Cámara Nacional de Casación Penal CAUSA Nro “Actuaciones Presunta Infra C.P. (Víctim s/recurso de ca REGISTRO NRO. //n la ciudad de Buenos Aires, a los 7 días del mes de marzo del año dos mil seis, reunidos los integrantes de la Sala II de la Cámara Nacional de Casación Penal integrada por los doctores Juan E. Fégoli, Pedro R. David y W. Gustavo Mitchell, bajo la presidencia del primero de los nombrados, asistidos por la Secretaria de Cámara doctora Gabriela García, con el objeto de resolver en esta causa Nro. 5832 del registro de esta Sala, caratulada: “Actuaciones instruidas por av. presunta infracción al art. 170 del C.P. (Víctima Beatriz Soto) s/recurso de casación”, estando representado el Ministerio Público por el Sr. Fiscal General, doctor Raúl Pleé, la defensa de Rubén Ricardo Riccieri por el doctor Horacio Oscar Blanco. Habiéndose efectuado el sorteo para que los jueces emitan su voto, resultó designado para hacerlo en primer término el doctor W. Gustavo Mitchell, en segundo lugar el doctor Juan E. Fégoli y, por último el doctor Pedro R. David. (fs.1804). El señor juez doctor W. Gustavo Mitchell dijo: I1°) Con fecha 27 de enero de 2005 los integrantes de la Sala de feria de la Cámara Federal de Apelaciones de La Plata, resolvieron: I) Revocar la resolución apelada que decide procesar a Rubén Ricardo Riccieri en orden al delito previsto y reprimido por el art. 170, inc. 6°, del C.P.; decretando su falta de mérito -art. 309 del C.P.P.N.- y ordenado su inmediata libertad. II) Declarar la nulidad absoluta de la declaración indagatoria y de los actos que sean consecuentes. 2°) Contra el punto II de esta resolución el doctor Julio Amancio Piaggio, Fiscal General de Cámara interpuso recurso de casación e inconstitucionalidad a fs. 1718/24, el que a través del recurso de queja, fue concedido a fs. 1771, y mantenido en esta instancia a fs. 1793. 3°) El recurrente encauza el remedio invocando vicios in proceden−1− do, conforme lo previsto en el inciso 2°del art. 456 del C.P.P.N. En primer término señala que el Tribunal de feria contradijo los precedentes emitidos por los integrantes de la Sala III, quienes no cuestionaron la constitucionalidad del art. 212 bis ibídem. En ese orden, critica que se le deniegue a los fiscales la posibilidad de recibir declaración indagatoria, pues a su entender tal facultad deriva del art. 120 de la Constitución Nacional, precepto que le otorga al Ministerio Público la potestad de velar por la legalidad y los intereses generales de la sociedad, principio que luego fue recepcionado por la ley 24.946. Es así, que considera que “no deben quedar dudas que la actividad que tienen los fiscales en el proceso penal, no consiste únicamente en la promoción de la acción penal y su prosecución como antaño se entendía, sino que el cúmulo de responsabilidades tiende invariablemente a que en todo proceso se respete la legalidad, conforme lo manda el artículo 18 de la Carta Magna”. En ese contexto, reitera que la recepción de la declaración indagatoria no es función exclusiva de los jueces, y que una interpretación diferente contraría lo dispuesto por el art. 27 de la ley 24.946. Tampoco comparte el criterio de que dicho acto procesal recibido en tales condiciones sea equiparado a la actividad de una comisión especial, vedada por el artículo 18 de la C.N. Asimismo, coincide con que esta norma no impone que ese acto deba ser recepcionado en forma exclusiva por los jueces y “que en el caso de autos, el señor fiscal al ordenar las declaraciones indagatorias, designó al Sr. Defensor Oficial para que tomare la intervención legal que le competía y también indicó que se celebraran las actas de notificación de derechos que le asisten a los imputados...”