BORDER CATHOLIC BISHOPS Mexico, Texas, and New Mexico Message from the Bishops of the border regions of Mexico, Texas and New Mexico to Catholics and to men and women of good will. "I have seen the affliction of my people" (Ex. 3,7). The Bishops from the border regions of Mexico, Texas and New Mexico greet all of you, wishing you peace and every good thing in the Lord Jesus. Gathered together in our second assembly of the current year, we have shared our preoccupation over the situation affecting millions of undocumented persons who migrate to the United States. In particular we are deeply concerned about the burden affecting so many families who have found themselves divided because of the lack of a suitable and Comprehensive Immigration Reform. At present, those most injured are the thousands of children and young people who find themselves deprived of their parents and other family members. We seek to view the reality of the migration phenomenon from the divine perspective. Just as God had compassion for his people enslaved in Egypt, so now he is moved, and he calls us to compassion and mercy towards our undocumented brothers and sisters. Further, Jesus the Good Shepherd felt compassion upon seeing the exhausted multitudes (Cf. Mt. 14,14). As their current shepherds we want to make our hearts beat in rhythm with theirs. We are at a moment in which the leadership of the United States is taking up the issue of Immigration Reform as one of its priorities. As shepherds we wish to contribute to this moment of reflection and action with a letter we are currently preparing, so that we might present it at an opportune time; we will entitle this forthcoming document "Family Beyond Borders". Immigrants make of their journey a true pilgrimage of faith and hope, and thus they inspire us all, including us their shepherds. This is why at this time we want to encourage their hope, and the hopes of all of us who see in them the face of Christ. We want to contribute with our prayer, and with the action that each one can offer, to achieve all that might be possible in favor of our brothers and sisters. With utmost respect we direct ourselves to those who are responsible for the enactment of an Immigration Reform in the United States, so that they might put all their determined energy into this effort, conscious of the human dignity of each immigrant, and conscious of what they contribute to the progress and development of this country. Asking the Lord that all families might remain united, we wish to commit ourselves and invite all of you to take up this same commitment to work in favor of the family, an institution willed by God as the foundation of society. We entrust this task that belongs to everyone, to the maternal intercession of Our Lady of Guadalupe, and to Saint Toribio Romo, patron of immigrants. September, 8, 2013 El Paso, Texas, USA BORDER CATHOLIC BISHOPS Mexico, Texas, and New Mexico Mensaje de los Obispos de las fronteras de México, Texas, y Nuevo México a los Católicos y a los hombres y mujeres de buena voluntad. "He visto la aflicción de mi pueblo" (Ex. 3,7). Los Obispos de las fronteras de México, Texas y Nuevo México, saludamos a todos ustedes deseándoles la paz y todo bien en el Señor Jesús. Reunidos en nuestra segunda asamblea del presente año, hemos compartido nuestra preocupación por la situación de millones de personas indocumentadas, que migran a los Estados Unidos. Particularmente nos preocupa la afectación de tantas familias que se han visto divididas por la falta de una conveniente Reforma Migratoria comprensiva. Al presente, los más dañados son los miles de niños y jóvenes que se ven privados de sus padres y de otros familiares. Queremos mirar la realidad del fenómeno migratorio desde la perspectiva divina. Así como Dios sintió compasión por su pueblo esclavo en Egipto, así ahora se conmueve y nos llama a la compasión y misericordia hacia nuestros hermanos indocumentados. También Jesús, el Buen Pastor, se compadecía al ver la multitudes extenuadas (Cf. Mt.14,14) y como sus pastores del momento actual, queremos poner a latir nuestro corazón al ritmo del suyo. Estamos en un momento en el cual los líderes de Estados Unidos van a tratar el tema de la Reforma Migratoria, como una de sus prioridades. Como pastores queremos contribuir a este momento para la reflexión y la acción con una carta que estamos preparando para presentarla en el momento oportuno, y la titularemos "Familia más allá de las fronteras". Los migrantes hacen de su marcha una verdadera peregrinación de fe y esperanza, y así nos inspiran a todos, incluso a nosotros sus pastores. Por eso desde ahora queremos animar la esperanza de ellos y de todos los que en ellos reconocemos el rostro de Cristo, para contribuir con nuestra oración y con la acción que cada uno pueda ofrecer, para lograr lo más posible en favor de estos hermanos nuestros. Con todo respeto nos dirigimos también quienes tienen la responsabilidad de la realización de esta Reforma Migratoria en los Estados Unidos, para que pongan todo su empeño en la misma, siendo conscientes de la dignidad humana de cada uno de los migrantes, y de lo que ellos contribuyen al progreso y desarrollo del País. Pidiendo al Señor que todas las familias puedan mantenerse unidas, queremos comprometernos e invitarles a todos ustedes a asumir el mismo compromiso de trabajar en favor de esta institución, querida por Dios como fundamento de la sociedad. Encomendamos esta tarea de todos, a la intercesión maternal de Santa María de Guadalupe, y de Santo Toribio Romo, patrono de los migrantes. El Paso, Texas, a los 8 días del mes de septiembre del año del Señor de 2013, Año de la Fe.