Resumen Análisis proyecto Reforma Laboral Gobierno Michelle Bachelet. De acuerdo a los principios del documento desarrollado por la Mesa laboral de Horizontal, consideramos el Proyecto de Ley (PDL) como deficiente ya que apunta exclusivamente a modificar el sistema de relaciones laborales, pero no aborda a los temas centrales que aquejan el actual mercado laboral: inclusión de trabajadores, capacitación y productividad. En términos generales, se refuerza excesivamente al sindicato como mecanismo de diálogo permanente en la empresa, pero no se hace cargo de la diversidad que existe al interior de ésta y mucho menos entre las empresas de un determinado sector (es un proyecto que excluye a empresas de pocos trabajadores), lo que introduce nuevas rigideces al mercado. Además, podría provocar un aumento en la judicialización de casos para resolver conflictos laborales. Creemos que este proyecto desequilibra la capacidad de negociación excesivamente a favor de los sindicatos, no así al conjunto de trabajadores dentro de una empresa. Además, pone al empleador en una situación forzosa con pocas alternativas para la resolución de conflictos, lo que se traduce en el deterioro en las condiciones de empleo de aquellos trabajadores que no pretenden sindicalizarse o no están interesados, pues la única forma de interactuar con su empleador (en materia de derechos colectivos) depende exclusivamente de la afiliación a un sindicato. El proyecto, sin decirlo explícitamente, pone todos los incentivos a la creación de sindicatos únicos, lo que podría vulnerar ciertas libertades individuales. Aspectos positivos 1. Ampliación de materias: Este punto es un avance en temas de adaptabilidad de jornadas en los diversos sectores, por lo que se considera una buena noticia: permitirá solucionar los actuales conflictos laborales (como el del sector portuario y transporte) sin tener que recurrir a la Dirección del Trabajo. Aún persiste la imposibilidad de discontinuar jornadas, o exceder el límite de 12 horas diarias y, más importante todavía, los requisitos para implementarla son excesivamente altos, lo que puede resultar inefectiva para una gran cantidad de trabajadores. 1 Resumen 2. Incorporación de otros trabajadores a procesos de negociación: Es positivo que otros trabajadores se sumen a la negociación colectiva, porque da mayor pertinencia a ésta. Hay que revisar en detalle las consecuencias de “trabajadores de confianza”. 3. Simplificación del proceso y mediación: El proceso de negociación colectiva es más expedito y elimina los excesivas formalidades que debían cumplir las partes, que muchas veces iban en contra de los acuerdos. Además, la mediación tiene un fuerte rol en el proceso: sus tres modalidades: Forzada, Voluntaria y Obligatoria permiten tener varios mecanismos de resolución antes de forzar una huelga. 4. Mecanismos de solución alternativos: El proyecto propone una resolución de conflictos laborales y negociación colectiva a través de un sistema arbitral para aquellas empresas que estén impedidas de generar negociación colectiva y para las pequeñas empresas. 5. Equilibrar las responsabilidades de acción de empleadores y trabajadores: Se avanza en la tipificación de prácticas antisindicales y conductas abusivas por parte de los trabajadores, como el mal uso de fueros, las acciones violentas en el marco de la negociación colectiva y faltar a los turnos mínimos. No obstante, aún se puede avanzar en incentivar el buen actuar de los sindicatos, pues el proyecto carga fuertemente la responsabilidad a los empleadores. Aspectos Negativos 1. Eliminación extensión de beneficios y beneficios extendidos automáticamente por afiliación: Esto punto implica limitar fuertemente la capacidad de administración del empleador de su propio negocio y desequilibraría el poder de la negociación a favor de los sindicatos, obligando así a una afiliación forzosa. Este punto nos parece el más sensibles del proyecto, pues encubre una participación obligada de los trabajadores en las actividades sindicales, lo que vulnera directamente su libertad y los convenios sobre libertad sindical que cita dicho proyecto (esto sin embargo no implicaría mayor costo, puesto que la mayoría de los empleadores extienden beneficios completos). 2. Negociación inter-empresa: Otro aspecto de preocupación es forzar la negociación inter-empresa en aquellas donde el sindicato tenga el cuórum exigido a un sindicato empresa. Se esconde detrás de esto una posibilidad de negociación ramal, sin posibilidad de que el empleador pueda elegir. Esta disposición del articulado no respeta la diversidad productiva que existe en un determinado conjunto de empresas y las 2 Resumen fuerza a seguir procedimientos generales que podrían atentar significativamente en aquellos sectores heterogéneos. 