Comparación Económica de la Crianza Intensiva y Convencional de Becerras A.F. Kertz, Ph.D. DIPL. ACAN ANDHIL LLC ST. LOUIS, MO, USA www.andhil.com Traducción: Ph. D. Leonardo Carlos Valdez, Facultad de Zootecnia y Ecología, UACH Resumen Los programas convencionales de alimentación con sustituto de leche, se han enfocado a restringir los costos de alimentación, limitando el suministro del sustituto de leche, y de esta manera incrementar el consumo de alimento iniciador, para con ello estimular el desarrollo del rumen. Por otra parte los programas intensivos de alimentación con sustituto de leche lo que hacen es elevar el contenido de proteína esto para mejorar la ganancia diaria de peso sin llegar a la obesidad o engrasamiento de la becerra. A la vez reduce los requerimientos de mantenimiento de las becerras por kg de peso vivo ganado. En algunos estudios con este programa se logro incrementar la eficiencia alimenticia (alimento/nutriente) y también se redujo el costo total de alimentación por kg de ganancia diaria. Los costos de crianza de la becerra en proporción del total de los costos de desarrollo de una vaquilla varían de 13 a 20%, esto fue reportado en dos estudios de campo realizados en Wisconsin. Sin embargo un estudio en el 2007 reporto que los costos de alimentación comprendía 37% de los costos diarios, equivalente a $5.5 dls, en el desarrollo de una becerra durante los 2 primeros meses de vida. El consumo diario por kg requerido de ® DIGAL 2013. vaquillas en un explotación becerra/vaquilla en España fue sólo de 1.74 kg durante los 2 primeros meses de vida, pero incremento a 12.6 kg a los 22 meses de edad. Datos de campo en Pe n s i l v a n i a r e v e l a n q u e b e c e r r a s provenientes de partos distócicos, numero de días enferma, y consumo de alimento de las becerras afectó su crecimiento y subsecuentemente su producción de leche. A diferencia de becerras con 1 kg de ganancia diaria durante los primeros 2 meses de vida, produjeron 850 kg más leche en la segunda lactación y 2.2 en las primeras 3 lactaciones, estudio realizado por más de 10 años en Cornell. Otros estudios en Michigan State University al comparar los programas de alimentación con sustituto de leche Intensivo vs Convencional encontraron que el costo por kg de ganancia diaria para el Intensivo fuel el más bajo y además mayor retorno neto de $97 dls por becerra a mitad de su primer lactancia. En un modelo comprehensivo se encontró un retorno neto de $205 dls por becerra para el programa de alimentación Intensivo vs Convencional. La mayor estrategia para maximizar el reembolso en becerra es duplicando el crecimiento de la becerra al suministrar 4 litros en lugar de 2 litros de calostro limpio y de buena calidad dentro de las primeras 4 horas del Comparación Económica de la Crianza de Becerras... 23 24 A.F. Kertz nacimiento. El incrementar los niveles de alimentación en ambos calostro y sustituto de leche tienen un efecto benéfico aditivo. Introducción Históricamente, los programas convencionales de alimentación para becerras con sustituto de leche en U.S. se enfocan en restringir el sustituto de leche (SL) para reducir los costos de alimentación e incrementar el consumo sólido de alimento iniciador (AI) en becerras de iniciación y con ello estimular el desarrollo del rumen. Por otra parte cuando se inicia con programas de alimentación intensivos/acelerados con SL, se enfocan en ofrecer más SL con alto nivel de proteína cruda (PC) para incrementar el promedio de la ganancia diaria de peso (GDP), para facilitar la capacidad de la becerra de crecer sin engrasamiento excesivo (Kertz and Loftenm 2013). Típicamente, en programas conven-cionales sólo se ofrecían de 11-12 kg de SL a las becerras antes de ser destetadas al mes de edad (Kertz et al., 1979). Un ejemplo de este programa se muestra en Cuadro 1, donde las becerras sólo promediaban 500 g