`El país no pode seguir tan encerrado`

'El país no pode seguir tan encerrado'
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Luis Eduardo Pareja, presidente Tecimpre, asegura que el sector está en
capacidad de aumentar su presencia en el mercado externo.
Como muchos otros sectores, a la industria gráfica colombiana la ha favorecido la
revaluación del peso, pues la alta participación de materias primas importadas
reduce los costos de operación de las empresas, a pesar de que hay una
reducción de los ingresos por la vía de las exportaciones.
Tecimpre es un ejemplo de ello. Sin embargo, el presidente de la compañía
asegura que si queremos mirar hacia el exterior, la revaluación atenta contra el
sector productivo nacional.
"El mercado nacional es pequeño y si queremos exportar, la revaluación nos
complica la situación", asegura el empresario.
En su concepto, las empresas no pueden ser tan inmediatistas en salir a decir que
la revaluación regia porque abarata las materias primas, sin darse cuenta de que
tiene incidencias supremamente delicadas.
¿Cómo está el mercado de las artes gráficas?
El año pasado tuvimos un crecimiento moderado en el sector gráfico. La demanda
de estos productos suele ser una demanda derivada y, en general, cuando crece
la economía, debe crecer el sector gráfico. Allí hay diversas opciones como la
publicidad en las revistas y los medios impresos, en la medida en que crece el
espacio para anuncios en sus páginas crece el trabajo del impresor. Igual sucede
con las etiquetas, pues en la medida en que se vendan más productos va a
tenerse la posibilidad de imprimirse más. Naturalmente, es un sector ligado al
crecimiento del PIB.
Pero subsector de las publicaciones creció menos que el resto del negocio
gráfico. ¿A qué se debió?
Tal vez la parte más sensible son los anuncios. Se concibe muy fácilmente que la
publicidad es un gasto y no una inversión, y cuando las empresas comienzan a
tener apuros económicos empiezan a pensar en recortar gastos y uno de ellos es
anunciar en medios como el escrito. Al reducirse la publicidad a las revistas, éstas
comienzan a pasar momentos difíciles.
También tenemos un fenómeno que no se había presentado antes y es que las
grandes superficies manejan ahora una publicidad directa, que ha restado terreno
a la participación publicitaria en las publicaciones, afectándolas.
A las artes gráficas, propiamente, eso no nos ha hecho un daño en el sentido de
que la publicidad que se desplazó de las revistas se ha ido a la publicidad directa
dándole la posibilidad al sector de hacer algún trabajo.
Nosotros, sin embargo, no vemos con mucho agrado que las publicaciones
pierdan espacio porque esto afecta la información. A todos nos interesa que exista
una fuente de información múltiple y que no sea restringida.
¿Por qué este sector es tan competido?
Definitivamente porque la capacidad instalada es superior a la demanda interna y
eso sucedió porque los empresarios de la industria sentimos en algún momento
que era muy bueno invertir porque había opciones. Entonces entramos en una
carrera un poco desenfrenada para luego encontrarnos con que el mercado
estaba sobreofertado.
¿Cuál es la mejor época del año para los impresores?
El segundo semestre para el sector gráfico es más dinámico que en el primer
semestre, pero eso es un ciclo normal del negocio y efectivamente crecimos al
finalizar el año. Sin embargo el sector presenta una oferta alta, lo que produce una
disminución de precios y hace que los empresarios busquemos permanentemente
mayor productividad.
Eso ha hecho que las artes gráficas colombianas evolucionen positivamente y
sean consideradas dentro del ámbito del continente americano como un sector
que produce con buena calidad a muy buenos precios. Hemos madurado para
hacer ofertas atractivas en el mercado exterior.
¿Cómo ve el mercado del papel?
El tema del papel es un tema muy delicado, pues es la materia prima más
importante que manejamos. Infortunadamente, en este momento, la oferta de
papel es muy restringida y los precios muy volátiles. Eso nos causa
inconvenientes a los impresores, pues disponer de papel cada vez es más
complicado y para un impresor el papel más caro es el que no tiene. Actualmente
hay más concentración en la propiedad de los molinos y la oferta que nos hacen
cada día se restringe más.
¿Qué opinión tiene del TLC?
Nos gusta que llegue al país la inversión en el sector del papel. De hecho, tal vez
la única cadena que se presentó unida para las negociaciones del TLC fue la que
incluye pulpa, papel, cartón, impresores y editores, que llegamos a un acuerdo
para comunicar al Gobierno nuestra posición frente al tratado.
¿Para ustedes, el TLC es una amenaza o una oportunidad?
Lo vemos como una oportunidad supremamente buena, pues Colombia en cuanto
a las artes gráficas tiene un nivel competitivo que hace que ese tipo de acuerdos
sea atractivo para el país. En general, todas las materias primas están hoy
gravadas y a la luz de la firma del un tratado se desgravarán.
