Boat Julio-Agosto 2010 - Archidiócesis de Toledo

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Año CLXV
Marzo 2011
Marzo 2011
BOLETÍN OFICIAL
DEL ARZOBISPADO DE TOLEDO
–MMXI–
N. 3
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Boletín Oficial del Arzobispado de Toledo
Marzo 2011
ÍNDICE
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Sr. Arzobispo
I. Escritos dominicales
-Reacciones, 6 de marzo..................................................................
-Cien días para el Misterio Pascual (I), 13 de marzo............................
-Una misión sin límites, 20 de marzo................................................
-Cien días para el Misterio Pascual (II), 27 de marzo............................
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Secretaría General
Decretos:
-Aprobación de Estatutos
-Hermandad de Ntra. Señora del Pilar, de Yepes.............................
-Cofradía de Ntra. Señora del Amparo, de Toledo.............................
-Hermandad de Ntra. Señora de los Remedios, de Ocaña.................
-Asociación de Amigos del Seminario, de Toledo.............................
-Cofradía de Ntra. Señora de la Soledad y san Sebastián Martír, de
Méntrida...................................................................................
-Hermandad de san Bartolomé Apóstol, de San Bartolomé de las
Abiertas.......................................................................................
Nombramientos..............................................................................
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Boletín Oficial del Arzobispado de Toledo
Año CLXV - Núm. 3
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ARZOBISPADO DE TOLEDO
BOLETÍN OFICIAL
Dirección y Administración: Arco de Palacio, 3. Teléfono 925 224100
Depósito legal TO. 3 - 1958
SR. ARZOBISPO
I. ESCRITOS DOMINICALES
REACCIONES
Escrito dominical, 6 de marzo
No hace muchos días que un sacerdote toledano, que escribe
semanalmente en un periódico local, comentaba el lamentable hecho de
la persecución religiosa contra los cristianos en el mundo; subrayaba
que, aún en medio de actos horrendos de violencia, el Papa, a la vez que
condenaba esto, abogaba por el diálogo entre instituciones civiles y
religiosa, e invitaba a los discípulos de Cristo a no desanimarse ante las
adversidades actuales, «porque el testimonio del Evangelio es y será
siempre un signo de contradicción». Hay que renovar siempre nuestro
compromiso de construir un mundo en que todos puedan profesar
libremente su fe y su religión, viviendo su amor a Dios con todo el corazón
y con toda el alma.
Insistía nuestro sacerdote toledano en mostrar cómo en Egipto, tras el
atentado contra un templo cristiano copto, cristianos y musulmanes se
unían en las protestas contra Hosni Mubarak y oraban juntos para que
viniera un mejor bien común para todos, lejos de la corrupción y la
injusticia. ¿Cómo es posible rezar junto a aquellos que les hacen daño?
Sencillamente porque el cristiano ha de ser el hombre del perdón, que
diariamente se libera de sus rencores, mirando a Aquel que en la cruz
perdonó a sus verdugos; de este modo se siente capaz de superar su rabia
y sus dolor, porque no podemos permitir que la ira y el rencor aniden en
nuestro corazón: nos hace daño.
Todos estos acontecimientos contemporáneos me llevan a una
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Boletín Oficial del Arzobispado de Toledo
reflexión acerca de cómo reaccionar los cristianos ante lo que sucede en
nuestra sociedad que podemos suponer no es cristiano sino que se separan
de nuestra cosmovisión. Ante todo, no compartir justamente con la que
podemos llamar «razón secular» sus puntos de vista, precisamente porque
no es razón sino pseudo razón. Hay que desconfiar, por ejemplo, del ansia
que tantos sienten hoy en día en ciertos países, entre ellos España, de
arrastrar a la Iglesia como Iglesia a la arena política para luchar contra
propuestas que ofenden en su totalidad a la concepción cristiana de la
vida humana porque son poco razonables y suponen una visión
indudablemente reduccionista del ser humano (que la unión entre
personas del mismo sexo sea «matrimonio», otras destrucciones obvias
del matrimonio, los experimentos con embriones humanos, la
«liberación» de la eutanasia y el aborto).
