La música, vía de mejoramiento humano Desde la sociedad primitiva la música ha estado estrechamente vinculada al desarrollo de la humanidad; durante los ritos religiosos, acompañando a la danza, como medio para expresar estados de ánimos (alegría, inquietud, tristeza, etc), en el trabajo, en la guerra, en los momentos de esparcimiento, en el tratamiento de distintas enfermedades y por supuesto en la educación del hombre, por imitación o de forma empírica. El hombre trató de reproducir, con su propia voz o con diferentes instrumentos que ha ido creando, los sonidos que escuchaba a su alrededor, así la música se fue incorporando a su vida de la cual no se ha separado jamás. En las civilizaciones antiguas fundamentalmente en Grecia, la música se enseñaba desde la infancia. Se consideraba que mediante esta se modificaba la conducta del ciudadano, de ahí la frase que llega hasta nuestros días " La Música Educa". Y así, en el decursar del tiempo en los diferentes períodos históricos, Edad Media, Renacimiento, la aparición en el siglo XVII de pedagogos como A. Comenio, que expresa sus ideas en la Didáctica Magna, iniciador de métodos sensoriales y activos, y el reconocimiento del papel de la música en la formación del hombre. En adelante, otras personalidades como J. Rousseau ( siglo XVIII y F. Froebel siglo XVIII y XIX ), los seguidores de la Escuela Nueva, entre otros no menos importantes, ejemplificaron y fundamentaron la importancia de la música en la preparación del hombre. Y a la vez, la enseñanza de la educación musical se ha ido nutriendo de las ideas nuevas de la sicología y la pedagogía. En este sentido, filósofos, pedagogos, médicos y músicos han investigado los efectos de la música sobre el ser humano, y las respuestas correspondientes que se obtienen del hombre bajo su influencia. En estas disquisiciones han surgido interrogantes, sí la música afecta esencialmente a las emociones y a los sentimientos, y estos sobre el cuerpo, provocando reacciones físicas diversas, otra interrogante es el poder de esta rama artística en el desarrollo de la inteligencia. A pesar que, cómo hemos dicho antes, desde las civilizaciones antiguas se reconoce el papel de la música en la formación ciudadana, no siempre ha estado presente explícitamente como disciplina o asignatura en el plano curricular. Hoy día, en la concepción de algunos sistemas educativos de América Latina y el Caribe, aún existen reservas y cuestionamientos de brindar fondos de tiempos curriculares aceptables para brindar una adecuada educación musical en la formación general del ciudadano. Por otra parte, otro cuestionamiento se refiere a ¿Cuál de las artes debe incluirse?, ¿Todas de forma independiente? o ¿Todas de forma integrada bajo el rubro de educación Artística?. Cualquiera que sea la respuesta debe partir de los criterios siguientes: Psiquiatras, psicólogos, sociólogos, antropólogos, e incluso políticos, han estudiado la conducta humana bajo los efectos de la música, y la utilizan para obtener determinados objetivos. Sin embargo, aún son insuficiente los datos que se han obtenido y divulgado acerca de las reacciones internas del hombre bajo sus efectos. Han tomado mayor peso las reacciones externas en relación con la expresividad del cuerpo, de la voz y los efectos de audiciones de distintos tipos de música. Es un hecho incuestionable que de todas las artes la música es la que tiene mayor poder de comunicación y contagio, e influye decididamente en las esferas cognoscitiva, afectiva y psicomotora de la personalidad. En algunos textos el aspecto psicomotor lo consideran dentro de los otros dos. Desde nuestro punto de vista, debe separarse para su estudio y para tenerla en cuenta en la actividad pedagógica, pues las reacciones rítmico corporales son parte consubstancial del aprendizaje musical. En 1915, Emile J. Dalcroze (1865 – 1950), sentó las bases de la rítmica musical o euritmia para algunos, cuyo enfoque llega hasta nuestros días; parafraseando a la educadora musical Violeta Hemsy de Gainza cuando se refiere a este tema, valora que hoy día, no se concibe aprender música de una manera estática. Con Dalcroze se incorporó el movimiento a la educación musical y ninguna moda podrá hacernos retroceder. Dalcroze a principios del siglo XX renueva los métodos de aprendizaje de la música, sus aportes influyen prioritariamente y sientan las bases de la Educación Musical contemporánea. En este mismo período, se destacan E. Willems, M. Martenot,, J. Mursell, S. Susuky, entre otros. En las décadas del cuarenta y cincuenta dos músicos pedagogos Zoltan Kodaly y C. Orff, cada uno en sus respectivos países plantea enfoques didácticos muy similares, sobre