MÓDULO: ACTO ADMINSITRATIVO Derechos Reservados Alcaldía Mayor de Bogotá. UNIDAD CUATRO ATRIBUTOS Y FIRMEZA DEL ACTO ADMINISTRATIVO Presentación La administración espera que una vez comunicado, por los medios legales pertinentes, el acto administrativo, este se ejecute. Para que esto se pueda realizar, se requiere que no haya mas oportunidades para sus destinatarios de impugnar lo decido en el acto, por lo cual es necesario que esté revestido de una serie de atributos, que efectivamente permitan se pueda realizar lo ordenado. Estos atributos son parte del contenido de estudio de esta unidad, como son la presunción de legalidad y la firmeza del acto. Pero en un Estado de derecho, donde existe un ordenamiento jurídico que obliga tanto al Estado y sus entidades, es decir a la administración pública en todas sus manifestaciones territoriales y funcionales, la administración no debe y no puede actuar arbitrariamente; por lo tanto, debe permitir que los actos que afectan a una persona en particular o a la comunidad en general, puedan ser impugnados o atacados ya sea ante la propia administración (con el agotamiento de la vía gubernativa) o ante el órgano jurisdiccional del Estado (ante lo contencioso administrativo), cuando los destinatarios de la decisión consideran que este se expidió vulnerando las normas en las que se debía fundamentar. En esta unidad se exponen los diferentes medios de impugnación ante la administración, como es la vía gubernativa y la revocatoria directa, al igual que las acciones contenciosas administrativas que se pueden incoar contra los actos administrativos. El objetivo de la unidad es mostrar al funcionario público de las entidades públicas distritales los atributos del acto administrativos y los medios de que dispone el afectado para impugnarlos, con el fin de que adquiera los conocimientos y destrezas para afrontar en debida forma las posibles impugnaciones a los actos que el o su entidad expide. 1. Atributos del acto administrativo. El acto administrativo, goza de unas características propias, que lo hacen único, tanto para la administración como para los particulares, éstos caracteres del acto administrativo se entiende como una cualidad, un modo esencial de ser, que lo distinguen, a los que se denominan atributos. Esos atributos son: presunción de legalidad, ejecutividad, ejecutoriedad, estabilidad, revocabilidad e impugnabilidad. Son propios del acto administrativo como prerrogativas dado su origen, ubicada en el órgano estatal público, por ello, se enlazan e influyen recíprocamente. Estos atributos derivan de la juridicidad del Estado en general y de la Administración en particular, es decir del principio de legalidad, según el cual la actividad estatal debe estar sometida a la ley. Es decir que estos atributos, provienen de la administración pública y se introducen en el acto administrativo concreto como una consecuencia de la propia actividad bajo la ley (juridicidad). Son caracteres que se encuentran en los sujetos creadores, que hacen que los actos administrativos, reciban estos atributos y no los creen. 1.1 Presunción de legalidad. Todo acto de la administración pública se le considera legal, o conforme a derecho. Es decir que, consiste en suponer que todo acto administrativo ha sido expedido de acuerdo con el ordenamiento jurídico, conforme a las reglas para su creación, tanto desde el punto de vista material, como lo MÓDULO: ACTO ADMINSITRATIVO Derechos Reservados Alcaldía Mayor de Bogotá. relacionado con su contenido desde el punto de vista formal, en lo concerniente a sus elementos, la competencia, requisitos, trámites, oportunidad y demás aspectos sustantivos y adjetivos para la expedición de cada acto administrativo. El Consejo de Estado la ha definido en varias ocasione el concepto de presunción de legalidad como la prerrogativa de que gozan los actos administrativos al desarrollarse y proyectarse en la actividad de la administración, los cuales no pueden desviarse o salirse de las reglas que los rigen dando seguridad jurídica, estabilidad normativa, paz y tranquilidad a los asociados y al ordenamiento y a la administración. Esta presunción implica, entonces, que un acto administrativo siempre debe considerarse acorde con el ordenamiento jurídico en todos los aspectos o elementos que lo conforman, esto es, que lo expidió el órgano o funcionario autorizado para ello (con competencia), con el objeto o contenido previstos en las normas superiores pertinentes y dentro del marco de las mismas, por las causales o motivos necesarios, con la forma y fines aplicables al caso. La jurisprudencia ha hecho reconocimiento a este atributo, pero atendiendo a los elementos de existencia y validez del acto administrativo. Fundamento. La doctrina ha expuesto varias teorías para explicar el fundamento de la presunción de legalidad. Para unos se trata de un privilegio de la administración pública; otros sustentan que es la calidad del sujeto que crea el acto (la administración) que le otorga al acto esa cualidad y para otros, es consecuencia del Estado Social de Derecho y por lo tanto, del principio de legalidad; como consecuencia del ordenamiento jurídico positivo, o como consecuencia de otro carácter del acto administrativo: el su obligatoriedad y ejecutoriedad. Efectos. El principal efecto, es el de que el acto administrativo debe cumplirse (condición que se llama “ejecutividad”), es decir, que el acto administrativo es obligatorio tanto para la administración como para los administrados, porque se crean efectos jurídicos, así el acto este viciado, mientras no sea anulado o suspendido en la jurisdicción contenciosa administrativa en declaración judicial este no perderá sus efectos. Se traduce en presunción de autenticidad del instrumento que contenga el acto administrativo, y por tanto la presunción de veracidad del contenido del mismo. Las declaraciones y hechos que en ellos consignen las autoridades que los expidan se toman como ciertos. 1.2 Ejecutividad. Es la fuerza normativa, general o particular, de lo dispuesto en el acto administrativo, que lo hace imperativo para la autoridad así como para los afectados. Conlleva el deber de cumplirlo y de hacerlo cumplir a quien corresponde, tanto en relación con los derechos como con las obligaciones que en él se determinan. Por ello es equivalente a obligatoriedad del acto. La ejecutividad tiene como condición necesaria la firmeza del acto administrativo; es decir que contra ellos no haya forma de interponer ni recursos ante la propia administración o las acciones correspondientes ante la jurisdicción de lo contencioso administrativo, según se puede deducir del artículo 66 del C.C.A., al decir que los actos administrativos en firme son obligatorios mientras no pierdan su fuerza ejecutoria. Los actos administrativos adquieren firmeza Art. 62 del C.C.A. A su vez la Corte se ha pronunciado al respecto diciendo que la administración esta obligada al cumplimiento y obligatoriedad de las normas de acuerdo al ordenamiento jurídico y su jerarquía. 1.3 Ejecutoriedad. También llamada fuerza ejecutoria; es la aptitud que tiene el acto administrativo en firme para que la administración, sin necesidad de requisito o Comentario [AF1]: “Como lo dice la ley, la doctrina y la jurisprudencia, uno de los atributos del acto administrativo, entendido como emisión de la voluntad de un organismo o entidad pública con el propósito de que produzca efectos jurídicos, es la denominada “presunción de legalidad”, que también recibe los nombres de “presunción de validez”, “presunción de justicia” y “presunción de legitimidad”. Se trata de una prerrogativa de que gozan los pronunciamientos de esa clase, que significa que, al desarrollarse y al proyectarse la ... [1] actividad de la Administración, Comentario [AF2]: “La presunción de legalidad o prerrogativa de legalidad que ostenta todo acto administrativo hace vocación a sus elementos, valga decir, al sujeto, a la competencia; al objeto, a la forma del mismo, pero no su realización u operatividad ejecutoria”. (Consejo de Estado, Sección Segunda, Febrero 23 de 1994) Comentario [AF3]: Estado Social de Derecho: Característica del estado basado en que su razón de ser y de us autoridades se encuentran en el servicio de la comunidad, en su prosperidad y desarrollo en el respeto de la dignidad humana, definida por la Constitución, amparada y desarrollada por el orden jurídico, al cual se deben someter” Álvaro Mendoza Palomino. Teoría y sinopsis de ... [2] la Constitución de 1991. Comentario [AF4]: “El principio de la legalidad es la base de la actividad de la administración y de él fluye la presunción, garantía o prerrogativa según la cual las autoridades proceden conform e a la ley, o más exactamente obedeciendo al orden jurídico aplicativo en cuanto atañe a la esencia del acto administrativo como expresión unilateral de voluntad de administración” Consejo de Estado, Sentencia ... [3] Sección Segunda, Agosto 04 Comentario [AF5]: “El principio que rige la operatividad del Estado de Derecho y que hace posible el funcionamiento de las instituciones es el de la obligatoriedad y ejecutividad de las normas que dentro del esquema de la organización política, profieren los organismos y las autoridades competentes, según la Constitución. En general, la norma jurídica, ... [4] independientemente de su MÓDULO: ACTO ADMINSITRATIVO Derechos Reservados Alcaldía Mayor de Bogotá. formalidad adicional, pueda ejecutar o efectuar de inmediato las actuaciones necesarias para su cumplimiento, que pueden ser jurídicas como los actos de ejecución formal (desvinculación del cargo), mixtas (operaciones administrativas), materiales (demoliciones), aún contra la voluntad de los interesados. (Art. 64 C.C.A). Tanto la jurisprudencia como la doctrina, establecen que se hace efectivo el mandato jurídico, de manera obligatoria, pudiendo ser en forma coactiva (multas, arrestos, embargos); por lo tanto, es una prerrogativa de la administración pública, que proviene de un acto unilateral de ésta, dándole exigibilidad u oponibilidad y de ser necesario ejecución forzosa, siendo esta última una instrumentación coactiva para darle efectividad al acto administrativo, en ciertos casos y cuando el administrado no le da voluntario cumplimiento al mandato. 