Página 1 de 8 imprimir voltar La enseñanza de la competencia gramatical en E/LE. Profª Ms. Valéria Jane Siqueira Loureiro Universidade Gama Filho Faculdade Geremário Dantas Introducción La enseñanza de la competecia lingüística o gramatical es uno de los retos fundamentales que los profesores de ELE encuentran en su práctica cotidiana. En el proceso de enseñanza/aprendizaje de la competencia comunicativa del español como lengua extranjera se incluye varias subcompetencias, dentre ellas, la subcompetencia gramatical o lingüística recibe un especial destaque. Durante mucho tiempo se difunde la idea de que el papel de la subcompetencia gramatical es fundamental para el desarrollo de la competencia comunicativa en una lengua extranjera, pues son las gramáticas que presentan la descrición y/o explicación del funcionamiento de los elementos que forman parte de la lengua. Entretanto, la cuestión se complica cuando se tiene en cuenta que el alumno ya posee estrategias gramaticales que ya aprendió en la lengua materna y lo que hace es transferir muchas de estas estrategias aprendidas en la lengua materna (L1) a la lengua extranjera (L2). Para el desarrollo de la subcompetencia gramatical en LE, el estudiante aprende las normas y el funcionamiento de los elementos de la lengua que, en general, forman parte del código escrito de la LE. Por ello, la cuestión es cómo proporcionar un aprendizaje de la competencia gramatical en español como lengua extranjera para que los alumnos sean capaces de alcanzar la competencia comunicativa. Además, se tiene que reflexionar sobre cómo proporcionar un aprendizaje de la subcompetencia gramatical en lengua extranjera para que los alumnos sean capaces de transferir las estrategias específicas de la competencia gramatical que poseen desde la lengua materna hacia la lengua extranjera. Si se parte de las diferentes aportaciones gramaticales (normativa, descriptiva, didáctica, entre otras), se puede hacer una reflexión sobre el papel de la subcompetencia gramatical en la enseñanza/aprendizaje de la lengua española en la sala de clase de LE. ¿Qué se entiende por gramática? En la vida cotidiana se escucha a menudo la palabra gramática. Entretanto, si se observa los contextos en los que aparece y las intenciones con las que los hablantes la utilizan, resulta obvio que no siempre la aluden al mismo referente. Además, los usos de esta palabra van acompañados de una serie de prejuicios y puntos de vista sobre qué es la lengua. Tres acepciones muy distintas, entretanto no excluyentes, que suelen estar asociadas al uso de la palabra gramática Primeramente, se define como un conjunto de reglas implícitas de un sistema lingüístico o principio de organización interna propia de una determinada lengua: lo que algunos lingüístas denominan competencia lingüística. Una segunda acepción es la que la define como el razonamiento explícito de normas que responden a un registro específico de una lengua o saber de carácter más o menos metódico sobre la lengua: conocimiento reflexivo de las regularidades, reglas o normas características de una lengua. Por último, se entiende por gramática como el manual o libro que corresponde a una visión o enfoque sobre la lengua o punto de vista particular sobre el saber gramatical propio de una lengua: determinada escuela de pensamiento, depterminada teoría sobre el funcionamiento interno de la lengua. En el ámbito de la enseñanza/aprendizaje de lenguas extranjeras, en paricular de E/LE, si se hace un análisis detenido en las tres acepciones presentadas, estas nos lleva a reflexionar sobre por qué y para qué se enseña gramática en las clases de ELE. Ser usuario de una lengua equivale a disponer de una serie de conocimientos y habilidades lingüísticas de las cuales no siempre somos concientes. Los hablantes nativos de una lengua disponen de un conocimiento “instrumental” o “procidimental”, saben usar de forma espontánea un complejo sistema de reglas gramaticales y de redes de palabras y significados para transmitir sus mensajes en el file://C:\Users\Usuario\Desktop\ano5n5\data\articles\Valéria Jane Siqueira Loureiro.h... 07/01/2011 Página 2 de 8 transcurso de sus interrelaciones comunicativas. Este