El Ideal 19170630 - Arxiu Comarcal del Ripollès

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Periódico Ouincenal
Organo delas sociedades
obreras de la Comarca
AñoLNÚm.7.RIPOLL,3oJunioI917Trimestre,1pta.:Núm.suefto1ócts.
Redacciónj Administración: Trinidad, 48.--Federación
Obrera
INTERESANTE
Desde el próximo número «EL IDEAL»
se publicará en Barcelona, por serle impo.
sible la vida en esta de Ripoli,’por diferen
tes causas que no creemos del caso mencio
nar. Como pasa en manos de nuestros co
loboradores, cuya capacidad’ reconocemos,
esperamos de nuestros suscritores y paque
teros continuarán favoreciéndoles como has
ta ahora lo hacían con nosotros.
No dudamos superará en su contenido
ya que ha vivido hasta hoy, lejos del roce
ciudadano, entre las escabrosidades de los
montes; junto a las vulgaridades de la Al
dea, fortaleciéndose en lo sucesivo al desli
zar su vida más en contacto con..e! mundo
intelectual.
Su nueva dirección es: Calle del Infern,
n.° 3, 2.° Barcelona, donde deberán dirigirse todos cuantos tengan relación con el pe
riódico, donde se les atenderá debidamente.
Como que la mejor garantía. para ase
gurar su vida son las suscripciones particu
lares, deseamos que los compañeros no va
cilarán en suscribirse cuanto antes, ya que
el cambio de localidad ocasiona grandes
gastos.
El precio de suscripción será el si
guiente:
ESPAÑA.
Semestre.
Año...
2 ptas.
3
»
EXTRANGERO.
Semestre.
Ano..
3 ptas.
5
»
Como’ que los compañeros que compon
drán el cuerpo de, redacción piensan publi
carlo muy pronto semanalmente no altera
rán lo más mínimo en el precio de los ya
suscritos, únicamente ten4rán que amoldarse a la nueva tarifa de precios los que se
‘suscriben de nuevo.
Recomendamos pues a los compañeros
se suscriben a EL IDEAL»’, convencidos de
que en lo sucesivo ocupará el lugar que le
corresponde en el escenario de la lucha.
Por el antiguogrupo editor,
SORIANO
J.
E.
-
2
-
IDEAL
EL
/
EL IDEAL
2. Podrían citarse muchos casos en la vida
en los que, llegando hasta la cúspide del gozo,
hemos experimentado un tormentoso escalofrio
interior, asomo de tragedia casi. ¡Y nos contá
bamos dichosos! ¿Donde está, pués, el placer,
el disfrutar de la vida? ¡Gran pregunta, que
fingimos contestar muchas vecesy que no queda
mos satisfechos con lo que decimos! Quizá ra
dique todo en lo niuy predispuestos que estamos
para rehusar ‘eíanálisis, la investigación, la pro
fundización en el por qué de las cosas. Tal vez
el dia que decidamos sondearlo todo, cuanto me
nos lo que nos hiere más directamente, huyamos
horrorizados sin poder alcanzar refugio en ningún
sitio, porque el estercolero, la inmundia o el abis
mo que temamos estará en nosotros mismos.
Puede también ocurrirnos cosa mejor: ¡el asoni
bro deslumbrante de que tras está vestimenta
deforme que enseñamos hay algo magno, una
riqueza ináudita, insospechada! Y. janiás esta
tan admirable el hombre como cuando cava en
sus propias reconditeces. ¡Loor a él, entonces!
Y que los gusanos, los n’iufiecos, los estúpidos,
que parece poseen cerebro y corazón, sigan cie
gos toda la vida, sin que la luz sea para ellos.
¡Ya saben gozar a su manera!
5.
No hay ningún pensámientc que pueda
llamarse en absoluto una vaciedad; no lo hay
tampoco tan profundo y verdadero que no poda
mos hallar en él algo insustancial y vacuno.
6.
Si la vida se basa en grandes mentiras,
también las inmensas verdades aprenden mucho
de las mentiras.
7.
Cuando el hombre, el hombre que sabe
pensar, no se note en el vacío, podrá decirse que
ha triunfado la razón, la justicia, la verdad.
‘
‘‘‘‘‘
9.
«Hallaramor dice Nietzsche—en aquel
a quien ama, debería dsengáñar’al amador acer
ca del objeto amado. ¡Como! ¡Sería una cosa
modesta el amarte! O necia o... » Mi alma dice
que esto es admirable, y añade : ¿Hay más que
síntomas del gran amor?