. También recuerda que a Riccieri al celebrarse el acto se le explicó el derecho que le asigna el artículo 212 bis del C.P.P., expresando, luego, su deseo de declarar ante el Fiscal. Así las cosas, concluye en que se ha dado cumplimiento a las garantías del debido proceso. Manifiesta, que sin perjuicio de que la indagatoria declarada nula fue luego reproducida por el juez, el agravio impetrado continua vigente toda vez que se le impide ejercer tal facultad al haberse declarado su inconstitucionalidad en el marco de este proceso. −2− Cámara Nacional de Casación Penal CAUSA Nro “Actuaciones Presunta Infra C.P. (Víctim s/recurso de ca Por último, estima que resulta contradictorio analizar la prueba colectada contra Riccieri, si se ha declarado la nulidad absoluta de la declaración indagatoria y de los actos consecuentes. Por las razones expresadas, solicita se revoque el fallo de fecha 27 de enero de 2005 y se dicte un nuevo pronunciamiento. 4°) Que durante el término de oficina previsto por los arts. 465 primera parte, y 466 del C.P.P.N., en primer lugar Rubén Ricardo Riccieri conjuntamente con el doctor Horacio Oscar Blanco presentaron un escrito en el que por los siguientes fundamentos solicitaron se rechace el recurso de casación interpuesto por el representante de la vindicta pública. Con el objeto de fundar su postura citaron doctrina que emana de la jurisprudencia de las Salas I y II de la Cámara Federal de Apelaciones de La Plata, cuyos integrantes sostienen que la ley 25.760 vulnera principios constitucionales y tratados internacionales, y por ende no justifican bajo ningún extremo la posibilidad de que el imputado preste declaración indagatoria ante el fiscal. No obstante ello, sostienen que “ nuestro defendido solicitó declarar ante el juez, situación que no se le permitió expresando que se encontraba en otro edificio, con lo cual continuó el acto del art. 294 del código de rito, a pesar del requerimiento de nuestro defendido”. Asimismo sostiene que las expresiones referidas por el representante del Ministerio Público Fiscal cuestionando la actitud del Tribunal de feria al resolver el caso contrariamente a la doctrina que venía sosteniendo la Sala III de la Cámara Federal de la Plata, horas antes de finalizar su integración, a su ver busca desacreditar la labor de sus miembros. Por su parte, el doctor Raúl Omar Pleé, Fiscal General ante esta Cámara Nacional de Casación efectuó una presentación en la que realiza un detallado análisis de la normativa constitucional y procesal penal vigente, para concluir que el art. 212 bis resulta constitucional. Para ello, proviene de la finalidad de las funciones del Ministerio Público Fiscal, competencia prorrogada por la Ley Orgánica del Ministerio Público y continuada por la sanción de la ley −3− 25.760. Asimismo, señala que esa facultad no vulnera al art. 18 de la C.N., ya que, a su ver, debe tenerse en cuenta que el art. 9, 3), del pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos enuncia que “Toda persona detenida o presa a causa de una infracción penal será llevada sin demora ante un juez u otro funcionario autorizado por la ley para ejercer funciones judiciales”. Por otra parte, considera que declarar ante el fiscal constituye “una opción del imputado. Esta previsión legislativa, de permitir al reo decidir el frente a quien realizará su declaración indagatoria, importa un reaseguramiento del derecho de defensa en juicio y al debido proceso legal, máxime cuando en el resto de los delitos el imputado obligatoriamente debe efectuar la declaración indagatoria frente al juez”. 