencia de vista se encuentra debidamente
motivada; asimismo, si la misma ha observado la garantía procesal
del debido proceso, para concertar el deber de los órganos
jurisdiccionales de impartir justicia dentro de los estándares
mínimos que garanticen al justiciable su pedido de tutela. Noveno.Que, como quiera que el control de logicidad es el examen que
efectúa la Corte de Casación o Tribunal Superior para conocer si el
razonamiento que realizaron los jueces inferiores es formalmente
correcto y completo desde el punto de vista lógico, esto es, se
quiere verificar el cumplimiento de las reglas que rigen el pensar,
es decir, los errores in cogitando, estando a ello, si existen: a) la
falta de motivación; y, b) la defectuosa motivación, dentro de esta
última la motivación aparente, insuficiente y defectuosa, en sentido
estricto. ANALISIS DE LA CONTROVERSIA: Décimo.- Que el
derecho a la Tutela Jurisdiccional Efectiva, como expresión del
derecho a un debido proceso, en la Sentencia N° 763-2005-PA/TC,
el Tribunal Constitucional ha precisado que este es un derecho de
naturaleza procesal en virtud del cual toda persona o sujeto
justiciable puede acceder a los órganos jurisdiccionales y obtener
una respuesta razonada en torno a la procedencia de su pedido, lo
cual no quiere decir que la Judicatura se sienta obligada a estimar
favorablemente toda pretensión formulada. Undécimo.- Que el
principio de favorecimiento del proceso, recogido en el inciso 3) del
artículo 2° de la Ley N° 27584, constituye un régimen interpretativo
en función del derecho a la tutela jurisdiccional efectiva en virtud
del cual, ante cualquier duda razonable en el momento de calificar
la demanda, se deberá preferir dar trámite al proceso. Por tanto, el
Juez no podrá rechazar liminarmente la demanda en aquellos
casos en los que por falta de precisión del marco legal exista
incertidumbre respecto del agotamiento de la vía previa.
Duodécimo.- Que, el referido principio, valga la redundancia,
impone sobre el Juez la prohibición de declarar la improcedencia
liminar de una demanda en aquellos casos en los que existan duda
razonable y en especial cuando esta duda surge a raíz de la
existencia de imprecisiones normativas en relación al instituto de la
caducidad en el proceso contencioso administrativo. Décimo
Tercero.- Que, esta regulación propia del proceso contencioso
administrativo guarda indiscutible vinculación con el principio pro
actione, de alcances más amplios, en virtud al cual se impone al
juzgador el deber de interpretar las normas en el modo que resulte
más favorable para la admisión y continuación de la demanda,
como formula necesaria para maximizar las posibilidades de
acceso a la tutela jurisdiccional que provee el Estado. En este
modo, la opción de la Ley, de imponer al Juez este particular modo
de solución de las dudas surgidas en la calificación de la demanda,
implica una clara preferencia legislativa por preferir la tutela de los
derechos de los administrados frente a la administración, por
encima a las incertidumbres que el ordenamiento jurídico pudiera
generar en cuanto a la procedencia de una demanda. Décimo
Cuarto.- Que, la Casación N° 10155-2013-Arequipa, emitida por la
Sala de Derecho Constitucional y Social Permanente de la Corte
Suprema de Justicia de la República, refiere en su Sexto
fundamento, que: “No debe pensarse que el principio de
favorecimiento del proceso tenga como propósito dejar sin efecto
los distintos requisitos previstos en la propia Ley para el ejercicio
de la acción contenciosa administrativa, pues es claro que no tiene
como propósito se empleado como un instrumento para defraudar
el marco previsto legalmente para regular la procedencia de esta
74092
CASACIÓN
acción, sino como un medio para maximizarlo en los casos que
pudieran generarse dudas fundadas sobre su aplicación, dando
prioridad a la búsqueda de los fines previstos en el artículo 1° del
Texto Único Ordenado de la Ley N° 27584 (…) por encima de las
dudas razonables que pudiera mantener el juzgador sobre la
procedencia de la demanda”. Décimo Quinto.- Que, en atención a
ello, apreciamos que la Resolución Directoral Regional N° 009022012-DREH que declaró infundado el recurso de apelación
interpuesto por el actor en la vía administrativa fue notificada con
fecha cinco de setiembre de dos mil doce, tal como se verifica de
la constancia de notificación de dicho acto administrativo de folios
cuatro, por lo que desde dicha data tenía expedito su derecho para
interponer la demanda contenciosa administrativa. Décimo Sexto.Que, de la Resolución Administrativa N° 255-2012-CE-PJ expedida
por el Consejo Ejecutivo del Poder Judicial, de fecha doce de
diciembre de dos mil doce, se desglosa que los días veinticuatro
y treinta de octubre, seis, siete y trece de noviembre de dos mil
doce, fueron señalados como paralización de labores, mientras
que por huelga nacional indefinida se verifico que se realizó a partir
del quince de noviembre hasta el cinco de diciembre de dos
mil doce. Décimo Séptimo.- Que, en este contexto apreciamos
que a la fecha de interposición de la demanda, según el sello de
recepción de folios 16 a 21, de fecha once de diciembre de dos
mil doce, se había excedido el plazo de tres meses para interponer
la demanda conforme lo dispone el numeral 1° del artículo 19° del
Texto Único Ordenado de la Ley N° 27584, aprobado por el Decreto
Supremo N° 013-2008-JUS; apreciándose que ha operado la
caducidad, por lo tanto determinándose que la demanda se
encuentra inmersa en la causal de improcedencia prevista en el
numeral 2) del artículo 23° del referido Texto Único Ordenado, tal
como fue advertido por la Sala Superior. Décimo Octavo.- Que, si
bien es cierto, dada la conclusión de las instancias de mérito como
el propio demandante concuerdan en que el vencimiento del plazo
de caducidad para interponer la demanda vencía el cinco de
diciembre de dos mil doce; ante ello, el demandante alega que
se habría visto imposibilitado de interponer su demanda con
anterioridad al vencimiento de dicho plazo por causa de la huelga
nacional de los trabajadores del Poder Judicial, que se inició el
quince de noviembre de dos mil doce y concluyó el cinco de
diciembre de dos mil doce, por tanto, de los fundamentos vertidos
este se podría colegir que del propio alegato del actor, la suspensión
del día final del plazo de caducidad se extendió hasta el mismo
cinco de diciembre de dos mil doce (fecha de finalización de la
huelga de trabajadores del Poder Judicial), produciéndose el
advenimiento del momento final de la caducidad el día jueves seis
de diciembre del referido año, (reanudación de la atención al
público); por lo que considerando que el demandante presento su
demanda recién el once de diciembre de dos mil doce, se
desprende que fue presentada en forma extemporánea, es decir,
fuera del plazo establecido por Ley. Décimo Noveno.- Que, sin
embargo, no debemos dejar de mencionar que el Tribunal
Constitucional en la Sentencia N° 03083-2012-PA/TC, precisa en
su fundamento 11, la referencia a la Sentencia N° 01049-2003-AA/
TC que en su fundamento cuarto, estableció que: “Los días
transcurridos durante la huelga del Poder Judicial no deben ser
incluidos en el cálculo del plazo para la interposición de la demanda
de amparo”. Vigésimo.- Que, si bien tal razonamiento está referido
al proceso de amparo, este Colegiado Supremo precisa que no
existe inconveniente en hacerlo extensivo al plazo de caducidad en
el proceso contencioso administrativo, dado que el presente caso
constituye situación jurídica idéntica sobre el impedimento ajeno a
la voluntad de las partes para acudir a los órganos jurisdiccionales.
Vigésimo Primero.- Que, en ese sentido, en la medida que los
días veinticuatro y treinta de octubre; seis, siete y trece de
noviembre de dos mil doce; y quince de noviembre hasta el
cinco de diciembre de dos mil doce, se paralizaron las labores
judiciales y la atención al público, el plazo de caducidad recogido
en el artículo 19° del Texto Único Ordenado de la Ley del Proceso
Contencioso Administrativo – Ley N° 27584, aprobado por el
Decreto Supremo N° 013-2008-JUS, debió suspenderse dicho
plazo, y por ende, extenderse hasta el día tres de enero de dos mil
trece como nueva fecha de vencimiento. Por ello, el actor al
momento de interponer su demanda el once de diciembre de dos
mil doce, se encontraba dentro de los plazos previstos por Ley.
Vigésimo Segundo.- Que, en todo caso, ante la duda respecto de
la procedencia o no de la demanda (por vencimiento de plazo de
caducidad establecido en la Ley), se deberá aplicar el principio de
favorecimiento del proceso, contemplado en el inciso 3) del artículo
2° de la Ley N° 27584, que precisa que en caso de que exista
alguna duda razonable por parte del Juez sobre la procedencia o
no de la demanda, este deberá preferir dar trámite a la misma.
Vigésimo Tercero.- Que, está concepción tiene base en el
reconocimiento del derecho a la tutela jurisdiccional efectiva, una
de cuyas manifestaciones es el derecho de acceso a la jurisdicción,
buscando privilegiar dicho derecho constitucional antes que
cualquier exigencia formal o cualquier otro tipo de barrera que
impida o restrinja dicho acceso, por cuanto si el proceso es un
medio para poder hacer efectivo los derechos, cualquier acto que
suponga una restricción a su acceso es un acto que supone una
afectación no sólo al derecho a la tutela jurisdiccional efectiva, sino
además a los derechos cuya tutela se pretende reclamar, por ello
ante cualquier duda se debe optar por proseguir con la continuación
del proceso. Vigésimo Cuarto.- Que, de lo antes advertido, se
El Peruano
Lunes 1 de febrero de 2016
aprecia de la sustentación de la sentencia de vista, esta ha incurrido
en el supuesto de indebida motivación de las resoluciones
judiciales, presentando una motivación defectuosa por contener
argumentos insuficientes e insostenibles, contraviniendo las
normas que garantizan el derecho a un debido proceso y la debida
motivación de las resoluciones judiciales; siendo así se advierte la
existencia de la infracción normativa del artículo 139° incisos 3) y 5)
de la Constitución Política del Estado; deviniendo en FUNDADO el
recurso de casación por la causal denunciada. DECISIÓN : Por
estas consideraciones, con lo expuesto en el Dictamen del
señor Fiscal Supremo en lo Contencioso Administrativo; y, en
aplicación del artículo 396° del Código Procesal Civil: Declararon
FUNDADO el recurso de casación interpuesto por el demandante
Donato Juan Ramos Curasma, de fecha veintiocho de agosto de
dos mil trece, de folios 171 a 174; en consecuencia: NULA la
sentencia de vista de fecha ocho de agosto de dos mil trece, de
folios 165 a 167, expedida por la Sala Civil de la Corte Superior de
Justicia de Huancavelica; e INSUBSISTENTE la apelada de fecha
treinta y uno de mayo de dos mil trece; ORDENARON que el A quo
expida nuevo auto admitiendo a trámite la demanda, conforme a
los considerandos precedentes, DISPUSIERON publicar la
presente resolución en el Diario Oficial “El Peruano”, conforme a
ley; en el proceso contencioso administrativo seguido con la
Dirección Regional de Educación de Huancavelica y otro; y, los
devolvieron; interviniendo como ponente la señora Jueza Suprema
Chumpitaz Rivera. S.S. RODRÍGUEZ MENDOZA, CHUMPITAZ
RIVERA, TORRES VEGA, MAC RAE THAYS, CHAVES ZAPATER.
