2. Ensayo sobre la Consulta Nacional por la Calidad Educativa

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Consulta Nacional por la Calidad Educativa 2014
Érika Andrade
Introducción
La Consulta por la Calidad Educativa definida como una investigación extensiva e
incluyente que busca reconocer las fortalezas y dificultades de la situación actual de la
Educación venezolana, debe propiciar la apertura al debate en pro de la construcción
de propuestas positivas que favorezcan nuestra formación como estudiantes, pero
también nuestro desempeño como docentes y futuros profesionales.
Bajo esta premisa el gobierno central asumió como su responsabilidad, la formulación
de políticas públicas que eleven la calidad de la educación, lo cual se traduciría en el
mejoramiento de las infraestructuras existentes, la creación de nuevos planteles
educativos, la dotación de insumos, la manutención de programas de salud,
alimentación y becas estudiantiles, entre otras. Sin embargo, el desafío es aún más
grande, puesto que la Educación no solamente se trata de una estructura física, una
compilación de material didáctico o la producción de equipos de alta tecnología.
Para comprobar este cuestionamiento, sólo basta con preguntarnos si una escuela, un
libro o una computadora por sí solos educan, puesto que para complementar nuestro
proceso de aprendizaje, necesitamos profesionales capacitados con una sólida
vocación de servicio que orienten y generen espacios para la formación integral de
niños, adolescentes y jóvenes.
Para garantizar una fotografía objetiva de nuestro panorama educativo se consultó a
los diversos sectores de Venezuela, entre ellos a los principales involucrados:
estudiantes, docentes, consejos educativos, universidades y misiones educativas; pero
también a organizaciones gubernamentales, no gubernamentales, trabajadores del
campo y de la pesca, pueblos indígenas, historiadores, entre otros.
Antes de dar paso a los resultados que se condensaron en dicha consulta, sería justo
también preguntarnos qué acciones factibles podemos desarrollar desde nuestros
roles como estudiantes, educadores, directores, personal obrero y administrativo,
padres o representantes y demás miembros de una comunidad educativa para acelerar
las mejoras que deseamos ver, ya que la educación es un asunto público de principal
importancia para el progreso de las sociedades.
Resultados de la Consulta
Es unánime que la escuela es una institución imprescindible y determinante en nuestra
formación humana, puesto que en ella cobran sentido los valores de libertad, respeto
y fraternidad; en ella llevamos a cabo nuestras primeras interacciones sociales,
aprendemos del otro, descubrimos qué hacer y en su objetivo más trascendente la
escuela debe aspirar a formar el Ser.
Los diversos sectores consultados coinciden en que la educación debe ser una
oportunidad para que todos se integren, sin perder de vista que el enfoque de educar
no es alfabetizar sino, potenciar las habilidades de cada niño, niña y adolescente, de
manera que sus acciones incidan a favor de la sociedad en la que vive. Por ello, surgió
la solicitud de contextualizar el currículo educativo a cada región del país en función
de la naturaleza de sus tradiciones, oficios y localización. Por ejemplo, estudiantes que
hacen vida en el campo o que viven en las zonas pesqueras venezolanas tienen
necesidades, intereses y estilos de vida diferentes a los estudiantes que conviven en
los centros urbanos.
La consulta también evidenció el aumento de niños, niñas y adolescentes incluidos en
el sistema escolar nacional, donde la mayor parte es atendida por el Estado
(Educación Oficial): 81,39% en inicial, 82,05% en primaria y 78,6% en educación media.
El informe también reveló el descenso de la repitencia escolar y la disminución de la
deserción, evidenciando que entre 3 y 5 años hay 318.472 niños y niñas que aún están
fuera del sistema, entre 6 a 11 años hay 91.885 y entre 12 a 16 años hay 365.324.
Así mismo se ratifican las diferentes políticas desarrolladas por el gobierno bolivariano
en beneficio de la inclusión, como las misiones educativas, la expansión de los
Simoncitos, las escuelas y liceos bolivarianos, la distribución de las “Canaimitas” y los
esfuerzos por garantizar la integración de personas con discapacidad.
En lo que respecta al proceso de enseñanza-aprendizaje los consultados manifestaron
la importancia de una educación constructivista, como aquella que induce a la
curiosidad y a la resolución de problemas, sin dejar de lado la formación para el
trabajo y la experimentación en oficios como carpintería, horticultura y electricidad,
que deben ser fortalecidos mediante programas de desarrollo endógeno.
