LECTURA COMPRENSIÓN Y VELOCIDAD Hay personas que leen muy bien en voz alta, sin embargo, cuando están leyendo en silencio parece que están hablando lo que leen pues lo repiten quedito. Esa repetición en algunas personas es audible mientras que en otras no. Las últimas mueven los labios sin emitir voz. En el mejor de los casos, hay personas que no mueven ningún músculo del aparato (fonador) del habla pero se repiten “en la conciencia” lo que están leyendo. A este último modo de repetir lo que se lee, se le llama subvocalización. Otras deficiencias en el hábito de la lectura son realizar regresiones (retornar a enunciados leídos), seguir con el dedo el lugar en el que va la lectura, mover la cabeza en forma de radar como si no se pudieran mover los ojos, etc. Estas deficiencias pueden disminuirse o eliminarse, según las ganas y trabajo que se emplee para erradicarlas. Si tú deseas dominar la lectura en silencio, procura hacerla frente a otra persona que observe tu modo de hacerla. Intenta no mover los labios ni repetir las palabras en la mente. Al enfrentarte al texto debes hacerlo como cuando escuchas a una persona. Te parecerá ridículo repetir lo que alguien te dice cuando lo escuchas y, sin embargo, uno de los errores más frecuentes en el estudiante es repetir lo que lee. Para evitarlo, pon tus dedos índice y pulgar a cada lado de la garganta. Trata de no apuntar con el dedo o cualquier otro material el lugar en donde vas leyendo. También, trata de no mover la cabeza mientras lees. Estos actos son inútiles a la comprensión, consumen energía, cansan y distraen la atención en la lectura. A continuación se presentan cuatro ejercicios de lectura para evaluar la velocidad y comprensión que ahora tienes al leer. A partir de este diagnóstico de lectura de comprensión, y velocidad, podrás ejercitarte cuanto puedas en textos de tu preferencia. Además, en los enlaces a Internet encontrarás sitios donde se promueve software para realizar este tipo de ejercicios y entrenarte hasta alcanzar la cantidad de palabras por minuto que te parezca aceptable. Un estándar podría ser 350 por minuto. No obstante, hay personas que dicen llegar a leer más de mil… evidentemente son pocas. EJERCICIOS DE LECTURA A continuación se presentan textos de diferentes temas para leer tratando de comprender lo mejor posible la información, y al mismo tiempo, avanzar lo más rápido posible. Después se evaluará la rapidez en la lectura y se medirán el tiempo promedio por palabra y el nivel de comprensión lograda mediante un cuestionario de diez preguntas. Si en el cuestionario las respuestas correctas son más de ocho, tienes posibilidades de leer más palabras por minuto; en cambio, si aciertas menos de ocho respuestas, entonces es necesario reducir el tiempo de lectura con el fin de comprender mejor. Para calcular la cantidad de palabras que lees por segundo debes multiplicar los minutos que hayas utilizado por sesenta, luego dividir la cantidad de palabras por los segundos utilizados. Ejemplo: Tenemos la primera lectura con 208 palabras y supongamos que el tiempo que te llevó leerla fue de 2:15; lo cual te da 135 segundos. Luego, leíste 1.54 palabras por segundo (208 dividido entre 135). Además de verificar la rapidez con la que puedes comprender un texto, conviene que después apliques la estrategia de las preguntas que hacen en la lectura crítica y de ese modo les saques mayor provecho. PRIMER EJERCICIO DE LECTURA Elabora un tríptico con los indicadores más importantes para realizar una lectura de comprensión y velocidad. Antes de iniciar tu lectura, mira la hora en tu reloj y anótala en tu cuaderno, incluidos los segundos.