escala messy para el alumno - Revistas Científicas de la

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© Copyright 2002: Servicio de Publicaciones de la Universidad de Murcia
Murcia (España). ISSN: 0212-9728
anales de psicología
2002, vol. 18, nº 2 (diciembre), 197-214
Relaciones entre evaluadores de la competencia social
en preadolescentes: Profesores, iguales y autoinformes*
Mª Victoria Trianes**(1), Mª José Blanca (2), Angela Muñoz (1), Belén García (1),
María Cardelle-Elawar (3) y Lidia Infante (1)
(1) Departamento de Psicología Evolutiva y de la Educación. Universidad de Málaga
(2) Departamento de Básica, Metodología y Psicobiología, Area de Metodología. Universidad de Málaga
(3) Arizona State University West, Educational Psychology. USA.
Resumen: Este trabajo intenta analizar las aportaciones,
en la evaluación de habilidades sociales y problemas de la
conducta social, de tres fuentes distintas: profesores, iguales y autoinformes, desde un enfoque multivariado en el
que cada evaluador representa un punto de vista distinto
que se complementa con los otros para ofrecer una visión
global de la competencia social de un adolescente. Los participantes son 92 alumnos y alumnas de colegios de Málaga. Los resultados de los análisis de regresión paso a paso
sobre las variables previamente resumidas por medio de
análisis factorial, en cada fuente, muestran que profesores
y autovaloración de alumnos coinciden en la valoración del
comportamiento hábil asertivo y coinciden también al valorar negativamente el comportamiento impulsivo/ agresivo. Los iguales y autovaloración coinciden al asociar el
comportamiento impulsivo/ agresivo a la baja aceptación
de iguales. La evaluación de iguales y la del profesor correlacionan en el caso de los alumnos hábiles. La aceptación
de iguales también correlaciona con inhibición evaluada
por el profesor, lo que permite cuestionar el carácter problemático de la inhibición en el contexto escolar.
Palabras clave: Competencia Social; convergencia evaluadores; adolescentes.
La competencia social en niños y adolescentes
es un campo de investigación complejo y amplio, compartido por varias áreas de conocimiento, de alta productividad e interés aplicado, particularmente en el mundo de la educación. Esta línea de investigación se viene desarrollando desde los años 70, a partir de planteamientos estrictamente conductistas hasta
modelos complejos actuales, que ordenan las
* Este trabajo ha recibido financiación de la de la Dirección General de Investigación y Desarrollo Tecnológico (proyecto PB93-0987).
** Dirección para correspondencia: Mª Victoria
Trianes. Departamento de Psicología Evolutiva y de la
Educación. Facultad de Psicología. Campus de Teatinos. Universidad de Málaga. 29071 Málaga (España).
E-mail: [email protected]
Title: Relations between assessment agents of social competence in preadolescents: Teachers, peers and self-reports.
Abstract: This work aims to analyse the relations among
the results of the assessment of social skills and social behaviour problems coming from different sources: teachers,
peers and self-reports. Data obtained after regression
analysis over the variables yielded by factor analysis show
that teachers and self-report agree in the assessment of
positive assertive behaviour and in the negative assessment
of aggressive/impulsive behaviour. Peers assessment and
self-reports coincide in the association of impulsive/aggressive behaviour with low peer acceptance. Peers´
and teacher’s assessment correlate in the case of skilled
students. Finally, peer acceptance is also correlated to inhibition assessed by teacher, which allows us to point out the
ambiguity of the category "inhibition" in the school context.
Key words: Social Competence; Convergence Evaluators;
Adolescents.
múltiples variables implicadas de nivel interno,
de evaluadores externos y a partir del comportamiento observado. Según el modelo más consensuado (Cavell, 1990; Gresham, 1981;
Greenspan, 1981; McConnell y Odom, 1986;
McFall, 1982; Meichenbaum, Butler y Gruson,
1981) las habilidades autoevaluadas sustentan y
explican comportamientos competentes, referidos a situaciones concretas, los cuales son evaluados por agentes sociales relevantes, que valoran la conducta competente de acuerdo a
normas, reglas y criterios de los contextos socioculturales de referencia. Estos pueden variar
de acuerdo a numerosas características: de los
sujetos, de las tareas, de los observadores, de
las familias y las comunidades culturales. Por
tanto, las variables que se manejan son de una
- 197 -
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Mª Victoria Trianes et al.
triple naturaleza: a) internas, tales como cogniciones, creencias, emociones, etc., cuya medición se realiza por autoinforme; b) comportamientos externos recogidos directamente mediante observación; y c) valoraciones de agentes externos, siendo los profesores e iguales los
agentes más utilizados en el contexto escolar.
Evaluación e intervención son dos caras de
la misma realidad, pues ambas se necesitan mutuamente y están íntimamente trabadas. La evaluación se ve orientada por los modelos conceptuales y de intervención y, a la vez, pone a
prueba y modifica estos modelos conceptuales
aportando información relevante para la comprensión de sus aciertos o limitaciones. Desde
una perspectiva de evaluación, que es la que se
adopta en el presente trabajo, la competencia
social ha sido considerada como una medida
sumativa del rendimiento social en las interacciones con iguales y adultos en distintas situaciones, valorado por agentes sociales significativos
incluyendo al propio sujeto (Gresham, 1986;
McConnell y Odom, 1986). Esta forma de entender la competencia social se asienta en un enfoque multivariado, que defiende una evaluación multimétodo-multifuente-multicontexto
(Elliott, Sheridan y Gresham, 1989; Gresham y
Cavell, 1986; Ledingham y Younger, 1985; Merrel y Gimpel, 1998), en la cual cada evaluador
aporta su punto de vista propio y distinto, y
conjuntamente contribuyen a una visión más
completa de la competencia social poseída por
un niño o niña.
La investigación ha demostrado que los distintos evaluadores presentan una escasa convergencia entre sus evaluaciones (Gresham y Rechly, 1987; Nelson, Hayes, Felton y Harret, 1985),
aunque también se han documentado acuerdos
que han sido interpretados como un índice de
validez convergente (Taylor, Asher y Williams,
1987). Sin embargo, actualmente, más que constatar los índices globales de convergencia o desacuerdo, se presta atención a las características y
peculiaridades de los distintos agentes, lo que
permite comprender mejor sus distintas aportaciones a la evaluación de la competencia social.
