Competencias de los Docentes de Idiomas Mtro. David Guadalupe Toledo Sarracino Licenciado en Idiomas (UJAT), Especialidad en Enseñanza del Idioma Inglés (Universidad de Cambridge-UABC), Maestro en Docencia énfasis en Gestión Escolar. Diplomado en Aprendizaje Autodirigido, Programación Neuro-Lingüística y Didáctica del Inglés. Ex-becario Fulbright 2003-2004 en la Universidad de California, San Diego. Actualmente es director estatal de la Facultad de Idiomas de la UABC. [email protected] Mtra. Lilia María Favela Alcaraz Licenciado en Derecho, Profesor de Francés desde 1983, formación en Francia Canadá y México. Coordinador del Departamento de Francés Maestría : Master of Education (Special Field: Teacher Training ) University of Exeter UK. Coordinadora Académica del Centro de Autoacceso, Coordinadora del Centro de Idiomas , actualmente Coordinadora de Formación Básica Facultad de Idiomas(campus Mexicali) . [email protected] Resumen: Hablar de competencias docentes, es reflexionar en la manera como se desempeña un docente en su quehacer cotidiano. La reflexión nos lleva a ampliar esquemas determinados para identificar la postura del docente, la forma en que desarrolla su actividad y hacia dónde se dirige. La disposición, el compromiso con su entorno, el contexto, el profesionalismo, la dedicación son factores que coadyuvan a la reflexión y en consecuencia al desarrollo profesional mediante actividades preconcebidas, así como a establecer los lineamientos que le permitan alcanzar objetivos esencialmente definidos; de aprendizaje constante, de desarrollo e incremento de conocimientos y capacidades a fin de poseer la competencia docente. Las competencias permiten a cualquier docente poseer un buen desempeño en el aula además de satisfacer la necesidad de desarrollo profesional, a fin de lograr calidad en la educación mediante la práctica reflexiva donde se evidencia la aplicación por parte del docente de sus conocimientos, habilidades, actitudes inherentes a las competencias que ha desarrollado, así como a la evaluación de sus logros. Las competencias docentes se definen como la capacidad de responder de manera exitosa a una demanda compleja en la cual se deben involucrar las actitudes, valores, conocimientos, destrezas de manera efectiva y significativa. Es decir, es la forma en que se articula el conjunto de conocimientos, creencias, capacidades, habilidades, actitudes, valores y estrategias que posee un docente y que determinan el modo y los resultados de sus intervenciones pedagógicas. De acuerdo a Roegiers y De Ketele (2001), Una Competencia se mide en términos de potencial para realizar tareas, ya sean de naturaleza escolar o profesional y complementa otras competencias que posee la misma persona adquiridas a través de la experiencia o de un aprendizaje sistemático. La integración de las competencias adquiridas se realiza por medio de; la inter- dependencia, la movilización dinámica, la polarización de la movilización, cuyo objetivo es la resolución de diferentes situaciones del proceso enseñanza aprendizaje. Philippe Perrenoud (1997) determina que una competencia es un savoir- mobiliser, no es una técnica o un saber “algo mas” es una capacidad de movilizar un conjunto de recursos; saber, saber-hacer, saber-ser, esquemas, de evaluación, de acción, herramientas para hacer frente a situaciones complejas e inéditas. No es suficiente enriquecer la gama de recursos para que las competencias se incrementen inmediatamente ya que su desarrollo pasa por la integración, la sinergia de estos recursos en situación. Enfrentarse a la complejidad, es ser un practicante reflexivo (St-Arnaud, 1992; Schön, 1994, 1996), disponiendo de conocimientos múltiples, herramientas metodológicas y una capacidad de cooperación con colegas y sobre todo el saber-analizar a fin de guiar las observaciones, interpretaciones y regulaciones. Es necesario señalar que el desempeño docente nos permite establecer una dinámica donde se involucran las competencias conductuales, funcionales y las de conocimiento básico que cualquier docente debe poseer. Es decir, cualquier docente debe estar habilitado como un profesional que sabe, conoce, internaliza, aplica y evalúa las actividades que dan como resultado una fase de integración, movilización y adecuación de capacidades y habilidades la cual le permite utilizarlas de manera apropiada y tener un desarrollo profesional satisfactorio. Shön (1996), puntualiza que el aprendizaje continuo se presenta mediante la reflexión y el análisis de nuestras capacidades y desempeño. Todo profesional de la docencia debe fundamentar sus principios en la profesionalización mediante un desarrollo sistemático fundado en el conocimiento-acción la cual determina la manera como un profesional en la docencia toma decisiones en torno a su desempeño, aprende, desaprende, reafirma como enseñar y organiza de manera sustantiva su actividad docente. Es decir, considera sus conocimientos, principios éticos, el contexto donde se desarrolla y lo más importante que son sus competencias docentes. De Acuerdo a la propuesta del C.I.C.S.