diarios durante su primer mes de vida (Warner, 1960). Con los benéficos que ofrece el programa Intensivo con SL, los objetivos y resultados han cambiado. Ahora el objetivo es incrementar al doble el peso vivo de la becerra al nacimiento en dos meses de edad. Por otra parte el como hacer comparaciones económicas de estos dos programas, ahora se ha convertido en la mayor pregunta, y es el objetivo de este análisis. Tabla 1. Ganancia diaria y consumo de alimento iniciador para becerras alimentados con varias dietas de leche por más de 7 semanas de edad (Warner, 1960). Dieta No. Becerros Leche entera 2% grasa sustituto 25% grasa coco, sustituto 25% cebo de cerdo, sustituto ab 30 30 30 30 GDP, kg 0.49 0.48 0.47 0.43 Consumo becerros iniciación, kg/d 35.4a 39.7b 35.7a 34.2a P<0.05 Las medias son diferentes, si su literal es diferente entre ellas Programas de Destete Temprano Convencional En el resumen de Kertz et al. (1979), los becerras consumieron en promedio 11.8 kg de SL, 13.2 kg de AI con 9 kg de ganancia de peso vivo (PV) en un periodo de 28 días seguido de los primeros 3 días de vida alimentados con calostros y transición a leche. Durante el siguiente mes, estas becerras típicamente consumieron un total cercano a 68 kg de AI y ganaron 25 kg adicionales de PV. Con un peso típico de 40 kg al nacer de una becerra (Kertz et al., 1997), para doblar su peso de nacimiento en dos meses de vida debería pesar 80 kg. Pero en un programa Convencional sólo Comparación Económica de la Crianza de Becerras... ganan 34 kg de PV –no se requirieren los 40 kg para doblar el peso al nacimiento a los 2 meses de edad. Sin embargo ese no fue el objetivo en ese momento con un programa de destete temprano. Desde esa revisión, SL se ha cambiado a 20% de proteína cruda (CP) y 20% grasa –el nivel estándar utilizado por la industria y lo ofrecido diario del SL en base seca se ha incrementado de 450 g/día a cerca de 570 g/día. Programa de alimentación Intensivo Numerosos estudios se han realizado en Cornell University y University of Illinois (Tikofsky et al, 2001; Díaz et al., 2001; Blome et al., 2003; y Bartlett et al., 2006) quienes demostraron la respuesta benéfica al incrementar la ganancia diaria de peso cuando se alimentó con SL con nivel alto de PC comparado con el Convencional SL. La clave fue alimentar con más PC y más SL; lo cual no resultó en becerras obesas como ocurriría si se hubiesen alimentado con simple 20/20 SL a niveles similares más altos. Después más estudios fueron realizados en Michigan State University. Brown et al. (2005) compararon terneras Holstein que fueron alimentadas para luego ser sacrificadas a 8 y/o 14 semanas de edad. Estas fueron destetadas a 7 semanas del experimento después de haber sido alimentadas con 20/20 SL al 1.1% de PV, reconstituido a 11.8% de sólidos y dividido en dos partes iguales y/o ofrecido a 28/15 SL a 2% del PV reconstituido a 14.1% sólidos. El contenido de materia seca del SL típicamente es de cerca del 95%. El agua estuvo disponible a libre acceso, con consumo restringido una vez al día de AI para lograr 0.4 kg de GDP. 25 Las terneras restantes que permanecieron después de 8 semanas fueron divididas posteriormente dentro de la alimentación restringida con AI para alcanzar 0.4 kg/d GDP o ad libitum con adición de 30% de maíz rolado iniciando en la semana 9 de edad. A las 8 semanas las terneras ganaron 0.668 vs 0.379 kg/d con 28/15 SL vs 20/20 SL con 2.3 centímetros más de altura. No hubo diferencias en proporciones de agua, PC, grasa ni cenizas en la canal dentro de los dos tratamientos, aunque el peso de las canales de 20/15 SL fue 29% más pesadas que las de 20/20 SL. después de 8 semanas, las becerras restantes fueron divididas para ser asignadas a uno de dos tratamientos, libre acceso o restringido con AI. A las 14 semanas, no se encontraron diferencias para proteína ni cenizas en la