Los profesores son agentes evaluadores muy
relevantes de la competencia social infantil, ya
anales de psicología, 2002, vol. 18, nº 2 (diciembre)
que pueden aportar valoraciones acerca de un
alumno o alumna basadas en una muestra
comprensiva y representativa de conductas observadas en la clase durante largos periodos de
tiempo (Elliot, Gresham, Freeman y McCloskey, 1988). Esta valoración de la conducta infantil se suele realizar desde la perspectiva de la
adaptación escolar, juzgando el comportamiento social en relación con las normas o valores,
explícitos e implícitos, del contexto escolar. De
esta forma, detectan fácilmente el comportamiento inadaptado, ya que debido a su experiencia con numerosos grupos de niños, conocen que es lo “anormal” en la conducta social
de un alumno o alumna.
Los iguales, por su parte, permiten evaluar
la aceptación o preferencias hacia un compañero o compañera. Suponen el ámbito de las
relaciones paritarias en las que un niño se
muestra de manera distinta a como lo hace con
el profesor. Experimentan directamente la
conducta social y son los mejores intérpretes de
las normas y estándares de grupo (Schneider,
1989). Profesores e iguales presentan un acuerdo sustancial al identificar grupos extremos
(Hudley, 1993; Kenrich y Stringfield, 1980) y la
convergencia es mayor si ambos agentes utilizan un mismo instrumento (Trianes, de la Morena y Sánchez, 1996). Los instrumentos sociométricos están entre los que, al ser utilizados
por ambos evaluadores, presentan mayor grado
de acuerdo (Coie, Dodge y Kupersmidt, 1990;
Newcomb, Bukowski y Pattee, 1993).
Además de iguales y profesores, el punto de
vista del propio niño o niña se ha empezado a
considerar recientemente. Los autoinformes
son indispensables para conocer la autopercepción y autovaloración de la persona en temas
como autoconcepto, atribuciones o sentimientos. Estas variables recogen, en cierta medida,
el impacto interno de la valoración por agentes
externos. La inclusión de estas variables internas ha permitido generar modelos que proporcionan explicaciones causales de la conducta
observada.
En la preadolescencia la autoevaluación
supera las limitaciones que se presentan en la
infancia, debido a una mayor madurez en el
Relaciones entre evaluadores de la competencia social en preadolescentes: Profesores, iguales y autoinformes
desarrollo sociocognitivo y a una mayor
experiencia social e interiorización de normas y
criterios sociales que juzgan la adecuación de la
conducta social en los distintos contextos. Sin
embargo, los preadolescentes pueden diferir en
criterios para calificar la conducta cuando se
valoran a sí mismos y cuando valoran a otros,
como ha demostrado la investigación sobre la
comprensión de la conducta violenta (Fatum y
Hoyle, 1996), y también pueden presentar
sesgos importantes (.Baumeister, Smart y
Boden, 1996; Colvin, Bloch y Funder, 1996;
Raskin, Novacek y Hogan, 1991; Salmivalli et al.,
1999) al evaluar la propia competencia. Otras
circunstancias contextuales parecen influir también en la autoevaluación adolescente. Hemos
encontrado que alumnos de clase acomodada
son más críticos que otros de clase baja a la
hora de evaluar sus habilidades (Trianes,
Cardelle-Elawar y Blanca, 2001).
Ante la complejidad inherente a la evaluación de la competencia social, el presente trabajo se propone, como objetivo general, contribuir a clarificar el punto de vista de cada una
de las fuentes empleadas en este estudio: profesores, iguales y el propio niño, analizando sus
coincidencias en la comprensión y definición
de habilidades y problemas. Las habilidades
consideradas en este trabajo son: habilidades
sociales, responsabilidad, amistosidad, asertividad con iguales y profesores y aceptación de
iguales. Los problemas o dificultades que se
evalúan son: impulsividad, agresividad, inhibición/ retraimiento, celos, soledad y respuesta
pasiva ante profesores e iguales.
En concreto, el presente trabajo, partiendo
del modelo multivariado explicado anteriormente sobre los componentes de la competencia social, persigue averiguar: a) si las habilidades y problemas sociales autoinformados predicen la valoración positiva y negativa del profesor, b) si las habilidades y problemas sociales
autoinformados predicen la valoración de los
iguales y c) si la valoración del profesor predice
la de los iguales.
Teniendo en cuenta que una mayoría de
trabajos utiliza sólo dos evaluadores simultáneamente en sus investigaciones, el presente
199
trabajo realiza una aportación a una comprensión más completa de la complejidad de las relaciones entre estos tres evaluadores relevantes
de la competencia social infantil y adolescente.
En definitiva, se pretende en este estudio contribuir a la comprensión de las relaciones entre
evaluadores de la competencia social, proporcionando un análisis sistemático de sus relaciones al evaluar la competencia social de una
muestra de preadolescentes españoles.
Método
Participantes
Los participantes fueron 92 estudiantes, 47 niños y 45 niñas, de 5º curso de EGB con una
media de edad de 11 años, organizados en cuatro aulas de tres centros escolares de Málaga
capital y su entorno. Los contextos de estos
centros variaban, siendo uno de ellos de nivel
socioeconómico y cultural acomodado, mientras que los otros dos pertenecían a una zona
de nivel más bajo.
Los profesores de las cuatro aulas (3 mujeres y un hombre) participaron voluntariamente. Todos tenían más de 5 años de experiencia y eran considerados buenos profesores en su centro. Colaboraron con interés y
dedicación.
Variables e instrumentos
Las variables utilizadas en este estudio,
organizadas por instrumentos, son las
siguientes:
1) The Matson Evaluation of Social Skills in
Youngsters (MESSY) de Matson, Rotatori y
Helsel (1983). La elaboración de este instrumento se describe con detalle en Matson et al.
(1983). Fue diseñado para evaluar el grado de
adecuación de la conducta social y presenta
dos formatos, para cumplimentar respectivamente por los alumnos y por los profesores.
