Energí^z y proclucción cle alimento.s Publicado en 1976 pot IPC Science and Technology Press paza el Intetnational Institute fot Environment and Development Vetsión española: Matía Tetesa Montes Palomino (Licenciada en Fatmazia) Miguel Angel García Dory (Ingenieto Agrónomo) © Servicio de Publicaciones Agtazias - Gerald Leach Fdita: Scrvicio dc Publicacioncs Agrariu Diseño: Albetto Corazón Composicibn: RB FOTOCOMPOSICION I. S. B. N. : 84-7479-108-1 Depósito Legal: M-25013-1981 Imprimc: Imprenta dcl Servicio de Publicaciones Agraziu Gerald Le^ch Energía y próducción de alimentos Vetsión espaáola: Mazía Tcresa Monta Palomino (Licenciada en Fazmacia) Miguel Angel Gdreía Dory (Ingenicro Agrónomo) AGRADECIMIENTOS Erte ertudio fue financiado bá.ricamente por !a Fundación Ford. Dereo exprerar mi erpec ^rl reconocimiento a Gordon Ha^riron, William Felling, Marrhall Robinron y Ned Amer de dicha fundación por erta ayuda, por ru aliento y por ru paciencia a1 alargarre el ertudio már delo previrto. También mi agradecimiento al proferor Chrirtopher Freeman, quien me ofrec:ó una beca para el Science Policy Rerearch Unit, Surrex Univerrity, para !!evar a cabo erte trabajo. . Iar últimar etapar de erte ertudio fueron rubvencionadar por ellnternationallnrtitute for Er.virr^nment and Development. Mi agradecimiento exprero a Lady Jackron y David Runnally de1lIED por ru entririarmo y generoridad. Otror muchor ayudaron con rur dator y conrejor. Rerultan demariado numeroror para men^ionarlor aquí, aunque rur nombrer aparecen dirperror a lo largo de lar referenciar, incluidor en letrar menorer. Finolmente, Gina Milne merece un agradecimiento mayorporla velocidad y exactitud con la que emprendió una imponente tarea de mecanografiado. Gerald Leach Fe!low, IIED, junio de 1975 1. INTRODUCCION Más de una tercera pane de la Humanidad se enfrenta con el problema de una desnutrición crónica y de una extrema pobreza. A pesat de los logros alcanzados durante las dos últimas decadas en el campo de la Agticultura, extensas regiones del Globo apenas han visto mejorada su capacidad normal para poder alimentar a sus crecientes poblaciones, de tal modo, que la difícil y lamentable siruación de los más pobres se ha visto empeorada. Muchos millones se ven en la actualidad amenazados a motir de hambre, e incluso los países más ricos e industtializados, han sentido las frías sombras de la escasez de alimentos y de la vertiginosa subida de sus precios. Aunque existen muchos medios para paliar esta aterradora situación, (tanto políticos como sociales o técnicos), lo cierto es que la.:crisis mundial de alimentos^, no es en absoluto, una frase retórica y sin sentido. Tampoco es un tópico lo de la ^crisis mundial de energíaA. EI fermento de las teacciones otiginadas por el alza de los precios del pettóleo dutante el petíodo 1973/74, ha ctistalizado en numerosas y nuevas perspectivas acerca de fuentes alternativas de energía, sus aplicaciones y el futuro de dichas fuentes y del petróleo. No es que las teservas de las materias primas energéticas (peuóleo, carbón, gas, uranio) no puedan durar probablemente,.durante siglos, calculando al ritmo actual de consumo, pero no es este el principal problema. Se uata de que el grueso de todas las reservas se encuenua en manos de unos pocos paúes: lestatán dispuestos estos países a suminisuarlas en las cantidades y a los precios que interesen a los consumidores? Existen numerosas fuentes potenciales alternativas: lpero se desarrollarán a tiempo, con unos costos aceptables, y en el caso de opciones de la más alta tecnología, con unos impactos tolerables para los frágiles medios ambientales y sin consum ^ en exceso otros recursos, tales como el agua, los metales o la propia materia prima energética en sí misma? Si Occidente continúa con su despilfarro energético y el mundo en vías de desazrollo aumenta su consumo en las proporciones Rplaneadas^, las actividades humanas Itransgredirán los <más lejanos 1'unitesD de la Biosfera y las condiciones climáticas locales o del Planeta entero? Las tespuestas a estas preguntas y a ottas semejantes, no son precisaznente tranquilizadoras. Como resultado de lo expuesto, paza las naciones industtializadas, consumidoras de gran cantidad de energía, la conservación de ésta, empazejada con esuategias a corto plazo, de nulo o bajo rendimiento energético, resultan en la actualidad,_ cada vez más interesantes, por ser no solo necesarias sino taznbién realizables y atractivas^3. El mundo en desazrollo se enfrenta a diferentes opciones. Su consumo energético debe incrementazse de manera considerable paza ser capaz de hacer frente a las necesidades más básicas de sus habitantes. Además, a excepción de unos pocos países, las reservas de materias ptimas energéticas son escasas o inexistentes y cazecen de capital disponible paza ^soluciones: de alta tecnología, como pueder_ ser los reactores nucleares o esquemas hidroelécuicos con sus redes y tendidos. Las principales alternativas serán: o petmanecet como ^pobres^ en matetias primas enetgéticas, o compraz las ttadicionales a ptecios cada vez más elevados, o desarrollar recursos propios tales como la energía solaz. Estas últimas, si se desaztollasen en gtan escala llegazían probablemente a ser útiles incluso paza la Agricultura: ^cosechas de materias primas enetgéticas> más que ^cosechas de alimentos^. Ambas requieran tierra y personas que la trabajen, por eso, la Agricúltura y el desarrollo energético en estas regiones se interrelacionan de manera especial. Este estudio incluye ouos varios a fin de examinaz la relación crucial y mutua enue alimentos y crisis energética. La producción de alimentos puede llegaz a ser un asómbroso proceso de energía intensiva cuando algunas tendencias se exageran -mecanización paza ahotraz trabajo humano, fertilizantes paza aumentar los rendimientos, núcleos urbanos con demandas de alimentos conservados fuera de temporada y empaquetados, o el agotamiento de los recursos pesqueros cosa que ha ocurrido en la mayoría de los países industrializados. El hacer llegar a algunos países una tonelada de ^lujosos^ langostinos puede consumir el equivalente a doce o más toneladas de petróleo, en tanto que para alimentaz cada persona del Reino Unido o de los Estados Unidos, se requiere en la actualidad el equivalente a 0,8 Tm de pettóleo, o unas ues veces más el consumo ordinazio ^per cápita^ 10 de matetias ptimas enetgéticas cometciales utilizadas paza cubrir todas las necesidades en el mundo desazrollado. Mienuas que `inputsD de este orden puedan todavía ser ^económicos^ en el mundo indusuial, no lo continuazán siendo paza siempte, como tampoco pueden resultar un posible modelo a seguir por los países en desatrollo. El fin ptincipal de este ttabajo, es pot tanto, el facilitat algunos datos comprobados sobre la enorme escala de ainputs^ energéticos para producir diferentes clases de alimentos a través de un completo panorazna de métodos, desde el de los ^cazadores-recolectores^ y gtanjas elementales hasta la producción de ptoteínas <sintéticasD. Dicho informe nos da idea de los niveles reales de consumo energético para producir alimentos, pone de manifiesto qué productos alimenti-. cios necesitan más enetgía intensiva, y pueden decitnos mucho sobre los efectos que el alza de los ptecios de las matetias ptimas energéticas tienen sobte los ptecios de los alimentos. Dichas informaciones son necesazias para planear estrategias de energía y alimentos, pero no son suficientes. Los altos e^inputsD energéticos de la producción alimenticia en Occidente no son fruto del azar. Se desazrollaton casi por completo durante los años 1950-70 basados en suministros de materias primas energéticas abundar,tes, seguras y batatas, cuando el pettóleo costaba 1,5^ por bazril, equivalente a tener una `energía esclava humanaA uabajando durante 4.000 hotas por un dólar (4.000 MJ/^)'. No es sorptendente que al calculaz los costes de cultivo, se presionase en general, sobre la necesidad de aumentaz los rendimmientos y teducir la mano de obra, sin fijatse en las consecuencias del consumo de energía a uavés de una superfenilización, supermecanización, superautomatismo... etc. El que estas expresiones cambien ahora debido a la escasez y precios elevados de las materias primas energéticas, es otta cuestión. EI segundo fin de este estudio es taznbién exploraz algunas de las imponantes relaciones entre energíatierra y uabajo, en la producción de alimentos, empleando cantidades ^f'ísicas^ paza las que se pueda establecer cualquier coste monetario presente o futuro. Se estudian también otros cambios tales como una reducción en cazne y productos animales, por sus consecuencias sobre la energía y el uso del suelo. En lo que se refiere a estos temas, el uabajo se reduce principalmente a la producción primazia: pot ejemplo, en el punto en que el • N. de T. MJ <> Megajulio l> 106 Julios. 11 alimento alcanza la granja o el muelle. Esto permite analizar sepazadaznente la Agricultura y ofrece datos útiles paza los países en desarrollo en donde gran pazte de la población vive todavía cerca de la tierra (explotación). Para el mundo industrializado uno debe ir más allá. Núcleos urbanos, la indusuialización y otros cambios, espoleados en gtan manera pot cambios en la Agricultura misma, han aumentado enormemente la escala de la cadena de alimentos, desde qué salen de la granja hasta que llegan al consumidor, y esto en todos los sentidos, incluido el gasto de energía. En estas sociedades, y de manera creciente en el mundo desazrollado, se consume muchas más energía paza ttansportar, empaquetar, vender, guisaz, almacenaz y conservaz (o simplemente mejoraz la ptesentación y decotar) las materias que sirven como alimentos, que la que se gasta en producirlas. El estudio examina por consiguiente, con tanta precisión como detalle como permiten los insuficientes datos estadísticos, el total sistema de producción de alimentos en el Reino Unido y lo compara con otros países y especialmente los EE.UU. Quizá sean en estas cifras donde debetán fijaz su atención los responsables de tomar determinaciones en los países en desarrollo. El cuazto punto a consideraz en esie uabajo es echaz una ojeada pteliminaz a las opciones para conservar las matetias ptimas enetgéticas en la Agricultura y otros sectores productores de alimentos así como al aprovechamiento de la tierra para cultivaz «cosechas de materias primas energéticass. No se ha intentado hacer un análisis exhaustivo, ya que el determinaz, qué opciones se pueden seguit y con qué rapidez se lleven a cabo depende de consideraciones muy complejas y variables económicamente, y, con frecuencia, de desazrollos técnicos que todavía están por Ilevar a cabo. En vez de eso, se enfoca el esrudio hacia los amplios potenciales de cada área, Zqué metas en principio deben conseguirse? Antes de ocupaznos del estudio en sí, deberemos fijarnos en tres puntos: 1.- LPor qué un análisis energético? ICómo, fijándonos en uno o vazios factores de producción, puede un análisis de energía decir algo útil que no se pueda decir con la economía convencional? Es una buena pregunta con una corta respuesta. EI análisis de energía no intenta reemplazaz a la economía si no complementarla. A1 hacer esto puede revelar vazias importantes posibilidades de las cuales tres merecen especial mención: 12 a) Las consecuencias de las restricciónes de materias primas energéticas o su subida de precios, no se comprenden, ni la política es capaz de planificarlas, sin un conocimiento del flujo total enetgético dentro de las sociedades: cuando se considera todo el consumo tanto indirecto como directo de materias primas energéticas y enetgía. Las actuales estadísticas no pueden hacer esto, desde el momento en que la mayoría solo dan el consumo directo. La economía puede hacerlo, pero sólo muy indirectamente. El análisis de energía intenta presentar de manera clara el problema completo. b) La energía es un recurso único. En el análisis final, todos los costos de producción de cualquier cantidad o servicio se pueden reducir a un juego de unidades monetarias, que uno puede etiquetar entre rentas, beneficios o impuestos, y a tres recursos físicos fundamentales. Son estos: materias ptimas enetgéticas o enetgía técnicamente útil (finita y no renovable), tierra y trabajo (ambos renovables en el tiempo peto finitos en cada período). Incluso recursos físicos tan primitivos como el agua, los minerales y las capacidades absorbentes de polución de una región, se pueden reducir a estos ttes fundamentales. La ptoducción de alimentos es única en el gasto que hace de estos recursos. Desde luego, es la mayor consumidora de tierra; en países en desarrollo es la mayor consumidora de trabajo, mientras que en los países industtiales es una considerable consumidora de uabajo y la más gtande consumidota de matetias ptimas enetgéticas: EI análisis de la producción de alimentos basado en estos tétminos físicos fundamentales apenas puede explicarnos nada, especialmente al existit extensas interrelaciones entre el uso de energía por una parte y el de la tierra y el trabajo por otra. c) EI volvet a considerat los tecursos físicos es impottante pot otta razón. La economía y consiguientemente todas las actividades que de ella dependen, no disponen de ningún mecanismo real para arreglátselas con el agotamiento de los recursos. Su principal objetivo es el vet la maneta de actuar con los precios existentes, con las ptevisiones de consumo y con las reservas de recursos energéticos. Por esta razón, la economía es perfectamente capaz de alertarnos ante uansformaciones masivas que nunca se llegan a realizar, porque si se agotasen los suminisuos de recursos, los precios se distorsionarían simultáneamente. Para conuarrestaz esta falta de visión se necesitan urgentemente estudios de todos los cambios y tendencias de los recursos potenciales que tengan alguna probabilidad de ser aprovechables. 13 2.- Este punto es consecuencia de lo dicho anteriormente. Como guía de la acción, un análisis económico debe generalmente ser detallado y tomar en consideración todas las peculiaridades locales. Cambios pequeños en los costos o beneficios, como puede ser solo un 10%, resultan altamente significativo ^ . El estudio ptesente no tiene que set tan específico ya que la necesidad más urgente es la de lograr amplias y completas investigaciones de los tecursos potenciales. Tampoco puede ser, en la mayoría de los casos, de una gran precisión, debido a la falta de estadísticas adecuadas y a las inmensas variaciones de clima, suelos, técnicas dc trabajo... etc., encontradas en todas las actividades de producción de alimentos. El estudio maneja getieralmente cifras medias y parciales, y cuenta con que los 1'unites de error sean aproximadamente de un 10-5%. 3.- Por último, el análisis de energía es un juego intrincado, complicado con cifras, acuerdos y referencias. La mayotía de estos detalles están expresados en un «banco de datosp que consta de once apéndices y 85 presupuestos de energía y que están al final del informe. Sin embatgo, hay unos cuantos puntos claves que necesitan set subrayados aquí. EI «input de energíap pata ptoducciones y servicios, matetias ptimas energéticas o lo que sea, es siempre la enetgía total en forma de materias primas energéticas fósiles, extraidas del suelo, que ha sido «agotadom sin contar donde ni como este consumo se haya producido. De este modo, el «input^ de un litro de combustible diesel no es solamente el gran calot contenido (entalpía) del combustible, si no un cálculo de todas las materias primas energéticas consumidas en la exploración del petróleo, su extracción del subsuelo, embarcarlo, refinarlo y distribuirlo hasta un consumidor final, incluyendo aquel combustible que se usa para suministrar todos los materiales y para la . fabricación de maquinatia y plantas empleadas en la cadena completa producción-disttibución. La Tabla 1 da referencias útiles pata alguno de los «inputsn utilizados en el estudio. La energía solat no se cuenta como un «input^ por razones convincentes (ver apéndice 2-A). Aparte de las materias primas energéticas fósiles, las energías del trabajo humano y animal (derivadas naturalmente de los alimentos conseguidos con materias primas energéticas) son también «inputsA para la producción alimenticia. En el caso de sistemas totalmente industriales, estos no se toman en cuenta, ya que normalmente contribuyen con mucho menos del 1% del total. En los sistemas pre- 14 TABLA 1. ALGUNOS INPUTS ENERGETTCOS BRUTOS UTILIZADOS EN ESTE ESTUDIO. Bienes y Servicios (suministrados al consumidor) Unidad Energía por Unidad (MJ) Diesel fuel Fuel oil Aceites lubricantes, grasas 1968 1 1 aC 43,3 46,6 550 Nitrógeno (N) en fertilizantes Fósforo (PZOS) en fertilizantes Potasio (K, O) en fertilizantes Cal (caliza pulverizada) Fertilización media 1970-71 kg. kg. kg. kg. ;e 80 14 9 2 Tractores y equipamento agrícola, (depreciación y reparaciones) ;e Tractot medio (50 hp, 37 kW) uno eferencia App.3, Tab.All App.3, Tab.All App.3, Tab.All App.6A, Tab.A13 App.6A, Tab.A13 App.6A, Tab.A13 App.6A, Tab.A13 530 Balance 1-16 200 App.7A, 7C 166.000 App.7A, Tab.A14 Utilización media del tractor h Piensos compuestos adquiridos 1970/71 Promedio de cereales secados (pot ptoducto seco) Heno desecado en henil (producto_de materia seca) Agua conducida 1968 ^ t t 213 9.570 520 App.8 App.8 App.9A t aC 2.360 295 App.9C App.10 Mercancías diversas 1968 ae t Energía primaria en el Reino Unido/ ae GDP 1968 1972 , 188,7 9,1 App.7A, Tab.A14 App.10 180 App.10 221 162 App.4 App.4 . Unidada Ias unidades que se utilizan a lo largo de este trabajo son las del Sistcma Intctnacional, lo que significa que el julio ()) es ta unidad de cnergía. Debido a que ésta representa un valor muy bajo, se emplean cambién sus múl[iplos, tales como cl Mcgajulio (MJ), que cquivale a 106 julios; cl Gigajulio (GJ), equivalcntc a 109 julios, y cl Megagigajulio (MGJ), equivalente a 106 GJ. 15 3,6 MJ = 1 kilovatio/hora (kwh) 4.187 MJ = 1000 kcal. (kcal - Caloría de nuttición) 35,0 MJ = 1 litro (I) de gasolina equivalente 43,2 MJ = 1 kilogramo (Kg) de petróleo equivalente (10,32 10^ kcallt) 105,5 MJ = 1 unidad tétmica o 105 unidades británicas térmicas (BTU) 159 43,2 MJ = 1 galón imperial de gasolina cquivalente MJ = 1 tonelada de petróleo equivalente t= tonelada; kg = kilogramo; m= metto; 1= litro; ha = hectátea ( 10.000 mZ, ó 2.471 acres); h= hora; añ. = año; M= millón; MS = materia seca; P= proteína. Las iniciales MGJ que equivalen a 10^ MJ reptesentan una abreviacibn que pretende reducit la ptoliferación de letras: ésta, frecuentemente se escribe como un 'terakilojoule' (TkJ). RU = Reino Unido; ME = Enetgía Metabolizáble. industriales taies como las granjas elementales, los «inputsp de materia prima energética fósil son ptácticamente nulos. Tales sistemas sedefinen como los que tienen «inputsm de materias primas enetgéticas fósiles menores del 10% en total. Esto deja los sistemas semiindustriales donde las materias primas energéticas fósiles se encuentran entre un 10-95 °^ del total. En los sistemas pte y. semiindustriales, las dos formas de «inputs» (fósil y alimentos con matetias primas enetgéticas) se combinan. Esto no es entetamente válido, ya que tienen unos valores sociales muy distintos, pero la combinación puede admitirse sobre la base de que ambos son materias primas energéticas disponibles para el hombte, y en tétminos físicos (por ejemplo de entalpía) son idénticos. Esta práctica también permite el uso de la combinación más lógica pata ainputsb y«out-putsp relaccionados con terrenos agrícolas: esto es; trazar las fronteras del sistema alrededor del terreno en sí y registrar todos los «inputsn que entran y todos los «out-puts^ que salen. Una mirada al Apéndice 2 y los Balances Energéticos aclatatan estas y ottas combinaciones y tevelatán la razón de incluirlas. 16 2. AGRICULTURA PRE Y SEMI-INDUSTRIAL Casi todos los agricultores pre-industriales y colectores de alimentos consiguen una gran cantidad de energía restituida o devuelta a partir del ttabajo que tealizan. EI Indice energético (E^), que expresa la relacción entre la cantidad de energía consumida en la producción de alimentos, y la energía contenida en estos, es mucho más elevado en cualquier sistema industrial de agricultura, debido a que la utilización de materias primas energéticas fosiles es nulo o muy escaso en la agricultura pre o semi-industrial. Esta compazación queda reflejada clazamente en la Figuta 1 que condensa datos a paztit de los Balances Energéticos. Una escala muy similaz existe paza outputs de proteínas obtenidas, por unidad de input de energía. La Figura 1 no debe set intetpretada demasiado literalmente. No se ha hecho ninguna corrección de las variaciones del suelo o del clima; y los inputs para todos los sistemas en la parte superior de la escala (valotes de E^ supetiores a 5)^se calculan a partir de hotas de ttabajo humano y animal con conversiones de hotas a energía consumida, que solo pueden ser aproximadas. A pesaz de todo esto, la situación que refleja a grandes rasgos, es bastante real. Los cazadores-recolectores y los agricultores de subsistencia conocen perfectamente las técnicas tradicionales del aprovechamiento y recolección de alimentos: acualquier forma de Agricultura representa un esfuerzo para alterar un ecosistema dado, de manera que aumenta el flujo de energía pata el hombre...^20. En resumen, éstos suministran las materias primas energéticas disponibles para el hombre. Sin embargo, no hacen esto sin riesgos ni faltas. La mayoría de los agricultores de subsistencia poseen unos conocimientos extremadamente sofisticados de sus propios ecosistemas, identificando muchos cientos de especies y subespecies botánicas y cosechando alternativamente unas y ouas con el fin de explotar intrincadas interdependen17 cias. Ottos reconocen hasta 30 tipos distintos de suelos de sus territorios, y emplean este conocimiento al máximo posible.21 Incluso Goutou estima que debido a sus actividades, en el año 1953, un 40% y un 30% de las selvas de Filipinas e Indonesia, tespectivamente han sido reemplazadas por la famosa sabana hetbacea que ha convertido una gran parte del Suroeste Asiático en un desierto verde. A1 mismo tiempo, aunque las dietas son frecuentemente adecuadas y variadas, por lo genetal existe poca protección contta los petíodos de hambre y escasez, de forma que las enfermedades catenciales especialmente en los niños, son bastante frecuentes. Mientras que la producción industrial de alimentos no puede escapar de críticas semejantes, la mayoría de los pte-industrialistas no han logrado claramente la perfecta felicidad y armonía ambiental que algunos les atribuyen. Energía y trabajo . Los elevados índices energéticos tienen también importantes consecuencias sociale^. Quizás la mayot sea el que a lo largo del año nadie tiene que trabajar duramente para conseguir alimento. Se dispone de un amplio espacio pata el ocio y frecuentemente también para una rica vida cultutal, lo que ha conducido a sugerir a muchos que los cazadores-recolectores, así como los agticultores pre-industriales, debido ptincipalmente al ajuste de sus necesidades con los recursos disponibles, Ilevaban una existencia de auténtica opulencia, una especie de edad de oro del bienestar^3. Estas escasa^ necesidades de trabajo, resultan quizás sorprendentes, peto son una consecuencia dírecta de los elevados índices energéticos. Un caso hipotético nos sitve pata aclatat este concepto. Supongamos un agricultot que tiene tres «equivalentes adultosm ayudantes, cada uno de los cuales necesita 10 MJ (2.400 kcal.) de energía nutritiva al día. EI total consumido por el grupo es de 40 MJ/día. Si el índice energético, posee aproximadamente el valor notmal de 25, el agricultor requiere consumir solo 1.6 MJ/día de trabajo físico, es decir; dos horas de ttabajo diatio -esto equivale a la cuarta parte de las hotas de ttabajo desempeñadas diariamente por un hombre-. En efecto, muchos agricultotes pte-industriales consiguen rendimientos de este otden, dedicando solo el 15-25 % de su jornada diaria a las tareas y trabajos relacionadas con la alimentación. Por ejemplo, en el caso 18 Indice de Energía (f,) Er 70 _ Energía extraída Energfa aportada ^ E, PIE DE LAS EXPLOTACIONES ^ O EN MUEILES - Guisantes RU - AZUCAR DE REMOLACHA, RU• (a pie de f3brical ]Subsistencia, cultivo de mandioca 60 50 0^5 40 -Campesinos chinos, años 30 0^4 30 03 20 Cultivos tropicales, subsistencia límites normales 02 - PAN BLANCO RU (en tahonal• ^ Toda la agricultura, RU 1952 - Leche RU ZToda la agricultura, RU 1968 ZTodo el abastecimiento de alimentos, RU, 1968 ^^t•t :^_ - Gallinas en batería (huevosl RU ^.^ m 10 0•1 - Carne de pollo, RU Cultivos tropicales, alguna fertilización y maquinaria - Limites normales 0^05 5 - Remolacha azucarera, RU a - Flotas pesqueras, RU 0^04 - Trigo RU 0^03 3 ^ Mafz, USA Cebada RU 1Maíz RU 2 ^ 0^02 _ Patatas RU esquerías de crustáceos, Australia Huerto-Jardín familiar, RU ^Arroz, USA t ^ O^Ot 1 - Pesquerías, Adri9tico Otras pesquerías por debajo de 0.004 • Indica: A pie de f8brica o comercio. Fig. 1.- Indiccs de encrgía para la producción de alimcntos. 19 de los iKung, bosquimanos del desierto de1 Kalahari (Balance Energético 49), 2/ 3 de la población total invierten 2-5 días pot semana en recoget alimentos, en tanto que los días restantes no trabajan en absoluto. Considerando la población total, y una semana de siete días como base, solo el 23% de la «semana de trabajoA se dedica a la recolección de alimentos. Dadas las extremas condiciones ambientales, esto patece algo asombroso;. como más adelante veremos, resulta «solo^ unas tres veces inferior que el sistema alimentario del Reino Uni- do. Una amplia exposición de este importante tema de la ptoductividad del trabajo se contempla en la Tabla 2, donde los outputs energéticos de los alimentos comestibles se compatan con las horas de ttabajo humano dedicadas al cultivo de plantas alimenticias. Hay que señalar que el trabajo indirecto (pot ejemplo, para conseguit ttactorés, fettilizantes, compras de piensos y otros inputs extetnos a la explotación), no se incluye aquí; tampoco se incluye ningún ptoceso de los alimentos después de cos^chados ni de su distribución. Los outputs son por lo tanto «a pie de explotaciónb o, en el caso de sociedades pre-industriales, el consumo doméstico. Queda clato, que con outputs de 11-40 MJ/hombre/hora, la mayoría de los agricultores pre-industriales ven cubiertas suficientemente sus necesidades. La semi-industrialización, donde se utiliza alguna maquinaria y fertilizantes, aumenta la productividad de manera considerable, hasta aproximadamente 20-50 MJ/hombte/hora; peto la industrialización total tiene efectos diferentes. Refiriéndonos solamente a los cultivos, la productividad se dispara hasta alcanzar unos 3000-4000 MJ/hombte/hora, lo que demuestra clatamente (aunque es algo evidente que no necesita ninguna derimostración) las capacidades de la industrialización para ahorrar trabajo. Sin embatgo, esta enorme ganancia se pietde, principalmente y en gtan patte, pot dós razones. Gran parte de los cultivos van ditigidos al consumo animal, que los convietten, con una eficacia biológica relativamente baja. Como consecuencia, la productividad del total de las explotaciones del Reino Unido desciende a 50-170 MJ/hombre/hora, situándose dentto de los 1'unites de esta escala según varie la importancia concedida a la Ganadería o a la Agricultura (ver Balances Energéticos 1-16). Cuando se toma en cuenta el trabajo inditecto o«exterior a la explotaciónn, estas cifras deberán multiplicarse aproximadamente pot 2/3 (vet Apéndice 1D Tabla A9). La se20 TABLA 2. OUTPUTS ENERGETTCOS DE LA PRODUCCION DE ALIMENTOS POR HOMBRE/HORA DE 7RABAJO AGRICOLA. Sisternas agrícola Output (MJ/hombrehora) Balances (número) Cultivos pre-industriales Bosquimanos de iKung, cazadores-recolectotes Arroz de subsistencia, trópicos Maíz de subsistencia, Mijo, Batata, ttópicos Campesinos agricultores, China 4,5 11-19 49 53-57 25-30 40 53-60 64 Cultivos semi-industriales Arroz, crópicos Maíz, trópicos 40 23-48 72 67-70 Cultivos plenamente industrializados Arroz, USA Cereales, RU Maíz, USA 2800 3040 3800 74 19 (ref. 14) Cultivos plenamente industrializados y animales Ovino, vacuno, cerda y pollos, explotaciones lecheras, RU Explotaciones de cereales RU (pequeño outpuc animal) 0-170 800 Huerto-jardín familiares RU, aproximadamente _ 4,3 Sistemas alimenticios del RU, aproximadamente 30-35 -15 16 48 gunda pérdida tiene lugar en todos los sectores post-explotación de la cadena de alimentos. Cuando se tiene en cuenta todo el trabajo directo e indirecto a lo largo de la cadena completa de producción de alimentos (Apéndice 1-D) la ptoductividad del Reino Unido llega a set como máximo de 35 MJ/hombre/hora. Esto coincide con el limite superior de los sistemas pte-industtiales, aunque lógicamente existen importantes diferencias climáticas a tener en cuenta. 21 La Tabla 2 muestra también un aspecto optimista para aquellos que ven la salvación ecológica de Occidente a través de una vuelta hacia la autosuficiencia personal en el terreno de la alimentación: la parcela de huerto-jardín familiar del Reino Unido, con su productividad de solo 4,3 MJ/hombre/hora, valor semejante al de los bosquimanos. En realidad esta cifra no resulta correcta para emplearla en la compatación, ya que muchos de los 28 tipos de vetduras cultivados en estos huertos domésticos se seleccionan precisamente por sus elevados precios en el mercado y su apreciable sabor, resultando por tan^^ to de bajos rendimientos, cosa que ocurre igualmente en el caso también muy frecuente de cultivos elegidos pata recogerse en invierno, y que se obtienen sin ninguna protección contra el frío. Si se pusiera el máximo interés en conseguir productos básicos de altos rendimientos, tal como es el caso de la patata, la cifra de productividad podría elevazse considerablemente, objetivo que también se lógraría con una modesta racionalización del uso del trabajo (por ejemplo, el empleo de fumigadores en vez del azadón paza suprimir malas hierbas). Sin embazgo, con un output netó de 70 libras por pazcela de 0.025 has. (precios de 1974) y 350 horas de trabajo por pazcela-año, solo revierten 0.2 libras por hora trabajada. Energía y tierra La enorme escala de valores de índices energéticos y de productividades energía-trabajo, aproximadamente mil veces superior en ambos casos, está sobrepasada pot la escala de los valores de los flujos energéticos pot unidad de supe^cie. Esta variación puede obsetvarse en la Figura 2, que nos indica los outputs e inputs energéticos por ha/año paza los sistemas de explotaciones agrícolas empleados en todo el mundo: esto es, solamente a pie de explotación; salvo una excepción. Se han excluido los valores exttemos correspondientes a los 1'unites infetior y superior de la escala input. El diagrazna nos ofre ^e varias sugetencias importantes pata el Mundo cuya población continua en aumento sin tener en cuenta los 1'unites previsibles de tierra cultivable y de las materias primas energéticas. Antes.de discutirlo, deben considerarse tres aspectos. Primero, la unidad de supetEicie es la Ha/año según regla general seguida durante mucho tiempo. Los agrícultores de subsistencia no cosechan sus 22 0 0 N O O \ n "^ W^ N \ ^ n \ lU^ ^ m \ \ ^\ ^ ^ ^\ ^ ^o ^ ^ Q \ X ^ \ O O ^ \ ^ ^ m \` V O ` ^ V ^ 11f f < ^ O.p r^ N^ ^ \ 7 { = O Q \ \ ^ \ \\^• \^ • ‚ ¢, ^ ^ ^ ^ ^Ó r^i ÓQá a^ L p^X^w^ \ ^ H V U^ rn ^ N \ d _/o W \ \ .^- \ \ y ^ m N .^ \ m \ O \ ^ % O J ^ U l0 ^ \ N ^ \ W I \ \ ^I ñ ^ ^ p U \ O x ^_ \ ^ ^ \ ^ \ ^ O ^ C x x \ C ^ ^ X \ ^ J ^J^U 2 ^ \ R tD • Ñ ^ Ó X W N ^ ^f . ^ x\ CN N •v b 7 ^ r` d C Yn 7 0 ^ m W ^ ^ N y l0 ^C '- ul C ^ y m O d J C m N 7 V N V O a C ^ ^^-,E,mm ^ ávm,áóv'^ 0 ld ^ m m O N ‚ N ^0 ^ X O U p .y y .r ^\ • ^ ^ ^^ N • ^ \ O • 7 _a ^ • \ N ^ \ 7 0 \ T N \ • 7 a ^ \ N ^ \ v ^ ^ \ • OOOV^ Ni \ .W ^L • >>>^ñ j j j O U U U U á m O • X ^ O ^ 1 ^ ‚ 111 Ó N N ^ J^ O ^ ^ Ó (o^e/ey/^) o^i1^B^aua 1nd1n0 23 campos de maneta continua, sino que a veces lo hacen a lo largo de un ciclo de 10-20 años, por lo que no son valores que se puedan tener en cuenta con exactitud ya'que sus rendimientos (e inputs) resultan a la larga unas 10 0,12 veces inferiores a los obtenidos en un año de cosecha téal. Segundo, no se ha realizado ningún ajuste paza las vatiaciones climáticas o del suelo. Tercero, algunos de los outputs de la escala se deben a diferentes tipos de cultivos, por ejemplo, el cultivo 61 con su output particulazmente elevado representa un hecho normal en toda Africa para la mandioca, elemento fundamental de subsis-. tencia, con su alta enetgía pero bajos rendimientos ptoteicos. Sin embazgo, se muestran clazamente gran número y diversidad de tendencias. Tampoco se altetatían éstas de maneta sign^cativa, excepto en algún detalle, si utilizasemos los datos de los balances energéticos, paza trazar un diagrama con ptoteínas en vez de outputs enetgéticos. Comenzando por el extremo inferior izquierdo, varios sistemas de explotación agtatia tienen outputs muy bajos, así como los inputs. Se trata en todos estos casos de cultivadores no establecidos: los cultivos 54-57 se refieren a cosechadotes de azroz que trabajan en ciclos de 7-10 años. El cultivo 52 cortesponde a los neolíticos Tsembaga de Nueva Guinea que cultivan huettos en la selva en ciclos de 17 años. Muchos cazadores-recolectores coiisiguen incluso valores inferiores a estos y están ^fuera de los 1'rmites de la escala^, en la izquierda del diagrama. Por ejemplo, los ^Kung Bosquimanos poseen un output de solo 29 MJ/ha/año lo que significa que para suminist<azles una dieta más adecuada, cada persona necesita 10.4 km2 de desierto. Clark24 muestra muchos ejemplos de necesidades incluso más elevadas, generalmente en circunstancias ambientales de dureza semejante: 30 km2 paza los bosquimanos de Australia antes de la llegada de los europeos, 140 kmz para los esquimales del NO del Canada, 80-100 kmz para otros pueblos subárticos, 20-25 kmz paza los indios de las praderas de los EU, descendiendo hasta solamente a 1.5 km2 para las áreas más favorables de pesca de salmón de las costas del Pacífico de los EU. Si nos referimos a pastores y granjetos de subsistencia la escala de tierra necesazia en mucho menot, aunque todavía resulte elevada en compazación con las ciftas standard mundiales. Un valot general de 10-200 has. (0.1-2.0 kmz) por persona, situando los pastore ^, tales como los Masai del Este de Africa y los Handa de Angola en la pazte supetiot de la escala (60-130 has.) y los agricultotes en la infetior, encontrando muchas comunidades que tequieten 10-20 has. por 24 cabeza24. Estos datos pueden relacionarse con la Figura 2, si observamos que un consumo bastante normal de 10 MJ/día (2390 kcal./día) necesita un output pata la producción de alimentos, después de reducir desechos y pérdidas, de 3.65 GJ/ha./año, considerando una dieta en la que entre la cosecha total y con la utilización de una ha. pot petsona. EI cultivo 57 (Arroz de subsistencia, Tanzania) está cerca de dichas características. Dejando el extremo inferior izquierdo de la Fig. 2, los outputs enetgéticos pata los agticultores pte-industriales se observa que aumenta más o menos linealmente según lo hacen los inputs enetgéticos -prácticamente todos en forma de trabajo humano o animal. El punto más elevado en la Figura 2(cultivo 64) corresponde a los campesinos de las explotaciones agrícolas chinas, con patcelas muy pequeñas (230 m2) con técnicas de abonos, intercosechas, y cosechas dobles excepcionalmente intensivas. EI sistema es único en la histotia de la Agricultura y justifica ampliamente él comentatio de Ktopotkin de que una huerta cultivada de manera intensiva es una de las creaciones más productivas de la Humanidad. Los sistamas semi-industriales (cultivos 67-72) no se muesttan tan eficaces en cuanto a la utilización del suelo. Conforme se elevan los inputs energéticos, debido casi exclusivamente al empleo de catburantes fósiles en la mecanización y fertilización, los outputs, sin embargo, permanecen prácticamente invariables. Apatece aquí un caso clarísimo de disminución de beneficios. Sin embargo, este hecho, puede asegutatse que es un ettor estadístico debido casi en su totalidad a la escasa y no caractetística muestra de cultivos elegidos, así como las diferencias climáticas/suelos. De no set así tesultaría algo totalmente sorprendente, ya que la intuición y la experiencia práctica sugieren que en las primeras fases de la mecanización, la aplicación de inputs técnicos a la Agricultura, puede elevar considerablemente los rendimientos, con unos beneficios marginales enotmes, incluyendo ganancias o beneficios de outputs energéticos pata inputs energéticos extra. Precisamente, basándose en esto se han realizado la gran mayoría de los planes agratios en el Mundo desatrollado. Se necesitan naturalmente muchos más datos a cerca de los sistemas intermedios para poner de manifiesto las tendencias reales de la fase de transición entre la Agricultura pre-industrial y la de plena indusuialización, en los climas tropicales y sub-ttopicales. Volviendo a los sistemas plenamente industrializados, la Fig. 2 25 confirma otra vez nuestras esperanzas. Con una notable excepción, el conjunto de cultivos con outputs comptendidos entre los 30-80 GJ/ha. /año, representan todos sistemas plenamente industtializados que cultivan especies de materiales básicas tales como cereales, arroz, patatas remolacha azucarera. Los outputs son elevados (suficientes pata mantener unas 10-20 personas por ha. a base de una dieta vegetariana) pero también los inputs son muy altos y comparados con los sistemas pre-agrícolas muestran una tendencia muy marcada de disminución de rendimientos. Las implicaciones de esto -y de los sistemas ganáderos del Reino Unido agrupados tan inquietantemente próximos al extremo infetiot derecho de la Fig.- lo discutiremos más adelante. En esta sección de los sistemas pre y semi-industriales, existe solo un aspecto más de la Fig. 2 que demanda atención: el cultivo 48 situado de manera única y aislada, correspondiente al huerto-jardín familiar típico en el Reino Unido. EI pequeño huerto familiar, es un sistema semi-industtial ya que los inputs de trabajo corresponden a un 30% del total, tiene un importante lugar en la historia de la agricultura británica, En 1951 Best y Ward25 realizaton un estudio sobre 600 jardines de las afueras de Londres. Encontrazon, con gran sorpresa para ambos, que el output financiero de alimentos por unidad de supe^cie para la explotación media casa-jardín, estaba muy próxima a la de las mejores explotaciones agtícolas (42 y 45 libras por acre respeçtivamente) y resultaba considerablemente superior a la de las explotaciones medias (36 libras por acre). Si tenemos en cuenta, que por lo general, solo el 14% de la supe^cie casa-patcela se utilizaba realmente en el cultivo de frutas y verduras la difetencia es notable y conduce a muchos a considerat con cierta ironía que la mejot medida que se puede tomar con las explotaciones agrícolas btitánicas es convertirlas en estos pequeños huettos familiates. " Produciendo 1.2 tm. de verduras (48 tm. /ha. ) los huertos familiares londinenses consiguen outputs de 60 GJ y 780 kg. de proteínas pot ha. y año, -en pazidad con los mejores sistemas agrícolas exazninados para este estudio. De manera significativa, estos elevados outputs se consiguen ptincipalmente en virtud de un trabajo intensivo y de una pequeña escala, lo que petmite asociar cultivos y obtener dobles cosechas, utilizando así la supe^cie disponible y la energía solar de una manera mucho más eficiente que con las técnicas convencio- 26 nales de cultivos individuales. En efecto, los outputs, en solo unos 250 mz, son suficientes para suministrar todas las necesidades proteícas (54.grs. /día) y una tercera parte de las necesidades energéticas (12 MJ/día) del ingles medio, aunque a base de una dieta vegetariana. Mientras los inputs energéticos son también telativamente elevados el 70% de estos se emplean para fertilizantes artificiales y podrían reducirse ciertamente si se reciclasen los residuos vegetales tales como materias orgánicas en descomposición y estiércoles verdes. 