Gestión Institucional • 3 Programa para la Transformación y el Fortalecimiento Académicos de las Escuelas Normales Orientaciones para su elaboración Serie: Cuaderno de trabajo El diagnóstico institucional en las escuelas normales Gestión Institucional • 3 Esta edición estuvo a cargo de la Dirección General de Normatividad, perteneciente a la Subsecretaría de Educación Básica y Normal. Serie Gestión Institucional, con el título El diagnóstico institucional en las escuelas normales. Orientaciones para su elaboración Coordinación editorial Esteban Manteca Aguirre Diseño de portada e interiores DGN/Inés Patricia Barrera Formación electrónica Inés Patricia Barrera Primera edición, 2003 D.R. ©SECRETARÍA DE EDUCACIÓN PÚBLICA, 2003 Argentina 28 Col. Centro, C.P. 06020 México, D.F. ISBN 968-5710-25-2 Impreso en México MATERIAL GRATUITO PARA MAESTROS • PROHIBIDA SU VENTA Índice Presentación 5 1. La elaboración del diagnóstico como punto de partida para el mejoramiento institucional 9 1.1 La identificación de problemas y necesidades en el diagnóstico institucional 13 1.2 El análisis de las fortalezas y debilidades de la escuela normal 18 2. Dimensiones y ejes de análisis para elaborar el diagnóstico institucional 25 2.1. Dimensión pedagógico-curricular 26 2.2. Dimensión organizacional 28 2.3. Dimensión administrativa 30 2.4. Dimensión vinculación con el entorno 31 3. El proceso de elaboración del diagnóstico institucional 33 3.1. La construcción de la misión de la escuela normal 33 3.2. Fases para la realización del diagnóstico institucional 38 Fase 1: Prediagnóstico 40 Fase 2: Identificación de problemas por dimensiones y ejes de análisis 43 Fase 3: Análisis de las fortalezas y debilidades 46 Fase 4: Jerarquización de problemas 48 Fase 5: Integración del Informe del diagnóstico institucional 51 Referencias bibliográficas 53 Presentación A partir de 1996, la Secretaría de Educación Pública, en coordinación con las autoridades educativas estatales, puso en marcha el Programa para la Transformación y el Fortalecimiento Académicos de las Escuelas Normales cuya finalidad es mejorar la calidad de la formación inicial de los maestros de educación básica. Las acciones de este Programa se han articulado en seis líneas de trabajo: transformación curricular, formación y actualización profesional del personal docente y directivo, mejoramiento de la gestión institucional, regulación del trabajo académico, evaluación interna y externa, y regulación de los servicios de educación normal. Con la línea de mejoramiento de la gestión institucional se impulsan acciones tendientes a renovar los procesos clave de la organización y del funcionamiento de las escuelas normales, tales como: el trabajo colegiado, el liderazgo de los equipos directivos, los criterios académicos para la organización de las actividades escolares, la planeación y la evaluación institucional. Con estas acciones se pretende generar condiciones propicias para que los profesores transformen sus prácticas de enseñanza y los estudiantes logren el perfil de egreso establecido en el plan de estudios respectivo. Desde esta perspectiva, y en congruencia con los objetivos prioritarios del Programa Nacional de Educación 2001-2006, en el año 2002 inició el Programa de Mejoramiento Institucional de las Escuelas Normales Públicas (PROMIN), cuyo objetivo general es contribuir a elevar la calidad de la formación inicial de los futuros docentes de educación básica, mediante acciones que favorezcan la renovación de la gestión institucional de las escuelas normales públicas, de modo que se constituyan en comunidades profesionales de aprendizaje donde la escuela, como unidad básica de formación, asuma un compromiso compartido dirigiendo sus esfuerzos al aprendizaje individual y colectivo de todos los que la integran, primordialmente, de los estudiantes y profesores. El PROMIN se centra en el mejoramiento de la planeación institucional, como una herramienta fundamental para dirigir los cambios académicos y organizativos que demandan las escuelas normales. Con el primer año de su operación, en la mayoría de las escuelas se inició un proceso de reflexión y análisis sobre los factores que favorecen u obstaculizan el cumplimiento de los propósitos educativos, y se desarrollaron diversas acciones de mejoramiento para atender 5 sus necesidades y resolver los problemas que enfrentan, a fin de garantizar una formación de calidad de los futuros maestros. Asimismo, se han generado coyunturas favorables para que las instituciones consoliden su proceso de planificación como vía para el cambio y la innovación educativa; desarrollen estrategias para mejorar la organización de las actividades académicas; incrementen los mecanismos y niveles de participación de las comunidades normalistas en las decisiones que tienen un impacto significativo en la vida de la institución; fortalezcan el trabajo colegiado; y reconozcan la evaluación como una herramienta útil en el mejoramiento continuo de la escuela. La experiencia obtenida durante el primer año también permitió advertir la necesidad de realizar ajustes en el diseño y en las estrategias de implementación del Programa, a fin de consolidar los avances hasta ahora logrados. En especial, se identificó la importancia de ofrecer a las escuelas normales orientaciones que les permitan conducir de manera más efectiva los procesos de transformación, en particular, mayores referentes metodológicos para el desarrollo de su planeación institucional, lo que implica considerar, a la vez, orientaciones para llevar a cabo un proceso de autoevaluación institucional que le permita reconocer su situación actual en el cumplimiento de sus finalidades y, a partir de ella, proponerse alternativas de solución, para su funcionamiento eficaz. En respuesta a estos requerimientos, la Subsecretaría de Educación Básica y Normal, por conducto de la Dirección General de Normatividad, emprenderá diversas estrategias de apoyo a las escuelas normales, siendo una de ellas el diseño y elaboración de cuadernos de trabajo referidos a temas básicos de la gestión institucional. Dado que el diagnóstico institucional se constituye en el punto de partida para que el proceso de planeación institucional oriente el cambio y la mejora en las escuelas normales, el presente cuaderno de trabajo tiene como propósito ofrecer a la comunidad normalista algunas orientaciones metodológicas para elaborarlo, por lo que pretende: • Favorecer una visión compartida de la misión institucional de las escuelas normales a fin de orientar sus acciones de mejora hacia el cumplimiento de los propósitos educativos. • Propiciar la generación de procesos reflexivos sobre los rasgos de las escuelas normales que obstaculizan su funcionamiento, además de reconocer los logros obtenidos. • Contribuir a que el diagnóstico institucional provea información que favorezca la toma de decisiones en las escuelas normales. • Fomentar la participación de la comunidad normalista en procesos de análisis, discusión y reflexión sistemáticos –que permitan la compren6 sión de su realidad institucional– en torno a sus problemas, necesidades, fortalezas y debilidades. • Impulsar una cultura de evaluación institucional en el marco de una nueva gestión en las escuelas normales. Si bien este cuaderno de trabajo contiene elementos que se consideran esenciales para la elaboración del diagnóstico institucional y propone algunos ejercicios prácticos, no pretende ser un modelo único, ni coartar la creatividad e iniciativa de las escuelas normales; éstas podrán complementarlo a partir de sus experiencias y necesidades particulares. El cuaderno consta de tres apartados. El primero hace referencia a las características que adopta el proceso de elaboración del diagnóstico institucional en las escuelas normales, el cual se centra en el análisis y la reflexión de la situación actual que enfrenta la institución y, particularmente, en la identificación de situaciones problemáticas, así como de sus fortalezas y debilidades. En este apartado se destaca la relevancia de que el diagnóstico se lleve a cabo por el conjunto de la comunidad normalista, con el propósito de arribar a la toma de decisiones colegiada para el mejoramiento institucional en congruencia con sus propósitos educativos y fundamentada en el conocimiento común. El segundo apartado describe y caracteriza de manera general las dimensiones y los ejes de análisis (aspectos) que se sugieren para la elaboración del diagnóstico institucional. Este apartado tiene el propósito de orientar el análisis de la situación actual de la escuela normal, a fin de permitirle a la comunidad normalista conocer, comprender y explicar de manera integral los factores o causas que inciden en el funcionamiento de su institución. Dichas dimensiones son: pedagógico-curricular, organizacional, administrativa y vinculación con el entorno. En cada una de ellas se incluyen preguntas para suscitar la reflexión y el análisis a partir de la recolección y sistematización de la información que realicen; dichas preguntas podrán ser enriquecidas de acuerdo con los criterios que determinen las escuelas. El tercer apartado presenta las orientaciones metodológicas para la realización del diagnóstico institucional, mismo que se organiza en dos secciones: la primera, relativa a la construcción o identificación de la misión institucional, referente fundamental para conocer la situación de la escuela normal y primera etapa metodológica del proceso de planeación institucional; en la segunda se describen las distintas fases que permiten el conocimiento, comprensión y explicación de la realidad institucional, es decir, la realización del diagnóstico institucional propiamente dicho. 7 1. La elaboración del diagnóstico como punto de partida para el mejoramiento institucional A partir de la puesta en práctica del Programa para la Transformación y el Fortalecimiento Académicos de las Escuelas Normales, en las instituciones normalistas se han promovido un conjunto de acciones y procesos orientados a elevar la calidad de la formación de los estudiantes normalistas, de tal manera que cuenten con las competencias necesarias para su futuro ejercicio profesional. Los avances y resultados logrados, así como las experiencias obtenidas y los obstáculos que van enfrentando para el cumplimiento de sus finalidades educativas, se reflejan de manera diversa y heterogénea en las escuelas, debido a la influencia de una gran diversidad de factores asociados a su historia institucional; a las formas de organización que siguen para ofrecer sus servicios; a los perfiles profesionales de sus docentes y a las formas de enseñanza; a la vinculación establecida entre la escuela normal y las escuelas de educación básica, entre otros.1 Si bien se reconocen avances significativos, se identifican retos que requieren ser atendidos por las instituciones normalistas; resulta necesario, entonces, continuar impulsando acciones sistemáticas y continuas, que permitan mejorar el proceso formativo de los estudiantes e incidir en el mejoramiento de la gestión institucional, con objeto de generar las condiciones para que dicho proceso se desarrolle en un ambiente institucional adecuado. Para que se pueda intervenir de manera eficaz en la transformación de las escuelas normales y, por ende, favorecer el logro de una educación de calidad para los estudiantes, la planeación institucional se concibe como la herramienta idónea para dirigir los cambios académicos y organizativos, en la medida en que, a través de ella, docentes y directivos orientan y guían los procesos y prácticas que se desarrollan en la escuela en congruencia con la detección de los problemas y necesidades, y diseñan estrategias de solución, con base en las carac- 1 En el cuaderno de trabajo 1, El mejoramiento de la gestión institucional en las escuelas normales (Elementos para la reflexión y el análisis), de la serie Gestión Institucional, DGN-SEByN-SEP, se profundiza en estos elementos. 