los principios de libertad, creatividad y el alumno como centro con un mayor protagonismo, la actividad juega un rol preponderante. Sus métodos trascienden universalmente. En las décadas del sesenta y setenta " se revisan y amplían los criterios de creatividad en la enseñanza musical "( V. Hemsy de Gainza 1995;2). Está en auge la música contemporánea y se traslada al aprendizaje musical. Figuras activas de este movimiento como M. Schafer, J. Paynter, G. Self incentivan el aprendizaje musical sobre la base de la experimentación y la creación. Las décadas del ochenta y noventa hasta la actualidad se caracterizan por la diversidad de enfoques didácticos, en los que el docente tiene un rol importante en la asimilación y proyección de sus propuestas didácticas sobre los principios básicos de los métodos que han caracterizado el siglo XX, los cuales se han concebido sobre los aportes de la sicología, la pedagogía y la sociología. Estos nuevos enfoques didácticos musicales se han abierto paso con mayor flexibilidad en la educación musical de la escuela general, no así en la formación especializada de intérpretes, musicólogos, compositores, etc. Los profesores de conservatorios y escuelas especializadas de música, de manera general, no aceptan los cambios con facilidad, hay un gran apego a la academia tradicional. La sicología ha demostrado la amplitud del hombre para aprender diferentes contenidos sin excepción, siempre en relación directa con sus aptitudes de base, por tanto es muy importante inducir una estimulación temprana del niño por medio de la música y el trabajo rítmico corporal, lo que se revertirá posteriormente en individuos más creativos y equilibrados emocionalmente. Sobre la base de estas valoraciones podemos concretar algunas ideas importantes, entre otras: .Continúa siendo una necesidad que la música forme parte en el mejoramiento de la personalidad ciudadana. .El aprendizaje musical debe ser activo, en el que el educando juegue un rol protagónico en su propio proceso musical, en el contexto sociocultural de su propio país. El perfeccionamiento continuo de los contenidos propios de la música y la educación musical y sus metodologías particulares. Se requiere una enseñanza desarrolladora, con énfasis en la experimentación, la creación y la improvisación. Es una época que requiere una correcta educación sonora para contrarrestar la fuerte contaminación sonora que existe en la actualidad. Educación sonora Nos relacionamos con nuestro entorno sonoro por múltiples vías, principalmente cuando escuchamos música mediante audiciones grabadas o en vivo, también con la ejecución de instrumentos musicales y en un sentido mucho más amplio, el reconocimiento auditivo de todas las expresiones sonoras de la realidad: desde los sonidos propios de la naturaleza hasta las sonoridades de los objetos, del entorno, de la calle, de los distintos tipos de trabajos, de materiales diversos y del cuerpo humano, incluyendo la voz. Desde el vientre materno, sobre el cuarto mes de embarazo, la criatura está captando los sonidos de a su alrededor entre otros muchos estímulos que influirán en la formación de su aparato psíquico. Una adecuada educación sonora comienza desde ese período de la vida. La percepción y exploración sonora de nuestro cuerpo, de los objetos, de nuestro entorno nos brindará amplias posibilidades para expresarnos sonoramente con creatividad. Estos tres pasos están muy interrelacionados: percepción – exploración – expresión. La carencia de medios no es un obstáculo para expresarse musicalmente. Se puede hacer uso de la voz humana de diferentes formas, tales como: hablar, cantar, resonar la voz en el pecho y en la cabeza. Las posibilidades expresivas de la voz humana son infinitas. Se pueden producir sonidos de alturas y timbres diferentes. La utilización de vocales, consonantes, sonidos onomatopéyicos, acompañados de los gestos, con distinta duración, intensidad, altura y aire, de forma individual y colectiva, permite la creación de múltiples expresiones musicales. Se combinan las vocales, las consonantes y los silencios a fin de lograr diferentes estructuras, formas musicales, cambios de intensidad, aires, ostinati rítmicos y melódicos, melodías, diseños rítmicos y polirritmias. Se podrán aplicar además ritmos diversos como habanera, guajira y bolero, entre otros. Con las diferentes manifestaciones de la voz se aplicarán alturas, graves, medias y agudas; intervalos diversos, giros melódicos, frases; intensidades diferentes; duraciones largas y cortas; ostinati y diseños que se podrán aplicar a diferentes formas musicales. Las posibilidades vocales y gestuales desde el punto de vista