5°) A fs. 1804 se dejó constancia de haberse celebrado la audiencia prevista en el art. 468 del código de forma. Superado este período procesal las actuaciones quedaron en condiciones de ser resueltas. IIEstimo oportuno señalar que el recurso de casación interpuesto con invocación de lo prescripto por el art. 456, inciso 2° del C.P.P.N., es admisible toda vez que de la verificación de la cuestión sometida a inspección jurisdiccional surge que el recurrente invocó fundadamente el agravio; además el pronunciamiento es recurrible en virtud de lo dispuesto por los arts. 457 y 474 ibídem. IIIEl planteo introducido por el casacionista ha obtenido por parte de esta Sala resultado negativo. En efecto en las causas nro. 5836 in re “Ibarra, Francisco O. y otro s/recurso de casación”, rta. 12/12/05, Reg. 8179; y nro. 5538 in re “Britez, Miguel s/recurso de casación e inconstitucionalidad”, rta. el 12/12/05, Reg. 8179, adherí a los votos de los doctores Juan E. Fégoli y Pedro R. David, respectivamente. En estos precedentes, luego de efectuado el control de constitucionalidad se concluyó que el art. 212 bis del código de forma no avasallaba a otros −4− Cámara Nacional de Casación Penal CAUSA Nro “Actuaciones Presunta Infra C.P. (Víctim s/recurso de ca derechos y garantías de rango superior, en tanto que “la Corte Suprema de Justicia de la Nación ha sostenido que las leyes debidamente sancionadas y promulgadas llevan en principio la presunción de validez (Fallos: 263:309). Asimismo, se consideró que la declaración de inconstitucionalidad de las leyes es un acto de suma gravedad institucional, ultima ratio del orden jurídico, ejerciéndose únicamente cuando la repugnancia con la cláusula constitucional es manifiesta y la incompatibilidad inconciliable (Fallos: 306:625). Además, el acierto o error, el mérito o la conveniencia de las soluciones legislativas no son puntos sobre lo que al poder judicial quepa pronunciarse, salvo en aquellos casos que trascienden ese ámbito de apreciación, para internarse en el campo de lo irrazonable, inocuo o arbitrario (Fallos: 313:410; 318:1256)”. En definitiva se señaló que “no se advierte vulneración de garantías constitucionales por el solo hecho de acordar al fiscal las atribuciones necesarias para el cumplimiento de sus funciones, siempre que se contemplen limitaciones y controles a su labor, en especial respecto de aquellas decisiones del fiscal que comprometan derechos de las partes, respecto de las cuales -al igual que ocurre en algunos catálogos instrumentales provinciales como el cordobés, por ejemplose prevea el control jurisdiccional mediante el mecanismo de la oposición del imputado. (confr. José I. Cafferata Nores, Introducción al Nuevo Código Procesal Penal de la Provincia de Córdoba, 1992, pág.75)”. A lo expuesto, atañe mencionar que el instituto incorporado por la ley 25.760 al art. 212 bis del código de forma dispone que: “No obstante lo establecido en el artículo 213 inciso a), cuando hubiese motivo bastante para sospechar que una persona ha participado en la comisión de alguno de los delitos previsto por los artículos 142 bis y 170 del Código Penal de la Nación, o en alguna otra infracción penal cuya investigación resulte conexas con aquéllas, el Fiscal procederá a recibirle declaración, salvo que el imputado manifestase su voluntad de declarar ante el Juez. Cuando la declaración sea recibida por el Fiscal, éste procederá de acuerdo con lo establecido por los artículos 294 y siguientes de este Código...”. Es así, que de adverso a lo sostenido por los integrantes de la Excma. −5− Cámara Federal de La Plata el espíritu que emana de la ley, lejos de otorgarle una nueva función al Ministerio Público Fiscal opuesto al principio de legalidad, procura que el imputado al momento de prestar declaración indagatoria pueda optar entre efectuarla ante el juez o el fiscal según la estrategia procesal seleccionada. Por lo tanto se está frente a un derecho el que concretamente se manifiesta en la posibilidad de elegir entre dos alternativas jurídicas, y que cualquiera fuera la selección no se verifica perjuicio alguno en desmedro del imputado y del proceso legal. Conforme ello, las razones de política criminal que llevaron al legislador a sancionar la ley 25.760, aplicable durante la etapa preparatoria, tampoco