Una de sus cualidades es que mide habilidades y competencias apropiadas, a la vez que
problemas del comportamiento social. Sus
anales de psicología, 2002, vol. 18, nº 2 (diciembre)
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Mª Victoria Trianes et al.
propiedades psicométricas han sido investigadas profusamente, particularmente en
muestras angloparlantes, resultando, en general, satisfactorias (Helsen y Matson, 1984;
Kazdin, Matson y Elveldt- Dawson, 1984;
Matson, Macklin y Helsel, 1985; Matson y
Ollendick, 1988; Spence y Liddle, 1990), y en
muestras españolas (Mendez, Hidalgo e Ingles, en prensa). Para su utilización, en este
estudio, se tradujeron y adaptaron los items
de esta prueba (véase en el anexo 1) en el seno del propio equipo de trabajo.
El cuestionario dirigido a alumnos
presenta un formato de respuesta en cuatro
escalones: nunca, a veces, a menudo y
siempre. Se han considerado los cinco
factores siguientes:
- Habilidades Sociales Apropiadas (24 ítems). Este factor evalúa conductas como expresividad emocional, tener amigos, compartir,
etc. Algunos ejemplos de ítems son: “miro a
la gente cuando hablo con ella” y “me dirijo
a la gente y entablo conversación.”
- Asertividad Inapropiada (16 ítems), el cual explora conductas agresivas, de burla o abuso
de los demás. Algunos ejemplos de ítems
son: “cojo cosas que no son mías sin permiso” y “pego cuando estoy furioso.”
- Impulsividad (5 ítems). Algunos ejemplos de
ítems son: “me enfado fácilmente” e “interrumpo a los demás cuando están hablando.”
- Sobreconfianza (6 ítems). Este factor explora
conductas de sobrevaloración del Yo. Algunos ejemplos de ítems son: “me gusta
presumir ante los demás de las cosas que
tengo” y “creo que lo sé todo.”
- Celos/soledad (4 ítems), el cual explora conductas como sentirse solo o no tener amigos.
El cuestionario MESSY para los profesores
presenta tres factores que muestrean la misma
información que la incluida en el cuestionario
de los alumnos y con la misma escala de respuesta. Los tres factores son:
- Habilidades Sociales Apropiadas (19 ítems). Este
factor incluye ítems de contenido positivo
que exploran conductas competentes socialanales de psicología, 2002, vol. 18, nº 2 (diciembre)
mente. Algunos ejemplos de ítems son: “suele
mostrar sus sentimientos” y “se siente bien si
ayuda a los demás.”
- Asertividad Inapropiada/Impulsividad (43 ítems),
el cual evalúa conductas impulsivas y agresivas. Algunos ejemplos de ítems son: “suele
pelearse en numerosas ocasiones” y “coge y
utiliza las cosas de los demás sin permiso.”
- Soledad y Ansiedad Social (2 ítems). Este factor
está compuesto por los ítems: “se siente solo”
y “le da miedo hablar con la gente.”
2) Escala de Observación para Profesores (EOP) de
Muñoz, Trianes, Jiménez, Sánchez y García (1996).
Esta escala presenta 48 ítems, con el mismo
formato de respuesta que las pruebas anteriores, y se compone de cuatro factores, identificados por análisis factorial. Fue construida a
partir del análisis de contenido realizado sobre
otras escalas al uso (Connors, 1969; Spivack y
Shure, 1974) con niños de edad preescolar. Tuvo una primera versión para preescolar, en la
que se extrajeron tres factores: agresividad, impulsividad e inhibición (Muñoz y Blanca, 1988;
Muñoz, 1994). Posteriormente, se adaptaron
los ítems a edades intermedias y se añadieron
ítems relacionados con amistosidad, cooperación y responsabilidad social.
En un último análisis (Muñoz et al., 1996) se
extrajeron cuatro factores, denominados: Impulsividad/Agresividad, Inhibición/Aislamiento, Sociabilidad y Responsabilidad Social. En el análisis de
validez de constructo, los factores positivos de
la EOP correlacionan positiva y significativamente con las escalas de conductas académicas
y adaptación de la CBCL de Achenbach y
Edelbrock (1979), mientras que las escalas negativas de la EOP correlacionan positiva y significativamente con la escala de dificultades externalizadas e internalizadas. Puede verse en el
anexo 2 los ítems de esta prueba.
Los factores extraídos de la prueba para el
presente trabajo fueron:
- Impulsividad/Agresividad (16 ítems). Algunos
ejemplos de ítems son: “protagoniza frecuentes peleas” y “termina precipitadamente las
tareas.”
Relaciones entre evaluadores de la competencia social en preadolescentes: Profesores, iguales y autoinformes
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- Inhibición/Retraimiento (7 ítems). Algunos
ejemplos de ítems son: “evita hablar cuando
los demás le preguntan” y “le cuesta relacionarse.”
- Sociabilidad (10 ítems). Este factor explora
conductas amistosas y competentes socialmente. Algunos ejemplos de ítems son:, “es
amable” y “tiene muchos amigos.”
- Responsabilidad Social (12 ítems). Algunos
ejemplos de ítems son: “se le pueden encargar tareas de confianza” y “cuando vigila la
clase lo hace de manera justa y ecuánime”.
en el que un niño valora a todos sus compañeros según tres criterios que exploran la posesión de las habilidades de negociación, asertividad y prosocialidad. De esta forma, se le solicita al niño que evalúe a sus iguales según los siguientes criterios:
- Ser buen compañero, presta sus cosas, ayuda,
etc. (prosocialidad)
- Saber defender sus derechos sin agredir
(asertividad)
- Saber resolver problemas con los demás sin
peleas (negociación).