No menos importante fue la propuesta de nuevas áreas de aprendizaje en Primaria y
Media tales como: antropología histórica y arqueología, prevención y gestión de
riesgos, lenguas e idiomas autóctonas, soberanía alimentaria y agroecología,
educación para el trabajo, política y ciudadanía, educación cultural y tecnología de la
información.
Es de gran importancia señalar que las diversas comunidades educativas hicieron
énfasis en centrar los esfuerzos de formación en liderazgo, donde los estudiantes
tengan participación a través de agrupaciones estudiantiles que respondan a sus
demandas y necesidades, con capacidad para emprender acciones de mejora dentro
de los centros educativos.
En cuanto a las oportunidades de mejora, los consultados señalaron la existencia de
docentes con métodos tradicionales y autoritarios, lo cual no favorece el
enriquecimiento del proceso de aprendizaje, ni el esfuerzo por disminuir las
situaciones de violencia en los planteles educativos. En este sentido, cobra importancia
la carrera docente, ya que siendo los docentes actores fundamentales de la educación,
deben tener las condiciones adecuadas para estar en continua formación que les
permita potenciar sus destrezas pedagógicas. A modo de complemento, los
consultados sugirieron que el ejercicio docente debe estar acompañado por el
conocimiento de las características de la comunidad en la que labora.
Así mismo, muchos coinciden en que deben existir mecanismos que regulen el ingreso
de personas a la carrera docente, tomando en cuenta, el desempeño del postulante, su
participación comunitaria, sus años de servicio, sus experiencias significativas en el
ejercicio y su formación; dichos mecanismos también deben abarcar la medición de la
calidad educativa, con métodos de acompañamiento pedagógico que monitoreen los
procesos pero también que sean una oportunidad de formación para el docente.
Con respecto al clima educativo, la investigación reveló la importancia de la existencia
de un director o directora que posea liderazgo. Si esta figura se preocupa por generar
cambios positivos y en su proceder se manifiesta como ejemplo dinámico, activo,
innovador, autónomo y decidido, también su personal, sus educadores y sus
estudiantes expresarán abiertamente entusiasmo e interés por la búsqueda de la
calidad dentro y fuera del plantel.
La Consulta acentuó la relevancia de la relación entre la escuela, la familia y la
comunidad. Los consultados afirmaron sobre la necesidad de que las familias se
involucren más con la gestión escolar, por ejemplo, en la recuperación y construcción
de espacios y en la planificación y seguimiento de proyectos. Los consultados aspiran
que los integrantes y dirigentes de cada centro educativo se relacionen con su
comunidad, de manera que puedan favorecer las dinámicas comunitarias en pro del
ascenso de la calidad educativa.
Aun cuando la exploración de esta consulta centra su investigación en la educación
primaria, también revela apreciaciones sobre la Educación Media, los cuales van
referidos al currículo, dado que continúa enfocado en contenidos disciplinares de
asignaturas tradicionales y no en competencias.
A manera de ejemplo, debido a los altos índices de embarazos adolescentes
registrados anualmente en Venezuela, muchos consultados proponen que la
educación sexual se incorpore desde el currículo de educación básica.
Los encuestados expresaron el deseo de contar con edificaciones seguras, en buen
estado, iluminadas, con áreas verdes y laboratorios dotados de servicios de agua y
materiales, de manera que se favorezca la motivación por aprender.
El aspecto vocacional y el tránsito hacia los Estudios Superiores fueron temas de
especial interés para los actores educativos. Los estudiantes manifestaron la necesidad
de recibir orientación previa que se conjugue con la formación permanente que
reciben, elementos que les permitirá decidir su futuro profesional, de manera que se
asegure la prosecución académica y la formación de personal especializado en diversas
áreas de interés para el país.
En esta consulta participaron 7.233.489 personas que representan el 26,8% de la
población mayor de 6 años. De estos, hicieron sus propuestas 3.920.472 estudiantes y
305.201 docentes de 20.748 instituciones educativas, entre otros sectores de la
población. Y con ella se pretende generar un Plan Decenal de Educación entre 2014 y
2024 que permita reorganizar la gestión escolar y mejorar la calidad de la educación
venezolana.
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