prevención de riesgos laborales

Anuncio
NUESTRO TRABAJO,
NUESTRO APARATO
L O C O MO T O R
ESQUELETO, MUSCULOS, CONSUMO ENERGETICO
GOBIERNO de CANTABRIA
Consejería de Economía - Hacienda y Empleo
(Acción social subvencionada)
NUESTRO TRABAJO, NUESTROS HUESOS
Nuestro esqueleto es un sólido y fuerte armazón, compuesto por 206 huesos,
convenientemente entrelazados con los músculos, los cartílagos, y 250 articulaciones
entre sí.
Sobre él, se sustenta todo nuestro cuerpo, pero ésta, no es su única misión:
Sirve para proteger a los órganos blandos, como el cerebro o la médula espinal.
Constituye, además, la esencia de nuestra capacidad de movimientos, y gracias
a él podemos desplazarnos.
Es el protector de nuestros órganos más importantes.
Los huesos están conformados por un tejido cuyas características más predominantes,
como la fuerza, la rigidez, y la resistencia, les da un aspecto duro y seco que pudiera
hacernos pensar que son partes muertas e inactivas.
Sin embargo, esa parte externa rígida y compacta rodea a otra esponjosa y flexible,
constituida por una red de proteínas, el colágeno, por las que se distribuyen los vasos
sanguíneos que riegan el tejido óseo.
La parte exterior, muy rica en elementos celulares, vasos sanguíneos y nervios, se
encarga de reproducir el tejido de los huesos. En el centro de su interior se encuentra la
médula ósea, cuya función principal es producir las células de la sangre.
Inicialmente los huesos se forman a partir de una base de cartílago, que se va osificando
al asimilar las sales cálcicas que le aporta el organismo. Los huesos se van endureciendo
mediante este proceso, que no termina hasta los 15 años de edad aproximadamente.
Luego siempre permanece el cartílago en los extremos de los huesos, y por ello es
posible el crecimiento.
Resulta indispensable para la correcta formación y mantenimiento de nuestros huesos el
incluir en nuestra dieta alimenticia leche, yema de huevo, queso, coles, zanahorias y otros
vegetales, de donde nuestro organismo puede obtener calcio. Es importante ingerir al
menos 1 gramo de calcio al día.
Página
3
La misma importancia tiene consumir aceite y grasas de pescado, huevos y mantequilla,
de donde extraeremos la vitamina D, que favorece la absorción del calcio. Para esta
misión nos serán también muy útiles los baños de sol.
DIARTRODIAS
Las diartrodias son articulaciones con capacidad de realizar movimientos extensos.
Elementos que constituyen una diartrosis
Superficies articulares: Son de forma variable y pueden ser convexas, cóncavas, planas
o en polea.
Página
Cápsula articular: Es un tubo que se inicia en los bordes del sistema óseo. Presenta en
su conformación un ligamento capsular una membrana sinovial y sinovia.
4
Cartilagos articulares: Son hialinos, sólidos, flexibles y elásticos. Cubren las superficies
articulares y las protegen de los efectos del choque y el roce.
a) Fibrocartilagos marginales o rodetes articulares: Se presentan en algunas
diartrosis y su objetivo es aumentar la extensión y profundidad de las superficies
articulares. Pueden ser:
b) Completos o anulares: Se desarrollan en todo el contorno de la superficie
articular.
c) Incompletos: Se desarrollan en una parte de la superficie articular.
Fibrocartilagos interarticulares o meniscos: Están adheridos por la periferia al
ligamento capsular y están presentes en articulaciones sonde hay coaptación de las
superficies articulares. Pueden ser:
Discos verdaderos o completos: Separan completamente las superficies
articulares.
Discos en media luna o incompletos: No poseen región central ni parte de su
contorno.
Ligamentos o medios de unión: Sujetan las articulaciones y restringen y guian los
movimientos. Los ligamentos pueden ser:
Ligamentos capsulares: Se componen de fascículos de fibras colagenas
dispuestas irregularmente.
Ligamento extracapsular: Puede ser cilíndrico o aplanado; blanco, fibroso e
inesxtensible o amarillo, elástico y extensible.
Ligamento intracapsular: Se encuentran entre las superficies articulares, son
cortos y resistentes, muy irrigados e inervados.
Página
5
Membrana sinovial y liquido sinovial: La membrana es delgada y tapiza la cara interna
de la cápsula articular. La sinovia o líquido sinovial es producida por la membrana sinovial
y es un líquido viscoso parecido a la clara de huevo que lubrica y nutre el cartílago
articular
LA COLUMNA VERTEBRAL
Es una estructura flexible formada por 33 vértebras que unidas entre sí con unas
almohadillas de fibrocartílago o discos, constituyen el eje central de nuestro cuerpo,
extendiéndose desde la base de la cabeza hasta donde nacen las piernas.
Sus principales funciones son, junto con el establecer un soporte rígido a todo el cuerpo,
ofrecer elasticidad a nuestros movimientos, posibilitando las flexiones y los giros, proteger
la cavidad torácica y otros elementos frágiles como la médula ósea; proteger el cerebro y
a la médula de los choque producidos por los saltos, absorbiéndolos gracias a su
curvatura y a los discos intravertebrales; y servir de soporte para la inserción de los
músculos y de las costillas.
Los huesos, que llamados vértebras, tienen gran capacidad de movimiento en su
conjunto, ya sea en su región cervical, dorsal y lumbar:
CERVICAL: Forma el cuello. La mayor movilidad de la columna. 7 vértebras.
DORSAL: de la 8ª a la 19ª vértebra. Menor movilidad debido a las costillas.
LUMBAR: de la 20ª a la 24ª vértebra. Mueven más en flexión y menos en la extensión
durante la cual las espinosas hacen contacto.
Las 7 cervicales, 12 dorsales y 5 lumbares están separadas por los 23 discos
intervertebrales correspondientes. Las 5 sacras están fusionadas, al igual que las 4
coccígeas, formando los huesos sacro y cóccix.
Las primeras siete vértebras se llaman cervicales y forman el cuello. La primera de todas
ellas es la “Atlas”, y sobre ella se asienta la cabeza, gracias a ella movimientos hacia
adelante y hacia atrás de la cabeza.
La segunda vértebra se llama “Axis” y a ella se debe la posibilidad de girar la cabeza
hacia uno y otro lado.
Axis
Página
6
Atlas
Las vertebras cervicales son las más pequeñas. Están perforadas para permitir el paso
por ellas de las arterias vertebrales La séptima, denominada vértebra prominente, tiene en
su vértice un tubérculo notable que puede apreciarse en la parte posterior del cuello.
Las vertebras dorsales son doce, y su tamaño es algo mayor. En ellas se sustentan las
costillas. Tienen una apófisis espinosa larga, dirigida hacia abajo.
Las vértebras lumbares, son cinco, son las más voluminosas.
VISTA SUPERIOR VERTEBRA LUMBAR
Página
El Sacro y el Coxis junto a los dos huesos innominados, forman la PELVIS, que
constituye un cinturón protector de los órganos blandos del sistema digestivo, y desde el
cual, se articulo el tronco con las piernas.
7
Articulado con la quinta vértebra lumbar se encuentra el “Sacro” que es un hueso formado
por otras cinco vértebras soldadas. En su vértice, compuesto también por cuatro
rudimentarios huesos fusionados se articula el “Coxis”, que es el final de la columna.
Curvatura cervical convexa hacia delante.
Curvatura dorsal, convexa hacia atrás.
Curvatura lumbar convexa hacia delante.
