doi:10.3900/fpj.6.2.71.s EISSN 1676-5133 La influencia de los ejercicios resistidos en los diferentes agrupamientos musculares sobre la presión arterial Artículo Original 1 Mestrado em Ciências da Motricidade Humana Universidade Castelo Branco - RJ (LABIMH/PROCIMH) 2 Escola de Educação Física e Desportos Universidade Federal do Rio de Janeiro (EEFD/UFRJ) Ingrid Dias1 [email protected] Roberto Simão2 [email protected] Jefferson Novaes1,2 [email protected] Dias I, Simão R, Novaes J. La influencia de los ejercicios resistidos en los diferentes agrupamientos musculares sobre la presión arterial. Fit Perf J.2007;6(2):71-5. RESUMEN: La literatura sugiere una reducción de la presión arterial (PA) de reposo en practicantes de ejercicios anaerobios, sin embargo, el comportamiento de PA tras los ejercicios resistidos (ER) permanece discutible. El objetivo del experimento fue a comparar dos secuencias de ER con mismo volumen e intensidad de entrenamiento en diferentes segmentos corporales, sobre respuesta de PA. El experimento envolvió 4 visitas no consecutivas de 16 hombres (23±2,3 años; 69,6±6,1 Kg) expertos en los ER. La primera visita, se habían realizado tests de 10RM para cada ejercicio y tras 48 horas uno retest fue aplicado. Las visitas posteriores se habían realizado dos secuencias (SEQA y SEQB) de ejercicio en días alternos, siendo la SEQA (hack machine, leg-press, silla flexora), y la SEQB (arrastrada supinada, remada cerrada y supino horizontal). En ambas, se habían ejecutado 5 series de 10 repeticiones a 80% de 10RM con 2 minutos de intervalo. PA sistólica y diastólica (PAS y PAD) habían sido contrastadas por método auscultatório en el reposo y tras el término de las secuencias, en 9 medidas durante 90 minutos, en ciclos de 10 en 10 minutos. Se utilizó ANOVA de dos entradas (PA x agrupamiento muscular x tiempo) con medidas repetidas en el segundo factor, siendo las diferencias identificadas por el post-hoc de Tuckey (p<0,05). La PAS, tanto la SEQA en cuanto a SEQB indujeron una hipopresión arterial significativa hasta la última medida post-esfuerzo. Esa respuesta fue significativa entre 40 y 90 min. post-esfuerzo. No habían sido observadas diferencias para PAD. De esa forma, el segmento corporal envuelto no influenció ni la magnitud, ni la duración del efecto hipotensivo. Palabras clave: Entrenamiento de fuerza. Musculación. Test de 10RM. Hipopresión arterial. Dirección para correspondencia: Avenida Pau Brasil, 540 Ilha do Fundão, Rio de Janeiro/RJ - CEP: 21941-590 Fecha de Recibimiento: septiembre / 2006 Fecha de Aprobación: diciembre / 2006 Copyright© 2007 por Colégio Brasileiro de Atividade Física, Saúde e Esporte Fit Perf J Rio de Janeiro 6 2 71-75 mar/abr 2007 71 RESUMO ABSTRACT A influência dos exercícios resistidos nos diferentes grupamentos musculares sobre a pressão arterial The influence of resistive exercises in different muscular groups on blood pressure A literatura sugere uma redução da pressão arterial (PA) de repouso em praticantes de exercícios aeróbios, no entanto, o comportamento da PA após os exercícios resistidos (ER) permanece controverso. O objetivo do experimento foi comparar duas seqüências de ER com mesmo volume e intensidade de treinamento em diferentes segmentos corporais, sobre resposta da PA. O experimento envolveu 4 visitas não consecutivas de 16 homens (23±2,3 anos; 69,6±6,1 Kg) experientes em ER. Na primeira visita, realizaram-se testes de 10RM para cada exercício e, após 48 horas, um re-teste foi aplicado. Nas visitas posteriores realizaram-se duas seqüências de exercício (SEQA e SEQB) em dias alternados, sendo a SEQA (hack machine, leg-press, cadeira flexora), e a SEQB (puxada supinada, remada fechada e supino horizontal). Em ambas, executaram-se 5 séries de 10 repetições a 80% de 10RM com 2 minutos de intervalo. As PA’s sistólica e diastólica (PAS e PAD) foram aferidas por método auscultatório no repouso e após o término das seqüências, em 9 medidas durante 90 minutos, em ciclos de 10 em 10 minutos. Utilizou-se