EL SENTIDO DE LO HUMANO *Humberto Maturana* Vanessa Franco Ríos

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RESEÑA
PEDAGOGIA
SOCIAL
EL SENTIDO DE LO HUMANO “Humberto Maturana”
Vanessa Franco Ríos
“La historia de la humanidad tiene que
ver con el fluir de las emociones y los
deseos, por tanto, toda institución es en
su constitución como quehacer humano,
y en su realización como tal por las
personas que la constituyen”
RESEÑA
La presente reseña, hace referencia a las reflexiones
realizadas por el Medico y biólogo chileno Humberto
Maturana, quien a hecho aportes a cerca de la
constitución de lo humano y de la relevancia del amor en
las acciones y emociones de las personas, para ello, intentare recoger lo fundamental de su
postura desde su libro El sentido de lo humano fundamentalmente del quinto capitulo llamado
Sobre educación. Apoyados en las posturas de Humberto Maturana, retomo dos pequeños
trabajos; el primero de Paco Builes Tro denominado De la biología de amor a la pedagogía del
afecto y el amor, o de la necesidad de caminar hacia entornos educativos saludables y de calidad;
y el segundo de Mario Aguilar y Rebeca Bize titulado La pedagogía de la diversidad una propuesta
de educación humanista.
De entada, Humberto Maturana parte de la idea que la educación se da mediante un proceso
mágico por el cual la palabra despierta del mundo adormecido, sin embargo, la realidad que
expresa el contexto, nos muestra como hoy en día la educación se encuentra subordinada a
intereses y motivaciones con sesgo economicista, despertar de ese mundo adormecido pone
difícil la situación cuando “vivimos en un sistema de frustración aprendida y se ha anestesiado
nuestro talento y nuestras inquietudes; la educación de hoy tiene un sesgo discriminatorio,
prepara a unos pocos para el mando y el control de la sociedad y a la mayoría como mano de
obra sumisa y de bajo costo”1, por tanto, cada vez mas cobra relevancia la idea de reformular la
manera como se han propuesto los procesos educativos, partiendo en primera instancia de una
concepción de ser humano como conciencia activa, y por tanto constructor de realidades, un
ser no solo social sino también histórico, un ser humano que no surja de la competencia, el
abuso o la agresión, sino desde la convivencia en el respeto, cooperación, el compartir y la
sensualidad bajo la emoción fundamental del amor.
1
AGUILAR, Mario, BIZE, Rebeca, “La Pedagogía de la diversidad una propuesta de educación humanista”
En línea, (Disponible en): http://idd00qaa.eresmas.net/noviolencia/pedagogia.pdf, Fecha de búsqueda 5
Octubre de 2010.
RESEÑA
PEDAGOGIA
SOCIAL
EL SENTIDO DE LO HUMANO “Humberto Maturana”
Vanessa Franco Ríos
Los argumentos de Aguilar y Bize contradicen la idea de que los seres humanos somos solo
razón, por ello, parten de la idea que en la educación es más importante la emoción que el
razonamiento, en la medida en que es ésta la que otorga pasión a la acción; no hay aprendizaje
sin emoción, el conocimiento mas que un objeto externo es una construcción interna, en tanto
la educación no solo es socializadora y reproductora, sino que también es habilitadora y
constructora de un proceso donde el estudiante desempeña un papel activo.
Reconocer que la educación requiere de una profunda reformulación es pensarse en la
posibilidad de construir un mejor escenario de interacción, que de manera prioritaria más que la
formación busque la humanización desde la acción; y es en este punto donde se formulan
desde una nueva propuesta de educación humanista la necesidad de identificar en las practicas
educativas 4 premisas fundamentales las cuales hacen alusión a la idea que:
1.
2.
3.
4.
No hay verdades absolutas, existen formas de ver y de estructurar la conciencia
Hay que hacer coherente el ejercicio de pensar
El estimulo de capacitación y desenvolvimiento es a través de la emotividad
El cuerpo es una herramienta de expresión
Todo lo anterior para indicar que se quiere “una educación verdaderamente liberadora de las
mujeres y hombres de nuestro tiempo, que no condicione desde pequeño el futuro de la
persona, que efectivamente otorgue oportunidades iguales para todos y que reconozca el
derecho de todas las personas sin exclusión alguna y por el solo hecho de vivir en esta tierra, el
acceso a una educación gratuita y de buena calidad”2 . de ahí que, retomar a Maturana se
vuelve importante en la medida en que sus reflexiones apuntan a identificar las graves
consecuencias que presenta la manera de el mal proceso educativo que permea las sociedades
latinoamericanas, en donde la sociedad se configura como oscurantista, regresiva y autoritaria;
donde se busca más que construir, es formar y aconductar a los seres humanos en idiotas útiles
para la sociedad de mercado y al servicio de del modelo neoliberal; y es en este punto donde
Maturana abre la discusión frente al siguiente interrogante ¿un país puede existir sin
universidad?, pues bien, la respuesta a esta pregunta es afirmativa “un país puede vivir sin
universidad nutriéndose del desborde cultural de otras naciones que le entregan su visión de
mundo”3, “un país puede existir sin universidad y ser una provincia sin mas autonomía cultural
que su riqueza rural abierta al turismo y a la admiración que la candidez de su gente despierte
en el visitante ávido por lo distinto y lo exótico.”, la universidad es prescindible, la nación no se
desintegra, solo se subordina a un curso cultural que tiene su centro fuera de ella, es decir, se
vuelve provincia.
2
3
Ibíd.