¿Qué hacer entonces? Para nosotros cristianos, ese tipo de «batalla»
política es probablemente una distracción y una trampa. ¿Por qué? En
primer lugar, porque los defensores de esas posturas tienen mucho interés
en que así actuemos; después porque, mirando la historia de la Iglesia, es
difícil imaginarla en el siglo segundo y tercero intentando echar abajo y
controlar el Imperio Romano que la perseguía, en lugar de convertirlo
mostrando la belleza y la bondad de la fe católica. Además también hemos
contribuido nosotros al mismo estado de cosas que ahora nos ofenden
tantos. Es patético ver a algunos cristianos rasgar sus vestiduras ante las
propuestas sobre la vida sexual, por ejemplo, que llega desde la sociedad
secular mientras que, al mismo tiempo, defienden de todo corazón la
autonomía moral de la economía o de la política modernas.
Esa estrategia continuaría ocultando a la mayoría de los cristianos
que el «enemigo» real no está en verdad sólo fuera de nosotros, sino
también y mucho dentro de nosotros, en la exacta medida en que
compartimos aquellos mismos presupuestos cuyas consecuencias
censuramos tan severamente en las decisiones de algunos políticos, pero
generalmente sólo en algunos.
Lo que necesitamos en la presente situación, y que puede marcar una
diferencia con el mundo es ser el cuerpo de Cristo, viviendo en la
comunión del Espíritu Santo en esta hora concreta de la historia. En otras
palabras, la «política» que más necesitamos es la conversión en orden a
construir la Iglesia de nuevo como estandarte entre las naciones.
Rechazamos, pues, esos pretendidos derechos antes enumerados, pero
no nos distraemos y volvemos a que la inmensa energía que el cristianismo
libera en estas cuestiones, para que no sea usada instrumentalmente a
favor de programas políticos que no se identifican ni pueden ser
identificados, de ninguna manera, con la vida que el Señor nos ha dado.
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Esa vida habita en la Iglesia, y no en un partido político, ni siquiera en
uno que eventualmente se presentara a sí mismo como al servicio de los
«valores cristianos».
CIEN DÍAS PARA EL MISTERIO PASCUAL (I)
Escrito dominical, 13 de marzo
La preparación para la fiesta de Pascua y la celebración de su alegría
ocupan tres meses largos, casi una tercera parte del tiempo anual de la
Iglesia. El fruto que queremos conseguir del ejercicio cuaresmal y de la
experiencia de la pascua lo expresa la oración que se reza en la liturgia de
la palabra de la Vigilia Pascual: «Dios todopoderoso y eterno, admirable
siempre en tus obras;que tus redimidos comprendan cómo la creación
del mundo, en el comienzo de los siglos, no fue obra de mayor grandeza
que el Sacrificio Pascual de Cristo en la plenitud de los tiempos».
Es decir, se celebra la Pascua, con su preparación cuaresmal, para que
valoremos con verdad la Redención de Cristo los que experimentamos
con evidencia la Creación: «Llega el día, tu día, en que todo florece», dice
un himno de Cuaresma. El ciclo de Pascua es la celebración privilegiada
del secreto de los siglos, tal y como se manifiesta en Jesucristo. Cien días
para el Misterio Pascual exponen el hondo sentido de las diez decenas de
días en las que resuena la densísima exclamación admirativa del Pregón
Pascual de la Noche Santa que precede al Domingo de Resurrección:
«Esta es la Noche,
en la que por toda la tierra,
los que confiesan su fe en Cristo
son arrancados
de los vicios del mundo
y de la oscuridad del pecado,
son restituidos a la gracia
y son agregados a los santos (…) ¿De qué nos serviría haber nacido
si no hubiéramos sido rescatados?»
Poner al ser humano en condiciones de que se decida definitivamente
a dejar de ser simplemente hombre, según su naturaleza, para comenzar
a ser «nueva criatura» alumbrada en el Misterio de la adopción es el
objetivo de todo el Año Litúrgico, y, por lo mismo, la aspiración del Ciclo
Pascual. A partir de la fe que brilla en la victoria de Cristo, la más perfecta
síntesis de la historia de la salvación obrada por Dios para nosotros se
condensa en la confesión del Pregón Pascual: «¡Necesario fue el pecado
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Boletín Oficial del Arzobispado de Toledo
de Adán, que ha sido borrado por la muerte de Cristo!».