conocimiento es distinto al “declarativo”, el conocimiento sobre la lengua. No todos los que hablan una lengua poseen un conocimiento declarativo sobre esta lengua. Al observar los dos tipos de conocimientos gramaticales, se nos plantea la cuestión del tratamiento didáctico del componente gramatical en el aula de lengua extranjera que nos lleva a los profesores a deslocar el foco del conocimiento declarativo hacia la adquisición de la denominada competencia comunicativa. En la actualidad la controversia sobre enseñar o no gramática ha dado lugar a dos interrogantes que tiene sido objeto de investigación en el panorama de la metología de ELE: ¿cómo la enseñanza puede favorecer al aprendizaje de una lengua? y ¿cómo elaborar/realizar actividades que conjuguen gramática y comunicación? Estas cuestiones no son tópicos de este trabajo, sin embrago no se puede pensar en la enseñanaza de la competencia gramatical por la práctica docente sin que se tenga en cuenta que el código, el sistema y la estructura de una lengua deben recibir un aporte en el que se conviertan en comunicación, acción y cultura. En otras palabras, que la gramática se insiera contextualmente en el proceso de enseñanza/aprendizaje de ELE, convertiéndose en un medio de intercambio y negociación de informaciones que lleve a los estudiantes a la producción y comprensión en la LE. La subcompetencia gramatical en la enseñanza de LE La subcompetencia gramatical o lingüística es una dentre las subcompetencias que se insiere en el desarrollo de las cuatro destrezas del enfoque comunicativo. No obstante, esta es la subcompetencia que los profesores más dan enfasis en las clases de LE, sea porque están inseridos en una tradición metodológica basada en la enseñanza gramatical, sea porque tienen una dependencia en utilizar materiales didácticos que en su gran mayoría se basan en la gramática[1]. A pesar del surgimiento de las varias metodologías a lo largo del tiempo, todas contienen el análisis de perspectiva gramatical normativo. La gramática está presente en todos los métodos, independiente del enfoque lingüístico y/o metodológico en el que está incluído la concepción de qué es saber una lengua. A lo largo de la historia, se sabe que la gramática realiza la descripción y la explicación de sistema de la lengua, que se ocupa de los elementos morfológicos y sintácticos de la lengua y que deja el léxico para la semántica y los sonidos para la fonética. “(…) según algunos gramáticos, la Gramática comprende sólo la Morfología y la Sintaxis; según otros, abarca también el plano fónico, es decir, el de los sonidos y los fonemas. (…) La Semántica, rama lingüística que se ocupa de los significados, no es una parte de la Gramática, pero se tiene en cuenta para el control de los procedimientos formales que se aplican en la Sintaxis y para la explicación de muchos fenómenos sintácticos (…)”.(Gómez Torrego, 1998,p.: 14)[2]: A esta concepción clásica de la gramática se debe que muchos métodos de fines del siglo XIX y durante todo el siglo XX recuperen los preceptos surgidos en la enseñanza/aprendizaje de las lenguas clásicas – gramática y traducción. En esta perspectiva la información nocional y meta-discursiva son los input más relevantes para adquirir la subcompetencia gramatical o lingüística. En esta perspectiva de gramática, el estudio gramatical o lingüístico–gramatical presenta un problema fundamental en el momento de responder a una concepción más amplia en relación a la enseñanza de lengua, que no sea simplemente la de un conjunto de reglas gramaticales de naturaleza nocional, sino que también sea un instrumento de comunicación. El análisis gramatical está a nivel de la sintaxis oracional y, por ello echa mano de todo los elementos de la lengua que implican un análisis a nivel del discurso o del texto. Actualmente, enseñar gramática es bastante más que explicar reglas y normas morfosintácticas. Los tiempos actuales exigen detenerse en aspectos discursivos y pragmáticos, y ello no sólo por hacer los debidos honores a las nuevas corrientes metodológicas y lingüísticas, sino porque el papel desempeñado por la gramática hoy día en la clase de LE es más amplio que la visión