-UMA. IPN (Centro Interdisciplinario de Ciencias de la Salud, Unidad Milpa Alta, Instituto Politécnico Nacional) Las competencias docentes están organizadas en seis ejes que representan diversos aspectos para describir y evaluar la función docente: • Saberes pedagógicos. (Aprovechamiento de la tecnología, explicación de la realidad social, pensamiento lógico-matemático, • Interacción social.(convivencia y resolución de conflictos, participación social, interculturalidad) • Organización de la enseñanza. (planeación, evaluación) • Intervención psicopedagógica. (atención a necesidades e intereses, estrategias y formas de trabajar) • Comunicación. (escucha, expresión, lectura, escritura) • Desarrollo profesional. (formación permanente,) Por otra parte (Fulquez: 2007) menciona que cualquier docente en la actualidad tiene un gran reto, cumplir con los 10 puntos claves de las competencias docentes: 1. Planificar el proceso enseñanza-aprendizaje 2. Seleccionar y preparar de los contenidos disciplinares 3. Proporcionar información sencilla, comprensible y bien organizada (competencia comunicativa) 4. Manejar las nuevas tecnologías 5. Diseñar y organizar actividades 6. Interactuar y comunicarse con los docentes 7. Tutorear 8. Evaluar 9. Reflexionar e investigar 10. Lograr identificarse con la organización educativa y trabajar en equipo. The European Profile for language Teacher Education: a Frame of Reference, (2004) Es un documento para ser utilizado como referente en el área de formación basada en competencias que contempla cuatro líneas de que deben ser abordadas; estructura, conocimientos, estrategias, habilidades y valores. Si bien las competencias en el ámbito de las lenguas extranjeras derivan fundamentalmente de las competencias generales relacionadas con la formación de docentes en el área de la educación, comportan variantes identificables, especificas, dada su naturaleza. Podemos ubicar las siguientes competencias en las grandes líneas de: conocimientos, habilidades, destrezas, valores y actitudes. 1.Manejar la lengua extranjera en forma oral y escrita. 2.Conocer la cultura y civilización de la lengua extranjera. 3. Manejar el metalenguaje. 4.Reconocer las teorías, enfoques métodos, técnicas pedagógicas y técnicas de evaluación. 5.Conocer la filosofía del aprendizaje auto dirigido 6.Aplicar de la metodología de acuerdo al contexto. 7.Establecer relaciones con instituciones educativas internacionales. 8.Diseñar unidades de aprendizaje. 9.Diseñar programas y planes de clase. 10.Diseñar y aplicar estrategias de aprendizaje de acuerdo a la diversidad del grupo. 11.Manejar el grupo. 12.Identificar las necesidades del grupo. 13.Identificar problemas de integración. 14.Manejar situaciones imprevistas. 15.Promover la autonomía de los alumnos. 16.Coordinar la elaboración de proyectos del grupo. 17.Desarrollar la autoevaluación en los alumnos. 18.Involucrar a los alumnos en su propio aprendizaje 19.Conocer y utilizar las nuevas tecnologías de la informática y de la comunicación. 20.Cultivar los valores de su profesión 21.Respetar la diversidad. 22.Ser responsable y tomar decisiones con justicia. 23.Reconocer sus errores. 24.Diseñar y aplicar instrumentos de evaluación 25.Sustentar tesis y proyectos desarrollando la cultura de la investigación en acción. 26.Presentar y publicar trabajos de investigación. 27. Participar en actividades formativas continuas para su desarrollo profesional. 28.Participar en elaboración de proyectos con sus pares. 29. Participar en la formación de nuevos docentes. 