sentencia - Nuevo Código Civil y Comercial

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Registro N° 15 /2015
Fojas 84/91
En la ciudad de Pergamino, el 13 de Febrero de 2015, reunidos
en Acuerdo Ordinario los Sres. Jueces de la Excma. Cámara de Apelación
en lo Civil y Comercial del Departamento Judicial Pergamino, para dictar
sentencia en los autos N° 2145- 14
caratulados "CORDOBA, MIRIAM
BEATRIZ C/ ALBORNOZ, RAMON ANTONIO S/ LIQUIDACION DE
SOCIEDAD CONYUGAL" , Expte. 2.342 del Juzgado de Familia Nro. 1 , se
practicó el sorteo de ley que determinó que la votación debía efectuarse en
el siguiente orden: Roberto Manuel DEGLEUE y Graciela SCARAFFIA, y
estudiados los autos se resolvió plantear y votar las siguientes:
C U E S T I O N E S:
I) ¿Se ajusta a derecho la sentencia apelada?.II) ¿Qué pronunciamiento corresponde dictar?.A la PRIMERA CUESTION el señor Juez Roberto Manuel
DEGLEUE dijo:
I.- El Sr. Juez de la anterior instancia, dictó sentencia en este
expediente, haciendo lugar parcialmente a la demanda interpuesta por la
Sra. Miriam Beatríz Córdoba contra el Sr. Ramón Antonio Albornoz y, en
consecuencia declaró que integran el Activo de la sociedad conyugal, como
bienen gananciales, sujetos a liquidación y partición, los siguientes: a) Dos
terceras (2/3) partes indivisas o lo que es lo mismo el 66,66% indiviso del
inmueble ubicado en calle Chiclana 560/580 de Pergamino y b) Cuatro
décimas (4/10) partes indivisas o lo que es lo mismo el 40% indiviso del
inmueble sito en Chiclana 1508 de Pergamino y rechazando la pretensión de
pago de alquileres o cánon locativo por el uso del inmueble de calle Chiclana
560/580. Impuso las costas en el orden causado y difirió la regulación de
honorarios, hasta tanto exista base para el cálculo.
Tal decisorio fue objeto de apelación por parte de la Sra. Miriam
Beatríz Córdoba a Fs. 104 y a Fs. 105 por el apoderado de la demandada,
concedidos a Fs. 109 y 113 respectivamente y fundados mediante escritos
obrantes a Fs. 127/129 y 130/132 respectivamente, a Fs. 135/138 la parte
demandada contesta el trasaldo que se corriera, no haciendo lo propio la
actora, a Fs. 139 se llama autos para dictar sentencia, el cual fuera
suspendido y vuelto a reanudar a Fs. 147, el que firme a la fecha, deja la
causa en condiciones de sentenciar.El memorial de la parte actora, expone como primer agravio que
el juzgador le atribuye la ganacialidad del inmueble sito en calle Chiclana
560/580 solo en la proporción del 66,66%, lo cual para ella surge de un error
de su parte a partir de desinterpretar el informe dominial que hace referencia
y pasa a desarrollar la interpretación que para su parte era la correcta, esto
es que el esposo de la apelante, durante la vigencia de la sociedad conyugal
adquirió con fondos gananciales el 100 % del inmueble en cuestión, por lo
que solicita se modifique la sentencia en tal sentido. En segundo lugar, se
queja sobre la imposición de costas en el orden causado, en tanto la
demandada se opuso terminantemente a la calificación que su parte
pretendía, sin embargo se ha acreditado en autos la ganancialidad de ambos
inmuebles, por lo que el demandado reviste la calidad de perdidoso,
debiéndosele imponer el total de las costas.