expresivo y sonoro, tienen un gran valor de comunicación según el uso que de éstas hagamos, se pueden demostrar emociones de todo tipo, tanto de forma individual como grupal. El canto, colectivo o individual, es una actividad fundamental en la educación musical. Es una vía excelente para facilitar la musicalidad en la etapa de iniciación musical. Al cantar no se debe forzar la voz, ni gritar, pero con voz audible, lenguaje claro, preciso y que contribuya al desarrollo de las cuerdas vocales. En esta actividad lo esencial es cantar con buena afinación y voz agradable, natural y relajada, con buen fraseo y calidad interpretativa. Este modelo es el que deben imitar los niños. Con nuestro cuerpo también se pueden obtener otros efectos como: Taconear, palmear, chasquidos y otras múltiples formas de percusión corporal. Los sonidos del entorno se pueden obtener mق°ediante la percusión, la frotación, el soplo y la pulsación de los materiales y objetos de la realidad, a partir de su exploración y análisis sonoro, visual, táctil y en movimiento de las fuentes generadoras de sonidos. El compositor y profesor de música Murray Schafer en su obraHacia una educación sonora (1994:13) argumenta: "El diseño del paisaje sonoro no se hace desde arriba o afuera, sino desde adentro, y se logra a través de la estimulación de grupos cada vez más numerosos de personas que aprendan a escuchar los sonidos que les rodean con una mayor atención crítica. ¿Cuáles son los sonidos que quisiéramos conservar? ¿Cómo habría que proceder para que las características esenciales de nuestro entorno puedan ser preservadas y embellecidas?" La observación y exploración del mundo sonoro y de sus distintas músicas, facilita la educación de la audición para lograr escuchar "con mayor eficacia."(R .M. Schafer,1992:9).La percepción de los distintos tipos de sonidos, del entorno, de la vida cotidiana, del cuerpo, de las músicas del mundo con una gran atención crítica desarrollará en buena medida la habilidad de aprender a escuchar. Todas estas actividades relacionadas con la percepción y exploración de sonidos y las audiciones de los diferentes tipos de música contribuyen en buena medida al desarrollo de la habilidad de escuchar con atención. Los medios expresivos de la música La música como lenguaje artístico, y teniendo en cuenta su propia naturaleza que es la relación entre los sonidos, posee sus propios códigos o medios expresivos que permiten su comprensión entre el compositor que la crea, el intérprete y el público que la consume. El hombre en su relación con la música y el mundo sonoro en general necesita conocer y comprender su sistema conceptual más general a fin de poder interactuar con la música desde distintos contextos. Desde las etapas iniciales los niños deben estar en relación con estos medios incluidos en el repertorio de cantos, juegos, audiciones, rimas, poemas, etc, como parte de su educación. Los medios expresivos del lenguaje musical son aquellos elementos que organizados y relacionados en el propio contenido, con una forma particular actúan como mediadores o enlace en la cadena comunicativa. El dominio de estos y su expresión práctica posibilitará una buena apreciación de la música, por parte del oyente. El sonido y sus cualidades es la mínima expresión del lenguaje sonoro, cuando el compositor selecciona conscientemente los sonidos por sus parámetros: altura, duración, intensidad y timbre para estructurar las relaciones sonoras del contenido con una forma determinada, se comienza la utilización de los medios expresivos. Existen elementos estructurales que permanecen inalterables después que el compositor los crea, no así los medios expresivos que pueden ser modificados según el criterio del intérprete, hasta del propio compositor, según el contexto en que se interprete, el tipo de música que se ejecute o por un enfoque renovador.. Los medios expresivos en una obra influyen poderosamente en las emociones y sentimientos de las personas y en la formación de valores universales. En el aprendizaje de la música, pueden agruparse estos elementos y otros que son estructurales y permanecen inalterables junto con los que pueden ser modificados por el intérprete, pues en definitiva todos constituyen medios de expresión que en su conjunto garantizan la comunicación entre el creador y el perceptor. Al igual que otras manifestaciones artísticas como la pintura, la literatura, la danza o cualquier otra, la música posee sus propios medios expresivos. A manera de resumen, mencionaremos los medios expresivos del lenguaje musical: En el contexto de las relaciones de altura: registro, sistema, modo, melodía, intervalo y sonidos musicales. En