Plumas de oro PARAGUAYAS

AÑO XIV
MADRID
NUM. 3.908
MIÉRCOLES ¿8 DE SEPTIEMBRE DE
mt
Totht lo
süscrapoofiES
Director
M a d r l c t , Mtn r r » * «
. 2,850 p t a a .
F*f o v^^otfflíBi, trtm^iB^ir^ 9 , 0 0 ^^
üpflrfMto mt CVVfVM ^aJ
2 S [JiPlMS I 9 7 5 PMAS
Número suelto, 1 0 céntimos
LA LIBERTAD seflala a n i lectores y ananciantei
: : que es el periódico de mis grandes tiradas : :
DEL P E N S A R Y DEL V I V I R
sido también a&esinado»; pero La Rodaooldn do LA LIBKRTAD da situación por que atraviesan
AL PASA R
hasta ahora se Ignoran detalles. está formada por Joaquín Aznar, muchos ciudadanos, la mayoría de
director;
Antonio
de
Lezama,
tublos ciudadanos del país, es demaRepresalias sangrientas
•La Habana, 27.—Un diputado y dlreoton Ricardo Hernández del siado fuerte.
Pozo,
redaotor-Jefei
Augusto
Barun defensor del Consejo de gueiNo resulta ofensivo para una
rra Incoado contra los acusados cia, Oarlot Bonet, Rafael Oarbo- democracia suponer que su decoro
políticos de la oposición han sido nell, Manuel de Oattro TIedra, An- reside en que su Jefe pueda firmar
asesinados a tiros en su domlclr tonio Oubois, Teresa de Eaoorlaza,
lio, juntamente con el hermano Hellodoro Fernández Evangelista, un documento con do» pluma» de
(Días de A s u n c i ó n )
de uno de ellos, que resultó llosa Manuel Fernández Gómez, oro, mientras el paro va Invadienmuerto, y otro hermano que ha Antonio Carola Romero, Franolsoo do, como una terrible enfermedad
a coronel me Uevó al cuartel y tico oamaxadia, con bellistmas Imá.sido herido de gravedad. Ha re- Hernández Mlr, Rafael Hernández progresiva, el organismo nacional? ante loe soldado» pronunció una genes, me saludaba como «al hi«No h« venido a meter los fenómenos soeiales para con- sultado
Ramírez de Alda, Ángel Lázaro,
también
herido
otro
diCierto que el importe de ambo» arenga... Guefrera arenga... Es es- jo del sol de Estpafla, de la luz
paz, sino «spada.>
vencerse de que siempre y en to- putado.
Manuel Machado, Antonio de Miobsequios es insignificante, compa- te misoio coroneü qfue dUirige aho- de Europa». Lo que hizo, oomo es
Palabrae evangélicaa. das partes los defensores de los
guel,
Antonio
Nicas,
Manuel
Ortiz
Este atentado »e cree que ha
rado con la cantidad precisa para
Un discreto amigo d« Bilbao me Imperlallsroos y, por ende, de las sido cometido como represalias de Pinedo, Darlo Pérez, Arturo atender a la» urgente» necesidades ra en la guerra a sus horoloos lógico, que ante tanta lug; queda»
ra un poco deelumbrado. Le conenvía un recorte d« «El Nervión» guerra», son los reaccionarios, por el asesinato del presidente Pérez Camarero, Carlea Pérez que una parte, la más importante soldados.
BIdonlo Pintado, Alarde
Tan bravo le escuché en su mi- testé con un poco de sol y un poen que cierto escritor que se ocul- que acatan las doctmas de Pío IX del Senado, ocurrido unas horas OrtIz,
Prats y Beltrán, Pedro de Répide, de la nación, reclama; pero como Utaír discurso, quat bien pudiera co de soanbra, quizás de maSa
ta bajo seudónimo haoe la aiK>- y de la Compañía Ignaciana. antes.