canal, pero el tratamiento ad líbitum con AI tuvo mayor contenido de grasa que el tratamiento restringido con AI. Los becerros alimentados ad libitum con AI tuvieron GDP mayores a 1 kg, limite superior alcanzado y usado algunas veces para identificar becerros gordos. Otro experimento fue iniciado con tratamientos similares donde se ofreció SL del nacimiento hasta las 6 semanas de edad al destete, pero sin restricciones de AI (Davis Ricncker et al., 2011). De igual manera se incremento GDP y la altura al momento del destete para los programas de alimentación 28/15 vs 20/20 SL. Cómo los programas de alimentación acelerados con SL se comportan en relación para la interacción entre el nivel de SL y consumo de AI, GDP, y transición del destete han sido evaluados en varios estudios (Stamey et al., 2012, 2013). En el primer estudio (Stamey et al., 2012), 26 A.F. Kertz becerras y becerros Holstein fueron alimentados ya sea convencional 20/20 SL con 12.5% sólidos al 10% del PV al nacer en dos programas de alimentación de 1 a 5 semanas y al 5% una vez al día durante 6ta semana; o 28/15 SL con 15% sólidos a 1.5% del PV base seca durante 1 semana, al 2% del PV base seca durante 2 a 5 semanas, ofrecido dos veces al día y al 5% del PV durante 6ta semana ofrecido una vez al día. Todos los becerros(as) fueron destetados a las 6 semanas. El programa de alimentación 28/15 SL contenía dos tratamientos de AI, 18 o 22% PC base húmeda o 19.6 y 25.5% PC base seca; los cuales fueron combinados dentro de un conjunto de datos para hacer gráficas comparativas (Figura 1) desde que no hubo diferencias (P<0.10) dentro de los tratamientos de AI. Alimentando menos del 20/20 SL (P<0.01) resulto en mayor consumo AI (P<0.02), pero menos GDP y mayor altura (P<0.02) que el tratamiento 28/15 durante el predestete. El consumo total de SL fue 19.3 para el 20/20 y 34.7 kg para el 28/15 con consumos de AI predestete de 14.0 y 7.3 kg, respectivamente. Con mayor consumo de SL base seca, a su vez se redujo el consumo AI base seca para le tratamiento 28/15 SL. Pero el consumo total de nutrientes fue mayor para 28/15, resultando en mayor GDP excepto para la semana 7 la cual fue justo después del destete completo. La Figura 1 muestra que en la semana 7 el consumo AI base seca para 28/15 SL no fue igualada por el consumo base seca del tratamiento 20/20 SL, pero si en las semanas 8-10 cuando el PGD fue similar entre estos dos tratamientos. Al final de las 8 semanas, el peso nacimiento fue duplicado en el tratamiento 28/15 SL, mientras que el tratamiento 20/20 SL quedo por debajo con 10 kg menos. Figura 1. El sustituto de leche (SL) y consumo de material seca (CMS) de alimento iniciador(AI) en becerros alimentados con SL con una de las dos combinaciones 20% PC/20% grasa o 28% PC/15 grasa (Stamey et al., 2012). NOTA: Homologación de las siglas del gráfico del inglés al español: MR=SL, CS=AI, DMI=CMS, PC=CP. Comparación Económica de la Crianza de Becerras... El segundo estudio (Stamey et al., 2013) fue usado para comparar el programa de alimentación 20/20 SL (Convencional—CON) con AI 18% PC contra un nivel más alto de alimentación 26/18 SL (moderado—MOD) con 20% PC de AI y con otro nivel de alimentación aun mas alto 28/20 (agresivo—AGR) con 22% PC de AI. Cada sustituto de leche fue ofrecido a diferentes niveles, pero todos las becerras fueron destetados a las 6 semanas de edad, y continuaron en corraletas individuales hasta la edad de 9 semanas. después de que fueron alimentadas en grupos en corraletas más grandes hasta la edad de 12 semanas. Conforme se incrementaba el SL de 15.8, 31.4 y 38.2 kg por tratamiento durante todo el periodo predestete de 42 días, respectivamente, el consumo de AI en el predestete disminuyó inversamente al consumo de SL a 42.1, 19.9 y 11.3 kg (Figura 2). Este patrón para consumo de AI continuó para hacerse mucho menor durante el posdestete durante 