relación con los cambios de intensidad: dinámica. El timbre o medio sonoro. Relaciones de duración: agógica, tempo o aire, ritmo, metrorritmo, figuras musicales y sus silencios correspondientes. Textura Armonía Forma El contenido de la Educación Musical en la estimulación de las esferas cognitiva, afectiva y psicomotora Se hace necesario una adecuada educación musical que facilite el aprendizaje de este lenguaje desde las etapas iniciales de la vida. Su contenido debe contemplar actividades vocales, rítmicas, auditivas o perceptivas, de creaciónimprovisación, de rítmica musical o expresión corporal y lectoescritura. Estas de conjunto van moldeando la personalidad de niñas y niños desde distintas facetas, pueden influir decididamente en la ampliación de los procesos y cualidades psíquicas que conforman la actividad cognoscitiva: la sensopercepción, la memoria, la imaginación, el pensamiento, el desarrollo del lenguaje y la atención. Las emociones, los sentimientos, la voluntad, la coordinación motriz y equilibrio psicomotor no se escapan a esta influencia. El proceso de la sensopercepción es condición esencial en el aprendizaje de la música en cualquier edad. La observación sonora, visual, táctil y cinética de los objetos, del cuerpo humano y de la realidad, es una acción propia de las metodologías de las audiciones, del montaje de obras vocales e instrumentales, de la lectoescritura y de la improvisación-creación. La percepción y la emisión de las diferentes gradaciones de la intensidad y el movimiento con las manos y otras partes del cuerpo, facilitan el desarrollo y control de la musculatura fina, la sensibilización y la educación del hombre. En las actividades de discriminación auditiva se pueden realizar diversas tareas con los sonidos o diferentes fuentes sonoras, tales como: reconocimiento del tipo de sonido que se escucha y llegar a precisar su naturaleza, repetición o reproducción de los sonidos escuchados, apareamiento de sonidos, agrupando los iguales y los diferentes, o por alguna de sus cualidades, clasificarlos según sus cualidades u otra característica que se determine. La percepción sonora requiere de un entrenamiento constante en la etapa de musicalización, en continua interacción con el desarrollo del pensamiento. Las operaciones mentales de: análisis, síntesis, comparación, y generalización están implícitas en la conformación del sistema de actividades en relación con: El adiestramiento auditivo, la lectoescritura: analógica y simbólica en el caso de los preescolares mayores, la rítmica, la entonación de sonidos. En el reconocimiento, ejecución, lectura analógica o simbólica, creación de ritmos y melodías diversas. Los ejercicios y juegos musicales de pregunta – respuesta, melodía en cadena, ritmo en cadena, audición interior entre otros, exigen alta concentración para que los niños mayores reconozcan las frases y semifrases musicales; respondan y entren a cantar y marcar el ritmo en el momento preciso que le toca a cada participante. También los relacionados con la actividad rítmica propuestos por V. Hemsy de Gainza, (1973:101). Disociación de una frase rítmica o melódica, significa repartir los elementos que la conforman entre diferentes personas, instrumentos o tipos de toque. Puede organizarse de diferentes formas: el pulso musical de una melodía es ejecutado por tantas personas como tiempos haya en el compás. También se dividen en dos equipos y se reparten los sonidos. Polirritmia: ejecución simultánea de dos o más elementos, frases o diseños rítmicos. Puede conformarse por varios grupos que ejecutan elementos diferentes como: pulso, acento, contratiempo, etc. También los distintos grupos pueden ejecutar valores rítmicos diferentes para acompañar canciones. pulso = pandero acento = triángulo diseño rítmico = toc - toc subdivisión del tiempo = cascabeles contratiempo = pandereta silencios ( se rellenan los silencios) = platillos Canon rítmico, es la ejecución de un diseño rítmico sencillo de cuatro compases, cada grupo sigue al anterior a distancia de un compás, puede llegar hasta tres o cuatro grupos. El desarrollo de la imaginación creadora tiene su máximo exponente en uno de los componentes de la Educación Musical: la improvisación - creación, lo que no contradice su presencia en los restantes contenidos. Las actividades creativas están presentes en todo el proceso de musicalización: improvisación de ostinatos rítmicos y melódicos, creación de melodías, de diseños rítmicos, expresiones corporales, etc. La realización de los diferentes contenidos de la Educación Musical asegura un constante desarrollo de la memoria, el montaje de obras vocales ( canciones, juegos, rimas) e