Minuta-Congreso-Reforma-Constitucional-4

Proyecto
de
ley
que
otorga
reconocimiento constitucional al
principio de transparencia y al
derecho de acceso a la información
pública. Boletín Nº 8805-07.
En primer lugar, quisiera agradecer la invitación y destacar la participación en este tema de
otras organizaciones dedicadas a la transparencia como Pro Acceso, Ciudadano Inteligente.
También destacar la labor de la Contraloría General de la República, el Consejo para la
Transparencia y del Ministerio Secretaría General de la Presidencia.
Esta reforma constitucional viene a cristalizar los esfuerzos que en materia de probidad y
transparencia se han sucedido desde la creación de la comisión nacional de ética pública el
5 de Abril de 1994.
La iniciativa iniciada en moción tiene como propósito consagrar en el artículo 8° del
Capítulo I de la Constitución, dentro de las Bases de la Institucionalidad, el principio de
transparencia en el ejercicio de las funciones públicas, explicitando que éste comprende
tanto el principio de publicidad como el de acceso a la información pública. Igualmente, se
incorpora en el numeral 12° del artículo 19 del Capítulo III, dentro de los derechos
constitucionales de toda persona, el de buscar, requerir y recibir información pública.
La Sala del Senado aprobó el proyecto en los siguientes términos:
Artículo 1º: Reemplaza el inciso primero del artículo 8º de la Constitución Política por el que
sigue: “En el desempeño de sus funciones públicas, sus titulares deberán observar los principios
de probidad y transparencia. Este último incluye el principio de publicidad y acceso a la
información pública.”.
Artículo 2º: Incorpora un nuevo inciso tercero al numeral 12 del artículo 19º de la
Constitución Política: "Toda persona tiene derecho a buscar, requerir y recibir información
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pública, en la forma y condiciones que establezca la ley, la que deberá ser de quórum
calificado.”.
En opinión de Chile Transparente, esta reforma es muy positiva pues viene a reforzar la
legislación nacional sobre transparencia, probidad y derecho a acceso a la información,
además de dar impulso a otros proyectos de ley relacionados con el tema.
En este sentido, se considera muy valioso que éste proyecto haya surgido como una moción
parlamentaria transversal, iniciada por los diputados Larraín, Alverar, Allende, García y
Tuma, pues da cuenta del interés de nuestros representantes por la transparencia y el
fortalecimiento a la democracia, y de su compromiso con estos temas.
En cuanto al fondo del proyecto, nos manifestamos conformes con el contenido de la
propuesta, considerando que es un gran avance y una fuerte señal el hecho de partir con
una trasformación a la Constitución Política de la República.
Incorporar el derecho de acceso a la información pública a la categoría de derechos
fundamentales que establece la Constitución es consecuente además con lo establecido en
los Tratados Internacionales ratificados por Chile y que se encuentren vigentes, así como
también con el criterio seguido por la Corte Interamericana de Derechos Humanos en el
caso “Claude Reyes y otros v/s Chile” según el cual se consagra el Derecho de Acceso a la
información como un Derecho Humano, por constituir un aspecto integrante del Derecho a
la Libertad de Pensamiento y Expresión. Agrega que aquel resulta fundamental para hacer
realidad la idea de participación ciudadana – puesto que una persona que no está informada
no puede participar en las decisiones de interés público- y con ello se convierte en un
elemento fundamental de una democracia saludable.
Lo anterior demuestra la importancia de acerca de este derecho, dando un paso más al
consagrarlo como un derecho relacionado con el derecho a la libertad de expresión, pero
autónomo.
Esperamos también que ésta disposición permita modificar el criterio reciente establecido
por nuestro Tribunal Constitucional que señala que el artículo 8 no habla de acceso, entrega
ni de derecho a acceso a la información respecto de un amplio espectro de ella, afectando
gravemente la aplicación de este derecho a un punto que va más allá de su ponderación con
otros intereses.
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Asimismo, con respecto al artículo 2°, consideramos excesivo exigir una ley de quórum
calificado para regular el ejercicio del derecho a acceso a la información, pues esto podría
afectar su ejercicio estableciendo un requisito extra al actual estándar constitucional. En
este punto apoyamos la indicación presentada por algunos Diputados y Diputadas de la
Comisión de Constitución de la Cámara de Diputados en cuanto a eliminar este requisito.
Creemos que basta con que la regulación específica quede en manos de una ley simple, tal
como ha sido gestada hasta el momento la regulación sobre transparencia y acceso a la
información, y que se siga la fórmula establecida en el actual artículo 8° de la Constitución:
que las leyes de quórum calificado queden reservadas en este aspecto sólo para definir las
excepciones a la regla general, es decir, para regular las restricciones y el secreto en el
acceso a la información.
Las observaciones antes señaladas buscan
erradicar la concepción del acceso a la
información solamente como una condición de transparencia en la gestión del Estado y, por
el otro lado, reforzar el principio general de que toda la información que obre en manos del
Estado es pública, salvo excepciones legales, convirtiéndolo en una práctica que logre
asentarse en nuestros ciudadanos e instituciones como parte integrante de las garantías
fundamentales de las personas y como elemento esencial de una Democracia robusta.
Y así, que la transparencia y el acceso a la información sea un efectivo antídoto a la crisis de
confianza que golpea a nuestras instituciones públicas y que se reconozca firmemente la
categoría de derecho fundamental que debe tener el derecho de acceso a la información
pública.
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