El Santo Padre, Benedicto XVI, como cada año, ha escrito una carta a
todos los católicos del mundo para ayudarnos a vivir mejor la Cuaresma,
que nos lleva a la celebración de la Santa Pascua. Nosotros, comunidad
eclesial, hemos de ser más asiduos a la oración, mientras dirigimos nuestra
mirada hacia el encuentro definitivo con Cristo en la Pascua eterna, y
mientras nos sentimos impulsados a la purificación del espíritu, de cara a
obtener con más abundancia del Misterio de la redención la vida nueva
en Cristo Señor.
Me parece muy importante para nuestra Iglesia de Toledo, en este
curso en el que estamos insistiendo en la Iniciación Cristiana en nuestra
programación pastoral, que el Papa comente con su sabiduría cómo esa
vida nueva se nos haya transmitido el día del Bautismo, cuando «al
participar de la muerte y resurrección de Cristo» comenzó para nosotros
la «aventura gozosa y entusiasmante del discípulo». Aprovechemos estas
hermosas lecciones o catequesis de Benedicto XVI para vivir mejor los
domingos de esta Cuaresma del llamado ciclo A, que tanto tienen que ver
con nuestra Iniciación Cristiana. Lo haremos con más detalle en los
próximos números de «Padre Nuestro».
UNA MISIÓN SIN LÍMITES
Escrito dominical, 20 de marzo
«Por san José, día del Seminario». Ya estamos en san José, el patrono
de la Iglesia Universal, porque su vida, su aliento, su corazón se centraron
en una tarea de la que todos los que somos la Iglesia quedamos
enriquecidos: cuidar del Redentor, cuando Él y María, su esposa, lo
necesitaban más. En él ponemos nuestros ojos para que Jesucristo –que
llama a muchos a ser sacerdotes– para que san José sea intercesor de
nuestros seminaristas del Seminario Menor y de los que ya viven la
experiencia del Seminario Mayor. En ellos se lleva adelante una labor
delicada y necesaria, para que no falten las vocaciones al sacerdocio
ministerial ni sacerdotes a nuestras parroquias, ni sacerdotes diocesanos
que trabajen, como fidei donum (como un don de la fe) en otras Diócesis
de América y España.
¿Qué haces tú, sacerdote de Toledo, que vives en una comunidad
parroquial o en otra misión diocesana? Importa mucho que experimentes
con frecuencia que el don espiritual que recibiste en tu ordenación
sacerdotal no te preparó para una misión limitada o restringida, sino a
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una misión amplísima, que llena el corazón, porque es la misión confiada
por Cristo a los apóstoles. Si lo vives así, a tu alrededor crecerán jóvenes
y adolescentes que descubran en tu persona que Cristo les llama a ellos
también para igual misión. Tú y yo sabemos que llevamos este don en
«vasijas de barro», que sentimos muchas veces la debilidad humana, pero
que sólo en nuestra carne hacemos visible el amor de Jesús a la
humanidad. Debemos estar, así, lejos de soberbias o posturas sabihondas
o de creer que no podemos anunciar a niños y jóvenes que el Señor llama
a muchos a ser sacerdotes.
«El sacerdote es un don del Corazón de Cristo: un don para la Iglesia y
para el mundo. Del Corazón del Hijo de Dios, desbordante de caridad,
proceden todos los bienes de la Iglesia y en él tienen su origen de modo
especial la vocación de aquellos hombres que, conquistados por el Señor
Jesús, lo dejan todo para dedicarse completamente al servicio del pueblo
cristiano, siguiendo el ejemplo del Buen Pastor (…). El sacerdote es
plasmado por la misma caridad de Cristo, por ese amor que le llevó a dar
la vida por sus amigos y a perdonar a sus enemigos. Por este motivo, los
sacerdotes son los primero sobreros en la civilización del amor»
(Benedicto XVI, Ángelus del 13 de junio de 2010).