27 3. TRANSICION A UNA PLENA INDUSTRIALIZACION. A principios de este siglo, la Agricultura del Reino Unido, que en la actualidad se encuentra entre las más industrializadas del Mundo, podtía clasificatse por entonces como un sistema pte-industtial. Escasísimas cantidades de carburantes fósiles se consumían para el cultivo de alimentos. La mayoría de los inputs energéticos eran aportados por más de un millón de ttabajadotes y sólo, en Inglaterra y Gales por alrededor de 920.000 caballosz^. En 1901 existías en Gran Bretaña 3,5 millones de caballos, de los cuales, 1,1 millones se empleaban para el trabajo en el campo, y de los restantes, la mayoría eran dedicados al transpone de los productos agrícolas. Si considetamos que cada cabaIlo tequería 1,2 has. para alimentarse, aproximadamente el 30% de los prados de los valles estaban dedicadas a su manutención, cultivando una tercera parte de la misma pata los caballos de la explotación. También se empleaban los bueyes y de las estimaciones de los granjeros ponen de telieve que una buena pareja de bueyes attasttando un arado sencillo, sería capaz, en el entorno de 1900, de arar unas 0,4 Has. cada día -lográndose lo mismo en 1900 que en tiempos de los sajones, varios siglos antes. Una inapreciable serie de acontecimientos recogida por Wickham Hall, Essex, que fué anotándolos sin intertupción en el período de 1850-1963 nos sirve de guía pata estudiar las condiciones típicas del sut de Inglaterra27. En 1885, de una explotación de 420 has., el 1214 % de su supe^cie se necesitaba pata alimentat a los caballos y los 37 trabajadores fijos, incluidos 10 hombres para el cuidado de los caballos. La proporción de tierra por trabájador era de 11 has/hombre, es decir menos de una tercera parte de lo necesario en 1970, cuya cifra era de 37 ha/hombte ('). Mienttas el trabajo aextetior a la explota' Una cifra aproximada para Inglaterra y Crales, que cn 1970 tenían 9,6 millona dc has. cultivadas y dc pastos (sin incluú los pastizales) y 260.000 ttabajadora fijos28 tn las cxplocaciones agrarias. 29 ciónp en las industrias subsidiarias de la Agricultura aumentaba de forma considerable durante dicho período, teduciéndose las diferencias, en 1885 un ejército de mano de obra eventual se necesitaba en la tempotada de recolección: ciertamente, el coste de la ayuda temporal excedía en un 25 % a la de los trabajadores fijos (cuyos salazios reunidos eran de solamente 24 libras por semana). La única maquinatia que trabajaba con carburante era un motor de 5 kw. (7 cv) para una segadora, un molino triturador y una trilladora. Aunque los tendimientos típicos de la Agticultura y la Ganadería por ha. eran la mitad o incluso algo menos que los de la actualidad, esto no sucedía siempre y en todas partes. En efecto, una de las cosechas más elevadas de hierba, recogida nunca en un clima templado, tuvo lugar en la década de 1840, y fue conseguida por un oscuro granjeto inglés, W. Dickinsonz^. Utilizando gtandes ^antidades de estiércol con orina procedente de los «caballos, vacas, cerdos, trabajadores de la explotación y sirvientes de la casa^, obtuvo cosechas de 100-125 tms. de tay-gtass por ha., efectuando hasta 7-10 cortes para su posterior consetvación como forraje. Esta cifra equivale aptoximadamente a 19 tms. de materia seca por ha. -cantidad sólo sobrepasada raras veces en estaciones experimentales, a base de parcelas cuidadosamente preparadas y nutridas. Comentando estos resultados, Alberda29 resalta: «durante los pasados 120 años ha aumentado nuestta profundización de los factotes detetminantes de la producción herbácea, peto no la máxima ptoducción en sí^. En fechas tan recientes como pueden ser la década de 1920, la Agricultura británica estaba todavía en los inicios de la semiindustrialización. En 1920 existían solo 10.000 tractores en todas las explotaciones de Gran Bretaña, en contraposición con los 500.000 que existen hoy, aproximadamente26. 28. Muchas granjas poseían motores que funcionaban con carbón o aceite como cazburantes paza hacer trabajaz cienas máquinas, pero su output de trabajo era de solo 7 MJ (2,5 CV/hora)ha/año por lo general, con una cifra 12 veces superior en el caso de explotaciones laboreables30. Si suponemos un rendi. miento total del 5%, el input energético por ha. resultaba solo paza los carburantes, más o menos, 150 MJ/ha/año en contraposición con los aproximadaznente 9.000 MJ/ha/año acruales, con un rendimiento total mucho más elevado del empleo de los cazburantes. La electrificación de las explotaciones sé había apenas iniciado: según Bayetto31 hacia 1935 solo Ilegaba la corriente a16% de las granjas y su 30 consumo total era de solo 25 GWh, es decir, menos del 1% del consumo acrual de la electricidad en la Agricultura. La ttansición hacia una plena industrialización se tealiza de manera muy rápida y la mayor pazte de la misma sucedió a lo largo de las ttes décadas siguientes a la Segunda Guerra Mundial. Hayami y Ruttan32han demostrado de manera concluyente que para muchos países esta ttansición ha seguido caminos íntimamente mazcados por los costes del suelo y de la mano de obra relacionados entre sí y a su vez pot los ptecios agtícolas. Donde la supe^cie a cultivar era bazata, compazada con el valor de la mano de obra, el interés se dirigió principalmente a aumentar la ptoductividad del trabajo, lo cual se consiguió casi totalmente gracias a inputs de ingeniería, tesumidos como RmecanizaciónA. Por otra pazte, donde la tierra era costósa pero el trabajo telativamente batato, el esfuerzo ha sido principalmente pata aumentaz los rendimientos de las cosechas, un logro que se consiguió casi enteramente gracias a inputs biológicos y químicos, tales como nutrientes de las plantas, abonos y fertilizantes artificiales. En regiones del Globo, como el Reino Unido, en donde el mal tiempo puede afectar a los trabajos de recolección, las cosechas se incrementaron también a través de la mecanización: máquinas poderosas trabajando rápidamente y que pueden a menudo ^vencer los factores atmosféricos> dejando limpio un caznpo en un breve intermedio de tiempo favorable. Los tesultados de estas presiones se muestran en la Fig. 3(adaptada a paztir de la referencia 32) que registra entre los años 1957-62, los outputs monetazios de la Agricultura expresados en aunidades equivalentes trigoa por trabajador vazón y por ha. de terreno cultivado, pata una amplia gama de países (' ). EI diagrama es una aguda advettencia de que las reservas de recursos varían enotmemente entre los diferentes países y de que lo que es económicamente rentable en un sitio, puede ser totalmente lo contrazio en otto. Desgraciadamente, queda fuera de los 1'unites de este estudio el establecer compazaciones entre los distintos países, que añáden una tercera medida de rentabilidad -outputs por unidad de inputs energético-. En su lugaz, se hizo incapie en la sitúación del Reino Unido que como el resto de la Europa occidental ha seguido un cami' EI grupo de páucs no indusuializados son: Brasil, Ceylan, Chile, Colombia, Grecia, India (óucput más bajo por uabajador). Méjico, Paraguay, Perú, España, S ^ia, Tutquía y Venezuela (output más bajo por ha.). 31 m ^ C ^ p^ • N m > m 7 Z C ^O Ñ> Ó b ó ^ ^ N LL T N u ^c̀á ^ ^ ^• m U ú s LL ^ Ó V f0 U ^ • ^ U ^ m E • •^ ^ ^ C_ ^ ` dQ c O ^ ^ ^ • m Ú C • Q ^ lL ^ a á ^ ^ ^^ • • ^ ^ Q I n1 . O U 7 C íao• 7 ¢ Q ^• id ^• f0 C N ^ , ea^Q3oay iod 1nd1n0 32 T • U p^ ^ 07 t0 • ^ • •^^ •• 0 • • 2 • Fig. S.- Toneladas de fenilizantes y rendimicnto dc las cosechas R.U. 1900-1972. no intermedio de desazrollo, fotzando tanto la productividad del trabajo como la dé la tierra. La Fig. 4 nos dá una idea aproximada de la escala y el ritmo de la mecanización de la agricultura británica durante el presente siglo. Los cambios más rápidos apazecieron a pattit de 1945, con el resultado bastante sorprendente de que (en Inglaterra y Gales por lo menos) el número de caballos no fué sobrepasado por el dé tractores hasta 1950, mientras que en 1962, los tractores comenzaton rápidamente a sobrepasar el número de trabajadores agtícolas fijos. El aumento de otros tipos de maquinaria agrícola siguió ampliamente el curso de los tractoreszó. Los efectos sobre el consumo de energía fueron notables. Eti 1968 los inputs energéticos en la Agriculrura del Reino Unido en cuanto a los carbutantes paza el funcionamiento de la maquinatia así como para la fabricación de dicha maquinatia totalizaba 77 MGJ o e120% del 33 total (Apéndice lA, Tabla A1). Esta cantidad refleja de modo aproximado la energía que reemplaza hoy día el ttabajo humano y animal, aunque está calculada por lo bajo, ya que gran parte de la electricidad consumida en la Agricultura (cantidad que se eleva a más de 30 MGJ) se utiliza para la puesta en funcionamiento de material que ahorre trabajo más que para la calefacción e iluminación. Con 324.000 ttabajadores fijos331a inversión solo para este propósito llega a 240 GJ o el equivalente a 5,5 tms. de petróleo por trabajador fijo anual. Considerando una semana normal de 50 horas, el input se calcula en cerca de 100 MJ (2,3 kg. de pettóleo) por hota. Ya veremos más adelante que esta cifra ayuda a situar la Agricultura del Reino Unido en la misma categotía que la de la maquinatia pesada en cuanto a la utilización de la energía pot el hombre. Aquí resulta más oportuno el hecho de que la energía necesaria para sustituir por trabajo se elevó en gran manera. A mediados de los años 20, cuando se comenzaban a electrificar las labores agrarias, tales como el ordeño, el bombeo, la siega, el desnatado... etc., necesitaban 0,2-0,4 kWh de electticidad por hota de trabajo ahorrada.30 Por ejemplo, 250 kWh. para utilizar un equipo de otdeño mecánico ahotraba 640 horas de trabajo comparada con el ordeño a mano. El cambio valía, desde luego, la pena, dé^de e1 punto de vista financiero, incluso aunque el precio de una unidad de electricidad sea el mismo que el de 40 minutos de ttabajo (0.017 libras por kWh, 0.025 libras/hota de ttabajo en 1926). Dadas las bajísimas rentabilidades termales para la generación de electricidad en aquella época ('), esta cifra representa un input energético de alrededor de 10-20 MJ por hora de trabajo ahorrada, aunque quizá deberían añadirse un 10-20 % para los inputs de fabricación de la maquinatia. Por el contrario, la cifra equivalente pata todas las explotaciones agrícolas del Reino Unido está ahota situada en los 230 MJ por hombre-hora ahortado. [De 1965 a 1970 el input eñergético se eleva a 70 MGJ mientras que el trabajo fijo desciende a unos 112.000 hombte-año (Apéndice lA, Tablas A3 y A4). Suponiendo 50 horas por semana y efectuando una corrección de 10,1 % el aumento en libras del producto es 230 MJ/hora ahorrada]. Según los Steinharts181a cifra equivalente para las explotaciones agrarias de USA durante el ' En 1926 los rendimientos termales estaban por lo general próxirnos al 10%30. Teniendo en cuenta que las pérdidas de distribución y los inpuu para las minas de cazbón, etc., dan unos 40-50 MJ pot kWh suminisuado. 34 mismo período resultaba unas ues veces superior a los 720 MJ/hombre-hora ahottados, aunque no se hacen cottecciones paza un output más elevado. ^ 1900 1920 1940 Años 1960 ^ ^ 1980 Fig. 4.- Númcro de explotaciones con caballos, tracrora y trabajadores con dedicación plena. Inglaterra y Gales 1880-1973. En tanto que la mecanización progresaba también lo hacían las tentativas paza aumentar los rendimientos. Una guía aproximada de la escala y ritmo de dicho caznbio queda reflejada en la figura 5, que muesua el uso total de fertilizantes artificiales y rendimientos de las cosechas más imporcances durante el período de 1970 a 1972, sobre un índice base, utilizando cinco años medios, excepto paza el promedio de tres años medios.26,^ 34 35 En cuanto a la mecanización, ésta, experimentó una btusca interrupción durante la Segunda Guerra Mundial así como en los años in- . mediatamente posteriores. Más significativo a lo largo de todo el período, los inputs de Nittógeno se elevaron ocho veces y los Fosfatos y Potasio juntos lo hicieton en uilas 30 veces más, en tanto que los rendimientos de estas cosechas alcanzaron escasamente el doble o incluso algo menos. (Los rendimientos del trigo se elevaron un 93 % en dicho período, siguiendo con valores muy próximos a los de este cereal, la cebada). Como se indica en la Tabla 3, el output de carne y productos animales resulta también dos veces superior aproximadamente durante este período. En efecto, si se tienen en cuenta la carne de pollo durante el principio del período, la mayor parte de la producción que no se registraba al comienzo del siglo (numerosas familias poseían unas cuantas gallinas, un cerdo o dos), y el hecho de que los datos de 1905 cotrespondan solo a Gran Btetaña (Reino Unido menos Irlanda del Norte) un output doble es probablemente un valor aproximado bástante exacto y ajustado a la realidad. TABLA 3. CAMBIOS EN LOS OUTPUTS DE PRODUCTOS ANIMALES. R. U. 190S-19G8 Gran Bretaña 1905 Cantidad (Mr) Reino Unido 1968 Energía (MGJ) . Cantidad (Mt) Energía (MGJ) Añojo y ternera Oveja y cordero Cerdo Carne de pollo 0,65 0,26 0,27 ? 7,91 3,24 4,45 ? 0,85 0,238 0,78 0,378 10,35 2,97 12,87 2,28 Huevos I.eche 0,073 3,63 0,48 9,88 0,696 7,932 4,61 21,58 Queso 0,038 0,65 0,119 2,05 Mantequilla 0,037 0,69 0,054 1,67 0,491 6,26 Otros productos lácteos ? Output energético total . ^? 27,3 + ? Fuenta: R.U. 1968, Apéndice lA. Gran Bretaña 1905, Ref. 26. ^ 3G 64,6 Sin embargo, si el output llegó a ser el doble, el rendimiento (Output/ha./año) no llegó en absoluto a doblarse debido a que la supetEicie real de suelo agrícola se elevó aprouimadamente en un 28% en dicho petíodo (') y los piensos importados también aumentaron de manera considerable. Una cifra más realista en cuanto a rendimiento sería ptobablemente la del 50%. Oponiendo esto frente a los altísimos inputs energéticos pata fettilizantes y teniendo en cuenta el que los abonos se consideran aquí como una mercancía libre de energía, se sugiere que se ha producido un caso bastante curioso de disminución de las ganancias. Pero también debería tenerse en cuenta el que el input enetgético pata todos los fertilizantes en 1972 (82 MGJ) representa solo el equivalente a unos dos millones de tm. de petróleo o alrededor del 1% del consumo energético primario del Reino Unido. El negocio no resultó tan malo. ' Ia supe^cie dedicada a culúvos y pastos descendía un 12 % durante cl períodozb, pero alrededor del 30% de tierra de labor, en 1905, se utilizaba para mantener caballos. Por cada 100 has. de ptoducción de alimentos en 1968 había unas 78 has. en 1905. 100/78 tepresenta un atuncnto del 28%. 37 4. CAMBIOS DENTRO DE LA PLENA INDUSTRIALIZACION. REINO UNIDO 1952-72 Los años 50 y 60 matcaron la época del petróleo gratis, del desartollo ético, de la creciente riqueza y opulencia de Occidente, de las crecientes preocupaciones a causa de dicha creciente riqueza, y del «vosotros copiarnosn como teatía a seguir pata el mundo en desatrollo. También matcaron una época de grandes y tápidos cambios en la Agricultura del Reino Unido, como ya se ve insinuado en las Figs. 4 y 5. Pero, ^con qué efectos sobre los gastos energéticos en la ptoducción de alimentos del Reino Unido, que se esforzaba y afanaba, empujada por los costes y precios reinantes, paza conseguit un mayor y mayor «rendimiento^? Las respuestas por lo menos ante la petspectiva del desarrollo de la alimentación del mundo fututo, y la teoría del «vosottos copiatnosn, resulta bastante inquietante. Una indicación de lo ocurrido puede contemplatse en las Figs. 6 y 7_(basadas en el Apéndice lA, Tablas A3 y A4). El consumo de energía en la Agticultura se elevó en aptoximadamente un 70%, pasando de 241 a 410 MGJ, esto es, casi dos veces más tápidamente que el consumo bruto de carburantes del Reino Unido, que aumentó solamente en un 40 % durante el mismo período.35 Como muesua la Fig. 7, mientras que la fuetza del trabajo descendió en un 50%, el input enetgético por hombte se inctementó en ptopotciones fenomenales, llegando a triplicarse con creces dutante el período que estudiamos. En 1972 cada trabajador fijo estaba respaldado por un input energético ditecto de 502 GJ, ó 11,6 tm. de petróleo equivalente por año (1). Si se cuentan el total de trabajadores fijos y eventuales (1) la cifra desciende a 308 GJ/hombre-año; y si lo que contamos son todos los trabajadotes, incluidos los agricultores a tiempo patcial y los emptesarios agrícolas (1), entonces, la citada cifra baja a 179 GJ/hombre-año. ' El total fue de 127 MGJ ( Apéndice lA, Tabla A3). Los uabajadores fijos 253.000; fijos y evcntuales 413.000; incluyendo los agricultores y empraarios 710.00033. 39 Incluso considerando este último valor, se coloca la Agricultura dentto de la categotía de las industrias pesadas. Cifras exactamente equivalentes paza la Agticultura en el Reino Unido en 1968 fueton: 335, 242 y 149 GJ/hombte-año. También en el mismo año y sobre la misma base los vehículos de motor puntuazon 311 GJ/hombre-año y un amplio gtupo de industtias de ingenietía mecánica entre los 130140 GJ/hombre-año36. Lo más sotptendente de este estudio es que el trabajador asociado normalmente con la maquinaria «devoradora de enetgía>, de las fábricas y de la línea de producción, no estaría más tespaldado por más energía que el hombte que labta los campos y cuida de las vacas. 400 Total global 350 ' 300 C7 m 0 N ^ 250 m ^ m c m ^ 200 v m v .y m U Z 150 100 Petróleo secado etc. Petróleo unidades de fuerza Carburantes sólidos 50 0 1952 1960 1965 1968 19701972 Año Fig. 6.- Necesidada cncrg^ticas brutas paza la Agricultura. R.U. 1962-72. 40 Energía / Hombre-año 320 300 280 260 240 g 220 i 200 Energfa ^: producto en libras d ^ 160 'v c 140 • Output de energía de alimentos 120 ^_ Energía 100 •Producto en libras 80 60 Hombre-aFSos 40 20 1952 1960 1965 1968 19701972 Año Fig. 7;- Enetgía, mano de obra y producto en libras. R. U. Agricultura 1952-72. En términos económicos normales, desde luego, esta substitución de energía por mano de obra, sin mencionar el output aumentado, fue completamente comprensible. Como muestra la Fig. 7, el input enetgético y el producto en libras se mantiene íntimamente en alza mientras que el coste de carburantes y electricidad descendían en tétminos reales. A pattir de aquí resultó cada vez más y más ventajoso el sustituir la energía por otros inputs básicos. Una confirmación de este hecho es la de que a partir de 1952-72 los costos de amaquinariaa (que incluyen catbutantes y electricidad), constitutían un valor estable del 17 % de todos los costos para el agricultor medio del Reino Unido, mientras que los fertilizantes se elevaton del 7 al 10,5 %z^, 33Esta subida justifica gtan cantidad del input energético. Pero en el mismo período, el costo del tíabajo descendía del 30% al 18,5%. 41 Como resultado de esto, el trabajo más la mayoría de los inputsenergético intensivos descendían realmente (del 54 al 46%). Lo que ocurrirá actualmente, cuando los precios de la energía y el trabajo se han disparado, es una cuestión distinta y que se discutirá ampliamente más adelante. Solo podemos anotar aquí que en mayo de 1975 los precios37 del carbón industrial y del petróleo alcanzaron en el Reino Unido el valot de 0.75 a 1.5 GJ/libta (0.07 libras-0.14/unidad térmica), así, cada trabajador agrícola fijo está tespaldado, por lo mínimo en 335-6701ibras, valot del input energético directo. La cifra verdadera resulta considerablemente más elevada, ya que los carburantes y electricidad consumidos directamente en la explotación agrícola son sustancialmente más caros que la media nacional. Como consecuencia, debido solo al alza de los precios energéticos, el ptecio dé los alimentos a pie de explotación se incrementó probablemente; en por lo menos un 20% (vet más adelante). Otro fenómeno muy impottante señalado en la Fig. 7 es el que la energía requerida para producir una cantidad nutricional dada de alimentos aumentó considerablemente durante el período 1952-72. EI input energético y el producto en libras se mantienen íntimamente en alza, peto el ctecimiento de este último se debe en gran parte a un mayor énfasis en el consumo de carne y de otros productos animales. En efecto, como se vio en la Tabla 4, el output energético de los alimentos para el consumo humano se elevó en «soloA el 30%. El output de ptoteínas subió justo por. encima del 35 %. Estos tesultan set aumentos sustanciales. No solo permitían que se alimentasen otros 5, 5 millones de personas (la población se elevó en un 100 % durante los 20 años); sino que también permitieron un incremento muy considerable pata la auto suficiencia en cuanto a alimentos en el Reino Unido. En términos absolutos, el coste energético de este cambio, sin olvidat el ahorro de mano de obta, era de 170 MGJ o unos 4 millones de tms., equivalentes. Una vez más, esto parece decididamente un buen negocio. Sin embargo, es impottante el tesaltat que en tétminos absolutos de tecursos, se experimentó un cambio extraordinario durante dicho petíodo. Los outputs de 1952 fueron logrados con un input enetgético de 241 MGJ, dando un Indice Energético de 0.46 y 251 MJ/kilo de proteína. En 1972 el input se había elevado a 410 MJ, dando un índice enetgético de 0.35 mienttas que el input ptoteico se había inctementado en 25 % pata 315 MJ, ó 7.3 kg de pettóleo /kg. de ptoteína. 42 TABLA 4: OUTPUTS AGRICOLAS PARA CONSUMO HUMANO, R. U. 1953/S4 Y 1972 Energía (MGJ) Proteína (103t) 1972 1953/54 1972 1953/54 17,55 14,64 13,12 16,00 61,3 20,58 22,48 16,97 12,76 72,8 120,4 116,5 105,7 343 141,1 180,0 84,3 405 7,13 2,02 10,42 2,62 80,5 18,8 117,5 24,6 Carne de cerdo Carne de pollo Huevos Leche y productos lácteos 7,43 0,85 4,31 27,37 13,69 2,73 4,51 36,91 52,1 29,1 83,6 352,1 96,2 94,2 87,4 474,9 Total rarne y produaos animales 49,1 70,9 616 895 110,4 143,7 959 1300 44,5 49,3 Trigo Cebada y avena Aaúcar Patatas Total cereales y raíces Ternera y añojo Oveja y cordero TOTAL GLOBAL % de animales 64,2 68,8 Fuentes y notas: Refe. 26 y 34, por lo demás como Apéndice lA, Tabla 5. Unos cuantos aztículos, principalmente fruta y vegetales no se [uvieton en cuenta, pero en 1968 estos justificazon solo el 3-3,5% de los outpua totales de energía y proteínas. En tesumen, mientras que la Agticultuta del Reino Unido se convertía en más rentable en muchos aspectos, se volvía mucho menos eficiente en su uso de la energía. También alcanzó el punto en cuestionarse seriamente las injusticias de la disponibilidad de alimentos y de energía a nivel mundial. Pata decitlo en otras palabras, en 1972, la enetgía para abastecer el consumo notmal de proteínas por persona en Gtan Bretaña -31 kilo/año38- se había elevado en aproximadamente un cuarto de tm. de petróleo equivalente -es decir tanto como la energía comercial utilizada aper cápitaD en el mundo desarrollado para todo uso. Pero esto es solo con respecto a los alimentos suministtados pot las explotaciones agtatias; esto no es toda la historia. 43 5. LA PRODUCCION DE ALIMENTOS DE LA EXPLOTACION AL MERCADO EL REINO UNIDO, 1968 Durante 1968 la Agticultura del Reino Unido consumió en total unos 378 MGJ de energía, es decir, el equivalente a 8,76 millones de tms. de petróleo. Esto constituía el 4,6% del consumo de la energía primaria35. Para esta inversión, entre ottas, sumininstró 13 MGJ de alimentos, esto es, lo suficiente para alimentat la mitad de la población y 1,16 millones de tms. de proteínas para consumo humano. Su Indice Energético era por lo tanto de 0,34, mientras que fueron 32,6 MJ o el equivalente de 7,6 kgs. de petróleo, los que necesitó pata producir un kilo de proteína bruta. La Fig. 8 muestra el flujo de energía en tétmin7^s genetales, mientras que las Tablas del Apéndice lA nos proporcionan una información más detallada. En el mismo período, la actividad pesquera en el Reino Unido era extremadamente intensiva en el aspecto energético, y mostraba todos los síntomas de que el consumo de energía iba en aumento ya que los báncos de pesca estaban agotados. Las consecuencias esta^an claras: los batcos tenían que navegaz más lejos y pescaz más tiempo paza alcanzat sus captutas. Si obsetvamos el balance energético 78, vemos que para la flota pesqueta total, según una estimación bastante conservadora, el input enetgéti^o era de 34,6 MJ por cada kilo de pescado desembarcado, y 78,6 MJ por cada kilo desembazcado paza consumo humano. Esta última cifra reptesenta un consumo del equivalente a 1,82 tms. de pettóleo por cada tm. de pescado que llega al consumidot. EI índice enetgético para esta operación eta de 0,03 mientras que necesitó 489 MJ paza suministtaz cada kilo de proteína comestible. No nos sorprende en absoluto el que en 1974, siguiendo el alza masiva de los precios del petróleo, el costo del pescado se elevara al igual que lo hiciera la carne de vacuno, de forma que tuvo que recibía ayudas estatales paza hacer frente al gran precio de los cazburantes. 45 Con todo, estos inputs energéticos para la producción primaria de alimentos, representan solo una mínima fracción de la energía total necesitada pata ptoducir, manipular, transportat, empaquetar y vender los productos alimenticios en el Reino Unido, así como para importar todos los piensos para los animales así como los alimentos destinados al consumo humano, que no pueden ser, o no son cultivados en el propio País. Una estimación de estos inputs energéticos totales la podemos ver en la Fig. 9. Con un total en conjunto de casi 1.300 MGJ, la ptoducción de alimentos, hasta el momento de su venta en el mercado consumió el 15,7% de la energía primaria del Reino Unido -aunque desde luego, una gran cantidad de este input fue gastado en el extranjero-. Del total, la Agticultuta más el Sector Pesqueto dan cuenta de 411 MGJ o 31,6%; la mWnipulación de los alimentos, 476 MGJ o 36,6%;; alimentos y pescados importados aptoximadamente 273 MGJ ó 21,0%; y la venta de los alimentos, incluyendo algún transpotte 139 MGJ ó 10,7%. Piensos importados Edificios servicios, etc. Maquinaria Fertilizantes Carburantes, electricidad 53.2 51.8 31.8 81.9 108.4 273.9 Agricultura R.U. ^ _ _ Piensos _^ 378.4 Alimentos para la población 130 energ(a de los alimentos unidad: 106 G J • Demanda de energia _ 2 9 Of e rt a d e energ (a Fi^ . 8.- Flujo cncrgético cn ^a Agriculttua del R.U. 1968. 46 Piensos Importaciones: Pescado 73 53 13 Alimentos Importaciones: Pienaos 53 53 51 R.U.: Agricultura 274 sin considerar piensos R.U. Industrias de alimentos y bebidas 527 Elaboración de alimentos y piensos ^ 139 Unidad: 106 GJ 1299 Consumidores del R.U. Fig. 9.- Flujo energético cn cl sistcma alimcntazio del R. U. 1968. 47 En realidad, para la cadena total alimentaria el input de energía resulta considerablemente superior al citado. Una vez adquirido en la tienda el producto alimenticio, el consumidor debe transportarlo a casa, almacenarlo, quizá en un refrigerador o en un congelador, y cocinarlo utilizando para ello gas o electricidad. EI equipamento de la cocina tiene también un costo de energía. Como también lo posee la disposición de los alimentos; del embalaje... etc.:, y de los residuos (para completat la cadena global alimentatia). Ninguno de estos factores están incluidos aquí. Faltan los datos de muchos de ellos o los que existen son imprecisos, en tanto que para los sectotes más amplios (cocina y refrigetación) la enetgía que debería ser incluida en el sistema de alimentos, a menudo reduce de manera sustancial las necesidades energéticas pata la calefacción local, surgiendo difíciles problemas de inclusión en uno u otro sector. En cualquier caso, el gasto total energético pata todos los sectores post-marcado del sistema alimentatio es ciertamente supetior a 8 GJ «per cápita^ y puede elevarse hasta 10 GJ «pet cápitap. Un cálculo detallado de la National Economic Devellopment Office39 del empleo de la energía en el sector nacional del Reino Unido para 1970, estima un valor neto de 99 MGJ para la ptepatación de los alimentos (de los cuales 34 MGJ cottespondén a las cocinas eléctticas y 59 a las de gas) y 20 MGJ de electricidad para el funcionamiento de refrigeradotes y congeladores. Estas cifras se convierten en un consumo bruto, adoptando el 100 % de gas natural, de 208 MGJ y 80 MGJ respectivamente, o un valor global de 5,1 GJ «per cápita^ pata estos items o conceptos. La misma fuente calcula un valor neto de 203 MGJ para todo el calentamiento del agua: un equivalente btuto de 430 MGJ. Si el 15 % de esta cifra se ^onsidera que es para el uso de la cocina, 1.1 GJ «per cápita^ debe incluirse además en el sistema alimentario. Otro detallado éstudio del empleo de la energía en edificios da un consumo neto, pata el servicio público y sectores diversos, en cuanto a las aplicaciones eléctticas solamente, de 3,62 x 10^ kWh pata cocinat y 2,38 x lO^kWh pata calentat agua. Como hicimos anteriormente, estas cifras se convierten en un consumo bruto de energía de 1,0 GJ «pet cápita^, con quizá ottos 0,5 GJ añadidos para aparatos de gas. EI total para todos estos artículos es de 7,2 (a 7,7) GJ «per cápitaA, mientras. que cálculos aproximados de la energía pata comprar el equipamento de la cocina y el transporte de los alimentos adquiridos, añaden bastante más de 1-2 GJ «pet cápitaD. 48 Si consideramos un total aproximado de 9 GJ aper cápita^ paza todos los conceptos, esto suma un 36 % al input energético total de los alimentos por lo que da una cantidad de energía consumida por todas las actividades relacionadas por los alimentos en el Reino Unido, cercana al aquivalente de 0,8 tms. de peuóleo por petsona y año. Sin embazgo, esta cifra media, no deja ver obviamente gran cantidad de variaciones individuales. Así, la energía utilizada pata transpottar los alimentos desde el metcado hasta el hogaz puede servirnos como un buen ejemplo de cómo los detalles personales, pueden elevaz sin sentido los gastos enetgéticos en cuanto a la alimentación. Mucha gente cogerá alegremente su coche y tecotterá un trayecto de dos kilómetros paza compraz, pot ejemplo, una simple pieza de pan de molde, porque se quedó sin pan en casa. El input energético paza el viaje será de unos 8 MJ utilizando un coche inglés (Apéndice 11) añadiendo de este modo un 50% al input energético de la bazra de pan (16,6 MJ paza una bazra standazd de 0,8 kgs.). Tanto paza justificar este punto, como por intetés general, damos en la Fig. 10 un análisis detallado de los inputs energéticos paza un kilo de pan blanco de molde, en rodajas y envuelto (basado en el Balance de Energía 20): justo menos del 20% de la energía total se consume en cultivat el trigo, y todo el testo excepto el 3%, en elaborazlo, empaquetarlo y . ttanspottarlo. Cutiosimente, el input total paza el sistema alimentatio del Reino Unido -sin analizatlo por paztes- es idéntico al de USA en 1963, según calculó Hitst^. La compazación se expresa en la Tabla 5 sobre una base aper cápita^. Con una población de 189 millones, la cifra americana incluyendo el ^cocinaz, etc., doméstico^ representa un input total de 6.450 MGJ que Hitst estima como un 12 % del balance total energético de USA paza aquel año. Cuando se m^a con detalle el análisis del Reino Unido, surgen muchos aspectos interesantes (ver Apéndice lA, Tablas A6, A8). Por ejemplo, en las industrias de alimentos, el 25 % del input total -o 104 MGJ, igual a 1,2% del consumo energético primazio del Reino Unido- es para el empaquetado. La escala denuo de cada indusuia es enorme, de 4% paza empaquetar galletas y azúcar a 43 % para frutas y verduras (enlatadas). Ouo punto a consideraz es que el uazuporte juega una pazte menor en los gastos energéticos de los alimentos, de lo que pueda pazecer a muchos. Sumando el transpone ad ^ectoD paza la agricultura, las 49 50 indusuias alimentarias, y disttibución [Tablas A2, AG y A8 regulan el 41 %(la fracción de ventas a tiendas sobre una base de valot en libras, como alimentos y bebidas] de un total de 56,2 MGJ ó 4,3 % del total y e10, 7% del presupuesto enetgético del Reino Unido. Sobre una base aper cápitaD esta cifta es casi idéntica a la dada pot Hitst para U.S.A. Sin embargo, existen considerables inputs enetgéticos indirectos para el ttansporte teflejados en las Tablas, incluyendo 18MGJ para piensos animales importados (Apéndice 6). TABLA S: INPUTS ENERGETTCOS PARA LA PRODUCCION Y DIS7RlBUCION DE ALIMENTOS, R. U. 1968 Y USA GJ por persona Agticultura y pesquerías del país Importaciones de alimentos y pescados Elaboración de alimentos AI por mayot y al detalle' Total ventas en las tiendas Cocinado etc. en casa R.U. 1968 USA 1963 7,5 5,0 8,7 2,5 23,6 (9) 6,1 11,2 6,4 23,7 10,4 Notas: EI total paza el Reino Unido no tiene en cuenta el redondeamiento de cada Apartado. ' El dc USA, incluye 1,0 para transpotte que se divide paza el Reino Unido rncrc la manipulación y disttibución de los alimentos. Las difetencias entte los Apartados son pazcialmente debidas a los distintos métodos tenidos en cuenta. Eclipsando todos estos aspectos, se encuentra la baja rencabilidad enetgética del sistema suministrador de alimentos. En las sociedades industrializadas y en las que están en términos de desartollo, el problema debería considerarse desde este punto de vista solamente, no precisamente sobre la base de los flujos energéticos en la agricultura. Históricamente, los cambios masivos en la agricultura fueron la causa principal que originó la cotriente hacia las ciudades y de aquí hacia el sistema fabril y generalmente a la indusuialización- una corriente, o mejor dicho, un verdadero torrente que se está repitiendo en todo el Mundo desarrollado. Más recientemente, fue el sistema indusuial urbano, sus valores y fuerzas económicas, lo que hizo que el sistema alimentario se uansforme, aumentando de manera espectaculaz su 51 demanda de enetgía: el doble y ttiple envoltorio de los ptoductos alimenticios; las distancias mayores paza ttanspottazlo; la estrepitosa venta de novedades y alimentos «cómodos y rápidosA de una artificialidad cada vez mayor para conseguir más «valot añadidoA en tanto que los valotes nutritivos se mantienen prácticamente iguales' ; los deseos legítimos de las amas de casa para ahotrar tiempo en la pteparación de las comidas; los conceptos económicos de los supermercados con sus prácticas de «cortat en rodajas, envolver, congelatx, con el fin de ahorraz ttabajo... la lista es casi infinita. Además, muchas partes del sistema se han visto entrelazadas tan íntimaznente que los cambios deben actuaz ptoduciendo grandes fricciones. EI contrato guisante-cultivadot, que en la actualidad necesita utilizar gran cantidad de máquinas paza recolectaz ultrazápidamente y satisfacer la supuesta demanda, ofreciendo un guisante perfecto, tierno, de tamaño uniforme, congelado o enlatado, es un ejemplo clásico. ^Cómo puede uno conseguir «desataz o descoserA esta situación, como no fuera no habiendo entrado en ella desde el primer momento? ^Cuáles son entoncés los rendimientós del sistema global? Con un input de 1.300 MGJ, el sistema suministrador de alimentos del Reino Unido ofrecía en 1968 un output de solo 261 MG ^ aproximadamente. Este output se base en una ingestión media diazia «per cápitaD de 10,72 MG (2.560 kcal.) a partit de las fuentes de alimentos y 1,11 MJ (265 kcal.) a paztir de bebidas alcohólicas y ptoductos de pastelería38. Esto es refiriéndose a los alimentos, etc. que se consumen en los hogates, pero debe añadirse un 10% paza los alimentos y bebidas consummidas fuera de casa, en cantinas, restaurantes... etc. EI total global resulta pot tanto de 13,01 MJ (3.107 kcal.) pot persona y día o 4,75 GJ/persona/año, tesultando 261 MGJ paza la población total. Blaxter5 calculó 241 MGJ como las necesidades enetgéticas de la población. Con estas cifras el Indice Energético global es de 0, 20, de este modo se necesitan cinco unidades de cazburante paza suministrar cada unidad enetgética de la dieta. No se incluye aquí ningún input una ' Era.u una vez una época en que había galletas de chocolate: galletas cubienas con una capa de chocolate. Después había galletas de chocolate y praliné. Más tazde, alguien tuvo la feliz ocurrencia de incluir una capa de mermelada entre la galleta y el praliné. Ahora se pucden compraz galletas de chocolate-mermelada-praliné, coronadas por una roseca de praliné y coco. El aumento del precio ha sido de unas dos veces y media supetior al primitivo. . 52 vez puesto el alimento en manos del consumidor. Las cifras muestran taznbién que en 1968 el Reino Unido era casi exactaznente autosuficiente en un 50 % con respecto a la enetgía dietética, ya que la producción de los pequeños jardines-huertos familiazes pata el consiguiente consumo humano, era de 130 MGJ (Fig. 8). Un resumen de todos los principales datos energéticos alimentarios en el Reino Unido puede verse en la Tábla 6, utilizando los cálculos de BlaxtetS para los tres ptimeros apartados. Fijándonos solo en el sector agrícola, Blaxter escribe que atomando juntos los valores energéticos, biológicos e industriales, aznbos ponen de manifiesto un bajo rendimiento biológico de producción energética alimentazia y un uso despilfazradador de materias primas energéticas fósilesbs. Si contemplamos el sistema global alimentazio, sobra todo comentazio. Esto no resulta, como se ve claramente, un sistema viable para todo el Mundo y paza todas las épocas. Copiado a escala mundial demandaría cantidades prodigiosas de energía. Si con la población actual existente en el Mundo de 4.000 millones, cada uno consumiera 23,6 GJ por año de cazburantes utilizados en la producción de alimentos, la cuenta anual sería equivalente a 2.185 millones de tms. de pettóleo, o e140% del consumo global de catbutantes en 1972. Tampoco en tétminos totales, tesulta el sistema tan económico con tespecto a la Tierra. Para alimentar a la mitad de la población basándonos en la energía contenida en la dieta, la Agricultura del Reino Unido tiene una supe^cie agrazia útil (contando los pastizales pero sin tener en cuenta las supe^cies destinadas a cultivar piensos importados de otros países) de 19,4 millones de has.41. Cada inglés, por tanto, cuenta por lo menos con 0,71 has. En cuanto a la población mundial, en 1973 casi 4.000 millones de personas vivían a panir de 1.475 millones de has. de tierra labrada y 3.005 millones de has. de prados y pastizales, lo que ptoporciona alrededor de 1,1 ha. pot pérsona42. Tampoco, debemos confesaz, el sistema resulta muy rentable en cuanto a la utilización de la mano de obra. La Agricultura del Reino Unido, empleando 413.000 petsonas en 1972, lo que reptesenta el 1,9°r6 del total de la mano de obra de 22,12 millones41, es altamente eficiente desde el punto de vista laboral. Cada uno de estos uabajadores agtícolas suministta a unas 66 petsonas una base energética de alimentos y bastantes más proteínas. Pero si se tiene en cuenta toda la mano de obra directa o indirectamente relacionada con el sistema ali- 53 TABLA 6. RESUMEN DE VALORES ENERGETTCOS DE SISTEMAS DE ALIMENTOS DEL R. U. 1968 MGJ poc año Flujos biológicos 1. 