Acceso para diálisis (fístula o injerto)

Acceso para diálisis
(fístula o injerto)
¿Qué es?
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La diálisis es una manera de eliminar los desechos del cuerpo desde la sangre cuando los riñones ya no
pueden cumplir con su función.
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El acceso para diálisis es la manera en que la máquina para diálisis se conecta con el cuerpo.
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Una fístula es una conexión directa entre dos vasos sanguíneos del brazo. Esto implica una cirugía corta.
Puede tomar de semanas a meses para que una fístula tenga suficiente flujo de sangre para usarse para
diálisis. Una vez que sea lo suficientemente grande para usarla, puede durar por años.
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En una fístula no se usa material artificial.
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Un injerto usa un tubo para conectar dos vasos sanguíneos del brazo. El tubo se introduce durante una
cirugía corta. El injerto se puede usar dentro de unas cuantas semanas después de la cirugía. Un injerto
puede durar años.
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Las fístulas normalmente duran más tiempo que los injertos. Las fístulas tienen menos probabilidad de
infectarse. Las fístulas también tienen menos probabilidad de presentar coágulos de sangre que
bloqueen el flujo de sangre.
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Las fístulas son la mejor opción comparadas con los injertos para los pacientes a los que se les pueden
hacer.
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Algunas veces las personas necesitan diálisis antes de que su fístula o injerto esté listo. Se le puede
hacer diálisis usando un tubo de plástico temporal llamado catéter hasta que la fístula o el injerto esté
listo para usarse.
¿Cómo me mantengo sano(a)?
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Si le acaban de colocar una fístula o injerto, mantenga la incisión limpia y seca.
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Si su fístula o injerto ha cicatrizado, puede ducharse.
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Mantenga limpia la piel que está encima de la fístula y del injerto.
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Proteja el brazo que tiene la fístula o injerto. No deje que nadie extraiga sangre ni le mida la presión
arterial en ese brazo sin el permiso de su nefrólogo.
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Tome todos sus medicamentos según las indicaciones.
¿Cuándo debo llamar a mi médico o a NurseWise?
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Si tiene fiebre o escalofríos.
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Si la piel encima de la fístula o injerto está roja, dolorida, sangrando o hinchada.
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Si hay un cambio en la vibración o sonido de su fístula o injerto.
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Si no puede asistir a su sesión de diálisis por cualquier razón.
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Si se siente enfermo(a) o no se siente como siempre.
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