Martes, 13 de septiembre de 2011 LÍDER EN INFORMACIÓN SANITARIA Año XX. Número 4.402 FUERA DE CONSULTA ALBERO ABAD La Oncología llena las vertientes en las que Abad quiere trabajar: la investigación de la enfermedad y el contacto con el paciente. La música es creatividad y posibilidad de transmitir. Como sucede con la música, Oncología Médica tiene un campo abierto a la investigación y a la creatividad que me atrae bastante "La música me quita los pesares del trabajo" ❚ Alicia Serrano De niño ya apuntaba maneras de músico. Solía ponerse delante de la radio, alzar los brazos y agitarlos de un lado a otro imitando los movimientos espasmódicos de los directores de orquesta. Ese gusto por la música lo mantuvo y cultivó durante lustros, pero al final decidió estudiar Medicina, su otro gran amor: "Estudié hasta tercero de piano con mi madrina, que era profesora del conservatorio de música, y luego lo abandoné a los catorce años para tocar la batería en una banda que se llamaba Los pájaros azules. La 'jam session' que suelo tener los miércoles es como una catarsis que hace que me olvide de lo duro que ha sido el día, aunque trasnoche Alberto Abad es jefe del Servicio de Oncología Médica del Hospital Germans Trías y Pujol. Lo cierto es que en casa siempre se ha escuchado música: jazz, blues... Mi hijo, de hecho, es músico profe- sional de blues", explica Alberto Abad, jefe de sección del Servicio de Oncología Médica del Hospital Univer- sitario Germans Trías y Pujol, jefe de servicio de la Unidad de Consejo y Cuidado Oncológico de Sanitas Hospitales en Barcelona y patrón de la Fundación para la Excelencia y Calidad de la Oncología (ECO). ¿Cuándo le llegó su amor por la Medicina? -Años después, aunque de pequeño adoraba al médico que solía venir a casa. Tenía el pelo blanco y parecía tan importante... De niño también tenía mucha curiosidad por conocer el funcionamiento del cuerpo humano. En la elección de mi profesión mi padre también tuvo algo que ver. Quería que estudiase una carrera que asegurase mi futuro. La carrera de Medicina acabó con la música... -Quizás la frenó, pero no la abandoné del todo. Cuando mi hijo empezó a tocar en bandas me reencontré con amigos de juventud y hemos formado una banda de Bossa nova que se llama Bossa club. También intento ir a jam sessions (reuniones informales de músicos que tocan para su propio disfrute música no escrita ni ensayada) a tocar la batería. ¿Por qué estudió Oncología Médica? -Me llevaron las circunstancias. Al principio quise ser cirujano cardiovascular, pero aterricé en Oncología mientras hacía el MIR y me quedé enganchado a la especialidad. Como sucede con la música, Oncología tiene un campo abierto a la investigación y a la creatividad que me atrajo bastante. ¿Hay alguna similitud entre su profesión y la música? -La creatividad, el romanticismo, la posibilidad de transmitir a los demás... El trato directo que tiene el médico con el paciente transmite más de lo que algunos creen, y en la relación médico-investigador la creatividad es importante. Esto enlaza con la mentalidad del artista. La música me aporta tranquilidad y me quita los pesares del trabajo. La jam session que suelo tener los miércoles es como una catarsis que hace que me olvide de lo duro que ha sido el día, aunque trasnoche. También le gusta pintar al óleo... -Me aporta mucha serenidad, pero ya no pinto tanto como cuando era un adolescente. Pintar es como pescar truchas... En realidad, la trucha me importa un bledo, pero todo el proceso y parafernalia que hay que llevar a cabo hasta que la trucha pesca el anzuelo me tranquiliza sobremanera y, sobre todo, me ayuda a olvidar lo dura que es mi especialidad desde el punto de vista de los sentimientos. De todas formas, no he abandonado la idea de pintar con la intensidad de antaño. Ahora tengo 63 años y lo haré cuando me jubile. Es patrón de la Fundación ECO y hace investigación traslacional... -Con la investigación traslacional veo una luz para ser más útil a los pacientes oncológicos. Pero es una pena que la investigación en el SNS no se contemple como un trabajo y que forme parte de las horas extras de los profesionales. No hay casi ayuda por parte de la Administración. Un investigador regala su tiempo... Puede leer otras entrevistas Sobre el terreno, Fuera de consulta y Sin anestesia en la web.