DESDE BOHR A SCHRÖDINGER. UNA ONDA PARA CADA PARTÍCULA CARLOS S. CHINEA Desde Bohr a Schrödinger. Una onda para cada partícula 01. La situación en los primeros años veinte. 01.1. El modelo de Bohr Para salir de la situación de bloqueo que representaba el modelo atómico de Rutherford, Niels Bohr supuso que se habrían de cumplir algunas premisas básicas, sin que supiera exactamente la razón. Estos fueron los hechos que postuló: 1. Cada electrón gira alrededor del núcleo en una órbita sin emitir energía radiante alguna. 2. Solamente existen órbitas electrónicas en las que el momento angular del electrón sea un múltiplo entero de la constante de Planck. 3. La absorción o emisión de energía radiante por parte de un átomo se hace mediante un cambio de órbita del electrón, de forma que si emite energía radiante, el electrón salta a una órbita de menor energía, y si absorbe energía radiante, entonces salta a una órbita de mayor energía. Bohr había postulado, por tanto, que el momento angular del electrón no podría ser cualquiera, sino que habría de ser siempre un múltiplo entero de la constante de Planck: p = n.h esta idea, en principio sin ninguna justificación, representó el paso genial que permitió avanzar en la resolución del problema de la inestabilidad del modelo atómico del momento. Al número cuántico n le llamó "número de la órbita del electrón"; así, n=1 corresponde a la primera órbita, n=2 a la segunda órbita, etc.. El momento angular, pues, habría de estar cuantificado, en paquetes, como lo estaría la misma energía, según la hipótesis de Planck. Al hacer esta introducción cuántica, el radio de la órbita del electrón se podría expresar de la siguiente manera: Esta expresión, para la primera órbita (n=1), y considerando el átomo de Hidrógeno (Z=1), nos da: 1 DESDE BOHR A SCHRÖDINGER. UNA ONDA PARA CADA PARTÍCULA Este valor, CARLOS S. CHINEA , es lo que se empezó a llamar "radio de Bohr". En cuanto a la energía del electrón en la órbita de número cuántico n: o bien y siendo se puede escribir: Y para la emisión o recepción de energía al saltar el electrón desde una órbita a otra: Según esto, podríamos calcular en ergios o en electronvoltios la energía necesaria para que el electrón salte de una a otra órbita. En el caso del Hidrógeno (Z=1) sería: y en electronvoltios: 2 DESDE BOHR A SCHRÖDINGER. UNA ONDA PARA CADA PARTÍCULA CARLOS S. CHINEA Sería, por consiguiente, de unos 13,6 eV, la energía necesaria para arrancar de su órbita a un electrón, en concordancia con los datos experimentales que se poseían entonces. La variación de energía entre dos órbitas quedaría en la expresión: o bien: Despejando la frecuencia para el átomo de hidrógeno (Z=1): y la longitud de onda: Es decir, aparece la constante que había sido descubierta empíricamente por Rydberg, y que hasta entonces nadie había podido explicar teóricamente: 01.2. Las limitaciones básicas del modelo El modelo atómico que estableció Bohr, aunque explicaba algunos aspectos experimentales de la física de su tiempo, no podía enmarcarse dentro de una concepción clara de la mecánica. Parecía, realmente, como el fruto de una mezcla arbitraria entre la mecánica clásica y la incipiente mecánica cuántica que surgía desde la hipótesis de Planck. Esto le hizo blanco de las críticas de muchos científicos de su tiempo, que no admitían sin una adecuada justificación la aceptación de los postulados cuánticos introducidos para poder desarrollar el modelo clásico de Rutherford. Sin embargo, la limitación fundamental, observada desde el primer momento, es que el modelo no explicaba la estructura espectral de otros átomos distintos al hidrógeno, ni tampoco las leyes del enlace químico. 