2. 3. 4. 5. 6. 7. 8. 9. 10. 11. 12. 13. Incidencia de la radiación solar Ptoducción ptimatia cosechada a partir de plantas Impottaciones de alimentos animales Outputs comestibles de la explotación: cultivos animales Output comestibles totales de la explotación Energía de los alimentos consumidos por la población Eficiencia primaria de conversión(2 / 1) 0,18 % Eficiencia del sistema [5/(2 + 3)] 10,7% 0,02 % Eficiencia global (7 x 8) Autosuficiencia energética de los 50% alimentos(5/6) ^6) Autosuficiencia en ptoteína de los alimentos 62 % Output energético de los alimentos/ha. cultivos y pastos R.U. 16. 17. 18. 19. 130 261 • 10,6 6,7 ' Input energético de la agricultuta (y % todoR.U.) 15. 65 65 12 incluyendo los pastizales Flujos energéticos industriales 14. 610.000 1.116 104 4,6°^ Input energético del sistema de alimentos 15,7 % (y % todo R.U.) ( 22 %) 15 contando la energía doméstica usada 0,34 Indice de energía de la agricultura (5 / 14) Indice de enérgía para el sistema de alimentos 0,2Ó (6/15) 18 incluyendo el consumo doméstico de 0,14 enetgía (6/ 16) 378 1.300 1.820 GJ por -año 20. 21. Input energético ( 15) per cápita Input agrícola/ha. cultivo y pastos en el R.U. 23,6 30,7 22. 21 incluyendo superficie pastada 19,5 mentario, desde la explotación al mercado (ver Apéndice 1D) el total ^e acerca probablemente a los tres millones. A^esto debe añadirse la mano de obra del extranjero que suminisua los piensos importados y 54 el 40-50% de alimentos para la población también importados -quizá un millón o más ^onsiderando la mayor intensidad de trabajo de los alimentos importados-. Así, cada persona empleada en alguna actividad relacionada con productos alimenticios, en el Reino Unido o en el exttanjero, alimenta «soloA a 13 ó 14 personas. Por eso, tomando como base la población total, el 7-8% de la «semana de trabajo> se dedica a la provisión de alimentos: un rendimiento, como ya se mencionó anteriormente; que solo resulta dos o tres veces superior al de los campesinos pre-industriales y al de los cazadoresrecolectores. Expresándolo de otra manera, hacen falta unos cuatro millones de trabajadotes pata suministrat 261 MGJ de energía de alimentos, produciendo un output.de unos 30-35 MJ por hombre-hota. Como se vio en la Tabla 2, este rendimiento es algo superior al de los campesinos de subsistencia de los estados preindustriales, aunque se trata de zonas tropicales. Ni en un ca ^o, ni en otro, se ha tenido en cuenta el tiempo dedicado a la prepatación doméstica de los alimentos, cosa que vazía enotmemente. Aunque puede suponerse que se necesita pata realizar estas tareas mucho menos ttabajo en las sociedades industriales, con cocinas dotadas de todos los adelantos y con cantidad de platos pre-cocinados; un estudio realizado en USA puso de manifiesto que de 1966 a 1968 las horas semanales dedicadas a la preparación de los alimentos descendieron solamente de 23 a 18 horas, mientras que el tiempo invertido en «compras y tareas domésticasp se elevó de 4 a 8 horas por semana43. Sin embargo, este estudio se realizó teniendo en cuenta solo a las mujeres que no trabajan la jornada completa fuera de sus casas. Como en la actualidad el número de mujeres que trabajan fuera de casa es muy superior al de hace 40 años, el descenso`real, puede resultat de considerable importancia. LPor qué resultan los rendimientos tan bajos? EI principal factot responsable de que el rendimiento biológico y el de la utilización del suelo sean tan bajos en el sistema alimentario del Reino Unido, es la elevada proporción de producción de alimentos en forma de productos animales. Esta es también con mucho, la causa más importante de los bajos rendimientos energéticos de la explotación agrazia del Reino Unido. - 55 EI primer punto se demuestra de manera sencilla. La Tabla 7 nos muestra como de toda la supe^cie cultivada en el Reino Unido, solo el 8,3°^ abastece directamente de alimentos al hombre. Casi todo el 92 % restante se dedica a alimentar el ganado, que consume también alrededor de 14 a 15 millones de tms. de piensos importados cada año. Incluso excluyendo del cálculo los pastizales natutales, la proporción de supe^cie utilizada directamente para la alimentación humana alcanza solo el 13 °^o . Ya que esta cifra del 8 al 13 °h suministra la mitad del output energético de las explotaciones agratias del Reino Unido y la otta mitad la suministtan los animales (Tabla 6), el sistema vegetal es 9 veces más eficiente en cuanto a la utilización de recursos del suelo, que lo es el sisfema animal. En ottas palabras, las explotaciones ganaderas del Reino Unido utilizan unos recursos del suelo, que deberían teóricamente, suministrar a unos 250 millones de personas aproximadamente la totalidad de su dieta de verdutas y cereales. En cuanto a la baja eficiencia energética, el concepto queda ampliamente aclarado con la Fig. 1, que muestra como todas las cosechas agrícolas del Reino Unido poseen unos índices energéticos mucho más elevados a pie de explotación que los que tienen incluso los ^mejoresb ptoductos animales (la leche). Hasta el azúcat y el pan blanco, después de haber pasado a través de varios procesos industriales muy energéticos-intensivos, se sitúan considerablemente pot encima. EI mismo punto queda demostrado también de manera evidente con las figuras 12 y 13 cuyos datos están tomados de los Balances Enetgéticos 19 y 38. En ellas podemos vet, para la ptoducción respectiva de trigo y leche, la cantidad extta de enetgía que debe emplearse con el fin de rescatar una ha. de suelo, utilizando para este fin unos procedimientos más intensivos de cultivo. Mientras que los datos reflejan principalmente la esperada respuesta del trigo y los pastos a los fertilizantes, siendo de este modo dos factores bastante amplios dentro del total, la diferencia es sorprendente. Pata el trigo, una ha. de suelo rescatada, demanda un extra de 1GJ de input energético, en tanto que para la leche la cantidad extta necesatia setía de 24 GJ. Pero quizá sea la fig' 11 la más demosttativa del despilfarro o prodigalidad energética en la producción animal. Los datos están tomados de los Balances Energéticos 1-16, que estudian una variedad del total medio de las explotaciones agrarias en el Reino Unido. Todas 56 a TABLA 7: UTILIZACION DE LA SUPERFICIE AGRICOLA, li<. U. 1971 /72 •(UNIDAD: 10^ ha) Area Total Trigo Cebada, avena, cereales vatios Total cereales Patatas Remolacha azucarera Productos hortícolas Frutos y hottalizas Total vegetales Hierba y alfalfa Pastizales Total superficie agrícola úcil • Otros 1,097 0,459 0,570 0,068 2,705 3,802 0,442 0,901 2,105 2,675 0,158 0,226 100% 24% 70% 0,257 0,189 0,182 0,388 0,173 0,183 0,182 0,113 0,037 0,006 0,275 0,047 - 1,016 0,651 0,318 0,047 64% 31% • 100% Total cultivos y pascos Alimentos Alimentos para el para animales hombre 7,254 - 12,072 . 1,552 100% 13% 6,646 - 6% 5% 7,254 - 10,247 0,273 85% 2% 6,646 - 18,718 1,552 16,893 0,273 100% 8,3% 90,3% 1,4% Fuentes y notas: las supe^cies divididas por outputs de peso de cosechas y utilización34. I.a ^otra^ columna indica ptincipalmente semillas, pero también alguna pérdida o despetdicio de la explotación y transpotte. ellas están dedicadas en pazte a cultivos agrícolas y en parte a ptoductos ganaderos. Pero las proporciones de los outputs energétiucos totales justificados por los animales varían enormemente -desde un 2% en el caso de fincas de cereales a un 93 % para las más pequeñas explotaciones especializadas en productos lácteos. I.a Fig. 11 recóge el descenso de los Indices Enetgéticos paza estos sistemas, que resultan unas 10 veces inferiores según se pase de acasi todo productos agrícolas' a`casi todo productos ganaderosA. A la gente le gusta la cazne, la leche y los huevos y no es necesario hacer cálculos paza adivinaz que en el futuro, la sociedad continuatá con estos hábicos. Estos produccos suminisuan nutrientes especiales 57 0 ^ Explotaciones cerealistas p Explotaciones de vacuno y ovino ■ Explotaciones de cerda y aves • Explotaciones lecheras ^ O 0•8 0•6 O • ^O ■• • ■ Leche ^ • • 02 Huevos: L7 Carne de pollo; p 0 0 20 40 60 80 100 Total de output energético procedente de productos animales I%1 Fig. 11.- Indices de energía para diferentes tipos de explotaciones, R.U. 1970/71. apatte de ser fuente de energía y proteínas, pot otra patte, los animales aptovechan gtan cantidad de patte de las plantas y de subptoductos que las personas no pueden hacetlo. También son capaces de alimentarse en terrenos inadecuados para el cultivo -incluyendo los pastizales de altura, que totalizan un tercio de la supe^cie agraria útil del Reino Unido- y pueden ayudar a mantener la fertilidad del suelo. La cuestión no consiste en demostrar si los productos animales son o no un lujo inmotal, sino en averiguar cuándo son lo suficientemente adecuados. Los outputs de las explotaciones agrarias y la ingestión en la dieta de productos animales, se elevaron de maneta constante a lo largo de los últimos 20 años, de modo que en 1972 suministraban 58 4•8 / Invierno 1 • 4•0 i / / / ^ // Invierno 2 / /^ROMEDIO ADOPTADO // Primavera 1 • / 3•2 / // / / • Primavera 2 / / / / / / // Respuesta de la cosecha a la fertilización N 2•4 1 10 I 12 ^ 14 i i I 16 18 20 Input energético (GJ/ha-añol Fig. 12. - Cosechas e inputs energéticos para el trigo, R.U. (ver Balance Enetgético 19, p. 158). e160% de las proteínas ingeridas y e144 % de la energía aportada por los alimentos (Ref. 38, excluido el pescado). Una inversión casi insignificante de esta tendencia podría tener como consecuencia un ahorro considerable de materias primas energéticas fósiles y dejar libres grandes extensiones de suelo paza dedicatlo a un tipo de Agricultura menos intensiva y menos despilfarradora de recursos. Paza demostraz lo dicho anteriormente, aunque a grandes rasgos, vamos a consideraz lo que ocurriría en la Agricultuta del Reino Unido si volviese hacia el pattón representado por las explotaciones lecheras de tipo medio del Balance 5, donde solo e128% del output energético y el 38% del output de proteína se encuentta en la fotma de productos animales (leche, catne de vacuno, huevo;, cotdero y ovejas, cerdos pero sin incluit la cazne de pollo). Paza un total de una ha. , incluyendo la tierra pata el cultivo de los piensos de fuera de la explótación, los outputs e inputs enetgéticos son de 22 GJ y de 28, 5 GJ (Indice Enetgético de 0,77). El Reino Unido podría alimentar a casi la mitad de sus habitantes, en tétminos de energía de alimentos, a base 59 de 11,9 millones de has., es decir, con bastante menos de la actual supe^cie dedicada a cultivos y pastos. EI output de proteína de esta supe^cie sería cercano a los 2,5 millones de tms., excediendo el consumo acrual en casi el 50%. El Reino Unido sería, de este modo, autosuficiente en más de un 100 % en cuanto a los alimentos propios de este tipo de clima. El input energético para suministtat todos los alimentos sin someter a tratamientos especiales ( no elaborados) res^ltaría ptóximo a los 309 MGJ en vez de a los 670 MGJ consumidos pot la Agticultura del Reino Unido, pesquetías y alimentos impottados en 1968. Todos los pastizales se mantendrían sin tocar para utilizarlos en la producción de ganado bovino y ovino. EI esquema resulta lógicamente supersimplificado y es absurdo en muchos aspectos. Su puesta en matcha cteatía una ruina económica pata los agricultores y la industtia alimentatia, a no set que se cam- Demanda de tierra (ha.-aRo) Fig. 13. - Demanda de energía y tietra para 1.000 galones de leche (4.550 litros). Ver Balancc EncrgEtico 38, pág. 110. 60 biata lenta y progresivamente hacia un sistema aproximadamente párecido al desctito. Peto hay que aceptat una opinión, establecida a menudo en los años recientes. Los hábitos occidentales de excepcionales consumidores de carne representan un verdadero desastre desde el punto de vista de la alimentación, de la tierra y de la energía en términos globales, y en caso de ptesentarse cualquiet tipo de aislamiento económico, podrían ser y probablemente lo serán, uno de los primeros lujos que se vetían recottados. Entte tanto, no hay escapatoria para el difícil e intrincado dilema de que si por un lado el clima económico pone todo su interés en producit más, por el otro, escasas reservas energéticas apuntan hacia un futuro de menores necesidades. G1 6. RESPUESTA Y DESAFIO La gran elevación de los precios de los ctudos en todo el mundo, ha tenido lugar tan rápida y recientemente, que los esquemas de respuestas a este problema resultan todavía extremadamenté confusos. Los sistemas nacionales y los sectores de producción a gran escala, como pueden set la agricultura y el ptocesamiento de alimentos resultan, de modo inevitable, lentos en su adaptación. Las casi únicas medidas a tomaz, serán por el momento it «taponando goterasb y recortando lujos, el contrarrestar la subida de los costos con otra de los precios y entonces comenzat a pensar seriamente en adaptaciones a más latgo plazo. En cuanto al sistema alimentatio, la violenta sacudida en todo el Mundo de los precios de los cereales y de las proteínas durante los años 1974 y 1975 ha sido un factor más que conttibuye en gtan manera a la inestabilidad e incertidumbre actuales; así, en el Reino Unido la subida vertiginosa de los salarios junto con una escasez importante de forrajes durante el invierno 1974/75, dio lugar a subvenciones precipitadas, y todos los convenios con la CEE, sumieton al sistema alimentario en una confusión total en el terteno económico. En los países en desazrollo la situación resultó aún más caótica y trágica con el alza de los precios de los cazburantes y el astronómico costo de los fenilizantes combinado con la escasez de la producción, añadiendo a veces enormes cazgas en el intercambio internacional y destruyéndose mucho de lo que se había logrado en el caznpo del desarrollo agrícola. Solo la India difundió la noticia de haber perdido 10 millones de toneladadas de cereales a causa de la falta de fenilizantes. Cualquiet intento de analizar cuál será la tespue ^ta a cono plazo, de las técnicas agrícolas y del resto del sistema alimentario, frente al alza de los precios de los cazburantes, resulta por lo tanto poco menos que imposible. Hablando en términos generales, sin embargo, en el Reino Unido ha quedado demostrado que por lo menos, el alza de los ptecios de los carbutantes afectó escasamente a los procesos agtíco- G3 las considerados en su totalidad -excepto en la elevación de los precios de los alimentos a pie de explotación. El alza debida solo a la energía, llegó a set de hasta un 20% en tétminos teales y ptobablemente sea mucho mayor si se tienen en cuenta los efectos indirectos. La evidencia de esta afirmación queda reflejada en los Balances Energéticos 1-16 que abazcan una escala de tipos medios de explotaciones agrícolas del Reino Unido en 1970/71. Un aspecto que llama poderosamente la atención al observarlas, es que para todas las explotaciones el input energético por cada libra de output bruto -es decir, beneficios totales antes de deducir los costos- se mantiene extraordinaziaznente constante. EI valor medio es de un input de 216 MJ por libra de output con una vatiación de ± 10%. Ahora, cuando se tienen en cuenta los ptecios medios pagados tanto por los carburantes como por la energía elécttica consumidos en la explotación agtazia y fuera de ella en industrias subsidiarias3s, 3^, aa y ponderando las cantidades utilizadas, el input energético total resulta haberse valorado en una cifta ptóxima a 2.000 MJ por libta. De este modo, el input cuesta al agricultor medio alrededor de 0,1 libra, o el 10 % de 'su output btuto. Siendo iguales todos los demás factores, una elevación global del doble en los precios energéticos elevará consiguientemente los precios a pie de explotación en un 10 % si el agricultor quiere mantenet su posición. A paztir de diciembre de 1970 hasta mayo de 1975, este precio ponderado se multiplicó por aptoximadamente un valor de 2,7. El factor que más influyó fue la subida de 4,5 veces el precio del petróleo y un aumento del 70% para el catbón industrialas, peto también fue debido a las elevaciones de otros carburantes y de la electricidad. Como resultado, el imput energético paza las explotaciones agrazias asumió un valor de 750 MJ/libra. Por consiguiente, basándonos en esta tosca aptoximación, paza absorber los costos extra de solo la energía, los ptécios a pie de explotación habtían tenido que aumentat aproximadamente en un 17%. El aumento real de todo lo relacionado con la enetgía resultó en la tealidad superior a este debido a una enetgía más costosa pata todos los precios al por menor y por consiguiente en los salazios, incluidos los de los trabajadores agrícolas. Además, hubiera resultado mucho rriás elevada aún si los fabricantes del Reino Unido y los consumidores hubiesen pagado los ptecios vetdaderos por los carburantes y la elecuicidad en vez de los precios altamente favorables y reducidos gracias a las varias subvenciones y a la 64 política de introducir un gran déficit de la balanza de pagos a causa de las importaciones de petróleo. Lo aplicado a las explotaciones agratias parece también adaptatse al sistema alimentatio total, y con casi exactamente la misma telacción en cuanto a una gran enetgía y ptecio de los alimentos. En 1968 el coste nacional del sector alimentario (incluidos el consumo doméstico, establecimientos hoteleros, y cantinas estatales) se estima en 6.52446 millones de libtas. Para suministrat estos alimentos se necesitó un input energético de unos 1.300 MGJ, dando un promedio de 200 MJ (equivalente a 4,6 kgs. de petróleo) por cada libra gastada en suministro de alimentos. Suponiendo esto, se valoró en aproximadamente una libra para 2.000 MJ, representando entonces de nuevo el input enetgético total el 10 % del ptecio final. Una elevación global cuatro veces superior de los precios de los carburantes y de la electricidad, esperado por muchos durante la década de los 70, elevará así los precios de los alimentos en aptoximadamente un 30%, o posiblemente muchó más cuando se lleven a cabo las subvenciones para paliar los efectos indirectos de la inflación, mencionados anteriormente. Por lo menos, lo harán si el sistema no responde convirtiéndose en más eficiente desde el punto de vista energético. La clave está en saber si puede esto lograrse e imped^ la subida de otros costos. En general esta respuesta crítica no ha tenido lugar todavía en gran parte. Algunos ptoductos exttemadamente aintensivoenetgéticosa resultaton severamente afectados de modo que la producción ha tenido que ser subvencionada o reducida: un claro ejemplo de lo primero lo reptesenta la Pesca (ver Balance Energético 78) y de lo segundo los cultivos hortícolas en invernaderos con calefacción (ver Balance enetgético 47 con sus 25 a 33 MJ para ptoducit una lechuga). Los valores económicos de algurios nuevos tipos de alimentos o de piensos han sido también duramente afectados: el ejemplo más característico lo tenemos en la ptoducción de ptoteína unicelular para piensos a partú de derivados del petróleo, tales como metanol y fracciones de petróleo bruto, cuando incluso con los precios anteriores a 1973 los precios de los carburantes y los inputs energéticos relacionados dieron cuenta de más del 50% de los costos brutos (ver Balance Energético 84 y 85.). Por lo demás, la mayoría de los ingerúeros agrónomos y de los economistas creen que a pesat de los precios actuales de los carburantes y energía eléctrica no se producúá ningún cambio 65 considerable a un corto o medio plazo, hacia prácticas que economicen energía. En general, los perjuicios de un uabajo extra, así como de los costos del capital, o en algunos casos, de rendimientos más bajos, contrazrestarán los costos más elevados de todo lo relacionado con la energía. Potencialmente, sin embargo, podrían hacerse muchas cosas para ahotrar energía en la producción de alimentos. Dejando apatte la única medida que podría ella sola originaz un cambio mayor que ningún otro -una reducción de los productos animales- dicho ahorro podría llevarse a cabo bien a base de economizaz en los actuales métodos de producción o bien a base de producit cazburantes y electricidad a partir de la materia orgánica de las explotaciones reduciéndose de este modo el consumo neto de energía. El potencial paza la ptoducción de catbutantes en la Agticultuta es verdadéramente importante siempre que las densidades de población sean relativamente bajas tal como es el caso de los USA. Un estudio reciente47 puso de manifiesto que un programa moderado de desazrollo dirigido a la conversión de los residuos biológicos en cazbutantes, podtía suministrar 15.800 MGJ (equivalentes a 366 millones . de tms. de petróleo) paza los Estados Unidos en el año 2000. Esta cantidad representa alrededor. del 60% del output energético del ptogtazna nuclear más amplio' propuesto en la actualidad por la US Atomic Energy Commission: es decit 1.400 GW (eléctticos) de capacidad, instalados en el año 2000 equivalentes a más de 1.100 reactores de las dimensiones mayores de que se puede disponer en la actualidad48. EI objetivo más modesto, aunque todavía de enormes proporciones, de la USAEC, de conseguir 850 GW de capacidad nucleat instalada hacia el año 2000, produciría menos energía que la bioconversión, ella sola, mienuas que la bio-conversión -la mayor parte procedente de la actividad agrazia- justifica ella sola un 4096 del total proyectado paza los recursos de la energía solar en el año 2000. ' Si tomamos un factor bastante genetoso de capacidad del 6S %, el ptograma nuclear proporcionaría 1.400 GW x 0,65 x 8.760 horas/año = 7.972 TWh = 28.700 MGJ o 26.400 MGJ teniendo en cuenta el 8% de las pérdidas de distribución. La comparación no toma en cuenta la potencialmente mayor ucilidad social de la eleccricidad compazada con los carburantes líquidos procedences de la bioconversión o las necesidades energéticas para construir, mantener, poner cn marcha y hacer funcionar los dispositivos de coñversión en ambos casos. G6 En el caso del Reino Unido con poblaciones aglomeradas, el potencial es considerablemente menot. Como se observa en la Tabla 6, la producción ptimazia cosechada de las plantas es poco más de 1.100 MGJ o alrededot del 12 % del actual consumo bruto de energía (9.268 MGJ en 197335). Como a paztit de esta producción ptimaria se deben suministraz alimentos así ^omo sub-productos cazburantes, el alcance para este último resulta clazamente bastante escaso. Otro modo de enfocar el problema es el advenir que el consumo bruto energético del Reino Unido tesulta ya equivalente a una media de 380 GJ/ha-año, o exactaznente el 1,0% de la tadiación solat total recibida por la supe^cie del suelo de Inglatetra (37.700 GJ/ha-año 0 90 Kcal/cmz/año49). Si la supe^cie total del Reino Unido se utilizara pata cosechar cultivos destinados a la producción de cazburantes con un rendimiento fotosintético que Ilegara hasta un 1%, y con una conversión completa de la cosecha a los cazburantes, entonces el Reino Unido gracias a este método, podría justo satisfacer todas sus necesidades de energía primaria. No obstante, existen ahotros que pueden ser Ilevados a la práctica, por la conversión de cazbutantes agrícolas, que resultan potencialmente de considerable imponancia. Los tres primeros que citazemos a continuación, podtían, en teoría, producir unos 200 MGJ, reduciendo así el input energético pata la Agticultura del Reino Unido en aproximadamente un 4% a partir del nivel alcanzado en 1972. Paja Como valor medio, una hectátea de cereales, en el Reino Unido, posee un rendimiento de 3,5 rms. de paja con un contenido de 45 GJ10 de enetgía bruta. Con 3,8 millones de has:-de ceteales, esto representa un rendimiento potencial de catburante de 170 MGJ lo que equivale a un 40 % aproximadamente del total del input energético para la Agticultura del Reino Unido en 1972. En la actualidad, algo más de la mitad de la paja se utiliza paza cama de animales o como pienso, peto casi un 40 % se quema en el campo por set éste el método más económico de deshacerse de los excedentes superfluos. Como las necesidades de energía pata cosechar la paja son relativamente escasas, algo así como 350 MJ por ha. (Apéndice 78), se dispone de un claro potencial qué vazios gtupos están activamente invescigando. 67 Una posibilidad consiste en cosechar el ceteal completo y utilizar la paja con un contenido calorífico de un 45 % en equivalencia en peso con el carbóni°. También podtía ttan ^formarse la paja en carburantes líquidos gracias a la hidrólisis o a la fermentación anaerobia, con un rendimiento energético neto de alrededor del 50%. Sin embargo, el principal inconveniente actual pata todos estos sistemas es el alto costo junto con el hecho de coincidir la cosecha de la paja con el punto álgido de la recolección del grano, dedicándose a este todo el esfuerzo de trabajo y máquinas disponibles. Fertilizantes y Abonos En 1972 los fertilizantes nitrogenados consumieron el 18 % del input energético de la Agricultura del Reino Unido, es decir una cifra áptoximada a los 74 MGJ (equivalentes a 1,7 millones de tms. de petróleo), aunque un estudio reciente estimaba que con toda ptobabilidad apenas la mitad del nitrógeno aplicado al suelo es aprovechado por las plantas. Se tecomendaba por tanto, que se pusiera el mayor cuidado en la utilización de los fertilizantes, teniéndose especialmente en cuenta las clases de suelos, estaciones del año, lluvias, tipos de cosechas y secuencias de éstas, ya que todo esto podría reducir sensiblemente el gasto supetfluo, gasto que resulta no solo improductivo y gran consumidor de energía, sino también un agente de gran impacto en la contaminación de las aguas que los atrastran. El mismo estudio estima también que alrededor de 57 millones de toneladas de abonos procedentes de las instalaciones ganaderas de cerdos, vacuno y aves en el Reino Unido en 1971 correspondían a 372.000 tms. de nitrógeno, 75.000 tms. de fósforo y 241.000 tms. de• potasio. Estas cantidades teptesentan de maneta aproximada el 40, 30 y 65 °r6 respectivamente de las suminisuadas en la actualidad por los fenilizantes artificiales con un input enetgético combinado de 33 MGJ y se convittieron en un impottante problema de almacenamiento, disponibilidad y contaminación en muchas explotaciones, frecuentemente por estat especializadas y no poseer suficiente extensión de terreno donde podet utilizatlos (explotaciones sin tierra). A pesar de que existen muchos problemas económicos y de manejo que evitan una mayor utilización de los abonos -el tirarlos es generalmente más barato y sencillo que el almacenarlos hasta la Primavera cuando 68 ptoducen la máxima respuesta de las cosechas- se espera en general que su utilización irá en aumento a causa también de una gradual vuelta atrás hacia el sistema de agricultura mixta tradicional. Existe además la revolucionaria posibilidad de transferir a los cereales y otros tipos de cosechas la característica de las leguminosas de fijar el nitrógeno atmosférico. Si este truco de ingeniería molecular y microbiana logta Ilevarse a cabo, la necesidad de fettilizantes nitrogenados de elevado contenido energético resultaría espectacularmente reducida. Sin embatgo, esto es como lanzar una piedra a gran distancia, cuyos efectos sobre los rendimientos de las cosechas, resistancia a las plagas, y otros muchos y sutiles aspectos ecológicos, nos resultan por el momento desconocidos. Metano La obtención de metano a partir de estiercoles animales y desechos vegetales, gracias a la fermentación anaerobia, es otra faceta activamente investigada actualmente por muchos y variados grupos, que van desde la alternativa tecnológica de las comunas hasta los centros de investigación del propio Gobierno. Los resultados económicos son extremadamente variados. En el caso de la típica explotación agratia inglesa, existen pot ahora, serios inconvenientes, tales como son las altas inversiones de capital, la necesidad para consegu ^ un almacenamiento eficaz, con el fin de ajustat la producción de abonos a lo largo del año con las demandas del gas catburante, y el hecho de que durante la mayor parte del invietno los líquidos de fermentación deben calentarse pata mantener las tempetaturas óptimas para la digestión. En las condiciones típicas del Reino Unido, las exigencias de calor consumen casi el 50% del gas producido a partir de los estiercoles de las aves y alrededor de140% del de los cerdos10. Sin embargo, el potencial para la producción de carburante es muy amplio. Por ejemplo, una tonelada de estiercol de vacuno puede, con un buen sistema, produc ^ aproximadamente 1,1 GJ de gas de tal modo que la conversión de los 40 millones de tms. totales de estiercoles procedentes de los ganados estabulados en el Reino Unido10 suministraría unos 44 MGJ. Patte de este gas podría emplearse para calentar las cuadras de los animales, con lo que se reduc^ían de maneta apreciable las necesidades de piensos; con un pequeño montaje técnico, el 69 metano puede también hacer funcionaz gtan parte de la maquinaria de la explotación. Otra ventaja adicional, es que la producción de gas apenas destruye los nutrientes de los estiercoles, que de este modo pueden volver a utilizarse en abonar los campos. Esta elemental tecnología paza adaptat la producción de metano con el uso del carburante en la explotación puede muy bien lograz que los tesultados obtenidos valgan realmente la pena. Medidas económicas elementales La calefacción de los invernaderos consume alrededor de la cuarta parte del petróleo utilizado directamente en la Agricultura del Reino Unido y es la causa de que algunos productos alimenticios sean asombtosos cónsumidotes de enetgía (ver Balance Energético 47). Este sector de la Agricultura fue muy perjudicado por el alza de los precios de los cazburantes, pot lo que muchas investigaciones se dedican en la actualidad a estudiaz el modo de reducit el consumo energético. Algunas medidas para paliat este problema son el uso de persianas aislañtes durante la noche paza reducir las pérdidas de calor sin afectar a la ttasmisión de la luz, ni verse alterados los rendimientos; utilizando dobles cristales permanentes o sistemas de aislamiento de cristal y plástico. Los invernadetos de plástico, hinchables, con buen aislamiento y adecuadas propiedades de trasmisión de la luz, se ha visto que son capaces de reducir el consumo de carburante en un 20%, considerando las condiciones climáticas normales durante las horas nocturnas en el Reino Unidolo. Quizá lo más importante de todo sea el tomar medidas tan simples como el uso de apazatos o instnimentos de gtan precisión, ya que el mantenet la tempetatura solamente un grado centrígtado por encima de la necesazia puede ocasionar un consumo adicional de 58 tms. (2.860 GJ) de pettóleo por ha. y añolo. Existen también ptoyectos a largo plazo paza cultivar y lograt buenas cosechas en invernaderos con temperaturas más bajas, y tambíén el de situar los invernaderos en las proximidades de ls centrales eléctricas de manera que el calor que se desprenda de éstas pueda suministrar gran parte del calor necesitado. Eliminando todo consumo de cazburantes paza la calefacción del invernadero -unos 22 MGJ en 1972/7310- se ahorraría alrededor del 60% del input energético total paza la Agticultura del Reino Unido. 70 La reducción de la labor del atado y otras faenas agrícolas, ámpliando el uso de herbicidas, para controlat las malas hierbas, puede también aportar algo sustancial al ahorro energético. Aparte de otras razones no relacionadas con los costes de carburantes -como es por ejemplo e1 evitar daños al suélo causados por el empleo de maquinaria pesada durante el tiempo húmedo- las explotaciones agrícolas «sin laboreon pueden disminuir los inputs energéticos para el cultivo de cereales en unos 1.500 MJ/ha. o aproximadamente un 10% (ver Balances energéticos 17 y 19). Reducciones menores pueden conseguitse también en el secado de las cosechas, donde enormes cantidades de agua que antes se evaporaban gracias al sol, son ahora reducidas por el calor procedente de carburantes fósiles. Estos valores potenciales, se discuten directa o implícitamente en el Apéndice 9. El desafío a la Humanidad Ahorros de este orden resultan algo insignificante frente a las vastas dimensiones del problema alimentario mundial y sus interrelaciones con el problema energético. La adecuada alimentación de los 4.000 millones de petsonas que en la actualidad habitan en el Planeta queda insuficiente ante los 7.000 millones que se espera lo habitarán en el año 2000 (a no ser que las Guetras Mundiales, hambres y grandes epidemias, se encarguen de desmentir esta cifra), este hecho plantea un imponente desafío a la Humanidad, reto qúe desde luego trasciende de las simples cuestiones del suministro energético. En el Mundo se están cultivando ya suficientes alimentos como pata suministrar a la población mundial una dieta razonable y no es precisamente por falta de «juliosb pot lo que muchas personas no reciban el alimento suficiente o lleguen a morir de hambre. Como dice Colin Tudge «en general, los ptoblemas de la alimentación mundial tienen que ver con los intereses comerciales; a la equidad; la corrupción; los repartos medievales de tierras; la explotación de los países pobres por los ricos; y dentro de ambos la de las clases privilegiadas por las más desposeídas^so Nos enconuamos ante ptoblemas humanos, no tecnológicos. Ninguna técnica alteratá la injusticia que permite, pot ejemplo, que 55 millones de ingleses consuman, ellos solos, los alimentos prima71 rios suficientes pata abastecer a la mitad de la población del subcontinente indio, o utilizar casi una tonelada de petróleo pot cabeza para conseguir estos alimentos. Y así la tecnología, la ciencia y la economía occidentales, con su obsesión en analizat y desmenuzar los problemas en fracciones con la creencia de que, cuando todas las partes tesulten atregladas su suma aportatá la solución total, no puede quedar libre de culpa. Se describió en este trabajo un aspecto importante de cómo tuvo lugar este fallo de visión. Los sistemas de suministro de alimentos, ptopios de los países ricos, tepresentados aquí pot el Reino Unido, se volvieron altamente dependientes de importantes subvenciones para carburantes. Y si es vetdad que este apoyo energético mejoró la ptoductividad de la tierra y el trabajo, sin embargo la mejora y progreso globales no resultaron, desde el punto de vista del sistema alimentario en su totalidad, tan espectaculares. En términos de la utilización de los recutsos físicos, él mactosistema falló en armonizar los ptonósticos de millones de microdecisiones llevadas a cabo en las explotaciones agratias, en los laboratorios y en los talleres del mundo occidental. A1 mismo tiempo, el «éxito. aparente de estas micro-mejotas y la dominancia de los consejos y tecnologías occidentales fue lo que persuadió, a gran parte del Mundo de que el modelo occidental es también el mejor a seguir para conseguir el desarrollo. TABLA 8: CONSUMO DE ENERGIA EN SEIS ALDEAS DEL TERCER MUNDOf l Energía Bruta (GJ per cápita) Leria, estierml, desperdicios de cosechas Carburantes comerciales Mangaon, India Peipan, China 4,2 21,1 0,2 3,6 3,2 3,2 7,9 5,3 15,5 33,2 Kilombeo, Tanzania Batagawara, Nigeria Quebrada, Bolivia 23,2 15,7 35,4 0,05 - 3,2 3,0 3,5 0,75 10,6 26,4 • 19,5 49,5 Arango, México 15,1 3,8 7,6 65,4 72 38,9 Trabajo Mimales humano de labor otal Afonunadamente, una nueva visión acerca de otros caminos para el desarrollo, que son más prometedores y prácticos, están comenzando ya a surgir en las mentes de los científicos, planificadores y políticos de los países desarrollados. Métodos calcados de los occidentales, se está viendo que resultan cada vez más irrelevantes debido a sus altos costos, elevadas necesidades de recursos energéticos y características de ahorro de mano de obra, además de ampliar cada vez más la separación existente entre la utbe y el campo; entre los que tienen y están desposeídos. En vez de eso, se inició un nuevo interés en descentralizat el desatrollo tural, utilizando las tecnologías apropiadas en pequeña escala y en el contexto de la autosuficiencia. EI camtiio de paradigma parece estar sucediendo con gran rapidez y Ileva involucrado una inmensa y compleja transformación de los componentes técnicos, económicos, sociales y políticos. Incluso el más pequeño de estos cambios se escapa de los límites de esta monografía. Sin embargo, vale la pena el fijarnos por un momento en el sector de producción alimentaria y observar el importante y especial papel jugado dentro del mismo pot las nuevas ideas en cuanto al desatrollo energético en pequeña escala, de un tipo descéntralizado. Consideremos la Tabla 8 que muestra como se suministta la energía en seis ciudades o poblados ^prototípicos> del Tercer Mundost. Se trata de comunidades de agricultores. Casi toda la energía humana y animal se consume en la producción de alimentos, incluido el riego, y gran parte de los bosques, estiercoles, y restos de cosechas se emplean en cocinar dichos alimentos. Varios hechos sorprendentes surgen a simple vista. • Cuando se incluye el proceso de cocinar los alimentos, la energía utilizada en el sistema alimentario es comparable a la de Occidente. ^Con los carburantes citados, el consumo per-cápita para cocinat tesulta alrededor de unos 5-7 GJ pot año comparado con los 1-2 GJ necesarios en USA para las modernas cocinas de gas y los 3GJ para las eléctricas51. • Los carburantes pata cocinat los alimentos son recutsos que tienen en sí mismos un gtan valor -el estiercol como fertilizante, los residuos de las cosechas como abonos o alimentos para los animales, los bosques como capital ecológico. Presiones crecientes sobre la utilización de la madera como combustible es algo común en casi todo el Tercer 73 Mundo, donde el consumo anual llega a menudo a ser de 1 a 1,5 tm. por persona y año, lo que está creando setias amenazas ecológicas por la indiscriminada tala de árboles, con los consiguientes fenómenos de erosión y posterior desertización que esta talas acatrean. Las consecuencias pata la población humana también son amenazadoras. Conforme aumentan las presiones sobre los bosques, los costos de la madera se elevan mientras que las existencias disminuyen, muchas familias se ven fotzadas a ttatat de conseguir el combustible cada vez más lejos y con mayores dificultades, en busca de algo que pueda quemarse, llegando a desmantelat nuevas explotaciones y desacottezar los átboles. • La enetgía suministtada a part ^ de los alimentos o recutsos biológicos (exceptuando el poblado mejicano) es abrumadora y aplastante, con una eficacia en su utilización extremadamente escasa. Con animales de trabajo la conversión del carburante en energía útil es de unos 3-5 % más o menos comparado con el 25-30% obtenido con un tractor. De modo semejante, la conversión de carburantes en calor útil pata cocinat los alimentos resulta alrededor del 5% frente al 20-25 % en el caso de una moderna cocina de gas o elécttica. En todas estas comunidades, el adecuar la fuerza o energía al trabajo de la tierra y bombeo del agua para el riego (donde se dispone de ella), es algo de crucial importancia para aumentar los rendimientos de las cosechas y evitar las devastadoras sequías; mejorando de esta manera el bienestar de la población. Normalmente, no se dispone de esta fuerza o energía a causa del bajo rendimiento en el uso de la misma y de que la energía total de que se dispone es limitada. Apatte de la ^ostosá solución de suministrar más energía del exterior por medio de carburantes líquidos, gaseosos o de electricidad, la medida más sencilla y.utgente, para resolver la ecuación alimentos-enétgía és el encontrar métodos baratos para aptovechat más eficazmente la energía local disponible, es decir, utilizándola con rendimientos más elevados. A su vez, esto significa suministrar (almacenat) energía con elevados valores termodinámicos -por ejemplo, gas o hidtocazburos líquidos en vez de estiercol, madera o vegetales-. Se está viendo de manera cada vez más clara, que la bioconversión 74 (y la utilización directa de la energía solaz) nos ofrece el camino de salida para este problema. Las tecnologías y las prácticas son sencillas, y los tecutsos energéticos resultan ampliamente disponibles, tenovables constantemente (con precauciones) e inofensivos desde el punto de vista ecológico (con precauciones). Quizá y sobre todo, resulten de importancia paza la gtan mayotía de los países subdesatrollados que todavía viven en comunidades rurales diseminadas. Consideremos lo que una de las tecnologías más ventajosas -la conversión de desechos orgánicos en biogas (aproximadamente el 60 Metano)- significazía paza un pequeño y típico poblado en la India. Un estudio a fondo de esta cuestión52 toma como ejemplo un pueblo de 500 habitantes, con un promedio de 250 cabezas de ganado y 100 casas. Lo que puede considerazse como cifras normales en toda la India. Tales asentamientos constituyen el 60% de los 5,67 millones de ciudades de este País, el 25 % de sus 564 millones de habitantes, mientras que solo el 11 % de estas ciudades fueron electrificadas. Utilizando un rendimiento en la recogida de estiercoles de solo un 75 % y un rendimiento bajo de gas de 0,19 m3 por kg. de estiercol seco, el estudio estima que el output del gas sería de 2,4 GJ o de 668 kWh/día-30% más elevado que el 1,8 GJ (500 kWh.) pot día consumidos en la actualidad, en las mencionadas poblaciones, procedentes tanto de recutsos enetgéticos cometciales como no cometciales. Este outpút tesulta suficiente pata 10 equipos de bombeo para el riego (0,72 GJ/día), 5 industrias (0,18 GJ/día), una luz en todas las casas (0,24 GJ/día), er.ergía para cocinaz también en todas las casas (0,72 GJ/día), y 0,54 GJ/día paza usos diversos; además sobrepasa en casi 7 veces los 100 kW /hora por ciudad y día, cifra considerada como meta paza los programas de electrificación rural. El utilizar el biogas como recurso energético ayudazá así, en gran manera, a reducir el uso continuado de cazburantes no comerciales, con sus consecuentes pérdidas de fertilizantes y bosques debidas a la quema del estiercol y de la madera. Como también producirá unas 295 tms. de abonos orgánicos por población y año, cottespondientes a unas 4,4 tms. de nittógeno, el poblado podría esperar un rendimiento mínimo adicional de cereales paza el consumo humano de unas 22 tms. pot año. Unos gastos nacionales más bajos paza la importación de fenilizantes, fabricación de abonos en el propio País, e instalación de industrias y cazburantes paza los fenilizantes, resultan además, unos béneficios sustanciales a añadir. 