30.Reflexionar y autoevaluar su práctica docente. (adaptado de Perrenoud, Ph.1996, Vidales D. I. 2005, The European Profile for language Teacher Education: a Frame of Reference 2004) Las propuestas anteriores describen un modelo ideal, cabe señalar que no todos los docentes de las diferentes disciplinas del conocimiento desarrollan todas las competencias, sin embargo , la reflexión conlleva a un punto de encuentro donde el mismo mecanismo de la actividad permite al docente valorar, evaluar, cuestionar, argumentar sobre aquellos factores que intervienen en el proceso enseñanza aprendizaje y que de una manera directa permiten encontrar soluciones y responder a los desafíos que surgen a partir de resultados, lo cual debe ser basado en la capacidad de argumentación creatividad e innovación con el único objetivo de beneficiar a la comunidad estudiantil. De acuerdo a Bruner (1998) la reflexión del docente que no cumple con la condición indispensable para su profesionalización y no mejora las condiciones de su formación, resulta en la carencia de atributos fundamentales necesarios para lograr el óptimo desempeño en el aula. La falta de competencia es siempre difícil de reconocer y cada docente en dificultad buscará en primer término excusas y tratará de legitimar su incompetencia invocando el derecho a la diferencia o a la libre experimentación. Las competencias docentes son parte de un conocimiento que orienta al docente a reflexionar en lo que hace, con que lo hace, como lo manifiesta, como funciona y donde lo aplica, de esta manera se traduce en un beneficio que determina la tarea del docente de por sí, sumamente difícil y compleja que debe valorar la objetivización sin perder de vista la relación entre la actividad que realiza y el sujeto que la realiza. En otras palabras, las competencias docentes no pueden considerarse en abstracto, sino en producto de intervención en el ámbito social. Por lo consiguiente, para que un profesional integral y competente tome conciencia y desempeñe sus funciones de manera sustantiva y efectiva en beneficio de sus educandos es necesaria la reflexión como un punto de partida sobre la práctica docente, sus principios, la manera como revisa sus quehaceres y decires, lo cual permite que la reflexión constante y la evaluación de la cotidianeidad lleve al docente a contextos específicos en los que es importante conocer los obstáculos, que limitan el desempeño mediante la evaluación, el diseño de formas de actuar y la ejecución de acciones dentro de las posibilidades reales para lograr mundos posibles y alcanzables y que no sea únicamente un producto de la forma de expresión y del lenguaje (Bruner,1998) A pesar de los obstáculos que el docente encuentra en el quehacer diario es factible lograr un cambio fundamentado en la reflexión de la práctica y en la práctica, es cierto que el proceso es largo, sin embargo los resultados se reflejarán en el desarrollo profesional y por ende en la adquisición de las competencias docentes. Referencias: Bruner, J (1998) El lenguaje de la educación en realidad mental y mundos posibles. Gedisa, Barcelona. Fulquez, S. (2007) Presentación de diapositivas: Competencias docentes. El futuro de la sociedad en nuestras manos. Gather Thurler, M. (1994 a) L’efficacité des établissements ne se mesure pas : elle se construit, se négocie, se pratique et se vit, dans Crahay, M. (éd.) Problématique et méthodologie de l’évaluation des établissements de formation, Bruxelles, De Boeck, pp. 203-224. Kelly, Michael, Grenfell, Michael, Allan, Rebecca, Kriza, Christine and McEvoy, William (2004) European profile for language teacher education: a frame of reference. Final report. A report to the European Commission Directorate General for Education and Culture. Brussels, Belgium, Européen Commission OCDE (1996) Qualifications et compétences dans l’enseignement technique et la formation professionnelle. Évaluation et certification, Paris, Organisation de coopération et de développement économique. Palacios, J. (1984) La cuestión escolar. Barcelona: Laia. Perrenoud, Ph. (1996 c) L’obligation de compétences: une évaluation en quête d’acteurs, L’Éducateur, n° 11, pp. 23-29. Perrenoud, Ph. (1996 a) Formation continue et développement de compétences professionnelles, L’Éducateur, n° 9, pp. 28-33. Schön, D. (1994) Le praticien réflexif, Montréal, Éditions Logiques. Schön, D. (éd.) (1996) Le tournant réflexif. Pratiques éducatives et études de cas, Montréal, Éditions Logiques. Tardif, J. (1996) Le transfert de compétences analysé à travers la formation de professionnels, in Meirieu, Ph., Develay, M, Durand, C. et Mariani, Y. (éd.) Le concept de transfert de connaissances en formation initiale et en formation continue, Lyon, CRDP, pp. 31-46. Vidales D.I. (2005) Las diez competencias del maestro. Agenda Escolar, México, Ediciones Larousse.