LOS FUNDAMENTOS DEL VOTO SINGULAR DE LAS SEÑORAS
JUEZAS SUPREMAS TORRES VEGA Y MAC RAE THAYS, SON
LOS SIGUIENTES: CONSIDERANDO: Primero: El recurso de
casación tiene por fines la adecuada aplicación del derecho
objetivo al caso concreto y la uniformidad de la jurisprudencia
nacional por la Corte Suprema de Justicia, conforme se señala en
el texto del artículo 384° del Código Procesal Civil, vigente a la
fecha de la interposición del recurso. Segundo: La infracción
normativa puede ser conceptualizada, como la afectación de las
normas jurídicas en las que incurre la Sala Superior al emitir una
resolución, originando con ello que la parte que se considere
afectada por la misma pueda interponer el respectivo recurso de
casación. Respecto de los alcances del concepto de infracción
normativa, quedan subsumidos en el mismo, las causales que
anteriormente contemplaba el Código Procesal Civil en su artículo
386°, relativas a interpretación errónea, aplicación indebida e
inaplicación de una norma de derecho material, pero además
incluyen otro tipo de normas como son las de carácter adjetivo.
Tercero: La infracción de las normas que garantizan el derecho a
un debido proceso se configura cuando en el desarrollo del mismo,
no se han respetado los derechos procesales de las partes, se han
obviado o alterado actos de procedimiento, la tutela jurisdiccional
no ha sido efectiva y/o el órgano jurisdiccional deja de motivar sus
decisiones o lo hace en forma incoherente, en clara transgresión
de la normatividad vigente y de los principios procesales. Cuarto:
El derecho al debido proceso y a la tutela jurisdiccional efectiva
reconocidos también como principio de la función jurisdiccional en
el artículo 139° inciso 3) de la Constitución Política del Estado
garantizan al justiciable, ante su pedido de tutela, el deber del
órgano jurisdiccional de observar el debido proceso y de impartir
justicia dentro de los estándares mínimos que su naturaleza
impone; así mientras que la tutela judicial efectiva supone tanto el
derecho de acceso a los órganos de justicia como la eficacia de lo
decidido en la sentencia, es decir, una concepción genérica que
encierra todo lo concerniente al derecho de acción frente al poder
- deber de la jurisdicción, el derecho al debido proceso en cambio
significa la observancia de los principios y reglas esenciales
exigibles dentro del proceso, entre ellas, el de motivación de las
resoluciones judiciales consagrado en el artículo 139° inciso 5) de
la Constitución Política del Estado, el cual tiene como finalidad
principal, el de permitir el acceso de los justiciables al razonamiento
lógico jurídico empleado por las instancias de mérito, para justificar
sus decisiones jurisdiccionales y así puedan ejercer adecuadamente
su derecho de defensa, cuestionando de ser el caso, el contenido
y la decisión asumida. ANTECEDENTES: Quinto: Conforme se
advierte del escrito de demanda de fojas 16 a 21, Donato Juan
Ramos Curasma pretende que el órgano jurisdiccional declare nula
e ineficaz la Resolución Directoral Regional N° 00902-2012-DREH
de fecha 23 de julio de 2012, que declara infundado el recurso de
apelación interpuesto contra la Resolución Directoral N°
001560-2012-UGELH de fecha 13 de abril de 2012, que declara
improcedente su solicitud. En consecuencia, se le reconozca el
pago de la bonificación especial mensual por concepto de
preparación de clases y evaluación equivalente al 30% de la
remuneración total, conforme señala la Ley del Profesorado y su
reglamento, así como el pago de los devengados e intereses
legales desde el momento de su nombramiento y/o vigencia de la
ley. Sexto.- Mediante auto de fecha 30 de mayo del 2013, contenido
en la Resolución N° 06, a fojas 131, se declaró improcedente la
demanda al considerar que en la constancia de notificación de la
Resolución Directoral Regional N° 00902-2012-DREH, se consigna
como fecha de recepción el 05 de setiembre del 2012, verificándose
que la demanda fue interpuesta el 11 de diciembre del 2012, es
decir fuera del plazo legal, conforme señala el artículo 23° inciso 2)
y el artículo 19° inciso 1) del Texto Único Ordenado de la Ley N°
27584. Sétimo.- El auto de vista de fecha 08 de agosto de 2013,
El Peruano
Lunes 1 de febrero de 2016
CASACIÓN
obrante de fojas 165 a 167, confirma el auto apelado tras considerar
que, en el caso materia de análisis se desprende que, quedó
agotada la vía administrativa con la Resolución Directoral N°
00902-2012-DREH de fecha 23 de julio de 2012, expedida por el
Director Regional de Educación de Huancavelica, la misma que le
fuera notificada al actor el 05 de setiembre de 2012, como es de
verse de fojas 4. Por lo que, al haber presentado la demanda, el 11
de diciembre de 2012, se encuentra fuera del plazo de tres meses,
en el que tenía expedido su derecho para accionar en la vía
contencioso administrativa, de conformidad a lo normado en el
inciso 1) del artículo 19° de la Ley N° 27584. Agrega que, en el
mismo escrito del recurso de apelación (punto 1 del error de hecho,
parte pertinente de fojas 143) se reconoce expresamente que, la
interposición de la demanda con fecha 11 de diciembre de 2012,
obedece a que los Trabajadores del Poder Judicial se encontraban
en huelga a nivel nacional desde el 15 de noviembre de 2012 hasta
el 05 de diciembre de 2012, por las que no había sido posible
presentar su demanda, al no haber atención al público.
DELIMITACIÓN DE LA CONTROVERSIA: Octavo.- Estando a lo
señalado y en concordancia con la causal por la cual fue admitido
el recurso de casación interpuesto, se aprecia que la controversia
en el presente caso gira alrededor de determinar si la Sala Superior
al declarar la improcedencia de la demanda por caducidad, ha
afectado el derecho al debido proceso y la tutela jurisdiccional
efectiva del demandante, así como el deber de motivación de las
resoluciones judiciales. Como quiera que el control de logicidad es
el examen que efectúa - en este caso- la Corte de Casación para
conocer si el razonamiento efectuado por los Jueces Superiores es
formalmente correcto y completo, desde el punto de vista lógico,
esto es, verificar si existe: falta de motivación o motivación
defectuosa, dentro de esta última, la motivación aparente,
insuficiente y la defectuosa en sentido estricto1. Lo que denota para
su solución basta utilizar el clásico silogismo jurídico, esto es una
simple deducción y aplicación pura del derecho; toda vez que,
conforme se señalara en los considerandos precedentes, para su
validez y eficacia, las resoluciones judiciales deben respetar ciertos
estándares mínimos. ANALISIS DE LA CONTROVERSIA:
Noveno.- A fin de emitir pronunciamiento respecto a si se configura
o no la causal materia de análisis en el caso de autos, es importante
tener presente que la caducidad constituye un medio de extinción
del derecho y la acción correspondiente, está determinada por el
transcurso del tiempo y su plazo tiene por característica de ser
perentorio y fatal. La caducidad está íntimamente vinculada con el
interés colectivo y la seguridad jurídica, por ello el juez está
facultado para aplicarla de oficio, en una verdadera función de
policía jurídico, superando el interés individual; razón por la que,
los plazos de caducidad los fija la ley, sin admitir pacto en contrario.
Décimo.- Es así que, el artículo 19° inciso 1) del Texto Único
Ordenado de la Ley N° 27584, Ley que regula el Proceso
Contencioso Administrativo, aprobado por el Decreto Supremo N°
013-2008-JUS, establece que la demanda contencioso
administrativa debe ser interpuesta dentro del plazo de tres meses
contados desde el conocimiento o notificación del acto material de
impugnación. Lo que nos llevaría a pensar que, si la Resolución
Directoral Regional N° 00902-2012-DREH, le fue notificada al actor
con fecha 05 de setiembre de 2012, tal como se verifica de la
constancia de notificación de dicho acto administrativo a fojas 4, a
la fecha de interposición de la demanda, según el sello de recepción
obrante de fojas 16 de autos, al 11 de diciembre de 2012, habría
operado la caducidad. Undécimo.- Sin embargo, la interpretación
de la norma no debe limitarse a una de carácter literal sino
sistemática, debiendo optimizar los derechos fundamentales,
principio que impone a los juzgadores la exigencia de interpretar
los requisitos y presupuestos procesales en el sentido más
favorable a la plena efectividad del derecho a obtener una
resolución válida sobre el fondo. Duodécimo.- Estando a que, el
demandante alega que se vio imposibilitado de interponer su
demanda con anterioridad, por causa de la huelga nacional de los
trabajadores del Poder Judicial, que se inició el 15 de noviembre y
concluyó el 05 de diciembre de 2012. Aspecto que determina la
suspensión del computo del plazo de caducidad en aplicación del
artículo 2005° del Código Civil en concordancia con el artículo
1994° inciso 8) del mismo código sustantivo, puesto que durante
dicho periodo el actor se vio imposibilitado de reclamar el derecho
ante un tribunal peruano. Criterio que coincide con lo señalado por
el Tribunal Constitucional en la sentencia recaída en el Expediente
N° 04135-2011-PA/TC. Décimo Tercero.- Lo expuesto evidencia
que las instancias de mérito se han limitado a aplicar el artículo 19°
inciso 1) del Texto Único Ordenado de la Ley N° 27584 de una
manera que restringe el derecho a la tutela jurisdiccional del
demandante, sin advertir que al regular el instituto de la caducidad,
el Código Civil –aplicable supletoriamente- admite como único
supuesto de suspensión del computo de la caducidad, el invocado
por el recurrente, esto es la imposibilidad de acudir al órgano
jurisdiccional, en este caso por huelga de los trabajadores del
Poder Judicial. Siendo que mediante Oficio N° 868-2013-OACSJHU/PJ de fecha 24 de abril del 2013, el Jefe de la Oficina de
Administración de la Corte Superior de Justicia de Huancavelica
informa al Presidente de esta Sala Suprema que, durante los días
24 de octubre, 06, 07, 15, 16, 19, 23, 26-30 de noviembre y 03, 04
y 02 de diciembre del año 2012, no hubo despacho judicial en dicha
sede judicial. Décimo Cuarto.- En este orden de ideas, del examen
del auto de vista recurrido fluye que las instancias de mérito al
74093
declarar improcedente demandada, ha omitido ameritar los criterios
señalados en los fundamentos precedentes, vulnerando los
principios del debido proceso y de la tutela jurisdiccional efectiva
consagrados en el artículo 139° incisos 3) y 5) de la Constitución
Política del Estado; en consecuencia corresponde amparar el
recurso de casación y proceder conforme a lo dispuesto en el
artículo 396° inciso 3) del Código Procesal Civil, declarando la
nulidad de la resolución recurrida e insubsistente la apelada,
ordenando al Juez de primera instancia que continúe con el trámite
la demanda según su estado. DECISIÓN: Por estas