7-9 semanas. La GDP predestete siguió el mismo patrón de consumo diarios del SL 0.43, 0.55 y 0.62 27 kg/d, respectivamente. La GDP posdestete fue 0.99, 1.07, y 0.82 kg/d, respectivamente, con el tratamiento AGR 28/20 SL la GDP fue menor que para el MOD 26/18 SL. El tratamiento MOD 26/18 SL estuvo por encima de su propio intermedio en GDP predestete dentro del consumo intermedio AI, pero con la más alta GDP de 1,07 kg/d posdestete. Esto refleja que las becerras bajo el tratamiento AGR 28/20 SL ganaron más peso en el predestete debido al mayor consumo de SL, pero el más bajo consumo de AI en el predestete, conllevó al más bajo consumo de AI en el posdestete para este mismo tratamiento. EL tratamiento MOD 26/18 SL obtuvo el mayor escenario entre los tratamientos. En particular, mientras AGR 28/20 SL obtuvo la GDP más alta dentro de las primeras 4 semanas para disminuir a la semana 6, y no se normalizó hasta la semana 9. Bajo consumo de AI en este tratamiento podría estar relacionado al nivel más alto de grasa en el SL y mas alto nivel de SL ofrecido entre los tratamientos. Figura 2. Los consumos de materia seca (CMS) para los tratamientos de sustituto de leche (SL) con diferentes % de proteína/grasa, y tratamientos de alimento iniciador (AI; Stamey et al., 2013). 28 A.F. Kertz Eficiencias de Peso Corporal y Ganancia en Altura Para el animal vivo, hay una necesidad básica de energía en la dieta esto sólo para mantenerse vivo y funcionando normal. Este requerimiento de energía es llamado “costo de mantenimiento”. Este requerimiento debe de ser el primero en satisfacer antes de cualquier energía adicional en la dieta que pueda ser usada para crecimiento, reproducción, o lactación. En vacas lactantes, a mayor producción de leche para determinado peso corporal, mayor es la eficiencia de la vaca en convertir la energía de la dieta consumida por unidad de leche producida. Por ejemplo, Bauman (2013) ha estimado que la eficiencia de utilización de la energía en la dieta para producción de leche fue 31% a nivel de producción de leche en U.S. en 1944, para el 2007 fue de 63%, y será de 80% en nivel de producción de leche en el 2025. Para una becerra de 50 kg, la eficiencia de energía metabolizable (ME) incrementa la utilización (Figura 3) al incrementar la GDP de 21% a 200 g/d hasta 58% con 800 g/d. Pero conforme crece la becerra a través de su periodo de vaquilla su eficiencia alimenticia (CMS/kg GDP) va de 1.74 durante los dos primeros 2 meses a 12.6 cerca de los 22 meses de edad, datos basado en becerras de talla grandes/vaquilla en España (A. Bach, comunicación personal, 2011). Comparación Económica de la Crianza de Becerras... Costos por Unidad de Peso Corporal y/o Altura En una publicación de, Kertz et al. (1998), calculó los costos de PV e incrementos de WH post-calostro hasta el primer parto. Los costos en ese entonces fueron: el proceso de transición calostro/leche en los primeros 3 días, para las siguientes 4 semanas con SL ($1.32 dlls/kg), durante los primeros dos meses con AI ($0.31kg), concentrado crecimiento ($0.28/kg) y alfalfa heno ($0.10/kg) del mes 3 al 6 y para vaquillas con concentrado de crecimiento ($0.24/kg), ensilaje de maíz ($0.026/kg) y pasto seco ($0.066/kg) del mes 7 hasta el 24. El componente más costoso en el desarrollo de vaquillas es la alimentación. Los costos más elevados para mantenimiento se tienen a mayor PV, b a j a G D P, y p e r i o d o s l a r g o s d e alimentación. En este ejemplo, los costos de alimentación por unidad de PV y por unidad de WH fueron los más bajos durante los primeros 6 meses, esto sucede cuando los nutrientes son convertidos de manera más eficientemente a peso corporal y WH. Los incrementos en relación a PV y WH fueron los más rápidos y más eficientes en costo durante los primeros 6 meses de vida. Datos de Campo sobre Costos para Desarrollo de Vaquillas Un estudio en Wisconsin (Hoard´s Dairyman, 2000) en resumen, reportan los costos de becerra y vaquilla de 62 establos en Wisconsin. Mientras que los costos diarios fueron los más grandes para los dos primeros meses del periodo de becerra, el gasto más grande fue para mano de obra con 40%, seguido de alimentación con 38%. 