9 terísticas y particularidades de su institución. Así, la planeación permite a la comunidad normalista definir metas, estrategias, proyectos y acciones comunes para fortalecer su tarea educativa, a la vez que favorece el desarrollo de acciones articuladas en los distintos ámbitos de la vida institucional y un uso más racional de los recursos con que cuenta para la conducción de la escuela. Lo anterior supone que cualquier iniciativa de mejoramiento institucional que emprenda la escuela normal se sustente en un ejercicio de revisión, reflexión y análisis de la situación actual; es decir, requiere que se parta de un diagnóstico institucional que dé cuenta tanto de los problemas y necesidades que presenta, como de sus fortalezas y debilidades, a fin de que las decisiones colectivas que se tomen permitan priorizar las situaciones problemáticas, consolidar los avances y logros que se van obteniendo y fijarse un camino de mejora continua. En cierto sentido, puede decirse que, como resultado de su práctica, los integrantes de las escuelas normales conocen los problemas y necesidades que habría que atender y cuentan con elementos que les permiten tomar decisiones respecto a las medidas de solución más adecuadas; entonces, ¿por qué y para qué plantear que es necesario el reconocimiento y análisis de la situación institucional? Asimismo, como producto del desarrollo de otras acciones que vienen llevando a cabo, tales como el trabajo colegiado o las estrategias de seguimiento a la aplicación de los planes y programas de estudio, entre otras, ¿no cuentan ya con una perspectiva sobre los problemas que enfrentan y las mejoras que requieren?; ¿no resulta suficiente con la experiencia y el conocimiento acumulado para formular propuestas o proyectos de mejoramiento institucional y llevarlos a cabo? Al respecto, es necesario aportar los siguientes elementos: a) El mejoramiento de los aprendizajes de los estudiantes normalistas sólo podrá lograrse si los responsables de su formación –profesores y directivos principalmente– comparten una visión común sobre las finalidades educativas de la escuela normal y los factores que influyen en el proceso educativo, y establecen acuerdos sobre las acciones más adecuadas para atender sus problemas centrales. Esto implica el intercambio de las distintas perspectivas que se tienen por parte de los integrantes de la comunidad normalista sobre los problemas que enfrenta la escuela, las razones que los originan y las posibles medidas de solución; es decir, se requiere del análisis colegiado sobre las hipótesis individuales que se tienen acerca de la situación institucional. b) Las medidas de mejoramiento que se impulsen en la escuela normal requieren que la comunidad normalista cuente con información 10 confiable y oportuna para la toma de decisiones, lo que demanda un ejercicio sistemático y colectivo de indagación y consulta de diferentes fuentes que aporten referentes explicativos sobre los problemas que se enfrentan, así como un análisis profundo sobre las principales causas que dan origen a la situación problemática; además, que se ponderen las fortalezas y debilidades de las escuelas para hacer frente a dichos problemas. En la medida en que se recabe, sistematice y comparta la información –incluyendo experiencias exitosas– se enriquece la comprensión de los problemas, las necesidades, las fortalezas y las debilidades de las escuelas normales, de modo que la toma de decisiones se realice evitando opiniones, creencias o visiones sin fundamento. c) El proceso de cambio en la escuela normal exige del diálogo constante entre sus integrantes para la definición de las prioridades institucionales. La elaboración del diagnóstico institucional propicia que se tomen en cuenta las preocupaciones, sugerencias, recomendaciones, intereses y necesidades de los actores, y se definan proyectos institucionales en los que prevalezca una perspectiva común congruente con la misión institucional. d) Las escuelas normales cuentan con diversa información que requiere sistematizarse para disponer de insumos que permitan “tener una radiografía de la institución”, sin perder de vista que la realidad institucional es compleja y los problemas que enfrenta son multicausales; en este sentido, el diagnóstico institucional que elaboren les permitirá contar con un punto de partida para perfilar intervenciones hacia la mejora, pero no será un ejercicio acabado y, por tanto, tendrá que enriquecerse en la medida en que se avance en el proceso de cambio institucional. Los señalamientos anteriores representan retos para que el diagnóstico institucional realmente oriente la definición de los proyectos de mejoramiento de la escuela normal; de otra manera se corre el riesgo de que pierda importancia y sentido si solamente se cubre como un requisito más en el proceso de planeación, si se convierte en un listado de datos o juicios improvisados o si se elabora de forma personal con acceso restringido para la comunidad normalista. El diagnóstico institucional se concibe como una evaluación inicial o diagnóstica que tiene como propósito que la comunidad normalista realice una apreciación y valoración sobre el momento en que se encuentra la escuela normal, estimando en qué medida la situación diagnosticada se corresponde con la situación deseada que se deriva de su misión institucional –qué tanto está cumpliendo con sus finalidades educativas– y, a partir de ello, defina los cursos de acción más pertinentes para esa situación diagnosticada. 11 En esta perspectiva, el diagnóstico supone un sentido de utilidad para la comunidad normalista ya que le permite conocer tanto las necesidades y problemas, como las fortalezas y debilidades en los diferentes ámbitos de la institución con el objeto de tomar decisiones para revertir las situaciones no deseadas o para garantizar la continuidad y consolidación de aquellas que consideran adecuadas, priorizando las situaciones cotidianas que demandan mayor atención. En el marco de una gestión renovada, su elaboración exige que se formen grupos de trabajo incluyentes, en los que se favorezca el intercambio de puntos de vista de manera propositiva y se procure que los acuerdos para mejorar sean resultado del consenso. Como tarea, representa un ejercicio intelectual que requiere de la disposición y el compromiso de todos los integrantes de la institución. Así, el diagnóstico institucional tiene la característica principal de ser el punto de partida del cambio planificado que pretende impulsar la escuela normal, ya que permite: • Contar con referentes institucionales para impulsar cambios y consolidar avances y logros que se han obtenido en el cumplimiento de sus finalidades educativas. • Conocer los problemas y necesidades que se manifiestan en la institución; cuáles son sus causas, sus efectos y sus consecuencias en los distintos ámbitos que la constituyen. • Valorar las fortalezas de la institución dado que éstas permiten perfilar y avanzar en la implementación de cursos de acción. • Reconocer las debilidades que se manifiestan en el aula y en la institución, las cuales dificultan el cumplimiento de la misión de la escuela normal. • Identificar los puntos críticos en los que es necesario priorizar las medidas de atención y de mejora, considerando que no es posible dar respuesta a todo a la vez. • Optimizar el proceso de planificación, detectando los aspectos relevantes para la institución y desechando aquellos que no tienen incidencia en su mejoramiento. • Favorecer la realización de un ejercicio de comunicación entre los distintos informantes: alumnos, docentes y directivos, entre otros, a fin de tomar decisiones institucionales. • Reconocer las diferentes interpretaciones, percepciones y opiniones que cada integrante de la comunidad normalista tiene de su institución, de los problemas y de los factores –internos y externos– que los provocan, para obtener una visión común de la situación diagnóstica. 12 • Delimitar las situaciones problemáticas que pueden ser atendidas por la escuela normal de las que exceden sus límites y posibilidades o no le corresponden dada su función social. • Identificar asuntos relevantes y establecer acciones que permitan alcanzar la visión institucional2 trazada por la comunidad normalista en congruencia con su misión institucional. • Guiar el descubrimiento del potencial humano y los saberes colectivos, que ayudan a definir una propuesta de innovación y transformación para la consecución de los propósitos educativos de la escuela. • Evaluar a la escuela normal respecto a los avances y resultados que va obteniendo la comunidad normalista ya que la situación inicial diagnosticada se contrasta una vez que se han implementado las acciones de mejoramiento, con lo que se valora en qué sentido se modificó o no. En síntesis, el diagnóstico institucional, como evaluación inicial, responde a la pregunta ¿qué escuela somos?, lo cual permite visualizar la escuela que deseamos para otorgarle direccionalidad al cambio institucional y decidir los proyectos de mejoramiento institucional que se incluyen en el Plan de Desarrollo Institucional (PDI) y en el Programa Anual de Trabajo (PAT). 1.1. La identificación de problemas y necesidades en el diagnóstico institucional La finalidad del diagnóstico institucional es dar respuesta a una pregunta central: ¿en qué medida la escuela normal está cumpliendo con sus finalidades educativas, es decir, con su misión institucional? La respuesta a esta pregunta plantea, por una parte, la importancia de reconocer los avances que se van obteniendo en torno a que los estudiantes normalistas adquieran las habilidades, conocimientos, actitudes y valores que les permitan en su futuro ejercicio docente favorecer los aprendizajes en sus alumnos y el mejoramiento de la educación básica. Por otra parte, supone para la escuela la búsqueda de explicaciones sobre los factores que están interviniendo en el logro o no de dichas competencias en los futuros docentes, de tal manera que pueda intervenir de manera pertinente y eficaz a fin de alcanzar los propósitos educativos encomendados. 2 Se refiere a la proyección o tipo de institución que la comunidad normalista quisiera alcanzar en un periodo preciso; es decir, la imagen-objetivo. [Cfr. La planeación institucional. Orientaciones para su elaboración, México, DGN-SEByN-SEP (Serie: Gestión Institucional, 4), 2003]. 13 Para que la comunidad normalista pueda definir proyectos de mejoramiento institucional, el ejercicio de evaluación inicial o diagnóstica se enfocará en caracterizar la situación actual de la institución, detectando los problemas y necesidades que se presentan y fijando prioridades de atención en función de su importancia, lo que le permitirá establecer un camino de permanente avance y mejora continua; habrá de analizar también las fortalezas y debilidades que la distinguen, ya que a partir de ellas podrán implementarse acciones vinculadas con las posibilidades reales de la escuela normal. Plantear la identificación de problemas prioritarios en el diagnóstico institucional es reconocer varias cuestiones: la primera, que la institución es un sistema complejo y dinámico que se encuentra en constante cambio: lo que representa un problema en el aquí y el ahora, al atenderse configura un escenario distinto, que volverá a revisarse para decidir nuevos cursos de acción; segunda, para poder impulsar el cambio en las instituciones es necesario acotar los límites de la acción; es decir, resulta esencial identificar qué se tiene que resolver, y seleccionar los problemas sobre los que se empezará a intervenir en el momento actual; y tercera, priorizar las situaciones problemáticas no significa descartar los problemas institucionales, sino decidir a qué aspectos se van a dirigir y concentrar más esfuerzos, recursos, tiempos, etcétera; y, principalmente, cuáles de ellos recibirán mayor atención en un determinado periodo, lo que imprime un carácter de gradualidad a la atención de problemas y necesidades detectadas. Ello implica que dichos problemas se analicen, comprendan y sistematicen dándoles prioridad en función de su importancia, urgencia y factibilidad, en el entendido de que no se puede atender todo a la vez, sino que es necesario intervenir en la realidad educativa de manera sistemática e interrelacionada, pensando a la institución como un todo y tomando conciencia de las dimensiones o partes que la integran. Así, a partir de resolver y superar una situación problemática actual, el proceso de cambio en la escuela normal se va generando como una sucesión de situaciones mediante las cuales se intenta llegar a la imagen-objetivo trazada, para que su acción sea más efectiva y se logren los resultados de aprendizaje de sus alumnos. El diagnóstico institucional, que permite construir el Plan de Desarrollo Institucional (PDI) y el Programa Anual de Trabajo (PAT), constituye una etapa dinámica en la cual se indaga y se identifican las situaciones problema con base en un ejercicio crítico y reflexivo que integre los distintos puntos de vista de los sectores de la comunidad normalista, ya que puede suceder que lo que uno identifica como problema, otro lo pueda percibir como una oportunidad. La manera como se mire a la escuela representará una experiencia única