Yo deduzco de estas palabras del Papa algunos acentos a tener en cuenta
en nuestra vida de pastores: nuestra vida de curas vale e interesa, aunque
tantas veces se desprestigia y se presenta como cosa del pasado. Por ello,
sin valorar lo que somos es imposible psicológicamente entusiasmar a
otros a seguir a Cristo por este camino. Se lo decía el Papa a los
seminaristas en la carta que les escribió el 18 de octubre de 2010:
«Vosotros, queridos amigos, habéis decidido entrar en el Seminario y,
por tanto, os habéis puesto en camino hacia el ministerio sacerdotal en la
Iglesia católica, en contra de estas objeciones y opiniones». No podemos
tampoco dudar que los hombres, también hoy, seguirán tendiendo
necesidad de Dios, del Dios manifestado en Jesucristo y que nos reúne en
la Iglesia universal para aprender de Él la vida verdadera, y tener presentes
y operativos los criterios de una humanidad verdadera. Todos los
cristianos estamos llamados a esta tarea, pero, ¿acaso no lo están los
sacerdotes y los que se preparan a ello?
Los seminaristas no podéis vivir en una burbuja. Sí, necesitáis del
trabajo, del silencio, de la disciplina, de la oración y de la formación del
Seminario, época muy concreta que es a la vez acicate y discernimiento
en la purificación de la vocación que habéis recibido. Pero debéis saber y
experimentar qué piensan algunos padres cuyos hijos quieren ser curas
y no se les pasa por la mente que así sea; vuestros padres os ayudan, sin
duda, pero debéis enfrentaros a esa forma de pensar que tienen de vosotros
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Boletín Oficial del Arzobispado de Toledo
tantos jóvenes cristianos, o aquellos que abandonan silenciosamente la
vida de la Iglesia. En efecto, muchos piensan cómo siendo jóvenes habéis
decidido seguir la llamada de Cristo; y entre lo que piensan está la
indiferencia, la incomprensión, la incredulidad de que eso sea b
ueno, y un cierto desprecio o mejor, no aprecio de lo que hacéis. Con
los jóvenes católicos, que sufren la misma incomprensión por vivir el
seguimiento de Jesús, también vosotros debéis apoyaros en Cristo y,
viviendo la belleza de la fe, ofrecer una alternativa a una vida sin sentido,
sin rumbo, sin Dios en definitiva, que lleva a una sociedad cerrada en el
consumismo, en una vida sin relieve y sin alegría.
«Por san José, día del Seminario». A todos cuantos apreciáis nuestro
Seminario, que le ayudáis, que os ilusiona que haya jóvenes dispuestos a
no vivir para sí, sino para los demás, os agradezco de corazón vuestra
ayuda económica, pero sobre todo vuestra oración, vuestra cercanía,
cuanto hacéis para que no se destruya entre nosotros, en Toledo, el
«ambiente vocacional», que tal vez no haya en otros lugares de la Iglesia.
Quiero reconocer públicamente mi agradeciendo a los padres y familias
de sacerdotes y seminaristas, a los amigos del Seminario, a las parroquias
que cuidan la vocación, a los sacerdotes que se preocupan por niños,
adolescentes y jóvenes con posibles vocación. A los formadores del
Seminario, a los profesores del Instituto Teológico y del Instituto de
Ciencias Religiosas.
Nuestro Seminario tiene futuro. Lo avalan los chicos que en un número
tan satisfactorio empezaron este curso de estudios de Teología y la
andadura del Seminario Mayor. ¿Podemos morir de satisfacción? Nunca.
El esfuerzo que esta Iglesia de Toledo ha hecho, la implicación de los
arzobispos mis antecesores; el ejemplo en concreto del Cardenal Marcelo
González Martín, cuyos cincuenta años de ordenación episcopal estamos
celebrando, con su cuidado exquisito del Seminario, me estimula a mí,
vuestro Arzobispo en esta tarea primordial.
CIEN DÍAS PARA EL MISTERIO PASCUAL (II)
Escrito dominical, 27 de marzo
Recordamos que hace quince días hacíamos referencia a ese mensaje
que Benedicto XVI ha escrito para la Cuaresma 2011, en el cual subrayaba
lo vinculado que está el Bautismo con la Cuaresma. Prometimos entonces
seguir la reflexión del Papa, pues en el Bautismo se realiza el gran misterio
por el cual el hombre muere al pecado, participa de la vida nueva de
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Jesucristo Resucitado y recibe el mismo espíritu de Dios que resucitó a
Jesús de entre los muertos. Ese don gratuito debe ser reavivado en cada
uno de nosotros y la Cuaresma nos ofrece un recorrido análogo al
catecumenado, que «para los cristianos de la Iglesia antigua, así como
para los catecúmenos de hoy, es una escuela insustituible de fe y de vida
cristiana».
