Diez cosas que ya debieran estar obsoletas en las escuelas

Diez cosas que ya debieran estar obsoletas en las
escuelas
Greg Stack, en Mind Shift, analiza diez cosas de las escuelas
que deberían estar, a juicio del autor, obsoletas…
El entorno donde todos aprendemos y hemos aprendido ha
cambiado mucho a lo largo de los años, pero, hablando de las
escuelas, colegios e institutos, parece que el cambio social influido entre otras muchas cosas - por las nuevas tecnologías, no ha hecho
cambiar las infraestructuras físicas y burocráticas, del mismo modo
que no ha generado una nueva metodología o un cambio de
modelos demasiado llamativo.
Interesante… aunque opinable; con matices, no todo el
mundo está plenamente de acuerdo con Greg Stack.
1. ¿Salas de informática?
Nuestros estudiantes se conectan a internet en todas partes,
salvo en la escuela. Es incomprensible. Independientemente del
nivel
de
ingresos
familiares,
-
todos
los
niños
y
más
los
adolescentes -, disponen de dispositivos móviles, pero cuando
llegan a la escuela les ordenamos apagarlos y los metemos en una
sala de computadores obsoletos. Un instituto o un colegio moderno
debe
tener
conectividad
en
todas
partes
y
tratar
a
los
1
computadores como si fuesen el lápiz y papel y no como si fuesen
algo tan raro y delicado como un microscopio.
2. La sala de clases como único lugar de aprendizaje
Es
posible
que
las
experiencias
más
significativas
de
aprendizaje - especialmente en la educación media -, que podamos
recordar no sean precisamente de las salas de clase… ¿Sería
trabajando en grupos, en un viaje o sobre un viaje? ¿Haciendo un
proyecto? ¿Haciendo un trabajo en casa? ¿Hablando con los
amigos? Aunque las aulas podrían estar diseñadas para el trabajo
colaborativo y para las metodologías activas, ni siquiera lo están;
es más, no podemos restringir el aprendizaje al aula.
3. Salas de clase centradas en el profesor
Las aulas que tenemos están diseñadas de acuerdo a una
enseñanza tradicional centrada en el profesor, como principal
protagonista del contexto y como fuente central de autoridad.
Substituir la pizarra verde por otra blanca… ya no es suficiente. Hay
que cambiar la estructura de la clase, la disposición de las mesas y
la metodología; por ejemplo, trabajos por proyectos, aprendizaje
basado en problemas, etc.
[Si
quiere
ver
una
guía
de
aprendizaje
basado
en
Proyectos: bit.ly/MnuKle] [La enseñanza del futuro: bit.ly/NrgjNa]
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4. Las salas de clase aisladas
3
Las aulas del centro educativo parecen incomunicadas: nadie
sabe qué pasa en la sala de al lado. El aislamiento, como dice Tony
Wagner (Harvard) es el enemigo de la mejora y, sin embargo, el
diseño físico de los institutos y colegios implica "cajas" y "cajones"
que, luego, no se corresponden con la realidad del trabajo del
alumnado fuera del centro
5.
Organizar
a
los
profesores
por
departamentos
de
asignaturas
¿Y dónde queda la interdisciplinariedad? Para no se nos
escape la organización interna de escuelas, colegios, institutos… los
docentes se organizaron en Departamentos y al alumnado se le
impuso un currículo que también han de cumplir rígidamente los
profesores. Los departamentos están bien, pero su organización ha
de ser flexible, igual que ha de serlo el currículo.
6. Los pasillos y la arquitectura escolar
Los pasillos ocupan un enorme espacio y, sin embargo, están
absolutamente desiertos. Otra disposición de las aulas podría evitar
ese gran espacio innecesario y desocupado. Ahora, ¿por qué no
utilizar los pasillos como espacio de aprendizaje informal?
7. Las bibliotecas tradicionales
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Un centro educativo del siglo XXI debe tener bibliotecas que
sean un bien común, colaborativo: un lugar de aprendizaje que
soporte muchas actividades diferentes, abierto y en el que se pueda
acceder a la información y evaluarla. Los libros tienen su lugar,
pero, ¿y los artículos? ¿Y qué pasa con internet? Un patrimonio
común de aprendizaje no puede ser un lugar sagrado lleno de
restricciones
(en
muchas,
ni
siquiera
se
permite
a
los/as
estudiantes acceder a ciertos libros), sino un lugar en el que se
estimule la investigación… con participación activa de los alumnos.
8. Gimnasios al interior, oscuros
¿Por qué no tener gimnasios con amplios ventanales, con luz
natural? ¡Se ahorra dinero en iluminación artificial!
La mayoría de los gimnasios ni siquiera tienen acceso a la luz
natural, por miedo a las miradas que pueden interferir en esos
"eventos deportivos". Apagar la luz, en estos tiempos, nos ahorraría
dinero: más luz natural porque las clases son diurnas.
9. Los comedores institucionales
En general, implica mesas plegables que, curiosamente, se
dejan plegadas todo el día. ¿Por qué sacrificamos un espacio
amplio, valioso, cuando puede servirnos para tantos propósitos?
Los espacios deberían requerir menos movimientos de muebles y
ser flexibles, para utilizarlos eficazmente. Comer en grupos más
pequeños también podría beneficiar a los estudiantes y permitiría
un mejor uso. Aunque la comida no sea la mejor, el espacio sí
puede serlo.
10. Los baños de los alumnos
Los estudiantes tratan de evitar usar los baños del colegio,
aunque el centro sea nuevo, porque les preocupa la privacidad y la
limpieza. En Finlandia se usan baños individuales que se encuentran
en áreas de aprendizaje compartido, entre las aulas. El alumnado
parece sentirse a gusto en ellos y desarrollar un sentimiento de
"propiedad", así que no los destrozan, tienen más privacidad y
menos intimidación.
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