1. No me dansaré núnca de creérme más.
dichoso en el dolor que en la banal felicidad ex
terior. Entonces, sufriendo, me doy exacta cuen
ta del paraíso interior que guardo. ¡El alma!
4
Si alguien, al leer mis escritos, me dice:
«iQué lástima no escribas mejor!», pensaré que
es un desdichado seducido por la forma. Un
hombre de cerebro, me discutirá mis ideas, apo
‘yará o no mis teorías, pero irá al fondo y no a la
vestimenta del lenguaje. ¡Yo no escribiré jamás
con gramática!
».‘,
8.
Cuando má nos han amado en esta vida
no ha sido precisámente cuando nosotros hemos
amado del todo.
Pensamientos
3.
Los hombres todavía no han aprendido a
decir como piensan. He ahí una fuente de gran
des errores.
,,,
1O Algunas veces no hablo ni escribo, ¿Sa
beis por qué? Porque no alcanzo el vuelo mag
nífico de mi espíritu. ¡Va tan alto y lo que me
dice lo empobrecería tanto con los medios de
expresión de que dispongo!.
11. Hablando ‘con los hombres más me im
porta adivinarles un pensamiento que ocultan que
comprender sus palabras. ¡Suelen ser tan débi
les e incolorosas estas casi siempre..!
12. De la mujer tengo un pobre concepto;
pero bien puede ser ella la almohada donde va
yamos a recostarnos cuando nos apercibamos
llenos de heridas.
RICARDOVAQUC
Barcelona
AMO.R LIBRE
¿Que
le hace amada •mía que ese igno
rante pueblo, que no conoce lb ley del Amor na
tural, nos mormhre groseramente, de los actos,
que el deseo ñuestro pueda hacer? ¡No ves que
su educación es tan míserá!.... Que le hace que
digan por ahí que somos herejes, ateos, incré
dulos y que cometemos una desvergüenza al
obrar en semejánte Libertad? ¡No ves que quien
lo dice es un ruín mentalistal¿Que
le hace,
‘compañera’mía, que caigan sobre nosotros todas
lbs calumnias que puédase forgar ese avaro pue
blo, si nos abriga la serónidad de una idea nueva
yun amor desconocido por el vulgo aristócrata?..
Nada nos debe importar; deja amada, que el in
conciente pueblo charle de nuestra felicidad, deja
que digan lo que les apetezca, nuestra misión es
distinta; por toda palabra injuriosa, un doble
beso, y mientras ellos sigan esa ‘rutina chafar
dera, que desde tantos siglos ha que perdura tu’
y yo continuaremos en. nuestros amOres sin mira
mento alguno de lopue pntedan decir,, sin acoba
darnos de los muchos insultos que puedan din•
4
-
EL IDEAL
girnos, firmesmás que nunca, demostraremosa
esos murmuradores de Natura, que nuestro amar
es inflexible.
¿Quienpodrá hacernos creer, amor mío, que
el beso, el placer, el deseo a la efusión voluptuo
sa, no es más puro, más leal, el hacerlo cuando
unos se entienden, que no cuando dan licenciael
cura, juez o magistrado? ¿Si tu y yo nos ama
rnos y a causas de ese amor sup?em6 que le ren
dimos tributo, siempre y cuando se desea y
pueda, porque tanto interés esos señores en que
rernos atar en léyes fanáticas y contrarias a la
madre Naturaleza
No, que nos odien, que nos llamenateos
esos hipócritas, que no nos escuchen, tanto nos
debe dar, la cuestión es firmezay concienciaen
nuestros hechos, y así regidos por un bello ideal
gozaremos de bellos días, porque estar libres es
un nuevo gozar..
Olvida lo supersticioso vida mía, que es todo
lúgubre, ama la verdad que ella te hará vivir
felizmente y al mismotiempo también me harás
participe de tu felicidad; por cada funesta osadía,
uno, otro y otro beso más y así sin miaja de ma
licia viviremossiempre con unión, bajo la fuerza
del cariño, el amor y la libertad.
-
• . ..
CLAVEL AZUL
Para “El IdéaÍ”
Porla amistadque nos une,te dedico
estas Jíneás,amigo J. S. Esquerdo
«ideab, palabra cumbre dentro los ideales,
quien hay que no tengaideal? nadie. Hay ideas,
hay errores, y vosotros, jóvenes idealistas tam:
bién algunos las .tendrais; pregonad vuestros
ideales ‘a los cuatro.vientos comoel Cristo pre
gonó sus doctrinas.