consideraciones; y, con lo expuesto en el Dictamen del Señor
Fiscal Supremo en lo Contencioso Administrativo: NUESTRO
VOTO es porque se declare FUNDADO el recurso de casación
interpuesto por el demandante Donato Juan Ramos Curasma, de
fecha veintiocho de agosto del dos mil trece, de fojas 171 a 174; en
consecuencia: se declare NULO el auto de vista de fecha ocho de
agosto de dos mil trece, de fojas 165 a 167, e INSUBSISTENTE el
auto apelado; SE DISPONGA que el Juez de la Causa emita nueva
resolución teniendo en cuenta lo señalado en los considerandos
precedentes a fin de proseguir la causa según su estado; SE
ORDENE publicar la presente resolución en el Diario Oficial “El
Peruano”, conforme a Ley; en los seguidos con la Dirección de la
Unidad de Gestión Educativa Local de Huancavelica y otros; y, los
devolvieron. SS. TORRES VEGA, MAC RAE THAYS
1
Calamandrei, Piero; “Estudios sobre el proceso civil”, editorial bibliografía,
Argentina – Buenos Aires, 1961, pág. 467 y sgts
C-1335410-63
CAS. Nº 14895-2013 LIMA
En el presente caso la Sala Superior ha interpretado y aplicado
correctamente el artículo 5º de la Ley Nº 27803, en tanto ha
analizado el principio de analogía vinculante, determinando que en
el presente caso se ha configurado dicha figura. Lima, ocho de
setiembre de dos mil quince. LA PRIMERA SALA DE DERECHO
CONSTITUCIONAL Y SOCIAL TRANSITORIA DE LA CORTE
SUPREMA DE JUSTICIA DE LA REPÚBLICA. VISTA; la causa
número catorce mil ochocientos noventa y cinco – dos mil trece Lima; en discordia, el señor Juez Supremo Malca Guaylupo se
adhiere al voto de los señores Jueces Supremos Rodríguez
Mendoza, Chumpitaz Rivera y Mac Rae Thays, dejados y suscritos
con fecha siete de mayo de dos mil quince; conforme lo señala el
artículo 145º del Texto Único Ordenado de la Ley Orgánica del
Poder Judicial, y producida la votación con arreglo a ley; emite la
siguiente sentencia: MATERIA DEL RECURSO: Se trata del
recurso de casación interpuesto por el Procurador Público del
Ministerio de Trabajo y Promoción del Empleo, mediante escrito
de fecha 03 de julio de 2013, obrante de fojas 290 a 295, contra la
Sentencia de Vista de fecha 08 de abril de 2013, obrante de fojas
274 a 283, que revoca la Sentencia de Primera Instancia de fecha
14 de junio de 2011, obrante de fojas 152 a 176, que declara
infundada la demanda, reformándola la declara fundada; en
consecuencia Nula la Carta Nº 32311-2009-MTPE/ST de fecha 03
de septiembre de 2009 que excluyó al demandante de su
inscripción en el Registro Nacional de Trabajadores Cesados
Irregularmente y ordena al Ministerio de Trabajo y Promoción del
Empleo disponga la inmediata inscripción del demandante en el
Registro Nacional de Trabajadores Cesados Irregularmente, sin
costos ni costas del proceso. FUNDAMENTOS DEL RECURSO:
Por Resolución de fecha 08 de enero de 2014, obrante de fojas 51
a 54 del cuadernillo formado en esta Sala, se ha declarado
procedente el recurso de casación por la causal de infracción
normativa a los incisos 3) y 5) del artículo 139º de la
Constitución Política del Estado, artículo 1º de la Ley Nº 29059
y artículo 5º de la Ley Nº 27803. CONSIDERANDO: Primero.Que, al haberse declarado la procedencia de la causal procesal –
contravención del artículo 139° inciso 5) de la Constitución Política
del Estado - y de dos causales sustantivas –infracción normativa
del artículo 1º de la Ley Nº 29059 y artículo 5º de la Ley Nº 27803
-, corresponde emitir pronunciamiento con respecto a la causal
procesal, sino se corroborase el vicio procesal denunciado, se
procedería a emitir pronunciamiento respecto a la causal sustantiva.
Segundo.- Que, la causal in procedendo admitida tiene como
sustento determinar si en el caso de autos la sentencia impugnada
ha sido expedida en cumplimiento de lo dispuesto por los incisos 3)
y 5) del artículo 139º de la Constitución Política del Estado, esto es,
si se ha observado el debido proceso así como la tutela
jurisdiccional y a la debida motivación de las resoluciones judiciales.
Tercero.- Que, de manera preliminar a la dilucidación de la
presente controversia, este Colegiado Supremo estima conveniente
precisar que el demandante pretende se declare la nulidad de la
Carta Nº 32311-2009-MTPE/SA de fecha 03 de septiembre de
2009 y en consecuencia se le reconozca como beneficiario de la
Ley Nº 27803 y se proceda su inscripción en el listado de
extrabajadores cesados irregularmente. Cuarto.- Que, hecha esta
precisión, este Colegiado Supremo estima conveniente ingresar al
análisis del caso concreto, teniendo en cuenta los específicos
supuestos de afectación que han sido denunciados por la parte
recurrente. De la causal procesal: Incisos 3) y 5) del artículo
139º de la Constitución Política del Estado Quinto.- Que, el
derecho constitucional al debido proceso tipificado en la
Constitución Política de 1993 establece, en el inciso 3) del artículo
139º que: “Son principios y derechos de la función jurisdiccional:
74094
CASACIÓN
(…) 3) La observancia del debido proceso y la tutela jurisdiccional”.
Dicha disposición constitucional es aplicable a todo proceso en
general. En este sentido, la necesidad de que las resoluciones
judiciales sean motivadas (artículo 139°, inciso 5, de la Constitución)
es un principio que informa el ejercicio de la función jurisdiccional y,
al mismo tiempo, es un derecho fundamental de los justiciables.
Mediante la debida motivación, por un lado, se garantiza que la
administración de justicia se lleve a cabo de conformidad con la
Constitución y las leyes (artículo 138º de la Constitución) y, por
otro, que los justiciables puedan ejercer de manera efectiva su
derecho de defensa. Sexto.- Que, de la revisión de los actuados,
se aprecia que según la Sala Superior, el demandante acredita
haber sido coaccionado a renunciar con los documentos obrantes
a folios 17, 40, 120 y 126 en los que se advierte que la demandada
inicio un programa de incentivos por renuncia voluntaria el 22 de
diciembre de 1993 y si no se acoge al programa de incentivos será
sujeto a reducción de personal, lo que evidencia la coacción en la
renuncia. Asimismo se acredita que otros trabajadores en
condiciones similares han sido incorporados a la lista de cesados
irregularmente, como es el caso de Javier Najarro y Alejandro
Medrano, por lo que no haber sido el demandante incluido en la
lista aprobada por Resolución Suprema Nº 028-2009-TR resulta
válidamente aplicable la analogía vinculante. Séptimo.- Que, en
consonancia con ello, este Colegiado Supremo estima que la Sala
Superior ha resuelto, expresando una decisión razonada, motivada
y congruente con la pretensión formulada por el demandante;
apreciándose, además que la misma se encuentra justificada; por
lo que el extremo relacionado con la infracción del artículo 139º
incisos 3) y 5) de la Constitución Política del Estado deviene en
infundado. De la causal procesal: Artículo 1º de la Ley Nº 29059.
Octavo.- Que, el artículo 1º de la Ley Nº 29059, estableció la
revisión complementaria y final de los casos de los extrabajadores
cuyo derecho fue reconocido por Resolución Suprema Nº 0212003-TR y fueron excluidos por Resolución Suprema Nº 034-2004TR, y de aquellos que, habiendo presentado sus expedientes en el
plazo de ley, presentaron recursos impugnativos por no estar
comprendidos en algunas de las Resoluciones Ministeriales Nº
347-2002-TR y Nº 059-2003-TR y en la Resolución Suprema Nº
034-2004-TR. Noveno.- Que, sobre esta base, mediante
Resolución Suprema Nº 028-2009-TR, de fecha 4 de agosto de
2009, se dispuso la publicación de la lista de extrabajadores que
debían ser inscritos en el Registro Nacional de Trabajadores
Cesados Irregularmente, la misma que fue publicada en el Diario
Oficial “El Peruano” el 5 agosto de 2009. Décimo.- Que, de acuerdo
al Colegiado Superior, mediante Carta Nº 32311-2009-MTPE de
fecha 03 de septiembre de 2009, la Secretaria Ejecutiva de la Ley
Nº 29059 comunico al demandante las razones por las cuales no
había sido considerado dentro de la relación de extrabajadores
inscritos en el Registro Nacional de Trabajadores Cesados
Irregularmente; es decir, el demandante cumplió con el requisito
del artículo 1º de la Ley Nº 29059, al estar apto para el análisis de
fondo. Undécimo.- Que, en este contexto, este Colegiado Supremo
considera que la Sala Superior ha interpretado correctamente el
artículo 1º de la Ley Nº 29059; en tanto ha determinado que el
demandante si cumple con los requisitos establecidos por dicha
norma; razón por la cual no se observa que se haya incurrido en
infracción de la mencionada norma legal, por lo que este extremo
del recurso deviene en infundado. De la causal material: Articulo
5º de la Ley N° 27803. Duodécimo.- Que, al respecto, cabe
mencionar que el artículo 5º de la Ley Nº 27803 explica cuáles
serán los criterios que las Comisiones utilizaron para cumplir sus
objetivos: Créase por única vez una Comisión Ejecutiva que estará
encargada de lo siguiente: 1. Analizar los documentos probatorios
que presenten los extrabajadores que consideran que su voluntad
fue viciada, a fin de determinar si existió o no coacción en la
manifestación de voluntad de renunciar. 2. Analizar los casos de
ceses colectivos de trabajadores que, habiendo presentado su
solicitud de cese hasta el 23 de julio de 2001, no fueron tomados en
cuenta por la entidad correspondiente. Esta Comisión tomará en
cuenta los parámetros establecidos en el artículo 9º de la presente
Ley. La calificación efectuada por la Comisión Ejecutiva o la
ejecución de los beneficios a favor de los extrabajadores cuyos
ceses sean calificados como irregulares, es de carácter
excepcional; en atención a ello, no generará beneficios distintos a
los establecidos en la presente Ley. Entiéndase que dentro de los
beneficios comprendidos en la presente Ley se encuentran los
precisados en el artículo 18º y la Segunda Disposición
Complementaria. Como se puede observar, los criterios utilizados
al momento de la denegatoria de la inclusión del demandante en la
lista de cesados irregularmente pueden ser encontrados en la ley
reproducida. Décimo Tercero.- Que, es postura reiterada del
Tribunal Constitucional1 el concepto de que, para plantear un
supuesto de tratamiento discriminatorio basado en la diferencia de
las personas, es preciso que se proponga un tertium comparationis
válido, esto es, un término de comparación que sea suficiente y
adecuado, a partir del cual sea posible constatar que, ante
situaciones fácticas iguales, uno de los sujetos de la relación ha
sufrido un trato diferente, sin mediar razones objetivas y razonables
que lo legitimen. Décimo Cuarto.- Que, a su vez, este Colegiado
Supremo ha establecido que para la aplicación del Principio de
Analogía Vinculante en los casos de trabajadores que fueron
cesados bajo coacción «debe presentarse identidad o similitud