Por esta razón la Iglesia, en los textos de los domingos de esta
Cuaresma, nos guía a un encuentro especialmente intenso con el Señor,
haciéndonos recorrer las etapas del camino de la Iniciación cristiana:
para los catecúmenos en la perspectiva de ser bautizados en la noche
pascual, y para los que estamos bautizados, con vistas a nuevos y
decisivos pasos en el seguimiento de Cristo y en la entrega más plena a Él.
Lo hemos vista ya en el primer domingo de Cuaresma, que subraya que
somos débiles y somos tentados; por ello la Iglesia presenta a Cristo que
triunfa de las tentaciones y nos indica que su gracia nos libera del pecado
e infunde en nosotros nuevas fuerzas en Cristo, camino, verdad y vida. De
este modo se abre para nosotros un camino de esperanza contra las
seducciones del mal.
En el segundo domingo, la transfiguración del Señor en un monte alto
pone delante de nosotros la gloria de Cristo, que anticipa la resurrección
y anuncia que seremos divinizados; es también una invitación a alejarse
algo del ruido de la vida diaria para sumergirse en la presencia de Dios.
Hay que aprovechar un tiempo de retiro o de ejercicios espirituales, la
preparación de la Pascua que haya en tu parroquia (en charlas
cuaresmales, vía crucis, ratos de oración, lectio divina o cualquier otro
modo de orar). En la presencia de Dios puede Él transmitirnos una palabra
que penetre en las profundidades de nuestro espíritu, allí donde se
distingue entre el bien y el mal y fortalece la voluntad de seguir al Señor.
En el tercer domingo la Iglesia lee un apasionante relato en el que
Jesús pide a la mujer samaritana: «Dame de beber» (Jn 4,7). Leamos
despacio ese precioso texto, en el que se expresa toda la pasión de Dios
por todo hombre y mujer y que quiere suscitar en nuestro corazón el
deseo del don del «agua que brota para la vida eterna»: es el don del
Espíritu Santo, que hace a los cristianos «adoradores verdaderos» capaces
de orar al Padre «en espíritu y en verdad». ¡Sólo esta agua puede apagar
nuestra sed de bien, verdad y belleza!
En los textos bíblicos de este tercer domingo de Cuaresma hay, además,
sugerencias útiles para la meditación. A través del símbolo del agua, que
encontramos en la primera lectura y en el pasaje evangélico de la
samaritana, la palabra de Dios nos transmite un mensaje siempre vivo y
actual: Dios tiene sed de nuestra auténtica felicidad. Todo creyente corre
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Boletín Oficial del Arzobispado de Toledo
el peligro de practicar una religiosidad no auténtica, de no buscar en Dios
la respuesta a las expectativas más íntimas del corazón, sino de utilizar
más bien a Dios como si estuviera al servicio de nuestros deseos y
proyectos.
En el diálogo entre Jesús y la samaritana vemos delineado el itinerario
espiritual que cada uno de nosotros, que cada comunidad cristiana está
llamada a redescubrir y recorrer constantemente. Esa página evangélica,
proclamada en tiempo cuaresmal, asume un valor particularmente
importante para los catecúmenos ya próximos al Bautismo. En efecto,
este tercer domingo de Cuaresma está relacionado con el así llamado
«primer escrutinio», que es un rito de purificación y de gracia.
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SECRETARÍA GENERAL
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DECRETOS
Nos, DOCTOR DON BRAULIO RODRÍGUEZ PLAZA,
por la misericordia divina Arzobispo de Toledo,
Primado de España,
Aceptada la instancia que nos presenta la Hermandad de Nuestra
Señora del Pilar, con domicilio social en la Iglesia parroquial de San Benito
Abad de YEPES (Toledo), junto con los Estatutos por los que han de
regirse, solicitando la aprobación de los mismos, así como la erección
canónica de la Hermandad, como persona jurídica pública de la Iglesia.
