Discursos, ponencias y entrevistas Palabras al recibir el nombramiento de Caballero Comendador de la Orden de San Gregorio Magno, de la clase civil Manuel Espinosa Yglesias Autor: Manuel Espinosa Yglesias Tipo de documento: discurso Titulo: Palabras al recibir el nombramiento de Caballero Comendador de la Orden de San Gregorio Magno, de la clase civil Fecha: ca. 1967 Lugar: sin especificar Clave de clasificación: II.A.3.a/1967-15 Caja: 38 Palabras clave: reflexiones personales. Qué difícil es encontrar las palabras apropiadas para expresar con justeza los sentimientos que me invaden desde hace varios días, cuando supe que la benevolencia de s.s. había acordado (constituirme) «Caballero Comendador del Orden de san Gregorio Magno», de la clase civil. Ahora, después de la maravillosa alocución de…, esos sentimientos se han desbordado y me ponen un nudo en la garganta. Yo he luchado en mi vida por cumplir siempre lo que he creído mi deber. Si he hecho o realizado algo digno de la enorme satisfacción que hoy recibo, mi mérito no ha sido más que el del esfuerzo cotidiano, el de la lucha constante, de todos los días. Y esta vida diaria, esta conducta, debe ser —en cualquier hombre tal como expresó… (Alocución anterior), una responsable y cristiana colaboración en orden al creciente desarrollo de quienes nos rodean, de nuestro México. Eso ha sido, en todo caso, mi principal preocupación. Por eso, creo que hoy recibo más una prueba de vuestra indulgencia, que un premio merecido. Pero como católico y como mexicano, lo acepto satisfecho y con gran humildad, porque no podría yo esperar ningún otro estímulo mejor, ni ningún aliento más propicio para perseverar en la labor, que vuestra simpatía. Además de él tomaré fuerzas para mantenerme, junto a vosotros, en el servicio de la comunidad, en busca del progreso humano y del mejoramiento social. Sé que aún me falta mucho por hacer para sentirme totalmente digno del honor que hoy me habéis conferido, pero espero que, en la medida de mis posibilidades y con vuestra ayuda, algún día pueda afirmar plenamente que he cumplido con mi misión, al servicio de los demás.