3) La Escala de Comportamiento Asertivo para Niños
(CABS) de Michelson, Sugai, Wood y Kazdin
(1983). Esta prueba se basa en el modelo sobre
la conducta asertiva en niños y adolescentes
que presentaron estos autores. Supone que la
conducta asertiva es un estilo de interacción
positivo que afirma los derechos u opiniones
propios sin herir a otras personas y sin conformarse pasivamente. Guarda por tanto una
relación inversa con la conducta agresiva, por
una parte, y con la pasiva, por otra, siendo estas
dos conductas socialmente inhábiles. La prueba
extrae, a través de autoinforme, seis puntuaciones, en diversas situaciones que son: 1) expresar y responder a manifestaciones positivas; 2)
expresar y responder a manifestaciones negativas; 3) dar y seguir órdenes y peticiones; 4) iniciar y mantener conversación y escuchar a los
demás durante la conversación; 5) expresar y
reaccionar ante los sentimientos y manifestaciones de comprensión. El formato supone
que, en cada problema, el niño debe elegir entre cinco alternativas de respuesta, dos son
agresivas, dos pasivas y una asertiva. Estas seis
escalas son:
- Asertividad con iguales
- Pasividad con iguales
- Agresividad con iguales
- Asertividad con adultos
- Pasividad con adultos
- Agresividad con adultos
El formato de respuesta tiene tres alternativas: mucho, regular y poco. De la corrección
de la prueba se extraen para cada criterio dos
puntuaciones, una positiva y una negativa. La
primera consistía en la suma ponderada de dos
valoraciones: la frecuencia de la alternativa
"mucho" multiplicada por 2 y la frecuencia de
la alternativa "regular." Esta puntuación se dividía entre el número de sujetos que contestaban el cuestionario. La segunda era el número
de valoraciones con la alternativa "poco" dividido también por el número de sujetos.
Procedimiento
En primer lugar, se solicitó permiso a las
familias, a través del consejo escolar o de la dirección, para hacer esta evaluación. Las pruebas se administraron a todos los alumnos,
quienes participaron de forma voluntaria, a finales del primer trimestre durante el horario
escolar. Se cumplimentaron en clase, aclarándose las dudas que surgieron. Los alumnos con
necesidades educativas especiales participaron
en el estudio, pero sus datos no fueron computados.
La evaluación se completó en dos mañanas,
durante las cuales los alumnos tuvieron el
tiempo de recreo reglamentario. Dos miembros
del equipo de investigación administraron las
pruebas en todas las aulas en el mismo orden
en que se expusieron en el apartado anterior.
4) Cuestionario sociométrico. En la construcción del
cuestionario se ha seguido el formato conocido
como evaluación de iguales mediante lista de la clase,
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Mª Victoria Trianes et al.
Resultados
Se han realizado distintos análisis de regresión
entre las diferentes fuentes utilizadas con el objeto de analizar la relación entre las evaluaciones provinientes de las mismas. Previo a este,
se realizaron unos análisis exploratorios: en
primer lugar para evaluar la distribución de las
variables medidas. A partir de éste, se transformaron algunas variables para conseguir una
distribución normal. Posteriormente, se procedió a la reducción de datos, mediante análisis
factorial, de algunas variables provenientes de
las distintas fuentes. La exposición de los resultados comenzará por el procedimiento de la
reducción de datos, con el objeto de establecer
claramente las variables que intervienen en el
análisis de regresión, para pasar posteriormente
a la presentación de los resultados encontrados
en la misma.
Análisis exploratorio y de reducción de
variables
En un análisis preliminar se evaluó la normalidad de las 19 variables, por medio de los
índices de asimetría y curtosis, procediendo a la
transformación en caso de violación. Las variables “impulsividad” (MESSY alumnos), “soledad y ansiedad social” (MESSY profesor) e
“impulsividad/agresividad” (EOP) fueron
transformadas a logaritmos, la variable “inhibición/ retraimiento” (EOP) se transformó en
función de su inversa y la variable “agresividad
con adultos” (CABS) se transformó mediante
la raíz cuadrada. Todas las transformaciones
realizadas mantenían la misma interpretación y
en el mismo sentido que en las variables originales.
Para reducir las variables en las tres fuentes
se han realizado independientemente tres análisis factoriales de componentes principales con
rotación Varimax. Con respecto a las variables
de valoración del profesor, la medida de adecuación muestral de Kaiser-Meyer-Olkin fue de
0.72 y el test de esfericidad de Bartlett fue estadísticamente
significativo
[χ2(21)=315.5;
anales de psicología, 2002, vol. 18, nº 2 (diciembre)
p=.001]. El análisis arrojó dos factores, que explican respectivamente el 44.5% y 29.1% de la
varianza. El primero puede ser identificado
como "habilidades sociales" y las variables (Tabla 1) que saturan positivamente son "habilidades sociales apropiadas" (MESSY), "responsabilidad social" (EOP), "sociabilidad" (EOP) y,
negativamente, "soledad y ansiedad social"
(MESSY). El segundo factor está formado por
saturaciones negativas de "asertividad inapropiada/ impulsividad" (MESSY), e "impulsividad/ agresividad" (EOP), y positiva de la variable "inhibición/retraimiento" (EOP). Dada
las variables que saturan, el factor puede ser
identificado como "inhibición/impulsividad" y
considerado bipolar, en el cual puntuaciones altas positivas indican inhibición y puntuaciones
altas negativas agresividad e impulsividad.
Tabla 1: Saturaciones del análisis de componentes principales sobre las variables de la valoración del profesor.
Factores
Saturación
1. Habilidades sociales
Habilidades sociales apropiadas
Responsabilidad social
Sociabilidad
Soledad y ansiedad social
2. Inhibición/impulsividad
Asertividad inapropiada/impulsividad
Impulsividad/agresividad
Inhibición/retraimiento
.86
.84
.82
-.72
-.84
-.82
.73
Por otro lado, con respecto a las variables
procedentes de los iguales, se obtuvieron seis
variables a partir del sociométrico, dos (una positiva y otra negativa) para cada criterio utilizado (ser buen compañero, saber defenderse sin
agredir y saber resolver problemas sin pelearse). La forma de obtención de estas puntuaciones se expuso en el apartado de variables e instrumentos. Para conseguir la normalidad en la
distribución de las variables, se transformaron a
raíz cuadrada la puntuación negativas del criterio “ser buen compañero,” a logaritmo las de
los criterios “saber defenderse sin agredir” y
“saber resolver problemas sin pelearse”. Al
igual que en los casos anteriores, todas las
Relaciones entre evaluadores de la competencia social en preadolescentes: Profesores, iguales y autoinformes
transformaciones realizadas mantenían la misma interpretación y en el mismo sentido que en
las variables originales.