75 Argumentos semejantes se aplican a otros tecursos enetgéticos tenovables que suministran carburantes concentrados o electricidad. Estos incluyen carburantes líquidos obtenidos a partir de materias vegetales por fermentación, destilación o pirolísis, que ponen en funcionamiento máquinas tales como cultivadoras o pequeños tractores; electricidad a partir de bio-gas o abosques paza el aprovechamiento de sus leñasn; paneles solazes convencionales para suministtaz agua caliente y calefacción en las áreas montañosas más frías; y dispositivos eléctrico-solazes tales como los ptopuestos pot los Meinels de lá Universidad de Arizona para concentrar la luz solaz en tuberías, almacenar la energía en montañas de sal o rocas, y extraerla según se necesite (día o noche) pata el funcionamiento de turbinas que suministren electricidad con un rendimiento de conversión total que llega a ser de hasta un 2S%53. Realmente, el estudio indio que se acaba de citar5z muestra que combinaciones convenientes de estos recursos energéticos propios, pueden genetar múltiples beneficios y efectos sinétgicos desde el punto de vista energético. Por ejemplo, el bajo rendimiento de gas que vimos anteriormente, puede ptobablemente duplicarse aumentando la supuesta temperatura invetnal de 15° C a 27° C, quizá gracias a unos sencillísimos reflectores o absorbentes solates, acoplados con un módico almacenador de calor pata días nublados. Algo más sorprendente, 0,40 has. de una plantación de jacintos de agua con rendimientos de 1.200 tms. de plantas por año podría suministrar 7,6 tms. de proteínas comestibles más 0,59 GJ pot día, de gas adicional después de la fermentación en el digestor, además de una cantidad adicional anual de 1,23 tms. de nitr ^eno, 0,66 tms. de fosfato y 1,5 tms. de potasio como lodos residuales del digestor. Otros muchos ejemplos de tales combinaciones energéticas, están apazeciendo actualmente en la bibliografía, prometiendo cada una de ellas romper el nudo de la actual escasez de enetgía y de escasez de producción del sistema alimentazio. EI desazrollo y difusión de mecanismos energéticos como los citados, a través de las áteas rurales del Tetcer Mundo encierra un enorme desafío. Quizá el desafío principal estribe en agudizaz más nuestro conocimiento sobte estos temas. Muchos de los costos de estos mecanismos se han realizado según los cálculos económicos convencionales y se encontraton como deseables o solo marginalmente atractivos compazados con las de tecnologías proveedoras más convencionales. 76 La cuestión consiste en sabet si el cálculo convencional con su tendencia a no tener en cuenta el futuro y su falta de previsión de incluir muchos factores importantes, tesulta set el modelo más adecuado. Nadie ha explotado todayía a fondo la multitud de consecuencias y transformaciones que desarrollos de este tipo podrían ttaet consigo -por lo menos nadie lo ha hecho hasta el ptesente sobte la producción de alimentos, las rentas tutales, el bienestar y el autotespeto-, la vigotización de la vida en los pueblos y sobre las emigraciones masivas hacia las desbordantes ciudades del Tercer Mundo. En resumen, sobre la totalidad del proceso de desatrollo. El que la energía sea la adecuada puede que no resulte la única pieza esencial en el mosaico del desatrollo para lograr salir de la pobreza, pero por lo menos una investigación a fondo del problema, es algo que debetía haberse llevado a cabo hace mucho tiempo. 77 Apéndice.r APENDICE 1: LAS INDUSTRIAS DEL REINO UNIDO PARA LA PRODUCCION DE ALIMENTOS EN 1968 lA. Agricultura La Tabla A1 considera el input enetgético pata la Agticultuta del Reino Unido en 1968: 378 MGJ o el equivalente a 8,7 millones de tms. de petróleo, o e14,G% del consumo bruto energético primatio del País3s. EI primer sub-total abazca todos los cazburantes y la electricidad adquiridos directamente por las explotaciones agrazias y empresas de productos hortícolas35. EI estimaz que solo el 60% de la electricidad fue paza la actual producción agrazia, quedando e140% para usos domésticos, es un cálculo aprozimado, basado en la cifra dada por Bayetto31 del 60% para Inglaterra y Gales durante el período 19721973. El considerar que solo el 50% de la gasolina destinada a motores tenía como finalidad las labores agrícolas resulta solo una suposición, aunque posiblemente bastante razonable: virtualmente no parece que exista ninguna infotmación relativa a los kilcimettajes recorridos por los coches y otros medios de transporte de las explotaciones paza negocios o asuntos privados. El sub-total de fenilizantes se calcula a pattir de las toneladas de nuttientes suministradas (el promedio para 1967 / 68 y 1968 / 69)34 y los inputs energéticos por tonelada (Apéndice 6). La maquinaria y aotros inputsD sub-totales se basan en cálculos sobre el input energético/output en libras, de las industrias del Réino Unido en 1968 descritas en el Apéndice 4. Estos datos se multiplican por las adquisiciones realizadas por el sector agrícola a estas industrias, calculadas a panir de las secciones periinentes de las Tablas Input-Output del Reino Unido en 196854: la atabla de artículos de 81 TABLA A1: INPUTS ENERGE77COS DE LA AGRICULTURA, R. U. 1968 Carbón Coke Electricidad 60% para usos no domésticos Pettóleo: unidades de enetgía diesel o gas-oil fuel-oil petróleo vaporizado lubrificación 50% motor gasolina Pettóleo: calefacción, secado, etc. (Total petróleo) Cantidad Energía (MGJ) 0,172 Mt 0,10 Mt (3,444 TWh) 5,62 3,31 (49-59) 2,066 TWh 29,75 0,645 Mt 33,79 0,034 Mt 0,060 Mt 0,011 Mt 0,111 Mt 0,484 Mt 1,70 3,18 0,91 6,01 24,15 (1,345 Mt) Energía directa total Fertilizantes: N P K cal (69,74) 108,42 0,783 Mt . 0,482 Mt 62,64 6,75 0,459 Mt 4,20 Mt 4,13 8,40 Tótal fertilizantes 5,924 Mt 81,92 Maquinatia básica no básica Total maquinaria 111 M^£ 46,8 Mae 157,8 M£ 21,29 10,48 31,77 Agroquímicos Edificios Varios Transpotte, servicios, etc. Total otros inputs 26 M£ 87,6 M£ 26,1 M£ 194,1 M£ 333,8 M£ 8,48 22,77 4,28 16,28 51,81 Piensos: industrias alimentarias impottación de alimentos impottación barcos Total piensos 15,13 (7,01 (7,01 15,13 Mt Mt ) Mt ) Mt 51,3 35,2 18,0 104,5 TOTAL GLOBAL (redondeado) ^ 378 MGJ Output total: 2380,2£M. Input/Output: 159 MJ/£ consumoD paza las adquisiciones de la producción interna del País (Tabla 8 de la Refetencia 54), los análisi ^ de los artículo ^ de consumo imponados (Tabla C) y la matriz de la inversión de la instalación y 82 maquinaria (Tabla Q). Un análisis más detallado de estos subtotales aparece en la Tabla A2. EI sub-total final, para los piensos, se basa en dos fuentes. Los inputs energéticos debidos al trabajo realizado por la industria alimentaria se derivan del Apéndice 1B. La energía para cultivat y ttansportar piensos importados se basa en el Apéndice 8 y tesulta ser solo un valor aproximado. Para algunas importaciones de productos utilizados como piensos, que se cultivan también en el Reino Unido (ceteales, etc.), los inputs energéticos por tonelada pueden considerarse iguales a los de la Agricultura del Reino Unido. Las únicas altetnativas posibles consistían o bien en ignorat completamente estos inputs o realizar análisis energéticos detallados para cada ptoducto agrícola importado de cada país exportador. EI considerar equivalentes las importaciones con la producción del Reino Unido, posee, sin embargo, cierto valor, si se desea tasar el impacto de sustituit las importaciones por el aumento de la productividad del Reino Unido. La Tabla A3 extiende el cuadro enetgético de 1968 a otros años, de 1952 a 1972. Los carburantes, electricidad y fertilizantes se calculan del mismo modo que en la Tabla A1; es decir, utilizando estadísticas oficiales de dichas cantidades en tms. y aplicando los inputs energéticos por tonelada de 1968. Este último procedimiento no resulta completamente válido, ya que los inputs para los fertilizantes, carburantes y electricidad suministrados descendieron realmente de algún modo, a lo largo del período de los citados 20 años. Por ejemplo, en 1955 el rendimiento termal medio de las centrales eléctricas era de 24,2 % con un 11 % de pérdidas de distribución (teniendo un rendimiento total para estos dos factores del 21,5%); en 1968 las cifras equivalentes eran de 28,3% y 9% (obteniendo un 25,7% total); y en 1972 eran 29,4% y 8,3% ( resultando un 27,0% total)33. La cifra dada para la electricidad en 1955 debería elevarse a partir de entonces en un 20% aproximadamente y la de 1972 tendría que reducirse en un 10%. Sin embatgo, posiblemente los otros inputs nó hayan cambiado en estas ptopotciones, así la Tabla A3 -que en tigot muestra los cambios del input con.riderando la.c tecnologíut y práctica.r a lo largo de todo 1968- resulte probablemente de una exactitud superior al 10%, aurique con la salvedad que indicamos. Otros inputs, incluidos los piensos, se basan en datos de la Annual Fatm Price Reviews33, de las Tablas Input-Output de 196356, y de las informaciones obtenidas de la Feedstuffs Manufacrurers Association57; todas 83 TABLA A2: INPUTS ENERGETTCOS INDIRECTOS PRINCIPALES, EN LA AGRICULTURA, R. U. 19G8 Compras de: Maquinatia agtícola Tractotes Bombas Otras máquinas no eléctricas Máquinas eléctricas Madeta + muebles etc. Distribución capital según compras Total capital compras Maquinaria agrícola Tractotes Neumáticos Vehículos de motor Otra maquinatia_ , bienes metálicos Total maquinaria secundaria Fatmacéuticos Pintura Jabón + detergentes Otros qúunicos Total químicos Compras (M£) 54 36 1 3 1 1 Considerados (MJ/£) Energía (MGJ) 215 217 142 129' 176 91 11,61 7,81 0,14 0,39 0,18 0,09 71 15 111 17,3 5,0 8,2 215 217 337 1,07 21,29 3,72 1,09 2,76 2,4 234 0,56 13,9 46,8 7,8 2,3 0,7 15,2 26,0 mix 2,35 10,48 2,67 1,18 0,27 4,36 8,48 342 512 388 287' 4,7 624 2,93 Cemento Madera Ottos materiales de consttucción Consttucción Total edificios Varios (canteras, textiles, vestidos, embalajes, pinturas, comunicaciones) Agua Ttanspone por tren 2,1 21,7 18,6 40,5 87,6 1500 91' 517 126 3,15 1,97 9,62 5,10 22,77 26,1 6,0 3,7 mix 296 185' 4,28 1,78 0,68 Transpone por carretera Otros transpones 28,6 5,3 120' 76' 3,43 0,41 Servicios vatios Disttibución Total transportes y servicios 54,0 9G,5 194,1 58' 71 3,13 G,85 16,28 TOTAL GLOBAL 491,6 (171) 83-58 Ladtillos, etc. Fuentes y Notas: las compras a partir de las Tablas Inpuc-Output para el Reino Unido, 196854. Todos los datos tvfJ/libra a partir de Chapman3ó excepto los ' anículos, que son de Wtightss 84 TABLA A3: INPUTS ENERGET7COS EN LA AGRICULTURA, R. U. 19521972 (UNIDADES: MGJ) . 1952 1960 1965 1968 1970 1972 Carbón + coke Petróleo - unid. energía - secadores 16,5 59,5 5,7 13,6 51,4 5,2 10,2 43,) 20,4 8,9 45,6 24,2 7,3 49,0 24,8 4,7 56,9 30,5 Electricidad 60% Totalfuel + energía 6,1 87,8 19,1 89,3 28,2 102,5 29,8 108,4 32,7 113,8 34,7 126,8 Fertilizantes: N 14,7 32,8 45,9 G2,6 67,4 73,8 5,3 8,0 10,5 8,0 10,8 8,0 10,9 8,4 10,9 8,8 10,8 8,9 28,0 51,3 64,7 81,9 87,1 93,5 P+ K cal Total fettilizantes 31, 8 Maquinaria 51,8 Edificios, servicios, etc. Total ocros inputs ( 50,0) (60,0) (72,1) Piensos (75,5) (86,5) (85,7) 104,5 (106,3) (94,0) TOTALGLOBAL (redondeado) 241 287 325 83,6 378 (88,3) (95,9) 395 410 TABLA A4: VALORES DE INDICES, DE LOS INPUTS ENERGETICOS, £ PRODUCTO Y HOMBRES-AÑO, R. U. 1952-72 (1952 - 100) 1952 1960 1965 1968 1970 1972 Indice input enetgético Indice £ producto 100 100 119 120 135 138 157 143 164 152 170 164 Indice de trabajo hombre-año equivalente 100 ' 81 67 S9 S6 54 100 99 98 110 108 104 100 147 201 267 293 315 100 148 206 242 271 304 índice energía £ producco índice enetgía hombre-año índice £ producto hombre-año 85 ellas recutren otra vez a los datos sobre inputs enetgéticos por libras y por tm., referidos al año 1968. EI propósito ptincipal de la Tabla A3 no es el de ttazar un cuadro exacto si no el de compataz, aunque de manera aproximada, como el cambio de los inputs energéticos, se ha relacionado con la mano de obra en la Agricultura y los outputs monetarios. Estas comparaciones se hacen en la Tabla A4 sobre un índice base (1952 = 100). Los datos pata la energía provienen directamente de la Tabla A3. Los datos para el producto en libras están tomados del «National Income and Expenditure 1963-1973Aa^. Mienttas estos datos se refieren a la «agricultura, bosques y pesca^ como la agticultuta consume exactamente el 95 % del output total paza el. grupo, tanto en el año 1963 como en 196854• s^ la aproximación puede hacetse con un error menot o igual al 10%. Los datos de la mano de obra no se toman de ninguna cifra bruta de las utilizadas comunmente (tales como uabajadores fijos, o fijos y temporeros) si no que se basan en consideraz todos los trabajadores (agticultor y su familia, empleados fijos y tempoteros, empresatios, socios... etc.), y las horas semanales ttabajadas por cada grupo. Las estimaciones comprenden alguna extrapolación fuera del período 0 1960-69 pero, por lo demás, se basan en dos estudios detallados de la mano de obra agrícolass, s^. La Tabla AS ofrece un cálculo detallado pot los outputs de los alimentos paza con.rumo humano, de la Agticultura del Reino Unido en 1968, y con toda probabilidad resulte otra vez exacto solamente en un + 10%. Sin embargo, está muy ptóximo a los 138 MGJ cifra estimada por Blaxters paza los ptimeros años de la década de los 70. EI peso en toneladas del output contenido en los alimentos paza cada producto, se basa en estadísticas oficiales34 y no tienen en consideración los desechos y desperdicios generados, la utilización de cultivos para semillas, y sobre todo, .el uso de las cosechas paza consumo animal. A pattir de estos outputs se deduce un «porcentaje de desechoD teniendo en cuenta los típicos e inevitables sobtantes del consumidor en la prepazación de los alimentos (vet Apéndice 28). 1B. Industrias de la bebida y de la alimentación La Tabla A6 muestra el input energético estimado paza la industria alimentatia y de bebidas pata 1968: 527 MGJ o el equivalente a 12,2 millones de tms. de petróleo, o el 6,4% del consumo bruto 86 TABLA AS: OUTPUTS AGRICOLAS PARA CONSUMO HUMANO, R. U. 1968 Output Pérdidas rnmestible Proteínas Energía (Mc) (103t) (MGJ) 0 0 0,005 1,062 0,34 106,2 ^ 0,06 15,48 0 0 1,315 0,063 138,4 7,61 17,15 1,06 2,445 252,6. 33,75 80-72 12,22 (%) Trigo, malta + exportactón Harinas Cebada, consumo + exportación Copos de avena Total cereales 3,844 Patatas Remolacha, azúcar refinada Remolacha Zanahorias Ch^ivias Nabos Cebollas Tocal raíces + bulbos 25 0 20 4 26 16 3 0,897 0,080 0,421 0,036 0,099 0,101 5,478 ^ 1,44 2,95 0,61 0,79 0,91 87;42 14,81 0,15 0,40 0,07 0,07 0,10 27,82 Coles de Bruselas Repollo Coliflor 25 30 30 0,140 0,410 U,203 5,04 6,15 6,90 0,19 0,48 0,21 Guisantes (vainas) Judías 0 75 0,257 0,009 14,91 0,65 0,68 0,03 Semillas + verduras 14 0,061 0,67 0,04 19 0,427 6,20 0,25 1,507 30,52 1,88 0,88 2,04 Otras verduras: tomates, lechuga, apio, puerto, setas, pepino... etc. Total verduras (eacepto raíces) Frutas Carne vacuno' vísceras CWino + cordero, carne v^sceras Cerda,carne v'iscetas aves Total carae 17 0,510 17 0 0,762 0,084 112,8 12,6 9,99 0,36 17 0 15 ^ 0 30 0,204 0,034 0,743 0,037 0,378 26,5 5,1 89,2 5,6 78,6 2,83 0,14 12,71 0,16 2,28 2,242 330,4 28,47 87 Pérdidas (%) Huevos, pato + gallina (13.550 millones) Leche,líquida Leche,polvo condensada crema mantequilla queso Total leche + produttos látteos TOTAL GLOBAL (redondeado) porcentaje, de animales + productos ^ Output comestible (Mt) Proteínas Energia (lO3t) (MGJ) 12 0,696 82,8 4,61 0 0 0 0 0 0 7,932 0,114 0,308 0,069 0,054 0,119 277,6 40,1 25,3 1,9 0,3 30,20 21,58 1,71 4,00 0,55 1,67 2,05 8,596 375,41 31,56 21,47 53,7 1160 68,0 130 49,7 ' Todo en peso canal. enetgético primario del País. Esta cantidad se refiere solo a«trabajo realizadoA por las industrias, incluyendo sus anejos de transporte de alimento y empaquetado de los mismos, y sin tener en cuenta la enetgía requerida pata el cultivo de los alimentos (o para cultivar, procesaz, y ttanspottar los alimentos importados por el Reino Unido). Todos los datos de la Tabla A6 provienen del Census of Production de 1968 así como del análisis de Chapman36, basado er, dicho censo, y descrito en el Apéndice 4. La columna final que refleja la energía total necesaria paza producir una cantidad física (tms., litros, etc.) es el agregado bruto de cada industria y debe ser consultado por lo tanto, con precaución. Sin embargo, cuando una industria se dedica de manera predominante a ptoducir un ptoducto, tal como es el caso del pan, azúcaz, leche y cerveza, el agtegado resultá probablemente con un valor muy aproximado a la cifra real exacta. Como las industrias alimentarias y de bebidas son los prin ^ipales clientes de la Agricultura -principalmente los piensos- se necesita un análisis adicional pata repattir el input energético de cada industria enue sus principales comptadotes. Estos son: (1) ottas industrias de la alimentación y bebidas; (2) consumidores pazticulazes y servicios públicos,.ya sea directamente o a través de intermediazios; (3) exportaciones; (4) ottas industtias; y(5) Agticultuta. ELpunto (1) pue88 TABLA A6. INPUTS ENERGETTCOS BRUTOS PARA LA INDUS7RIA DE ALIMENTOS Y BEBIDAS, R. U. 1968 ^ Input Input energé- por £ de outtico put bruto Según porcentaje de input Input por unidad de output Transporte Envasado 57 31 47 30 82 62 35 53 11 7 12 5 5 5 4 9 15 20 14 4 4 5 28 25 144 128 153 20 48 28 3 4 4 20 31 43 2,99/t 4,22/t 18,77/t 42,80/t 8,25/t 7,56/t 49,00/t 7,06/t 0,073/1 13,60/t 16,47/t 27,66/t 66 44 44 10 7 27 25 19,70/t 10,39/t 180 21 9 35 18,60/c 0,019/1 Industria: (MGJ) (MJ/£ ) Directa Grano molido Alimentos animales Pan + harina Galletas Azúcar Aceites y grasas Cacao,chocolate Leche + productos 19,90 40,95 57,01 27,75 32,62 12,92 44,41 50,95 68,8 104 148 175 157 113 149 87,5 Margarina Féculas + varios Frutas + hortalizas Tocino, pescado + productos cárnicos` 5,89 34,40 56,09 33,34 Todos los alimentos 416,23 (GJ) Bebidas no alcohólicas' 23,01 Cervezas' S5,62 54,4 59 8 14 8,73/t 0,009/1 Licores' 29,09 - 48 3 38 0,042/ 3,14 99 31 12 36 grado 1 15,15/t 47 7 25 45 7 25 Vinos + sidra` 0,017/1 Todas las bebidas 110,86 Todos los alimentos 527,1 y bebidas Oucput total 1968 =£ 4418 millones. Input/Output = 119 MJ/£ Fuentes y Notas: Chapman3^ (vet Apéndice 4): los attículos señalados con un ' calculados por el autor a partir de los datos de Chapman y del Censos of Production. No te incluye la energía pasa cultivar p^oductot brutor. El pan, azúcar, leche líquida y cetvcza dan cuenta del 82-85 % del oucput en toneladas en sus rapcctivas industrias. 89 de pasatse por alto, ya que las transacciones intra-industriales ya se justificaron. Por lo tanto, los inputs tienen que dividirse según una base propotcional entre (2), (3), (4) y (5). Los datos utilizados fueron sencillamente los precios de las ventas en libras registrados en las Tablas Input-Output de 1968 en el Reino Unido (industria-industria básica, Tabla D)54. Se trata de un método aproximado, pero es el único posible con los datos de que se dispone. De todas formas, no se trata de una aproximación sin fundamento, ya que existe probablemente una gran conexión entre el precio de venta total de un producto y el trabajo que sobte dicho producto realiza la industria correspondiente, y por lo tanto, entre el ptecio y él input enetgético. Los resultados de estas patticiones o repartos se teflejan en la Tabla A7, y el total para la Agricultura -51,3 MGJ- se supone que en su totalidad está dedicada a los piensos. 1C. Distribución La Tabla AB muestta una estimación del input energético para los intermediarios del Reino Unido en 1968: 451 MGJ, o el equivalente a 10,4 millones de tms. de pettóleo. EI Input Enetgético/Output en libras, es de 71 MG/libra, en donde el output se tefiere al valor añadido y no a las ventas en bruto. El primer sub-total para carburantes directos y electricidad se deriva de las Input-Output TablesS4 del Reino Unido, y el precio del carburante y las cantidades en tms. , calculadas según los datos del Digest of UK Energy Statistics35. Todos los demás sub-totales se basan en el método trazado pata las compras indirectas realizadas por el sector Agrario ( Apéndice lA). En cuanto a las industrias alimentarias, el input energético debe repartirse entre los ptincipales clientes según sus patticipaciones en las comptas totales a los intermediatios54. Estos clientes, con sus participaciones expresadas en % son: consumidores patticulares del Reino Unido (76,9%); exportaciones (6,1%); industrias alimentarias y de bebidas (3,0%); otras industrias (12,4%); y Agricultura (1,6%). Hay que señalat que las patticipaciones para la agricultuta y las industrias alimentarias y de bebidas han sido ya cargadas a estos sectores en las Tablas A2 y A6. Con vistas a un estudio de los sectores energéticos alimentarios 90 TABLA A7. INDUSTRIAS DE ALIMENTOS Y BEBIDAS: REPARTO DEL INPUT ENERGETICO BRUTO ENTRELOS SECTORÉS OUTPUT, R. U. 1968 AgriOtras Industrias de la alimen- Input Consumo Expoa. industrias cultura tación y bebidas: energético R.U. Grano molido Alimentos para animales Pan + harina Galletas Azúcar 19,90 40,95 16,90 5,90 0,90 - 0,28 - 1,82 35,05 84 , 76 70 , 00 3 , 27 1 , 13 10,36 32,62 27,83 2,92 0,59 1,28 Cacao, Choc, etc. 44,41 37,64 5,48 0,45 0,84 12,92 180,67 23,01 87,85 527,1 5,08 166,74 20,72 55,17 406,0 1,07 10,30 1,05 28,88 53,9 6,59 3,07 3,80 15,9 0,18 0,56 1,24 51,3 Aceites y grasas Otros alimentos Bebidas no alcohólicas Bebidas alcohólicas Totales (redondeado) del Reino Unido la fracción que interesa es e176;9% correspondiente a los consumidores pazticulares del Reino Unido. Esto representa un total de 347 MGJ. Queda ahora el repattir esta cantidad entre ventas de alimentos y no alimentos. Como las estadísticas de distribución son extremadamente limitadas (en cualquier caso lo son para estos propósitos) esta partición puede hacerse solo dé un ^modo aproximado. El método utilizado, es sencillamente realizat la partición a paztir de los valores en libras de las ventas totales. En 1968, justo por encima del 40 % de todas las ventas que realizaron los establecimientos comerciales se clasificó, sobre una base de valor en libras, como alimentos y bebidas54. De acuerdo con e.rto, e! input energético a.rignado a alimento.r y bebida.r e.r de 139 MGJ, o el equivalente a 3,2 millones de tms. de petróleo, o el 1,7% del consumo bruto energético primazio del País. Como puede verse clazaznente, esta cifra no resulta muy satisfactoria. Las necesidades energéticas para vender la infinita gama de mercancías y productos disponibles en las tiendas, restaurantes, hoteles... etc., deben variaz enormemente de unas a otras. Incluso dentro de la venta de alimentos, los inputs energéticos por tonelada o libra tienen que ser muy distintos, con productos, de un lado de rápida rotación, y de otro, digamos, un filete que se ha transportado a través 91 TABLA A8. INPUT ENERGETICO BRUTO PARA LA DISTRIBUCION, R. U. 1968 Compras: Coste Considerados (aem) (MJ^) Derivados del petróleo, para: fuel + gas/oil para calefacción pata vehículos Gas Electricidad Total carburantes y electricidad 18,2 6,1 13,7 118,0 156,0 Consttucción + matetial de manejo mecánico Maquinaria oficina Ottas máquinas no eléctticas Telecomunicaciones y electricidad Construcción Total compras principales 13,0 7,0 36,0 51,0 78,0 185,0 Envasado: Lata^ y cajas madera papel + cattón papel + productos de cartón Otros productos P+ C Total envasado Jábón + detetgentes Servicios eléctricos Vehículos de motor Bienes metálicos Alfombtas textiles Total varios Agua Ttansporte ferrocarril Tiansportecarreteta Otrostransportes Comunicaciones Servicios varios Total trarisportes, servicios, etc. TOTAL GLOBAL . 2.200 760 1.850 1.600 137 106 129 83 126' 92 40,0 4,64 25,4 188,8 258,84 1,78 0,74 4,64 4,23 9,83 21,22 20,8 15,1 441 90,7' 9,71 3,37 14,4 621 8,94 84,4 396 33,42 7,8 142,5 209' 1,63 54,53 21,9 62,7 4,8 10,5 79,9 179,8 388 mix 234 mix mix 8,50 9,21 1,12 1,08 23,69 43,60 16,4 296 4,85 65,8 355,9 185' 120' 12,17 42,71 1,9 76' 0,14 97,0 165,4 702,4 36,7' 58' ^,56 9,59 73,02 1.365,7 Total output 1968 =^ 6327,9 millones. Input/Output = 71 MJ/ae . Fuentes y notas: Como Tabla A6. lnput energético (MGJ) 451,21 del País, refrigerado durante meses, envasado y vendido en un gran supermercado provisto de gran iluminación y calefacción. 1D. Mano de obra total en la producción y distribución ^ de alimentos en el RU La Tabla A9 pone de manifiesto un cálculo aproximado de la mano de obra total (directa e indirecta) relacionada con la producción de alimentos en el Reino Unido durante el período 1968-1970. La mano de obta directa en la Agricultuta cotresponde a los trabajadores fijos y no fijos33. En estos últimos se incluyen los trabajadores contratados para las tateas estacionales y los accidentales o eventuales, pero no incluyen las esposas de los agricultores, y de este modo las conclusiones a las que se llega son bastante ettóneas. Una observación detallada de la mano de obra agrícolas^ que se ajuste a todos estos factotes, incluyendo el promedio de horas de trabajo por semana, sugería, que pata Inglatetta y Gales, el input total de ttabajo directo era aproximadamente de 140 millones horas-trabajador en 1970 ó 570.000 trabajadores con una base de 40 horas semanales. Pata el Reino Unido considerado en su totalidad, la cifra equivalente podría llegar a ser de 700.000 trabajadores. La mano de obta ditecta en las industrias alimentarias y distribución incluye solo los trabajadotes que tienen un puesto de trabajo41. La mano de obra indirecta en industrias de soporte, se calculó a partit de las Input-Output Tables del Reino Unido para 196854, que muestran el total directo e indirecto de las adquisiciones monetarias realizadas por cada industria a panir de todas las demás con las que se relaciona. Pata cada industria suministradora, las ventas se computaron como una fracción de las ventas totales. Esta cantidad se multiplicaba por la mano de obra total (directa) de la industria. Los datos, son por tanto, una sub-estimación dé los reales, ya que ignoran la mano de obra indirecta de las industrias suminisuadoras. La mano de obra que entra en la distribución es e141 % de los tótales verdadetos, ya que esta es la proporción de los intermediatios que abastecen a la industria alimentaria y de bebidas. La mano de obta inditecta en los servicios de mantenimiento es ftancamente aproximada. Bajo aservicioss, la ^ tablas input-output parecen incluir muchas categorías tales como enttetenimientos, edu- 93 TABLA A9. TRABAJO DIRECTO E INDIRECTO EN EL R. U. PARA LA PRODUCCION Y DISTRIBUCION DE ALIMENTOS Directo Indireao (Mile.r de trabajgdore.r) Agricultura Industrias abastecedoras Servicios abastecedores 1970 1968 1970 MAFF & ARC' Tota1 agricultura 1970 Industrias alimentarias (exc. bebidas y tabaco) Industtias abastecedotas Servicios abastecedotes Total industrias abastecedoras Distribución al por mayor y al detalle (incluidas bebidas y tabaco) Industrias abastecedotas Servicios abastecedores 430 190 22 430 1970 1968 1970 22 234 664 319 67 386 1087 162 47 ' 701 701 1970 1968 1970 Total 1014 Distribución total 1014 209 1223 Producción y distribución de alimentos 2145 829 2974 ' MAFF - Mimistry of Agriculture, Fisheries and Food; ARC - Agriculture Research Council. cación y medicina con gran cantidad de mano de obra, dentro de la cual la ptoducción alimentatia cuenta en escasa ptopotción. Se hizo el cálculo, pot lo tanto, tomando el output financieto de cada gtupo industrial (Agricultuta, alimentos y bebidas, distribución) como una fracción del Producto Bruto Doméstico en 196854 y acomodando después estas ptopotciones a las personas empleadas en asegutos, bancos, finanzas y negociosD, aservicios ptofesionales y científicos^, «contabilidad^ y«otros servicios profesionales y cient^cos^. La mano de obra pata estos cuatto grupos totalizó 1.155.000 ttabajadores, de los cuales, 136.000 (11,9%) están asignados a las mencionadas industrias de producción de alimentos. El total de 2.974 millones representa el 12,7% de los trabajadores empleados en el Reino Unido durante 1968 y el 5,4% de la población del Reino Unido (55,0 millones). 94 APENDICE 2: CRITERIOS Y METODOS DE LOS ANALISIS ENERGETICOS 2A. Inputs EI fin principal del análisis energético es el calculaz la cantidad total de energía necésaria, directa e indirectamente, para suministrar un producto o un servicio a un consumidor final. Por acuerdo común^^, a esto se le llama Demanda Bruta de Energía (en el texto apatece con las siglas GER correspondientes a Gross Energy Requirement), aunque el tétmino simplificado de «input energético^ es el utilizado a lo latgo de este ttabajo. Desgraciadamente, existieron considerables confusiones y controversias sobre las definiciones y criterios utilizados, por lo que resulta importante aclazaz aznbos conceptos y establecet de manera clara los criterios acordados y utilizados en este trabajo. El Ilevar esto a cabo, conducirá a una breve discusión de los métodos de investigación y fuentes de datos que pueden resultar de ayuda a los no iniciados en este campo. Paza calculaz un GER o input energético, se intenta calculaz una cantidad, semejante en cuanto al concepto, peto complementaria en cuanto a la clase de lo que la noción económica entiende por «costoD. El costo valora una ciena suma de recursos físicos reales o potencialmente aúcilesb (trabajo, materiales, cazburantes, tierra... etc.) calculadas en la actualidad como ^ que se necesitan paza producir un producto o un servicio dado. EI asumir un número cazdinal detrás de este concepto se debe a la existencia de otros usos competitivos en cuanto a estos recursos. Si no existiesen tales utilizaciones alternativas (en la actualidad o en un futuro próximo) entonces el concepto del costo no tendría ningún sentido. EI análisis enetgético ttansfiere sencillamente este concepto a un 95 simple recurso físico aenergéticob. Pero no a cualquier forma de enetgía. Como el acostoD de los economistas, la energía debe ir acompañada de un avalor apéndiceA. Debe tener una utilización actual o, en potencia como recurso y utilizándolo debe contraerse una oportunidad de costo, en el sentido, de que después, no puede usarse el recurso de otro modo. Existe una fuerte predisposición en esta definición, hacia todo lo concerniente al agotamiento de los recutsos, lo cual resulta positivo. Quedan excluidas, de manera obvia, un amplio número de fuentes energéticas de arecursos petpetuosA, particularmente la inagotable energía de las radiaciones solares y de los motores caloríficos de la atmósfera y del océano que el sol pone en movimiento. EI no tomarlas en consideración no se'debe a que no puedan ser utilizadas o explotadas como formas útiles de energía, si no, que al hacerlo, al no agotarse las existencias, apenas si se puede entonces detetminat lo que entendemos por acoston. En cuanto a los recursos energéticos alimentarios, la exclusión de la energía solar como un input, puede chocaz a muchos lectotes -especialmente a los ecologistas- y parecetles una monstruosa hetejía. Fxisten, sin embazgo, buenas razones paza actuaz de este modo, aparte de la ya citada de la inagotabilidad del sol como fuente energética. Los ttes argumentos más importantes son: 1. Uno de los principales objetivos de este estudio es el evaluaz el consuino de cazburante necesario paza suministrat al hombte la energía y alimentos. La energía solat no es un cazburante, en cuanto al concepto tradicional que de este tenemos, como fuente de energía técnicamente aprovechable. 2. Si la energía solat se convierte alguna vez en un recurso aprovechable (electricidad) técnicamente utilizable a gran escala -como seguramente ocuttirá- esto tendrá lugar ocupando supe^cie de sueló. Si este suelo se empleara en producir alimentos, se establece una relación entte la energía solat u output energético y los alimentos producidos u output alimentazio. En ambos casos, el input solar permanece constante, y puede ser ignorado en las dos comparaciones. Si el mecanismo solat no ocupa supetficie de suelo útil (por ejemplo, grandes paneles solazes colocados encima de tejados), no tiene entonces competencia alguna y. carece de significado por tanto el acosto del suelo^. 9G 3. A1 compazaz la enetgía solaz con catburantes o trabajo humano o animal como inputs enetgéticos, pata la ptoducción de alimentos, el input solar azrollazía completamente a los demás inputs. El análisis enetgético se teducitía entonces al estudio de las conversiones fotosintéticas de la energía solaz en energía alimentazia, y no podría aclatar nada acerca de los efectos del empleo del cazburante y caznbio de métodos en la producción de alimentos. Cazburantes fósiles tales como el catbón, petróleo y gas natural entran claramente dentro de la definición. Más exactamente, solo se consideran denuo de la misma aquellos cazburantes que son extraibles de sus yacimientos, ya que aquellos que permanecen Rin situ^ ^ inalcanzables no tienen ninguna alternativa claza de empleo en la actualidad. Si Ilegase a ser posible su extracción, lo sería gracias a nuevas tecnologías que tendtían a su vez nuevos inputs y outputs enetgéticos; en este caso se necesitaría tealizaz un nuevo análisis. Este acuerdo convencional presenta también la ventaja de acomodazse a los criterios utilizados en calculaz los consumos nacionales de energía primaria. En ambos casos, el tecutso primazio es el carburante extraído de1 suelo, que resulta igualaz también la disminución de las existencias. Los cazburantes nucleazes se analizan en este trabajo en relación con su contenido calor'ifico y extraído por los reactores ya existentes, debido que es la mejor respuesta paza la sustitución de ouos cazburantes así como paza los problemas de contaminación térmica. La energía hidroeléctrica se considera en relación del calor equivalente de la electricidad suministrada, siguiendo la ptáctica de las Naciones Unidas así comó las estadísticas energéticas de la OECD. Esto evita el empleo de acatburantes fantasmasb (es decir, el evaluaz el carbón o el petróleo que debetía quemazse en una cenual eléctrica convencional paza suministtat el mismo output elécttico). Según convenio, todas las corrientes energéticas deberían exptesazse de manera ideal en términos de energía libre termodinámica, pero el llevat esto a cabo resulta una tatea inmensamente difícil. En vez de esto, muchos investigadores -como en este caso- transforman los carburantes en sus calores brutos de combustión (es decir: entalpía). Los trabajos humano y animal son también inputs energéticos para la producción alimentatia. En este estudio, se tratan de dos modos 97 distintos. Cuando se consideran sistemas agrarios altamente industrializados, dichos trabajos se ignotan por completo, ya que están en una proporción absolutamente insignificante con respecto al input total: por ejemplo, en todas las explotaciones agrazias del Reino Unido; el equivalente energético de trabajo humano (aproximadamente 6-7 MJ/hombre-día) varía desde más o menos un 0,2 a 0,5% del total del input enetgético (Balances Energéticos 1-16). Incluyendo el trabajo inditecto -por ejemplo, la mano de obra necesaria para fabricaz maquinatia, fenilizantes y otros productos adquitidos por el agticultor -no es probable que alcance valores superiotes al 1%. Ni tampoco, por conveniencia60 se tiene en cuenta la energía necesatia para apoyaz la vida doméstica del agricultor, ya que, estos valores no son de ninguna relevancia frente al hecho de producir alimentos. En los sistemas de baja energía, el trabajo humano y animal debe ser considerado, ya que ellos son a menudo el único input energético (además del sol). Resultan también sustituibles por los inputs técnicos de métodos agrarios altamente energéticos y son por tanto, en rigor, compazables con ellos. El modo de calculaz estos inputs posee, sin embazgo, cietta impottancia, ya que ctitetios distintos pueden originaz resultados energéticos muy diferentes. Paza ilusttar este hecho fundaznental, consideremos un hombre que posee una pequeña explotación de una ha. de tetreno donde ttabaja,y de la que vive. La tierra produce 12 unidades de energía en forma de alimentos por año, de las que el agricultor corisume 7 y vende 5. De estas 7, utiliza 4 en trabajaz su parcela y ttes pata el testo de sus actividades (dormir, ocio, etc.). Estas cantidades pueden tratazse de varias maneras, dependiendo de cómo se tracen los 1'unites del sistema de producción. Por ejemplo: 1. EI sistema incluye la tierra además de todas las actividades del agricultor; el output neto energético es de 5 unidades por ha. , el input es de 0 unidades, y el indice energético (output/input) igual a infinito. 