respecto de un extrabajador ya inscrito en el registro entre, otros,
El Peruano
Lunes 1 de febrero de 2016
en los siguientes aspectos: 1.- Entidad o empresa de cese del
extrabajador; 2.- fecha de cese; 3.- forma y/o causa del cese; y 4.resolución y/o documentos de cese de los trabajadores cesados o
reincorporados. De lo cual se colige que para la aplicación del
citado principio debe verificarse que exista identidad o similitud
entre el caso materia de calificación y aquél que ha sido acogido e
inscrito como cese irregular, debiendo ello evidenciarse de los
medios de prueba obrantes en el proceso». Décimo Quinto.- Que,
en relación a este punto, el demandante acompaña a su demanda,
a manera de tertium comparationis, el caso de dos trabajadores
que, al igual que él, fue cesado en el año 1993 en virtud de un
mismo acto administrativo, a saber: Directiva Nº GG-003-93-ENCI
de fecha 14 de julio de 1993 (fojas 120 a 126). Así pues, el
demandante presenta el caso de 02 extrabajadores, que han sido
incorporados en la Cuarta Lista aprobada por Resolución Suprema
Nº 028-2009-TR de 04 de agosto de 2009. Décimo Sexto.- Que, a
juicio del demandante, este trato diferenciado resulta violatorio de
su derecho a la igualdad en la aplicación de la ley, por cuanto no se
han expresado las razones para realizar dicha distinción; es decir,
no se ha establecido por qué, a pesar de cumplir con los mismos
requisitos que las personas antes indicadas, el demandante no ha
sido incluido en la lista publicada. Décimo Séptimo.- Que, en
atención a lo expuesto, este Colegiado considera que el término de
comparación ofrecido por el demandante resulta válido y adecuado
para el presente caso, por cuanto permite apreciar el trato desigual
que la parte demandada le ha conferido a su caso respecto de
otros sustancialmente iguales. En consecuencia, y como paso
siguiente, corresponde analizar si la entidad demandada ha
ofrecido una justificación objetiva y razonable para realizar dicho
trato desigual. Décimo Octavo.- Que, en el presente caso el
Colegiado Superior argumenta que el demandante acredita haber
sido coaccionado a renunciar con los documentos de folios 17, 40,
120 y 126 donde se advierte que la demandada inicio un programa
de incentivos por renuncia voluntaria el 22 de diciembre de 1993 y
si no se acoge el programa de incentivos será sujeto a reducción
del personal ante la autoridad administrativa de trabajo cuya
solicitud será aprobada a la sola presentación de la medida en el
plazo de 05 días en aplicación a lo dispuesto en el artículo 2º del
Decreto Supremo Nº 041-93 de fojas 126; evidenciándose la
coacción de la renuncia, del mismo modo acredita que otros
trabajadores en condiciones similares han sido incorporados en la
lista de ceses irregulares como se aprecia de los trabajadores
Javier Najarro y Alejandro Medrano cesados al igual que el
demandante y han sido incluidos en la lista de ceses irregulares
como se aprecia de los documentos obrantes a fojas 21/39,
omitiéndose de tal modo la inscripción del demandante en dicho
registro cuando en ambos casos se aprecia similitud. Décimo
Noveno.- Que, cabe precisar que si bien los extrabajadores Javier
Najarro y Alejandro Medrano cesaron con fecha 27 de julio de
1993, conforme se advierte de fojas 21/32 y el demandante cesó
con fecha 22 de diciembre de 1993; no es menos cierto que todos
ellos se acogieron a la Directiva Nº GG-003-93/ENCI de fecha 14
de julio de 1993 que preciso que: “las cartas de aceptación de
renuncia serán cursadas hasta el 31 de agosto de 1993, plazo que
la administración podrá prorrogar hasta el 31 de diciembre de
1993”; siendo ello así y al haber los extrabajadores presentado sus
cartas de renuncias de acuerdo al formato señalado por la Directiva
dentro del plazo estipulado, se evidencia que efectivamente hubo
coacción en la renuncia de dichos extrabajadores, conforme lo
señala la Sala Superior. Vigésimo.- Que, de lo detallado se infiere
que en el presente caso se ha configurado la analogía vinculante
por cuanto el Colegiado Superior ha determinado que el
demandante ha sufrido un trato diferenciado, a pesar de estar en
idéntica situación que los extrabajadores Javier Najarro y Alejandro
Medrano, siendo ello así, esto es, haber sido cesados en las
mismas condiciones y por los mismos motivos, y al no haber la
entidad demandada brindado una justificación objetiva y razonable
que respalde el trato desigual que realizó respecto a la situación
del demandante, ha quedado demostrado que se ha vulnerado el
derecho a la igualdad en la aplicación de la ley. Vigésimo Primero.Que, siendo ello así, este Colegiado Supremo estima que la Sala
Superior ha interpretado y aplicado correctamente el artículo 5º de
la Ley Nº 27803, en tanto ha analizado el Principio de Analogía
Vinculante, determinando que en el presente caso se ha
configurado la figura de la analogía vinculante, siendo además que
la Instancia de Mérito luego de la revisión de los documentos
concluye que se ha acreditado mediante documentos probatorios
idóneos la analogía vinculante, por lo tanto no se observa que se
haya incurrido en infracción del mencionado artículo, razón por la
cual el recurso deviene en infundado. DECISIÓN: Por estas
consideraciones, y con lo expuesto en el Dictamen emitido por
el señor Fiscal Supremo en lo Contencioso Administrativo,
Declararon: INFUNDADO el recurso de casación interpuesto por el
Procurador Público del Ministerio de Trabajo y Promoción del
Empleo, obrante de fojas 290 a 295; en consecuencia, NO
CASARON la sentencia de vista de fecha 08 de abril de 2013,
obrante de fojas 274 a 283; DISPUSIERON la publicación de la
presente resolución en el Diario Oficial “El Peruano, conforme a
ley; en los seguidos por Ángel Paulino Alache Godine contra el
Ministerio de Trabajo y Promoción del Empleo, sobre inclusión
en el registro nacional de trabajadores cesados irregularmente; y,
los devolvieron.- Interviniendo como ponente la señora Jueza
Suprema, Mac Rae Thays. S.S. RODRÍGUEZ MENDOZA,
El Peruano
Lunes 1 de febrero de 2016
CASACIÓN
CHUMPITAZ RIVERA, MAC RAE THAYS, MALCA GUAYLUPO. El
señor Juez Supremo Malca Guaylupo firma su dirimencia el ocho
de setiembre de dos mil quince; los señores Jueces Supremos
Rodríguez Mendoza, Chumpitaz Rivera y Mac Rae Thays firman
sus votos suscritos el siete de mayo de dos mil quince; y, conforme
a lo dispuesto por el artículo 149º del Texto Único Ordenado de la
Ley Orgánica del Poder Judicial. Firma para certificar el acto, la
doctora Rosmary Cerrón Bandini, Secretaria de Sala (e). EL VOTO
EN MINORIA DE LOS SEÑORES JUECES SUPREMOS TORRES
VEGA Y
CHAVES
ZAPATER,
ES
COMO
SIGUE:
CONSIDERANDO: Primero.- Que, habiéndose declarado
procedente el recurso de casación por normas de orden procesal y
material, en principio corresponde efectuar el análisis respecto de
la primera pues de producirse sus efectos nulificantes carecería de
objeto examinar la norma in iudicando. Segundo.- Que, respecto a
ello se debe señalar que la infracción al debido proceso se
configura cuando en el desarrollo del mismo no se han respetado
los derechos procesales de las partes, se han obviado o alterado
actos de procedimiento, la tutela jurisdiccional no ha sido efectiva
y/o el órgano jurisdiccional deja de motivar sus decisiones o lo hace
en forma incoherente, en clara transgresión de la normatividad
vigente y de los principios procesales, esto conforme a lo
establecido en el artículo 139° incisos 3) y 5) de la Constitución
Política del Perú; los artículos 50° inciso 6) y 122° incisos 3) y 4) del
Código Procesal Civil. Tercero.- Que, dentro de ese contexto, se
advierte del análisis del petitorio de la demanda obrante de fojas 42
a 47, que el accionante viene solicitando se declare la Nulidad de
la Carta N° 32311-2009-MTPE/ST, de fecha 03 de setiembre de
2009, que denegó la solicitud del actor de Inscripción en el Registro
Nacional de Trabajadores Cesados Irregularmente, conforme a la
Ley N° 27803. Cuarto.- Que, de los actuados procesales se verifica
que la sentencia de vista que revoca la sentencia de primera
instancia que declara infundada la demanda, y reformándola la
declara fundada, tiene como fundamentos que de autos (fojas 17,
40, 120 y 126) se acredita que el actor ha sido coaccionado para
renunciar, del mismo modo se acredita que en el caso del
demandante y de los extrabajadores Javier Najarro Ochoa y
Alejandro Medrano Quispe, existen similitudes, sin embargo,
dichos extrabajadores fueron incorporados al Registro Nacional de
Trabajadores Cesados Irregularmente y al demandante no (fojas
21 a 39), por lo que en aplicación del Principio de Analogía
Vinculante se evidencia una clara vulneración de derecho de
igualdad, resultando por ello amparable la demanda. Quinto.- Que,
siendo esto así, es de advertir que el órgano de segunda instancia
ha incurrido en un vicio de motivación aparente - entendida esta
cuando una resolución judicial si bien contiene las razones de
hecho y de derecho que justifican la decisión del juzgador, estas no
son pertinentes para tal efecto, sino que son simuladas,
inapropiadas o falsas en la medida que en realidad no son idóneas
para adoptar la decisión final - ya que la argumentación que
sustenta su decisión, no resulta ser la apropiada, al no haber
tomado en cuenta lo prescrito en el artículo 5°2 de la Ley N° 27803,
dispositivo legal por el cual se crea la Comisión Ejecutiva como
único órgano administrativo encargado de revisar los Ceses
Colectivos efectuados en la década del año 1990 y, determinar de
esta forma, si existió o no, coacción al momento de que los
trabajadores expresaron su voluntad de renunciar. Sexto.- Que,
sostener un razonamiento como el esbozado por el Ad Quem en la
recurrida, conllevaría no solo a asumir competencias que la ley no
prevé sino también a vulnerar uno de los principios más importantes
del Derecho Administrativo, como es el Principio de Legalidad,
previsto en el artículo IV, inciso 1), literal 1.1 del Título Preliminar de
la Ley N° 27444, por el cual se establece que todas las autoridades
administrativas que componen el Estado deben actuar con respeto
a la Constitución, la Ley y al Derecho, dentro de las facultades que
le estén atribuidas y de acuerdo con los fines para los que fueron
conferidas dichas facultades. Al respecto, Ochoa Cardich3 precisa
que: “(…) la Administración Pública, a diferencia de los particulares,
no goza de la llamada libertad negativa (nadie está obligado a
hacer lo que la ley no manda, ni impedido a hacer lo que esta no
prohíbe) o principio de no coacción, dado que sólo puede hacer
aquello para lo cual está facultada en forma expresa”. En ese
sentido, el órgano Colegiado Superior al momento de merituar
nuevamente la controversia deberá tener en cuenta que la
Administración tiene su fundamento y el límite de su acción en la
Ley, ya que de lo contrario, se vulneraría el Estado de Derecho.