ANOVA de duas entradas (PA x grupamento muscular x tempo) com medidas repetidas no segundo fator, sendo as diferenças identificadas pelo post-hoc de Tuckey (p<0,05). Na PAS, tanto a SEQA quanto a SEQB induziram uma hipotensão significativa até a última medida pós-esforço. Essa resposta foi significativa entre 40 e 90 min. pós-esforço. Não foram observadas diferenças para PAD. Dessa forma, o segmento corporal envolvido não influenciou nem a magnitude, nem a duração do efeito hipotensivo. Literature suggests a reduction of blood pressure (BP) when practitioners of aerobic exercises are resting, however, the behavior of the BP after the resistive exercises (RE) remains controversial. The aim was to compare 2-sequences of RE with same volume and intensity of training in different corporal segments, on reply in BP. The experiment involved 4 not consecutive visits of 16 men (23±2.3 years; 69.6±6.1 kg), experienced in the RE. In the first visit, a 10RM test for each exercise was done and after 48 hours a re-test was made. In the posterior visits, two sequences of exercise (SEQA and SEQB) had been carried through, in alternating days, been SEQA (hack machine, leg-press, leg curl), and SEQB (lat pull-down, rowing closed, bench press). In both, 5 sets of 10 repetitions had been executed, with 80% of 10RM and a 2-min interval. The systolic (SBP) and diastolic (DBP) had been checked by auscultatory method, before and after the sequences, in 9 measures during 90 min after effort, in cycles of 10 min. The 2-way ANOVA (BP x muscular group x time) was used with repeated measures in the second factor and the significant differences had been identified by test posthoc of Tuckey (p<0.05). In the SBP, both SEQA and SEQB induced a significant hypotension until the last measure. This reply was significant between 40 and 90 min after effort strengthen. No differences were observed in DBP. The involved corporal segment did not influence nor the magnitude, nor the duration of the hypotension effect. Palavras-chave: Treinamento de força, musculação, teste de 10RM, hipotensão. Keywords: Strength training, workout, 10RM test, hypotension. INTRODUCCIÓN La hiperpresión arterial arterial es uno de los principales factores de riesgo para el desencadenamiento de la enfermedad cardiaca. Sin embargo, en la última década, medidas alternativas están siendo adoptadas como forma de prevención de enfermedades y manutención de la salud y bien estar. De entre esas medidas, la actividad física viene siendo recomendada como alternativa no farmacológica en el tratamiento y prevención de la hiperpresión arterial arterial1,2. El ejercicio físico regular contribuye para reducción de la presión arterial (PA) en reposo tanto como respuesta crónica, cuanto aguda1,2,3. Valores presóricos reducidos, mismo en sujetos normotensos, es un importante factor para minimizar el riesgo de enfermedad cardiaca4. De forma consensual, la literatura sugiere una reducción presórica de reposo en practicantes de ejercicios anaerobios5,6, . En contrapartida, el comportamiento de PA justo después de los ejercicios resistidos (ER) permanece discutible5,6. La prescripción de los ER envuelve clasicamente el control de innúmeras variables como número de series, orden de ejercicios, sobrecarga, tiempo de intervalo, velocidad de movimiento, entre otras6. Tales variables pueden desencadenar diferentes respuestas fisiológicas durante la realización de los ER, teniendo impacto directo en la seguridad cardiovascular en el transcurrir del entrenamiento. Estudios habían analizado la influencia de variables como volumen, intensidad y métodos de entrenamiento sobre la respuesta de PA tras una sesión de ER5,6,7,8,9 . Los autores están reportando disminución5,6, aumento o ninguna alteración en los valores presóricos post-esfuerzo cuando comparados a los niveles de reposo5,9,11. Sin embargo, todavía no existen evidencias en la literatura comparando la respuesta de PA post-esfuerzo en di72 ferentes segmentos corporales en