histórica después del concepto de comunicación y competencia comunicativa. La competencia comunicativa se puede dividir, a su vez, en cinco otras subcompetencias. Entre ellas está la Competencia lingüística. Esta subcompetencia se puede definir como el grado de capacidad que un alumno de un curso de español posee para interpretar y formular frases correctas en un sentido habitual y conveniente. Ello implica el uso adecuado de reglas gramaticales, vocabulario, file://C:\Users\Usuario\Desktop\ano5n5\data\articles\Valéria Jane Siqueira Loureiro.h... 07/01/2011 Página 3 de 8 pronunciación, entonación y formación de palabras y oraciones. La Competencia pragmática se refiere a la habilidad para utilizar los elementos lingüísticos correctamente en un contexto, situación, etc. (por ejemplo saber qué funciones puede desempeñar una frase, cuándo se puede o se debe utilizar …). La Competencia discursiva se refiere a la habilidad que tiene el hablante para unir elementos lingüísticos sueltos de forma coherente (significa saber actuar a un nivel superior al de la frase). La Competencia estratégica se refiere a la habilidad de remediar posibles fallos en las anteriores competencias. Por último, la Competencia sociocultural se refiere al conocimiento del mundo que va inseparablemente unido a la lengua (gestos, comportamiento …)[3]. A partir del enfoque comunicativo, la gramática es un componente más, indispensable, pero como son indispensables el elemento pragmático, el discursivo, el estratégico y el sociocultural para la enseñanza/aprendizaje de la lengua. La propuesta del desarrollo de la subcompetencia gramatical, en que se tenga en cuenta la comunicación para describir y explicar las reglas y normas del uso y funcionamiento de la lengua, además de las del sistema, es concebida para que se proponga la integración entre la descripción y explicación gramatical con los distintos niveles de enseñanza de la lengua para que resulte de más ayuda a todos, tanto a quienes se dediquen a la enseñanza como a aquellos que se dedican al aprendizaje de una LE. ¿Qué es saber la gramática de la lengua? En el proceso de enseñanza/aprendizaje de LE, los profesores les ofrecen a los estudiantes un conocimiento reflexivo de las regularidades, reglas o normas características de una lengua extranjera que enseñan, llevándoles a los alumnos al desarrollo de la subcompetencia lingüística[4]. No obstante, ello acarrea el detrimiento del desarrollo de las habilidades discursivas, como la escrita, la lectura y la conversación En la historia de los diversas metodologías de LE, la relación entre saber una lengua y saber la gramática de la lengua siempre fue muy próxima. Hasta los años sesenta y setenta, los estudiantes aprendían reglas gramaticales y listas de vocabulario y aplicaban estos conocimientos en traducciones directas e inversas. En los años setenta, los métodos audioorales y audiovisuales encaran la enseñanza de la escrita como similar a la de la lengua oral. Así, el aprendizaje de una lengua se restringía a utilizar los contenidos lingüísticos-gramaticales enseñados en la práctica oral prévia. Los ejercicios que se proponía resultaban repetitivos, puesto que se trataban de ejercicios de repetición de estructuras lingüísticas aprendidas oralmente en la forma escrita. No obstante, la gramática transformacional de Chomsky cuestiona los fundamentos teóricos de los métodos audiorales. Dentro de su corriente, los alumnos deben crear su propia lengua en un acto de comunicación sea oral o escrito. Desde esta concepción de enseñanza/aprendizaje de lengua se destaca el enfoque comunicativo que propone un gran cambio en la forma de afrontar la gramática en la clase de LE. Para el enfoque comunicativo, la habilidad de componer oraciones no es suficiente para que haya la comunicación. La comunicación escrita sólo tiene lugar cuando se utiliza para realizar una serie de conducta social como describir, narrar, argumentar, entre otras. A partir de este enfoque, se introduce el principio del aprendizaje y no de la adquisición de la lengua. Además, la subcompetencia gramatical no funciona como refuerzo de lo aprendido de la “fase” oral, sino también su enseñanza