Séptimo.- Que, además, la Sala Superior difiere el análisis
respecto a verificar las razones por las que en los casos análogos
se aceptó la inscripción en el Registro de Trabajadores Cesados
Irregularmente, ni ha reparado que al invocarse la aplicación de
una situación análoga, se debe verificar la supuesta vulneración
del Principio de Igualdad ante la ley, y para que ello exista, la
vulneración del citado principio debe darse en circunstancias y
condiciones similares, las cuales necesariamente deben
acreditarse de modo suficiente, teniendo en cuenta los expedientes
administrativos generados en sede administrativa tanto del actor
como de los otros extrabajadores. Octavo.- Que, por tanto, la
omisión advertida en la sentencia de vista, afecta el artículo 30° del
Texto Único Ordenado de la Ley N° 27584, así también la garantía
y principio del debido proceso, la tutela jurisdiccional efectiva y de
motivación de las resoluciones consagrados en el artículo 139°
incisos 3) y 5) de la Constitución Política del Perú, que encuentra
desarrollo legal en el artículo 122° inciso 3) del Código Procesal
74095
Civil, en tanto que para la validez y eficacia de las resoluciones
judiciales exige, bajo sanción de nulidad, que estas contengan los
fundamentos de hecho que sustentan la decisión y los respectivos
de derecho con la cita de la norma o normas aplicables en cada
punto, según el mérito de lo actuado y lo invocado por las partes;
en consecuencia, frente a la invalidez insubsanable de la sentencia
de vista, corresponde disponer que el Ad Quem emita nuevo
pronunciamiento conforme a lo expuesto precedentemente.
DECISIÓN: Por estas consideraciones, NUESTRO VOTO es
porque se declare FUNDADO el recurso de casación interpuesto
por el Procurador Público a cargo de los Asuntos Judiciales
del Ministerio de Trabajo y Promoción del Empleo, obrante de
fojas 290 a 295; en consecuencia, se declare NULA la sentencia de
vista de fecha 08 de abril de 2013, obrante de fojas 274 a 283;
ORDENAMOS que la Sala Superior de la causa emita nuevo fallo
de acuerdo a ley y a las directivas emitidas en la presente
resolución; en los seguidos por Ángel Paulino Alache Godine
contra el Ministerio de Trabajo y Promoción del Empleo, sobre
inclusión en el registro nacional de trabajadores cesados
irregularmente. S.S. TORRES VEGA, CHAVES ZAPATER. Los
señores Jueces Supremos Torres Vega y Chaves Zapater, firman
sus votos suscritos el siete de mayo de dos mil quince, conforme a
lo dispuesto por el artículo 149º del Texto Único Ordenado de la Ley
Orgánica del Poder Judicial. Firma para certificar el acto, la doctora
Rosmary Cerrón Bandini, Secretaria de Sala (e).
1
2
3
Véase: STC Nº 4587-2004-AA/TC, entre otras.
Artículo 5.- Comisión Ejecutiva
Créase por única vez una Comisión Ejecutiva que estará encargada de lo siguiente:
1. Analizar los documentos probatorios que presenten los extrabajadores que
consideran que su voluntad fue viciada, a fin de determinar si existió o no coacción
en la manifestación de voluntad de renunciar. 2. Analizar los casos de ceses
colectivos de trabajadores que, habiendo presentado su solicitud de cese hasta el
23 de julio de 2001, no fueron tomados en cuenta por la entidad correspondiente.
Esta Comisión tomará en cuenta los parámetros establecidos en el artículo 9° de la
presente Ley. (…)
OCHOA CARDICH, César. Los Principios Generales del Procedimiento
Administrativo. En: Comentarios a la Ley del Procedimiento Administrativo General
- Ley Nº 27444. Segunda Parte. Ara Editores, Lima, julio - 2003, página 53.
C-1335410-64
CAS. Nº 14909-2013 AYACUCHO
Es aplicable la protección prevista en el artículo 1° de la Ley N°
24041 a la demandante, por haberse acreditado que ella misma ha
realizado labores de naturaleza permanente y ha prestado servicios
por más de un año en forma ininterrumpida. Lima, doce de mayo de
dos mil quince. LA PRIMERA SALA DE DERECHO
CONSTITUCIONAL Y SOCIAL TRANSITORIA DE LA CORTE
SUPREMA DE JUSTICIA DE LA REPÚBLICA. VISTA: La causa
número catorce mil novecientos nueve guión dos mil treceAyacucho, en audiencia pública de la fecha; y, luego de verificada
la votación con arreglo a Ley, emite la siguiente sentencia:
MATERIA DEL RECURSO: Se trata del recurso de casación
interpuesto por la demandante Magna De La Cruz Huaman, de
fecha dieciséis de setiembre de dos mil trece, obrante de fojas 539
a 547, contra la sentencia de vista de fecha veintidós de agosto de
dos mil trece, obrante de fojas 526 a 532, expedida por la Sala Civil
de la Corte Superior de Justicia de Ayacucho que revoca la
sentencia apelada y reformándola declara infundada la demanda.
FUNDAMENTOS DEL RECURSO: Mediante resolución de fecha
dieciséis de enero de dos mil catorce, que corre de fojas 32 a 35 del
cuaderno de casación, éste Tribunal Supremo ha declarado
procedente en forma excepcional el recurso de casación
interpuesto por la demandante por las causales establecidas en el
artículo 386° del Código Procesal Civil, referida a la infracción
normativa del artículo 1° de la Ley N° 24041 e infracción
normativa de los incisos 3) y 5) del artículo 139° de la
Constitución Política del Perú. CONSIDERANDO: Primero.Que, conforme a lo preceptuado por el artículo 1° de la Ley N°
27584, norma que Regula el Proceso Contencioso Administrativo,
la acción contenciosa administrativa prevista en el artículo 148° de
la Constitución Política del Perú, constituye una expresión singular
del Estado de justicia administrativa; es decir, del sometimiento del
poder al Derecho puesto que tiene por finalidad el control jurídico
por parte del Poder Judicial, de las actuaciones de la administración
pública sujetas al Derecho Administrativo y la efectiva tutela de los
derechos e intereses de los administrados en su relación con la
administración. Segundo.- Que el debido proceso es un principio y
derecho de la función jurisdiccional, consagrado en el inciso 3) del
artículo 139° de la Constitución Política del Perú, cuya función es
velar por el respeto irrestricto de los derechos fundamentales y las
garantías constitucionales que lo integran, dando a toda persona la
posibilidad de recurrir a la justicia para obtener la tutela jurisdiccional
de sus derechos, a través de un procedimiento regular en el que se
dé oportunidad razonable y suficiente de ser oído, ejercer el
derecho de defensa, de producir prueba y obtener una sentencia
debidamente motivada. Tercero.- Que, asimismo, uno de los
contenidos del derecho al debido proceso es el derecho de obtener
de los órganos judiciales una respuesta razonada, motivada y
congruente con las pretensiones oportunamente deducidas por las
partes en cualquier clase de procesos. La exigencia primordial es
que las decisiones judiciales sean motivadas en proporción a los
términos del inciso 5) del artículo 139° de la Constitución Política
74096
CASACIÓN
del Perú, la cual garantiza que los Jueces cualquiera sea la
instancia a la que pertenezcan expresen el proceso lógico que los
ha llevado a decidir la controversia, asegurando que el ejercicio de
la potestad de administrar justicia se haga con sujeción a la
Constitución Política del Perú y a la Ley, así también, con la
finalidad de facilitar un adecuado ejercicio del derecho de defensa
de los justiciables. Cuarto.- Que el derecho a la debida motivación
de las resoluciones judiciales, bajo el marco del contenido
constitucional garantiza la delimitación de otros supuestos que han
sido desarrollados por el Tribunal Constitucional: a) Inexistencia de
motivación o motivación aparente, b) Falta de motivación interna
del razonamiento, c) Deficiencias en la motivación externa:
justificación de las premisas, d) Motivación insuficiente, e)
Motivación sustancialmente incongruente y f) Motivaciones
cualificadas; recogidos en la sentencia del Expediente Nº 007282008-HC. Quinto.- Que, si bien en el presente caso se ha declarado
la procedencia del recurso de casación por la causal de infracción
normativa del artículo 139° incisos 3) y 5) de la Constitución Política
del Perú y artículo 1° de la Ley N° 24041; se aprecia, de autos, que
la Sala Superior ha empleado en forma suficiente los fundamentos
que le han servido de base para confirmar la sentencia apelada
que declara infundada la demanda, argumentos que resultan
contrarios a lo establecido por esta Sala Suprema y el Tribunal
Constitucional; y, que no pueden analizarse a través de una causal
In Procedendo; consideraciones por las cuales la causal de
infracción normativa del artículo 139° incisos 3) y 5) de la
Constitución Política del Perú, resulta infundada. Sexto.- Que,
hoy, es reconocido como derecho fundamental del ciudadano, el
obtener de la administración pública decisiones congruentes y
coherentes; y, es obligación del Poder Judicial efectuar el respectivo
control jurídico conforme a lo señalado anteriormente; por lo que,
es posible afirmar que la existencia de una vulneración de los
principios del debido proceso en detrimento de los derechos del
demandante, merece un pronunciamiento de fondo por parte de
esta Sala Suprema, dirigido a tutelarlos. ANTECEDENTES:
Sétimo.- Que, conforme se advierte del escrito de demanda
obrante de fojas 160 a 172, la demandante Magna De La Cruz
Huaman, emplaza a la Municipalidad Provincial de Huamanga,
solicitando la reposición al puesto de trabajo que venía
desempeñando, tal como dispone el artículo 1° de la Ley N° 24041,
Desnaturalización de Contrato de Servicios No personales, con
una de naturaleza indeterminada bajo los alcances del Decreto
Legislativo N° 276, y accesoriamente la inclusión en planillas de
trabajadores y se disponga el pago de beneficios laborales tales
como CTS, vacaciones no gozadas, asignación familiar,
bonificación de fiestas patrias y navidad, y finalmente declare
inaplicable el despido verbal arbitrario efectuado por el Gerente de
Transporte y Seguridad Vial y el Sub Gerente de Transporte de la
Municipalidad Provincial de Huamanga. Octavo.- Que, de autos se
observa que la sentencia de primera instancia ampara la demanda
declarándola fundada en parte, bajo los siguientes fundamentos:
Décimo: “Determinación del periodo laborado superior a 01 año de
forma ininterrumpida.- En el caso de autos, la demandante acredita
mediante los contratos (Fs. 05 al 68) adjuntados a su demanda lo
siguiente: 1) Laboró durante el periodo del 01 de marzo al 31 de
diciembre de 2009 en forma regular bajo la modalidad del Contrato
Administrativo de Servicios – CAS, y 2) Durante el periodo del 02
de enero de 2010 al 02 de febrero de 2011, con contratos de
locación de servicios y lo hace en forma continua e ininterrumpida,
pues, a partir de aquella fecha de forma mensual y continuada ha
prestado sus servicios a favor de la entidad demandada, superando
el tiempo de 01 año previsto en la Ley N° 24041”; Décimo Primero:
“En cuanto al primer periodo comprendido del 01 de marzo al 31 de
diciembre de 2009, de los contratos adjuntados a la demanda, se
advierte que la demandante ha laborado en forma ininterrumpida,
donde existe continuidad de labores, con contratos administrativos
de servicios – CAS sobre el cual, es necesario señalar que, el
Tribunal Constitucional, mediante la sentencia recaída en el
Expediente N° 3818-2009-PA/TC del 12 de octubre de 2010,
fundamento 6 (…). Lo que conlleva a establecer, que quienes
prestaban sus servicios por servicios no personales o civiles, y por
el sólo hecho de suscribir contrato CAS, tal situación anterior
quedaba consentida y novada, y asume las consecuencia del
régimen CAS, que viene a ser un régimen laboral excepcional,
donde no existe reincorporación laboral, debido a que este viene a