instrumentales requiere del razonamiento y elaboración mental, acorde con la edad de los preescolares, no debe convertirse en una simple reproducción mecánica de la obra. La interpretación del repertorio vocal e instrumental es un vehículo idóneo para aumentar el volumen y calidad de la memoria. La educación mediante los diferentes contenidos de la Educación Musical también influye positivamente en la esfera afectiva de la personalidad. Por ejemplo, las audiciones de música diversa producen emociones muy placenteras, sentimientos de satisfacción y de otra índole: pánico, sobrecogimiento, tensión, tristeza, alegría, etc. El descubrimiento, percepción e interacción con las sonoridades del entorno y del propio cuerpo humano, como paso previo para disfrutarlos o llegar a convertirlos en música, garantiza vivencias positivas y negativas, agradables y desagradables, relajantes, todas ellas muy naturales. Es decir estados de ánimos satisfactorios y positivos. Cuando los niños han incorporado el contenido de la Educación Musical demuestran: rasgos de sensibilidad ante hechos determinados; comunicación adecuada manifiesta en un tono de voz, postura y modales que garanticen buenas relaciones afectivas. La persona expresa sus sentimientos y emociones de diversas formas, que incluyen: los gestos, el tono de la voz, la delicadeza o la agresividad al dirigirse a otras personas, entre otros aspectos. Las múltiples formas de expresión de la voz, de la rítmica, de la expresión corporal, de la improvisación – creación, coadyuvan a educar el comportamiento del hombre para su desempeño en la sociedad, en un colectivo determinado. Asimismo, la realización de ciclos de audiciones, la asistencia a conciertos, recitales, la ejecución de instrumentos como el piano, la guitarra, la participación en grupos musicales, bandas rítmicas y coros favorecen el mejoramiento de las cualidades volitivas de la personalidad, se desarrolla la independencia, la decisión y la perseverancia. El desarrollo del autocontrol o autodominio es esencial en la ejecución vocal e instrumental, tanto en el proceso de entrenamiento y montaje de las obras como en el momento de la interpretación. La participación en grupos vocales e instrumentales permite la eliminación de muestras de sobrevaloración y a su vez repercute directamente en los casos de timidez e inhibiciones, pues el individuo asume responsabilidad al tener que demostrar el mismo nivel de ejecución a los restantes intérpretes, no puede quedar ni por encima ni por debajo de la interpretación del grupo que conforma una sola masa sonora. Paralelamente, en el interior de la esfera cognoscitiva y afectiva de la personalidad, se encuentra la atención como una propiedad de la psiquis del hombre. Una organización adecuada del proceso de la actividad pedagógico musical desarrolla la concentración de la atención, que repercute en la organización física del individuo. Los ejercicios de relajación, concentración, respiración y vocalización, previo al montaje de obras y a la percepción del material sonoro, entrenan en este sentido. De forma similar, la ejecución vocal e instrumental requiere un alto grado de la concentración de la atención. Su desarrollo debe ser paulatino, teniendo en cuenta que una de las grandes dificultades en el aprendizaje de esta especialidad es la concentración auditiva prolongada. El aumento de la estabilidad, el volumen y la distribución de la atención se logra mediante las actividades de la Educación Musical, adecuadamente dirigidas y organizadas. La esfera psicomotora de la personalidad se desarrolla ampliamente con los contenidos de la Educación Musical, tales como: la ejecución simultánea de ritmos diferentes en las extremidades y en la voz; cantar, acompañándose de palmeo y taconeo; cantar acompañándose de un instrumento de percusión de afinación determinada o indeterminada; leer, cantar y tocar un instrumento Estas actividades garantizan una buena coordinación motora; independencia rítmico - melódica y el desarrollo simultáneo de la visualización, la percepción auditiva, la expresión vocal y la ejecución instrumental. El idioma y el lenguaje tienen una amplia utilización en la Educación Musical. Los recursos del idioma han sido tomados por personalidades como Carl Orff y Zoltán Kodály, entre otros, para la enseñanza musical. La riqueza rítmica de nuestro propio idioma expresada en rimas, versos, poesías tradicionales, la obra de autores como Nicolás Guillén, Mirta Aguirre, Dora Alonso, Emilia Gallego, Gabriela Mistral, entre otros constituyen el material didáctico idóneo para el desarrollo de la rítmica. Es por todo esto que resulta de vital importancia que los