Ha sido declarado el estado de Alfonso R. Kuntz, Franolsoo RIvero síntoma es demasiado significar ser ei coronel heroico que antes .wmbra. Y os aseguro que estaba
logla de la guerra y del odio. «No Cuando la gran guerra sabido fué
guerra en la capital como conse- Gil, Aifonao Sánchez, Luis de Slr- tivo.
de entregar el tuerte Boquerón a conmovido... Ante mi se abría un
hay otro camino — dice — que la que eran germanófllos todos loa cuencia de los atentados come- val, Lázaro Somoza Silva, Lult
La trascendencia de un decreto lo» bollvlanioe prefirió sulcldairse. mundo nuevo... Admlratoa, «1, la
guerra. A loa ídolos no es sufi- fanáticos, no porque creyesen que tidos contra el presidente del Se- de Tapia, Alejandro de la Villa,
no está en los medios más o me- Sucedía en Asimclón cuando la fuerza de las Ideas, cantina las que
ciente hacerlos descender; es pre- Alemania tenia una misión de cul- nado y otras personalidades po- Antonia de la Villa y Antonio
nos espléndidos de que »e dispone visité yo algo semejante a lo que nada pueden tiranos y dictadores,
Zozaya
ciso trlturartos, reemplazarlos por tura, como eUos alegaban, sino líticas.
para estampar al pie un nombre en el Paría del 70. Retretas TtiMi- Ideas que habían ya llegado a lo
ti caudillo, por la jerarquía. Las porque velan en el kaiser al rey una rúbrica; está en »u conte- tare» Inflamaben las muidhedumr profundo de las vírgenes selvas,
casta» han trepado, híun corrom- presentante del despotismo y de
nido. Su influencia histórica no bres; béllioo» dlaouffsos incendia- tocado su corazón, desipertado la'
pido oon sus tópicos la voluntad la superstición, frente a la orienconsiste en la solemnidad de que ban la» trilbuna»; el Partomento luz entre les trágicas somhras
LO Q U E S E F I R M A
patriótica, y a esas castas hay que tación republicana y democrática
se le rodee, sino en la eficacia que ardía en convuladone». Y eJ. Para- de bairtarie e Ignorancia, despedí
•pftlnteerrarla* al rebaño. Ya sé que de Francia. Odiaban a 1« patria
de él resulte. Lo importante e» lo guay, nuevo Moisés aJzado en tado también una tradiolón pasa^
esto «A ol>ra d« mestlnes; poro de Víctor Hugo por instinto de tique »e firma; no con lo que se Asunción, miraba del lado de Bo- da, pues entes que Lenis surgl*cuando loa mjastimes sou impo- ranía; porque hay que hacer nofirma.
IMa con el proíétíco minar de »u ra en Rusia, y ya hace siglos, los
tentes queda la honda diestra diel tar que este instinto lo sienten en
Con una pluma humilde, de dia- irritada visita, die au ojo cldoipe. incas peruano», y los primitivos
pastor. La fuerza. No Importa que una especie de sadismo no solario, »e puede hacer una revoluQuería yo dar una conferencia boliviano», y los p e r a ^ a y o s del
la pl«l quede entre los dientes del mente los déspota», sino los esción.