ser un régimen laboral donde el trabajador percibe todos los
beneficios que le son inherente a este régimen, y no es posible que
se le aplique los beneficios que son propios del régimen laboral
público o del privado”; Décimo Segundo: “Respecto al segundo
periodo del 02 de enero de 2010 al 02 de febrero de 2011, la
demandante fue contratada mediante contrato de locación de
servicios precisando que si bien son contratos de naturaleza civil,
estos fueron contratos encubiertos y que en aplicación del principio
de la primacía de la realidad se ha demostrado y acreditado con los
documentos adjuntos (…), que estas tienen el carácter de
permanente, subordinada y dependiente, cumpliendo además con
un horario de trabajo conforme se advierte de las hojas de control
de asistencia; la labor de inspector de Transito y Seguridad Vial
está configurada como una labor de carácter permanente de la
demandada y que está prevista en el numeral 2.2 del inciso 2) del
artículo 73° de la Ley N° 27972, Ley Orgánica de Municipalidades;
de lo que se concluye que la demandante ha prestado labores de
forma permanente e ininterrumpida por más de 01 año, esto es,
El Peruano
Lunes 1 de febrero de 2016
desde el 02 de enero de 2010 hasta el 02 de febrero de 2011,
conforme lo refiere la actora en su demanda, aseveración que no
fue contradicha por la entidad demandada, siendo esto así, la
demandante ha alcanzado la protección del artículo 1° de la Ley N°
24041”. Noveno.- Que, en el caso de autos, la sentencia de vista
revoca la apelada y reformándola declara infundada la demanda,
tras considerar en su considerando 4.3 que: “En tal sentido,
teniendo en cuenta que la actora ha desempeñado su función en
un primer periodo bajo Contrato Administrativo de Servicios, y
posteriormente mediante contrato de locación de servicios; es de
indicar, que respecto a los contratos administrativos de servicios
regulado por el Decreto Legislativo N° 1057 y su Reglamento
aprobado mediante Decreto Supremo N° 075-2008-PCM, (…) y en
razón a dicho análisis las sucesivas sentencias del Tribunal
Constitucional vienen siguiendo una línea jurisprudencial en la cual
se considera que el personal CAS sólo tiene derecho a un régimen
de estabilidad laboral relativa, y que ante un despido injustificado
no tienen derecho a la reposición sino sólo a la indemnización
(…)”; y, 4.5 que: “De lo glosado precedentemente, se puede
concluir que la desnaturalización de contratos, inclusión a planilla,
pago de beneficios sociales y reposición laboral demandada por la
actora, bajo los alcances de la Ley N° 24041, devienen en
infundada, en vista de que si bien, posterior a la suscripción del
contrato administrativo de servicios, laboró bajo contratos de
locación de servicios éstos se desnaturalizaron en contratos
laborales regulados por el Decreto Legislativo N° 1057,
consiguientemente, resulta irrelevante dilucidad si en el segundo
periodo laboral existió fraude en la suscripción de contratos de
servicios no personales y si corresponde aplicar el artículo 1° de la
Ley N° 24041, dado que dichos contratos se han desnaturalizado
en uno regulado por el Decreto Legislativo N° 1057, y siendo éste
un régimen laboral excepcional, caracterizado por la temporalidad
de los servicios no existe la posibilidad de reincorporación laboral;
(…)”. DELIMITACIÓN DE LA CONTROVERSIA: Décimo.- Que, al
haber sido descartado el problema jurídico bajo el cual versan los
actuados respecto a la motivación de resoluciones judiciales
esgrimida por los Jueces Superiores; cabe soslayar esta
circunstancia y establecer que este Colegiado considera pertinente
la aplicación de los principios de celeridad y economía procesal,
toda vez que en autos aparecen elementos de prueba suficientes
que posibilitan un pronunciamiento de fondo; por ello y en atención
a lo señalado se aprecia que la controversia en el presente caso
gira alrededor de determinar si resulta aplicable a la actora la
protección prevista en el artículo 1° de la Ley N° 24041, norma que
establece: “Los servidores públicos contratados para labores de
naturaleza permanente, que tengan más de un año ininterrumpido
de servicios, no pueden ser cesados ni destituidos sino por las
causas previstas en el Capítulo V del Decreto Legislativo Nº 276 y
con sujeción al procedimiento establecido en él, sin perjuicio de lo
dispuesto en el artículo 15° de la misma ley.” (Sic). Undécimo.Que, el citado dispositivo debe interpretarse judicialmente
siguiendo el método de la ratio legis, es decir desentrañando la
razón intrínseca de la norma a partir de su propio texto; en
consecuencia, la esencia de la norma es proteger al trabajador que
ha laborado durante más de un año de servicios ininterrumpidos en
labores de naturaleza permanente, a no ser cesado o destituido
sino únicamente por la comisión de falta grave, y con sujeción al
procedimiento establecido en el Capítulo V del Decreto Legislativo
N° 276. ANALISIS DE LA CONTROVERSIA: Duodécimo.- Que,
estando a lo señalado, se advierte que la instancia superior de
mérito no ha efectuado un mayor análisis respecto de la
procedencia de la actora a ser repuesta al centro de labores,
conforme al artículo 1° de la Ley N° 24041 que postula;
desarrollando sus fundamentos, básicamente, en la declaración de
constitucionalidad del Contrato Administrativo de Servicios
(Decreto Legislativo N° 1075 y su reglamento) y la inoficiosidad
respecto de la aplicación del principio de primacía de la realidad,
entendido este como la suposición que ante cualquier situación en
que se produzca una discordancia entre lo que efectivamente
sucede, el Derecho prefiere la realidad antes que lo que las partes
pueden manifestar. Décimo Tercero.- Que, además, es pertinente
enunciar que por su parte, el Tribunal Constitucional en numerosa
y reiterada jurisprudencia, ha señalado que: “para efectos de la
aplicación del artículo 1° de la Ley N° 24041, es preciso determinar
si se han cumplido los dos requisitos exigidos siguientes: a) que el
demandante haya realizado labores de naturaleza permanente, y
b) que las mismas se hayan efectuado por más de un año
ininterrumpido”. Décimo Cuarto.- Que, sin embargo, al advertir
que la instancia superior de mérito, tampoco, ha tomado en cuenta
que la relación laboral con la demandante ha quedado acreditada,
tal es así que se aprecia de manera contundente, que ha realizado
labores de naturaleza permanente, toda vez ha prestado servicios
laborales de carácter ininterrumpido, tal como es de verse: 1.- de
los Contratos de Locación de Servicios, obrante de fojas 40 a 68,
que precisan en su: “Clausula Tercera: Objeto del Contrato. A
tenor del presente documento La Municipalidad contrata a El
Locador para que preste sus servicios como Inspector de
Tránsito, (…), mientras que la “Clausula Cuarta: Del Plazo”
precisa que en los contratos el plazo de vigencia es computable a
partir del 02 de enero de 2010 hasta el 31 de enero de 2011; así
también, 2.- del Record de Asistencia de Inspectores de Transportes
que al dos de febrero de dos mil once seguía fiscalizando, ello se
aprecia de dichos documentos adjuntados obrantes de fojas 69 a
El Peruano
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CASACIÓN
78; 3.- de los informes, memorandos múltiples, de las actas, de las
boletas de pago y de los recibos por honorarios expedidos a favor
de la demandada; acreditándose con ello que la labor de la actora
era prestar servicios de Inspector de Tránsito y Seguridad Vial
adscrito al Área de Gerencia de Transportes y Seguridad Vial
dependencia de la Municipalidad Provincial de Huamanga. En
atención a los medios de prueba presentados, no cabe duda que la
actora ha desempeñado labores de naturaleza permanente, pues
la temporalidad significa lo circunstancial, lo fugaz o perentorio en
el tiempo, siendo que el periodo tan extenso, según es de verse de
los medios antes referidos, no refleja sino la naturaleza permanente
de la labor, por lo que ha quedado debidamente establecido, que la
recurrente, desempeñó labores de carácter permanente e
ininterrumpidas a partir del segundo periodo presentado esto es
desde el dos de enero de dos mil diez. Décimo Quinto.- Que, en
tal sentido, en base a los documentos antes precisados; se
desprende que la actora prestó servicios desempeñando labores
como Inspectora de Transito y Seguridad Vial – Área de gerencia
de Transportes y Seguridad vial de de la Municipalidad Provincial
de Huamanga, desde el dos de enero de dos mil diez a la
actualidad; es decir, la demandante laboró en forma ininterrumpida
durante el período posterior a la suscripción del Contrato
Administrativo de Servicios y del despido; así desarrollándose
plenamente, la actora en sus labores de naturaleza permanente y
sujeta a subordinación, ha adquirido la protección del artículo 1° del
Decreto Ley Nº 24041 amparado en el principio de protección al
trabajador, el mismo que establece que sólo puede ser despedido
por las causas previstas en el capítulo V del Decreto Legislativo N°
276, resultando ilícita la decisión de la demandada de dar por
variada la relación laboral sin observar el procedimiento de Ley.
Décimo Sexto.- Que, resulta pertinente mencionar que entre las
partes existía una relación laboral desde el mes de enero del año
dos mil diez, ello al verificar que la contratación de la accionante
por contratos de servicios no personales (de naturaleza civil) se
han desnaturalizado, en aplicación del principio de primacía de la
realidad, desarrollado por esta Sala Suprema en reiteradas
ejecutorias, criterio que coincide con el Tribunal Constitucional en
la Sentencia N° 49-2011-AA, fundamento 3 (que mediante este
principio “(...) en caso de discordancia entre lo que ocurre en la
práctica y lo que fluye de los documentos, debe darse preferencia
a lo primero; es decir, a lo que sucede en el terreno de los hechos”),
pues la actora ha cumplido con acreditar los tres elementos del
contrato de trabajo, esto es, la prestación personal del servicio, la
subordinación y la remuneración. Además, a la consideración que
habiéndose establecido entre las partes una contratación de
naturaleza laboral desde la fecha de ingreso de la actora (dos de
enero de dos mil diez), por el principio de continuidad, para la
realización de las mismas funciones no resultaba viable realizar
otra contratación que vulnere los derechos constitucionales del
trabajador, en desmejora de su contratación laboral. Décimo
Sétimo.- Que, en atención a la norma infringida, cabe agregar que
ésta hace referencia únicamente a la forma en que los trabajadores
sujetos a la modalidad de contrato, que hayan realizado más de un
año de labores ininterrumpidas, han de ser cesados y destituidos
de acuerdo a lo precisado por el capítulo V de del Decreto
Legislativo Nº 276, mas no prescribe como condición sine qua non
que el servidor haya ingresado a la carrera pública; para tal efecto,
se desprende del artículo 15° del citado Decreto Legislativo N° 276,
que para adquirir dicha condición deberá concursar y ser evaluado
previamente de manera favorable. Que, entonces, al no ser materia
de discusión los alcances del artículo 15° del Decreto Legislativo
N° 276, referidos al ingreso a la carrera administrativa; y al haberse
acreditado de forma suficiente que la recurrente efectuó labores
de naturaleza permanente por más de un año ininterrumpido
de servicios resulta de aplicación al caso de autos la protección
contenida en el artículo 1° de la Ley N° 24041; por lo que, la causal
denunciada resulta fundada. Décimo Octavo.- Que, conforme se
advierte del Decreto Legislativo N° 276, en el Sector Público
existen dos tipos de servidores: i) Nombrados; y, ii) Contratados.