Y curvatura pelviana, convexa hacia
atrás.
Las curvaturas dorsal y pelviana se
califican de primarias, porque responden
a la curvatura total de la columna, en
forma de C, con la cabeza dirigida hacia
abajo, que presenta el feto antes de
nacer.
Las otras dos curvaturas, consideradas
secundarias, se han desarrollado en dos
fases del crecimiento del bebé: la cervical
cuando éste levanta la cabeza, tendido
prano (boca abajo) para mirar hacia
arriba, y la lumbar cuando el niño gatea y
aprende a mantenerse en pie y a andar.
Vista lateralmente, la columna vertebral
presenta cuatro curvaturas de delante
hacia atrás o viceversa.
Entre vértebra y vértebra existen
articulaciones
de
materia
fibrocartilaginosa
llamadas
discos
intervertebrales, que hacen posible la
flexibilidad de la columna, y con ella, la
movilidad de nuestro cuerpo.
Cada disco tiene un núcleo central de naturaleza gelatinosa, rodeado de una capa de
fibra. El hundimiento del núcleo por presiones excesivas, puede producir compresiones de
las raíces nerviosas, ocasionando dolor y, a veces, pérdida de la fuerza en la zona de
distribución del nervio o nervios afectados.
La superior, en la zona cervical, y la inferior, en la lumbar, son cóncavas hacia atrás y se
llaman lordosis -cervical y lumbar respectivamente-. La curva media es cóncava hacia
adelante y se llama cifosis dorsal.
Página
Cada vértebra se articula con la inferior por delante (mediante el disco intervertebral) y por
detrás (a través de la articulación facetaria). Del mismo modo, el disco amortigua la
presión entre los cuerpos vertebrales y en la articulación facetaria se encuentra un
8
Esta disposición permite que la columna sea muy resistente a la carga aplicada en
dirección vertical, puesto que sus curvaturas le dan flexibilidad. Si la carga es muy
importante, las curvaturas pueden aumentar transitoriamente, amortiguando la presión
que sufren las vértebras. Por eso, en algunos países era o es tradicional transportar la
carga sobre la cabeza, incluso el nuestro, cuando las amas de casa portaban o portan las
coladas de ropa húmeda sobre la cabeza, de vuelta de los lavanderos. Además, al
hacerlo así se mantenía el centro de gravedad en el eje de la columna, por lo que la
musculatura de la espalda apenas tenía que trabajar.
cartílago con la misma misión. En el cartílago no hay nervios, esto explica que cierto
grado de desgaste del cartílago pueda ser indoloro, mientras no llegue a afectar al hueso
que hay por debajo. Si esto ocurre, se activan los nervios y entonces sí se siente dolor.
Vértebras, discos intervertebrales (el superior con una lesión) y nervios
En una visión lateral, se puede observar que al ubicarse una vértebra sobre la otra forman
un agujero, o agujero de conjunción, por el que pasan las raíces nerviosas que nacen de
la médula espinal.
Entre las vértebras que no están unidas o soldadas existe un amortiguador, llamado disco
intervertebral. Está compuesto por dos partes: la parte central de consistencia gelatinosa
que se denomina núcleo pulposo, y una envuelta fibrosa que lo mantiene en su lugar y se
denomina anillo o envuelta fibrosa. El disco es un medio hídrico que recupera agua
cuando descansa y la expulsa cuando sufre tensiones.
Página
9
El anillo fibroso es más grueso en la porción anterior del disco, por lo que la pared
posterior es más frágil. Ese es el motivo por el que la mayoría de las veces en las que el
anillo se rompe, causando una hernia discal, lo hace por detrás.
La presión en el núcleo pulposo es de 5 a 15 veces superior a la presión arterial, por lo
que no puede llegar sangre a él. Seguido a la cual, al no llegar nutrientes, éste no se
recupera cuando se desgasta o lesiona. Hay algunos productos farmacéuticos y otros
naturales como el cartílago de Housón para favorecer su recuperación, aunque no está
del todo demostrada su eficacia; ni la de unos, ni la de otros. Por esta razón, tampoco hay
nervios en el núcleo pulposo; sólo los hay en las capas más externas de la envuelta
fibrosa. Eso explica que la degeneración del disco pueda ser indolora mientras no afecte a
la capa más externa de la envuelta fibrosa; aunque el tejido se desgaste no hay nervios
que puedan percibir y transmitir el dolor.
A lo largo del tiempo, con el paso de éste, las cargas que soporta el disco intervertebral
hacen que el núcleo pulposo se vaya desgastando; esto le hace perder altura. Ese
proceso, conocido como artrosis vertebral, no se puede considerar como una enfermedad
en sí misma, sino que la mayoría de las personas sanas, a partir de sobrepasar los 30
años, comienzan a tener cierto grado de desgaste. De hecho, por esta razón, los ancianos
suelen perder altura porque el desgaste del núcleo pulposo, haciendo que el disco pierda
espesor, por lo que las vértebras se acercan entre sí.
Por el contrario, cuando la carga disminuye, los discos dejan de estar comprimidos y se
incrementa la separación entre las vértebras. Eso ocurre durante la noche, cuando al
estar acostados desaparece la carga vertical. Es esta la situación idónea para la
recuperación de agua aludida anteriormente. Se calcula que una persona de edad media
puede aumentar hasta dos centímetros de altura durante la noche. También por el mismo
motivo los astronautas aumentan de altura cuando están en condiciones de ingravidez.
Página
10
Otra razón por la que disminuye la carga en los discos es al hacer estiramientos
adecuadamente, o algunas prácticas culturales, como es el caso de las llamadas mujeres
jirafa, de la etnia Kayah, en Birmania y Tailandia; a las que las aplican una serie de anillos
metálicos en el cuello, lo que hace que su cuello se alargue a lo largo de su proceso de
crecimiento, con la consiguiente separación de las vértebras cervicales.
LOS MUSCULOS
Este complicado armazón sobre el que se estructura nuestro cuerpo realiza sus
movimientos gracias a la actividad de los MUSCULOS. Todos nuestros movimientos, el
desarrollo de la fuerza, o simplemente, el permanecer inactivos, responde a la contracción
de nuestros músculos, constituidos por un tejido dotado de unas especiales
características:
Excitabilidad: Capacidad de responder a estímulos mecánicos, térmicos,
químicos o eléctricos.
Contractilidad: Posibilidad de acortamiento y endurecimiento. A base de la
cual, se realiza el trabajo muscular.
Extensibilidad y elasticidad: Capacidad de recuperación de su forma original,
después de su contracción.
Página
11
Tonicidad: El músculo en reposo NO se haya en completa relajación, sino que
mantiene una tensión, llamada tono, que está controlada por el sistema
nervioso. Es el estado ideal, en el cual, se encuentra el musculo dispuesto a
trabajar.
FORMA DE TRABAJAR LOS MUCULOS
Trabajo Muscular
Las fibras musculares obedecen una orden del cerebro para ponerse a trabajar a base de
contracciones. Estas pueden ser de dos tipos:
1.- Cuando el músculo se contrae, pero no cambia de longitud, por lo tanto no hay
movimiento, es llamada isométrica. Trabajo muscular estático.
2.- Cuando el músculo se contrae y acorta, entonces a través de sus inserciones en
los huesos (tendones), produce movimiento, es llamada isotónica y el trabajo muscular
es dinámico.