parte del principio de que es una habilidad que tiene sus estrategias propias distintas en el registro escrito y en el registro oral y que a la vez esta subcompetencia interacciona con las demás subcompetencias[5]. En la enseñanza de la gramática, desde la perspectiva del enfoque comunicativo[6], no basta que los estudiantes sepan un conjunto de reglas y estructuras de la LE analizadas y organizadas conscientemente en un sistema, necesitan saber cómo funcionan las normas y estructuras gramaticales del español, en una gran variedad de contextos, niveles sociales e incluso ámbitos profesionales, para verificar los diversos usos y funciones del lenguaje. Así, la gramática explícita[7], para un aprendiz, es importante, ya que es la encargada de monitorizar y por lo tanto puede ser una aliada a la hora de enfrentarse a la fosilización, la interferencia, entre otros problemas que surgen en el proceso de enseñanza/aprendizaje de LE, pero sin lugar a dudas cuando un estudiante se enfrenta de forma espontánea a la LE va a echar mano de su conocimiento implícito[8]. Cuando un alumno se comunica en la LE utiliza ambos conocimientos gramaticales – el file://C:\Users\Usuario\Desktop\ano5n5\data\articles\Valéria Jane Siqueira Loureiro.h... 07/01/2011 Página 4 de 8 explícito y el implícito. El aprendiz acude al conocimiento explícito que posee de la LE con la función principal de monitorizar, controlar que las producciones lingüísticas sean correctas y si no es así corregirlas. Cuando el aprendiz usa el lenguaje de forma natural, el conocimiento explícito juega un papel secundario y es el conocimiento implícito de la gramática el que rije formalmente los usos del lenguaje para la comunicación. Dentro de esta perspectiva, la tarea del profesor de convertir las clases de E/LE en un espacio en el que no sólo se ofrezca estructuras gramaticales e informaciones meta-discursivas sobre la lengua, sino también que se proporcione actividades de tipo procesual – lectura y comprensión oral – y de tipo productiva – expresión oral y escrita – que lleve a capacitar al alumno para la comunicación, desde el punto de vista pedagógico se da a partir del momento que se dé importancia al proceso de adquisición la lengua. En el enfoque comunicativo, la importancia de darles a los estudiantes exponentes nocio-funcionales para que los capaciten para la comunicación, desarrollando las cuatro destrezas cumplen el objetivo de desarrollar las estrategias tanto de comprensión como de expresión en la LE. Hoy en día, tras haber superado la idea de que el aprendizaje de la gramática no llevaba a la adquisición de la LE, se asiste a la recuperación de la gramática y a la búsqueda de aplicaciones que den lugar a un proceso de aprendizaje-adquisición más completo y eficaz en las aulas, aunque existan todavía carencias metodológicas. A partir de esta perspectiva la enseñanza de la subcompetencia gramatical en la destreza escrita retoma su papel de monitorizar la producción, pero intentando incorporar los diferentes tipos de procesos y subcompentencias[9] necesarios para la enseñanza y aprendizaje de lenguas. La inserción de la subcompetencia gramatical en la enseñanza de E/LE La influencia de la gramática se hace presente en todos los métodos de enseñanza de lengua extranjera. Los profesores muchas veces confunden el hecho de tener a dispoción el conocimiento reflexivo de las regularidades, reglas o normas características de una lengua con saber las estrategias discursiva y textual. Como ya se aportó anteriormente, los hablantes nativos de una lengua disponen de un conocimiento instrumental o procidimental y en la clase de ELE es este tipo de conocimiento que se intenta desarrollar en los estudiantes. En otras palabras, los hablantes no nativos deben saber usar de forma espontánea un complejo sistema de reglas gramaticales y de redes de palabras y significados para transmitir sus mensajes e intenciones tanto para interpretarlos como para expresarse en las interrrelaciones comunicativas. Dentro de una concepción comunicativa para que una persona sea usuaria de una determinada lengua equivale a que disponga de esta serie de conocimientos y habilidades lingüísticas de las