Descarga ahora Financiamiento a PyMEs

Anuncio
En Portada
Adalberto Mendoza Jiménez
[email protected]
Existen en la actualidad excelentes alternativas de
financiamiento, que pueden ser el punto de partida
para tu negocio o el despegue de tu empresa.
E
n México: la micro, pequeña y mediana empresa,
ocupan un lugar muy importante, pues son generadoras de empleo y de riqueza. A pesar de que
constituyen más del 99% del total de las empresas, uno de los principales problemas a los que
se ha enfrentado históricamente es la falta de financiamiento; además, hay que sumar los problemas
de integración o articulación, debido a la
inadecuada organización y planeación, así
como la falta de competitividad.
Las empresas necesitan mantener un mínimo
de efectivo para financiar sus actividades operacionales diarias; la situación financiera de largo
plazo puede depender de los recursos que
se consigan en el corto plazo; por ello surgen
preguntas como: ¿en dónde puedo conseguir
efectivo de la manera más ágil y rápida?, ¿Cuáles son las entidades de crédito financiero?,
¿Cuánto me costará solicitar un crédito?, ¿Qué
debo hacer para obtener un mayor beneficio? Entre otras.
Para un buen
proyecto siempre
hay dinero
En México las PyMEs pueden recurrir a
diversas fuentes de financiamiento. Cuando
requieren recursos económicos para su crecimiento o subsistencia, normalmente piensan en
la obtención de un crédito bancario o en aportación de su patrimonio. Pero además, existen muchas otras opciones para obtener los recursos que
les permitan operar rentablemente o impulsar sus
proyectos de expansión.
20 MeM
En Portada
Algunas fuentes de financiamiento a
las que pueden recurrir las PyMEs son:
1. El crédito de proveedores
2. Crédito Bancario
3. Bancos de Desarrollo
4. Sofoles y Sofomes
5. Organizaciones Auxiliares de Crédito
tales como: Almacenes Generales de
Depósito, Arrendadoras Financieras,
Empresas de Factoraje Financiero,
Sociedades de Ahorro y Préstamo, y
Uniones de Crédito.
6. Entidades de Ahorro y Crédito Popular
como: Sociedades Cooperativas de
Ahorro y Préstamo (mejor conocidas
como Cajas Populares) y Sociedades
Financieras Populares.
La ausencia de información respecto
a estas figuras y la falta de cultura de los
empresarios por acercarse a organismos
diferentes a la banca comercial, han
sido los principales factores que han
propiciado que las PyMEs, continúen
lamentando el acceso al crédito.
Comentario MeM
por Jorge Alba García
[email protected]
Los bancos de desarrollo como
Nafinsa y PROMÉXICO, pueden ser
también una fuente de financiamiento
interesante para empresarios. Los
créditos de los llamados “Bancos de
Desarrollo” cumplen con funciones
gubernamentales de apoyo a
específicos sectores de la economía.
Desde el sexenio pasado, estas dos
instituciones han ofrecido diversos
programas de apoyo a la PyME.
Destaca el programa de Cadenas
Productivas de Nafinsa, que apoya a
las pequeñas y medianas empresas
que venden a grandes corporativos,
pagándoles las facturas en un periodo
casi inmediato, sin tener que esperar
los periodos de hasta 90 días de pago
de los grandes corporativos. Este
programa beneficia a las empresas
al obtener liquidez y poder lograr
grandes ventas casi de contado.
El crédito de
proveedores
Una de las principales fuentes de recursos de
las PyMEs en México, ha sido el crédito de los
proveedores. Según el Banco de México, de
acuerdo a la Encuesta Trimestral sobre el financiamiento a empresas del sector privado, del
trimestre de enero a marzo, el porcentaje de empresas que recurren a esta fuente de
financiamiento es de 71.4% para las
pequeñas, 58.3% para las medianas y
casi el 53.5% para las grandes.
Es uno de los financiamientos más económicos.
El proveedor puede inflar los
precios del producto para recuperar el costo del crédito.
Fácil de obtener, la única
condición es comprar el producto o servicio y negociar el
plazo con el proveedor.
La empresa debe comprar
exclusivamente a ese proveedor.
Financiamiento directo al
capital de trabajo de la empresa.
Se limita el destino del financiamiento.
Crédito bancario
Es un financiamiento que puede ser
a corto o largo plazo, las empresas lo
obtienen por medio de los bancos con
los cuales establecen relaciones funcionales. El crédito bancario, es una de las
formas de financiamiento más utilizadas por las PyMEs hoy en día, y generalmente es la primer fuente en la que
pensamos al requerir de un crédito. De
acuerdo con la Encuesta Trimestral sobre
el financiamiento a empresas del sector
privado, es la segunda fuente de financiamiento más importante empleada
por las PyMEs. El empleo más común
de este tipo de préstamos es para capital de trabajo con un 68.5%, según la
encuesta del Banco de México.
Casi en su totalidad son bancos comerciales los que manejan las cuentas de
cheques de las empresas y tienen mayor
capacidad de préstamo, de acuerdo a las
leyes y disposiciones bancarias vigentes. La
empresa deberá determinar el tipo de crédito que requiere de acuerdo a su finalidad
y uso, al momento de solicitarlo al banco.
Generalmente los bancos cuentan con una
gama de productos amplia para satisfacer esas necesidades.
Si el banco es flexible en sus
condiciones, habrá más probabilidades de negociar un
préstamo que se ajuste a las
necesidades de la empresa,
lo cual la sitúa en el mejor
ambiente para operar y obtener utilidades.
Permite a las organizaciones estabilizarse en caso de
emergencia con respecto al
capital.
Posibilidad de implementar
relaciones integrales para
resolver otro tipo de necesidades.
