Se puede dejar de fumar sin subir de peso Más de un 22% de las argentinas son fumadoras y el aumento de peso es una preocupación, de todos modos los expertos ponderan la positividad de abandonar el cigarrillo. En 2000, casi un millón de mujeres murieron en el mundo debido a enfermedades causadas por el cigarrillo, es decir que cada día fallecen en el mundo unas 2700 fumadoras. En la Argentina según la última Encuesta Nacional de Factores de riesgo (ENFR) del año 2009, un 22,4% de las mujeres son fumadoras. Ante este escenario, "la mujer y el tabaco fue uno de los temas centrales" del 7° Congreso Argentino Tabaco o Salud el pasado mes de Agosto, en el que se alertó acerca del temor a subir de peso que tienen muchas de las mujeres que quieren dejar de fumar. Esta preocupación no es infundada ya que en las primeras semanas de cesación tabáquica, el efecto anorexígeno (disminución del apetito) que causaba la nicotina ya no está más, lo que provoca un aumento de la ingesta sumado a que se normalizan los sentidos del gusto y del olfato generando cambios de comportamiento respecto a la comida. Esto hace que la ansiedad que antes se controlaba fumando se exprese ahora comiendo y no es el objetivo cambiar un mal hábito por otro. 1/4 Se puede dejar de fumar sin subir de peso En este sentido, la cesación del consumo de tabaco, debe ser acompañada por un plan de alimentación, que ayude a evitar el aumento de peso, y que permita controlar la ansiedad consumiendo alimentos saludables. El tabaco provoca la alteración de la percepción de los sentidos del gusto y el olfato, el umbral para percibir sabores y olores están muy por debajo de lo normal y por es por eso que los fumadores tienden a consumir alimentos con alto contenido en grasas saturadas y comidas con prevalencia de carnes muy condimentadas y saladas, descartando las frutas y verduras ya que no encuentran atractivo su sabor. La realidad es que los primeros 3 a 6 kilos ganados durante la cesación son a raíz del cambio metabólico causado por la ausencia del tabaco, el resto de los kilos que puedan ganarse serán a causa de malos hábitos propios generados por la ansiedad mal controlada. En estos primeros meses de abandono del tabaco la alimentación no debe focalizarse en la pérdida de peso, sino en la depuración del organismo. El aumento de unos kilos no representa un riesgo tan importante para la salud en relación a los grandes beneficios que genera dejar de fumar. Consejos • Hacer las 4 comidas principales y en las colaciones elegir opciones bajas calorías siempre teniendo en cuenta los Alimentos Aliados: los lácteos, jugos naturales, frutas y verduras que son aquellos, que según fumadores y ex fumadores, le dan mal sabor al cigarrillo y colaboran en el proceso de deshabituación • El síndrome de abstinencia genera un gran nerviosismo y no resulta adecuado ingerir sustancias excitantes que puedan aumentar este estado anímico, es por eso que no se recomienda el consumo de café, té, chocolate, bebidas alcohólicas, bebidas y gaseosas colas . Una actitud muy común es ver a los ex fumadores consumiendo chupetines y caramelos 2/4 Se puede dejar de fumar sin subir de peso constantemente, deben saber que este tipo de azúcar en exceso se transforma en grasa y además es metabolizada con gran velocidad por el organismo, de manera que, al cabo de un rato de ingerirlos sentimos de nuevo hambre y la necesidad de "picar" algo más. Teniendo un buen manejo de los alimentos que se consumen y con un incremento de la actividad física diaria se puede controlar o evitar el aumento de peso y hasta reducirlo en aquellas personas que tenían sobrepeso antes de dejar de fumar. Algunos beneficios sobre dejar de fumar A las 8 hs: La nicotina en sangre disminuye en más de un 90% A las 48 hs.: Normalización del olfato. 5 a 8 días: las células bronquiales recuperan su vitalidad y mejora su eficacia como defensa de los pulmones (Algunas personas presentan aumentos transitorios de tos y expectoración por esto). 2 a 4 semanas: Mejoría de la circulación de la sangre: menor tendencia a formar coágulos en la sangre. Mejoría del colesterol bueno y malo. Disminución del riesgo de enfermedad coronaria. 1 a 9 meses: Mejoría de los síntomas de congestión nasal, fatiga y falta de aire vinculadas con fumar. Mejoría de la función pulmonar con mejor manejo de secreciones y menos infecciones respiratorias. Mejoría de la energía corporal. Mejoría significativa de la circulación coronaria. Disminución significativa del estrés. 1 año: Disminución del 50% del riesgo de enfermedad coronaria, infarto agudo de miocardio y accidente cerebrovascular. 3/4 Se puede dejar de fumar sin subir de peso 5 a 15 años: El riesgo de accidente cerebro vascular es comparable al de un no fumador 4/4