Cómo perder peso de forma saludable y definitiva Por Jaime García Birón Médico Nutriólogo [email protected] Que Chile es un país gordo nos lo dicen las estadísticas y lo repiten los expertos en nutrición: “los chilenos no nos alimentamos bien”. Desde quienes sufren obesidad severa hasta aquellos con algunos kilos de más, buscan la forma de verse mejor y sentirse más saludables. El Dr. Jaime García Birón, médico nutriólogo, nos devela en este artículo las claves para perder peso de forma saludable y definitiva. Nadie dijo que fuera fácil. El tratamiento de la obesidad debe ser idealmente realizado por un médico nutriólogo -es decir, un médico cirujano especialista en nutrición clínica-, que debe realizar un diagnóstico exacto del grado y tipo de obesidad, incluyendo una anamnesis (examen clínico que reúne todos los datos personales, hereditarios y familiares del paciente), un examen físico y las evaluaciones de laboratorio que sean pertinentes. Se deben identificar además las comorbilidades asociadas (enfermedades relacionadas con el exceso de peso) o factores de riesgo de importancia, así como los factores alimentarios, metabólicos, psicológicos y de actividad física de cada individuo, con el fin de poder establecer una conducta de tratamiento, que siempre debe ser individualizada. Generalmente es necesario realizar un trabajo en equipo, es decir, si es necesario se puede contar con la asesoría de un psicólogo, un kinesiólogo u otra especialista médico, como un cardiólogo o un endocrino. El tratamiento tiene dos etapas con objetivos claros: bajar de peso adecuadamente, y conseguir mantener el peso logrado -y definido como saludable-. La velocidad de baja de peso y las metas deben ser individuales, estimándose una baja semanal de entre 500 a 1200 gramos, e intentando bajar al menos entre un 5% a un 10% del peso inicial en un tiempo promedio de 3 a 4 meses. El tratamiento tiene dos etapas u objetivos claros: bajar de peso adecuadamente, y conseguir mantener el peso logrado -y definido como saludable-. La velocidad de baja de peso y las metas deben ser individuales, estimándose una baja semanal de entre 500 a 1200 gramos. Los pilares fundamentales del tratamiento son: 1. 2. 3. 4. 5. Esquema de alimentación hipocalórico (bajo en calorías) personalizado Manejo conductual Actividad física Medicamentos (sólo los aceptados) Medidas de excepción como la cirugía Medicamentos aceptados Existe reconocimiento por parte de la comunidad científica de los siguientes principios activos para el manejo de la obesidad: orlistat, sibutramina, rimonabant, y coadyuvantes como sertralina y fluoxetina, todos bajo supervisión y receta médica, ya que algunas pueden presentar contraindicaciones o serios efectos secundarios. Debe insistirse en evitar al máximo la automedicación, y cuando sea necesario, consultar a un médico especialista que pueda realizar un adecuado diagnóstico y tratamiento a cada paciente en particular. Sustancias sin efecto demostrado Existen una serie de productos ampliamente publicitados y que carecen de evidencia científica para el efecto que dicen tener. De acuerdo a estudios publicados en importantes revistas científicas a nivel mundial, las siguientes sustancias NO tienen efecto en quemar grasas, ni en disminuir el apetito, ni en aumentar la masa magra: derivados del cromo; piruvato de calcio; carnitina; ácido hidroxicítrico y espirulina entre otros. Riesgos de la cirugía La cirugía es una medida que debe considerarse excepcional, y solamente después que haya fracasado el tratamiento con una alimentación hipocalórica y con medicamentos permitidos. La cirugía es de alto costo y tiene riesgos. No son pocos los casos donde los pacientes han tenido graves secuelas o incluso han perdido la vida. La población no debe dejarse seducir por médicos que pudieran promover este tipo de cirugías como la fórmula rápida e ideal para bajar de peso. Si el tratamiento con dietas ha fracasado debe ser el equipo de nutriólogos, psiquiatras y cirujanos quienes decidan la eventual cirugía y no sólo el cirujano, como a veces lamentablemente ocurre. En relación al globo intragástrico, la Asociación Chilena de Nutrición Clínica ha definido que su utilidad es limitada y sólo tendría indicación en el obeso mórbido extremo y no como se ha planteado, en la obesidad leve o moderada. Punto Vital Mayo 2007 ©