La expresión de agravios del demandado se centra en la
calificación de gananciales de las partes indivisas de los inmuebles de calle
Chiclana 560/580 y de Chiclana 1508, ambos de esta ciudad y que por lo
tanto fueron indebidamente incluidos en el activo de la sociedad conyugal
sujeta a liquidación. A continuación pasa a exponer los motivos y legislación
que avalan su posición, solicitando en definitiva se revoque la sentencia
apelada, disponiendo el rechazo total de la demanda con costas a la actora.II.- Entrando a resolver, entiendo que en primer lugar corresponde
avocarme al carácter de ganancial de los inmuebles en cuestión, otorgado
por el sentenciante y que resulta cuestionado por la parte demandada; y
para ello he de destacar que conforme lo dispone el art. 1261 del Cód. Civil,
la vigencia de la sociedad conyugal "principia desde la celebración del
matrimonio y no puede estipularse que principie antes o después". Y, al
respecto las partes no están en desacuerdo sobre que la fecha de
celebración de matrimonio de los litigantes lo ha sido el día 20 de abril de
1976 (copia de acta de matrimonio agregada a Fs. 10 y no desconocida) y
que la sentencia de divorcio decretó con efecto retroactivo la disolución de
la sociedad conyugal al 16 de diciembre de 2010 (según reconoce la
demandada en su conetestación de demanda a Fs. 27).-
Esta comunidad de bienes que se genera entre los esposos no es
universal sino restringida, por tanto resulta imprescindible distinguir entre los
bienes propios de cada cónyuge y los gananciales, por cuanto sobre los
propios de cada esposo el otro cónyuge no tendrá ningún derecho al tiempo
de la liquidación, mientras que los bienes gananciales deberán ser
compartidos por los esposos porque la comunidad de vida hace presumir la
colaboración afectiva y material que debe haber contribuído a hacer posible
su adquisición.Y, la caracterización de un bien como propio o ganancial no depende
de la voluntad de los cónyuges, ya que éstos no pueden decidir sobre su
naturaleza sino que la determinación depende de una serie de reglas que
refieren fundamentalmente al tiempo de la adquisición y a la naturaleza del
derecho que justifica esa adquisición.Si bien el art. 1271 de Cód Civil estalece una presunción de
ganancialidad es dable neutralizar la misma, que es juris tantum con la
consiguiente acreditación del carácter de propio que desplaza a aquella,
circunstancia que queda a cargo de quien invoque tal carácter, en nuestro
caso el demandado, por imperativo legal (art. 375 del C.P.C.C.).
Cabe destacar que, según criterio reiterado del Máximo Tribunal
Provincial "...La prueba que debe producir el cónyuge que alega que la
adquisición onerosa la fue con dinero o fondos propios, exige la constancia
en el acto de adquisición de cómo los referidos fondos le pertenecen a título
propio, sólo frente a terceros, pero entre los cónyuges y a los efectos de la
liquidación de la sociedad conyugal, toda prueba es admisible para acreditar
el carácter de propio de los fondos empleados en la adquisición..." (Cfr.
SCBA, 7/3/94 en JA, 1995- III-638).Ello así, ha sido correcta la conclusión arribada por el a quo, en
cuanto a la ganancialidad del bien sito en calle Chiclana 560, en tanto que
en el expediente sucesorio de los padres del Sr. Ramón Antonio Albornoz
(Expte. Nro. 17.328, ofrecido como prueba instrumental y que en este acto
tengo a la vista), el propio recurrente agregó un boleto de compraventa
celebrado con su madre, Benigna Pilar Ferreyra, por el cual ésta le vende
dicho bien, en fecha 15 de febrero de 1989, es decir durante la vigencia de la
sociedad conyugal conformada con la accionante.En dicha oportunidad el Sr. Albornoz aclaró expresamente que: "... el
bien inmueble transferido por mi difunta madre salió de su patrimonio
con anterioridad a su deceso, por consiguiente, no integra el acervo
sucesorio, habiendo el suscripto abonado la totalidad del precio y
habiéndose entregado la posesión del bien en fecha 15 de febrero de
1989, quedando pendiente únicamente la formalización de la escritura
pública traslativa del bien". (Fs. 93 y el destacado me pertenece).