Los servidores nombrados se encuentran comprendidos en la
carrera administrativa y se sujetan íntegramente a las normas que
la regulan, como son los derechos, bonificaciones y beneficios, en
tanto su ingreso necesariamente es por concurso público conforme
lo señala el artículo 12° literal d) del Decreto Legislativo N° 276; y,
los servidores contratados que por el contrario no están
comprendidos en la carrera administrativa pero sí en las
disposiciones de dicho dispositivo legal en lo que les sea aplicable,
según se aprecia del artículo 2° del citado Decreto Legislativo;
contratación que puede darse para realizar funciones de carácter
temporal o accidental, o para el desempeño de labores
permanentes. Décimo Noveno.- Que, la Resolución Jefatural N°
252-87-INAP-DNP, publicada el veintiuno de junio de mil
novecientos ochenta y siete, aprueba la Directiva que norma la
formulación, ejecución y evaluación de la Planilla Única de Pagos
de Remuneraciones y Pensiones para todo el Sector Público, la
cual no se limita al caso de los servidores públicos nombrados;
toda vez que, ello no implica que se le reconozca el status de un
trabajador nombrado de carrera bajo el régimen del Decreto
Legislativo Nº 276, ni que en función a ello goce de los derechos
inherentes a la condición de un servidor público nombrado. Por lo
que, al haber acreditado la actora que, ingresó a prestar servicios a
favor de la municipalidad demandada, desde el dos de enero de
dos mil diez, corresponde ordenar su inscripción en planillas como
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servidora contratada desde dicha fecha. Vigésimo.- Que, en
relación a lo solicitado sobre el pago de los beneficios laborales
como la Compensación por Tiempo de Servicios; por mantener
vínculo laboral vigente, es importante precisar que el artículo 54°
literal c) de la Ley de Bases de la Carrera Administrativa y de
Remuneración del Sector Público – Decreto Legislativo N° 276,
establece que: “Compensación por Tiempo de Servicios: Se otorga
al personal nombrado al momento del cese…”, lo que determina
que al ostentar la demandante la condición de servidora contratada,
no le asiste el derecho a percibir dicho beneficio, al encontrarse
este restringido al personal nombrado, deviniendo dicho extremo
en improcedente. Vigésimo Primero.- Que, en cuanto a lo
solicitado respecto al pago de beneficios laborales como
vacaciones no gozadas, es menester precisar que el artículo 25°
de la Constitución Política del Estado, establece que: “La jornada
ordinaria de trabajo es de ocho horas diarias o cuarenta y ocho
horas semanales, como máximo. En caso de jornadas acumulativas
o atípicas, el promedio de horas trabajadas en el período
correspondiente no puede superar dicho máximo. Los trabajadores
tienen derecho a descanso semanal y anual remunerados. Su
disfrute y su compensación se regulan por ley o por convenio”; y, el
artículo 24° inciso d) del Decreto Legislativo N° 276, contemplado
en el Capítulo IV del Título I del citado texto legal, señala: “Son
derechos de los servidores públicos de carrera: (…) d) Gozar
anualmente de treinta días de vacaciones remuneradas salvo
acumulación convencional hasta de 02 períodos”. Como se sabe
las vacaciones, para los servidores públicos de carrera o
nombrados, son el descanso de treinta días al que tienen derecho
después de haber laborado durante un año en la respectiva
entidad; sin embargo, para los trabajadores contratados la
normativa legal especial no ha fijado el goce de este derecho, pero
teniendo en cuenta que el artículo 25° de la Carta Fundamental
establece que los trabajadores tienen derecho a descanso semanal
y anual remunerados (vacaciones), sin hacer distinción alguna
entre trabajadores nombrados o contratados, corresponde ordenar
a la entidad demandada otorgue a la trabajadora demandante el
descanso semanal y anual remunerado. Vigésimo Segundo.Que, en cuanto a lo solicitado respecto al pago de beneficios
laborales como asignación familiar, resaltamos que al ostentar la
demandante la condición de servidora contratada bajo la protección
de la Ley N° 24041, no le asiste el derecho a percibir dicho
beneficio, al no encontrarse la actora sujeta al régimen laboral de la
actividad privada, condición laboral que constituye uno de los
requisitos para percibir el concepto demandado, conforme al
artículo 1° de la Ley N° 25129, deviniendo dicho extremo en
improcedente. Vigésimo Tercero.- Que, respecto a la pretensión
formulada por la demandante en la cual solicita el pago de
beneficios laborales como bonificación de fiestas patrias y
navidad, el artículo 54° inciso b) del Decreto Legislativo N° 276
prevé que: “Son beneficios de los funcionarios y servidores
públicos: (…) b) Aguinaldos: Se otorgan en Fiestas Patrias y
Navidad por el monto que se fije por Decreto Supremo cada año”.
El numeral 2 de la Quinta Disposición Transitoria del Texto Único
Ordenado de la Ley N° 28411, Ley General del Sistema Nacional
de Presupuesto, aprobado por Decreto Supremo N° 304-2012-EF,
establece que a través de la Ley Anual de Presupuesto del Sector
Público se fija, entre otros conceptos, el monto del Aguinaldo por
Fiestas Patrias y Navidad que se otorga a los funcionarios,
servidores, obreros, personal sujeto a carreras reguladas por
Leyes específicas, así como a los pensionistas del Sector Público,
para lo cual en cada año fiscal será reglamentado mediante decreto
supremo refrendado por el Ministro de Economía y Finanzas. Por
ello, los Aguinaldos por Fiestas Patrias y Navidad, son beneficios
laborales que tienen sustento legal; asimismo, las diversas leyes
anuales de presupuesto del sector público, disponen de manera
expresa el otorgamiento de aguinaldos por fiestas patrias y por
navidad, a todos los servidores públicos nombrados y contratados,
bajo el régimen del Decreto Legislativo N° 276; por ende,
corresponde ordenar a la entidad demandada cumpla con abonar a
la demandante los referidos aguinaldos por fiestas patrias y
navidad, durante todo su débito laboral, pues dada su condición
laboral acreditada le asiste dicho derecho. Vigésimo Cuarto.Que, de lo expuesto, es posible concluir que al haberse desestimado
mediante sentencia de vista, la pretensión objeto de demanda en el
caso de autos, pese haberse acreditado el cumplimiento de los
requisitos establecidos en el artículo 1° de la Ley N° 24041
-conforme se ha expuesto en los fundamentos precedentes-, se
configura la causal invocada de infracción normativa de la acotada
norma material; razón por la cual, corresponde estimar el recurso
casatorio y actuar en sede de instancia revocando la sentencia
apelada y declarar fundada en parte la demanda, ordenando que la
demandada cumpla con registrar a la actora en Planilla de Pagos
como servidora contratada permanente desde el dos de enero de
dos mil diez, asimismo le abone los conceptos de vacaciones y
aguinaldos desde dicha fecha. DECISIÓN: Por estas
consideraciones; y, con lo expuesto en el Dictamen del Señor
Fiscal Supremo en lo Contencioso Administrativo: Declararon
FUNDADO el recurso de casación interpuesto por la demandante
Magna De la Cruz Huaman, de fecha dieciséis de setiembre de
dos mil trece, de fojas 539 a 547; en consecuencia: CASARON la
sentencia de vista de fecha veintidós de agosto de dos mil trece, de
fojas 526 a 532, expedida por la Sala Civil de la Corte Superior de
Justicia de Ayacucho; y, actuando en sede de instancia,
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CASACIÓN
REVOCARON la sentencia apelada de fecha veintiséis de
setiembre de dos mil doce; y REFORMÁNDOLA declararon
FUNDADA en parte la demanda; ORDENARON que la
Municipalidad Provincial de Huamanga, a través de su Alcalde,
representante legal, o quien haga sus veces, reponga a la
demandante Magna De la Cruz Huaman en el cargo de Inspectora
de Tránsito y de Seguridad Vial de la Municipalidad Provincial de
Huamanga, o en cargo similar, sin que esto último implique
disminución de nivel o remuneración al que ostentaba o percibía,
dentro del régimen laboral público en lo que corresponda de la
aplicación de la Ley N° 24041. Asimismo, ORDENARON que la
demandada cumpla con registrar a la actora en Planilla de Pagos
como servidora contratada permanente desde el dos de enero de
dos mil diez, asimismo abónesele los conceptos de vacaciones y
aguinaldos desde dicha fecha, amparadas en el Decreto Legislativo
N° 276 y su reglamento. Declararon INFUNDADA en el extremo
que solicita el pago de beneficios laborales como la compensación
por tiempo de servicios y asignación familiar, así también, los
dejados de percibir en el periodo del uno de marzo al treinta y uno
de diciembre de dos mil nueve; sin costas ni costos; DISPUSIERON
publicar la presente resolución en el Diario Oficial “El Peruano”,
conforme a ley; en el proceso contencioso administrativo seguido
contra la Municipalidad Provincial de Huamanga; y, los
devolvieron; interviniendo como ponente la señora Jueza Suprema
Chumpitaz Rivera. S.S. RODRÍGUEZ MENDOZA, CHUMPITAZ
RIVERA, TORRES VEGA, MAC RAE THAYS, CHAVES ZAPATER
C-1335410-65
CAS. Nº 15067-2013 LAMBAYEQUE
Bonificación Especial Mensual por Preparación de Clases y
Evaluación, Artículo 48° de la Ley N° 24029, modificado por la Ley
N° 25212. Lima, catorce de setiembre de dos mil quince. VISTOS;
y, CONSIDERANDO: Primero.- Viene a conocimiento de esta
Sala Suprema el recurso de casación interpuesto con fecha 09 de
setiembre de 2013, por el Gobierno Regional de Lambayeque
de fojas 257 a 264, contra la Sentencia de Vista de fojas 246 a
250, su fecha 12 de agosto de 2013, que confirma la sentencia
apelada obrante a fojas 201 a 209, su fecha 9 de octubre de 2012
que declara fundada en parte la demanda; e, improcedente en
el extremo demandado referido a percibir mensualmente en su
pensión de cesantía la bonificación especial mensual por
preparación de clases y evaluación; el mismo que debe ser
calificado teniendo en cuenta los parámetros establecidos en los
artículos 387° y 388° del Código Procesal Civil, modificado por la
Ley N° 29364, en concordancia con el inciso 3), numeral 3.1, del
artículo 35° del Texto Único Ordenado de la Ley N° 27584, que
regula el Proceso Contencioso Administrativo, aprobado por el
Decreto Supremo N° 013-2008-JUS, a fin de verificar el
cumplimiento de los requisitos de admisibilidad y procedencia de
dicho recurso. Segundo.- Que, se verifica que el medio
impugnatorio propuesto cumple los requisitos de admisibilidad
previstos en el numeral 3.1, inciso 3) del artículo 35° del Texto
Único Ordenado de la Ley N° 27584, y los contenidos en el
artículo 387° del Código Procesal Civil, esto es: i) Se recurre una
sentencia expedida por la Sala Superior respectiva que como