Examinados los referidos Estatutos en los que se determina el objetivo
social de la Hermandad, y visto que se encuentran en todo conforme a lo
preceptuado por el Código de Derecho Canónico (cc. 301 y 312 al 320), y
obtenido previamente el dictamen favorable del Sr. Director del
Secretariado de Hermandades y Cofradías, por el presente,
DECRETO
1. La aprobación de los Estatutos de la Hermandad de Nuestra Señora
del Pilar de YEPES (Toledo), según la redacción de Estatutos que se
acompaña a este oficio, aprobada en Asamblea General celebrada el 6 de
noviembre de 2010 y verificados por el Canciller-Secretario.
2. La erección canónica de la Hermandad, quedando constituida en
asociación pública de la Iglesia en esta Archidiócesis, y le concedemos
personalidad jurídica pública.
Confío que la Hermandad ayude a todos sus miembros a vivir una
vida cristiana más profunda y auténtica, que contribuya a propagar la
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Boletín Oficial del Arzobispado de Toledo
devoción y culto a la Santísima Virgen María en su advocación de Nuestra
Señora del Pilar, así como a un mayor compromiso caritativo y apostólico.
Dese traslado a la Hermandad un ejemplar de los Estatutos, con el
presente Decreto, y guárdese otro ejemplar en el Archivo de esta Curia.
Dado en Toledo, a 2 de febrero de 2011.
? BRAULIO RODRÍGUEZ PLAZA
Arzobispo de Toledo
Primado de España
Por mandato de Su Excia. el Sr. Arzobispo Primado
JOSÉ LUIS FERNÁNDEZ-MARCOTE
Canciller-Secretario General
***
Nos, DOCTOR DON BRAULIO RODRÍGUEZ PLAZA,
por la misericordia divina Arzobispo de Toledo,
Primado de España,
Aceptada la instancia que nos presenta la Cofradía de Nuestra Señora
del Amparo de TOLEDO, erigida canónicamente el 22 de febrero de 1958
y con sede canónica en la Iglesia parroquial de San Ildefonso, calle Méjico,
12, de TOLEDO, solicitando la aprobación de los nuevos Estatutos,
reformados conforme a las normas canónicas y diocesanas vigentes;
Examinados los referidos Estatutos en los que se determina el objetivo
social de la Cofradía, y visto que se encuentran en todo conforme a lo
preceptuado por el Código de Derecho Canónico (cc. 301 y 312 al 320), y
obtenido previamente el dictamen favorable del Sr. Director del
Secretariado de Hermandades y Cofradías, por el presente,
DECRETO
La aprobación de los Estatutos por los que en adelante ha de regirse la
Cofradía de Nuestra Señora del Amparo de TOLEDO, según la nueva
redacción aprobada en Asamblea General Extraordinaria del 25 de agosto
de 2010 y verificados por el Canciller-Secretario.
Confío que la Cofradía ayude a todos sus miembros a propagar la
devoción y amor a la Santísima Virgen María en la venerada advocación
de Nuestra Señora del Amparo, así como a un mayor compromiso
caritativo y apostólico.
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Marzo 2011
Dese traslado a la Cofradía un ejemplar de los Estatutos, con el presente
Decreto, y guárdese otro ejemplar en el Archivo de esta Curia.
Dado en Toledo, a 3 de marzo de 2011.
? BRAULIO RODRÍGUEZ PLAZA
Arzobispo de Toledo
Primado de España
Por mandato de Su Excia. el Sr. Arzobispo Primado
JOSÉ LUIS FERNÁNDEZ-MARCOTE
Canciller-Secretario General
***
Nos, DOCTOR DON BRAULIO RODRÍGUEZ PLAZA,
por la misericordia divina Arzobispo de Toledo,
Primado de España,
Aceptada la instancia que nos presenta la Hermandad de Nuestra
Señora de los Remedios, erigida canónicamente el 25 de agosto de 1989 y
con domicilio social en la Iglesia de San Juan Bautista de la parroquia de
Santa María de la Asunción de OCAÑA (Toledo), solicitando la aprobación
de los nuevos Estatutos reformados conforme a las normas canónicas y
diocesanas vigentes;
Examinados los referidos Estatutos en los que se determina el objetivo
social de la Hermandad, y visto que se encuentran en todo conforme a lo
preceptuado por el Código de Derecho Canónico (cc. 301 y 312 al 320), y
obtenido previamente el dictamen favorable del Sr. Director del
Secretariado de Hermandades y Cofradías, por el presente,
DECRETO
La aprobación de los Estatutos de la Hermandad de Nuestra Señora de
los Remedios de OCAÑA (Toledo), según la nueva redacción aprobada en
Asamblea General Ordinaria celebrada el 12 de junio de 2010 y
verificados por el Canciller-Secretario.