maestros relacionados con la música sepan leer, interpretar versos, canciones y poemas, de forma correcta, se necesita un educador que domine el lenguaje de forma consciente. El desarrollo de la lectura es fundamental para lograr un mayor perfeccionamiento de la calidad de la labor de los maestros vinculados a la educación musical, lo que redundará en una mejor comunicación con los niños y niñas. El lenguaje en la música como comunicación humana está presente desde los primeros días del nacimiento, cuando la madre le canta al bebé canciones de cuna y realiza juegos rítmico musicales con él, transmite conocimientos, emociones y sentimientos. La narración de cuentos por la maestra contribuye al desarrollo de la memoria y la imaginación de los niños. Ellos deben ser capaces de reproducir partes del mismo o hacer breves narraciones en relación con el cuento que escuchó. La lectura de poemas, narraciones, canciones, rimas, versos, son fuentes vivénciales de la creación - improvisación, de la rítmica y de la expresión corporal. El texto de las canciones es muy importante, en algunos casos la belleza de una canción reside en la melodía y en otras esta se concentra en la letra, pero en realidad para que la canción llegue a alcanzar un nivel artístico, es necesario que la letra y la melodía posean una calidad similar. Las obras vocales tienen temáticas diferentes dirigidas a formar valores y normas morales, sentimientos, gustos estéticos e intelectuales que contribuirán a la educación de los niños preescolares. La propia naturaleza de las actividades musicales incluyendo el texto de las canciones influye en la conciencia de los niños, se forman y desarrollan valores como el colectivismo, la ayuda mutua, la sencillez, la responsabilidad, el patriotismo, el amor, etc. Toda persona es capaz de educarse musicalmente en relación directa con sus posibilidades naturales individuales. La utilización sistémica del contenido de los componentes de la Educación Musical en el proceso de aprendizaje de la música contribuirá favorablemente al desarrollo en el individuo de las capacidades, conocimientos, habilidades y hábitos que le permitirán demostrar rasgos de sensibilidad ante hechos determinados, en la valoración musical de su entorno; la demostración en la comunicación de un tono de voz, posturas y modelos adecuados; la apetencia de estar en contacto con la buena música y la percepción, descripción y expresión musical por vías diferentes nos define una "persona musicalizada". La actividad pedagógico musical en la educación inicial y preescolar reclama un tratamiento metodológico basado en la vivencia musical, en la exploración y expresión sonora en la propia actividad musical. Este proceso tiene que ser fuente de conocimientos, pero sobre todo debe provocar estados de ánimos y sentimientos agradables y positivos en los niños, lo que garantizará en buena medida su salud física y mental. Las actividades musicales en la Educación inicial y Preescolar La educación musical en toda la etapa preescolar pudiera dividirse en dos grandes etapas, la primera hasta los tres años, cuyas actividades centrales tienen que propender al mejoramiento de la marcha, de una buena coordinación motora y al desarrollo del lenguaje. La segunda dedicada a la preparación para la escuela, que conlleva un adecuado desarrollo intelectual y físico para aceptar el aumento de tiempo de la actividad pedagógica con su actividad rectora que es el estudio, entre otros aspectos. El tiempo de la actividad pedagógico musical va aumentando, paulatinamente, desde el primer año de vida de 5 minutos aproximadamente, veinticinco minutos a los cuatro y cinco años y de cuarenta y cinco minutos a una hora con los niños de seis y siete años. El concierto también puede llegar a los niños preescolares, es uno de los medios más favorables para escuchar música, con esa atmósfera solemne y festiva que lo envuelve, provoca una impresión o efecto más fuerte al escuchar la música. En la organización de estos, a fin de lograr una atención pr parte de los niños mayores de tres o cuatro años la vinculación con otras manifestaciones artísticas especialmente las artes visuales, las audiovisuales, la literatura y la danza. Obras significativas de la cultura musical universal y de cada país, de distintos períodos estilísticos, incluyendo la contemporánea, pueden combinarse con dibujos animados, imágenes ( video, películas), bien imbricadas al tipo de música que se esté escuchando por los niños. Esta actividad puede realizarse llevando a los niños al teatro, en el centro escolar o en la propia casa. Actualmente la televisión y el video facilitan su realización. Se cuidará de aprender