Posteriormente, el propio juez interviniente en dicho proceso
sucesorio, dispuso la inscripción del bien inmueble en cuestión a nombre del
Sr. Ramón Antonio Albornoz, decisión que no cabe merituar en el presente.Es decir que, independientemente del tema acerca de la inscripción
del bien a su nombre -obligación del demandado que excede este proceso-,
lo único cierto es que éste bien, según se reconoce expresamente, fue
adquirido por el demandado, en carácter oneroso en vida de la progenitora,
por lo que no puede ahora desconocer tal situación, que se contrapone con
la teoría de los actos propios, como bien lo señalara el sentenciante, y
sostener que el bien es propio porque "es parte de un haber hereditario del
ascendiente del recurrente".Sobre tal cuestión, nuestro Máximo Tribunal ha dicho en reiteradas
ocasiones: "Atento la doctrina de los actos propios resulta inadmisible la
pretensión que importe ponerse en contradicción con los propios actos
anteriores, deliberados, jurídicamente relevantes y plenamente eficaces".
SCBA LP C 102607 S 27/08/2014 - Carátula: B. ,A. L. contra C. ,C. A. D. v. ;
SCBA LP C 114661 S 05/09/2012 - Carátula: Sánchez, Thelma Elvira
c/Instituto de Vida Consagrada Hermanas Ursulinas s/Daños y perjuicios Sumario Juba: B3902502).En lo que respecta al otro bien en discusión, esto es el ubicado en
Chiclana Nro. 1508, -como refiere el recurrente (el Sr. Albornoz) y no existe
contradicción alguna-, resulta un bien recibido por herencia junto a otros
nueve herederos declarados tales en el juicio sucesorio ya referido, tal como
surge
de
la
declaratoria
de
herederos
obrante
a
Fs.
78/79,
correspondiéndole una décima parte del mismo.También, es reconocido que el mismo, con posterioridad se convirtió
en cesionario de los derechos hereditarios correspondientes a las
coherederas Esperanza Soledad; Marta Mercedes, María Fernanda y Elsa
Zunilda Albornoz (conforme escritura Nro. 216 de de cesión de acciones y
derechos hereditarios agregada a Fs. 81/82 del expediente sucesorio Nro.
17.328 anteriormente aludido).Ahora bien, entiendo que la posición sustentada por el juzgador no
es la correcta, ello en tanto que a mi entender no es la aplicable al caso.
Recordemos que -entre las circunstancias reconocidas por ambas
partes, el Sr. Albornoz, sobre el bien en cuestión, resulta titular de una parte
indivisa sobre el mismo, en virtud de su calidad de heredero declarado en la
sucesión de su padres, titulares del mismo, por lo que la adquisición por
cesión de derechos y acciones hededitarios, con carácter oneroso durante la
vigencia de la sociedad de otras partes indivisas -circunstancia que hace
presumir que con fondos gananciales-, reviste el carácter de propio.Y, ello así en tanto que situaciones como el caso en análisis, nuestro
Código Civil no la ha previsto, esto es "... admitir una calificación dual, en
atención a los fondos empleados en la adquisición, o una calificación única.
La tésis que afirma la calificación única del bien es la que ha prevalecido en
la jurisprudencia y en la doctrina. La calificación única del bien vendría dada
por el carácter de la cuota originaria, solución que surge de la esencia
misma del condominio. La parte alícuota del condominio no se refiere a su
objeto, que es la cosa, sino a su medida. El derecho de cada condómino
recae sobre la cosa toda, no sobre una fracción de ella; pero como el
derecho de cada uno debe coexistir con el derecho de los demás, hay una
limitación
que
viene
dada
por
tal
concurrencia...Aplicando
estas
consideraciones al caso en análisis, resultará que el cónyuge que tenga en
condominio con un tercero una cuota de carácter propio (por ej. por haber
heredado el inmueble en condominio con su hermano), al adquirir el resto de
las cuotas con bienes gananciales, el inmueble tendrá carácter propio, ya
que la cuota originaria -de carácter propio- tenía por objeto la totalidad de la
cosa; la calidad de propia de la cuota originaria impregna o califica como
propio la totalidad del bien que luego es adquirido con fondos gananciales
del condómino... Cuando las adquisiciones no sean del resto de las cuotas
sino sólo de algunas, se ha de aplicar el mismo criterio de calificación. Habrá
un condominio ante el cónyuge, entre el cónyuge propietario de la cuota
originaria que adquiere otras, todas las cuales tendrán el carácter propio, y el
tercero." (Cfr. José Luis Pérez Lasala, "Liquidación de la sociedad conyugal
por muerte y partición hereditaria", Ed. Depalma Buenos Aires, 1993, págs.
