HISTORIA DE LA FILOSOFÍA EN LA POSMODERNIDAD Mauricio Beuchot INTRODUCCIÓN En este trabajo me propongo compartir mis lecturas de algunos pensadores de la posmodernidad. Son sobre todo pertenecientes al ámbito de la filosofía, pero en algunos casos también pertenecen a la literatura o a la sociología. En todo caso, es necesario agrupar estas perspectivas multidisciplinares, que nos dan una visión más amplia y enriquecida del fenómeno posmoderno. Este fenómeno, que a veces se llama tardomodernidad y a veces posmodernidad, ha recibido muchas teorizaciones, pero puede entenderse principalmente como reacción contra la modernidad. No ha sido igual en todos los ámbitos; a veces cuestiona un aspecto y conserva otros, a veces pretende romper con todos, y a veces no es más que una eclosión o exacerbación de cosas que ya se daban en la posmodernidad. Como quiera que sea, aquí se tomará la posmodernidad como una reacción contra la modernidad. También la posmodernidad ha sido dividida de muchas maneras, en numerosas corrientes. Una de las más útiles es la que ofrece Jürgen Habermas, en posmodernidad antimoderna, posmodernidad paleoconservadora, posmodernidad neoconservadora y posmodernidad ético-critica. Los posmodernos antimodernos son los que mas propiamente han sido considerados como posmodernos, al menos en nuestros ámbitos, como Lyotard. Baudrilard, Lipovetski, Deleuze, Derrida, Vattimo y Rorty. Ellos critican de la modernidad tanto la ética como la técnica. Son los que más se enfrentan a la modernidad y también será a los que más atención dediquemos. Los posmodernos paleoconservadores son los que critican la ética y la técnica de la modernidad, y proponen la vuelta a éticas anteriores, como la de Aristóteles (Arendt, Maclntyre), la de Hegel (Taylor), etc. Los posmodernos neoconservadores critican la ética moderna, pero conservan la técnica, tanto en su aspecto mecánico como en su aspecto sociopolítico, la burocracia, dentro de la línea del neoliberalismo o neocapitalismo (Bell, Kristol. Novak, Berger). Finalmente, los posmodernos ético-críticos son, según Habermas, los que como él, Apel y otros, critican la técnica de la modernidad, pero desean conservar o, por lo menos, replantear, la ética moderna, considerando la modernidad como un proyecto incompleto, o que no pudo dar muestras de su viabilidad. Como se ve, estos últimos son los que en menor medida podrían ser llamados posmodernos. Por eso tomaremos ejemplos de las demás corrientes. De los posmodernos antimodernos, comenzaremos presentando algunos de sus antecedentes y acompañantes de la literatura, ya que a veces los hombres de letras exponen los fenómenos mejor que los filósofos y aun que los sociólogos. Allí irán algunos que, aun cuando nunca se consideraron posmodernos, bien pueden fungir como antecedentes, por ejemplo Walter Benjamín y Georges Bataille. Otro de ellos fue acompañante preclaro, Maurice Blanchot, que a veces hasta inspiró a los mismos filósofos posmodernos. Luego presentaremos algunos provenientes de la sociología, que nos describen con mucha clarividencia la situación del ser humano en la posmodernidad, y allí estarán Jean Baudrillard y Gilles Lipovetski, que representan el ala antimoderna, y Daniel Bell, que nos servirá de ejemplo del ala neoconservadora, ya que con eso nos resultará suficiente. Después pondremos a alguien que no se consideró posmoderno, Michel Foucault, pero que es uno de los que más han influido en el pensamiento de la posmodernidad. Servirá, por lo menos, como ejemplo de uno de sus antecesores si no es que uno de sus más célebres iniciadores. Él oscila entre la historia, la sociología, la literatura y la filosofía, así es que resulta una buena muestra de este pensamiento en varios campos. Luego vendrán varios filósofos de esa posmodernidad antimoderna que es la que más se conoce en nuestro medio, célebres por sus críticas a la modernidad. Así, Jean-François Lyotard, Gilles Deleuze, Jacques Derrida, Emmanuel Lévinas, Gianni Vattimo y Richard Rorty. Lyotard, desde la filosofía y la sociología, proclama el tiempo de la posmodernidad, la condición posmoderna. Deleuze y Derrida han sido colocados en esta situación por sus comentaristas. Lévinas no se preocupa mucho de esta denominación, pero sus críticas a la filosofía occidental lo colocan en esa postura. Vattimo se ha llamado a sí mismo filósofo posmoderno, y lo mismo Rorty, quien, dejando las filas de los filósofos analíticos, pasó a las del pragmatismo o neo-pragmatismo y él mismo dice alinearse con los posmodernos. Maclntyre es excelente ejemplo de los posmodernos paleoconservadores, ya que es uno de los más preclaros neoaristotélicos, esto es, que proponen recuperar varios elementos de Aristóteles y adaptarlos a nuestra nueva situación, como lo habían hecho ya antes Hannah Arendt y Agnes Heller. Es curioso apreciar que algunos autores, como el propio Vattimo, ponen entre los filósofos posmodernos a los hermeneutas. No a Hans-Georg Gadamer, pero si a Paul Ricoeur, lo cual no deja de ser desconcertante, pues no se ve en él mismo la intención de ser colocado en esa posición. Puede entenderse por el hecho de que en muchas cosas ha sido crítico de la modernidad, e incluso ha sido clarividente anticipador de modos de pensamiento; también puede entenderse por la sencilla razón de que es un hecho que la hermenéutica ha pasado a ser la episteme o koiné de la posmodernidad; pero no creo que se pueda adjudicar cualquier tipo de hermenéutica a la posmodernidad, sino una hermenéutica más precisa, como la de Vattimo, que pretende despojarse de categorías como la referencia y la verdad, que no han sido claramente dejadas por Gadamer ni, mucho menos, por Ricoeur. Por eso preferiremos ejemplificar esa hermenéutica de la posmodernidad con Vattimo. No todo posmoderno es hermeneuta, ni todo hermeneuta es posmoderno; por eso hay que ejemplificar, para precisar un poco más. Tal es, pues, el panorama que me interesa llenar. Con eso tendremos una apreciación introductoria pero suficientemente amplia de los filósofos de la posmodernidad, que ciertamente es muy compleja, pero que a base de estos botones de muestra nos dejara ver sus perfiles principales. Acerca de ellos ofreceré mis lecturas, que desean contextuarlos y, sobre todo, entresacar sus aportaciones principales. Ya eso es el inicio de un diálogo con ellos.