Un banco muy estricto en sus
condiciones, puede limitar
indebidamente la facilidad de
la operación y actuar en detrimento de las utilidades de la
empresa.
Las tasas de interés son generalmente más altas que otras
fuentes de financiamiento.
Un crédito bancario acarrea
tasas pasivas, la empresa debe
pagar al banco por concepto
de intereses, que se registran
en sus asientos contables.
Por lo general, se requieren
garantías para requerimientos de largo plazo.
El sobreendeudamiento bancario limita el uso de otras alternativas de financiamiento.
MeM 21
En Portada
Sofoles y Sofomes
Generalmente para las PyMEs, obtener un préstamo a
través de las Sociedades Financieras de Objeto Limitado y Sociedades Financieras de Objeto Múltiple, que representan intermediarios financieros no bancarios, es más sencillo que con
la banca, porque los requisitos y comisiones son menores.
Las Sofomes, se caracterizan por ser sociedades anónimas
que contemplan expresamente como objeto social principal,
la realización de una de las actividades siguientes:
otorgamiento de crédito, celebración de arrendamiento financiero o factoraje financiero.
Arrendamiento financiero
Es un contrato que se negocia entre el propietario
de los bienes (acreedor) y la empresa (arrendatario), a
la cual se le permite el uso de esos bienes durante un
período determinado y mediante el pago de una renta
específica; sus estipulaciones pueden variar según la
situación y las necesidades de cada una de las partes. El
arrendamiento se presta al financiamiento por partes, lo que permite a la empresa recurrir a este
medio para adquirir pequeños activos.
Por otra parte, los pagos de arrendamiento son deducibles de impuestos como gasto de operación; por lo tanto, la empresa tiene mayor deducción fiscal cuando toma
el arrendamiento. El riesgo se reduce porque la propiedad
queda con el arrendado, y éste puede estar dispuesto a operar cuando otros acreedores rehúsan a financiar la empresa.
Esto facilita considerablemente la reorganización de la empresa.
Es un financiamiento bastante flexible y da liquidez a activos de uso muy específico.
Un contrato de arrendamiento obliga una tasa costo por
concepto de intereses.
Evita riesgo de una rápida
obsolescencia para la empresa, ya que el activo no
pertenece a ella.
La principal desventaja del
arrendamiento es que resulta más costoso que la compra de activo.
La cuota de arrendamiento
genera ahorro tributario.
Pérdida de control sobre activos.
No es pasivo exigible para
efectos de balance.
Los administradores y el
Factoraje financiero
departamento de finanzas
El factoraje es una operación de financiamiento a corto
deben conocer las entidades
plazo, por medio del cual, las PyMEs pueden tener acceso a
de apoyo financiero
capital de trabajo para impulsar su crecimiento, a partir de
la cesión de sus cuentas por cobrar vigentes (facturas, contra
recibos, títulos de crédito) a una empresa de factoraje.
El factoraje consiste en la venta de los derechos de crédito
de la cartera no vencida de clientes (total o parcial) de una
empresa a otra, especialmente constituida para tal efecto. La
empresa de factoraje, Factor, compra los derechos de dicha
cartera con un descuento entre el 15 y el 30% del importe
que queda, en garantía de la operación y que se reintegra al
vendedor una vez cobrada la cuenta cedida.
22 MeM
Se obtiene liquidez al convertir en
efectivo inmediato una cuenta por cobrar a 20, 60 o más días de plazo.
No se eleva el endeudamiento de la
empresa, dado que se está vendiendo
un activo (la cartera), en lugar de contratar un nuevo crédito.
Dependiendo de la empresa, se pueden obtener beneficios financieros superiores al costo del factoraje, al contar con mayor liquidez en la empresa.
Al vender activos, no se congelan
otras fuentes de financiamiento, ya
que con esta operación, no se contratan nuevos pasivos, quedando abierta
la posibilidad para hacerlo.
El costo financiero es elevado.
Se llega a perder control sobre la
puntualidad de los clientes cedidos, así como la información inmediata y oportuna de los clientes
que no pagaron en tiempo, dado
que la empresa de factoraje por
su carga administrativa, no informa con oportunidad a su cliente
de las cuentas con problemas.
Se puede crear una dependencia
de la casa de factoraje, ya que
al ceder la cartera, aún cuando
sea en forma parcial, se reciben
los recursos programados para
un futuro cercano, pero cuando
llegue ese momento dichos recursos no se obtendrán, creando
la necesidad de volver a ceder
cartera futura para cubrir los requerimientos presentes.
Entidades de ahorro y crédito popular
Existen otras fuentes de financiamiento que generalmente no sabemos de su
existencia; pero que también pueden ser una buena alternativa para obtener financiamiento, nos referimos a las entidades de Ahorro y Crédito Popular, que incluye Sociedades Cooperativas de Ahorro y Préstamo (mejor conocidas como Cajas Populares) y Sociedades Financieras Populares, las cuales tienen como objeto
fomentar el ahorro y apoyar el financiamiento de micro, pequeñas y medianas
empresas, propiciando la solidaridad y superación económica de sus miembros.
El conocer nuevas alternativas de financiamiento permite disponer de herramientas actuales, las cuales –si son utilizadas correctamente—permiten a
cualquier PyME enfocar sus esfuerzos en la operación y comercialización de
sus productos, aprovechando sabiamente sus conocimientos financieros para
la consolidación y crecimiento de su negocio.
Es necesario que antes de acercarte a alguna de las fuentes señaladas, realices un diagnóstico de tus necesidades de financiamiento,
esto te ayudará a elegir la mejor alternativa.
Los recursos de
MeM 23
Descargar