en la 14 evaluación diagnóstica, por lo que el reto será conocer y valorar la apreciación de los alumnos, del personal académico y del directivo y del conjunto de la comunidad normalista para obtener una visión común de sus necesidades y problemas: una práctica reflexiva se ha de generar cuando se enfrenta alguna dificultad, algún incidente problemático o una experiencia que no se puede resolver de inmediato. Asimismo, la discusión colegiada sobre lo que hay que resolver exige un ejercicio de clarificación sobre qué es un problema, cuáles son sus efectos y las causas que lo provocan, ya que esto favorecerá construir acuerdos para comenzar a intervenir, así como el éxito de los proyectos de mejoramiento que se consensen y lleven a la práctica. “La regla de oro podría ser la siguiente: ningún problema carece de esperanzas de solución, pero tampoco hay recomendaciones si no se tiene éxito en presentar los problemas claramente” (UNESCO, 1998: 14). Un problema es una situación que genera incertidumbre, dificultad o inconformidad, o como dirían Munby y Russell (1990) los problemas son “los acertijos de la práctica”. En la realidad institucional, en una situación problemática confluye un conjunto de problemas que, desde la percepción de los distintos integrantes de la comunidad normalista, tienen diferente nivel de jerarquía y, por tanto, de urgencia por atenderse; esto significa que las miradas son diferentes acuerdo con el lugar organizacional y los intereses de cada uno. De ahí la necesidad de discutir y analizar las múltiples perspectivas y sustentar, con base en información suficiente y pertinente, la toma de decisiones para seleccionar y decidir por cuál problema se inicia el desarrollo de acciones. Será posible llevar a cabo el ejercicio crítico y reflexivo de la situación problemática de la escuela normal organizando la elaboración del diagnóstico institucional a partir de cuatro dimensiones de la gestión institucional,3 las cuales incluyen, a la vez, ejes de análisis para facilitar su revisión: 1) La dimensión pedagógico-curricular: se centra en la aplicación de los planes y programas de estudio, los logros educativos de los estudiantes normalistas, la organización de las actividades académicas en la escuela, las actividades curriculares de formación complementaria que se ofrecen a los estudiantes normalistas, y el desempeño profesional del personal docente. 2) La dimensión organizacional: referida a la participación en la toma de decisiones y las formas de organización institucional, el funcionamiento del trabajo colegiado, el uso del tiempo escolar, y el aprovechamiento de los recursos educativos disponibles. 3 Estas dimensiones comprenden los diferentes aspectos de la vida institucional. 15 3) La dimensión administrativa: incluye criterios para la asignación de los recursos a las tareas institucionales, regulación laboral, normatividad académica y administrativa, instalaciones y equipamiento. 4) La vinculación con el entorno: relativa a la relación de la escuela normal con las escuelas de educación básica, intercambio de la escuela normal con otras instituciones formadoras y actualizadoras de docentes y educativas, y vinculación e intercambio académico con otras instituciones de educación superior y centros de investigación. La revisión por dimensiones y ejes de análisis permitirá hacer un “recorte de la realidad”, sistematizar las ideas y proponer acciones directas a cada uno de los problemas identificados, una vez jerarquizados por orden de importancia. Igualmente posibilitará que la comunidad normalista fije su participación a partir de la responsabilidad que cada uno tiene en la escuela normal. Es importante aclarar que esta forma de organizar la elaboración del diagnóstico no significa que deban excluirse otros aspectos que la escuela normal identifique como importantes de analizar y explicar, ni que el análisis deba efectuarse de forma exhaustiva o con el mismo grado de profundidad para cada dimensión. Asimismo, es conveniente considerar que en algunas escuelas normales se cuenta con avances sobre el análisis de estos tópicos, así como con información documentada y sistematizada, misma que podrá utilizar también como insumo para la evaluación diagnóstica que se propone. El siguiente esquema ilustra la forma que se sugiere para organizar el proceso de análisis en la elaboración del diagnóstico institucional: DIMENSIONES DE ANÁLISIS • Pedagógica-curricular • Organizacional • Administrativa • Vinculación con el entorno 16 Ejercicio crítico y reflexivo por ejes de análisis DIAGNÓSTICO INSTITUCIONAL ¿Qué nivel de profundidad es recomendable para el análisis de la situación actual de la escuela normal y la definición de propuestas de mejora? Tomando en cuenta la complejidad de la realidad institucional y que la situación problemática detectada es producto de múltiples causas, cabría preguntarse ¿qué posibilidades reales tiene la escuela normal para dar respuesta a las causas que están provocando sus problemas y dificultan el cumplimiento de su misión? La revisión de la situación actual en las escuelas normales y la toma de decisiones para impulsar medidas de mejora tendría que considerar, por lo menos, tres criterios: a) Existen factores externos e internos que son la causa de los problemas que presenta la escuela normal. En su análisis, la escuela normal tendrá que distinguir los factores de orden interno que le corresponden y puede atender, con lo que evitará tratar de resolver situaciones que están fuera de su alcance, y orientará sus esfuerzos a proyectos factibles que le representen resultados óptimos. b) Es importante tener en cuenta que los problemas son originados por múltiples factores o causas, los cuales se encuentran relacionados entre sí conformando una red en la que algunos factores tienen una relación más directa para explicar el problema que se pretende resolver. Por tanto, es recomendable que en las escuelas normales se analice, bajo una perspectiva integral, la diversidad de causas y se determinen las que se encuentran más ligadas al problema para incidir en ellas, ya que la resolución o superación de los problemas sólo podrá lograrse si se interviene en las causas directas que los provocan. Esto implica reconocer, por una parte, que existen límites para identificar las diferentes causas y su articulación, mismos que la propia comunidad normalista se plantea al tomar en cuenta los referentes que tiene para ello y, por la otra, que estas redes causales no son predeterminadas ni estáticas, su definición es producto de la construcción colectiva que el conjunto de actores de la institución hace de ellas al analizar las situaciones problemáticas, es decir, las causas directas que originan un mismo problema y cómo éstas se articulan, pueden ser diferentes dependiendo del actor o grupo que las analiza. c) Como resultado del análisis de su situación actual, es muy probable que la escuela normal identifique un gran número de problemas por atender. Al respecto, es conveniente que dichos problemas se jerarquicen de acuerdo a su orden de importancia, urgencia y factibilidad, 17 de tal manera que se determine la atención de éstos considerando las posibilidades de la escuela normal. En esta priorización, la escuela normal deberá tener como referente su misión institucional, ya que es determinante para realizar un ejercicio de contraste entre lo que la escuela normal debe lograr –sus propósitos educativos– y la situación problemática que obstaculiza o dificulta su cumplimiento. 1.2. El análisis de las fortalezas y debilidades de la escuela normal Parte importante del análisis situacional de la escuela normal son la identificación y el reconocimiento de sus fortalezas y debilidades, entendiendo las primeras como aquellas condiciones o circunstancias que favorecen, propician y contribuyen al logro adecuado de sus propósitos educativos. Mientras que las debilidades son aquellas condiciones, circunstancias o situaciones desfavorables que influyen en el desarrollo de las actividades y por ende en el logro de la misión institucional. Las debilidades constituyen procesos no consolidados, que son susceptibles de ser mejorados durante el proceso de desarrollo, a diferencia de los problemas, que son situaciones de conflicto que afectan de manera directa el logro de los propósitos educativos de la escuela normal. Las fortalezas y debilidades resultan de la organización interna de las escuelas y de sus particulares características, por lo que se relacionan también con la cultura organizacional propia de cada institución. Con el propósito de detectar los elementos que favorecen el cumplimiento de la misión de la escuela, es importante analizar las fortalezas y debilidades, permitiendo con esto identificar todos aquellos aspectos de la vida institucional que apoyarán o limitarán la atención adecuada de la situación problemática, por lo que el diseño de estrategias específicas para la solución de los problemas identificados debe fundamentarse, a la vez, en ellos. Este análisis se reflejará en la identificación de las posibilidades reales con que cuenta la escuela para resolver los problemas. De tal manera, las fortalezas se traducen en medios favorables para su solución y las debilidades representan las necesidades que requieren ser satisfechas y que, de no serlo, limitan la atención de la situación problemática y, por tanto, el logro de los propósitos educativos de la escuela normal. En el siguiente cuadro se ejemplifican algunas fortalezas y debilidades de una escuela normal. 18 FORTALEZAS DEBILIDADES F1 Se cuenta con el equipo de autoridades, conformado por un director y dos subdirectores: administrativo y académico, quienes conocen la misión de la escuela, y con base en una visión se preocupan por la búsqueda de soluciones y la atención a diversos problemas que generan la baja calidad de la enseñanza y del aprendizaje de los alumnos de la institución. D1 Estilo directivo vertical, caracterizado por la falta de comunicación con el resto de la comunidad normalista. Poco impulso al trabajo colegiado como espacio de análisis y reflexión sobre las prácticas educativas. F2 La mayoría de los docentes conocen los propósitos de la escuela normal, desarrollan el papel que les corresponde y adoptan una actitud favorable para el trabajo académico en general. D2 Existe desconocimiento parcial de los contenidos de los programas del Plan de Estudios por parte de los docentes, lo que les impide establecer la vinculación entre dichos programas y las asignaturas que imparten; falta de comunicación y trabajo en equipo para buscar alternativas de solución a los problemas cotidianos de su trabajo en el aula. F3 Los estudiantes conocen las finalidades educativas del nivel para el que se están formando y están conscientes del papel que les toca desempeñar en su futuro ejercicio docente, lo que se refleja en su desempeño escolar. Los estudiantes muestran entusiasmo en sus prácticas y se interesan por la institución. La mayoría de los estudiantes tiene altas expectativas de sus docentes. D3 Algunos estudiantes establecen poca comunicación y disposición para el trabajo con sus compañeros. Interrupciones constantes de las clases por atender diversas situaciones que los distraen de sus actividades de formación. En algunos casos existen opiniones poco favorables sobre el desempeño de algunos docentes de la escuela normal. Algunos alumnos exigen a la institución sin dar el mismo esfuerzo. Los siguientes ejercicios pretenden apoyar la reflexión y el análisis de los temas revisados en este apartado. Ejercicio 1. ¿Cómo se identifica un problema? A continuación se encuentra una fotografía con un iceberg: si imaginamos que viajamos en un barco y el iceberg está entre nosotros y el puerto al que habremos de arribar, podemos identificar que el iceberg representa un problema. Las posibles decisiones para resolver el problema del iceberg, en el caso de quienes viajan en el barco, pueden ser: a) quedarse anclados en el mismo lugar; b) cambiar la ruta con el riesgo de perderse o arribar a otro lado si no se está seguro de cuál es el lugar a donde se tenía que llegar; c) destruir el iceberg y 19 Efectos Consecuencias Causas PROBLEMA continuar con la ruta prevista; y d) atravesar el iceberg caminando y continuar en otro barco que espera del otro lado. Como se observa, existen varias formas de resolver el problema, pero una de ellas puede ser la más idónea porque garantiza lograr el objetivo:“arribar al punto anhelado por todos”. Si analizamos la ilustración, podemos observar que en la identificación de un problema se encuentran presentes cuatro elementos centrales: el problema, las causas, los efectos y las consecuencias. Tener presentes estos elementos nos puede ayudar a reflexionar sobre la dificultad que representa definir un problema real y los factores –causas– que lo están originando; es decir, corremos el riesgo de centrar nuestra atención en aspectos secundarios –los efectos y las consecuencias– y que las medidas de mejora que pretendamos implementar no estén resolviendo el problema desde el fondo. Planteando una analogía del iceberg, a fin de analizar los problemas pedagógicos existentes en la escuela normal, podríamos ejemplificar de la siguiente manera: Planteamiento del problema por un profesor: siento que estamos mal, porque los alumnos no tienen interés, se salen de la clase y no cumplen con los trabajos de investigación encomendados. Pregunta: —¿Cuál es el problema? Profesor: —Los alumnos se ausentan con frecuencia. 