cuales no siempre sea totalmente consciente. El estudiante tiene que disponer de un sistema de reglas y normas gramaticales no necesariamente normativas que le ayuda a expresarse y a interpretar los mensajes. El tratamiento didáctico del componente gramatical desde la revolución comunicativa de los años 70, cuando la enseñanza de lenguas ha sufrido un cambio radical desterrándose el foco del conocimiento gramatical declarativo[10] hacia la adquisición de un conocimineto gramatical procedimental, conduce a una enseñanza de la gramática donde se exponga la funcionalidad y el uso de léxico y estructuras morfosintáticas de la LE y no solamente las reglas y normas académicas. En el foco procedimental, se plantea el papel de la gramática como uno de los elementos formadores del proceso de la adquisición del lenguaje y surge el planteamiento de un proceso mucho más complejo y creativo en el que sin lugar a dudas el que aprende desempeña un papel fundamental. A esta nueva forma de comprender el proceso de enseñanza-aprendizaje se puede sumar el desarrollo y aplicación del concepto de competencia comunicativa que define en los siguientes términos (CANALE M., 1997, p. 65-66): “(…) sistemas subyacentes de conocimiento y habilidad requeridos para la comunicación (…) El conocimiento hace referencia (…) a lo que uno sabe (consciente o inconscientemente) sobre el lenguaje y sobre otros aspectos del uso comunicativo del lenguaje; la habilidad hace referencia a lo bien o mal que se utiliza este conocimiento en la comunicación real (…)”. file://C:\Users\Usuario\Desktop\ano5n5\data\articles\Valéria Jane Siqueira Loureiro.h... 07/01/2011 Página 5 de 8 Enfocar la enseñanza de la gramática desde sus aplicaciones, no sólo normativas al español como lengua extranjera, encara con la necesidad de replantearse cómo tratar las reglas y normas dentro de una visión en la que se incuya el uso y el funcinamiento de los elementos lingüísticos y cómo estos elementos se manejan en el discurso y en el texto. Las nuevas corrientes pragmáticas y discursivas necesitan mucha más información, e información diferente, sobre cómo se escribe el castellano, en una gran variedad de contextos y situaciones para poder desarrollar con los alumnos una gramática de uso o gramática pedagógica. El subcomponente gramatical siempre tuvo una estricta relación con la enseñanza/aprendizaje de LE, puesto que es la gramática que dicta normas y fija reglas sobre el uso y funcionamiento de la lengua. En consecuencia, los manuales de LE tienen por tradición presentar explicaciones gramaticales basadas en las que los compendios gramaticales les ofrecen, así como los ejemplos y las muestras de lengua aportados se basan en su mayoría en textos literarios o escritos (periódicos, revistas, folletos, entre otros). La subcompetencia gramatical se trata de una competencia que posee estrategias propias, ya que debe seguir las convenciones lingüística, respetando las reglas y normas gramaticales, puesto que una de sus principales funciones de la gramática es la de mantener la unidad lingüística dentro de la diversidad de hablantes de la lengua. Entretanto, a pesar de ello, el aprendizaje-adquisición de la competencia gramatical debe ocurrir en un contexto mucho más inconciente de las reglas estructurales y de la organización textual en la lengua. Propuesta de aportación de la gramática en actividad comunicativa En el proceso de enseñanza/aprendizaje de LE, el conocimiento reflexivo de las regularidades, reglas o normas características de una lengua lleva al desarrollo de la competencia lingüística[11]. No obstante, muchas veces ello acarrea que haya el desarrollo de las habilidades discursivas, tanto oral como escrita, que también son inprescindibles para el desarrollo de la competencia comunicativa[12] en los estudiantes. De esta forma, la tarea de convertirse las clases de E/LE en un espacio en el que se proporcione estructuras gramaticales e informaciones meta-discursivas sobre la lengua inseridas en actividades de tipo procesual – lectura y comprensión oral – y de tipo productiva – expresión oral y escrita – que lleve a capacitar al alumno para la comunicación, desde el punto de vista pedagógico