los ER. Siendo así, el objetivo de este estudio fue a comparar dos secuencias de ER con mismo volumen e intensidad de entrenamiento, en diferentes segmentos corporales, sobre respuesta de PA post-esfuerzo. MATERIALES Y MÉTODOS Muestra Participaron del estudio 10 voluntarios (23±2,3 años; 69,6±6,1 kg; 171,1±2,1 cm) masculinos normotensos y todos poseían experiencia previa en los ER, por lo menos un año, con frecuencia semanal mínima de tres veces. Como criterio de exclusión se utilizó el uso de sustancias ergogénicas, compromisos osteomioarticulares que impidiesen total o parcialmente la ejecución del ejercicio, medicación que afectase los valores de PA en reposo, en el ejercicio, y post-esfuerzo, consumo de cafeína o alcohol el día de la colecta de los datos y la actividad cotidiana que exigiera gran demanda energética. Todos voluntarios, respondieron negativamente a los ítems del cuestionario PAR-Q y firmaron un término de consentimiento, conforme la resolución 196/96 del Consejo Nacional de Salud para experimentos humanos, tras la aprobación por el comité de ética de la institución (Universidade Castelo Branco – RJ). Test de 10RM Los datos habían sido colectados en dos días distintos. La primera visita, los individuos, tras realicen las medidas antropométricas, Fit Perf J, Rio de Janeiro, 6, 2, 72, mar/abr 2007 ejecutaron el test de 10RM. Tras la obtención de las cargas máximas en el test de 10RM, los individuos descansaron por 48 horas y fueron reevaluados para obtención de la reproducibilidad de las cargas en el test de 10RM. Para tanto, se consideró como 10RM mayor carga establecida en ambos los días, con diferencia menor que 5%. En los intervalos entre las sesiones de tests no fue permitida la realización de ejercicios, visando no interferir nos resultados obtenidos. El procedimiento de aplicación del test 10RM fue en la siguiente orden: Supino recto con barra (SR), leg press sentado (LP), arrastrada supinada en el pulley (PS), hack machine horizontal (HM), remada cerrada en el aparato para dorsal (RF) y silla flexora (CF). Los ejercicios habían sido seleccionados debido a su diseminación en centros de entrenamiento y facilidad de ejecución. Visando reducir el margen de error en los tests de 10RM, habían sido adoptadas las siguientes estrategias: a) instrucciones estandarizadas habían sido suministradas antes del test, de modo que el evaluado estuviese informado de toda la rutina que envolvía la colecta de datos; b) el evaluado fue instruido sobre la técnica de ejecución del ejercicio; c) el evaluador estaba atento cuanto a la posición adoptada por el practicante de momento de la medida, pues pequeñas variaciones en el posicionamiento de las articulaciones envueltas en el movimiento podrían accionar otros músculos, llevando la interpretaciones erróneas de los apuntales obtenidos; d) estímulos verbales habían sido realizados a fin de mantener alto el nivel de estimulación; e) los pesos adicionales utilizados en el estudio fueron previamente contrastados en balanza de precisión. Los intervalos entre los intentos de cada ejercicio durante el test de 10RM habían sido fijados entre dos a cinco minutos6. Tras obtención de la carga en un determinado ejercicio, intervalos no inferiores hace 10 minutos habían sido datos, antes de pasarse al test en el ejercicio siguiente. Procedimiento para colecta de datos Los datos relacionados a PA habían sido colectados en dos días más no consecutivos con intervalo de 72 horas entre ellos, en los cuales los individuos realizaron dos secuencias distintas de ejecución. La secuencia A (SEQA), los evaluados solamente hacían ejercicios para miembros superiores en la siguiente orden: SR, PS y RF. La secuencia B (SEQB) constaban ejercicios para miembros inferiores en la ordenación: LP, HM y CF. Todos los evaluados habían sido insertados en las secuencias de entrenamiento por la delineación alternado (balancee cross-over diseño). Figura 1: Respuesta de la PAS en las dos sesiones de entrenamiento de acuerdo con el