en
la Universidad de Asunolióa so- silglc XVI, y después los mismos
sufre
un
descrédito
tan
enorme
El
protocolo,
en
las
fastuosas
mastín o loa bordes de la piedra; clavos. El entuslíiamo por la gueROSARIO DEL OLMO
bro la paz y la guerra, orítioa de Jesuíta» en sus paraguayas «Mino Importa que «1 rebafto se dlez- rra y por la esdavltud tiene una Cortes de emperadores y de reyes, desde que el cine la» ha superalas pasada» gueimas... Un alegre siones», habían vivido Dargo ttammi»; oasl ee necesario que ocurra, base metafísica en los dogmas ve- constituye UIM. molestia habitual do con sus estrellas, más bonitas
CENTENARES
DE
VICTIMAS
toirbión de vociferanitea estudien- po en pleno y fireM'raal eoleott'
y
más
interesantes
que
las
prinpara
lo»
que
tienen
que
soportarpaira qu« la |u«tlcla trlimíe, para nidos de lo alto, c|ue »e de<aeiian
tes que a sí mismos •» titulaban Tlsma
qa» la barbarle acabe. ;Ouál serla linlcos y que llegan a pedir que lo. La descripción de cuantos acto» cesa» auténticas, y desde que lia
comunistas, pero que pertemecíam
la fórmula unlveroal? He aquí la quienes no comulgan con sus idea- oficiales »e celebran ocupa mucha» miseria «n eso» reino» ha «altado
Los mllitarotea me mlmtMn «•<
a la má« seneota sociedad d« Asunpáginas en los diarios y revistas a la calle sin poder permanecer
re«puesta de Beaverbrook: la guefludos al día siguiente, cuando par
les suban a las hogueras. Por más acusadamente adictos al ré- oculta por más tiempo, que ni sición
la
aristooráitica,
sacároninM
rra.»
eso la propaganda contra la gue- gimen, publicaciones que cuentan quiera las pobres muchachas que
una tarde del hotel entre estruen- seaba las calles de Astunolón, |Y
Todavía sigue al iracundo en rra tiene que comenzar en la es- con un público perfectamente ho- soñaban con lo» manto» de áureo» Salónica, 27.—Varios movimien- dosos imuerast y irívasl, muwras qué militares! lElegantlslmos, atilto» sísmicos de gran violencia »e a la guerra y viva» a mi pobre dados, fulgurantes eo sos dorados
•ne furores Impulsivos. .«Loe hom- cuela, liaciendo que el nlfio pien- mogéneo de «eflora» y muchachi- tejidos le prestan atención.
uniformes, alemanes o firanoesaal
han producido durante la pasada
bre» — «ligue — de r»9ponsAblil1dad se por au cuenita y no se plantee tas cursi», quienes llegan al éxtasis
La gran carnavalada declina en- noche y en las primera» horas de enferma persona, algo cansada de iQué distintos de axpMl «Jératto
littermiaoloinal no pueden ahogar los grave» prc^Iemas dogmMico» cuanda reciben noticia detallada
vivlT,
y
(jnleaas
cfue
no
quieras
tre esplendores anacrónicos que la madrugada en toda Macedonia,
da (oldados descalzos y en camieee grito unlflcador que nace de hasta tanto ' que tn inteligencia de las indumentarias regias en la»
ya no deslumhran a nadie, procu^ causando un enorme pánico entre me pusieron de patita» en la ca- són, de Indeseadoe Indilos, f a s
todo» k » pueblo» y de todos los sea capaz de pensar y de razonar, galas palaciega», y al desmayo »1
lle, y luego, con todo mi cuerpo,
rando «llevar 1 len» la derrota, «In la población.
atemraban, hará olnouenta aflot, a
peciho»: ¡guerral Y el eco, como merced a la labor constante del el cronista, sentimental, da publiEJ epicentro de dichos movi- al lado de una mesa de un auSa... los viajeros! Alguien maltelosai
percatarse (ceguera incurable) de
una bala lanzada por un Hércu- maestro y de le oomrlvencla con cidad a algún rasgo heroico de emMas
cuando
pjínciplaba
yo
mi
que su» últimas piruetas se pier- mientos, de lo» ouaie» lo» más Immente decía si los cuatro o seis
les « través de un plano entari- gentes desprovistas de ceguera» perador o rey cuando uno de ésden entre la indiferencia general. portantes se han sentido a la» nue- prédica olmos eo el cercano pa- elefantes oftcialies COQ qv» 1iro(pemado, repite la misma palabra mentales y de aberraciones de pa- tos consiente en dejarse ver ante
ve y once de la nodhe y tres de tio sonar de eeipueias y ristras de
Pero cuando el panorama varia, la madrugada, parece encontrarse sables. iSerá Primo de Riverat, samo» enan siempre los miamos,
en la» calles, en loa hogares y en ranoico.