29 Los costos diarios de alimentación fueron mayores para vaquillas más viejas debido a que los costos de mantenimiento se incrementan con el peso corporal. Aun y cuando el costo más bajo por kg o por tonelada de alimento puede ser usado con vaquillas de mayor talla que con becerras, la eficiencia de conversión de nutrientes a crecimiento es más baja debido a mayor costo de mantenimiento. De hecho en algunos casos (Kertz et al., 1998; Brown et al., 2005) el costo por kg ganado puede ser el más bajo durante el periodo de becerra esto debido a su mayor eficiencia de conversión de nutrientes para ganancia de peso con menor PV. En este estudio de Wisconsin reportan, que del total de los costos para criar una vaquilla ($1260), sólo $160 ó 13% corresponde a los primeros 2 meses del periodo de becerra. En el año 2000, una vaquilla fue valuada en $100 dlls, a la cual se le debería adicionar $1260 dls de los costos de desarrollo de vaquilla para obtener el valor total de la vaquilla. Del total de los costos de desarrollo del periodo de vaquilla el 60% correspondió a gastos de alimentación, reflejando mayores costos de mantenimiento conforme incrementa el peso corporal. Este estudio fue esencialmente repetido en el 2007 usando 49 establos lecheros, con cuatro áreas de desarrollo de becerra. http://www.uwex.edu/ces/heifermgmt/ rearingcost.cfm Algunos de las diferencias en costos del reporte del 2000 son: una vaquilla ahora vale $500 dls en lugar de $100, los costos de mano de obra incremento de $7 a 12/hora y el costo de manejo incrementaron de $12 a 20/hora. De 2000 a 2007 el valor de la becerra incremento 5 veces más; mientras los 30 A.F. Kertz costos totales del periodo de becerra fueron “sólo” el doble. En un principio fue una función primordial incrementar los costos de mano de obra, los cuales representan cerca de la mitad de los costos diarios de la becerra. Los costos durante el periodo de becerra incrementan de 13 a 20% del total de los costos de la cría de vaquillas del 2000 al 2007. He aquí el asunto. Es frecuente que no se garantice enfocarse en reducir costos de alimentación de la becerra. Si se reduce la calidad del SL, el nivel de alimentación, o el costo del AI utilizado, esto podría ahorrar $25-50dls por becerra. Esto podría ser solo 15% del máximo de los costos diarios de la becerra, y sería solo 2 a 3% del total de los costos de desarrollo de vaquilla. Una pobre nutrición podría entonces ser el punto más vulnerable y responsable del crecimiento animal en los establos cuando la eficiencia y retorno es mayor. Datos de becerras grandes/vaquillas en España (A. Bach, 2011, comunicación personal) describen como las becerras crecen y se convierten en vaquillas grandes, su eficiencia alimenticia (kg CMS/kg GDP) fue mayor durante sus 2 primeros meses de vida a 1.74; pero después progresivamente fue haciéndose más pobre conforme las vaquillas crecían hasta que llegó a ser de 12.6 a los 22 meses de edad. Efectos a Largo Término del Periodo de Becerra sobre La Producción de Leche Heinrichs and Heinrichs (2011) resumen 10 años de información, desde el nacimiento a los 4 meses de edad de 795 becerras Holstein en 21 hatos en Pensilvania. Ellos encontraron que becerras con dificultades al nacimiento y número de días enfermas, resultaron en edad más tardía a su primer parto y con más baja producción de leche en la lactancia. El crecimiento de las becerras fue afectado negativamente o positivamente por CMS de leche, SL, grano, y forraje. La producción de leche en la primera lactación fue afectada por CMS al destete, días de