1.4 La Estabilidad de actos creadores de derechos particulares. Este atributo, denominado igualmente inmutabilidad o tangibilidad del acto administrativo, consiste en la limitación que tienen las autoridades administrativas para variar los actos administrativos en perjuicio del titular del derecho o para revocarlos una vez se encuentren en firme, limitación que viene dada por la sujeción a requisitos o condiciones taxativamente señaladas en la ley, según el caso. La estabilidad, únicamente se predica de actos administrativos creadores de situaciones jurídicas que reconozcan o confieran derechos particulares y concretos (a sujetos individualizados). Requisitos: Que se trate de actos administrativos particulares que reconozcan o confieran derechos, es decir, que declaren la existencia de un derecho adquirido o que le concedan a un particular un determinado derecho que no tenía (un permiso, licencias). Que el acto administrativo haya sido notificado al beneficiario del mismo, de lo contrario puede ser objeto de retiro o determinación diferente por la administración. Que el acto administrativo se encuentre en firme (ejecutividad y ejecutoriedad), es decir, poderlo hacer cumplir por la administración, pues el administrado no tiene mas oportunidad para su impugnación. Que sea un acto administrativo expreso; de ser tácito, que no se hayan empleado medios ilícitos para la ocurrencia del silencio administrativo positivo. Que no se den las causales de casos especiales que autorice a las autoridades administrativas a dejar sin efecto el correspondiente acto administrativo (como en las licencias ambientales). 1.5 Revocabilidad. El vocablo revocar es “volver a llamar”, implica sustitución de un acto administrativo por otro, pues los actos administrativos aunque válidamente producidos pueden revocarse, si el interés público o las razones de conveniencia y oportunidad lo imponen, siendo la actividad de la administración fundamentalmente movible, se enfrenta a situaciones cambiantes y debe ser capaz de adaptarse a ellas; es decir que tiene la facultad de revocar sus propios actos lo que tiene como efecto el anular el acto desde su origen borrando sus consecuencias jurídicas futuras y pasadas. Por lo tanto, el acto administrativo puede ser derogado, si es general, o revocado en cualquier tiempo por las autoridades administrativas, más si son actos discrecionales. Incluso, la doctrina admite, que los actos administrativos particulares reglados que se expiden en perjuicio de los particulares puedan ser revocados en su favor sin su consentimiento. Comentario [AF6]: Articulo 64. “ Carácter Ej ecutiv o y Ejecutorio de los Actos Adminis trativos. Salvo norma expresa en contrario, los actos que queden en firme al concluir el procedimiento administrativo serán suficientes, por sí mismos, para que la administración pueda ejecutar de inmediato los actos necesarios para su cumplimiento. La firmeza de tales actos es indispensable para la ejecución contra la voluntad de los interesados” Código Contencioso Administrativo. Comentario [AF7]: “La fuerza ejecutoria del los actos administrativos a que se refiere la disposición transcrita es la capacidad de que goza la administración para hacer cumplir por sí misma sus propios actos, es decir, que tal cumplimiento no depende de la intervención de autoridad distinta a la de la misma administración..().. La jurisdicción coactiva de que se ha investido a ciertos funcionarios de la Administración….()..entendido como un privilegio exorbitante en favor de la Administración por el cual no tiene que acudir a la jurisdicción para acudir al pago de lo adeudado, sino que ella misma puede hacerlo directamente mediante el pronunciamiento establecido para tal efecto” Consejo de Estado, Sección Quinta, diciembre 5 de 1995. MÓDULO: ACTO ADMINSITRATIVO Derechos Reservados Alcaldía Mayor de Bogotá. 1.5.1 Revocatoria directa. Está reglada en el título V, artículos 69 a 74 del C.C.A; la revocación de los actos administrativos, encierra una de las formas de extinción de ellos. Su significado filosófico está ligado a dos ideas bien definidas, pero en esencia distintas. De una parte, la necesidad de preservar y proteger la situación jurídica de carácter individual y concreto, originada mediante un acto administrativo, conocido esto como sistema de “garantías administrativas”; y de otro lado, la necesidad de mantener el privilegio de la administración de hacer cesar los efectos del acto administrativo, por las prerrogativas del poder jurídico­administrativo, que está supeditada al principio de legalidad, que limita esa prerrogativa, por cuanto no puede ser alterado sino conforme con las reglas que le dan operatividad justa y eficaz a la revocación directa (art. 69 y 73 C.C.A.). La revocatoria directa puede ser de dos clases: 1) Como mecanismo que obra a petición de parte, utilizado directamente por el interesado ante la autoridad que profirió al acto administrativo o ante su inmediato superior, con fundamento en las causales taxativas que señala la normatividad, y que la convierte en instrumento para la defensa de sus intereses cuando el acto no sea susceptible de impugnación recursiva ordinaria alguna; por ello, cuando se ejerce a petición de parte contra actos administrativos creadores de situaciones jurídicas subjetivas, concretas o particulares, se trata de un recurso de naturaleza excepcional; y, 2) La que realiza o decreta la administración de oficio, como la potestad unilateral (revocatoria directa de oficio), para hacerle perder eficacia a sus propios actos, también por las causales instituidas, para salvaguardar el ordenamiento jurídico. Desde el punto de vista de la actividad asumida por la administración, la revocación es una positiva alternativa a prevención de extinción del acto administrativo, especialmente para el creador de situación general. Sí el acto crea o modifica una situación jurídica individual, o ha reconocido un derecho concreto, no procede la revocación oficiosa sin el consentimiento expreso y escrito del respectivo titular (art. 73, inciso 1º), lo cual limita la potestad revocadora de la administración y únicamente le abre la posibilidad de procurar su anulación por “vía de lesividad”, es decir, acudiendo al proceso contencioso­administrativo. En ambas situaciones, de oficio o a petición de parte, la de la revocación por su carácter excepcional, tiene que ver con la ejecutoriedad del acto que en el régimen colombiano, permanece íntegra, pues la formulación de la revocación no produce efectos suspensivos con amparo en la “cosa juzgada administrativa”, pero que al ser revocado le hace perder fuerza ejecutoria. La revocación implica un cambio sustancial en el acto administrativo que puede ser total o parcial en el contenido del mismo; es total en casos de ilegalidad o inconstitucionalidad, agravio o inconveniencia; y es parcial cuando se trate de corregir simples errores que no incidan en el sentido de la decisión, cambios formales (art. 69 y 73 inciso 2º). 1.5.2 Características de la revocación. a) Es una figura jurídica para corregir un error, agravio, ilegalidad o inconveniencia de la administración al proferir el acto administrativo. b) No esta estatuida como un recurso extraordinario de agotamiento de la vía gubernativa, ni puede interponerse simultáneamente con los recursos de Comentario [AF8]: “Se trata de un mecanismo unilateral de la administración que le otorga el legislador, con el fin de revisar sus propias actuaciones y dentro del contexto de la actuación oficiosa, sacar del tránsito jurídico decisiones por ella misma adoptadas” SANTOFIMIO, Jaime Orlando. Tratado de Derecho Administrativo, tomo II, 3ª edición., Universidad Externado de Colombia, Bogotá. 1998. Pág., 226. MÓDULO: ACTO ADMINSITRATIVO Derechos Reservados Alcaldía Mayor de Bogotá. ésta vía (reposición y/o apelación), ni ante el funcionario que profirió el acto y su inmediato superior. c) Por razones de economía procesal la revocación no genera nuevos recursos. d) La petición de revocación de un acto, ni la decisión que sobre ella recaiga, reviven los términos para recurrir en demanda contencioso­administrativa. Así por ejemplo, un peticionario tiene dos meses para presentar demanda ante la jurisdicción, pero decide promover la solicitud de revocatoria, si el fallo no esta dentro de los meses, pierde la oportunidad de ir a vía jurisdiccional a incoar la acción respectiva. e) Por no ser técnicamente un recurso ordinario del procedimiento gubernativo, la inercia de la administración o morosidad en contestar la solicitud de revocación, no da lugar a la aplicación del silencio administrativo (art.72). La jurisprudencia contencioso­administrativa ha establecido la diferencia existente entre la revocación directa y los recursos gubernativos, al señalar: DIFERENCIAS Revocatoria directa Recursos de la vía gubernativa No podrá operar si se han Los recursos gubernativos se ejercitado los recursos de la deciden a solicitud de parte: del vía gubernativa (Art. 70). afectado. Puede proceder a petición o de oficio. Únicamente interesado. Puede operar en cualquier tiempo inclusive con actos en firme o aun cuando se haya acudido a la jurisdicción contenciosa administrativa, pero no se ha proferido auto admisorio de la demanda. Procede contra toda clase de actos generales o particulares. Deben ser interpuestos dentro de los (5) días siguientes a la notificación personal o por edicto o a la publicación del acto objeto de los mismos. Se puede pedir ante el mismo funcionario que expidió el acto o su inmediato superior. Sólo procede cuando se dan las causales previstas en el artículo 69 del C.C.A. La revocación directa de los actos de carácter particular está sujeta a normas especiales contenidas en los artículos 73 y 74. 