el pueblo.
cuando el anticuado sistema ee de- en Chalcldlque.
las baraancadas de los paisaje»
pregunté yo entre carcajadas. No que daban espectaenlams ywtMi
E» el capitalísimo, unido al faN a d a tan conmovedoramente rrumba, cuando las democracias Loe primeros telegTMna» reolbi- lo «ra, porque el verdadero... «prlr por detrás del diecorado para finfronterizos. Contra la guerra 8«- natismo, el que insplira el furor
rAn inútiles todes las tentativas guerrero. «Cuando un Mussodinl ejemplar como la actitud de un substituyen a los absolutismo», co- dos de la región siniestrada dicen mo» era yo en aquel momento... gir ser mutího», como lo» soldados
y todos lo» orgítnismo» totema- —escribe un Joven pensador, F. de monarca que estrecha la mano de mo la transformación está determir que el número de muerto» e» de Tanto que para ostentar venda- de «I feroci romanl» que hacían
y de, vaí^poe centenaire» efl de
clonales. Alemania quiere T«!on- la Pumarlega—, remedando la p&- cualquier humilde subdito, por el nada por factores Independiente» 120
deiro color local estaba en el país cien de cuatro...
loe herido».
qulstar su honor... LA revancha, es tí'/.ica de Tito Lt.ío y el fetichis- hecho de habar éste cumplido no- de voluntatíe» más o meiiot feenede los antiguos Indios haciendo
Conocí al presidente Ayala, taontDetalle de l,ma viotlmas
una necesidad. Tras la derrota, la mo patriotero de un Guillermo VI venta aflOB o de ser un guarda rosas, la pervlvencia de alguno»
el ídem...
bre más europeo que para;guayo,
Atenas,
27.—A
consecuencia
del
mal
fisonomista
que
impone
mulusos
predilectos
del
régimen
hunrevancha, el desquite, etc., etc.»
o de un Polncaré, exalta la gue- tas a las propias personas reales. dido en los limite» de eu ciclo his- seísmo registrado en Chalcldlque
cultísima persona luego asesina*
Los militarotes cetrinos y acei- da; a dliputados y ministro».
rra, no habla por cuenta propia, Y no se diga nada de la origina- tórico resulta más absurda aún ha resultado destruido el pueblo
En verdad no me sorprenMie la oon iniciativa creadora o destruc- lidad oon que reaccionan los au- que lo fuera en un ambiente pro- de Stnatonikion, donde hay 60 tunados ctianto grefitidos miTán>nEl que lo era de Espafla, tm rimuerto» y 100 herido». Parece que me de arriba abajo oon hitleriano dículo cuanto grotesco poetasteo,
actitud d« e»6 belicoso militar, tora. Quien maneja los hilo» del gustos sujetos ante lo» incidentes picio.
en
la
localidad
de
lerlasoe
hay
un
gesto
y
martínezanideeco
contique oy» ol eco que grita igu^rral retablo es el imperialismo, la po- de la vía pública. SI contemplan
dictatorial y amigo de Primo dé
Si el protocolo resultaba arbitra- centenar entre muertos y heridos nente.
a travo» de los entarimado», y lítica del capital financiero.»
Rivera, (julso, loh menguado!, kialgo gracioso son capaces de son- rio y molesto cuando »e desenvol- grave»,
—lAqul
no
se
haMa
d«
paz,
amtacaso ccQi décimas de D. Bernardo
Pero el principal auxiliar de ese reír; cuando se les dirige la palaterrumpir míe confeTenola» oowtra
ocurrió durante la gultoi—díjoms uno.