2. EI sistema incluye el suelo además de las actividades de trabajo del agricultor: el output energético neto es de 5 unidades más tres unidades paza actividades del ocio... etc., mientras que el input es 0, de forma que el índice enetgético es i^nito. 3: El .ri.ctema incluye aolo !a tierra: e1 output energético 9g e.r de 12 unidade.t por ha., e! input e.r de 4 unidadet y e! índice energético de 3. Es esta terceta posibilidad la adoptada aquí. Resulta de sentido común, no da índices enetgéticos con valores infinitos, es el mejor método pata relacionar energía y utilización de la tierra y está conforme con las estadísticas del consumo nacional alimentazio que cuentan a los agticultores y trabajadores de la tierra como consumidores igual que cualquier otros. (Una consecuencia natural de esto, es que, cualquier alimento producido y consumido en las propias explotaciones debe contatse como un output; en la ptáctica, esta cantidad resulta muy pequeña en los sistemas industriales). Igualmente importante es el que en los sistemas industriales este criterio evita el absutdo de tener que sustraer inputs de cazburantes fósiles, de outputs energéticos de alimentos, como si se tratata de dos formas de enetgía estrictamente equivalentes. Por el contratio, lo acotdado permite compazaciones, en forma de índice, entre el input bruto de combustible fósil y el output btuto de la energía de los alimentos o el output de ptoteína, basados los dos en una supe^cie dada de tierra. 2B Outputs _ ^^-. EI sistema de producción de alimentos tiene muchos objetivos, genera muchos efectos y por tanto posee una amplia gama de .valores output^. Estos pueden ser positivos o negativos, identificazse a primera vista o pasaz casi desapercibidos, ser fáciles o difíciles de cuantificar: abazcan desde el aumento o desuucción de los patrones de vida rutal y de los habitats naturales, hasta las complejas telaciones periféricas de cocinaz, servir y comer los alimentos. El único output aquí considerado es el prr^ducto alimenticio apmvechado por e! hombre, lo que después de todo, no es sino el objeto principal de la producción de alimentos (eso, o las ganancias económicas). Los Outpuu se expresan genetalmente de ues formas: un peso o volumen de alimento completo (ejemplo: kilo o liuo de leche); un contenido nuuitivo energético (MJ) utilizando las conversiones normales paza carbohidratos, proteínas y grasas, empleados en la dieta humaz.a; y una cantidad de proteína bruta (N x 6,25). I.os valores 99 energéticos y proteicos se toman de las fuentes normales para los ali= mentos humanosó1• 6z y cuando parece oportuno taznbién para los piensos animalesó3• ^a. Fsta imponancia concedida a los alimentos comestibles, quiere decir que gran parte, aunque no toda, de alimento detperdiciado así como los .cubproducto.r de los alimentos no .re con.rideran como output.r. Fstos conceptos exigen una aclaración cuidadosa. Los desechos o desperdicios de los alimentos tienen lugar en diversos puntos de la lazga cadena que va desde el cultivo en el campo hasta ser ingerido por el consumidor. Fxiste un «proceso de pérdidas^ (por ejemplo en la recolección, almacenamiento y transporte). Hay unos «desperdicios inevitables^ en los alimentos una vez adquiridos por los consumidores (por ejemplo, los huesos de la carne y las cáscaras de los huevos) y hay «desperdicios normales^ en el propio hogar durante la preparación de los alimentos, antes de ser cocinados o servidos crudos en la mesa (por ejemplo, los recones de las verduras). Si estos desechos se deducen de la producción neta, se obtiene una cantidad -un output comertible neto- que calcula la cantidad de alimento que es adquirida por los consumidores finales (familias, restaurantes, cafés... etc.) lo que con las actuales prácticas comunes es potenciulmente disponible paza el consumo. Este es el output del sistema alimentazio que aquí se define. Los datos sobre las proporciones de desechos clásicos inevitables se toman a partir de las mismas fuentes utilizadas paza los contenidos enérgéticos y proteicos de los alimentos. Fxiste, sin embazgo, una forma adicional, muy imponante de desechos alimenticios. Consiste en los desechos «casuales^ procedentes de alimentos prepazados y comestibles, que nunca llegan a consumirse, sino que van al cubo de la basura (lo que en el Reino Unido, viene a ser de manera aproximada, el 25 % de los alimentos totales adquiridos). Este alimento que podía consumirse, pero que no fue consumido, se considera como un output del sistema de producción de alimentos, ya que: (a) no es culpa del sistema el que se desperdicién los alimentos y, (b) solo se dispone de muy toscas estimaciones sobre las cantidades así desperdiciadas. Los .rub productor, aunque sean a veces importantes componentes de la producción agrícola y de los procesos alimentazios, no se cuentan normalmente como outputs ni inputs. Paza aclazaz este punto, supongamos que una tonelada de trigo se muele• y ptoduce 0,7 100 tms. de harina paza consumo humano y 0,3 uns. de salvado paza consumo animal. El input energético en este caso se cazga totalmente en la hazina, ya que es el.ptoducto ptimazio. Las paztes inservibles paza el hombte (salvado) se cuentan por lo tanto como un ^producto libre de energía^ excepto paza algunos inputs enetgéticos adicionales que pueda conaaer (por ejemplo, ensacazlo y transportarlo desde el molino hasta los procesadores de alimentos, procesadores de piensos, etc.). El mismo criterio se utiliza paza valotaz la superficie de suelo necesazio para alimentos humanos y piensos. Sin embazgo, existe una o dos excepciones a esta regla; en el caso de sub-productos que no pueden producitse sin un imponante input enetgético. Un ejemplo gr^co es la producción de pulpa seca de remolacha azucazera. Aquí, el input enetgético total se divide entte el ptoducto principal (azúcaz) y los sub-productos (pulpa, melazas... etc.) de acuerdo con las estimaciones mejores obtenidas de los datos industriales (ver Balance Energético 23). 101 APENDICE 3: CARBURANTES Y ELECTRICIDAD El primet paso de cualquier análisis enetgético es el establecer los inputs de enetgía ptedominantes necesazios para ptoporcionaz cazburantes y electricidad a sus consumidores finales. Los criterios adoptados pata logtazlo, necesitan alguna aclaración. Lo más importante, es establecer dónde se trazan los 1'unites que encierran el sistema energía-suministro. Consideremos una central eléctrica convencional. ^Debetían ttazazse dichos 1'unites ciñéndose alrededor de la central como en los cálculos normales de rendimiento térmico, de tal modo, que solo se contasen las entalpías de los cazburantes quemados y la entalpía de la electricidad enviada a la ted? De lo conttario, ^hasta qué distancia debe uno ampliaz los citados 1'unites? En el caso del input, una primera ampliación podría incluir la energía total (directa e indirecta) consumida dentro de la Nación en transportaz los cazburantes a la central, en someterlos a tratamientos especiales paza suministrarlos (lavado del cazbón, pérdidas durante el proceso de refinado del petróleo... etc.), en extraerlos del suelo, y en la construcción y funcionamiento de toda la instalación y equipo relacionado con todo ello. Otros ensanchamientos adicionales inclu^ían muchos y remotos factores, tales como la energía consumida en la exploración del cazbón o de los yacimientos peuolíferos; en todas las operaciones de extracción Ilevadas a cabo en el extranjero; en embarcat los catbutantes y ttanspottarlos a sus lugazes de destino; en hacer funcionar las secciones de las industrias suministradoras de carburantes... etc. Preguntas semejantes deberán plantearse en el caso del output: por ejemplo, ^se debe reducir de la electricidad enviada al exterior, aquella que se pierda en la distribución o se utiliza en las exhibiciones tendentes a promocionaz su consumo (y cazgaz estas y todas las demás aoperaciones output' a los cazburantes que consumen) ya que 103 - todas ellas forman parte del proceso total de suministrar energía eléctrica a los consumidores? EI ctitetio adoptado aquí es el de ttazar límites infinitamente amplios, por lo menos en ptincipio, con tespecto al input. En la práctica unos cuantos (y probablemente secundarios) inputs escapan de la red, debido principalmente a la falta de datos disponibles. Con tespecto al output, los límites se extienden justo hasta el punto en que un consumidor final fuera del sistema total de energía-suministro, en cuestión, recoge el combustible o electricidad abastecido. Del mismo modo, cualquier sub-producto de la energía producida por el sistema, por ejemplo, electricidad vendida por las refinerías de petróleo, es acreedor del sistema. Cuando un sistema abastecedor produce más de un tipo de output (por ejemplo, carbón más coke más gas manofacturado; o productos refinados de petróleo má ^ petroquímicos) los inputs enetgéticos totales son repartidos entre los outputs en proporción al total de las entalpías de este último. Usando estos criterios, Chapman, Leach y Slesser^s examinaton las industrias suministradoras de energía en el Reino Unido para 1963, 1968, y 1971 / 72 y computados sus «tendimientos^ totales. Los resultados aparecen en la Tabla A 10. TABLA A 10. EFICIENCIA EN EL ABASTECIMIENTO DE LAS INDUSTRIAS DE ENERGIA DEL R. U. 1963 1968 1971/72 Eficiencia (% ) • Eficiencia (%) Eficiencia (%) Carbón 95,5 96,0 95,5 Coke Gas Petróleo Electricidad 75,5 64,7 80,0 . 22,0 84,7 71,9 88,2 23,85 88,0' 81,1 + 89,6 25,2 Industria energética: Notas: • este tesultado es menos cxacto que los demás, debido a la falta de datos sobte hotnos de coke. + Ia gtan alza del gas es debida a la conexión de gas manufacturado con gas natural procedente del Mar del Notte. 104 TABLA A 11. DEMANDAS ENERGETTCAS PARA EL ABASTECIMIENTO DE CARBURANTES YELECTRICIDAD, R. U. 1968 Contenido energétirn Unidad mnsiderado (MJ/unidad) Carbón, agricultura t industria alimentaria 1960-68 t Media, coke 1960-72 t Gas natural ft3(1) (Metano; multiplicado por 1.027) m3 Gas ciudad it3 m3 Petróleo/gasolina 1960-72 gall. (2) 1 kg Diesel fuel (gas/oil) 1967-70 gall. 1 kg Fuel oil 1967-68 gall. 1 kg Electricidad kWh Total input Multi- energético plicador(MJ/unidad) 31.360 1,04 32.610 28.660 28.040 1,092 1,04 1,18 1,05 29.808 33.090 1,147 38,56 1.092 1,05 1, 31 38,56 1,31 159 34,97 46,9 173,5 38,17 45,60 186,8 41,1 43,2 3,6 1,134 1,134 1,134 1,134 1.134 1.134 1.134 1.t34 1.134 4,0 Aceites lubrificantes y gtasas 40,49 1,43 50,51 180,3 39,7 53,2 196,7 43,3 51,7 211,8 46,6 49,0 14,4 550 Fuentes: Multiplicadores^S; entalpias directas35; aceites y grasasi^. (1) pie cúbico. (2) galón. A lo lazgo de este trabajo, son los rendimientos de 1968 los que utilizamos paza la mayoría de los outputs. A excepción del gas narural y la electricidad. En cuanto al gas (no incluido por sepazado en la Tabla) se adopta un rendimiento del 95 %. Esta cifra se basa en consultas realizadas a la British Gas Corpotation y parece ser una propotción razonable para justificaz el bombeo del gaseoducto y las pérdidas. Paza la electricidad el rendimiento asumido es de 25,0% teniendo en cuenta la ligera subida de 1968 a 1972. (Este rendimiento es 105 adoptado para todos los consumidotes, aunque en la práctica existitían diferencias enotmes entre los valores extremos; el rendimiento de una fábrica que toma la mayor parte de su enetgía eléctrica de una moderna y cercana central, debería ser superior a125 %, en tanto que para una granja que usa la electricidad ptincipalmente dutante petíodos punta del día cuando la National Gtid conecta centrales de menor eficiencia, el rendimiento debetía set mucho más bajo). EI valor recíproco de estos rendimientos ptoporciona un multiplicador, para convertir el contenido energético de los carburantes y electricidad suministrados en sus re ^pectivas necesidades energéticas totales. EI combinar los multiplicadores con las entalpías. de los diferentes carburantes empleados por varias industrias en distintos años, apatece en las principales estadísticas energéticas del Reino Unido3S y suministra los datos básicos sobre los inputs energéticos totales para los carburantes y la electricidad utilizados a lo largo de este estudio. Algunos resultados clave se resumen en la Tabla A11. 1oG APENDICE 4: BIENES Y SERVICIOS Los cálculos del input energético de un bien y setvicio pueden realizarse de varias maneras: 1. Lo más elemental y rápido es multiplicar simplemente el costo monetario por la cifra predominante del consumo de energía primaria pot unidad del Producto Nacional Bruto. En el Reino Unido, esta razón tuvo unos valores, durante el período de 1968-1972, ptóximos a los 221, 218, 205, 180 y 162 MJ/libra respectivamente35^ 4G. Este método puede resultar sorprendentemente exacto en algunos casos: un gran número de industrias tiene valores MJ/libra semejantes al valor medio nacional. También puede, sin embatgo, ser extraordinariamente inéxacto, ya que los inputs energéticos por costo en libtas vatiaban (Reino Unido 1968) desde 3.500 MJ para fuel-oil hasta 37 MJ para servicios de comunicaciones, mienttas que, según criterios aquí adoptados, el valor del trabajo correspondiente a una libta tiene un input enetgético equivalente insignificante y por lo tanto despreciable. Este método se utilizó con extremada moderación y solo para casos intrascendentes. 2. En el extremo opuesto, el método más difícil y laborioso -conocido a veces como aanálisis de procesosD -consiste en seguit la pista o tastrear uno por uno, todos los outputs e inputs a través de la madeja total de procesos, ventas, compras, transacciones... etc., que conducen, en un sentido inverso, a partir de un producto o bien terminado hasta todos los recursos finales enetgéticos de catbutantes fósiles. Nadie intentó todavía un análisis completo de estas catacterísticas, y de no ser completo, puede inducir a errores. Errores que pueden originarse por concenuarse en solo algunas empresas o fábricas (en algunas veces son casos aislados y no reresentativos) ^ o bien por interrump ^ el atastteo hacia auása en un estadio pre107 maturo (probablemente debido al agotamiento del investigador). 3. En el término medio se encuentra el método normalmente utilizado de análisis input-output. Este se basa en el empleo de las Tablas Nacionales de Input-Output que tegisttan transacciones monetarias entte una setie impottante de agrupaciones industriales y comerciales como compradores, y la misma serie como vendedores. Como las energías de las industrias están también tegistradas, resulta telativamente sencillo el computat tanto las comptas ditectas por cualquier industria a estas industrias de energía (pot ejemplo, ptoductos agtícolas a pattit del carbón) como todas las segundas, terceras y así sucesiva• mente, resto de compras inditectas (por ejemplo, los productos agrícolas a partir de un tractor fabricado a partir del carbón; ptoductos agtícolas a pattit del tractor fabticado a pattir del hierro y acero a partir del carbón). En la realidad, con la mayoría de las Tablas Input-Output se llevó ya a cabo esta medida indirecta y se publicó en fotma de matriz invertida. Aunque utilizado ampliamente el método Input-Output sufre de algunos serios inconvenientes. Los más importantes son el alto grado de agregación, de modo que los productos individuales y los inputs no pueden sepatarse; la exclusión, en muchos casos de adquisiciones capitales por las industrias; la cobertura incompleta de todas las industrias y servicios relevantes y de importancia; y el hecho de que desde el año base de la publicación hasta hoy (1976) transcurrieron de 4 a 6 años en la mayoría de los países. EI alto gtado de agregación resulta particulatmente grave cuando se intenta convenir ttansacciones monetarias en unidades de energía, debido a las amplias variaciones existentes, de una industria a otra en cuanto a los precios pagados por carburantes y electricidad; los valores calor'lficos de los carburantes adquiridos; y la mezcla de carburantes comprados. Por ejemplo, la matriz del Reino Unido de 196854 tegistra solo que «otras industrias alimentatiasD adquirieron bienes pot valor de 10,3 millones de libras a partir de la producción nacional de «aceite mineral refinado, aceites lubrificantes y grasas^. No se indica de modo alguno como se dividió esta suma entre varios carburantes derivados del petróleo, principalmente existiendo gtan difetencia de inputs energéticos por costo en libras. 108 En e.rte e.rtudio re utilixó un método con.riderado como muy ventajo.ro .robre lo.r análi.ri.r input-output normale.r. Consiste en emplear los datos básicos a partir de los cuales se elaboran el grueso de las Tablas Input-Output nacionales. En el Reino Unido, los datos de esta índole más reciente se reflejan en el Census of Production Reports, que registra con considerable detalle todas las compras y ventas de las 154 categorías de industtias (aunque no la Agricultura) a lo largo del año 196844. EI método presenta muchas y grandes ventajas. La disgregación de las industtias es sustancialmente mayot: 154 categotías en vez de las 90 que citan las Tablas Input-Output. Se incluyen las compras de capital. Quizás lo más imponante de todo sea que las compras y ventas se identifican bastante detalladamente y la mayoría vienen expresada en cantidades físicas así como su costo en libras. En conttaste con el ejemplo que acabamos de citar pata las adquisiciones de petróleo, estas se identifican separadamente como x toneladas o galones de aceites lubricantes y grasas, derivados del petróleo y gasolina para los motores de los vehículos por catretera, y otros carburantes líquidos. A partir de estos datos, la estimación de los inputs energéticos director, para todas las industrias del Censo, se hace posible, con una considerable exactitud. EI calcular los inputs indirecto.r resulta un enorme cometido. En grandes rasgos, el procedimiento es como sigue; supongamos que vamos a calculat los inputs pata la Industtia A: tendremos entonces que: 1) calcular aproximadamente el total input energético/output libra, pata todas las industrias (por ejemplo a partir de un tipo de análisis normal de input-output; 2) aplicar estos totales a las compras realizadas por Ia Industria A a otras industrias dadas en el Census for Industry A; 3) realizat una nueva estimación para el valor Input Energétic / Output libra, relativo a la Industria A. Este procedimiento se repite para todas las industrias y se continúa haciendo aptoximaciones hasta que las ciftas finales pata el valor Input energético / Output-libra no sufre apreciables alteraciones. Debe tenerse mucho cuidado en definir correctamente el Output-librá de cada industria, empleando la terminología del Census of Production, esta cantidad se toma como: (Producto Principal vendido por establecimientos en la industria) +(Productos no principales vendidos) (Gastos de comedor) -(Bienes vendidos sin procesar) -(Productos de desecho) -(Auto-adquisiciones) -(Trabajo Realizado). EI total de las compras de energía d^ecta e iñd^ecta (MJ) dividida por esta cantidad 109 (libra) da el resultado total global Input energético/Output-libra para la industria. Estos cálculos tan agotadores y rigurosos fueron llevados a cabo por Chapman y sus colaboradores en la Open Univetsity Enetgy Research Group36, que amablemente facilitaton los resultados detallados de los que pudimos disponer. Estos resultados se utilizaton ampliamente a ttavés de este estudio: ver especialmente los Apéndices lA, 1B, 1C. Con respecto a las escasas industrias y servicios no cubiertos por los datos de Chapman / Census -principalmente los transportes por fetrocartil y cattetera, «otros químicosp y servicios varios- se empleaton los resultados obtenidos por Wright55 a pattit de las Tablas Input-Output del año 1968. 110 APENDICE 5: CAMBIOS DE LOS PRECIOS A lo lazgo de un período de cinco años los inputs energéticos paza cualquier unidad física de producción (una tm. de fertilizantes, un tractot, un kWh de electricidad, etc.) probablemente no expetimenten cambios apreciables' . Si todas las necesidades energéticas y todos los datos importante^ de producción estuvieran refetidos a unidades físicas, el analista de la energía podtía deducir entonces que daba igual consideraz un año que cualquier otro de los de este período. Desgraciadamente la realidad no resulta tan sencilla. La mayoría de los inputs eñetgéticos pueden obtenerse solo paza un año base - en este caso 1968- y referidos al valot en libras (MJ/libta,... etc.). Al mismo tiempo, gtan parte de los datos de ptoducción -por ejemplo para empresas de explotaciones agrarias mixtas con cultivos y ganadería- se basan también en costos y precios en libras. EI poner apazte el año base es pór lo tanto esencial paza aplicat los valores monetazios deflactores o inflactores: es decir, números índices de precios y costos. Muchos de estos se empleazon en el presente estudio, tomados de fuentes standard tales como el Annual Absuac of Staticstis41, estadísticas oficiales del Ministry of Agticulrure, Fisheties and Food33^ 3a, 6^ del Reino Unido, y otras semejantes. Resultan demasiado numerosas paza ser teseñadas aquí. En vez de esto, la Tabla A 12 ptoporciona para algunas necesidades agrarias clave, los resultados de aplicar deflactores en libras a paztir de las fuentes citadas. ' Tccnolo^ias nuevas y más encrg ‚tico cficaces, se inuoducirán probablemente durante el período, qucdando lu anúguas desplazadas, pero la escala muiva de la mayoríá de los sistemas indusuiales impidc que cl co^ciente medio de encrgía cxperimente cambios rápidamente. 111 TABLA A 12. INPUTS ENERGET7COS POR COSTO ENIIBRAS PARA ALGUNAS NECESIDADES AGRICOLAS, R. U. 1968-72 Electricidad vendida a las explotaciones Año (^/loo (MJ/^) Pcomedio diesel-fuel (^/ioo^) D e p c e c i ación de la maquinaria y repacac. (MJ/^^ (MJ/^^ 2950 2885 2850 2810 2730 2650 2520 2460 2260 200 197 193 185 177 170 163 158 153 kWh) 1968 1968/69 1969 1969/70 . . 1970 1970/71 1971 1971/72 1972 0,893 0,886 0,879 0,878 0,877 0,914 0,950 0,983 1,016 1690 1704 1717 1719 1721 1655 1589 1537 1485 1,47' 1,50 1,52 1,54 1,58 1,63 1,726 1,76^ 1,91b Fuentes: Precios de la electricidad35•^^. Precios dieseli6e•b British Petroleum comunicación personal ` National Institute of Agricultural Engineering, comunicación personal; otros años extrapolados a panir de4 ^. Precios de maquinaria a partir del índice para las industrias de ingeniería mecánica4 ^ . 112 APENDICE 6: FERTILIZANTES 6A Generalidades. Los fertilizantes artificiales son productos «energético-intensivos^: cada tonelada de Nitrógeno (N) aplicada al suelo requiere una energía aproximada equivalente a 1.8 tms. de petróleo. Su empleo cada vez mayor, ha sido uno de los factores principales del aumento del consumo energético en la Agricultura «industrial^, y en la actualidad, en el Reino Unido, es el responsable de cerca de la quinta parte del input energético total. Se ha puesto, pot tanto, un cuidado considerable en calcular y estudiar por separado sus requerimientos y necesidades energéticas. Esto encierra una cierta cantidad de pasos, pero en la Tabla A13 se expresan solo los resultados finales. Capital y otro.r ga.rto.r generaler: el Census of Production44 de 1968, señala que la industria de fertilizantes dél Reino Unido producía cerca de 9.0 Mt. de productos de todas las clases. Utilizando el Census con los datos de Chapman para las adquisiciones en MJ/libra durante 19683^, nos encontramos con los siguientes inputs enetgéticos indirectos: Nuevas construcciones Instalaciones y Maquinaria Recambios de Maquinatia Todos los materiales restantes (excluidos los piensos) Harina de pescado Capital total mas costos fijos 1.134 x 10^ MJ 1.177 770 4.702 29 7.812 x 106 MJ Dividiendo este total, en partes iguales entre los outputs nos da un input para «capital y costos fijosA de unos 870 MJ/tm. Esta cifra reptesenta alrededor del 3-4% del input/tm. para la mayoría de los 113 TABLA A13: INPUTS ENERGE7TCOS PARA FER77LIZANTES, REINO UNIDO 1968-1973 Fertilizantes tipo: (Ingredientes en %; P = PzOS;K = KZO) Nitrato amónico Urea Amoniacolíquido Sulfato amónico' Fosfato amónico Compuestos 15-15-21 22-11-11 9-25-25 17-17-17 Sales de potasio Ptomedio peso nitrógeno fosfato potasio Cal (caliza molida) Ensacado: pie fábrica' Ensacado: Distribuido a las granjas ICI Producto Elemento Leach (MJ/kgproducto) (MJ/kg) (MJ/kg) 34,5 46,6 82,4 21,0 N 25,4 N 36,8 N 50,5 N - ^^ P^ 15 N 15 P 16,2 21K 22 N 11 P 19,7 11K 9 N 25 P 13,7 25 K ^ 17 N 17 N^ 17,5 17 K 100 K 100 N 100P 100 K 25,9 38,6 51,2 16,0 26,2 38,9 51,5 17,2 19,5 19,8 16,2 16,5 19,7 20,0 13,7 14,0 17,5 17,8 76,0 83,5 62,5 81,9 N N N N i 13,0 P 83,8 N 14,4 P 8,3K 80,6 N 13,7 P 7,9K 87,0 N 15,2 P 7,9 K I 82,6 N 14,0 P 8,2 K 9,0 K 1 80,0 N 14,0 P 9,0 K 2,0 Calculado a.pattit de Notas: ' No se aplica al amoniaco ningún cargo de envasado. Slack10 con 4% de sobrecarga pot capital y costes fijos, añadiendo el envasado. productos (ver más adelante) y está muy próxima a las estimaciones realizadas por el ICI69, el mayor fabricante de fettilizantes del Reino Unido. Los cálculos del ICI son por lo tanto considerados como correctos. Envarado: casi el total de los fertilizantes se vende en sacos, generalmente de polietileno. Empleando un análisis bastante sofisticado, el 114 ICI estima que el input energético paza un saco que contenga 50.8 kgs. es de 21 MJ, dando 410 MJ/tm. producto. Sin embatgo, incluyendo las operaciones de envasado, el total de esta operación se eleva a 1.040 MJ/tm. Estos dos inputs paza envasado y capital (ambos según datos del ICI) se incluyen en todos los cálculos siguientes, excepto, como es lógico, para los productos intermedios de los procesos de fabricación, en los que los inputs de envasado, quedan excluidos. Trans^iorte: los datos36 de Chapman / Census, señalan que paza todos los transportes -incluidos catteteras de peaje y ttanspotte por fettocattil, así como el empleo de catburantes para el ttansporte, vehícúlos, repazaciones... etc.- el input enetgético total de la industria de fertilizantes del Reino Unido en 1968, fue de 2.484 MGJ, dando 276 MJ/tm. de ptoducto. EI incluir la energía empleada pot todos los distribuidotes al por mayot, puede redondear la cifra a 300 MJ/tm. Incluyendo esta cantidad obtenemos el input energético total de los fertilizantes suministrados al agricultor. Inputr director: los antetiores detalles justifican solo un pequeño % de los inputs enetgéticos totales de los fertilizantes, pot lo que pazece razonable el distribu^los equitativamente sobre una base media. Peto el valot medio, no resulta justo ni admisible paza los inputs ditectos, que constituyen bastante más del 90% del total y que vazían enormemente de unos tipos de productos a otros. Estos inputs directos, se valoran, por lo tanto, por métodos de análisis de procesos, como veremos a continuación. 6B Fertilizantes nitrogenados El Nittógeno (N) es el elemento más importante y con mucho el de mayor contenido energético de todos los fertilizantes. Genetalmente, se aplica como un fenilizante de nitrógeno ad^ectoa bajo la fórmula normal de nittato amónico (34,5 % N), pero también como sulfato amónico ( 21 % N), utea (46,6 % N), o amoníaco líquido (82,4 % N). EI nittógeno se mezcla también con fosfatos y potasio dentto de compuestos fertilizantes N-P-K. 115 En líneas generales, el diagrama de la producción de los fertilizantes de rápida incorporación del nitrógeno es sericillo. Por ejemplo: urea amoniaco Gas natural ^ ácido nítrico ---^ amonico líquido nitrato En la práctica, las diferencias en la aplicación, los rendimientos del producto empleado y los inputs útiles originan una escala considerable de necesidades energéticas por tm. de producto. Por ejemplo, en un estudio realizado por Leach y Slesset^' en 1972, se examinó la producción de ámoniaco y los inputs energéticos derivados (calculados de nuevo sobte la base de este trabajo) que oscilaban entre 39,7 y 52,6 MJ/kg. de amoníaco, con «un objetivo mínimo teórico^ calculado en altededor de 36,9 MJ/kg. Difetencias semejantes se encontraron para el ácido nítrico. Las estimaciones utilizadas aquí se basan en los datos^^ publicados por el ICI y los detallados (confidenciales) diagramas para materiales e inputs de utilidad en los que estos están basados a su vez. Representan pot lo tantó lo que se puede llamar «la mejor tecnología del momento presentep y así probablemente subestimarán ligeramente las tecnologías medias actuales. Esta aproximación se eligió, de manera deliberada, con vistas a los países en desarrollo, donde la expansión de la producción de fertilizantes se debe, y se seguirá debiendo gracias a tales tecnologías, ya que a causa de la escasa base tecnológica de la que disponen estos métodos modernos parecen para ellos los más adecuados. Sin embargo, dado que este trabajo utiliza índices de corrección ligeramente superiores a los que emplea el ICI, pata carburantes y electticidad (por ejemplo, multiplicar pot 1.05, pata el caso del gas natural, en vez de pot 1.032 empleado por el ICI y 4,0 para la electricidad en vez del promedio de 4,0 y 3,63 empleado por el ICI), los resultados pata fertilizantes nitrogenados de rápida asimilación son muy ligeramente superiores a los del ICI, y pata los fettilizantes compuestos las diferencias son despreciables. Ambos grupos muestran sus 116 resultados en la Tabla A13. Además, el ICI no incluye el transpotte desde la fábrica, por lo que los inputs energétcos finales adoptados en . este estudio (las dos últimas columnas de la Tabla A13) resultan aptoximadamente un 2-3 % más elevadas que las del ICI. 6C Fertilizantes fosfatados Casi todos los fosfatos se utilizan en formas transformadas tales como superfosfatos o en fótmulas compuestas (N, P, K). Los inputs energéticos deben calcularse pot lo tanto con tespecto al principal ingrediente de estos compuestos, el ácido fosfórico (P04H3), que se produce por la reacción de los concentrados de menas de fosfatos con el ácido sulfúrico. Cálculos simplemente aproximados resultan suficientes, ya que los fosfatos poseen bajos inputs energéticos compatados con el nitrógeno. Estos inputs se pueden agrupar en cinco apartados: Mena.r de minerale.r: en el Reino Unido las industrias de explotaciones de canteras (creta, arcilla, arena, grava y piedra caliza, piedra, pizarra) tienen unas nece ^idades energéticas medias de 367 MJ/tm. output3G. Las menas de fosfato están más cerca por su dureza de la piedra caliza que de la arena o de la arcilla, por lo que se dá por válida la cifra de 400 MJ/tm. procedente de la cantera. Este valor es equivalente a 933 MJ/tm. de concentrado (ver Apartado siguiente). Concentración: los dos yacimientos mayores del Mundo en Marruecos y Flotida (USA), poseen menas con una concentración del 15 y 12 % respectivamente^^. Una práctica universal es la de la concentración de esta riqueza hasta aproximadamente 35% de Pz05 antes de embarcarlo. Shreve73 expresa las necesidades útiles pata el método standard de flotación de espumas: para una tm. de mena concentrada (35%) estos son, con sus necesidades energéticas brutas de NaOH, 2,01 kg., 21,8 MJ; agua, 14.800 litros, 30,6 MJ; electricidad, 25 kWh., 360 MJ; fuel-oil, 2,1 kgs., 103 MJ; ácidos grasos, 2,7 kgs., 34,3 MJ. EI total redondeado es de 550 MJ/tm. concentrada. Tran.rposte marítimo: en 1968 el Reino Unido imponó 1.664 millones de tms. de concentrado de fo^fato, en tanto que la producción nacio117 nal era. nula74. Considerando las tms. y las distancias por mar desde cada país de origen se obtienen unos costos de transporte de 4,78 x 10^ tm-kilómetto 0 2.782 kilómetto por tonelada media. Los batcos utilizados eran de unas 14-20.000 tms.75 con inputs energéticos próximos a 0,2 MJ/tm. kilómetto (Apéndice 11B). Por lo tanto, los inputs del transporte marítimo resultan de 574 MJ/tm. de concentrado. Input para la planta industria! de fertilixantes: el input energético total hasta el presente es de 2.057 MJ/tm. de concentrado. Un 10% de sobrecarga se añadé para cubrir costos de capital para la planta industrial de concentración, el transporte desde dicha planta hasta el puertó (las distancias son relativamente pequeñas para todos los suministradores del Reino Unido), y los manejos en los muelles. Esto da un total final redondeado de 2.260 MJ/tm., cifra muy próxima a la calculada por el ICI, de 2.180 MJ/tm.^^. Por conveniencia, esta última cifra es, la que se ha tenido en cuenta. Acido fosfórico: considerando el crédito del vapor y calor procedente de la producción de sulfúrico, además de todos los piensos y los inputs de utilidad, el ICI estima unas necesidades totales energéticas para el ácido fosfórico de 10.800 MJ/tm. como e! 100% PZOs. Este valor es muy próximo al promedio de los dos métodos, con menores necesidades energéticas, analizados por Leach y Slesser^l, pero utilizando los datos e índices de correción de este estudio. La cifra del ICI es pot lo tanto la aceptada. 6D. Fertilizantes Potásicos EI potasio se obtiene, normalmente, de las sales de potasio, con frecuencia del cloruro potásico, que puede hallarse en estado casi puro en numerosas partes del mundo. Por ser la roca blanda y encontrarse generalmente cerca de la superficie, los inputs energéticos tesultan extremadamente bajos. Por otra parte, puede también hallarse en depósitos ptofundos, como ocurre con los gtandes y recientemente explotados yacimientos de Yorkshire (situados a 1.200 m. de profundidad); o a partir de mezclas de sales que deben someterse a tratamientos de enriquecimiento, muy ^energético-intensivos^, para conse118 guir exuaer así el cloruro potásico. Ias distancias de transpone varían, así mismo, enormemente de unos casos a otros. Todo esto hace que resulte bastante difícil la adopción de un valor medio, peto afortunadamente, como en el caso de los fosfatos, el potasio no representa ningún input enetgético impottante para la agricultura, por lo que aptoximaciones no muy exactas, pueden darse por válidas. Mostramos a continuación dos estimaciones: Importacionet de mina.r .rituadar en !a tuperficie: En 1968, el Reino Unido, todo el potasio que necesitaba (735.000 tm.) lo imponó de los países mayores productores: Alemania Occidental, URSS, Francia, Israel, USA y España74. La mayoría de los yacimientos de estos países se encuenuan en la supe^cie, constiruyendo rocas relativamente blandas. Los iñputs de la extracción minera son considerados, de manera aproximada, como una tercera parte de los de las minas de fosfatos, consistiendo el ahotto principal en los procesos de tritutación o pulverizado. Esto representa 133 MJ/mineral. En cuanto a la concentración, Shteve73 señala la utilidad de un proceso bastante típico de enriquecimiento que se sitúa entre los dos extremos mencionados anteriormente y que produce una tonelada de cloruro potásico. EI mineral de que se pane, es la silvinita, qúe es una mezcla, aproximadamente a partes iguales, de cloruros sódico y potásico: = 266 MJ Silvinita, 2.000 kg. x 0,133 MJ/kg. = 3.776 Vapor, 1.134 kg. x 3,33 MJ/kg. Electricidad, 50 kWh x 14,4 MJ/kWh = 720 = 4.762 MJ Total, En cuanto al tran.rporte marítimo, un análisis de las toneladas imponadas por el Reino Unido, de las distancias matítimas y del tonela. je de los batcos (utilizando las mismas fuentes que para los fosfatos), señalan un input medio de 342 MJ/t. EI input total actual es de 5.114 MJ/t. Añadiendo un 10% de sobrecarga, como en el caso de los fosfatos, se llega a un total final, en cifras redondas, de 5.600 MJ/t cloruro potásico. Yacimiento.r nacionale.r localizado.r en e1 tub.ruelo: El ICI ha estimado los inputs enetgéticos para los yacimientos de potasio de Yorksh^ e, contando con el vapor y la electricidad, capital y costos fijos, y el transpone hasta el complejo de fenilizantes del ICI en Billingham, con índices correctores muy semejantes a los utilizados aquíb^. El in119 put resultante es de 3.945 MJ/t cloruro potásico. Considerando que el cálculo anterior pata las importaciones probablemente tesulta estimado por lo alto, este cálculo del ICI se acepta como correcto como total para la planta de fertilizante. En cuanto, a las sales de potasio vendidas directamente a las explotaciones agrarias ( muriato de potasio, etc.) el ensacado y transporte añaden 1.340 MJ/t ( Apéndice 6A), proporcionando un total de 5.285 MJ/t cloruro potásico. Pata convertir esto a la unidad de empleo normal en la agricultuta expresada en KZO, hay que multiplicat pot 1,57. Por lo tanto para el potasio suministrado (K20 equivalente), el input es de 8.300 MJ/t. Una estimación final de 9.000 MJ o 9 MJ/kg e.r !a a.rumida. (Hay que señalar que si se toma la primera estimación, citada anteriormente, el total final se eleva a 10,9 MJ/kg.). 6E. Fertilizantes compuestos (N, P, K) Los fertilizantes compuestos a base de mezclas en diversas proporciones con N, P y K, constituyen e160% en peso del total de los fertilizantes empleados por los agricultores del Reino Unido. Los inputs energéticos para los cuatro tipos más utilizados, se expresan en la Tabla A13, empleando los cálculos del ICI^^. Después de ajustar estos datos aplicando para ello los diferentes índices correctores aquí empleados, solo se corrige en un 1% o menos a los citados totales. Por ello, aceptamos los cálculos del ICI, aunque se añade el transporte para los inputs energéticos finales, tespecto a los ptoductos suministrados a la explotación. Siempte que los datos agrarios especifiquen el tipo de compuesto utilizado, se emplea el input más relevante a partir de la Tabla A13. Pero es mt}cho más ftecuente que únicamente se expresen los datos indicadores del total de las cantidades del elemento activo; por ejemplo, N, Pz05 y K20. Para deducit los inputs enetgéticos medios utilizados a partir de esta base, son necesarios otros dos pasos más. EI primero consiste en dividir el input energético de cualquier fertilizante compuesto, entre sus elementos activos. Esto se tealizó para todos los compuestos expresados en la Tabla A13, confotme al método desarrollado por el ICI. Como resultado de este ejercicio, se observa una dispersión bastante amplia de inputs relativos a cada elemen120 to; por ejemplo, para el N, incluyendo las formas de asimilación ditecta, los valotes oscilan entre 62,5 y 87,0 MJ/kg. de N. Nos induciría a grandes errores la deducción de un valor medio a partir de esta escala, sencillamente por la suma de cada fertilizante en la próporción 1:1. EI segundo paso es, por consiguiente, considerar la cantidad de elemento activo suministrado en la práctica, por cada tipo de fertilizante. Esto se llevó a cabo en Inglaterra y Gales en 1969/70, con tespecto a cuatro de los fettilizantes más ampliamente usados en las cosechas, empleando un minucioso y detallado informe de Halliday y colaboradores^^, sobre las supe^cies fertilizadas y las cantidades aplicadas de cada tipo de fertilizante. EI resultado refleja una notable consecuencia en cuanto a input enetgético por cantidad de elemento aplicado: para el N los inputs son 80,9 MJ/kg. para los cereales de primavera, 80,8 MJ/kg. pata los ceteales de invierno, 78,9 MJ/kg. para áreas temporalmente destinadas a la producción de pastos intensivos, y 79,1 MJ/kg. para pastos permanentes. Se adopta un valor medio de 80 MJ/kg. de N. De manera semejante, las medias ponderadas están muy próximas a los 14 MJ/kg. de fo.cfato y 9 MJ/kg. de potario. 