1.5.3 Procedencia de la revocación. a solicitud del La vía gubernativa no procede contra actos de carácter general, de trámite o de ejecución. Los recursos solamente se pueden solicitarse así: el de reposición ante el mismo funcionario que expidió el acto y los de apelación y queja ante el inmediato superior. En la vía gubernativa se puede impugnar los actos por cualquier tipo de inconformidad. En la vía gubernativa no hay restricción alguna MÓDULO: ACTO ADMINSITRATIVO Derechos Reservados Alcaldía Mayor de Bogotá. La revocatoria directa procede (C.C.A., art. 69): 1) Contra los actos administrativos, cuando sean: a) manifiestamente contrarios a la Constitución Nacional o a la ley (por razones de legalidad). Las razones de legalidad se orientan al acto imperfecto o inválido en su creación o de formación; esto es, que adolece de vicios generadores, en el fondo, de anulación; cuando el vicio no reviste esta entidad, se habla de corrección, en cuyo caso procederá su revocación parcial, por simples errores que no incidan en el sentido de la decisión; b) Contra actos que no estén conformes con el interés público o social, o atentan contra él (por razones de mérito, oportunidad o conveniencia). Es decir, que de su expedición se deriven motivos que comprometan el orden público o el interés general, que imponen su modificación o extinción para establecer dichas situaciones. Es un acaso típico de prevalencia del interés general sobre el privado, pese a que se persiga en la mayoría de los casos, la satisfacción de un interés particular, pues por disposición constitucional, cuando los motivos de utilidad pública o interés social resultaren en conflicto los derechos de los particulares con la necesidad por ella reconocida, el interés privado deberá ceder al interés público o social; y c) Cuando con la declaración de voluntad administrativa se cause agravio injustificado a una persona (razones de legalidad ­ equidad); esto es, que el acto cause perjuicios al particular, en su relación daño­ilegitimidad, para conciliar, con su sustitución, las relaciones jurídico­administrativas, entre administración y el particular lesionado de manera grave y directa en sus derechos e intereses. Igualmente, procede la revocación, cuando fuere evidente que el acto ocurrió por medios ilegales (Art.73, inciso 2º). 2) Cuando el peticionario no haya ejercido contra el acto administrativo los recursos de la vía gubernativa (C.C.A., Art. 70). Teniendo oportunidad el afectado o interesado consintió en no hacer uso de los recursos de reposición y apelación o el de queja de ser necesario. 3) En cualquier tiempo, inclusive contra los actos administrativos en firme, se presentan dos situaciones: Una primera, donde el ejercicio de esta medida no tiene limite de tiempo o plazo de caducidad o preclusivo, como regla general, porque hay excepciones como en el limite que estipulan los casos tributarios; y en segundo lugar, el tiempo de solicitarla y resolverla está sujeto y limitado al momento procesal de la admisión de la demanda, cuando se activado la vía jurisdiccional. 4) En los casos del artículo 73, incisos 2º y 3º, se establecen los recursos para su procedencia. Habrá lugar a la revocación de esos actos, cuando resulten de la aplicación del silencio administrativo positivo, si se dan las causales previstas en el artículo 69, o si fuere evidente que el acto ocurrió por medios ilegales. Además, siempre podrán revocarse parcialmente los actos administrativos en cuanto sea necesario para corregir simples errores aritméticos, o de hecho que no incidan en el sentido de la decisión. 5) Para que la revocación de los actos de carácter particular y concreto proceda, debe adelantarse la actuación administrativa de acuerdo con las previsiones de que tratan los artículos 28 y concordantes del C.C.A. (Art. 74). Se tiene por regla general de irrevocabilidad de los actos administrativos que hayan creado o modificado una situación jurídica de carácter particular y concreto o reconocido un derecho de igual categoría, no podrán ser revocados sin el consentimiento MÓDULO: ACTO ADMINSITRATIVO Derechos Reservados Alcaldía Mayor de Bogotá. expreso y escrito del respectivo titular del derecho, para cuyos efectos deberá comunicarse a éste la existencia de la actuación y el objeto de ella, como también citarse a terceros si es necesario, para el cumplimiento de los principios de publicidad y contradicción. De todas maneras, tratándose de revocación como instrumento de la administración, siempre deberá generarse una actuación administrativa, donde se brinden la totalidad de garantías establecidas en el Código Contencioso Administrativo, y en el artículo 29 (el debido proceso) de la Constitución. 1.5.4 Revocación respecto a terceros determinados o indeterminados. Si al tercero determinado o indeterminado no se le cita y, consecuentemente, no es escuchado durante la actuación administrativa, es decir, que no hubo la comunicación entre la administración y éstos (como sujetos que también soportan los efectos de la decisión) y que les permitiera conocer la existencia del acto administrativo y la oportunidad para impugnarlo, pueden darse los siguientes supuestos: Que durante el procedimiento administrativo se le nombra apoderado de oficio, con el cual se surtiría legalmente la actuación administrativa y la notificación de la decisión. En caso de que no ocurra lo anterior, y acontecida la situación omisiva mencionada, al enterarse de la expedición del acto puede solicitar que se le notifique personalmente o notificarse por conducta concluyente, ejerciendo los recursos procedentes Que la omisión convalide la procedencia de la revocación directa, por violación del debido proceso y del derecho de defensa, máxime cuando el interesado no tiene por qué sufrir las consecuencias de las deficiencias de la administración. 1.6. Impugnabilidad. Es la posibilidad de controvertir todos los actos administrativos ante la misma administración (en sede administrativa), cuando se trata de actos particulares que ponen fin a una actuación administrativa y, en general, ante la jurisdicción contenciosos administrativa mediante las acciones pertinentes. En cualquier caso, los actos administrativos son susceptibles de ser cuestionados en su validez, de donde la impugnabilidad viene a ser una característica común de los mismos, sin excepción alguna, es la consecuencia lógica, o mejor, la contrapartida necesaria de la presunción de legalidad, que puede ser desvirtuada. 1.6.1. Ante la Administración por la vía gubernativa. Es una figura jurídica, que busca que la administración tenga la oportunidad en primer lugar de reaccionar o reflexionar sobre sus propias decisiones; por eso, es allí donde acude el interesado como primer lugar, para que se le revise a través de los recursos pertinentes la decisión proferida y obtenida con la petición en interés particular. Para un mejor entendimiento del tema la normatividad, como en la doctrina y en la jurisprudencia, brindan un concepto en estricto sentido, y otro en sentido amplio. 1.6.1.1. La vía gubernativa en estricto sentido. Es la etapa del procedimiento administrativo en la que se impugna ante la propia Administración la decisión que le pone fin a la actuación administrativa, decisión denominada el acto administrativo definitivo. La vía gubernativa está constituida por los recursos de reposición y apelación, u otros equivalentes (como el de reconsideración en materia tributaria), que procedan ante la propia Administración contra los actos administrativos que ponen fin a una MÓDULO: ACTO ADMINSITRATIVO Derechos Reservados Alcaldía Mayor de Bogotá. actuación administrativa iniciada por el ejercicio del derecho de petición en interés particular, en cumplimiento de un deber legal o de forma oficiosa, y mediante los cuales, aquélla puede revisar la juridicidad o legitimidad de sus propios actos. 1.6.1.2. La vía gubernativa en sentido amplio. Se hace equivalente al mecanismo de la decisión previa, que contempla las legislaciones como la francesa, que consiste en obtener previamente de la autoridad competente por pronunciamiento sobre futuras pretensiones de cualquier persona, relacionadas con un conflicto originado en cualquier actuación de la Administración; es decir por un acto administrativo, por un hecho, por una omisión o en general por una actuación realizada por una autoridad estatal o por un particular, en ejercicio de función administrativa. La decisión previa se da entonces de varias formas: una es la de los recursos administrativos, cuando se trata de actos administrativos, y que es nuestra vía gubernativa en estricto sentido, y otra es la de la reclamación, tratándose de otro tipo de actuación administrativa: Hechos, vía de hecho, operación, etc., que usualmente da lugar a reclamar indemnización de perjuicios, la cual no está previsto en la legislación colombiana en lo que la jurisdicción contencioso administrativa se refiere. 1.6.1.3. La vía gubernativa impropia. Existe en el ordenamiento jurídico una forma de vía gubernativa cuyo agotamiento, es obligatorio para poder acudir ante los jueces. Es la que deben agotar los trabajadores oficiales, señalada en el artículo 6º del Código Procesal del Trabajo. Se aplica a conflictos jurídicos originados en contratos de trabajo celebrados con el Estado, que da lugar a la categoría de servidores públicos denominada “trabajadores oficiales”. Esta forma de vía gubernativa se surte mediante memorial que el potencial demandante debe presentar ante la entidad a demandar, el cual debe contener el requerimiento de la satisfacción de pretensiones, cuyo contenido determina el de las pretensiones de la posible demanda judicial por el conflicto de que se trate; porque ésta debe estar en consonancia con lo requerido o reclamado a la entidad. 