colisiona con las garantías constituciones. “....la Constitución Nacional no establece que los imputados deban declarar sólo y exclusivamente ante un juez, sino que tienen el derecho a hacerlo si así lo quieren. No hay ninguna norma constitucional que prohíba al fiscal escuchar a un imputado que prefiere declarar nada menos que ante quien lo está investigando”. (“La facultad del Fiscal Federal de recibirle declaración al imputado no tiene porqué ser considerada inconstitucional” Corvalán, Victor R., pub. La Ley 2004- T. C, 661). Ello es así, ya que no obstante de que sobresalga como función primordial del Ministerio Público Fiscal la persecución de la acción, no puede resultar indiferente que dicha actividad debe ejercerse en defensa de la legalidad y de los intereses generales de la sociedad, de conformidad con lo descripto por el artículo 120 de la Constitución Nacional. Esta postura, a su vez, se encuentra regulada en la Ley Orgánica del Ministerio Público Fiscal, conforme se desprende de los artículos 1° y 27°, inc. a) de la ley 24.946. En consecuencia, negarle la posibilidad, a quien instruye la pesquisa, de indagar al causante, bajo el endeble argumento de ser el responsable de impulsar el proceso constituye ésta una simple afirmación dogmática, carente de sustento y por consiguiente infundada, pues, no se toma en cuenta que su −6− Cámara Nacional de Casación Penal CAUSA Nro “Actuaciones Presunta Infra C.P. (Víctim s/recurso de ca desempeño debe ceñirse al absoluto respeto de las leyes. Justamente, ante la posibilidad de vacilar sobre la objetividad en su proceder, subsiste la posibilidad de que el imputado preste declaración ante el Juez. Por último, corresponde expresar que dicha actividad no se despliega sin ningún tipo de control, en tanto el custodio elemental concerniente al cumplimiento de la mencionada opción resulta ser su letrado defensor, quien además de las obligaciones propias de su ministerio, le compete observar la correcta aplicación del artículo 212 bis del código de forma. El asesoramiento previo, los términos y el alcance de los dichos que considere necesarios expresar, así como también ante quién se pretende emitirlos se encuentran ineludiblemente entre las medidas que obligan a su estricta vigilancia en cuanto a su ejecución, y cualquier inobservancia deberá ser puesta de manifiesto, y en su caso corregida, en tanto su omisión lleva inevitablemente a lesionar el principio de legalidad. En esa inteligencia, tampoco se aprecian diferencias relacionadas a la forma y modo de su cumplimiento para el caso de que la declaración indagatoria sea celebrada por el juez, en tanto él al igual que el fiscal tienen el deber de cumplir con los principios constitucionales. Ahora bien, trasladados estos principios al caso que provoca la intervención de esta Cámara, es dable concluir que se observa un correcto desempeño del sistema contemplado por el art. 212 bis del código de forma por parte del fiscal de instrucción. En efecto, en el marco de la pesquisa la que se encontraba delegada a su cargo (art. 196 del C.P.P.N.) le recibió declaración indagatoria a Rubén Ricardo Riccieri a quien se le hizo saber que se le atribuye haber participado, en calidad de coautor, junto a otras personas en la sustracción, retención y ocultación, para sacar rescate de Norma Beatriz Soto, suceso acontecido entre las 20:30 horas del día 12 de noviembre de 2003 y las 3:30 horas del día inmediato siguiente. Hecho que fue encuadrado, “prima facie”, en los arts. 170,con el agravante del inciso 6to., y 166, inc. 2° ) en función del art. 164, todos del Código Penal (v. fs. 1331/1336). −7− El documento confeccionado a tal fin, refleja que el imputado eligió ser asistido por el doctor Néstor Fabián Bianchini, con quien había mantenido una entrevista. Asimismo, y luego de haberle informado sobre su derecho de negarse a