Pero la musculatura no está diseñada para trabajar continuamente, sino que lo está
para trabajar y descansar, siendo ésta la razón de ciertos fenómenos como los calambres,
los cuales son debidos a que se somete al músculo a tanto trabajo; es decir, a tanta
contracción, que cuando para, éste sigue contrayéndose por su cuenta, sin orden
cerebral, lo cual va a suponer que termine por estar contraído incluso en reposo o
acortado. Esto lo podemos considerar un punto poco ideal para volver a trabajar, puesto
que para contraerse/trabajar, parte ya de un estado de contracción, hasta el punto que si
en estas circunstancias se le demanda una prolongación importante (antagonista), no va a
ser capaz de hacerlo y romperá, esto será una rotura de fibras.
Los músculos esqueléticos no actúan individualmente, sino en grupos. Cada grupo de
músculos tiene su grupo opuesto o antagonista. Es el caso, por ejemplo, de los
extensores y de los flexores. Los músculos de fijación actúan estabilizando las diferentes
partes de un miembro durante el movimiento de las otras partes. Y otros músculos, los
sinergistas, estabilizan una articulación mientras otros la mueven, como los flexores de la
muñeca la sostienen mientras están extendidos los dedos. Es de suma importancia que
haya un buen equilibrio entre el “protagonista” y la ”antagonista” para el funcionamiento
de las articulaciones, puesto que cuando el “protagonista” trabaja, aumenta su tono y
fuerza o capacidad de contracción, mientras tanto el “antagonista” ha de extenderse,
perdiendo tono, produciéndose una descompensación entre ambos, situación ideal para
producirse una lesión.
En cuanto al sistema muscular que soporta la espalda, podemos indicar que Los
músculos paravertebrales se coordinan con los abdominales y el músculo psoas iliaco
para mantener la columna recta, de tal forma que se forma un conjunto de fuerzas
opuestas, llegando a mantener en una posición adecuada el raquis con respecto a la
espalda. Por último, los glúteos fijan la columna a la pelvis y dan estabilidad al sistema.
Página
Los músculos poseen muchas terminaciones nerviosas, por lo que su lesión o sobrecarga
puede ser muy dolorosa.
12
Por otra parte, si los músculos de la parte posterior del muslo, los isquiotibiales, están
acortados, tienden a provocar posturas inadecuadas para la columna vertebral.
Los músculos abdominales se extienden desde la parte inferior de las costillas hasta la
parte superior de la pelvis, protegiendo los órganos internos. Los que están en la parte
anterior se denominan rectos anteriores. Al contraerse tienden a acercar las costillas a la
pelvis frontalmente, doblando la columna hacia adelante, pero no poseen demasiada
eficacia, en términos de movimiento (cuando están contraídos a su máxima capacidad
curvan la columna vertebral hacia adelante unos 30 grados, solamente. El pecho puede
acercarse más a la rodilla por la acción de otro músculo, el denominado psoas-iliaco).
Los abdominales que están en la parte lateral se denominan oblicuos y transversos. Al
contraerse el transverso izquierdo acercan las costillas hacia la pelvis por el lado
izquierdo, haciendo que en el lado derecho se separen las costillas de la pelvis. Al
contraerse los oblicuos (mayor y menor) hacen girar las caderas sin provocar que se
muevan los hombros. Si se contraen a la vez que los rectos anteriores, acercan las
costillas a la pelvis de forma cruzada, acercando el hombro derecho hacia la cadera
izquierda o al revés.
La contracción del transverso actúa de forma similar al de una faja, apretando las
vísceras contra la columna vertebral.
Músculos del recto abdominal.
Músculos paravertebrales
Página
13
Por otro lado, los músculos paravertebrales se extienden por toda la parte posterior del
tronco, desde la nuca hasta la pelvis, uniendo por detrás la parte inferior de las costillas
con la pelvis y las vértebras con los omóplatos, y entre sí hasta la nuca.
Además, hay que tener en cuenta otros músculos, como son el psoas, los glúteos y el
piramidal. Así el psoas se extiende desde la última vértebra dorsal y las cinco lumbares
hasta el muslo, atravesando la pelvis. Al contraerse, aproxima el muslo y las vértebras por
delante, hasta hacer que se toquen el pecho y la rodilla.
El músculo psoas
EL PIRAMIDAL
Página
14
Es un músculo en forma de pirámide con base en el sacro y vértice en el trocánter mayor,
su “principal” acción es rotación externa y aducción del femur; es decir, la pierna. Se dá la
circunstancia que atraviesa el agujero ciático mayor, lo mismo que el nervio ciático, que
pasa sobre él.
Los glúteos se extienden desde la pelvis hasta el fémur por detrás, formando las nalgas.
Al contraerse tienden a llevar la pierna hacia atrás y hacia afuera. Al erguir la espalda
hacia atrás.
Vista lateral
1. Músculos abdominales
2. Músculos psoas
3. Músculo glúteos
4. Músculos paravertebrales.
COMPORTAMIENTO VERTEBRAL
Las sinartrodias
Las sinartrodias son las vertebras que hacen movimientos de flexión, extensión,
lateraflexión y roladación.
Flexión.- Es el movimiento que tiende acercar la cabeza a las rodillas, durante
el mismo, el disco se ve presionado en la parte anterior y liberado en la
posterior, hacía la que se desplaza. Los ligamentos serán los responsables de
aguantarles.
Extensión.- Es lo contrario a la flexión. El disco se presiona en la parte
posterior y libera en la anterior. Los ligamentos tratan de evitar que se desplace.
Lateraflexión.- La presión se ejerce sobre el lado de ésta y/o viceversa.
Roladación.- Movimiento donde más presión recibe el disco, el cual se ve
presionado en toda su superficie.
Página
15
Pensemos en posturas cargando o descargando pesos por los laterales, con rotaciones
vertebrales.
El mecanismo que hace aparecer y mantener el dolor de espalda es el siguiente:
a) Se produce contractura muscular.
b) Se activan unas fibras nerviosas concretas sensibles a la capsaicina o nervios del
dolor.
c) Estas causan dolor y desencadena inflamación muscular.
d) La inflamación causa más dolor, éste más contractura.
e) Se constituye un círculo vicioso porque la inflamación y la contractura muscular
mantienen activados los nervios del dolor.
f) Existen estudios científicos que demuestran que si la activación de estas fibras
dura el tiempo suficiente, se ponen en marcha mecanismos bioquímicos que
pueden perpetuar su activación indefinidamente. En esa situación, el dolor se
mantiene aunque desaparezca la causa que inicialmente lo desencadenó.
Este proceso que causa el dolor, la inflamación y la contractura muscular.
Puede ser desencadenado por alguna lesión estructural. Por ejemplo, cuando
se produce una hernia discal se activan los nervios del dolor que están en las
capas externas del disco al entrar en contacto con las sustancias que están en
su interior. En este caso, una Resonancia Magnética permitiría ver la rotura de
la envuelta fibrosa y precisar la causa del dolor. También cuando existe una
subluxación de una vértebra, flexión, extensión, etc.
Pero también pueden desencadenarse sin lesión estructural. Por ejemplo, el
mantenimiento de una postura incorrecta puede sobrecargar un grupo muscular
y provocar su contractura, excitando los nervios del dolor que lo inervan. Si la
musculatura del paciente es insuficiente o asimétrica, la sobrecarga puede
mantenerse mucho tiempo o repetirse periódicamente. En este caso, ninguna
exploración radiológica permitiría ver la lesión que causa el dolor. Volviendo así,
al citado círculo vicioso.
Normalmente son causas de dolor de espalda aceptadas:
Las fisuras, protusiones o hernias discales cuando permiten el contacto del
núcleo pulposo con los nervios del dolor situados en la envuelta fibrosa.