órgano de segundo grado, pone fin al proceso; ii) Se ha
interpuesto ante la Sala Mixta Transitoria de Chiclayo de la Corte
Superior de Justicia de Lambayeque que emitió la resolución
impugnada; iii) Ha sido presentado dentro del plazo de diez días
que establece la norma; y, iv) La entidad impugnante se encuentra
exonerada de presentar tasa judicial, en aplicación del artículo
24º inciso g) del Texto Único Ordenado de la Ley Orgánica del
Poder Judicial, modificado por la Ley Nº 27231, concordado con
el artículo 413° del Código Procesal Civil. Tercero.- Con
referencia al requisito de procedencia previsto en el inciso 1) del
artículo 388°, del Código Procesal Civil, se verifica de autos que
la parte recurrente apeló la resolución de primera instancia que le
fue adversa, conforme se verifica del escrito de fojas 215 a 220,
con lo cual ha dado cumplimiento a dicha exigencia. Asimismo,
respecto al requisito previsto en el inciso 4) del mencionado
artículo, se advierte del recurso interpuesto que la misma ha
solicitado como pedido casatorio el revocatorio, siendo así este
requisito también ha sido cumplido. Cuarto.- En cuanto a las
exigencias contenidas en los incisos 2) y 3) del artículo 388º del
Código Procesal Civil, la parte impugnante denuncia como
causales: i) La Infracción normativa por interpretación
errónea del artículo 48° de la Ley N° 24029, sosteniendo que la
Sentencia de Vista ha incurrido en error de derecho al considerar
que el pago que hace mención la citada norma legal, se refiere a
una remuneración total, sin tener en cuenta que el artículo 8°
inciso a) del Decreto Supremo N° 051-91-PCM, establece que el
cálculo debe ser en base a la remuneración total permanente;
indica además, que el artículo 48° de la Ley N° 24029, modificado
por el artículo 1° de la Ley N° 25212, no precisa el tipo de
remuneración a la cual se ha concluido en la sentencia impugnada;
ii) Infracción normativa por inaplicación del artículo 10° del
Decreto Supremo N° 051-91-PCM, al considerar que el tema en
cuestión es determinar cuál es el tipo de la remuneración sobre la
cual se aplicará a la Bonificación Especial; pero, la Sala de Vista
no ha tenido en consideración el artículo en mención que señala
expresamente: “Precisase que lo dispuesto en el artículo 48° de
la Ley del Profesorado N° 24029, modificado por la Ley N° 25212,
se aplica sobre la remuneración total permanente establecida en
El Peruano
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el presente Decreto”, por lo que esta norma es la que indica cuál
es la remuneración a pagar; iii) Infracción normativa por
inaplicación del artículo 1° del Decreto Legislativo N° 847,
precisando que ésta es una norma de igual jerarquía que la Ley
del Profesorado N° 24029, modificada por la Ley N° 25212;
empero, el mencionado Decreto Legislativo trata de un tema
especial, referido al de la remuneración, señalando en su artículo
1° que las remuneraciones o las bonificaciones, como es el caso
de la Bonificación Especial Mensual por Preparación de Clases y
Evaluación, debe seguir regulándose en los mismos montos
percibidos. Indica además que la Sentencia de Vista no ha
analizado esta norma, vigente en el ordenamiento jurídico; iv)
Infracción normativa por interpretación errónea de los
artículos 8° y 9° del Decreto Supremo N° 051-91-PCM, al
considerar que los mismos no tienen mayor jerarquía que la Ley
del Profesorado, Ley N° 24029; v) Infracción normativa por
inaplicación del precedente vinculante expedido por la Corte
Suprema de la República en la Casación N° 1074-2010, al
referir que los fundamentos séptimo al décimo tercero de dicha
sentencia constituyen principios jurisprudenciales en materia
contenciosa administrativa, donde se establece la base de cálculo
de la Bonificación Diferencial y Bonificación Especial Mensual por
Preparación de Clases y Evaluación; siendo sólo aplicable para la
base de cálculo, la remuneración íntegra en el caso de no existir
disposición expresa que regule su forma de cálculo, situación que
no se presenta en el caso de autos. Quinto.- Examinadas las
causales denunciadas por el recurrente en su recurso de
casación, precisadas en el acápite i) al iv), se aprecia con
evidente claridad que no cumplen con los requisitos de
procedencia previstos en los numerales 2) y 3) del artículo 388°
del Código Procesal Civil, ya que su argumentación carece de
sustento, toda vez que se ha limitado a realizar una descripción
genérica de las normas legales que, a su criterio, han sido
infringidas por las instancias de mérito, sin realizar un análisis de
las mismas a fin de demostrar cuál sería la incidencia directa de
la infracción alegada sobre la decisión impugnada, lo cual implica
desarrollar el modo en que se han infringido las normas y cómo
debe ser su aplicación correcta. Asimismo, tampoco se ha
aportado evidencias acerca de la probabilidad de error en el
razonamiento de los jueces superiores que emitieron la resolución
de vista recurrida. Por otro lado, cabe precisar, que de la
Sentencia de Vista se aprecia que el órgano revisor ha emitido
pronunciamiento sobre cada uno de los extremos que fueron
materia de apelación, indicando entre otros que el derecho
reclamado encuentra debido sustento en lo dispuesto en el
artículo 48° de la Ley Nº 24029, Ley del Profesorado, que de
manera clara y expresa establece el derecho de los profesores al
pago de la bonificación bajo análisis en base a la remuneración
total y no con respecto a la remuneración total permanente como
sostiene erróneamente la entidad demandada, por lo que la
decisión asumida por el colegiado concuerda con la posición
asumida por la Corte Suprema de Justicia, en uniformes y
reiteradas Ejecutorias Supremas, siendo así devienen en
improcedentes las causales denunciadas. En cuanto a la
inaplicación del precedente al cual se hace mención en el acápite
v), se debe señalar que, éste, determina la base del cálculo para
la Bonificación Diferencial y la Bonificación Especial, ésta última
regulada en el artículo 12° del Decreto Supremo Nº 051-91-PCM
por tanto su aplicación no resulta pertinente al caso de autos,
siendo ello así, debe declararse improcedente ésta causal
denunciada. FALLO: Por estas consideraciones y en aplicación
de lo dispuesto en el artículo 392° del Código Procesal Civil,
modificado por la Ley N° 29364, declararon: IMPROCEDENTE el
recurso de casación interpuesto con fecha 09 de setiembre de
2013, por el Gobierno Regional de Lambayeque de fojas 257 a
264, contra la Sentencia de Vista de fojas 246 a 250, su fecha 12
de agosto de 2013; ORDENARON la publicación de la presente
resolución en el Diario Oficial “El Peruano” conforme a ley; en los
seguidos por la demandante Sonia Mercedes Terrones Vda. De
Zúñiga y otra contra el Gobierno Regional de Lambayeque y
otro; sobre Proceso Contencioso Administrativa. Interviniendo
como ponente la señora Jueza Suprema, Chumpitaz Rivera; y
los devolvieron. S.S. RODRIGUEZ MENDOZA, CHUMPITAZ
RIVERA, MAC RAE THAYS, CHAVES ZAPATER, MALCA
GUAYLUPO C-1335410-66
CAS. Nº 15259 – 2013 LIMA
La recurrida incurre en un vicio de motivación aparente ya que la
argumentación que sustenta su decisión, no resulta ser la
apropiada, al no haber tomado en cuenta el artículo 5° de la Ley N°
27803, por el cual se crea la Comisión Ejecutiva como único órgano
administrativo encargado de revisar los Ceses Colectivos. Lima,
diecisiete de setiembre de dos mil quince. LA PRIMERA SALA DE
DERECHO CONSTITUCIONAL Y SOCIAL TRANSITORIA DE LA
CORTE SUPREMA DE JUSTICIA DE LA REPÚBLICA. VISTA: En
discordia, el señor Juez Supremo Yrivarren Fallaque se adhiere al
voto de los señores Jueces Supremos Torres Vega, Chaves
Zapater y Malca Guaylupo, dejados y suscritos con fecha veintiocho
de mayo de dos mil quince, conforme lo señala el artículo 145° del
texto Único Ordenado de la Ley Orgánica del Poder Judicial; en
audiencia pública llevada a cabo en la fecha; y, producida la
votación con arreglo a ley, emite la siguiente sentencia: MATERIA
DEL RECURSO: Se trata del recurso de casación interpuesto por
El Peruano
Lunes 1 de febrero de 2016
CASACIÓN
el Procurador Público del Ministerio de Trabajo y Promoción del
Empleo, a fojas setecientos setenta, contra la sentencia de vista de
fojas setecientos cuarenta, de fecha veinte de junio de dos mil
trece, que confirma la sentencia apelada de fecha dieciocho de
abril de dos mil doce, obrante a fojas setecientos diecisiete, que
declara fundada la demanda; en el proceso contencioso
administrativo seguido por don José Luis Castro Alvarado.
CAUSALES DEL RECURSO: Que, el recurso de casación ha sido
declarado procedente mediante resolución de fecha veintidós de
enero del dos mil catorce, que corre a fojas cincuenta y ocho del
cuaderno de casación formado en esta Suprema Sala por las
causales de infracción normativa de los artículos 139° inciso 5)
de la Constitución Política del Estado, 5° de la Ley N° 27803 y
30° del Texto Único Ordenado de la Ley N° 27584.
CONSIDERANDO: Primero: Que, la Corte Suprema de Justicia de
la República, como órgano de casación ostenta atribuciones
expresamente reconocidas en la Constitución Política del Perú,
desarrolladas en el artículo 4° del Texto Único Ordenado de la Ley
Orgánica del Poder Judicial aprobado por Decreto Supremo N°
017-93-JUS, atribuciones que sustentan la unidad, exclusividad e
independencia en el ejercicio de la función casatoria que
desempeña en la revisión de casos. Segundo: Que, habiéndose
declarado procedentes, tanto las denuncias sustentadas en vitio in
procedendo como en vitio in iudicando, corresponde prima facie
efectuar el análisis del error procesal o vitio in procedendo, toda
vez que, de resultar fundada la denuncia en dicho extremo, dada
su incidencia en la tramitación del proceso y su efecto nulificante,
carecería de sentido emitir pronunciamiento respecto del
denunciado error material, referido al derecho controvertido en la
presente causa. Tercero: Que, el debido proceso es un principio y
derecho de la función jurisdiccional, consagrado en el inciso 3) del
artículo 139° de la Constitución Política del Estado, que tiene por
función velar por el respeto irrestricto de los derechos fundamentales
y las garantías constitucionales que lo integran, dando a toda
persona la posibilidad de recurrir a la justicia para obtener la tutela
jurisdiccional de sus derechos, a través de un procedimiento
regular en el que se dé oportunidad razonable y suficiente de ser
oído, ejercer el derecho de defensa, de producir prueba y obtener
una sentencia debidamente motivada. Cuarto: Que, el derecho a
la motivación de las resoluciones judiciales, tal como se recoge en
el texto constitucional, artículo 139° inciso 5
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