1.6.1.4. Finalidad de la Vía Gubernativa. Tiene como finalidad permitir que quien expidió un acto administrativo revise a instancia de parte interesada la conformidad del acto con el ordenamiento jurídico que le es aplicable, de modo que pueda aclarar, modificar o revocar dicho acto si es del caso. Se da así una autotutela jurídica que busca facilitarle al emisor del acto o a su superior, enmendar o corregir sus errores o desaciertos de hecho o de derecho que pudieren afectarlo en el momento de su formación o nacimiento a la vida jurídica, y de esta manera evitarle al Estado, en lo posible, procesos judiciales por causa del mismo acto. Es un privilegio a favor de la administración, por cuanto, los actos o decisiones administrativas que requieren el agotamiento de la vía gubernativa, no pueden ser impugnadas judicialmente sin el cumplimiento de este presupuesto. Además, de permitirle a las autoridades la posibilidad de conocer antes que el juez respectivo, la inconformidad, y pretensiones del eventual demandante, en relación con tales actos, y así anticiparse a la decisión judicial en la enmienda de sus errores de hecho o de derecho, le abre el camino para la firmeza de aquéllos, e incluso, para la consolidación definitiva de las situaciones respectivas en caso de que debiéndose agotar, el afectado o internado no lo haga, perdiendo así la oportunidad de impugnarlo en la jurisdicción contencioso administrativa. Asimismo, respecto al afectado por el acto administrativo, la vía gubernativa cumple una doble función, una en su favor, consistente en un medio de defensa, al darle la oportunidad para solicitar a la Administración de revisar, en lo que le interesa, los actos administrativos, pudiendo impugnar tales actos ante ésta, con el fin de que rectifique las irregularidades que le afecten. La otra es en su contra, pues, hace de la vía gubernativa una carga procesal que debe agotar, para acceder a la justicia Comentario [AF9]: “Permitir a la administración la corrección de us propios actos mediante su modificación, aclaración o revocatoria y, a los administrados la garantía de us derecho por aquella, sin tener que acudir a la instancia judicial. Existe además la necesidad del agotamiento de la vía gubernativa, como un requisito previo, establecido por la ley, para acudir a la jurisdicción contencioso administrativa, lo que implica, nada menos que su debido agotamiento es requisito indispensable para el ejercicio, en los caos de la ley, del derecho fundamental al libre acceso a la justicia. La razón de la existencia legal del agotamiento señalado, es la de que administración revise los reparos que se le formulen a su actuación, antes de que conozca de ellos quién tiene la competencia para juzgarlos a fin de que pueda enmendarlos, cuando sea oportuno” Corte Constitucional, Sentencia C­ 339 de 1996. MÓDULO: ACTO ADMINSITRATIVO Derechos Reservados Alcaldía Mayor de Bogotá. contencioso administrativa, y así su demanda contra dicho acto pueda ser admitida y sometida a fallo de fondo por los jueces respectivos (artículos 135 del C.C.A) Características La vía gubernativa implica ante todo una actividad de examen jurídico, no obstante la posibilidad de que en algunos casos se valore la convivencia del acto administrativo. Su objeto de examen es el acto impugnado, de modo que adquiere cierto tinte de actividad jurisdiccional, pues en ese momento la administración hace lo mismo que un juez, un pronunciamiento definitivo para la administración, pero no para el acto administrativo y ahí radica la diferencia con la jurisdicción, pues la decisión del juez pone fin a la controversia constituyéndose en cosa juzgada. Es reglada en alto grado, debido a la sujeción a término y requisitos, tanto de forma como de contenido, para su uso y para su decisión, todo lo cual la hace preclusiva, es decir, no se pueden retrotraer o revivir, o reponer términos, salvo norma en contrario. Pues, se interponen los recursos dentro de los cinco días siguiente de notificado la decisión o el acto administrativo al particular. 1.6.1.5. Estructura de la vía gubernativa. En la vía gubernativa se pueden presentar las siguientes situaciones: a) Que el acto no sea susceptible de recursos. Es lo que ocurre en los actos administrativos que no ponen término a una situación administrativa, como son los actos administrativos generales, los previos, de trámite, discrecionales, los que requieren aplicación inmediata o que en lugar de tener que ser notificados son apenas objeto de comunicación, así como cuando es una respuesta al ejercicio del derecho de petición en interés general. b) Que sólo pueda ser posible de recurso de reposición. Es la situación común y general de los actos administrativos proferidos por autoridades que no tienen superior jerárquico y que ponen fin a una actuación administrativa, como es el caso de los alcaldes, gobernadores, jefes o directivos de autoridades descentralizadas. c) Que procedan los recursos de reposición, apelación o queja. Es la regla general para los actos administrativo, cuando el emisor del acto tiene superior jerárquico (art. 50 del C.C.A.), de suerte si no hay disposición en contrario o distinta, aplicable al caso, deberá darse aplicación a esta regla; por tanto, el acto es susceptible de los recursos de reposición y apelación, y así debe hacérsele saber al interesado a quien le sea notificado, en forma personal, la decisión de la administración. El recurso de queja es un recurso que utiliza el afectado en virtud de la negativa a acceder al recurso de apelación, su solicitud será ante el superior jerárquico, del funcionario que emitió el acto administrativo. 1.6.1.6. Etapas de la vía gubernativa. Cuando los actos administrativos son susceptibles del o de los recursos (reposición, apelación y/o queja), se inicia la vía gubernativa, desarrollando diferentes etapas: MÓDULO: ACTO ADMINSITRATIVO Derechos Reservados Alcaldía Mayor de Bogotá. A CT TU UA A CI ÓN N A A DM IN NI I ST RA A TI VA A A C C IÓ D MI S TR T IV IN IC C IA Ó N I NI I A CI C IÓ TR Á MI TE E T RÁ M IT DE SI IC CI IÓ Ó N D ES PO N P O NE N E FI F IN PU UB B LI CI ID DA A D P L IC NO T IF IC CA AC CI IÓ ÓN N N OT I FI CO C OM M UN U NI IC CA AC CI IÓ Ó N VI A G GU UB B ER NA A TI VA A V IA E RN T IV IN IC CI IA AC I NI C IÓ I Ó N PO R P OR RE CU UR RS SO OS S R EC TR ÁM T RÁ M IT I T E DE SI IC CI IÓ Ó N D ES NO FI IC CA AC CI IÓ ÓN N O TI T IF N PU BL IÓ Ó N P UB L IC I C AC A CI Iniciación de la vía gubernativa Presentación y admisión del recurso. La iniciación de la vía gubernativa implica siempre la intervención de parte interesada (el afectado con la decisión), y se da con la interposición del o los recursos que procedan, con el objeto de que la decisión que pone fin a la actuación administrativa se aclare, modifique o revoque. Para que la presentación de los recursos pueda dar origen a la vía gubernativa, se deben cumplir los siguientes requisitos: § Interés o legitimación. Sólo el interesado puede hacer uso de los recursos, es decir, quien resulte afectado directa y particularmente por lo decidido en el acto. Puede hacerlo de manera personal o por intermedio de apoderado, que para el efecto debe ser abogado. Cuando hay pluralidad de interesados, el recurso de uno de ellos no aprovecha a los no recurrentes, respecto de quienes, por lo demás, el acto cobra firmase en lo que le es desfavorable. § Presentación personal. Los recursos deben presentarse personalmente por el interesado o su apoderado, lo cual significa, un rigor procesalista que genera un riesgo para el derecho de defensa de los afectados, toda vez que no siempre quienes reciben los recursos se preocupan de verificar si está siendo presentado por el interesado o no, debe dejarse la constancia respectiva en uno u otro sentido. § Presentación oportuna. Los recursos de reposición y apelación pueden ser interpuestos en el acto de la notificación personal de la decisión que puso fin a la actuación administrativa o dentro de los cinco (5) días siguientes a dicha notificación, o a la publicación, si hubo lugar a ella, o a la desfijación del edicto, si por no haber sido posible la primera, fue necesario hacer uso de este mecanismo. Ante actos administrativos presuntos se pueden interponer en cualquier tiempo. § Presentación en forma. La presentación de todos los recursos debe ser por escrito, el cual debe contener el nombre e identificación del recurrente, la indicación del recurso o los recursos que se impetran, la indicación del acto recurrido y la sustentación del recurso, la cual requiere la expresión concreta; es decir, precisa, de los motivos de inconformidad del recurrente respecto del acto impugnado, así como lo que se pretende en relación con el mismo, puede se, que se aclare, modifique o revoque; relación de las pruebas que se pretende hacer valer, e indicación de la dirección del recurrente, para las notificaciones. El recurso de apelación puede presentarse en forma conjunta o en subsidio con el de reposición o simplemente por separado, según sea el caso en concreto. § Ajuntar anexos. Si el acto contiene una obligación pecuniaria que debe cumplir el impugnante, se debe acreditar el pago o el cumplimiento de lo que el recurrente reconoce deber, y garantizar el cumplimiento de la parte de la MÓDULO: ACTO ADMINSITRATIVO Derechos Reservados Alcaldía Mayor de Bogotá. decisión que impugna o controvierte, cuando ésta sea exigible conforme a la ley. Si el recurso es el de queja, al escrito debe anexar copia de la providencia que negó el recurso de apelación. Efecto en que se conceden los recursos. Por regla general los recursos se concederán en el efecto suspensivo , entendiendo que se trate de todos los tres recursos, toda vez que no se hace distinción alguna. Cuando se trate de procedimientos de ejecución de políticas monetarias, cambiarias y de crédito, los recursos se concederán en el efecto devolutivo es decir, que no suspenderá el cumplimiento de la providencia impugnada. Consecuencia del no cumplimiento de los requisitos: rechazo del recurso. Si el escrito mediante el cual se formula el o los recursos del caso, se presenta sin el cumplimiento de los requisitos, el funcionario ante quien se presentó, si es el competente para decidirlo o concederlo, debe rechazarlos, que debe hacerlo a través de la providencia motivada, contra la cual, y si uno de los rechazados es el de apelación, procederá el recurso de queja. El recurso de queja. Se podrá interponer cuando sea rechazado el recurso de apelación, sea cual fuere la razón del rechazo, si el interesado o el apelante estima que este recurso fue mal rechazado. Se deberá hacer uso de aquél dentro de los cinco (5) días siguientes a la notificación del acto que le rechaza el recurso de apelación. Se debe interponer directamente ante el superior del funcionario que dictó la decisión apelada, y que fue quien le rechazó la apelación; mediante escrito al que deberá acompañarse copia del auto con el cual se haya rechazado la apelación. Una vez recibido el escrito con el anexo precitado, el superior ordenará inmediatamente que le sea remitido