3 DESDE BOHR A SCHRÖDINGER. UNA ONDA PARA CADA PARTÍCULA CARLOS S. CHINEA Henry Gwyn Jeffreys Moseley (1887 – 1915), había propuesto una ordenación de los elementos químicos con respecto a la carga nuclear creciente, estableciendo una relación sistemática entre la longitud de onda de la radiación emitida por los átomos y su número atómico, y poniendo de manifiesto la periodicidad de las propiedades químicas que había descubierto Mendeleev. Los huecos que aparecían en la tabla periódica en la ordenación de Moseley correspondían a la falta de algún valor entero de carga nuclear. El mismo Bohr anunciaría en 1922 el descubrimiento del Hafnio, observando que en general las orbitas electrónicas permitidas estaban relacionadas con la explicación de la tabla periódica. Sin embargo, el modelo no puede explicar porqué en un átomo polielectrónico en la n-sima órbita no pueden 2 haber más de 2n electrones. No puede ofrecer tampoco una explicación cuantitativa de las fuerzas que dan origen al enlace químico, ni asimismo permite calcular la intensidades relativas de las líneas del espectro. El problema que se planteaba en los primeros años veinte era el de encontrar una teoría cuántica general que explicase la fórmula principal del modelo de Bohr: fórmula que, por lo indicado más arriba, se mostraba válida en la justificación de los niveles energéticos del átomo. Era necesario, pues, encontrar una justificación cuántica, distinta de la mezcolanza de conceptos clásicos y cuánticos implícitos en el modelo de Bohr. La historia comenzaría con una tesis doctoral presentada en la Universidad de La Sorbona. 02. La tesis de Luis de Broglie en 1923. Es en esta situación cuando inesperadamente el físico aristócrata francés Luis De Broglie (1892-1987) propone en 1923, en la presentación de su tesis de doctorado en La Sorbona, Recherches sur la théorie des quanta ("Investigaciones sobre la teoría cuántica") que para salvar las dificultades que presentaba el modelo de Bohr, construido como una almalgama de conceptos clásicos y cuánticos, había de llegarse establecer alguna ecuación de ondas para la materia, de la misma manera que existían ya las ecuaciones de Maxwell para la luz. De Broglie introdujo en su tesis los electrones como ondas, presentando la concepción innovadora de la dualidad onda-corpúsculo que sería característica en el desarrollo posterior de la Mecánica Cuántica. Propuso generalizar esta dualidad a todas las partículas conocidas. Propuso, en definitiva, que a toda partícula clásica microscópica se le puede asignar una onda, lo cual se comprobó experimentalmente en 1927 mediante la difracción de electrones, con los trabajos de Clinton J. Davisson (1881-1958) en colaboración con Lester H. Germer (18961971). Asocia, por analogía con los fotones de la luz, a cada partícula libre con energía E y cantidad de movimiento p una frecuencia υ y una longitud de onda λ . E = h.υ , p = h/λ 4 DESDE BOHR A SCHRÖDINGER. UNA ONDA PARA CADA PARTÍCULA CARLOS S. CHINEA 03. El trabajo de Schrödinger a partir de la tesis de De Broglie. La histórica tesis de De Broglie indujo al físico matemático Edwin Schrödinger a plantearse la posibilidad de construir una ecuación de onda para la materia que tuviera la necesaria invariancia relativista. Se trataría, simplemente, de encontrar una relación momento-energía compatible con la relatividad y sustituir en ella la energía y el momento por sus correspondientes operadores de onda. 03.1. Una ecuación relativista que relaciona la energía y el momento. Para relacionar la energía y el momento habría de partirse de las expresiones relativistas E= m0 v 1− c 2 .c 2 y r p= m0 v 1− c 2 r .v y eliminar