COMENTARIO DE TEXTO En tanto que de rosa y azucena, se muestra la color en vuestro gesto, y que vuestro mirar ardiente, honesto, enciende al corazón y lo refrena; y en tanto que el cabello, que en la vena del oro se escogió, con vuelo presto, por el hermoso cuello blanco, enhiesto, el viento mueve, esparce y desordena: coged de vuestra alegre primavera el dulce fruto, antes que el tiempo airado cubra de nieve la hermosa cumbre. Marchitará la rosa el viento helado, todo lo mudará la edad ligera, por no hacer mudanza en su costumbre. (Soneto XXIII, GARCILASO DE LA VEGA) Este texto corresponde al soneto XXIII de Garcilaso de la Vega. Garcilaso encarna las principales cualidades del cortesano renacentista: hombre de letras y hombre de armas, exquisito poeta, hombre refinado y de una intensa vida amorosa. De su corta biografía (Toledo, 1501 - Niza, 1536), destacamos lo siguiente: en 1526, ya casado, conoció a Isabel Freire, dama portuguesa que se convertiría en la inspiración de su poesía amorosa; en 1529, se casa doña Isabel Freire, y el poeta sufre una grave crisis sentimental; en 1531, es desterrado de España y confinado en la isla del Danubio, por haber asistido a una boda en contra de la voluntad del emperador Carlos V; de 1532 a 1534, vive en Nápoles, donde entra en contacto con humanistas de renombre y participa en los cenáculos artísticos; en 1534, la muerte de Isabel Freire conmociona sentimentalmente al poeta; en 1536, muere en Niza. Garcilaso nos ha dejado una obra poética corta, pero de una gran calidad: treinta y ocho SONETOS, cinco CANCIONES, dos ELEGÍAS en tercetos, una EPÍSTOLA en versos sueltos y tres ÉGLOGAS pastoriles, de métrica variada En su producción poética se distinguen dos etapas: 1) hasta 1532, antes de entrar en contacto con la literatura italiana. Sus poemas guardan todavía una gran influencia de la poesía castellana del s. XV. 2) a partir de 1532, Garcilaso se relaciona en Nápoles con poetas y humanistas italianos, y asimila el espíritu y el arte renacentista. En esta época escribe lo mejor de su época (las églogas, las elegías y la mayor parte de los sonetos) El poema es un soneto, estrofa formada por catorce versos endecasílabos de rima consonante ABBA, ABBA, CDE, CDE. El soneto, de origen italiano, fue adaptado al español por Boscán y Garcilaso y fue muy utilizado en los siglos XVI y XVII. La distribución acentual permite ver que se trata de un soneto polirrítmico. La mayoría de los versos tienen tres o cuatro acentos, recayendo uno fijo sobre la décima sílaba (acento rítmico), y con frecuencia en la segunda, sexta y octava, aunque no se repiten en el mismo orden. El tono general del poema es pausado, cadencioso. El poema se inicia con un ritmo fluido, lento, subrayado por dos encabalgamientos suaves, que producen una sensación delicada y armoniosa, reforzada ésta por la presencia de sinalefas y por el vocalismo abierto de las palabras acentuadas. La aliteración de sonidos nasales junto a vocales abiertas y tónicas es claramente perceptible a lo largo del poema: tanto, ardiente, enciende, blanco, viento, antes, mudanza Lo más destacable del poema es la abundancia de SUSTANTIVOS concretos produciendo una fuerte sensación de realismo y plasticidad. Son numerosas las referencias a la naturaleza, que le sirve al poeta de imagen para describir las cualidades físicas de la mujer: las flores (rosa, azucena), el viento, la primavera, el fruto, la nieve, la cumbre. Es significativo la riqueza cromática a lo largo del poema: color de rosa y de azucena, vena de oro, cuello blanco, nieve. La gran riqueza de ADJETIVOS (ardiente, honesto, hermoso, enhiesto, blanco) al mismo tiempo que exaltan la belleza de la mujer renacentista y expresan los valores del tiempo, dan un sentido pausado a los versos. Se repite un mismo modelo de sintagma nominal, compuesto de nombre + adjetivo: mirar ardiente, vuelo presto, tiempo airado, viento helado, edad ligera. En el esquema inverso, adjetivo + nombre, el adjetivo (epíteto) aumenta su capacidad