agrupamiento muscular utilizado (media ± desvío patrón) Barrotes oscuras = sesión de ejercicios para miembros superiores (MS); Barrotes claras = sesión de ejercicios para miembros inferiores (MI); * = diferencia significativa en relación al reposo en los MS; t = diferencia significativa en relación al reposo en los MI (p<0,05). Fit Perf J, Rio de Janeiro, 6, 2, 73, mar/abr 2007 Los evaluados realizaron cinco series de 10 repeticiones con cargas correspondiendo a 80% de aquella verificada en el test de 10RM e intervalo fijo de dos minutos entre las series y ejercicios. La ejecución de los ejercicios, los sujetos habían sido instruidos a no realizar la maniobra de valsalva. Antes de iniciar la colecta de datos, PA de reposo fue contrastada por evaluador entrenado a través del método auscultatorio12, tras el sujeto permanecer sentado durante 10 minutos (min.). Inmediatamente al término de cada una de las secuencias, PA fue registrada tras 10 min. Posteriormente se habían realizado ocho medidas más en ciclo de 10 min. El tiempo total de contraste de PA fue de 90 min. Siendo así, el individuo permaneció sentado y en reposo absoluto durante toda colecta siendo evaluada por el mismo método y evaluador. Durante la monitorización de PA los individuos permanecieron en sala con temperatura ambiente controlada. Tratamiento Estadístico Para verificar el comportamiento de la presión arterial sistólica (PAS) y presión arterial diastólica (PAD) tras el esfuerzo, se utilizó la ANOVA de dos entradas con medidas repetidas, seguidas de verificación post-hoc de Tukey (PA x tiempo x grupo muscular) para identificar las posibles diferencias. La determinación de la reproducibilidad en las cargas para 10RM fue realizada a través del coeficiente de correlación intra-clase, añadida al test t de student pareado. El estudio admitió el nivel de p<0,05 para la acepción estadística. El software Statistica fuere Windows versión 5.5 (Statsoft, EE UU) fue utilizado para el análisis de los datos. RESULTADOS En relación a los resultados referentes a la reproducibilidad de las cargas obtenidas en los tests de 10RM, habían sido verificados elevados valores coeficientes de correlación intra-clase en los ejercicios seleccionados (SR r=0,86; LP r=0,92; PS r=0,94; HM r=0,90; RF r=0,94; CF r=0,96). En adicción, el test-t student pareado no demostró diferencia significativa entre las cargas obtenidas para 10RM de cada ejercicio (p<0,05). La Figura 1, cuando los valores medianos de la PAS post-ejercicio habían sido comparados a los niveles de reposo, observamos una reducción de la PAS significativa a partir de 40 minutos, perdurando hasta 90 minutos post-esfuerzo en el protocolo de ejercicios para miembros superiores. En relación a los ER efectuados para los miembros inferiores, también habían sido observadas Figura 2: Respuesta de la PAD en las dos sesiones de entrenamiento de acuerdo con el agrupamiento muscular utilizado (media+desvío patrón) Barrotes oscuras = sesión de ejercicios para miembros superiores (MS); Barrotes claras = sesión de ejercicios para miembros inferiores (MI). 73 diferencias significativas a partir de 40 minutos, se prolongando hasta 90 minutos tras el término de la sesión de entrenamiento. En ningún momento encontramos diferencias significativas al comparemos los dos protocolos de entrenamiento envolviendo diferentes segmentos corporales. La Figura 2, se nota que los valores de PAD post-ejercicio no demostraron diferencias significativas en todos los tiempos cuando comparados al reposo, con respecto a ambos los protocolos de ejercicios sugeridos y tampoco hubo diferencias en relación a los segmentos corporales. DISCUSIÓN Recientemente, Simão et al.6 comparando diferentes intensidades y volúmenes en los ER verificaron que esas variables metodológicas pueden afectar la duración del efecto hipotensor sobre la PAS, pero no la magnitud de la respuesta por hasta 60 min. Fischer7 verificaron reducciones presóricas significativas decurrentes de los ER durante 60 min. en