La compresión de una raíz nerviosa, por ejemplo por una hernia discal, una
estenosis espinal o una espondiolistesis de III o IV grado. Esta
espondiolistesis, es una subluxación.
Página
Las contracturas musculares, desencadenadas por sobrecargas posturales,
esfuerzos o alteraciones de la forma de la columna vertebral. En este último
supuesto se incluye la escoliosis de más de 60 grados.
16
Las degeneraciones importantes de la articulación facetaria.
Comprensión de la raíz nerviosa
Una de las lesiones más habituales son las contracturas musculares en la espalda. La
contractura muscular consiste en la contracción persistente e involuntaria de un músculo.
Puede ser consecuencia suficiente y directa del dolor de espalda.
La contractura aparece esencialmente cuando se exige al músculo (o los músculos) un
trabajo superior al que puede realizar, ya sea intenso y puntual, (por ejemplo, un esfuerzo
excesivo) o mantenido y menos intenso (por ejemplo, mantener unas horas una postura
incorrecta o inadecuada). Por otra parte, algunas anomalías del raquis o desequilibrios de
la musculatura favorecen que unos grupos musculares estén trabajando constantemente
más de lo necesario, lo que, en principio, les predispone a contracturarse.
Esto mismo ocurre cuando falta tono a la musculatura y se le exige que realice esfuerzos
que exceden su capacidad.
Otro síntoma es la inflamación, que consiste esencialmente en una gran dilatación de los
vasos sanguíneos junto con una gran apertura de sus poros, permitiendo el paso de
líquido, sustancias y células desde el torrente sanguíneo al resto de los tejidos, por lo que
éstos aumentan de volumen y temperatura.
Esto ocurre porque la activación de los nervios del dolor provoca la liberación de varios
neurotransmisores, que dilatan los vasos y abren sus poros, desencadenando la
inflamación del tejido en cuestión. Esta es la llamada inflamación neurógena, y algunos de
los neurotransmisores y neuromoduladores implicados son el CGRP (calcitonin-generelated-peptide), la NKA (neuroquinina A) y, sobre todo, la Sustancia P (SP).
En el dolor de espalda, la inflamación es esencialmente consecuencia de la liberación de
neurotransmisores que conlleva la activación de los nervios del dolor y, secundariamente,
Página
Se ha demostrado que la inflamación neurógena y humoral se potencian entre sí y que
ambos procesos están implicados en los dolores de espalda. Eso explica la eficacia de los
antiinflamatorios para su tratamiento, puesto que dificultan la fabricación de
prostaglandinas e impiden la potenciación de la inflamación humoral y neurógena.
17
Además, algunas células de la sangre se activan en determinadas circunstancias,
fundamentalmente cuando detectan la presencia de microbios, liberando sustancias que
atraen a otras células de defensa del cuerpo, dilatan los vasos, abren sus poros y
permiten el paso de esas células a los tejidos. Esa es la conocida como inflamación
humoral y algunas de las sustancias liberadas son las prostaglandinas y los leucotrienos.
de la puesta en marcha del proceso de la inflamación humoral. No obstante, una vez que
existe inflamación, ésta se convierte en un factor agravante añadido:
1.- Por una parte, porque las sustancias liberadas en la puesta en marcha de la
inflamación humoral son capaces de activar los nervios del dolor y aumentarlo. A su vez,
el dolor conlleva la liberación de los neurotransmisores implicados en la inflamación
neurógena, lo que aumenta la inflamación y constituye un círculo vicioso.
2.- Por otra parte, porque al aumentar el volumen de los tejidos aumentan el riesgo
de compresión nerviosa y pueden agravar la eventual lesión causante. Por ejemplo, en
una hernia discal, la inflamación puede aumentar el volumen del material pulposo
destruido, o disminuir la luz de la fisura de la envuelta fibrosa por la que salió.
INFLAMACION
Estos procesos inflamatorios suelen ser puntuales, los originados por contracturas
musculares podrían ser golpes, picaduras, etc. Pero hay unos procesos inflamatorios que
podemos llamar generalizados. Estos están siempre presentes en enfermedades tales
como reúmas, fibromialgias, lupus, e incluso obesidades.
Todo esto tiene una relación directa con las fascias y su induración, dejando así de
desempeñar su función, tanto la de nutrición, como la de drenaje, lo caul va a originar más
induración (otro círculo vicioso).
Además, esta inflamación puede contribuir a tocar las arterias (aterosclerosis), con el
consecuente efecto sobre la salud.
Existe cantidad de medicamentos para atacar estas inflamaciones, pero antes de tener
que llegar a utilizarlos, está en nuestra mano evitarlo a través de la alimentación.
Podemos tranquilamente hablar de agentes proinflamatorios y anti-inflamatorios, no son
otros que, los primeros que las grasas “omega 6” y los segundos las grasas “omega3”.
Dentro de los primeros tenemos la carne grasa, la leche entera, los huevos, el aceite de
girasol y sésamos.
Página
18
Dentro de los segundos encontramos las algas, los pescados azules, aceite de oliva y
frutas y verduras, vitamina C y E.
FASCIAS
¿Qué es la fascia?
Es una membrana fibrosa de tejido conectivo que envuelve los músculos, forma las
cápsulas articulares, los tendones y los ligamentos.El tejido conectivo tiene tres
componentes: células, fibras (colágeno, elásticas, reticulares) y sustancia fundamental.
Esta última compuesta por polisacáridos, especialmente por el ácido hialurónico, que
absorbe mucha agua.
La fascia es como una segunda piel, todo el cuerpo está envuelto por tejido fascial. Los
músculos, huesos, tendones, nervios, vasos sanguíneos y las vísceras están envueltos
por este tejido y por lo tanto todo el organismo está interconectado sin interrupción por
las fascias. Este sistema de fascias tiene una extraordinaria capacidad de deslizamiento
y desplazamiento. Así posibilitan todos, incluso los más pequeños movimientos, como el
del ritmo craneosacro. Pero también el latido del corazón, la expansión de los pulmones
al respirar, la elevación de un brazo etc. A nivel de la espalda existe por ejemplo la fascia
toracolumbar. Cuando se ve la gran superficie que ocupa y su grosor se sospecha que
pueda tener una gran importancia en el dolor de espalda. De hecho, actualmente, gran
parte de las investigaciones se centran en esta fascia ya que al conectar a dos de los
músculos más potentes de nuestro cuerpo como son el glúteo y el dorsal ancho, tener
gran cantidad de células contráctiles y mecanoreceptores y estar localizada en una de las
áreas que más dolor nos produce se la atribuye un papel primordial.
Página
En los últimos treinta años las hernias discales fueron consideradas como la causa
principal de los dolores de espalda. Pero desde que se ha visto en estudios de imagen
como por ejemplo la resonancia magnética que incluso personas sin problemas de disco
podían tener dolor de espalda crónico y en cambio personas sin molestias a veces
presentaban problemas discales, se empezó a sospechar de otras posibles causas.
Según un estudio publicado en una prestigiosa revista médica únicamente alrededor del
25% de los pacientes con dolor de espalda presentaban herniaciones discales. Al
observarse en tantas personas sin problemas de espalda protrusiones u otros problemas
de disco los autores suponen que se trata de un hallazgo accidental sin relación con el
19
Fueron estudios con electromicroscopia e
histológicos que lograron demostrar que
las
fascias
contenían
células
musculares lo que les proporciona la
capacidad
de
contraerse.
Este
sorprendente
descubrimiento
ha
supuesto una verdadera revolución en
los conceptos existentes hasta entonces.