Actualmente, en algunos casos las publicaciones entran sin gravamen y allí
tenemos un efecto negativo. Pero aun así, la industria gráfica es competitiva.
Actualmente, ¿cómo está la balanza comercial con E.U. respecto de las artes
gráficas?
La balanza comercial en este momento favorece a Colombia y esperamos que
siga así. Los sectores más dinámicos son los de libros y publicaciones. Han ido
ganando espacio artículos como los cuadernos y de manera indirecta las etiquetas
están creciendo.
¿Cuánto representa el mercado exterior para Tecimpre?
Representa aproximadamente 20 por ciento de las ventas. Normalmente
exportamos revistas y publicomerciales, es decir, catálogos y cosas de ese estilo.
Hemos venido creciendo y esa es nuestra estrategia a futuro. Sabemos que el
mercado local no es suficientemente grande (obviamente no queremos
descuidarlo, pues es nuestro soporte), pero es indispensable que Tecimpre y, en
general, Colombia mire hacia fuera. No podemos seguir siendo tan encerrados.
¿La revaluación ha afectado la industria?
La revaluación para Tecimpre ha sido positiva, porque nuestra balanza (lo que
compramos y exportamos) ha sido deficitaria, teniendo así unos pasivos más
baratos. Pero en general, la perspectiva, en especial si queremos ver fuera de
Colombia la revaluación atenta contra nosotros. El mercado nacional es pequeño y
si queremos la oportunidad de salir si hay revaluación se nos hace más difícil. Por
eso no podemos ser tan inmediatistas en decir 'regia la revaluación', sino que tiene
incidencias supremamente delicadas.
¿Cuál es el interés de Carvajal por obtener el control total de Tecimpre?
Aunque no estoy en la capacidad de dar detalles concretos a cerca de la
negociación, la razón del por la que la organización Carvajal desea tomar el
control total de la compañía es que la presencia del Grupo en el sector de
inversión no está asentada en Bogotá. La participación es a través de Tecimpre.
Hoy definitivamente quieren participar porque Bogotá representa, sin duda, cerca
del 50 por ciento de la producción gráfica nacional.
¿Se prevén inversiones en el sector para 2005?
Cada empresa está haciendo sus análisis particulares. Pero hay una condición
que deben tener en cuenta todos los que deseen invertir, y es el cambio
tecnológico en procesos como preprensa, donde una máquina alcanza fácilmente
el millón de dólares. De hecho, ha habido inversiones y se sigue pensando en
invertir muy razonablemente.
Yo esperaría que no siga creciendo la inversión en equipos gráficos de manera
que la oferta no siga aumentando desmedidamente, y que más bien el mercado
ocupe mejor y más racionalmente los equipos que hoy tenemos. Sin embargo, esa
es una circunstancia que el mercado nos va a imponer.
¿Cómo le fue a la compañía el año pasado?
Tuvimos un año sano, conveniente y financieramente positivo. Siempre uno
espera que sea mejor. El crecimiento en ventas fue paradójicamente de cero, pero
en utilidades crecimos un treinta por ciento. Ese cero en ventas se debe
particularmente al deterioro en los precios, que daría lugar a una disminución de
las utilidades. Éstas sin embargo crecieron por el control de costos al interior de la
compañía produjo resultados positivos.
¿Y qué esperan del 2005?
Estamos optimistas. Comparativamente con el año pasado esperamos crecer un
poco más. La razón de la falta de un crecimiento mayor es por causa de la oferta,
los precios siguen deteriorándose. Sin embargo, hemos logrado racionalizar unos
costos que teníamos, como en los tiempos de operación y en la programación,
que nos ha permitido mejorar respecto del año pasado.
¿Cuál es la estrategia de la empresa para 2005?
En vista de las circunstancias del mercado, debemos seguir cuidando y
controlando nuestros gastos fijos, sin descuidar, por supuesto, los costos
variables, más concretamente, el papel y la tinta, que son los costos más
radicalmente delicados dentro de nuestros procesos y la clave está en el aumento
de nuestra productividad.
De esa manera podemos obtener costos menores que la competencia y aumentar
los márgenes de ganancia, que son nuestro oxígeno, y que nos permiten tener un
futuro un poco más tranquilo. En la medida en que crezca la economía, y
esperamos que lo haga radicalmente, nuestra demanda debe crecer, el aumento
en el PIB debe reflejar una mejor situación para la industria.
Su imagen
Luis Eduardo Pareja es nacido en Pereira y desde varios años vive en Bogotá
junto con su familia, conformada por su esposa y dos hijos.
En los ratos libres le gusta jugar golf, su deporte favorito. Sus allegados y
personas vinculadas a la actividad empresarial lo conocen como una persona
carismática, con mucha experiencia y conocimiento del sector.