1
1
***
No abdicar como hacen los reyes, ‘seguidcon
vuestro ideal hasta que logreis poner a flote la
humanidad caida; firmes al ideal libertador,sin
ver en él, un trabajo penoso. Poner a todos los
seres a la mayor parte que se pueda al nivel de
vuestro ideal, a de ser vuestro anhelo y entonces
podremos felicitaros por el bien que habeis hecho
a la Humanidad.
PoMo
Los políticos mujer,
son como tu y yo, Teresa,
queregañamos ayer.
y al llamarnos a ‘córner
fuímos juntos a la’mesa.
V.R.
Repertorio de un baturro
CANTARES
A mi amigoSantiagoBilbao
Dícese que en guerra algunos
se hacen bien pronto <heroes»;
yo me quedo con los burros
aúnque me arreen coces.
El campo que yo he «sembráu»
dicen que es tó del amo;
y yo solo, Ii regau,
con el sudor que derramo.
Flor oculta entre abrojos
que festoneas el camino;
solo te advierten mis ojos,
de incansableperegrino.
*
El hombre ideal es por su naturaleza intré
pido, incansabley luchador por redimir al humil
de, y vosotros idealistas, si no ponéis el ideal al
servicio de la verdad, y si solo lo usais como
lucro, retiraros al rincón más oscuro, para qúe
nadie os oiga ni vea. Será mejor.
-
Allá va la despedida•
con
que un
seasaludo
la biencordial;
venida
«Emancipación social»
F.
BARTHE
EL IDEAL
EL HONOR
Nacido en un pueblecito donde no sevé más
que la monotonfu, donde no se enseña nada más
que una doctrina que nos explica la existencia de
un Dios jamás conocido, donde .no hay otro camino que ir a la iglesia, ya qué la religión impera
en estos sitios,. pasé mi infantez; al llegar a mi
uso de razón mi pensamiento ya no estaba en el
pueblecito, había sentido hablar de grandes ciu
.dades donde el bullici, la libertad y una idea
renovadora reinan, y hacia allí fué.
Recuerdo muy bién que los padres, el maestro
y los curas me habían hablado, entre otras cosas,
del honor y quise sondear esa palabra acudiendo
en mi mente esta pregunta : ¿Es posiblerespetar
el honot del modo en que rige la Sociedad? No,
respondía mi «yó». ¿Por que?
Ahí va un ejemplo: Cierta familia se encuen
fra sin el sostén de una mano varonil que pueda’
ayudarla a pasar el tranc de la ‘ida. Son madre
y tres hijos; la madre vieja y abatida por las
penas y miserias sufridas, yá no puede. trabajar,
dos de los hijos son demasiado jóvenes para ex
plotarlos, el único sostén que les queda es una
linda jóven de diez y ocho años, esta trabaja y
su salario no llega para las necesidades de la fa
milia. Viene un dia en que la madre se enferma,
y entonces es cuando más se nota la falta de re
cursos en aquelladesgraciadafamilia.
Y aquí es cuando emiieza la lucha entre la
vida y el honor. ¡Que pena tan grande es, tener
una madre enferma y no poderla socorrer!, qu
alivio,. ohir a sus pequeños hijos como le dicen
«madre teñemos hambre, dános pán» y la po.bre
muy abatida les haya de contestar «no tenemos»,
es que a tales criaturas se. les puede hablar de
honor en aquellosmomentos?
Que debe hacer la muchacha que en la edad
de entrar a la vida se encuentra con semejante
desgracia, a la cual trabajando mucho no puede
poner alivio? ¿Pedirlimosna?, a ms de ser in
humanó tal proceder, ¡quiénle hará! ¿Llevarsu
madreal hospital y los niños a un hospicio?,
muchas recomendaciones se necesitan y aún si
llegase a adquirirlo ¿que no es una tristeza gran
de para una buena hija el no poder asistir ella
misma al ser más querido, que es la madre, y s
correr a sus tiernos hermanitos?
Entonces es cuando peligra en gran manera
el honor de aquellajóven. Ella vé a otras hiuje
res en grandes lujos de toda clasé; a ella le han
ofrecido también esas vanidades, y he aqúí como
•
-
.