6F. Cal. Los agricultores del Reino Unido vienen utilizando, sin casi variaciones, la cantidad de 4 millones de tms. de ca134, generalmente como creta pulverizada o piedra caliza, pero también, a menudo, como acal vivap (óxido de calcio) o como cal apagada (hidróxido cálcico). No se intentó nunca calcular los inputs energéticos de la cal viva o de la cal apagada, por causa de los difíciles problemas de los subproductos. En vez de esto, se llevó a cabo una groseta aproximación con respecto a la cteta y a la piedta caliza, con un valot de 2 MJ/kg. suministrado, basado en la cifra de 367 MJ/tm. para el output de las industtias exttactivas de las cantetas, más 1.340 MJ/tm. para el ensacado y transpone, redondeando la cifra después de tener en cuenta la gran demanda energética de los óxido e hidróxidos de cal. Este valor de 2 MJ/kg. (2 GJ/tm.) se emplea solo en el total de los inputs energéticos de la Agricultura del Reino Unido, y no en cada Balance Energético específico de cada granja con cultivos y ganadería. Esto es en parte, debido a qué los datos agrarios raramente registran 121 el consumo de cal; y en parte también, potque su inclusión añadiría solo unos 700 MJ/ha. a los totales, o menos de 1-2%. (Input energético bruto pata la cal = 2 GJ/tm. x 4 Mt/año. Supe^cie total cultivada y pastos permanentes del Reino Unido = 12 millones de has. Por lo tanto, 0,67 GJ/ha-año, sobre un promedio muy agtegado). 122 APENDICE 7: • TRACTORES Y EQUIPAMENTO AGRICOLA 7A. Tractores-hóras de trabajo El uso de los ttactores constituye una amplia ftacción del input energético total en la mayoría de las explotaciones agrícolas y ganaderas. Un ttactor medio de 50 CV. (37 kW) consume algo así como 23 tms. de catburante a lo largo de 6.000 horas de trabajo. Si consideramos su peso aproximado de 1, 7 tms. , se puede sumar el equivalente a 3,8 tms. de pettóleo que se consumen en su fabricación; de esta cifra, casi exactamente la mitad se debe a la extracción del mineral, transpone y transformación del hierro y el acero que forman parte de la carrocería y del motor. Los inputs energéticos del tractor se calcularon por lo tanto con considerable minuciosidad. Estos inputs, ptovienen casi exclusivamente de cuatro factores: consumo de catburantes; aceites y grasas; depreciación (es decir, participación del consumo de energía inicial, en la fabricación); y reparaciones. No se tienen en cuenta los insignificantes valotes enetgéticos de la chatarra -aunque puede resultar importante debido a que son más bajos los inputs energéticos pata los metales reciclados que para los metales extraidos de los yacimientos, ya que los inputs energéticós de los metales empleados en la fabricación, reflejan de antemano este aplus de reciclaje^. Los inputs de los carburantes, aceites y grasas fueron calculados anteriormente ( Apéndice 3). Los inputs de depreciación se consideran que equivalen a 200 MJ/libra, en donde la libta se refiere a los precios de los agticultores en 1968 y a la depreciación constante. Este valor se detiva de la estimación, ampliamente aceptada, del 15 % para la subida de precios fábrica-agricultor; 217 MJ/libra para la_fabricación del ttactor en 196836 y 71 MJ/libra para el cometciante distribuidor en 1968 (Apén123 dice 1C). De aquí, que por cada libra que el agricultor paga, el input energético es de ( 217 x 0,87) +(71 x 0,13) = 198 MJ. EI valor asumido es de 200 MJ. Los inputs pata las teparaciones se consideran también como 200 MJ/libra, aunque esta cifra resulta incierta. Los costes de reparación de la maquinatia durante el período de 1965-1972, se admiten por lo general como un 40% debido al trabajo, y 60% debido a las piezas de recambio. En cuanto a estas últimas,. pata los tractores el 50=60% se consumen normalmente en los neumáticos^^ (a 337 MJ/libra)36. El 40-50% restante se justifica con los recambios de los tractores así como de las industrias fabricantes de vehículos (a 217 y 234 MJ/libra respectivamente)36. Así, paza 0,6 libras gastadas en piezas de recambio el input energético es (337 x 0,5 - 0,6) +(digamos 226 x 0,4 - 0,5) = 282-293 MJ/libra, 0 170-176 MJ. Las restantes 0,4 libras pata el ttabajo, incluyeñ ciettamente algunas ventas directas de cazburantes y electricidad en talleres de las propias-o no -explotaciones agrarias. Por eso se considera válida una cifra aproximada de 200 MJ/libra. ^ A partir de estos datos, se pueden calcular los inputs de una hora media de empleo del tractor. Esto presenta la doble ventaja de ajustatse por una parte a los datos que sobre el empleo del tractor se citan frecuentemente en la bibliografía agrícola, y por otra, de permanecer libres ftente a los efectos inflacionistas de la libra. Los análisis de los costos medios en libras para el funcionamiento de los tractores de divetsos tamaños aparecen, en cuanto a 1968, en las seties aFarm as a Businessp68 del Ministry of Agticulture. Dichos datos se combinan en la Tabla A14 con la información precedente sobre MJ/libra para dar MJ / hora. En los casos en que las horas del ttactor se emplean en recopilat Balances Enetgéticos para cultivos determinados o productos ganaderos, los datos acerca de la utilización por horas se obtienen o bien de la citada fuente principal de información para el Balance o a partir de Tablas de cálculo standazd^g. Un aspecto impottante que destaca de la Tabla A14 es, que el prolongaz la vida de un tractor gracias a una conservación cuidadosa, tiene escasa repercusión en el input energético pot horas. Por ejemplo, si se alazga la vida de un tractor de 90 CV. en un 20%, los inputs de depreciación por hora descienden de 74,6 a 60 MJ, reduciéndose el input total por horas en solo 3,6%. En la ptáctica, esta reducción 124 TABLA A14: INPUT ENERGETICO DE UNA HORA REPRESENTAT7VA DE USO DE TRACTOR, REINO UNIDO 1968 50 caballos de vapor (37,3 kW)* (6.000 h/vida; 900 h/año) ^/h Depreciación Repataciones Impuestos, etc. 0,138 0,074 0,011 Fuel (3,181/h) 0,0467. Aceite, grasa Total Input no-fuel, en % de fuel :37,0 0,0156 0,285 0,172 0,091 0,011 MJ/ae MJ/h 200 200 - 27,6 14,8 - 2949 137,7 550 662 8,6 188,7 200 200 - 34,4 18, 2 - 167,2 65 caballos de vapor (CV) (48,5 kW) 7000 h vida; 900 h/año Depreciación Reparaciones Impuestos, etc. Fuel (3,86 1/h) 0,0567 2949 Aceite, grasa 0,0178 550 9,8 Total Input no-fuel, como °h de fuel: 37,3 0,349 668 229,6 Depreciación Repataciones Impuestos, etc. 0,373 0,200 0,017 200 200 - 90 ^aballos de vapor (CV) (67,2 kW) 7500 h vida; 900 h/año . 74,6 40,0 - Fuel(6,731/h) 0,0989 2949 Aceite 0,020 550 11,0 Total 0,709 589 417,3 291,7 Inputs no-fuel, como % de fuel: 43,0 Notas: ' Medias de los datos dados paza tractores de 4S y 55 CV (33,6 y 41,0 kW). Cazburantes y aceite se expresan conjuntamente como 0,0623/libras-hora. EI National Institute of Agricultural Engineering estima que el consumo de cazburantes ( a lo lazgo de todo el año) para un tractor de estas dimensiones es normalmente de 3,18 litros/hora, dando 0,0467 libras/hora al costo medio de cazburante de 0,0147 librasllitro paza el año 1968. Los mismos costos proporcionales para cazburantes y aceites se considerazon paza ttactotes de mayor potencia. . 125 resultaría ptobablemente anulada por los inputs extta de las teparaciones y tecambios. Otro aspecto importante es que los inputs procedentes de otros factóres que no sean los carburantes (depteciación, reparaciones, aceites y grasas) tienen valores próximos al 40% de los inputs de carbutantes pata los tractotes de cualquiet tamaño. Esta fracción del 40% resulta casi exacta pata los ttactores de 72-75 CV. (54-56 kW). Sopesando pot un lado los inputs energéticos y por otro la tasación de la energía del tractor, se ve que los tractores de 72-75 CV. tienen rendimientos medios de 200 MJ de carburante/hora (4,63 litro/hora) y 280 MJ total/hora. La siguiente sección se basa en tractores de dicha ^ dimensiones (Apéndicé 7B). 7B. Traetores-carga de trabajo Los datos notmales pot hora, del Apattado antetiot, aunque son útiles pata algunos ptopósitos, tesultan una débil guía en cuanto al empleo de la enetgía en las explotaciones agtarias actuales, .y por lo tanto, para determinados cultivos. Un tractor que se mueva tirando de un gran atado, puede muy bien estar empleando más de180% de la potencia total del motot; mientras que «dando la vuelta^ al heno puede muy bien empleat poco más del 10-15 % de potencia total. Pata calcular inputs de detetminados cultivos, una aproximación mucho más satisfactoria resulta de ir sumando los inputs de las distintas opetaciones agtatias empleadas eti dicho cultivo. Los datos no muy exactos para logtar esto se exptesan en la Tabla A15. Los inputs de trabajo y los rendimientos de trabajo (potencia del motor en %, litros/hota y hora/ha.) están calculados aproximadamente por Rutherford^^, sobre la base de tractores de 74 CV (55 kW) empleados en ptuebas en grandes extensiones de terrenos en 1966/68, efectuadas por el National Agticultural Advisory Service80 del Reino Unido, y a partir de informes sobre pruebas de tractores del National Institute of Agticult ^ral Engineeting. (El autot de este ttabajo utilizó también fuentes de la NAAS pata conseguir datos muy aproximados a los de Rutherfotd). Cuando se utilizan estas cifras deben tenerse en cuenta dos importantes aspectos. Primeto, el input enetgético de cada opetación (aunque no el tiempo empleado) tesulta más o menos independiente 126 del rendimiento énergético del ttactor, en igualdad de condiciones. Por ejemplo, un tractor grande necesitatá aplicat el mismo esfuerzo de trabajo total para arar una ha. de terreno a determinada profundidad, que la que necesitatía un tractot pequeño (o un par de caballos). I.a ptincipal difetencia esttiba en que el tractor grande puede terminar su trabajo en un tiempo infetior, con mayot rendimiento. Segundo, los datos son solo aproximados: condiciones extremas de terrenos pesados o ligeros, condiciones de humedad o sequía o terrenos en laderas, pueden ptoporcionar inputs energéticos de hasta el 50% superiores o inferiores a los datos ptoporcionados. 7C. Equipamento agrícola Los inputs enetgéticos para el empleo de equipamento agtícola en las explotaciones agrarias son sustanciales: justifican el 5% del input total de la Agticultura del Reino Unido en 1968 (Tabla A2). EI cálculo de los inputs tesulta complicado potque, incluso los análisis más detallados de los costos de la explotación agraria raramente teseñan la depreciación y tepatación del equipamento agrario, como una cuestión apatte. Genetalmente, están englobados con los tractores bajo un total de adepreciación de maquinariaA o con todos los costos del tractor, empleo de carburantes y electricidad bajo el de ^maquinatia y energíaA. Incluso cuando sí existen los datos, los valores medios son bastante difíciles de encontrar: las explotaciones agrarias individuales difieren enormemente entre sí a causa de las grandes variaciones en cuanto a la intensidad de la utilización. Lógicamente una máquina con 10 años de vida que se emplea a pleno rendimiento sobte 100 has. al año, ptesentará un input energético mucho menor por ha. que otra máquina idéntica utilizada al año solamente sobre 20 has. Los cálculos empleados por la mayoría de los Balances Energéticos de cultivos del Reino Unido, a lo largo de este estudio, aparecen en la Tabla A16. Se basan en datos ptopotcionados por Kerr$t pata los costos en libras ( 1968/69) en cuanto depreciación y reparaciones por año y empleo potencial pot ha. ; es decit, en gtandes explotaciones y bien dirigidas. Resultan por lo tanto, casi con certeza, subvaloraciones de las verdaderas necesidades energéticas de las explotaciones agtarias normales. Los datos se convittieron a MJ/ha. utilizan127 TABLA A IS. INDICES DE 7RABAJO DE TRACTOR E INPUTS ENERGETI COS EN 7RABAJOS' DE CAMPO (TRACTORES DE 77 CV o SS kW. EN CONDICIONES MEDIAS) Input total Consumó Input fuel (fuelx 1,4) fuel (MJ/ha) (MJ/ha) (1/ha) Carga del motor (%) Razón de trabajo (h/ha) Atada de 0,2 m. Cultivo secundario Rotavatear profundo superficial Preparación terreno Abrir surcos y sembrar Opetación ditecta 75 66 75 55 50 50 75 1,66 0,62 2,0 1,5 0,50 0,50 0,41 19,6 6,42 23,5 13,0 3,93 3,93 4,82 840 280 1020 560 170 170 210 1180 390 1430 785 240 240 295 Pase de rulo 25 0,33 1,30 56 78 Fumigar Transportar semillas y fettilizantes Aplicación de fertilizantes' Cereales Ttansporte de la cosecha Empacar paja 25 0,31 1,21 52 73 25 0,12 0,47 20 28 25 0,62 1,99 86 120 25 . 25 0,33 0,40 1,30 1,59 56 70 78 98 Hilerear paja Operación 15 1,66 3,92 170 240 66 Levantar rasttojo 85 Cosechadora Raíces Sembtar a golpes ( 3 filas) Transportar patatas Sembrar remolacha a golpesLabor escarda, surcos li20 geros Cosechar y transportar Hierba y heno 15 Gradeo 25 Segar 0, 50 1,00 5,18 14,62 220 630 310 880 2,1 2,5 - 7,85 78,0 3,93 340 3380 170 480 . 4730 240 1,72 5,0 5,40 58,7 230 2540 320 3560 0,50 1,25 1,18 4,91 50 210 70 295 Voltear Empacar 15 25 0,63 1,25 1,48 4,91 64 210 90 295 Manejo y almacenamiento pacas Recolección fottaje Transporte heno Ensilar 15 65 25 25 1,67 2,0 2,0 1,48 3,93 20,41 7,85 5,81 170 880 340 250 240 1230 475 350 Notas: ' Aplicación de abonos attificiales, peto no estietcol 'de la explotación. + Calculados por el autor a pattit de los datos de NAAS. 128 TABLA A16: INPG^S ENERGETICOS DEL EQUIPO DE CAMPO POR ha. (DEPRECIACION MAS REPARACIONES) Input energético (MJ/ha) Arado de 2 vertederas Arado de 3 vertederas 176 86 5 vertederas contiderado 121 120 316 108 Rotavator Cultivador 18 Grada Rulo, 3 cilindros Disttibuidor fettilizante giratoria con.riderado Furnigadora, bajo volumen Scmbtadora cereales a golpes, 3-5 m. combinada 2-5 m. Cosechadora comb. con depósito autopropulsado: 2,5 m. 3,0 m. 4,2 m. contiderado Cosechadora empacadora de heno o paja Segadora (por corte) Volteadora (por cotte) Hilerear (por corte) Equipo pata manejo de pacas 41 66 25 45 34 66 158 770 908 ^ 814 820 330 1^ 45 22 270 do un índice para depreciación y reparaciones de 200 MJ/libra (Apéndice 7A). Pata el equipamento de cultivos más especializados y costosos -por ejemplo, los de patatas, zanahoria, guisantes- los cálcplos se han tomado generalmente a partir de datos más detallados sobre costes en libras, relacionado con el cultivo o a partir de otros dacos técnicosó8^ 82, utilizando de nuevo el índicé de conversión de 200 MJ / libra después de uasladar los costos en libras a los de 1968. En el caso de simples herramientas tales como pueden ser hachas o azadones, utilizados por los agricultores de subsistencia -frecuentemente es esta la única forma en que consumen inputs 129 energéticos industriales- el valor tomado en cuenta es la cifra standard de 90 MJ/kg..Esto se basa en una estimación de Berry83 sobre aceros fundidos en USA, en donde durante 1968 / 701os inputs energéticos eran de 91, 5 GJ / tm. EI transportista y otros inputs de postfabricación añaden un valor despreciable a esta cifra. Resulta interesante el comprobar que estos 90 MJ/kg. son casi idénticos en la fabricación de tractores medianos o pequeños. 130 APENDICE 8: PIENSOS Las importaciones y los procesos de fabricación de piensos contribuyen en casi un 30 % al input enetgético bruto de la Agricultuta del ^Reino Unido, en tanto que, para algunas explotaciones agtazias la compra de piensos es la responsable de la mitad del input energético total (ver Bslances Enetgéticos 1-16). EI cálculo de los inputs de los piensos comerciales, ya sea basándose en su valor en libras o su peso en tms. , como generalmente vienen expresados en las estadísticas de la Agticultuta, lleva implícita una serie de pasos a seguit. EI primeto consiste en calcular la enetgía requerida para cultivat las materias primas necesarias paza la elaboración de los piensos, ya sea en el Reino Unido o en el extranjéro, así como el transporte marítimo de las mencionadas materias primas hasta el Reino Unido. En la Tabla A17 se tealizó esto para el año 1968. Los pesos en tms. provienen de datos de las estadísticas oficiales34, y son estimaciones del contenido de las materias primas de todos los suministros de piensos vendidos por mezcladores y fabricantes del Reino Unido. Los inputs enetgéticos pot tms. se basan en cifras mostradas en los Balances Energéticos de cultivos con respecto al Reino Unido, y en algunos casos, con tespecto a ottos países (por ejemplo, maíz y soja americanos y piensos con harina de pescado). En los caoss en que no existe ningún Balance paza un pienso importado, se supone que ha sido cultivado con el mismo apone energético que su equiva' lente inglés. Natutalmente, esto resulta solo un cálculo aptoximado, peto de todas formas no influye demasiado en el resultado final. Los inputs del transporte se basan en una cifta media de 2,7 GJ/tms. (ver Apéndice 11B), en tanto que los subproductos tales como los salvados de los cereales se consideran como mercancías libres de enetgía. El resultado total de 84,1 MGJ es equivalente a los 6,17 GJ/tms. de materias primas cultivadas paza la elaboración de los piensos, mien131 tras que pata solo los cereales el total es de 53,05 MGJ (22,70 + 18,67 + 65% de la energía del transporte marítimo) es equivalente a 5,19 GJ/tm. El segundo paso es sumar el input enetgético total pata fabricar, envasar y transpottar lós piensos en el Reino Unido, lo que ya se estableció como 51,3 MGJ pata 1968 (Apéndice 1B). EI paso tercero consiste en dividit los inputs del cultivo y elaboración entre piensos compuestos y asimplesA (es decir, principalemnte ceteales que se utilizan como piensos o bien directamente o sufriendo pequeñas manipulaciones, a excepción de su envasado, almacenamiento y transporte). Se consideta que los piensos simples son en su totalidad acereal purom con un input de cultivo de 5,19 GJ/tm. Pata los procesos... etc., se adopta de forma arbitratia que los inputs pot tonelada de los compuestos es casi cuatro veces superior a las de los simple^, resultando pata los compuestos un valor de 4,74 GJ/tm. y pata los simples 1,19 GJ / tm. El último tesulta ligeramente supetior al valot que se podría esperat pata el envasado más el transporte, y así incluye una cantidad simbólica, como muestta, pata almacenamiento... etc. Utilizando fuentes oficiales para cantidades y precios medios durante los años 1967-68 y 1968-6934, y dividiendo después tal como muestra la Tabla A18. Debe resaltatse que el input total pata el cultivo es ligeramente superior que el de la Tabla A17, ya que las cantidades registradas en las estadísticas resultan también ligeramente más elevadas. Un análisis semejante, tomando como base la superficie, proporciona valotes ptóximos a 4,40 tm. /ha., pata todos los piensos. En la mayoría de los Balances, que aparecen en este trabajo referidos a explotaciones agrícolas y ganaderas, se utilizan los datos de 1970/71 en vez de los de 1968. Si se da por válido que los inputs físicos no se altetaron apreciablemente en el intervalo de dos a tres años, lo cual patece razonable, se puede tealizar un análisis idéntico al anterior, empleando los pesos adecuados en tms. durante el período 1970 / 71. Operando de este modo, se obtienen los valores de 213 MJ/libra, 9,57 GJ/tm. y 4,45 tm/ha. para todos los piensos, incluyendo la fabticación, etc. Estas cifras son las empleadas. La ligera reducción a partir del input energético por tonelada del año 1968 fue debido en gran patte a importaciones menores de piensos de gran contenido enetgético, tales como el maíz y hatina de pescado. 132 TABLA A17: INPUTS ENERGET7COS PARA EL CULTTI^O DE PIENSOS COMERCIALES, R. U. 19G8 Cantidad (Mt) Cultivor R. U. Trigo Cebada 1,585 3,499 Avena Salvado 0,332 0,454 Total cereales Judías, guisantes 5,87 0,033 Harina pescado (fabri.) Hierba y heno Vatios 0,Ó80 0,060 0,010 Referencia Conside- Inputs energét. rados (GJ7t) (MGJ) Balance 19 Balance 17 como cebada por produao 4,3 4,6 6,82 14,35 4,6 - 1,53 - 4,5 22,70 0,15 11,8 4,6 4,6 0,94 0,28 0,04 12,2 6,86 - 8,27 2,67 0,49 Pulpa de remolacha 0,562 Balance 43, 44 Balance 79 estimado como cebada Balance 23 Residuos lácteos y malta Total no cereales 0,115 1,04 pot producto ^ Importador Trigo Cebada 0,620 0,106 4,3 4,6 Avena 0,010 Maíz Sorgo Salvados como R.U. como R.U. como R.U. Balance 76 2,309 0,135 ' por produao 1,279 0,004 1,260 como R.U. '(US soya) 4,5 7,05 0,458 Balance 79 como R.U. Harina pescado (captutas) Varios Desperdicios de la carne Total no cereales ' 0,172 0,460 2,354 TOTAL GLOBAL 14,79 0,68 18,67 por produao 14,8 0,02 8,89 6,79 4,6 0,79 - 16,49 .18,0 Transporte barcos Total importaciones 0,04 5,9 S,0 - 4,36 Total cereales Judías y guisantes Tona proteínas 4,6 6,71 53,2 13,63 84,1 Notas: ' Scgún fuentes dc los USA. tm / ha. y prccios dc vcnta a pan ^ de las cscadíscicas agrícolas dc los USA^. Input cncrg^tico/f a panir de los análisis input-outpuc dc HctcndcenBS. 133 Estos datos se aplican únicamente a la totalidad de los piensos. Sin embargo, las diferentes especies animales (ganado vacuno, cerda, aves... etc.) varían considerablemente su consumo de piensos según las tres siguientes razones: 1. Los ingredientes utilizados en los piensos compuestos adquiridos por el agricultor. 2. Las ptoporciones de piensos compuestos y simples adquiridos por el agricultor. 3. Las proporciones de piensos (compuestos más simples) adquiridos por el agricultor en oposición a los piensos obtenidos en la propia explotación. TABLA A18: INPUTS ENERGETICOS PARA PIENSOS COMPUESTOS, SIMPLES Y COMERCIALES, R. U. 1968 Simples Compuestos , Todos los piensos Mt 4,291 10,132 14,423 GJ/t MGJ 5,19 . 22,3 6,58 66,7 6,17 89,0 4,74 48,0 11,32 3,68 53,1 9,85 ,f/ Cantidad de piensos comerciales Input del cultivo Fabricación, etc. input Total input Precio medio por tm. 1968 Input energético/aé GJ/t MGJ GJ/t 1,19 5,1 6,38 MGJ 27,4 ^ MJ/^ 28,20 226 114,7 142,1 37,38 303 34,65 . 284 En este estudio no se hace ningún intento para tener en cuenta el primer factor. De hacerlo adecuadamente, se deberían elaborat detallados Balances Energéticos de cada constituyente del pienso paia cada país de origen. Todos los piensos compuestos se considetan pot tanto en igualdad de contenido energético. EI factor segundo catece de imponancia cuando solo se tienen en cuenta valores medios nacionales. En 1970/71 la totalidad del gana134 do vacuno, cerda y aves recibió respectivamente el 76,65 y 71 % de los piensos adquitidos en forma de piensos compuestos (a 10,9 GJ/tm.) y los restantes como simples (6,4 GJ/tm.)34. La combinación de estas ciftas exptesa los inputs energéticos pata todos los piensos adquiridos dentro del 3% del valor medio (9,57 GJ/tm.) pata ganado vacuno y de cerda, y denuo de 0,5 % pata aves. Estas diferencias se encuenttan perfectamente dentro del matgen admisible de error del 5-10%, aunque desde luego, las explotaciones consideradas individualmente pueden mostrar grandes variaciones con respecto a esta cifra. EI tercer factor se toma en cuenta en todos los Balances relevantes, peto solo otta vez con respecto a medias nacionales, empleando la misma fuente de datos que con anterioridad. De manera obvia, las implicaciones energéticas según se alimente el ganado con el 100% de piensos adquiridos o con el 100 % a base de piensos producidos en la misma explotación, resultan considetables: en tanto que el primet caso incide en sustanciales inputs energéticos de la industria de fabricación de alimentos, el último evita éstos pero exige un considerable empleo de maquinaria y enetgía en la propia explotación pata componet los piensos. 135 APENDICE 9: SECADO DE COSECHAS 9A. Secado de cereales El secado de los cereales constituye un factor importante, aunque muy variable, en los consumos energéticos de la producción de cereales. Las variaciones que se deben tanto a los métodos empleados como a las diferencias de las condiciones climáticas, regionales y anuales de la recolección, pueden hacet que el input total enetgético para una tonelada de cereales cosechado, se eleve en casos extremos hasta el 50 % o descienda hasta el 10 %. Como tegla genetal, los ceteales deben secarse hasta hacerles petder gran parte de su humedad de constitución, de forma que solo contengan, al final del proceso de un 14 a un 15 %, con el objeto de almacenatlos a latgo plazo. En el caso de que estos cereales sean destinados al consumo de los animales de la propia explotación, el contenido de humedad debe ser de un 16% aproximadamente. Cuando se cosechan, los cereales pueden tener desde un 22% de humedad, en las condiciones más desfavorables, hasta un 18-19°r6 en años de climacología normal en el cincurón de cultivo de cereales del sur y sudeste de Inglaterra, o incluso solo un 14-15% en años excepcionalmente secos. El secado exige por tanto eliminar encre un 0 a un 8% de humedad del grano. La cifra que consideraremos aquí es de un 3% del contenido de humedad (por ejemplo, la mitad de la cosecha debe set secada restándole un 4% para almacenat, y la otra mitad solo un 2% para alimentat al ganado) como se señala a menudo en valores medios en las principales regiones cerealistas. Dentro de la escala del 15-20% de contenido de humedad, el quitat un 1% de la misma, supone exuaet unos 12,5 kgs. de agua por cada tm. de gtano secado. EI mínimo teótico de enetgía para logar esto, se establece por el calor latente de la evaporación del agua 137 (2,26 MJ/kg.) y es de 28,3 MJ. Esta energía se puede administrat sin ningún inputs de catburantes, solo con el empleo del sol. Pero las necesidades de trabajo resultan elevadas; una cosechadora con un rendimiento de 1 ha/hora suministrará de 4 a 5 tm. pot hora pata el secado. Debido tanto a estas proporciones como pata evitat el riesgo natural de la humidificación en caso de Iluvia, todos los cultivadores de cereales utilizan actualmente en la ptáctica algún tipo de secado attificial que consuma electricidad y/o carburante. La Tabla A19 muestra los inputs energéticos directos y totales para una gama de equipos de secado, basándose todos ellos en la elimi- TABLA A19: INPUTS ENERGETTCOS DIRECTOS Y TOTALES PARA EL SECADO DE GRANÓ (POR TM. DE GRANO SECADO CON UN 1% DE CONTENIDO DE HUMEDAD): Mínimo teórico Quemadot de fuel (muy eficiente) Secadot de maíz (típico)' (2,05 litros gas-oil; 1,20 kWh por ventilador) Secadores de plataforma; grano en sacos (2,09 litros gas-oil; 1,53 kWh. por ventilador) Secadores continuos (1,79 litros diesel; 3,94 kWh porventilador) Eléctricos: movimiento radial (12-15 kWh) Eléctricos: sobre el suelo (12-16 kWh) Eléctricos: movimiento vertical (15-18 kWh) Energía directa Enecgía total (MJ) (MJ) 28,3 Fuente text 41,0 46,5 86 82,4 105,8 87 5,3 12,5 8 82,5 43,2 134,2 173 89 90 -54,0 -43,2 -57,6 -216 -173 -230 90 54,0 216 90 -64,8 -259 Notas: ' Basado en el secado del maíz desde un 40 a un 15 % de contenido de humedad (417 kgs. de agua cxaaida). 138 nación del 1% del contenido de humedad. Teniendo en cuenta la cantidad de diferentes tipos de secadores actualmente existentes31, un valor medio razonable a adoptar es el de 130 MJ/tm. (1 % de contenido de humedad) 0 390 MJ/tm. de grano. Esta cifra es la considerada a lo lazgo de este estudio, pero debe, desde luego, ser manejada con cautela. Dicho valot coincide casi exactamente con una estimación a pattir de los datos nacionales. Utilizando cifras del Electricity Council, Bayetto y colaboradores3i calculazon que la cosecha de cereales de 15,4 millones de tms.34 del año 1972, necesitó 239 millones de kWh. paza secarse y otros 31 millones adicionales de kWh. pata el manejo y almacenamiento del cereal. De todo esto tesulta 17,5 kWh/tm. o unas necesidades enetgéticas btutas de 2S2 MJ/tm. Bayetto calculó también (citado por Stansfield) que el petróleo empleado en el secado de los cereales es de 1.748 x 10^ MJ, basándose en una base directa. Teniendo en cuenta el input energético para los procesos de refinación, disttibución... etc., resulta 1.982 x 10^ MJ, 0 129 MJ/tm. EI input enetgético total es por tanto de 381 MJ/tm. grano .recado. Se añade una catga adicional de 130 MJ/tm. grano .recado paza la fabricación del equipo de secado y almacenamiento, utilizando los datos de costos en libras; a pattir de una serie de fuentes^g^ 78. 9B. Hierba y heno La hietba que crece en los ptados posee un contenido normal de humedad del 75-80%. Para su almacenamiento como heno, este debe reducirse hasta aproximadamente un 18-20% de contenido de humedad, en tanto que lá hierba seca contiene notmalmente altededor de un 10%. Así, cantidades muy grandes de agua necesitan eliminarse del modo que sea: por ejemplo, 3,1 tms. por una tm. de heno cuya humedad se redujo del 80 al 18 °h . Tradicionalmente toda esta humedad se eliminaba en el campo gracias al sol, aunque con las desventajas de tener que emplear gtan cantidad de trabajo, de una pétdida en el contenido de los nutrientes (algunas veces superior al 70%), así como afrontat el riesgo de la pérdida de la cosecha a causa de la humedad. Una práctica común, cada vez más empleada, para la henificación, es el dejaz que la hierba se marchite, una vez segada, sobre el suelo hasta alcanzaz alrededor del 139 40-50% del grado de humedad, o aun menos, si esto es pósible, para después completaz su secado aen el henil: haciendo circulát a su ttavés una corriente de aire frío o ligeramente caliente. Con la producción de hierba seca, el rápido secado artificial, hace que la hierba húmeda (o a veces pazcialmente matchita), una vez segada, se convierta directamente en hierba seca. La ventaja es una mínima pérdida de nuttientes (notmalmente solo el 5%), aunque pot el contratio el aumento del consumo de carburantes es enorme. Ross^', realizó un buen resumen de los distintos métodos según sus costos en libras y la calidad obtenida del heno o hierba, siendo estos datos los utilizados aquí. TABLA A20: INPUT ENERGETTCO DIRECTO Y TOTAL PARA EL SECADO DE HENO Y HIERBA (POR TM. DE PRODUCTO F7NAL: FUEL OIL Y ELECTRICIDAD SOLAMENTE) Heno Mínimo teótico: 25-15% mc 35-15°h mc 30-20% mc 40-20% mc Quemador de baja temperatura:40-20% mc (sin tener en cuenta la pequeña carga eléctrica por kilo de agua eliminada) Eléctticos, intervalos (90-130 kWh) Ptomedio de muchos valores (120 kWh) Eléctticos, almacenado en graneros cerrados (150-240 kWh) Eléctricos, montones en el suelo de malla (180-360 kWh) Energía Energía direaa (MJ) total (MJ) Fuentes 300 700 320 750 1.630 1.850 92 324 -468 1.296 -1.872 90 432 1.728 90 540 2.160 90 -864 -3.456 648 -1.296 2.592 90 -5.184 Secado de hierba Mínimo teórico: 80-10% mc Unidad grande (10 t/h): 247 1 fuel, 120 kWh 9.870 12.930 93 Unidad pequeña (4 t/h): 364 1 fuel, 54 kWh 14,070 16,510 93 140 7.910 Como en el caso de los cereales, los inputs enetgéticos para el equipo de secado, varía enotmemente. Una escala de valores para los distintos métodos se expresa en la Tabla A20. Todos los datos -que se basan en ensayos extensivos en las actuales condiciones agrariasestán referidos a una tm. de heno o de hierba seca. A partir de esta escala, un valor medio (y bastante conservador) es el que aquí tenemos en cuenta de 1.700 MJ/tm. de heno, equivalente a 2.000 MJ/tm. de materia seca de heno con un 15% de humedad. A esto se añade 360 MJ/tm. de materia seca para la depreciación del equipo y reparaciones, según los costos en libras expresados por Ross91. De este modo, el total final adoptado es de 2.360 MJ/tm. de materia teca de heno. Debe tesaltazse que esta cifra es .rolo para el heno que se secó en mayor o menor medida y se emplea en este estudio, exclusivamente cuando se tiene la certeza de que se procedió de aquella manera: es decir, en cultivos intensivos en los que se obtienen vazios cortes de hierba al año. La cifra nacional media resulta clatamente inferior, ya que la mayoría del heno se cosecha aún por los métodos tradicionales. Según Bayetto y colaboradotes31 y Stanfieldl^ para los 9,75 Mt. de heno cosechadas en 197234, el secado consumió 57 x 10^ kWh. de electricidad además de 115.000 GJ de carburantes. Convittiendo estas ciftas a un input total, tesultan 951.000 GJ o solamente 98 MJ/tm. de heno .recado. En los casos en los que se consideró la formación de heno como de :bajo rendimientos (Balances Energéticos 2435) el input energético pata el secado, se adoptó como nulo. Por el conuazio, la hierba seca requiere enormes cantidades de energía Theophilus93 ofrece cifras detalladas paza una tm. de hierba seca empleando una pequeña (2,5 tm/h.) y una gran (10 tmlh.) unidad. En el último caso, con un sistema de ^costo mínimo>, los datos de inputs son de 2471itros de carburante (10,70 GJ); 120 kWh. (1,73 GJ); y 4,671ibras en 1971 para repazaciones, instalaciones de edificios (0,50 GJ). El total es de 12,93 GJ o el equivalente a 0,30 tm. de petróleo por tonelada de hierba seca. Considerando el 109^6 de contenido de humedad resulta 14,4 GJ por tm. de materia seca de hierba seca. Es interesante el resaltar que con estos costos anteriores a 1973, los carburantes y la electricidad imponazon e143 % de los costos de la operación de secado, en libras, incluyendo en este valor la depreciación y el uabajo. Con la pequeña unidad, el input es de 18,9 GJ por tm. de matetia seca de hietba seca, con carb^rantes y electricidad que 141 forman parte del 5 5% del coste total en libras. Sin embargo, la práctica actualmente desartollada de prensat previamente la hierba húmeda para extraer parte del agua de constitución antes de secarla -agua que resulta poseer un alto valot nuttitivo- puede llegar a reducir las necesidades energéticas totales hasta en un 50%. 142 APENDICE 10: INPUTS MENORES Ciertas cantidades de inputs de producción que considerados individualmente poseen una menor trascendencia en cuanto al consumo enetgético, se incluyen en algunos Balances de las explotaciones o de los cultivos; pot ejemplo, ttatamientos fitosanitarios, servicios contratados, cuerda y alambre, agua, varios y semillas. Los inpúts energéticos para todos ellos se calculan del siguiente modo: Tratamiento.r fito.ranitario.r; Leach y Slesser^l dedujeron aproximaciones de las necesidades energéticas del D.D.T. (insecticida) y del 2,4-D (herbicida) que dieron los siguientes resultados: 105 MJ/kg. y 95 MJ/kg., tespectivamente, con los índices de conversión aquí utilizados. Estos valotes son utilizados para todos los insecticidas y herbicidas siempre que se proporcione una cantidad física. Si solo se dispone de los costos en libras, los valores de Chapman / Census de 692 MJ/libra a pie de fábrica, es la que adoptamos, teniendo en cuenta que en este valor ya se incluye la inflación que corresponda al año en que se hace la estimación. Seruicio.r contratado.r, Servicio.r i/eterinario.r y Medicina.r. La cifra que prevalece paza el consumo energético ptimatio por libra-GDP (ver Apéndice 4). Cuerda y alambre. EI valor de Capman/Census paza la .^indusuia del alambre^, en 1968, de 406 MJ/libra, en la que ya se incluye la inflación por tm., paza el año de referencia; por ejemplo, a 297 MJ/libra en 1970/71. i/ario.r. Si no se especifica lo contratio, 180 MJ/libta como valor medio normal obtenido a partir de los datos de Chapman/Census, paza las indusuias de ingeniería mecánica en 1968, e incluyendo en este valot, la inflación paza el año de referencia. En los casos en que se especifica el tipo de industria, se adoptan los datos de 143 Chapman/Census. Pot ejemplo, «planta industial y siderurgia^, «tuercas y tornillosa... etc. Agua: en el caso en que se considete solamente la conducción de agua, 9,1 MJ/tm. 0 1.000 littos; para la industria suministradora de agua, los datos ptovienen de Chapman/Census pata 1968. Si se adopta el costo en libras, el valor es de 295 MJ/libra para el año 1968 incluyendo como siempre el valor de la inflación para la fecha de referencia. Semilla,r: en el caso de que las semillas se destinen al consumo humano (ceteales... etc.) no se les carga ningún input enetgético. Pot el contrario, el peso de las semillas empleadas se deduce del output de la cosecha. Para otro tipo de semillas se cazgan a180 % del valor de las compras de 1968, y pata la energía ptimatia pot GDP en libtas, incluyendo la inflación paza el año de referencia. Esta reducción del 80 % se adopta de acuetdo con los análisis -no oftecidos aquí- de los inputs y outputs energéticos en tm., y de los ptecios pata las semiIlas de pastos. 144 , APENDICE i i : TRANSPORTE 11A. Por carretera ' La mayor parte de las materias ptimas alimentatias se uansportan por cartetera. En 1965 las industrias de la alimentación del Reino Unido enviaron el 97 % de sus remesas y el 85 °Yo del tonelaje total, por catretera, lo que equivalió a un 25 % del total de los transportes por carteteta94. Dutante 1968, empleando cálculos del Depaztment of Envitonment refetidos a los años 1967-68, sobte el tráfico pot carretera de los alimentos, bebidas y tabaco, estos conscituyeron el 21,8% del flete total por tm/km. recorrido, por un total de 16.770 millones de tms/km. Esto suma la cantidad de 305 tm/km. pot persona en el Reino Unido. Refiriéndonos a los principales sectores de la producción de alimentos, los inputs energéticos por metcancía fletada por catretera, se expresan solo con tespecto al total y se calculan a pa^tit de los costos en libras, siendo la cifra de 120 MJ/libra, la deducida por Wright para 1968 (Apéndice 4). Pero en determinados casos, resulta esencial el ' expresaz los inputs según vehículo/km. o tm/km. Los valores medios paza estas unidades no son difíciles de calcular. Datos bastante exactos existen para el consumo total de catburantes de los vehículos de ttansporte pot carreteta del Reino Unido (tanto para gasolina como paza diesel)35 y paza el total de las metcancías transportadas41. Estos se tesumen en la Tabla A21. La enetgía contenida en los catburantes, se expresa, en relación con el total en el Apéndice 3. Los inputs enetgéticos del cazburante petmanecieton, casi sin variaciones, altededot de 4,0 MJ/tm-km. y 8,8 MJ/vehículo/km. Peto a estas cifras deben añadirse los inputs paza la fabricación del vehícu- 145 lo, y para los recambios, además de los neumáticos... etc.' Chapman95 calculó estos inputs, pata 1968, como 50 y 38 MGJ respectivamente, añadiendo así un 28% al input total del carburante. La distribución a partes iguales de estos inputs indirectos, sobte la base de vehículo-km. o tm-km., es un ejercicio extremadamente complejo. Los inputs para recambios y neumáticos están íntimamenté interrelacionados, con el tamaño del vehículo y los kms. recotridos en el año. Pero los inputs energéticos de la fabricación, no lo están: cuanto mayor númeto de kms. recorra el vehículo durante su vida, dicha catga extta por kilómetto, tesultatá infetiot, aparte de que la energía de fabricación no es fácil de disttibuir equitativamente entre los vehículos de distintos tamaños (peso sin catga). Tomando como base una tm-km. , la situación resulta aún más complicada. Se trataron de resolver estos problemas pero el intento fracasó, debido principalmente a la falta de cualquier dato seguto sobre las horas-vida y millas-vida medias de los vehículos de diferentes capacidades. Por acuerdo, se consideró el añadir un valor arbitrario, 25 %, a los inputs que se tefieren exclusivamente al consumo de carbúrante, tesultando los inputs para el vehículo normal de carga, de 11 MJ/km. y S MJ/tm-km. En el caso de cualquier transpotte actual de mercancías, estos valotes medios pueden, sin embargo, inducir a graves errores. Una pequeña camioneta puede desplazatse un kilómetto consumiendo alrededor de una teicera parte del carburante, del que consume un camión de 20 tms., mientras que si cualquiera de ellos viaja sin carga,^ su consumo por tm-km. resulta lógicamenté infinitamente más elevado. Se necesita un análisis adicional por tipo o clase de vehículo. Afortunadamente, existen datos excelentes sobre estó, suministrados por pruebas detalladas de consumo de carburantes llevadas a cabo ' Podría azgumentarse que los inpucs energécicos para la construcción de cazrcteras, y su mantenimiento, iluminación, apazcamientos paza vehículos... etc. deberíari también incluirse. Monimer^b estimó que dichos inputs sumaban 61 MGJ en 19fi8. Sin embazgo, este valor debe repartirse a partes iguales enue todos los uazupones de pasajeros y mercancías; la iluminación de carreteras, que consume el 4096 dcl total, debe cambién compaztirse con los peacones y otros. Dicha distribución equitaciva no resulta evidencemente una cazea fácil. Exisce otro argumento más, concra la inclusión de estos inputs; a sabcr, quc cualquier aumento o disminución del ttáfco apenas si altera cl total y por lo tanto, no debería cazgarse contra un viaje marginal excra. Siendo paza estc tipo de viaje para el que en este aabajo, se utilizan datos dispcrsos sobre el transporte por cazretera. 