Boletín 46 Retos de la Evaluación del Impacto Social Iniciativa para el Desarrollo Ambiental y Sustentable, S.C. Noviembre 2015 En seguimiento al Boletín 45, la presente nota tiene por objetivo referir algunos de las deficiencias y/odudas que se han identificado de la Evaluación del Impacto Social a poco más de un año de la publicación de las leyes que crearon este instrumento, es decir la Ley de Hidrocarburos y la Ley de la Industria Eléctrica. En los últimos años ha sido evidente el rechazo social a múltiples proyectos de diversa naturaleza, llegando en muchos casos a detenerlos, de ahí la importancia de contar con un instrumento que no sólo identifique impactos (positivos y negativos), sino que influya en la toma correcta de decisiones y que contribuya al tan anhelado desarrollo sustentable. Si bien la regulación mexicana ambiental ha contemplado la participación social en temas como el procedimiento de evaluación del impacto ambiental, lo cierto es que este último tiene una naturaleza diversa a la evaluación del impacto social. A diferencia del primero, que tiene por finalidad prever impactos sobre el medio ambiente, el segundo se refiere a los efectos que determinado proyecto tendrá sobre la comunidad, aunque cabe señalar que los ordenamientos jurídicos que regulan la EIS no definen qué debe entenderse por impacto social y aunque pareciera obvio, lo cierto es que sus límites resultan importantes. En este sentido, la exposición de motivos de la Ley de Hidrocarburos señala que Para el sector energético resulta necesario establecer procedimientos que permitan a las autoridades competentes contar con la información completa y oportuna de la relación que se generaría entre un proyecto y una comunidad, para salvaguardar en todo momento el bienestar y desarrollo de las mismas, garantizar la viabilidad y rentabilidad social de los proyectos, y reducir los riesgos de inversión y costos de transacción para los desarrolladores e inversionistas. Cabría preguntarse entonces si con la regulación actual de la EIS se cumpliría dicho objetivo. Es por ello que resulta importante conocer los alcances de la EIS en términos de la legislación vigente, pues poco se sabe de este instrumento. Retos de la Evaluación del Impacto social 2 Al 05 de octubre del año en curso se habían ingresado ante la Secretaría de Energía (SENER) un total de 285 Evaluaciones de Impacto Social, mismas que incluyen desde proyectos de cogeneración, estaciones de gas, líneas de transmisión, plantas fotovoltaicas, hasta plantas hidroeléctricas, prospecciones sísmicas y levantamientos sismológicos, siendo los promotores tanto particulares como dependencias del sector público, como la Comisión Federal de Electricidad o Petróleos Mexicanos; mientras que al 13 de agosto del 2015 se habían emitido un total de 20 resoluciones. No olvidemos que la SENER cuenta con un periodo de 90 días hábiles a partir de la presentación de las EIS para emitir su resolución. En este sentido, resulta oportuno señalar que en el Boletín pasado se hizo referencia a la palabra autorización, sin embargo, en términos de la propia legislación en la materia, así como el Reglamento Interior de la SENER, ésta no emite autorizaciones, sino resoluciones, sin que la legislación indique los sentidos en los que puede emitirse estas resoluciones, como sí sucede por ejemplo en materia de impacto ambiental. De modo que cabe preguntarse si ¿es posible que una vez presentada una EIS se niegue? Más aún está la pregunta de si, basta la presentación de la EIS y las recomendaciones de la SENER para que el proyecto sea viable socialmente, ¿se cumple con eso su objetivo? Pues en términos de la legislación que regula el tema, la consulta se realizará cuando existan comunidades y pueblos indígenas, entendidos éstos en los términos de la Constitución como: • Pueblo indígena: Aquellos que descienden de poblaciones que habitaban en el territorio actual del país al iniciarse la colonización y que conservan sus propias instituciones sociales, económicas, culturales y políticas, o parte de ellas. • Comunidad indígena: Aquel que desciende de poblaciones que habitaban en el territorio actual del país al iniciar la colonización y que conservan sus propias instituciones sociales, económicas, culturales y políticas o parte de ellas. Aunado a lo señalado, como ya se indicó en el primer boletín, la legislación prevé el contenido y procedimiento general de resolución de EIS, así, el contenido de una EIS debe ser el siguiente: - Identificación Caracterización Predicción Valoración - Planes de gestión social Impactos y Medidas de prevención y mitigación Pese a lo anterior, no se determinan los alcances de estos términos, siendo particularmente de interés el plan de gestión social. Tampoco se determina qué pasaría si se incumple ese plan de gestión social. En este sentido ha sido cuestionado el hecho de que el desarrollo social es una obligación del Estado, y pareciera que con la EIS y los denominados planes de gestión, son los particulares quienes adquieren la obligación de “generar bienestar social”. 2 Retos de la Evaluación del Impacto social 2 Al respecto, cabe señalar que las disposiciones administrativas que en términos de la ley deben expedirse para definir metodologías, siguen sin emitirse, mientras que del borrador de las mismas disponibles en COFEMER se desprenden varios aspectos cuestionables, entre ellos los siguientes: 1. Se determinan qué actividades se encuentran sujetas a EIS. Si bien algunos proyectos podrán no presentar EIS, en virtud de lo que se señala en estas disposiciones, y ello podría ser plausible en virtud de que existen proyectos que por su capacidad y ubicación podrían no llegar a tener impactos sociales negativos, lo cierto es que ello debería constar en Ley y/o Reglamento, máxime si se considera que la Ley solo establece dos excepciones para no presentar EIS (tampoco claras) y son aplicables sólo a actividades del sector hidrocarburos, sumado al hecho al que es el Reglamento de Actividades a las que se refiere el Título Tercero de la Ley de Hidrocarburos del que se desprenden con mayor facilidad las actividades sujetas a permiso y que por ende requieren presentar EIS. 2. Se establece que el EIS debe ser elaborado considerando una línea base (primera medición de indicadores), misma que debe incluir variables como como salud, educación, orden público, vivienda, seguridad social, sin embargo por cuanto hace a la identificación de impactos sociales hay implica determinar los impactos que afectarán a variables como cambios familiares, recursos políticos, estructuras comunitarias, lo que no parece ser congruente. 3. Se determina que el plan de gestión social debe integrarse de al menos 6 planes, entre ellos el plan de inversión social y el plan de salud y seguridad, sin embargo en nuestra opinión el plan de gestión social debe estar ligado con los impactos que se generarán del proyecto y no necesariamente deberían incluir un plan de salud y seguridad si no se tendrán impactos sobre estos sectores. De lo antes descrito se puede concluir que si bien es cierto, todo proyecto tendrá un efecto positivo y/o negativo en su entorno, entendiendo éste no sólo en lo ambiental, lo cierto es que la EIS como actualmente está prevista genera mucha confusión e incertidumbre, que esperamos sobre la marcha vayan dilucidándose, pues solo así se logrará la finalidad a la que se refiere la exposición de motivos de la Ley de Hidrocarburos, y no sólo en un mero trámite más. **El presente artículo reflejan únicamente la opinión de los integrantes de IDEAS. Si desea mayor información favor de comunicarse con: Lic. Daniel Basurto / [email protected] ® Monte Elbruz # 132, Despacho 202, Col. Lomas de Chapultepec, Del. Miguel Hidalgo, C.P. 11000, México, D.F. Tels: +52 (55) 5998-4800, 5281-7271 [email protected] www.iniciativasustentable.com.mx 3