entre ellas la velocidad v de la partícula. Llamando β =v c y elevando ambas expresiones al cuadrado: 2 E − 1 2 m c 0 β2 = 2 2 E m02 4 E = 1 E2 = c 2 2 2 m0 c 2 1− β m0 c 1− β → → 2 2 2 m02 2 2 p p β p = v = 1 − β 2 m0 c 1 − β 2 m0 c 2 β = 2 p + 1 m0 c igualamos: 2 2 E p −1 2 E 2 p 2 p 2 E 2 m0 c m0 c − 1 + 1 = = → 2 2 2 2 m c m c m c m c E p 0 0 0 0 + 1 2 m0 c m0 c o bien: (E 2 )( ) − m02 c 4 p 2 + m02 c 2 p2E 2 = → E 2 − m02 c 4 p 2 + m02 c 2 = p 2 E 2 m04 c 6 m04 c 6 ( )( ) y finalmente: E 2 m02 c 2 − p 2 m02 c 4 − m04 c 6 = 0 o sea: − p 2 c 2 + E 2 − m02 c 4 = 0 5 DESDE BOHR A SCHRÖDINGER. UNA ONDA PARA CADA PARTÍCULA CARLOS S. CHINEA 03.2. La ecuación con invariancia relativista Puesto que los operadores de onda para la energía y el momento vienen dados por ∧ E = ih se tienen ∧ r r p = −ih∇ ∂ , ∂t ∧ 2 E = −h 2 ∂2 , ∂t 2 ∧2 r p = −h 2 ∇ 2 y al sustituir en la anterior relación energía-momento resulta: 2 2 2r2 2 ∂ h c ∇ − h − m02 c 4 ψ = 0 2 ∂t o bien: r 2 1 ∂ 2 m02 c 2 ∇ − 2 2 − 2 ψ = 0 c ∂t h que Schrödinger escribiría en la forma: r 2 1 ∂2 1 ∇ − 2 2 − 2 ψ = 0 λ0 c ∂t habiendo llamado λ0 = h (longitud de onda Compton) m0 c que, para la masa del electrón ( m0 = 9,1091x10 λ0 = 3,86148 x10 −11 −31 kgs ), resulta ser: cms Esta fue la primera ecuación de onda que probó Schrödinger, con invariancia relativista, pero hubo de abandonarla debido a las serias dificultades que se le plantearon tanto a la hora de introducir los potenciales electromagnéticos como en lo que respecta a la propia interpretación de la función de onda. Decidió, entonces, buscar una ecuación que fuese válida en el límite no relativista, para velocidades muy pequeñas en comparación con la velocidad de la luz. 03.3. La ecuación no relativista. Schrödinger probó entonces en el límite no relativista, utilizando la expresión de la energía total r 1 p2 E= +U 2 m0 y al sustituir ambos operadores de onda: ih ∂ψ − h 2 r 2 = ∇ + U ψ ∂t 2m0 que es la famosa ecuación de onda no relativista. 6 DESDE BOHR A SCHRÖDINGER. UNA ONDA PARA CADA PARTÍCULA CARLOS S. CHINEA 04. La aplicación de la ecuación no relativista al átomo de hidrógeno. Si aplicamos la ecuación no relativista de Schrödinger al electrón del átomo de hidrógeno, teniendo en cuenta que la energía potencial de atracción electrostática viene dada por la expresión Z .e 2 U =− r ih Se tendría, al sustituir: ∂ψ − h 2 r 2 Ze 2 = ∇ − ∂t 2m0 r ψ Y si expresamos la laplaciana en coordenadas polares esféricas (r , θ , ϕ ) : r 1 ∂ 2 ∂ 1 1 ∂2 ∂ ∂ + 2 2 + 2 ∇2 = 2 r senθ ∂θ r sen θ ∂ϕ 2 r ∂r ∂r r senθ ∂θ se tiene la ecuación en la forma: ih ∂ψ − h 2 1 ∂ 2 ∂ ∂ ∂ ∂ 2 Ze 2 1 1 ψ = r sen + + θ − ∂t 2m0 r 2 ∂r ∂r r 2 senθ ∂θ r ∂θ r 2 sen 2θ ∂ϕ 2 04.1. La expresión de la función de onda: El primer paso para la resolución consiste en probar soluciones de la forma ψ (r , θ , ϕ ) = R(r ). Al ,m (θ , ϕ ).e donde las funciones E .t −i h [04.1] Al ,m (θ , ϕ ) son las denominadas armónicos esféricos, que verifican las condiciones: 1 ∂ ∂2 ∂ 1 A (θ , ϕ ) = −l (l + 1) Al ,m (θ , ϕ ), l = 0,1,2,... a) + senθ 2 2 l ,m ∂ ∂ sen θ θ θ ∂ sen θ ϕ 1 ∂ Al ,m (θ , ϕ ) = mAl ,m (θ , ϕ ), m = l , l − 1, l − 2,...,−l b) i ∂ϕ 2π π 0 si l ' ≠ l o m' ≠ m * c) ∫ dϕ ∫ senθ dθAl ', m ' (θ , ϕ ) Al ,m (θ , ϕ ) = δ l ',l δ m ',m = (ortonormales) = = 1 si l ' l o m ' m 0 0 [ ] Como las soluciones de la forma 04.1 verifican que ih ∂ψ = Eψ ∂t la ecuación no relativista de Schrödinger se puede escribir para estas soluciones en la forma 7 DESDE BOHR A SCHRÖDINGER. UNA ONDA PARA CADA PARTÍCULA − h2 2m 0 CARLOS S. CHINEA 1 ∂ 2 ∂ ∂ ∂ ∂2 1 1 Ze 2 ψ = 0 + + θ − − r sen E 2 2 ∂θ r 2 sen 2θ ∂ϕ 2 r r ∂r ∂r r senθ ∂θ o sea: − h2 2m 0 1 ∂ 2 ∂ ∂ ∂ ∂2 1 1 