¿QUIEREN LOS JOVENES CAMBIAR LA SOCIEDAD? Rubén Abad González 1ºBach B-C A día de hoy, al hacer esta pregunta a cualquier persona de a pie, la gran mayoría contestaría casi sin pensarlo que sí; pues no hay más que ver las continuas revueltas y conflictos que se han producido en los países árabes y, sin ir más lejos, la que estamos viviendo actualmente en Madrid , entre otras provincias, con las manifestaciones y acampadas llevadas a cabo por un grupo de jóvenes que se hacen llamar movimiento 15-M. Por lo tanto, parecería una pregunta sencilla con su respuesta sencilla, pero no es así. Hay muchos jóvenes a los que si les gustaría que la sociedad cambiase, dado que piensan que no está del todo bien, pero no hacen nada al respecto; o también otros que sencillamente se quejan de la sociedad pero son tan “vagos” que prefieren seguir viviendo como están: viviendo, aunque sea mal, antes de hacer algo para cambiarla. Entonces, la respuesta ya no es tan sencilla y podemos distinguir 2 grupos: el de los que piensan que si y se apoyan en los acontecimientos que estamos viviendo, y el de los que piensan que no, en el que estarían todos aquellos que no hacen nada para cambiar la sociedad. Podría decir que me incluyo en el grupo que piensa que si, esencialmente por todo lo que estamos viviendo a día de hoy. Para defender mi posición, suelo tomar como referencia lo ocurrido en los países árabes, en cómo el pueblo se ha puesto en contra de sus gobernantes por la mala situación que estaban viviendo hasta, en muchos casos, hacer que abandonen el poder: estas revueltas, tarde o temprano, iban a ocurrir en alguna parte del mundo. Es bastante importante que el desencadenante fuera la desesperación de un joven por la sociedad en la que vivía, ya que no encontraba un trabajo acorde a sus altos estudios y el único trabajo que tenia, un puesto de frutas y verduras, se lo saboteaban las autoridades. Por desgracia estamos en un punto en el que aun teniendo altos estudios como carreras, master, etc.; nadie te asegura un puesto de trabajo, y aun encontrándolo sigues con el miedo de perderlo porque te despidan o la empresa quiebre porque la situación actual está muy, muy mal. Por lo tanto parece claro que los jóvenes quieren cambiar la sociedad, porque si no es así no se sabe que va a ser de ellos cuando “mamá y papá” no estén a su lado para ayudarles y mantenerles. Muchos jóvenes no quieren hacer nada porque sus padres les han dado una vida en la que no les falta de nada, pero ellos no van a estar siempre ahí y no van a saber vivir y ser autónomos cuando los padres no estén. Pero si se quiere cambiar la sociedad, no hay que hacerlo de forma alocada y sin planearlo, porque sería un acto sin relevancia alguna que no serviría para nada y esto no debe ser así; debe cambiarse desde la raíz del problema y no limitarse a un cambio superficial. Como nos dice Raúl del Pozo en su artículo “Revuelta NI-NI, el ruido de la calle”; la revolución social que se tiene que hacer, no debe ser algo espontáneo, debido a que la espontaneidad no lleva a ninguna parte. Se tiene que tener un objetivo o una idea clara de que es lo que se quiere llevar a cabo con esta revolución o que es lo que se quiere cambiar, como se tenía pensado en revueltas anteriores, como los marxistas que partían de la unidad de los proletariados; y así fue como esa revuelta se hizo famosa y consiguió su objetivo. Muchas veces los jóvenes para plantearlo todo bien y conseguir mucho apoyo, utilizan las redes sociales, como el ejemplo que se vivió en Portugal. 4 jóvenes amigos crearon una página en Facebook en la cual exponían sus ideas y pensamientos y a la que se unían a aquellas personas que poseían los mismos pensamientos y querían que esta sociedad cambiase : se planeaban manifestaciones y demás actuaciones. Esta idea dio buenos resultados. También he de decir que en parte les doy la razón a aquellos que dicen que los jóvenes no quieren cambiar la sociedad porque no hacen nada al respecto; debido principalmente a que yo me encuentro en el sector al que le gustaría que la sociedad cambie, pero no hago nada al respecto. No es algo de lo que me sienta orgulloso ni de lo que me tenga que avergonzar, sino que es así, y puede que sea porque todavía no me ha ocurrido nada que me incite a hacer algo o que simplemente no he “madurado”, por decirlo de alguna manera, suficiente para despertar y hacer todo lo que esté en mi mano para cambiar esta situación. Para terminar, después de explicar y exponer todo esto, pienso que los jóvenes si quieren cambiar la sociedad y también que lo van a conseguir y nos van a guiar a una sociedad mejor. Todas estas revueltas y conflictos que se han producido y se están produciendo, y todas aquellas personas que dieron su vida, como el joven tunecino, y aquellas que están luchando por una sociedad mejor, obtendrán su recompensa que tan justamente se merecen y que gracias a ellos todos disfrutaremos de una sociedad mejor.