Lectura Orante mes día primero

LECTURA ORANTE
UN MES EN LA ESCUELA DEL SAGRADO CORAZON DE JESÚS
DÍA PRIMERO
nada esa alma, y un momento después lo es todo. Hay unión con Dios por
naturaleza, por gracia, por gloria, por hipóstasis.
Esta es la más excelente, porque compenetra todo el ser de la
criatura racional, el ser humano, y lo hace digno de la adoración debida a
1. ORACIÓN INICIAL
2. COMPARTIMOS CON QUÉ NOS QUEDAMOS LA SEMANA
PASADA…
Dios, de latría. ¡De la nada al ser, y del ser a ser otro Dios! ¿Quién podrá
comprenderlo? ¡Cómo amaría Cristo a Dios con todo su corazón, con toda
su alma, con toda su mente, con todas sus fuerzas! ¡Y desde el primer
instante! ¡Oh! es el único Corazón, pues es el Corazón de Dios, que
3. ESCUCHAMOS LA PALABRA DE JESÚS: Jn.1:1-9
cumple con toda perfección tan máximo mandamiento. Considéralo en
1 En el principio existía el Verbo, y el Verbo estaba con Dios, y el Verbo
silencio. Nada había en Cristo que retardase las avenidas de este infinito
era Dios. 2 El estaba en el principio con Dios. 3 Todas las cosas fueron
amor. Nada había en Dios, que le pusiese término, pues lo creó
hechas por medio de El, y sin El nada de lo que ha sido hecho, fue hecho.
expresamente para unirlo a la persona de su Hijo hipostáticamente. Dios
4 En El estaba la vida, y la vida era la luz de los hombres. 5 Y la luz brilla
mío, exclamó Jesús en este primer instante, me has dado este cuerpo,
en las tinieblas, y las tinieblas no la comprendieron. 6 Vino al mundo un
este Corazón, esta alma para que te ame, te adore, te sirva, te
hombre enviado por Dios, cuyo nombre era Juan. 7 Este vino como
desagravie. Tu voluntad está en medio de mi corazón. Deus meus, volui:
testigo, para testificar de la luz, a fin de que todos creyeran por medio de
Dios mío, quiero lo que Tú quieres, como Tú lo quieres, porque Tú lo
él. 8 No era él la luz, sino que vino para dar testimonio de la luz. 9 Existía
quieres. ¡Oh alma mía! más es para admirar y ponderar en silencio este
la luz verdadera que, al venir al mundo, alumbra a todo hombre.
instante precioso, el primero y el único que ha habido en el mundo en que
4. ESCUCHAMOS LA PALABRA DE ENRIQUE DE OSSÓ
DIA PRIMERO
Petición.
un Corazón ha amado a Dios cuanto merece ser amado. Bendito seáis,
Dios mío, oh Padre Eterno, porque desde este instante ya tenéis un
corazón en quien complaceros plenamente... bendito seas. Dadme que
Jesús mío, dadme a sentir, pensar, amar y obrar en
todas las cosas como Vos queréis de mí.
Valora, lo que sentiría Cristo al informar su cuerpo y su corazón
en el primer instante de ser criada y unida al Verbo. ¡Qué sentimientos de
adoración, asombro, gratitud, anonadamiento al verse elevada a la más
grande dignidad u unión con la Divina Esencia! Un momento antes no era
imite al Corazón de Cristo amándoos con todo mi corazón, con todas mis
fuerzas hasta el último instante de mi vida. Amén.
Punto segundo.
Y tú, corazón mío, ¿cómo has cumplido y
cumples este máximo mandamiento de amar a Dios con todas tus
fuerzas?
A semejanza de Cristo Jesús, desde el primer instante que tuviste
uso de razón ¿te convertiste a Dios con un acto de amor? Desde el
6. COMPARTIMOS NUESTRA ORACIÓN
instante que le conociste ¿le amaste, le adoraste, le diste gracias como
debías? Éste era tu deber máximo... Y si no lo cumpliste, y robaste a Dios
7. ORACIÓN FINAL
las primicias del amor de tu corazón, pecaste mortalmente. A lo menos
cuando reflexionaste sobre tu fea conducta ¿te encomendaste, te dirigiste
Gracias infinitas te doy, Jesús mío de mi alma, porque te has dignado
a Dios? Dime ¿cuántos actos de amor a Dios has hecho? ¿Cuántos
admitirme en este día a la Escuela de tu adorable Corazón, y por haberme
haces? ¿Cuántos piensas hacer? Sábete que para esto has sido criado,
enseñado con tu ejemplo a amar y servir a Dios con todo mi corazón, con
para esto tienes un corazón, para eso te ha honrado Dios con su amistad
toda mi alma, con todas mis fuerzas mostrándome prácticamente la
y prevenido con tantos beneficios, y rodeado de tantas gracias y adornado
hermosura de la virtud y la fealdad del vicio. Yo te prometo con la ayuda
de tantos dones. ¿Qué has hecho, pues, para probar a Dios tu amor?
de tu gracia practicar con las obras lo que Tú me enseñas con la palabra y
¿Qué has hecho, pues, para probar a Dios tu amor? ¿Qué has hecho por
el ejemplo, y presentarme mañana al volver a tu divina escuela, escuela
Cristo tu Redentor? ¿Qué haces por Cristo? ¿Qué piensas hacer?
del Corazón, escuela de amor, muchos actos de vencimiento, de amor, de
Reflexiónalo seriamente... Propón y enmiéndate. Ama a Dios con todo tu
sacrificio... amándote por los que no te aman, adorándote por los que no
corazón. Ama a Jesús sobre todas las cosas. Si no le amaste antes como
te adoran, y glorificándote por los que te agravian. ¡Oh Corazón
debías, procura con todo ahínco amarle y reparar el tiempo perdido en el
misericordiosísimo de Jesús! Convertid a todos los pecadores, dad
desamor de tu Dios y principal Bienhechor. ¡Oh Corazón de mi Jesús! o
perseverancia a todos los justos, libertad a todas las almas del purgatorio,
amarte o morir por tu amor, porque la vida sin tu amor es peor que mil
para que no formemos todos los hombres más que un solo corazón y una
muertes pesadas.
sola alma que os adore, os ame, os reverencie, os sirva y os glorifique
5. TIEMPO DE REFLEXIÓN – Anoto lo que sale de mi corazón
como Vos queréis y merecéis en el tiempo y por toda la eternidad. Amén.
8. CANTO FINAL