el expediente del procedimiento administrativo, y tomará la decisión, de confirmar el rechazo o conceder la apelación. Si el superior encuentra que es procedente el recurso de apelación, asumirá de inmediato el asunto y, si no hay pruebas que practicar, en el mismo pronunciamiento revocará el auto que rechazó la apelación y lo decidirá de plano. Renuncia y desistimiento de los recursos. El recurrente podrá renunciar o desistir del o de los recursos interpuestos, lo cual debe hacer de forma expresa, cuando así lo manifiesta ante quien conoce del recurso en trámite, y por supuesto debe hacerlo por escrito. Trámite de la vía gubernativa. Los recursos de reposición y de apelación siempre se resolverán de plano, esto es, que una vez presentados, el competente, si no observa razones válidas para rechazarlos, procederá a decidirlos. Practica de pruebas. Tratándose del recurso de apelación, puede ocurrir que deban practicarse pruebas, decretadas a solicitud de quien interpuso la apelación o de oficio por el funcionario que ha de decidirlo. Serán admisibles todos los medios de prueba señalados en las normas, atendiendo, las reglas de admisibilidad de las pruebas que se soliciten, como pertinencia, idoneidad, conducencia, legitimidad en su obtención, validez del medio probatorio, etc. Si la práctica de alguna prueba ocasiona gastos, estos deberán ser sufragados por quien la pidió, o si son varios los que la solicitaron o si se decretó de oficio, se distribuirán en cuotas iguales entre todos los interesados. Si se solicita la práctica de pruebas, el funcionario que conozca del recurso deberá decretar, mediante auto, las que estime necesarias, idóneas pertinentes, y negar las que no estime así. En el proveído que decrete la Comentario [AF10]: Se suspende el cumplimiento de los efectos jurídicos del acto administrativo, mientras se resuelven el o los recursos. Hay que tener en cuenta, que la validez del acto sigue intacta. MÓDULO: ACTO ADMINSITRATIVO Derechos Reservados Alcaldía Mayor de Bogotá. práctica de pruebas deberá señalar para ello un término no mayor de treinte (30) días y no menor de diez (10), pudiendo prorrogar por una sola vez los términos inferiores a treinta (30) días, sin que con la prórroga el término exceda de 30 días, y se indicará con exactitud el día que vence el término probatorio (artículo 58 C.C.A.). Negación de Pruebas. Cuando la negación de pruebas pedidas es parcial, se entiende que ha de hacerse en el mismo acto de trámite que decrete la práctica de las aceptadas. Pero si se niegan todas las pruebas pedidas y no hay necesidad de pruebas de oficio, es admisible que la decisión de negarlas se tome en el mismo acto que resuelve el recurso de reposición o apelación y de hecho se observa que así se procede en la práctica, a menos que haya norma expresa que señale otra cosa. La decisión de la vía gubernativa. Para que haya decisión de los recursos de la vía gubernativa que debe resolverse mediante providencia, es necesario tener en cuenta, lo siguientes requisitos: 1) Debe ser motivada en sus aspectos de hecho y de derecho, y en los de convivencia si es del caso, los cuales tienen la posibilidad de darse cuando el acto tiene relación con el orden público en general o con la prestación de servicios públicos (permisos, licencias, autorizaciones, etc.) 2) La decisión debe resolver todas las cuestiones que hayan sido planteadas y las que aparezcan con motivo del recurso, aunque no lo hayan sido antes, es decir, debe obedecer al principio de congruencia. 3) Sólo puede ocuparse de los motivos de inconformidad en que se basa el recurso a decidir, sin incluir asuntos no planteados o sugeridos por razones del mismo. Es decir, la competencia del funcionario se encuentra limitada por los motivos del recurso que decide. 4) Debe producirse en tiempo, es decir, mientras el interesado no haya invocado el silencio administrativo negativo si éste tuvo ocurrencia demandando el acto ficto ante lo contencioso administrativo, o no se haya configurado el silencio administrativo positivo, en el caso que este previsto de norma especial. Recursos contra actos que resuelven recursos. En principio, no hay recurso contra tales actos, a no ser que el de reposición contenga puntos nuevos, es decir, no debatidos ni resueltos en la actuación administrativa y en el acto que le puso fin. Al respecto el Consejo de Estado, hace se pronunciamiento en el sentido de no existir oportunidad para nuevos recursos, pues se da el agotamiento de la vía gubernativa. Decisión por acto ficto. Silencio administrativo ­ Negativo. Los recursos de la vía gubernativa también pueden ser decididos mediante acto tácito o ficto, que resulta del silencio administrativo, conocido como silencio administrativo procesal, ha de entenderse como decisión negativa, esto es, como denegación de las suplicas del o de los recursos, y por tanto, como confirmación del acto impugnado. Esta regla general, tiene aplicación cuando transcurrido un plazo de dos (2) meses contados a partir de la interposición de los recursos de reposición o apelación no se ha notificado decisión expresa sobre ellos. Además, para que en rigor se configure el silencio administrativo negativo es necesario que después del vencimiento de dicho plazo, el recurrente acuda ante la jurisdicción en lo contencioso administrativo, toda vez que mientras esto no suceda, la autoridad, descontada la caducidad de la Comentario [AF11]: “…dejan do a salvo el caso en que se decidan punto nuevos, refiriéndose al peticionario, que resulte favorecido con la decisión que, su situación no se modifica por razón de que terceras personas afectadas por el acto administrativo puedan interponer recursos – así no tenga la oportunidad de controvertir las argumentos de los recurrentes­ pues al decidirse tales recursos se produce, como consecuencia el agotamiento de la vía gubernativa, sin que se abra la oportunidad para nuevos recursos” Consejo de Estado, Sección Primera, abril 10 de 1997, Consejero Ponente Juan Alberto Polo Figueroa. MÓDULO: ACTO ADMINSITRATIVO Derechos Reservados Alcaldía Mayor de Bogotá. facultad sancionatoria del Estado, puede resolver sin límite en el tiempo los recursos interpuestos. Entonces, la ocurrencia del silencio administrativo depende de tres supuestos a saber: § Vencimiento del término de dos (2) meses contados a partir de la fecha de interposición del o de los recursos, descontados el período de práctica de pruebas. § Que no haya habido notificación al recurrente de decisión expresa sobre los recursos expuestos. § Interposición de demanda ante lo contencioso administrativo contra el acto recurrido, con invocación del silencio, caso en el cual, se deberá demandar también el acto tácito, y acompañar la prueba de su ocurrencia. Es decir, el silencio administrativo negativo en la vía gubernativa no opera automáticamente o de derecho, pues, depende la voluntad del recurrente y no directamente del ordenamiento jurídico. Silencio administrativo positivo. Pero la ley, de manera excepcional, el silencio administrativo se entiende como decisión favorable del recurso, caso en el cual se está frente al silencio administrativo positivo. En éste, la norma que lo establezca deberá señalar las condiciones para su ocurrencia, incluyendo el plazo respectivo. La ocurrencia del silencio administrativo positivo, al contrario del negativo, se presenta de manera automática y objetiva, para ello, no es necesario que el interesado lo invoque; opera de derecho, por el sólo vencimiento del término sin que se haya surtido notificación de la decisión del recurso. Publicidad de la decisión. La notificación de las decisiones de los recursos debe atender las siguientes reglas: 1. Debe hacerse pro escrito. 2. Si no hay otro medio más eficaz de informar al interesado, para hacerle la notificación personal, se le citará por correo certificado a la dirección que haya anotado al intervenir por primera vez en la actuación, o en la última que haya informado para tal fin. El envío de la citación se hará dentro de los cinco (5) días siguientes a la expedición del acto, y de él se deberá anexar constancia al expediente, que no es otra que el recibo o comprobante de introducción al citado correo. 3. En la notificación personal se entregará al notificado copia íntegra, auténtica y gratuita de la decisión. 4. Si no puede hacerse la notificación personal al cabo de los cinco (5) días del envío a la citación, se fijará edicto en lugar público del respectivo despacho, por el término de diez (10) días, con inserción de la parte resolutiva de la providencia, a cuyo vencimiento se desfijará el edicto dejando constancia en el mismo de la hora y fecha de su fijación y desfijación, entendiéndose como surtida la notificación por edicto. 1.6.2. Ante la Jurisdicción de lo Contencioso Administrativo. la vía jurisdiccional o vía de acción es la controversia jurídica que se entabla ante los jueces, contra las MÓDULO: ACTO ADMINSITRATIVO Derechos Reservados Alcaldía Mayor de Bogotá. actuaciones administrativas, pero no ante la misma administración, como en la vía gubernativa, sino ante la rama judicial. Para estos efectos la rama judicial está representada por la jurisdicción de lo contencioso administrativo, integrada por el Consejo de Estado, a nivel nacional, los tribunales administrativos, a nivel seccional y, los jueces administrativos. Por la vía jurisdiccional, de acuerdo con el Código Contencioso Administrativo, proceden las acciones de: acción de nulidad, acción de nulidad y restablecimiento del derecho, acción de reparación directa, acciones contractuales y acción de definición de competencias administrativas. 