20 Pregunta: —¿Cuáles son las causas que lo originan? Profesor: —No tienen interés en las asignaturas. Pregunta: —¿Cuál es un efecto? Profesor: —No cumplen con las tareas solicitadas. Pregunta: —¿Cuál es la consecuencia? Profesor: —Que reprobarán la asignatura por inasistencias, o la acreditarán con un bajo promedio. A continuación, reflexione con base en los siguientes tópicos: 1. En la situación que expresa el profesor: el problema que plantea, ¿lo es en realidad?, ¿o es un efecto?, ¿o una consecuencia? ¿Por qué? 2. ¿Considera que está bien identificado el problema? ¿Por qué? 3. ¿Cómo definiría usted el problema real? 4. ¿Cuáles serían las causas que podrían originarlo? 5. ¿Cómo se podría resolver? Es conveniente mencionar que, para realizar un análisis que permita reconocer problemas pedagógicos en la escuela normal, es necesario que se revise si los estudiantes normalistas “aprenden lo que deben aprender”; es decir, tomar como referente constante los rasgos deseables del perfil de egreso. Retomando el ejemplo del iceberg, lo que se ve fuera del agua son los elementos observables del problema. La parte del iceberg que se encuentra debajo del agua, serían aquellas causas o factores de índole interno y externo que provocan el problema (aspectos no explícitos y difíciles de reconocer). Por ejemplo, para reconocer si el problema y las causas son realmente las respuestas anteriores, es importante dialogar y preguntarse si la falta de interés de los alumnos no es resultado del poco conocimiento de la asignatura por parte del docente y de la inadecuada conducción y/o metodología propuesta. O si el problema real es que los estudiantes no están adquiriendo las habilidades y conocimientos específicos de la asignatura que se trate. Ejercicio 2. Identificación de un problema y de las causas que lo provocan Cuando en la escuela pensamos cómo resolver los problemas, a veces pueden considerarse soluciones que no son pertinentes o resultan demasiado ambiciosas, con el consecuente poco éxito para superarlos. Esto puede deberse a que se identifican varias causas y se pretende dar solución al conjunto de ellas o, lo que es más grave, no se atienden las que tienen una influencia más directa. En el siguiente cuadro se presentan cuatro problemas identificados en la escuela normal, con las causas que los generan. 21 1) En equipo, elijan un problema y analicen las causas. 2) Incluyan otras causas que, desde su punto de vista, tienen mayor peso en la explicación del problema (nivel de importancia). 3) Corrijan o eliminen aquéllas en las que no estén de acuerdo. Argumenten. 4) Respondan a los siguientes cuestionamientos: ¿Cuáles causas atendería para resolver el problema elegido y por qué? ¿Cuáles podría dejar de atender? ¿Por qué? ¿Qué elementos o criterios consideró para tomar su decisión? ¿Con qué medidas superaría las causas seleccionadas? Ejemplos: Problema 1 Problema Causas • Falta de actualización de los • No existen estrategias adedocentes, en relación con cuadas de actualización los enfoques de las asignapara los docentes. turas que impartirán. Los maestros llevan a cabo • Falta de congruencia entre • Falta de organización técniprácticas educativas que no la actualización proporcioca-administrativa. están acordes con los enfonada con las necesidades ques de los planes y prograde actualización de los mas de estudio de las maestros. licenciaturas. • Poca participación de los • Falta de apropiación de la docentes en las actividades de actualización, así como incumplimiento en la aplicación de los programas. misión y de los rasgos deseables del perfil de egreso y escasa vinculación con la asignatura impartida. Problema 2 Problema Causas • Desconocimiento de los en- • No se aceptan los planes y foques de evaluación de los programas de estudio y/o aprendizajes. se incluyen o quitan contenidos. Los docentes no aplican los • Establecimiento de perio- • Desconocimiento del Acuerprocedimientos y las formas dos de evaluación que imdo 261. de evaluación formativa espiden llevar a cabo este tipo tablecidas en los planes y de evaluación. programas de estudio. • • No se respetan los acuerdos de las reuniones de trabajo colegiado. • 22 Desconocimiento por ausencia en las reuniones de trabajo colegiado. Actitud apática para trabajar sobre los acuerdos. Problema 3 Problema Causas • Falta de espacios curriculares • Carencia de espacios en la formación curricular (estilos en la formación, dedicados o formas de trabajo acadéal ejercicio sistemático de micos anteriores a la Licendiversas formas de trabajo 30% de la población escociatura). intelectual. lar manifiesta deficiencias en el desarrollo de la capacidad • Falta de práctica de habili- • En las diferentes asignatude comprensión del material dades de expresión oral y ras del mismo semestre no escrito y en la expresión oral, escrita. se fortalecen las habilidades así como en la adquisición de expresión oral y escrita. del hábito de la lectura; también presenta dificultad para • Poco desarrollo de compe- • Los docentes no fomentan tencias para aprender con suficientemente dicha complantear preguntas y propiautonomía. petencia. ciar la reflexión crítica. • Los alumnos no han adquirido la habilidades necesarias para el desarrollo de esta competencia. Problema 4 Problema Causas • Desvinculación entre las es- • Falta de espacios para el incuelas de práctica y la escuetercambio y análisis de exla normal. periencias docentes. Falta de coincidencia en la práctica de los enfoques de • Falta de tiempo en la apli- • Falta de organización de la educación básica, entre los cación de los talleres para escuela normal para amalumnos normalistas y los tula formación de los tutores. pliar los tiempos de capacitores de educación básica, en tación. el cumplimiento del trabajo • Desconocimiento de los • Circunstancias que obstacudocente. tutores de las distintas estrategias y actividades didácticas sugeridas en los programas de estudio para la formación de los estudiantes normalistas. lizan la asistencia de los docentes tutores a los talleres de formación: distancia entre la escuela normal y la escuela de práctica, falta de comunicación del docente con la escuela normal. 23 2. Dimensiones y ejes de análisis para elaborar el diagnóstico institucional Para elaborar el diagnóstico sobre la situación actual de la escuela normal y contar con información útil para la toma de decisiones, es fundamental definir estrategias de análisis que permitan conocer, comprender y explicar de manera integral los factores que favorecen u obstaculizan el cumplimiento de los propósitos educativos, así como las causas que los propician. En este sentido, se considera que la aproximación a la situación prevaleciente en dichas instituciones podría llevarse a cabo a partir de las dimensiones que caracterizan la gestión en las instituciones formadoras de docentes: pedagógico-curricular, organizacional, administrativa y de vinculación con el entorno.4 Para orientar la elaboración del diagnóstico mediante las dimensiones referidas, enseguida se presenta una breve caracterización de cada una de ellas, incluyendo ejes de análisis y preguntas generadoras para facilitar la valoración institucional; las escuelas tienen la posibilidad de atender o no los ejes sugeridos e incorporar otros que guarden mayor relación con sus características y necesidades; de lo que se trata en este apartado es de ofrecer pistas que pueden servir de guía en los procesos de análisis de la institución. Las dimensiones no son, en sí mismas, disposiciones espaciales o temporales ni personas, sino dispositivos que nos permiten analizar una realidad. La idea de dimensiones responde a razones eminentemente operativas, facilita la comprensión de la escuela y considera múltiples perspectivas sin perder de vista la totalidad, esta idea permite situarse en diferentes niveles institucionales y comprender distintos modos de operar. La mirada se enriquece, pero no pierde su capacidad de enfocarse en algún fenómeno particular. Una gestión que comprenda y emplee esta mirada pluridimensional de un modo operativo promueve cambios que superan la tendencia a la fragmentación institucional que se observa habitualmente en nuestras escuelas (cfr. Azzerboni y Harf; s/f). 4 En estas dimensiones se incluyen diferentes aspectos de la vida institucional. 25 Conviene reiterar que el análisis por dimensiones o ámbitos, constituye una de las opciones del amplio espectro de estrategias metodológicas utilizadas para diagnosticar la realidad institucional y, por lo tanto, cada escuela normal puede optar por las estrategias que juzgue pertinentes. Independientemente de los medios y recursos metodológicos que se utilicen para realizar el diagnóstico, el común denominador deberá ser disponer de información útil, confiable y oportuna sobre los cambios que precisan las escuelas normales para mejorar la calidad de la formación inicial de los futuros maestros. 2.1. Dimensión pedagógico-curricular Refiere a los aspectos más relevantes de la institución: los procesos de enseñanza y de aprendizaje. En esta dimensión es posible identificar el desarrollo de las actividades académicas que lleva a cabo la escuela para atender los requerimientos de los planes y programas de estudio; las prácticas de enseñanza de los profesores, así como el rendimiento escolar de los estudiantes, entre otros aspectos. También representa el punto nodal para valorar el grado de cumplimiento de los propósitos educativos encomendados a las escuelas normales. En esta dimensión, se recomienda profundizar el análisis a nivel del aula y de la escuela: “las condiciones, circunstancias, medios, instrumentos y recursos, secuencias y tiempos que hacen posible y optimizan en la práctica el logro de los objetivos para el desarrollo curricular y su desarrollo concreto en los centros educativos” (cfr. J. Gairín). a) Eje de análisis: aplicación de los planes y programas de estudio. Preguntas para ¿La planeación académica está favoreciendo el trabajo de los curla reflexión: sos y la práctica docente? ¿El desarrollo de los cursos es congruente con el enfoque, los propósitos y los contenidos de las asignaturas? ¿Los recursos educativos utilizados para el desarrollo de los cursos propician el aprendizaje de los estudiantes? ¿Los criterios, estrategias e instrumentos para evaluar son adecuados a los enfoques de los programas? ¿En qué medida la evaluación fortalece el proceso formativo de los estudiantes? ¿De qué manera las prácticas de enseñanza de los profesores son congruentes con las nuevas orientaciones establecidas en los planes y programas de estudio? 26 b) Eje de análisis: los logros de los estudiantes normalistas. Preguntas para ¿Cuál es el desempeño académico de los estudiantes? la reflexión: ¿Todos los estudiantes están logrando el perfil de egreso deseable? ¿A qué obedece dicha situación? ¿Cuáles asignaturas representan mayor dificultad para los estudiantes? c) Eje de análisis: la organización de las actividades académicas en la escuela. Preguntas para ¿Los criterios que se aplican en la escuela para la distribución de la reflexión: la carga horaria de maestros, de qué forma permiten u obstaculizan aprovechar el potencial de cada profesor y lograr un equilibrio en la asignación de las actividades académicas y las de otra índole? ¿Existen las condiciones favorables a nivel aula y escuela para el cumplimiento de las actividades académicas programadas? ¿Cómo se pueden generar dichas condiciones u optimizar las ya existentes? d) Eje de análisis: las actividades cocurriculares y de formación complementaria que se ofrecen a los estudiantes normalistas. Preguntas para ¿En qué medida contribuyen al logro del perfil de egreso de los la reflexión: estudiantes? ¿Bajo qué criterios se definió ofrecer ese tipo de actividades? ¿El desarrollo de dichas actividades resta tiempo a profesores y estudiantes para atender lo concerniente al plan y programas de estudio? ¿De qué manera incide? e) Eje de análisis: el desempeño profesional del personal docente. Preguntas para ¿Cómo se manifiesta el dominio que tienen los profesores con respecto al enfoque, los propósitos y los contenidos del plan de la reflexión: estudios y de las asignaturas que imparten? ¿A qué obedece que algunos maestros no cuenten con un dominio satisfactorio de los contenidos disciplinarios de las asignaturas que imparten? ¿Sobre qué aspectos prioritarios de la formación de los profesores deberían centrarse las actividades de actualización? 