se da a partir del momento que se dé importancia al proceso de adquisición la lengua. En el enfoque comunicativo, la importancia de darles a los estudiantes tanto exponentes gramaticales como funcionales para que los capaciten para la comunicación pasa por desarrollar las cuatro destrezas enlos alumnos para cumplir el objetivo de desarrollar las estrategias tanto de comprensión como de expresión en la LE. Dentro de esta visión comunicativa y a la vez pragmática en la enseñanza de LE, teniendo en cuenta no sólo los aspectos formales de la lengua – gramaticales – pero también otros factores que forman parte de las prácticas sociales del funcinamiento y uso de los elementos que hay en la lengua, el uso de textos seleccionados a partir de situaciones argumentativas publicados en periódicos y revistas es un material accesible y de fácil manejo tanto por los profesores como por los estudiantes. Así, a través del texto, el estudiante extrae desde una situación discursiva, las intenciones comunicativas con sus exponentes funcionales, además de las estructuras gramaticales. La propuesta de este trabajo con la competencia gramatical en la clase de LE pasa por el criterio de la integración en el proceso de enseñanza/aprendizaje del contenido gramatical con las habilidades discursivas (Gómez Casañ y Martín Viano. 1996, 45 – 48). Así, lo que se propone es que en un enfoque comunicativo, haya la integración entre las habilidades que se desarrolla en las actividades didácticas, en este caso de la producción oral y de la producción escrita mediada por la comprensión lectora. En este sentido el trabajo intenta desarrollar las nociones gramaticales en los alumnos de manera inconciente. La tarea a desarrollarse se divide en tres etapas. En la primera etapa del trabajo, los estudiantes sin ningún tipo de input y sin incentivos para la negociación de significados, leen el texto previamente elegido por el profesor en clase. A partir de esta lectura – habilidade de tipo procesual – los alumnos y los profesores reflexionan sobre el elemento lingüístico (gramatical), previamente planeado por el profesor, que se quiere presentar a los estudiantes utilizados en el texto. Después de la lectura como punto de partida, los estudiantes infieren los aspectos semánticos e pragmáticos del tema gramatical en cuestión presentes en el texto, siendo file://C:\Users\Usuario\Desktop\ano5n5\data\articles\Valéria Jane Siqueira Loureiro.h... 07/01/2011 Página 6 de 8 así activan mucho más que reglas morfosintáticas, activan reglas funcionales y semánticas de los elementos funcionando en nivel textual. En la segunda etapa, a través del debate – actividad de expresión oral – sobre el tema ofrecido por el texto en la clase de LE, los estudiantes intentan emplear el tópico gramatical analizado y estudiado en los textos que se leyó en la clase. En esta etapa, los estudiantes ya tienen el input contituído por los textos seleccionados que parten de situaciones discursivas y teniendo la lectura como actividad previa, el debate se convierte en una herramienta importante para la construcción de la orientación discursiva oral para los alumnos. En la tercera y última etapa, se desarrolla las condiciones semejantes a las de la segunda etapa, en el sentido que se ofrecen los mismos inputs[13]. No obstante en esta etapa, a pesar de las semejanzas de las condiciones didácticas y pedagógicas ofrecidas, los estudiantes tienen indirectamente acceso a las informaciones meta-discursivas conseguidas por el trabajo precedido de la habilidad de tipo procesual – lectura – y de expresión oral – debate – con la integración de la habilidad escrita. En la utilización de la habilidad escrita, se espera que los alumnos alcancen un nivel de mayor de adecuación del uso y funcionamiento del contenido gramatical frente al que presentan en el debate, puesto que en esta etapa los estudiantes ya tuvieron la oportunidad de contornar las dudas y dificuldades que presentaban antes del trabajo de lectura y expresión oral basados en el texto. En la expresión escrita, el profesor es capaz de verificar si hubo el fin del proceso de transferencia de la L1 a la LE, característica que forma parte del proceso