Para resumir las seis puntuaciones se realizó
un análisis factorial de componentes principales
con rotación Varimax. La medida de adecuación muestral KMO fue de 0.714 y el test de
Bartlett fue significativo [χ2(15)=701.035;
p<.001]. El análisis arrojó un factor que explica
el 77.12% de la varianza, el cual puede ser identificado como un índice de "aceptación de iguales". En la Tabla 2 se expone las saturaciones
de cada variable en el factor. Como puede
apreciarse, las puntuaciones positivas de los
tres criterios saturan positivamente, mientras
que las negativas saturan negativamente. Por
tanto, puntuaciones altas en el factor indican
ser considerado hábil en los tres criterios.
Tabla 2: Saturaciones del análisis de componentes principales sobre las variables de la evaluación de iguales.
Factores
Saturación
1. Aceptación de iguales
Buen compañero (positivo)
.82
Buen compañero (negativo)
-.79
Defender sus derechos (positivo)
.93
Defender sus derechos (negativo)
-.91
Resolver Problemas (positivo)
.93
Resolver Problemas (negativo)
-.88
En relación con las medidas de autoinforme, el índice de adecuación muestral de KaiserMeyer-Olkin fue de 0.27, por lo que no se procedió al análisis de componentes principales.
Por tanto, para análisis posteriores se utilizaron
todas las puntuaciones: “habilidades sociales
apropiadas,” “asertividad inapropiada,” “impulsividad,” “sobreconfianza,” “celos/ soledad,”
“asertividad con iguales,” “asertividad con
adultos,” “agresividad con iguales,” “agresividad con adultos,” “pasividad con iguales” y
“pasividad con adultos.”
203
Análisis de regresión
Con el objetivo de analizar la relación entre
los distintos agentes evaluadores, a la vez que
se selecciona las variables que más contribuyen
a la relación, se han realizado cuatro análisis de
regresión múltiple con selección paso a paso.
En el primer análisis se introdujo como variable dependiente la puntuación factorial de
"habilidades sociales" (profesor) y como predictoras las variables de autoinforme extraídas
del cuestionario MESSY (alumnos) y CABS. El
modelo fue significativo con una R2=0.19
[F(2,89)=10.52; p<0.001], en el cual sólo dos
variables contribuyeron significativamente:
"agresividad con adultos" (CABS) con un coeficiente estandarizado de –0.36 (t= -3.82;
p=0.001) y "pasividad con adultos " (CABS),
con un coeficiente estandarizado de –0.19 (t=
-2.05; p=0.04).
En el segundo análisis se introdujo como
variable dependiente la puntuación factorial de
"inhibición/impulsividad" (profesor) y como
predictoras las variables de autoinforme señaladas anteriormente. El modelo fue significativo con una R2=0.21 [F(2,89)=12,51; p<0.001],
en el cual dos variables contribuyeron significativamente: "impulsividad" (MESSY) con un
coeficiente estandarizado de –0.39 (t=-4.18;
p=0.001) y "asertividad inapropiada" (MESSY),
con un coeficiente estandarizado de –0.19 (t=
-2.07; p=0.04).
El tercer análisis de regresión múltiple se
realizó para evaluar la coincidencia entre las variables de autoinforme y la de los iguales. Como variable dependiente se introdujo la puntuación factorial "aceptación de iguales" y como predictoras las variables derivadas de los
autoinformes. El modelo arrojó una R2=0.19,
alcanzando la significación estadística [F(2,89)=
10.79; p<0.001]. Las variables que contribuyeron fueron: "agresividad con adultos" (CABS)
con un coeficiente estandarizado de -0.37 (t=3.92, p<0.001) e "impulsividad" (MESSY), con
un coeficiente de -0.21 (t=-2.16; p=0.03).
Finalmente, el cuarto análisis de regresión
múltiple introdujo como variable dependiente
la puntuación factorial "aceptación de iguales"
anales de psicología, 2002, vol. 18, nº 2 (diciembre)
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Mª Victoria Trianes et al.
y como predictoras las dos puntuaciones factoriales del profesor: “habilidades sociales” e “inhibición.” El modelo arrojó una R2=0.48, alcanzando la significación estadística [F(2,89)=
42.72; p<.001]. Las dos puntuaciones factoriales del profesor contribuyeron significativamente: “habilidades sociales” con un coeficiente estandarizado de 0.42 (t=5.59; p<.001) y la
puntuación de “inhibición/impulsividad” con
un coeficiente estandarizado de 0.55 (t=7.36;
p<.001).
Discusión
El objetivo general de este trabajo era analizar
las relaciones en la valoración de la competencia social entre las tres fuentes empleadas: profesores, iguales y los propios alumnos. Para
discutir los resultados obtenidos se va a seguir
la misma pauta sistemática de los análisis, contrastando dos a dos los evaluadores. Se revisan
pues, en primer lugar, las convergencias entre
la autoevaluación de los alumnos y la evaluación del profesor, posteriormente entre autoevaluación de los alumnos y evaluación de
iguales, y finalmente entre profesor e iguales.
Autoevaluación de los alumnos y evaluación del profesor.
La evaluación del profesor se resume en
dos factores de gran capacidad explicativa de la
varianza, y que son de naturaleza distinta: uno
relativo a las habilidades sociales, y otro relativo
al comportamiento inhábil. Este resultado indica convergencias entre los dos instrumentos
empleados en la evaluación del profesor
(MESSY y EOP), que se complementan uno a
otro, al mismo tiempo que prueba la consistencia y estabilidad de la evaluación del profesor.
Sin embargo, la autoevaluación de los alumnos
carece de esta convergencia entre los instrumentos, lo cual puede venir explicado porque
los dos cuestionarios utilizados son de naturaleza diferente, ya que el MESSY tiene como
objetivo medir el ajuste general, mientras que el
CABS pretende evaluar específicamente la
conducta asertiva y, por contraste, la agresiva y
anales de psicología, 2002, vol. 18, nº 2 (diciembre)
la pasiva. Se trata de un instrumento específico
para medir asertividad en contextos concretos.
El modelo de regresión obtenido indica que
el profesor otorga puntuaciones altas en “habilidades sociales” a alumnos que se perciben con
una baja agresividad y pasividad con los adultos.