Confío que la Hermandad ayude a todos sus miembros a vivir una vida
cristiana más profunda y auténtica, que contribuya a propagar la devoción
y culto a la Santísima Virgen María en la venerada advocación de Nuestra
Señora de los Remedios, así como a un mayor compromiso caritativo y
apostólico.
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Boletín Oficial del Arzobispado de Toledo
Dese traslado a la Hermandad un ejemplar de los Estatutos, con el
presente Decreto, y guárdese otro ejemplar en el Archivo de esta Curia.
Dado en Toledo, a 3 de marzo de 2011.
? BRAULIO RODRÍGUEZ PLAZA
Arzobispo de Toledo
Primado de España
Por mandato de Su Excia. el Sr. Arzobispo Primado
JOSÉ LUIS FERNÁNDEZ-MARCOTE
Canciller-Secretario General
***
Nos, DOCTOR DON BRAULIO RODRÍGUEZ PLAZA,
por la misericordia divina Arzobispo de Toledo,
Primado de España,
En atención a la petición a la petición presentada en este Arzobispado
por el Rvdo. Sr. D. José María Anaya Higuera, Rector del Seminario
Conciliar San Ildefonso de TOLEDO, con domicilio social en la Plaza de
San Andrés, 3, 45002 TOLEDO, en la que expresa su anhelo de constituir
una Asociación de Amigos del Seminario que sea cauce y expresión de la
cercanía y solicitud de la Archidiócesis por los llamados al sacerdocio
ministerial, por lo que solicita su reconocimiento canónico diocesano,
así como la aprobación de sus Estatutos.
Examinados los referidos Estatutos en los que se determinan la
naturaleza y fines religiosos y apostólicos de la Asociación, visto que se
encuentran en todo conforme a lo preceptuado en el Código de Derecho
Canónico, y obtenido previamente el dictamen favorable de M.I. Sr. Fiscal
General del Arzobispado, por el presente,
DECRETO
1. La aprobación de los Estatutos de la Asociación Amigos del
Seminario de TOLEDO, según la redacción de Estatutos que se acompaña
a este oficio.
2. La erección canónica de la Asociación, como asociación pública de
fieles, dotada de personalidad jurídica, a tenor del canon 298-320 del
Código de Derecho Canónico.
Ordenamos que se consignen en la Secretaría General del Arzobispado
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Marzo 2011
dos ejemplares de estos Estatutos con el presente Decreto, y un ejemplar
quede en el archivo de la Asociación, todos debidamente compulsados.
Dado en Toledo, a 19 de marzo de 2011,
Solemnidad de San José, Patrono del Seminario.
? BRAULIO RODRÍGUEZ PLAZA
Arzobispo de Toledo
Primado de España
Por mandato de Su Excia. el Sr. Arzobispo Primado
JOSÉ LUIS FERNÁNDEZ-MARCOTE
Canciller-Secretario General
***
Nos, DOCTOR DON BRAULIO RODRÍGUEZ PLAZA,
por la misericordia divina Arzobispo de Toledo,
Primado de España,
Aceptada la instancia que nos presenta la Cofradía de Nuestra Señora
de la Soledad y San Sebastián mártir, con domicilio social en la Iglesia
parroquial de San Sebastián de MÉNTRIDA (Toledo), junto con los
Estatutos por los que han de regirse, solicitando la aprobación de los
mismos, así como la erección canónica de la Cofradía, como persona
jurídica pública de la Iglesia.
