Infecciones virales Esperanza de vida en pacientes en tratamiento antirretroviral combinado En la última década, el tratamiento antirretroviral combinado ha conseguido cambiar las perspectivas de un paciente VIH positivo de llevar una vida relativamente normal. Parece evidente el incremento en la supervivencia y la calidad de vida que se ha ido alcanzando con este tratamiento a lo largo de los últimos años, pero, ¿cuántos años puede esperar vivir un paciente de este tipo? Antes de 1996, alrededor de la mitad de los pacientes recién diagnosticados con VIH desarrollaría SIDA o moriría en los siguientes 10 años. Afortunadamente, durante la última década, la supervivencia y calidad de vida de estos pacientes ha aumentado considerablemente gracias al tratamiento antirretroviral combinado. Pero, ¿cuantos años más podría esperar vivir uno de estos pacientes en la actualidad? Con el objetivo de comparar los cambios que se ha ido dando desde 1996 en la mortalidad y la esperanza de vida asociados a este tratamiento, se inició un análisis colaborativo de 14 cohortes en diferentes países ricos. El estudio ART-CC (Antiretroviral Therapy Cohort Collaboration: Colaboración de Cohortes con Terapia Antirretroviral) es una colaboración entre Canadá, Estados Unidos y diferentes países de Europa, en la que se analizaron 14 estudios de cohortes realizados con pacientes VIH positivos que comenzaban tratamientos antirretrovirales. Se compararon 3 periodos: 1996-99, 2000-02 y 200305. Cada estudio de seguimiento debía incluir al menos 100 pacientes mayores de 15 años, infectados por el VIH-1 que, sin haber recibido tratamiento previo, comenzaran un tratamiento antirretroviral de alta efectividad con 3 antirretrovirales al menos (excluidos los inhibidores de la fusión). Las variables de evaluación fueron, en primer lugar, las tasas de mortalidad tanto general, como las de 20 a 44 años. En segundo lugar, los años potenciales de vida perdidos (APVP) y la esperanza de vida a los 20 y a los 35 años. A su vez, todas estas variables fueron estratificadas según edad, sexo, recuento basal de linfocitos CD4 y según si tenían o no un historial de consumo de drogas intravenosas, así como calculadas para los diferentes periodos en estudio. Entre 1996 y 2005, de los 43.355 sujetos estudiados, murieron 2.050 (4.7%), apreciándose una mejoría a lo largo de este lapso de tiempo en estos indicadores de salud. Entre los periodos de 1996-99 y 2003-05 se registró una disminución en la tasa de mortalidad general (de 16,3 a 10,0 muertes por 1000 personas-años). Asimismo, disminuyeron la tasa de mortalidad de edades comprendidas entre 20 y 44 años (de 13,1 a 7,5 muertes) y los APVP (de 365,9 a 189,4 por 1000 personas-años). A su vez, hubo un aumento en la esperanza de vida a los 20 años (de 36,1 a 49,4 años) y a los 35 (de 25,0 a 37,3). Estos indicadores, estudiados en función de los recuentos basales de linfocitos CD4, cambiaron de forma más pronunciada cuanto mayores fueron los recuentos. Los resultados también fueron mejores en mujeres que en hombres, quizá debido a que en éstas, los niveles de CD4 tienden a ser mayores en el momento del diagnóstico (éste suele realizarse antes que en hombres, por los controles prenatales). Por último, en los pacientes con historial de drogodependencia, la mejora en estos indicadores fue menor que en pacientes sin este historial. Este último hecho puede estar relacionado con la adherencia, accesibilidad al tratamiento, uso de drogas ilícitas, coinfección con hepatitis C, consumo de alcohol, tabaco y estatus socioeconómico. A pesar de estos resultados esperanzadores, aun existe una gran diferencia entre la esperanza de vida de la población general y la de los pacientes infectados con VIH. Un paciente que comenzara el tratamiento a los 20 años, podría esperar vivir una media de 43 años más, alrededor de dos tercios de lo que viviría un individuo sin esta enfermedad. Esta diferencia puede deberse tanto a la propia infección, como a aspectos socioeconómicos, de estilo de vida y de salud en general. Aun no se dispone de datos sobre las causas de muerte, ni sobre el efecto en niños o mayores de 44 años. También es importante recordar que estos resultados fueron obtenidos en países con altos niveles económicos, y por tanto, no son aplicables a aquellos en vías de desarrollo, aunque sí son los que se deberían pretender alcanzar. Aun así, éstos son datos muy esperanzadores para aquellos pacientes que en la actualidad están siendo diagnosticados con el VIH. - Hogg R, Lima V, Sterne JAC, et al. Life expectancy of individuals on combination antiretroviral therapy in high-income countries: a collaborative analysis of 14 cohort studies. Lancet. 2008; 372:293-99.