Las medidas de asertividad, agresividad y
pasividad hacia adultos e iguales arrojadas por
la prueba de Michelson et al. (1983) responden
a los planteamientos de los autores, quienes
consideran la respuesta asertiva un estilo de relación positiva, que defiende los derechos u
opiniones propias sin herir a otra persona y sin
presentar una conformidad pasiva. Se produce
en contextos de atropello de derechos o amenazas para el Yo y, en una situación dada, es
incompatible y alternativa a la emisión de conductas agresivas y pasivas. Los resultados obtenidos indican que el punto de vista del profesor
se ajusta a este modelo, ya que las “habilidades
sociales” percibidas por el profesor correlacionan negativamente con la “agresividad con
adultos” y con la “pasividad con adultos”.
Puede concluirse la existencia de acuerdos
entre ambos evaluadores, que se refieren específicamente a la valoración de la conducta
hábil, la cual es entendida por los propios
alumnos como asertividad en relación con el
adulto, lo cual era esperable, ya que la prueba
permite diferenciar el contexto de las relaciones
con iguales del contexto de las relaciones con el
profesor.
La puntuación de inhabilidad “inhibición/impulsividad” según el profesor guarda
relación con autoevaluaciones de “impulsividad” y “asertividad inapropiada”. Esta variable
supone una dimensión bipolar que ha sido utilizada por numerosos autores en los años 80
(e.g., Camp y Bash, 1985; Elliot, Gresham y
Heffer, 1987; Kendall y Braswell, 1985; Matson
y Ollendick, 1988), interpretándose las puntuaciones altas como inhibición y las bajas como
impulsividad. Debido a este carácter bipolar de
la variable del profesor la interpretación de este
resultado es compleja y permite suponer un
acuerdo entre estos dos agentes evaluadores
respecto a este tipo de conductas: cuanto más
Relaciones entre evaluadores de la competencia social en preadolescentes: Profesores, iguales y autoinformes
inhibido es evaluado un alumno por el profesor, más bajo en “impulsividad” y “asertividad
inapropiada” se autoevalúa el propio alumno. Y
cuanto más impulsivo es valorado un alumno
por el profesor, más alto éste se autoevalúa en
“impulsividad” y “asertividad inapropiada”. Se
supone que debido a la índole de las pruebas
utilizadas en este trabajo, ni inhibición ni impulsividad presentan un carácter psicopatológico sino suponen más bien conductas inhábiles
para la relación social con adultos e iguales en
el contexto escolar.
Puede concluirse un grado aceptable de
acuerdo al evaluar la conducta impulsiva y
amenazadora u hostil (asertividad inapropiada)
entre profesores y autoevaluación de los propios alumnos. Estos resultados son consistentes
con otras investigaciones que han obtenido que
profesores e iguales presentan un acuerdo sustancial al identificar grupos extremos de conducta más perceptivamente saliente (Kenrick y
Stringfield, 1980; Hudley, 1993).
Como conclusión final de las relaciones entre ambos evaluadores se detecta que en este
trabajo coinciden profesores y autoevaluaciones de alumnos, no sólo al valorar una conducta de fuerte impacto público como es la impulsiva, sino también al valorar la conducta asertiva hábil referida a adultos.
Autoevaluación de los alumnos vs evaluación de iguales
Los resultados del análisis indican una coincidencia entre los dos agentes evaluadores, ya
que los alumnos con una baja aceptación entre
iguales presentan altas puntuaciones en las autoevaluaciones de “agresividad con adultos” e
“impulsividad”. Es curioso que la variable relevante sea asertividad referida a los adultos y no
referida a los iguales, lo que puede apuntar a
que sea menos aceptado, en el contexto escolar, el comportamiento agresivo hacia los adultos que hacia los iguales. En cuanto a la participación de la impulsividad en el modelo, como
Pope, Bierman y Mumma (1989) señalan, es
posible que los sujetos impulsivos terminen
siendo rechazados por los iguales, ya que este
205
comportamiento suele ser molesto, perturbador, de incumplimiento de normas, y las interacciones con estos niños con frecuencia terminan en agresiones.
Evaluación de iguales vs evaluación del
profesor
Los resultados muestran que los alumnos
con altas puntuaciones en “aceptación de los
iguales” obtienen también altas valoraciones
por parte del profesor en “habilidades sociales”. Este dato muestra una consistencia entre
los dos agentes evaluadores, ya que los sujetos
más aceptados por los iguales también son evaluados habilidosos por el profesor. Por otra
parte, la “aceptación de los iguales” también está relacionada de forma positiva con “inhibición/impulsividad” según el profesor, de forma
que los sujetos con altas puntuaciones en una
de estas variables obtienen también alta puntuación en la otra. Ya que “habilidades sociales” e “inhibición/impulsividad” son factores
independientes, hay que atribuir este resultado
a la naturaleza bipolar de la puntuación de inhibición, la cual permite pensar que los alumnos considerados aceptados por los iguales son
vistos por el profesor con un comportamiento
no impulsivo, incluso sesgado hacia lo inhibido.
Como conclusión de esta investigación
puede decirse que existen importantes coincidencias entre profesores, iguales y los propios
alumnos al evaluar habilidades y problemas del
comportamiento social en alumnos preadolescentes. Las coincidencias se concentran en la
valoración del comportamiento inhábil, aunque
también aparecen al valorar la conducta asertiva. Coinciden los tres agentes en que el comportamiento impulsivo/ agresivo autoevaluado
supone un obstáculo para conseguir aceptación
de los iguales, así como acarrea también baja
valoración de competencia por parte del profesor. Coinciden, por otra parte, profesor y autoevaluación de alumnos ya que la conducta hábil
según valoración externa conlleva autoevaluaciones de asertividad hacia adultos y de baja
agresividad y pasividad en relación a adultos.
Ello parece también apuntar a una inexistencia
anales de psicología, 2002, vol. 18, nº 2 (diciembre)
206
Mª Victoria Trianes et al.
de sesgos fuertes en la autoevaluación de estos
preadolescentes, pudiendo en este caso interpretarse la convergencia entre los evaluadores
como índice de validez convergente (Taylor,
Asher y Williams, 1987).
Las relaciones entre estos agentes llevan a
concluir la necesidad de emplear diversas fuentes para la evaluación de competencia social. Al
mismo tiempo, dado que parece existir un mayor acuerdo al evaluar el comportamiento impulsivo/ agresivo como causa principal de problemática y rechazo interpersonal, puede ser
más económico, con fines de diagnóstico inicial
y detección temprana, utilizar al profesor y/ o
los iguales como fuentes que pueden detectarlo
de manera más económica y siempre fiable.