MATURANA, Humberto, “El sentido de lo humano” En línea, (Disponible en):
http://www.4shared.com/account/document/ewPlUq-i/El_Sentido_de_Lo_Humano_por_Hu.html, Fecha
de búsqueda 1 de Octubre de 2010.
RESEÑA
PEDAGOGIA
SOCIAL
EL SENTIDO DE LO HUMANO “Humberto Maturana”
Vanessa Franco Ríos
Sin embargo, el sólo hecho de que a nivel latinoamericano existan personas y grupos que se
piensen los anteriores argumentos y que pongan de manera manifiesta la necesidad de abrir
escenarios donde la educación sea el elemento primordial, es ya un avance significativo frente a
la utopía de un mundo más igualitario y menos subyugado a planteamientos que relevan al ser
humano por debajo de lo económico y que lo oprime y lo excluye de manera sistemática.
Y es en la educación, reflejada en las universidades donde cada vez más se pierde el sentido del
aprendizaje, hoy más que nunca la Universidad se hace trasparente frente a los procesos de
construcción de los seres humanos, en la medida en que se racionaliza la acción y pierde
sentido la emoción, la universidad puede ser un espacio de configuración fuerte de escenarios
de educación que trasmita de manera coherente la idea de convivencia, para el autor, las
instituciones como redes de conversaciones deben estar amparadas bajo la idea de que, no es
lo que hacemos, sino es la emoción bajo la cual hacemos lo que hacemos, lo que define nuestro
hacer como una acción. Así mismo, ésta únicamente adquiere su legitimidad como institución
que de hecho sirve al país al que pertenece, en la medida en que esta abierto para todos los
habitantes de la sociedad; situación muy discutida en la Universidad de Antioquia, donde una
vez mas se cierran las puertas para los ciudadanos que habitan la ciudad, configurando esto en
un elemento importante de segregación y de limitaciones de acceso a muchas personas, y lo
mas grave, pierde sentido y coherencia frente a lo que debería ser su accionar.
El quehacer universitario, deberá ampliar los espacios de acción y reflexión de sus estudiantes
desde un quehacer social no productivo ni comercial, deberá disponer de las condiciones
materiales y académicas que hacen posible el crear dichos espacios de acción y reflexión pero
en pro de la transformación, no debe ser ingenua y dejar que se condicione y determine su
accionar o se instrumentalice al servicio de una política económica o productiva, mas bien debe
impulsar al cambio en tanto es el conocimiento crítico y reflexivo la única escapatoria a la
dependencia, el sometimiento y la subordinación.
Aprender tiene que ser algo diferente del captar algo externo, el aprender es un fenómeno
estructural de la convivencia, “es posible educar responsablemente sólo si uno se hace cargo
de la participación que uno tiene en el mundo y que trae a la mano en la convivencia con el
otro”4, la universidad deberá entonces identificar que es posible educar responsablemente solo
en la medida en que se reconozca la diversidad y la construcción identitaria que cada ser
humano hace de su accionar, debe existir estrecha relación entre la razón y la emoción,
identificando que el aprender es convivir, es decir, el aprender se da de una manera o de otra
en la transformación que tiene lugar en la convivencia, y consiste en vivir el mundo que surge
con el otro.
Es importante resaltar que para Maturana, la universidad como escenario de reflexión no debe
pararse desde la idea de obediencia, en tanto ésta solo se da cuando se está negando a sí
mismo y al otro, el saber no da poder, el poder lo concede el que obedece; se cree que se
4
Ibíd.
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SOCIAL
EL SENTIDO DE LO HUMANO “Humberto Maturana”
Vanessa Franco Ríos
posee poder sin ver que éste es concedido por el que obedece en un acto en el que se niega a sí
mismo; por ello, esa negación de otro para al autor debe ser manejada desde la educación con
reflexión y emoción, es decir no solo razón, en la medida en que la emoción funda lo social que
hace posible la convivencia en el amor, el 99% del sufrimiento humano viene de la negación de
amor. “Así que, la tarea del educador es crear en sus estudiantes autorespeto, que recuperen
su dignidad como personas, como pensadores, como actores, y se vuelvan capaces de actuar
desde sí mismos en el dominio en que ha escogido actuar.”5
Parafraseando a Maturana cabe indicar que, el momento inicial en el quehacer de la educación
se encuentra en el punto en que uno acepte al otro como un legitimo otro en la convivencia,
porque es sólo desde allí que se puede establecer un dominio del consenso social; el entender
que el amor es el punto de partida que configura lo humano es fundamental, porque nos
permite aceptar que lo humano se configura en el vivir y no preexiste.
Seguidamente, es pertinente reconocer que en la medida en que identifique que es necesario
hacer una transformación a las maneras tradicionales de concebir la educación, se va
configurando un reto, pero a la vez se convierte en un aliento para reforzar la idea de que es
posible cambiar y modificar lo establecido, tal vez con un poco mas de imaginación y sin perder
nunca el sueño se puede lograr.
Comparto los argumentos de los autores cuando afirman que los seres humanos no solo
razonamos y que por el contrario es mucho más relevante para la educación y el aprendizaje
entender que lo que no pasa por las emociones de cada uno de nosotros no puede constituirse
como acción en pro de trasformación, es bastante alentador frente a la situación actual no solo
de la Universidad de Antioquia sino de la educación en el contexto latinoamericano identificar
propuestas que se consolidan desde una visión humanista y habilitadora de los seres humanos,
por ello cuando se plantea la idea del amor y la emoción quizás suene un poco romántico, pero
quien no se permite a sí mismo soñar y exaltar lo mas positivo de sí, quizás no logre dar el paso
hacia una mejor sociedad. Soñar, pensar y actuar para trasformar debería ser la tarea de la
educación social.
5
Ibíd.
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