mujeres normotensas e hipertensas tras la ejecución de tres series en circuito con carga correspondiente a la 50% de 1RM. También Mac Donald et al.8 verificaron caída significativa en la PAS entre 10 y 60 min. tras sus voluntarios concluyan 15 min. de ejercicio en el aparato leg-press de forma unilateral con carga correspondiente a 65% de 1RM. Polito et al.5 verificaron que los ER ejercen un efecto hipotensivo sobre todo sobre la PAS, y que la magnitud de las cargas tendió a favorecer la duración de la reducción de la PAS. Ese estudio analizó el efecto de dos secuencias de ER realizados en diferentes intensidades (6RM x 12 repeticiones con 50% de 6RM), sin embargo con lo mismo volumen de entrenamiento. Para PAS, la secuencia de 12 repeticiones indujo una reducción significativa en un periodo no superior la 50 min., mientras la secuencia de 6RM ocasionó reducción en todas las medidas (60min.). Hardy y Tucker13 realizaron un estudio con sedentarios e hipertensos en los ER, y verificaron reducción en la PAS, también por una hora. Contraditoriamente, algunos estudios no consiguieron identificar la intensidad y volumen de entrenamiento como variable en la respuesta hipotensiva. Focht y Koltyn10 comparando 50% (12-20 repeticiones) y 80% (4-8 repeticiones) con porcentual de carga correspondiente a 1RM, no encontraron respuesta hipotensiva para PAS por hasta 180 min. Santos et al.9, al verifiquen el comportamiento de la PAS y PAD tras la realización de uno programa compuesto de 3 series con cargas para 10 RM en cuatro ejercicios, no relataron ninguna respuesta hipotensora durante 60 min. Post-esfuerzo, aunque hayan observado una tendencia a la reducción de la PAS. En que pesen diferencias metodológicas de nuestro estudio en relación a los citados anteriormente, nuestros resultados tienden a corroborar como los experimentos que verificaron efecto hipotensivo post-esfuerzo. El presente estudio demostró reducciones significativas de la PAS en relación al reposo entre 40 y 90 min. tras una sesión de ER tanto en la sesión que utilizó segmentos corporales inferiores como solamente los superiores, y tampoco verificamos alteraciones en la PAD post-ejercicio en ninguna situación estudiada. Un hecho curioso acaecido en nuestro experimento, es que justo después de la sesión de ER no observamos diferencias significativas en la PAS en relación al reposo. Mismo 74 con tendencia a efecto hipotensor justo después del esfuerzo, las diferencias solamente fueron significativas a partir de 40 min., perdurando hasta 90min. Otro hecho que debe ser resaltado es que no verificamos en ningún estudio el efecto hipotensivo en una sesión de ER para miembros inferiores o superiores aisladamente en las cargas estipuladas. Nuestros resultados también sugieren que el volumen e intensidad del entrenamiento pueden influenciar en la reducción de la PAS post-esfuerzo. Sin embargo, la PAD no demostró alteraciones por todo tiempo de contraste. Mismo utilizando intensidad correspondiente a 80% 10RM, el volumen total de entrenamiento puede haber sido influenciado por el número de repeticiones totales en la sesión de entrenamiento, debido el hecho de algunos evaluados no soporten completar todas las repeticiones estipuladas debido al efecto de la fatiga. Macdonald et al.14 habían verificado la influencia de la masa muscular de miembros inferiores y superiores en la respuesta hipotensiva post-ejercicio. La muestra fue compuesta por siete hombres y dos mujeres entrenados e hipertensos. Estos realizaron 30 min. de ergometría de brazos la 65% VO2 de pico y 30 min. de ergometría de piernas la 70% de VO2 de pico. PA fue vigilada antes y una hora post-esfuerzo utilizando el aparato Finapress. La PAS fue significativamente reducida por hasta una hora post-ejercicio. La reducción presórica fue independiente de la modalidad, aunque la duración del efecto tenga se prolongado tras la ergometría de piernas. En nuestro estudio utilizamos la misma intensidad para ambos los segmentos corporales, ya Macdonald