Lópeí García. E» la de todos los capitalismo es el fanatismo suges- bra suelen contestar, y »1 a esto se vía en su propia atmósfera y lo El movimiento
la Dictadura. Era un m1nia*rlllo
hora
d«l
aueflo
Se fueron. Los estudiantes vo- reblandecido que ee dedicaba a tx
hombre» de mediana cultura, aooa- tión ador, que convierte a los hom- añade la agudeza de sus pregun- disculpaba el cretinismo caracteAtena», 27.—ILe» noticias qne se
rístico
de
lo»
actores
y
de
»u
pútuimbrados a dlsíratar de privile- bres en rebaflos, que dice a 1« tas y comentarios cuando se enreciben sobre loe eeismoe die Ma- cearon y pagó, por fin, el pato el al mercado por la» maftanas pa«a
gio» y d* llevar a la guerra por Iglesia; «Apacienta mis ovejas», cáentran ante una máquina que no blico, queda completamente de»- cedonia dan cuenta de escena» pobre Wladlmiro Illitlh, conocido seducir a «chlnitas», que ael llapor Lento, pue» como protesta de man allí a las muchachas de serdelante a lo» hijos d i los obreros «pasee oves meas»; que llama a saben para qué sirve, o presiden plazado en la nueva situación. Por- verdaderamente espantosas.
y de los cam,pesmo8. Quien vive los guías pastores y no se atreve un acto que no les interesa, pue- que cuanto» alegato» traten de har La catástrofe sorprendió a la la multar visita oibsequtámnle los vicio, o «mucamas». Por lo qus
de la guerra es justo que la pre- a denominar, aunque lo piensa, a de formularse un Juicio bastante cerse en favor suyo carecerán en población cuando se hallaba en- estudiantes oon algunos ivlvas!, yo en la primera conferencia proabsoluto de fundamento. Si se lur
al sueño, y el pánico que que oiria él desdf> Moscou, si los
dlqu». Ahora lo que liay que pre- los grandes caudillos mastines.
acertado sobre la sugerente perso- vooa el principio de autoridad re- tregada
se apoderó de loe' habitantes fué ola; desde aquella au teatral y se- puse que le trasladaran a m Con-i
gwitar e« si conviene a quienes
Es preciso acabar con todo eso, nalidad que el cronista retrata. Y
sulado de China, ya qine tanto le
ao aolamemte no medran con las y entretanto no temer que las vi- la admiración debe extenderse por sultará contraproducente, ya que tan intenso que muchos no acer- vera aeptútura donde le vi yo tan- tiraban laa chlniítas y aun «pjerte
taron ni siquiera a huir y fueron
nada
desautoriza
tanto
como
el
ri^
tos días, por cierto ridlouleimiente
luchia» internacionales, sino qiue sitas de los Jefes de Gobierno, co- todo el reino.
diculo, que proporcionan gratis los alcanzados por los escombros de repintadas de colorete sus mongó- tirarme tanta» a mí para gua tropierden en edlas sus hijos y sus mo, por ejemplo, la próxima de
los
millares
de
casas
que
se
hunpezara en mi camino.
E^to, en lo qiue se refiere al pro- encargado» de manejar bombo y dleipon.
lica» mejilla» y muy rublta» sus
intereee»; si les ee bien defender M. Herrlot a nuestro presidente,
Tales estúpidas ridiculeces, que
platillos.
Y
si
se
habla
de
prestitocolo
circunstancial
y
transeúnte,
bart>itas df chivo o de peludo oso
e«a» revancha» y esos desquite», traigan alianaas temerarias. Hoy
contaré otro día, hacen que la dique llevan a los pueblos a la ml- la República es una garantía de aminorado en cierto modo por el giar el nuevo estado de cosas, no Formidable explosión de las selvas,.
plomacia española en alguno» oar
será continuando los procedimienaerla y enriquecen a los agiotistas que no habrá pactos secretos, sino ambiente popular.
Y esta es Asunción... Extraña sos y por a<íuello» tílmas eaté muWoecester
(Massachussetts),
27.—
tos
mé»
desprestigiados
de
aquey * los negociante» sin pudor.
discutidos en Cortes, y lo es tam- El otro, el protocolo rígido e in- llos oligarcas como ee consiga.