1.6.2.1. Anulación de los actos administrativos La anulación de los actos administrativos es la decisión judicial de suprimirlos o hacerlos desaparecer del mundo jurídico a instancia de parte, es decir, en virtud de acción contenciosa administrativa. Por consiguiente, la anulación afecta directamente la existencia del acto administrativo; partiendo del supuesto de que el acto existe y se presume legal, se pasa a tener como si no hubiera existido. Sólo puede decretarse por razones jurídicas, mientras que en sede administrativa la extinción de los actos administrativos puede producirse por esas mismas razones y por las de mérito o de convivencia, conjunta o separadamente. Anulación e inexistencia del acto. En el ordenamiento jurídico no se prevé la inexistencia del acto administrativo; cuando se manifiesta que un determinado acto administrativo es inexistente, es debido a situaciones en las que el acto administrativo no se perfeccionó o no se formó siquiera en apariencia, de modo que a simple vista se descarta como tal, lo cual ocurre cuando no se reúnen los elementos de existencia o los requisitos esenciales del mismo. Por lo tanto la figura de la inexistencia del acto administrativo, como situación autónoma e independiente de la anulación, consiste en el supuesto de que el acto no alcanzó a nacer o surgir a la vida jurídica. Se presenta diferencia entre: La anulación que es la actividad del juez de hacer efectivas las consecuencias de los supuestos que causan la invalidación del acto administrativo, cuando tienen ocurrencia. Es la acción de anular. La anulabilidad es la condición que ofrece un acto administrativo de merecer ser anulado o invalidado, por estar afectado por una causal de nulidad; es la situación que ofrece el acto viciado de nulidad. El acto que presenta esta situación, en todo caso, se presume válido y debe cumplirse mientras no sea suspendido provisionalmente o declarado nulo, o derogado. La nulidad es la situación del acto que existió jurídicamente, pero que el juez invalidó por haberlo hallado afectado por cualquiera de las causales instituidas para ello. La nulidad es la consecuencia de la anulación que realiza el juez contencioso administrativo. Es la situación en que queda el acto declarado nulo o anulado. Por esta razón en Colombia, la nulidad de los actos administrativos no existe en si misma, sino como resultado de la declaración del juez en tal sentido, la cual requiere solicitud de parte a través de acción contencioso administrativa. 1.6.2.2. Acción de Nulidad. Está consagrada en el Código Contencioso Administrativo. Consiste en que una persona solicita al juez que declare que un acto administrativo es violatorio de una norma jurídica superior por cualquiera de las causales de ilegalidad, y por consiguiente, decrete su anulación. En ésta solo se persigue la anulación del acto, su desaparición del mundo jurídico, sin que le esté permitido al juez declarar más allá cuando accede a la petición de MÓDULO: ACTO ADMINSITRATIVO Derechos Reservados Alcaldía Mayor de Bogotá. nulidad. Por ello, se llama acción de simple nulidad, o contencioso objetivo. Procede contra los actos administrativos generales y, excepcionalmente, contra actos particulares cuando la anulación de estos no implica el restablecimiento automático de derecho alguno en cabeza de persona determinada, y cuando se trata de actos particulares que por el asunto tiene importancia de trascendencia para el orden económico, social y ecológico del país, así como los de elección o nombramiento, y los que taxativamente señala la ley. La acción de nulidad la puede promover cualquier persona, de manera directa o a través de apoderado, y en cualquier tiempo, es decir, no tiene caducidad al excepto, cuando la acción se dirige contra un acto administrativo precontractual, la cual tiene una caducidad de 30 días siempre y cuando no se haya celebrado el contrato. Características de la acción de nulidad a) Se ejerce en interés de la legalidad, es decir, con el simple propósito de que se respete el principio de la legalidad, lo cual constituye un propósito de interés general y no particular de quien la promueve b) Es una acción pública, es decir, que puede ejercerla cualquier persona. c) No caduca, se puede ejercer en cualquier tiempo, salvo excepciones expresamente previstas por la ley, como es el caso de la acción electoral que caduca en veinte días d) La declaratoria de nulidad produce efectos erga omnes, es decir, generales o para toda la comunidad. e) La sentencia produce efectos retroactivos; es decir, que se entiende que el acto no ha existido jamás. f) Es gratuita, vale decir, que la actuación está exenta de impuestos y gastos especiales. g) Procede contra actos generales como individuales, siempre que sólo se persiga el fin de interés general de respeto a la legalidad. 1.6.2.3. Causales de nulidad. Se encuentran estipuladas en el artículo 84 del C.C.A., y son a saber: violación de la norma en que debía fundarse, incompetencia en el funcionario que lo expide, expedición irregular, desconocimiento de los derechos de audiencia y defensa, falsa motivación y desviación de las atribuciones propias. Violación de norma superior. Una causal genérica, que supone la infracción de una norma superior al acto. La norma en que debía basarse el acto administrativo ha de entenderse en el ámbito sustancial, esto es, en cuanto a la materia que regula o de que se trata y que no fue claramente aplicada o simplemente se rompe la legalidad del acto administrativo, infringiendo normas de superior jerarquía como las constitucionales. Esta causal comprende además la de inconstitucionalidad del acto administrativo, debido a que las normas constitucionales son normas de normas, y, como tales, aquellas en las que en primer orden deben basarse los actos administrativos, debido al principio de supremacía de la Constitución y a su fuerza vinculante, no obstante el orden subordinado que tienen dichos actos. Incompetencia del funcionario que lo profiere. Este vicio se presenta cuando el acto administrativo es expedido por quien ostenta la condición de funcionario público o por particular autorizado por la ley para ejercer función administrativa, MÓDULO: ACTO ADMINSITRATIVO Derechos Reservados Alcaldía Mayor de Bogotá. pero lo hace por fuera de la esfera de atribuciones que la Constitución, la ley o el reglamento le han asignado; o no corresponde a los asuntos que por razón de la materia, el territorio, la persona, el grado funcional o jerárquico, o el tiempo inclusive, le son dables resolver. Alude a la “competencia” como requisito de validez del acto administrativo; consistente en la carencia de atribución constitucional, legal o reglamentaria para expedir el acto administrativo. Es la ausencia de la condición específica que requiere el “órgano” o “sujeto” del acto administrativo para que el acto sea legal o legítimo. Falsa motivación. El elemento “causa” o “motivo” del acto administrativo que, consiste en las circunstancias de hecho y/o de derecho que sirven de fundamento o determinan la decisión o la declaración contenida en el acto. Este vicio se presenta cuando la sustentación fáctica del acto carece de veracidad, es decir, no hay correspondencia entre lo que se afirma en las razones de hecho o de derecho que se aducen para proferir el acto y la realidad fáctica y/o jurídica, de allí que se dé en las siguientes situaciones: § Por falsead en los hechos, esto es, cuando se invocan hechos que nunca ocurrieron, o se describen de forma distinta a como ocurrieron. § Por apreciación errónea de los hechos, pues, los hechos aducidos efectivamente ocurrieron, pero no tienen los efectos o el alcance que les da el acto administrativo o no corresponden a los supuestos descritos en las normas que se invocan. La falsa motivación tiene la virtud de afectar la validez del acto, cuando el error afecta el sentido de la decisión, de allí que los errores puramente mecánicos o formales, no generan nulidad del mismo. Una cosa es la falsa motivación y otra muy distinta la falta de motivación. La primera es un evento sustancial, que atañe a la realidad fáctica y jurídica del acto administrativo, y la segunda es un aspecto procedimental, formal, que consiste en la omisión en hacer expresos o manifiestos en el acto administrativo los motivos del mismo. De modo que el acto puede, formalmente, estar motivado, o sea cumplir con el requisito de tener indicados los motivos, pero en la realidad tener una falsa motivación, que será legal, y estará viciado de nulidad. Puede darse la situación contraria: Que debiendo ser motivado, no lo haya sido, pero los motivos por los cuales la ley autoriza su adopción realmente ocurrieron. Aquí la nulidad puede surgir de lo primero, la falta de motivación, y no de la falsa motivación, por cuanto ello constituye un vicio de forma o expedición irregular, que en atención al tipo de acto puede ser sustancial, es decir, relevante para el derecho e defensa y control del acto, como todos los que ponen fin a una actuación administrativa, si afectan a particulares. No siempre es necesaria la motivación para la validez del acto administrativo, pero sí lo es que debiendo estar motivado, los motivos existan y que correspondan a los previstos en el ordenamiento jurídico Expedición en forma irregular. Esta causal de nulidad se configura cuando no se le da cumplimiento a las formalidades previstas en la ley o el reglamento para la formación del acto que se trate, entendiendo como formalidades, los requisitos tendientes a garantizar la veracidad del acto, la igualdad de los interesados, sus derechos privados como el de defensa, controversia, etc., así como la publicidad MÓDULO: ACTO ADMINSITRATIVO Derechos Reservados Alcaldía Mayor de Bogotá. que en determinados casos se debe hacer el trámite de la actuación respectiva. Entre ellos, se encuentran desde requisitos obvios y comunes como la fecha, nombre del órgano, firma del funcionario, pasando por la motivación cuando deba hacerse expresa, hasta el cumplimiento de trámites, diligencias o pasos necesarios etc. La irregularidad que puede originar la anulación del acto es la que es relevante para su contenido o para la efectividad del debido proceso, cuando es sustancial, es decir, cuando incide en el sentido de la decisión, o es básica para la misma. Desconocimiento del derecho de audiencia. Corresponde al aforismo jurídico de que “nadie puede ser condenado si no ha sido oído y vencido en juicio”; está de por medio el núcleo esencial del derecho de defensa que puede resultar afectado por un acto administrativo. Se presenta cuando el acto administrativo es expedido sin haberle permitido al afectado ser oído previamente en relación con la actuación administrativa que finaliza con el mismo, situación que incluso puede dar lugar o constituir