et al.14 habían calculado la intensidad relativa a la masa muscular envuelta durante el esfuerzo. Quizás, podamos especular que utilizando diferentes intensidades, encontrásemos diferencias significativas entre los segmentos. Un otro factor puede estar relacionado al método de contraste de PA. Macdonald et al.14 realizaron sus medidas con el aparato Finapress, mientras en nuestro estudio utilizamos el método auscultatório, siendo este más susceptible a errores12. La población estudiada también fue diferente en los dos estudios. Macdonald et al.14, comprobaron individuos hipertensos, mientras nuestro estudio utilizó una población normotensa. Se sabe que mayores reducciones en PA tras el ejercicio anaerobio tienden a sean verificadas en hipertensos y, probablemente la misma relación puede ser mantenida en la fuerza5. Sin embargo, estudios envolviendo poblaciones hipertensas y los ER son relativamente escasos, consecuentemente mayores inferencias todavía no pueden ser hechas. Algunas limitaciones de nuestro estudio pueden tener influenciado en nuestros creídos. Primeramente, la muestra fue compuesta por individuos normotensos y, como antedicho, quizás pudiésemos obtener mayores resultados se hubiésemos evaluado individuos hipertensos. Mismo utilizando evaluador entrenado, el método auscultatório demuestra ser más sujeto a errores en sus medidas que el levantamiento cartográfico ambulatorial (Mapa) y el Finapress. Medidas obtenidas por el método auscultatório tienden a subestimar los resultados de PA en 30%, sin embargo, este es el método más viable y usual en la verificación de los valores de PA en los ER. Sin embargo, es importante que el individuo responsable por el contraste tenga experiencia, pues dificultades para distinguir los ruidos de Korotkoff pueden ocasionar errores12. Sonidos externos y movimientos con brazos, por ejemplo, pueden Fit Perf J, Rio de Janeiro, 6, 2, 74, mar/abr 2007 traer dificultades para la distinción de estos ruidos, ocasionando errores en la medida15. Los mecanismos responsables por la hipopresión arterial post-ejercicio todavía permanecen discutibles y inconclusivos en la literatura. Sin embargo, algunos factores vienen siendo relacionados la esta caída de PA decurrente del ejercicio. La disminución de la resistencia vascular periférica puede estar relacionada la vasodilatación proporcionada por el ejercicio físico en la musculatura activa e inactiva. Disminución en la actividad nerviosa simpática, alteraciones en la puesta en marcha de los presoreceptores arteriales y cardiopulmonares, termoregulación provocada por la disipación de calor producida por el ejercicio, aumento en los niveles de serotonina y hormonas vasodilatadores como óxido nítrico, también son citados como posibles factores hipotensores16. CONCLUSIÓN Los resultados sugieren que una sesión de ER con alto volumen de entrenamiento puede desencadenar reducciones en PA de forma significativa en los momentos subsecuentes al esfuerzo, es decir, hasta 90 min. También de acuerdo con los resultados obtenidos, no verificamos diferencias significativas al comparar diferentes segmentos corporales con mismo volumen e intensidad de entrenamiento. Otros estudios son necesarios para verifiquemos el real efecto de innúmeras variables como intensidad, volumen, tiempo de intervalo, velocidad de ejecución, métodos de entrenamiento, entre otras, en la respuesta de PA tras una sesión de ER. 2. Joint National Commitee On Prevention, Detection, Evaluation and Treatment of High Blood Pressure (JNC). The sixth report of the Joint National Committee on Prevention, Detection, Evaluation, and Treatment of High Blood Pressure. Archives International Medicine. 1997; 157: 2413-2446. 3. Kelley GA, Kelley KS. Progressive resistance exercise and restihg blood pressure: a meta-analysis of randomized controlled trials. Hypertension. 2000; 35: 838-843. 4. Vasan RS, Larson MG, Leip EP, Evans JC, O’Donnell CJ., Kannel W. B., Levy D. 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