•
5
el amor de hija y hermana le hace caer facilmente
en la tentación.
¡Que tristeza dá al verla allí en un café, sir
viendo de juguete a lo.shombres, acostunibrarse
a soportar todos los vicios,y caprixos de ‘hombres
sin conciencia, de hombres brutos; tener que reir
con el corazón despedazado por el dolorya
la
vemos salir en altas horas de la noche con un
pagano que le ofréce dinero a cambióde su be
llezava
en auto, tiene trajes.... pero no tiene
alegría, no goza en sus actos, no siente bienestar
en su corazón, ‘todo lo hace por sus infelicesherr
manitos y por su madre, que, si en aquel momen
to pudiese pasar y verla no podríá decirle nada,
porque con su vestir y su cara ‘de” miseria haría
mala vista al amante.
Juzgad si son suficientes motivos para que
una muchachacaiga en el vicio, y si uo es la mi
seria la causa de la mayorparte de prostitución.’
¡jHonorU, que palabrá más bella y digna de
respeto, pero que fácil es, sin quererlo, pasar por
sobre de ella.
MARIO
EL IDEAL
Despedida
-•
•
‘
‘
•
•
•
Es el último númerodé EL IDEAL;no cae ven
cid por las huestes de esa burgesfa, que sólo mi
ra aplastar el Progreso, no cae humillado por no
poder contrarestrar las injusticiasque en esta co
marca se hacén, no cae aplastado por la rua de
hampones que la autocraciatiene en su servicio.
Sus funcionariosven al enemigo y saben como
pararle los piés. Si «El Ideal» se despide, puede
agradecerlo al pueblo, ese pueblo, sordo, que le
hace miedo curarse de sus dolores, ese pueblo
que tanto sufre, y teme en rebelarse a pedir más
de lo que tiene, ese pueblo que tiene las obligadones de respetar, lo que la fuerza inleal le ha
impuesto.
En este mundo mal regido, todo hay que ha
cerlo por la maldita moneda, sin ella nadie traba
ja; y como nosotros no somos Rotchil para su
fragar gasto sobregasto, e aquí que la revista ha
tenido que despedirse de esta comarca.
Ya podéis cantar victoria, burgeses de la co
marca del Ter y Freser; los obreros que tan bella
mente explotais en vuestros presidiosno quieren
redimirse, no han querido éscuchar la voz del pa
ladin obrero EL IDEAL,son ‘cobardes, quieren me
jor morir en la fea miseria, que no unirse para el
bien de ellos mismos, ¡reir a boca abierta! más no
ábusarde la risa, que aún en todo pueblode esta
comarca, hay quien puede exigir cuentas de bur
las acasionadas, porque hay hombres, al medio
de tantos bonifacios.
Tu puebloRipollés, tambiénhas enseñado la
cobardía, gustas más frecuentar en esos antros
delvicio, dejando moneda tras moneda, que no
saber de corno podrás mejorar tu condiciónde
asalariado; para la taberna, café, juego y démás
novacilas en gastarte las pesetas, para comprar
un periódico obrero que vale 10 céntimos haces
así como quien no puedes y hasta osas decir que
escaro. ¡Ahignorancia! ¡tu llegarás! Pero sa
bes donde?.. ha pedir.limosna:. Esta es tu ruta
si no cambias; el obrero,que el vicio le domina,
el obrero que no se úne en el Sindicato para
mejorar su situación, el obrero que en su jo
ventud no procura para la reivindicación de si
mismo, llega a la vejez hecho un perdis y en
tonces lo vereis en una. esquina implorando
caridad, de quienes no pensó jamás en unirse.
Sicontinuas siendo un esclavo, si continuas en
el
1cio,Ripollés
si continuas
en la
pueblo
despreciado
por.ignorancia,
los amantesserás
del
Progreso, quieras ser algo, quietas que puedan
7
EL IDEAL
decir en las ciudades donde el ambiente es de
Libertad, que este es un pueblo que quiere Unión
con todos los séres que anhelan la Redención
Universal.
SOR-LANO.
Nofas
A todos cuantos hayan recibidoEL IDEAL, sUscrip.’
tores, paqueteros ysociedades, les comunicamossal
den los retrasos quedeben a la mayor brevedad po
sible, para poder liquidar cuentas con el grupo editor.
El modode pagar .háganloen la forma que les vaya
mejor, ya sea con sellos de 15 céntimos, giro postal,
sobre-monedero o por recadero. La dirección es la
misma.