declarar, se lo puso en conocimiento sobre la posibilidad de que ese acto pudiera efectuarse ante el juez. La rúbrica y falta de impugnación de los allí intervinientes ratifica el conocimiento, en tanto la observancia de tales obligaciones dejan sin sustento lo alegado por la defensa en cuanto a que no se consideró el pedido para que sea el juez quien le recibiera la indagatoria. Si así hubiera acontecido simplemente el imputado debía haberse negado a declarar, presentando formalmente la solicitud para ser recibido por el magistrado. Por consiguiente al haber contado el causante con el asesoramiento por parte de su defensa técnica, no se llega apreciar la sostenida existencia de un perjuicio, al no haberse acreditado vulneración a su derecho a declarar ante el juez. Es que la libertad de decidir en uno de los actos de defensa de mayor importancia, no se satisface entrevistándose con su abogado -previo a celebrarse el acto-, el de hacerle conocer los hechos que se le imputan y la calificación legal, y la posibilidad de negarse a declarar, sino que a estos derechos, a partir de la sanción de la ley 25.760, se le debe adicionar la facultad supra mencionada, circunstancias que itero, por lo demás fueron llevadas a cabo con total apego a las disposiciones vigentes. Previo a finalizar, resta señalar que en las expresiones efectuadas por el Fiscal observo la única intención de destacar que la doctrina que sustenta al fallo que impugna no sólo no la comparte si no que tampoco es pacifica en la Cámara de “a-quo”. En conclusión, el art. 212 bis del código procesal se integra en forma armónicamente con el resto del cuerpo normativo, y por lo tanto, no contraviene ningún principio constitucional ni tratado internacional. Por otra parte la actuación del fiscal, en estas condiciones, fue prudente y razonable observando su función dentro de los derechos y obligaciones que provienen de esos cuerpos −8− Cámara Nacional de Casación Penal CAUSA Nro “Actuaciones Presunta Infra C.P. (Víctim s/recurso de ca normativos y, que se encuentran descriptos en el Código Procesal Penal de la Nación. En definitiva y en razón a lo expuesto, propicio hacer lugar al recurso de casación presentado por el Ministerio Público Fiscal a fs. 1718/24vta., y en consecuencia, declarar la constitucionalidad del art. 212 bis del C.P.P.N., anular el punto II del resolutivo del auto de fs. 1614/16vta., y devolver las actuaciones a la Sala de origen a efectos de que dicte un nuevo pronunciamiento de acuerdo a lo aquí expuesto, sin costas. (arts. 471, 475, 530 y 532 del C.P.P.N.). Tal es mi voto. Los señores jueces doctores Juan E. Fégoli y Pedro R. David dijeron: Que adhieren al voto precedente. En mérito al resultado habido en la votación que antecede la Sala II de la Cámara Nacional de Casación Penal RESUELVE: Hacer lugar al recurso de casación e inconstitucionalidad deducido a fs. 1718/24 por el doctor Julio Amancio Piaggio, Fiscal General de Cámara y en consecuencia declarar la constitucionalidad del art. 212 bis del código de forma, anular el punto II del resolutivo del auto de fs. 1614/16vta., y devolver las actuaciones a la Sala de origen a efectos de que dicte un nuevo pronunciamiento de acuerdo a lo aquí expuesto, sin costas. (arts. 471, 475, 530 y 532 del C.P.P.N.). Regístrese y notifíquese en la audiencia designada a los fines del art. 400, primera parte del Código Procesal Penal de la Nación en función del art. 469, tercer párrafo del mismo ordenamiento legal, y remítase sirviendo la presente de atenta nota de estilo. Firmado: Juan E. Fégoli - Pedro R. David - W. Gustavo Mitchell. Ante mí: Gabriela García -Secretaria de Cámara. −9− −10− Cámara Nacional de Casación Penal −11− CAUSA Nro “Actuaciones Presunta Infra C.P. (Víctim s/recurso de ca −12− Cámara Nacional de Casación Penal −13− CAUSA Nro “Actuaciones Presunta Infra C.P. (Víctim s/recurso de ca