Página
20
dolor en muchos de los pacientes con dolor de espalda. Únicamente verdaderas hernias
discales pueden ser consideradas con seguridad como la causa de posibles molestias. En
los otros casos, no se cree hoy en día ya tan ciegamente en el disco intervertebral como
causa del dolor sino más bien se sospecha que la causa sean microroturas de las fascias.
Un estudio publicado en 2001 demostraba que no había relación entre la duración de la
dolencia lumbar y la gravedad de los cambios observados en las imágenes de resonancia
magnética. Un 31% de pacientes sin molestias presentaban cambios patológicos en los
discos intervertebrales. Estudios con ultrasonidos mostraron un grosor mayor de la fascia
en pacientes con dolor de espalda. Al tener gran cantidad de mecanoreceptores las
fascias suponen para el cerebro una de las fuentes de información más importantes
acerca del estado del cuerpo. Se sabe que a este nivel queda un largo recorrido
investigador por recorrer y que solo se está al principio de conocer la importancia de las
fascias en la propiocepción, el embodiment etc.
Resumiendo: Según las últimas investigaciones científicas en la mayor parte de los
casos la causa del dolor está en las fascias. Las investigaciones aún están lejos de estar
concluidas. Pero para la comunidad científica existe un nuevo culpable. Antes eran las
hernias, ahora la fascia toma el relevo.
Página
21
Fascia: Es un tejido conectivo. La
fascia es fina, pero muy fibrosa y
fuerte. Es un membrana que pasa a
través del cuerpo, rodea los músculos,
los huesos, los vasos sanguíneos y
los nervios. Existen 2 tipos de fascia
profunda y fascia superficial. El color
blanquecino proviene de hojas delgadas
de tejido entre la piel y el músculo de la
carne. La fascia se forma directamente
debajo de la piel y actúa como una capa
sólida de tejido conectivo entre la piel y
los
músculos
debajo
de
ella,
sosteniéndolos juntos, pero teniendo en
cuenta la elasticidad.
Fascia tiene una rica inervación y por lo tanto puede ser un foco del dolor. También
pueden adherirse a otros músculos y tejidos conectivos, causando movimientos
restringidos así como el estirar demasiado resultando en desestabilización de las
articulaciones. Nuestros huesos, los músculos y los tendones son encapsuladas en vainas
fasciales que mantienen nuestros cuerpos en su posición.
La ciencia del ejercicio ha estado predominantemente enfocada en los músculos, pero
estos ven afectados por los tejidos conectivos, que cambian su funcionamiento. En la
mayoría de los ejercicios, hay muy poco énfasis en la importancia y el efecto que tejido
conectivo tiene en los músculos, los huesos y las articulaciones.
De acuerdo con la Dra. Ida Rolf, "la fascia es el órgano de la postura". Químicamente
está compuesto de colágeno, una sustancia única que puede cambiar con la
adición de la energía. En la liberación miofascial, miofascia se puede manipular
mediante la adición de energía. Esta energía no es la energía metafísica, pero la energía
física. Mediante la aplicación de presión, terapeutas logran añadir energía a la estructura.
a este método se le conoce como Rolfing
La fascia está afectada por nuestras actividades diarias y la vida repetitiva. De estar
sentado frente a una computadora todo el día o fundamentalmente sedentaria,
produciendo que la fascia sea una sustancia más dura. Se puede acortar y apretar los
músculos, haciendo que las articulaciones y los huesos más rígidos hasta el punto de
dolor y angustia. Si la fascia esta inflamada o la deshidratada, la posición de los huesos,
los músculos y los tendones pueden cambiar también. Un resultado de este cambio puede
ser repetitivo desgaste, que puede conducir a lesiones o condiciones artríticas.
La fascia superficial y la profunda
Se puede decir que las fascias se encuentran en todo el cuerpo. Podemos diferenciarlas
en dos capas de fascias principalmente: la fascia superficial y la profunda.
Estos dos componentes corporales son los que se encargan de la interacción entre las
tensiones locales y el conjunto de la compleja forma corporal.
Página
La fascia superficial es un sistema fibroso que envuelve todo el cuerpo por debajo de la
piel, permitiendo la transmisión de tensiones a través de distintas partes del cuerpo sin
que puedan ser descritas u observadas mediante un análisis de los elementos
anatómicos. Se encuentra unida a la cara inferior de la piel y es un tejido fibro-elástico,
tejido conjuntivo areolar y tejido adiposo de confección holgada. Aquí encontramos grasas
y estructuras vasculares (incluyendo redes capilares y canales linfáticos) y estructuras
nerviosas, en especial los corpúsculos de Paccini, que nos sirven de receptores cutáneos.
22
La fascia superficial
La piel puede desplazarse en todas las direcciones sobre las estructuras más profundas
gracias al holgado diseño de la fascia superficial. Aquí hay espacio potencial para la
acumulación de fluidos. Gran parte de la grasa de las personas con sobrepeso se
almacena en esta fascia superficial.
Esta fascia cumple cuatro importantes funciones:
Aquí se almacena agua y grasa.
Protege frente a la perdida de calor, es aislante.
Proporciona protección mecánica frente a los traumatismos.
Constituye un camino por donde los nervios y vasos sanguíneos entran y
salen de los músculos.
La fascia profunda
En un nivel más profundo nos encontramos con que las fascias envuelven y separan los
huesos, los músculos, rodean y aíslan las vísceras y contribuyen de manera importante
a la forma y función del cuerpo. Podemos llamar a estas fascias profundas, fascias
individuales de tejido conjuntivo denso e irregular.
Esta fascia profunda mantiene a los músculos unidos separándolos en músculos
funcionales. Esta fascia permite que los músculos se muevan libremente.
La capa más externa que rodea a cada uno de los músculos es el epimisio. El perimisio
rodea a los haces musculares compuestas por 10 o más de 100 fibras musculares.
Penetrando a cada fascículo y separando cada una de la fibras musculares de las demás
se encuentra el endomisio.
El epimisio, el perimisio y el endomisio se continúan y proporcionan fibras de colágeno
comunes al tejido conjuntivo, que une los músculos a otras estructuras, como los huesos
u otros músculos. Estos tres elementos se pueden unir y extender mas allá de fibras
musculares formando un tendón, una cuerda de tejido conjuntivo denso que une los
músculos al periostio del hueso. Algunos tendones disponen de una vaina tendinosa que
permite que entre ellos se deslice con mayor facilidad. Cuando los elementos del tejido
conjuntivo forman una capa ancha y plana el tendón recibe el nombre de aponeurosis.
Esta estructura también se une al hueso, a los músculos o a la piel. Un ejemplo de
aponeurosis es la epicraneal en la parte superior del cráneo.
Página
Por eso los terapeutas saben que liberando el movimiento respiratorio primario en una
parte del cuerpo estamos ayudando y mejorando toda la función y estructura corporal.
23
El peritoneo, el pericardio y la pleura, son elementos especializados de las fascias
profundas. Todos los órganos internos están envueltos en un tejido fascial que les
protege y les da forma y sustentación. Esta fascia individual casi nunca termina
exactamente donde el músculo o el órgano tiene su inserción o su origen, sino que en la
mayoría de los casos continúa en otras fascias de otros músculos u otros órganos u otras
partes del cuerpo.
Las fascias realizan la tarea de conectar, unir, vincular, separar, nutrir, soportar y deslizar.
Sin embargo el papel prioritario de las fascias es el de conectador: recogen la
información de un tejido y la envían a otro, además de establecer conexiones con el
sistema sensorial, emocional y mental.
