PERFILES Tres poetas hispanoamericanos Roberto Valenti Su titulo, de este poeta argentino apareci6 en 1931. primer libro EL Primer grado inferior, nos saludaba en la tapa, junto a unos dibujos de extraordinaria gracia y fina estilizaci6n, a manera de los que los nifios realizan en sus cuadernos cuando comienzan a escribir. Las evocaciones de infancia que Roberto Valenti agrup6 en su libro inicial se caracterizan, a la vez que por su riqueza emotiva, por la sobriedad de sus medios expresivos. No pertenecen a esa literatura sentimentaloide que tanto ha abusado del tema nostalgico. Hay no s61o una austera humanidad en las estrofas de este poeta, sino tambien, muy a menudo, notas de sutil humorismo. Al evocar sus afios nifios, el poeta sientese nuevamente nifio y vive como tal. O bien conversa con su maestra del grado inferior. Y le dice, en el breve poema "Penitencia": "Debo "Debo Y asi por lo Si me me la ser siempre bueno". ser siempre bueno"... doscientas veces menos... vieras ahora, maestrita, dabas de nuevo... El segundo libro de Valenti, Domingos del tiempo bueno, continfia en cierta manera la veta del primero. Aparecido en 1933 292 REVISTA 2 IBEROAMER ICANA con magnificas xilografias de.Luis C. Demarco, Domingos del tiempo bueno llega hasta los afios de la adolescencia. Y refleja emociones muy portefias; asi, por ejemplo, las callecitas de Palermo, "quietas y arboladas", los domingos de calesita, en barrios pobres "que amenazan al cielo con sus chimeneas" Domingos del tiempo bueno es, para mi gusto, el mejor libro de este poeta. iQue emoci6n y que verdad en sus imigenes! En el poema "Pantalones largos", mientras el muchacho sale ufano a exhibir su patente de "hombre grande", el tiltimo pantal6n corto que dej6 entre los trapos viejos, en un rinc6n de la casa, "llora, por dos remiendos, la muerte de su infancia". En la nifiez "las semanas tenian siete domingos", "el mundo era un letrero de tranvia". Roberto Valenti es asimismo un excelente prosista, y su libro de cuentos En la cruz de una esquina une, a su emoci6n de poeta, una aguda captaci6n de la realidad y sus virtudes de sintesis y so- briedad. En su mas reciente obra, Poemario portefio -exaltaci6n de su ciudad natal-, logra acentos muy humanos y trascendentes, aunque yo prefiero su lirismo en sus poemas anteriores, mas imaginativos, mas musicales, de mas pura emotividad. II Luis Nieto C libro que lieva el subtitulo de "romancero cholo", es a nuestro parecer la obra que da la plenitud estetica de este poeta peruano. Aparecido en 1943, Charango se incorpora gallardamente a esa poesia que busca en los seres y el paisaje tipicos de America -en el caso, del Peri- la esencia espiritual, el latido animico. Dieciocho poemas forman la obra: romances diictiles, nerviosos, jugosos, con algo de la tonada popular, estilizada por la sabiduria del artista. Y tambien poemas en verso libre, anchuroso, de riqueza sinf6nica. En ambas formas ritmicas, Luis Nieto logra realizaciones de alta belleza, por la emoci6n y la imaginaci6n que sabe dar a esa visi6n suya, tan limpida. Canta a Sicuani, su tierra; a sus cholas felices y bailadoras en las fiestas populares; al viento de las altas punas; a la guitarra "vestida de penas", a la casa pequefia y dichosa en el retiro agreste; a los indios que van camino de la feria, a todo lo que sus tierras cuzquefias tienen de tipico. No debe confundirse a Nieto con esos poetas que aparecen seducidos por el tono pintoresco. Charango es el cuarto libro del autor. Anteriormente public6, despues de un poemario editado en Bolivia, su libro Puios en alto y su canto a Marittegui. Puos en alto estr compuesto de "poemas de barricada y de combate". Editado en 1938, corresponde bien a esa epoca y logr6 una muy merecida difusi6n, pues ha sido reeditado. Nieto supo buscar nuevos horizontes, dentro siempre de su