27 ¿Cómo han impactado en las prácticas de enseñanza las actividades de actualización para una mejor preparación y desempeño de los profesores? ¿Con qué tipo de oportunidades de actualización cuentan los maestros? ¿En qué medida satisfacen sus necesidades de actualización y desarrollo profesional? 2.2. Dimensión organizacional Incluye los componentes relacionados con la organización y el funcionamiento de la escuela normal: clima institucional; formas de participación de la comunidad normalista en la toma de decisiones; establecimiento de prioridades educativas y asignación de los apoyos para su cumplimiento; trabajo colegiado de maestros; estructuras y formas de organización; uso del tiempo escolar y aprovechamiento de los recursos educativos disponibles, entre otros. Asimismo, estos componentes ejercen una influencia decisiva en las prácticas de enseñanza de los profesores y en los aprendizajes de los alumnos. a) Eje de análisis: la participación en la toma de decisiones y las formas de organización institucional. Preguntas para ¿De qué manera la estructura de operación de la escuela y las formas de organización favorecen el cumplimiento de los prola reflexión: pósitos educativos de la institución? ¿Qué mecanismos existen para estimular la participación de profesores y estudiantes en las decisiones que afectan la vida académica de la escuela? ¿Los proyectos de desarrollo de la institución son conocidos y compartidos por todos sus integrantes (profesores, estudiantes y directivos)? ¿Qué se hace para compartirlos y lograr la participación del conjunto de la comunidad normalista? ¿Qué características del ambiente institucional son propicias para el desarrollo del trabajo académico? b) Eje de análisis: el funcionamiento del trabajo colegiado. Preguntas para ¿Cómo funciona regularmente el trabajo colegiado en la escuela normal? la reflexión: 28 ¿Qué tan valorado es este espacio por maestros y directivos? ¿Qué tiempos tienen los maestros para asistir a las reuniones del trabajo colegiado? ¿Cómo se involucran en él? El trabajo que realizan los profesores en las reuniones de academia ¿de qué manera ha permitido brindar mejor atención a los estudiantes? ¿Qué se hace para que en este espacio los maestros reflexionen sobre su práctica docente y la mejoren? ¿Qué asuntos tratan? ¿Cómo impactan su práctica de enseñanza? ¿Qué estrategias se pueden emprender para fortalecer el trabajo colegiado en la escuela normal? c) Eje de análisis: el uso del tiempo escolar. Preguntas para La forma de administrar el tiempo en la institución ¿qué efectos tiene en la organización y el cumplimiento de las actividades la reflexión: académicas? ¿Cómo se distribuye y aprovecha el tiempo en las aulas? ¿Qué actividades realizan los maestros en su descarga horaria? ¿Cómo inciden estas actividades en su formación y desempeño profesional y en el desarrollo de la institución? ¿A qué tipo de actividades da mayor importancia el maestro: en el aula, en el colegiado, en la escuela? d) Eje de análisis: el aprovechamiento de los recursos educativos disponibles. Preguntas para Los horarios de la biblioteca, el sistema de clasificación y de orla reflexión: ganización de los acervos, el perfil del personal que presta el servicio, entre otras cosas, ¿están en concordancia con las demandas de los usuarios? ¿Por qué? ¿Qué características tiene el servicio que se ofrece en el aula de cómputo? ¿Cuál es la calidad del servicio en el aula para el aprendizaje de idiomas y el uso de medios audiovisuales? ¿Cómo aprovechan, estudiantes y profesores, la programación de la red Edusat? 29 2.3. Dimensión administrativa En esta dimensión se pueden identificar rubros referidos a la administración de los recursos materiales, financieros y humanos de que dispone la institución. También abarca aspectos como: relaciones laborales, control escolar y cumplimiento de la normatividad escolar, entre otros, e incluye criterios, mecanismos y procedimientos en la asignación de recursos para el desarrollo de las diversas actividades de la escuela. a) Eje de análisis: criterios en la asignación de los recursos a las tareas institucionales. Preguntas para ¿Bajo qué parámetros se distribuyen los recursos a las áreas, prola reflexión: yectos y actividades de la escuela? ¿Cómo y quiénes definen las prioridades institucionales para la asignación de los recursos? ¿Se realizan estudios de costo-beneficio? ¿Cómo? ¿Por qué? ¿Para qué? ¿Qué hace la escuela para que la asignación de recursos se haga de manera transparente? ¿Existe una cultura de rendición de cuentas? b) Eje de análisis: regulación laboral. Preguntas para ¿Qué criterios se utilizan para el ingreso, contratación y promoción del personal docente? la reflexión: ¿Cómo inciden las condiciones de contratación del personal docente en el desempeño profesional? ¿Por qué? ¿En qué medida los conflictos laborales interfieren con el desarrollo de las actividades escolares? ¿Existen mecanismos efectivos para garantizar el cumplimiento de la normatividad laboral (asistencia, puntualidad, desempeño y promoción)? c) Eje de análisis: normatividad académica y administrativa. Preguntas para ¿Qué mecanismos aplica la institución para verificar el cumplimiento de la normatividad que regula las actividades académila reflexión: cas en las escuelas normales? 30 ¿Cómo se aplica el reglamento para otorgar la beca de apoyo a la práctica intensiva y al servicio social? ¿Qué reglamentación interna tiene la escuela para generar un mejor ambiente de convivencia que favorezca el cumplimiento de sus tareas institucionales? d) Eje de análisis: instalaciones y equipamiento. Preguntas para ¿Cuáles de los espacios educativos requieren de rehabilitación y mantenimiento? ¿Por qué? la reflexión: ¿Qué equipo y mobiliario requiere de mantenimiento o sustitución? ¿Por qué? ¿Qué hace la comunidad normalista para el cuidado, buen uso y aprovechamiento de las instalaciones y recursos educativos? 2.4. Dimensión vinculación con el entorno Para lograr una formación de calidad en todos los estudiantes que se preparan para desempeñarse como maestros, las escuelas normales –sobre todo en los últimos años– han empezado a establecer nuevos mecanismos de intercambio y colaboración con escuelas de educación básica, otras instituciones de educación superior, centros de investigación, organismos encargados de la promoción y desarrollo de la cultura, y sector productivo, entre otros. Esta dimensión puede constituirse en un detonador para el desarrollo académico de las escuelas normales como auténticas instituciones de nivel superior; su análisis brindará información respecto al tipo y calidad de la relación de colaboración que se ha generado fuera de la escuela normal. a) Eje de análisis: vinculación de la escuela normal con las escuelas de educación básica. Preguntas para ¿Qué acciones de coordinación institucional ha emprendido la la reflexión: escuela normal con autoridades educativas del nivel de educación básica? ¿Han sido suficientes para garantizar buenas escuelas y buenos tutores para los estudiantes normalistas? ¿Cómo involucra la escuela normal a directores de educación básica en acciones de vinculación? ¿Los criterios con los que se seleccionan las escuelas de práctica y los tutores, favorecen el cumplimiento de las actividades académicas de los estudiantes? 31 ¿De qué manera se ha brindado a los tutores el apoyo y las orientaciones necesarias para el cumplimiento de su rol en la formación profesional del futuro maestro? b) Eje de análisis: intercambio de la escuela normal con otras instituciones formadoras y actualizadoras de docentes. Preguntas para ¿Qué relaciones de intercambio académico tiene la escuela normal con otras instituciones de formación y actualización de dola reflexión: centes? ¿En qué medida ha representado una estrategia que contribuya al mejoramiento recíproco de estos centros de formación docente e intercambio interinstitucional? ¿Cuál ha sido el impacto del intercambio de la escuela normal con otras instituciones de formación y actualización de docentes? ¿En qué ámbitos de la escuela normal conviene mantener una vinculación estrecha con otras instituciones de formación docente? c) Eje de análisis: vinculación e intercambio académico con otras instituciones de educación superior y centros de investigación. Preguntas para ¿Qué tipo de relaciones se han establecido con otras instituciola reflexión: nes de educación superior y centros de investigación? ¿Cuál ha sido su impacto? ¿Qué necesidades tienen los maestros de las escuelas normales en cuanto a experiencias y conocimientos que generan centros de investigación? ¿Sobre qué aspectos que contribuyan al mejoramiento de la formación inicial de profesores podrían concretarse acuerdos de colaboración interinstitucional entre la escuela normal y otras instituciones de educación superior o centros de investigación? 32 3. El proceso de elaboración del diagnóstico institucional El diagnóstico adquiere sentido en el ejercicio de la planeación institucional, ya que es el punto de partida que ayudará a direccionar el cambio institucional; como una evaluación inicial, permite a la comunidad normalista, entre otros aspectos, identificar problemas y necesidades para superarlas o solventarlas según corresponda y detectar sus fortalezas y debilidades como condiciones que hacen posible el cambio y la innovación. El proceso de realización del diagnóstico en las escuelas normales se inicia una vez que se han efectuado la reflexión y el análisis para construir o identificar la misión institucional, pues si se quiere conocer la situación actual de la escuela normal es necesario tener un marco de referencia mediante el cual se pueda saber qué tanto es adecuado o no su funcionamiento para cumplir con la tarea que tiene encomendada. Enseguida se presenta la propuesta metodológica para la construcción del diagnóstico institucional, mismo que permite el conocimiento, la comprensión y la explicación de la realidad de la escuela normal. Incluye diversas fases: prediagnóstico, identificación de problemas por dimensiones y ejes de análisis; análisis de fortalezas y debilidades, jerarquización de problemas e integración del informe del diagnóstico institucional. 