26/28).En relación a este tópico de adquisicion de partes indivisas, se ha
sostenido que cuando "... un cónyuge sea dueño de una parte indivisa de
una cosa con carácter propio y adquiera luego otra parte indivisa con dinero
ganancial.
En
tal situación,
consideran
Rébora,
Borda,
Mazzinghi,
Guastavino y Zannoni que las nuevas partes indivisas tienen también
carácter propio, sin perjuicio del crédito en favor de la sociedad conyugal
por el dinero ganancial invertido." (Augusto C. Belluscio - Eduardo A.
Zannoni, "Código Civil y leyes complementarias - Comentado, Anotado y
Concordado, Ed. Astrea, 1986, pág. 126). Es decir, la tesis sustentada por el
sentenciante de considerar "ganancial las nuevas porciones indivisas
adquiridas cuando no se incorpora la totalidad de la porciones preindivisas
restante, sino una parte", no es la correcta, por lo que en este aspecto
corresponde revocar tal decisión. Ello, independientemente del derecho de
recompensa que le corresponda a la sociedad por el dinero ganancial que se
haya invertido en la adquisición.Por último, he de destacar que esta es la posición que adopta el
nuevo Código Civil y Comercial de la Nación (Aprobado mediante ley 26.994
y promulgado según decreto 1795/2014 y publicado el 8 de octubre de
2014); en efecto el mismo adopta la teoría monista de calificación de los
bienes, en tanto que el art. 464 inc. k) que establece que "Son bienes
propios de cada uno de los cónyuges: ... las partes indivisas adquiridas por
cualquier título por el cónyuge que ya era propietario de una parte indivisa de
un bien al comenzar la comunidad, o que la adquirió durante ésta en calidad
de propia, así como los valores nuevos y otros acrecimientos de los valores
mobiliarios propios, sin perjuicio de la recompensa debida a la comunidad en
caso de haberse invertido bienes de ésta para la adquisición".III.- Establecido el carácter ganancial de uno sólo de los bienes
(Chiclana 560) y el de propio del restante (Chiclana 1508), con eventual
derecho a recompensa si huebiere sido adquirido con fondos gananciales,
corresponde entrar a resolver -en lo que atañe al primero de bienes
nombrados-, lo atinente al agravio expuesto por la accionante, respecto a si
el demandado adquirió la totalidad o una porción del inmueble. No hay duda
de que lo comprado pasó a formar parte de la sociedad conyugal pero resta
determinar la extensión del mismo.
En este punto estimo, que en orden a la insuficiente documentación
acerca de la conformación del inmueble, ello ha de ser materia de
tratamiento en la oportunidad procesal correspondiente. En la presente se
establece su calidad de ganancial a los efectos de la integración del activo
de la sociedad conyugal pero no procede expedirse sobre el alcance de
dicho dominio si no surge prístino. Ello excede el objeto de estos autos.
El informe de dominio al que he aludido, esto es el agregado a Fs.
88/90, da cuenta que la Sra. Benigna Ferreyra (madre del demandado), era
titular al 29/10/82, de las 2/3 partes del bien individualizado en el mismo,
esto es el de Ramón Raimundo esquina Chiclana, de una superficie total de
340 metros cuadrados, pero el mismo informe también da cuenta, de que el
bien luego (1984) fue objeto de afectación en propiedad horizontal, con la
división en tres unidades funcionales (Fs. 90), sin embargo nada se dice ni
surge de autos, que proporción se le asignara a la mencionada Ferreyra
sobre las tres unidades o cual de ellas en particular.