Otras de las principales funciones de las fascias son las de proteger y sostener.
Parece claro que todos los órganos internos están sostenidos por un tipo de tejido fascial
(ligamentos) que evitan que estos órganos caigan y se descuelguen por el efecto de la
gravedad. Recordemos que los ligamentos son fascias.
Las fascias dan soporte a los vasos sanguíneos y nervios de todo el cuerpo, hacen
posible que tejidos adyacentes se muevan y rocen entre sí proporcionándoles estabilidad
y contorno, y además es por el interior de este tejido donde circula el líquido
cefalorraquídeo.
Sistema conectivo fascial
Somos una fascia grande. Nuestros nervios, músculos, capilares, huesos, etc. existen y
pueden realizar sus funciones gracias al orden y conexión que permiten las fascias. Este
sistema fascial mantiene al sistema nervioso en constante conexión con todo el
organismo, es decir, ayuda junto con los nervios a que todo el organismo esté
interrelacionado.
Las fascias proveen de líquido lubricante a las diferentes estructuras con el fin de
permitir el movimiento y la nutrición de tejidos y órganos.
En los tendones y ligamentos las fascias presentan características distintas, aunque
comparten con la fascia general elementos como el colágeno, fibras elásticas y otras
sustancias celulares. En estos componentes especializados de las fascias existen
mecano receptor y propio receptores que envían información a la médula espinal y al
cerebro sobre las posiciones corporales y los diferentes movimientos que realizamos.
Página
Las fascias son tejidos de protección y unión que envuelven a todos y cada uno de los
órganos de nuestro cuerpo. Hacen posible que nuestra piel, músculos, huesos, todos
nuestros órganos y diferentes sistemas permanezcan unidos ofreciendo un escudo de
protección y lubricación. Los libros de medicina enumeran más de 100 tipos diferentes de
fascias.
24
El tejido fascial también ayuda en la defensa del sistema inmunitario ante cualquier
agresión, sea ésta por impacto, por disminución del aporte nutritivo o de oxígeno, por el
aumento de gas carbónico y de desechos metabólicos, proliferación de microbios o por la
irritación de los receptores nerviosos. En estos casos las fascias tienden a inflamarse,
enrojecerse, crear calor y producir dolor. Aquí tiene lugar un proceso automático de
reparación y cicatrización basado en mecanismos complejos en los que el tejido fascial o
conjuntivo juega un papel muy importante gracias entre otros al LCR que circula en su
interior.
Cuando las fascias no tienen demasiada energía, se endurecen y vuelven frágiles.
Cuando la persona pierde su energía o ésta no circula bien (como en el caso de una
cicatriz), el cuerpo se endurece y los movimientos pueden resultar dolorosos y poco
armónicos. Sabemos que en la mayoría de los casos de cicatrización el tejido dañado no
recupera su suavidad ni calidad original. Lo que predomina en estos casos es el tejido
fibroso responsable del aspecto rígido denominado fibrosis. Además, esta cicatrización
va acompañada por adherencias responsables de diversas patologías como son
irritaciones, espasmos o fallos energéticos en dicha zona producidos por la falta de
comunicación eléctrica entre las células del tejido fascial y sus alrededores, así como el
acortamiento de tejidos (una operación donde hay cicatriz siempre tendrá estos
inconvenientes). Como ya hemos dicho, en el proceso de cicatrización se produce un
acortamiento del tejido fascial que tiende a compensar dicho acortamiento ocasionando
un exceso de tensión en zonas distales que posiblemente cause dolor o malestar en algún
otro punto del cuerpo.
Vemos pues que a través de las cadenas musculares o fasciales estas cicatrices pueden
producir molestias en otras partes del cuerpo.
De igual manera, cuando una persona recibe un impacto en la cabeza su sistema fascial
intenta que el cerebro quede lo menos dañado mediante ajustes elásticos. Intenta
protegerle amortiguando dicho impacto como si fuera un muelle, es decir, absorbiendo los
impulsos del golpe y re-dirigiéndolo hacia zonas menos importantes.
Es como echar una piedra en un estanque: las ondas circulares que se forman tras el
impacto de la piedra en el agua son simplemente un sistema de amortiguación.
Este impacto se transmite por las fascias de las suturas craneales externas, las fascias
internas, las fascias longitudinales y transversales y por los envoltorios musculares del
cuello.
Aunque es difícil percibir este principio en el tejido fascial, es cierto que tras un
traumatismo existe un movimiento dinámico del tejido fascial o aponeurótico ya que
funciona como sistema protector amortiguando el impacto.
Las fascias se caracterizan por su continuidad de una zona a otra, recubriendo
completamente todos y cada uno de nuestros elementos corporales y llegando incluso a
todas las células del organismo en un sistema complejo pero unificado y unitario.
Página
25
Al hablar de fascias hablamos de diferentes tejidos que tienen la misma función.
Dependiendo de dónde se ubique la fascia, de dónde esté el tejido de relleno, recibirá un
nombre u otro.
El tejido aponeurótico
El tejido aponeurótico, el envoltorio que se encuentra entre músculo y músculo, es una
fascia.
El hueso tiene su propio envoltorio, el periostio, otra fascia que protege y nutre al hueso.
Una arteria tiene diferentes hojas o túnicas que la envuelven y cuya función es la de
proteger y nutrir, pues bien, esto también forma parte del tejido fascial.
El abdomen tiene varias capas de fascias, en realidad allí es donde se encuentra la mayor
concentración de fascias del cuerpo de ahí la necesidad de mantener sano y energetizado
todo el abdomen.
Las fascias sanas son como láminas tirantes de un material delgado y resistente que
ofrece un escudo protector flexible. Fascias sanas son sinónimo de flexibilidad, de unidad
estructural y de que disponemos de un cuerpo sano y vigoroso. Son ellas las
responsables en gran medida de nuestro estado de salud y es ahora cuando nos estamos
dando cuenta de la importancia de este tejido.
Como ya hemos dicho, la fascia posee una elasticidad y ésta le permite tanto mantener su
forma como responder a la deformación.
La deformación elástica es la capacidad de la fascia para recuperar su forma original
cuando ha desaparecido la carga.
Sin embargo, aunque la fascia tiene la capacidad de dar de sí cuando se la somete a una
carga de estiramiento constante, si esta carga es grande y se aplica durante un periodo
de tiempo prolongado, la fascia puede no ser capaz de recobrar su tamaño y formas
originales pudiendo dar lugar a una deformación plástica y pérdida de energía. A éste
fenómeno se le llama histéresis.
Tras la relajación que se acompaña a esta nueva adaptación del tejido estirado, éste
recibe un desgaste y posteriormente dispone de menor resistencia a una segunda
aplicación de carga. Éste fenómeno es de importancia clínica para el terapeuta cuando se
observan los efectos del tejido conectivo o fascial provocados por lesiones agudas, microtraumatismos repetitivos o debido a una tensión constante.
Página
26
Siguiendo el principio de “dañar lo menos posible a lo más importante” y gracias a la
inherente tendencia a la salud, supervivencia y conservación del cuerpo, este tejido
siempre intentará alejar el trauma físico de las zonas más importantes.
El tejido fascial es resistente y sensible a la vez
La fascia está hecha de colágeno, elastina y ácidos. Esta constitución la convierte en una
estructura elástica, dura y resistente.
El tejido conjuntivo tiene la capacidad de responder a influencias mecánicas o químicas
realizando cambios en su estructura y forma.