tratamiento por problemas respiratorios, y PV al parto. La producción durante su vida productiva fue similarmente afectada, pero con mucho menos grado que para la primera lactación. Así que una variedad de efectos positivos o negativos que ocurren durante los primeras 4 meses afectan estas becerras en su primera y subsecuentes lactaciones. Mientras los beneficios potenciales del programa acelerado de alimentación con SL fueron originalmente postulados para reducir la edad al primer parto, recientes análisis por Soberon et al, (2012) indican que también tiene beneficios en las subsecuentes producciones de leche. Mas del 90% de las becerras fueron alimentados con SL 28/15 aproximadamente al 2% de su PV (0.68 kg/d, del 2 a 7 d de edad) y después 0.91 kg/d hasta el destete por cerca de 42 a 49 d de edad (M. Van Amburgh comunicación personal, 2010). LA GDP en las becerras vario de 0.10 a 1.59 kg en 1,244 becerras vaquillas, debido al manejo, el clima, la genética, y posiblemente otros factores (como punto de referencia y recomendación, con 0.68 kg GDP podría duplicarse el peso de nacimiento a los 2 meses de edad). Los tratamientos de alimentación no fueron impuestos para tener diferentes GDP. Se desarrolló un Modelo de Prueba (Soberon et al., 2012) utilizando entradas de GDP predestete, peso nacimiento, peso destete, edad al parto, año de nacimiento, mes de nacimiento, y cálculo de la energía consumida sobre la requerida para mantenimiento. Por cada kg de GDP adicional dentro del rango 0.10 a 1.59, las Comparación Económica de la Crianza de Becerras... vaquillas produjeron 850 kg más de leche durante su primera lactación (P < 0.01) y produjeron un total de 2,280 kg más de leche durante sus 3 primeras lactaciones (en una hato comercial en New York alimentado de igual manera con SL, datos de más de 5 años, resumidos en este articulo, 623 vaquillas de primera lactación promediaron 30% mas respuesta lechera que los estudios de Cornell). La GDP de predestete afectó en 22% de variación en la producción de leche para su primer lactancia. La edad al primer parto no afectó la producción de leche dentro de un rango de 20 a 30 meses. El suministro de agua fría tuvo un efecto negativo en las becerras sobre las subsecuentes producciones de leche así mismo hubo menos energía disponible para crecimiento sobre el incremento de las necesidades para mantenimiento en becerras jóvenes resultando en la reducción del crecimiento. Por cada mega caloría (Mcal) de energía metabolizable (EM) consumida por encima del mantenimiento, 235 kg más de leche fueron producidos en la primera lactación. El mecanismo probable para este incremento en la producción de leche aun no es entendible, pero son especulados en relación al desarrollo muy temprano de la glándula mamaria. Drackley (2010) 31 encontraron 10 estudios los cuales midieron la producción de leche subsecuente a la primera lactación, relacionado al comportamiento del predestete. Todos estos estudios excepto uno tiene efectos positivos sobre subsecuentes producciones de leche. El estudio por Raeth-Knight et al., (2009), fue limitado en encontrar significancia en diferentes localidades esto debido al número limitado de animales (18 por tratamiento) para la variable de producción de leche. Estudios sobre Costo por Ganancia y Retornos En un estudio en Michigan State University (Brown et al., 2005) se compraron becerras las cuales fueron alimentadas, ya sea 20/20 ó 28/15 SL con destete a 49 días del experimento. Al final de las 8 semanas d e l e x p e r i m e n t o , P V, W H , C M S , ganancia/alimento, y costo por GDP fueron todos mejorados por el programa intensivo de alimentación (Cuadro 2). En el análisis de la composición corporal no encontraron diferencias significativas en proporción de proteína, grasa, y cenizas entre los dos tratamientos con SL. Así que el crecimiento adicional referente al tratamiento intensivo SL no engrasó las becerras si no que fue crecimiento real. Cuadro 2. Comportamiento de becerras en programas convencional o intensivo con sustituto de leche por 8 semanas hasta el final del experimento (Brown et al., 2005). 