personalidad lirica. Y al realizar poesia pura, ya traia una larga expeHARANGO, 294 REVISTA IBEROAMERICANA riencia estetica. Asi, su poema al "gran amauta del Peru" -nombre con que Juan Marinello design6 a Mariategui-- se caracteriza por el vigor de su tono neowithmaniano, por su ritmo huracanado, por su salud de aspero fruto silvestre, emparentandose con esa poesia de lucha en la que no faltan acentos de fina emotividad. En realidad, el poema a Mariategui y los romances cholos de Charango son mas que suficientes para ubicar a Luis Nieto en primera fila, en la actual generaci6n lirica de su patria. Tiene personalidad y es, a la vez, multiple en facetas. Tiene voz propia y una inquietud que ha cuajado en numerosas obras ineditas, entre las que figuran las tituladas Cielo de ausencia y Territorio del coraz6n. Luis Nieto naci6 en octubre de 1910 en Sicuani (Provincia de Canchis), en el legendario Cuzco. III Trigueros de Le6n H E aqui una de las figuras mts interesantes de la joven intelectualidad centroamericana. Trigueros de Le6n, que es salvadoreio, divide su obra en dos aspectos: la poesia en prosa y la' poesia en verso. Aqudlla, que mencionainos primero por cuanto corresponde a su iniciaci6n, se halla expresada en su libro Campanario, pequefio gran libro, un poco a la manera de Francis Jammes y de Jules Renard. Pero hay tambi:n en Campanario elemnentos que apartan a este centroamericano de los dos maestros europeos; asi, por ejemplo, el color aut6ctono de muchas de sus estampas de animalitos tipicos de la tierra en que Trigueros de Le6n vive y suefia. En uno de los pasajes de Campanario nos habla, por ejemplo, de la chiltota, que le hace el efecto de una llama cantando dentro de una jaula, picoteando la fruta, brincando en las varitas y extendiendo sus alas. Aunque no escrito expresamente para los nifios, Campanario se vincula noblemente a los ideales de una literatura infantil plena de gracia, ritmo, color, muy adecuada para la educaci6n estetica. Y es asimismo -como ya lo dejamos apuntado-- una expresi6n de centroamericanidad. En abril de 1945 apareci6 en la ciudad de San Salvador, en una edici6n de s61o cien ejemplares, la "suite" de ocho sonetos titulada Presencia de la rosa, ornada con una vifieta de Salarrue, el gran artista salvadorefio. He aquiesas fases de la presencia de la rosa: "En el aire de amor vive la rosa", "Soledad en la rosa", "Prisi6n y ruego", "Amor 296 REVISTA IBEROAMERXCANA y desamor", "Vida y muerte en la rosa", "Segunda soledad", "Agonia de la rosa" y "Elegia". Una imaginaci6n rica en hallazgos, una simbologia plena de gracia y delicadeza, una emoci6n quintaesenciada, dan a esta "suite" caracteristicas que sefialan a Trigueros de Le6n como uno de los mis autenticos poetas de la actual generaci6n centroamericana. Los catorce versos no son para su inspiraci6n nada que aprisione ni que cercene: al contrario, logra -en una plenitud de sintesis y de condensaci6n- dar la esencia de sus estados emocionales. En tal sentido, Presencia de la rosa se hermana a este renacimiento del soneto que observamos en todos los paises de America, inclusive en Brasil y en Estados Unidos. Renacimiento que no significa, desde luego, nada absoluto ni exclusivo, pues el mundo potico es, por suerte, rico y generoso. Y asi, en su vastedad se yergue, con la misma gallardia de este soneto afinado y rutilante, el verso libre desmelenado y sinf6nico, y el color aut6ctono y la briosa americanidad no se oponen al cultivo de una poesia universalista. Cada uno, al seguir su verdad temperamental, cava en su autentica personalidad. Por eso, una de las mejores caracteristicas de la critica contemporinea es esa: respetar la verdad temperamental. Se acabaron, felizmente, aquellos tiempos en que no faltaban criticos que exigian -por ejemplo- que "habia que hacer nativismo". GAST6N FIGUEIRA