Una formidable explosión hJa des- mezcla de müitaírismo viejo ré- cha» veces desacreditada y sea por
flexible reservado a los actos BOtruido
la residencia del Juez gimen, tlipo dlctatoriall americano, demás grotesca. Lo qine contaré
b1<5n
de
que
los
dos
enemigo»
funSe oombate el afán guerrero; tolerones, requiere cierta» aptitudes Hay que tener en cuenta, ade- Webster Tíiayer, uno de los ma- de patriarcal indiada y de comudo» ludíamos contra él, y al decir damentales de la paz serán pronto
de comediante en cuantos intervie- más, que para una conciencia ein- gistrado» que Intervinieron más nistas anobistas que vocean en las en otro artículo, por lo sainetesco,
«todos» clero es que me refiero a atacados en ífus mismas guarida*.
nen en ellos para poder improvisar ceramente democrática supone un destacadamente en el famoso pro- selva» «le demJer ori» de París será regocijante.
ANTONIO ZOZATA
los verdaderos demócratas; pero
Mas los paraguayos tomaron mi
las escenas ceremoniosas sin nece- verdadero sacrificio aceptar obse- ceso contra Sacco y Vanzetti.
llegado. Estos mismos muchacho»,
todavía no hemos atacado a la
El
Juez
Thayer
fué
eacado
de
defensa.
Llenaron los teatro», visidad de ensayos.
tan inflamados y tan rojos, mas
quios extremado» y soportar actiguerra en sus bases fundamentala» ruinas completamente ileso, hasta anteayer negruzcos, apenas torearon entusiásticamente a 3ia
tudes
de
adhesión
fetichista,
porPero
y
a
la
teatralidad
operetesoa
les: el capitalismo y el clericalisno así su señora, que resultó
les dieron una vuelta en lia sartén futura República esipaíloia, jenmo. Ciertamente serán, como dice Movimiento estratégloo, no derrota de las escasas Cortes que subsisten que el contraste oon la desespera- oon heridas.
pusiéronse' rojos oomo cangrejo» tonces tan lejana! Luego la Cá«a señor de «El Nervión», Inútiles
Londres, 27. — Comunican d e
cocidos.
Mas cangreijos que, por mara de Diputado» me invitó a
toda» las Conferencias internaclo- Montevideo al «Times» que 1« rearte
diabólico
y por la pimienta sus sesiones...
nale» y todos los proyecto» e in- tinada de las tropa» paullstas no
oon que lo» cocieron, galopan aho- Salía yo del hotel en que yirla,
tentos pacifistas mientras no se de'be oonsldenarse como una dera a d e n por hora.
y conforme me aioercaha al edift-'
formule en los Congresos esta con. rrota, sino como un movimiento
cluslón: los enemigos principales estratégloo.
Pocos mese» después de yieitar cío parlamentario, antlgtjo case»
Los paulistas han Instalado lide la paz son el capitalismo y los
yo Asunción, a<iuello6 mis acom- ron colonial bien ca«tellcno, oon
discípulos de quien declaró que neas de trincheras al sur de Crupañantes semlaristócratas, semile- su clásica solana y «m galerías
no venía a «metar paz, sino espa- ceiro y los habitantes han evacuanJnistas,
se apoderaron de un pue- descubierta» que daban eotxre el
do la región.
da». No se diga que aconsejó que
blo paraguayo a la Argentina cer- rio Paraguay, ola excüamaclones,
El general Montero, Jefe de los
los hombres se emasen los unos federales, ha declarado que esta
cano. Y establecieron allí un pe- lejanos aplausos y formidables
a los otros. Lo que trajo fué la situación retrasa en más de seis
(lueflo falansterio que Foiirler en- gritos...
discordia, el fanatismo, la Intiran- meses el fin de las hostilidades.