32 A.F. Kertz Un estudio similar (Davis Rincker et al., 2011) con los mismos tratamientos en Michigan State pero con becerras de un hato en experimento. después de 152 días en su primer lactación, el retorno neto por tratamiento de alimentación de becerras fue $83 dls para el Convencional y $170 dls para el Intensivo. Fueron $53 dls más de costos de alimento por becerra en el tratamiento Intensivo con un retorno adicional de $97dlls más durante los primeros 152 días en la primera lactación. En una comparación económica detallada de los programas de alimentación de becerras Convencional vs Intensiva, Overton et al. (2013), reporta que el retorno neto durante la primera lactación (incluyendo la respuesta lechera determinada por Soberon et al., 2012) fue $205 dls más para programas con SL Intensivo vs Convencional. un año. Adicionalmente, todos las becerras continuaron siendo alimentadas con calostro/transición leche por los dos siguientes dos días. De esa edad, las becerras fueron alimentadas y manejadas igual a través de su primer y segunda lactación. Las becerras que fueron alimentadas con 4 litros de calostro en lugar de 2 litros el primer día tuvieron 50% de los costos de veterinario y ganaron 0.23 kg más por día hasta la edad de empadre. Un total de 27 ó 28 de estos animales completaron ambos la primera y segunda lactaciones. Los becerras que fueron alimentados con 4 litros de calostro el primer día de edad comparado con los que recibieron sólo 2 litros, produjeron 11% más leche en su primera lactación. Esta diferencia aun fue mayor cuando al 17% más leche en la segunda lactación Cómo Alcanzar Mejores Retornos en Programas de Becerras Intensivos vs Convencional? Un programa de alimentación que El primer componente es por Hay un beneficio haciendo ambos? En un alimentación con calostro limpio (<100,000 TPC cfu/ml y <10,000 coliformes CFU/ml). Que debe de ser dentro de las primeras 4 horas después del nacimiento, de alta calidad (preferible >50 mg IgG/ml), y se deben de alimentar 4 litros con ayuda de una manguera. Cuanta diferencia hace 4 vs 2 litros de calostros? Un estudio en Wisconsin (Faber et al., 2005) con vacas Brown Swiss lecheras, 68 becerras fueron alimentadas o forzosamente alimentadas con 2 ó 4 litros al inicio de su programa de alimentación durante resulta en becerras que duplican su peso de nacimiento a los 2 meses de edad. experimento con 125 becerras (Soberon y Van Amburgh 2010), alimentaron al inicio con 2 o 4 litros de calostro, así que dentro de cada tratamientos, las becerras fueron alimentadas ya sea con 4 o 12 litros de SL. Con la alimentación de 4 vs 2 litros de calostro se maximizo IgG, ganancia diaria, e incremento de la altura a la cadera; y estas diferencias fueron generalmente mayores cuando las becerras fueron alimentadas con 4 litros de calostro donde también fueron alimentadas con 12 en lugar de 4 litros de SL. 33 Comparación Económica de la Crianza de Becerras... IgG mg/m/ 2 L calostro, 4 L MR 12 L MR 4 L calostro, 4 L MR 12 L MR 80-d ganancia kg a a 81-111 d ganancia kg a 14.2 0.53 0.92 14.7a 0.66a 0.88 a b ab ab 24.8 0.69 0.97 27.5c 0.78b 1.07 b Literatura Citada Bartlett, K.S., F. K. McKeith, M. J. VandeHaar, G. E. Dahl, and J. K. Drackley. 2006. Growth and body composition of dairy calves fed milk replacers containing different amounts of protein at two feeding rates. J. Anim. Sci. 84:1454-1467. Bauman, D. E. 2013. Optimizing productivity in dairy cows: The interface betweengenomics and nutrition. Proc. 3rd International Symposium on Dairy Cow Nutrition and Milk Quality. Beijing, China. 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