expresiva: hermoso cuello, alegre primavera, dulce fruto, hermosa cumbre. La posición antepuesta del adjetivo le proporciona más relieve. Predominan en el poema los VERBOS imperfectivos que contribuyen al tono pausado y lento del poema. No sólo se refieren a la experiencia concreta, sino que apuntan a lo universal del hecho. Únicamente aparece un verbo perfectivo, escogió. Los periodos son largos, con abundancia de subordinadas, lo que le da al texto un ritmo lento y complejo. Los versos iniciales del poema proponen los dos temas principales: 1) la rosa roja de la pasión y de la juventud, y, 2) la azucena blanca de la castidad. Ambos conceptos se funden en el semblante de la dama y en la sinalefa. Los adjetivos del verso 3 corresponden a la rosa (ardiente) y a la azucena (honesto) y también aparecen unidos por medio de la sinalefa [la coma no impide que se produzca la sinalefa]. El cuarto verso vuelve a juntar los dos temas: enciende (rosa, ardiente) y refrena (azucena, honesto). La hermosura juvenil de la dama provoca el deseo del poeta a la vez que le impone respeto. El primer cuarteto se cierra con un punto y coma. El segundo cuarteto se inicia con la anáfora En tanto, que repite como un eco las dos primeras palabras del poema. Aquí se describen otros dos rasgos de la juventud y de la hermosura de la dama, también con imágenes sensoriales (la metáfora vena del oro = cabello rubio). El cuarteto concluye con una progresión de verbos: el viento primero MUEVE, luego ESPARCE y por fin DESORDENA el cabello de la dama. Esta movilidad plástica contrasta con la inmovilidad del cuello, enhiesto, un adjetivo aislado entre dos pausas. En el primer terceto, llegamos por fin al verbo principal, al mensaje del poema: "coged ... el dulce fruto", CARPE DIEM. En este terceto aparecen muchas sinalefas, dos encabalgamientos y sólo una pausa, en medio del verso 10, lo que nos hace suponer que él rápido movimiento rítmico de estos versos sugiere el paso ininterrumpido de la vida. El último verso es el único que carece de sinalefas, y ello obliga al lector a cierta lentitud y da a esas palabras una gran importancia temática. Estos versos son el eje temático de todo el poema. En el segundo terceto, se repite el mensaje de los versos 9-11, que ahora reaparece de forma impersonal, tras la primera pausa fuerte de todo el poema. La rosa aún está presente en el verso 12, aunque temblando bajo el soplo del viento helado que va a mustiarla. Apenas se menciona esto, TODO (lo humano y lo no humano) ha de sufrir la misma transformación por obra del tiempo. El grado de abstracción que comporta este último terceto supone una intencionalidad antipoética, que contrasta con el lirismo de las estrofas anteriores, consiguiento así expresar plenamente la tragedia de una vida que se marchita, de acuerdo con los tópicos clásicos del "CARPE DIEM" de Horacio y del "COLLIGE, VIRGO, ROSAS..." de Ausonio. Así, pues, observamos la siguiente estructura: 1) la formada por los dos cuartetos y el primer terceto: el poeta se complace en describirnos la belleza de su amada, a la que le advierte la conveniencia de gozar su juventud 2) el segundo terceto: tono pesimista ante la ley inexorable del paso del tiempo El tema es LA BREVEDAD DE LA VIDA Como hemos visto, Garcilaso , mediante el tema del CARPE DIEM, nos hace una reflexión ligeramente angustiada en la que se nos anima a gozar de los placeres de la vida mientras dure. El tono general del poema se inserta dentro de la tradición renacentista, sugerido por la presencia de epítetos, su cromatismo (colores esenciales: blanco, rosa, oro), utilización de recursos musicales (encabalgamientos suaves, anáforas...) y de formas italianistas. En la lengua de Garcilaso, como CORTESANO que es, domina un criterio culto pero sencillo, que se opone al amaneramiento latinizante del siglo anterior (s. XV), pues no hay en el texto ningúna imagen oscura que dificulte su comprensión; las metáforas suelen ser fáciles y el estilo es utilizado con mesura, naturalidad y armonía.