Futuras investigaciones deberían evaluar
independientemente el comportamiento inhibido y el impulsivo, puesto que ambos parecen
tener distinta consideración en el mundo escolar. Habría que investigar sus correlaciones independientes, y si el comportamiento inhibido,
según el profesor, tiene una valoración positiva
en las normas y criterios implícitos u ocultos
que rigen la vida del aula y del centro escolar.
Esto llevaría a avanzar en el análisis de los
contextos o situaciones donde se desarrollan las
conductas sociales. El análisis de contextos
puede arrojar luz y clarificar las aportaciones
específicas de cada evaluador contribuyendo así
a una evaluación más efectiva tanto para el diagnóstico como para el seguimiento de la intervención.
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(Artículo recibido: 15-3-2002, aceptado: 7-11-2002)
209
Relaciones entre evaluadores de la competencia social en preadolescentes: Profesores, iguales y autoinformes
Anexo 1a
ESCALA MESSY PARA EL ALUMNO
Nombre:....................................................................................................... Curso: ...................
Centro:...................................................................... Profesor:.....................................................
Rodea con un círculo el número que mejor represente si la frase describe tu forma de ser o
comportarte generalmente, teniendo en cuenta la siguiente equivalencia:
1
nunca
2
A veces
3
A menudo
4
Siempre
1. Suelo hacer reír a los demás.
2. Amenazo a la gente o me porto como un matón.
3. Me enfado con facilidad.
4. Soy un mandón (le digo a la gente lo que tiene que hacer en lugar de preguntar/pedir).
5. Critico o me quejo con frecuencia.
6. Interrumpo a los demás cuando están hablando.
7. Cojo cosas que no son mías sin permiso.
8. Me gusta presumir ante los demás de las cosas que tengo.
9. Miro a la gente cuando hablo con ella.
10. Tengo muchos amigos/as
11. Pego cuando estoy furioso.
12. Ayudo a un amigo que está herido.
13. Doy ánimo a un amigo que está triste.
14. Miro con desprecio a otros niños.
15. Me enfado y me pongo celoso cuando a otras personas les va bien las cosas.
16. Me siento feliz cuando otra persona está bien.
17. Me gusta sacar defectos y fallos a los demás.
18. Siempre quiero ser el primero.
19. Rompo mis promesas.
20. Alabo a la gente que me gusta.
21. Miento para conseguir algo que quiero.
22. Molesto a la gente para enfadarla..
23. Me dirijo a la gente y entablo conversación.
24. Digo "gracias" y soy feliz cuando la gente hace algo por mí.
25. Me gusta estar solo.
26. Temo hablarle a la gente.
27. Guardo bien los secretos.
28. Sé cómo hacer amigos.
29. Hiero los sentimientos de los demás a conciencia.
30. Me burlo de los demás.
31. Doy la cara por mis amigos.
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Mª Victoria Trianes et al.
32. Miro a la gente cuando está hablando.
33. Creo que lo sé todo.
34. Comparto lo que tengo con otros.
35. Soy testarudo.
36. Actúo como si fuera mejor que los demás.
37. Muestro mis sentimientos.
38. Pienso que la gente me critica cuando en realidad no lo hace.
39. Hago ruidos que molestan a los otros (eructar, sonarse,...).
40. Cuido las cosas de los demás como si fueran mías.
41. Hablo demasiado fuerte.
42. Llamo a la gente por sus nombres.
43. Pregunto si puedo ayudar.
44. Me siento bien si ayudo a alguien.
45. Intento ser mejor que los demás.
46. Hago preguntas cuando hablo con los demás.
47. Veo a menudo a mis amigos.
48. Juego solo.
49. Me siento solo.
50. Me pongo triste cuando ofendo a alguien.
51. Me gusta ser el líder.
52. Participo en los juegos con otros niños.
53. Me meto en peleas con frecuencia.
54. Me siento celoso de otras personas.
55. Hago cosas buenas por la gente que se porta bien conmigo.
56. Pregunto a los demás cómo están, qué hacen,..
57. Me quedo en casa de la gente tanto tiempo, que casi me tienen que echar.
58.Explico las cosas más veces de las necesarias.
59. Me río de los chistes e historias divertidas que cuentan los demás.
60. Pienso que ganar es lo más importante.
61. Suelo molestar a mis compañeros porque les tomo el pelo.
62. Me vengo de quien me ofende.
anales de psicología, 2002, vol. 18, nº 2 (diciembre)
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Relaciones entre evaluadores de la competencia social en preadolescentes: Profesores, iguales y autoinformes
Anexo 1b
ESCALA MESSY PARA EL PROFESOR
Alumno/a: ............................................................................ Fecha nacimiento:..........................
Centro: ..........................................................................Curso: .............................
Profesor/a:...........................................................................................
Rodee con un círculo el número que mejor represente si la frase describe el comportamiento
habitual de este niño, teniendo en cuenta la siguiente equivalencia:
1
nunca
2
A veces
3
A menudo
4
Siempre
1. Hace a la gente reír (cuenta chistes, historias divertidas,...)
2. Amenaza a la gente o se porta como un matón.
3. Se enfada fácilmente.
4. Es mandón (le dice a la gente qué hacer en vez de preguntar/pedir).
5. Critica o se queja con frecuencia.
6. Interrumpe cuando alguien más está hablando.
7. Coge o utiliza las cosas de los demás sin permiso.
8. Le gusta presumir ante los demás de las cosas que tiene.
9. Abofetea o pega cuando está furioso.
10. Ayuda a un amigo que está herido.
11. Mira a otros niños con desprecio.
12. Se enfada o siente celos cuando a otra persona le va bien.
13. Saca faltas o errores a otros niños.
14. Siempre quiere ser el primero.
15. Rompe las promesas.
16. Miente para obtener lo que quiere.
17. Molesta a la gente para enfadarla
18. Se dirige a la gente para iniciar una conversación.
19. Dice "gracias " y es feliz cuando alguien hace algo por él.
20. Le da miedo hablar con la gente.
21. Hiere los sentimientos de otros intencionadamente.
22. Es un mal perdedor.
23. Divierte a los demás.
24. Agobia a la gente con sus problemas.
25. Da la cara por sus amigos.
26. Mira a la gente cuando le habla.
27. Piensa que lo sabe todo.
28. Sonríe a la gente que conoce.
29. Es testarudo.
30. Actúa como si fuera mejor que los demás.
31. Suele mostrar sus sentimientos.
32. Piensa que están hablando mal de él cuando no es así.
33. Piensa que van a sucederle cosas buenas.
34. Trabaja bien en equipo.
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Mª Victoria Trianes et al.