146 TABLA A21: 7RAFICO DE MERCANCIAS POR CARRETERA Y CONSUMO DE CARBURANTES, R. U. 1965-72. 1971 1972 37,80 39,15 40,21 87,8 86,8 88,6 1965 1968 1969 10^ vehículo-km. 36,28 36,48 36,65 10^ t-km. MGJ input carburante MJ/vehículo-km. 68,8 79,0 83,4 280,6 315,5 327,2 335,7 345,5 MJ/t-km. 1970 351,5 7,73 8,65 8,93 8,88 8,83 8,74 4,08 3,99 3,92 3,82 3,98 3,97 TABLA A22: INPUT ENERGETICO DE CARBURANTE PARA VEHICULOS DE CUA7R0 TAMAÑOS, R. U. 1968. Peso sin catga (t) Peso con catga media (t) Peso totalmente cargado (t) Camión + tr_ailer 20 tm. Camión Minibus 7 tm. Camión 12 tm. 1,24 0,396 4,48 2,41 5,56 7,45 6,53 13,03 7,71 13,03 20,64 4,33 4,76 6,73 7,32 8,31 8,92 9,83 9,09 12,3 14,5 8,66 10,7 11,9 12,0 16,9 21,2 12,1 14,8 15,3 17,1 23,7 26,9 Carburante MJ por vehículo km: Carreteras rurales: vacío media carga carga completa Centro ciudad: vaúo media carga carga completa por la UK Ttanspott and Road Research Laboratory^^ que expetimentó con cuatro tipos de vehículos de mercancías utilizando diversos cargamentos a lo largo de una amplia gama de carteteras y condiciones de tráfico, desde caminos rurales y autopistas hasta el centro de Londres. Algunos resultados, empleados en varios lugates de este trabajo, se teflejan en la Tabla A22. Los inputs de carburante se exptesan en btuto, peto e125 % de sobrecarga para la fabricación, recambios y neumáticos, no se incluyeton. 147 TABLA A23: ^ONSUMO DE CARBURANTE PARA EL 77ZANSPORTE POR BARCO Tipo barco(103 t) Catga completa (MJ/t-km.) Consumo Fuente Petrolero 215 120 112 100 80 60 40 0,050 0,064 0,087 0,070 0,077 0,085 0,100 99 100 99 100 100 100 100 Carguero 153 96 14 7 0,051 0,057 0,186 0,200 101 101 101 101 0,127 101 Media de todos los cargos, yatdas USA, 1972 49 A partir de estos datos, pueden calculazse los inputs energéticos pot tm-km., para cualquier combinación de cargamentos -pot ejemplo, «salida completamenté catgado, retorno vacío^-. Los resultados por tm/km. varían desde 18,5 MJ (minibus completamente cargado por el centro de la ciudad) hasta 0,74 MJ («Mandatorn completamente catgado por caminos rurales). Una compatación con los resultados medios nacionales (Tabla A21) sugiete o que la mayoría de las mercancías se transporta en pequeñas camionetas -lo que no es así- o que existen una gran cantidad de camiones vacíos yendo de un lado para otro. ^ Finalmente, el input de catburante .paza un coche normal se considera que es 0,4 MJ/km., basándonos en todas las estadísticas nacionales35• 41. Esto equivale a un consumo de 10,1 litros/100 km. 11B. Transporte maritimo Los inputs energéticos por unidad útil de transpotte mazítimo -por ejemplo, una tm-km.- vazían ampliamente, siendo los ptin148 cipales factores la antigiiedad del bazco, su tamaño y su velocidad. Los dos últimos citados son los más críticos, ya que el consumo de cazburante de un barco suele expresatse como proporcionalmente a Dzi3 y a V3, en donde D es el desplazamiento en unidades de tiempo y V es la velocidad en nudos98. El primer factor está relacionado principalmente con el diseño del batco y la calidad de los motores; sin embazgo, si se refleja en consumo de cazbutante por km., estas cualidades pazecen ya haber llegado a un valot 1'unite98. Los cálculos de este ttabajo se basan en la atecnología supétiorm del período 1970/72, deducidos de datos detallados sobte el consumo del carburante en condiciones de trabajo normales, obtenidas de ttes fuentes^^• 101.Los resultados se expresan en la Tabla A23, y se tefieren más a los inputs totales que a los directos. También se considera que el barco ttanspotta su carga máxima. Estos datos se sitúan agrupados alrededor de una suave curva de consumo con respecto a la catga. Esta curva se utiliza paza bazcos de dimensiones medias. Las mayores necesidades paza el transporte por maz, en el momento presente, son demandadas por los alimentos y piensos importados al Reino Unido. Pata el grueso de estas impottaciones -pot ejemplo los cereales- se adopta una cifra media de 2, 7 MJ/tm. Esta se basa en un minucioso análisis, con tespecto a 1968-69, no exptesado aquí, de las cantidades de cereales totales importadas de diferentes regiones (costa oriental de los USA, Canadá, Sudamérica, Australia, Africa del Sur, Europa)75; la longitud de los viajes por maz al Reino Unido; dimensiones medias del barco utilizado^s; y los datos de la Tabla A23. Los inputs enetgéticos pata la construcción del bazco se estimó que añadían solo el 2% aptoximadamente a esta cifra; los viajes por tren desde el lugaz del cultivo hasta los muelles, alrededor del 10%. Estas adiciones no se tuvieron en cuenta, principalmente, porque había una tendencia constante al empleo de barcos mayores, reduciéndose así el valor del transporte mazítimo en sí. 11C. Transporte por ferrocarril EI ferrocartil juega solo un papel secundazio en el uazuporte de alimentos, tanto en estado natural como elaborados, en el Reino Uni- 149 do, siendo responsable solo del 11% de las toneladas-km, en 196594. Una necesidad energética calculada por Mortimer^^ basada en el consumo de cazburante o electricidad de los trenes, la fabricación del equipo, los materiales de vías y su emplazamiento y la mayoría de los gastos de la British Rail, es la energía considerada. Dicha cifra se tefiere a un viaje normal, es decir, incluyendo viajes con retorno en vacío, y tesulta 1,4 MJ/tm-km. Los datos de la British Rail sugieren que solo pata el consumo de catburantes, con trenes normales completamente cargados de mercancías, el input energético es de 0,36 MJ/tm-km. ^' En numerosos cálculos, sin embargo, el input energético se basa en costos en libtas, siendo su valor de 185 MJ/libra deducido, paza 1968 por Wright (Apéndice 4). 150 B^zl^znces energético.s , Balance Total de las explotaciones agtarias del Reino Unido Explotaciones agrícolas y ganaderas del Reino Unido Sistemas pre y semi-industriales Sistemas diversos industriales Pesquerías Ptoteínas para piensos a part^ de derivados del petróleo 1-16 17-48 49-72 73-77. 78-83 84-85 A no set que se indique lo conttario, toda la tietra se considera como produaiva durante todos los años. La tierra posee, por lo tanto, un cfactor de reutilizaciónA (R = 1,0) y los datos, ya sea pata uno o varios años medios, son los mismos. En cuanto a muchos sistemas pte-industriales, la tierta se deja en barbecho durante largos períodos. En estos casos, se da el factor R in- TABLA 1-16: TODAS LAS EXPLOTACIONE, 1 2 3 4 Especializados en la ptoducción láctea 6 5 Leche principal pcoducción (S = menor; L = mayot; Av = medio) Inputc (GJ) Fertilizantes Carburantes Electricidad Maquinatia Piensos comprados Otras deducciones menores Totales Supe^cie para el cultivo de piensos Ttabajo (en las explotaciones) Output: energía (GJ) Leche y productoslácteos Vacuno Huevos CWino Cetda Pollo Cereales Raíces y ottos Totales % de animales + productos 152 ha días S L Av S L Av 4,94 16,63 5,16 9,15 8,93 4,35 6,36 13,16 4,90 3,30 12,SG 3,24 G,84 5,85 3,89 5,11 9,71 3,34 2,29 , 2,53 2,74 2,70 2,02 2,79 14,34 2,64 46,24 12,65 5,52 43,34 14,06 3,89 45,07 10,70 2,48 34,24 9,51 5,36 36,97 0,364 17,1 0,321 16,5 0,357 17,4 0,272 13,5 0,241 13,7 9,79 4,40 34,64 0,249 13,6 10,35 9,66 10,G2 5,45 5,83 5,58 1,01 0,13 0,06 0,14 1,21 0,08 0,02 0,2G 1,12 0,08 0,06 0,14 1,40 0,06 0,34 0,18 0,96 0,27 0,05 0,42 1,11 0,16 0,20 0,30 0,67 9,29 5,13 3,54 18,74 9,96 0,19 12,55 93 1,00 21,54 S2 0,19 17,34 69 0,27 11,24 G6 0,97 27,24 28 0,90 18,21 40 dicado, o asumido. Por ejemplo, R= 0,1 indica que cualquier superficie dada de una ha., se cul[iva solamente una vez cada 10 años. Los inputs y outputs pata el año de cultivo serían, en este caso, 10 veces superiores á los expresados en el Balance, donde se consideran valores medios durante un largo período. ^GLATERRA Y GALES, 1970-71 (GJ/ha/añoJ 8 7 9 10 Vacuno y ovino 11 12 14 13 Ovino 15 . Cerda y pollos Cereal L Av S L Av 2,23 3,51 2,58 0,53 0,65 0,48 3,9G 7,55 5,46 5,42 7,93 4,31 G,41 3,22 1,78 2,18 19,26 14,42 18,82 8,99 1,56 0,G1 1,24 0,60 0,29 0,37 9,64 13,59 14,38 1,86 1,27 3,25 1,35 1,07 1,58 2,2G 1,19 2,65 1,7G 0,40 1,17 0,11 0,32 0,8G 0,52 0,30 0,99 0,29 3,94 50,14 8,47 5,G1 61,75 10,88 5,11 69,35 10,51 2,39 2,11 4,51 17,59 13,34 15,83 6,03 4,42 4,61 95,41 113,80 123,63 25,28 S S 1,273 L 16 1,567 Av 1,761 Av 0,083 0,040 0,062 0,030 0,022 0,025 7,24 G,2G 7,07 3,57 3,2G 3,03 0,20 1,54 0,03 0,46 0,06 - 0,2G 0,85 0,38 - 0,18 1,35 0,02 0,4G 0,08 -- 0,16 0,25 0,32 0,03 - 0,17 0,19 0,29 0,01 - 0,14 0,21 0,27 0,03 - 0,28 2,23 0,19 1,05 1,05 1,51 0,51 G,52 1,05 1,05 0,90 0,38 4,42 0,14 1,11 1,11 0,12 0,44 0,05 0,11 0,02 0,02 2,69 11,80 G,00 0,G4 1,10 0,44 15,74 23,37 19,21 40,G5 1,28 2,11 1,20 - 0,05 0,15 G,74 8,29 G,07 6,9G 6,26 37 15,41 10 9,28 23 14,1 54 1,81 3G 1,14 57 31,94 30 47,96 34 39,02 35 48,62 2 25,1 33,0 33,2 0,054 7,55 153 TABLA 1-16 2 1 (continuación) (S = menor; L = mayor; Av = medio) Outputr: proteína.r (kg) Leche y productos lácteos Vacuno Huevos Vacuno Ovino Cerda Pollos Cereales ^ Raíces y o[ros Totales % de animales + ptoductos Indicer Apotte enetg. /área total GJ/ha Energía obtenida/átea total GJ/ha Energía obtenida/energía aportada E Proteínas obtenidas/átea kgP/ha total Energía aportadas / proteínas MJ/kgP Enetgía apottada/ ttabajo GJ/hombre-día Output bruto/supe^cie ^/ha explotaciones Energía apottada output ^ 4 3 6 5 Leche principal producción Especializados en la producción láctea S L Av S L Av 132 13 124 16 137 14 70 18 75 12 72 14 5 4 4 G 9 8 6 89 32 29 157 1 157 96 4 237 61 1 188 82 1 124 76 4 257 38 83 4 181 52 33,9 32,8 33,2 26,2 28,5 26,5 9,2 16,3 12,8 8,84 22,0 14,6 0,27 0,50 0,38 0,33 0,77 0,55 115 179 139 98 207 145 294 183 240 269 138 183 2,70 2,63 2,59 2,54 2,70 2,55 204 221 215 153 183 164 MJ/.£ 227 19G 210 224 202 211 1-16 Fuentes y notas: Todos los inputs y outputs calculados a partú del análisis detallado de !os datos en libras, para la totalidad de las explotaciones agrazias, extraidos del Fazm Incomes in England and Walles 1971-72102, y expresados por ha. La supe^cie es el total de la cultivada, más los prados y los pastizales; estos últimos no se ajustan en los valles. Las conversiones de libras a inputs y outputs f'ui ^os, procedentes de vazios apéndices, se hace de la siguiente forma: Inpuu Fettilizantes: media nacional escimada de 530 MJ/libra. Catbutantes: 2.650 MJ/libra. Electricidad: 1.655 MJ/libra. Maquinaria: 170 MJ/libra, suma de las depreciaciones y repazacioncs. Compra de piensos: 213 MJ/libra. Otras deducciones menores: suma de servicios conuatados, servicios veterinazios, semillas, electrificación y inejoras (todo a 186 MJ/libra, o energía primaria del Reino Unido/GDP cn libr^s); transpotte a 120 154 8 7 9 10 L 12 t3 Av S L 14 15 Av 16 Cereal Cerda y pollos Ovino Vacuno y ovino S li S L Av Av 3,0 3,3 2,4 2,1 2,2 1,9 0,1 19,5 11,6 1,G 19,7 0,5 11,0 0,1 17,2 0,3 3,2 0,1 2,4 - 2,7 0,1 3,6 40,1 6,S 117,2 4,9 79,4 5,7 1,0 4,7 3,9 4,7 3,3 3,0 2,8 1,9 0,1 1,5 1,1 0,5 0,1 - 0,7 0,1 0,2 - 0,1 - 0,2 - 52,0 3G,3 61,2 36,4 61,8 38,2 2,5 0,7 22,2 10,2 60,9 47 95,0 16,1 132,4 14 49,7 10,5 85,6 30 5,2 14,1 G3 9,1 1G,8 46 3,6 1,1 12,4 62 128,1 25,4 288 47 197,7 46,4 485 50 159,9 33,7 391 51 336,0 48,9 397 3 16,2 12,8 14,8 5,9 4,3 4,5 42,0 44,3 44,8 24,0 5,8 14,8 8,7 1,4 1,1 1,1 14,1 18,7 14,1 4G,1 0,59 0,23 0,41 0,25 0;3G 1,2 0,33 0,42 0,32 1,9 56 127 80 14 1G 12 127 189 142 377 289 101 18S 428 263 372 331 235 316 64 2,42 2,13 2,24 1,69 1,36 1,52 3,80 3,45 3,72 3,35 76 68 75 25 22 21 401 549 549 116 231 196 211 241 201 220 238 207 225 218 MJ/libra; agua a 280 MJ/libra (1968 = 29S MJ/libra paza suministro de agua); Tratamientos fitosanitatios a 60 MJ/libta; vazios a 153 MJ/libta (1968 = 180 MJ/libra), menos la deducción paza el consumo doméstico. Esta deducción sc expresa en libras en cl Fatm Incomes y aquí se susttac de manera propotcional, del input energético combinado pua cazburantes, electricidad y maquinazia. La supe^cic paza el cultivo dc piensos: se basa en la cifra media de 4,45 tm/ha. Outputt • Todos los datos en libras convenidos en toneladas dc producto, empleando los prccios medios nacionales a pie de las explotaciones, dados en las estadúticu oficiales33. Las conversiones de tms. en energía y proteínas se basan en el output de materias comestibles (es dec^ , después de deduc^ los desperdicios natutales e incvitabla), y se obtienen dc la siguicnte forma: 155 Leche y derivadot: 2,72 MJ/kg., 3,5% P. [^acuno: 10,17 MJ/kg., 13% P. peso-canal. Huevo.r: 6,62 MJ/kg., 11,9% P. peso concáscara. Ovino: 12,81 MJ/kg., 13% P. pesocanal. Ave.r: 6,03 MJ/kg., 20,8% P. peso una vez limpio y listo paza cocinaz. Trigo: 14,0 MJ/kg., 12,1% P. tms. de la cosecha completa. Cebada y otm.r cesealeJ: 13,0 MJ/kg., 10,5% P. tms. de la cosecha completa. Patata.r: 3,18 MJ/kg., 2,1% P., 20% dcsechos deducidos. Remolacha: 16,51 MJ/kg., tms. de la cosecha completa. Otro.r cultivo.r: (todos los outputs menores de estas explotaciones): promedio de cereales más raíces; Output bruto en libra.r: Fazm Incomes. Notar que el primer grupo de índices se aplica a la supe^cie total: es decir, explotación más supe^cie requerida paza el cultivo de los piensos comprados fuera de la explotación. EI Indice Encrgético (E^) y la energía por kgP son lógicamente lo mismo referidas a solamente una explotación que a la supe^cie total. Los otcos índices (hombre día y outputs brutos) se indican paza trabajo directo y solamente paza el output doméstico de la explotación. 17. CEBADA R. U. 1968-72 (Y A i/ENA) (GJ/ha-año) Input.r: Fertilizantes N, 97 kg. Fettilizantes P, 48 kg. Fettilizantes K, 48 kg. Trabajó de campo, tractores Trabajo de campo, equipo Pulverizadotes, 4 kg. Secado,carbutantes(390 MJ/t) Secado, maquinaria (130 MJ/t) Total Outputa: Cosechas brutas, 15% humedad Cosechas netas, 15 % humedad (menos semillas 0,17 t/ha.) Energía (ME) 10,9 MJ/kg.' Proteína (digestible CP 6,8%)' ^ Ratio.r: Aporte energético/grano Apotte energético/proteína Energía obtenida/aponada 7,76 0,67 0,43 3,24 1,29 0,40 1,40 0,47 15,66 t 3,58 t GJ kgP 3,41 37,2 232 GJlt MJ/kgP 4,6 67,5 E = 2,4 Fuentes y notas: Ver Balance 19' los valotes enetgético y ptoteico se incluyen como Energía Metabolizable (ME) y Proteína Cruda digestible por los tumiantesG3• 64, ya que el 76% del cultivo de cebada se dedica a la alimentación del ganado34 y los datos se necesitan para otros Balances expresados de esta fotma. I^t avena, tiene los valotes input y output muy semejantes (dentro del 2-3%) y se consideran como idénticos a los de la cebada. La produción es pequeña y más del 82 % de la cosecha se dedica al ganado para su alimentación. 156 18. MAIZ GRANO, R. U. 1973-74 (GJ/ha-año) Inputr: Fertilizantes N, 56 kg Fettilizantes P, 45 kg Fertilizantes K, 45 kg Trabajo de campo, tractores 17,3 h x 189 MJ/h cosechadora, 2,5 h(est. 220 MJ/h) Otra maquinaria, aC 28,4 ( x est. 100 MJ/ ae ) Pulverizadores, ae 7,4 est. como cereales Secadoras, combustible, 2701 Secadora, electricidad Total Output.r: Maíz Grano Energía contenida (12,3 MJ/kg) Indice: Energía obtenida/aportada 4,48 0,63 0,40 3,27 0,55 2,84 0,40 11,67 2,13 26,37 t GJ 5,02 61,7 E, = 2,34 Fuentes y notas: Todos los inputs y ou[puts de los valores obtenidos Hill1o3. Los valores enetgéticos son muy similues a los dcl maíz en los USA en 1970, estimados por Pimentel14. Ver Balance 76. 157 19. TRIGO R. U. 1968-72; DISTRIBUCION, MEDIA, RESPUESTA A LA FERTTLIZACION NITROGENADA (GJ/ha/año) La tabla siguiente proporciona cuatro estimaciones medias de los inputs y outputs. Los tesultados están tepresentados, en la Fig. 12, pág. 35. Primavera Primavera 1 2 Inputr Fertilizantes N P kg Invierno 1 Invierno 2 97 48 75 38 95 55 48 8,86 3,24 1,29 0,40 38 6,86 3,24 1,29 0,40 55 8,87 3,24 1,29 0,40 50 11,67 3,24 1,29 0,40 1,32 1,47 1,67 1,72 0,44 15,55 0,49 13,75 0,56 1G,03 0,57 18,89 t 3,39 3,77 4,27 4,40 t 3,20 3,58 4,08 4,21 Indice.r Input energético por tm. de grano GJ/t 4,86 3,84 3,93 4,87 K Fertilizantes GJ Ttabajo de campo, tractores Trabajo de campo, equipo Pulverizadores, 4 kg. Secadotas, carburantes (390 MJ/t) Secadoras, maquinatia (130 MJ/t) Total Outputt Cosecha bruta, 15 % humedad Cosecha neta, 15 % humedad (menos semillas 0,19 t/ha) 130 50 Fuentes y notas: los fertilizantes, tratamientos, rendimientos brutos paza{1) a paztir de la media dada por Nix78, para (2) a paztir de la Nottingham University104. Otros inputs tales como ttabajo en el campo, secado... etc., standazizados a patir de los Apéndices. Semillas, a paztir de las estadísticas oficiales34. Contenido energético y proteico, valor medio paza trigos blandos^ pero los mismos valores se proporcionan también pot el Ministry of .^gticultute Food Division^os Ia Fig. 12 sc basa en los datos de Cooke10G quc señala para el trigo de invierno un rendimiento superior a 20 kgs. de grano por cada kilo de nitrógeno empleado. Los rendimicntos se convierten a output neto en tanto que paza los inputs se deben tener en cuenta los cambios dc la demanda energética necesazios paza el secado, como factor que altera los rendimientos. 158 Rendimiento.r normolet de! trigo en el Reino Unido 1968-72 La dispersión de los inputs y outputs mostrada anteriormente, resulta incluso ampliada cuando se incluyen variaciones de explotaciones... etc. incluso dejando apatte los valores extremos registrados por las estaciones experimentales en años buenos, o por pequeños y pobtes agricultotes en años malos. Por ejemplo, Nix señala pata explotaciones notmales un ^alto tendimiento y un bajo rendimirnto. paza el Ttigo de Invierno que se encuentra 18,5% por encima y pot debajo del valor medio citado. Estas vaziaciones resultan de gran impottancia, y metecen un estudio adicional desde el punto de vista energético, y hacen que el concepto de un valor .normal o medios resulte bastante irreal. Sin embargo, cifras medias se necesitan paza otros Balances, y se deducen del modo siguiente: Los tendimientos bruto y neto, medio, paza 1967-68, 1971-72, calculados a pattir de fuentes oficiales34, etan de 4,07 tm/ha. y 3,87 tm/ha. respectivamente. Halliday y colaboradores^b examinazon cuidadosamente el empleo de fenilizantes para el Trigo de Ptimaveta e Invietno en 1968-70 y enconttazon las medias ligetamente supetiotes a las dadas pot Nix (ver más azriba). El empleo aumentó en los dos últimos años del petíodo considetado de cinco años, en que los rendimientos también se elevazon. Pot lo tanto, un input enetgético ligetamente supetior al expresado pot Nix, es el que consideramos aquí. Los inputs y outputs resultar,tes paza el trndimiento normal del trigo en el Reino Unido, se proporcionan a continuacibn: Input energético Producción neta de gtano, 15% humedad Oucput energético (14,4 MJ/kg) Output proteínico (10,3%) Aporte enetgético/grano Aporte enetgético/proteina Energía obtenida/apottada GJ/ha 17,8 t/ha 3,9 GJ/ha 56,2 kgP/ha 400 MJ/kg MJ/kgP 4,3 42 E, = 3,35 159 20. PAN (BLANCO, REBANADA, ENVASADO) 1 KG LA PIEZA (MJ) Inputr (MJ) Bruto 0,934 kg. grano trigo: fettilizantes tractores, carburantes, maquinaria Secado grano Pulverizadores Total a pie de la explotación 2,30 1,09 0,53 0,10 4,02 Rendimiento molienda: 0,69 (74% exttacción) Tahona ' Tiendas Total al punto de venta (redondeado) Superficie cultivo de trigo 2,4 m2 2,68 13,31 0,71 MJ 20,7 Outputr i barra de pan de 1 kg. 10,60 MJ, 8,3% proteína (83 g.) Indicer Energía aportada/supe^cie Energía obtenida/supe^cie Proteína obtenida/supe^cie Enetgía apottada/proteína Energía obtenida/apottada GJ/ha GJlha kgP/ha MJ/kgP 86 44 350 243 E, = 0,525 Fuentes y notas: cultivo de trigo, Balance 17 (media del Reino Unido). Molienda de trYgo 1968 a G8,8 MJ/libra: para ^dcrivados del trigo que no sean alimcntos cereales para el desayuno. quc justifican e171 % dcl output total, con un input cnergético nulo paza ptoductos secundarios, dá 81,55 MJ/libra. El output eta el 94% de hazina blanca a 47,51 libras/tm. De aquí 3,87 MJ/kg de hañna blanca. De este input 57,0% paza catburances dúectos y eleccricidad, 10,9% transpotte, 15,2 envasado, 16,9 otros. Flaboración; industtias del pan y la hazina en 1968 a 147,6 MJ/libta; precio pan blan^o a pie de tahona a 90,181ibras por tm. Por lo tanto 13,31 MJ/kg. pan. De este input, 47,1 % paza catburantes y electticidad, 12,2% transporte, 13,9% empaquetado y 26,8% otros. Panaderíat.. etc. Cometcios disttibuidores 1968 a un valor añadido de 71 MJ/libta. Precio total de venta de una pieza de un kg. 0,091ibras; venta al detalle cerca de 0,10 libtas. Subida presumible 0.01 libras. De aquí 0, 71 MJ/pieza de pan. Los datos sobre molido, elaboración y venta a panir de3ó.aa 160 21. RENDIMIENTO MEDIO DEL CULTTVO DE PATATAS. REINO UNIDO 1968-72 (GJ/HA. AÑO) Los inpuu y outpuu resultan exttemadamente variables, dependiendo los primeros, principalmente, de los niveles de fenilizantes empleados, de la eficiencia del uso de la maquinaria y del alnnacenamiento. Los outpuu pueden justificar casi el 50% del input enérgético total peto en condiciones normales son casi despreciables. Estas variaciones se expresan a continuacibn, según datos medios. Inputr Fertilizantes N, 175 kg. 14,00 Fertilizantes P, 175 kg 2,45 Fettilizantes K, 250 kg Trabajo de campo, carburantes pata tractores Carburantes para cosechat y ttansportar Trabajo de campo, depreciación y reparaciones cosecha, depreciación + reparaciones Pulverizadores, 13 kg Semillas carburantes (620 MJ /t semilla) Aimacenamiento (1,65 kWh/net t) 2,25 2,85 3,38 1,14 6,70 1,24 1,57 0,57 36,15 Total Outputr (aceptando 25 % corecha no comertible) Cosecha bruta, media 1967-8 a 1971-2 t 26,3 Cosecha neta (menos 2,5 t semillas) t 23,8 Cosecha comestible t 17,9 Output energético (17,9 t x 3,18 MJ/kg) GJ/ha 56,9 Chitput proteínico (17,9 x 2,1 % proteína) kgP/ha 376 Indicer Aporte energético/kg. comestible Apone energético/proteína Enetgía obtenida/aponada MJ/kg MJ/kgP 2,03 96 E, = 1,57 Fuentes y aotas: Fenilizantes: Scott107 y Potato Mazketing Boazd valores medios paza 1968. Trabajos en el campo: Apéndices. Tratamientos, semillas y limpicza: Nix7e que dá 0,25 libras pata cazburantes pot [m. de semilla pequeña. Rendimicnto y semillas a partir de estadísticas oficiales34. Desechos represcntan normalmentc el 27% dcl total de la cosecha, el 14% para patatas tempranasbi; 25% es cl rendimiento de la cosccha en tms, para 1971-72. Paza almacenamiento consuhar los datos que sigucn. Fertilizanter. Ouas estimaciones son: Ministry of Agricultural recomcndaciones gcnerala108 N, P, K= 200-250-125 kgs/ha. (20,63 GJ) rccomendacioncs para suelos del Nucricn[ Indcx 1 y 2109 son 188-235-250 (20,58 GJ) y 150-235-230 (17,54 GJ) 161 los siguientes cultivos con rendimientos medios88 150-150-225 (17,3 GJ) y las siguientes supe^cies destinadas a pastos temporales 80-120-160 (9,52 GJ). hlaguina^ia. Estudios realizados en telación con el uso de cosechadoras costosas que consumen gran cantidad de energía68, muesttan que cuando se infrautilizan pueden llegaz a elevaz el input pot ha. en altededor de 20 GJ en compatación con los 6,7 GJ que se consumen con notmalidad. Un empleo más eficaz, puede llegaz a hacer descender el input hasta 4,0 GJ/ha. Almacenamiento: El período normal de almacenamiento de la patata cosechada en Mazzo, es de 200 días generalmente. Mientras están almacenadas deben someterse de forma regulaz a una refrigeración. Esto se suele hacer con corrientes forzadas de ventilación, gracias a un ventilador de 12 kVYh. capaz de enftiaz 500 tms. de ptoducto almacenado. Los exámenes90 del Elecuicity Council detetminazon que el consumo es del orden de 5-20 kWh. por tm. almacenada, con 12 kWh como consumo normal. Con 24 tm/ha., esto tesultaría 4,15 GJ/ha. paza el almacenamiento, o lo que reptesenta unas 7 veces superiot a la cifta citada anteriormente. Paza almacenamientos de mayor dutación, pot ejemplo, de Abril a Julio se utiliza un gtado mayor aún de enftiamiento, aunque esta es una práctica poco común. Los examenes del Electricity Council sugieren consumos medios de 75 kWh/tm. paza sistemas inditectos y 50 kWh/tm para sistemas ditectos, aunque la escala de valotes es muy aznplia. Vazios autores, induyendo Rutherford^^ y la «investigación ^oficiah del Gobierno del Reino Unido sobte valotes enetgéticos de los alimentos10, han asumido que unos inputs tan elevados ^10 kWh/tm almacenada- deben aplicatse a todas las patatas. Si esto fuera así, la electticidad utilizada paza las patatas almacenadas justificazía pot sí mismo más del 15 % del empleo de la electricidad total de la explotación, en 1972 / 73 (sin incluir los gastos domésticos). Esto no tesulta nada vetosimil. La cifta utilizada en el Balance, se basa en una estimación de Bayetto31, de 10 GWh paza patatas almacenadas en Inglatetra y Gales dutante 1972/73. Casi todas las patatas del Reino Unido se ptoducen en Inglatetta y Gales, y en los años 1972 / 73 la producción de la cosecha normal de patatas fue de G,06 millones de tm. Por lo tanto, 1,65 kWh-tm., de patata (dando 39,3 kWh/ha. con un tendimiento neto de 23,3 tms., o 0,57 GJ/ha. en términos de input btuto). 1G2 22. REMOLACHA AZUCARERA, R. U. 19G8-72 (GJ/HA-AÑO) El outpuc no es directamente comestible, pata azúcar ver también Balance 23. Inputr ' Fertilizantes N, 160 kg. P, 50 kg K, 150 kg NaCI, 70 kg x 1,47 MJ/kg Kainita, 280 kg (17% Kz0) Ttabajo de campo, combustible tractot Cosechadora combustible, transpottador Trabajo de campo, depreciación + reparaciones (total) Cosechadora,^depreciación + repazación Tratamiento, 10,9 kg Semilla, £ 7,5 x 144 MJ/£ Total (distribución 20-32; ver abajo) Outputr Remolacha azucatera, 35,5 t x 16,99^o azucaz x 16,51 MJ/kg Hojas ftescas, 35,5 t x 2,26 MJ/kg x 20% utilizadas como forraje (conversión a ptoducto comestible, con el 13% de enetgía asimilable:) Indice.r Enetgía aportada/tm remolacha Enetgía aportada/tm azucaz (6,00 t) Energía obtenida/aportada (el único output es el azúcat) Energía obtenida/aponada (output btuto) ^ 12,80 0,70 1,35 0,10 0,43 2,50 2,54 2,00 2,80 1,09 1,08 27,39 GJ 99,1 GJ 16,0 GJ (z,l) GJ/t GJ/t 0,772 4,565 E, = 3,62 E, = 4,20 Furnta y notu: Fettilizantes N, P, K: Chutch + Webbcr^ 10; CINa y Kainita: informes de campo de la British Sugaz Cotporation. C1Na: 1,47 MJ/kg. proceden[c dcl K extraído del mineral más transpotte y ensacado, Apéndice 6D;. Kaini[a scgún su contenido en KZO, Apéndice 6A. Trabajo de campo, Apéndicc 7; dcpreciacibn cosechadora a partir del bolcún Ministry of Agticulnue ^Sugaz Bett Cultivation.^ ^^ que, scñala, con apcros, 1,08 libtas/ha. (a 200 MJ/libta). Tra[amientos a partir dcl Broom's Barn Eupetimental Station (comunicación personal); Semillas, Nix (1971). Los tendimientos son los normales para un petíodo dc cinco años a partir dc las estadísticas oficiales;4. 1G3 Fertilizante.r varían ampliamente según los tipos de suelos. EI Boletín del Ministry of Agticulrure, citado antetiormente, exptesa cantidades con los inputs enetgéticos siguientes según los distintos suelos: standard (12, 6S GJ/ha.), turbetas (9,10 GJ/ha.) aluviones (10,30 GJ/ha.). Una gtan pazte de las supe^cies cultivadas se encuentran dentro de esta categoría de suelos. Trabajo en e! campo: las estimaciones del trabajo en el campo varían mucho, en función del grado de mecanización ( pot cjemplo, empleo del azadón). EI Boletín del Ministerio cita 50 hotas/ha. pata ttactores de tamaño medio, lo que ptoporciona 9,45 GJ en vez de los 5,04 Gj considerados. Los exttemos de estas variaciones tepresentan una escala de inputs de unos 20-32 GJ/ha. 23. AZUCAR (DE REMOLACHA) REINO UNIDO 1968-73 En la refinación del azúcaz se requieren grandes cantidades de energía. Los dos principales productos son, el azúcat refinado y la pulpa de remolacha, gran patte de la cual, se deseca a base de la utilización de grandes inputs enetgéticos. Esto plantea un ptoblema a la hota de repartir los inputs energéticos, entre los dos outputs principales. Los datos que siguen suponen un intento aproximado para conseguirlo. 1. A partit de los datos3^ de Chapman/Census para 1968, e182,4% del consumo energético de la industtia azucarera, eta directo, mientras qúe el testo lo era indirecto. Esta propotción se considera constante para años posteriores. 2. I.a Btitish Sugat Cotporation (comunicación petsonal) señala 0,071 tm. de cazbón, más 0.004 tm. de coke por tm. de remolacha tratada. Estas cifras incluyen la utilización de cazburantes líquidos; transformados en equivalentes de carbón. EI input enetgético pot tonelada de remolacha resulta así 2,252 GJ para carburantes directos, pero 2.733 GJ en total (2.252/0,824). 3. Estos datos vienen relacionados a 1972-73, en que la producción de remolacha fue de 6.216 Mt., con un contenido de azúcaz del 17,04°r6, de donde se deducen 1.059 Mt. de azúcaz como inp^t^4. Las necesidades energéti• cas fueron pot lo tanto de 16,04 GJ/tm. de azúcar obtenida. 4. Por cada tm. de azúcar obtenida, 0,836 cm. fueron paza azúcar refinada, 0,117 tms. paza molasas incorpotadas dentro de la pulpa, 0,047 tms. se destinaron a otros ptoductos34. Debido a los altos inputs enetgéticos pata el secado de.la pulpa, el input total se considera tepattido entre azúcar refinado y pulpa en la proporción de 836:164. Esto probablemente infravalora los inputs con respecto a la pulpa. 5. Esto da, por cada tm. de azúcaz obtenida 13,41 GJ pot 0,836 tm. de azúcar refinada 2,63 GJ por 0,216 t. de pulpa 164 16, 04 GJ/tm. azúcar 12,18 GJ/tm. pulpa Balance energécico de la supe^cie necesaria, se incluye en el cultivo de remolacha (azúcar refinada como único output) Inputt Enetgía para el cultivo de remolacha, 35,5 t Energía para el refinado de remolacha, 2,733 GJ/t 27,4 Total GJ/ha 97,0 124,4 Outputr Refinado de azúcar, 6,00 t x 83,6% exttacción Energía en el azúcar, 16,51 MJ/kg t/ha GJ/ha 5,02 82,9 Indice.c Apone energético/azúcar refinado MJ/kg Energía obtenida/aportada 24,8 E, - 0,67 1G5 24-29. HIERBA, REINO UNIDO: PASTOS Y HENO DE UN SOLO CORTE (BAJO RENDIMIENTO) (GJ/HA-AÑO) Un factor crítico para los valores energéticos de la hierba es su respuesta a los fertilizantes nitrogenados. Después de analizar (de manera muy variable) los datos procedentes de muchas fuentes, una cifra media notmal de 15 kgs. de materia seca de hierba pot kg. de N., fue la considerada para todos los cálculos. Otras vatiables, además de notmales en la explotación (habilidad en la aplicación, etc.) son el contenido de nutrientes del forraje conservado, que depende, por un lado, de la época y número de cortes y por otro del método de conservación empleado (hietba seca, heno, ensilado). 24 26 25 Solamente pastada Fertilizante N: kg/ha Inputr Fertilizantes Trabajo de campo Secado (nulo) 100' Total Outputt Cosechapastada MS/t Cosecha henificada MS/t 200 300 28 27 29 Pastada + heno 450 80 120 9,08 0,25 16,08 0,42 25,26 0,60 37,35 0,80 7,48 2,0 10,68 2,0 9,33 16,50 25,86 38,15 9,48 12,68 8,0 9,5 11,0 13,3 - - - - 1,6 1,6 5,6 6,7 Energía metabolizable/kg MS 10,6 10,6 10,6 10,6 10,6 10,6 % Pé rdid a energ ía meta b ol^able/heno - 40 40 E nergía meta b o li za lil e neta 141 GJ 85 101 117 60 53 Energía obtenida/aporta- da E, 9,1 G,1 4, S 3, 7 S, G 4, 7 Fuentes y aotas: ' el niuógeno medio emplcado en 1969 / 70 fue de 90 kgs. pata pastos pcrmanentes; 120 kgs. pata pastos temporales106. Contenido energécico (ME = Energía metabolizable) y% pérdida en la henificacióñ, a panir de Rou91. Para la tptalidad de pastos con N cero (pcro con algo dc P y K). F, = 100 aproximadamcnte. 1GG 30-33. HIERBA, R. U: PRODUCCION INTENSIVA (3 COR7ES) (GJ/ha-año) 30 31 32 33 34 35 Ensilado Heno Fertilizantes N: kg/ha. Alta (H) o baja (L) eficiencia 250 H 350 H 250 L' 250 H Inputr Fertilizantes 350 H 250 L' 21,62 21,62 30,34 21,62 21,G2 30,34 Trabajo de campo, carburante 2,57 2,57 2,57 5,64 5,64 5,64 Trabajo de carnpo, maquinar. Secado del heno (incl. maq.) 3,53 24,3 3,53 27,8 3,53 - 4,98 - 4,98 - 4,98 Ensilado utilizando maquinaz. Total - - - 7,73 8,95 52,0 64,2 27,7 40,0 49,8 32,2 11,8 10,3 10,3 11,8 10,3 12,5 40 12,5 12,5 30 65,5 2,36 95,5 2,39 109 2,19 Outputr Cosechacultivomedio MSt 10,3 % pérdida de energía 12,5 metabolizable E nergía meta b oli za bl e neta delacosecha GJ 95,5 Energíaobtenida/aportada 1,84 109 1,70 Fuentes y notac: 'Práctica norrtlal. Rcferencias como en los Balances 24-29. 76,4 2,37 36. EXPLOTACIONES LECFIERAS: A PARTTR DE NO ^^ILLAS DE UNODOS AÑOS (ha) (GJ) neg. 0,208 0,094 0,12 7,92 6,06 0,099 4,21 0;047 0,85 1,52 0,35 0,448 21,03 Inputt Sustitutivos de la leche neg. 0,12 Hierba con E, = 9,1 Heno con E, = 2,36 0,345 0,157 3,22 4,36 Concenttados, como arriba: comprados de la explotación Tractor y paja 0,099 0,047 4,21 0,85 1,87 Totales 0,648 14,63 Superficie reduáda/alta energía Inputr Sustitutivos de leche, 16 kg. (leche a 7,6 MJ/kg) Hietba, 29,3 GJ valor enetgía (ME) con Er = 3,7 Heno, 10,3 GJ valot energía (ME) con El = 1,7 Concentrados, 628 kg: 70% comprados a 9,57 GJ/t, 4,45 t/ha Concentrados, 628 kg: 30% de la explotación a 4,5 GJ/t, 4,0 t/ha Ttactot pata acattear alimentos, etc. 8 h x 190 MJ/h Paja, 1 t. x 0,35 GJ/t Calefacción, luz, etc. no cargada: ver vaca lechera Totales Superficie elevada/baja energía Output.r Novillo de 1-2 años, 530 kg. peso vivo Fuentes y notas: Los datos de piensos y peso de un novillo, según FrostllZ como notmal pata el Reino Unido 1973-74. Supe^cie en áreas y energía para hierba y heno, a partir de los Balances 24-35. Análisis de los piensos concenttados, comprados o de la ptopia explotación a partit de34, aunque son muy variables; de otra forma, según el Apéndice 8. Horas de tractor según Nix^g y del Ministry of Agticulture68. La vatiación de supe^cie elevada/baja energía, parece ser normal en la práctica y se utiliza en el Balance 37. 1G8 37. LECHE: PROMEDIO R. U. 1970-71 (HOLANDESAS) (VACA-AÑO) Inputt A paztit de novillas x Yo (petíodo de lactación de 4 años) (ha) 0,162 (GJ) 3,66 inpu[ típico de baja energía, Balance 28. E= j,6 0,687 Concentrados, 1,32 t: 70% compradas 9,57 ^J/t, 4,45 t/ha 0,208 30% de la explotación 4,5 GJ/t, 4,0 t/ha 0,099 Paja, 1 tm. (vaziable) en 0,35 GJ/t Servicios veterinarios y medicinas, ae2,5 x 186 MJ/^ Almacenaje productos perecederos, ae.3,5 x 153 MJ/aC 9,48 8,84 1,78 0,35 0,47 0,54 Agua, 50.000 1 0 50 t x 9,1 MJ/t Electricidad, 318 kWh (8kWh/1001 leche) 0,45 4,58 Pastando (0,384 ha.) más heno (0,303 ha. 0 1,7 t. MS) 0,90 Edificios, mejoraz, etc. 1,0 GJ/ha x 0,9 ha. explotación 1,156 Totales Outputr Leche,: 3.9801itros, 4.090 kg., 875 galones Energíaleche(2,72MJ/kg.) 31,05 t 4,09 GJ 11,12 Proteínaleche(3,5%) kgP Terneros: 45 kg. peso vivo, 11,3 kg. peso medio canal Energíacarne(10,17 MJ/kg.) Proteínacazne(13%) GJ kgP 0,115 1,47 1/a del peso vivo de las vacas, paza matadero, 13S kg. peso medio canales Energía cazne (10,17 MJ/kg) Proteínacazne(13%) Total output energétim 96 % como leche) Total output energétirn (96% como leche) GJ kgP GJ kgP 0,343 Indicet Enetgíaapottada/kg.leche galón leche Energíatotal/superficietotal Energíaobtenida/superficietotal Proteína obtenida/supe^cie total Energíaapotcada/ptotcína Energía obtenida/apottada MJ MJ GJ/ha-año GJ/ha-año kgP/ha-año MJ/kgP 143 4,39 11,6 149 7,59 35,5 26,9 10,0 129 208 E - 0,374 Fuentes y notas: Rendimiento lecheto y pastos, heno, concentrados, paja, vetetinazio, almacenes, agua, a panir de Nix7e. Edificios y mcjoras paza atplotaciones especializadas en la producción lechera: Balance 1-3. La electricidad es más vaziable, dcpendiendo del equipo de la sala de ordeño y tipo de almacenado de la leche en la explotación. Son vatios los cálculos que aparecen pot cada 100 lictos de leche: 6,6 kWh (sin iluminación)113, 7,97 kWh (citado en refercncia 10), 8,15 KWh según una visita a Shropshire, induyendo la iluminación (citado pot Bayctto;^). El pcríodo lechero sc consideró de 4 años, con una producción de 4 tetnetos. 1G9 38. LECHE: RELACION ENERGIA-TTERRA, REINO UNIDO En cuanto a la ptoducción, en pazticular, existen grandes intetcambios entre energía y empleo de tierra debido a la utilización de métodos más o menos intensivos pata el cultivo de los ptados y ottos tecursos forrajetos. La Fig. 13 calcula la relación energía-tietta: el punto encertado en un cúculo, equivale al Balance 37. La 1'mea que une los puntos tiene una pendiente de 24 GJ/ha (equivalente a 0,55 tms. de petróleo/ha.). En otras palabras, para ahorraz una ha. en la producción de una cantidad determinada de leche supone un input energético extra del mencionado orden, en tanto que utilizando una ha. extra se ahorrazá esta cantidad de energía. La cifra resulta solo aproximada y se basa ptincipalmente en la telación enue el tendimiento de la cosecha de hierba y el empleo de fercilizantes niuogenados (ver Balances 2435). Fuentes y notas: Todos los inputs y outputs excepto los piensos, como en el Balance 37, a escala aumentada siempre que resulte necesazio para un output de leche más elevado. Las cantidades de alimentos (forrajes verdes, ensilados y heno, y piensos conccnuados) según Theophilus93. Estos datos se aplican a la amplia gama de necesidades energéticas y de tierra, paza un output dado que se muescra en lcs Balances 24-35, y a las dos variantes paza criar novillos en el Balance 36. Donde la hierba seca teemplaza al heno y ensilados (y a algunos concenttados), los inputs energéticos oscilaban enue los 65-73 GJ con necesidades de suelo que oscilaban entre 0,9-0,7 has. Estos valores se localizan por encima de la recta de regresión. 170 39. Ai^ES: INCUBADORAS, R. U. 1970-71 (POLLO-AÑO) (mz) Inputt Huevo de partida Incubadora, grande 0,07-0,17 kWh; considetado 0,12 kWh Ctiadora de pollitos (menos huevo inicial) Ctiadota de pollos (8% hembtas) Alimentos 45,4 kg: 83% comptados en 9,57 GJ/t, 4,45 t/ha. 0, 8 4, 2 25 1,5 1,7 134 10,6 84;7 361 17 % de la explotación en 4, 5 GJ /t, 4,Ot/ha. 17,1 Engorde pollos (S%) 8,1 Costes varios, menos electticidad 1,4-6,0 kWh; considerado 3,7 kWh Costes varios, menos electricidad ^ 0,046 x 180 MJ/£ Edificios y equipo £ 0,192 x 140 MJ/£ Alimentos totales, incluyendo pollitas, etc. Total (redondeado) 137 Outputt 180 huevos: 108 para incubadora, de los que el 80% son fértiles 72 para la sección empaquetado Total (redondeado) Indice Output energético por huevo Superficie pot huevo (MJ) 87 72 160 MJ mz 35 32 53,3. 