Es la capacidad para acceder a los sentimientos propios y discernir las emociones íntimas, pensar sobre los procesos de pensamiento (metacognición). Es la inteligencia del yo (y, por lo tanto, del autoconocimiento, auto-motivación y auto-estima, es decir, una inteligencia interior) La Inteligencia Intrapersonal requiere una instrucción individualizada, trabajo independiente y opciones para poder elegir temas y materias en función de los intereses. Los materiales idóneos son los proyectos individualizados y diarios para la autoevaluación. La estrategia didáctica idónea es la AUTOINSTRUCCION PROGRAMADA Los niños que destacan por su Inteligencia Intrapersonal presentan las siguientes características: Son independientes Les encanta fijarse metas, soñar, reflexionar y planificar. Necesitan su propio espacio, tiempo para estar solos y marcarse su propio ritmo de aprendizaje. Saben conocer sus emociones y como gobernarlas de forma adecuada. Se interesan más por las personas que por las cosas. Gardner incluyó en su formulación de la inteligencia intrapersonal un continuo desarrollo donde el individuo tiene la opción de llegar a ser progresivamente autónomo, integro y verdadero. Si la competencia Aprender a Aprender, supone iniciarse en el aprendizaje y ser capaz de continuarlo de manera autónoma, poder desenvolverse ante las incertidumbres tratando de buscar respuestas que satisfagan la lógica del conocimiento racional, implica admitir diversidad de respuestas posibles ante un mismo problema y encontrar motivación para buscarlas desde diversos enfoques metodológicos. La relación que esta tiene con la inteligencia intrapersonal viene marcada por los siguientes descriptores: Control y gestión del propio el aprendizaje Tener conciencia de las capacidades de aprendizaje: Atención, concentración, memoria, comprensión y expresión, motivación de logro Adquirir responsabilidades y compromisos personales siendo perseverante en el aprendizaje Obtener un rendimiento máximo de las capacidades de aprendizaje con la ayuda de estrategias y técnicas de estudio Adquirir confianza en sí mismo y gusto por aprender Habilidad para gestionar el tiempo de manera efectiva Plantearse metas alcanzables a corto, medio y largo plazo Planificar y organizar actividades y tiempos Afrontar la toma de decisiones sobre el propio aprendizaje racional y críticamente Pensamiento crítico y creativo y metacognición Pensar sobre la estrategia de pensamiento utilizada y ser capaz de aplicarla en situaciones distintas Hacer una metacognición correcta y ser capaz de aplicar la estrategia de pensamiento a situaciones parecidas y contextos diversos Si ahora nos planteamos qué elementos tienen en común la inteligencia. intrapersonal y la competencia espiritual, hemos de tener en cuenta que Howard Gardner definió la inteligencia existencial o trascendente como la capacidad de situarse a si mismo con respecto al cosmos la capacidad de situarse a si mismo con respecto a tales rasgos existenciales de la condición humana como el significado de la vida, el significado de la muerte, y el destino final del mundo físico y psicológico en profundas experiencias como el amor a otra persona o la inmersión en un trabajo de arte, sin embargo Gardner no se atrevió a profundizar en ello, y ante la duda la dejaba en “medio inteligencia”. Teniendo en cuenta el estudio llevado acabo por el departamento pedagógico pastoral de Escuelas Católicas de Madrid, que partiendo de una perspectiva de educación integral, considera que hay cuatro tipos de competencia espiritual que se incluyen uno en el otro: La competencia espiritual habla de que estás preparado para hacerte preguntas hondas, para asombrarte y comprometerte con la realidad del mundo en el que vivimos. La competencia espiritual trascendente expresa la inclusión en esas preguntas-respuestas y en ese compromiso de la dimensión trascendente, el Misterio. La competencia espiritual religiosa te hace tener las habilidades para saber qué tipo de respuestas y aportaciones se han realizado desde las diferentes religiones. La competencia espiritual cristiana desarrolla todo ello en la propuesta cristiana, en los procesos de pastoral y acciones explícitas. La competencia espiritual, al igual que la medio “inteligencia trascendente”, según Gardner, y la inteligencia intrapersonal, convergen una serie de preguntas y respuestas que el ser humano se plantea y que tienen que ver con la reflexión sobre la persona y su sentido último, para sentir “…la necesidad innata en el ser humano de conectarse con algo más grande que uno mismo” (Wigglesworth, 2004). En nuestro Colegio para desarrollar la inteligencia intrapersonal. Se trabaja: La inteligencia emocional, ya que consideramos que el aprendizaje desarrollado a través de la emoción constituye una verdad irrefutable. Nuestras experiencias, cuando están asociadas a situaciones emocionales críticas, se convierten en recuerdos que permanecen. La autoestima. Una persona debe sentirse valiosa, digna de ser amada, competente dentro de su entorno y capaz de realizar contribuciones significativas hacia los demás. Reflexión sobre el misterio y el sentido de la vida. Escuela de Oración desde los pequeños de 3 años hasta los de ESO Aprendizaje autodirigido: enfoque educativo intrapersonal! Es el alumno y no el docente el que se encuentra en el centro del proceso para la toma de decisiones, la auto motivación y autodisciplina Proyectos individuales. De cara al futuro, para desarrollar la inteligencia intrapersonal en todo el Centro debemos de insistir en el trabajo en equipo por parte del profesorado y sistematizar lo que ya hacemos, formándonos y creando material para que nuestros alumnos/as desarrollen esta inteligencia.