3.1. La construcción de la misión de la escuela normal Todas las instituciones tienen una tarea que da sentido a su funcionamiento, ésta se identifica como la misión institucional. La misión es la expresión formal de la actividad fundamental a la que se dedica la institución; de los fines, objetivos y metas que la organización quiere lograr a través de esa actividad; de los valores que la orientan y que, a la vez, pretende fomentar, así como de los resultados que desea alcanzar. También las instituciones educativas –en este caso la escuela normal– tienen una tarea fundamental que justifica su existencia. Las metas que la sociedad impone a la escuela normal se encuentran en el Artículo Tercero Constitucional 33 y en la Ley General de Educación, y se establecen de manera más precisa en los planes y programas de estudio para la educación normal. Hablar de la misión institucional alude a las bases filosóficas que orientan la educación normal en el país y que definen el conjunto de habilidades, conocimientos, actitudes y valores que constituyen la formación de los futuros docentes de educación básica. La escuela normal tiene la encomienda de la formación inicial de los docentes de educación básica, lo que delimita su campo de acción, pero no lo restringe; es decir, que para la educación normal se establezcan propósitos educativos de carácter nacional no significa que se desconozcan sus particularidades y sus diferencias, derivadas de las diversas características de la población que atiende, de la planta docente y directiva que la constituye, de su historia institucional y de la estructura que la configura. Significa, fundamentalmente, que de forma independiente a estas particularidades, se logre el cumplimiento de los propósitos educativos para los que fue creada, lo que implica que la comunidad normalista defina la forma más adecuada para lograrlos. Tener un conocimiento claro y preciso de la misión institucional de la escuela normal y, principalmente, que los docentes y directivos tengan una visión común de ella y la asuman como propia permitirá, por una parte, que el análisis de su situación actual se enfoque a la identificación de las dificultades que se presenten y de las posibles causas que impiden o favorecen su logro y, por otra, que la acción institucional se oriente de forma intencionada para su cumplimiento. La elaboración del diagnóstico parte de la revisión y construcción de la misión institucional. Para tal efecto, es necesario que en la escuela normal se realice la puesta en común de los conocimientos, las percepciones y las opiniones que la comunidad normalista tiene respecto a cuáles son sus finalidades educativas, con el fin de arribar a un conocimiento compartido de ellas. Para revisar y analizar los propósitos educativos de las escuelas normales –y favorecer su apropiación por la comunidad normalista– es necesario que se consulten: el Artículo 3° Constitucional, la Ley General de Educación y los planes y programas de estudio nacionales para la educación normal; los siguientes fragmentos destacan algunos elementos relevantes de éstos, a fin de enmarcar el ejercicio de revisión y análisis que deberá hacer la escuela normal con el objeto de iniciar la discusión por parte de docentes y directivos, y contribuir a que tengan otra aproximación a su misión institucional: El Artículo Tercero Constitucional establece que: “La educación que imparta el Estado tenderá a desarrollar armónicamente todas las facultades del 34 ser humano y fomentará en él, a la vez, el amor a la patria y la conciencia de la solidaridad internacional, en la independencia y en la justicia”. Además, señala que para cumplir con lo dispuesto en el párrafo anterior “el Ejecutivo Federal determinará los planes y programas de estudio, de la educación primaria, secundaria y normal para toda la república”. La Ley General de Educación, dentro del marco de la federalización educativa, sustenta la misión de las normales presentando las atribuciones de las autoridades educativas locales, dentro de las cuales destaca: “prestar los servicios de formación, actualización, capacitación y superación profesional para los maestros de educación normal, de conformidad con las disposiciones generales que la Secretaría determine”. Por consiguiente, la Secretaría de Educación de cada entidad, a través de las instituciones formadoras de docentes, presta los servicios educativos de acuerdo con lo estipulado por la Secretaría de Educación Pública y siguiendo las disposiciones que regulan el sistema educativo nacional. Los planes de estudio de las licenciaturas de las escuelas normales son los ejes rectores de la educación normal. En ellos se menciona que las escuelas normales deben seguir formando a los maestros de educación básica, como lo han hecho en el pasado, pero respondiendo a las demandas cada vez mayores y más complejas que se derivan de la necesidad de una educación suficiente para todos, de alta calidad formativa y que distribuya con equidad sus beneficios. Esta posición se funda no sólo en la valoración de lo que la tradición normalista ha significado para el país, sino también en el convencimiento de que, en el momento actual, ningún otro tipo de institución podría realizar con mayor eficacia la tarea de formar a los nuevos maestros. Asimismo, en los planes de estudio se establecen los rasgos deseables del perfil que se pretenden lograr con los futuros docentes de educación básica, esto es, los propósitos educativos de la formación inicial. La formación de los profesores de educación básica es una tarea de todo el sistema educativo nacional. El Programa Nacional de Educación 2001-2006 plantea que: “La transformación de las prácticas educativas es un elemento indispensable para alcanzar una educación básica de calidad para todos; están determinadas, entre otras cosas, por las posibilidades de acceso de los profesores a nuevos conocimientos y propuestas con sentido práctico acerca de los procesos de aprendizaje de los niños, de las formas de enseñanza de contenidos con naturaleza distinta y de métodos específicos para el trabajo en diferentes circunstanciales sociales y culturales”. 35 La misión de la escuela normal refleja, por lo tanto, su tarea sustantiva: “La formación de los alumnos para la docencia en el nivel básico a través del desarrollo de las competencias necesarias en el ejercicio profesional”. En resumen, la misión de la organización (o la declaración de la misión institucional) responde a las siguientes cuestiones: Cuadro 1. La misión de la escuela ¿Qué es? Es la razón de ser de la escuela, que justifica su existencia. Es una declaración formal que describe su propósito fundamental, formulada por la comunidad normalista. Ubica la identidad de la institución y la dirección requerida. Determina de manera sintética y clara su quehacer sustantivo y estratégico, así como el fin para el que fue creada. Precisa los valores que la orientan y los que pretende fomentar. ¿Cómo se construye? Se construye respondiendo a cuatro preguntas clave: • ¿Qué hace la escuela normal? • ¿Para qué lo hace? • ¿A través de qué lo hace? (principal medio). • ¿A quién se dirige? ¿Qué características debe tener? 36 Genera identidad, motivación y compromiso entre los integrantes de la escuela normal. Define el campo de especialidad y delimita fronteras de responsabilidad de la escuela normal. Se expresa mediante un párrafo corto. Ejercicio 3. Revisión de la misión institucional de una escuela normal A continuación se presenta, como ejemplo, la propuesta de una escuela normal. En nuestra escuela se debe garantizar, a través del trabajo ético y profesional de la planta docente, la formación sólida y congruente de los estudiantes como futuros profesionales de la enseñanza, cumpliendo de manera organizada y funcional con los criterios formativos establecidos en los propósitos del plan de estudios, a través de los contenidos y la aplicación de actividades sugeridas en las asignaturas del mapa curricular de la Licenciatura en Educación Primaria, para concretar, a partir de su tratamiento, la formación de sujetos comprometidos con el quehacer docente, dispuestos a contribuir con ética y profesionalismo en la formación de futuras generaciones con expectativas que permitan cristalizar la calidad educativa en la niñez mexicana, para el progreso de nuestra nación. De acuerdo con el resumen de los elementos que conforman la misión, ¿realizaría algún ajuste a la misión de esta escuela normal?, ¿qué elementos consideraría para enriquecerla? Redacte su propuesta en el siguiente cuadro y discútala en equipo para arribar a conclusiones generales. Ejercicio 4. Conformación de la misión institucional de la escuela normal Para impulsar el mejoramiento institucional de su escuela normal, es necesario reconocer cuál es la tarea fundamental que le corresponde y analizar el sentido de sus finalidades educativas. Esto podrá lograrse si se efectúa, principalmente, la revisión y el análisis de los planes y programas de estudio, identificando y discutiendo entre la comunidad normalista acerca de: 37 • Las habilidades, conocimientos, actitudes y valores que se pretenden desarrollar en los estudiantes normalistas. • Los criterios y orientaciones para la organización de las actividades académicas. • Los contenidos básicos que se proponen: sus enfoques, sus rasgos comunes y la forma en que se articulan. Resuelva el siguiente ejercicio: 1. En la columna izquierda del cuadro, escriba la misión que en su escuela normal se definió en el año próximo pasado en el contexto del PROMIN. 2. Analice en colegiado, ¿cuáles son las finalidades educativas de la escuela normal? 3. Como resultado de este ejercicio de análisis, en la columna derecha del cuadro, escriba cuál es su misión institucional y responda lo siguiente: a) ¿Existen cambios en la misión institucional actual? ¿De qué tipo? b) ¿A qué factores atribuye que haya modificado su misión? En caso contrario, ¿a qué factores atribuye que no se haya modificado? c) ¿Por qué es importante que la misión institucional sea construida por el conjunto de la comunidad normalista? Misión anterior Misión actual 3.2. Fases para la realización del diagnóstico institucional El proceso que se puede seguir para construir el diagnóstico o la evaluación inicial de la escuela normal, inicia con una fase prediagnóstica que da una primera aproximación de la situación actual; se continúa con la identificación de los problemas que enfrenta la escuela normal organizándolos, para su análisis, en dimensiones y ejes –en esta etapa, la recopilación y la sistematización de información relevante es la que sustenta el análisis. El análisis de las fortalezas y las debilidades de la escuela es la fase que sigue para, posteriormente, jerarquizar 38 los problemas detectados con el fin de que se seleccionen los que empezará a resolver la escuela, dada su prioridad y las posibilidades reales que tiene para ello. Finalmente, la construcción del diagnóstico culmina con la elaboración del informe, que es el insumo para iniciar la planeación de la institución normalista. Gráficamente, los elementos que conforman el proceso de diagnóstico en las escuelas normales es el siguiente: Construcción del Plan de Desarrollo Institucional y Programa Anual de Trabajo Construcción de la misión institucional Construcción de la visión institucional 1° Prediagnóstico 5° Integración del informe del diagnóstico institucional 4° Jerarquización de problemas Diagnóstico Institucional 2° Identificación de problemas por dimensiones y ejes 3° Análisis de fortalezas y debilidades Notas metodológicas a) El diagnóstico es una valoración de la realidad institucional que se realiza para conocerla, comprenderla y explicarla; sin embargo ésta es parcial ya que no es posible abordarla en su totalidad ni con la profundidad de todos los factores que la explican. Los primeros ejercicios sistemáticos que se realizan, por lo regular establecen propósitos 39 muy ambiciosos y abarcativos que tienen efectos contrarios a lo que se busca, generando en muchos casos información difícil de manejar, desarticulada y, por tanto, sin utilidad. Por ello, es recomendable que la escuela normal acote su análisis, el cual podrá ir actualizando y enriqueciendo conforme a los aspectos de su interés que requieren analizarse con mayor grado de precisión y de acuerdo con el proceso de desarrollo que la propia escuela va experimentando. b) Para realizar el diagnóstico se pueden utilizar diferentes criterios para conceptualizar, sistematizar, categorizar, organizar y comunicar la información que se va obteniendo: por dimensiones de la gestión institucional, por ámbitos de la vida institucional, por funciones, etcétera. Con el criterio que se ofrece en esta propuesta, por dimensiones y ejes de análisis, se pretende organizar la información en correspondencia con el modelo de gestión que se quiere impulsar en las escuelas normales y con las acciones que se desarrollan en el marco del Programa para la Transformación y el Fortalecimiento Académicos. No obstante, la institución normalista podrá hacer los ajustes que considere pertinentes, de tal manera que el diagnóstico sea útil para orientar su mejoramiento académico e institucional. c) Para organizar la participación de la comunidad normalista en la elaboración del diagnóstico y de las tareas que se requieren para ello, se sugiere que la escuela normal aproveche las formas de organización que ha definido para implementar el proyecto de seguimiento y evaluación de las prácticas educativas y de la gestión institucional. Asimismo, es indispensable que se retome el avance y los resultados que se han obtenido con el desarrollo de este proyecto, a fin de contar con un insumo más que complemente y enriquezca el conocimiento de la institución y la definición de los proyectos de mejoramiento. d) Para explicar la secuencia, se incluyen ejemplos y preguntas que pueden llevarse a cabo cuando se inicie el análisis correspondiente. Se incluyen, además, cuadros que podrían apoyar en la sistematización de la información analizada; no obstante, no es obligatorio utilizarlos tal como se presentan. Las escuelas podrán hacerles las adecuaciones que consideren más pertinentes a fin de facilitar sus ejercicios; lo que sí deberán procurar es seguir la secuencia metodológica descrita, realizando los ajustes necesarios para operarla, por lo que en cada escuela se valorará su pertinencia y funcionalidad. Fase 1: Prediagnóstico Esta es una fase donde la comunidad normalista (docentes, directivos, personal de apoyo y alumnos), se reúne para compartir y expresar, desde su punto de vista, a partir de la experiencia y de sus conocimientos propios, cuál es la situación problemática que enfrenta la institución para el cumplimiento de su labor educativa. Es un momento exploratorio que permite sondear, mediante lluvia de ideas, los problemas generales existentes. En este sentido, la información que se proporcione será de carácter previo e intuitivo. Con esta fase se pretenden lograr los siguientes propósitos: a) Iniciar, o continuar, la sensibilización de la comunidad normalista sobre la importancia de conocer su institución como base para emprender cualquier acción o medida de mejoramiento. 