3. Pisos mínimos: Encarece fuertemente los costos asociados a los procesos de negociación y genera un incentivo para que un empleador racional disponga de ofertas con menores beneficios a los que actualmente se podría acceder. Además, no existen mecanismos para exceptuar a la empresa de dicha obligación ante momentos de crisis. 4. Fin del reemplazo con poca claridad de la definición de los servicios mínimos: No equilibra de manera adecuada el derecho a huelga y el derecho a desarrollar la actividad económica. En ambos casos no se entiende sin hacerlos necesariamente rivales, en este sentido la propuesta del gobierno que prohíbe el reemplazo con trabajadores internos (reemplazo funcional) parece excesivo y vulneraría el segundo principio. Una huelga podría afectar especialmente aquellas empresas más pequeñas o donde exista un sindicato único muy grande, pues se corre el riesgo de paralizar completamente la actividad de la empresa. Es preciso asegurar la conservación del empleo de aquellos trabajadores que no participan de la huelga y la subsistencia de la empresa, sólo de esta formas se podrán equilibrar ambos derechos 5. Eliminación del descuelgue: vulnera la libertad y sana convivencia de los trabajadores: La actual legislación contempla la posibilidad individual de retirarse de una huelga e incorporarse a sus labores, sin embargo, el proyecto elimina estos derechos, forzando a todos los trabajadores a seguir a la dirigencia incluso en situaciones donde podrían no estar de acuerdo. 6. Eliminación de los grupos negociadores: La titularidad sindical no representa un problema en la medida que implique tener una real representación de la diversidad de trabajadores dentro de una empresa. El hecho que se fuerce a negociar con los sindicatos, por el sólo hecho de existir dentro de una empresa rigidiza el sistema de relaciones al interior de ésta y fuerza conflictos, no sólo con el empleador, sino también entre trabajadores. Que el proyecto de ley elimine los grupos negociadores sin ofrecer una solución real a la diversidad productiva dentro de una empresa, es algo negativo. 7. Interpretación de prácticas antisindicales: Se endurecen fuertemente las prácticas antisindicales, pero ya no son sólo consideradas aquellas acciones directas, sino también acciones que se presuman. La redacción de este artículo no deja un criterio claro y podría significar la judicialización de muchos procesos. Además se considera práctica antisindical la extensión de beneficios. 3 Resumen 8. Otros puntos débiles: • Plazos para reclamación a tribunales • Reducción de la vigencia máxima de los contratos colectivos • Mala regulación de la entrega de información • Posible alza en la judicialización de conflictos. Temas ausentes Es imposible concebir una buena reforma si no se avanza de manera integral en los aspectos estructurales que afecta al mercado del trabajo, en este sentido, el proyecto de ley sigue abarcando sólo un aspecto del mercado laboral, dejando fuera temas que impactan en la posibilidad de crear empleos, tales como: 1. 2. 3. 4. 5. Productividad Capacitación Gratificación y salarios participativos Fortalecimiento, autonomía y tecnificación de la Dirección del Trabajo Uso de otras instancias de colaboración bipartita. Ej: comité paritarios Conclusiones Si bien compartimos que se deben equilibrar el poder de negociación de instancias que representen a los trabajadores, creemos que el proyecto fuerza en exceso la participación en sindicatos como única alternativa para establecer diálogos dentro de la empresa. Lo que introduce nuevas rigideces y podría tener un efecto de rechazo a tales instancias de diálogo. Creemos que el proyecto no permite la sana competencia entre organizaciones cuyo fin sea representar la voluntad general de los trabajadores, pues los pone en una posición de forzosa participación para obtener los beneficios de una negociación colectiva, y posee también incentivos a monopolizar la negociación dentro de las empresas en los dirigentes sindicales. Valoramos el esfuerzo por promover mecanismos de diálogo previo al desarrollo de una huelga, además de incentivar el principio de buena fe y promover una actitud responsable de parte de trabajadores y empleadores. Sin embargo, creemos que la conflictividad no disminuirá a menos que haya una voluntad real por avanzar a una adaptabilidad del código del trabajo, que implique un incentivo efectivo para participar de la negociación colectiva como un mecanismo que beneficie a todos los trabajadores y la empresa en su conjunto, no como un instrumento de reivindicación de derechos. 4