8,3 27,1 (527) 667 huevos para incubadora huevos para consumo huevos 4, 2 0,86 Fuentes y notas: EI Balance se rcficrc a una incubadora de grandes dimensiones y alto rendimienco. La mayoría dc los datos físicos sobre inputs y outputs a partú de'la Ia elecuicidad según el Electricity Council90. Debe resaltazse que casi el 80% dcl input energético se dcbc a los picnsos y quc ace factor puede variaz cnormcmencc, sobrc todo cn cuanto a las difcrentcs proporciones dc picnsos adquúidos, cn cuanco a codos los pollos, en 1970-7134, fue del 83%. Ocras fucnta consulcadas para escc y los demás Balances de pollos incluyen cuatro documcntos del Miniscry of Agricultutc"S'118 171 40. AIfES: CRIA DE POLLITAS DE YEINTE SEMANAS, R. U. 1970-71 mz Inputt Huevo de pattida Alimentación 10,4 kg: 83% comprados en 9,57 GJ/t, 4,45 t/ha. MJ 0,8 4,2 19,4 82,6 4,4 8,0 17 % de la explotación a 4, 5 GJ /t 4,0 t/ha. Electricidad pata la incubación, calefacción, ventilación, luz: 0,75-2,5 kWh; considetado 1,6 kWh Costes varios, menos electricidad £0,025 x 180 MJ/£ Edificios y equipo £ 0,0625 x 140 MJ/£ Total ^ Incremento total de un 5% teniendo en cuenta una mortalidad del 10% del rebaño Outputr Pollita de 20 semanas Fuentes y notes: Como en el Balance 39• 172 23,0 4,5 8,8 24,6 131,1 25,8 138 41. AVES: POLLOS PARA CARNE, R. U. 1970-71 (UN POLLO) (MJ) (m2) Inputc Huevo inicial Alimento total 4,45 kg: 83% comptados en 9,57 GJ/t, 4,45t/ha. 0,8 4,2 8,3 35,3 4,0 t/ha. 1,9 Electricidad para la incubadora, calefacción, ventilación, luz: 3,4 17% de la gtanja en 4,5 GJ/t, • 1,05-2,52 kWh; considerado 1,25 kWh Costes vatios menos ele^tricidad £ 0,0125 x 180 MJ/£ Edificios y equipo £ 0,012 x 140 MJI£ 18,0 2,3 1,7 11,0 Total Incremento total por 2, 5°^ teniendo en cuenta una mortalidad deun 5% 11,3 64,9 Un pollo de 2 kg. de peso vivo (2,2: 1 índice convetsión) Peso pollo para consumo 79% de lo que el 70% es comestible: carne come.rtible 1,10 kg. MJ Output de energía asimilable, 6,03 MJ/kg. Output de ptoteína asimilable, 20,8% proteína cruda kgP RattOS Energía aportada/supe^cie Energía obtenida/supe^cie Proteína obtenida/supe^cie Enetgía aportada/catne digestible Enetgía aportada/ptoteína Enetgía obtenida/apottada GJ/ha-año GJ/ha-año kgP/ha-año MJ/kg MJ/kgP 66,5 6,63 0,229 58,9 5,87 203 60,5 290 E, = 0,10 Mano de obra Un hombre puede cuidar de unas 25.000 a 100.000 aves pot año (cuatro lotes de 10 semanas cada uno más o dos semanas por lote para tenovarlos). Considerando un año laboral de 250 días, el input energético por hombre-día es de 25,3 GJ o el equivalente a 0,58 tms. de petróleo. Fuentes y notas: Como el Balance 39. 173 42. AVES: PONEDORAS EN BATERIA, R. U. 1970-71 (GALLINA-AÑO) (MJ) (m2 ) Inputr Cría pollitas, hasta el arranque de la puesta (20 semanas) Alimento 42,6 kg: 83°h comprados 9,57 GJ/t, 4,45 t/ha. 25,8 138 79,5 338 17% de la explotación 4,5 GJ/t, 4,0 t/ha. 18,1 Electricidad 3,35-7,^ kWh; considerado 4 kWh Costes vatios menos electticidad ae0,05 x 180 MJ/£ Edificios y equipo £ 0,15 x 140 MJ/£ Total(redondeado) 32,6 58 123 9 21 598 Outputr 231 huevos; 17,13 huevos/kilo kg huevos kg huevos comestibles Proporción comestible 88% peso Contenido energético 6,62 MJ/kg. MJ Contenido proteína 11,9% kgP Canal de desecho, 27 kg. peso vivo, menos 12% mortalikg.carne dad x 0,54 de proporción comestibles MJ Contenido enetgético 6,03 MJ/kg. kgP Contenido proteína 20,8% Output energético total Output protéuiico total MJ kgP Indice.r Energíaaportada/supe^cie Energíaobtenida/supe^cie GJ/ha-año GJ/ha-año Proteínaobtenida/supe^cie kgP/ha-año Energía aportada/kg. huevos comestibles (sin tener en cuenta MJ la gallina de desecho) Energía aportada/proteína Energía obtenida/aportada MJ/kgP 13,5 11,9 78,8 1,42 1,28 7,72 0,27 86,5 1,69 48,5 7,03 137 50,2 353 E, = 0,14 Fuentes y aotas: Incubadoras intensivas y eficientcs de 5.000 pollos al.año, corpo en el Balance 39. La amplia escala dc inputs de electricidad paza gailincros con ventanas (3,35 kWh/polio) y para granjas avícolas sin ventanas (7,1 kWh/pollo). Bayetto31 scñala 4,5-5,5 kWh/pollo como valot mcdio. 174 43. GUISANTES FTZESCOS, R. U. 1971 (GJ/ha/año) Inputt Fertilizantes N, 0 kg P, 50 kg K, 50 kg Ttactotes, 28 horas x 189 MJ/h Depreciación del equipo y repataciones (£ 26,8 x 150 MJ/ae ) Tratamientos, aC 4,7 x 30 MJ /£ 0,70 0,45 5,29 4,02 0,14 Varios, ^ 2,2 x 150 MJ/aE Total 0,33 10,93 Ttabajo ( en la explotación) 35 h Outputl Peso guisantes con vaina Cosecha neta, menos semilla Output energético (2,64 MJ/kg) Output ptoteínico (5,8%) Indicer Energía apottada/kgs. guisantes Energía aponada/proteína Energía obtenida/aponada t t GJ kgP 4,39 3,89 10,27 226 MJ/kg MJ/kgP 2,81 48,4 E, = 0,94 Guisantes en lata: En 1968 el input enetgético pata la industtia conservera de frutas y verduras, fue de 27,6 por tm. de ptoducto, del cual e143 % era paa el envasado (Apéndice 1B). A panir de una ciena aproximación, los inputs para los guisantes en lata resultan unas once veces superiores a los de los frescos. Es decir, 30,4 GJ/tm. en vez de 2,8 GJ/tm. Fuentes y notas: Como en el Balance 46. 175 44. JUDIAS (PRIMAI^ERA), R. U. 1971 (GJ/HA-AÑO) Inputr Fertilizantes N, 16,7 kg 1,34 1,93 P, 138 kg K, 138 kg 1,24 2,38 1,31 0,28 Ttactor, 12,6 hotas x 189 MJ/h Depreciación del equipo y teparación Ttatamientos, £ 29,4 x 30 MJ/£ Semillas, £ 10,4 x 150 MJ /£ 1,56 Varios, £ 1,48 x 150 MJ/£ Secado (como cereales, 390 MJ/t) Total Trabajo ( en la explotación) 17 h 0,22 1,43 11,69 Outputr Judías secas (para piensos) Indice Energía aponada/Kg. judías Energía apottada/hombte-hora t 2,60 MJ/kg 4,50 690 MJ Fuentes y nocas: muchaz cosechas no se fenilizan con N; cl valor es medio; en el Este de Inglaterra no se fertilizan muchas cosechas. En otros casos, las fuentes como las del Balance 46. • 176 4S. COLES DE BRUSELAS, R. U. 1971 (GJ/HA-AÑO) Input.r Fenilizantes N, 314 kg P, 100 kg K, 100 kg Tractores,37 h x 189 MJ/h Depteciación del equipo y reparaciones Tratamientos, ae 22,2 x 30 MJ/ae Semillas, ^ 14,8 x 150MJ/ae Varios,aC32,4 x 150MJ/ae Selección y almacenado, 7,5 kWh/t Tocal Trabajo (en la explotación) 215 h 25,12 1,40 0,90 6,99 4,80 0,67 2,22 4,86 0,98 47,94 Outputr Coles, bruto Coles, neto (25% despetdicio) Contenido de energía (1, 34 MJ / kg proporcióncomestible) Contenido de proteína (3,6% propotción co- mestible) t t GJ 9,04 6,78 ' 9,09 kgP 244 GJ/t MJ/kgP 7,07 196 E, = 0,19 Indice.r Energía aponada/t. coles comestible Energía aponada/proteína Energía obtenida/aportada Energía aponada/hombre-hota 220 MJ Fuentes y notac: Como en ct Batancc 46. 177 4G. ZANAHORIAS, R. U. 1971 (GJ/HA-AÑO) Inputr Fertilizantes N, 82 kg 6,56 P, 105 kg K, 105 kg Traetores, 45 hotas x 189 MJ/h Depreciación del equipo y teparaciones Tratamientos, £ 18,5 x 30 MJ/£ Semillas, £8,9 x 150MJ/£ Varios, £ 24,7 x 150 MJ/£ Selección y almacenamiento, 4,5 kWh/t Tocal Trabajo (en la explotación) 200 h Outputr Zanahorias, bruto Zanahotias, neto (4°h desperdicio) Contenido enetgía (0,96 MJ/kg potción comesti- ble) Contenido proteína (0,7°r6 potción comestible) 1,47 0,94 8,50 2,40 0,56 1,34 3,71 2,11 27, 59 (0,16) t t 32,6 31,3 GJ 30,0 kgP 219 Indicet Energía apottada/zanahoria comestible Enetgía aponada/proteína Energía obtenida/aportada Enetgía aponada/hombre-hora: 170 MJ MJ/kg MJ/kgP 0,88 126 E, = 1,1 Fuentes y notas: Las cantidades de inputs y rendimientos, Dench^ 19. Los desechos y el contenido proteíco, y energético^^. La selección y almacenamiento, Rutherford^^. Otras fuentes, Apéndices. 178 47. LECHUGA DE INVIERNO (INVERNADERO), R. U. 1971-72 (GJ/HA) Inputt Fuel oil para la calefacción, 86-115 0001(82-109 t) Propano pata el enriquecimiento, 5,43 t ElPctricidad para iluminar semilleros, 3890-14.260 kWh Fungicidas, 102 kg 100% solución x 95 MJ/kg Fertilizantes, 0-680 kg superfosfatos x 17 MJ/kg Tratamiento semilleros, 13 kg x 95 MJ/kg 4010-5360 308 56-205 10 0-12 1 Varios, ae74 x 153MJ/ae 11 Cajas, 15.400 de 3,5 t x 30,6 GJ/t Semillas + bloques compost, ^ 300 x 150 MJ/^ Trabajo, 2.870 h Total(redondeado) 107 45 4550-6060 Outputr 15.400 cajas de lechuga x 12/caja Estimación 1,5 kg de lechuga por caja Output energético (0,46 MJ/kg lechuga) Indice.r Aporte energético/lechuga Aporte energético/kg lechuga Energía obtenida/aportada lechugas Tm. lechugas GJ 184.800 23,1 10,6 MJ 25-33 MJ 200-260 E, = 0,0023-0,0017 Fuel-oil + propano + elecuicidad a 1.2561ibras, 1.6711ibras/ha. 0 34-46% de los costos de la producción total. Fuentes y notas: Paza todos los datos básicos el follcto' 20 dcl Agricultural Development and Advisory Service, La cifra de fucl baja es paza cultivos no forzados en el Sur dc Inglaterta; la alta es para los cultivos forzados en el Notte: ambos cultivos cosechados a mediados de fcbtero. El precio adoptado paza el fuel-oil a de 1,06 libras/ 100 littos. El dcl propano como 309 libras/ha.; el prrcio de los invernadetos paza gtanda pedidos a 56,9 libras/tm.; neccsidades energéticas 56,7 MJ/kg. EI consumo dc clcctricidad sc calcula a partit de análisis detallados sobre las neccsidades de iluminación en proporción al número de semillas por mz: la principal vaziación sc debc a si las plantas sc cultivan con plantones de semilleto o no. (72-264 hotas de iluminación respectivamente). Ias necesidada de fenilizanca son normalmente nulas, si se hace cl cultivo dapués del de toinates, de oua forma, como las ya dadas o ligeramente supcriores. El input energécico paza las cajas scgún los dacos dc Chapman/Ccnsus3ó cn el caso dc cmpaquetado en cartón. 179 48. HUERTOS JARDIN FAMILIARES, R. U. 1974 (GJ/HA-AÑO) Inputr Trabajo, 14.000 h. y 1,0 MJ/h. 14 Fertilizantes, 80% en N Maquinatia y equipo despteciable 32 - 4( Total Output.r 28 clases de hottalizas, con un peso total de 48 tm. en ptopotción comestible de 40 tm. de las que el 40% en peso cotresponden a las patatas. Output energético (potciones comestibles). Output proteíco (potciones comestibles) Indicer Energía apottada/proteínas Energía obtenida/aportada J kgP 0 788 MJ/kgP 58,4 E, - 1,3 Fuentes y notas: Datos de los informes realizados por la revista Which?^^1 en una parcela de huerta-jardín media de 0,025 haz. Esta fuente señala laz supe^cies y rendimientos en peso de 28 tipos de verduras cultivadaz de una forma muy intensiva a lo largo de todo el año. Estas vetduras son: tres clases de judías, remolacha, brecol, coles de Bruselaz, cuauo clases de repollos, dos clazes de coliflor, zanahorias, pepino, col rizada, puettos, lechugas, calabacín, cebollas, ch ^ibias, guisantes, patatas, rábanos, chalote, tres clases de espinacas, cebollas tempranaz, nabos suecos, maíz dulce, tomate y nabos. Los outputs energéticos y proteícos calculados para cada verdura por el autor. EI trabajo considerado de 350 horas, de las que e160% corresponden a trabajos ligeros y el 40% restante para aabajo moderado. EI valor neto de estos cultivos se estima en unas 701ibras (precios de mercado, parcela de 0,025 has.) lo que equivale a un rendimiento de 0,21ibraz por hora de trabajo. Los inputs, outputs e índices pueden verse alterados considerablemente según se cultiven diferentes tipos de verduras. Es interesante, el resaltar que el rendimiento de una pequeña parcela de 0.025 has. abastece a todas las necesidades de proteínas de una persona durante un año (54 grms. proteína/día) y alrededor de una tercera parte de las necesidades energéticas (12 MJ/día, equivalentes a 2.870 kcal/día). Para consegu ^ esto, la persona debe trabajar un 17-18% de la jornada laboral, es decir 350/2.000 horas año. 180 49. NOMADAS !KUNG, KALAHARI, AFRICA (MJ/HA-AÑO) Inputr Trabajo, 0,65 h x 0,57 MJ/h Outputt Semillas, animales, 20 tipos plantas 0,37 0,0327 kgP 11,3 MJ/kgP Indice.r 2,90 E, = 7,8 Fuentes y notas: Lee122. Los cazadores-tecolectores !Kung obtienen una dieta suficien[e (93 grms. de proteína y 8,27 MJ por día como media) pero necesitan 1.040 has. de tetteno (10,4 Kmz) por petsona. El tiempo que necesitan paza la recolección de los alimentos no es excesivo. ^e enconttó que se necesitaban 156 hombre-día paza el consumo de una población de 668 personas, diaziamente: en ouas palabras, mientras que el 65% de la población pasaba 2,S días de una semana de 7 días, recogiendo alimentos, el restante 35 % no ctabajaba nada. Los outputs: datos de Lee. Inputs: 8 horas/día, 365 días/año, 1.040 has/persona x 156/668 = 0,65 hora/ha-año. Los adultos consumieron 8,4 MJ alimento/día, dividido en 0,19 MJ/hota de descanso x 8 hota; 0,29 MJ/hora en otras actividades x 8 horas; 0,57 MJ/hora recogiendo alimentos x 8 horas. S0. TRIBU DODO, UGANDA (GJ/HA-AÑO) Inputr Trabajo, 290 h x 0,57 MJ/h Output.r Cultivos, granos leche, sangte, carne Total Indice.r 0,165 1,73 kgP 0,817 1,35 kgP 3,08 kgP 0,008 0,825 54 MJIkgP Er = 5,0 Fuentes y notas: 3,7 has/persona; 4,5 cabezas de ganado por persona. Dieta media diaria 8,4 MJ y 31 grms. de proteína. Outputs: Odum13. Inpuu iguales a los del Balance 49. 181 51. CULTIVADORES QUEMANDO, CONGO (R = 0,1) (GJ/HA-AÑO) Input.r Trabajo, 287 h x 0,8 MJ/h Utensilios, $0,1 x 72 MJ/$ 0,230 0,007 Tocal 0,240 Outputr Arroz 80 kg Mandioca, fresca 1.500 kg Plátanos 1.000 kg Tocal Indicet Fuentes y notas: Ruthenbetg123. 182 6,4 kgP 1,210 10,5 kgP 10,0 kgP 26,9 kgP 9,615 4,860 15,685 8,9 MJ/kgP E, = 65 52. TSEMBAGA (CULTTVADORES QUEMANDO), NUEVA GUINEA (R = 0, O6) (GJ/HA-ANO) Huertor batata/Taro Inputr Ttabajo (Hetramientas despteciable) Outputr 21 plantas cultivadas, 524 kg 0,0847 1,398 E, = 16, 5 Huertor axúcas/boniator Inputr Trabajo (Hettamientas despteciables) Outputr 21 plantas cultivadas, 403 kg 0,0775 1,232 E,=20,3 Fuentes y notas: Rapapott124. Fste detallado estudio de Octubre 1962-Diciembre 1963, proporciona datos completos de inputs y outputs sobre un período de 120 semanas. Los datos se convittieron a un petíodo de 52 semanas. La estimación de R= 0,06 se basa en los datos de Rapapott paza el consumo por persona de enetgía en forma de alimentos, el output pot ha-año ptocedente de los huettos, dutante todo el período del cultivo, y la cifta de Rapaport de 2,36 has. de huerto por petsona. Cada individuo necesita también algo menos de 2 has. de selva virgen paza cazaz. Esta zona se encuentra densamente cubietta de selvas en terreno montañoso y suelos pobtes: alrededor del 80% del imput enetgético de ttabajo se debía al acazteo de las cosechas pot laderas empinadas. Las herramientas de acero, inttoducidas en la década de los 40 y que sustituyó totalmente a las de piedra en la década de los 50 comprendía hachas y machetes. A pattir de los materiales locales se siguieron construyendo herramientas y utensilios paza cavaz, azcos y flechas, ttampas y calabazas como recipientes. 183 S3. SUBSISTENCIA, INDIA (GJ/HA-AÑO) . Inputr Trabajo, 837 h x 0,8 MJ/h 0,70 0 0 0,70 Animales trabajo, 430 h x 0(ver abajo) Herramientas despreciables Total Outputt Atroz (MS base) ó18 kg Vegetación espontánea Cazne vacuno + leche Arroz + vegetación para el ganado Output neto Indice.r 56,2 kg 5,5 kgP -61,7 11,3 MJ/kgP 10,47 2,93 0,09 -3,14 10,35 E, = 14,8 Fuentes y notas: Odum13. Densidad de población 0,4 has./persona. EI 80% del attoz cosechado dedicado paza el consumo de la familia del agricultor, mientras que el 20% testante se destinaba a la exponación. Dieta media 9,28 MJ con 6 grms. de proteína animal/día. Debe resaltarse que solo el 17% de ^el tiempo de irabajo^ se consume en alimentar a una persona (S37 hora/ha. por 0,4 ha/persona = 335 hora/año comparado con la cifra standazd de 2.000 hora/año de 40 horas/semana x 50 semanas). Otros micmbros de la familia, aumentarán lógicamente este valor. El granjero normal trabaja 16 horas/semana. 184 S4-G3. SUBSISTENCIA + CULTTVADORES CON FUEGO, VARIOS (R = 0,1 a O, S) (GJ/HA-AÑO) 54 Dayak, azroz (0,1) 55 Dayak azroz (0,1) 56 Iban, arroz (0,1) 57 Tanzania, azroz(0,15) 58 Maíz, Africa (0,5) 59 Mijo, Africa (0,5) 60 Boniato, Africa (0,5) 61 Mandioca, Aftica (0,5) 62 Batata, Aftica (0,5) 63 Cacahuete, Aftica (0,5) Tnbajo Input Cosecha (h/ha) (GJ) (kg) (kgP) Outputs (GJ) Indice (MJ/kgP) (E^ 217 0,174 190 15,2 2,87 11,4 1G,5 16G 0,133 160 12,8 2,42 10,4 18,2 75 0,060 56 4,5 0,85 13,3 14,2 204 0,163 252 20 3,81 8,2 23,4 450 0,360 89G 85 4,2 37,7 250 0,200 478 53 7,26 3,8 36,2 580 0,464 3057 46 14,55 10,1 31,3 935 0,748 7115 50 45,60 15,0 61,0 1160 0,928 4895 98 21,30 9,5 22,9 758 0,60G 558 84 7,76 7,2 12,8 13,G Fuentes y notas: Todos según Clazk24, excepto el 57 que procede de Ruthenberg123. El trabajo se considera a 0,8 MJ/hora. 58-63 resultan:todos los valores medios de Africa^, paza las que Clazk da R comptendido entre 0,3 y 0,7, sin especificaz ninguna cifra paza cada cultivo. R= 0,5 es el valor adoptado a lo lazgo de todo este Cuadto. 185 64. EXPLOTACIONES CAMPESINAS, CHINA 1935-37 (GJ/HA-AÑO) Inputr Trabajo, 7.064 h x 0,8 MJ/h Animales, 120 h x 8,0 MJ/h 5,651 0,960 Hetramientas, atado: 25 kg x 90 MJ/kg, 10 años vida 0,225 Total G,846 Outputr Arroz, 16.456 kg Judías, 8.456 kg (sin vaina) 1.316 kgP 592 kgP 243,9 37,2 Total 1.908 kgP 281,1 3,59 MJ/kgP E, = 41,1 Indices Fuentes y notas: Fie y Changlzs. Una supe^cie tradicional en la Agricultura China de 1 Kung (230 mz) con cultivos dobles, necesitó 20,3 unidades de trabajo, en donde cada unidad equivale a 8 horas. La labor de azado con animales, requirió 6 días/ha., dos labotes de arado pot año, 10 hotas/día. Los fertilizances utilizados, fueton cl estiercol de cetdos, búfalos, caballos y del hombte, tecolectados en los caminos, posadas, cuadras y cochiqueras, de las alcantarillas locales. El trabajo paza recogetlo y distribuirlo se incluye más azriba. Los rendimientos attremos por encima de la media propotcionada, fueron del orden del 25% en los superiores, y del 40% en los inferiores. GS. CEREALES, MEXICO's (GJ/HA-AÑO) Inputs Trabajo,1.144 h x 0,8 MJ/h 0,915 Hacha y azada, 10 kg x 90 MJ/kg, 20 años vida 0,045 Tota( 0,96 Outputs 1934 kg cereales Indices 18G 184 kgP 5,22 MJ/kgP 29,4 E, = 30,6 66. CEREALES, GUATEMALA's (GJ/HA-AÑO) Inputt Trabajo,1.415 h x 0,8 MJ/h Hacha y azada, como 65 Total 1,132 0,045 1,18 Outputr 1.056 kg cereales Indice.r 100 kgP 16,0 11,8 MJ/kgP E, = 13,6 67. CEREALES, MEXICO'3 (GJ/HA-AÑO) Inputt Trabajo,383 h x 0,8 MJ/h Bueyes, 198 h x 8,0 MJ/h Maquinaria, 225 kg x 90 MJ/kg, 20 áños vida Total 0,306 1,584 1,013 . 2,903 Outputr 931 kg cereales Indice.r 88,4 kgP 32,8 MJ/kgP 14,15 E, - 4,87 68. CEREALES, GUAT'EMALA's (GJ/HA-AÑO) Inputr Trabajo, 701 h x 0,8 MJ/h Bueyes, 311 h x 8,0 MJ/h Maquinaria, como 67 Total Outputr 1.056 kg cereales Indúe.r 0,561 2,488 1,013 4,062 100 kgP 16,05 40,6 MJ/kgP EY = 3,95 187 69. CEREALES, NIGERIA13 (GJ/HA-AÑO) Inputr Trabajo,620 h x 0,8 MJ/h 0,496 Hacha y azada, 10 kg x 90 MJ / kg, 20 años vidá Fertilizantes, 20,2 kg considerado 50% N 0,045 0,90 Total 1,44 Output.r 994 kg cereales (maíz) Indice.r 94,4 kgP 15,1 15,3 MJ/kgP E, = 10,5 70. CEREALES, FILIPINAS^s (GJ/HA-AÑO) Inputr Trabajo, 296 h x 0,8 MJ/h 0,237 Búfalo, 146 h x 8,0 MJ/h 1,168 Maquinaria, 225 kg x 90 MJ/kg, 20 años vida 1,013 Fertilizantes N, 4,5 kg x 80 MJlkg Fertilizantes P+ K, 1,4 kg x 11 MJ/kg Total 0,36 0,015 2,793 Outputr 931 kg cereales Indice.r 88,4 kgP 14,15 31,6 MJ/kgP E, = 5,07 71. TRIGO, UTTAR PRADESH, INDIA's (GJ/HA-AÑO) Inputr Trabajo,615 h x 0,8 MJ/h Novillo, 642 h x 8,0 MJ/h 0,492 5,136 Maquinaria, 225 kg x 90 MJ/kg, 20 días vida Estietcol + riego, trabajo y novillo incluidos Total Outputr 75G kg trigo Indice 188 1,013 6,641 87 kgP 11,20 76,3 MJ/kgP F., = 1,69 72. ARROZ, FILIPINAS's (GJ/HA-AÑO) Inputt Trabajo, 576 h x 0,8 MJ/h 0,461 1,013 2,176 0,448 0,057 4,155 Maquinaria, 225 kg x 90 MJ/kg, 20 días vida Búfalo, 272 h x 8,0 MJ/h Fertilizantes N, 5,6 kg x 80 MJ/kg Herbicidas, 0,6 kg x 95 MJ/kg Total Outpuh 1.546 kg a^rox Indice.r 124 kgP 33,5 MJ/kgP 22, 9 E, = 5,51 73. CULT7Y0 INTENSIYO L)E ARROZ, SURINAM (GJ/HA-AÑO) Inputr Trabajo 101 h x 0,8 MJ/h 0,08 22,95 1,05 Diesel, fuel, 5301 x 43,3 MJ/1 Gasolina, 26,51 x 39,7 MJ/1 Fuel aviacióri, 26,51 x 40,0 IvIJ/1 (10,6 GJ del fuel arriba usado paza energía, cultivos pteparación de la cosecha, maquinaria, etc.) Maquinaria, $150 x 80 MJ/$ Pulverizadores, nulas - 41,14 Total Indices 12,00 4,00 Fenilizantes: 50 kg N x 80 MJ/kg Output.r 3.400 kg arroz 1,06 273 kgP 51,49 151 MJ/kgP E, = 1,25 Fuentes y notas: FAOIZb 189 74. CULTTVO INTENSIVO, USA (GJ/HA-AÑO) Inputr Trabajo, 30 h x 0,8 MJ/h Fuel, 2551 x 43,3 MJ/1 Maquinaria 0,024 11,04 4,34 10,72 0,94 29,62 0,56 0,53 4,48 3,21 Fertilizantes N, 134 kg x 80 MJ/kg P,67 kg x 14 MJ/kg Riego (fue16841 x 43,3 MJ/!) Insecticidas, 5,6 kg x 100 MJ/kg Herbicidas, 5,6 kg x 95 MJ/kg Secado Electricidad Tocal Outputr 5.684 kg arroz Indice.r 65,46 455 kgP 84,12 143 MJ/kgP E, = 1,29 Fuentes y notas: Maquinatia, ^ecado, electricidad, según Pimentel'S. Ocros aztículos según las cantidades físicas proporcionadas por Pimentel. 7S. CEREALES, USA, 194S^s (GJ/HA-AÑO) Input.r Trabajo, 57 h x 0,8 MJ/h Fuel, 1401 x 43,3 MJ/1 Maquinatia 0,051 6,062 1,861 0,64 0,154 0,434 Fertilizantes N, 8 kg x 8 MJ /kg Fertilizantes P+ K, 14 kg x 11 MJ/kg Riego Insecticidad, herbicidas Secado 0,041 0,331 15,95 Electricidad Total Outputr 2.121 kg cereales Indice.r 190 201 kgP 32,24 79,4 MJ/kgP E, = 2,02 7G. CEREALES, USA 1970" (GJ/HA-AÑO) Inputr Trabajo, 22 h x 0,8 MJ/h Fuel, 2061 x 43,3 MJ/1 Maquinaria Fertilizantes N, 125 kg x 80 MJ/kg P+ K, 102 kg x 11 MJ/kg Riego Insecticidas, 1,12kg x MJ/kg Herbicidas, 1,12 kg x 9g MJ/kg Secado Electricidad Tocal Outputr 5.060 kg cereales Indice.r 0,018 8,92 4,343 10,00 1,120 0,786 0,112 0,106 1,241 3,205 29,85 481 kgP 76,91 62,1 MJ/kgP E, = 2,58 191 77. ARROZ + HORTALIZAS, HONG KONG 1971 (GJ/HA-AÑO) Inputr Trabajo, 4.530 h x 0,8 MJ/h Animales, 300 h arroz solamente x 8,0 MJ/h Fertilizantes, 1.134 t x 15,71 GJ/t Pulverizadores, 24,37 kg x 100 MJ/kg Maquinaria, fuels, 6,751 x.43,3 MJ/1 Depreciación maquinariá Riego-fuels, 120,61 x 43,3 MJ/1 -equipo Electricidad (10% total explotaciones Hong Kong) Administración agraria, etc. Hettamientas, 35 kg x 24 MJ/kg, 10-años vida Transpotte matetial á la explotación Total GJ 3,624 2,400 17,98 2,437 0,292 neg. 5,222 0,086 26,42 2,86 0,08 7,53 68,93 GJ 56,88 . Outputr Cosecha neta (después de deduc ^ las semillas) Indice E, = 0,825 Fuentes y notas: Los inputs físicos, outpuu, a part ^ del detallado análisis de Newcombe^Z^ para 4.568 has. de arrozales con agua dulce, 4.053 has. de hucttas, 801 has. de tierra cultivada en produccibn en 1971. El trabajo paza el cultivo dc las hucttu y azrozales se desazrollb por 20.206 personas, más 307 administradores, lo que represenca un valor medio de 2,18 personas por ha. Los datos del Census muestran una media dc 8 horas/día en el campo: considerando semanas de cinco días, y años de 52 scmanas. El trabajo de los animales dc t ^o era dc unas 10 horas/día, en jornadas de 30 días por ha. en los azrozales. Los fertilizantes paza las hucttas y los arrozales eran de unas 7.984 tms. de compuestos (18,5 MJ/kg), 943 tms. de nitratos CaNI-Iq (23 MJ/kg), 1.838 tms. de compuestos y de 13,71 GJ/tm. Los cratamientos totalcs fueron dc 229,59 tms. Carburanta para la maquinazia y el riego paza cl total de la supc^cic, según Agriculture and Fisheries, Hong Kong. EI equipo paza cl regadío comprcnde 2.300 bombas (14.230 MJ cada una, 10 años de vida, más un 10% año paza el mantenimicnto) y 120 kms. de tuberías, 2,3 kgs/metro, 23,8 MJ/kg., 15 años dc vida, más 10% por año paza el mantenimicnto. El consumo total de electricidad de las explotacioncs agrícolas dc Hong Kong se considera como dc 153 milloncs kWh., dc los quc el 10% a para las huertas y los azrozales. Ia eficiencia de conversibn es dc 22,5%. Ia administtacibn agrícola, incluye el cmpleo de cazburantes paza vehículos, electricidad para las oficinas, ctc., y ta fabricacibn de los vehículos. El crazuporte de los matcriales a la explotacibn se hace principalmente por bazco hasta Hong Kong, incluyéndose el traz>sporte por bazco hasta la costa y después por cazretcra. Debc notazsc que los fcnilizantes y fumigadora sc cmbarcazon una distancia media de 23.300 kms.: a 0,2 MJ/tm-km. añade 4,66 GJ/tm. a los fcttilizantes (cs dec ^ , un 30%, más del costo energético mcdio en el Reino Unido, según se considerb a lo lazgo de este estudio). 192 78. PESCA: R. U. (PESQUERIAS) (Tota! captura.r) (MGJ) InputJ Gas/diesel oi10,4145 Mt x 51,7 GJ/t 21,43 10,40 0,74 0,40 Fuel oi10,2123 Mc x 49,0 GJ/t Construcción bazcos y equipo, ae 6,9 M x 107 MJ/£ Hielo, approx. 2,5 Mt x 160 MJ/t Total tedondeado 33 Outputr Todas Capturasdesembarcadas Paza consumo humano Energía contenida, porción comestible Outputenergético Proteína contenida, porcibn comestible Output ptoteínico t Mt 0,954 0,420 MJ/kg - MGJ 1,663 % 103 t P Indice.c Energía aportada/total capturas Energía apottada/kg. comestibles hombres Energía apottada/proteína para hombres Energía obcenida/apottada 67,48 Plataforma 0,728 0,313 Pelágicos Molusms 0,175 0,093 0,051 0,014 2,89 7,9G 1,46 0,905 0,740 0,020 16 50,08 16 14,88 18 2,52 34,6 MJ/kg MJlkg 78,6 MJ/kgP 489 E = 0,050 Fuentes y aotas: Ias captutas según laz estad'uticas oficialeslzs. tZ9. Los cazburantes scgún las estad'uticas de encrgía35. El costo dc la construcción dc bazcos scgún las Tablas Input-Chuput del Reino Unido de 196834 como adquisiciones pata ^Silvicultura y Pesca^ a parc^ de la aonstrucción de barcos c ingenicría naval.; MJ/libras según Wrightss. Tms. de hielo, según McSween130 quc también estima 10,48 kWh. (151 MJ) por tm. de hielo. Esta cifra se aumcnta azbitraziamentc cn un 5% con objeto de tener en cuenta el equipamento, gastos del capital y otros. EI hccho de que la construccibn de los bazcos, más el hielo sumen menos de14% del total sugiere que para los inputs en el muelle, solo con tener en cuenta los carburances cs suficienccmcnce aproximado en la mayoría de los casos (ver Balanca 79, 80, 82, y 83). Debe señalazse que por conveniencias de estc cstudio no se valoran los gastos de harinas de peces y ouos subproductos. Aceptando una convcrsión dcl 18 % del pescado a alimcnto, y considerando e165 % dc protcína digestiblc cn d alúnento (picnsos típicos para cerdos), el cotal obtenido, representa una cantidad adicional dc 25.480 tms. de proteínas quc suponen aproximadamente 0,72 MGJ (38% y 43% rapativamcncc dcl output de los alimcntos para el hombre). 193 79• PESCA: ANCHOI/ETA YHARIIVA PESCADO, PERU (fuel.rolamente) (tonelada harina) (GJ) Input.r Capturas 6,56 t peces, 0,54 GJ/t Factoría grande de. harina de pescado, 18% conversón harina, 11,8 GJ/t hatina Sub-total a pie factoría 3,00 11,80 14,80 2,30 17,1 Barcos pesca 11.600 km de R.U., 0,2 MJ/t-km un viaje Total Outputt e índice.c 1 tm de harina mas 0,1 tm. de aceite de pescado; protteínas contenidas en la hatina 60%, aceites insignificantes. Enetgía apottada/ptoteína MJ/kgP 28,5 Fuentes y notas: Carburantes paza la pesca según Slcsscr13t. Planta paza la elaboración de harinas dc pescado, de 50-60 tms. /día-unidad132. Solamente se tienen en cuenta los inputs del vapot y de la electricidad (no se utilizan cazburantes), por lo que no se considcran los gastos del capital, los inputs encrgéticos del equipamento y ouos. En el caso de incluirse en los Balanccs dcl Reino Unido (ver Apéndicc 8) un valor de 14,8 GJ/cm. es la más conveniente para tener en cuenta los outputs correspondientes a la elaboración de los accites de pescado. 80. PESCA: CAMARONES, GOLFO DE MEXICO 1972 (fue! . rolamente) (tonelada cru.rtáceo.r Inputr 8.300 1 ó 6,95 t. gas-oil por t. camarones desembarcada: 359 total en los muelles Outputt e Indice.r 1 t. camarones, 65% comestible en peso; 3,38 MJ/kg y 16% proteínas Energía aportada/kg. comestibles Energía aponada/proteínas Energía obtenida/aponada MJ 552 MJ/kgP 3450 F., = 0,0061 Fuentes y aotas: Wadsworth133. lnpuzs de carburantes, promedio paza 1972. 194 (GJ) 81. PESCA: CAMARONES, AUSTRALIA (Tonelada cru.rtáceo) Inputr 5731 ó 0,8 t gas-oil pot t. camatones desembarcada Mantenimiento del pesquero, aC lOS/t. desembarca- (GJ) 24,8 da x 90 M)/ Manufactura del pesquero, ae41,8 por t desembat- 9^S 3,8 38,1 cada x 90 MJ/aC Total en los muelles Outputr e índicet 1 tm. gamba.r, 63 % peto comettible, 3, 38 MJ/kg y 16% prt7teína porción come.rtible Energía aportada/kg. come.rtible Energía aportada/proteína Energía obtenida/apostada MJ 38, 6 MJ/kgP 366 F., = O,OS8 Fuent^.s y notac: Datos fisicos y costos según Dall y KitkWoodi;4 paza 1974 aunquc ligcramente infcrior a las capturas medias dc la temporada, logradas por barcos dc azrasue de más de 17 metros de eslora. Los costos en dólazes ausualianos dcben convcrtirsc al cambio de 1,76$/libra; Conversioncs dc 90MJ/libra considerados por el autor son solo aproximadas. 82. PESCA: TOTAL CAP77JRAS, MALTA 1972 (fuel tolamente) (tonelada pe.rcado) (GJ) Inputs 0,78 t diesel fuel por t. pescado desembarcada 40,3 Outputc e índice.c 1 t. pescado, considerando un 60% comestible, 2,9 MJ/kg & 16% ptoteína comestible porción Energía aponada/kg. comestible Energía aponada/proteína Enetgía obtenida/aponada MJ MJ/kgP 67,2 420 $ = 0,043 Fuentes y notas:. $. Holt15. Los datos sc refiercn a las capturas totala dc Malta cn 1972; consumo de cazburantes 1.136 millones de littos paza 1.220 tms. de pescado. El coste de los cazburantes fue de 18.750 libras maltaas, equivalenta a14% dcl valor dc las capturas (464.000 libru maltesas). 19S ^ 83. PESCA: ADRIATICO 1970-71 (fue! tolamente) (tonelada pe.rca) (GJ) Inputr Pequeños pesqueros: 2,1 t. fuel pot t. pesca desembarcada Grandes pesqueros: 3, 3 t. fuel por t. pesca desembarcada Cambio marginal: 3,7 t. fuel p6r t. tonelada desembarcada 109 170 191 Outputt e Indice.r 1 t. pesca, considetando un 60% comestible, 2,9 MJ/kg. & 16% potción de proteína digestible pequeño Enetgía aponada/kg. comestible MJ 182 Enetgía aportada/ptoteína MJ/kgP 1135 Energía obtenida/apottadá Er = 0,016 grande marginal 283 1770 0,010 318 1990 0,0091 Fuentes y notas: Levi y Giannetti136. Las embazcaciones de bajura, con tonelajes dc hasta 1S0 tms., capruraron unas 50 tms. por año. La captura y el consumo de cazburante se relacionan según el tamaño de la embazcación mediante la siguiente función: Y= 20,09 + 0,27 X, en donde Y es la caprura en toneladas y X el consumo de carburante en tms. Fsta fórmula expresa un aumento mazginal del consumo de cazburante paza el aumento de capturas, debido al empleo de embazcaciones de mayor tonelaje. Las embarcacioncs mayores poseen tendimientos inferiores, debido a que tienen que alejatse más de las costas: debido al agotamiento de los tecursos pesqueros, las mayotes distancias quc los bazcos tienen que recorrer, no compensan el aumento de la pesca. De 1958 a 1971 el consumo de carburante por tm. de pesca desembazcada se multiplicó por un factor de 2,6, prueba dct agocamicnto de los recursos. 196 84. PROTEINA PARA PIENSOS, DE PETROLEO (1973) (tonelada producto) Inputt N-parafinas, 870 kg x 47 (valot calotífico solamente) Fuel, dado como 21 GJ ( x 1.134 multiplicadorl Vapor, 10,5 toneladas x 3,41 MJ/kg Qúunicos, ^16,3 x 450 MJ/ae Agua, 1.250.m3 x 9,1 MJ/m3 ó/t. Crédito general, ^ 2,2 x 150 MJ/ae Edificios y equipo, ^ 19,7 x 90 MJ/ae Empaquetado, ae0,83 x 175 MJ/aC Gastos generales: Administración, impuestos, etc. . Trabajo Total (redondeado) ^ Proteína (66%) Indicer Energía aportada/proteína (GJ) 130,5 40,9 MJ/kg Electricidad, 500 kWh Outputr 1 t. de células simples de proteínas (1973 $) 6,65 7,2 8,35 23,8 21,0 39,1 5,4 35,7 7,3 11,4 5,3 0,3 47,2 1,8 2,0 0,1 34,1 0,1 300 129 ^ 424 kgP 660 MJ/kgP 195 Fuentes y notas: El Balance es paza 100.000 tms. /año por factoría, en Italia, según la Compagnia Técnica Induscrie Petroli. Todos los datos fisicos y de costos según Giacobbe^;^. Los productos químicos se consideran que son ptincipalmente, fuentes nitrogenadas, con algo de P, K y minerales, por lo que sus valores son inferiores a los medios de fettilizantes en el Reino Unido (S13 MJ/libra en 1968). Agua, suministtos generales, edificios, envases, todos ellos según los datos de Chapman/Census3ó paza cl Reino Unido en 1968, teducidos paza tener en cuenta el costo de la inflacción de 196873. Vida media de la planta industrial 20 años, del equipo, 10 años. Debe señalarse que los piensos, cazburantes, elecuicidad y vapor representan el SS% de los costos totales, en dólazes, en tanto que para el trabajo directo estos costos resultan despreciables. El sistema es por lo tanto altamente sensible a la inflacción del precio del carburante; los datos son anteriores a la elcvación del praio del pctróleo de 1973. 197 8S. PROTEINA PARA PIENSOS DE METANOL (1974) (tonelada producto) Inputr para 1 t. metano! Gas natural, dado como 44,1 GJ Electricidad 98,4 kWh Ptoducción de vapot, a presión intermedia, 160 kg x 3,31 MJ/kg Costos capital ^ 30,5 x 65 MJ/^ Total Inputr para 1 tm. producto Fuel, dado como 9,6 GJ ( x 1,134 multiplicador) Costos capital Metanol, amoníaco, ácido sulfúrico, fosfatos, electricidad Ajuste de los apartados anteriores ( + 2%) Total (redondeado) G1 44,1 1,4 (-)0,5 2,0 47,0 ' 10,9 3,7 119,3 2,4 136 Outputr 1 tm. de producto de células simples de proteínas, 80% proteína bruta, 800 kgP Ptoteína: Indicer: Energía aponada/ptoteína MJ/kgP 170 Fuentes y notas: 100.000 tms. /año por planta induscrial proyectada por el ICI, del que se obtiencn todos los datos físicos (comunicazión personal). Debido al secreto industrial cl análisis del metanol, amoníaco, ácido sulfiírico, fosfato, electricidad no pueden ser revelados, pcro se proporciona el valor total, según el ICI. El ajuste tiene en cuenta dos faccores: (1) las dcmándas energéticas del metanol, el input más elevado resulta 1,8% superior en los cálculos anteriores, quc los dcl valor proporcionado por el ICI: (2) los cálculos del ICI para el amoníazo fueron revisados, elevándolos en un 10,5% (de 45,7 a 50,5 GJ/tm.) ya quc los datos anceriores fueron elaborados por ellos. 198 Referencia.r y nota.r 1 Durante los años 60 la ptoducción agtícola decreció en seis países; por debajo dc los índices de crecimiento de la población en más de 36, y excedió al crecimiento de la población en 49 países del mundo desaztollado. EI tesultado final fue de un desccnso en li ptoducción de alimentos ^pet cápitas de un 3% en Hispanoamérica y en el Lejano Oriente, y un aumento de solo un 1% en Africa. Las condiciones atmosféricas desfavotables determinazon aun peotes tesultados en la tempotada 1972-74. FAO (1973). The nate of food and agriculture 1973. Y FAO (1974). 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Notiza^io ctip, 14, 40-55. 207 INDICE Págs. 1 Introducción ..................................... 9 2 Agricultura pre y semi-industrial . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 17 3 Transición a una plena industrialización . . . . . . . . . . . . . . . 29 4 Cambios dentro de la plena industrialización - Reino Unido 1952-72 ...................................... 39 5 La producción de alimentos de la explotación al mercado el Reino Unido en 1968 ............................ 45 6 Respuesta^ y Desafío . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 63 APENDICES: 1 Las industrias del Reino Unido para la producción de alimentosen 1968 ................................... lA Agricultuta .................................. 1B Industrias de la bebida y de la alimentación ........ 1C Distribución ................................. 1D Mano de obra total en la producción y distribución de alimentos en el Reino Unido . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 81 81 86 90 93 2 Criterios y métodos en los análisis energéticos . . . . . . . . . . . 2A Inputs ...................................... 2B Outputs .................................... 95 95 99 3 Carb^rantes y electricidad . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 103 4 Bienes y Servicios . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 107 5 Cambios de los precios . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 111 209 6 Fertilizantes ..................................... 6A Generalidades ............................... 6B Fertilizantes nitrogenados . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .. 6C Fertilizantes fosfatados . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 6D Fenilizantes potásicos . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 6E Fertilizantes compuestos, N-P-K . . . . . . . . . . . . . . . . 6F Cal ........................................ 113 113 115 117 118 120 121 7 Tractotes y equipamento agrícola . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 7A Tractotes-hotas de ttabajo . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 7B^ Tractore^ -carga de trabajo . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 7C Equipamento agrícola . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 123 123 126 127 8 Piensos ......................................... 131 9 Secado decosechas ................................ 9A Secado de cereales ............................ 9B Hierba y heno ............................... 137 137 139 10 Inputs menotes ................................... 143 11 Transpotte ....................................... 11A Por carretera . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 11B Transporte marítimo . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 11C Ttansporte pot fettocaril . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 145 145 148 149 Referencias y notas ................................... 199 210 OTROS TITULOS PUBLICADOS SERIE ESTUDIOS • La innovación tecnológica y ru difurión en la agricultura, por MANUEL GARCIA FERRANDO. • la explotación agraria familiar. Varios autores. • La rucerión en el Derecho Agrario, por JOSE LUIS DE LOS MOZOS. • E!latifundio. Propiedad y explotación, SS. XVIIi-XX, por MIGUEL ARTOLA y OCIOS. • La formación de !a Agroindurtria en España (1960-1970), por RAFAEL JUAN I FENOLLAR. • Antropología de !a ferocidad cotidiana: Supervivencia y trabajo en una comunidad cántabra, pOr JAVIER IÁPEZ IINAGE. • La conflictividad camperina en la p^nvincia de Córdoba (1931-1936), por MANUEL P^REZ YRUELA. • Fl rector oleícola y e! olivar: Oligopolio y corte de secolección, por AGUSTÍN I.f)PEZ ONTIVEROS. • Propietañor muy pobrer. Sobre la rubordinación política del pequeño camperino (La Confederación Naciona! Católico-Agraria (1917-1942), pot JUAN JOS^ CnsTILLO. ! La evolución de camperinado: La agrrcultura en el derarrollo capitalirta, por MIREN ETxEZARRETA. • Iu agricultura erpañola a mediador del riglo XIX (1850-1870). Rerultador de una encuerta agraria de la época, por JOAQUÍN DEL MORAI RUIZ. • Cririr económica y empleo en Andalucía, por ANTONIO TITOS MORENO Y JOSE JAVIER RODRIGUEZ ALCAIDE. • Aprovechamiento en común de partos y leñar, por MANUEL CuADRADO IGLESIAS. • Prenra agraria en la Erpaña de la Ilurtración. E! Semanaño de Agricultura y Arter dirigido a lor párrocor (1797-1808), por FERNANDo DíEZ RODRícuEZ. • Agricultura a tiempo parcirr! en e! Paú i^alenciano. Naturalexa y efector de! fenómeno en e! regad'so litoral, pOt ELADIO ARNALTE ALEGRE. • Lat agriculturar andaluza.r, pot Grupo ERA (Estudios Rurales Andaluces). • F1 problema agrario en Cataluña. La cue.rtión Rabasraire (1890193G), pot ALBERT BALCELLS. • EXpanJtÓn vinlcOla y atraJO agTaflO (18^O-1900), pot TERESA CARNERO 1 ARBAT. • Propiedady u.ro de !a tierra en !a Baja Andalucía. Carmona, .riglot XI/111-XX, por JOSEFINA CRUZ VILLALbN. • Tierra y parente.rco en e! campo revillano: la revolución agrícola de1 .riglo XIX,^ por FRANço^s HERAN. SERIE RECURSOS NATURALES • Ecología de lor hayedo.r me>idionale.r ibérico.r: e! macixo de Ay!lÓn, pOr J. E. HERN^INDEZ BERMEJO y M. SAINZ OLLERO. SERIE LEGISLACION • Recopilación de norma.r. Núm. 1. Ganadería. SERIE TECNICA • La energía .rolar, e1 hombre y!a agricultura, pot JOSÉ J. GARCtABADELL. • La técnica y!á tecnología de! riego por a.rperrión, pOt PEDRO GóMEZ POMPA. r P.V.P.: 400 Ptas.