de adquisición de lengua extranjera en los estudiantes, principalmente por el hecho de tratarse de dos lenguas tan semejantes entre si. En las tres etapas de trabajo, durante el proceso de integración de las habilidades se objetiva desencadenar un proceso de inferencia de informaciones meta-discursivas sobre los elementos gramaticales que funcionan en el texto a nivel discursivo, que en la mayoría de las veces no está descrito o explicado por las estructuras gramaticales de los manuales de E/LE. Siendo así, a través de la situación comunicativa propuesta, en el caso el texto, el estudiante infiere los posibles empleos y funciones del tópico abordado, deduciendo sus intenciones comunicativas y sus exponentes funcionales. En esta propuesta, la lectura fue el punto de partida para la actividad de expresión oral y escrita No obstante, en el proceso de integración entre las habilidades para contornar las posibles ausencias de descripción y explicación gramaticales, también es posible tener otro tipo de habilidad como punto de partida, como por ejemplo, partir de una actividad de expresión escrita desarrollada por los estudiantes e integrarla a otra de expresió oral. (Gómez Casañ y Martín Viano. 1996, 45 – 48) En este trabajo de integración de las habilidades para la enseñanza implícita de un tópico gramatical, es imprescindible que se lleve en cuenta la necesidad de adecuarse lo que se quiere enseñar a las necesidades presentadas por los distintos grupos de estudiantes. Esta propuesta de trabajo no es de manera absoluta cerrada en si misma y por ello el profesor puede y debe analizar la realidad pedagógica en la que se insiere para poder determinar cuáles las habilidades que va a integrar y cómo va a integrarlas entre si. Consideraciones Finales La enseñanza de la subcompetencia gramatical es uno de los retos fundamentales que los profesores de español lengua extranjera encuentran en su práctica cotidiana. El proceso de enseñanza/aprendizaje de esta subcompetencia, dentre las otras, siempre ha recibido y aún recibe un especial destaque por parte de todos los métodos de enseñanza de LE, incluso el del enfoque comunicativo. En la enseñanza de la competencia gramatical, el estudiante aprende las normas y el funcionamiento de los elementos de la lengua que, en general, forman parte del código escrito de la lengua, sea materna o extranjera. Por ello, la cuestión es cómo proporcionar un aprendizaje de la subcompetencia gramatical en lengua extranjera para que los alumnos sean capaces de transferir las estrategias gramaticales específicas que poseen en la lengua materna a la lengua extranjera. A partir de las diferentes aportaciones gramaticales (normativa, descriptiva, didáctica, entre file://C:\Users\Usuario\Desktop\ano5n5\data\articles\Valéria Jane Siqueira Loureiro.h... 07/01/2011 Página 7 de 8 otras), se puede hacer una reflexión sobre el papel de la subcompetencia gramatical en la enseñanza/aprendizaje o enseñanza/adquisición de lengua, en este caso el español, en la clase de LE. El desarrollo de estrategias de enseñanza de la gramática que extrapole las fronteras de las informaciones morfosintáticas y meta-linguística a nível oracional, lleva a la inclusión del desarrollo de las habilidades de organización discursiva/textual que se hace necesario para que los alumnos logren alcanzar la competencia comunicativa en E/LE. Además de proporcionar el aprendizaje más inconciente de las reglas y normas de la gramática de la lengua, lo que se propone es que les enseñen a los estudiantes los aspectos de la organización discursiva y textual tanto escrito como oral y que se reconozca las estructuras concretas de cada una de las destrezas. Los aspectos de la subcompetencia gramatical pueden ser enseñados y aprendidos por los alumnos de forma inconsciente, implícitamente a través de la integración del contenido gramatical con el desarrollo de las destrezas lingüísticas, como por ejemplo la lectura. Bibliografia: ÁLVAREZ, Mirian. (1998) Tipos de escritos I: narración y descripción. Madrid, Arco Libros. ÁLVAREZ, Mirian. (1994) Tipos de escritos II: exposición y argumentación. Madrid, Arco Libros. BECHARA, Evanildo. (1999) Ensino da gramática – Opressão? Liberdade?. São Paulo, Ática. CASSANY I COMAS, Daniel .