las normas de conducta apropiadas, si es en el teatro, la vestimenta con ropas de fiesta, salir y entrar disciplinadamente, escuchar quietos, en silencio, sin cuchicheos, ni exclamaciones. Aplaudir al finalizar cada número musical. Los cuentos musicales de Pedro y el Lobo de S. Prokofiev, es un clásico en este género, también Saxo y Píccolo de André Popp la Mota de Polvo de Fernando Palacios entre otros son materiales apropiados para la realización de los conciertos, sin renunciar a la vivencia de escucharlos en vivo en un teatro. Algunos contenidos de Educación Musical propios de la Educación Inicial y Preescolar Las distintas sensaciones sonoras y la percepción auditiva requiere de una estimulación constante por parte del adulto, sobre todo con los más pequeños hay que insistir en las acciones con objetos para buscar sonidos, los juegos rítmico musicales para provocar movimientos y el desarrollo del lenguaje mediante canciones, rimas, adivinanzas. Desde los primeros días de nacido es necesario atender al desarrollo de los analizadores visual y auditivo del bebé, que son los menos preparados, Las relaciones auditivas se establecen desde los primeros días de nacido, el pequeño detiene sus movimientos al oír un ruido intenso o fuerte, en el segundo mes empieza a tener significación la voz del adulto y los sonidos que escucha. La conversación dulce del adulto, las audiciones de música apropiada, los juegos rítmicos provocan estados positivos y satisfactorios en esta edad, no así los ruidos estridentes y violentos que pueden provocar el llanto. La educación intelectual mediante la música debe iniciarse en el embarazo, la voz de la madre y la audición de música apropiada. Después del nacimiento es aconsejable un ambiente sonoro agradable, cantar canciones por la madre, el padre o la educadora, también se puede silbar o tocar la línea melódica en un xilófono, marimba o glokenspield. Canciones tradicionales de cuna como Señora Santana y Duérmete mi niño, Palomita Blanca y más actuales como Era un cocotero. Los juegos rítmico musicales que heredamos de nuestros abuelos siguen teniendo gran vigencia, puesto que promueven el movimiento coordinado y rítmico de las extremidades y la voz. Entre ellos: Azótate la mocita, Las torticas, Aserrín Aserrán. El adulto estimulará el movimiento, el palmeo y el desplazamiento con marugas, objetos sonoros, canciones, audiciones y juegos rítmico musicales. Audiciones de música seleccionada instrumental, vocal, vocal -instrumental y electroacústica. Todas estas acciones musicales deben garantizar un estado emocional positivo, alegre y de satisfacción lo que asegurará un buen desarrollo físico y neuropsíquico acorde con la edad. En las actividades de discriminación auditiva se pueden realizar diversas tareas con el sonido o fuentes sonoras, tales como: Reconocimiento, reconocer la fuente sonora, ya sea de las voces de los adultos que lo rodean como otros tipos de sonidos, en el caso de los niños más pequeños. Los niños y niñas de dos años pueden acompañar las canciones cantadas por el adulto con sílabas y palabras, es por ello que son aconsejables canciones como Ta – ma – to – pá, y Cuatri – color de Olga de Blanck que tienen palabras y sílabas fáciles de repetir Ta – ma – to - pá Esta es mi abuelita ta, ta, ta, ta, ta, Esta mi mamá ma, ma, ma, ma, ma, Este mi abuelito to, to, to, to, to, Este mi papá pa, pa, pa, pa, pa. Cuatri – color Conejito blanco, cotorrita verde, Pescadito rojo, mariposa azul, Zapatico blanco, Limoncito verde, Florecita roja Pañoleta azul. Se deberá permitir y alentar las improvisaciones que realizan los niños de forma libre, retomando las palabras y sílabas aprendidas de otras canciones u otras inventadas por los niños. Las audiciones sistemáticas de música vocal, tanto en vivo, como discograbadas, tienen especial importancia en esta etapa, pues se van preparando las condiciones psico – fisiológicas para el desarrollo de las actividades vocales ( canciones, juegos vocales, etc), posteriores. En las actividades rítmico corporales y de expresión corporal ya se pueden incorporar actividades relacionadas con los movimientos naturales de locomoción tales como caminar, correr, saltar y girar al compás de distintos pulsos: largos, cortos y muy cortos, según el movimiento que se vaya a ejecutar. Estos movimientos pueden acompañarse con diferentes formas de palmeo y con instrumentos percusivos: claves, toctoc o caja china, con percusión corporal en diferentes partes del cuerpo, también música instrumental en compases de dos y cuatro tiempos que acompañen los desplazamientos, por ejemplos marchas o similares, que facilitarán la corporización de los distintos