íSerá una manifestación—penvidiaría, que a Cabed, autor del
sifrp.ncla, y sus suopsores altera«Viaje a Icaria», asombraría, y saba—, una revolución, ya que en
EN LA HABANA
ron su doctrima en lo que tenía
espeluznaría creo a Campanella, el Paraguay las hay cada media
de piadosa y humanitaria para
el soflador de la «Ciudad del Sol». horia7 Mea cuando llegamos a la
trocarla en código de violencia y El presidente del
Cuando los estudiantes me deja- Cámara mi asombro no tuvo lide dominación. Esos son los verron, tomároiune lo» obrero», y mite». Anta el edlñclo habla un
daderos enemigos de la paz uni- Senado cubano fué
quieras que no quieras tamhién peq[ueflo Jardín enverjado de hieversal; esos son los que predican
lleváronme a un curioso mitin. rro, y desde el enverjado a la gar
asesinado
las revanchas, y oyen los ecos
Tan curioso, que nunca asistí, con leria o solana de la Cámara hade guerra en todas partes, y prehalwr asileitido a tantos, a ningu- bla tendida u n a cuerda. Un titiLa Habana, 27.—El doctor Váztenden qiue les sociedades saan re- quez Bello, presidente del Senano parecido. El presidente ee di- ritero la pasaba entre los aplaubaños y que no sean gobernadas do cutxano, ha Éido asesinado.
rigió a mi en puro guaraní, el pri- sos del público. La sesión se haDos miembros de la Cámara de
por hombres de ciencia, sino por
mitivo, Indioo lenguaje oon plu- bía interrumpido... iLos dijiutados,
mastines; ésos son los que desean Representantes y otras dos persomas. Lengua, i>or cierto, bellísi- asomados a la baranda, aplauque las muchedumbres, como las nas han sido también víctima»
ma, en sus dulces inflexione» y dían. Un payaso pagaba el plato
ovejas, dejen la piel entre los de atentados cometidos por grualigera
eufonía, que me Tvcorda- y te arrojaban monedas.
de desconocidos, creyéndose
dientes de los canes o en los bor- pos
ba por la e r a d a de sus gires aü
que hayan resultado muertos.
de» de los pedernales; ésos son,
irabe. Yo no eabía lo que me de- lOh patriarcal e infantil CámaEl Sr. Vázquez Bello. Jefe del
en reaiunen, loa que arden en ira- partido liberal nacional, fué gracían. Extendía tí orodior los bra- ra de las felices sesiones! iPor
qué no intenta el Sr. Beeteljno pacundia» porque ven que ha lle- vemente herido cuando salta de
zos 7 t u s ojos l e llunilnal)an.
rooldo» eepeotáculofl cuando loe
gado la plenitud de los tiempos su domicilio. Inmediatamente fué
—jlpattiá, Ipalpatí, ParapatiiUl diputados se aburren?...
democráticos, y qup se les esca- conducido a un hospital, donde
—gritaba enardecido.
Luego entré en el salón, después
pan las presas y S" les acaban falleció.
El diputado Sr. Ángel Aguier
Y los obrero», sindicalistas y co- de admirar al titiritero, al fln símlos ocios y no quieren las ovejas
munista», aplaudían.
bolo de la pcyiítloa. «A tout selser muertas en las juntas de raba- es una de las otras victimas.
Se dice que el también miemPor fln pude comprender, gra- gneur, tout honneur!» El salón, esdanes.
bro de la Cámara de Representan—iQué frío! ¿Eh?
cias a un hábil traductor, pero trecho, era muy pobre. Tenía un
No hay (jue ser muy atento e tes Sr. De Andrade y sus dos herllB taiMurrai^, que jwiuel «impá- tedio M loa^erft desplat^ift <!*
—Y en Barealona, según nos cuentan, |qué oalorl^
manos Guillermo Y. Leopoldo han
LOS ENEMIGOS
DE LA PAZ
PARAGUAYAS
Plumas de oro
Terremoto
en Macedonia
EÑTEL
BRASIL