Como ya hemos descrito, una carga constante en el cuerpo hace que éste modifique su
configuración para acomodar dicha carga y como consecuencia puede dejar rasgos
permanentes en el cuerpo. Las experiencias traumáticas pueden provocar el acortamiento
de un músculo y de sus fascias. Bajo tensión los músculos se contraen, pero si esta
tensión persiste, el acortamiento se puede hacer permanente ya que la fascia empieza a
unirse al músculo y a entremezclarse con éste en patrones de acortamiento. Esto hace
que el músculo se endurezca causando al conjunto del cuerpo que se acople en una
postura desviada o asimétrica.
Si las influencias externas dejan rasgos permanentes en la estructura del cuerpo,
entonces deducimos que al realizar el proceso inverso devolveremos al organismo su
estructura corporal correcta.
Veamos qué puede suceder tras un trauma físico o psíquico.
Un traumatismo físico puede ser una lesión o golpe, un trauma psíquico puede ser el
ocasionado, por ejemplo, por un miedo intenso a afrontar situaciones difíciles o
fallecimiento de un ser querido.
Como consecuencia de un trauma lo normal es que la onda expansiva del tejido fascial
adopte una dirección determinada para protegernos y aliviar el dolor y que luego vuelva a
su posición inicial. No obstante, ocasionalmente en el proceso de retroceso las fibras no
se alinean bien y se atascan. Debido a que las fascias están repartidas por todo el
cuerpo de forma continua y a que los músculos se complementan y equilibran unos
con otros, dicho traumatismo tensará y acortará el músculo en la zona local, pero de
igual manera se producirá una tensión compensatoria en otra parte del cuerpo.
Al cabo de años o meses el sujeto puede tener problemas de pérdida de olfato, de oído,
dolor de hombro, molestias en el cuello, en la cabeza, problemas respiratorios, fallo de
memoria, etc. que difícilmente podremos asociar con algo que nos sucedió hace 3 ó 4
años. Si viniese de un proceso laboral pudiera ser que se desarrolle una enfermedad
profesional.
Debido a tan estrecha vinculación entre estos componentes del cuerpo humano, un
problema en el sacro repercute en la columna y en el cráneo, y viceversa.
Página
La médula espinal es fuerte y resistente así como rica en fibras de colágeno. Su débil
rigidez proporciona cohesión entre las estructuras del cráneo internas y externas, la
columna vertebral, el sacro y el cóccix.
27
Por supuesto el proceso de deterioro provocado por un traumatismo es reversible en la
mayoría de los casos. El cuerpo se puede manipular y dirigir a una posición mejorada, ya
que el cuerpo es maleable. Incluso los huesos están continuamente regenerándose y
cambiando su estructura.
Muchos problemas de origen psíquico, por no decir todos los problemas emocionales,
mentales y sentimentales que a lo largo de la vida sufrimos, derivan en auténticos
traumas que afectan a nuestras fascias.
Por ejemplo, situaciones emocionales traumáticas en el trabajo, con los padres, con los
hijos, con la pareja o cualquier otra relación, repercuten en la tensión de las fascias de
todo nuestro organismo.
Es muy posible que una discusión, una pena o tristeza, un enfado, una depresión, una
duda o incertidumbre, un no decir lo que uno quiere decir, o cualquier emoción negativa,
pueda producirnos tensión en el tejido fascial y dolor en alguna parte del cuerpo.
Es importante que seamos conscientes de que si nos vamos llenando de pequeñas capas
de energía negativa o traumática sin aprender a liberarlas, al cabo del tiempo éstas se
pueden convertir en una distorsión psicológica y finalmente materializarse en una lesión
física. Sin embargo es muy posible que hasta que esto suceda continuemos viviendo sin
apenas darnos cuenta, sin demasiadas molestias palpables. Quizá seamos un poco más
infelices o tengamos cierta dosis de ansiedad hasta que estos estados “soportables”
deriven en serios problemas.
Página
28
Hasta la fecha aún no se han efectuado estudios que relacionen la causa con el efecto, o
lo que es lo mismo, lo psíquico-emocional con lo físico. Aunque sabido es por la
comunidad científica que casi un 80% de las enfermedades actuales son de tipo
psicosomático.
EL CONSUMO ENERGETICO DE NUESTRO CUERPO
Siempre existe actividad muscular, con su consiguiente consumo de energía por el
organismo humano.
La energía que necesitan los músculos la obtienen de los alimentos, hidratos de carbono
y grasas, que se transforman en “glucógeno”, y del oxígeno obtenido por la respiración.
Las fibras de los músculos están recorridas por numerosos vasos sanguíneos a través de
los cuales reciben las sustancias energéticas y el oxígeno. Cuando el suministro de estas
sustancias es insuficiente, sobreviene la FATIGA MUSCULAR, generalmente porque un
número repetido de contracciones ha agotado la provisión de energía, y al mismo tiempo,
ha provocado la acumulación de algunas sustancias de desecho. O porque el aporte de
O2 es deficiente, bien sea este déficit circulatorio o relacionado con las fascias.
LA ENERGIA CONSUMIDA POR NUESTRO ORGANISMO EN REPOSO ABSOLUTO
ES, APROXIMADAMENTE, DE 1.700 KILOCALORIAS AL DIA, PARA UN HOMBRE DE
UNOS 70 KILOS DE PESO.
1.400 KILOCALORIAS AL DIA PARA UNA MUJER DE UNOS 60 KILOS DE PESO.
Trabajar supone aumentar nuestro consumo energético. Pero comer más no es suficiente.
Ni siquiera es, el del consumo energético, el único problema. El principal problema radica
en la adecuación del trabajo a nuestro organismo, y a la actividad para la que estamos
adaptados.
Dicho de otra manera, ¿estamos hechos para trabajar?, o ¿para qué trabajos?, o ¿cómo
trabajaría a gusto nuestro organismo?.
Si analizamos la evolución humana y la constitución del cuerpo humano, deberíamos ser
“paseantes”, pastores, cazadores, agricultores (de una agricultura de supervivencia), etc.
La búsqueda de la máxima productividad ha deshumanizado el trabajo hasta el punto en
que trabajar supone riesgos tan contrarios a nosotros mismos como el de morir,
lesionarnos traumáticamente, o enfermar.
2. El peso de la carga no debe sobrepasar 20 Kg.
Página
1. Nuestra columna vertebral se dobla, pero no tanto. A la hora de levantar
cargas hay que flexionar las rodillas, no la espalda.
29
Puestos a tener que trabajar, TRABAJEMOS SIN RIESGOS. Para ello, es fundamental
recordar en resumen, que:
3. Nuestros músculos se deterioran por falta las descompensaciones
citadas, de alimentación, por acciones repetitivas, y por acciones
bruscas. También estando sentados nuestros músculos (varios) están
contraídos.
4. Un trabajo estático es peor que otro moviéndose. El movimiento adecuado
ayuda a la circulación de la sangre y a mantener la frecuencia cardiaca
correcta. Hay que realizar descansos aún trabajando sentados.
Esquema del conducto alimentario y digestivo
¿COMO SE PUEDE MEDIR EL GASTO ENERGETICO DE UNA ACTIVIDAD
LABORAL?
Página
Diversos autores han desarrollado métodos que nos permiten medir el oxígeno consumido
durante la realización de un trabajo. Del valor obtenido podemos calcular las calorías
gastadas.
30
Podemos relacionar la energía consumida en una actividad laboral determinada, o gasto
energético (GE) con el oxígeno que han precisado nuestros músculos para realizarla.
Es evidente que no todas las actividades laborales comportan el mismo gasto energético
(GE). En la tabla se muestran algunos ejemplos de la demanda de energía para distintos
tipos de ocupaciones.