una vía de hecho, cuando el desconocimiento sea total o absoluto, es decir, que el acto se preparó, se expidió y ejecutó a sus espaldas, sin ningún conocimiento suyo. Esta causal opera respecto de terceros determinados que debiendo ser citados a la actuación administrativa no lo son, así como de particulares que pudiendo ser afectados por actuaciones iniciadas de oficio no les fue comunicada la existencia y objeto de la misma. Desviación de las atribuciones propias. Se conoce como “desviación de poder”, tiene lugar cuando un acto administrativo que:1) fue expedido por un órgano o autoridad competente; y 2) con las formalidades debidas, en realidad persigue fines distintos a los que le ha fijado el ordenamiento jurídico y que se presumen respecto de dicho acto. Tiene entonces correspondencia con el elemento fin del acto administrativo, el cual, que se supone en todo acto administrativo, se presume legítimo, esto es, que el fin perseguido es el previsto en la regulación jurídica aplicable al acto, pero que deviene en ilegítimo, cuando el autor del acto se aparta del anterior, caso en el cual se configura la causal. Es así que teniendo la competencia para expedir el acto, su objetivo involucre intereses personales y no el bienestar común o interés público. Las causales de nulidad y la acción de repetición. La acción de repetición está consagrada en el artículo 90 de la Constitución Política, y desarrollada mediante ley 678 de 2001. Es una acción civil de carácter patrimonial que deberá ejercerse en contra del servidor o exservidor público que como consecuencia de su conducta dolosa o gravemente culposa haya dado lugar a reconocimiento indemnizatorio por parte del Estado, proveniente de una condena, conciliación u otra forma de terminación de un conflicto. También se ejercerá contra el particular que investido de una función pública haya ocasionado, en forma dolosa o gravemente culposo, la reparación patrimonial. En lo que interesa a las causales de nulidad del acto administrativo, los artículos 5º y 6º de la referida ley las relaciona con las conductas que pueden dar origen a dicha acción, así: Las causales de nulidad y el dolo. Se establece que la conducta es dolosa cuando el agente del Estado quiere la realización de un hecho ajeno a las finalidades del servicio del Estado, y que se presume que existe dolo (la intensión positiva de causar daño) del agente público por las siguientes causas: § Obrar con desviación de poder. Esta corresponde a la causal relativa al fin, y que en el artículo 84 del C.C.A. se describe como desviación de las MÓDULO: ACTO ADMINSITRATIVO Derechos Reservados Alcaldía Mayor de Bogotá. atribuciones propias del funcionario o corporación. El acto se expide para perseguir un fin contrario a la ley. § Haber expedido el acto administrativo con vicio en su motivación por inexistencia del supuesto de hecho de la decisión adoptada o de la norma que le sirve de fundamento. Esto es, con falsa motivación material. § Haber expedido el acto administrativo con falsa motivación por desviación de la realidad u ocultamiento de los hechos que sirven de sustento a la decisión administrativa. Es otra falsa motivación del acto. Las causales de nulidad y la culpa grave. En el artículo 6º se considera que la conducta del agente del Estado es gravemente culposa cuando el daño es consecuencia de una infracción directa a la Constitución o a la ley o de una inexcusable omisión o extralimitación en el ejercicio de las funciones, y que se presume que la conducta es gravemente culposa por las siguientes causas: § Violación manifiesta e inexcusable de las normas de derecho. § Carencia o abuso de competencia para proferir la decisión anulada, determinada por error inexcusable. Esto es, expedición del acto por funcionario competente. § Omisión de las formas sustanciales o de la esencia para la validez de los actos administrativos, determinada por error inexcusable. Corresponde a la expedición irregular del acto administrativo. 1.6.2.4. Actos contra los cuales procede la nulidad. La nulidad, como decisión judicial, procede contra actos administrativos que tienen la índole de definitivos, sea que resulten o no de una actuación administrativa; trátese de actos particulares o de actos generales. Los actos preparatorios, de trámite y de ejecución no son anulables en sí mismos, pero son susceptibles de examinar por el juez contencioso administrativo en la medida en que se incorporan en el acto definitivo, es decir, junto con éste, excepto del acto de trámite cuando por impedir la continuación del procedimiento se convierte en definitivo, caso en el cual puede ser anulado de manera separada o independiente. La Competencia para que proceda la nulidad. En Colombia, la nulidad de los actos administrativos solo la pueden declarar las autoridades contencioso administrativas (los jueces administrativos, los tribunales administrativos y la Sala de lo Contencioso Administrativo del Consejo de Estado), según la distribución de competencia y las acciones señaladas en el código contencioso administrativo. 1.6.2.5. Acción electoral. En ella se persigue la nulidad de actos de elección popular, de elección proferidos por las corporaciones públicas y de nombramiento. Además de la nulidad, el juez puede ordenar la realización de nuevos escrutinios. Caduca al cabo de 20 días a partir del día siguiente a aquél en el cual se notifique legalmente el acto por medio del cual se declare la elección o se haya hecho el nombramiento cuya nulidad se pide, o el de la confirmación cuando ésta se requiere. (Se encuentra instituida en el artículo 227 del Código Contencioso Administrativo y regulada en los artículos 223 y siguientes del mismo código). 1.6.2.6. Acción de nulidad por inconstitucionalidad. Está dirigida a los decretos citados por el Gobierno Nacional cuyo control no corresponda a la Corte Constitucional ni al propio Consejo de Estado como tribunal supremo de lo contencioso administrativo, de modo que no implique el ejercicio de la función administrativa. (Establecida en el artículo 237, numeral 2, de la Constitución de 1991, y MÓDULO: ACTO ADMINSITRATIVO Derechos Reservados Alcaldía Mayor de Bogotá. desarrollada por los artículos 39 de, numeral 9, y 49 de la ley 270; 33, numeral 7, de la ley 446 de 1998 y 97, numeral 7, del C.C.A). 1.6.2.7. Acción de nulidad y restablecimiento Consiste en que una persona perjudicada por un acto administrativo solicita al juez que decrete la nulidad de ese acto, por ser contrario a una norma jurídica superior, pero que, además, se le restablezca su derecho o se le repare el daño. (artículo 85 del Código Contencioso Administrativo). Características a) No solo se ejerce en interés de la legalidad en abstracto, sino que intenta, además, la defensa de un interés particular. b) No puede ejercerla cualquier persona, sino solamente aquella que demuestre un interés, es decir, el perjudicado por el acto. c) Por regla general tiene un término de caducidad de cuatro meses contados a partir del día siguiente de la publicación, notificación, comunicación o ejecución del acto; es decir, que después de ese término no puede ejercerse la acción. Si la parte demandante es la entidad pública que expidió el acto, la caducidad es de dos años. d) La sentencia que se dicte como resultado de está acción produce dos clases de efectos: generales en cuanto a la declaratoria de nulidad y relativos o interpartes en cuanto al restablecimiento de los derechos violados, puesto que, este sólo beneficia y obliga a las partes que intervinieron en el proceso e) En esta acción la sentencia produce efectos retroactivos. Pero como pueden haberse producido efectos que no es posible eliminar, en estos casos el restablecimiento del derecho se traduce a una indemnización de perjuicios. f) El restablecimiento del derecho puede consistir también en la modificación de una obligación fiscal, o de otra clase, o la devolución de lo pagado indebidamente. g) Es onerosa, o sea que los posibles gastos que se causen, corren por cuenta del interesado. Además solo puede tramitarse a través de abogado titulado e inscrito. h) Por regla general, solo procede contra actos de carácter individual o subjetivo. Sin embargo, excepcionalmente la jurisprudencia ha aceptado la procedencia de esta acción contra actos de carácter general. 1.6.2.8. Acción de reparación directa En esta acción la persona que acredite interés podrá pedir directamente la reparación de un daño causado por la administración, cuando la causa de la petición sea un hecho, una omisión, una operación administrativa o la ocupación temporal o permanente de un inmueble por causa de trabajos públicos. Las características de esta acción son en general semejantes a las de la acción de nulidad y restablecimiento del derecho, salvo en los siguientes aspectos: a) No hay declaratoria de nulidad sino restablecimiento directo del derecho. b) Procede contra hechos, omisiones y operaciones administrativas MÓDULO: ACTO ADMINSITRATIVO Derechos Reservados Alcaldía Mayor de Bogotá. c) El daño objeto de la reparación puede ser también el emanado de la ocupación temporal o permanente de inmuebles por causa de trabajos públicos d) Tiene un término de caducidad de dos años, contados a partir del día siguiente del acaecimiento del hecho, omisión u operación administrativa o de ocurrida la ocupación del inmueble. 1.6.2.9. Acción contractual. Consiste en que cualquiera de las partes de un contrato estatal podrá pedir que se declare su inexistencia o su nulidad y que se hagan las declaraciones, condenaciones o restituciones consecuentes; que se ordene su revisión que se declare su incumplimiento y que se ordene al responsable a indemnizar los perjuicios y que se hagan otras declaraciones y condenas. Esta acción caduca, por regla general, a los dos años, contados a partir del día siguiente de ocurridos los motivos de hecho o de derecho que le sirvan de fundamento teniendo en cuenta las diversas hipótesis previstas en el numeral 10 del artículo 136 del Código Contencioso Administrativo. 1.6.2.10. Acción de fijación de competencias administrativas. Esta acción está consagrada para los casos en que se presenten conflictos de competencia entre varias entidades administrativas o que ejerzan funciones administrativas. La ley determina la forma como se fijan las competencias sin detrimento del interés general y la conveniencia social. 