Examinados los referidos Estatutos en los que se determina el objetivo
social de la Hermandad, y visto que se encuentran en todo conforme a lo
preceptuado por el Código de Derecho Canónico (cc. 301 y 312 al 320), y
obtenido previamente el dictamen favorable del Sr. Director del
Secretariado de Hermandades y Cofradías, por el presente,
DECRETO:
1. La aprobación de los Estatutos de la Cofradía de Nuestra Señora de
la Soledad y San Sebastián de MÉNTRIDA(Toledo), según la redacción de
Estatutos que se acompaña a este oficio, aprobados en Asamblea General
celebrada el 3 de marzo de 2011, y verificados por el Canciller-Secretario.
2. La erección canónica de la Cofradía, quedando constituida en
asociación pública de la Iglesia en esta Archidiócesis, y le concedemos
personalidad jurídica pública.
Confío que la Cofradía ayude a todos sus miembros a vivir una vida
66
Boletín Oficial del Arzobispado de Toledo
cristiana más profunda y auténtica, así como a un mayor compromiso
caritativo y apostólico.
Dese traslado a la Cofradía un ejemplar de los Estatutos, con el presente
Decreto, y guárdese otro ejemplar en el Archivo de esta Curia.
Dado en Toledo, a 30 de marzo de 2011.
? BRAULIO RODRÍGUEZ PLAZA
Arzobispo de Toledo
Primado de España
Por mandato de Su Excia. el Sr. Arzobispo Primado
JOSÉ LUIS FERNÁNDEZ-MARCOTE
Canciller-Secretario General
***
Nos, DOCTOR DON BRAULIO RODRÍGUEZ PLAZA,
por la misericordia divina Arzobispo de Toledo,
Primado de España,
Aceptada la instancia que nos presenta la Hermandad de San Bartolomé
Apóstol, con domicilio social en la Iglesia parroquial de San Bartolomé
Apóstol de SAN BARTOLOMÉ DE LAS ABIERTAS (Toledo), junto con los
Estatutos por los que han de regirse, solicitando la aprobación de los
mismos, así como la erección canónica de la Hermandad, como persona
jurídica pública de la Iglesia.
Examinados los referidos Estatutos en los que se determina el objetivo
social de la Hermandad, y visto que se encuentran en todo conforme a lo
preceptuado por el Código de Derecho Canónico (cc. 301 y 312 al 320), y
obtenido previamente el dictamen favorable del Sr. Director del
Secretariado de Hermandades y Cofradías, por el presente,
DECRETO
1. La aprobación de los Estatutos de la Hermandad de San Bartolomé
Apóstol de SAN BARTOLEMÉ DE LAS ABIERTAS (Toledo), según la
redacción de Estatutos que se acompaña a este oficio, aprobada en
Asamblea General celebrada el 19 de diciembre de 2010 y verificados
por el Canciller-Secretario.
2. La erección canónica de la Hermandad, quedando constituida en
asociación pública de la Iglesia en esta Archidiócesis, y le concedemos
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Marzo 2011
personalidad jurídica pública.
Confío que la Hermandad ayude a todos sus miembros a vivir una
vida cristiana más profunda y auténtica, que contribuya a propagar la
devoción y culto a su santo patrono San Bartolomé Apóstol, así como a
un mayor compromiso caritativo y apostólico.
Dese traslado a la Hermandad un ejemplar de los Estatutos, con el
presente Decreto, y guárdese otro ejemplar en el Archivo de esta Curia.
Dado en Toledo, a 30 de marzo de 2011.
? BRAULIO RODRÍGUEZ PLAZA
Arzobispo de Toledo
Primado de España
Por mandato de Su Excia. el Sr. Arzobispo Primado
JOSÉ LUIS FERNÁNDEZ-MARCOTE
Canciller-Secretario General
NOMBRAMIENTOS
El Sr. Arzobispo ha firmado los siguientes nombramientos:
Con fecha 30 de abril:
–D. Enrique Rico Pavés, administrador del Instituto Superior de Estudios
Teológicos San Ildefonso, de Toledo.
–D. José Rico Pavés, director del Instituto Superior de Estudios
Teológicos San Ildefonso, de Toledo, por un trienio.
–D. José Aurelio Jiménez Guillén, profesor invitado de Teología en el
Instituto Superior de Estudios Teológicos San Ildefonso, de Toledo.
–D. Miguel Ángel Dionisio Vivas, profesor invitado de Historia en el
Instituto Superior de Estudios Teológicos San Ildefonso, de Toledo.
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