tipos de pulsos. Rimas como las que se exponen a continuación facilitan el desplazamientos de pulsos, que se pueden identificar con el paso de marcha o de caminar. Don Pepito Don Pepito el verdulero se metió en un sombrero, El sombrero se rompió, Don Pepito se cayó. Picolito, Picolito Picolito ¿Quién te dio tan largo pico? Que le fuiste a robar los pasteles a Don Juan, Los de Roque Alfandroque, los de Pedro Piripán Todas estas actividades deben conformar patrones internos en los niños, los que podrán retomarlos más tarde para improvisar acompañamientos a canciones, realizar ostinati rítmicos, crear movimientos o secuencias de movimientos que reflejen la corporizaciòn de estos ritmos. La actividad pedagógica debe reforzar en los niños la marcha y el desarrollo del lenguaje, aspectos centrales de este período, tiene mayor exigencia en comparación con el año precedente: ya el niño se desplaza al compás de la música, acompaña el canto con sílabas, palabras y fragmentos de canciones. A los tres años de edad el niño se desplaza y se comunica correctamente, está en condiciones de asimilar con un tiempo mayor la actividad pedagógica y tareas más complejas, entre algunas de ellas podemos mencionar: el aprendizaje de canciones hasta dos estrofas, mayor precisión al ejecutar el pulso y el acento, logra escuchar música con atención por un tiempo más prolongado que la etapa anterior, acorde con la edad. La improvisación grupal se logra con más organicidad al realizar de conjunto un grupo de niños, el movimiento, la voz mediante el canto, recitado o ritmo del lenguaje y la percusión corporal o instrumental. También podrán narrar breves historias, cuentos que podrán ejemplificar con sonidos, gestos, desplazamientos y otras expresiones corporales. La expresión rítmico corporal o expresión corporal es idónea para las edades inicial y preescolar pues los niños tienen las posibilidades de expresarse libremente en su actuación con los objetos y con todo el entorno que le rodea, por una parte, y por otra, la aprehensión de una serie de patrones internos sobre las cualidades de los sonidos y los medios expresivos de la música, que les permitirá interactuar con estos y expresarse creadoramente. En este período, los niños deben ser capaces de escuchar con atención, distintos tipos de música folclórica, popular y de concierto. Discriminar algunos elementos como: medio sonoro, melodía y ritmo principal, etc. Cantar con afinación y tempo aceptable de forma individual y en el grupo. Ejecución de pulso, acento, diseño rítmico, ostinati, subdivisión del tiempo, con percusión corporal, movimientos corporales, instrumentos percusivos, ritmo del lenguaje y desplazamientos en el espacio. Pueden improvisar libremente o a través de consignas que se les propongan, reproducir descripciones sonoras y hacer imitaciones con canciones, juegos, adivinanzas, nombres, rimas y lemas, poemas, imágenes figurativas . Ejemplos de poemas para ser utilizados en la educación rítmica y en la creación e improvisación melódica y rítmica: Caballito de Coral La gota de rocío E. Gallego E. Gallego Gira, gira Esta gota de rocío. Noche y día, yo no sé por donde vino Carrusel de fantasía pero sí sé que se irá Arcoiris de soñar. __aunque se muera de frío__ Gira, gira en la corriente del río Noche y día, que va camino del mar. Con tu trote de alegría, Caballito de coral Poder E. Gallego Se puede, Con el poder del cariño: Ser tomeguín del pinar, Ser papalote y volar, Ser caballo y galopar, Ser cosmonauta y viajar Al espacio sideral. Con el poder del cariño, Todo se puede lograr. Cortesía Mirta Aguirre Limón, limonero, las niñas primero. Ceder la derecha, quitarse el sombrero, jugar a la dama y a su caballero. Limón, limonero, Las niñas primero. Bibliografía: Frega Ana Lucía. 2001. Movimiento expresivo y rítmica corporal. Versión revisada, corregida y aumentada. Música Clásica Argentina. CD – R 2001." Educación Musical en Argentina". En Reunión Regional de Expertos de Educación Artística de América latina y el Caribe. Uberaba. Brasil. Hemsy de Gainza, Violeta. 2000. Problemática actual y perspectivas de la Educación Musical para el Siglo XXI. Conferencia en el 1er. Seminario y Taller sobre Educación, Musical. Lima. Perú. 1999. Reflexiones sobre la educación musical en Latinoamérica en los umbrales del Siglo XXI. Comisión Costarricense de Cooperación con la UNESCO. Foro Latinoamericano de Educación Musical. 1995. "La transmisión y la enseñanza de la música" en Reunión Regional de Expertos en Formación Musical. Informe Final. UNESCO. CONAC. Venezuela 1964. La iniciación musical del niño. Ricordi Americana. 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