Ze 2 R(r ). Al ,m (θ , ϕ ) = 0 + + r sen θ − E − 2 2 ∂θ r 2 sen 2θ ∂ϕ 2 r r ∂r ∂r r senθ ∂θ o bien, reordenando el coeficiente: 1 ∂ 2 ∂ 1 1 ∂ ∂ ∂ 2 2m0 2 r sen θ + + + r ∂r ∂r r 2 senθ ∂θ ∂θ r 2 sen 2θ ∂ϕ 2 h 2 Ze 2 E + R(r ). Al ,m (θ , ϕ ) = 0 r 1 ∂ 2 ∂ 1 1 ∂ ∂ ∂ 2 2m 0 1 2 r ∂r r ∂r + r 2 senθ ∂θ senθ ∂θ + sen 2θ ∂ϕ 2 + h 2 1 ∂ 2 ∂ 2m 0 2 r ∂r r ∂r + h 2 Ze 2 E + R(r ). Al , m (θ , ϕ ) = 0 r Ze 2 E + R(r ). Al , m (θ , ϕ ) + r 1 1 ∂ ∂ 1 ∂2 + 2 senθ + R(r ). Al , m (θ , ϕ ) = 0 ∂θ sen 2θ ∂ϕ 2 r senθ ∂θ Sustituyendo el segundo sumando en virtud de la propiedad a) de los armónicos: 1 ∂ 2 ∂ 2m 0 2 r ∂r r ∂r + h 2 − l (l + 1) Ze 2 E + R(r ). Al , m (θ , ϕ ) + R(r ) Al , m (θ , ϕ ) = 0 r r2 o bien: 1 ∂ 2 ∂ 2m 0 + r r 2 ∂r ∂r h 2 Ze 2 h 2 l (l + 1) E + R(r ). Al ,m (θ , ϕ ) = 0 − 2 r 2 m r 0 y como no actúa ahora ningún operador diferencial sobre el armónico esférico Al ,m (θ , ϕ ) podemos dividir por el mismo, quedando la expresión radial de la función de onda así: 1 ∂ 2 ∂ 2m 0 r + r 2 ∂r ∂r h 2 2 2 E − − Ze + h l (l + 1) R(r ) = 0 2 r 2m0 r Apareciendo un potencial U (r ) efectivo que es suma del potencial debido a la atracción electrostática y el potencial debido a la repulsión centrífuga: U (r ) = − Ze 2 h 2 l (l + 1) + r 2m0 r 2 Con lo que finalmente queda: 8 DESDE BOHR A SCHRÖDINGER. UNA ONDA PARA CADA PARTÍCULA CARLOS S. CHINEA 1 ∂ 2 ∂ 2m 0 2 r + 2 (E − U (r ) ) R(r ) = 0 r ∂r ∂r h o, tal como la escribió Schrödinger: 1 ∂ 2 ∂ 2 r 2 ∂r r ∂r + k R(r ) = 0 llamando k 2 = 2m0 ( E − U (r )) h2 04.2. Resolviendo la ecuación radial: Si pretender ser exhaustivos, ante la dificultad de los cálculos implicados podemos hacer una descripción resumida del proceso seguido por Schrödinger para conseguir justificar el resultado capital de la teoría atómica de Bohr, partiendo en definitiva de una concepción ondulatoria de la mecánica. Schrödinger resolvió la ecuación radial utilizando la llamada función hipergeométrica confluente, que había sido introducida por Gauss en el siglo XIX: f ( a b x) = 1 + a a(a + 1) x a(a + 1)(a + 2) x 3 a (a + 1)(a + 2)...(a + n − 1) x n x+ + + ... + + ... b b(b + 1) 2! b(b + 1)(b + 3) 3! b(b + 1)(b + 3)(b + n − 1) n! Así, pudo comprobar, mediante una muy laboriosa sustitución directa que una solución de la ecuación radial es la expresión: 2ρ Rn ,l ( ρ ) = ρ l e − ρ n F l + 1 − n 2l + 2 n Zr Zm0 e 2 r − ( Ze) 2 2 donde ρ = y = = n a0 2a 0 E h2 2ρ = n 2 2ρ 2ρ l + 1 − n n (l + 1 − n)(l + 2 − n) n n + + ... 1+ 2l + 2 1! (2l + 2)(2l + 3) 2! Sin embargo, la solución Rn ,l ( ρ ) = = ρ l e −ρ ρ l e − ρ n F l + 1 − n 2l + 2 no ha de tener infinitos términos, pues en tal caso la función de onda ψ crecería indefinidamente cuando r tiende a infinito. Para evitar esto necesariamente habremos de imponer la condición de que a partir de un cierto término todos los términos siguientes sean nulos, y esto solamente es posible si n es un entero positivo. Esta condición implicará, entonces, que 9 DESDE BOHR A SCHRÖDINGER. UNA ONDA PARA CADA PARTÍCULA CARLOS S. CHINEA 2 ( Ze) 2 1 Z 2 E=− =− m0 c , para n=1,2,3,… 2 2 137 n 2a 0 n Es decir, Schrödinger logró obtener el más importante resultado del modelo atómico de Bohr desde un planteamiento completamente distinto. La parte espacial completa de la función de onda se obtiene combinando las soluciones de la ecuación radial con los armónicos esféricos correspondientes: ψ (r , θ , ϕ ) = R(r ). Al ,m (θ , ϕ ).e í Et h obteniéndose los llamados “orbitales atómicos hidrogenoides”. Bibliografía: Avery, J.; Teoría Cuántica de átomos, moléculas y fotones, Ed. Alambra, 1975, Madrid. S. Chinea, C.; “Niels Bohr o el comienzo de la aventura”, http://casanchi.com/fis/bohr02.htm 10