Solidaridad con Cristo Así Joan Alsina, fusilado en Chile a la semana del asesinato del Presiden­ te Allende, deja claro que su muerte viene de la intolerancia de los capita­ listas liberales, y que la liberación viene de la solidaridad con el Cuerpo de Cristo, Señor de la Historia, del „C u erp o", que es lo que es encarnado y que será perfecto al cum plirse la liberación de la Humanidad. En esta línea queda m anifiesto que el proyecto m arxista-socialista y el pro­ yecto cristiano coinciden en cuanto com prom eten a los hom bres por entero en la liberación de la hum ani­ dad, y son los únicos, que los hom ­ bres tenemos hoy, para restablecer la esperanza como virtud social. Una de las medidas más jocosas de la Junta fascista que gobierna a Chile, fue la elim inación de El Q uijote y el Poema del Cid en los program as de ense­ ñanza media, en una depuración efectuada en ju lio pasado, con el fin de e xclu ir el estudio de obras „con cie n tizad oras“ , que pueden in tro d u cir „c o n ­ ceptos subversivos" en la m entalidad de los estudiantes. La m edida denotó tal ignorancia, que el diario „El M ercurio", portavoz oficial de la Junta, se vió en la obligación de expresar su queja. No en vano corren por todo Chile, y, especialm ente, en los círculos reaccionarios del país, una cantidad de chistes acerca de la ineptitud de los m ilitares. Por ejemplo, se dice que la Junta está com puesta por cuatro m iem bros por­ que, por una parte, se sabe que Pinochet sabe leer y M erino escribir. Por tanto los otros dos están allí para evitar la „fug a de ce re bros“ . . . La Junta Militar les ha negado „El Quijote“ y el „Poema del Cid“ . . . Fé en la liberación de la Humanidad Mi afirm ación de que „la Iglesia C atólica Institucional es un aliado de prim er orden de los regímenes fas­ cista s“ , que a usted le extraña sobre manera, no ofrece la m enor duda a los C ristianos C ríticos que luchan para que las estructuras de gobierno de la Iglesia Institucional se rejuvenezcan y dejen de ser repeticiones de las estructuras de gobierno de los regí­ menes fascistas: Un sólo Partido (el de la Jerarquía); Exaltación N aciona­ lista (protestantes, socialistas, com u­ nistas y otros quedan al exterior de sus fronteras reales); mas el Poder C oercitivo de la Iglesia Institucional (que hoy abarca frecuentem ente el terreno económ ico). Por otro lado, sostengo com o usted bien indica, que la Iglesia, cuando se encarna, cuando se compromete con el perseguido, con el extranjero, con el explotado, ni es im perialista ni es profascista, sino Iglesia santa y liberadora. Y esta Iglesia está nacida en muchos cristianos de la Iglesia de Chile, de M ozam bique y de Angola, de Sud-Vietnam, de Sud-Africa, de Es­ paña, etc. . . . y, además, las escuelas, el puesto de trabajo y el pan. Permítame la cita de dos versos, que se me vienen a la cabeza, de Jorge Manrique, poeta de mi patria chica: „Pues . . lo presente . . . en un punto se es ¡do y acabad o . . . si juzgamos sabiamente, daremos lo venido por pasado.“ (Coplas, 2). G racias pues a la fé, que es tam bién poesía, la libera­ ción de la Humanidad dentro de la Historia, es una realidad ya conse­ guida. ■ I. Alvarez Bernardo Leighton ha sido un hom bre muy respetado en Chile, aún en los m om entos de más aguda lucha política. M inistro a los 27 años, llegó a ser Vicepresidente de Chile, y, en las últim as elecciones parlam entarias que se celebraron en el país, obtuvo la prim era mayoría de Santiago. Por su ecuani­ midad y bondad humana, tradicionalm ente se le conoció como „e l hermano B ernardo", y, aún cuando m ilitaba en el mismo Partido de Frei, el contraste entre ambas personalidades se ha venido evidenciando con mayor fuerza en los últim os tiem pos y, especialm ente, después del golpe fascista. La situación de ambos políticos en la hora actual lo dice todo. M ientras Frei se m antiene en el país a costa de un infam ante sílncio, al „herm ano B ernardo", por una orden reciente de la Junta, le ha sido prohibido pisar tie rra c h ile n a . . . EXPRÉS ES PAÑO L / Enero 1975 49