¿Has contempladocomo caminoarriba hacia la
iglesia (no se de que nombre) íban una ramada inmen
sa de corderos?
=
Si hombre; y a fé que vI alguno que cuandoél
habla, no dice que sea cordero.., si no un re. un
pro... un...
Pues yo vi muchos de esos hombres mansos,
que les oyes un día y se pintan comoun M. Pardiñas.
=
No hay que hacer caso, dicen varios que no han
ido por la vocación, si no por el mero solo de oir que
es lo que dirá.
Hombre, no lo creo; en esie pueblo hay tanta
hipocresía que hace asco cuando oyes según quien:
.
—
—
t
—
28
—
—
te desgrana su embotellada peroración, vereis
que reproduce,como por arte magnéticotoda la
elocuencia que la palabra expresa. Sin darse
cuenta vereis que delira si trata de vengar in
justicias; sonríe si se regocija de alguna ..yjcio
ria; está melancólicQ,si es que divaga melancó
licamente en tésis defectuosas e incomprensi
bles; ríe si ve que ríe y se indigna cuando se
indigna. Pero cuando el ídolo enfurecido dama
venganza y exterminio, entonces el fanático es
fatal; ciego de odio cierra los puños, rechina los
dintes, vuélvase pálida su cara, y al primer pu
fietazo que aquel dá sobre la tribuna, este deja
escapar instintivamente una terrible blasfemia,
blasfemia que anatematiza odiosamente al ene
migo particular de aquel.»
«iHo, el fanatisnío!»
«Es el fanático, el hombre que anda ciego
tras otro hombre; es el muñeco que tirando de
un hilo invisible, acciona a voluntad agena; es
el que, puestas las sposas voluntariamente, se
arrastra luego, cual perro después de latigatiza
do a lamer las botas del amo. Es un esclavo
voluntario; un reptil venenoso; uií miserable
inconciente.
Se cree
infalible,
indiscutible.
25—
Pero aquella masa, aquella súcia masnada
que no sabe de libertad y armÓníamás que, vive
alegraniente encadenada, escuchaba: escuchaba
delirante de venganza: escuchaba odiosamente
pasmada al ver que sus víctimas, su botín, les
insultaba cara a cara, pensando tal vez compen
sar nuestro atrevimiento con el justo castigo
que nos aguardaban.
Y mi amante prosiguió:
=Leed «LosMalos Pastores» de• Mirbeau y
vereis lo que sois. Y por si acaso no lo sabeis,
os lo diré yo cara a cara para flagelar vuestra
mezquina cónciencia.
Sois la estúpida masa
que ruge furiosamente contra los que derribaron
tronos y dioses y abrieron nuevos senderos a la
vida, y vosotros en compensación los disteis la
cárcel y el patíbulo. Individualmente sois unos
cobardes y en masa una horda salvaje que odia
todo lo grande, todo lo noble La •obra destruc
tora que en un arrebato de locura habeis realiza
do, después, en serena calma, os torturará y así
vivireis bajo el terror que vosotros mismos os
inspirareis, y gemireis, y suspirareis rastrera
mente pidiendo con humildad que se apiaden de
unos miserables que aplaudían sinceramente,
EL IDEAL
8
Vamos a ver, ¿cuandoen nuestrd Sindicato se celebra
un mítin o conferencia, porque no vienen esos cucu
rucas aunque solo sea por lo que dircin?
=
Que te diré yo.
Pues sabes por que no vienen, porque si el
burgués que los manda se enterara los abofetearía y
los ksped-iría (al creer de -elias).;‘y yendo a esas
prddkas
.religioaas, otiando el burgués se entere
gozará de contentoy dirá, -buenoscorderitos eirgo
,en ini tra&zjo,- -queseguro eslay eti que no se iiie
declararán en huelga., znmçre les descuenta dinero y
les haga frabajar inés ‘horasque la ley marca.
Hay muchaimpostura amigo, no todós- :5cm --‘como
pintan,- o si no fíjate bien en el Sindicato de Ris
tencia.
Hay en esta villa más de 1.500obreros de fábricas
algodoneras, asociadossolo cuenta el Sindicato con 40.
Albañiles hay un número crecido, en la sociedadsolo
éstán ‘20; en un conjunto unos 100 asociadosdentro
uiia villa tan industrial como es esta; los restantes
oficios no hay que hablar, no viven, están aún sus
obreros al limbo ¡que pueblo, eh! Lo único que hay
anido son los burgueses, estos son más vivos que no
los obreros, pruebas las han dado con el «Foment
Mercantil».
