Fundamentación sobre la narración

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La organización de la narración
1- Introducción
Para abordar la organización de la narración nos apoyaremos en los aportes
teóricos de Van Dijk, T. (1978, 1983) y de Adam, J.M. (1996), que
exploraremos a continuación.
2- La superestructura narrativa según T. Van Dijk
Van Dijk, T. (1983) considera que: “…los textos narrativos son formas
básicas globales muy importantes de la comunicación textual”. (1)
El mencionado autor entiende que todo sujeto desarrolla desde muy
temprana edad la competencia textual narrativa, que evoluciona desde una
forma oral dialogal, hasta una forma monologal oral o escrita.
Apoyándonos en sus estudios referidos al análisis de los textos,
consideramos pertinente destacar tres conceptos: superestructura,
macroestructura y microestructura.
Por superestructura Van Dijk, T. (1978) entiende:
“…un tipo de esquema abstracto que establece el orden global de un
texto y que se compone de una serie de categorías, cuyas posibilidades de
combinación se basan en reglas convencionales”. (2)
Es posible identificar este esquema abstracto independientemente del
contenido del texto.
Las distintas superestructuras presentan una serie de categorías y de
reglas constitutivas.
Como categorías de la superestructura narrativa distinguimos:
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La historia: comprende la trama y la evaluación.
La trama: se refiere a una serie de episodios.
El episodio: está integrado por un marco y un suceso. Cuando hay varios
episodios es porque los sucesos tienen lugar en sitios diferentes.
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El marco: alude a la situación, circunstancias, lugar y tiempo
determinados en que se desarrolla la acción.
El suceso: comprende el núcleo conjunto de la complicación y la
resolución.
La complicación: abarca la secuencia de acciones.
La resolución: implica la dilución de la complicación, pudiendo ser
positiva o negativa.
La moraleja: es la conclusión que aparece en las fábulas. Implica una
lección a ser aprendida.
Las reglas constitutivas para la narración se refieren a las relaciones
temporales y causales.
La macroestructura, por otra parte, es para Van Dijk, T. (1978):
“…una representación abstracta de la estructura global del significado
del texto”. (3)
Es de naturaleza semántica, por lo que se vincula con el contenido del
texto.
La noción de microestructura se refiere, según el mencionado autor, a:
“… (la) estructura local de un discurso, es decir, la estructura de las
oraciones y las relaciones de conexión y de coherencia entre ellas”. (4)
3- La secuencia textual narrativa desde el aporte de J. M. Adam
Según Adam, J. M. (1996), una secuencia textual es:
“Una red de relaciones jerárquicas, una totalidad que se puede
descomponer en partes relacionadas entre sí y con el todo. Una entidad
relativamente autónoma, dotada de una organización interna que le es propia”.
(5)
Este autor postulaba, en sus primeros trabajos, ocho tipos de esquemas
secuenciales, que luego redujo a cinco: narrativo, descriptivo, argumentativo,
explicativo, dialógico.
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El esquema narrativo comprende:
“… (un) conjunto de proposiciones, ordenadas según una estructura más o
menos convencional, que presenta a uno o más sujetos como agentes o
pacientes de una acción de cuyo proceso y consumación, la secuencia
narrativa se ocupa”. (6)
Adam, J. M. (1996) diferencia seis constituyentes en la narración, que
caracterizaremos brevemente a continuación.
a) La sucesión de los acontecimientos
Para este autor se puede hablar de narración cuando se tiene una
sucesión mínima de acontecimientos comprendidos desde un tiempo
lineal t (aquel en donde se origina la narración) hasta un tiempo t + n (el
que permite la clausura de la narración).
Ahora bien, a pesar de que el vector temporal es ordenador de la
experiencia humana, en la narración, la temporalidad está estructurada a
partir de una tensión, por lo que se organiza el relato en función de su
situación final.
b) La unidad temática
La narración implica siempre un interés humano. Para ello, se hace
necesaria por lo menos la presencia de un sujeto (animado o
inanimado), ubicado en un tiempo t, que luego deriva en un tiempo t + n.
Este actor (individual o colectivo) aparece como un factor de unidad de
la acción.
c) Los predicados transformados
Según Bremond : “Se puede decir que se llega al instante t + n por los
predicados que (…) caracterizaron al sujeto de estado (S) en el instante
t”.(7)
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Este concepto se relaciona con la idea aristotélica de la “ inversión de
los contenidos”, que implica una relación dialéctica entre contenido
invertido (un sujeto (S) que se encuentra separado de un objeto (O), y
contenido que llega a un estado de reposo (el sujeto (S) se encuentra, al
final del relato, con el objeto (O) que codiciaba). E palabras de
Hipogrosso, C. (1994): “…un relato puede entenderse como la
transformación de un estado dado en su contrario”. (8)
d) El proceso
Esta idea se refiere a que la acción debe ser “sola y entera”. Se vincula
con el concepto aristotélico de “unidad de acción” que entiende que todo
aquello que es completo tiene principio, medio y fin. Estos términos,
luego serán reformulados, en la época clásica, como: “comienzo” o
“exposición”, “nudo” o “desarrollo”, y “conclusión” o “descenlace”.
e) La causalidad narrativa de una puesta en intriga
Hipogrosso, C. (1994) sostiene que, para los antiguos novelistas, un acto
provocaba otro, y así sucesivamente. Sin embargo, la acción humana
puede tener un aspecto a – causal, misterioso, sorprendente. Es por ello
que la narración puede o no apoyarse sobre la lógica de un
razonamiento.
f) La evaluación final (implícita o explícita)
Según Mink: “Incluso cuando los hechos están establecidos, queda
todavía el problema de su comprensión en un acto judicativo que
manifieste una trama en lugar de presentarlos en serie”.(9)
La evaluación final (implícita o explícita) es una de las claves de la
especificidad de la narración. El escritor debe explicitar la evaluación,
puesto que hay lectores que no llegarían a comprenderla si estuviera
implícita en el texto.
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4- Bibliografía
-
Duvós, M. J., Segovia, M., Mandoría, T. et al: “Proyecto de intervención
en la competencia comunicativa”, Disrtito 06, Inspección de Educación
Inicial, 2006.
-
Hipogrosso, C, Pedretti, A., “Tipología de los textos escritos”, en La
escritura del español, Facultad de Humanidades y Ciencias,
Montevideo, 1994.
-
Van Dijk, T.: La ciencia del texto, Barcelona, Paidós, 1978.
-
Van Dijk, T., Kintsch, W.: Strategies of discourse comprehension.
Academic Press, New York, 1983.
(1) Van Dijk, T., Kintsch, W.: Strategies of discourse comprehension. Academic Press,
New York, 1983.
(2) Van Dijk, T.: La ciencia del texto, Barcelona, Paidós, 1978.
(3) Van Dijk, T. op. cit.
(4) Van Dijk, T. op. cit.
(5) Adam, J. M. en Duvós, M. J., Segovia, M., Mandoría, T. et al: “Proyecto de
intervención en la competencia comunicativa”, Disrtito 06, Inspección de Educación
Inicial, 2006.
(6)Adam, J. M. op. cit.
(7) Bremond en Hipogrosso, C, Pedretti, A., “Tipología de los textos escritos”, en La
escritura del español, Facultad de Humanidades y Ciencias, Montevideo, 1994.
(8) Hipogrosso, C, Pedretti, A., “Tipología de los textos escritos”, en La escritura del
español, Facultad de Humanidades y Ciencias, Montevideo, 1994.
(9) Mink en Hipogrosso, C, Pedretti, A. op. cit
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