Cada vez que mi familia y yo visitamos tias, tios, y compadres, la primera pregunta que se nos preguntan “Quieres una coca?” Mandan a sus hijos a la tienda de liquor en la esquina de la cuadra, con dos arrugada dólares y monedas en sus bolsillos Nos reímos de quien se desmayó borracho en la última fiesta de la familia y hablamos de nuestra familia en Guerrero, mientras tomamos veneno carbonatada Simplemente no es buena educación no tener refresco cuando tienes vistantes Rechazalo y te clasifican un malcriado Acepta todo lo que se te ofrecen Coca, papitas fritas con chile, limon, y sal, los dulces Mexicanos que triamos de Mexico la ves pasada Utilizamos dulces como una manera de demostrar que nos importa Diabates y la obesidad es la última cosa en nuestras mentes Pansa llena, Corazon contento Nuestros latidos golpean al ritmo de cumbia, mientras mamá cocina sus sopes y enchiladas Simplemente no se siente como una cena sin la botella de Coca Cola Sin las burbujas de gas que ahogan nuestras narices y bocas Ese sentimiento que se apodera de gárgaras en nuestras gargantas Coca en botellas de vidrio de Mexico Que nos da ese sabor y sensación de hogar Creemos que esto posiblemente no nos puede hacer daño sin darse cuenta de que ni siquiera podemos leer los ingredientes en la etiqueta Olvidemos que nuestro hogar es el país número uno obesos en el mundo y estamos aquí en los EE.UU. a la altura de la misma Entra en Mi Pueblo y surtirse del especial de cuatro botellas de dos litros de Coca por un dólar Hecha los jugos Tampico baratos y Sabritas para los niños a comer después de la escuela para las próximas dos semanas Mamá y papá están demasiado ocupados trabajando 10 horas o más para limitar el consumo de comida chatarra No desperdieces la comida, eso me costo Demasiado ocupado tratando de ganarse la vida que vivir sanamente Cualquier tipo de alimento que nos mantiene en movimiento Aunque nos movemos un poco más lento que el resto del mundo o luchamos para completar las tareas diarias Seguimos avanzando, y eso es todo lo que importa Desesperadamente buscando casa en nuestros platos y tazas La cena se ha convertido en una expedición Dónde lambiamos los platos limpios y tragamos tazas de nostalgia Nostalgia que ni siquiera es de nuestro país Nuestras lenguas han sido colonizados por la creencia de que este vaso de coca-cola es el hogar Olvida que los que nos precedieron sólo bebieron agua Estamos matando a nosotros mismos tratando de encontrar partes de nosotros en una botella de Coca Cola de plástico de dos litros Cena en México siempre se cocinaba y se sirvia bajo la luz de la luna Pero ahora estamos más de mil kilómetros de distancia, finalmente, tener esa hora que hemos estado esperando todo el día, cena familiar Todas las mujeres que llaman a sus hijos lejos de la TV Comerciales de Coca Cola oso polares jugando en el fondo de la cuarta vez que la hora Los tintineos y ruido de platos y tenedores ahogan todos los anuncios El sonido de la risa de las historias de niñez en México llenan nuestras barrigas Encontramos hogar en cada una de nuestras historias No hay necesidad de sacar esa botella de Coca Cola No hay necesidad de casi matar a nosotros mismos, en busca de recuerdos de casa.