¡Dormir Ripoi+enses!¡Id a oir ‘lasprédicas religio
-sas, cuando’notengais pan el predicador os lo dará
desde ‘elpúlpito.
Prornetimosinvestigar el porque la queja de algtt
nas niñas, que van a la escuela de la -señorita uiaestra
4ue cubrió la vacante de la Sra. Rosita, y por fin he
mos dado con lá razón:
A la jóven maestra felicitamosantes de entrar en
innteria de lo que quéremostrstar, se lo merece, aun
que algunas familiashayan malhabladode ella.
Cuando llegó en esta localidad,vió que la ruta de
las enseñanzas-era de ‘modeloviejo, de eso que se cae
por su vejez, quiso ella renovar algo-de lo que se ha
cía y algunas niñas de esas que el cerebro lo tienen ya
claustrado por las convenienciasqueiiay en cada pue
blo, les ¡5arecióque la maestra mal obraba y entonces
lo comunicarona sus padres, y estos ue quieren me
jor hacer de la niña una bestia de carga, que no una
mujer, las quitaron de colegio mandándolascon las
monjas.
¡Que padres quieren mejor que la niña sepa rezar y
decir doctrina que no que sepa Geografía, Historia y
cultura másidealista!
Padres que quere-isque las niñas sean unas buenas
mujeres, no apartarlas de la escuela que dirije tal se
ñorita, si las mandais con las beatas monjas lógrareis
hacer de la niña una esclava en total.
A la vida; quererles enseñar lo que ella debe ser el
afán de los padres.
•
-
—
-
-
-
Tipografía Ripollesa, Batet 15.—RipoIl-
—26-
—27-
-
aquello que hoy les aterroriza por nq .deSpren
derse de aquellos prejuicios que desgraciada
mente estai-s dotados.
«No por eso, -otracosa podéis hacer con es
piritas tan mezquinos. Agradís al que roba u-ti
pan y reverenciais servi’hnenteal que os roba la
vida, -miserablesfanáticos.
«Hay quien ciego de iFadebido a una injusti
cia, mata. Hay quien mata por -celos,quien por
amor, quien por dignidad, -quien por una cosa,
quien por otra ya que cualquier minurie4ades
móvil suficiente para-cometerel más grande de
los crímenes,»
<cMaies,
son estos que podríamos llamar de
herencia, puesto que nos-los-acarres la defectuo
sa organizaciónsocial 4iie padecemos.
Esta hidrofobia puecle se-r -concien-tenata o
innata, directa o indirecta, moral o material: ‘no
importa el orígen ni la éalidad;pero’ si, innega
blemente somoslos cuerdos, -[ossanos, él blanco
de sus impertinencias. Es un mal para la ar
monía-de la sociedad, un nial grande partiendo de lo lógico, ya que «la libertad -de uno em
pieza alli donde termina la de los demás.» Ellos
hacen gala de su Libertadesclavizando-con sus
-
-
,
-
abusos la de los demás.»
«Søn impertinentesen sumo grado; y es muy
natural puesto que son irresponsables. Por eso
son seres temiblescuyos actos son odiosos.»
«Pero si -analizamos-elaspecto de la maldad
y hacemoscomparaciones,veremos ‘queaún hay
seres más odiosos, más temibles; seres ruines,
indecentes, irresponsables también. Estos sois
vosotros, los fanáticos, los sectarios ray--anoal
fan-ati-snio
y los indiferentes, que de todo hay
entre vosotros»
«Empieza el fanático, singularizando, pof te
ner un ídolo que le absorve -toda su atenciú-n.
Este ídolo es deista, ateo, político, ácrata, etc.
s-iendo cI culto de todas sus preocupaciones.»
«Por la mañana al despertar es la primera
imagen que acaricia sus peñsares; luego, en se
gu-ndoTugar,los seres -queridos; la madre, la es
posa, el hijd. Por la noche al acostarse,- es la
última que le abandona,no sin que algunas ve
ces -mézclaseen sus ensueñós, donde desde un
pedestal adecuadoa su-grandiosidad dirije los
destinos de la tierra por fantásticas sendas.»
«Es la cara -del fanático el espejo de su in
vulnerable ídolo, y su voz, el eco. Cuatidoes-
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