40 b) Identificar, en un primer momento, la situación problemática que manifiesta la comunidad normalista, de tal manera que se cuente con un punto de partida para organizar el proceso de indagación y análisis de la situación actual de la institución.5 Esto es, contar con una aproximación a la realidad institucional, hacer una selección de los problemas a investigar y poner a discusión de la comunidad normalista las diferentes interpretaciones, concepciones y significados sobre su situación actual, aventurando hipótesis sobre los factores que causan dichos problemas. c) Obtener una primera clasificación de los problemas de acuerdo con el tipo de factores que los están provocando, a fin de delimitar los que como escuela normal le corresponde resolver y los que podría atender dadas sus posibilidades reales. Es importante que la escuela normal identifique que los problemas están condicionados por factores de índole externo e interno. Los primeros, si bien producen desajustes fuertes en el funcionamiento la escuela normal no son controlables y por consiguiente no los pueden resolver porque se encuentran fuera de su ámbito de responsabilidad. Aunque la escuela normal pudiera incidir a través de acciones sistemáticas y bien planificadas, los resultados son observables a largo plazo. La mayoría de las veces, podrá hacerse poco o nada para modificarlos ya que su resolución depende de otras instancias o se encuentran asociados a condicionantes sociales. Los segundos se producen –directa o indirectamente– por los actores involucrados en el hecho educativo y por las condiciones en que se desarrolla. La escuela normal tiene la capacidad de abordar estos problemas e influir en ellos, porque son de su ámbito de competencia y para en su resolución se implica a toda la comunidad normalista. Ejercicio 5. Planteamiento de problemas generales 1. Para comenzar la discusión se plantean preguntas generadoras (en este ejercicio se pueden incluir otras que que se consideren necesarias para propiciar el debate): a) ¿En qué medida estamos logrando nuestras finalidades educativas? ¿Por qué? b) ¿Cuáles son los problemas que enfrentamos como institución que nos impiden obtener mejores resultados educativos? Las opiniones que viertan pueden organizarse en una lista general de problemas. 5 Se refiere a la fase de identificación de problemas por dimensiones y ejes de análisis. En esta fase, la comunidad normalista recopila, sistematiza y analiza la información para sustentar la toma de decisiones. 41 2. Una vez expresados los problemas que haya identificado la comunidad normalista, se darán a la tarea de plantear las posibles causas que los originan. Después, estas causas o factores se clasifican en internos (de la escuela) o externos, como se ilustra en el siguiente cuadro. Listado de problemas generales expresados por la comunidad normalista. Problemas causados por factores internos de la escuela normal. Problemas causados por factores externos a la escuela normal. 3. Con base en las siguientes preguntas, analicen el listado de problemas expresados. a) ¿Cuáles problemas podemos resolver como institución? ¿Por qué? b) ¿Cuáles problemas no podemos resolver desde la escuela? ¿Por qué? 4. De acuerdo con los resultados de su ejercicio, seleccionan los problemas con que se va a iniciar la siguiente fase de análisis. Notas metodológicas: 1. Se recomienda dar prioridad al análisis de los problemas causados por factores internos de la escuela normal, en la medida en que éstos son de su competencia y pueden tener incidencia para resolverlos. 2. Conviene recordar que los problemas son multicausales, por lo que muchos de ellos estarán asociados a causas de índole interna y externa. La escuela normal deberá tener en cuenta que sus medidas de atención estarán orientadas a resolver o superar los factores internos de los problemas, o a dar respuesta a aquellos problemas que fundamentalmente se expliquen por factores de orden interno. 3. Para la selección de los problemas externos en los que la escuela considere necesario incidir y en los que tenga posibilidades reales de hacerlo, deberá tener en cuenta los recursos con que cuenta, su nivel de influencia para lograr modificaciones en ellos, y que generalmente su resolución se da en un mediano o largo plazo. 42 Fase 2: Identificación de problemas por dimensiones y ejes de análisis En esta fase, la comunidad normalista se organiza en equipos para iniciar el proceso de indagación y profundizar en el análisis de los problemas y de sus posibles causas (vertidos en la fase anterior). Cuando la comunidad normalista (docentes, directivos, estudiantes, personal de apoyo y administrativo) se reúne y manifiesta los problemas de la escuela, con frecuencia se refieren a los que están estrechamente relacionados con las tareas y funciones que cada uno realiza. Esto constituye un primer acercamiento indispensable para conocer el funcionamiento de la institución; adicionalmente, se realizarán análisis más detallados que permitan establecer la correspondencia y articulación entre ellos y explicar el grado de avance en el cumplimiento de la misión institucional, así como comparar la información y conocimiento que manejan los diferentes miembros de la comunidad con el fin de construir una visión común informada, entre ellos, sobre su realidad institucional. La escuela normal deberá tener presente, de manera constante, sus finalidades educativas, como eje rector que orienta el diagnóstico institucional y hacia las que tendrán que dirigirse los esfuerzos que, como colectivo, impulsen para mejorar los resultados educativos que se obtienen. En este sentido, en el análisis de la situación actual de la institución –la identificación de problemas, necesidades, fortalezas, debilidades y la búsqueda de causas que provocan la situación que dificulta su labor educativa– estarán como centro de atención: los aprendizajes de los estudiantes normalistas, las formas de enseñanza, y las formas de organización y funcionamiento de la escuela normal. A partir de las recomendaciones que se hacen en este documento, de las dimensiones y ejes de análisis que se sugieren para elaborar el diagnóstico, y de las opiniones expresadas por la comunidad normalista, la escuela normal decidirá qué tipo de insumos conviene incluir en el diagnóstico y cuáles estrategias sería más pertinente seguir para su elaboración. Como se ha mencionado, las dimensiones y sus ejes de análisis tienen el propósito de orientar la elaboración del diagnóstico, incluyendo aspectos comunes a la reforma de la educación normal que es necesario tomar en cuenta. No obstante, pueden ampliarse, sintetizarse y modificarse de acuerdo con las condiciones particulares de cada institución, siempre que se relacionen con los aspectos que se propone sean abordados para el análisis. En esta fase la escuela normal: a) Clasifica, por dimensiones y ejes de análisis, los problemas detectados que son consecuencia de factores internos sobre los que iniciará el proceso de 43 indagación, sistematización y análisis. De acuerdo con esto obtiene un diagrama de problemas, que es la representación gráfica que permite ponerlos en orden para, en un momento posterior, facilitar su detección por nivel de prioridad, facilidad o dificultad para resolverlos: Cuadro 2. Diagrama de problemas6 Pedagógicocurricular Organizacional Administrativa Vinculación con el entorno Aplicación de los planes y programas de estudio: 1. 2. 3. 4. 5. Participación en la toma de decisiones y formas de organización institucional: 1. 2. 3. 4. Criterios en la asignación de los recursos a las tareas institucionales: 1. 2. 3. 4. Vinculación de la escuela normal con las escuelas de educación básica: 1. 2. 3. La organización de las actividades académicas en la escuela: 1. 2. 3. El funcionamiento del trabajo colegiado: 1. 2. 3. 4. 5. Regulación laboral: 1. 2. 3. Intercambio de la escuela normal con otras instituciones formadoras y actualizadoras de docentes: 1. 2. 3. Las actividades cocurriculares de formación que se ofrecen a los estudiantes normalistas: 1. 2. 3. El uso del tiempo escolar: 1. 2. 3. Normatividad académica y administrativa: 1. 2. 3. 4. Perfil y desarrollo profesional del personal docente: 1. 2. 3. 4. 5. El aprovechamiento de los recursos educativos disponibles: 1. 2. 3. Instalaciones y equipamiento: 1. 2. 3. 4. Vinculación e intercambio académico con otras instituciones de educación superior y centros de investigación: 1. 2. 3. 4. 6 Este diagrama cumple la función de constituirse en un mapa para tener una perspectiva general del tipo y magnitud de los problemas, por lo que se recomienda registrarlos con un enunciado breve. 44 b) Discute y selecciona el orden de los problemas para recabar información que permita detectar y explicar las causas que los originan, tomando en cuenta: • Los que afectan directamente el logro de los aprendizajes de los estudiantes normalistas. • Los que afectan al conjunto de la comunidad para que la escuela normal logre el cumplimiento de sus finalidades educativas. c) Define los criterios, técnicas, instrumentos y fuentes de información que se consultarán para recabar información suficiente que permita la explicación de los problemas y su incidencia en el cumplimiento de la misión. Es recomendable que durante la fase correspondiente a la jerarquización de los problemas que enfrenta la escuela normal en su conjunto se organicen los equipos responsables de recabar y sistematizar los datos, y de elaborar los informes parciales que se analizarán en el pleno del colegiado. d) Obtiene información fundamental que propicie el análisis de la situación problemática. En este aspecto, es importante que se considere la información que ya existe en la escuela –sistematizada o no–, lo que evitará invertir tiempo y esfuerzos en la búsqueda de algo que ya se tiene. Asimismo, recabará aquella con la que no cuenta, para lo que se sugiere que se consideren distintas fuentes de información (internas y externas a la escuela normal) que les aporten insumos valiosos como pueden ser: cuadernos de los alumnos, exámenes, producciones y evidencias de trabajo en los cursos y en la práctica docente, registros de clase, documentos recepcionales, estadísticas institucionales y estatales (alumnos, docentes, personal administrativo), actas de academia, informes de labores, informes de seguimiento y evaluación, etcétera. Para la información que requiere documentarse es recomendable considerar la realización de observaciones (de grupo y de academias) y entrevistas, recabar testimonios y compartir experiencias. e) Sistematiza la información recabada y elabora reportes o informes parciales, con el fin de facilitar el análisis en el colegiado. f) Analiza la situación problemática –por dimensión y eje de análisis– e identifica los aspectos más relevantes sobre los problemas en los que se pretende incidir. Lo importante es que se construya una visión común que les permita ponerse de acuerdo acerca de las necesidades y problemas que mejor definen su situación actual o que serán objeto de las decisiones que se tomen sobre lo que debe hacerse para solucionarlas y solventarlas. 