(2004) “La expresión escrita”. En Sánchez lobato, Jesus y Isabel Santos Gargallo (directores). Vademécum para la formación de profesores – enseñar español como segunda lengua (L2)/lengua extranjera (LE), Madrid, SGEL, pp. 917-942. GÓMEZ TORREGO Leonardo. (1998) Gramática didáctica del español. Madrid, SM. LUFT, Celso Pedro. (1994) Língua e liberdade. São Paulo, Ática. MARTÍN PERIS, Ernesto. (2004) “La subcompetencia lingüística o gramatical”. En Sánchez lobato, Jesus y Isabel Santos Gargallo (directores). Vademécum para la formación de profesores – enseñar español como segunda lengua (L2)/lengua extranjera (LE). Madrid, SGEL, pp. 467-490. REYES, Graciela. (1999) Cómo escribir bien en español. Madrid, Arco / Libros. AA.VV. (1997) Competencia comunicativa. Documentos básicos en la enseñanza de lenguas extranjeras. Madrid, Edelsa. Minicurrículo: Bacharel e licenciada em letras, habilitação em português – espanhol pela Universidade Federal do Rio de Janeiro. Em 1996 obteve o Diploma Superior de Español como lengua extranjera outorgado por El Ministerio de Educación y Ciencia del Reino de España. Concluiu curso de atualização “O espanhol escrito: da teoria à prática” no ano de 2000. Membro de associações culturais entre as quais Associação de Espanhol do Estado do Rio de Janeiro (APEERJ) Associação Brasileira de Hispanistas (ABH), Asociación para la Enseñanza del Español como Lengua Extranjera (ASELE), freqüentou cursos na Universidade de Volladolid e na Universitas Castellae em Volladolid – Espanha. Mestre em língua espanhola e literaturas hispânicas pela Universidade Federal do Rio de Janeiro em 2004 É professora assistente da Universidade Gama Filho e da Faculdade Geremário Dantas. [1] En este trabajo se entiende por gramática el razonamiento explícito de normas que responden a un registro específico de una lengua o saber de carácter más o menos metódico sobre la lengua. [2] GÓMEZ TORREGO L., “Introducción” In: Gramática didáctica del español, Madrid, SM, 1998. [3] CANALE M., “De la competencia comunicativa a la pedagogía comunicativa del lenguaje” en AA.VV. Competencia comunicativa. Documentos básicos en la enseñanza de lenguas extranjeras, Madrid, Edelsa, 1997, pp. 65-6. [4] La competencia lingüística se refiere a la competencia gramatical, a los conocimientos meta-discursivos que el estudiante posee sobre la lengua que aprende. file://C:\Users\Usuario\Desktop\ano5n5\data\articles\Valéria Jane Siqueira Loureiro.h... 07/01/2011 Página 8 de 8 [5] La interacción de las subcompetencias y habilidades en el proceso de enseñanza/aprendizaje de LE (Pilar Gómez Casañ e Maria del Mar Martim Viano. 1996: 45 – 48) . [6] La competencia comunicativa incluye más competências que la mera competencia lingüística, incluye también: la competencia sociolingüística, la competencia discursiva y la competencia estrategica. [7] Las reglas y estructuras de la LE analizadas y organizadas conscientemente en un sistema por el alumno. [8] Conocimiento gramatical que es de naturaleza intuitiva o subconsciente y no se halla formulado como un corpus de reglas. [9] Además de la sbucompetencia lingüística o gramatical, se agrega las comunicativas: la subcompetencia pragmática, la subompetencia discursiva, la subcompetencia estratégica y la subcompetencia sociocultural. [10] Conocimiento declarativo es el conocimiento sobre la lengua, la grmática explícita, que se opone al conocimiento instrumental o procedimental que es saber utitlizar de manera espontanea el complejo sistema de reglas gramaticales, o sea es el conocimiento de la lengua – gramática implícita. [11] La competencia lingüística se refiere a la competencia gramatical, a los conocimientos meta-discursivos que el estudiante posee sobre la lengua que aprende. [12] La competencia comunicativa incluye más competencias que la mera competencia lingüística, incluye también: la competencia sociolingüística, la competencia discursiva y la competencia estrategica. [13] Refierense a los textos de periódicos o resvistas utilizados en el aula. file://C:\Users\Usuario\Desktop\ano5n5\data\articles\Valéria Jane Siqueira Loureiro.h... 07/01/2011