Gasto energético de algunas y distintas ocupaciones
Hombres
700
1500
3000 kcal/jornada
Bibliotecario ++++++++++
Relojero+++++++++++++++++++++1000
Conductor camión++++++++++++++++++1300
Cartero+++++++++++++++++++++++++++++++++++1600
Albañil++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++1900
Carpintero de obra
Leñador
Minero entibador
¿DE QUE OTRA FORM A SE PUEDE MEDIR EL ESFUERZO FISICO REALIZADO?
Hemos visto que también la frecuencia cardíaca se incrementa durante el ejercicio.
Basándose en ello, la diferencia entre los valores alcanzados en la realización del trabajo
con los de reposo, antes de comenzar la actividad, es utilizada como una medida del
esfuerzo que se ha hecho.
Supongamos por ejemplo, que un trabajador en reposo tiene una frecuencia cardíaca de
70 latidos por minuto (lat/min) y que durante el trabajo llega a tener 120 lat/min., la
diferencia de 50 latidos por minuto nos indica el esfuerzo físico realizado. Al valor de esa
diferencia se le denomina costo cardiaco.
¿QUÉ VALORES DE GASTO ENERGÉTICO NO DEBEN SUPERARSE PARA UN A
JORNADA DE OCHO HORAS?
Página
No existe ni en España, ni en la mayoría de los estados nacionales de Europa o del
mundo, una legislación que limite el gasto energético de las actividades laborales.
Diversos autores han propuesto valores máximos para actividades realizadas en forma
continua, establecidos con el criterio de garantizar que no aparezca fatiga, ni a largo
plazo, una enfermedad laboral.
31
A pesar de la creciente mecanización y automatización, aún existe una gran número de
actividades que exigen una gran demanda de energía al individuo que las realiza.
La mayoría de los ergónomos coinciden en que, para una jornada de ocho horas
(cuarenta semanales), no debería superarse las 40 Kcal/min (que corresponden
aproximadamente a 2000 Kcal/jornada). De rebasarse este valor, sería necesario
establecer adecuadas y frecuentes pausas a lo largo de la jornada, que permitan la
recuperación del trabajador.
Pero como hemos visto, la capacidad física es diferente en cada persona, por lo que, aún
dicho valor puede ser alto en algunos casos. Por tal motivo, la Organización Mundial de la
Salud (OMS), plantea que ese límite sea fijado de acuerdo a la CFT de cada sujeto, valor
que está comprendido entre el 30% y 40 % de su capacidad de trabajo.
Valores límites para una actividad laboral
GE = 4 Kcal/min
% CFT = 30 – 40 %
Costo cardíaco = 40 latidos/minuto
Desde el punto de vista cardíaco, se plantea que el aumento de la frecuencia cardíaca
durante la actividad, con respecto a la FC en reposo no debe ser mayor de 40 latidos por
minuto. De superarse este valor, también será preciso establecer pausas de trabajo.
EL RIEGO SANGUINEO EN EL TRABAJO ESTATICO
En un trabajo estático, el musculo al permanecer contraído actúa como “torniquete” sobre
la circulación, provocando un riego deficiente y por tanto, no le llega una cantidad de
oxígeno suficiente. Este hecho ocasiona un incremento anormal de la frecuencia cardiaca,
mayor que si el trabajo fuera dinámico.
En realidad en toda actividad laboral se da una mezcla de los dos tipos de trabajo. Es
necesario un estudio particular de cada puesto de trabajo, a fin de valorar la existencia de
componentes estáticas y su importancia.
Página
En la realización de un trabajo dinámico, la sangre llega al musculo sin ningún obstáculo,
garantizando un buen suministro de oxígeno y sustancias energéticas. Es más, la
continua contracción y relación del musculo, actúa como una bomba que mejora el riego
sanguíneo. En teoría una persona podría realizar un trabajo de este tipo durante horas,
sin experimentar fatiga, siempre que el ritmo sea el adecuado.
32
¿CUÁLES SON LOS EFECTOS SOBRE LA CIRCULACION DE UN TRABAJO
DINAMICO Y DE UN TRABAJO ESTATICO?
¿QUE RIESGO TIENE PAR A LA SALUD UN TRABAJO ESTATICO?
En una primera etapa, la ejecución de un trabajo que tenga componentes estáticos
provoca la fatiga de los músculos contraídos. La fatiga muscular se caracteriza por la
aparición de cansancio y dolor, motivado por la falta de riego sanguíneo suficiente, dolor
que puede llegar a ser inaguantable. Así mismo un trabajo desarrollado de manera
continua puede originar inflamaciones de las articulaciones y tendones.
A largo plazo, puede ser causa de otras alteraciones, como:
Degeneración crónica de las articulaciones.
Desgaste de los discos intervertebrales.
Lesiones de los discos intervertebrales (hernia).
Cardiopatías (anginas de pecho, infarto de miocardio).
Estas tres últimas son debidas a que el importante aumento de la frecuencia cardiaca que
se registra, provoca una carga adicional en el trabajo del corazón, que a la larga puede
originar la aparición de una patología cardiaca. La edad, las alteraciones cardiovasculares
(tensión alta, niveles de colesterol altos en sangre), el sedentarismo, el exceso de
consumo de tabaco, son factores de riesgo adicionales.
Por tanto, debería evitarse que, al menos, los trabajadores en los que concurran alguna
de estas circunstancias, ocupen puestos de trabajo con componentes estáticos.
EJERCICIO
Visto lo visto respecto a trabajos dinámicos y trabajos estáticos, pronto podemos deducir
que resulta importante la movilidad para mantener los tejidos oxigenados, a base de un
buen riesgo sanguíneo. Esto va a redundar también en una buena eliminación de
productos de deshecho (antioxidación).
Los ejercicios más recomendables son los aeróbicos, tales como caminar, correr, nadar,
montar en bicicleta, etc., siendo ideal acompañarlos de ejercicios de fuerza y
estiramientos. Estos ejercicios, van a servir de entrenamiento para el corazón y nos
ayudarán a mantener a raya el colesterol, tensiones arteriales, niveles de azúcar en
sangre, peso, etc.
EFECTOS SOBRE LA SALUD DEL TRABAJO ESTATICO
Fatiga muscular.
Inflamación de las articulaciones.
Inflamación de los tendones.
Página
-
33
Reversibles
Irreversibles
-
Degeneración crónica de las articulaciones (artrosis).
Degeneración de los discos intervertebrales.
Lesiones de los discos intervertebrales (hernías).
Cardiopatías: infarto, angina de pecho).
ALGUNOS EJEMPLOS DE POSTURAS CON COMPONENTES ESTATICAS
De pie siempre en el mismo sitio.
Brazos y piernas. Riesgo de varices.
Sentado en una silla muy alta.
Músculos de la espalda.
Sentado en una silla muy baja.
Rodillas, pantorrillas, pies.
Busto hacía delante, sentado o de
pie.
Región lumbar. Deterioro de los discos
Intervertebrales.
Brazos extendidos hacía delante
en alto o hacía los lados.
Hombros y brazos. Riesgo de periartritis
En los hombros.
Cabeza inclinada exageradamente
delante o hacía atrás.
Cuello. Deterioro de los discos hacía
Intervertebrales.
Sujeción de un objeto o herramienta
de forma poco natural.
Antebrazo. Riesgo de inflamación de los
tendones.
34
Parte del cuerpo afectada
Página
Postura
GOBIERNO de CANTABRIA
Consejería de Economía-Hacienda y Empleo
(Acción subvencionada)
Descargar