Ello así, ante tal situación, considero que resulta prematura la
proporcionalidad asignada por el Sr. Juez de la primera instancia, la cual se
podrá dilucidar cuando se inscriba el bien a nombre del demandado, todo lo
cual se deberá efectuar en una posterior etapa, con la documentación que
se adjunte al efecto.De lo contrario, de seguirse la posición adoptada por el
sentenciante primero, las 2/3 partes que correspondería como bien
ganancial a la sociedad conyugal, serían de la totalidad del inmueble
identificado en el informe de dominio ya aludido, cuando lo que se declarara
con tal carácter es sólo la unidad funcional Nro. 00-02, como figura en el
boleto de compraventa de fecha 15/2/89 y que adquiriera el Sr. Albornoz, el
que tiene una superficie menor (107,91 metros
cuadrados). O podría
interpretarse que sólo corresponderían los 2/3 de la mencionada Unidad
Funcional.IV.- En cuanto a las costas correspondientes a la Primera
Instancia, entiendo que es ajustada a derecho la imposición en el orden
causado
atento
haber
prosperado
sólo
parcialmente
la
demanda,
acaeciendo lo propio en esta instancia de Alzada, en que los respectivos
agravios de los recurrentes, no fueron atendidos en su totalidad (arts. 68 y
ccs. del CPCC).
Por
las razones dadas, citas legales de referencia y con el
alcance indicado,
VOTO POR LA NEGATIVA.
A la misma cuestión la Sra. Jueza Graciela SCARAFFIA
por
análogos fundamentos votó en el mismo sentido.A la SEGUNDA CUESTION el señor Juez Roberto Manuel
DEGLEUE
dijo: De conformidad al resultado habido al tratarse la cuestión
precedente, estimo que el pronunciamiento que corresponde dictar es:
1) Acoger parcialmente el recurso de apelación deducido por la
parte demandada y rechazar el de la actora, y en su merito, revocar
parcialmente el decisorio primero en lo que respecta al activo de la sociedad
conyugal, disponiendo que integra el mismo en el carácter de bien ganancial,
sujeto a liquidación y partición, solamente el inmueble ubicado en calle
Chiclana 560 de esta ciudad y cuyos datos catastrales obran en el boleto de
compraventa glosado a
Fs. 91 del expediente Nro. 17.328 caratulado;
"Albornoz, Sixto y Otra s/Sucesión Ab Intestato".2) Declarar prematura la proporcionalidad establecida en la
sentencia atacada sobre tal inmueble y dejar ello para etapa posterior,
cuando se inscriba el bien a nombre del demandado y se adjunte la
documentación correspondiente, antes de la liquidación y partición.3) Costas de ambas instancias, por su orden (Arts. 68 y ccs. del
C.P.C.C.).4) Diferir la regulación de honorarios hasta tanto exista regulación
de primera instancia (art. 31 ley 8904).ASI LO VOTO.
A la misma cuestión la Sra. Jueza Graciela SCARAFFIA
por
análogos fundamentos votó en el mismo sentido.Con lo que terminó el presente Acuerdo, dictándose la siguiente;
S E N T E N C I A:
1) Acoger parcialmente el recurso de apelación deducido por la
parte demandada y rechazar el de la actora, y en su merito, revocar
parcialmente el decisorio primero en lo que respecta al activo de la sociedad
conyugal, disponiendo que integra el mismo en el carácter de bien ganancial,
sujeto a liquidación y partición, solamente el inmueble ubicado en calle
Chiclana 560 de esta ciudad y cuyos datos catastrales obran en el boleto de
compraventa glosado a Fs. 91 del expediente Nro. 17.328 caratulado;
"Albornoz, Sixto y Otra s/Sucesión Ab Intestato".2) Declarar prematura la proporcionalidad establecida en la
sentencia atacada sobre tal inmueble y dejar ello para etapa posterior,
cuando se inscriba el bien a nombre del demandado y se adjunte la
documentación correspondiente, antes de la liquidación y partición.3) Costas de ambas instancias por su orden (arts. 68 y css. del
C.P.C.C.).4) Diferir la regulación de honorarios hasta tanto exista regulación
de primera instancia (art. 31 ley 8904).Regístrese. Notífiquese. Devuélvase.-
-Graciela SCARAFFIA Presidenta de la Excma. Cámara de
Apelación en lo Civil y Comercial
Dpto. Judicial Pergamino
Si-/////
///-guen las Firmas.-
Roberto Manuel DEGLEUE
Juez
Ana María ALBORNOZ
Secretaria
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