45 El ejercicio de análisis de la información, por parte de la escuela normal, implica que se trascienda lo descriptivo, dando significados a la información y a los datos recabados, de tal manera que se cuente con una visión reconstruida de la institución. Esto implica que se contrasten las distintas visiones, juicios, opiniones, ideas y representaciones de los integrantes de la comunidad normalista, creando con ello nuevas significaciones en torno a las situaciones evaluadas. Fase 3: Análisis de las fortalezas y debilidades La reflexión profunda y crítica sobre las fortalezas y debilidades de la escuela normal, como parte constitutiva del análisis de la situación actual, favorece que se tomen en cuenta los riesgos que la institución normalista corre, así como las posibilidades de éxito en las decisiones con base en los problemas y necesidades prioritarias por atender y solventar. Este análisis permite identificar coincidencias y discrepancias respecto al funcionamiento general de la escuela normal para construir una imagen de conjunto de la institución, por lo que pone el acento en las prácticas, costumbres, saberes institucionales y personales, y condiciones institucionales (organizativas y pedagógicas) que podrían favorecer u obstaculizar las medidas de mejoramiento por implementar. En esta fase, la escuela normal: Elabora un listado con las fortalezas y debilidades. Con las primeras analiza los aspectos que marcan una tendencia en la institución o que son detectados como logros o metas cumplidas. Con las segundas, identifica las situaciones o elementos que de no atenderse y/o mejorarse pueden constituirse en obstáculos importantes para renovar la gestión de las escuelas normales y, por consiguiente, para la transformación de la institución en el sentido de lograr el cabal cumplimiento de sus propósitos educativos. Se pretende no sólo enlistar los aspectos positivos de la institución o los que impiden tener condiciones para hacer frente a sus problemas y necesidades, sino establecer relaciones entre éstos y la situación problemática que se enfrenta, con el fin de tomar decisiones sobre las estrategias y medidas de mejoramiento potencialmente posibles. Ejercicio 6. Identificación de fortalezas y debilidades de la escuela normal 1. Para detectar las fortalezas y debilidades, se requiere tanto de la intuición de los diferentes integrantes de la comunidad normalista, como del conocimiento 46 que tengan de la escuela normal, por lo que es importante que como referente constante se parta de la información que se ha ido recabando, sistematizando y analizando a lo largo de la elaboración de su diagnóstico.7 Se requiere, por otra parte, del trabajo colegiado para establecer acuerdos sobre los aspectos fuertes y débiles que caracterizan a la institución, pues como ya se indicó, existen diferentes representaciones, significados, ideas y opiniones al interior de la escuela normal, que demandan la reconstrucción del conocimiento de su realidad institucional. 2. Registren, en el cuadro, las fortalezas y debilidades de su institución (se incluyen dos ejemplos para orientar cómo pueden plantearse). Cuadro 3. Fortalezas y debilidades de la escuela normal Fortalezas Debilidades F1 La escuela normal es la institución responsable de la formación inicial de los docentes de educación básica en el país. D1 La mayoría de la planta docente está contratada por horas clase. F2 Actualmente se cuenta con recursos educativos diversos para apoyar la formación de los estudiantes normalistas y el desarrollo profesional de los docentes. D2 No se cuenta con recursos económicos para proporcionar el mantenimiento adecuado que los equipos requieren. F3 D3 F4 D4 F5 D5 F6 D6 F7 D7 F8 D8 7 Se prioriza la identificación de fortalezas y debilidades por ser éstas las que permiten el análisis del contexto interno –las posibilidades reales de la escuela normal para implementar sus proyectos de mejoramiento–; lo que no descarta que las instituciones normalistas complementen su análisis, incluyendo la identificación de las oportunidades y amenazas, las cuales dan cuenta de las posibilidades que ofrece el contexto externo para el éxito de las medidas de mejora. 47 F9 D9 F10 D10 F11 D11 F12 D12 F13 D13 3. Este listado favorecerá el análisis de las posibilidades reales de la escuela para definir los cursos de acción y, por consiguiente, la jerarquización de los problemas por atender, de acuerdo con un criterio de viabilidad. Fase 4: Jerarquización de problemas Teniendo en cuenta que el análisis de problemas realizado en la fase anterior ofrece una visión más clara y precisa de su realidad, en esta etapa es necesario jerarquizarlos para acotar el nivel de intervención de la institución. Lo que se pretende ahora es analizarlos y seleccionarlos con base en criterios de urgencia, importancia, viabilidad y gradualidad. Se aconseja ser realista en la priorización de los problemas porque se pueden desbordar las intenciones de la comunidad normalista para mejorar su institución y no tener éxito en las acciones que pretendan impulsar. Esto significa, por una parte, que la escuela normal inicie sus medidas de mejoramiento en los problemas que mayor incidencia tienen en la formación inicial de los futuros docentes y, por la otra, que se tenga en cuenta la capacidad y los recursos de la escuela normal que hagan posible su resolución. En esta fase la escuela normal: a) Analiza en el pleno del colegiado, las causas o los factores que han provocado los problemas clasificados en las dimensiones institucionales, tratando de observar cómo se encuentran relacionados entre sí, para llegar a una articulación causal coherente. Pueden realizar el análisis con base en las siguientes cuestiones: • ¿Cómo se relacionan entre sí los problemas detectados en la escuela normal? • ¿Cuáles son sus posibles causas? • ¿Cuál es su magnitud y grado de complejidad? 48 Es conveniente que se organice la información en un cuadro como el siguiente, para esquematizar la información y facilitar el análisis en torno a su posible interrelación. Cuadro 4. Problemas y sus causas por dimensión institucional y eje de análisis Pedagógico-curricular8 Problemas Causas b) Establece criterios para seleccionar los problemas prioritarios que atenderá, considerando los siguientes elementos para la reflexión: • Urgencia. ¿Qué es lo más urgente por atender en la escuela normal? ¿Qué no puede dejar de atenderse? ¿Cuáles problemas pueden dejar de atenderse? • Importancia. ¿Qué es lo más relevante que la escuela debe atender para cumplir con sus finalidades educativas? ¿Qué sucedería si no se atendiera? • Viabilidad. ¿Estamos en condiciones de solucionar el problema de acuerdo con nuestras capacidades y recursos? • Gradualidad.9 ¿Cuáles son los problemas que abordaremos en las primeras etapas? ¿Cuáles después? Es importante destacar que el análisis a realizar para priorizar y seleccionar los problemas se dirigirá a las causas que los ocasionan; ya que el conocimien8 Se recomienda la elaboración de una tabla por dimensión institucional, dependiendo de la cantidad de problemas detectados. 9 Relacionado con el establecimiento de periodos de corto, mediano y largo plazos. 49 to causal es esencial para poder intervenir sobre los factores que provocan un problema. c) Distingue los problemas prioritarios de la escuela normal, destacando los centrales de algunos secundarios o específicos (por ejemplo: los relacionados únicamente con alguna licenciatura, academia, área o unidad departamental, por actor, etcétera). Para la reflexión se sugiere considerar: • ¿Qué problemas prioritarios afectan la tarea fundamental de la escuela normal? • ¿Cuáles afectan el logro de los aprendizajes del total de los estudiantes normalistas? ¿Cuáles a una proporción de estudiantes? • ¿Cuáles se relacionan con un aspecto particular de la institución que no puede dejar de atenderse? Los problemas específicos pueden representar para la escuela normal la definición de medidas particulares que pueden implicar esfuerzos relativamente fáciles o todo lo contrario. Asimismo, afectan a una parte de la institución –en lo pedagógico o en lo administrativo–, pero no deben dejar de atenderse; en muchas ocasiones se encuentran más relacionados con el quehacer cotidiano de la escuela y responden a una situación muy particular de la institución. d) Realicen una tabla de prioridades en la que se incluya la explicación o las razones por las cuales se han priorizado y seleccionado los problemas centrales y los específicos de la institución. Esto permitirá que, una vez establecidos los problemas sobre los que se actuará, se inicie el proceso de elaboración del Plan de Desarrollo Institucional y del Programa Anual de Trabajo. Cuadro 5. Tabla de prioridades de problemas centrales y específicos10 Dimensión y eje de análisis Prioridades Explicación o razones Pedagógico-curricular a) b) c) 10 Sólo incluirán problemas específicos si la comunidad normalista considera relevante y urgente su atención a través de proyectos estratégicos y requiere de la concentración de esfuerzos del colectivo. 50 Organizacional a) b) Administrativa a) b) Vinculación con el entorno a) b) c) Problemas específicos 1. 2. 3. 4. Explicación o razones: Fase 5: Integración del informe del diagnóstico institucional La redacción del informe es la parte final del proceso de construcción del diagnóstico institucional. Su propósito es presentar e integrar las conclusiones y resultados producto del análisis que la comunidad normalista hace de su escuela. Si bien a lo largo del proceso, y conforme se desarrollan las diferentes fases, se han elaborado informes parciales que documentan y sistematizan la información, el informe final se realiza para presentar una síntesis centrada en la exposición de los problemas prioritarios detectados y ofreciendo los datos y elementos en los que se sustenta esta selección de prioridades. Así, el informe final se constituye en el punto de partida para generar la discusión y la reflexión informada sobre las medidas de mejora que la escue51 la normal habrá de emprender para su fortalecimiento. En este sentido, orientará la toma de decisiones y el diseño de los proyectos de mejoramiento institucional para elevar la calidad de la formación inicial de los futuros docentes de educación básica. En el mismo sentido en que se planteó que para la fase de “Identificación de problemas por dimensiones y ejes de análisis”, la escuela normal definirá la mejor forma de organizar su análisis; en este caso, la estructura que adopte el documento final del diagnóstico será definida por el pleno de la comunidad, con objeto de que resulte un instrumento de utilidad para el conjunto de los integrantes del plantel. El informe debe ser un documento breve, confiable en los datos e información que ofrece y ser claro en su argumentación. Si se considera necesario, podrían incluirse anexos que apoyen lo que se dice en el texto. En esta fase, la escuela normal: a) Realiza esquemas detallados de las ideas principales que pretende exponer, con el propósito de que el equipo se ponga de acuerdo sobre la estructura y el contenido del documento por elaborar. Algunos elementos fundamentales que puede contener el documento, son: justificación, proceso que se siguió para su elaboración (fuentes de información consultadas, metodología y tipo de instrumentos, tratamiento de la información), breve balance de la experiencia obtenida por la comunidad normalista durante el proceso de construcción (ventajas y retos), información relevante que explique la realidad institucional y la situación problemática prioritaria (organizada por las dimensiones y ejes de análisis seguidos), además de las razones que llevaron a la comunidad normalista a seleccionar esos problemas. b) Discute y analiza la propuesta y acuerda la estructura base del informe. c) Redacta el informe considerando un lenguaje sencillo, claro y conciso. Esto facilitará la lectura y comprensión del mismo, así como el uso que se le dé para sustentar las siguientes etapas del proceso de planeación. El contenido de este informe final será el que se incluya en el Plan de Desarrollo Institucional de la escuela.11 11 Cfr. “El proceso de planificación en las escuelas normales. Orientaciones metodológicas para su construcción”, en La planeación institucional en las escuelas normales. Orientaciones para su elaboración, México, DGN-SEByN-SEP (Serie: Gestión Institucional, 4), 2003. 52 Referencias bibliográficas Aguerrondo, Inés (2002), La escuela del futuro II. Cómo planificar las escuelas que innovan, Buenos Aires, Papers. Azzerboni, R. Delia, y Ruth Harf (s/f), Conduciendo la escuela: ¿la Institución y sus directivos o los directivos y su Institución ?, Buenos Aires, Ediciones Novedades Educativas, pp. 9 y 14. Batistón, Virginia y Horacio F. Ademar (1998), “La construcción de la identidad Institucional”, en Plan Educativo Institucional, Buenos Aires, ENE, pp. 46 y 51. Bertely, B. 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El tiro fue de 1 500 ejemplares más sobrantes de reposición. El cuidado de la edición estuvo a cargo de la Dirección General de Normatividad de la Secretaría de Educación Pública.