1.6.2.11. Otras acciones. Además de las acciones anteriores, debe tenerse en cuenta que la Constitución Política y la ley consagran otras acciones que constituyen también mecanismos de control jurisdiccional del principio de legalidad frente a actuaciones de las autoridades administrativas, aunque no todas ellas son propiamente contencioso – administrativas por cuanto algunas pueden ejercerse ante jueces diferentes de los administrativos, estas acciones son las siguientes: a) La acción de tutela, mediante la cual toda persona podrá reclamar ante los jueces, en todo momento y lugar, mediante un procedimiento preferente y sumario, la protección inmediata de sus derechos constitucionales fundamentales, como quiera que estos resulten vulnerados o amenazados por la acción u omisión de cualquier autoridad pública y, en algunos casos, de los particulares b) La acción de cumplimiento, mediante la cual toda persona podrá acudir ante la autoridad judicial para hacer efectivo el cumplimiento de una ley o un acto administrativo. c) Las acciones populares, para la protección de los derechos e intereses colectivos, relacionados con el patrimonio, el espacio, la seguridad y la salubridad pública, la moral administrativa, el ambiente, la libre competencia económicas y otras de similar naturaleza que se definan en la ley. d) Las acciones colectivas o de grupo, originadas en los daños ocasionados a un número plural de personas, sin perjuicio de las correspondientes acciones particulares. 1.6.3. Efectos de la declaración de nulidad. Pueden ser de dos clases: En el tiempo. La nulidad de los actos administrativos tiene, por regla general, efectos a partir de la fecha de expedición de los mismos, debido a que se tiene como si el acto no hubiera existido, es decir, que la decisión de anulación tiene efectos retroactivos (ex ­ tunc), de modo que permite asumir que las cosas vuelven MÓDULO: ACTO ADMINSITRATIVO Derechos Reservados Alcaldía Mayor de Bogotá. al estado anterior al de la expedición del acto anulado, salvo las situaciones individuales que se hubieran consolidado. En lo material. La sentencia que declare la nulidad de un acto administrativo tiene efectos erga omnes (para toda la comunidad) si se trató de un acto general, o para los interesados o afectados si es particular, y en ambos casos hace tránsito a cosa juzgada, no se podrá volver ante la jurisdicción por el mismo asunto. (artículo 175 del C.C.A). 2. Firmeza del acto administrativo Se debe tener en cuenta que cuando se está ante este tema, hay algunos conceptos que son importantes recordar y que se hacen necesarios para determinar la firmeza del acto administrativo como son: a) la perfección del acto Administrativo, que se entiende como el cumplimiento de todos los requisitos de procedimiento y de forma que la ley ha señalado, para su expedición. A partir de esa perfección el Acto Administrativo produce efectos jurídicos; b) la eficacia, que es la exigencia de ley, que el acto administrativo se de a conocer a los interesados (Notificar, comunicar o publicar) para que adquiera eficacia, es decir; para que produzca efectos; y la validez que se entiende como la conformidad del acto con las normas jurídicas que lo rigen. Su validez no depende de la existencia de todos los elementos constitutivos, sino de su conformidad con la ley. Es así, como la firmeza del acto administrativo (Art. 62 del C.C.A), se predica, cuando éste pase a ser decisión definitiva y última de la administración, de modo que contra ella ya no es admisible más controversia o debate ante la Administración que impida su obligatoriedad o cumplimiento. Este concepto es distinto al de ejecutoria de las decisiones jurisdiccionales, aquí ejecutoria implica la cosa juzgada, mientras que la firmeza del acto administrativo no, debido a que si bien es definitivo en sede administrativa, aún puede ser controvertido en sede jurisdiccional. Situaciones que causan la firmeza del acto administrativo: Cuando contra el acto administrativo no procede recurso alguno (actos que deben estar taxativamente señalados en la ley o el reglamento) Cuando los recursos interpuestos hayan sido decididos de manera expresa o mediante el silencio administrativo según el caso. Cuando no se interponen los recursos que procedan. Cuando se renuncia expresamente a los recursos (el interesado o afectado). 2.1 Efectos jurídicos del acto administrativo en el tiempo La regla general es que los actos administrativos constitutivos tengan efectos ex­ nunc., hacia el futuro (actos administrativos generales, o que impongan restricciones o limitaciones al ejercicio de algunas libertades, lo que confieren poder o autorizan el ejercicio de derechos). Los declarativos pueden tener efectos ex­nunc, cuando se trate de derechos que se hubieren adquirido con anterioridad a la expedición del acto, por haberse dado los supuestos de hecho y derecho que les dan origen. MÓDULO: ACTO ADMINSITRATIVO Derechos Reservados Alcaldía Mayor de Bogotá. 3. Perdida de la fuerza ejecutoria del acto administrativo. Situación en la cual un acto administrativo que cobró firmeza deja de ser obligatorio, sea de manera temporal o definitiva. Hay cesación de los efectos jurídicos del acto, por lo tanto, lo afectados pueden oponerse legítimamente al intento de hacerlo cumplir, mediante la excepción de pérdida de fuerza ejecutoria (art. 67 C.C.A). Las autoridades deben abstenerse de hacerlo efectivo. Causales Artículo 66 del código contencioso Administrativo Por la Suspensión Provisional Se refiere a la medida cautelar que el juez contencioso administrativo puede adoptar a instancia de parte al inicio del proceso, respecto del acto demandado, en acción de nulidad o en acción de restablecimiento del derecho. (Art. 152 del CCA) suspensión por manifiesta violación de la norma superior en que se fundamenta el acto acusado. Con la acción de tutela se han establecido otras posibilidades de suspensión provisional por decisión judicial, como en el art. 7º del Decreto 2591 de 1991, que regula esta acción, desde la presentación de la demanda cuando el juez expresamente lo considere necesario y urgente para proteger el derecho fundamental, suspenderá la aplicación del acto concreto que lo amenace o vulnere. Se puede ordenar en la propia sentencia que decida la acción de tutela cuando ésta se concede como mecanismo principal de defensa judicial, que el solicitante debe promover en el tiempo que le sea indicado en el fallo de tutela. Requisitos para decretar la suspensión provisional (Art. 152 del C.C.A.) Que la medida se solicite y sustente de modo expreso en la demanda. Si la acción es de nulidad, basta que haya manifiesta infracción de una de las disposiciones invocadas como fundamento de dicha acción. La violación debe ser perceptible de golpe y sin necesidad de mayores análisis jurídicos que trasciendan los enunciados normativos objeto de confrontación y los documentos públicos que se aduzcan como prueba de la violación manifiesta. Si la acción es otra, además el peticionario deberá demostrar, aunque sumariamente, el perjuicio que la ejecución del acto causaría o podría causar al actor. Pérdida por Fuerza Ejecutoria por desaparición de los fundamentos de hecho o de derecho (Decaimiento del Acto Administrativo) Pérdida por Fuerza Ejecutoria por No Ejecutarse el Acto al cabo de cinco (5) años de estar en firme. Pérdida por Fuerza Ejecutoria por cumplimiento de la condición resolutoria Por Pérdida de Vigencia del acto. Página 2: [1] Comentario [AF1] ADELINA FLORIAN 22/10/2007 15:45:00 “Como lo dice la ley, la doctrina y la jurisprudencia, uno de los atributos del acto administrativo, entendido como emisión de la voluntad de un organismo o entidad pública con el propósito de que produzca efectos jurídicos, es la denominada “presunción de legalidad”, que también recibe los nombres de “presunción de validez”, “presunción de justicia” y “presunción de legitimidad”. Se trata de una prerrogativa de que gozan los pronunciamientos de esa clase, que significa que, al desarrollarse y al proyectarse la actividad de la Administración, ello responde a todas las reglas y que se han respetado todas las normas que la enmarca. Legalidad es sinónimo de perfección, de regularidad, se inspira en motivos de conveniencia pública, en razones de orden formal y material en pro de la ejecutoriedad y de la estabilidad de esa manifestación de voluntad”. (Consejo de Estado, Sección Segunda, Febrero 17 de 1994) Página 2: [2] Comentario [AF3] ADELINA FLORIAN 22/10/2007 15:45:00 Estado Social de Derecho: Característica del estado basado en que su razón de ser y de us autoridades se encuentran en el servicio de la comunidad, en su prosperidad y desarrollo en el respeto de la dignidad humana, definida por la Constitución, amparada y desarrollada por el orden jurídico, al cual se deben someter” Álvaro Mendoza Palomino. Teoría y sinopsis de la Constitución de 1991. Página 2: [3] Comentario [AF4] ADELINA FLORIAN 22/10/2007 15:45:00 “El principio de la legalidad es la base de la actividad de la administración y de él fluye la presunción, garantía o prerrogativa según la cual las autoridades proceden conforme a la ley, o más exactamente obedeciendo al orden jurídico aplicativo en cuanto atañe a la esencia del acto administrativo como expresión unilateral de voluntad de administración” Consejo de Estado, Sentencia Sección Segunda, Agosto 04 de 1994 Página 2: [4] Comentario [AF5] ADELINA FLORIAN 22/10/2007 15:45:00 “El principio que rige la operatividad del Estado de Derecho y que hace posible el funcionamiento de las instituciones es el de la obligatoriedad y ejecutividad de las normas que dentro del esquema de la organización política, profieren los organismos y las autoridades competentes, según la Constitución. En general, la norma jurídica, independientemente de su jerarquía obliga a sus destinatarios y es deber de las autoridades públicas en el ámbito de las atribuciones que a cada una de ellas corresponda, hacerla efectiva”. Corte Constitucional, sentencia C­131 de 1993, Magistrado Ponente Alejandro Martínez Caballero.