35. Suele hacer ruidos que molesta a los demás (eruptos, sonarse...)
36. Presume demasiado cuando gana.
37. Cuida las cosas de los demás como si fueran suyas.
38. Habla demasiado fuerte.
39. Llama a la gente por su nombre.
40. Pregunta si puede ayudar en algo.
41. Se siente bien si ayuda a los demás.
42. Se defiende solo.
43. Siempre piensa que algo malo le va a pasar.
44. Intenta ser mejor que nadie.
45. Suele preguntar cosas cuando habla con los demás.
46. Se siente solo.
47. Se siente apenado cuando ofende a alguien.
48. No tiene paciencia cuando está esperando algo.
49. Le gusta ser el líder.
50. Se apunta a juegos con otros niños.
51. Cuando juega cumple las reglas del juego.
52. Suele pelearse en numerosas ocasiones.
53. Se siente celoso de los demás.
54. Hace cosas buenas por la gente que es amable con él.
55. Manipula a los demás para conseguir lo que quiere.
56. Pregunta a los demás como están, qué están haciendo.
57. Es muy pesado.
58. Explica las cosas más de lo necesario.
59. Es simpático con la gente que acaba de conocer.
60. Hiere a los demás cuando quiere conseguir algo.
61. Habla demasiado de sus problemas o preocupaciones.
62. Piensa que ganar lo es todo.
63. Suele molestar a los demás porque les toma el pelo.
64. Se venga de quien le ofende.
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Relaciones entre evaluadores de la competencia social en preadolescentes: Profesores, iguales y autoinformes
Anexo 2
ESCALA DE OBSERVACIÓN PARA PROFESORES
APELLIDOS Y NOMBRE ..........................................................................................................
EDAD ..............
SEXO ....................
CENTRO ............................................................................................
CURSO ............... FECHA ....../....../......
PROFESOR/A ......................................................................................
Con esta escala se pretende evaluar 6 aspectos de la conducta social del niño: IMPACIENCIA,
DOMINANCIA-AGRESIÓN, INHIBICIÓN, AYUDA-COOPERACIÓN, AMISTOSIDAD Y
RESPONSABILIDAD SOCIAL.
Por favor, responda de forma precisa, rodeando el valor de la escala que refleje más
adecuadamente el comportamiento ACTUAL del niño, teniendo en cuenta su CONDUCTA
OBSERVABLE, y evitando las posibles inferencias e interpretaciones.
Rogamos conteste en relación a la siguiente equivalencia:
1: Casi nunca
2: A veces
3: A menudo
4: Siempre
1. Insiste y se pone pesado cuando se le niega algo que ha pedido.
2. Hace precipitadamente las tareas o las deja sin terminar.
3. Guarda su turno.
4. Demanda constantemente la atención del profesor/a.
5. Es impulsivo en su comportamiento: intenta hacer lo que cree que tiene que hacer, sin
tener paciencia para esperar.
6.Cambia constantemente de actividad .
7.Se frustra fácilmente: sus peticiones deben ser inmediatamente atendidas.
8.Frecuentemente abandona su asiento alegando que necesita algo para continuar su tarea.
9.Protagoniza frecuentes peleas.
10.Reacciona violentamente si alguien le arrebata algún objeto.
11. Se burla o da bromas pesadas a los compañeros/as.
12. Cuando está con los demás, es quien crea los problemas de disciplina.
13. Disfruta presenciando acciones agresivas y violentas.
14.Protesta de palabra o de hecho cuando le mandan hacer algo.
15.Unas veces es complaciente y otras brusco/a y provocador/a.
16. Se enfada con los compañeros/as desproporcionadamente si le gastan una broma.
17.Evita hablar; incluso cuando los demás le preguntan le cuesta responder.
18.Se avergüenza desproporcionadamente cuando el profesor/a le corrige.
19.En tareas de grupos, recreos... permanece aislado/a o se mantiene a distancia.
20.Si los demás le hacen alguna faena o le excluyen del juego, él se conforma.
21. Se le ve más jugando solo/a que con sus compañeros/as.
22.Rara vez mira directamente a los ojos de su interlocutor.
23.Es tímido.
24.Le cuesta relacionarse.
25.Tiende a ayudar a sus compañeros cuando lo necesitan.
26.Se presenta voluntario/a para actividades tanto en clase como fuera.
27.Comparte sus cosas (comida, materiales escolares, dinero) .
28.Regala fácilmente cosas de su pertenencia.
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Mª Victoria Trianes et al.
29.Suele fomentar la participación en los trabajos en grupo.
30.Intenta tener en cuenta los puntos de vista de los demás cuando surgen problemas en
clase.
31.Admite sugerencias y correcciones de los otros cuando realiza algún trabajo en grupo.
32.Se inscribe y participa de buena gana en distintas actividades colectivas
independientemente de los compañeros con quien tenga que formar grupo.
33.Es amable (utiliza un tono amable en sus conversaciones, suele sonreír, etc.).
34.Habla bien de los otros chicos.
35.Tiene muchos/as amigos/as.
36.Suele tolerar bien las bromas pesadas o las provocaciones.
37.Es un niño simpático.
38.Conserva sus amistades, dentro del mismo año o de uno para otro.
39.A los chicos les gusta juntarse con él..
40. Es de los primeros en acercarse a un alumno nuevo.
41. Suele cumplir las normas académicas y de las clase.
42.Se implica en el buen funcionamiento de la clase.
43.Es sincero/a y honrado/a.
44.Si vigila la clase, lo hace de manera justa y ecuánime .
45.Muestra educación en su trato con los demás.
46.Se siente en la obligación de ayudar al niño que está en dificultades.
47.Se le pueden encargar tareas con la confianza de que las realizará tal cual.
48.Si nadie sale voluntario/a para realizar un trabajo común él/ella, finalmente, consiente.
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